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Introducción.
Bolívar consideraba que, “La moral, las máximas religiosas y la práctica de las costumbres sanas
eran fundamentales para la conservación de la salud y la vida”.
Según la OMS, la salud se define como el perfecto estado de bienestar físico, mental y social.
En coherencia con los postulados bolivarianos para el desarrollo humano y social, la equidad y
la democracia, la universidad Simón Bolívar ha desarrollado un proyecto educativo en las
ciencias de la salud que se alinea con la declaración de Alma Ata y el compromiso de todos los
países del mundo (1978) sobre mejorar la estrategia de atención primaria en salud (APS),
incentivando en el nuevo profesional de la salud la búsqueda constante de la mejora, y el
fortalecimiento de la salud individual y colectiva, basándose en varios principios estratégicos
como: Equidad, universalidad, intersectorialidad, interdisciplinaridad, participación social y el
desarrollo de tecnologías apropiadas y culturalmente aceptadas en salud, respetando la
dignidad y la vida de los humanos.
Bolívar planteó claramente que la educación popular debe ser la base fundamental para tratar
las necesidades más importantes y trascendentales de los pueblos, para distanciarlo de la
tiranía y la ignorancia, se basó en el precepto que dice que un pueblo ignorante es presa fácil
de los gobernantes, porque no reconoce la trascendencia de la libertad y el valor de la dignidad
humana. “El primer deber del gobierno es dar educación al pueblo”, Simón Bolívar.
De esta manera el personal en salud debe tener una formación disciplinada, tener una sólida
base científica, humana y social, desarrollar un pensamiento creativo e innovador, facilitar la
acción autónoma, responsable y decidida, y realizar intervenciones integrales a todos los
niveles para el mantenimiento, mejora u optimización de la salud individual y colectiva,
ayudando a abordar los problemas de salud a nivel local, regional, nacional y mundial.
Conclusión.
Bolívar luchó contra la falta de educación y postuló a la ignorancia como una habilidad de
autodestrucción, que conlleva a la inutilidad de las capacidades y la pérdida del valor. “No
puede existir libertad donde reina la ignorancia, porque la esclavitud es hija de las tinieblas y
un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción", Simón Bolívar.
La importancia de la Catedra Bolivariana para el medico está en el proceso de constante
cambio individual y colectivo, basándose en el conocimiento científico y los valores para actuar
de manera consciente, disciplinada y estratégica para brindar un óptimo servicio médico con
la finalidad de prevenir, diagnosticar y tratar el sufrimiento humano. Así como también, ser un
agente de cambio en el ámbito social y político que contribuya con el desarrollo y construcción
de las políticas de salud, tanto individuales como públicas y ambientales.
Referencias.