EL SECRETO: LEY DE LA ATRACCIÓN.

POR: Mary Luz Burbano Medina.

“Todo lo que somo es el resultado de lo que pensamos”. -Buda.
Cuantas veces nos hemos puesto a pensar “¿Cómo logramos llegar al lugar en el que
estamos? ¿Cómo superamos las dificultades que se nos presentan día a día?” y la respuesta
para muchos de nosotros es clara, porque nos hemos visto llegar a donde estamos e incluso
más allá y esa es la razón por la cual seguimos luchando cada día.
Cuando visualizamos cual va a ser nuestro objetivo obtenemos la motivación para
alcanzarlo, no es cuestión de magia nuestros logros, es nuestra propia fuerza encaminada a
un gran fin que enriquecerá nuestra vida lo que hace que logremos grandes cosas. Entonces
visualizarnos, creer que es posible es uno de los grandes pasos, aunque no hay un orden
establecido.
Mi experiencia con la fuerza de atracción se ha dado en diferentes escenarios, desde que era
niña soñaba con grandes cosas que hoy en día he logrado tener como por ejemplo una
familia estable y amorosa, logros académicos como el destacarme como mejor alumna en
mi colegio, con el tiempo me pregunte que tipo de profesional quería ser, a que me quería
dedicar y fue cuando decidí ser abogada, me visualice estudiando la carrera de mis sueños,
carrera que curso actualmente y la cual me llena de orgullo porque se que logre obtener
algo con lo que soñaba gracias a la energía que dedique en este sueño. Así he logrado
alcanzar muchas de mis metas a largo plazo. En corto plazo logré atraer el amor de una
pareja, la felicidad de poder comprar el álbum de música que quería y que muchos creían
imposible de obtener, tuve la satisfacción de encontrarme con buenas personas que al igual
que yo están llena de sueños y que hacen nuestro entorno mucho más positivo, más
esperanzador.
De las personas con las que me he cruzado y que han compartido conmigo su experiencia
con la fuerza de atracción ha sido mi amiga Sofia quien nunca perdió la fe de ver a su
madre superar el cáncer que le había sido diagnosticado. Cada día que me cruzaba con ella
manifestaba su fuerte creencia en que su madre iba a mejorar y decía que cada día la veía
mejor, estaba convencida de que ella superaría tan grave enfermedad. Así pasaron semanas,
meses hasta que un día me encontré en ella y su madre en el parque de mi pueblo muy
felices, me acerque y les pregunte como seguía la señora Diana pues la miraba muy bien,
ella con gran felicidad respondió que estaba totalmente curada, que los médicos le habían
dicho que era casi un milagro pues compañeras de tratamiento lastimosamente habían
muerto, pero ella por el contrario estaba hoy mas sana que nunca, hablando y hablando de
su experiencia recuerdo que me dijo que desde el día que se creyó capaz de superar esta
enfermedad sintió que algo dentro de ella cambio, dejo atrás la depresión y cambio su
rutina de vida totalmente, es así como aquellas células dañinas no pudieron expandirse pues
su propio organismo se convenció de que era mucho mas fuerte, y me dijo que cuando ella
decía en voz alta que se iba a recuperar sentía como cada célula de su organismo se movía
para lograrlo y fue así como ella logro curarse y cambiar totalmente su forma de pensar.
Estas experiencias me convencen cada día mas de que nuestra fuerza va más allá de lo que
creemos y que todo lo que nos propongamos puede ser logrado en tanto que creamos que
podemos hacerlo.