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Universidad autónoma de Sinaloa

Unidad académica de psicología de Mazatlán.

Materia: Ética, Ciencia y Psicología

Docente: Humberto Lara Vega

Nombre: Ashley Caritina Cardenas Osuna

Resumen de los equipos a exponer (2, 3, 4, 5, 6, 7).

Grado y Grupo: 2-5, vespertino.

Fecha: 14/marzo/2022. Mazatlán, Sinaloa.


Resumen del equipo 1:

Implicaciones éticas de las antropologías subyacentes a las teorías


psicológicas.

Ludwick Fleck: Planteó la dependencia del conocimiento y de las teorías científicas


con respecto al contexto social con el que se gestan. Este autor, a través de la
descripción de las modificaciones que se han ido dando en los dibujos animados
atómicos de los seres humanos muestra cómo han ido evolucionando a lo largo de
la historia las diferentes concepciones de lo que es la observación científica.

Sostiene que los estilos de pensamiento y la forma de interpretar la realidad


empírica que luego cobran cuerpo en las teorías científicas de diversa índole, tiene
un progenie social. según él, las distintas escuelas, orientaciones o teorías llamadas
científicas, te ponen de moda en una colectividad, como resultado de las fuerzas
sociales.

El conocimiento científico depende de dimensiones para científicas que serían las


que hacen que la ciencia no evoluciona linealmente sino por paradigmas o lógicas
epistemológicas diferentes. este hecho ha llevado a que tanto Fleck como Kuhn
elaboró en una teoría epistemológica generalmente de las Ciencias, que involucra
evidentemente a la psicología.

En psicología, se ve explícita como ese condicionamiento social determina el plano


teórico, y esta tendencia a la autovalidación que tiene determinados estilos de
pensamiento psicológico.

Laín entralgo plantea que existe dos tipos de modelos básicos de salud, que se han
ido formulando a lo largo de los siglos:

El naturalista: el hombre es todo y sólo naturaleza. desde el punto de vista ético,


este modelo es considerado antiético (niega la posibilidad de responsabilidad y
libertad).
El personalista: afirma que la libertad, responsabilidad, moralidad y apropiación
racional de las cosas son realidades características del hombre, qué lo diferencia
de los demás animales.

Ética y modelos de salud mental:

Modelo Médico: Este “estilo de pensamiento” se insertaría dentro del modelo


naturalista clásico y se caracteriza por definir como enfermedad toda aquella
circunstancia vital que este compuesta por etología, patogénesis, cambios
morfológicos, síntomas y métodos de cura.

Modelo Mental: el esquema de este modelo es propio del ámbito psicológico. Lo


integran varios modelos, qué tienen en común que todos consideran que la
casualidad de las enfermedades psicológicas son propias de los psíquico y sólo por
consecuencia colateral, se relacionan con lo orgánico. Pueden describirse 3
submodelos:

- a) Enfermedad mental como dolor o sufrimiento vs “normalidad” como bienestar.

-b) Enfermedad mental como perdida de razón vs “normalidad” como coherencia


racional.

- c) Enfermedad mental como personalidad inhibida, reprimida o incapaz de


autorrealización vs “normalidad.

Modelo Social: se detectan dos sub-modelos:

- a) Enfermedad mental como variación de la media estadística vs “normalidad”


como lo mayoritario.

- b) Enfermedad mental como relación social vs “normal” como adaptación.


Considera la enfermedad mental como perdida de la responsabilidad, autonomía y
habilidad para vivir en una adecuada adaptación a la sociedad.

Simplificando los anteriores modelos de salud mental podríamos decir que hay dos
"estilos de pensamiento" opuestos, los cuales son:
El paradigma cientificista: Parte de la base de lo que es la delimitación de lo que es
salud mental y de lo que es enfermedad es algo independientemente a los valores
sociales y éticos de una determinada sociedad.

El paradigma humanista: postula que la salud mental es la capacidad de funcionar


de acuerdo a lo que la persona debe hacer.

Teorías reivindicativas o autodefensivas: En este caso tienden a ver a la sociedad


como un organismo agresivo y destructivo para con el individuo al que ha dañado
provocando síntomas. Como consecuencia consideran que es justo que reaccione
en contra de eso.

Teorías de la responsabilización: En este tipo de escuelas terapéuticas asumen que


quien más conoce el mundo psíquico es el sujeto y no el terapeuta. Tiene como
supuesto implícito que las personas son responsables de buscar la solución a los
problemas, siempre que tengan el ámbito apropiado para hacerlo.

Deberá analizar la credibilidad científica de la teoría o método de terapia psicológica.


Este análisis nos lleva a dos elementos: a) Nivel de la teorías, b) Nivel de la
metodología.

Deberá analizar la implicación antropológica-ética que tiene la teoría o método de


terapia: a) Implicación de la teoría, b) Implicación de su metodología.
Resumen del equipo 2:

Ética de la investigación en psicología y psiquiatría.

La investigación psicológica y psiquiátrica puede definirse como la operación


intelectual destinada a ampliar el conocimiento sobre el psiquismo humano con
métodos de observación clínicos o experimentales, que permitan comprobar datos
obtenidos mediante la evaluación o repetición hecha por investigadores diferentes
a lo que llevaron a cabo la observación.

Organización Mundial de la Salud y Consejo Internacional de Organizaciones


de Ciencias Médicas. Afirman que:

Investigación (con seres humanos) incluye estudios médicos y conductuales que se


relacionen con la salud humana, estudios de los comportamientos relacionados con
la salud en variedad de circunstancias y ambiente.

Después de experimentaciones medicas:

Se establece el criterio ético clave que impregna todas las dimensiones de la


investigación con seres humanos: derecho de dar el consentimiento valido o la
decisión informada. Estableciendo que todo experimento debe ser conducido de tal
forma que evite todo sufrimiento o injuria física o mental.

Las principales dificultades éticas: 1. Antes de tomar contacto con el sujeto, 2.


Durante la investigación, 3. Después de recabar datos. Al iniciar la investigación:

a) Debilidad de algunas justificaciones se da a favor de utilizar sujetos humanos en


investigación psicológica, es necesario para el beneficio del individuo como para la
humanidad o bien para evitar perjuicios futuros.

b) Discriminación en la elección de los sujetos. ¿Es justificable elegir niños,


prisioneros, débiles mentales u otras personas vulnerables como sujeto de
investigación ?, Se establece que debe pedirse el consentimiento subrogado de un
familiar o la aprobación del representante legal.
c) Invasión de la privacidad, la observación con o sin su consentimiento sobre
grupos humanos invadiendo su privacidad y los resultados se hagan públicos.

d)La técnica de distribución al azar, elimina en el investigador el riesgo de


seleccionar prejuiciadamente al sujeto, algunos individuos pasan a formar parte del
grupo que recibe terapia regular beneficiándose otros reciben terapia experimental
o ningún tratamiento el cual puede perjudicar.

e) El uso del engaño o placebo, el objetivo es evitar que el sujeto experimental


pueda imaginarse o intuir cuales pueden ser las hipótesis para probar con la
investigación y actuar en función de ellas. El engaño rompe el normal presupuesto
de confianza, honestidad y veracidad sin recurrir a manipulación engañosa.

Investigación Psicológica: El problema de la manipulación de la identidad del


individuo es el peor riesgo y el más grave dilema que surge con la investigación
psicológica.

Área de Psicología social: se da a través de la modificación de la conducta.

Psiquiatría, la manipulación social se puede dar en el área de terapia


electroconvulsiva, psico-cirugía y psicofarmacología.

Riesgos de perjuicios psicológicos:

Numerosos autores trataron de evaluar con cuestionarios los posibles trastornos


psíquicos que puedan haberse provocado con la aplicación de técnicas,
encontrando;

1-. Producción de trastornos de personalidad en algunos sujetos, que tiempo


después necesitaron terapia.

2-. Incompatibilidad con la imagen que el sujeto tiene sí mismo, causando cambios
prolongados en dicha auto-imagen.

3-. Tensión psíquica, la probabilidad de este daño en el sujeto puede verse reducida
a través de una adecuada explicación post experimental.

4-. Algunos sujetos no muestran el daño a primera vista.


Los Farmacólogos y Psiquiatras se ven constantemente estimulados a perfeccionar
la eficacia del arsenal psicofarmacológico con la evaluación clínica de nuevas
fórmulas químicas y para eso debe cumplir con el “visto bueno” del Comité de Ética
en Investigación.

Justificación para la aplicación de una nueva droga:

1- El tratamiento que se estaba haciendo es ineficaz.


2- No hay otra alternativa conocida equivalentemente eficaz.
3- La “innovación” ofrece razonables ventajas sobre la siguiente alternativa
conocida.
4- El intento es apropiado en la opinión de un grupo independiente del que está
haciendo el tratamiento.
5- Es posible mostrar la corrección del diseño terapéutico y obtener el
consentimiento de los responsables legales.

Se ha argumentado que los efectos negativos de una aplicación (investigación) se


pueden eliminar a través de conocer las hipótesis, procedimientos con el fin de que
el individuo recupere su confianza o autoestima perdida.

Hay dos tipos diferentes de argumentaciones éticas a favor de la explicación


post experimental:

1- La deontológica; considera que es un derecho de toda persona que haya


participado en una investigación el poder saber cuál era el estudio.
2- La consecuencialista o utilitarista; postula que la explicación
postexperimental debe hacerse porque es conveniente ya que disminuye la
posibilidad de perjuicios o traumas y compromete al individuo a no revelar lo
que pretende la investigación a otros participantes.

Principales criterios éticos para la investigación Psico-Psiquiátrica:

La Declaración de Tokio de la Asociación Médica Mundial establece una serie de


pautas que son perfectamente válidas para la investigación psicológica:

1-Debe ser hecha por personas científicamente calificadas para ello.


2-Todo protocolo debe remitirse a un comité independiente para su consideración,
observación y aprobación.

3-La preocupación por los intereses de los individuos debe tener prioridad sobre los
intereses de la ciencia o sociedad.

4-Los beneficios deben ser razonablemente proporcionados en relación a los


riesgos posibles.

5-El sujeto debe saber que puede abandonar la investigación en cualquier momento
sin recibir represalias por ello.

5º Declaración respecto a cómo será mantenida la confidencialidad de los datos


obtenidos del sujeto.

6. En caso de que la investigación vaya más allá que los riesgos mínimos, habría
que dar una explicación de cuáles serían los tratamientos disponibles; y en caso de
que se produzca algún daño, en qué consistirían estos últimos y dónde se podría
obtener más información al respecto.

7. Información respecto a las personas a las que pueden contactar para preguntar
acerca de la investigación y acerca de sus derechos como individuos de
experimentación. Además, deben saber a quién referirse en caso de que
efectivamente se produzcan daños.

8. Declaración de que la participación es voluntaria; que el rechazo a participar no


supondrá algún tipo de castigo por parte del investigador, o pérdida de los beneficios
-que de otra manera se espera rían de la relación-; y seguridad que el sujeto puede
interrumpir la participación en cualquier momento sin consecuencias negativas de
algún tipo.

3. En su defecto, es ineludible el consentimiento sustituto.

▪ en ciertas condiciones de investigación es necesario el uso del engaño para poder


obtener datos científicamente fiables

▪ tipos de engaño:
▪ El “injustificable" sería aquel que tiene por objetivo obtener la participación de un
sujeto que, de conocer el verdadero motivo de la investigación, se negaría a
colaborar.

▪ El "tolerable" sería aquel al que sólo se recurre en caso de que los datos que se
esperan obtener resultaran invalidados si el sujeto voluntario supiese de qué se
tratan pero que, de saberlo, no se negaría a dar el consentimiento.

El engaño tolerable puede dividirse en dos categorías:

▪ Engaño parcial. El sujeto se presta voluntariamente a una investigación sabiendo


que los psicólogos no le dirán ningún dato de la experiencia porque acepta confiar
en el investigador, a quien ve como un profesional que no lo va a perjudicar ni a
exponer a un riesgo mayor que el mínimo.

Se le informa al sujeto a propósito del método de investigación que se va a emplear.

Se practica en la mayoría de los test, cuestionarios, o entre vistas sin objetivos


definidos.

▪ El engaño total. Al sujeto se le informa explícitamente sobre los objetivos de la


investigación, pero con información falsa.

Una mentira incluida en el diseño de investigación y el sujeto cree participar de una


determinada búsqueda, cuando en realidad, forma parte de otra diferente.

La asociación norteamericana de psicólogos considera licito el uso del


engaño siempre y cuando…

▪ el objetivo de la investigación sea de gran importancia y no pueda ser obtenido sin


el uso del engaño

▪ se tenga la certeza de que los sujetos, de ser informados después de la


investigación, aceptarán como razonables los procedimientos empleados y no
disminuirán su confianza en los investigadores
▪ los participantes de la investigación sepan que pueden abandonarla en cualquier
momento y que sean libres de suprimir los datos que hayan dado una vez que se
les ha dicho el verdadero motivo de la investigación

▪ los investigadores asuman total responsabilidad en cuanto a las tensiones y


efectos secundarios resultantes de la experiencia

▪ siempre se haga examinar el protocolo por un comité de ética independiente.

La obtención de un consentimiento en el engaño podría obtenerse de diversas


formas:

• Consentimiento sustituto “aceptado” por los candidatos


• Consentimiento sustituto “elegido” por los candidatos
• Consentimiento sustituto en investigación con menores
• Que haya posibilidad de abandono

Casos para la discusión:

• Engaño y vergüenza provocado por el experimentador.

AB se sintió seriamente humillada cuando supo que el propósito del estudio que se
le había hecho no era evaluar su puntaje respecto a la película que estaba viendo
sino observar sus reacciones frente a las proposiciones groseras y obscenas que
un joven le hacía a una chica -dentro de la sala de cine- para que se fuera con él,
mientras ella protestaba diciendo que la dejara de molestar. A pesar de que le
pareció muy violenta y agresiva la actitud del muchacho, ella no hizo ni dijo nada,
aunque quedó muy preocupada por la chica e indignada por la conducta del joven.
Cuando AB supo que el incidente había sido orquestado para que otros pudieran
observar la reacción de ella, su culpabilidad por no haber hecho nada por la chica,
se convirtió en rabia e indignación. El comité ético supo que el investigador y su
ayudante tuvo que permanecer más de una hora con AB intentando explicarle por
qué el estudio tenía que ser hecho de esa manera, y por qué la información sería
útil e importante para el conocimiento científico. También le aseguraron que su
respuesta no era infrecuente y que no debía sentirse mal consigo misma.
Resumen del equipo 3:

Responsabilidad ética ante la ley:

A. LA PSICOLOGÍA Y PSIQUIATRÍA JURÍDICA

l. Aspectos éticos generales de la labor pericial

El área de interrelación entre la psiquiatría-psicología y la Ley conforma lo que se


puede llamar Psiquiatría y Psicología jurídica (llamada también "Legal" o "Forense").
Retomando la distinción que hace DIAMONJY hay dos tipos de intervención del
profesional.

La primera es cuando un psicólogo o psiquiatra ya está tratando a un paciente, éste


se ve envuelto en asuntos legales y el profesional es llamado a testimoniar como
experto.

El segundo caso sería propiamente la psicología y psiquiatría forense, que es


cuando el profesional no está atendiendo a la persona, pero igual es llamado por el
juez a dar su informe técnico. Ambas situaciones pueden estar relacionados con las
siguientes problemáticas:

1. diagnóstico de credibilidad de un testigo judicial.

2. diagnóstico de culpabilidad de un acusado.

3. diagnóstico de competencia de una persona para el ejercicio civil de sus derechos


como persona.

4. diagnóstico de capacidad para tener en custodia a menores o para suprimir la


patria potestad a quienes la ejercen.

5. responsabilidad de acusar a personas en ciertas circunstancias (cuando hay


abuso de menores, ancianos, discapacitados, etc.).

6. cuando se acusa a otros profesionales de mala práctica.

Los psicólogos o psiquiatras muchas veces son requeridos para dar testimonios en
aquellos casos en que es necesario establecer el estado emocional o mental de una
parte directamente implicada en un litigio judicial. El juez penal, por su parte, puede
solicitar a los profesionales un informe pericial sobre el estado mental de un
acusado. Pero, cómo es sabio, aunque los psicólogos hagan múltiples test de
personalidad, de actitudes, etc., tratando de averiguar las características del sujeto,
sólo podrían encontrar indicios de peligrosidad o de una personalidad trastornada
en el momento actual. Pero no existe ningún test, ni instrumento alguno de otro tipo,
que permita diagnosticar -en retrospectiva- sobre las motivaciones que pudieron
haber existido o el estado psicológico del individuo en el momento de haber
cometido un crimen.

Tres problemas éticos fundamentales se presentan en la práctica de psicólogo o


psiquiatra cuando actúa como forense:

• La honestidad e imparcialidad en la sección de las fuentes a partir de las


cuales elabora la información que va a presentar al juez.
• La honestidad e imparcialidad de la presentación o redacción del informe. La
responsabilidad ética fundamental del profesional que participa como experto
en cualquiera de las circunstancias.
• La confidencialidad y la labor pericial. Cuando un psicólogo o psiquiatra
participa como testigo a pedido del paciente.

2. Confidencialidad y ''privilegio" terapéutico.

Privilegio es un concepto legal que se aplica en algunos países y que se refiere al


derecho que tiene todo psicólogo o psiquiatra a que nunca se le sancione si se niega
a revelar a la justicia las confidencias que un paciente le haya hecho en el transcurso
de la relación psicológica. sería el equivalente profesional -reconocido por la ley- del
secreto de confesión que tienen los sacerdotes de la Iglesia católica. también se
reconoce ese privilegio al abogado defensor de un delincuente cuando no es
interrogado, a su vez, por el juez, a propósito de lo que sabe.

Para que pueda reivindicarse el derecho al ejercer el privilegio de secreto ante


requerimiento del juez creo que debería darse las siguientes condiciones:
1. La comunicación del sujeto hay psico terapeuta debe haberse hecho con la
convicción de que no sería revelada a terceros.
2. La inviolabilidad de esa confidencia es considerada esencial a los propósitos
y a la continuidad de la relación psicológica; y su ruptura, un grave perjuicio
para el individuo afectado.
3. El tipo de relaciones de tales características que, en opinión mayoritaria de
la sociedad, siempre mereces ser melosamente amparada con el privilegio
terapéutico.
4. El acusado no está poniendo en riesgo la vida de terceros, ni está practicando
abuso sexual o maltrato físico o psíquico cuya única manera de averiguarlo
sea la información que dispone el profesional.

3. Diagnóstico de futura peligrosidad.

Una ocasión de particular gravedad por las implicaciones éticas que trae consigo es
cuando el Juez quiere tener datos psicológicos de la presumible conducta peligrosa
o agresiva de un determinado sujeto, en orden a decidir qué destino darle. Muchos
estudios han cuestionado fuertemente el diagnóstico psiquiátrico y psicológico de
peligrosidad. Si -como decíamos más arriba- hay serias dificultades para juzgar
sobre la peligrosidad actual de una persona, mucho más respecto a la futura
peligrosidad.

B. DE PERITO A INCULPADO: LA "MALA PRÁCTICA"

La "mala práctica" puede definirse como el fallo en el ejercicio de la idoneidad que


puede ser razonablemente esperada en un psicólogo, cuando actúa poniendo en
práctica las pericias propias de su profesión. Se contrapone a la práctica
considerada "normal" entre los colegas de un determinado lugar y tiempo. Dentro
de la "mala práctica" suele hablarse también de otros tres conceptos: la
imprudencia, impericia y negligencia.

i. Imprudencia: Sería la osadía desproporcionada en la que incurre un


psicólogo al usar métodos o procedimientos que, estando dentro del conjunto
de conocimientos o prácticas de la profesión, requerirían un entrenamiento
específico no recibido por un determinado psicólogo. También podría ser
imprudencia el uso de procedimientos o prácticas complejos, inciertos -o al
límite de su capacidad- y con resultados dudosos.
ii. Negligencia: sería la conducta del profesional cuando; sabiendo y
conociendo determinada terapéutica o procedimiento, no pone en práctica
con exactitud esa información y pericia y causa un perjuicio al paciente;
también, cuando deja de poner los medios usuales para llevar a cabo aquel
patrón de conducta esperado normalmente de un profesional.
iii. Impericia: sería cuando el perjuicio provocado al paciente se produce por el
uso de prácticas o procedimientos que el psicólogo no conoce o no ha sido
capacitado para usarlas.

En consecuencia, para que una acusación de mala práctica sea válida como causa
en contra de un psicólogo o psiquiatra, el Juez debe comprobar 4 condiciones: 1 ª.
que el profesional debía al paciente un determinado patrón de conducta en cuanto
a la asistencia; 2ª. que no cumplió ese deber por un determinado acto de comisión
o de omisión; 3ª. que debido a ese abandono del deber, el paciente sufrió un daño
psicológico; 4ª. que la· conducta del profesional fue la causa próxima del daño.

Pasar las dificultades antes mencionadas las acusaciones del perjuicio por mala
práctica contra los psicólogos o psiquiatras pueden ser muy diversas. podríamos
clasificarlos en los siguientes rubros fundamentales de problemas:

Explotación. Incluye: a. explotación económica o aprovechamiento de la


ascendencia sobre el cliente para lucro del psicólogo; ocultación inicial o aumentos
injustificados y desproporcionados de los honorarios en el transcurso de una terapia.
Puede suponer, también, acusación de influencias indebidas llevadas a cabo por
los psicólogos que trabajen con ancianos; acusaciones de miembros de terapias
grupales porque consideran que el psicólogo los ha introducido en ellas, no por su
mejor interés, sino por motivos económicos o de conveniencias no terapéuticas; b:
Explotación sexual: cuando hay abuso de autoridad para el aprovechamiento sexual
del cliente.
Imprudencia: Comprende genéricamente todos aquellos casos en los que el
psicoterapeuta, habiendo acordado llevar a cabo un determinado tratamiento, luego
no lo puede hacer por insuficiente formación; o lo hace, pero provocando daño en
el sujeto a causa de la impericia, negligencia o imprudencia.

Mentira, falsedad o engaño:

ª· Ausencia de información para el consentimiento valido. a.1) engaño por utilizar a


la persona para un experimento sin su consentimiento; a.2) falta de consentimiento
previo para registros escritos y grabaciones a.3) uso de tests (en ambientes
laborales o escolares) que violan el derecho a la autonomía y a la decisión
informada previa, sin coacciones ni intromisiones a la intimidad.

b. Por informes escritos. b.1) Problemas respecto a los informes no periciales a los
que se considera falsos, engañosos o inductores a engaño debidos a su
esquematismo, vaguedad o ambigüedad. b.2) Quejas contra informes periciales en
casos de atribución de guarda y custodia de niños o incompetentes; dudas acerca
de la legitimidad y contrastación científica de los procedimientos utilizados en esos
informes.

c. por publicidad engañosa: anuncios que generan falsas expectativas, expresión


de titulación indebida, promesas sobre éxito de tratamientos, inclusión de
honorarios falsos.

d. Por formación o capacitación insuficiente. Comprende las falsedades en la


formación de psicólogos tales como irregularidades en los formadores o en los
programas de formación respaldados por psicólogos (profesores no titulados, oferta
indebida de títulos, formación engañosa) entrenamiento. para el falseamiento de
tests o información al público de las respuestas correctas.

f. Falseamiento datos científicos, especialmente en los trabajos de investigación;


plagio de trabajos hechos por otros investigadores.

Caso y texto para la discusión.

• Autonomía para decidir el proceso terapéutico


EA ha estado en tratamiento con DD de forma intermitente durante un período de 3
años. Ha tenido conflictos neuróticos de larga data contra los cuales ha luchado
ambivalentemente. EA empezó a cuestionar durante las sesiones con DD si la
terapia le estaba ayudando en algo. EA reconocía que quería trabajar en los asuntos
personales, pero tenía sentimientos mezclados acerca de ellos. Sugirió, pues, que
quizá otro psicólogo que no fuera DD podía ayudarlo más. DD interpretó estos
comentarios como un medio para evitar asuntos importantes del tratamiento, pero
sugirió que a AE le podía venir bien obtener una segunda opinión. Le procuró a AE
diferentes nombres de profesionales bien entrenados. AE seleccionó uno de ellos y
lo fue a ver durante 2 sesiones, luego de las cuales, tanto el cliente como el
consultado decidieron que debía continuar tratando de enfrentar la dificultad de los
conflictos con DD, a quien conocía bien y a quien consideraba que era la persona
capaz de enfocar mejor el problema que cualquier otro terapeuta nuevo. (Ib., 130).
Resumen del equipo 4:

Ética de la relación individual entre terapeuta y paciente.

Actualmente la profesión del psicólogo se ocupa de dos tipos principales de


servicios en la sociedad:

La psicología clínica o individual y la psicología institucional u organizacional.

La primera sigue el patrón clásico de relación individual entre un psicólogo y una


persona luego que ambos entablan un acuerdo basado en el libre consentimiento.

La segunda, tiene una evolución más reciente y es la que requiere la pericia del
psicólogo como facilitador en el desarrollo de las personas que conviven en las
instituciones o grupos; o como asesor para la potenciación de las cualidades
individuales en los equipos de convivencia o de trabajo.

A. El proceso de la relación individual entre terapeuta y paciente.

1. ética del inicio de la relación psicológica.

En la práctica cotidiana, un falso presupuesto por parte del terapeuta, presiones de


tipo económico o de prestigio o, aún una mala conducta ética, llevan a algunos
profesionales a considerar que toda persona que le consulta lo hace porque
realmente quiere recibir el tratamiento que ellos están en condiciones de ofrecer.

Debe el psiquiatra o el psicólogo de informar al paciente cuales son las otras


alternativas u otros profesionales a los cuales puede recurrir si considera que ellos
están en mejores condiciones para responder su demanda.

Debe describir en términos comprensibles y sencillos su propia orientación teórica


y técnica.

Debe incentivar a la persona desde la primera entrevista a que exprese sus


particulares fantasías o sentimientos respecto a la terapia.

Estas son algunas de las cuestiones éticas relacionadas con el inicio de la relación
individual entre una persona y un psicólogo o psiquiatra.
A) El Consentimiento Válido

Cada persona, en la medida que es centro de decisiones, tiene derecho a auto


disponer de si en aquella esfera que le compete. El respeto de la autonomía de las
personas se posibilita por el cumplimiento de la regla de veracidad y se instrumenta
por el consentimiento.

Cuando la veracidad es la base de la relación profesional – persona y el derecho a


la autonomía se reconoce como ineludible, entonces es posible que se dé un
auténtico acuerdo entre iguales que debe ponerse en práctica por el consentimiento
valido. Este puede definirse como el acto por el cual una persona decide que
acontezca algo que le compete así misma pero causado por otros.

Existen 3 condiciones básicas que debe tener todo consentimiento para ser
considerado valido:

1.Que lo haga una persona generalmente competente para decidir. En general se


ha definido la competencia como la capacidad funcional de una persona de tomar
decisiones adecuadas y apropiadamente en su medio sociocultural, para alcanzar
las necesidades personales que, a su vez, estén de acuerdo con las expectativas y
requerimientos sociales.

En este sentido una persona seria plenamente competente cuando es capaz de


ejercitar tres potencialidades psíquicas propias del ser humano “normal”: la
racionalidad, la intencionalidad (o capacidad de orientarse a la búsqueda de valores
personales y sociales) y la voluntariedad (o posibilidad de actuar sin coerción).

2. Que la persona haya recibido la suficiente y adecuada información.

Una información suficiente en el caso de asistencia psicológica o psiquiatra es el


conjunto de datos merecidos por el paciente que se refieren al menos a:

* La capacitación y formación del psicoterapeuta, sus estudios previos, etc.

*El tipo de psicoterapia que puede recibir de el: sus metas y objetivos.

*Los asuntos relacionados con la confidencialidad y sus excepciones


* La forma que serán registrados sus datos y si podrá o no tener acceso a ellos. Es
necesario saber además si la información es adecuada, es decir, apta para ser
comprendida en esta ocasión.

3. ser voluntario, es decir, no tener ningún tipo de coacción exterior.

Esto quiere decir, que una persona puede ser competente en general, puede
comprender la suficiente y adecuada información que se le proporciona, pero no se
encuentra libre para tomar la decisión específica que se le pide. Ser libre para tomar
una decisión, no solo tiene que ver con ausencia de coerción exterior. Dado el caso
en el que el paciente no esté en condiciones de tomar ninguna decisión, será su
representante legal quien tenga que hacer el consentimiento para poderse iniciar de
forma éticamente correcta la relación psicoterapéutica.

2. Ética Del Transcurso De La Relación Psicológica

Una vez que el psicólogo hace una primera apreciación de la realidad del paciente,
decide implícita o explícitamente si quiere o no ayudar a las personas consultante.
No es posible continuar con el proceso terapéutico si el psicólogo o psiquiatra no
piensa que esa persona concreta necesite algún tipo de ayuda. Junto a esta
decisión van implícitas una serie de consecuencias para la relación ya que el
psicoterapeuta proyecta metas y objetivos a lograr con el paciente desde teorías ya
asumidas; y razona su forma de proceder desde dicho punto de partida.

A. Objetivos Terapéuticos E Implicación Ética

Hay tres grandes modelos de metas u objetivos psicoterapéuticos, que


pertenecen a distintas teorías psicológicas:

1. Promoción de la autonomía: aquellos psicólogos que consideran que el único


objetivo éticamente justificable de una psicoterapia es favorecer la autonomía
del ser humano en tanto individuo, el objeto de la terapia es satisfacer el mejor
interés del individuo y la insistencia se pone en lo que son las necesidades del
sujeto como tal. La meta es promover el autocontrol y la autoestima sin ejercer
influencias indebidas sobre la persona y sin cuestionar su mundo de valores.
2. Promoción de la armonía: un gran grupo de psicólogos se reúnen en tono a
querer buscar como objetivo principal de la terapia el ayudar a que la persona
se ajuste a los valores del medio ambiente y este en armonía con ellos de forma
que su convivencia sea satisfactoria, tanto para si como para la sociedad , la
visión del hombre que encierra este grupo es un “ hombre pueblo” no considera
al ser humano como conviviendo con múltiples enfoques o visiones de la realidad
, busca encontrar una ideología, practica y practica consensuada, el objeto de la
terapia está determinado por “ nuestro mejor interés” y la existencia principal se
pone en el nuestro.

3. Promoción de la perfección de la naturaleza humana: Es el que pretende con


la psicoterapia que el paciente no se acomode a las conductas, o intereses de
una determinada sociedad sino que conduzca su vida con valores que implícita
o explícitamente se consideran verdaderos en sí mismos, el objeto terapéutico
está orientado por el mejor interés, los objetivos terapéuticos de esta corriente
buscan una determinada imagen de lo que es el hombre sano y tratan de que el
sujeto se adapte a ella. Este modelo es obsoleto solo es una primera impresión.

2. Ética De La Atención Psicológica Y Psiquiátrica A Menores:

Los psicólogos y los psiquiatras tienen que ejercer profesionalmente en múltiples


ocasiones relacionadas con la vida y el comportamiento de niños y adolescentes.
Procesos en la justicia juvenil, decisión sobre custodia, casos de abusos
sexuales o incestos, decisiones sobre adopción y diagnóstico de competencia,
son algunos de los asuntos en los que intervienen la psicoterapia y la justicia.
También interviene el psicólogo en relación con los menores en los ámbitos
educacionales.

Tratándose de que los menores dependen de sus padres o representantes


legales son al menos tres de las partes involucradas cada vez que el psicólogo
o psiquiatra acepta atender a un menor de edad: el profesional, el menor y sus
progenitores o tutores.

A. ¿Lealtad Con El Menor O Con Sus Padres?


Este dilema surge porque el menor de edad todavía no tiene la total autonomía
para disponer de si, según su propia filosofía de vida y escala de valores. A
causa de eso, durante su proceso de maduración, son los padres quienes
ejercen la patria protestad sobre una capacidad todavía no plenamente
desarrollada.

La sociedad siempre ha reconocido la legitimidad de este proceder y las leyes


que garantizan el derecho de los padres a orientar y guiar a sus hijos menores
según les parezca conveniente, siempre que no violen los derechos inalienables
del niño y de todo ser humano.

Ahora bien, precisamente porque la autonomía es una capacidad que se va


desarrollando progresivamente, pueden surgir conflictos de deseos e intereses
entre los padres y el menor en aquello que se refiere a la asistencia psicológica
o psiquiátrica.

B. Lealtad Para Con El Maltratado

Los conflictos de lealtades descritos antes se refieren a cuando no hay una


violación de los derechos fundamentales de la dignidad humana. Sin embargo
en la práctica profesional pueden seguir otros dilemas mucho más graves. Tales
serían los casos del maltrato infantil, se suele diferenciar los maltratos en varias
categorías:

1º negligencia del cuidado; 2º maltrato físico y emocional; 3º abuso sexual; 4º


abandono; 5º explotación social.

1°. Negligencia o maltrato pasivo: consiste en no cubrir una o más de las


necesidades básicas del niño: comida adecuada, ropa, abrigo, cuidado médico
o un mínimo de supervisión o cubrir mal estas necesidades, por ejemplo cuidarlo
dentro de un ropero, darle de comer solo al final del día, hacer que deambule
por las calles.

2°. Maltrato físico y emocional: se entiende aquel género de trato violento que
se excede de las conductas normalmente admitidas, como correctivas o
educativas por las costumbres sociales, su grado extremo constituye el
abandono.

3°. Abuso sexual: es una forma particular de maltrato físico-emocional pero


directamente relacionado con la genitalidad. Entre sus diversas formas tenemos:
atentado violento al pudor, ultraje público al pudor, violación, pornografía infantil,
prostitución.

4°. Explotación socioeconómica: es el uso de los niños como fuerza de trabajo


en beneficio lucrativo de otras personas, sean adultos o de la misma edad.

Para los psicólogos de España el acuerdo psicólogo persona tiene como límite
– a partir del cual el secreto debe romperse – aquellos casos en que existan
violaciones de los derechos humanos o malos tratos de cualquier persona.

A. Una primera responsabilidad ética es la obligación del psicólogo de saber


diagnosticar el maltrato.

En primer lugar distinguiendo y detectando a los padres maltratadores. Entre


las características de personalidad destacan:

1. mayores síntomas depresivos, cierto grado de ansiedad, bajo nivel de autoestima.

2. alto grado de impulsividad. (Incapacidad de control racional de impulsos


agresivos, ausencia de evaluación previa de la consecuencia de los actos).

3. déficit de las estrategias de afrontamiento a los problemas.

4. déficit en la capacidad empática.

5. experiencia personal de haber sido maltratados.

Las características físico-biográficas del niño de padres que se sospecha son


maltratadores también son importantes, entre ellas destacan:

1. niños no deseados.

2. niños atípicos.

3. niños que por sus características físicas defraudan a sus padres.


4. tienen llanto arrítmico de tonalidad alta.

5. niños discapacitados.

6. niños con enfermedades físicas frecuentes y severas.

7. niños difíciles.

B. diagnosticado el maltrato infantil, el primer deber profesional es buscar mantener


la relación paterno filial, pero sin que se vuelva a repetir el maltrato.

C. cuando hay suficiente evidencia de que no es posible, el psicólogo o psiquiatra


se verá obligado a la denuncia al juez para que este decida lo que se deba hacer
con el niño.

D. todo profesional tiene una responsabilidad preventiva ante el maltrato.

3. Ética En La Asistencia A Los Ancianos

En nuestra sociedad, lo que muere, inútil, regresivo, irreversible, débil es asociado


con lo anciano; mientras que lo que vive, útil, progresivo, modificable, fuerte es
asociado con lo joven y por tanto con lo que vale la pena reforzar.

Por tanto nuestra sociedad busca internar a los ancianos en instituciones que los
cuiden, para que no molesten y vivan allí son últimos años. La causa de esta
sorprendente actitud cultural es muy compleja y no es el momento de intentar
reflexionar sobre ella. Pero en este contexto no puede extrañar que la edad sea
claramente un factor de discriminación. Tantos psiquiatras como psicólogos no son
inmunes a estos valores, y su curiosa actitud de desinterés al menos por la
ancianidad y su psicología, ha estado influida por ese contexto social.

Por otro lado es notorio el hecho de que las facultades de medicina o escuelas de
psicología no preparan a sus profesionales para que sepan asistir a los ancianos.
Al contrario, la ideología pedagógica es enseñar a los estudiantes a curar, vencer la
muerte, superar el sufrimiento o lograr el bienestar biopsiquico.
El envejecimiento trae aparejado:

1. perdida de status, e incertidumbre respecto a la valía personal

2. Inseguridad respecto a la inhabilidad para enfrentar las demandas de la vida

3. Aprehensión respecto a la salud

4. Dificultad de adaptación a la condición de no tener que trabajar

5. Incapacidad para encontrar caminos que le den gratificación personal

6. Dificultad para manejar la tensión creada por el cambio social

7. Incentivo limitado para la limitada participación que se le ofrece

5. Ética De La Asistencia A Personas Con Temática Religiosa:

Los valores éticos y religiosos son unos de los más proclives a ser influenciados por
la interacción que se da entre un profesional de la salud mental y una persona
consultante. El paciente toma consciencia de elementos que desconocía en su
mundo de valores éticos y religiosos y decide de forma consciente y libre modificar
parte o toda su postura ante ello, nada hay que objetar.

Muy por el contrario, toda imposición de valores entre personas atenta contra la
dignidad y la libertad de los seres humanos y pasa a ser una conducta éticamente
inaceptable.

La contratransferencia de contenidos religiosos por parte del psicoterapeuta hacia


el paciente puede darse de diversas maneras.

1º intercambios de tipo filosófico con el paciente, sobre la naturaleza de la creencia

2º argumentación con el paciente respecto a ciertas doctrinas o prácticas que el


terapeuta considera dañinas

3º evitación de la temática religiosa si el paciente la plantea

4º interpretación teórica rápida y superficial de los temas religiosos


5º rehusamiento a tratar aquellos temas religiosos que están en afinidad con lo que
el mismo terapeuta cree.

Tanto el temor a que surjan ciertas dudas de fe no resueltas en el psicoterapeuta,


como su temor a lo desconocido, a la mortalidad y a la finitud humana hace que
afloren en el profesional poderosas fuerzas contra transferenciales hacia su
paciente estas suelen quedar tematizadas en torno a 4 ejes principales:

*omnipotencia-finitud: surge cuando el psicoterapeuta siente inconscientemente un


deseo de ser omnipotente, pero se encuentra con un creyente que pone a Dios
como la fuerza de toda potencia. Su reacción puede llevarlo a luchar contra ese
poder trascendente mediante la eliminación de la religiosidad en el paciente.

*generosidad-narcisismo: puede surgir ante la actitud altruista o generosa del


paciente supuestamente opuesta a la meta de auto-realización o auto-estima que el
psicoterapeuta pueda considerar esencial en los objetivos y metas de la
psicoterapia.

*materialismo-desprendimiento: puede experimentarse como contratransferencia


por parte del psicólogo, ante la presencia de un paciente que invoca su creencia
religiosa como fundamento de su actitud de desprendimiento ante las cosas
materiales y económicas.

*placer-sacrificio: aquí entra de lleno la vivencia que tiene, tanto el paciente creyente
como su psicoterapeuta, con respecto al papel del placer, el bienestar y el sexo en
la vida y el psiquismo humano. Cuanto más dificultad haya tenido un psicoterapeuta
para integrar su sexualidad en una relación integralmente satisfactoria, más tenderá
a focalizar la felicidad y la auto-realización en torno a la actividad placentera por sí
misma.

Teniendo en cuenta lo anterior se cree que el objetivo de la terapia de los pacientes


que presentan temática y problemáticas religiosas debe consistir en separar los
conflictos interiores que se expresan a través de un sistema defensivo y con
características religiosas, de lo que es la verdadera experiencia religiosa. Sin atacar
la religión del paciente, el terapeuta puede trabajar con los componentes
patológicos, ayudándolo a que re-encuentre los valores religiosos no neuróticos del
grupo al que pertenece.

ETICA DE LAS TERAPIAS PSIQUIÁTRICAS U ORGÁNCIAS

Algunos psicólogos piensan que “nada tienen que ver” con las terapias orgánicas,
con la consiguiente repercusión de esto sobre la forma con la que luego se aborda
ese tema con sus pacientes, lo que va en detrimento de su recuperación. De esta
forma, no ayudan a sus pacientes a clarificar lo que es un temor racional y justificado
con respecto a las terapias orgánicas, así como en la re-elaboración de los miedos
irracionales y fantasías.26

Todo psicólogo tiene la responsabilidad ética de estar permanentemente


actualizado en este tipo de terapias, como parte de su tarea interdisciplinar al
servicio de los pacientes y además asesorarlos idóneamente. Solo así es posible
saber cuáles son aquellas informaciones que los profesionales de la salud mental
deben transmitir a los paciente o sus representantes, como para que pueda darse
el consentimiento válido antes del tratamiento, que es la regla de oro entre
profesional y paciente.

ÉTICA DE LAS TERAPIAS PSICOSOCIALES O PSICOTERAPIAS

Aspectos éticos globales relacionados con la psicoterapia:

La interpretación y la directividad vs. Neutralidad axilógica: El problema de la


interpretación está ligado a la contratransferencia, por lo que ninguna interpretación
es completamente objetiva, ya que frecuentemente es originada desde los valores
o problemática afectiva del terapeuta. Otro gran interrogante que surge es ¿quién
asegura la neutralidad axiológica de los presupuestos de las escuelas teóricas?

El psicólogo como velado “moralizador” del paciente: Esto puede darse cuando el
paciente tiene determinadas opciones morales, sobre las cuales el psicólogo tiene
una opinión adversa y las califica como no sanas.
¿Eficacia comprobada?: Se trata de un terreno en el que no hay suficientes estudios
empíricos y que sólo se pueden hacer observaciones éticas muy restringidas en
determinados casos y procedimientos.

a Terapia familiar: Es cualquier tipo de procedimientos que tengan como meta la


búsqueda de alterar los patrones de interacción entre los miembros de una familia.

Primer problema ético: ¿Qué es y cómo debe funcionar una familia para asegurar
el adecuado estado de salud en cada uno de sus miembros?

Kalafat y Boroto: “La efectividad de una terapia se debe en gran parte a la afinidad
de los estilos y valores entre el terapeuta y las personas”.

El grado de nivel cultural de los miembros de la familia y los tipos de personalidad


son de enorme importancia en las alianzas que establece el terapeuta, y los
refuerzos que proporciona a los individuos particulares en el seno del sistema.

b TERAPIA SEXUAL:

Metas u objetivos principales:

1 El cambio de la interrelación marido/mujer.

2 La estructuración de un espacio nuevo de espontaneidad relacional.

3 Cambio de actitudes y prejuicios respectos al sexo.

4 Disminución de la ansiedad hacia la expresividad sexual.

5 Énfasis en una comunicación asertiva.

6 Uso de determinadas técnicas para la disminuir los elementos trastornables de la


relación.

7 Uso de una estrategia escalonada de logros, para adquirir confianza y disminuir


la ansiedad.

c TERAPIA GRUPAL
Problemas éticos:

1 Capacitación del líder del grupo: ¿Cuál es el tipo de líder que se considera
apropiado para la experiencia grupal? Desde el punto de vista ético, puede ser
enormemente perjudicial para la sociedad, el que no exista ningún tipo de control
de los líderes de los grupos terapéuticos.

Criterios mínimos de formación:

➢ Saber identificar, prever y reaccionar a los típicos problemas de la terapia


grupal.
➢ Estar familiarizado con los códigos de ética de las asociaciones
profesionales.
➢ Tomar conciencia de los asuntos éticos y actitudes éticas con otros colegas.
➢ Estar dispuesto por adelantado, a proporcionar a los miembros del grupo
orientaciones éticas escritas, a fin de analizarlas en el primer encuentro.
➢ Consultar opiniones expertas cuando surjan situaciones difíciles y buscar
supervisión periódica.
➢ Ser firme en el apoyo de conductas éticas durante la experiencia grupal.

2 Selección de los participantes:

Según la APA: “Debe hacerse una entrevista de selección por parte del líder grupal
antes de aceptar cualquier integrante y excluir a aquellas personas que él juzgue
que la experiencia grupal pueda serles inapropiada”

Es evidente que no todas las personas están preparadas para poder participar en
una experiencia de dinámica de grupo.

Según Lakin, se deben excluir dos tipos de personas:

➢ Con sospecha de signos de paranoia.28


➢ Quienes tienen extremos de ansiedad, que les impida comunicarse con los
demás.
También son motivo de exclusión:

➢ Individuos demasiado defensivos.


➢ Que proyecten sus sentimientos sobre otros y sentirse victimizados por ello.
➢ Con autoestima baja que necesiten permanente reforzamiento.

Condiciones positivas para participar:

➢ Habilidades para comunicarse.


➢ Grado de vulnerabilidad emocional adecuada.
➢ Tolerancia a la interacción con otros.

La pregunta éticamente responsable que debería hacerse un terapeuta grupal cada


vez que se encuentra ante un candidato, debería ser la siguiente: “¿Es apropiado
que esta persona participe de este grupo, con este líder y en este momento?

3 Voluntariedad en la participación.

4 La preparación de los candidatos y el consentimiento válido: Es un derecho de


toda persona el poder dar un consentimiento válido, ante cada alternativa vital que
un profesional le ofrezca, y hacerlo después de recibir suficiente y adecuada
información.

d TERAPIA CONDUCTISTA: Utiliza los conocimientos de las ciencias del


aprendizaje, para la modificación de la conducta humana; lo que sienten,
interpretan, perciben, piensan o proyectan.

Existe una polémica en cuanto:

1 Sus presupuestos teóricos.

2 Sus métodos.
Esto ha llevado a establecer criterios éticos explícitos. Bandura: “la cuestión moral
básica no es tanto si la conducta del hombre será controlada, sino más bien, por
quién, con qué medios y para qué fines”.

Puntos conflictivos en los métodos utilizados:

1 ¿Objetivos terapéuticos éticamente neutros?: Un conductista no puede menos


que admitir que el imperativo ético del Principio de Beneficencia sigue siendo
prioritario.

2 La ética en sus métodos y técnicas: El instrumental del conductismo es peligroso


en manos de personas inescrupulosas, que no están bajo el control de la sociedad.
Los autores conductistas propugnas que todo psicoterapeuta del comportamiento
debe buscar que la persona consienta explícitamente respecto al tratamiento que
se le vaya a dar.

3 Cuestionamiento por su uso en medios institucionales (hospitales, cárceles o


centros escolares): En dichos ámbitos donde el requisito esencial de ausencia de
coercitividad para el consentimiento previo puede estar más ausente y haber por
consiguiente más riesgo de control. La modificación de conducta puede ser, de esa
manera, un perfecto medio de represión institucional.

E) TERAPIA PSICOANALÍTICA:

PA: Técnica que facilita el desarrollo de una neurosis de transferencia regresiva y


la resolución final de esa neurosis, por medio de técnicas de interpretación.
Hartman: “Posición aséptica” Considera que el PA no tiene nada que ver con los
asuntos morales, excepto, para explicar la causa que lleva a los individuos a apoyar
determinados valores y no otros”.

Existen en el PA, al menos cuatro valores fundamentales:

1 Es “bueno” el conocimiento de la dinámica interna que se hace por introvisión


“insight”.
2 Es “positivo” no juzgar al paciente, porque el paciente es “otro” inmanipulable.

3 Es “bueno” tener en cuenta los sentimientos inconscientes, porque gracias a esto,


se puede encontrar un yo básicamente bueno y constructivo.31

4 Es “bueno” encontrar la verdad por medio de la verdad.

¿Neutralidad?

Glover: “La idea de un analista completamente neutral, es algo similar a un mito”.

Reid: “Los analistas no solo describen y explican los valores de los pacientes, sino
que comunican sus propios valores; así, como también sus expresiones verbales y
no verbales, modifican los valores de sus paciente de diversas maneras”.

Menninger: “Lo que el psicoanalista cree, aquello por lo que vive, lo que ama, lo que
considera bueno o malo, termina siendo conocido por el paciente y lo influye
enormemente.

Aunque el contenido verbal puede ser neutral y no directivo, el analista puede estar
expresando a través de su tono de voz o de otras maneras muy sutiles, como las
señaladas a continuación:

➢ El rechazo o inhabilidad del analista para ver o entender que tipo de material
es el que ha expresado el paciente.
➢ El deseo del analista por dar gratificación al paciente, satisfaciendo sus
propios deseos con las mismas necesidades que el paciente necesita
gratificar.
➢ El deseo del analista de demostrarle al paciente su inteligencia o sagacidad
para elaborar interpretaciones sutiles o complejas, es un síntoma de contra-
transferencia.
➢ Son particularmente significativos ciertos silencios, que muchas veces
contienen, rabia, venganza, aburrimiento, depresión y momentánea
identificación o refuerzo de lo que el paciente acaba de decir.
➢ La repeticiones que hace el analista de ciertas interpretaciones también
pueden estar impregnadas de mensajes extra-verbales para el paciente.
➢ Indicios de que el analista ha mostrado más atención durante un cierto tiempo
de la sesión, puede indicarle al paciente el tipo del valoración que el terapeuta
está haciendo de lo que le cuenta.
➢ La contra-transferencia puede manifestarse en las preguntas o sugerencias
para profundizar en determinado tema o aspecto de sus sentimientos.
➢ La reacción que pueda tener el paciente frente a la interpretación dada
anteriormente también puede estar determinada por la
contratransferencia.32
➢ La concepción del mundo exterior del analista teñirá su manera de ver las
actitudes, sentimientos y conductas de su paciente y por lo tanto, las
consiguientes interpretaciones.
➢ Los síntomas de contra-transferencia, también pueden manifestarse cuando
el analista tiene pensamientos recurrentes respecto al paciente fuera de las
horas de trabajo.
Resumen del equipo 5:

Ética de la relación institucional entre psicólogo y organizaciones.

A. La práctica psicológica organizacional

• Se hicieron investigaciones en las empresas y pronto encontraron que las


buenas relaciones humanas aumentaban la productividad.

• Siguiendo el modelo clínico individual, se intentó aplicar terapias a las


organizaciones con el fin de sanarlas de sus patologías.

Los ámbitos institucionales en los que actuar el psicólogo organizacional

• Educativos

• Empresariales

• Sanitarios

• Religiosos

• Políticos

• Seguridad publica

• Publicitarios

• Promoción humana

• Deportivos

• Gremiales

Puedes resumirse la intervención de un psicólogo en una industria, empresa o


institución privada o gubernamental en 3 formas fundamentales:

1. diagnosticar las dificultades o carencias en las organizaciones; tanto en el


sistema global como en sus diversos componentes. en ese sentido ya sea
como agentes externos, o internos, puede ayudar a los miembros de la
institución a hacer un auto análisis del funcionamiento del sistémico.
2. planificar posibles cambios organizacionales que favorezcan el bienestar de
los individuos y el funcionamiento global satisfactorio del sistema.
3. aplicar técnicas de ingeniería psicológica que permitan que la institución o
empresa modifique la forma como lleva a cabo sus finalidades favoreciendo
así que sistema organizacional y sus integrantes, incrementan su bienestar
global y personal.

2. Aspectos éticos específicos de la practica en la empresa

El psicólogo organizacional puede presentarse de muy diversas maneras al entrar


en la misma conducta ética. En lo que sigue, veremos algunas de sus formas más
típicas.

1. una de ellas es cuando el psicólogo organizacional está convencido de que


es su deber absoluto, no recomendar nunca a un trabajador que se cambie
de la empresa donde está trabajando. esta opinión es tan cuestionable como
decir que un profesional, si veo un delito, debe ocultarlo.
2. otra forma de seguir el juegos manipulador de algunas de estas
organizaciones sería a través de la forma en que interviene para llevar a cabo
la selección de personal, promoción, transferencia de responsabilidades o
asignación de cargos de confianza. todos estos acontecimientos no
pequeños en la vida de quienes forman parte de la empresa, de ahí que la
colaboración del psicólogo organizacional, en un sentido u otro, tiene
profunda repercusión en la vida privada y social de los trabajadores.
3. muchas de las decisiones antes mencionadas están basadas en tests,
entrevistas, y otras técnicas desarrolladas por los psicólogos
organizacionales. es evidente que el tono, la terminología o los juicios, que
haga un psicólogo a partir de determinado tests, tendrá repercusión en la
decisión que, quienes no son psicólogos, tomen con respecto a los
trabajadores.
4. un problema especial en conexión con la confidencialidad es el de acceso de
los empleados a los informes dado sobre ellos, por otras personas (que no
es el psicólogo ni psiquiatra) y cuyos documentos están en el poder del
psicólogo organizacional a fin de que este pueda llevar a cabo su función de
recomendación o de sugerencias.
5. otro asunto a tener en cuenta es la conservación de los datos sobre los
sujetos, especialmente si se trata de candidatos a ingresar a la empresa y a
los que se le dan hecho una serie de test.
6. todas las empresas tienen políticas de personal. Pero ¿cuáles son los límites
de discrepancia con la política de las instituciones? ¿es ético promover en
los trabajadores la reacción contra determinadas políticas de la empresa, que
lo único que pretende es la productividad a costa de todos los demás bienes?
el psicólogo podría encontrarse en una encrucijada padre difícil salida: por
un lado, si toma partido por los trabajadores puede ser despedido; y si toma
partido por los empresarios, se convierte en un explotador a los ojos de los
primeros.
7. La psicólogo cuando trabaja como asesor técnico en una empresa de
publicidad, se sumerge en un mundo lleno de ambigüedades y de
implicaciones éticas. En general, la publicidad sí justifica como una forma de
informar el público, de las cualidades que tiene un determinado producto. La
tarea del psicólogo como profesional del psiquismo humano, sería pues, la
de descubrir cuáles son esas necesidades y deseos escondidos en las
personas con el fin de recomendar los procedimientos más eficaces para que
la promoción publicitaria pueda ofrecer aquellos bienes y servicios que
dispone el mercado.

3.Psicólogo en centros escolares.

1. Etiquetación psicológica y estigmatización. El problema ético suscitado por los


test hechos por psicólogos escolares es particularmente delicado, ya que el uso que
podrían hacer de ellos los educadores puede repercutir fuertemente sobre el futuro
desarrollo psicoafectivo de los menores.

• Los resultados de tests deben ser informados ordinariamente solamente a quienes


están calificados para interpretarlos. Pero surge el interrogante de si un estudiante
tiene derecho a saber los resultados de los tests que a él se le han hecho. La
respuesta a este problema puede ser sencilla en el caso de que el test haya sido
hecho al adolescente, con la promesa de que, a posterior, se le daría el resultado.

2. el deber de confidencialidad. Otro punto éticamente cuestionable es el conflicto


entre mantener la confidencialidad con el adolescente y el informe a los padres, no
pueden ser accesibles a ningún tipo de personas, ni siquiera a las autoridades
educativas, sin el consentimiento del niño o adolescente. En cuanto a la
permanencia de los registros en la institución, creemos que el adolescente tiene
derecho a solicitar que se eliminen los datos confidenciales, una vez que ha pasado
el período en que la institución le presta servicios.

3. Ética y opciones psicopedagógicas. El psicólogo educacional intenta crear en los


alumnos, determinados hábitos de pensamiento, sentimiento o conducta. Sin
embargo, es necesario tener en cuenta que el psicólogo organizacional puede
dejarse utilizar por el sistema institucional educativo para inducir aquellos
comportamiento o conductas que terminan beneficiando a los directores y no a los
alumnos.

4. prácticas en instituciones militares, policiales o de espionaje. en este caso es


evidente y explícito que el psicólogo sirve a los intereses de la institución en la que
trabaja, con el fin de que sus miembros conservan el poder de combate o de control.
y aunque en condiciones normales la confidencialidad también está asegurada por
dichas organizaciones, en este caso de conflicto, el psicólogo sabe de antemano
que la autoridades respectivas harán prevalecer el interés de la institución y de su
eficacia propia, por sobre los derechos individuales de los miembros.

5. promotor y guardián de los derechos humanos. Nunca se exige tanto ser agentes
éticos activos a los psicólogos y psiquiatras en relación a los principios éticos
fundamentales y autonomía del individuo como en este campo de la practica
organizacional. A diferencia de la relación psicólogo persona individual en los
ámbitos institucionales el psicólogo no solo debe ser un profesional individualmente
desde el punto de vista ético si no también promotor y guardián de una ética en este
medio.
B) Psicología comunitaria.

Cuando tratamos las antropologías subyacentes a las escuelas psicológicas y


cuando expusimos las diversas opciones de metas u objetivos terapéuticos en
relación a la psicología salió a la luz que una de las estrategias de cambio era la
modificación de la interrelación social o del medio ambiente humano que rodea a
las personas o grupos.

PARTE DEL ROL PLURIFACETICO DEL PSICOLOGO COMUNITARIO:

• 1 Asesoramiento de pequeños grupos ante problemas de convivencia específicos


(ej. Los vecinos de un edifico de departamentos de un barrio etc.)

• 2 Desarrollo de redes sociales de soporte psicoafectivo.

• 3 Planificación de programas que permitan prevenir problemas psicoafectivos


antes que tratarlos (ej. Estrategias para enfrentar la tensión y el cansancio físico
emocional)

• 4 Desarrollo de habilidades psicológicas en agentes sociales para que puedan


ejercer roles de soporte social psicoafectivo en la comunidad y grupos.

• 5 Desarrollo de estrategias específicas para solucionar problemas particulares de


salud mental.

• 6 Desarrollo de estrategias psicológicas de educación para la convivencia social


armónica.

• 7 Desarrollo de estrategias informativas en salud física y psicológica para cambiar


hábitos de conducta.
Resumen del equipo 6:

Visión de conjunto de la psicoética.

Estaría conformado por un valor ético último, 3 principios fundamentales y 3 normas


éticas.

Los principios o columnas de este templo serían: el respeto a la autonomía, el deber


de beneficencia y el de Justicia. Los normas, basamentos o cimientos serían las de
confidencialidad, Veracidad y fidelidad. y como frontón culminante de todo este
edificio tenido por las columnas, podríamos poner el objetivo fundamental de la
relación psicólogo o psiquiatra-persona, qué es la humanización o el
perfeccionamiento de la persona humana.

Mientras que los principios hacen de columnas que sostienen el valor último de la
relación profesional-persona- que es el de la humanización-, las normas hacen de
piso que sostiene e instrumenta a los principios vinculados nulo con el resto de la
realidad. Pero consideramos que de nada sirve saber que es imperativo respetar la
autonomía si el profesional de la salud mental no interioriza esa norma como algo
intrínseco y permanente a su manera de estar en el mundo.

a. La práctica psico-psiquiátrica desde una ética Personalista.

1.Crítica de la mala práctica

1. Crítica de los absolutos. Nos hemos referido muchas veces la relatividad de


ciertas categorías y nociones manejadas por la psiquiatría-psicología. Lo
hemos visto en relaciones con las nociones de normal-anormal, saludable-
patológico, Maduro-inmaduro, etc; así como también en las concepciones
antropológicas explícitas o implícitas- que fundamentan esas opciones
epistemológicas.
2. crítica de los poderes y manipulaciones. El poder de los terapeutas se da
fundamentalmente en 3 niveles diferentes: la incertidumbre diagnóstica
convertida en calificación segura, el riesgo de estigmatización social, y el
diagnóstico con consecuencias legales. de la forma como se maneja cada
una de estas áreas de conflicto, depende los daños o beneficios que luego
experimenten los pacientes.
3. crítica de las relativización. Con esto queremos llamar la atención sobre los
riesgos de usar el ser humano como medio para otra cosa que no sea su
propio beneficio y el incremento de su autonomía. esto se ve con particular
claridad cuando se hacen algunos tipos de experimentación con el
diagnóstico, con el tratamiento o en el campo de la psicología social. el sujeto
no siempre es beneficiado en la investigación psicológica y en algunos casos,
incluso pueden ser perjudicado.
4. Crítica de las infidelidades. vemos esto en los casos de ruptura
confidencialidad, ya sea por error, mala intención opresión de poderes extra
terapéuticos. Además, se presenta un conflicto de fidelidad es cuando
intervienen terceros en la relación terapéutica. es el caso del psicólogo de
empresas., instituciones o Estados; o cuando los padres exigen del terapeuta
que revele datos confidenciales de sus hijos.
5. crítica de los perjuicios. hay ciertas prácticas psicológico-psiquiátricas que de
por sí son dañinas para los sujetos, porque suponen explotación, abandono
o negligencia. nos referimos por ejemplo: a las relaciones sexuales con los
pacientes; a su explotación económica de diversas maneras; al hecho de no
proteger y cuidar a los transeúntes sin hogar que son enfermos mentales.
6. crítica de la mala práctica. en las críticas anteriores, hemos querido señalar
las implicaciones éticas de los procedimientos psicológicos o siquiátricos tal
como son justificados teóricamente por las diversas escuelas. Ahora, no nos
queremos referir al riesgo intrínseco que puede traer aparejada una
determinada escuela o técnica de terapia, sino al factor subjetivo del
terapeuta y a su opinión ética.

2. reafirmación de una buena práctica.

Queda por último, establecer nuestro decidido apoyo ético a ciertos procedimientos
ya firmemente establecidos en la práctica profesional, o que se podrían instrumentar
sin dificultades insalvables.
1. apoyo a la decisión informada o consentimiento válido. actualmente es un
procedimiento firmemente establecido en el campo de la medicina, pero no
tanto en el ámbito de la psicología-psiquiatría. En este caso, no siempre es
posible solicitar una decisión informada, pero sí creemos que es posible
ampliar mucho más la gama de circunstancias en las que se emplea,
especialmente para personas que no tienen ningún impedimento
cognoscitivo.
2. apoyo a un entrenamiento adecuado de los psicoterapeutas, que supongo no
sólo una clarificación de los presupuestos teóricos, afectivos y éticos que
aprobó provengan de la técnica terapéutica o diagnostica por sí misma, sino
del factor subjetivo del profesional.
3. apoyo a la beneficencia cuando el deber ya hacer el bien es entendido como
búsqueda de recuperación de la autonomía en el individuo. y si esto último
no es posible, cuando consiste en una actitud de respeto por la dignidad y
por el bienestar mínimo de los enfermos mentales.
4. apoyo a la colaboración Inter escolar y a la atención personalizada.
5. apoyo a la investigación que permita encontrar los objetivos teóricos y los
campos más eficaces desde el punto de vista de la salud psicológica-
psiquiátrica, así como para el hombre pueda vivir digna y autónomamente,
en posesión de su libertad, gozando de la comunión con otros, y
construyendo una convivencia significativa y plenificante para el futuro.

Decálogo de la psico ética.

1. el paciente tiene derecho al tratamiento (más apropiada para su problema


particular, que le permita recuperar su autonomía; o en su defecto, que le
ayudan a vivir con dignidad su trastorno psíquico).
2. el paciente tiene derecho a disponer del servicio terapéutico brindado por un
individuo que sea competente (desde el punto de vista ético y técnico).
3. el paciente tiene derecho a pagar un honorario razonable (o a quien se le
ayude gratuitamente en casos de emergencia o pobreza económica).
4. el paciente tiene derecho a un terapeuta que esté únicamente interesado en
promover su mejor interés y su bienestar personal.
5. el paciente tiene derecho a ser informado (de la escuela psicológica a la que
pertenece el terapeuta, de los posibles objetivos terapéuticos, de las técnicas
que se emplearán, de los posibles riesgos y) del plan de tratamiento, para de
esa forma dar consentimiento por adelantado.
6. el paciente tiene derecho a consultar a otros terapeutas y hacer referido a
otros psicólogos si necesita.
7. el paciente tiene derecho a ser sus datos respecto al proceso terapéutico se
guardan en un registro seguro, (que proteja su privacidad).
8. el paciente tiene derecho a la privacidad y a la confidencialidad, (siempre que
no se deriven daños graves contra terceros o contra sí mismo en lo que
consiste a la vida o la integridad personal).
9. el presidente tiene derecho a exigir reparación de los daños que se le haya
podido ocasionar en la terapia (y ya conocerlos instancias donde poder
reclamarlos)
10. el paciente tiene derecho a una experiencia terapéutica que tenga un límite
determinado (y a no ser tratado sin necesidad o por tiempo indefinido).
11. el paciente tiene derecho a que no se le explote, engañe y manipule por
medio de la información que se le brinde o del poder o la sugestión que se
ofrece el terapeuta.

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