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Daño ambiental

Daño ambiental

Marco normativo

Para complementar

Referencias
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Daño ambiental

 ¿Qué es el daño ambiental? ¿Cuáles son sus características? ¿Cuál es el régimen aplicable? ¿Cómo es la responsabilidad por ese daño producido?

Valls desarrolla de manera extensa y detallada las cuestiones relativas al daño ambiental y la responsabilidad que surge de él.

En esta lectura haremos referencia al marco teórico y normativo general. Comenzaremos describiendo las características del daño ambiental y su diferenciación con el daño
común, para luego, hacer un breve repaso por el marco legal atinente a la cuestión, sin adentrarnos en legislaciones particulares.

Características y distinciones

Es importante comenzar con un breve repaso de las características más importantes del daño ambiental, teniendo en cuenta que sus particularidades lo apartan del daño clásico,
lo que justifica la búsqueda de soluciones diferentes.

En esta línea, el daño ambiental no cumple con los requisitos del daño jurídico común, resarcible y reparable, el cual es cierto, concreto, directo, personal y diferenciado. El
daño ambiental, por el contrario, es incierto, indirecto o reflejo, impersonal, de causalidad difusa. En este sentido, Mario Valls (2016) postula como características sobresalientes
las siguientes:

Los daños ambientales generalmente se exteriorizan lentamente. Esto dificulta que el perjuicio se advierta, permitiéndole al responsable disfrutar de los
beneficios por un período prolongado hasta que se reclame y proceda a la ejecución de la sentencia favorable.

Sus consecuencias pueden ser de una gravedad tal que haga imposible la reparación y el resarcimiento.

Relacionada con la anterior, el autor postula que la reposición de las cosas al estado anterior suele ser difícil, antieconómica o imposible. Por ello, las
normas hacen especial hincapié en la prevención del daño.

La doctrina se refiere al daño ambiental como bicéfalo o bifronte, debido a que causa tanto daños colectivos como individuales. De esta manera, se diferencia entre el daño
ambiental per se o de incidencia colectiva y el daño a los individuos a través del ambiente.

En palabras de Morales Lamberti (2008):

…Es posible con la misma acción, causar dos daños jurídicamente distintos: por un lado el daño ambiental colectivo, cuya obligación de restauración por
parte de los responsables es debida en forma permanente e imprescriptible frente a la colectividad; y del otro, el daño a la persona o cosa material con motivo
del mismo daño ambiental… Corresponde así, distinguir entre el daño causado a las personas o a sus bienes, incluso a través del daño al ambiente, del daño
causado al ambiente mismo o daño ambiental puro. (Morales Lamberti, 2008, p.12).
Sabsay y Di Paola (2003), entienden que es una distinción que permite analizar las características particulares de cada tipo de daño. De esta manera, en el caso del daño al
ambiente, se trata de un menoscabo al medio en general, afectando la calidad de vida de los seres vivos, los ecosistemas y demás componentes bióticos y abióticos. En cambio,
respecto al daño individual o clásico, el perjuicio es producido a las personas o sus cosas, a través del deterioro del ambiente.

Desde otro punto de vista, Mosset Iturraspe, Hutchinson y Donna (1999) distinguen tres supuestos distintos dentro del concepto genérico de daños:

Por un lado, el caso en el que se ocasiona un daño patrimonial a un tercero como consecuencia de un daño ambiental (responsabilidad civil).

Por otro, los casos en que es responsable el Estado. Se trata de responsabilidad administrativa, ya sea por conducta legítima o por una conducta ilegítima.

Finalmente, encontramos a los casos de responsabilidad por daños ambientales colectivos, en los que el daño se le hace a la comunidad.
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Marco normativo

Constitución Nacional

Pablo Lorenzetti (2015-a) destaca que se trata de un tipo de daño que posee mención expresa en la Constitución Nacional. Esto tiene como consecuencia principal que debamos
considerar especialmente el bloque de constitucionalidad al resolver un caso sobre daño ambiental.

La cuestión del daño ambiental tiene jerarquía constitucional a partir de la incorporación de la llamada cláusula ambiental en la reforma del año 1994. El primer párrafo in fine

del artículo 41 expresa que “el daño ambiental generará prioritariamente la obligación de recomponer, según lo establezca la ley”1.La Constitución no se detiene a dar un
concepto de daño ambiental, por ello, lo repasaremos más adelante según la definición de la Ley General del Ambiente.

[1] Artículo 41. Constitución de la Nación Argentina. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/NVXWuR

Respecto a la obligación que surge como consecuencia del daño ambiental, podemos decir que recomponer supone restablecer la alteración ocasionada, volver las cosas al
estado anterior a la producción del daño. Respecto al término prioritariamente, no hay acuerdo en la doctrina si se trata de una opción o de una obligación, pero la mayoría
entiende que solo cuando la recomposición es técnica o fácticamente imposible se puede hablar de indemnización sustitutiva (Rosatti, 2007).

En relación a las responsabilidades que surgen de ese daño ambiental, destacamos, siguiendo a Marta Juliá, el deber de todos los ciudadanos de preservar el ambiente en primer
lugar. La segunda referencia es la responsabilidad que se configura frente al daño ambiental en particular, lo que genera la responsabilidad de recomponer según establezca la
ley. En tercer lugar, otro tipo de responsabilidad está asociada a la obligación de proveer el derecho que tienen las diferentes autoridades (ejecutiva, legislativas y judiciales en
los diferentes niveles de gobierno: nacional provincial y municipal), lo que les genera una responsabilidad frente al mandato constitucional. “Aquí identificamos tres actores
diferentes: los habitantes frente al deber de preservar, los habitantes y sus actividades en general frente a la producción de un daño al ambiente, los funcionarios frente al
incumplimiento del mandato.” (Juliá, Foradori, Perez Cubero, 2015, p. 24).

Ley General del Ambiente N° 25.675

En su artículo 4 establece el principio de responsabilidad, que dispone que “el generador de efectos degradantes del ambiente, actuales o futuros, es responsable de los costos de

las acciones preventivas y correctivas de recomposición, sin perjuicio de la vigencia de los sistemas de responsabilidad ambiental que correspondan”2.

[2] Artículo 4. Ley 25.675. (2002). Ley General del Ambiente. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/75jNXA

Luego de fijar la política general, esta ley dedica un capítulo especial a la temática del daño ambiental, particularmente del colectivo. El artículo 27 in fine define al daño
ambiental perse o daño ambiental de incidencia colectiva:

“Se define el daño ambiental como toda alteración relevante que modifique negativamente el ambiente, sus
recursos, el equilibrio de los ecosistemas, o los bienes o valores colectivos”3.
[3] Artículo 27. Ley 25.675. (2002). Ley General del Ambiente. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/75jNXA

Si analizamos los elementos de esta definición, lo primero que nos preguntamos es: ¿qué significa una alteración relevante y negativa al ambiente?

Gran parte de la doctrina considera que la capacidad autoregenerativa del ecosistema constituye una variable de especial importancia a la hora de determinar si existe daño
ambiental (Sabsay y Di Paola, 2003, p.2).

Rosatti (2007) entiende que no existe una única línea divisoria susceptible de diferenciar todas las hipótesis de relevancia e irrelevancia en materia de daño ambiental, y propone
dos parámetros divisorios como mínimo: una de ellas absoluta y ocurre en caso de pérdida de biodiversidad, y la otra ponderada, en caso de alteración de ecosistemas, recursos,
bienes o valores colectivos.

Con respecto a que se trate de una alteración negativa del ambiente, tenemos que tener presente, como se expresó en el módulo 1, que no todo es negativo y por ello es válida la
aclaración.

El artículo 28 establece la responsabilidad objetiva de quien causare el daño ambiental, reafirmando el criterio constitucional de la recomposición al estado anterior como
prioridad; solo en caso de no ser técnicamente factible, se deposita una indemnización sustitutiva en el Fondo de Compensación Ambiental.

Siguiendo con el factor de atribución de responsabilidad, el artículo 29 establece que:

la exención de responsabilidad sólo se producirá acreditando que, a pesar de haberse adoptado todas las medidas destinadas a evitarlo y sin mediar culpa
concurrente del responsable, los daños se produjeron por culpa exclusiva de la víctima o de un tercero por quien no debe responder.

La responsabilidad civil o penal, por daño ambiental, es independiente de la administrativa. Se presume iuris tantum la responsabilidad del autor del daño

ambiental, si existen infracciones a las normas ambientales administrativas.4

[4] Artículo 29. Ley 25.675. (2002). Ley General del Ambiente. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/75jNXA

Como surge de este artículo, se trata de un factor de atribución objetivo y las eximentes son mucho más estrictas que en el daño común regulado en el Código, puesto que el
autor debe acreditar el hecho exclusivo de la víctima o un tercero y, a la vez, que adoptó todas las medidas destinadas a evitar el daño.

En el artículo 30, de manera coherente con lo normado en el artículo 43 de la Contitución Nacional, la Ley
General del Ambiente presenta como legitimados activos para iniciar acciones sobre daño ambiental al
afectado: al Defensor del Pueblo y a las asociaciones no gubernamentales de defensa ambiental. También
otorga dicha capacidad al Estado nacional, provincial o municipal.

Nuevo Código Civil y Comercial de la Nación

Como propuesta superadora del modelo anterior, el Código Civil y Comercial de la Nación (CCyCN) sancionado en 2014 actualiza la responsabilidad civil conforme a los
acontecimientos actuales. En esta nueva normativa se recepta expresamente el derecho de incidencia colectiva, por lo que cobra especial protección el daño al medio ambiente.
Además, y en lo que importa especialmente a nuestra materia, reconoce que el derecho de daños tiene un fin primordialmente preventivo, lo que vuelve imperante que se impida
la provocación antes de que sea luego subsanado.
La responsabilidad civil se ubica en el Libro Tercero (Derechos personales), Título V (Otras fuentes de las obligaciones), Capítulo I (Responsabilidad civil). Esta nueva
normativa regula el régimen de responsabilidad, atribuyéndole una doble función: preventiva y reparadora (artículo 1708). De este modo, se amplían las funciones del derecho
de daños, revitalizando el sistema y haciéndolo más compatible con los caracteres del daño ambiental. En otras palabras, se comprenden dos etapas del daño: actuar ex ante
para impedir su producción, continuación o agravamiento (prevención) y, una vez acaecido el hecho, se presenta la función resarcitoria (Lorenzetti, 2015-b).

La función preventiva es uno de los aspectos más innovadores del nuevo Código y, más aún, si lo pensamos en lo que a daño ambiental específicamente se refiere. En palabras
de Cafferatta (2014):

Desde la óptica de la especialidad, todo el instrumental jurídico ambiental está orientado para evitar la consumación del daño. Cuando se actúa después de
que ocurrió el hecho dañoso la solución tardía es inútil, porque el daño ambiental es expansivo, multiplicador, continuo o permanente, por ello es plausible
toda decisión que se ubique ex ante (y no ex post), que opere sobre las causas y las fuentes de los problemas. (P. 34).

Siguiendo el orden de los artículos, el artículo 1710 se refiere de manera genérica al deber de prevención del daño, y luego el artículo 1711 a la acción preventiva en los
siguientes términos: “La acción preventiva procede cuando una acción u omisión antijurídica hace previsible la producción de un daño, su continuación o agravamiento. No es

exigible la concurrencia de ningún factor de atribución.”5 En cuanto a los legitimados: serán quienes acrediten un interés razonable (artículo 1712).

[5] Artículo 1711.Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/QzO0oO

Por otro lado, el Código se refiere a la función clásica y mayormente desarrollada del derecho civil: la función reparadora o resarcitoria en la Sección 3 a 11 (artículos 1716 a
1780).Para hacer el análisis de la normativa en este punto, seguiremos a Vera (2015) al distinguir entre: daños a través del ambiente (aquél derivado de un daño ambiental pero
que afecta intereses individuales) y daño ambiental propiamente dicho o daño ambiental colectivo (aquél que afecta directamente al ambiente como un todo común e
indivisible). Esta distinción surge del artículo 1737, cuando al conceptualizar daño expresa: “Hay daño cuando se lesiona un derecho o un interés no reprobado por el

ordenamiento jurídico, que tenga por objeto la persona, el patrimonio, o un derecho de incidencia colectiva.”6

[6] Artículo 1737.Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/QzO0oO

1 Daño a través del ambiente

El artículo 1716 establece: “La violación del deber de no dañar a otro, o el incumplimiento de una obligación, da lugar a la reparación del daño causado,
conforme con las disposiciones de este Código.”7 Luego, se establece un criterio amplio de antijuridicidad: “cualquier acción u omisión que cause un
daño a otro es antijurídica si no está justificada”8.

En lo que a factores de atribución se refiere, el Código regula tanto objetivos como subjetivos (artículos 1721, 1722, 1724).

Respecto a la relación causal, el Código mantiene la teoría de la causalidad adecuada. El artículo 1726 expresa: “Son reparables las consecuencias dañosas
que tienen nexo adecuado de causalidad con el hecho productor del daño…”9.

[7] Artículo 1716.Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/QzO0oO

[8] Artículo 1717.Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/QzO0oO

[9] Artículo 1726.Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado dehttps://goo.gl/QzO0oO

2 Daño ambiental colectivo

Como se expresó, este tipo de daño tiene sus raíces directamente en el artículo 41 de la Constitución Nacional y se encuentra conceptualizado en el
artículo 27 de la Ley General del Ambiente. Se debe tener en cuenta que,al tratarse de un daño colectivo, su regulación tiene ciertas particularidades
propias de la indivisibilidad del bien a proteger.
Lamentablemente, el anteproyecto poseía una norma integral que regulaba todo el proceso colectivo, pero
luego el Poder Ejecutivo, al modificar el artículo 14 y suprimir la categoría de derechos individuales
homogéneos, suprimió también esta regulación.En consecuencia, el daño ambiental colectivo sigue
rigiéndose por la Ley General del Ambiente y la jurisprudencia (Vera, 2015), por lo que remitimos a lo
dicho up supra.
LECCIÓN 3 de 4

Para complementar

Luego del recorrido realizado, podemos distinguir dos funciones de la responsabilidad ambiental. Por un lado, la función preventiva receptada en los principios precautorio y
preventivo de la Ley General del Ambiente y en los artículos 1711 a 1713 del Código Civil y Comercial de la Nación. Por otro lado, la función resarcitoria o reparadora,
regulada en la Ley General del Ambiente, y que puede consistir en: 1) recomposición total; 2) recomposición parcial más indemnización subsidiaria; 3) indemnización
sustitutiva.

En esta lectura solo se hizo referencia al marco normativo general receptado en la Constitución Nacional, la Ley 25675 y el Código Civil y Comercial. A los fines de
profundizar sobre estos temas, te invitamos a estudiar la bibliografía obligatoria, en donde Valls (2016) hace un minucioso análisis de la responsabilidad por daño ambiental, el
principio contaminador-pagador y las cosas materiales que dañan el ambiente. En este último punto (Sección X del Capítulo V), Valls profundiza sobre los distintos regímenes
de los residuos, haciendo alusión a las leyes de presupuestos mínimos de residuos domiciliarios (N° 25.916) y residuos industriales (N° 25.612) y a la ley de residuos peligrosos
(N° 24.051), entre otras.

A modo complementario, te invitamos a leer la siguiente publicación:

Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.pdf


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LECCIÓN 4 de 4

Referencias

Cafferatta, N. (2014) Derecho ambiental en el Código Civil y Comercial de la Nación. Recuperado de http://www.nuevocodigocivil.com/derecho-ambiental-en-el-codigo-civil-
y-comercial-de-la-nacion-por-nestor-a-cafferatt/

Constitución de la Nación Argentina. (1994). [Sancionada por el Congreso General Constituyente el 1° de mayo de 1853, reformada y concordada por la Convención
Nacional Ad Hoc el 25 de septiembre de 1860 y con las reformas de las Convenciones de 1866, 1898, 1957 y 1994]. Recuperada de
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/0-4999/804/norma.htm

Juliá, M., Foradori, M. y Perez Cubero, M. (2015). La responsabilidad ambiental en el nuevo orden jurídico ambiental de Argentina. En Cuaderno de Derecho Ambiental,
nºVII: Responsabilidad ambiental. Pp. 17-46. Recuperado de http://www.acaderc.org.ar/ediciones/cuaderno-de-derecho-ambiental-vii

Ley 26.994. (2014). Código Civil y Comercial de la Nación. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado de:
http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/235000-239999/235975/norma.htm

Ley 25.675. (2002). Ley General del Ambiente. Honorable Congreso de la Nación Argentina. Recuperado de: http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/75000-
79999/79980/norma.htm

Lorenzetti, P. (2015-a). La función preventiva de la responsabilidad civil y el daño ambiental en el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación. Recuperado de
http://www.nuevocodigocivil.com/la-funcion-preventiva-de-la-responsabilidad-civil-y-el-dano-ambiental-en-el-nuevo-codigo-civil-y-comercial-de-la-nacion-por-pablo-
lorenzetti/

Lorenzetti, R. (2015-b). Código Civil y Comercial de la Nación Comentado. Buenos Aires: Robinzal-Culzoni.

Morales Lamberti, A. (2008). Estudios de Derecho Ambiental. Córdoba: Alveroni.

Mosset Iturraspe, J., Hutchinson, T., y Donna, E. (1999). Daño Ambiental. Buenos Aires: Rubinzal-Culzoni.

Rosatti, H. (2007). Derecho Ambiental Constitucional. Santa Fe: Rubinzal-Culzoni.

Sabsay, D., Di Paola, M. (2003). El daño ambiental colectivo y la nueva ley general del ambiente. En Anales de Legislación Argentina. Boletín informativo N° 32. Pp. 1-9.
Buenos Aires: Ed. La Ley.

Valls, M. (2016). Derecho ambiental. Buenos Aires: Abeledo Perrot.

Vera, A. (2015). Responsabilidad por daños en materia ambiental en el nuevo Código Civil y Comercial. En: L. Devia (Dir.), Avances del nuevo código civil y comercial en los
aspectos ambientales (pp.s/d). Buenos Aires: Albremática.

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