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Alumno (a):
Villalobos Saiz Leobeth del Carmen
Matricula:
[190040008]
Grupo:
RN 3-1
La depresión mucho más que estar bajo de ánimo, es un trastorno del estado de ánimo
caracterizado por una tristeza profunda y pérdida de interés general por las cosas de forma
mantenida, además, suele asociarse a otros síntomas psicológicos, físicos y del
comportamiento probablemente, es uno de los trastornos mentales más frecuentes. La
Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que la depresión es uno de los trastornos
que más discapacidad provoca en el mundo. En España afecta a 1 de cada 6 personas en
algún momento de su vida, y el 70% de los pacientes con depresión son mujeres. Se puede
sufrir depresión a cualquier edad.
Aunque la mayoría de las personas experimenta tristeza de vez en cuando, normalmente
como respuesta a algún acontecimiento de la vida (pérdida de un ser querido, desempleo,
problema familiar…), en algunas ocasiones esos sentimientos continúan a lo largo del tiempo
acompañados de otros síntomas que provocan malestar y dificultad para desarrollar la vida
cotidiana. Causan dolor tanto a quien lo padece, como a quienes les rodean. Este conjunto de
síntomas y sensaciones es lo que se conoce con el nombre de depresión.
Las personas deprimidas suelen sentir cierta impotencia ante la situación y piensan que son
más débiles o menos competentes, esto no quiere decir que la depresión sea algo que tenga
que ver con la valía personal o con la capacidad para llevar a cabo la vida diaria.
Si bien algunas personas no buscan ayuda, la mayoría puede mejorar su estado de ánimo con
el tratamiento adecuado, en algunos casos, los síntomas afectan poco a la vida diaria o lo
hacen solo en algún aspecto específico, esta es la denominada depresión leve. En otros casos
pueden presentarse muchos síntomas que pueden llegar a causar deterioro o incapacidad en
diferentes aspectos de la vida cotidiana; en este caso estamos ante una depresión grave. Entre
leve y grave se suele hablar de depresión moderada cuando los síntomas y las limitaciones
son moderados: ni tan específicos como en la primera, ni tan generalizados como en la
segunda.
Conceptos y teorías
Dentro de los despliegues teóricos de psicoanalistas argentinos, podemos encontrar las
conceptualizaciones sobre la depresión establecidas por Hugo Bleichmar, este autor sostiene
que su manifestación depende tanto del elevado "ideal del yo", de la imagen de sí misma
despreciada o de la agresividad de la conciencia crítica. Asimismo, señala que estos factores
no se adquieren durante una época determinada durante el desarrollo, sino que se estructuran
a lo largo de la vida de la persona.
Para este autor, los componentes que pueden ser considerados como característicos del estado
depresivo son:
A. Fijación a cierto deseo que ocupa un lugar importante en la vida de la persona y que
es sentido como no realizable.
B. Una representación de sí mismo como impotente/indefenso para satisfacer ese deseo.
C. Los componentes afectivos y motivacionales que acompañan a las dos condiciones
mencionadas.
También establece una clasificación posible para los cuadros depresivos, tomando como ejes
la posición del YO frente a la pérdida o deseos de apego del objeto (de presencia física del
objeto, de compartir estados emocionales o fusionarse con él), el YO ideal y la conciencia
crítica:
● Duelo normal, o depresión por pérdida simple de un objeto.
● Depresión narcisista, en la cual predomina un elevado ideal narcisista o bien un YO
subestimado, el cual se identifica con el ideal negativo, a lo cual se agrega la
agresividad de la conciencia crítica.
● Depresión culpógena, donde el YO se encuentra identificado como malo-agresivo y el
objeto como dañado, y donde también entraría en juego la agresividad de la
conciencia crítica.
Teniendo en cuenta y después de analizar estos factores, que no deben ser considerados de
ninguna manera como los únicos posibles, abordaré algunas otras formas en que puede estar
interrelacionada la depresión.
Experiencias traumáticas: Existen situaciones en que la realidad externa es central en crear
sentimientos de impotencia y desesperanza. Situaciones de pérdida temprana de las figuras
parentales o de abandono por parte de éstas, o prolongado sometimiento a figuras patológicas
y crueles, o enfermedades severas e incapacitantes, o circunstancias que cuestionan el
sentimiento de valía o de identidad, pueden ser inscritas en la mente como profundo
sentimiento de que nada puede hacerse en relación a la realidad.
Identificación con padres depresivos: La identificación tiene lugar con las fantasías
inconscientes de los padres, con los mensajes que ellos le transmiten al niño/a de maneras
muy sutiles, con cómo ellos se representan a sí mismo y a la realidad. Las fantasías de los
padres y sus conductas en la realidad, si ellos perciben a la vida como intrínsecamente
frustrante o abrumadora, o como placentera y excitante, determina en parte las formas
inconscientes y conscientes con las cuales el niño/a se relaciona con la realidad y con él/ella
mismo/a.
Depresión debida a un trastorno narcisista previo: Dos condiciones diferentes son
habitualmente designadas en psicoanálisis con la misma expresión, trastorno narcisista. En
primer lugar, aquellas caracterizadas por permanente baja autoestima o con una dificultad
para mantener una representación valiosa de sí mismo. En segundo lugar, personas con
incapacidad para depender de otras, con omnipotencia, que atacan y denigran a sus objetos,
que tienen una fusión defensiva entre la representación de sí mismo. Los caminos a través de
los cuales estos dos tipos de trastornos narcisistas conducen a la depresión son muy
diferentes. En el tipo de trastorno narcisista caracterizado por grandiosidad y omnipotencia, la
depresión surge en los momentos en que hay un colapso en el sentimiento de omnipotencia
después de haberse negado las limitaciones personales y desatendido la realidad. La
depresión es el resultado de las consecuencias dañinas de un narcisismo destructivo sobre las
relaciones interpersonales, el autocuidado y la inserción en la realidad.
Agresión y delirio del objeto interno: Esta destrucción psíquica del objeto puede ser
producida porque en la realidad psíquica del sujeto la denigración del objeto conduce a su
pérdida como un objeto valioso y estimulante, dejando al sujeto en un mundo representado
como vacío de objetos estimulantes, un mundo que es comparado con otro imaginario, pleno
de objetos idealizados, todos los cuales permanecen como inalcanzables.
Vitriol, V., Cancino, A., Ballesteros, S., Núñez, C. y Navarrete, A., (2017). Depresión y
trauma temprano: hacia una caracterización clínica de perfiles de consulta en un
servicio de salud secundario. Disponible en:
https://scielo.conicyt.cl/pdf/rchnp/v55n2/art07.pdf
Ávila, G., (2014). Información para pacientes, familiares y allegados. Disponible en:
http://feafesgalicia.org/img/documentacion/guias/La-depresion-Informacion-para-paci
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