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EVALUACIÓN SEGÚN LOS AGENTES

EVALUACIÓN SEGÚN LOS AGENTES

Uno de los puntos importantes dentro de la evaluación es quién la realiza. Hasta hace
poco se entendía que la evaluación siempre provenía de una instancia externa al
evaluado.
Solamente en los últimos años, de acuerdo con los nuevos modelos pedagógicos, se
han incluido nuevos agentes en el proceso.
Conceptos básicos y funciones de la evaluación educativa
Clarificación de conceptos:
Es importante, antes de abordar cualquier contenido de evaluación, distinguir
algunos conceptos fundamentales, tales como evaluación calificación y medida.
El concepto de evaluación es el más amplio de los tres, aunque no se identifica con
ellos. Se puede decir que es una actividad inherente a toda actividad humana
intencional, por lo que debe ser sistemática, y que su objetivo es determinar el valor de
algo (Popham, 1990).
Ámbitos de la evaluación
Tradicionalmente, la evaluación se ha venido aplicando casi con exclusividad al
rendimiento de los alumnos, a los contenidos referidos a conceptos, hechos, principios,
etc., adquiridos por ellos en los procesos de enseñanza. A partir de los años sesenta, la
evaluación se ha extendido a otros ámbitos educativos: actitudes, destrezas, programas
educativos, materiales curriculares didácticos, la práctica docente, los centros escolares,
el sistema educativo en su conjunto y la propia evaluación.
Evaluación/promoción
La decisión de promoción es la que, con más frecuencia, debe enfrentar el profesor,
desde las promociones formales (curso a curso) hasta las promociones diarias (de una
tarea a otra, cuando se considera que se ha alcanzado un nivel de conocimientos
suficiente).
Evaluación interna:
Se divide en:

 Heteroevaluación: La heteroevaluación es aquella que se realiza en un contexto


determinado con un objetivo y finalidad preestablecida, ésta es ejecutada por una o
varias personas sobra otra u otras respecto a su trabajo, actuación, rendimiento, etc. La
particularidad de esta evaluación corresponde a que los sujetos evaluadores están en un
nivel jerárquico superior que el evaluado, sin olvidar que dependerá del contexto para
determinar así los roles que tomará cada parte. Un ejemplo concreto de lo mencionado
anteriormente es cuando un profesor evalúa a sus estudiantes; ya sea de manera
formativa, diagnóstica, sumativa, etc. También es importante mencionar que los
estudiantes al evaluar a un profesor también están llevando a cabo una
heteroevaluación.
 Coevaluación: Se denomina coevaluación a la metodología evaluativa
realizada entre pares o entre grupos de pares que asisten a un mismo grupo
de trabajo o estudio. Surge del cuestionamiento acerca de porqué siempre debe ser el
docente, maestro o profesor quien evalúe si el estudiante ha alcanzado o no las
expectativas de manera satisfactoria.

Sin embargo, debemos diferenciar coevaluación de heteroevaluación. La


primera, que es la palabra que nos interesa en este artículo, es precisamente la
que se realiza de manera conjunta, entre todos los integrantes de un grupo, ya
sea de estudio o de trabajo. Por ejemplo, al finalizar un proyecto que se ha
realizado fuera de la escuela, todos los alumnos-participantes de este evalúan,
desde su propia perspectiva, los logros alcanzados, si se cumplieron los
objetivos, qué falencias hubo, qué se debió o deberá mejorar, entre otras cosas.

Autoevaluación: Se produce cuando un sujeto evalúa sus propias actuaciones.


Es un tipo de evaluación que toda persona realiza de forma permanente a lo
largo de su vida. Por ejemplo, frecuentemente tomamos decisiones en función de
la valoración positiva o negativa de un trabajo realizado, de la manera como
establecemos nuestras relaciones, etc.

Mediante la autoevaluación los alumnos pueden reflexionar y tomar conciencia


acerca de sus propios aprendizajes y de los factores que en ellos intervienen. En
la autoevaluación se contrasta el nivel de aprendizaje con los logros esperados
en los diferentes criterios señalados en el currículo, detectando los avances y
dificultades y tomando acciones para corregirlas. Esto genera que el alumno
aprenda a valorar su desempeño con responsabilidad.

EVALUACION EXTERNA:
Se divide en:

 Inicial.

La evaluación inicial es la que se realiza antes de empezar el proceso de enseñanza-


aprendizaje, con el propósito de verificar el nivel de preparación de los alumnos para
enfrentarse a los objetivos que se espera que logren.

La verdadera evaluación exige el conocimiento en detalle del alumno, protagonista


del proceso, con el propósito de adecuar la actividad del docente (métodos, técnicas,
motivación), el diseño pedagógico (objetivos, actividades, sistema de enseñanza), el
nivel de exigencia e incluso el proyecto educativo a cada persona como consecuencia de
su individualidad.

El proceso de Enseñanza Aprendizaje requiere de la evaluación diagnóstica para la


realización de pronósticos que permitan una actuación preventiva y que faciliten los
juicios de valor de referencia personalizada. La actuación preventiva está ligada a los
pronósticos sobre la actuación futura de los alumnos.

 Procesual.

La evaluación procesual es aquella que consiste en la valoración continua del


aprendizaje del alumnado y de la enseñanza del profesor, mediante la obtención
sistemática de datos, análisis de estos y toma de decisiones oportuna mientras tiene
lugar el propio proceso.
El plazo de tiempo en el que se realizará estará marcado por los objetivos que hayamos
señalado para esta evaluación. Puede referirse al tiempo que dura el desarrollo de una
unidad didáctica (una semana, quince días, 6/8 horas...), a un periodo trimestral de
aprendizajes, anual, bianual (un ciclo completo de dos años)... Estará en función del tipo
de aprendizajes que se evalúen (las actitudes es preciso valorarlas en plazos amplios; lo
contrario es imposible y, por lo tanto, absolutamente superficial) y, además, hay que
tener en cuenta que, desde esta perspectiva, se superpondrán unas y otras evaluaciones
procesuales: la de objetivos que implican asunción de actitudes a lo largo de un curso,
con la de objetivos que suponen la adquisición de conceptos o del dominio de
procedimientos, durante quince días o un mes. Ambas son evaluaciones procesuales,
cuyos resultados permanentes se van anotando en los registros preparados para ello.

La evaluación procesual es la netamente formativa, pues al favorecer la toma continua


de datos, permite la adopción de decisiones “sobre la marcha”, que es lo que más
interesa al docente para no dilatar en el tiempo la resolución de las dificultades
presentadas por sus alumnos. Aparece un “error” que no usará para sancionar ni para
calificar negativamente, sino que será útil para detectar el problema de aprendizaje que
ha puesto de manifiesto; se resuelve mediante la adecuación de unas determinadas
actividades o las explicaciones oportunas y se continúa el proceso de aprendizaje.

 final

Al final del programa tiene lugar una evaluación final para determinar los niveles de
logro obtenidos por cada alumno en relación con los objetivos específicos establecidos
para cada grupo de asignaturas y el Proyecto Personal.

Los profesores plantean las tareas adecuadas y aplican rigurosamente los criterios de
evaluación prescritos para cada grupo de asignaturas. Entre los métodos de evaluación
de los que pueden servirse los profesores se incluyen:

 trabajos orales.
 trabajos escritos.
 trabajos prácticos.

Referencia
Fundación Instituto de Ciencias del Nombre. (24 de Mayo de 2020). LA
EVALUACIÓN EDUCATIVA: CONCEPTOS,. Obtenido de
uv: https://www.uv.mx/personal/jomartinez/files/2011/08/LA_EVALUACION_EDUC
ATIVA.pdf

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