Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Esta película nos resalta en la vida el gran valor que tiene el poder contribuir en la
vida de los demás cuando estos nos necesiten, ya que en el mundo a diario se
presentan muchas injusticias y por eso es que entre comillas como tal muchos
dicen y como en ciertos momentos de la película algunos personajes dicen que “el
mundo es un asco”, pero de eso se trata, debemos de cambiar ese concepto
porque está en nosotros mismos cambiar el mundo por medio de buenas acciones
que conlleven a grandes logros en la vida de otras personas.
Debemos ser capaces de asumir que existen personas que poseen problemas aún
mucho más grandes que los de nosotros mismos y es allí donde nuestra presencia
se debe notar y al querer ayudar y hacerles ver que la vida se trata de eso, de
contribuir a todo el que lo necesite, todos somos hijos de Dios y debemos ser
seres humanos con voluntad de servir de forma desinteresada. De esta manera,
hacer un favor a alguien que lo necesite no nos resta nada al contrario nos hace
mejores personas y no solo eso, al mismo tiempo le damos un gran ejemplo a
esas personas y estas al ver tal situación lo más probable es que sigan con la
cadena porque más que un acto de agradecimiento es un acto de amor, un acto
de generosidad, un acto donde dejamos de pensar en nuestro bien común y
entendemos que en la vida estamos es de paso y que en todo lo que podamos
ayudar debemos hacerlo.
La película nos refleja gran parte de lo que es la vida, donde observamos que
algunas personas actúan con vocación de servir a los demás, buscando que la
ayuda no pare y siga sin detenerse. El mundo para ser cambiado requiere de
mucho, pero por allí empieza por las buenas acciones y como podemos esclarecer
la idea del niño generó gran impacto en todo el transcurrir de la película porque
este nunca se cansó de buscar ayudar a toda persona a la que este se proponía.
Sin duda alguna la historia comprendida nos hace reflexionar en gran medida de
que nuestra estancia en este mundo debe ser fructífera y de alguna forma
debemos ser seres humanos capaces de aportar algo significativo a la sociedad y
entre esas cosas está el contribuir a todo aquel que nos necesite y que tal ayuda o
favor como se le quiera llamar debe seguir una secuencia porque lo más bonito es
ver como no solo ayudamos sino observar que esa persona que ayudamos se
interesa en ayudar alguien más y que esa cadena no tenga final, es así como el
mundo empieza a tener un cambio positivo, donde solo haya espacio para
servirnos mutuamente con los demás.