Está en la página 1de 11

José

martí
t
Antología sencilla

selección de

Alejandro Ramírez y Daniel Yock

| 2020 |

consejo estatal de fomento a la lectura y creación literaria


t José M artí. A ntología sencilla

Al lector

Mis amigos saben cómo me salieron estos versos del corazón.

Solamente un pueblo culto puede ser veramente libre.


José Martí

En José Martí confluyen la figura del lírico y el hombre


de acción comprometido con los ideales más altos de los
pueblos de nuestra América. Leer su obra es comprender
su indómito amor por la patria y la libertad; pero, también,
escuchar los clamores del rayo y de la ola, o ver cómo surcan
las nubes el azul celeste y elevan su canción las abejas hasta
el oído de las flores silvestres.
Esta selección de Versos sencillos se publica procurando
respetar el orden con que fueron concebidos la noche de
invierno que despertó el afecto de algunas almas reunidas
por la amistad y la poesía.

2
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

ensayos para diversas publicaciones de América. Entre sus


obras más destacables se encuentran La república española
José Martí ante la revolución cubana (1873), Ismaelillo (1887), La edad de
oro (1878 -1882), Versos sencillos (1891), Nuestra América (1891),
Versos libres (1913) y Flores del destierro (1878 -1895).
t Finalmente, muere en Dos Ríos el 19 de mayo de 1895,
víctima de las heridas recibidas en combate. Sus restos se
encuentran sepultados en el nicho 134 de la galería sur del
José Julián Martí Pérez nació en La Habana el 28 de enero cementerio de Santa Ifigenia, en Santiago de Cuba.
de 1853. Su sensibilidad e inteligencia atraen la atención de
Rafael María Mendive, hombre ilustrado que se encarga de
costear su educación y cultiva en él el espíritu de la poesía y el
ideal de libertad. En 1869 es encarcelado por su participación
en actividades revolucionarias, como la publicación de la
revista satírica El Diablo Cojuelo y el semanario Patria Libre.
Es condenado a seis años de prisión, de los cuales sólo
cumple cinco meses. Posteriormente es desterrado a Cádiz
por intervención de su padre. Llega a España en 1871, en
donde pasará los siguientes tres años de su vida; durante
ese tiempo participa a través de la prensa en el debate
sobre la independencia cubana. En 1874, tras un breve paso
por Francia, regresa a América y vive esporádicamente en
México, Cuba, Guatemala, Venezuela y Nueva York, ciudad
en la que reside por más de una década. Sus viajes por el
continente lo llevan a considerar la necesidad de las naciones
americanas de emprender una política propia que tenga en
cuenta las condiciones naturales y sociales en las que se ha
de desarrollar. Asimismo, escribe artículos periodísticos y

4 5
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

Alas nacer vi en los hombros


I De las mujeres hermosas:
Y salir de los escombros
Volando las mariposas.
Yo soy un hombre sincero
De donde crece la palma, He visto vivir a un hombre
Y antes de morirme quiero Con el puñal al costado,
Echar mis versos del alma. Sin decir jamás el nombre
De aquella que lo ha matado.
Yo vengo de todas partes,
Y hacia todas partes voy: Rápida, como un reflejo,
Arte soy entre las artes, Dos veces vi el alma, dos:
En los montes, monte soy. Cuando murió el pobre viejo,
Cuando ella me dijo adiós.
Yo sé los nombres extraños
De las yerbas y las flores, Temblé una vez —en la reja,
Y de mortales engaños, A la entrada de la viña—,
Y de sublimes dolores. Cuando la bárbara abeja
Picó en la frente a mi niña.
Yo he visto en la noche oscura
Llover sobre mi cabeza Gocé una vez, de tal suerte
Los rayos de lumbre pura Que gocé cual nunca: cuando
De la divina belleza. La sentencia de mi muerte
Leyó el alcaide llorando.

6 7
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

Oigo un suspiro, a través Oculto en mi pecho bravo


De las tierras y la mar, La pena que me lo hiere:
Y no es un suspiro, es El hijo de un pueblo esclavo
Que mi hijo va a despertar. Vive por él, calla y muere.

Si dicen que del joyero Todo es hermoso y constante,


Tome la joya mejor, Todo es música y razón,
Tomo a un amigo sincero Y todo, como el diamante,
Y pongo a un lado el amor. Antes que luz es carbón.

Yo he visto al águila herida Yo sé que el necio se entierra


Volar al azul sereno, Con gran lujo y con llanto,
Y morir en su guarida Y que no hay fruta en la tierra
La víbora del veneno. Como la del camposanto.

Yo sé bien que cuando el mundo Callo, y entiendo, y me quito


Cede, lívido, al descanso, La pompa del rimador:
Sobre el silencio profundo Cuelgo de un árbol marchito
Murmura el arroyo manso. Mi muceta de doctor.

Yo he puesto la mano osada,


De horror y júbilo yerta,
Sobre la estrella apagada
Que cayó frente a mi puerta.

8 9
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

V XXXIV

Si ves un monte de espumas, ¡Penas! ¿Quién osa decir


Es mi verso lo que ves: Que tengo yo penas? Luego,
Mi verso es un monte, y es Después del rayo, y del fuego,
Un abanico de plumas. Tendré tiempo de sufrir.

Mi verso es como un puñal Yo sé de un pesar profundo


Que por el puño echa flor: Entre las penas sin nombres:
Mi verso es un surtidor ¡La esclavitud de los hombres
Que da un agua de coral. Es la gran pena del mundo!

Mi verso es de un verde claro Hay montes, y hay que subir


Y de un carmín encendido: Los montes altos; ¡después
Mi verso es un ciervo herido Veremos, alma, quién es
Que busca en el monte amparo. Quien te me ha puesto al morir!

Mi verso al valiente agrada:


Mi verso, breve y sincero,
Es del vigor del acero
Con que se funde la espada.

10 11
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

XXXV XXXVII

¿Qué importa que tu puñal Aquí está el pecho, mujer,


Se me clave en el riñón? Que ya sé que lo herirás;
¡Tengo mis versos, que son ¡Más grande debería ser,
Más fuertes que tu puñal! Para que lo hirieses más!

¿Qué importa que este dolor Porque noto, alma torcida,


Seque el mar, y nuble el cielo? Que en mi pecho milagroso,
El verso, dulce consuelo, Mientras más honda la herida,
Nace alado del dolor. Es mi canto más hermoso.

12 13
t José M artí. A ntología sencilla J osé M artí. A ntología sencilla t

Mi vida así se encamina


XLVI Al cielo limpia y serena,
Y tú me cargas mi pena
Con tu paciencia divina.
Vierte, corazón, tu pena
Donde no se llegue a ver, Y porque mi cruel costumbre
Por soberbia, y por no ser De echarme en ti te desvía
Motivo de pena ajena. De tu dichosa armonía
Y natural mansedumbre;
Yo te quiero, verso amigo,
Porque cuando siento el pecho Porque mis penas arrojo
Ya muy cargado y deshecho, Sobre tu seno, y lo azotan,
Parto la carga contigo. Y tu corriente alborotan,
Y acá lívido, allá rojo.
Tú me sufres, tú aposentas
En tu regazo amoroso, Blanco allá como la muerte,
Todo mi amor doloroso, Ora arremetes y ruges,
Todas mis ansias y afrentas. Ora con el peso crujes
De un dolor más que tú fuerte,
Tú, porque yo pueda en calma
Amar y hacer bien, consientes ¿Habré, como me aconseja
En enturbiar tus corrientes Un corazón mal nacido,
Con cuanto me agobia el alma. De dejar en el olvido
A aquel que nunca me deja?
Tú, porque yo cruce fiero
La tierra, y sin odio, y puro, ¡Verso, nos hablan de un Dios
Te arrastras, pálido y duro, Adonde van los difuntos:
Mi amoroso compañero. Verso, o nos condenan juntos,
O nos salvamos los dos!

14 15
El Consejo Estatal de Fomento a la Lectura y Creación Literaria
de Chiapas, presidido por el poeta Óscar Oliva, articula diversas
instituciones, agentes culturales y creadores en busca de divulgar
el hábito lector y la expresión literaria en nuestro estado.

La edición de José Martí. Antología sencilla estuvo bajo el cuidado


de la Dirección de Publicaciones del Coneculta Chiapas, en
diciembre de 2020.
Los poemas aquí reunidos provienen del tomo 16 de la edición
crítica de las Obras completas de José Martí publicadas por el
Centro de Estudios Martianos en La Habana, Cuba, en 2016.

También podría gustarte