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ANÁLSIS FÍLMICO GOOD BYE LENIN

FICHA TÉCNICA
Director Wolfgang Becker

Productores Stefan Arndt/ Wolfgang Becker/ Berndt Lichtenberg

Fotografía Martin Kukula

Dirección musical
Yann Tiersen/ Claire Pichet
Reparto principal Daniel Bruhl/ Katrin Sass

Premios Premio del cine alemán (actor, director, película, montaje, banda
sonora y guion)
Premio del cine europeo (actor, actriz, película, audiencia, director)

País Alemania

Crítica media 9,6/10

CONEXTO HISTÓRICO
Alemania, 1945. El régimen del Tercer Reich es abatido por los aliados, y los territorios que
antes pertenecían a dicho imperio, fueron liberados, y posteriormente influenciados, ya fuera
por Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña, o, la Unión Soviética. El 7 de octubre de 1949,
se instauró la República Democrática Alemana, o, Alemania Oriental, bajo la influencia y
doctrina marxista-leninista. No obstante, al ser Berlín la capital del territorio, dicha ciudad
también fue dividida bipolarmente mediante el famoso “Muro de Berlín”.
A diferencia del sistema liberalista y capitalista desarrollado por Estados Unidos en Alemania
Occidental, en la zona oriental, prevalecía la economía planificada, basada en la fusión entre
empresas estatales y grandes compañías, total control Estatal sobre el comercio, el desarrollo
de la gran industria y la agricultura, sin dar cavidad al sector de servicios. A pesar de no darse
una mayor diferencia socioeconómica, los sueldos no eran homogéneos respecto a la
profesión de un individuo; los productos de primera necesidad escaseaban en gran mayoría
y eran controlados uniformemente por el estado. Aparte, el libre pensamiento y de prensa era
radicalmente censurado.
Debido a esto, gran descontento, en especial por parte de los jóvenes, ansiosos por cruzar la
frontera hasta la “exótica” Alemania del este, se produjo entre 1988 y 1989, logrando la caída
del Muro de Berlín, y la reunificación de Alemania, consagrando la anexión de Alemania
Oriental al modernismo de la zona occidental.

ANÁLISIS FÍLMICO Y ARGUMENTATIVO


Good Bye Lenin, es una película que nos demuestra toda esta travesía social y económica
desde la perspectiva de los Kerner, una familia de Alemania Oriental, ya dividida entre los
dos polos de la guerra fría (capitalista y marxista-leninista), debido al abandono por parte del
padre de familia, al este huir a Alemania Occidental en 1976.
Christiane Kerner, madre cabeza de familia, sufre un colapso mental y entra en estado de
mutismo por casi un año. El día que recupera la conciencia, inicia su labor activista en pro
del desarrollo de ideologías comunistas en Alemania Oriental, consagrándose, así como una
de las mas proliferadas lideres de este movimiento contra capitalista.
No obstante, a pesar de sus doctrinas, su hijo Alexander es partícipe de las revueltas de
principios de 1989 a favor de la caída del muro de Berlín. En una de las manifestaciones a
las que él asistió, es encarcelado y abatido brutalmente por las fuerzas militares rusas y
alemana-socialistas. Christiane observa esto con terror y se desmaya en plena vía. La líder
socialista entra en estado de coma por 8 meses, los 8 meses más cruciales en la historia
moderna alemana al darse la caída del muro de Berlín y el adoctrinamiento de Alemania
Oriental al sistema capitalista. Por ende, se da la histeria colectiva de la sociedad alemana
oriental de adquirir productos y servicios americanos: coca cola, Burger King, el futbol y la
cerveza no se quedan atrás.
De esta forma, ya cuando Christiane despierta de su coma, todas las ideologías por las que
batalló estaban ahora bajo el dominio de El Tío Sam. Así, debido a las advertencias del doctor
en materias de su debilidad física y emocional, sus hijos Alexander y Arianne, le dan a su
madre una nueva perspectiva del mundo desde la pequeña habitación de su hogar: Alemania
oriental (que ya no existía), era la nueva superpotencia mundial, superando científicamente
cualquier otro país. El socialismo marxista-leninista todavía vivía en Alemania.
Así, mientras Alemania (y el mundo en general) se occidentalizaban, Alex fingía varios
noticieros falsos debido a la muy real (tan real que nadie sabía) inmigración occidental a
Alemania oriental debido a las “terribles condiciones de la doctrina americana”. En la casa
de los Kerner, todos los frascos y paquetes fueron renvalsados en contendores de marcas
rusas, checoslovacas o húngaras; las vestimentas llamativas e indiscretas volvieron a ser
trapajo; la televisión fue la nueva adicción de los alemanes; y la señal a cable se convirtió en
un dios todo poderoso que transmitía mensajes y noticieros cuando le convenía. Y más
importante, el mundo nunca vio la caída del modelo marxista-leninista.
De este modo, el filme retrata la radical transformación de Alemania, la histeria colectiva de
consumismo que el recién llagado capitalismo género, y el olvido de los lideres socialistas
que alguna vez lucharon por una patria de carácter marxista. Así, se muestra la gran brecha
cultural, económica y política que existía dentro de una misma nación, y que no solamente
separaba etnias, ideologías, políticas, economías y relaciones internacionales, sino también,
familias e individuos.

ANÁLSIS ESTRUCTURAL
Estructuralmente, la película logra balanceadamente mostrar la idea central: tratar de recrear
lo que hubiera sido el “final digno” de un sistema político, de la forma que critica el fin de
un fanatismo socialista, en contra posición del comienzo de uno nuevo de carácter
consumista. Esto, mediante una recreación, tanto escenográfica como ficticia (pues Alex
recrea este entorno) de una Alemania Oriental extremadamente socialista, desigual y atrasada
social, económica y científicamente: pasillos sin productos, viviendas de bajo coste,
educación radical, opresión en los medios de comunicación, y vestimenta del periodo
correspondiente (1980’s).
Narrativamente, el filme logra no encasillarse en el tipo de filmes que desgarradoramente
demuestran las persecuciones de estados socialistas. En vez de esto, plantea la dulzura de un
hijo hacia su madre para que esta no vea el derrumbe de su lucha social de forma cómica y
satírica.
La mayoría de las escenas son presentadas en plano medio, exceptuando la más icónica del
filme: la vez que Christiane sale a hurtadillas de su casa y descubre toda la gran mentira que
sus hijos han montado en su pequeño departamento: el socialismo en Alemania ha caído,
Alemania Occidental ha triunfado. Es por esta razón que, confundida en medio de la calle,
se enfoca un primer primerísimo plano en la cara de la protagonista cuando contempla la
estatua de Lenin, siendo transportada por los aires por un helicóptero occidental, en símbolo
de la derrota marxista leninista. De ahí el nombre del largometraje.
Adiós Lenin, adiós socialismo alemán, adiós fanatismo marxista-leninista… Hola
liberalismo, hola capitalismo, hola consumismo. Hola “progresismo” …

ANÁLSIS ACTUACIONES Y PERSONAJES PRINCIPALES


Christiane es una fanática socialista, quien, debido a su apego por sus doctrinas y al miedo
que sentía por vivir en un mundo diferente al que conocía, decide no seguir a su esposo a
cruzar la frontera para llegar a Alemania Occidental.
A pesar de ser una madre amorosa y comprensiva, probablemente lo mejor hubiera sido huir
al occidente con su marido.
Independientemente de esto, lo que no es considerable es el hecho de que haya mentido a sus
hijos acerca de la desaparición de su padre (“un amorío con una mujer de occidente”), y que
haya escondido las muchas cartas que Robert escribió a sus hijos por casi 3 años. Sus
acciones, aunque no sean las mas adecuadas, tienen una justificación de temor al régimen
que ella misma apoyaba, pues al ser una de las miembros más reconocidas, su vida hubiera
corrido peligro al fugarse al mundo que ella misma rechazaba. Las vías de sus hijos también
hubieran sido amenazadas.
Por otra parte, Alex, su hijo, presenta un debate de valores al recrear un mundo socialista,
una mentira, y profesarla, a su madre. Varios no comparten el hecho de que le haya mentido;
no obstante, en la condición médica en la que se encontraba Christiane, probablemente sus
esfuerzos hayan valido la pena. De la misma forma, a pesar de ser una película de carácter
critico social, el amor y la belleza se reflejan en los duros esfuerzos del protagonista por
recrear el mundo y el fin, que él hubiera querido que tuviera.
VALORACIÓN FINAL
Por todo lo anterior (sumado a la originalidad de presentar una denuncia social, su entretenida
banda sonora, y fotografía en tonos amarillos y verdes); Good Bye Lenin es una película que
todo ser humano debería ver para comprender desde los ojos de una familia común y
corriente, con la que se es posible entablar conexión, uno de los sucesos sociopolíticos e
históricos más relevantes de la Alemania actual: la reunificación Alemana y su impacto
cultural.

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