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NEFROLOGÍA. Vol. XXIV. Número Extraordinario (II).

2004

Guías sobre enfermedades víricas en


hemodiálisis (HD)
G. Barril1, E. González Parra2, R. Alcázar3, D. Arenas4, J. M.ª Campistol5, C. Caramelo6, M. Carrasco7, V.
Carreño8, M. Espinosa9, J. García Valdecasas10, J. L. Górriz11, M.ª D. López12, L. Martín13, P. Ruiz14 y J. L.
Teruel15
1
Coordinador. Nefrólogo Hosp. Universitario de La Princesa, Madrid. 2Coordinador (Responsable de la confección de Guías y repre-
sentante de la SEN). Nefrólogo. Hosp. Central de la Defensa. Madrid. 3Nefrólogo. Complejo Hospitalario de Ciudad Real. 4Nefrólo-
go. Hospital Perpetuo Socorro. Alicante. 5Nefrólogo. Hospital Clínico de Barcelona. 6Nefrólogo, Fundación Jiménez Díaz, Madrid.
7
Profesor asociado UAM y del Centro Universitario de Salud Pública, Consejería de Sanidad. Madrid. 8Hepatólogo. Fundación para
el estudio de Hepatitis Virales, Madrid. 9Nefrólogo, Hospital Universitario Reina Sofía, Córdoba. 10Nefrólogo. Hospital San Cecilio,
Granada. 11Nefrólogo. Hospital Universitario Dr. Pesset. Valencia. 12ATS. Fundación Jiménez Díaz. Madrid. 13ATS. Hospital Universi-
tario 12 de Octubre, Madrid. 14ATS. Hospital Universitario de La Princesa. Madrid. 15Nefrólogo. Hospital Ramón y Cajal. Madrid.

RESUMEN Palabras Clave: Hemodiálisis. VHC. VHB. VIH. Se-


roconversión. Transmisión nosocomial.
Las infecciones víricas influyen en la morbi-morta-
lidad de los pacientes con Enfermedad renal crónica
(ERC) en Hemodiálisis y pueden afectar al personal de GUIDELINES ON HEMODIALYSIS-ASSOCIATED
las unidades han considerado los virus con mas rele- VIRAL INFECTIONS
vancia en el momento actual: Virus B, Virus C y VIH.
Las guías se han desarrollado con los mínimos exi- SUMMARY
gibles, dejando abierta la posibilidad de actuación
hacia mayores logros en el diagnóstico sexológico, The viric infections influence morbi-mortality in
,tratamiento (cuando, como y cuanto tiempo), y pre- Chronic kidney Disease patients in hemodialysis the-
vención de infecciones víricas (vacuna en VHB) así rapy and can affect to the Staff of the Units. The gui-
como políticas de aislamiento según las característi- des considered the most relevant virus at the present
cas de los virus. moment: C Virus, B Virus and HIV.
Para prevenir la vía de transmisión nosocomial ho- To prevent horizontal nosocomial transmission is
rizontal deben cumplirse las Precauciones Uni- necessary the observance always the universal pre-
versales siempre, no obstante se considera la posi- cautions in the HD units, althought sometimes can
bilidad de que en ocasiones puedan no cumplirse y appeared seroconversions and epidemic bud when
por ello pueda aparecer la seroconversión e incluso exist a break of these. Is analyzed different situations
el brote epidémico. Se analizan situaciones diferen- with special foccus in units for acute patients.
tes con eSpecial interés en unidades de agudos. The following steps under the suspicius of the epi-
Los pasos a seguir bajo la sospecha de aparición demic bud appeared in one of the annexes together
de un brote epidémico quedan reflejados en uno de with legislation according to this case
los anexos así como la legislación vigente a este res- Respect to the staff in every one of the virus is
pecto. shown prevention paterns, serologic markers to per-
Con respecto al personal en cada uno de los virus form when an accident with infected blood occur,
se habla de criterios de prevención, marcadores a also is considered when treatment is indicated.
realizar ante un accidente con sangre infectada y The guides considered too the conditions neces-
cuando tratar. sary for include these patients on waiting list for kid-
También se considera las indicaciones de inclu- ney transplantation.
sión en lista de trasplante renal para los pacientes
Key Words: Hemodiálisis. HCV. HBV. HIV. Sero-
infectados en los 3 virus.
conversion. Nosocomial transmission.
The Guides have developed with the minimun re-
quired, living open the possibilities of actuation the
best adquiries in the serologic diagnose, treatment INTRODUCCIÓN
(when, how and how long) and prevention of the
viric infections (HBV vaccination) as isolation poli- Las infecciones inciden en la morbi-mortalidad en
tics according virus characteristics. los pacientes en la Unidades de Hemodiálisis y por

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G. BARRIL y cols.

ello son uno de los focos de atención de los Ne- cada en más del 30% de los casos en pacientes sin
frólogos encargados de las mismas. HD y marcadores no suficientemente resolutivos como
Dentro de ellas las infecciones víricas despiertan para estar seguros de que el paciente, en algunos
especial interés, ya que las mismas unidades a tra- casos, no pueda ser potencialmente infectivo.
vés de la transmisión nosocomial pueden favorecer Estas características hacen difícil establecer unos
o impedir su transmisión. Asimismo es obligado pre- criterios rígidos de necesidad o no de aislamiento y
venir accidentes en el personal de las unidades que cuando puede levantarse el mismo con seguridad.
pudieran conducir a infección por estos virus. En el caso de este virus las Precauciones Universa-
En los objetivos de las Unidades de Hemodiáli- les de obligado cumplimiento siempre cobran un
sis en relación con las infecciones víricas están: papel primordial en evitar la transmisión.
Inevitablemente a pesar de intentar cumplir las
a. Prevenir la infección de forma activa (vacuna- precauciones Universales, en algunas ocasiones
ción lo más precoz cuando es posible). puede ocurrir la ruptura de las mismas y aparecer
b. Informar, educar y extremar las condiciones seroconversiones, especialmente con el VHC. A
necesarias en las Unidades, para lograr que las veces las seroconversiones son aisladas y otras veces
Precauciones Universales se cumplan siempre son en forma de brotes.
por todo el personal sanitario y no sanitario. Inevitablemente a pesar del esfuerzo del grupo de
c. Identificar precozmente los pacientes infectivos trabajo de la SEN al que todos pertenecemos y que
o potencialmente infectivos, para establecer las ha conseguido bajar la prevalencia e incidencia es-
medidas de aislamiento si están indicadas, para pañola de modo considerable, en los últimos años
evitar la trasmisión nosocomial horizontal, hemos asistido a la aparición de brotes de VHC en
principal vía de transmisión. algunas Unidades. Por ello hemos considerado opor-
d. Diagnosticar los pacientes infectados y valo- tuno que en las guías existiera una metodología a
rar de modo consensuado las posibilidades de seguir en caso de brotes epidémicos, reforzada con
tratamiento según las características del pa- las disposiciones legales pertinentes.
ciente, especialmente en aquellos candidatos Hemos realizado unas guías básicas y unos ane-
a trasplante renal. xos, igualmente útiles pero más extensos, para dar
respuestas a las posibles preguntas sobre inmuniza-
En las guías nos referiremos a los tres virus con ción activa y pasiva, marcadores y valoración de los
mayor interés, de transmisión fundamentalmente pa- mismos, posibilidades de tratamiento en pacientes
renteral, con distintas peculiaridades: Virus de la infectados y su implicación en la lista de espera de
inmunodeficiencia adquirida (VIH), Virus de la He- trasplante renal, actitud ante brotes y actuación ante
patitis B (VHB) y virus de la hepatitis C (VHC). accidentes del personal de las unidades con sangre
Con respecto al VIH (puede producir enfermedad de pacientes infectados.
grave incluso mortal, pero el virus se inactiva rápi- Quiero recalcar que, si el trabajo en equipo en
damente). Tras la aparición de los nuevos antiretrovi- nefrología es importante, no cabe duda que todos
rales y la posibilidad de negativizar la carga viral, al- los eslabones que integran el núcleo de las unida-
gunos grupos han planteado la posibilidad de incluir des de HD, tanto sanitarios como no sanitarios, tie-
en lista de espera de trasplante renal a pacientes VIH nen una misión especial e insustituible para preve-
con buena respuesta al tratamiento. Otra consecuen- nir la transmisión nosocomial. Para todos ellos
cia es el aumento del número de pacientes con ERCA hemos elaborado elaborar estas guías.
que pueden incluirse en terapia sustitutiva en HD. Hemos pretendido que sean prácticas, asequibles
Con respecto al VHB (cursa con viremia elevada para todas las unidades, dando en algunos casos el
en sangre por lo que es altamente infectivo), las se- mínimo exigible y apuntando otras alternativas de
roconversiones en las unidades son excepcionales, mejora.
desde la aparición de la vacuna en 1986 y de prac- Por último quiero agradecer a todos los integran-
ticar aislamiento en estos pacientes. No obstante la tes del grupo de profesionales que han elaborado
respuesta a la vacuna no es homogénea, y la pre- estas guías su participación en la discusión y ela-
cocidad en la administración puede ser decisiva boración de las mismas.
como se comentará más adelante. La Sociedad Española de Nefrología ha decidido
Por último el VHC (carga viral variable generalmente que las funciones de este grupo no finalicen con la
menor que con el VHB, varios subtipos sin inmuni- redacción de estas guías sino que se pretende reali-
dad cruzada) ofrece una serie de peculiaridades como zar revisiones anuales, con el fin de incorporar aque-
la no existencia de inmunización activa ni pasiva para llos avances científicos que aparezcan en un futuro
los distintos subtipos, vía de transmisión no identifi- y que afecten directamente a este campo.

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GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

PRINCIPIOS GENERALES DE APLICACIÓN DE nipulación de fluidos orgánicos y antes de


PRECAUCIONES UNIVERSALES (VIH, VHB Y realizar manipulaciones en otro paciente.
VHC) • Esterilización o eliminación adecuada de todos
los productos potencialmente contaminantes.
Todo el personal que trabaja en una unidad de • Limpieza de las superficies, con especial aten-
hemodiálisis, sea sanitario o no sanitario, es poten- ción a los paneles de control y las superficies
cialmente vehículo de infección, y ha de conocer la que se tocan frecuentemente.
Medidas de precaución universales (Anexo II). • Desinfección habitual de los circuitos de los
Estas medidas se han de aplicar de forma ES- monitores.
TRICTA en TODOS los pacientes y SIEMPRE, inde- • Después de la sesión limpiar y desinfectar los
pendientemente del tipo de aislamiento que exista utensilios utilizados por los pacientes, antes de
en la unidad. ser guardados o utilizados por otro paciente.
El responsable médico y de enfermería deben ve- • Lavar correctamente y con prontitud toda salpi-
rificar periódicamente que se conocen y aplican cadura de sangre con hipoclorito sódico al 10%.
estas normas, así como realizar formación conti-
nuada en el personal sanitario y no sanitario, con-
cienciándolo de su papel como potencial transmisor ESTRATEGIA GENERAL
de la enfermedad.
Recordar que son acciones potencialmente conta- Guías para prevenir la infección por el VIH en las
minantes: unidades de HD

• Utilizar los mismos guantes para procedimien- – Todo enfermo que comienza tratamiento con
tos en distintos pacientes. hemodiálisis debe tener estudio serológico del VIH,
• Tocar con guantes superficies que posterior- con la finalidad de ser filiado frente a dicho virus 1, 2.
mente pueden ser tocadas sin guantes (por Asimismo, cuando un paciente sea transferido defi-
ejemplo: teléfono, bolígrafos, etc.). nitivamente desde otra unidad, debe ser estudiado
• No lavarse las manos entre paciente y pacien- frente a este virus.
te, aunque se hayan usado guantes. No son exigibles estudios serológicos posteriores2-4,
• No limpiar de forma inmediata las salpicaduras. aunque en pacientes de riesgo puede considerarse la
• Utilizar los mismos materiales para distintos repetición semestral o anual.
pacientes (recipientes de solución antiséptica, Puede considerarse la determinación anual para
compresores de venopunción, pinzas de coa- identificar posibles seroconversiones.
gulación, pinzas, rollos de esparadrapo, inclu-
– Aislamiento de pacientes VIH positivos.
so las bandejas de alimentos) sin haberlos lim-
El virus VIH es de baja infectividad, por lo que
piado y desinfectado previamente.
no es exigible el aislamiento del paciente 1, 5. La es-
tricta observación de las medidas universales de pre-
Las medidas protectoras a utilizar por el personal son:
vención y desinfección son suficientes para prevenir
la transmisión del VIH.
• Utilización de vestimenta adecuada (bata, guan-
Los monitores de pacientes VIH+ podrán utilizarse
tes, mascarillas).
con pacientes VIH– siempre que se sigan las normas
• Manipular con cuidado los objetos punzantes y
correctas de desinfección y limpieza externa e interna.
cortantes y eliminarlos en contenedores rígidos.
• Utilización de protecciones específicas (masca- – Personal sanitario y VIH.
rilla y gafas) si existe riesgo de salpicaduras. Tras la inoculación accidental a un personal sani-
tario o paciente VIH negativo se procederá a tratar
Las medidas preventivas por / para el paciente son: con antiretrovirales lo antes posible, como máximo
dentro de las 48-72 horas de la exposición, aunque
• Responsabilizar a los pacientes de su autocui- es preferible dentro de la primera hora6, asociando
dado en lo referente a la compresión del punto triple terapia 7. Posteriormente se pondrá en conoci-
de punción y lavado de la extremidad porta- miento de Medicina Preventiva y/o especialista co-
dora de la fístula. rrespondiente.
• Centralizar las áreas para la preparación y dis- Con la finalidad de valorar la existencia de resis-
tribución de la medicación. tencias previas del virus, se aconseja tomar mues-
• Lavado de manos y cambio de guantes después tras del sujeto fuente del contagio, así como del ac-
de finalizar una maniobra en un paciente, ma- cidentado para futuras determinaciones.

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G. BARRIL y cols.

Guías para prevenir la infección por el VHB en cederá inmediatamente a realizar tratamiento con in-
las unidades de HD munización pasiva-activa 14. Se administará inmuno-
globulina y al mismo tiempo se procederá a nueva
– Todo paciente con enfermedad renal crónica vacunación. En el supuesto de desconocerse la situa-
(ERC) debe tener estudio serológico del VHB con ción inmunológica frente al VHB se administrará la
la finalidad de ser filiado frente a dicho virus y inmunización pasiva inmediatamente tras la inocula-
plantear vacunación 8. Como mínimo se deben es- ción 15-17, para pasar tras ello al estudio serológico de
tudiar los siguientes marcadores: AgHBs, AcHBc, marcadores virales, con la finalidad de valorar si es
AcHBs preciso realizar vacunación. Posteriormente se pon-
drá en conocimiento de Medicina Preventiva y/o es-
– Se puede considerar la determinación del pecialista correspondiente. (Anexo 1.)
AgHBs y el AcHBc:
• Anualmente a todo paciente en hemodiálisis
(especialmente en no respondedores a la va- Guías para prevenir la infección por el VHC en
cuna frente al VHB). las unidades de HD
• A todo paciente que venga remitido de otra
unidad, con especial referencia a los perío- – Todo enfermo que entre programado en la Uni-
dos de vacaciones y unidad de agudos. dad de HD debe tener hecha la determinación de
• A todos los pacientes si aparece una sero- Anticuerpos frente al VHC 2, 17-20 (exigible).
conversión. En el caso de pacientes admitidos de forma per-
manente en una unidad, es altamente recomendable
– Vacunación de los pacientes: Todos los pa- realizar la PCR cualitativa para determinar su infec-
cientes con ERC y marcadores serológicos negativos tividad 21-27. Si no existe la posibilidad de realizar
frente al VHB deben ser vacunados lo antes posi- esta técnica en el laboratorio habitual, es aconseja-
ble 8-10. ble remitir las muestras a un laboratorio de referen-
cia.
– Medidas de aislamiento: Si el paciente no entra de forma programada,
• Todos los pacientes con infección al VHB se debe ser filiado en el momento de su entrada (exi-
dializarán en sala independiente con moni- gible), aconsejable se haga preferentemente de ur-
tores de diálisis independientes y personal gencia junto a la determinación de serologías para
especialmente dedicados (exigible) 10-13. el VHB y el VIH.
• Si los pacientes negativizan el AgHBs, el Si tiene PCR cualitativa positiva, sobre todo si es
ADN del virus B se pierde y seroconvierten candidato a tratamiento, es aconsejable medir carga
(aparece el AcHBs), se considerarán no in- viral y genotipo del VHC para completar el estudio
fecciosos y podrán salir del aislamiento y filiación de la infección 28-30.
– Vigilancia enzimática y serológica
– Los pacientes VHB positivos deben ser evalua- En todo paciente en hemodiálisis debe determi-
dos adecuadamente por el especialista correspon- narse al menos cada dos meses (exigible) las enzi-
diente que indicará la actitud a seguir con los agen- mas hepáticas GPT y la GGT 31-33. Es aconsejable
tes antivirales. (ANEXO 4.) que esta determinación sea mensual, especialmen-
te en las unidades de riesgo aumentado. (Anexo 1.)
– Personal sanitario y VHB – A todo paciente en hemodiálisis debe determi-
• Los miembros del personal sanitario que no narse al menos semestralmente (exigible) los Ac fren-
tengan inmunidad activa frente al VHB te al VHC 2 mediante ELISA como mínimo de 3ª ge-
deben ser vacunados. neración. Es aconsejable aumentar la frecuencia en
• En el caso particular de una empleada em- unidades de riesgo aumentado y en pacientes con
barazada sin AcHBs se debe evitar el con- elevación de enzimas hepáticas.
tacto con estos pacientes mientras dure el Además es aconsejable aumentar la vigilancia epi-
embarazo. demiológica (Anexo II) en:
• Es recomendable que el personal de las uni-
dades VHB esté adecuadamente inmunizado. • Pacientes que se incorporan a la diálisis tras el
trasplante.
Ante una inoculación accidental tanto en el perso- • Pacientes dializados en otra unidad con espe-
nal sanitario no respondedor a la vacunación, como cial referencia a los períodos de vacaciones y
en los pacientes dializados no respondedores, se pro- unidad de agudos.

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GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

– Ante toda seroconversión frente al VHC deben – En caso de aumento de las enzimas hepáticas,
determinarse enzimas hepáticas, anticuerpos y PCR deberá extremarse la diligencia en el diagnóstico de
a todos los pacientes de la unidad (exigible) 2, con hepatopatía, empleándose el siguiente esquema (fig.
prioridad en los del mismo turno y no cambiar de 1, modificado de las NAC) 34.
turno hasta descartar epidemia.

Esquema sobre la actuación ante el incremento de las transaminasas en un paciente en hemodiálisis (Mo-
dificción de las NAC de la Sociedad Española de Nefrología).

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G. BARRIL y cols.

– Medidas de aislamiento: – Anti-HBc: Anticuerpo frente al core del VHB.


Anti-HBc positivo, aislado o con Anti-HBe positi-
Mínimo exigible: Concentración de pacientes in- vo:
fecciosos o potencialmente infecciosos (ANEXO 1) • Tipo IgM: El paciente está en «período ven-
en una zona claramente delimitada de la unidad (2), tana». Implica infección.
con personal dedicado exclusivamente a ellos du- • Tipo IgG: Dos significados:
rante la sesión. En todo momento debe evitarse * Infección crónica por el VHB con niveles
simultanear la atención de la zona C con la de la indetectables de AgHBs. El ADN es positi-
no C. vo. Implica infección.
Los monitores de pacientes VHC+ podrán utili- * Infección pasada y curada con niveles de
zarse con pacientes VHC– siempre que se sigan las AcHBs indetectables. El ADN es negativo.
normas correctas de desinfección y limpieza exter- No es infeccioso.
na e interna 35, 36. – AgHBe: Proteína de la región codificada por
Otros tipos de aislamiento a considerar 37-44, con pre-core del VHB. Significa fase de alta replicación
grado creciente de seguridad, y en función de la pre- del virus B y paciente muy infeccioso.
valencia del VHC y de la disponibilidad de cada – Anti-HBe: Anticuerpo frente al AgHBe.
centro: – Paciente infeccioso: Todo aquel con AgHBs en
suero independientemente de la presencia de AgHBe
• En la misma sala con algún tipo de separación o anti-HBe. En este último caso (anti-HBe +) es reco-
física añadida. mendable realizar detección de VHB-ADN por PCR.
• En la misma sala pero por turnos, cumpliendo Todo paciente con VHB-ADN en suero indepen-
las normas de desinfección y limpieza externa dientemente del resto de marcadores es infeccioso.
tras cada turno. – Paciente no infeccioso: Enfermo AgHBs negati-
• Salas separadas con personal exclusivo en cada vo en suero con:
sesión para los pacientes. • Anti-HBs aislado.
• Anti-HBs, anti-HBc simultáneamente positi-
– Personal sanitario y VHC. vos.
Tras la inoculación accidental a un personal sa- • Anti-HBs, anti-HBc, anti-HBe simultánea-
nitario se pondrá en conocimiento de Medicina pre- mente positivos.
ventiva y/o especialista correspondiente y se proce- • Anti-HBc, aislado con ADN negativo.
derá a determinar GPT, GGT y RNA-VHC por PCR
al personal sanitario expuesto, basalmente y una vez – Paciente potencialmente infeccioso: Enfermo
al mes. Además, es recomendable realizar determi- AgHBs negativo con anti-HBc aislado o anti-HBc y
nación de anti-VHC basalmente y cada 3 meses. Al anti-HBe aislados, es recomendable realizar VHB-
cabo de 6 meses de seguimiento, si los marcadores ADN por PCR para clarificarlo.
de virus C permanecen negativos, se puede consi- – Comentario final: Aunque en la práctica no es
derar como personal no infectado. En caso de que factible su aplicación, es conveniente recordar que
aparezcan dos determinaciones positivas al ARN me- se ha detectado VHB-ADN por PCR en suero y cé-
diante PCR se debe administrar de forma inmediata lulas de sangre periférica de pacientes en hemodiá-
terapia antiviral y solamente utilizar interferón pegi- lisis, AgHBs negativo, con o sin anticuerpos. Son po-
lado 45-48. tencialmente infecciosos 49.

Pautas de vacunación
ANEXO 1: CONCEPTOS
Se pueden utilizar las siguientes pautas, cuya efi-
VIRUS DE LA HEPATITIS B cacia es equivalente, aunque sobre la última existe
menos experiencia.
Marcadores serológicos e infectividad
– Dosis a tiempo 0, 1 mes y 6 meses.
– Dosis a tiempo 0, 1 mes, 2 meses y 6 meses.
– AgHBs: Proteína de superficie de virus B de la
– Dosis a tiempo 0, 1 mes, 2 meses y 12 meses.
hepatitis. Implica infección. Deben valorarse falsos
– Pauta rápida: 0, 15 y 30 días.
positivos en pacientes recientemente vacunados.
– Anti-HBs: Anticuerpo frente a AgHBs. Implica – La dosis a aplicar debe ser doble de la habi-
protección. tual, vía intramuscular. La vía intradérmica aporta re-

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GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

sultados controvertidos, por lo tanto, no es reco- ARN frente al VHC, podría excluirle definitivamen-
mendable 50-55. te como infectado. Mientras tanto, es potencialmen-
– Tras uno o dos meses de finalizada la vacuna- te infeccioso.
ción, se estudiarán los títulos de AcHBs en suero.
Se entienden títulos protectores aquellos superiores 2. UNIDAD DE RIESGO AUMENTADO: Se con-
a 10 UI/L. Si la pauta es de 4 dosis, se evaluará la sidera como tal:
respuesta al mes de administrada la tercera dosis.
– En los pacientes que no hayan obtenido res- a) Prevalencia > 20% del total.
puesta a la vacunación (títulos de AcHBs inferiores b) Relación enfermera/paciente inferior a 1/4
a 10 UI/L) se aconseja una segunda pauta. Si tras en unidades sin aislamiento por sala o por
ello no responden se considerarán definitivamente turno.
como no respondedores. No hay evidencia de que c) Unidades con 3 o más turnos.
los no respondedores con las dos pautas tengan una d) Unidad en la que se detecta una serocon-
mayor tasa de respuesta posterior. versión al VHC.

VIRUS DE LA HEPATITIS C
ANEXO 2: APLICACIÓN DE MEDIDAS
1. INFECTIVIDAD: De acuerdo a la serología y a UNIVERSALES
la viremia del VHC todo paciente en hemodiálisis
puede incluirse en uno de los grupos siguientes:
MEDIDAS DE PRECAUCIÓN UNIVERSALES
a) NO INFECCIOSOS: Paciente con Ac negativos, (VHB, VHC, VIH)
PCR negativo y enzimas hepáticas normales. En
hemodiálisis hay habitualmente cifras bajas de Medidas de precaución Universal
transaminasas. Debe considerarse como poten-
cialmente patológica la elevación de transami- Introducción
nasas superior a 2 veces su basal, o variacio-
nes mensuales inexplicadas de transaminasas, El objeto del presente anexo es aportar infor-
cifras de GPT superiores a 28 UI/L 31 o incre- mación acerca de las Medidas de Precaución Uni-
mentos no explicados de GGT. En estos casos versales específicas a aplicar para prevenir la intro-
está indicado la repetición de la serología de ducción, proliferación y difusión de infecciones en
hepatitis y especialmente de la PCR. las unidades de hemodiálisis, y proteger al personal
y a los otros pacientes del contagio de posibles in-
b) INFECCIOSOS: fecciones víricas existentes en la unidad (virus B, C,
ii. Paciente con Ac positivos y PCR positiva, in- VIH principalmente) 46, 47, 56, 57.
dependientemente de las enzimas hepáticas. La transmisión parenteral (transfusiones, adictos a
ii. Paciente con Ac negativos y PCR positiva. drogas por vía parenteral) es la vía más directa de trans-
Es infectivo, independientemente de las en- misión de la hepatitis C. No obstante, dados los me-
zimas hepáticas y necesita seguimiento. canismos y sistemas de control de la transmisión de las
enfermedades infecciosas vigentes en la actualidad, esta
c) POTENCIALMENTE INFECCIOSO: vía se ha reducido de forma considerable 57. Por ello
ii. Paciente con Ac positivos, confirmados y la transmisión horizontal o por contacto se ha conver-
PCR negativa en suero (aunque podría tra- tido en la vía más importante de infecciones virales en
tarse de pacientes curados). las unidades de hemodiálisis 58-67. Esto ocurre cuando
ii. Paciente con elevación crónica persistente los microorganismos son transferidos de las manos del
de alguna enzima hepática y Ac y PCR en personal sanitario que no cumple de forma adecuada
suero persistentemente negativos. (Se ha las precauciones universales y toca a otro paciente y,
descrito infección oculta por VHC en célu- menos frecuentemente, a través de las superficies con-
las de sangre periférica). taminadas que pueden actuar como un reservorio de
patógenos. Esta vía de transmisión por contacto se
La determinación en tres ocasiones de la PCR cua- puede evitar realizando una adecuada higiene de las
litativa y, en caso de persistir la negatividad, tanto manos y desinfección de las superficies 56, 58, 68, 69.
en suero como en células de sangre periférica, sólo La mayoría de las investigaciones relacionadas con
la biopsia hepática con determinación tisular de brotes de hepatitis C en las unidades de hemodiálisis

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G. BARRIL y cols.

indican que la transmisión ha tenido lugar por ina- • El personal que trabaje en la unidad de hemo-
decuada puesta en práctica de medidas destinadas al diálisis, sea antiguo o de nueva incorporación
control de infecciones. Hay estudios que demuestran debe conocer las MEDIDAS DE PRECAUCIÓN
que el grado de cumplimento de las precauciones uni- UNIVERSALES, siempre que se administren cui-
versales en las unidades de hemodiálisis, sigue sien- dados que impliquen la manipulación de san-
do inferior al que sería deseable 70-72. gre y/o fluidos orgánicos. El supervisor/a de en-
fermería debe verificar periódicamente que se
conocen estas normas y se cumplen. Se sugie-
Consideraciones previas re la existencia protocolos de actuación en los
lugares de tratamiento.
• Las diferentes recomendaciones incluidas en • El personal sanitario que trabaje en contacto di-
este protocolo son válidas para todas las uni- recto con pacientes seropositivos ha de cono-
dades o servicios hospitalarios, y todo el per- cer las técnicas y procedimientos óptimos, los
sonal, tanto sanitario como no sanitario, ha de riesgos de su tarea y las normas a seguir.
respetar la normas de prevención que se des- • Los miembros del staff no podrán fumar, comer
criben. ni beber en la sala de hemodiálisis. Para ello
• Todos los fluidos orgánicos son potencialmente dispondrán de áreas específicas. Sin embargo,
infectantes, provengan de quién provengan, por a los pacientes si se les permitirá comer y beber
lo que la aplicación de estas normas, se deben en la sala de tratamiento y los utensilios utili-
seguir en TODOS los pacientes y SIEMPRE, in- zados por ellos se limpiarán de la forma habi-
dependientemente de que exista aislamiento en tual. No es necesario tener un cuidado especial
la unidad 56. con este tipo de utensilios, excepto el lavado
entre paciente y paciente.

Precauciones universales a aplicar en las unidades


de hemodiálisis b) Personal:

a) Recomendaciones generales: • La higiene de las manos es una de las activi-


dades más importantes, si no la que más, para pre-
• Verificar la identidad del paciente y que se han venir la transmisión de patógenos en las unidades de
realizado las determinaciones analíticas (mar- hemodiálisis. Esta higiene de las manos consiste en:
cadores virus B, C, VIH) para confirmar la exis- 1. Uso de guantes que sirva de barrera protecto-
tencia o no de infecciones víricas. ra para las manos del personal sanitario, pre-
• En caso de existir aislamiento en la unidad ve- viniendo, por una parte la propia contamina-
rifique que los pacientes van a dializarse en los ción del trabajador, y por otra la transmisión
monitores y salas de aislamiento destinadas a de paciente a paciente a través de las manos.
la infección vírica de que sean portadores: 1. • Utilice guantes de protección siempre que
VHB, VHC, VIH. manipule sangre o fluidos orgánicos.
• Cada paciente debe tener asignado su puesto 1. • Deseche los guantes utilizados antes de
de diálisis (sillón o cama y monitor de diáli- tocar utensilios no contaminados.
sis), cambiándolo lo menos posible, solo en si- 2. El lavado de manos se ha de realizar SIEM-
tuaciones necesarias y no como práctica habi- PRE después de retirar los guantes y entre
tual. paciente y paciente tras la realización de ac-
• En la gráfica de hemodiálisis debe figurar el mo- tividades que impliquen la posibilidad de
nitor en el que se ha dializado el paciente en contaminación.
cada sesión. 3. El uso de guantes NO EXCLUYE la necesi-
• Preparar y distribuir la medicación en un área dad del lavado de manos, porque los pató-
centralizada. genos depositados sobre los guantes pueden
• Las áreas limpias y contaminadas deben estar ser detectados sobre las manos una vez re-
separadas físicamente; por ejemplo, la manipu- tirados estos, posiblemente por defectos en
lación y el almacenamiento de la medicación la pared del guante o contaminación de las
y el lavado de manos no se debe hacer en la manos en el momento de retirarlos.
misma área o en áreas próximas a donde hay 4. Se deberá de disponer de suficientes dispo-
muestras de sangre o se limpian los equipos uti- sitivos y adecuadamente ubicados para rea-
lizados. lizar el lavado de manos.

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GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

• Utilizar medidas de protección específicas si deben ser limpiados y desinfectados en un área


hay riesgo de salpicaduras de sangre, según necesi- de limpio común, antes de ser guardados o uti-
dades del paciente, como bata, mascarilla, gafas, etc. lizados para otro paciente.
Es muy importante la limpieza inmediata de sal- • Los materiales y medicación que se encuentren
picaduras de sangre, con hipoclorito sódico al 10%. en los puestos de hemodiálisis, solo se deben
usar con ese paciente y nunca deben regresar
a la zona de limpio común o usada con otros
c) Pacientes: pacientes, sin haber sido desinfectado previa-
mente.
• Se ha de comprobar que se han realizado los • Los viales multidosis implican un riesgo añadi-
controles aconsejados para pacientes en HD: do. En caso de que se usen, las dosis indivi-
duales de los pacientes, adecuadamente rotula-
– Detección marcadores de virus B, C, y VIH das y utilizando jeringas de un solo uso, se
previamente a la incorporación al tratamien- prepararán en un área limpia centralizada a dis-
to sustitutivo. tancia de los puestos de hemodiálisis y física-
– Realización de control periódico de marca- mente separada de los pacientes. No llevar via-
dores según normativa. les de medicación múltiple de un puesto de
– Realización de control periódico a los pa- diálisis a otro.
cientes transfundidos o trasplantados según • No usar carros comunes para llevar la medica-
normativa. ción a los pacientes. No llevar viales de medi-
– Administración de la vacuna contra la hepa- cación, jeringas, algodón con alcohol, etc., en
titis B según pauta recomendada. los bolsillos. Si se usan bandejas para llevar
medicación a pacientes individuales, estas se
• El paciente ha de ser informado de la necesidad deben limpiar entre paciente y paciente.
de tomar medidas específicas de protección en • Las zonas de limpio deben ser claramente des-
caso de producirse una positivación para virus tinadas a la preparación, manipulación y al-
C, B o VIH, y acerca de las medidas higiénicas macenamiento de medicación y no se debe
que deben observar para evitar contagios utili- usar para la limpieza de material contaminado.
zando un lenguaje claro y comprensible. Las áreas de limpio deben estar claramente se-
• Es importante responsabilizar a los pacientes de paradas de las áreas contaminadas donde se
sus autocuidados en lo referente a sus necesida- manipula el material contaminado.
des (compresión del punto de punción y lavado
de la extremidad portadora de la FAVI).e indi-
carles la conveniencia de evitar ayudarse unos a f) Monitores y superficies:
otros en maniobras que puedan entrañar riesgos.
• Al finalizar cada sesión de diálisis se realizará
una desinfección interna completa, utilizando
d) Salas de hemodiálisis: los medios de desinfección aconsejados por los
fabricantes. Compruebe que se realiza el pro-
• Es recomendable la no superposición de pacien- ceso de desinfección de los monitores de forma
tes de un turno a otro como práctica habitual. idónea, anotándolo en el libro de registro de
• Entre los turnos se limpiará la sala y las super- incidencias de la sala, indicando el turno en
ficies de los monitores, así como se realizará que se realiza la actividad y la firma de la per-
una desinfección completa interna del monitor. sona responsable de esta, y en el monitor en
• Para facilitar la utilización y cambio de guan- forma llamativa la falta de desinfección de mo-
tes, se deberá disponer de una zona cercana a nitores contaminados en caso de avería.
cada monitor de dispositivos dispensadores de • Limpiar y desinfectar la superficies externas (si-
guantes no estériles, así como de contenedores llones, camas, mesas, monitores) entre pacien-
para desechar los guantes utilizados. tes.
• Las superficies externas de los monitores son la
fuente más probable de contaminación. Al ter-
e) Utensilios y medicación: minar de conectar y siempre que se atienda
algún paciente con manipulación de fluidos or-
• Los utensilios utilizados en la sesión de diálisis gánicos, se limpiará la superficie de los moni-
deben estar dedicados a un único paciente o tores con agua y jabón y seguidamente se des-

51
G. BARRIL y cols.

infectará con hipoclorito sódico al 10%. Poner punto de manera más adecuada, las unidades
especial atención a los paneles de control de de agudos de los hospitales de referencia dis-
los monitores de diálisis y a otras superficies pongan de un listado con las serologías víricas
que se tocan frecuentemente y son potenciales de cada paciente de las unidades periféricas o
contaminantes. centros concertados dependientes de ellos. Este
• Es importante la limpieza inmediata de las sal- listado se actualizará periódicamente, remitién-
picaduras de sangre, en el momento en que dolo desde las unidades de diálisis periféricas
estas se produzcan. Se utilizará una bayeta con al hospital de referencia por ejemplo cada mes
hipoclorito al 10%. Esta limpieza ha de reali- o dos meses o si se produce alguna incorpora-
zarse con guantes. ción nueva, especialmente si presenta serología
• Compruebe que las conexiones de las tomas de vírica positiva frente a VHC, VHB o VIH.
agua y desagües de los monitores están situa- • En el caso de que no se disponga de serología
das en sus lugares específicos, y que se realiza vírica del paciente, se deberá ser cauteloso,
la recogida de agua y de baño de forma inme- considerando al paciente como positivo y ex-
diata. tremando las medidas descritas anteriormente.
Es recomendable dializar al paciente solo, sin
compartir el turno con otros pacientes.
g) Material: • En cada hospital se establecerán las estrategias
adecuadas, y de acuerdo con los Servicios de
• Utilice un material para cada paciente (pinzas Microbiología y Medicina Preventiva, para que
compresoras, kochers...) para evitar infecciones la realización de los test serológicos frente a
cruzadas o proceda a su desinfección entre pa- virus B (HbsAg), Ac frente a VHC y VIH en pa-
ciente y paciente cuando sean de uso común. cientes con necesidad de diálisis urgente, sea
• Deposite los objetos punzantes/cortantes en los considerado como una urgencia. De esta forma
contenedores adecuados. se podría disponer en escasas horas de dichos
• Deposite los objetos contaminados en bolsas resultados, especialmente en el turno de la ma-
impermeables, debidamente etiquetadas o iden- ñana. En el caso de los pacientes cuya prime-
tificadas para que se proceda a su desecho. ra diálisis urgente y sin marcadores víricos co-
• La preparación del material se debe realizar en nocidos se realice en la tarde-noche, se podrían
zonas separadas del área de tratamiento y de- realizar los test serológicos a la mañana si-
signadas solo a la medicación. guiente.
• No se debe unir medicación residual de varios
viales en uno solo.
Traslados y pacientes de vacaciones

Situaciones especiales Siempre que el paciente vaya a trasladarse de cen-


tro, ya sea definitivamente o transitoriamente (por
Hemodiálisis en las unidades de agudos ejemplo, período vacacional), deberá transmitir pre-
viamente al traslado por fax o correo electrónico sus
• Las unidades de hemodiálisis de agudos son informes clínicos donde constarán los datos de mar-
áreas de especial riesgo en la transmisión viral cadores víricos, con fecha de realización. Posterior-
nosocomial, debido a la posible llegada de pa- mente el paciente llevará consigo estos mismos in-
cientes con serología desconocida, a la prácti- formes, para prevenir errores de transmisión. El
ca de actividades de forma urgente, a que re- centro receptor deberá exigir dicha información
ciben un mayor trasiego de pacientes, etc. antes de la aceptación de cualquier paciente
• Antes de la incorporación del paciente a la uni-
dad es importante verificar, si la urgencia lo per-
mite, la identidad del paciente y que se han EDUCACIÓN DEL PERSONAL
realizado las determinaciones analíticas (mar-
cadores virus B, C, HIV) para confirmar la exis- • La educación y formación continuada del per-
tencia o no de infecciones víricas. sonal es una de las piezas clave para una co-
• En el caso de que se conozca la serología ví- rrecta aplicación de las medidas para prevenir
rica del paciente, este se dializará en el moni- la transmisión de las enfermedades infecciosas.
tor o turno correspondiente a su serología. • Todo el personal tanto sanitario como no sani-
Se sugiere que para poder cumplimentar este tario (médicos, enfermería, auxiliares de clíni-

52
GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

ca, técnicos de diálisis y personal de limpieza) ANEXO 3: BROTES EPIDÉMICOS DE


debe recibir un programa educacional continuo INFECCIONES VÍRICAS EN UNIDADES DE
acerca de las infecciones virales y su transmi- DIÁLISIS
sión en hemodiálisis.
• Este programa educacional debe contener los
siguientes aspectos: ASPECTOS LEGALES

1. Transmisión parenteral de la hepatitis y otras Las hepatitis víricas y la infección por el VIH son
enfermedades. enfermedades de declaración obligatoria, por lo que
2. Transmisión horizontal: Como la hepatitis, debe de notificarse todo caso nuevo confirmado que
una vez introducida en las unidades de he- cumpla criterios de infección reciente. La notifica-
modiálisis, puede ser transmitida entre pa- ción se hará a los órganos establecidos en cada Co-
cientes y personal. munidad Autónoma. El plazo de declaración es de
3. Como controlar un brote de hepatitis en un 48 horas a una semana en función de la legislación
centro. autonómica.
4. Para aquellos pacientes y personal portado- La declaración de brote epidémico es obligatoria
res del Ag HBs positivo o de Ac VHC se les y urgente. La obligatoriedad afecta en primera ins-
debe informar acerca de cómo controlar la tancia a todos los médicos en ejercicio y a los cen-
infección en sus casas (ejemplo, no com- tros sanitarios públicos y privados que detecten la
partir maquinillas de afeitar ni cepillos de aparición del mismo.
dientes, tijeras, cortauñas o peines). Comentario: La notificación de enfermedades se
5. Cuales son las medidas de precaución uni- regula por el Real Decreto 2210/1995 publicado el
versales y las prácticas de asepsia, para evi- 24 de enero de 1996 en el que se crea la Red Na-
tar la transmisión de la infección. cional de Vigilancia Epidemiológica. En este RD se
detallan las enfermedades objeto de declaración
• Estos programas de información y de educación obligatoria, estando incluidas, entre otras, la Hepa-
han de realizarse regularmente, como parte de titis A, la Hepatitis B y otras hepatitis víricas. Tam-
una educación continuada. bién se concreta la vigilancia epidemiológica de la
• Es recomendable al existencia de protocolos es- infección por VIH y se establecen las directrices ge-
critos en las unidades, a disposición del per- nerales para que las Comunidades Autónomas esta-
sonal que reflejen este contenido. blezcan los canales de información para el cumpli-
• Además de la formación continuada del perso- miento de los fines y de las necesidades de la red
nal del centro, el personal nuevo de la unidad nacional de vigilancia epidemiológica.
de diálisis enfermería (auxiliares de clínica y Cada Comunidad Autónoma, por tanto, ha desa-
personal de limpieza aunque se incorporen por rrollado una legislación propia en la que se esta-
un corto período de tiempo) recibirá dicha for- blecen los niveles organizativos y los impresos y
mación previa a su incorporación debiendo de formularios oficiales que permitan la declaración in-
conocer los protocolos de actuación, que de- mediata de las enfermedades de declaración obliga-
berán estar escritos. toria. En este desarrollo autonómico se especifica la
obligatoriedad de declarar a todo médico con ejer-
– El personal de limpieza puede ser una de las
cicio profesional que diagnostique una enfermedad
piezas claves en la transmisión de la infec-
de declaración obligatoria, así como la responsabi-
ción en las unidades de diálisis, por lo que
lidad de los directores de los centros sanitarios, pú-
se considera fundamental que no realicen ta-
blicos o privados y de los jefes de servicio/sección
reas de limpieza en las unidades, el perso-
de Medicina Preventiva de que la declaración se
nal que no hay sido adecuadamente forma-
haga efectiva y exhaustiva.
do. Para ello es conveniente que este sea
La notificación será de los casos confirmados que
siempre el mismo, evitando la entrada de
cumplan con criterios de infección reciente. Los
personal que no haya recibido la formación
casos se referirán, en el tiempo, a la fecha de con-
adecuada.
firmación del diagnóstico. Dicha notificación se hará
• Establecer periódicamente controles de actua- mediante un conjunto mínimo de datos.
ción y de vigilancia en las unidades de diáli- Respecto a los Brotes Epidémicos, el mismo RD
sis para evitar comportamientos o actitudes de 2210/1995 en su Artículo 15 lo define como “El in-
riesgo que pudieran comportar una falta de cremento significativamente elevado de casos en re-
aplicación de las medidas universales. lación a los valores esperados. La simple agregación

53
G. BARRIL y cols.

de casos de una enfermedad en un territorio y en salas específicas tal y como contempla la legis-
un tiempo comprendido entre el mínimo y el máxi- lación vigente.
mo del período de incubación o de latencia podrá – En aquellos pacientes con sospecha no confir-
ser considerada, asimismo, indicativa». En las uni- mada de estar afectos (p.ej. transaminasas ele-
dades de diálisis, la incidencia de infección por el vadas con serologías negativas), sería aconse-
VHC comunicada por el Grupo de Vigilancia Epi- jable alguna medida de aislamiento hasta un
demiológica sobre VHC en diálisis fue del 0,26% en adecuado diagnóstico.
1999. La incidencia de infección por VHB o VIH es
mucho menor. Por tanto, dos casos nuevos confir-
mados de estas enfermedades en un corto espacio
de tiempo en una misma unidad de diálisis deben Medidas posteriores
de considerarse como brote epidémico. Cada Co-
munidad Autónoma tiene establecidos los canales de – El punto clave es la detección del paciente ín-
información sobre las situaciones epidémicas y bro- dice de la epidemia.
tes. – Estudiar los posibles factores de riesgo de in-
fección de todos los casos (transfusiones, ciru-
gías, adicción a drogas parenterales, contactos
RECOMENDACIONES A SEGUIR ANTE UN con enfermos, hábitos sexuales...).
BROTE EPIDÉMICO EN UNA UNIDAD DE – Analizar los movimientos y localización del
DIÁLISIS puesto de tratamiento de todos los pacientes en
el período previo al brote (6 meses).
No existe evidencia científica sobre la actitud a – Analizar la estructura y procedimientos funcio-
seguir ante un brote epidémico en una unidad de nales de la Unidad, con especial énfasis en los
diálisis. El grupo de especialistas que ha elabora- siguientes apartados:
do estas guías establece las siguientes recomenda-
ciones (Nivel de Evidencia: 5, grado de recomen- iii. Cumplimiento de normas sobre prevención
dación: D). de enfermedades transmisibles en hemo-
diálisis, especialmente en lo referente a las
precauciones universales en la manipula-
Medidas inmediatas ción de objetos y contacto con los pacien-
tes.
– Comunicar el brote a la dirección del centro, iii. Circuito de fungibles, delimitación de zonas
al departamento de Medicina Preventiva (si lo limpias.
hubiera) y a los órganos administrativos res- iii. Preparación centralizada de medicación,
ponsables de la vigilancia epidemiológica. utilización de viales multidosis.
– Comunicar a los pacientes infectados su enfer-
medad, causas probables de la infección, pro- – Estudio virológico de todo el personal ads-
nóstico y posibilidades terapéuticas. crito a la unidad en contacto con los pa-
– Obtener una muestra de suero de todos los pa- cientes.
cientes que se dialicen en la Unidad y de todos – Realizar un estudio epidemiológico con el de-
los pacientes que se hayan dializado en la partamento de Medicina Preventiva y las auto-
misma durante el período de incubación de la ridades sanitarias locales, que permita iden-
enfermedad. Tanto para estudios virológicos in- tificar las causas del brote y corregirlas. La
mediatos (PCR cualitativa para VHC, VHB o determinación del genotipo viral y su análisis
VIH), como para Seroteca por si se precisan es- filogenético en caso de infección por el VHC
tudios posteriores. es especialmente útil para la confirmación de
– En el caso de infección por VHC o por VIH ais- brote.
lar a los pacientes afectos, bien por sala/turno, – Otras medidas a considerar:
o bien por monitor y por personal de enferme-
ría dentro de la misma unidad, en función de iii. Desinfección exhaustiva de todos los mo-
las posibilidades del centro, confirmar la con- nitores.
gruencia con normas posteriores hasta que esté iii. Descongestionar la unidad.
completamente dimensionado y controlado el iii. Pruebas serológicas y víricas mensuales,
brote epidémico. En el caso de infección por transaminasas quincenales hasta tener com-
VHB los pacientes afectos deben dializarse en pletamente dimensionado el brote.

54
GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

ANEXO 4: GUÍAS DE TRATAMIENTO DE LA HE- te todavía una amplia experiencia en pa-


PATOPATÍA POR VHC EN HEMODIÁLISIS cientes en hemodiálisis, parece sensato uti-
lizar este tipo de preparados.
1. Tienen indicación de tratamiento con In- • Dosis de IFN pegilado (subcutáneo, 1 vez a
terferón aquellos pacientes en hemodiálisis la semana).
con una aceptable esperanza de vida que pre-
senten elevación de transaminasas y ARN-VHC • – alfa 2b (Pegintron), 1,5 mcg/kg.
positivo. • – alfa 2a (Pegassys); 135 mcg.

1.1. Considerar también a los pacientes en lista • Ribavirina. En pacientes con función renal
de espera de trasplante renal con transa- normal el tratamiento más aceptado de la
minasas normales y viremia positiva. hepatitis C es IFN pegilado + Ribavirina 90.
• Nota: En ficha técnica consta el consejo de
1.2. Existe experiencia con alfa-interferón. Se no utilización de Pegintron, ni de Ribavirina
están realizando estudios con Interferón con aclaramientos < 50 ml/min, aunque
pegilado administrado semanalmente. La existe experiencia comunicada con estos fár-
experiencia con Ribavirina es muy esca- macos en hemodiálisis.
sa. • Existe poca experiencia 91-94 en pacientes en
hemodiálisis con Ribavirina y con impor-
Nivel de evidencia. Numerosos estudios en pa- tantes efectos secundarios, sobre todo ane-
cientes en hemodiálisis con hepatopatía C han mia. Considerando que la tasa de respuesta
mostrado que el Interferón produce una res- en monoterapia con IFN para los pacientes
puesta sostenida a largo plazo del 20-62% 32, 73- en hemodiálisis es aceptable y parece sen-
87
. Esta respuesta es superior que la obtenida sato comenzar solo con IFN y reservar la
en población no urémica con IFN en monote- asociación con Ribavirina (a dosis bajas)
rapia 88. para los pacientes que no respondan o re-
Los pacientes deben estar en contraindicación caigan.
temporal de trasplante renal durante el perío- • Los efectos secundarios del IFN son fre-
do de tratamiento (6-12 meses) y esperar un cuentes e importantes. Los más frecuentes
tiempo prudencial (recomendable 6 meses) son: síndrome pseudo-gripal, molestias gas-
cuando se suspenda el IFN antes de incluirlos trointestinales, anemia, leucopenia, trombo-
en lista de espera de trasplante. La razón de penia, y trastornos depresivos.
esta espera es tener la oportunidad de volver a • El síndrome pseudogripal mejora con para-
tratar a aquellos pacientes que recaigan al fi- cetamol. Casi todos los pacientes necesitan
nalizar el tratamiento. incrementar las dosis de EPO para mejorar
Los candidatos a este tratamiento son aquellos la anemia. Cuando los efectos secundarios
pacientes con transaminasas elevadas y ARN- son importantes se debe reducir o suspender
VHC positivo. Las transaminasas de los pa- el IFN.
cientes en HD son significativamente inferio-
res a las de los pacientes con función renal • Esquema-Duración: La mayoría de los pa-
normal 31, 89 por lo que un valor de GPT > 28 cientes que responden inhiben la replicación
UI/L se considera elevado para estos pacien- viral antes de los 3 meses.
tes. • – Si la viremia es negativa a los 3 meses, se
Es dudosa la indicación del tratamiento en debe proseguir con el tratamiento duran-
pacientes con transaminasas persistentemente te 6 meses si el Genotipo es distinto de
normales y viremia positiva. Parece razonable 1, ó 12 meses para los pacientes con Ge-
intentar tratar a los pacientes en lista de espe- notipo 1.
ra, ya que una vez trasplantados el uso del IFN • – En los pacientes que no responden y per-
no está indicado. sisten con ARN positivo se puede asociar
Ribavirina. Las dosis utilizadas en pacien-
• Dosis. Existe experiencia con alfa-interferón tes en hemodiálisis son de 200-400
a dosis de 3 millones de unidades/ 3 veces mg/día.
a la semana.
• El IFN pegilado se está comenzando a utili- 2. El esquema de tratamiento sería el reflejado en
zar con buenos resultados. Aunque no exis- la figura 2.

55
G. BARRIL y cols.

Interferón

3 meses ARN- ARN+

Interferón + Ribavirina
6-12 meses Fin de tratamiento
(200-400 mg/día)

ARN+
3-6 meses ARN- (recaída)

Lista de espera
Esquema de trata-
miento de la hepa-
topatía por HVC en
hemodiálisis.

2.1. El genotipo 1 debería tratarse durante 12 2. Es recomendable que esté recibiendo Eri-
meses. El resto 6 meses. tropoyetina y no se biopsiará a nadie con
2.2. Una vez suspendido el tratamiento es con- menos de 30% de hematocrito.
veniente mantener en contraindicación
3. Se debe suspender la Aspirina y los AINE y
temporal de trasplante renal durante 3-6
los antiagregantes del tipo de ticlopidina o
meses. Si recaen se pueden tratar según el
clopidogrel al menos una semana antes del
esquema (Interferón + Ribavirina).
procedimiento.
3. La biopsia hepática aporta una información 4. Los procedimientos previos a la biopsia in-
muy valiosa pero no es imprescindible. cluirán: ecografía para determinar el punto
La realización de biopsia hepática pre-trata- de punción en la misma mañana de la biop-
miento es controvertido dado el riesgo elevado sia, estudio de coagulación, hematocrito, in-
de complicaciones en los pacientes en diálisis. forme al paciente de las razones para la rea-
Podría plantearse en aquellos pacientes con lización de la biopsia y su morbi-mortalidad
transaminasas persistentemente elevadas, o teórica y firma de la hoja de consentimiento
para decidir la inclusión de un paciente en lista informado.
de espera de trasplante renal. La vía transyu-
5. Es aconsejable realizar tiempo de sangría o
gular es recomendable en estos pacientes, aun-
su equivalente in vitro y si es superior a 10
que la vía transparietal tiene un margen de
minutos administrar 0,4 mcg/kg de desmo-
riesgo aceptable, si se emplea un protocolo
presina (Minurin), por vía IV en 100 cc de
adecuado de prevención del sangrado.
fisiológico.
Si se realiza se aconsejan las siguientes medi-
das profilácticas para evitar el sangrado;
4. Las hepatitis agudas C deberían ser tratadas
1. Dializar al paciente el día anterior a la biop- según el esquema general en el momento del
sia hepática. diagnóstico y durante 6 meses.

56
GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

5. No hay razones para contraindicar el trasplan- realizado estudios muy amplios administrando in-
te renal a aquellos pacientes con viremia posi- terferón alfa y lamivudina 101-106.
tiva aunque es esperable una peor evolución El interferón alfa induce seroconversion de AgHBe
de su enfermedad hepática 95-96. Es recomenda- a antiHBe con desaparición del DNA-VBH, normali-
ble tener un estudio histológico hepático para zación de transaminasas y mejoría de la lesión histo-
valorar la necesidad de un trasplante doble de lógica en el 30-50% de los casos 103,104. Sin embargo
hígado y riñón. La biopsia podría obviarse si esto solo ocurre en el 16% de los pacientes tratados
existen datos clínicos evidentes de cirrosis o con lamivudina 105. Existen pocos trabajos publicados
hepatopatía evolucionada con hipertensión en pacientes en hemodiálisis pero los resultados su-
portal. gieren que los resultados del interferón alfa pueden
ser similares a los obtenidos en sujetos inmunocom-
petentes aunque la tolerancia es peor 97, 107.
GUÍAS DE TRATAMIENTO DE LA HEPATOPATÍA Dado que en pacientes en Hemodiálisis se persi-
POR VHB EN HEMODIÁLISIS gue la erradicación de la enfermedad, y teniendo en
cuenta que los mejores resultados se obtienen con
En el manejo de la hepatitis crónica B en el caso interferón alfa, si las condiciones del paciente lo per-
de los pacientes en hemodiálisis, así como en ERCA, miten, se recomienda valorar el realizar un intento
hay que tener en cuenta, que en la infección cró- curativo con interferón alfa recombinante a dosis de
nica por virus B, se pueden dar tres situaciones: 5-6 MU tres veces por semana durante 4-6 meses,
administrados después de cada sesión de diálisis. En
1. Alto nivel de replicación viral: AgHBs+ y caso de intolerancia, se puede disminuir la dosis a
AgHBe+, VBH-DNA+ (PCR). 3 MU como mínimo.
Están descritos casos de importante intolerancia a
2. Bajo nivel de replicación viral: AgHBs+, anti- dosis altas, por lo que algunos autores recomiendan
HBe+, VBH-DNA+(PCR). pasar directamente a lamiduvina en pacientes en HD
debido a la mejor tolerancia.
3. Pacientes con AgHBs+ y DNA-VBH- (PCR). Actualmente, el interferón alfa 2a pegilado ha de-
mostrado ser más eficaz que el interferón alfa con-
Es aconsejable realizar una biopsia hepática a los vencional en el tratamiento de la hepatitis crónica
pacientes para conocer el grado de lesión histológi- B en pacientes inmunocompetentes, a dosis de 90-
ca. Si no existe lesión y las transaminasas son nor- 180 µg 108. Por ello también podría ser utilizado con
males no es necesario instaurar tratamiento antivi- éxito en pacientes en HD a dosis ajustadas, si como
ral, sin embargo en el caso contrario el paciente parece es mejor tolerado.
debe someterse a terapia antiviral. Si el paciente no responde o no se puede reali-
zar el intento terapéutico con interferón alfa, se
recomienda administrar lamivudina. Teniendo en
PACIENTES CON HEPATITIS CRÓNICA AGHBE+ cuenta el aclaramiento de creatinina se ajustará la
(ALTO NIVEL DE REPLICACIÓN VIRAL) dosis según se recoge en la tabla 1.
Con la lamivudina se consigue una respuesta bio-
La experiencia en pacientes en HD fuera de la química y virológica con negativización del DNA-
lista de espera de trasplante es escasa con ensayos VBH, con mejoría histológica, en prácticamente el
pilotos y pocos pacientes 97-100. 100% de los casos durante el tratamiento 109, 110. La
En el tratamiento de la hepatitis crónica por virus administración de lamivudina se debe mantener
B AgHBe+ en pacientes inmunocompetentes se han hasta conseguir la seroconversion del AgHBe a anti-

Tabla I. Ajuste de la dosis de lamivudina según el aclaramiento de creatinina


Ccr Ccr Ccr Ccr Ccr
Lamivudina > 50 ml/min 30-50 ml/min 15-30 ml/min 5-15 ml/min < 5 ml/min

Primera dosis 100 mg/24 h 100 mg/24 h 100 mg/24 h 35 mg/24 h 35 mg/24 h
Dosis sucesivas 100 mg/24 h 50 mg/24 h 25 mg/24 h 15 mg/24 h 10 mg/24 h

* Cuando se precisen dosis inferiores a 100 mg debe utilizarse la lamivudina en solución oral (5 mg/ml). Datos extraído de la ficha técnica del Zeffix.

57
G. BARRIL y cols.

HBe (16% de los casos) con negativización del mente) considerando la posible agresividad de la le-
DNA-VBH por PCR. sión hepática (histología, analítica) para evitar la pro-
En el 84% de los pacientes la administración de la- gresión de la enfermedad. Si se considera que ape-
mivudina se debe mantener de forma indefinida (la nas existe lesión, no se debe utilizar lamivudina, sino
tolerancia es excelente) puesto que no se consigue realizar seguimiento analítico y, en caso, de aumento
eliminar el virus B de la hepatitis y si se retira se de transaminasas o reaparición de VBH-DNA (PCR)
puede producir una reactivación 111, 112. Hay que re- en suero, administrar el fármaco. En cualquier caso,
cordar que durante el tratamiento, según avanza el siempre se debe iniciar tratamiento con lamivudina
tiempo, pueden aparecer mutaciones en la región en el momento del trasplante.
YMDD del virus B de la hepatitis (primer año: 14-
32%, tercer año: 52%) 113-115 que pueden provocar una
recaída bioquímica, virológica e histológica. En este
caso, hay que sustituir la lamivudina por adefovir ANEXO 5: INCLUSIÓN EN LISTA DE ESPERA DE
puesto que esas mutaciones son sensibles a este fár- TRASPLANTE RENAL DE PACIENTES CON
maco 116, 117. Sin embargo hay que señalar que el ade- INFECCIONES VÍRICAS
fovir puede producir toxicidad renal 118, 119 y se deben
ajustar las dosis según se recoge en la tabla 2.
INFECCIÓN POR VIH

PACIENTES CON HEPATITIS CRÓNICA ANTI-HBE+ Existía hasta hace poco una exclusión histórica,
(ABAJO NIVEL DE REPLICACIÓN VIRAL) como algunos autores han mencionado, de los pa-
cientes infectados por VIH para ser trasplantados de
En esta fase, la respuesta a interferón alfa y lami- riñón, debido a la posibilidad de que el tratamiento
vudina es similar, con normalización de transamina- inmunosupresor pudiera exacerbar la enfermedad y
sa y negativización del DNA-VBH pero casi todos los condicionara progresión de la misma 127-129.
pacientes recaen al interrumpir la medicación inde- La introducción del tratamiento antirretroviral de
pendientemente del fármaco administrado 120, 121. Por gran actividad (HAART) en Europa y Norteamérica ha
lo tanto dada la excelente tolerancia de la lamivudi- conducido en los últimos años a una dramática dis-
na se recomienda administrar este fármaco siguiendo minución de la morbi-mortalidad asociada a la in-
las dosis descritas en la tabla 1 122, 123. En caso de re- fección VIH. La mortalidad por SIDA ha descendido
sistencias a la lamivudina se administrará adefovir a de 30 por 100 personas año en 1995 a 3 por 100
las dosis indicadas en la tabla 2, que también ha de- personas año en 1997 130, 131. Esta disminución de
mostrado tener eficacia en estos casos 117. mortalidad es atribuible al uso del HAART. Como con-
En cualquiera de las situaciones anteriores, si se ob- secuencia de este alargamiento de la supervivencia se
serva un deterioro de la función hepática no contro- producirá un incremento de las complicaciones deri-
lable con la medicación, se debe plantear la posibi- vadas de enfermedades crónicas comunes o deriva-
lidad de realizar un doble trasplante renal y hepático. das de las co-infecciones por los virus de las hepati-
tis B (VHB) y C (VHC) que conducen al fallo de algún
órgano, y en consecuencia es previsible que cada vez
PACIENTES CON AGHBS+ Y DNA-VBH- (PCR) más frecuentemente se considere el trasplante de ór-
gano sólido (TOS) como una alternativa terapéutica.
Estos pacientes aunque no tengan VBH-DNA En pacientes infectados por el VIH, la incidencia de
(PCR) 124-126 en suero, lo tienen en hígado. Por lo enfermedad renal terminal (ERT) es alta, especialmen-
tanto, se debe valorar la administración de la lami- te en determinadas áreas y grupos de población 132, 133.
vudina (a las dosis y ajustes comentados anterior- La causa más frecuente de ERT, sobre todo en algunos

Tabla II. Ajuste de la dosis de Adenovir según el aclaramiento de creatinina


Ccr Ccr Ccr Ccr
Adefovir > 50 ml/min 20-50 ml/min 10-20 ml/min < 10 ml/min

Dosis 10 mg / 24 h 10 mg / 48 h 10 mg / 72 h 10 mg / semana

Datos facilitados por los Laboratorios Gilead.

58
GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

grupos poblacionales, es la llamada Nefropatía asocia- man una evolución favorable del injerto renal, con ci-
da al SIDA (NAS), que se caracteriza clínicamente por fras de supervivencia del injerto y del pacientes simi-
la existencia de síndrome nefrótico e insuficiencia renal lares al paciente VIH negativo, sin incrementar el ries-
progresiva, e histológicamente por la existencia glo- go de infecciones en el post-trasplante renal, siempre
merulonefritis (GN) focal y segmentaria 134-136. La NAS que se mantenga la terapia antiretroviral con HAART.
representa aproximadamente 2/3 de los casos de ERT Ello, junto a la mejora sustancial del pronóstico de la
en pacientes infectados por el VIH, el resto se debe a infección VIH tras la instauración del tratamiento
otros tipos de nefropatía, como GN membranoprolife- HAART obliga a reconsiderar que la infección por el
rativa, enfermedad de cambios mínimos, GN mem- HIV, por sí misma, no es una contraindicación de tras-
branosa, GN por inmunocomplejos, amiloidosis, y ne- plante renal y considerar que, como en la población
fropatía IgA. En Europa, no obstante, la NAS parece general, en todo paciente infectado por el VIH con
presentarse con muy baja incidencia predominando di- ERT cualquiera que sea su origen debe considerarse
versos tipos de GN mediadas por inmunocomplejos el trasplante renal, siempre y cuando no existan con-
como GN membrano-proliferativa, membranosa, proli- diciones que lo contraindiquen.
ferativa endocapilar y GN IgA entre otras, así como Afortunadamente, en el último año se han presen-
otras formas de nefropatía. La co-infección por el virus tado estudios importantes al respecto, que confirman
de la Hepatitis C (VHC) incrementa el riesgo de desa- las expectativas existentes. Roland y cols., que coor-
rrollo de enfermedad renal en pacientes infectados por dina un estudio prospectivo de TOS, presentó en la
el VIH y en estos casos la afectación glomerular puede Conferencia Mundial de SIDA de Barcelona del año
ser muy variable destacando principalmente la GN 2002, la evolución de 26 casos de trasplante renal
membrano-proliferativa y la GN membranosa 137, 138. en 8 hospitales de americanos 142. Los criterios de in-
Aunque un estudio reciente estima que el HAART ha clusión fueron que los pacientes no debían haber te-
supuesto una reducción de un 23% en el desarrollo de nido infecciones oportunistas, la cifra de linfocitos
ERT entre pacientes infectados por el VIH, se prevé en CD4 antes del trasplante debía ser mayor de 200
los próximos 10 años un aumento exponencial de los cél./µL y la carga viral del VIH < 50 copias/mL o con
casos de ERT en pacientes infectados por el VIH, pro- la posibilidad de administrar antirretrovirales eficaces
vocado por el aumento de enfermedades crónicas co- en el período post-trasplante. La cifra media de lin-
munes o asociadas al VIH que condicionan ERT. focitos CD4./µL antes del trasplante renal fue de 441
La experiencia de trasplante renal en pacientes VIH (200-1.054 cél./µL). La supervivencia global del in-
positivos es escasa, especialmente en la época pre- jerto y de los pacientes VIH al año del trasplante fue
HAART, aunque el análisis de estos casos demuestra del 85% y 91% respectivamente. Estas cifras son si-
que un alto porcentaje de pacientes infectados por el milares a las que tienen los pacientes no VIH de la
VIH sobreviven largo tiempo después del trasplante base UNOS (United Network for Organ Sharing), que
renal, sin presentar especiales complicaciones 139, 140. presentan unas cifras de supervivencia del injerto y
La introducción de la terapia antirretroviral y las ex- del paciente que oscilan entre el 89 y 94% y el 95
periencias previas han cambiado el panorama y han y 98% según hayan recibido un trasplante de riñón
impulsado diversos estudios prospectivos para definir de cadáver o de donante vivo respectivamente. Todos
la idoneidad del trasplante renal en pacientes VIH po- estos datos apoyan la opción del trasplante renal en
sitivos, con unos criterios estrictos de selección. En pacientes VIH positivos si cumplen los criterios es-
mayo del 2001 se publicó una primera guía clínica tablecidos en la tabla I.
de valoración
del receptor para trasplante del Comité de Práctica Clí-
nica de la AST 141. En ella se recoge que la infección Tabla I. Criterios de inclusión en trasplante renal
por VIH no es una contraindicación para el trasplan- para pacientes VIH positivos
te renal, si el paciente cumple una serie de criterios:
cifra de CD4 mayor de 200 cél/µL durante más de 6 – No haber tenido SIDA (salvo tuberculosis).
meses pre-trasplante, carga viral indetectable, trata-
miento antirretroviral estable durante más de 3 meses, – Tener una cifra de linfocitos CD4 > 200 céls/mm3 durante, al
no complicaciones de SIDA y cumplir los restantes cri- menos, los 6 meses previos.
terios generales para el trasplante (tabla I). Estos datos – Tener una carga viral < 50 copias/mL, al menos, en los 3 meses
aportan argumentos suficientes para considerar el tras- previos.
plante renal una opción validad en pacientes VIH po-
sitivos afectos de insuficiencia renal crónica terminal, – Tratamiento antirretroviral estable durante más de 3 meses. En
si cumplen los criterios referidos en la tabla I. Parece pacientes sin indicación de tratamiento antirretroviral: carga
viral indetectable y CD4 > 350 céls/mm.
que los datos disponibles hasta la actualidad confir-

59
G. BARRIL y cols.

Todos los pacientes deberán cumplir el resto de • Seguimiento del VHB-ADN post-trasplante. Man-
criterios generales necesarios para ser receptor de tener terapia con Lamivudina post-trasplante.
trasplante renal. Deberán dar su consentimiento es-
crito en documento especial para pacientes VIH po-
sitivos a su inclusión en lista de espera y trasplante. INFECCIÓN POR VHC
Por todo ello aconsejamos ante pacientes con VIH
en hemodiálisis, valorar cada caso de forma indivi- El trasplante renal supone el principal factor de
dual para ver si se les debe excluir o no de lista de riesgo de progresión de la hepatopatía en pacientes
trasplante renal 143. en diálisis VHC positivos 144-147. El tratamiento in-
munosupresor administrado post-trasplante modifica
la historia natural de la hepatopatía, activa la repli-
INFECCIÓN POR VHB cación viral y acelera el desarrollo de la hepatopa-
tía crónica. Además, la infección por el VHC parti-
La situación actual del VHB en diálisis y lista de cipa de manera activa en el desarrollo de diversas
espera se ha modificado de manera notable en los variedades de glomerulonefritis en el paciente tras-
últimos años con un descenso significativo en el nú- plantado renal, que podrán influir negativamente en
mero de pacientes HbsAg positivos, gracias a la va- la supervivencia del injerto 148,150.
cunación frente al VHB y al aislamiento de los pa- Por otro lado, el tratamiento con interferón esta
cientes en unidades independientes de hemodiálisis. contraindicado en el paciente trasplantado renal, por
Además, la introducción en los últimos años del el riesgo de desencadenar un rechazo agudo y/o una
tratamiento antiviral con Lamivudina ha cambiado nefropatía intersticial aguda 151. Por estos motivos, la
considerablemente la evolución de la hepatopatía correcta valoración y el posible tratamiento antiviral
crónica por VHB 98, 107, 110, 125, 126.
del paciente VHC+ debe prescribirse en la etapa de
ERC en diálisis 152-163.
Protocolo básico de valoración de pacientes Estudios post-trasplante demuestran que la
HbsAg+ en lista de espera negativización del ARN-VHC pre-trasplante no
solamente se acompaña de un mejor curso de la he-
Considerar las alternativas explicadas en el Anexo 4. patopatía, sino también de una menor incidencia de
enfermedades glomerulares post-trasplante 164-166.

Valoración del paciente VHB+ en lista de espera


de trasplante renal Objetivos

i. Biología hepática (GPT/GGT/F.Alc/Bilirrubina) Diagnósticos


ii. HbsAg.
iii. ADN-VHB. • Valoración del grado de hepatopatía.
iv. Biopsia hepática preferente. • Valoración de la actividad viral.
v. Valoración de tratamiento (Anexo IV).

Terapéuticos
Situaciones especiales
• Negativización de la replicación viral (PCR).
• No respuesta a la Lamivudina y/o recidiva • Detención de la evolución de la hepatopatía
ADN-VHB. Aconsejaríamos un segundo inten- intentando lograr remisión bioquímica e histo-
to con Adefovir. lógica.
• No-respuesta al tratamiento con Lamivudina ±
Adefovir en paciente con hepatopatía crónica
no terminal. Considerar de forma individual y Valoración del paciente VHC+ en lista de espera
según la hepatopatía esté evolucionada o no de trasplante renal
aconsejar trasplante renal solo o doble tras-
plante hepato-renal. i. Biología hepática (GPT/GGT/F.Alc/Bilirrubina).
• Valorar posponer el trasplante, para considerar ii. ELISA III o superior.
de forma individual si la hepatopatía está muy iii. PCR-VHC (ARN).
evolucionada el realizar doble trasplante hepá- iv. Biopsia hepática preferente.
tico y renal. v. Valorar indicación de tratamiento (Anexo IV).

60
GUÍA SOBRE ENFERMEDADES VÍRICAS EN HEMODIÁLISIS (HD)

Situaciones problemáticas ANEXO 6: LEGISLACIÓN RELEVANTE

• Paciente VHC/ARN+ con biopsia hepática nor-


1. Real Decreto número 664/1997 de 12 de
mal. Valoración en cada caso de indicación de
mayo, publicado en BOE de 24 de mayo de
tratamiento para intentar negativizar el ARN y
1997, nº 124, por el que se regula la protec-
evitar el desarrollo de enfermedades glomeru-
ción de los trabajadores contra los riesgos para
lares post-trasplante.
su salud y seguridad derivados de la exposi-
• No respuesta al IFN y/o recidiva post-IFN. Se ción a agentes biológicos durante el trabajo, así
sugiere un segundo intento con IFN + Riba- como la prevención de dichos riesgos.
virina.
• No-respuesta al IFN+Ribavirina en paciente Aspectos a resaltar:
con hepatopatía crónica no terminal. Valo-
rar individualmente cada caso, Considerar • Artículos 1 y 2 en los que se establecen el ám-
Trasplante renal aislado si la hepatopatía no bito de aplicación y las definiciones aplicables.
está muy evolucionada o trasplante doble • Artículo 6 en el que se describen las medi-
hepato-renal en caso de hepatopatías evolu- das destinadas a reducir el riesgo de expo-
cionadas. sición a los agentes biológicos.
• Algunos grupos utilizan donantes VHC+, siem- • Artículo 8 establece las actividades que el
pre en receptores VHC+/PCR+ (Consentimiento Centro Sanitario y/o Empresa deberá realizar
informado específico) 165-166. para vigilar adecuadamente la salud de los
trabajadores expuestos a los agentes biológi-
cos en lo que se refiere a, vacunaciones, for-
Tratamiento VHC+ en lista de espera mación e información al respecto y recono-
cimientos médicos específicos de los
Ya ha sido ampliamente comentado en el Anexo trabajadores sanitarios con riesgo de transmi-
4. sión a virus de transmisión sanguínea.

Fig. 3.—Esquema de la valo-


ración del paciente VHC+
candidato a trasplante renal.

61
G. BARRIL y cols.

2. RD 664/1997 de 12 de mayo (BOE 24 de mayo, BIBLIOGRAFÍA


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