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ORIGEN DE LA PROSPECTIVA
ALUMNOS:
ASESOR:
HUÁNUCO – PERÚ
2022
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
1.4. Cronología..................................................................................................................................9
1.4.2. En estos años destaca:........................................................................................................................12
1.4.3. Las primeras visiones científicas:.......................................................................................................16
2.1. Conceptos.................................................................................................................................21
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INTRODUCCIÓN
Aunque existen diversas definiciones del término, vamos a decir que la prospectiva, enfocando
hacía lo que se ha venido conociendo como “prospectiva tecnológica”, como el conjunto de “tentativas
sistemáticas para observar a largo plazo el futuro de la ciencia, la tecnología, la economía y la sociedad
con el propósito de identificar las tecnologías emergentes que probablemente produzcan los mayores
beneficios económicos y/o sociales”.
Primeramente, hablaremos del origen y de su desarrollo durante todas las épocas pasadas hasta la
actualidad, veremos una cronología desde su primer intento de ver e futuro y como fue evolucionando,
desde el primer antecedente, uno de ellos la segunda guerra mundial hasta las definiciones por filósofos y
estudios que en el día de hoy se realizan.
Luego veremos los conceptos y las definiciones más usadas en el término de la Prospectiva y
daremos una breve conclusión.
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CAPÍTULO 1: ORIGEN DE LA PROSPECTIVA
En las antiguas civilizaciones, el de la profecía era el más preciado de los dones, y los profetas se
convertían con cierta facilidad en dirigentes, puesto que eran quienes mejor podían tomar
decisiones acertadas compatibles con lo que les había sido revelado sobre el porvenir. Generales y
políticos acudían al oráculo de Delfos para consultarle antes de iniciar sus empresas. La
prospectiva no tiene nada que ver con todo esto, por otra parte, es mucho más reciente. Sin
embargo, sí que tiene algo en común con las viejas tradiciones adivinatorias: el objetivo de
conocer por dónde puede ir el futuro para tomar mejores decisiones en el presente. Lo que sucede
es que para conseguirlo no recurre a la magia, sino a las opiniones de personas expertas en las
materias de que se trate, expresadas a través de mecanismos sistematizados de reflexión colectiva.
Son estos mecanismos los que constituyen las técnicas y metodologías empleadas en prospectiva
En efecto, hacia finales de la década del cincuenta, el filósofo francés Gastón Berger comenzó a
hablar de la necesidad de contar con un espíritu que permitiera al hombre “observar lejos de una
manera amplia y profunda” (Berger, 1959). Para Berger, “una ciencia del hombre del mañana”
(antropología prospectiva) tiene como tarea sacar a luz las aspiraciones humanas, estudiando las
diferentes situaciones a las que el género humano podría enfrentarse en el futuro, y define el
futuro como “la razón de ser del presente”. Es esta una disciplina orientada a la capacidad de
incidencia del hombre en el futuro lejano (Godet, 2011).
El concepto fue acuñado a comienzos de los años 50 por el pensador francés Gaston Berger, uno
de los autores que podemos considerar como pioneros de la disciplina, y es utilizado con éxito en
el contexto del mundo latino: Iberoamerica, España, Francia, Italia, mientras que en el mundo
anglosajon prevalecen los términos “foresight”, “future studies” o incluso también “forecasting”,
y conceptos asociados a los mismos. Pese a sus diferencias, y contemplados en términos
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generales, podemos considerarlos como relativamente cercanos y, en mi opinión, a menudo
complementarios
“La prospectiva es la ciencia que estudia el futuro para comprenderlo y poder influir. Aunque de
hecho es, paradójicamente, una ciencia sin objeto que se mueve entre la necesidad de predecir lo
que puede ocurrir y el deseo de inventar el mejor futuro posible”.
Otras dos conocidas definiciones descritas por investigadores del Reino Unido, citaremos a Ben
Martin (1995), describe la prospectiva como “El proceso de investigación que requiere mirar
sistemáticamente el futuro de largo plazo en ciencia, tecnología, economía y sociedad, con el
objetivo de identificar las áreas de investigación estratégicas y las tecnologías genéricas
emergentes que generarán los mayores beneficios económicos y sociales”.
Por su parte Luke Georghiou (1996), describe la prospectiva como “un medio sistemático de
evaluar los desarrollos científicos y tecnológicos que podrían tener un fuerte impacto en la
competitividad industrial, la creación de riqueza y la calidad de vida”.
Los estudios recientes realizados en los Estados Unidos sobre la tecnología de pronóstico
comenzaron a usarse alrededor de 1950 en el campo de la producción de defensa. Por
ejemplo, Rand Corporation, en varios trabajos de consultoría, se ha encargado de
desarrollar algunas de las herramientas clave que se utilizan en esta técnica, como el
patrón de medición "Delphi".
Grandes ejercicios de pronóstico se llevaron adelante en la Marina y la Aeronáutica de los
Estados Unidos. Y las empresas privadas lo aplicaron al sector de la energía.
A pesar de la limitada afinidad con el mercado que proporciona el campo en el que se
especializan los estudios de prospectiva, su uso está perdiendo adeptos. Sin embargo, a
fines de la década de 1980 y debido a lo que Japón consideraba una amenaza para la
competitividad estadounidense, las técnicas de previsión volvieron a estar en primer
plano.
Fue entonces cuando el Departamento de Comercio, el Consejo de Competitividad y la
Oficina de Políticas en Ciencia y Tecnología comenzaron a utilizar nuevamente las
renovadas técnicas de prospectiva.
Aunque fue Estados Unidos quien comenzó a utilizar estas técnicas en 1950, fueron los
japoneses quienes las llevaron a su máximo potencial. Convencidos de que representaban
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una herramienta potencialmente útil para la formulación de políticas, enviaron un equipo
para consultar con expertos en los Estados Unidos.
Para 1970, los japoneses habían desarrollado su propia estrategia de prospectiva y la
aplicaron para hacer el primer pronóstico del futuro de la ciencia y la tecnología, con un
período de 30 años. El estudio fue preparado por la Agencia para la Ciencia y la
Tecnología y, a menudo, se considera el primer estudio verdaderamente prometedor
desde el punto de vista tecnológico.
El objetivo del mismo fue producir una visión general que mirara los campos de ciencia y
tecnología como un conjunto, a fin de proveer inteligencia de negocios sobre tendencias
de largo plazo a quienes formulan políticas en el sector público y privado. De este modo,
estarían en condiciones de decidir los trazos gruesos de la dirección que había que tomar
para alcanzar la vanguardia del progreso. Miles de expertos de la industria, las
universidades y el gobierno participaron en la elaboración de este informe que desde
entonces se repite cada 5 años.
A menudo su origen se ha atribuido a la denominada escuela francesa de prospectiva, con
la que personalmente mantenemos una estrecha relación, y puede ser que así sea. Pero
como hemos tratado de hacer ver, la reflexión y planeación estratégicas llevan implícitas
la visión de futuro y comparten el propósito transformador característicos de la
prospectiva, por lo que la confluencia ha resultado casi natural. Desde los años ochenta,
diferentes académicos, profesionales y organizaciones han ido consolidando, y continúan
haciéndolo, el marco teórico de la prospectiva estratégica por un lado y el ámbito de su
aplicación práctica, por otro.
La misma apreciación es recogida por una reciente publicación del Ministerio de Ciencia,
Tecnología e Innovación Productiva de Argentina (Beinstein, 2016), que aprecia una
verdadera explosión de estudios prospectivos en el siglo XXI, por parte de gobiernos
nacionales, organismos internacionales, empresas, organizaciones sociales que han
comenzado a utilizarla. La prospectiva se ha extendido desde su origen en la Europa
Occidental y algunas grandes empresas y organismos oficiales, a los países de alto
desarrollo.
1.1.4 En Holanda
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Este parece haber sido el primer país europeo en utilizar las técnicas de prospectiva en los años 70
para examinar la relación entre la ciencia y la sociedad. En los 80 los consejos sectoriales (para
agricultura, salud y medioambiente) llevaron adelante varios estudios de prospectiva y en los 90
un comité asumió las tareas de coordinación de estos estudios en todo el país.
1.1.5 En Alemania
El uso extendido que esta técnica comenzó a tener en otros países y, sobre todo, la unificación y
los problemas de recesión y ajuste estructural a los que se enfrentaba la economía alemana,
llevaron al país a incorporar (después de 1990) el uso de las técnicas de prospectiva.
Se buscó información sobre la utilización de este instrumento en los Estados Unidos y se recurrió
a la asistencia de Japón que ya iba por su quinto ejercicio periódico (quinquenal) de prospectiva.
Más tarde, y en función de su propia experiencia, Alemania colaboraría con el sexto ejercicio
japonés en la materia.
1.1.7 En Francia
A principios de los 80 Francia desarrolló varios ejercicios de prospectiva. Sin embargo, fue sólo a
partir de 1994 que los mismos comenzaron a realizarse de un modo sistemático, basados en
herramientas tradicionales como los formularios Delphi. A finales de esta década la técnica se
extendió a países como Australia, Canadá, Noruega y Suecia.
En 1994 el Reino Unido lanza el primer ejercicio de prospectiva tecnológica. Desde entonces,
varios países más han aplicado esta técnica, como Italia, España (que crea su Oficina de
Prospectiva Tecnológica), Irlanda, Austria, Hungría, Sudáfrica, Nueva Zelanda, República de
Corea, Tailandia, India y Turquía.
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CAPÍTULO 4: Personajes precursores
Gaston Berger, fundador en 1957 del Centro Internacional de Prospectiva. Más tarde, en
los años setenta, esta comienza a desarrollarse en América Latina.
Bertrand de Jouvenel como padre de la Prospectiva, a la que definió como disciplina
encargada de la «exploración de los futuribles» en su famoso libro, publicado en 1965,
«L'Art de la Conjecture». (El concepto futurible aparecía como contracción de las
palabras futuro y posible).
Michel Godet define la prospectiva como aquel esfuerzo por lograr una previsión o
anticipación que permita aclarar la acción presente a la luz de los futuros posibles y
deseables. Además, menciona que lo que sucederá no está escrito, y pensar en el futuro
no elimina la incertidumbre, aunque nos prepara para enfrentarla. Todo el mundo debe
hacer frente a los mismos cambios; lo que marcará la diferencia será el comportamiento
de cada cual. En español, como en las otras lenguas latinas, el término prospectiva
responde a un concepto idéntico al concepto en francés (prospective). En inglés, según
Michel Godet, no se adaptan ni futurology, ni futures studies, ni forecasting, que refieren
a la generación de modelos económicos o al pronóstico, algo que difiere sustancialmente
de la anticipación de futuros. La que más se aproxima es foresight.
Guillermina Baena Paz: La vida del planeta está cambiando vertiginosamente. Cada vez
es más difícil para la ciencia interpretar los cambios; de ahí que surjan nuevos métodos
con diferentes formas de pensar y de ver. La prospectiva, que por definición es política,
es una herramienta para entender los problemas complejos en estructuras sistémicas. El
trabajo ofrece una visión general de la prospectiva y sus métodos, y refiere las principales
aplicaciones que ésta tiene para la ciencia política.
Enric Bas: Prospectiva e Innovación es un tratado de naturaleza multidisciplinar e
internacional, que recoge múltiples enfoques, experiencias y sensibilidades, en diferentes
contextos y ámbitos, sobre las potencialidades de la Prospectiva para la innovación y el
desarrollo social. La obra recoge aportaciones de muchos de los más destacados futuristas
de todo el mundo, que quedan reflejadas en los tres volúmenes que la componen:
visiones, experiencias y propuestas.
CAPÍTULO 5: Cronología
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Historia de la Prospectiva
Evolución de la Preocupación del Ser Humano por el Futuro: Últimos Cuatro y Medio Milenios
De 2500 a.C. a 1700 d.C.: Dominaron las posiciones místicas. El interés por el futuro estaba
poblado de Oráculos, brujos, místicos, adivinadores, profecías, horóscopos, bolas de cristal,
cartas, etc.
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1.1.9 En estos años destaca:
El término i ching significa “libro de las mutaciones” escritos hacia el 1200 a. C. El texto fue
aumentado durante la dinastía Zhou y posteriormente por comentaristas de la escuela de
Confucio, pero su contenido original es de procedencia taoísta y no confucianista. Se cree que
describe o interpreta la situación presente de quien lo consulta y aconseja el modo en que se
puede resolver el futuro si se adopta ante él la posición correcta. Es un libro oracular, sapiencial y
moral, a la vez que por su estructura y simbología es un libro filosófico y cosmogónico.
El Oráculo de Delfos.
Era un templo griego dedicado al dios Apolo al que la gente acudía para
conocer el futuro.
El ser humano se asoma al futuro, pero lo hace tímidamente y de la mano de los dioses. Sin otra
herramienta, más que su imaginación.
1. Posiciones Místicas:
De acuerdo con Tomás Miklos y María Elena Tello hay tres aproximaciones místicas al
futuro: la apocalíptica, la teológica y la profética.
2. Apocalíptica:
Se caracteriza por un rígido dualismo entre este mundo y el próximo, así como por su
fatalismo y el distanciamiento de los quehaceres terrenales.
Además, influida por religiones orientales, crea una compleja organización en la que
participan seres angelicales y demoníacos.
3. Teológica:
Percibe el futuro como el desarrollo de un propósito inherente al universo mismo y en
función de Dios.
4. Profética:
Mantiene la noción hebrea del futuro como una posibilidad abierta a la esperanza y
responsabilidad del ser humano. Las profecías de los hebreos eran un medio para motivar
al pueblo a cambios de conducta, pues planteaban que el futuro podía ser logrado por el
hombre, si bien en apego a sus creencias religiosas.
“No hacen otra cosa que tratar de predecir y advertir sobre el futuro” (Miklos y Tello). Buscan
signos en las estrellas, las cartas, el café, los gallos, las conchas, etc. Propiciaron el surgimiento
de creyentes, convencidos, escépticos, oponentes, polemistas y fanáticos.
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De 1700 a 1950 se denominó la ficción profética, la ciencia ficción, con los primeros enfoques
científicos. Grandes autores como:
Julio Verne
Edward Bellamy
George Orwell
Su obra lleva la marca de las experiencias autobiográficas vividas por el autor en tres
etapas de su vida: su posición en contra del imperialismo británico que lo llevó al
compromiso como representante de las fuerzas del orden colonial en Birmania durante su
juventud; a favor del socialismo democrático, después de haber observado y sufrido las
condiciones de vida de las clases sociales de los trabajadores de Londres y París; y en
contra de los totalitarismos nazi y estalinista tras su participación en la guerra civil
española.
Aldous Huxley
Es conocido por sus novelas y ensayos, pero publicó también relatos cortos, poesías,
libros de viajes y guiones. A través de sus novelas y ensayos, ejerció como crítico de los
roles, convenciones, normas e ideales sociales.
Arthur Clark
Escritor británico, autor de notables novelas y relatos de ciencia ficción en las que destaca
la presencia de una cierta reflexión de talante filosófico.
Isaac Asimov
No sólo escribió novelas de ciencia ficción, sino que publicó libros de pura divulgación
científica. Y no solo de robótica, sino de matemáticas, química, astronomía e incluso
historia. No por nada se le considera uno de los autores más prolíficos de la historia.
Ray Bradbury
Anthony Burgess
Alvin Toffler
Charles Richet
Fue un médico y fisiólogo francés. Premio Nobel de Medicina en 1913 en reconocimiento a sus
trabajos sobre la anafilaxia. En terapéutica experimental, Richet demostró que la sangre de
animales vacunados contra una infección, protege contra la misma.
H.G. Wells
Anticipó el problema de la proliferación, advirtiendo que un gobierno global era la única manera de
impedir que las naciones se destruyeran entre ellas con armas nucleares. Además, predijo conflictos
biológicos en La guerra de los mundos.
William F. Ogburn
Fue un sociólogo estadounidense que nació en Butler, Georgia y murió en Tallahassee, Florida.
También fue estadístico y educador.
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De 1940 en adelante se empiezan a desarrollar los enfoques sistemáticos y participativos.
Trabajos del tipo de fábricas pensantes (Think Tank “Tanque de pensamiento''). La prospectiva se
vuelve un asunto serio, científico y estratégico, incluso de supervivencia para las grandes
potencias, a cargo del ejército, de la Corporación Rand, del Club de Roma. La investigación y
construcción del futuro se vuelve una disciplina científica. Sus predicciones son base de políticas
nacionales y mundiales. H.H. Arnold, comandante de la fuerza aérea de Estados Unidos plantea la
necesidad de llevar a cabo estudios “a cualquier costo”.
A los enfoques sistemáticos y participativos, que llevan 70 años (desde 1940), los cuales se
profundizan y llegan a altos niveles de profesionalismo y ciencia en los próximos 70 años (2080),
se agrega un nuevo enfoque en el que la prospectiva y los estudios y diseños del futuro exploran
el karma, es decir el comportamiento ético pasado y presente de sujetos, organizaciones y
sociedades para predecir, planear, diseñar, construir y de construir su futuro. Esto abre un nuevo
paradigma para el Tercer Milenio. La tecnología y la ciencia han mejorado la vida del ser
humano, pero también, como dice Bertrand Russel han sido responsables del terrible futuro que
nos acecha. En el nuevo enfoque se analiza las causas kármicas que han ocasionado esas
desviaciones.
La Ley de la Retribución Moral de las Acciones nos advierte que todo acto negativo tendrá un
efecto negativo en el futuro y viceversa. De ser cierto esto, lo cual tendríamos que demostrar
científicamente implicaría que además de diseñar y construir el futuro, con las mejores
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herramientas que queramos, deberíamos también cuidar que nuestras intenciones sean virtuosas,
lo que implicaría elevar nuestro nivel de conciencia.
El problema, visto científicamente no es tan sencillo de resolver, porque los expertos nos
advierten que el karma tiene tres fases:
Una parte directa, cuyas causas son visibles y pueden ser estudiadas.
Una parte indirecta, cuyas causas no son totalmente claras. Se requiere enfoques
contraintuitivos y modelos muy complejos.
Una parte oculta o “secreta” que requiere que los estudiosos desarrollen tres
entrenamientos: el de su mente (shamata y vipashana), el de su percepción (prajna) y
el de su virtud (shila).
El planteamiento es que uno no podrá tener un mejor futuro hasta que no limpie su karma. Este es
un planteamiento provocativo que va más allá de lo que han planteado hasta ahora la prospectiva
y los estudios del futuro. Pareciera que nos devuelve a las posiciones místicas que se creían ya
superadas, pero como dijo uno de los mayores científicos Albert Einstein el futuro será espiritual
o no será.
Hasta ahora la prospectiva seria se ha basado en puras cosas materiales, al alcance de los 5
sentidos. Este componente espiritual del karma puede ser visto por muchos como una regresión
anticientífica, pero, así como la física se basa en relaciones causa‐efecto, también parece que este
componente determina la vida de las personas, de las empresas, de las familias, de las
organizaciones, de los países y de la humanidad en su conjunto.
Se basa en el Humanismo para proponer que el futuro puede ser creado y modificado por las
personas ya sea de forma individual u organizacional y propone estudios que caractericen a la
sociedad futura en diferentes enfoques: social, económico y cultural.
Fue desarrollada en Francia a finales de la Segunda Guerra Mundial por político que tenía una
cierta posición en la política; nació a causa de la preocupación por la reconstrucción del país a
causa de la guerra y también con la mira del desarrollo económico del país, esto condujo a
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realizar un análisis que podría porvenir y de esta forma la prospectiva acompaña la planeación
francesa que se propone orientar el desarrollo industrial, considerando las tendencias sociales y
económicas.
Esta escuela está enmarcada por el voluntarismo, donde se afirma que el futuro está por hacerse.
Al inicio los norteamericanos llamaron a los estudios del futuro como Futurología, pero no es
posible estudiar el futuro no lo cambiaron por Futuristica, la futurologia está marcada hacia lo
militar. El comandante General de las Fuerzas Armada Arnold plantea la necesidad de llevar
estudios a cualquier costo que permita planear la defensa de América, ordenó la realización del
pronóstico de capacidades tecnológicas futuras con el cual creo el primer Think Thank
norteamericano.
Herramientas utilizadas
Con el dinero de la Fundación Ford se crea en 1948 la Rand Corporation, para que realizara
estudios sobre el futuro de Estados Unidos.
Base Contextual
La escuela está marcada por el determinismo que plantea ver el futuro como algo determinado
donde la acción del individuo no puede cambiarlo
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Pensadores
Está representada en la filosofía de Michel Crozier expuesta en su libro “El actor y el sistema”
Crozier concibe el sistema social dentro de una “racionalidad limitada” que permitirá la
identificación de zonas de incertidumbre y que permitía el uso de la libertad, porque dejaría
margen para que los diferentes “actores sociales” se posicionan frente a los retos provenientes de
la defensa de sus propios intereses y luchen en los “campos de batalla” caracterizados por el uso
de las diferentes formas de poder presente en cada uno de ellos
CAPÍTULO 8: Conceptos
Gaston Berger (1964) fue uno de los fundadores de la disciplina, y la define como “la
ciencia que estudia el futuro para comprenderlo y poder influir en él”.
La prospectiva parte del concepto de que el futuro aún no existe y “se puede concebir
como una realización múltiple” (Jouvenel, 1993) y que “depende solamente de la acción
del hombre” (Godet, 2007).
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Ben Martin (1995) describe la prospectiva como: “El proceso de investigación que
requiere mirar sistemáticamente el futuro a largo plazo en ciencia, tecnología, economía y
sociedad, con el objetivo de identificar las áreas de investigación estratégicas y las
tecnologías genéricas emergentes que generarán los mayores beneficios económicos y
sociales”.
Decouflé (1973), en su libro La sociología de la previsión, comenta que “hablar de
futuro” puede tomar seis formas del discurso teórico-práctico.
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CONCLUSIÓN
Concluimos que la Prospectiva no tiene como objetivo poder predecir el futuro, aunque algunos
deterministas pretenden dar a conocer el futuro no podemos dar con ciencia cierto lo que
realmente va suceder, porque el futuro no está escrito en ninguna parte o en algún libro; desde el
principio se dio a entender que la Prospectiva consiste de ayudar a construir un futuro usando las
bases para enlazar la prospectiva con la estrategia y la planeación estratégica.
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