El Perú ha enfrentado grandes cambios, uno de ellos es que ahora debido a la migración

indígena la población urbana se quintuplico, por esto las actividades tradicionales han sido
reemplazadas, ahora se pueden ver viviendas modestas juntas, muchos ambulantes en las
calles y microbuses, esto por poner solo algunos ejemplos; aunque al mismo tiempo que esto
ocurre, el individualismo ha comenzado a ser más imperativo. Además, también se nota que
ha habido un gran cambio y que lo popular ha tomado fuerza, por ejemplo, para las clases altas
ahora no les es imposible tener que codearse con alguien de origen normal o humilde y esto
ha ocasionado que muchos de ellos traten de aislarse solo yendo a sus clubs o sitios exclusivos.
Otro cambio notorio es la perdida de presencia de la iglesia católica, pues si bien aun tiene una
fuerte presencia en el país, ahora gracias a otras sectas o religiones como la evangélica o la
protestante han ido perdiendo se antiguo dominio, pues ahora la gente tiende a preferir a
estas religiones o creencias de origen popular no reconocidas por la iglesia. También ha habido
cambios preocupantes con respecto a la seguridad, pues los robos y asesinatos han
aumentado en mayor cantidad junto al aumento de la población. Otro cambio seria que temas
como la devaluación, la inflación y la deuda externa son ahora tópicos que no solamente son
hablados por la elite, sino que ahora es algo discutido por todo el mundo que tenga una
opinión y es por ello que ahora el gobierno se ve obligado a justificarse y que la a aceptación o
rechazo de la opinión pública pueda afectar la estabilidad del gobierno. Todo esto ha
estimulado un gran cambio en la sociedad que ya no puede revertirse.

Las migraciones:

Los cambios mencionados antes comenzaron a ocurrir cuando la gente que vivía en las
comunidades del agro comenzó a trasladarse a las grandes ciudades. Estos cambios
coincidieron con el rápido incremento de la población; en el Siglo XX entre 1940 y 1981 la
población paso de ser de 7 millones a 18 millones, la población de lima también aumento, ya
que paso de albergar al 8.6% de la población del país ha albergar al 26%. Se puede tratar de
explicar el porque de estas migraciones, la más notoria razón seria debido a la construcción de
carreteras, pues habían transformado caminos inconexos en carreteras transitables, otra cosa
que alentó la migración fueron los medio de comunicación sobre todo la radio, pues esta
elevaba las expectativas de lograr ingresos más elevados en las ciudades, otra razón también
fue la crisis que afecto al agro entre 1940 y 1945 además de que las consecuencias de la
segunda guerra mundial provocaran despidos masivos y de ahí que un gran número de
desempleados quisieran migrar para mejorar su situación, otro incentivo para dejar el campo
fue la menor mortalidad infantil que había en lima, otro motivo para estas migraciones fueron
las remuneraciones, pues inclusive si un migrante estaba desempleado por un año podía
recuperar en dos meses y medio de trabajo en la ciudad su ingreso perdido en el campo,
además estas personas consideraban los estudios muy importantes pues al ellos solo poder
ofrecer su capital humano veían en la educación una valiosa posibilidad de progreso y una
buena inversión. Todo esto nos indica que la gente no inmigro solo porque quisieron sino
porque pensaban que tendrían un mejor estilo de vida en comparación con lo que hasta ese
momento habían sido sus ambiciones y aspiraciones.

La recepción hostil:

Cuando los migrantes llegaron a la ciudad, recibieron una recepción hostil, pues se dieron
cuenta de que la sociedad formal no quería que los que eran parte del “Perú profundo”
bajasen a las ciudades y esto se veía en que, los programas de asistencia y desarrollo estaban
dirigidos a que los campesinos se desarrollaran en sus tierras y lejos de las ciudades, esta
hostilidad se fue a extremos en los años 30 con algunos ejemplos como que se prohibía la
construcción de departamentos baratos en lima, otros dicen que el presidente Manuel Prado
estaba considerando una iniciativa llamada “mejorar la raza” ya que quería estimular que
escandinavos migraran hacia algunas ciudades del Perú, también el senador por Junín Manuel
Faura presento un proyecto de ley para prohibir el ingreso de los provincianos sobre todo a
lima y también hubo otro pedido de un diputado que quería crear un pasaporte de ingreso
como obligación a los provincianos que quisieran ir hacia la capital, todos estos proyectos
fracasaron pero lo que indican es que ya existía una intención de impedirles el acceso a la
ciudad. Se dice que los políticos reaccionaron de esta manera pues se consideraban a la ciudad
como el “cosmos dentro del caos”, por ello sus antiguos habitantes miraron con disgusto la
migración campesina pues creían que había llegado el fin de su cosmos, además se debía
tomar en cuenta que cada persona que migraba a la capital era un competidor potencial y por
ello generaban un gran recelo. Pero la mayor dificultad que encontraron fue la
institucionalidad legal vigente, pues estas habían sido creadas para satisfacer las necesidades
de los grupos dominantes de las urbes. Los migrantes se dieron cuenta que, aunque eran
numeroso, el sistema no quería reconocerlos pues ellos amenazaban su estatus quo, en
resumen, se dieron cuenta que además de competir contra personas también lo tenían que
hacer contra el sistema.

De migrantes a informales:

Para poder subsistir los migrantes se tuvieron que convertir en informales, actualmente somos
un país el cual el 48% de la población económicamente activa y el 61.2% de las horas hombre
se dedican a hacer actividades informales las cuales contribuyen al 38.9% del PBI, también se
sabe que gracias a la informalidad que hay en los sectores de vivienda, transporte y comercio
los informales ganaron notoriedad y se adueñaron de terrenos para poder vivir y producir
además, de que se instalaron en las calles o invadieron las pistas de la ciudad para poder
trabajar, con todo esto ellos no han acatado las disposiciones legales vigentes, esto ocasionó
que parte de la población comenzara a salirse de la formalidad. A medida que los informales
aumentaron el estado hizo concesiones las cuales no eran otra cosa que la decisión de adoptar
con renuencia una retirada permanente. Se supo además que como a través de invasiones se
han formado barrios que son el 42.6% de las viviendas de lima y que en ella viven el 47% de su
población lo cual mostraba el potencial de ganar dinero de los informales. También se sabía
que los 91,455 ambulantes que había en lima dominaban la distribución minorista de los
artículos de consumo popular. Además, se sabe que por la invasión de rutas los informales
están en el 93% del servicio de transporte urbano en adición se conoce que fueron los
informales los que diseñaron las rutas de transporte que hoy comunican a toda lima. Para
terminar, se puede ver que la invasión debido a los informales se volvió un medio alternativo
para expresar el valor de las cosas.

Reflexión crítica:

Con la lectura de este capítulo del libro “El otro sendero”, uno se puede dar cuenta de que la
realidad del Perú ha cambiado en los últimos años y que lo que se creía que iba a ser
permanente ya no lo sería más, además se comenzó a ver que lo popular comenzó a tomar
mayor fuerza y que las antiguas convenciones comenzaron a volverse obsoletas. Este cambio
comenzó con la migración de la gente del campo a la ciudad en busca de una oportunidad para
progresar, estas personas lo hacían con el objetivo de desarrollarse y progresar, comenzando a
tomar mayor interés en los estudios, con la llegada de ellos a la ciudad, se incremento la
población que habitaba en ella, su llegada fue influenciada por los medios como la radio pues
elevaban sus expectativas de lo que encontrarían en la ciudad, cosa que se evidencio en las
remuneraciones que recibían en comparación con lo que recibían en el campo. Pero no todo
fue fácil para los inmigrantes pues les esperaba una recepción hostil por parte de los que
Vivian en la ciudad , además de que no ayudaba el que las leyes vigentes solo apoyaran a las
clases sociales predominantes y les pusieran trabas, esta animosidad mostrada se puede decir
que se debió a que los que Vivian en las ciudades sentían que los migrantes habían llegado
para desorganizar su “cosmos”, con todo esto los migrantes se dieron cuenta que el sistema no
quería reconocerlos y que no solo debían competir con otras personas sino que también con el
sistema. Para que los migrantes pudieran subsistir tuvieron que recurrir a la informalidad,
debido a las disposiciones legales vigentes que no los amparaban; el comercio informal y los
sectores de vivienda, transporte y comercio informal ganaron notoriedad lo que causo que
personas del sector formal se cambiaran al informal y que el estado comenzara a hacer
concesiones a este sector. Con esto se puede ver que la informalidad comenzó a tener una
mayor presencia en el Perú, algo que hasta ahora ha ido en aumento y que se puede decir, se
ha vuelto incontrolable.

Bibliografía:

De Soto, H.(1986). El otro sendero.

file:///C:/Users/JESUS/Downloads/HERNANDO_DE_SOTO.pdf