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TÉRMINOS DE LOS TRABAJOS DE AUDITORÍA

El propósito de esta norma es dar lineamientos sobre: el acuerdo
de los términos del trabajo con el cliente; y también dar respuesta
del auditor a una petición de un cliente en el caso de cambiar los
términos de un trabajo por otro que brinde un nivel más bajo de
certeza (Certeza es la cuantificación del nivel de seguridad que el
auditor ha obtenido al momento de finalizar una auditoría).
Bajo este contexto esta norma pretende ayudar al auditor en la
preparación de cartas compromisos que sean relativas a auditorías
de estados financieros, estos lineamientos son también aplicables a
servicios relacionados. Y también cuando se preste otros servicios
como asesoría sobre impuestos, contabilidad, o administración,
puede ser apropiado emitir cartas por separado.

Cartas Compromiso de Auditoría

Esta carta documenta y confirma la aceptación del nombramiento
por parte del auditor, el objetivo y alcance de la auditoría, el grado
de las responsabilidades del auditor hacia el cliente y la forma del
informe. Cabe recalcar que debe enviarse antes de iniciar el trabajo
para evitar malos entendidos.
Esta norma también especifica la forma y contenido de las cartas
compromiso estas pueden variar para cada cliente pero deben
hacer siempre referencia a:
• El objetivo de la auditoría
• Responsabilidad de la administración
• El alcance de la auditoría, que incluye la legislación aplicable,
reglamentos o pronunciamientos de organismos profesionales
a los cuales se adhiere el auditor.
 • La forma de los informes.
• El riesgo se da cuando el auditor de una opinión de auditoría
inapropiada cuando la información financiera está elaborada
en forma errónea de una manera importante.
• Acceso sin restricción a la información de la
empresa
Auditorías de Componentes
La auditoría de componentes se presenta en los encargos de
auditoría que se realizan sobre grupos empresariales, en los que se
identifican diferentes organizaciones denominadas componentes,
estas influyen en el resultado integral del grupo sometido al
proceso de auditoría.
En este caso Si el auditor de una entidad controladora es también
auditor de su subsidiaria, rama, división o (componente), de esta
manera existen varios factores que deciden si hay que mandar una
carta compromiso por separado al componente, y deben incluir:
• Quién nombra al auditor del componente.
• Si debe emitirse un dictamen de auditoría por separado.
• Requisitos legales.
• El grado de cualquier trabajo desempeñado por otros
auditores.
• Proporción en que la tenedora o controladora es propietaria.
• Grado de independencia de la administración del
componente.
Auditoria Recurrentes
Son aquellas donde se examinan los Planes de Medidas elaborados
en auditorias anteriores donde la empresa obtuvo calificación
Deficiente o Mala.
En este caso el auditor deberá considerar si las circunstancias
requieren que los términos del trabajo sean revisados y si hay
necesidad de recordarle al cliente los términos ya existentes.
El auditor decidirá si envía una nueva carta compromiso cada
periodo, sin embargo se deberá tomar en cuenta varios factores
que indican lo apropiado que es hacerlo.
• Para evitar malentendidos de los objetivos y alcance de la
auditoría por parte del cliente.
• Los términos del trabajo revisados o especiales.
• Cualquier cambio en la alta gerencia, consejo de directores.
• Un cambio importante en la naturaleza o tamaño del negocio
del cliente.
• Requisitos legales.
Aceptación de un Cambio en el Trabajo
Cuando a Un auditor se le pide, antes de terminar su trabajo, que lo
cambie a uno que proporcione un nivel más bajo de certeza, deberá
considerar si es o no apropiado hacerlo.
Cuando el cliente pide que el auditor cambie el trabajo puede
afectar la necesidad del servicio, generar un malentendido o una
restricción sobre el alcance del trabajo, impuesta por la
administración o causada por las mismas circunstancias.
Para ello Se debe considerar cuidadosamente la razón dada para la
petición, particularmente si las implicaciones de una restricción
sobre el alcance del trabajo.
Un cambio no sería considerado razonable si mostrara que el
cambio se refiere a información que es incorrecta, incompleta o
insatisfactoria. En este caso El auditor no deberá estar de acuerdo
con un cambio de trabajo donde no haya justificación razonable.
Si el auditor concluye que la justificación es razonable para cambiar
el trabajo y que cumple con las normas aplicables al trabajo
cambiado el dictamen no incluirá la referencia al trabajo original, ni
a los procedimientos desarrollados en el mismo sin embargo el
auditor y el cliente deberán estar de acuerdo sobre los nuevos
términos.