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TEMA III AUDITORIA DEL ACTIVO FIJO

3.1. Cédula sumaria del activo fijo.


Son aquellas que contienen el primer análisis de los datos relativos a uno de los
renglones de las hojas de trabajo y sirven como nexo entre esta y las cédulas de
análisis o de comprobación.

Las cédulas sumarias normalmente no incluyen pruebas o comprobaciones; pero


conviene que en ellas aparezcan las conclusiones a que llegue el auditor como
resultado de su revisión y de comprobación de la o las cuentas a la que se refiere.

3.2 Programa Interino y evaluación del control interno.


Entender y evaluar el proceso de control interno de la entidad es responsabilidad
del auditor, diseñar pruebas que permitan identificar controles, riesgos y probar
los procesos establecidos en la empresa.

Propiedad: Comprobar que todos los bienes que figuran en el balance se


encuentren en posesión de la empresa o de terceros.

Existencia Física: Comprobar que los activos existen y figuran en el rublo de


propiedad, planta y equipo.

Medición: Comprobar que los activos fijos estén valuados a su costo o a su valor
razonable, menos depreciación acumulada o provisión por desvalorización.

Cumplimiento de las normas contables: Verificar si se ha cumplido con el


registro adecuado en función a las NIC y NIFF

3.3 Conclusión interina.


Es el informe de auditoría que se debe presentar en la asamblea de accionistas
anual ordinaria, en la cual se presentan los estados financieros en los que se debe
adjuntar el informe del auditor que certifique la razonabilidad de la información.
Dicha asamblea se realiza en fecha límite el 31 de marzo.

Lo anterior teniendo en cuenta que la ley indica que se debe ejecutar dentro de
los tres primeros meses del año, cuando las empresas, específicamente los
departamentos contables y financieros se encuentran enfocados en la culminación
del cierre contable del período inmediatamente anterior.

También cuando los profesionales que se desempeñan como auditores y las


firmas de auditoría se encuentran en la fase final de la aplicación de los
procedimientos con el propósito de obtener la evidencia suficiente para la
expedición de los informes en los que se entregan los resultados del proceso de
auditoría y se comunica a todos los interesados. La razonabilidad de la
información

3.4 Programa de fin de año de activo fijo.


Mantener comunicación con planteles y dependencias, con la finalidad de
mantener control del mobiliario y equipo, que sea enviado a estos lugares.

Registrar a través del sistema de cómputo, la información relativa que se genere


de traspasos y altas de activos fijos, con el propósito de mantener actualizado y
accesible dicha información.

Participar con la Unidad de Auditoría Interna en el levantamiento del acta de


entrega-recepción de los activos fijos, cuando sucedan cambios de funcionarios
en la Institución.

3.5 Prueba de adiciones y retiros de activo fijo.


El análisis de adiciones y retiros es una prueba de auditoría, que se realiza una
vez que ha confeccionado la Cédula de trabajo de revisión de registros de años
anteriores, o bien cuando se realiza la auditoría a una misma empresa por dos o
más ocasiones.

El análisis de adiciones y retiros consiste en una comprobación de los


movimientos ocurridos (débitos y créditos) en la cuenta de
activos, para determinar si tales anotaciones son procedentes y se
ajustan a los principios de contabilidad generalmente aceptados.

3.6 Cómputos globales de depreciación.


El cómputo de la depreciación de un período debe ser coherente con el criterio
utilizado para el bien depreciado, es decir, si este se incorpora al costo y nunca es
revaluado, la depreciación se calcula sobre el costo original de adquisición,
mientras que si existieron revalúas, debe computarse sobre los valores
revaluados. Este cálculo deberá realizarse cada vez que se incorpore un bien o
mejora con el fin de establecer el nuevo importe a depreciar.

3.7 Cruces de referencia con la cuenta de gastos de depreciación.


El gasto de depreciación es el resultado de la asignación del costo del activo
basado en el uso del mismo; y dado que los activos fijos no se utilizan en un
periodo contable único, las empresas incurren en dicho gasto sólo en la cantidad
que corresponde al uso del activo en ese período.

En armonía con la contabilidad de causación, cotejar los gastos de


depreciación del activo con su uso, asegura que el costo total del activo se asigne
en el tiempo para que coincida con los ingresos que el activo ayuda a generar en
cada período.

Como resultado, las empresas pueden reportar adecuadamente


el gasto de depreciación en el estado de resultados y restarlos de
los ingresos brutos para generar ingresos gravables.

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