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Anotaciones sobre “El último en la fila”

1) El poder de descripción es enorme.


Había allí
estos ingredientes frescos: la caja de bombones de un kiosco
donde estallaba la música las noches de los jueves y los domingos;
unos hermosos bancos de bronce y cobre patinados de verde con
volutas y flores; hermosos senderos de mosaicos rosados y azules
—azules como ojos de mujer recién pintados, rosados como
maravillas ocultas de mujer—, y hermosos árboles podados y
recortados en forma de caja de sombreros.

Debe notarse la introducción de la comparación. La


descripción siempre está enlazada a la interioridad
humana, explícita o implícitamente. El entorno de
los personajes lo moldea el escritor en los términos
de las experiencias interiores que ellos sufren. Ya la
comparación elegida muestra la importancia que
tendrá la interioridad femenina.
2) Notar la brevedad de los diálogos, la brevedad
con que se expresan los personajes. No hay
verborragia sino precisión y expresión mínima. Un
minimalismo del diálogo que hace que todas las
palabras dichas por los personajes sean
significativas.
— ¿Cuáles son los planes para hoy?
—Iremos a ver las momias.
—Oh —dijo Marie. Hubo un largo silencio. Joseph entró, con la
cámara colgando, y encendió un cigarrillo.
—Iré a verlas solo —dijo Joseph—, si no tienes ganas.
—No —dijo Marie, con una voz no muy firme—. Iré contigo. Pero
espero que lo olvidemos pronto. Es un pueblecito tan encantador…

También el vocabulario de los diálogos se ajusta a la


practicidad. Y de nuevo, la expresión de lo que corre
por dentro de los personajes. Eso es muy
importante para que lo que dicen sea significativo
en cuanto a crear una imagen de su interioridad. No
son personajes huecos porque dicen lo que sienten,
aunque sea indirectamente.
3) La presentación de las situaciones no es patente
sino que yendo de la sugerencia a la precisión. Eso
hace que el lector tenga que acceder a lo que se
describe como si estuviera haciendo un esfuerzo
por ver, por ir encontrando el rumbo en el
panorama presentado por el escritor. Entonces se
produce un efecto de zambullida descriptiva.
No era un bulto común lo que llevaba sobre la cabeza el primer
hombre de la procesión, en delicado equilibrio, como una pluma de
pollo. El bulto estaba cubierto con una seda plateada, y tenía flecos
de plata y rosetas de plata. Y el hombre lo sostenía
cuidadosamente con una mano morena, balanceando la mano libre.
La procesión era un funeral y el bulto era un ataúd.

4) Si sumamos el efecto de correspondencia entre


paisaje interior y paisaje interior, con la
expresividad minimalista de los diálogos, que
también ayudan a establecer el paisaje interior, y
por último, con el efecto de zambullida descriptiva,
tenemos tres recursos excelentes para la
construcción de la ATMÓSFERA del relato. La
atmósfera es más que simplemente la interrelación
entre lo exterior y lo interior, es la sumersión mutua
de los personajes en el paisaje y del paisaje en los
personajes.
5) El personaje del cuento más delineado por Ray es
Marie, y en Marie realiza una apoteosis de su
capacidad descriptiva, hasta el punto de que la
imagen de Marie es al mismo tiempo física, mental,
actitudinal, etc. Cuando la retrata realiza en ella un
sincretismo de la dimensión psicológica y la física.
Su cuerpo y su mente están correlacionadas y
evolucionan juntos.
Marie tenía el color de la leche fresca. Había
perdido el color rosado del baño. El corazón se le había hundido en
algún vacío secreto. Se apoyaba con fuerza en el marco de la
puertaventana, y miraba a la gente que subía por la calle, miraba
cómo comían fruta, oía cómo hablaban tranquilamente entre ellos y
reían. Olvidó que estaba desnuda.
6) Claramente Ray juega con un fuerte contraste
entre Marie y su esposo Joseph. En Marie hay
poesía, en Joseph hay una aridez objetiva y
ausencia total de interioridad. Es nada más un muro
de conciencia que patentiza la soledad de Marie.
—Pero no ese cementerio, ese sitio horrible ———dijo Marie con
una voz que parecía venir de un sueño.
(…QUE PARECÍA VENIR DE UN SUEÑO,
SUBJETIVIDAD)
Este clima no es bueno para los
muertos. Hace calor, y no hay embalsamadores. Tienen que
terminar todo enseguida.
ESTE CLIMA NO ES BUENO PARA LOS MUERTOS,
EXPRESIÓN OBJETIVA, DESPOJADA DE EMOCIÓN.
De este modo Ray establece sin afirmarla
tácitamente, la soledad de Marie, y el lector no
sabe por qué lo sabe pero sabe que ella está sola
aunque está con Joseph. Es simplemente el
contraste que también penetra en la mente del
lector.
Este recurso es muy interesante, pues la situación
emocional de Marie se define también a través del
modo en que el escritor moldea los diálogos.
7) En la escena de las momias podemos ver como el
escritor decide moldear el relato en los términos de
la interioridad de Marie, es decir, sin decirlo se
pone en la perspectiva del personaje y la
descripción adquiere la tonalidad de lo que ocurre
en su mente, en un sincretismo perfecto entre la
mente del personaje, la escritura y lo que se
describe. Es la apoteosis de lo atmosférico obtenida
mediante la perturbación psicológica de Marie
transfundida al texto hasta en su mera
construcción.
Moreno, Morelos, Cantino, Gómez, Gutiérrez, Villanosul, Ureta,
Lincón, Navarro, Iturbe; Jorge, Filomena, Nena, Manuel, José,
Tomás, Ramona. Este hombre caminaba y este hombre cantaba
y este hombre tenía tres mujeres, y este hombre murió de esto,
y aquél de aquello, y el tercero de otra cosa, y el cuarto fue
fusilado, y el quinto fue apuñalado, y el sexto cayó muerto de
pronto, y el séptimo se emborrachó hasta morir, y el octavo
murió de amor, y el noveno se cayó del caballo, y el décimo
tosió sangre, y el undécimo tuvo un ataque al corazón, y el
duodécimo se reía mucho, y el decimotercero bailaba muy bien,
y el decimocuarto era el más hermoso de todos; el
decimoquinto tenía diez hijos y el decimosexto es uno de esos
hijos lo mismo que el decimoséptimo; y el decimoctavo se
llamaba Tomás y tocaba bien la guitarra; los tres siguientes
segaban maíz en los campos y tenían tres amantes cada uno;
Además, como el narrador omnisciente no dice
estar usando la perspectiva de Marie no está
obligado a limitarse a “saber lo que el personaje
sabe”, evadiendo esta limitación con excelencia de
resultado.

7) Cuando Ray introduce el horror lo hace de la


manera más poderosa, que hace innecesaria toda
otra manera. Lo hace en la mente de Marie. El
horror ni siquiera tiene que existir, solamente tiene
que manifestarse mentalmente. La mente luego lo
proyecta hacia afuera, transformando la descripción
del mundo, algo para lo cual queda habilitado el
narrador omnisciente.

Marie se abrió paso


entre gritos que colgaban alrededor como una red.

8) Podemos ver por qué Ray prefiere el narrador


omnisciente: porque en esta postura y usando el
recurso de no admitir límites entre su mente y la del
personaje, entre lo exterior y lo interior, él
realmente hace uso del poder divino. No se deja
entrampar por limitación alguna en su narrativa.

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