Está en la página 1de 9

JULIO CESAR, LA TRAGEDIA

-DÚMAR CRUZ: ANTONIO-DISGUSTO

-HYMAN RIVEROS. CASIO-IRA

-JERONIMO CESPEDES. BRUTO-ARREPENTIMIENTO

-MARLON GUTIERREZ: ADIVINO, MUERTE ANDANTE.

-JUAN SIERRA: JULIO CESAR

-JUAN RAMÍREZ. LUCIO-TRISTEZA

-DAVID LÓPEZ CASCA-TEMOR

ACTO 1

CESAR recorre de manera erguida e imperativa junto con MARCO ANTONIO una calle en ROMA:

CESAR: No olvidéis en la rapidez de vuestra carrera, Antonio denotar a nuestra gente que los
dioses apremian al justo y castigan al opresor. Recuerda que Cuando el pueblo solloza yo lamento
con tales.

ANTONIO: Lo tendré presente CESAR. Cuando César dice: «Haz esto», se hace.

ADIVINO: ¡CESAR!

CESAR: — ¿Quién de entre la muchedumbre me ha llamado? Oigo una voz, más vibrante que toda
la música, gritar: «¡César!» Habla; César se vuelve para oírte.

BRUTO: Es aquel adivino, te advierte de los idus de marzo.

CESAR: Traedlo ante mí quiero dar oídos y verle la cara.

CASIO: Amigo, sal de entre la muchedumbre; mira a César.

CESAR: ¿Qué me dices ahora? Habla otra vez

ADIVINO: ¡Guárdate de los idus de marzo!

CESAR: Es un visionario; dejémosle. Paso.

EN EL SENADO.
CASCA: Señor Cesar, me encuentro un tanto intrigado sobre el como repartiste las tierras a los
veteranos, osaste de quitarle a mis lugartenientes y tales no se encuentran satisfechos de tus
medidas.

LUCIO: De mi parte triste estoy, mi posición en este órgano no puede decaer, vuestros favores y
uniones no cumplen mis condiciones de plebeyo, la carrera militar de mis predilectos no avanza en
mi consideración, has engrandecido tu figura, osar de retar a los dioses.

CASIO: Palabras ciertas de Lucio, vuestra posición se torna más absoluta te has acrecentado como
un rey solo faltas de una corona.

BRUTO: Contempla las objeciones de estas personas Cesar, debes rendirle a tu nación, a tu
república; así como te estimo, aprecia a Roma favoreciendo las súplicas de tus esenciales.

CESAR: Escuchando vuestras disputas, me resulta inédito el como sobreponen su posición y


anhelan mis favores en pro de sus avaricias, mi aspiración es para la gente de Roma, yo soy su
líder, unifique esta república con mi pulso y mis luchas. Permitir sus ambiciones el pueblo romano
flaqueara.

LA ASAMBLEA SE LLENA DE REPOCHES Y GRITOS.

ANTONIO: Os suplico que marchéis vuestras palabras indignan a los Dioses.

ANTONIO Y CESAR OBSERVAN SERIOS COMO LOS DÉMAS SE VAN:

ANTONIO: Cesar, cuídate de este hombre Casio su irá la propaga a los demás.

CESAR: Solo me consterna su envidia, avaricia e interés. Como hombre es débil, debemos
reprimirlo.

ACTO 2.

SE REUNEN DE NOCHE CASIO, BRUTO, LUCIO Y CASCA. https://www.youtube.com/watch?


v=48BFwinwJyQ

BRUTO: A causa de que me llamas a estas altas horas de la noche.

CASIO: Es Cesar, no lo soportamos se cree un Dios, debemos arrancarle de las manos el poder de
Roma. Y sabemos que vos a pesar de ser cercano de él, tiene sus dudas y miedos. ¿Miento?

BRUTO: Aquello es cierto, lo he pensado y meditado, no veo un lugar donde Roma sea prospera
como Cesar de dictador.

LUCIO: Debemos hacerlo pagar, que sepa que nosotros como sus esenciales merecemos su
importancia aquel dictador debe saber el poder y sus consecuencias. De mi parte, mi poder se
viene abajo mis posesiones en Hispania y Galia decaen, mis súbditos desconfían de mí, ¿acaso es
mi culpa si aquel Cesar se la reparte a los que no son como nosotros?

CASCA: Tal cual Lucio, mis riquezas no prevalecen con este tipejo robando lo nuestro y
derrochándola en los demás, sabrá que consecuencias tendrá, siempre habrán para estos.

BRUTO: Cómo osan hacerlo pagar ya que debe hacerlo reconocer, debe hacerlo remorderse por
dentro.

CASIO: Con la muerte, aquella imparable y eterna. Su poder caerá y el pueblo sabrá que este
individuo no es un Dios. Solo aquel que obra mal y es débil. Nuestro cometer será en el Idus de
Marzo aquél que promete prosperidad y cosecha.

BRUTO: Aunque en mi se contradiga mi ética, lo hare por amor a Roma.

TODOS: ¡POR AMOR A ROMA!

LUCIO DESPUES SE VA A CASA DE CESAR Y DISCUTEN. HASTA QUE LLEGA ANTONIO

https://www.youtube.com/watch?v=heZvEmLvN04

CESAR: ¿A qué se debe tu inédita visita Marco Antonio, me dispongo a salir con Lucio y tú me
irrumpes?

LUCIO: ¿Acaso desconfías de mi persona?, no ves que salimos a recorrer los prados nada más.

ANTONIO: Señor Cesar considero poco oportuna tu salida, he reflexionado sobre lo que dijo el
adivino en los idus de marzo, mi preocupación está en vos, no puedo descansar pensando que el
líder de Roma este alrededor de tiranos y avariciosos como este, te ruego que pases la noche en
casa.

CESAR: Los dioses hacen esto para avergonzar a los cobardes. ¡Los cobardes mueren varias veces
antes de expirar! ¡El valiente nunca saborea la muerte sino una vez! ¡De todas las maravillas que
he oído, la que mayor asombro me causa es que los hombres tengan miedo! ¡Visto que la muerte
es un fin necesario, cuando haya de venir, vendrá!

LUCIO: Cesar sería un animal sin corazón si por miedo se quedara en casa. ¡Vete Antonio! Haz caso
a tu líder.
ACTO 3.

https://www.youtube.com/watch?v=EVB_leSo7lM

CESAR: — (Al ADIVINO.) ¡Ya han llegado los idus de marzo!

ADIVINO. — Sí, César; pero no han pasado aún.

Cesar se queda en la plaza, mientras los otros senadores están ya adentro. Antonio está en su
hogar.

CASCA: Oh aliados, el día de hoy, Roma será libre independiente de aquel tirano que solo la
encadena. Casio se tú el primero en lanzar tu daga sobre Cesar apenas nosotros caigamos
arrodillados ante él. No desfallezcas, te ayudaremos apenas comiences.

CASIO: ¿Tenéis listos vuestras dagas? Todos afirman. Hoy las usaremos para salvar a Roma.

LUCIO: Apenas terminemos saldremos a las calles a dar la hora buena. Tu Bruto amado de Cesar,
debes explicarle al pueblo aquello que haremos, justifícalo por tu amor, por tu pasión a la
república.

BRUTO: Sera, así como dicen…

Entra a Cesar. Casca susurra a Casio…

CASCA: Ve persíguelo y espera la señal.

Bruto se antepone en el paso de cesar, se arrodilla.

BRUTO: Cesar ayúdanos a liberar a Tribolio, aquel amigo desterrado de Lucio merece volver a su
hogar.

CESAR: ¿Oh Bruto, Enserio a ese?

Se le cruza Lucio

LUCIO: Exactamente Cesar, devuelve a mi hermano no lo has considerado del todo como te
comenté anoche. Se bondadoso con aquellos que te rodean.

CESAR: ¿Acaso no lo entiendes?, Cesar es claro en sus decires, tu hermano está desterrado por
decreto si te entre pones o dudas de mi palabra, te apartare de mi camino como a un perro
callejero. Se refiere a todos. Cesar no ofende, ni queda satisfecho sin causa.

LUCIO: ¿Acaso no hay otra voz más triste que la mía para pedirle a los dulces oídos de Cesar que
revoque el destierro?

CASCA: Cesar no beso tu mano para adularte, sino para pedir el perdón y misericordia que merece
Tribolio hermano de Lucio.
CESAR: Haría tal acto solo si fuera igual de temeroso que tú, si supiera rogar para conmover. Pero
soy como la estrella Polar, inamovible cuya firmeza no hay en el firmamento El cielo este pintado
de innumerables luces. Todas arden, todas brillan. Pero solo una es inmóvil. Así en este mundo
hay hombres hechos de carne y hueso que son aprensibles, de todos ellos solo conozco a uno, que
mantiene su rasgo seguro sin conmoverse, y ese soy yo Julio Cesar. Os lo demuestro en esto. Fui
firme al desterrar a este y sigo siéndolo manteniendo este destierro.

LUCIO: PIEDAD CESAR.

CESAR: ¡QUIETO! QUIERES LEVANTAR AL OLIMPO.

Todos ruegan y gritan a Cesar.

CESAR: ¿BRUTO TE HAS ARRODILLADO EN VANO?

CASIO: ENTONCES QUE HABLEN LAS MANOS POR TI.

PROTOCOLO CUADRO VIVO

LLEGA MARLON DICIENDO.

ESTE ES EL JUEGO DEL PODER, AQUELLOS QUE VEN COMO PENSADORES SOLO INTENTARON
COMPRENDER LAS REGLAS DEL JUEGO, SEAN FIRMES CON SUS ESCENCIALES, SI USAN LAS
RIQUEZAS DE ESTOS PARA DAR AL PUEBLO ESTOS TERMINARAN CON SUS DAGAS SOBRE USTEDES
Y COMO YO, LA MUERTE, TRAGICO FINAL DE ESTA REPUBLICA ROMANA, APARECERE SIEMPRE AL
FINAL DEL TUNEL ACOMPAÑANDO SUS AGONIAS.

CESAR: ¿Bruto tú también?

Terminan de apuñalarlo y cae….

Llega Antonio.

ANTONIO: — ¡Oh, excelso César! ¿Tan abatido yaces? ¿Todas tus glorias, conquistas, triunfos y
despojos se han reducido a esto1? ¡Adiós a ti! Desconozco, patricios, lo que intentáis; quién
todavía deberá verter su sangre, qué otro de rango elevado. ¡Si soy yo, ninguna hora mejor para
morir que la que ha visto caer a César, ni ningún instrumento la mitad tan digno cómo esas
vuestras espadas, enriquecidas ya con la sangre más noble de todo el universo! ¡Si os soy odioso,
os suplico que satisfagáis vuestro resentimiento ahora, mientras vuestras manos purpúreas
humean y exhalan el vapor de la sangre! ¡Viviera cien años, y nunca me hallaría tan dispuesto a
morir! ¡Ningún sitio me agradaría tanto como aquí, con César, ni ningún género de muerte como
recibirla de vosotros, los altos y selectos espíritus de esta edad!

BRUTO: Entenderás que lo hicimos por nuestro pueblo. Se nuestro aliado y te contare porque
actúa de tal manera a pesar de amar a Cesar

ANTONIO: No dudo de tu sabiduría. Pero primero dadme vuestra mano ensangrentada Primero
Marco Bruto te doy la mano. Después Lucio, estrechare la tuya, Ahora Casca vuestra también, y la
tuya, pero no la menos importante valiente Casio.

LUCIO: No te culpo por adular, pero serás nuestro compañero o no contaremos con tu soporte.

ANTONIO: Por eso estreche tu mano.

CASCA: Saldremos y tu tendrás derecho a hablar en su funeral sin incendiar y cultivar repulsión en
la gente de Roma.

BRUTO: Así como lo harás Antonio, lo hare yo; para darle la cara y demostrarles que viene
independencias.

CASIO: Larguémonos y difundamos el mensaje.

ANTONIO: Perdóname por ser sumiso y amable con estos carniceros, eras la ruina del hombre más
justo de los tiempos, pobre de la mano que derramo tu sangre, sobre tus heridas juro que caerá
una maldición sobre de los cuerpos, guerra y furia, la sangre y destrucción serán tan comunes que
las madres sonreirán al sostener a sus niños descuartizados en la guerra. La pena caerá sobre los
traidores Y tu espíritu de Cesar llegará de los infiernos a buscar venganza aquí, con la voz de un rey
gritará: ¡¡¡¡¡Caos!!!!!
IV ACTO

BRUTO: ROMANOS, COMPATRIOTAS. Cesar si hay alguien amigo Cesar, yo le digo que Bruto no
amaba a Cesar menos que él. Si ese amigo pregunta Porque Bruto haría tal. Esta es mi respuesta:
No amaba menos a Cesar, pero amaba más a Roma.

CASCA: ¿Quieren estar con Cesar, siendo o esclavos? O quieren ver morir a Cesar siendo libres.

CASIO: La muerte de tal esta allá en el capitolio, su gloria no fue allá donde se supone que es digno
su ambición e insensatez nos hubiera llevado a la ruina a todos, nosotros si somos hombres
honrados.

BRUTO: Puesto que Cesar me amaba yo lo lloro, tuvo buena fortuna, y me alegro por ello, fue
valiente, y lo honro. PERO fue ambicioso y por eso lo mate. Hay lágrimas, alegría, honor, pero
también muerte por su ambición. Si somos hombres honrados

LUCIO: ¿Hay aquí alguien tan vil que quiera ser un esclavo? ¿Si hay que hable, pues lo ofendí Hay
aquí alguien tan tosco que o quiera ser romano? Si hay hable, pues lo ofendí. Somos hombres
honrados.

LLEGA ANTONIO CON EL CADAVER DE CESAR.

BRUTO: Con esto me retiro dejando que Antonio hable. Pero sepan, así como mate que mate a
quien más amaba por el bien de Roma, ¡tengo en mi poder el mismo puñal cuando mi patria
requiera de mi Muerte!

ANTONIO: He venido enterrar a Cesar no ha elogiarlo, los malos actos viven más así sea en Cesar.
Bruto dice que Cesar era ambicioso, grave falta que debió pagar. Aquí con permiso pues ellos son
hombres honrados vengo a hablar, era amigo mío fiel y justo, pero ellos dicen que era ambicioso
ellos son hombres honrados; trajo muchos rescates y lleno las arcas públicas, Cesar pareció
ambicioso entonces. Cuando los pobres lloraban, Cesar lloraba la ambición debió ser dura para él,
pero ellos dicen que era ambicioso y ellos son hombres honrados. ¿Todos vieron en Lupercales
que le ofrecí la corona real 3 veces y la rechazo 3 veces, esto era ambición? Pero ellos dicen que
era ambicioso y ellos son hombres honrados. No hablo para desmentir, solo para decir lo que se.
¿Todos lo amaban antes con razón Que razón ahora os impide llorar por él?

ANTONIO: Y ahora lloran gentiles almas, lloran al convertir el manto manchado de nuestro cesar,
miren esto aquí está el mismo desgarrado como ven por los traidores. ¿¿¿¿¿¿¿¿¿Aquí había un
Cesar cuando habrá otro IGUALLLLLL?

CUANDO LOS CONSPIRADORES HUYEN AUGUSTO Y ANTONIO DECLARAN LA GUERRA CIVIL,


DENTRO DE LA CUAL BRUTO Y SUS ALIADOS FALLECEN.
Lucio: ¡Éste es el más noble de todos los romanos! ¡Todos los conspiradores obramos por envidia
al gran César! ¡Sólo él, al unirse a ellos, fue guiado por un motivo generoso y en interés del bien
público! Su vida fue pura, y los elementos que la constituían se combinaron de tal modo, que la
naturaleza, irguiéndose, puede decir al mundo entero: «¡Éste era un hombre!»

MITIGADA LA REBELION, AUGUSTO Y ANTONIO EMPIEZAN A DISTANCIARSE POR EL CONTROL


DEL NUEVO IMPERIO ROMANO. EN TAL CONFLICTO ANTONIO SE SUICIDA AL VER LA FATIDICA
DERROTA LLEGAR.

Antonio: Nadie como ti Cesar, caeré pues a tu lado.

FIN

También podría gustarte