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APORTES DEL CRISTIANISMO

Desde un principio el cristianismo ha sido un aporte de gran importancia tanto para la


Sociedad como para la Cultura

Sociedad
En el campo de la sociedad ha sido importante debido a las enseñanzas que han sido
dictadas por Jesús y por varios pasajes bíblicos, que afianzan los valores mediante
mandamientos y parábolas que Jesús trata de explicar durante su venida al mundo. Estas
enseñanzas han colaborado a que la sociedad no se salga de control, disminuyendo
injusticias, agrandando la dignidad de las personas, aprendiendo a realizar el bien para
todos, eliminando egocentrismos.

Con estos valores se puede decir que algunos países han relacionado sus democracias,
para formar sociedades con derechos y libertades tratando a cada ser humano como
alguien que debe tener estos derechos y sobre todo fe basándose en el cristianismo,
como ejemplo esta el presidente de Estados Unidos que se declara cristiano.
Aunque algunos escándalos han hecho que disminuya la cantidad de cristianos su aporte
es muy significativo, en este mundo moderno la secularización de las personas hacen
sombra de los valores innegables que ha dejado el cristianismo haciendo las sociedades
cada vez más débiles y propensas a maldad.

Cultura
En cuanto a cultura se refiere el cristianismo está estrechamente relacionado con las artes
europeas ya que ahí tiene su evolución desde épocas romanas, el cristianismo ha
aportado con una gran cantidad de cultura no solo a Europa sino a todo el mundo. La
mayoría de la cultura Europea tiene bases y leyes basadas en el cristianismo.

El cristianismo desde sus orígenes ha sido polémico. Muchos de los fariseos y escribas en
tiempos de Jesús, no comprendieron el sentido de su enseñanza y acciones; otros
reconociendo quién era Él y lo que veía a hacer entre ellos, pero no le quisieron
reconocer. Ya desde los primeros apóstoles y discípulos sufrieron persecuciones por
atreverse a vivir el compromiso de la fe en Cristo. En medio de estas dificultades la fe y
esperanza de las primeras comunidades cristianas comenzaron a brindar algunos aportes,
no solo en el campo de la teología y la espiritualidad, sino en el ámbito público.
Un aporte importante a la humanidad es la re-significación del concepto griego de
persona humana. Esta, ya no es sólo una máscara utilizada para las obras de teatro, sino el
concepto que se emplea para designar el valor inalienable que posee cada ser humano, es
decir, cada persona es portadora de una alta dignidad. El fundamento de esta afirmación,
no radica en una definición jurídica, como lo reconocía el derecho romana a sus
ciudadanos, ni tampoco en base a su capacidad racional, como lo explicaba la filosofía
griega: “el hombre es un animal racional”; sino en la adopción filial que Dios Padre hace
de la humanidad, justificada en su amor creador y redentor. Esta adopción amorosa que
Dios manifiesta a través del recorrido histórico subrayado en el Antiguo Testamento, se ve
profundamente enriquecida en el misterio de la encarnación de Cristo, pues Dios ama al
extremo a la humanidad entera, le ama en la humanidad que Cristo asumió con su
encarnación. De esta manera, el valor de cada persona no se establece en base a sus
capacidades, atuendos, accesorios, circunstancias, riquezas, estilos de vida, profesiones,
etc., sino en que se es persona creada y redimida por el amor de Dios.
Sin embargo, parece que aún no hemos entendido del todo el gran valor que posee cada
persona. Las obras de misericordia son un claro llamado a vivir el respeto y cuidado de
esta dignidad humana. Ocuparse del hermano que sufre y está en situación de abandono,
de enfermedad, de hambre y sed, es vivir respondiendo a nuestra propia dignidad
humana, es la oración perfecta que agrada a Dios.
Cuando la Iglesia, entendida esta como la jerarquía y los laicos, ignora los aportes que el
cristianismo ha legado a la humanidad, cuando se olvida de que su compromiso de fe está
en trabajar por reconocer y promover el valor de la dignidad de cada persona y del bien
común, fácilmente pierde su rumbo. Si enmudecemos ante la injusticia y el sufrimiento de
nuestros prójimos, traicionamos la humanidad que Cristo asumió en su encarnación; si
pasamos de largo ante las personas en situación de calle, de los migrantes, hambrientos y
sin ropa suficiente para enfrentar las inclemencias, nos volvemos cómplices de un estilo
de vida social cómodo y egoísta, que traiciona el proyecto de amor que Dios nos ofrece.
El cristianismo debe ser polémico frente a las sociedades y ambientes indiferentes de
nuestros días, nuestra sordera y silencio ante el dolor crea más escándalo y polémica que
los errores manejados mediáticamente por los medios de comunicación. Que este año de
la Misericordia, proclamado por el Papa Francisco, nos motive a contemplar a Cristo
sufriente en el rostro de la humanidad. Como servidores y seguidores de Cristo, no
debemos reinventar el hilo negro, sino retomar los aportes que otros cristianos con su
vida y testimonio nos han dejado.

Aportes
1. La sabiduría de promover la educación para todos a través del establecimiento de miles
de escuelas, seminarios, universidades en todo el mundo.

2. La sabiduría para abogar por la prevención de la crueldad de los animales y el cuidadoso


manejo del medio ambiente a la luz del mandato de Dios al hombre sobre la creación.

3. La caridad para ayudar a los que están en necesidad a través del establecimiento de
hospitales, refugios de emergencia para individuos y familias desplazados de sus hogares,
hogares para huérfanos y otros en necesidad, instituciones humanitarias para el enfermo
mental, ministerio para ayudar a las víctimas de delitos, ministerios de capellanías para las
fuerzas armadas, los presos, pacientes de hospitales y familias.
4. El valor moral para abolir los abusos de los derechos humanos como el infanticidio, las
peleas de gladiadores y la crucifixión en el Imperio romano, la esclavitud y el canibalismo
entre varios pueblos primitivos.

5.Varios de los ideales de la Constitución de los Estados Unidos como el valor a la vida, la
libertad, la existencia de derechos inalienables conferidos por nuestro Creador y la
necesidad de establecer justicia fueron fuertemente influenciados por el cristianismo.

6. El trabajo linguístico y alfabetización de más de 1,210 pueblos en todo el mundo que


hace posible que decenas de millones de personas puedan tener acceso a la literatura.

7. El cristianismo regala el sentido objetivo de la vida. Transmite que no somos productos


de la casualidad, sino que el ser humano fue creado con un propósito especial para que
viva de acuerdo a la voluntad de Dios llevando una vida satisfactoria en relación con Dios.

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