UNIVERSIDAD DE PALERMO

CATEDRA TEORIA GENERAL DEL CONTRATO

PROF. DR. FERNANDEZ ALEJRANDO – SANTARELLI FULVIO

Goncebatt Veronica

ACTIVIDAD VICIO DE LA VOLUNTAD

INTRODUCCION

Teoría de los vicios del consentimiento: critica

El Dr. Borda (2016) hace mención sobre la doctrina de la voluntad intima o psicológica,
el consentimiento, para tener efectos jurídicos, debe ser expresado con discernimiento,
intención y libertad. Como la seguridad de los negocios exige conferir valor, en
principio a las situaciones aparentes, el consentimiento se presume valido, en tanto el
que lo presto no demuestre que este viciado por error, dolo o violencia.

Esta teoría ha sido muy difundida y acogida por el Código Civil y comercial en los art.
259, 260 y 261, siguiendo las líneas tradicionales de los art. 921 y 922 del Código de
Vélez, es a nuestro juicio falsa (Borda 2016).1

Generalmente llevamos a cabo los negocios y transacciones bajo la presión de nuestras

necesidades (lo que implica falta de libertad) o sin haber podido estudiar las
consecuencias que más tarde nos serán perjudiciales. Por ejemplo, el error en la
consideración de un negocio cualquier no solo es frecuente, sino casi inevitable. Si estas
fueran causas de nulidad, prácticamente todas las transacciones humanas estarían
sujetas a tal sanción. Es tan evidente esta conclusión que los propios sostenedores de la
teoría de los vicios del consentimiento han debido admitir importantes limitaciones. No
todo error es causa de nulidad.

DOLO

Concepto y fundamento: Acción dolosa es toda aserción de lo falso o disimulación de lo

verdadero, cualquier ficticio, astucia o maquinación que se emplee para la celebración
de un acto. (art. 271).

1
Derecho Civil contratos, Borda 20016, Ed. La ley pag.87
El dolo supone siempre un engaño: es inducir deliberadamente en error a una persona
con el propósito de hacerla celebrar un acto jurídico.

Generalmente el dolo consiste en un acto positivo; tal ocurre cuando se vende la copia
de un cuadro celebre afirmando engañosamente que es el auténtico. Pero también se
miente con el silencio. La omisión o reticencia dolosa consiste en callar la verdad
cuando se sabe que la otra parte esta equivocada respecto de un elemento esencial del
contrato, que es determinante de su consentimiento.

El dolo vicia el contrato y quien lo ha sufrido ha sufrido tiene derecho a pedir su

nulidad. La sanción de la nulidad no se funda en el error provocado en el otro
contratante, como lo sostiene la teoría de los vicios del consentimiento, sino en el hecho
ilícito; el orden jurídico exige no convalidar datos que han tenido su origen en mala fe
de uno de los contratantes, pues ello sería estimular el delito y propiciar el engaño.2

Dolo esencial: solo el dolo esencial causa nulidad del acto. Así lo dispone el art.272 que
establece, además las condiciones que debe reunir ese dolo. Ellas son: a) debe ser grave;
b) debe ser determinante del consentimiento; c) debe ocasionar un daño importante; d)
finalmente es necesario que el dolo no haya sido reciproco.

Efectos del dolo esencial: a) en primer término, da derecho a la persona que lo ha

sufrido, a pedir la nulidad del contrato (art. 272) ; se trata de una nulidad relativa y, por
consiguiente, saneable; b) en segundo lugar, da derecho a la victima a pedir la
indemnización de los daños sufridos con motivo del contrato que se anula.(art.275).

Dolo incidental: es aquel que no fue determinante del consentimiento prestado por la
víctima. No afecta la validez del contrato, pero el que lo ha cometido debe indemnizar
los daños causados (art.273-275).

Dolo de un tercero: en este caso da lugar a la nulidad del acto, lo mismo que si emanara
de las partes. El tercero y una de las partes pueden ser los autores del dolo (art.274).
quien sea el autor del dolo (contratante y/o tercero) debe reparar el daño causado
(art.275).

2
Derecho Civil contratos, Borda 20016, Ed. La ley pag.95