Está en la página 1de 2

TAREA.

- 1

NOMBRES Y APELLIDOS: GUILLERMO SEBASTIAN ROSERO CHAVES

ENSAYO
UNA BUENA RECETA

La narración permite entrar al cerrado y desconocido mundo de la gastronomía


por parte de quienes lo dirigen y lo planean, es conocer el mundo de los
restaurantes, de su intimidad y de sus rivalidades, como también del alto nivel
de exigencia y competitividad de sus respectivos chefs para lograr acogida en
el público y lo más importante, a nivel profesional, para obtener la codiciada
estrella Michelin que entregan los expertos y que en la vida real, los convierte
en sinónimo de máximo prestigio y excelencia. Ese es el tema y relato de la
película, y el desarrollo del guion apunta a develar un poco ese difícil ambiente
encargado de conquistar el refinado paladar de muchos gourmets con base en
la preparación de exquisitos platos, fruto del talento de combinar ingredientes
con debida sazón y cocción.

La historia, que tiene un ritmo muy fluido y sin complicaciones, se centra en un


individuo que sale de su crisis y que vuelve después de tocar fondo, o sea, a la
búsqueda de una segunda oportunidad cuando ya nadie confía en él. Es la
persona que como cualquier otra, quiere modificar varios aspectos de su vida
tanto privada como profesional. Es el chef talentoso que, además de neurótico
y tirano en la cocina, se enfrenta a las consecuencias de sus actos pasados, a
fracasos y odios, rencores y venganzas, que necesariamente lo conducen a ver
sus propias limitaciones, a confrontar sus propios conceptos sobre sí mismo y
los demás, sobre su vida y la búsqueda obsesiva del éxito y el triunfo,
resultando fácilmente que el espectador pueda identificarse con todo ello,
quedar atrapado en el agradable desarrollo de los acontecimientos que se van
presentando.

Junto a este fluir de la narración se encuentra algo que sucede de forma


imperceptible, que sigue siendo la base y fundamento del cine, del buen cine,
cuando no se olvida el medio a través del cual realiza su relato, es decir, la
imagen fílmica, aspecto que hoy por hoy ni es considerado importante, ni
tampoco se le presta mucha atención, lo cual es una gran equivocación y un
contrasentido como tal. La película basa buena parte de su relato en dejar que
sea la imagen la que narre, gracias a muchos ángulos y enfoques, a diversidad
de planos, en especial de primeros planos en la preparación y corte de los
alimentos, en su sazón y cocción, y posteriormente en la servida de los platos.
En entregarse con mucho talento visual a que todo quede dicho y representado
por sólo imágenes, donde sobran las palabras y los diálogos, pues la
expresividad de la imagen y más en cine, es más que suficiente. Ahí reside el
secreto para una buena receta fílmica, para poder saborear con especial gusto
el cine como imagen.

En suma se encuentran buenos ingredientes en el guion que con la buena


sazón de recursos fílmicos de planos y enfoques, entregan una muy particular
película, con su protagonista Bradley Cooper, uno de los actores de moda del
momento, quien logra una buena interpretación dramática para la exigencia del
papel, en una historia donde gracias a la ficción del cine volver a comenzar es
posible, donde modificar aspectos de la personalidad también lo es, para
retomar la senda del triunfo, incluso con historia de amor adjunta y rebasando
un pasado problemático, o sea, los muchos aspectos personales que todo ser
humano desea mejorar y superar, que los encuentra reflejados en esta
comedia y que como a toda buena comedia le compete un final feliz.

Nunca subestimes a un hombre sin nada que perder.

También podría gustarte