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Decretos Reglamentarios: 

Son aquellos que expide el presidente de la República con fundamento


en la potestad reglamentaria permanente, prevista en el numeral 11 del artículo 189 de la Carta,
los cuales son necesarios para la cumplida ejecución de las leyes.

Decretos Legislativos:
Son aquellos por medio de los cuales el Presidente de la República declara los estados de
excepción, previstos en los artículos 212 (guerra exterior), 213 (estado de conmoción interior) y
215 (estado de emergencia económica, social y ecológica) de la Constitución Política.

Decretos Leyes:
Son aquellos que expide el Presidente con base en una ley de facultades extraordinarias pro
tempore conferidas por el Congreso de la República, cuando la necesidad lo exija o la conveniencia
pública lo aconseje, estas disposiciones tienen la misma jerarquía de una ley expedida por el
Congreso de la República, de acuerdo con lo previsto en el numeral 10 del artículo 150 de la
Constitución.

Decretos Administrativos:
Son aquellos que profiere el Presidente o el Gobierno en cumplimiento de sus funciones
administrativas, cuya finalidad es la aplicación concreta de disposiciones constitucionales, legales
o reglamentarias.

En la derogación expresa, el legislador señala en forma precisa y concreta los artículos que deroga.
Es decir, no es necesaria ninguna interpretación, pues simplemente se excluye del ordenamiento
uno o varios preceptos legales, desde el momento en que así lo señale el legislador

La derogación orgánica refiere a cuando la nueva ley regula integralmente la materia, que en
términos de la Corte Suprema de Justicia supone “que la nueva ley realiza una mejora en relación
con la ley antigua; que aquella es más adecuada a la vida social de la época y que, por tanto,
responde mejor al ideal de justicia ...

¿Qué es el estatuto tributario?


El Estatuto Tributario sustituye las normas con fuerza de ley relativas a los impuestos que
administra la Dirección General de Impuestos Nacionales, en él comprendidos, vigentes a la fecha
de expedición de este Decreto y entrará en vigencia dos (2) meses después de la publicación de
este Decreto."

Principios Constitucionales del Derecho Tributario

Lo anterior, partiendo de lo establecido por el articulo 363 de la constitución política, el cual dicta
que “El sistema tributario se funda en los principios de equidad, eficiencia y progresividad. Las
leyes tributarias no se aplicarán con retroactividad”.
Así pues dentro de estos principios se encuentran:

PRINCIPIO DE LEGALIDAD

De acuerdo con lo establecido por la sentencia C 891 de 2012, “El principio de legalidad tiene
como objetivo primordial fortalecer la seguridad jurídica y evitar los abusos impositivos de los
gobernantes, puesto que el acto jurídico que impone la contribución debe establecer
previamente, y con base en una discusión democrática, sus elementos esenciales para ser válido.

En este sentido, el principio de legalidad, como requisito para la creación de un tributo, tiene
diversas funciones dentro de las cuales se destacan las siguientes:

Materializa la exigencia de representación popular,

Corresponde a la necesidad de garantizar un reducto mínimo de seguridad a los ciudadanos frente


a sus obligaciones, y

Representa la importancia de un diseño coherente en la política fiscal de un Estado.

El principio de legalidad tiene una construcción doctrinaria presente en la estructura de las


constituciones de diferentes países. Este tiene como fin exponer el vínculo directo que tiene la ley
con lo que se refiere al pago de tributos, puesto que esta debe partir de una manifestación de la
voluntad que esté constituida de una forma legítima y expresa a través de una ley. Esto último
podría interpretarse de la forma en que, el principio de legalidad restringe las potestades de poder
tanto del estado como de sus gobernantes (principio de reserva de ley) de imponer cargas y
desarrollar políticas tributarias sin que se encuentren consagradas en la norma.

Respecto de a lo anterior, la Sentencia C-710/01, de la Corte constitucional, expone que:

El principio constitucional de la legalidad tiene una doble condición de un lado es el principio


rector del ejercicio del poder y del otro, es el principio rector del derecho sancionador. Como
principio rector del ejercicio del poder se entiende que no existe facultad, función o acto que
puedan desarrollar los servidores públicos que no esté prescrito, definido o establecido en forma
expresa, clara y precisa en la ley. Este principio exige que todos los funcionarios del Estado actúen
siempre sujetándose al ordenamiento jurídico que establece la Constitución y lo desarrollan las
demás reglas jurídicas.

Continuando con lo anterior, la Constitución colombiana establece el principio de legalidad en los


artículos 150 numeral 12 y el artículo 338, el primero consagra una reserva en el Congreso
para “establecer contribuciones fiscales y, excepcionalmente, contribuciones parafiscales en los
casos y bajo las condiciones que establezca la ley”, mientras que el segundo des estos consagra:

“Artículo 338: En tiempo de paz, solamente el Congreso, las asambleas departamentales y los
concejos distritales y municipales podrán imponer contribuciones fiscales o parafiscales. La ley, las
ordenanzas y los acuerdos deben fijar, directamente, los sujetos activos y pasivos, los hechos y las
bases gravables, y las tarifas de los impuestos. La ley, las ordenanzas y los acuerdos pueden
permitir que las autoridades fijen la tarifa de las tasas y contribuciones que cobren a los
contribuyentes, como recuperación de los costos de los servicios que les presten o participación
en los beneficios que les proporcionen; pero el sistema y el método para definir tales costos y
beneficios, y la forma de hacer su reparto, deben ser fijados por la ley, las ordenanzas o los
acuerdos. Las leyes, ordenanzas o acuerdos que regulen contribuciones en las que la base sea el
resultado de hechos ocurridos durante un período determinado, no pueden aplicarse sino a partir
del período que comience después de iniciar la vigencia de la respectiva ley, ordenanza o
acuerdo”.

Bajo los estipulado en el artículo 338 de la Constitución Nacional de Colombia, es importante


resaltar que la forma procesal que la nación ejerce expresa que, sólo los órganos de
representación tales como, el congreso, las asambleas departamentales y concejos tienen la
competencia en términos y materia de tributos y contribuciones.

PRINCIPIO DE EQUIDAD

El principio de equidad tributaria observa y analiza las circunstancias económicas de los individuos,
para así poder determinar y asignar un nivel adecuado de contribución con el Estado.

De esta forma existe una proporcionalidad, que busca que la cantidad de dinero este de acuerdo
con los ingresos que tiene el contribuyente, para así establecer o definir una obligación de
contribución acorde. Hay que recordar y tener en cuenta que estas medidas son tomadas en pro
de la población y para un beneficio común, por lo que el Estado se ve limitado con lo previamente
mencionado.

Teniendo en cuenta lo anterior, entre mayor sea la capacidad de pago, mayor va a ser la carga
impositiva que se establecerá de acuerdo con la ley tributaria. De aquí nacen los términos equidad
horizontal y equidad vertical, los cuales dictan:

Equidad horizontal: hace referencia a que los tributos gravan de la misma forma a aquellos que
tiene la misma capacidad de pago.

Equidad vertical: hace referencia a que los tributos gravan en una proporción mayor o menor a
quienes tiene una capacidad contributiva mayor o menor. Entendiendo como capacidad
contributiva, la capacidad de pago que tiene la persona de sus obligaciones de tipo tributario.

Por lo que se podría decir que, lo que se busca es a un trato desigual entre desiguales, y un trato
igualitario entre iguales. Frente a esto la corte constitucional ha sostenido que:

“la equidad tributaria es la manifestación del principio de igualdad general e implica las
formulaciones legales que establezcan tratamientos tributarios diferenciados injustificados, ya sea
porque se desconozca el mandato de igual regulación legal cuando no existan razones para un
tratamiento desigual o porque se desconozca el mandato de regulación diferente cuando exista
razones para un tratamiento igual”

PRINCIPIO DE EFICIENCIA
Desde una perspectiva de carácter puramente tributario, el principio de eficiencia se refiere a la
capacidad de cumplir una meta deseada o idónea, con la menor cantidad de procedimientos y
recursos; por lo que en materia tributaria se refiere a la capacidad de imponer tributos y
recolectarlos de la forma más sencilla, tanto para el Estado como para los contribuyentes.

Frente a la eficiencia vista desde el deber de contribuir, es necesario que la legislación tributaria
así como su procedimiento se encuentren lo suficientemente claras para que el contribuyente
logre tener un entendimiento adecuado de los tributos, y que efectúe su pago sin traumatismos
innecesarios, para poder continuar con cumplimiento fluido y estimulado de las obligaciones
fiscales.

De esta manera, de acuerdo con algunos doctrinantes, el principio de eficiencia parte del análisis
de la relación entre el derecho y la economía, donde se determina si las políticas económicas son
deseables o indeseables, a través de la práctica de la economía positiva y normativa, conceptos
que consagran:

Economía positiva: se encarga de la ejecución de un análisis de un problema económico,


basándose en los acontecimientos y consecuencias de la práctica de este. Toma como medio de
estudio la evidencia empírica y la lógica subyacente.

Economía normativa: practica que complementa el ejercicio de la economía positiva, que se


encarga de hacer, de manera subjetiva, un juicio de valor que establezca si esas consecuencias y
efectos son deseables o indeseables. Esto no parte de una teoría científica, ya que no se basa en
hechos o evidencias concretas.

PRINCIPIO DE PROGRESIVIDAD

Este principio va de la mano con el principio de equidad e igualdad, debido a que este consiste en
que debe existir una distribución de las cargas tributarias entre los diversos individuos obligados a
contribuir con su pago, observando la capacidad contributiva de dichos individuos. A manera de
ejemplo, generalmente se sostiene que el impuesto más regresivo es el impuesto sobre las ventas
(IVA) debido a que este es un impuesto que no observa la capacidad contributiva de su obligado
económico, mientras que el impuesto sobre la renta de personas naturales se enciente como un
impuesto puramente progresivo por establecer tarifas diferenciadas de acuerdo con el ingreso que
tiene la persona, por lo que a mayor ingreso, mayor tarifa aplicable.

Así pues, la capacidad contributiva debe ser proporcional y acorde a la disposición económica que
hay para ejercer el pago. Sin embargo, en términos de progreso, este principio también hace
referencia a la valoración de los resultados obtenidos con los recursos recaudados, tales como el
destino y los efectos de tal gasto público financiado por los individuos contribuyentes. Esta
permite determinar el nivel de impacto tanto positivo, como negativo del gasto público en relación
con el bienestar y situación relativa de los contribuyentes.

En conclusión, la progresividad busca llegar al concepto de justicia establecida en la disciplina


jurídica y filosófica, lo que hace que el uso de este principio sea tanto de interés público y para la
población, como para lo que se refiere al derecho tributario.
Clase de Tributo

Los impuestos de carácter nacional son el impuesto a la renta, el impuesto al valor agregado (IVA)
y el Gravamen a los Movimientos Financieros (GMF). Los principales impuestos departamentales
en Colombia son el impuesto al consumo y el impuesto de registro.

La exequibilidad (lat. exsequibilis) es una clase de sentencia emitida por la Corte Constitucional en


la que se manifiesta que una ley es acorde a la constitución política.1 Se dice que una norma es
declarada exequible cuando su contenido se ajusta a la Constitución Política o Carta Magna. El
término se contrapone con inexequible, evento en el cual una norma no se ajusta a lo expresado
en la Carta Política.

La nulidad es, en Derecho, una situación genérica de invalidez del acto jurídico, que provoca que
una norma, acto jurídico, acto administrativo o acto procesal deje de desplegar sus efectos
jurídicos, retrotrayéndose al momento de su celebración. Para que una norma o acto sean nulos
se requiere de una declaración de nulidad, expresa o tácita y que el vicio que lo afecta sea
coexistente a la celebración del mismo.

¿Qué significa corte de Estado?


Es la encargada de solucionar los conflictos entre el Estado y los particulares, o entre las mismas
Entidades Oficiales y los ciudadanos. También hacen parte de la jurisdicción de lo contencioso
administrativo: Tribunales Administrativos.

¿Qué es El Corte Constitucional?


Jurisdicción Constitucional

Su máxima autoridad es la Corte Constitucional. Tiene como principal función cuidar que se


respeten nuestra Constitución y los derechos humanos o fundamentales de las personas, y
resolver los asuntos Estudia las tutelas y que se puede convertir en una ley y que no

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