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ARGENTINA Y
LATINOAMERIC
ANA
DOSSIER
Leis, Alejandro D.
La economía medieval se basó en las relaciones comerciales que se establecieron entre Europa
y Oriente. Esas relaciones se interrumpieron en los inicios de la Edad Moderna. A mediados del
siglo XV, el imperio turco (otomano) se encontraba en plena expansión territorial. En 1453, los
turcos lograron su mayor objetivo tomaron la ciudad de Constantinopla, capital del imperio
Bizantino. De esta manera, bloquearon las rutas comerciales que unían a Europa con Oriente.
Europa se vio obligada, entonces, a buscar nuevas rutas. Entre las principales razones que
motivaron esta búsqueda podemos mencionar:
• La necesidad de comunicarse con Oriente, ya que de esa región provenían los artículos
de mayor consumo de la época: sedas, especias, piedras preciosas, entre otros;
• La necesidad de encontrar tierras donde obtener oro y plata para la acuñación de
monedas
El mar Mediterráneo perdió su lugar central en la ruta con Oriente. Entonces, la alternativa fue
lanzarse a la búsqueda de una nueva ruta navegando las aguas del océano Atlántico. Por su
posición geográfica, Portugal y España eran los países mejor ubicados para emprender la
aventura. Pero el éxito de estas empresas dependía de medios materiales que las hicieran
posibles.
LOS VIAJES ESPAÑOLES
La empresa conquistadora
Después del descubrimiento del nuevo continente y de la firma del Tratado de Tordesillas, el
gobierno español se propuso conquistar y colonizar el territorio americano. Para llevar a cabo
esta empresa, la corona española contrató a hombres de diferentes grupos sociales, Pero se
reservó el derecho de autorizar y reglamentar la conquista y la colonización.
Para emprender la conquista de América, los Reyes Católicos debieron iniciar, bajo el mandato
del papa, la evangelización de los pueblos indígenas que habitaban esos territorios. Así enviaron
representantes de diferentes órdenes religiosas para que llevaran a cabo la conversión de los
nativos a los principios de la religión católica.
Franciscanos
San Francisco de Asís fundó esta orden religiosa a principios del siglo XIII. Fue la primera en
llegar a América. Los franciscanos iniciaron su obra en La Española y desde allí se extendieron
a América del Norte y a América del Sur, cuya sede principal se estableció en Lima. Las misiones
que fundaron en Paraguay y en el Río de la Plata perduraron hasta el siglo XVIII. Sus miembros
eran educadores, misioneros, artistas, constructores, y en sus establecimientos desarrollaron
acciones culturales y de beneficencia.
Dominicos
En 1508 obtuvieron una autorización para comenzar su obra en América. Desde La Española, la
orden se extendió hacia Guatemala, Colombia, Ecuador y Perú. En 1549 sus frailes arribaron al
territorio argentino. Catequizaron a los diaguitas, en Tucumán, y fundaron otros centros de
enseñanza en el norte y en el oeste; más tarde, alcanzaron el Río de la Plata. En el siglo XVIII
se trasladaron a Corrientes y a Tierra del Fuego para iniciar la conversión al cristianismo de los
nativos.
Jesuitas
Eran miembros de la Compañía de Jesús, fundada en 1540 por Ignacio de Loyola. En 1566
fueron admitidas para misionar en América. Su objetivo, como el de las otras órdenes, era
conquistar espiritualmente a los indios. Fundaron centros misioneros en todo el territorio
americano; el más importante de ellos era la provincia jesuítica del Paraguay, establecida en
1607.Las misiones se organizaban a partir de un centro ocupado por la iglesia y rodeado por
viviendas. Políticamente, contaban con un cabildo formado por indios y funcionarios municipales
que elegían los miembros de la misión. Pero los controles religioso y político-económico los
ejercían dos sacerdotes. Los pobladores desempeñaban diferentes funciones, para las que eran
preparados: podían ser artesanos, agricultores, asistentes religiosos, entre otras. Las
producciones que sobraban del consumo local las vendían a otros poblados. Otorgaban a la
educación un papel fundamental, especialmente a la educación de los jóvenes, y enseñaban en
la misma lengua de los indígenas. En 1622 fundaron la Universidad de Córdoba. La orden jesuita
alcanzó un control casi total sobre la educación primaria, secundaria y universitaria en la
Argentina.
Los viajes de Colón fueron un acontecimiento decisivo para la historia de América y Europa, que
provocaron un impacto de gran magnitud en la sociedad europea del momento. Muchas
estructuras se conmovieron: existía un continente del que ni la ciencia ni las religiones habían
dado cuenta. Además, las "nuevas" tierras estaban pobladas por seres humanos que tenían
costumbres y formas de vida diferentes de las conocidas, y ofrecían vegetación y especies
animales que inicialmente asombraron a los europeos y luego fueron incorporadas por estos a
su vida cotidiana.
España y Portugal rivalizaron por el control de las rutas comerciales y la posesión de los
territorios explorados. Portugal había firmado con España el Tratado de Alcazovar-Toledo en
1479-80, por el cual se aseguraba los derechos de exploración y colonización desde las islas
Canarias hacia el Sur. A partir del descubrimiento de América, las discrepancias resurgieron y
Portugal consideró que, en virtud del tratado firmado con España, las tierras descubiertas por
Colón le pertenecían. España argumentó que ese acuerdo reservaba para Portugal sólo las
tierras africanas.
Sin pensarlo, Colón puso en marcha una serie de acontecimientos de grandes dimensiones. A
partir de 1495 se multiplicaron las expediciones para explorar los territorios.
•Descubrieron el océano Pacifico, al que llamaron "Mar del Sur", al atravesar el Istmo de Panamá
(Vasco Núñez de Balboa, 1513).
•En la búsqueda de un paso que conectase los dos océanos (Atlántico y Pacífico), llegaron al
Río de la Plata (Juan Díaz de Solís, 1516)
•Completaron el primer viaje alrededor del mundo al descubrir el paso interoceánico, el estrecho
de Magallanes o estrecho de Todos lo;
El primer viaje de Colón tuvo como fin encontrar una ruta alternativa hacia los países asiáticos.
Pero los viajes de exploración posteriores confirmaron la sospecha: las nuevas tierras no
formaban parte de Asia. En adelante, la búsqueda de oro y plata se convirtió en el objetivo
principal de las expediciones: comenzó la época de las conquistas. Un movimiento vasto y
acelerado de expansión condujo a la colonización de América. El Caribe fue el primer centro de
operaciones: Cristóbal Colón se instaló inicialmente en la isla La Española (Santo Domingo).
Desde las islas del Caribe se lanzó la conquista del continente.
La ocupación del territorio argentino (1536-1776)
Mientras tanto, en Buenos Aires había muchos problemas por la falta de alimentos. Los
españoles no estaban dispuestos a trabajar la tierra y los querandíes que habitaban la zona se
resistían a ser sometidos a trabajos obligatorios. En 1541, cinco años después de su fundación
y por orden del gobernador Domingo Martínez de Irala, la ciudad fue despoblada y sus habitantes
se trasladaron a Asunción.
Desde el Alto Perú, los españoles avanzaron sobre el norte del actual territorio argentino y
fundaron la ciudad de Barco I, II y III, que luego fue destruida. ,Francisco de Aguirre traslado a la
población de esta última ciudad y funda Santiago del Estero, llamada luego "madre de ciudades".
Desde allí organizaron la fundación de San Miguel de Tucumán, Córdoba, Salta y San Salvador
de Jujuy. Buscaban incorporar nuevos territorios para proteger las minas de plata de Potosí y
lograrla comunicación con el Atlántico.
Desde Asunción y bajo el adelantazgo De Juan Torres De Vera y Aragón, partió Juan de Garay
a fundar Santa Fe en 1573, y llevó a cabo la segunda fundación de Buenos Aires, en 1580. Los
conquistadores necesitaban asegurarse una salida al Atlántico.
Los conquistadores españoles se dedicaron a fundar ciudades lo más rápidamente posible para
lograr la ocupación de los territorios y la explotación de sus recursos. En los primeros tiempos se
construyeron guarniciones militares (es decir, fuertes y fortines), que aseguraban la defensa del
territorio. Conformaban además el centro económico de extensas áreas rurales, el lugar de
concentración del comercio y la sede del gobierno colonial. Las primeras ciudades se situaron
en las islas del Caribe (La Española) y en el golfo de México (Veracruz), zonas de fácil acceso
para la navegación.
De este modo, las ciudades americanas tuvieron diferentes orígenes y formas variadas.
Acto de fundación: En el momento de fundar una ciudad se realizaba una ceremonia con varios
pasos. Primero se plantaba un grueso tronco, llamado picota en el centro de un espacio elegido
como plaza, donde en el futuro se haría comparecer a los condenados por la justicia. Allí el
fundador cortaba un poco de pasto, golpeaba la tierra con su espada y preguntaba si alguien se
oponía a la fundación. Luego generalmente se celebraba una misa y se redactaba un acta ante
escribanos y testigos. Finalmente, se repartían las tierras entre los expedicionarios.
A diferencia de Europa, donde el movimiento general de la economía generó una mayor libertad
para la mano de obra (con la disminución de la servidumbre de la gleba), en América los europeos
establecieron sistemas de trabajo obligatorio. La encomienda, la mita, el yanaconazgo, el porteo
y la esclavitud fueron las formas de trabajo vigentes.
La Encomienda
La encomienda fue instalada por el sucesor de Colón, Nicolás de Ovando, en La Española (Haití),
a partir de 1508. Por este sistema, la Corona concedía al encomendero, de por vida, derechos
sobre un cierto número de indígenas:
El sistema de encomiendas se mantuvo firme hasta mediados del siglo XVI, cuando se levantaron
voces desde la Iglesia y algunos pensadores de las universidades de España en defensa de los
indígenas. En la Universidad de Salamanca surgieron críticas hacia los abusos de los
conquistadores. El catedrático y teólogo Francisco de Vitoria (1484-1556) sostuvo que los
"indios" no eran seres inferiores a los que se podía explotar sino seres libres, con los mismos
derechos que los españoles y dueños de sus tierras y bienes.
En la defensa de los indígenas se destacó el padre Bartolomé de Las Casas (1474-1566), quien
consagró su vida a conseguir un trato justo para las comunidades indígenas. Sostuvo
insistentemente que los españoles debían vivir de sus propias tareas y no del trabajo de los
hombres y las mujeres nativos de América.
La Corona española intentó limitar el poder de los encomenderos, pero esta decisión no fue
tomada únicamente por la valiosa prédica de Las Casas: las encomiendas eran difíciles de
controlar y representaban un peligro para la autoridad real. Después de haber alcanzado, tras
muchos esfuerzos, la organización del Estado y el fortalecimiento de la monarquía, los reyes no
estaban dispuestos a permitirla extensión de señoríos en América.
A partir de la conquista y la colonización realizadas por los españoles en América, estas tierras
fueron denominadas Reinos de Indias e incorporadas temporariamente como territorios del Reino
de Castilla. En adelante, quienes habitaron en la América española fueron súbditos libres de la
monarquía.
Así, durante los siglos XVI y XVII, las colonias americanas y su explotación económica
constituyeron la base del poderío español. Sin embargo, la gran distancia que separaba a España
de sus posesiones y la extensión territorial de las mismas impedía a la corona llevar a cabo una
administración eficaz.
Cada uno de los virreinatos se encontraban divididas en unidades políticas más pequeñas
Para evitar o sancionar los actos de corrupción de los funcionarios, la Corona disponía de
algunos sistemas de control: Residencias, visitas y pesquisas
Las visitas y pesquisas: Este sistema de control se empleaba para castigar el mal desempeño
de las autoridades, tanto civiles como eclesiásticas (a excepción del virrey), cuando no cumplían
correctamente con sus deberes.
Durante el siglo XVII, las riquezas de las naciones se transformaron en sinónimo de poder. La
noción más rica era lo más poderosa. Por lo tonto, uno de los objetivos de las monarquías
europeas en este siglo fue acumular la mayor cantidad de metales (oro y plata) posible y fomentar
el desarrollo de las industrias nacionales. Los reyes de la época aplicaron los principios de una
teoría económica que surgió con las monarquías: el mercantilismo.
De esta manera, cada país europeo, de acuerdo con sus características y posibilidades,
estableció leyes y reglamentos que fomentaron las manufacturas nacionales y protegieron el
comercio. Las leyes y los reglamentos se tradujeron en la aplicación de diversas medidas,
algunos de los cuales fueron:
Lo aplicación de las ideas del mercantilismo y de medidas proteccionistas generó una gran
competencia entre los estados europeos. Pero también provocó numerosas guerras por lo
posesión de las coloniales en América, Asia y África.
La economía colonial al servicio de España
Entre los siglos XVI y XVII, el poderío de las naciones europeas se basó en sus posesiones
territoriales y la explotación económica de sus tierras. España no fue la excepción. Por eso,
concentró casi todos sus esfuerzos en desarrollar y organizar las colonias como proveedoras de
materias primas, especialmente de oro y de plata, y consumidoras de mercancías producidas en
la metrópoli. Es decir que España aplicó los principios de la teoría mercantilista en su relación
con América.
La agricultura
Las características del suelo americano brindaron grandes posibilidades para el desarrollo de la
agricultura. Aunque muchos cultivos eran originarios de América, los españoles también
aportaron otros, como las frutas y el trigo. Las zonas y los principales cultivos de la América
española en el siglo XVII fueron:
La ganadería
La cría de ganado para uso comestible y la extracción de materias primas fueron actividades que
se iniciaron en América con la llegada de los españoles. Ya desde sus primeros viajes al Nuevo
Mundo, los españoles trajeron en sus barcos caballos, vacas y animales domésticos como gatos,
perros y gallinas.
La minería
La minería fue la actividad productiva más importante de esta época, pues aportaba los minerales
que España necesitaba para sostener su economía. La principal zona de extracción minera en
el siglo XVII fue Potosí que, con sus fabulosas riquezas, mantuvo a todo el imperio español.
La industria
La Corona española también aplicó los principios de la teoría mercantilista en sus colonias
americanas:
Al llegar a Santo Domingo, una flota se dirigía hacia los puertos de Jamaica, Cuba y Veracruz.
La otra continuaba hasta Portobelo (Panamá). En cada uno de los puertos americanos se
realizaban ferias, con el objetivo de comerciar los productos provenientes de España y
transportarlos hacia el interior de las colonias.
El contrabando
Los productos que traían los buques españoles resultaron insuficientes para satisfacer la
demanda. Además, las ciudades que se encontraban más alejadas de los puertos debían pagar
un precio muy elevado por los productos, debido a la gran cantidad de intermediarios que
intervenían en el proceso.
Por ejemplo: los alimentos que llegaban en buques españoles a Portobelo debían transportarse
en barco hasta El Callao. Desde allí partía la mercadería hacia Buenos Aires, adonde era
trasladada a lomo de muía. Por lo tanto, el recargo elevaba el valor de origen en forma
desproporcionada.
Así, los pobladores de Buenos Aires debían pagar mucho más que los de Portobelo por la misma
mercadería. Estas situaciones facilitaron el contrabando en América, llevado a cabo por ingleses,
franceses, holandeses y portugueses. Los centros más activos del comercio ilegal fueron el
Caribe y el Río de la Plata.
La colonización portuguesa
Las capitanías: un intento de organización Recién a partir de 1530, y en vista de que otros países
europeos, especialmente Francia, había cuesto sus ojos en estas tierras, la corona portuguesa
inició el poblamiento de Brasil. Un grupo de naves al mando de Martín Alfonso de Souza llegó
con la misión de defender la costa contra los piratas, remarcar los territorios de la corona,
establecer poblaciones y proceder a su definitiva organización.
El territorio que correspondía a Portugal fue dividido en trece franjas, denominadas capitanías.
Cada una de las capitanías fue cedida a un particular o donatario, que se comprometía a
colonizarla.
Los donatarios contaban, además, con ciertas atribuciones: administrar justicia; fundar ciudades;
designar funcionario: cobrar impuestos; repartir tierras; esclavizar indígenas.
El ciclo del azúcar, base de la economía portuguesa Los portugueses que se instalaron en
América comprendieron que su economía no podía sostenerse sólo con la explotación del palo
Brasil. Por eso, aprovechando las condiciones del suelo, introdujeron la caña de azúcar. El
trabajo en las plantaciones de caña de azúcar generó un nuevo problema económico: se
necesitaba mucha mano de obra y los indígenas de la zona no tenían la resistencia necesaria
para ese trabajo. Para solucionar este problema, en 1559 la corona portuguesa autorizó la
introducción de esclavos africanos. Gracias a la mano de obra esclava, Brasil pudo lograr una
magnífica producción de azúcar y satisfacer la creciente demanda europea del producto] De esta
manera, se conformó un "triángulo comercial" entre Portugal, África y Brasil: los comerciantes
portugueses cambiaban en África manufacturas europeas y algunos exóticos productos
orientales por esclavos, que cargaban en las bodegas de sus barcos y llevaban a Brasil; allí los
vendían y regresaban a Portugal con otro cargamento: azúcar para ser vendida en Europa.
En 1580, Felipe II, rey ele España, integró el reino de Portugal a los dominios de la Corona
española. De esta manera, los límites establecidos por el datado de Tordesillas en 1494
quedaron sin efecto. Cuando los portugueses que se encontraban en América se enteraron de
la nueva situación del reino, avanzaron hacia el oeste de la línea de Tordesillas y colonizaron
tierras que antes eran españolas. Pero, en 1640, Portugal se declaró independiente de España
y, por lo tanto, se restableció la vigencia del Tratado.
La Corona española reclamó entonces sus derechos sobre las tierras colonizadas desde 1580
por los colonos portugueses. Pero, a pesar de estos reclamos, los portugueses permanecieron
allí, donde se habían establecido.
Desde entonces, la frontera entre los territorios de las dos naciones en América fue motivo de
conflicto.