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CASAS DE GRACIA.

OBJETIVOS:
Que los estudiantes puedan:
 Tener una revelación de Cristo como la
única Roca y cimiento de la iglesia.
 Conocer las columnas fundamentales del
edificio espiritual llamado iglesia y lo que
dice la Biblia, de la vida después de la
muerte.
 Decidir el destino que quieren para
ellos y sus familias después de morir y
permitir que la obra terminada de la
cruz se haga realidad en sus vidas.
Para que se conviertan en la justicia de
Dios en Cristo a través de la fe.
ROMANOS 5:1.
TEMA: CIMIENTO Y COLUMNAS DEL
CRISTIANISMO.
La fe cristiana tiene un solo fundamento el
cual es Cristo, la piedra principal que
desecharon los edificadores, la religión
ofrece por lo general una serie de normas o
dictámenes religiosos que deben ser
seguidos al pie de la letra para obtener los
beneficios basados en el desempeño de los
creyentes y no en la obra terminada de la
cruz.

Este curso busca exponer las bases en


las que debe estar apoyada nuestra fe.
¿Cuál es el fundamento de la fe cristiana?
1 de Corintios 3:9-10

9 “Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y


vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
10 conforme a la gracia de Dios que me ha sido
dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento,
y otro edifica encima; pero cada uno miré cómo
sobreedifica”

En la Biblia, la vida del creyente se


compara con la construcción de un
edificio. Recordamos que para cualquier
construcción lo primero es colocar un buen
cimiento.
En la vida espiritual debe haber un orden
para la correcta edificación de nuestras vidas
espirituales.
Por esto muchos cristianos que llevan tiempo
en la iglesia se derrumban de repente o
empiezan a inclinarse hacia los lados,
porque el fundamento no puede aguantar.
La mayoría quizás puede saber cuál es el
cimiento, pero no tienen claro cuáles son
las columnas que deben soportar su
crecimiento.
¿CUÁL DEBE SER EL CIMIENTO?
1 Corintios 3:11 “Porque nadie puede poner otro
fundamento que el que está puesto, el cual es
Jesucristo”
El edificio llamado cristianismo o fe
cristiana solo puede tener un cimiento o
fundamento y es la Roca inconmovible de
los siglos: Cristo Jesús.
Mateo 16:13-18.
“Viniendo Jesús a la región de Cesárea de Filipo,
pregunto a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los
hombres que es el Hijo del Hombre? Ellos dijeron:
Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros,
Jeremías, o alguno de los profetas. Él les dijo: Y
vosotros, ¿Quién decís que soy yo? Respondiendo
Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios
viviente. Entonces le respondió Jesús:
Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque
no te lo revelo carne ni sangre, sino mi Padre que
está en los cielos. Y yo también te digo, que tú
eres Pedro, y sobre esta roca edificare mi iglesia;
y las puertas del Hades no prevalecerán contra
ella”
Hay una mala interpretación de este
pasaje que ha perdurado por siglos y
compone la doctrina inamovible de la
Iglesia Católica, la cual sostiene que el
apóstol Pedro es el fundamento en donde se
apoya la Iglesia.
Las traducciones del idioma griego nos dan
más luz de este acontecimiento:
Cuando Jesús dice: “… Y yo también te digo, que
tú eres Pedro (griego Petros = pedazo de
roca, un poco más grande que una
piedra de molino), y sobre esta roca (griego
petra = una masa de roca o peña maciza)
edificaré mi iglesia…”
En este pasaje, Jesús confirma el
sobrenombre que le había puesto a Simón
(Petros), pero la Roca (Petra) en donde se
edificaría la Iglesia es la declaración que
Pedro, inspirado por Dios Padre, hace
sobre Jesús, viendo en él al Cristo, al
Ungido de Dios.
CRISTO ES LA ROCA, EL CIMIENTO, EL
FUNDAMENTO
Esto cubre a todos los verdaderos
creyentes que se unirán con Jesús en el aire
junto con todos los santos del A.T. y del
N.T.; los que durmieron en Cristo hasta el
día del rapto.
Salmos 18:2. “Jehová, roca mía y castillo mío, y mi
libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré;
mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto
refugio”
Cristo es la Roca de todas las
generaciones, y el que edifica sobre este
fundamento puede decir como David en el
Salmo 62:6 “Él es mi roca y mi salvación. Es mi
refugio, no resbalaré”.
El camino del cristiano necesita de un
sólido cimiento porque no estamos
exentos de momentos difíciles que van a
golpear nuestra vida, tarde o temprano.
Jesús dijo: “… es imposible que no vengan
sufrimientos…” Es una afirmación dura de
asimilar, pero no podemos escapar
todavía a nuestra condición de hombres que
estamos rodeados de debilidades.
Por tal razón, el estar cimentados
correctamente en nuestro interior y tener
revelación de las columnas fundamentales
de la fe cristiana, hará que los momentos
difíciles pasen y nosotros quedemos
enteros, sin que suframos pérdidas, pese
al amargo momento.
¿Cuáles deben ser las columnas o
doctrinas fundamentales según la Biblia?
Hebreos 6:1-2 “Por tanto, dejando ya los
rudimentos de la doctrina de Cristo, vamos
adelante a la perfección; no echando otra vez el
fundamento del arrepentimiento de obras
muertas, de la fe en Dios, de la doctrina de
bautismos, de la imposición de manos, de la
resurrección de los muertos y del juicio eterno.”

Estas seis doctrinas fundamentales son


indispensables tanto en la vida de cada
persona como en la comunidad de la
iglesia mundial:
1 Arrepentimiento de obras muertas.
2 Fe en Dios
3 Doctrina de bautismos
4 Imposición de manos

5 Resurrección de los muertos

6 Juicio eterno
A partir de ahora y en las siguientes clases,
usted conocerá las doctrinas
fundamentales que sostendrán todo lo que
logre edificar como discípulo de Cristo de aquí
en adelante.
Doctrina fundamental:
Resurrección y juicio eterno.
Primeramente, tenemos que anotar que para
que haya resurrección, primero tiene que
haber muerte.
Desde el principio de los tiempos lo
hombres han lidiado con la interrogante de
donde irán después de morir.
La Biblia habla de dos lugares o destinos
diferentes:
 Hay un lugar de tormento, también
llamado en la Biblia como el Seol, el
Hades o el infierno.
 Allá irán los hombres y mujeres impíos
que rechazan a Cristo.
 Hay un lugar de descanso, también
mencionado en la Biblia como seno de
Abraham, paraíso o el cielo.
 A él irán los justos o verdaderos
discípulos de Cristo.
Es importante recalcar que el destino de los
justos y de los impíos es diferente.
¿QUÉ ES LA MUERTE?
La palabra muerte en su definición más
común significa separación.
La muerte también es un estado o
condición:
 Muerte física: Cuando cesa la vida en el
cuerpo no pudiendo permanecer más el
alma y el espíritu en este mundo de
materia.
 Muerte espiritual: Es la muerte con la que
cada ser humano nace, por causa del
pecado de Adán. Que es algo que fue
imputado al hombre.
 Es un estado de separación de Dios.
pero la Biblia también se refiere a la
muerte como un espíritu que al final del
tiempo se personificará. Apocalipsis 6:8.
“Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo
montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades le
seguía…”
La muerte que describe Juan, es un ministro
de Satanás que trabaja produciendo este
estado de separación física y espiritual.
Hades Es un dios de la mitología griega,
usado por Juan de Patmos para dar identidad
a un ministro espiritual diabólico,
encargado del lugar a donde van los
muertos sin redención.
Los que leían este escrito entendían a la
perfección, ya que las iglesias a las cuales fue
dirigido Apocalipsis eran de raíces
griegas.
También es asociado a un lugar en donde
esperan, en una especie de cárcel, hasta el
juicio final.
La muerte tiene poder sobre el cuerpo de
los hombres para producir la muerte
física, mientras que el Hades tiene poder
sobre los espíritus de los hombres para
encarcelarlos.
Por eso Juan los vio venir en ese orden,
primero la muerte separando y luego el
Hades confinando.
De otra parte, Jesús dijo que sus
verdaderos discípulos no conocerán este
personaje:
Juan 8:51 “De cierto, de cierto os digo, que el que
guarda mi palabra, nunca verá muerte”
No habla de la muerte física sino de este
ángel de las tinieblas.
El cristiano al morir nunca estará bajo el
dominio de estos ángeles, sino que, por los
ángeles de Dios, serán los que te escolten
hacia el cielo de Dios cuando partamos de
este mundo fisico.
DOS DESTINOS PARA EL HOMBRE:

Redimidos Condenados
Vida eterna Fuego eterno
Verán a Dios Verán a la muerte
Recibirán recompensa Recibirán sentencia
Tribunal de Cristo Juicio final
¿Dónde va el espíritu al morir su
cuerpo?
La escritura nos permite establecer dos
principios definitivos:
 El espíritu del hombre va hacia Dios,
pero no al juicio inmediatamente, este
tendrá lugar después de la resurrección
de los muertos.
Los espíritus impíos no pueden tener
acceso permanente a la presencia de
Dios, van a una especie de prisión previa al
destino final, que es el lago de fuego. esta
cárcel transitoria se llama infierno.
UN VISTAZO AL OTRO MUNDO.
La Biblia nos deja ver algunos detalles de lo
que pasa más allá de la muerte.
Isaías 14:9-10 “El Seol abajo se espantó de ti;
despertó muertos que en tu venida saliesen a
recibirte, hizo levantar de sus sillas a todos los
príncipes de la tierra, a todos los reyes de las
naciones. Todos ellos darán voces, y te dirán: ¿Tú
también te debilitaste como nosotros, y llegaste a ser
como nosotros?”
Detalles de este pasaje:
 Estas personas no saben lo que sucede en la
Tierra.
 Conservan la misma personalidad.
 Reconocen a otras personas.
 Se pueden comunicar entre ellos.
 Están consiente de la condición en la que
se encuentran.
Lucas 16:22-24 “Aconteció que murió el
mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de
Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y
en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio
de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno.
Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten
misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la
punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua;
porque estoy atormentado en esta llama”

Esta historia que cuenta Jesús, muestra el


destino de las almas después de morir
antes de que se consumara la salvación del
hombre a través de Cristo.
Había un lugar para descanso y consuelo de
los que morían en fe llamado Seno de
Abraham.
Y otro que los judíos llamaban Seol, el
lugar donde iban los que no eran justos,
hoy lo conocemos como infierno. Hoy los
redimidos van al cielo de Dios y las almas
impías al mismo lugar que se conoce
históricamente, al Seol o infierno.
Después que Cristo resucitó, todo cambió, no
solo en este mundo, sino en el más allá.
La próxima clase veremos lo que paso con
el espíritu de Jesús después de expirar, pues
Cristo fue quien venció a la muerte y abrió
el camino para hacer posible nuestra
futura resurrección.
Entonces, después que una persona sin
Cristo muere, su espíritu es llevado por la
muerte al lugar de tormento, en el que va a
permanecer, hasta el día de su
resurrección y posterior juicio.
De otra parte, cuando un verdadero
discípulo de Cristo parte de este mundo,
la Biblia no dice que muere, sino que
duerme, su espíritu es llevado por ángeles
de Dios al tercer cielo, donde va a
permanecer, hasta el día de la segunda
venida de Cristo, cuando vendrán
juntamente con Él.
Algo muy importante, existe un orden,
primero resurrección y después juicio,
jamás se presentará el hombre
incompleto ante Dios, siempre será
completo, espíritu, alma y cuerpo.
Recuerde, el alma y el espíritu están en
alguno de los dos lugares de espera, hasta
que el cuerpo sea resucitado.
Todos rendiremos cuentas a Dios.
Hechos 17:30-31 “Pero Dios, habiendo pasado por
alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda
a todos los hombres en todo lugar, que se
arrepientan; por cuanto ha establecido un día en el
cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón
a quien designó, dando fe a todos con haberle
levantado de los muertos” (énfasis agregado).

EL JUICIO ES PARA EL MUNDO, NO PARA


LOS QUE SE HAYAN ARREPENTIDO.

A cada ser humano se le manda que se


arrepienta porque todos tendremos que dar
cuentas a Dios de lo que hicimos en vida.
Esto sucederá en dos eventos
separados:
uno para los verdaderos cristianos (el
tribunal de Cristo) y otro para los impíos (el
juicio final), esto lo veremos en la siguiente
clase, cuando hablemos de la segunda
resurrección.
EL TRIBUNAL DE CRISTO.
Romanos 14:10-12 “Pero tú, ¿por qué juzgas a tu
hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu
hermano? Porque todos compareceremos ante el
tribunal de Cristo. Porque escrito está: Vivo yo, dice el
Señor, que ante mí se doblará toda rodilla, Y toda
lengua confesará a Dios. De manera que cada uno de
nosotros dará a Dios cuenta de sí”

Nosotros, los cristianos, debemos estar


listos para este evento, pero no para juicio ni
condenación, será para retribuir a cada uno
por las obras hechas en fe a favor del Reino
de los cielos, la honra dada a Dios y el
testimonio de vida mostrado ante el
mundo.
7 Corintios 5:10 “Porque es necesario que todos
nosotros comparezcamos ante el tribunal de
Cristo, para que cada uno reciba según lo que
haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea
bueno o sea malo” (énfasis agregado). Porque el
que sabe hacer lo bueno y no lo hace le es
tomado por pecado.
Pablo aquí nos habla a los cristianos, por
eso se incluye y dice: “nosotros”.
Tendremos que dar cuenta de lo que
hicimos en nuestro cuerpo en la tierra y es
a esto a lo que vamos a contestar.

ACTIVACIÓN
El maestro guiara a todos a hacer una
oración de entrega total de sus vidas a
Dios, confesando con su boca que Jesús es
Dios. Que reconozcan que, sobre esa
Roca, sobre su declaración, Dios empieza
ahora mismo a edificar su vida cristiana.
Echar fuera todo espíritu inmundo de
temor a la muerte, todo espíritu de
muerte prematura e impartir la vida de
Dios en todos ellos.
Desafiarlos a invitar a una persona a que se
inscriba a este seminario (que lo hagan
hablando con su líder).

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