Está en la página 1de 4

Artículo 40

Afecciones posteriores al COVID-19

Recuperado de:
https://espanol.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/long-term-effects/index.html#:~:text=S
%C3%ADntomas%20nuevos%20o%20en%20curso&text=Dificultad%20para%20respirar
%20o%20falta,veces%20denominada%20%22neblina%20mental%22)

Visión general
Aunque la mayoría de las personas con COVID-19 mejora al cabo de unas semanas de
haber estado enfermas, algunas personas experimentan afecciones posteriores al COVID-
19.
Las afecciones posteriores al COVID-19 son una amplia gama de problemas de salud
nuevos, recurrentes o en curso que las personas pueden experimentar cuatro semanas o
más después de haberse infectado por primera vez por el virus que causa el COVID-19.
Incluso las personas que no tuvieron síntomas de COVID-19 en los días o semanas
posteriores a haberse infectado pueden experimentar afecciones posteriores al COVID-19.
Estas afecciones pueden presentarse como diferentes tipos y combinaciones de
problemas de salud por diferentes periodos.

Las afecciones posteriores al COVID-19 también pueden conocerse como COVID-19


persistente, COVID-19 de larga duración, COVID-19 post agudo, efectos a largo plazo del
COVID-19 o COVID-19 crónico.
Los expertos de todo el mundo están trabajando para obtener más información acerca de
los efectos de salud a corto y largo plazo asociados al COVID-19, quiénes los padecen y por
qué.

Tipos de afecciones posteriores al COVID-19


Síntomas nuevos o en curso
Algunas personas experimentan una gama de síntomas nuevos o permanentes que
pueden durar semanas o meses después de haber sido infectadas por el virus que causa el
COVID-19. A diferencia de algunos de los otros tipos de afecciones posteriores al COVID-
19 que solo suelen ocurrir en personas que se enfermaron gravemente, estos síntomas
pueden manifestarse en cualquier persona que haya tenido COVID-19, incluso si la
enfermedad fue leve, o si no tuvieron síntomas iniciales. Las personas comúnmente
notifican combinaciones de los siguientes síntomas:

 Dificultad para respirar o falta de aire


 Cansancio o fatiga
 Síntomas que empeoran luego de realizar actividades físicas o mentales (también
conocidos como malestar general post esfuerzo)
 Dificultad para pensar o concentrarse (a veces denominada "neblina mental")
 Tos
 Dolor en el pecho o en el estómago
 Dolor de cabeza
 Corazón que late rápido o muy fuerte (conocido como palpitaciones)
 Dolor muscular o en las articulaciones
 Sensación de hormigueo
 Diarrea
 Problemas para dormir
 Fiebre
 Mareos (vértigo) al ponerse de pie
 Sarpullido
 Cambios en el estado de ánimo
 Alteraciones del gusto o el olfato
 Cambios en los ciclos del periodo menstrual

Efectos multiorgánicos del COVID-19


Algunas personas que se enfermaron gravemente a causa del COVID-19 experimentan
efectos multiorgánicos o afecciones autoinmunes durante más tiempo, con síntomas que
duran semanas o meses después de haber tenido COVID-19.
Los efectos multiorgánicos pueden afectar a muchos, si no a todos, los sistemas del
cuerpo, entre ellos las funciones del corazón, los pulmones, los riñones, la piel y el
cerebro.
Las afecciones autoinmunitarias ocurren cuando su sistema inmunitario ataca las células
sanas de su organismo por error, y causa una inflamación dolorosa o daños en los tejidos
de las partes del cuerpo afectadas.

Aunque es poco frecuente, algunas personas —mayormente niños— sufren el síndrome


inflamatorio multisistémico (MIS) mientras cursan una infección por COVID-19 o
inmediatamente después. El MIS es una afección en la que diferentes partes del cuerpo
pueden inflamarse. El SIM puede causar afecciones posteriores al COVID-19 si la persona
sigue teniendo efectos multiorgánicos u otros síntomas.

Efectos de los casos de enfermedad u hospitalización por COVID-19


Las hospitalizaciones y enfermedades graves relacionadas con los pulmones, incluido el
COVID-19, pueden causar efectos en la salud como debilidad grave y agotamiento durante
el periodo de recuperación.

Los efectos de la hospitalización también pueden incluir el síndrome post-cuidados


intensivos (PICS, por sus siglas en inglés), que hace referencia a los efectos sobre la salud
que aparecen cuando una persona se encuentra en una unidad de cuidados intensivos
(UCI) y pueden prolongarse incluso después del alta.
Estos efectos pueden incluir debilidad grave, problemas para razonar y discernir, y
trastorno de estrés postraumático (TEPT). El TEPT implica reacciones a largo plazo a un
evento muy estresante.

Algunos de los síntomas que pueden aparecer después de la hospitalización son similares
a ciertos síntomas que las personas con síntomas inicialmente leves o sin síntomas
pueden experimentar muchas semanas después de haberse infectado por COVID-19.
Probablemente resulte difícil determinar si se deben a los efectos de la hospitalización, a
los efectos a largo plazo del virus o a una combinación de ambos. Estas afecciones
también podrían complicarse por otros efectos relacionados con la pandemia de COVID-
19, incluidos los efectos en la salud mental por el aislamiento, los impactos negativos por
la situación económica y la falta de acceso a los servicios de salud para controlar las
afecciones subyacentes. Estos factores han afectado tanto a las personas que tuvieron
COVID-19 como a las que no se infectaron.

Niños y adolescentes.
Las personas de cualquier edad que han tenido COVID-19 pueden presentar afecciones
posteriores al COVID-19. Aunque las afecciones posteriores al COVID-19 parecen ser
menos frecuentes en niños y adolescentes que en adultos, sí pueden manifestarse efectos
a largo plazo después del COVID-19 en niños y adolescentes.
Existen estudios que han notificado síntomas a largo plazo en niños con COVID-19 tanto
grave como moderado, incluidos niños que presentaban previamente el síndrome
inflamatorio multisistémico en niños. Similares a los síntomas identificados en adultos, los
síntomas más frecuentes notificados han sido cansancio o fatiga, dolor de cabeza,
problemas para dormir (insomnio), problemas para concentrarse, dolor en los músculos y
articulaciones, y tos.
A los niños más pequeños puede resultarles difícil describir los problemas que están
experimentando; la información disponible sobre las afecciones posteriores al COVID-19
en niños y adolescentes es limitada. Es posible que se manifiesten otros síntomas en
grupos de edad más jóvenes.

Si su hijo tiene alguna afección posterior al COVID-19 que afecta su capacidad de asistir a
la escuela, completar sus tareas escolares o realizar sus actividades habituales, podría ser
útil hablar con la escuela de su hijo sobre posibles adaptaciones, como tiempo adicional
en los exámenes, periodos de descanso programados durante el día, programas de clases
modificados, etc. Los administradores de escuelas, consejeros escolares y personal de
enfermería escolar pueden trabajar con las familias y los profesionales de atención médica
para ofrecer opciones alternativas de enseñanza a los niños con afecciones posteriores al
COVID-19, en especial a aquellos que experimentan dificultades para pensar, concentrarse
o realizar actividades físicas.
También podría solicitar adaptaciones similares para actividades fuera de la escuela, como
programas de cuidados infantiles, tutorías, actividades deportivas, actividades de los
scouts, entre otras.

También podría gustarte