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Ensayo sobre Temor y

temblor
Andrés Lucas Jaramillo Grado
en Filosofía
Análisis de los principales conceptos de la obra Temor
y temblor

Antes de empezar, hay que tener en cuenta que Kierkegaard es un autor cuyas obras
están intrínsecamente relacionadas a su vida1. Por este motivo, es necesario aportar algunos
datos de esta para así comprender mejor los temas desarrollados en Temor y temblor2. Søren
Aabye Kierkegaard nació en 1813 en Copenhague y murió en 1855 en la misma ciudad. Tuvo
ocho hermanos, de los cuales siete murieron muy jóvenes. Su padre y su hermano mayor eran
pastores protestantes. Kierkegaard creía que su familia estaba maldita porque un día su padre
maldijo a Dios3. Esto le generó mucha ansiedad. También hay que mencionar que
Kierkegaard realizo sus estudios en Filosofía y en Teología. Estuvo comprometido con
Regina Olsen, pero decidió romper su relación con ella porque pensaba que Dios no lo
llamaba al matrimonio. Murió muy joven a causa de una enfermedad.
La obra titulada Temor y temblor4 fue escrita en 1843 y es uno de los principales
trabajos del filósofo danés. En ella se trata el problema de la fe aludiendo a la historia del
sacrificio que Dios le ordena a Abraham. El libro presenta la siguiente estructura: prólogo-
proemio-panegírico de Abraham-problemata-epílogo.
En el prólogo5, el autor afirma que todo aquel que se dedique a la filosofía debe dudar
de todo para tratar de ir más allá de lo que previamente han llegado otros pensadores. Elogia a
Descartes porque este nunca dudó de la fe. También añade que cada uno tiene la fe, pero no se
queda en ella, sino que sigue adelante. Después de esto, declara que él no busca que su
filosofía sea sistemática6. En el proemio, Kierkegaard hace referencia a que un hombre esta
releyendo la historia de Abraham y que este individuo anhelaba poder haber hecho el viaje de
tres días hasta el monte Moriah, pues eso era lo que más le fascinaba de la historia. También
el autor indica que este hombre no deseaba ir más allá de la fe. A continuación, se narra hasta
cuatro versiones diferentes de la historia del patriarca, destacando un aspecto u otro de ella y
aludiendo al final a lo que tiene que hacer una madre para destetar a su hijo. En el panegírico
de Abraham, antes de ensalzar al patriarca, hace una distinción entre los héroes y los poetas.

1
En la obra que se analizará a continuación, Kierkegaard realiza continuas referencias a su relación con Regina
Olsen. Aparte de que él escribió Temor y temblor para explicarle a Regina porque no podía casarse con ella.
2
En este trabajo se utiliza la traducción de Kierkegaard, S. [1843]. Temor y temblor (trad. Simón Merchán, V.).
Alianza, Madrid, 2016.
3
Hay que mencionar que la figura del padre del autor también cobra una gran importancia en la obra, esto se
puede constatar en la continua referencia que se hace a la historia de Abraham e Isaac. Es muy probable que el
autor haya asociado a su padre con Abraham. Además, en el proemio se indica que un hombre está releyendo la
historia de Abraham después de varios años (Ibid., p. 70). Se puede inferir que Kierkegaard hace una referencia a
su padre.
4
A propósito del título del libro, hay que decir que el filósofo danés lo tomó de Filipenses 2, 12: “Por eso,
queridos míos, ustedes que siempre me han obedecido, trabajen por su salvación con temor y temblor, no
solamente cuando estoy, entre ustedes, sino mucho más ahora que estoy ausente”. El subrayado es mío.
5
Hay que añadir que el prólogo empieza con una frase que hace referencia a la vez en la que el hijo de Tarquinio
el soberbio le pidió a su padre por medio de un mensajero que le indicase que debía hacer con la nueva ciudad
que había conquistado. Como el padre no confiaba en el mensajero, no dijo ninguna palabra, solamente se limitó
a derribar unas amapolas con su bastón. Cuando el mensajero le contó lo que había hecho su padre, el hijo
comprendió que debía asesinar a todos los hombres importantes de la ciudad. De esto se puede inferir que la obra
está “cifrada” y que contiene un mensaje que Regina Olsen debe descubrir, ya que se sabe que Kierkegaard
escribió la obra para ella.
6
Es importante añadir que al final del prólogo firma con el pseudónimo de Johannes de Silentio. Kierkegaard
solía usar pseudónimos en sus obras, se podría establecer un símil entre esta acción y las “máscaras” que
representaban los personajes de Nietzsche para este.
En la sección denominada "Problemata", el autor trata tres problemas que intentará
resolver: a) la suspensión teleológica de lo ético, b) la existencia de un deber absoluto para con
Dios y c) la justificación ética de Abraham por haber guardado silencio antes Eleazar, Sara e
Isaac. Por último, en el epílogo, el autor vuelve a tratar a la fe como pasión para finalmente
aseverar que la verdadera fe es la que le lleva a uno a lo más alto.
A continuación, se pasará a mencionar los conceptos y figuras que aparecen en el libro
y después se explicarán los más importantes. En el proemio se emplea la imagen de la madre
que tiene que destetar a su hijo, esta imagen puede significar que Kierkegaard tiene que dejar
de darle su amor a Regina, tal y como la madre aparta su seno del niño. En las
consideraciones preliminares de la sección "Problemata", se menciona por primera vez el
concepto de Anfaegtelse, el cual se puede interpretar como la angustia o ansiedad que uno
siente frente a lo absurdo, a lo religioso.
Un concepto que aparece también en el primer problema es el de insomnio. El autor
afirma que una persona que tuviera insomnio iría a matar a su hijo después de haber oído el
sermón en el que se aludía a la historia de Abraham. Esto se debe a que dicha persona no
habría comprendido el sermón y no lo habría comprendido porque los pastores expresan
erróneamente el significado de la historia. El texto bíblico —según Kierkegaard— no hace
referencia a que el patriarca fue capaz de incluso ofrecer en sacrificio a Dios lo que más
amaba en esta vida (el hijo que él le había dado), sino a que Abraham creyó y se resignó a
sacrificar a Isaac, fue capaz de subordinar lo que le decía la ética (amarás a tu hijo más que a
ti mismo) para hacer la voluntad de Dios. No solo se resignó, sino que también creyó en el
absurdo, y por virtud del absurdo fue que recuperó a Isaac. Más adelante, el autor asocia a
Abraham con la noción del caballero de la fe7, un hombre que ha creído en sí mismo y en
Dios y ha depositado toda su confianza en el absurdo. No obstante, también aparece la figura
del caballero de la resignación infinita, que es la de la persona que —como el caballero de la
fe— renuncia a todo, pero que no es capaz de confiar en el absurdo.
Otra noción importante es la de fe como pasión8; la fe sigue a la razón, la fe empieza
donde acaba esta. También hay que mencionar a la distinción que realiza el autor entre los
Particulares y lo general. Con el término ‘Particulares’ se hace referencia al bien de cada
individuo, mientras que con el término ‘general’ se hace referencia al bien de la comunidad, al
bien de todos. Lo general se identificaría con lo ético. Finalmente, hay que mencionar que en
el tercer problema, Kierkegaard realiza una distinción entre la estética y la ética. La primera
se identificaría más con la confianza en el absurdo, mientras que la segunda estaría más
relacionada con lo racional.

Ya se ha dicho que el concepto de caballero de la fe es opuesto al de caballero de la


resignación, ahora hay que agregar que el estadio del caballero de la resignación es previo al de
la fe9. Hay que añadir que el autor también utiliza el término "héroe trágico" para referirse al
caballero de la resignación y pone el ejemplo del rey Agamenón, quien tuvo que sacrificar a su
hija Ifigenia para que los dioses le dejaran marchar a la guerra de Troya. Cabe destacar que el
autor concibe a ambos estadios como movimientos. Además, también asevera que el caballero
de la fe está solo en su camino, nadie lo puede comprender, porque es difícil que alguien dé ese
“salto”. Hay que agregar que Kierkegaard entiende la fe como algo privado, que solamente
concierne a la relación que tiene uno con Dios. De ahí que esté en contra de las
manifestaciones religiosas externas. A propósito de esto, se sabe que en el funeral del filósofo,
su sobrino protestó porque lo estaban enterrando con los ritos propios de la iglesia danesa, aún
cuando su tío había dejado claro en su testamento que se oponía a esto.

Ahora se va a tratar acerca de la Anfaegtelse. Se la ha identificado previamente con un


estado de angustia frente a lo absurdo. Ahora hay que decir que esa angustia es una angustia de
no tener certeza si se está obrando bien o no. Eso es lo que se siente frente al absurdo (el
absurdo es, por así decirlo, la paradoja que encierra la religión: que la fe en Dios le lleve a uno a
acertar en esta vida). Esa ansiedad también es como un horror que se siente acerca de lo
religioso, de lo incomprensible por la razón (esto se entiende mejor si se tiene presente que el
máximo grado de angustia se da ante lo religioso; por eso Abraham es digno de admiración,
porque creyó a pesar de que todo apuntaba a que no podría recuperar a Isaac).

También hay que profundizar más en el hecho de que la fe suponga una suspensión de lo
ético. Esto quiere decir que los individuos (Particulares) que tienen fe pueden ponerse más allá
de lo general, lo cual viene representado por la ética. La fe está más allá de lo ético. Es por este
motivo que Abraham no peca cuando está a punto de sacrificar a Isaac. La fe, por así decirlo,
está más allá del bien y del mal.

Finalmente, hay que explicar en qué consiste que la fe sea una pasión. Esto quiere decir
que la fe es algo que, en cierto sentido, se padece, puesto que muchas veces la persona que
tiene fe tiene que soportar todas las contrariedades y miserias que le da la vida. Otra
característica de la fe es que es parecida a un sentimiento (pasión en el sentido clásico), ya que
es algo que está más allá de la razón y que esta no puede comprender, la fe es algo irracional.
La fe también es algo que mueve al ser humano a obrar.

En conclusión, la obra del filósofo danés trata el tema de la fe relacionándola con la


confianza en el absurdo, que es lo que le permite a Abraham recuperar a Isaac en el último
momento. Una noción que se destaca mucho en la obra es la de la fe como pasión, es decir, la
fe como algo que mueve. También hay que agregar que el creyente puede ponerse por encima
de lo ético justamente porque obra movido por el amor a sí mismo y a Dios. Es por eso que
Abraham no peca de asesinato cuando se dispone a sacrificar a su hijo, puesto que tiene fe, y
lo que intentó hacer en realidad era un sacrificio a Dios. No obstante, uno se puede preguntar
si esto que se ha afirmado acerca de la fe no es una consecuencia del debate de si las cosas
son buenas porque Dios lo ha querido así o si son buenas por sí mismas. Si lo primero fuera
cierto, entonces uno con toda seguridad y sin ningún temor de pecar podría ponerse encima de
lo ético para cumplir la voluntad de Dios. Pero si resulta que lo verdadero es lo segundo,
entonces se concluye en que aún no se ha entendido bien el mensaje de la historia de Abraham
e Isaac. Dicho esto, todavía se puede investigar más en torno a la relación de la fe con el
mundo finito y el infinito, así como de la relación de esta con el movimiento del infinito.

7
Otro ejemplo de caballero de la fe al que Kierkegaard alude en la obra es la Virgen María.
8
Ibid., p. 155.
9
Ibid., p. 123.

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