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Para hacer esta comparación, tomé unos sitios comerciales en los que he realizado algunas compras y para los no comerciales tomé
sitios educativos que buscan no vender algún producto. Pensé en las redes sociales, pero en el caso de todas ellas, tienen una opción
para realizar actos comerciales.
Podemos distinguir en los sitios de internet comerciales una gran diferencia de imágenes muy notoria. Creo que se debe a que buscan
mostrar lo que se vende en su sitio. Los clientes, me incluyo entre los compradores, necesitamos ver el producto. Sinceramente
cuando la imagen no está disponible, no tengo gran interés en el producto. Una vez que tenemos un producto identificado, es
importante contar con varias fotos de este, además de varias especificaciones escritas para conocer un poco más sobre el producto.
Como se trata de un sitio que busca vender, es importante crear una cuenta para poder vaciar nuestros datos personales y que el sitio
pueda realizar cobros en caso de compra. También nos hacen firmar o aceptar un acuerdo de privacidad de nuestros datos. Otro caso
importante es que muchos tienen una conexión segura con los bancos para poder cobrar los productos que queremos adquirir.
Estos sitios comerciales, permiten las opiniones de los usuarios que han adquirido dicho producto y que expresan su conformidad o su
inconformidad con el producto adquirido. Aquí, debo confesar que las opiniones pasan por una aprobación previa por parte del sitio, en
varias ocasiones no me han permitido publicar mis opiniones porque “no cumplo con los requisitos mínimos exigidos por el sitio para
poder publicar mi opinión” y coinciden con que no son buenas opiniones porque no estoy satisfecha con el producto y quiero alertar a
otros de sus inconvenientes, incluso, nunca he utilizado lenguaje soez pero no me han permitido publicar dos inconformidades con dos
productos.
Los productos comerciales confiables poseen un contrato donde explican a qué se comprometen y a qué no. Personalmente, sigo
comprando en aquellos lugares que me han demostrado que el sitio realmente se preocupa por el cliente y no solo por vender a como
dé lugar.
Los sitios no comerciales que escogí son sitios que proporcionan información al usuario. Pensé en incluir periódicos, pero al final,
muchos de ellos también resultan ser sitios comerciales porque buscan vender una suscripción a su sitio. En algunos casos, muchos
sitios de internet tienen algún tipo de patrocinador que pone su publicidad dentro del sitio, pero no fue el caso del sitio de internet de la
UNAM ni del BLOG de la mediateca de FCPyS. En estos sitios encontramos todo tipo de información la cual en su mayoría son textos.
También nos conectan con más sitios para poder tener más información del tema que buscamos.