Modelo ecológico:

El modelo teórico que permite comprender mejor el fenómeno de la violencia en la

pareja es el “modelo ecológico”. Este considera simultáneamente los distintos
contextos en que se desarrolla una persona, entendiendo así que el fenómeno de la
violencia es multicausal, es decir que no tiene una sola causa sino que es consecuencia
de la interrelación de varios aspectos. Por eso, la violencia en la pareja no se debe solo
a un único aspecto, por ejemplo una “sociedad patriarcal”, sino al juego entre varios
de esos aspectos: una sociedad patriarcal + las instituciones donde la persona se
desarrolla + los vínculos familiares + la biografía personal y la dimensión biológica de la
persona.
El modelo ecológico distingue entonces 4 contextos que debemos tener en cuenta al
analizar este fenómeno. Cada uno de estos contextos puede funcionar como un factor
de riesgo o de protección ante la violencia. Distingamos primero los 4 contextos:
1) Macrosistema: se refiere a los modos de organización social, económica, cultural y
al conjunto de valores y creencias que están internalizados en la sociedad.
2) Exosistema: está formado por las instituciones que actúan como mediatizadoras de
los valores culturales (la escuela, el barrio, el club, los lugares de trabajo, etc).
3) Microsistema: es el nivel de relaciones más cercanas del individuo (la red familiar,
los amigos, etc).
4) Individual: es la dimensión biológica, psicológica y la historia personal del sujeto.

Decíamos que cada contexto puede funcionar como un factor de riesgo o de

protección de la violencia. Por ejemplo, si tomamos el macrosistema y consideramos
que la organización social es patriarcal, estaría funcionando como un factor de riesgo,
pero la misma persona que está expuesta a ese macrosistema puede vivir en una
microsistema donde desde la familia siempre le hayan inculcado valores como la
igualdad, la justicia, el respeto hacia el otro, y así funcionar como un factor de
protección. La misma persona puede concurrir a un club (exosistema) donde se
fomente la competencia a través de la agresividad y ser un factor de riesgo. Pero en el
contexto individual esa persona puede tener un temperamento tranquilo, saber
manejar sus emociones y tener una historia personal que funcionen como factor de
protección.
Por eso la violencia en la pareja va a ser consecuencia de cómo estos 4 contextos
interactúen entre sí.