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En un vehículo refrigerado por agua, la carcasa del calefactor contiene una matriz (un
pequeño radiador) que toma el agua caliente del motor por medio de un manguito. El aire
entrante aumenta su temperatura al pasar a través del radiador calentado por agua. También hay
un ventilador eléctrico, que se puede encender para soplar el aire a través del sistema cuando el
coche está detenido, o cuando se necesita ventilación adicional (y el flujo que viene de fuera no
es suficiente). El ventilador se puede ajustar para funcionar a diferentes velocidades de acuerdo
a la necesidad.
d) Refrigerante: Se ocupa de sacar el calor del motor y piezas del sistema, transportando
el calor generado por el motor de combustion interna al radiador de la calefaccion, para
asi lograr enviar el calor al interior del avitaculo por medio de un flujo de aire que pasara
a traves del mismo.
Dentro del sistema de calefacción de Toyota corolla modelo 2004 tenemos todos los
componentes mencionados anteriormente, los cuales podemos identificar en los dos gráficos
siguientes los cuales fueron tomados del manual de mantenimiento del vehículo.
Figura 2. Componentes que conforman los ductos de ventilacion
Figura 3. Componentes que conforman el sistema de calefacción
En muchos coches modernos, el flujo de aire caliente suele regularse mediante un sistema
electrónico que va asociado al de aire frío (aire acondicionado o climatizador), lo que supone
un sistema complejo en el que llega a ser imposible, en ocasiones, hacer que el aire exterior
circule por el habitáculo sin conectar todo el conjunto.
Sin embargo, en esta entrega, vamos a desgranar los dos sistemas más básicos y habituales en
los que se basan los más recientes, mediante los cuales, desde hace décadas, hasta en los
automóviles más sencillos se podía gestionar la temperatura del aire que llegaba hasta todos sus
ocupantes: el que calentaba el flujo del aire sin más, y el que lo hacía mediante agua a alta
temperatura.
Además, el tener el poder de controlar ese flujo permite también dirigirlo hacia donde más
interese, por una cuestión de confort, pero también, de seguridad, ya que la aireación del
habitáculo es esencial, por ejemplo, para eliminar el vaho de las lunas y no perder visibilidad.
De manera general, como ves en el gráfico, el flujo aerodinámico se canaliza por un conducto
ubicado en la parte delantera del coche, colocado de modo tal que cuando éste se esté moviendo,
el punto de entrada esté en una zona de alta presión y el aire sea forzado a entrar. De ahí, va
hacia el calefactor, que lo calienta de ser necesario. Tradicionalmente, un punto de entrada
habitual era las rejilla de la parte superior del capó.
A continuación, una vez calentado o sin calentar, el aire pasa al interior del coche a través de
los conductos de ventilación frontales, superiores e inferiores. Las rejillas de ventilación o
toberas que intervienen se seleccionan mediante palancas, ruedas o botones y, finalmente, tanto
el conductor como los otros viajeros seleccionan manualmente la dirección final que ha de
tomar el flujo.
El calefactor
En un vehículo refrigerado por agua, la carcasa del calefactor contiene una matriz (un pequeño
radiador) que toma el agua caliente del motor por medio de un manguito. El aire entrante
aumenta su temperatura al pasar a través del radiador calentado por agua. También hay un
ventilador eléctrico, que se puede encender para soplar el aire a través del sistema cuando el
coche está detenido, o cuando se necesita ventilación adicional (y el flujo que viene de fuera no
es suficiente). El ventilador se puede ajustar para funcionar a diferentes velocidades de acuerdo
a la necesidad.
En un calefactor por mezcla de aire, la matriz se encuentra a una temperatura constante. El aire
caliente de ésta se mezcla con aire frío mientras las válvulas de control de temperatura se abren
y cierran.
La temperatura a la que el aire se calienta es controlada tanto por una válvula de agua como por
un sistema de mezcla de aire. La válvula de agua tipo se encuentra principalmente en coches
antiguos. El control de temperatura en el tablero acciona una tapa, la cual permite que mayor o
menor cantidad de agua caliente pase a través del radiador.
En cualquiera de los sistemas puede haber pasos adicionales, que permitan admitir un
suministro separado de aire frío hacia los conductos de ventilación delanteros, incluso cuando
el resto del sistema está suministrando aire caliente.
Las solapas de control de aire que se encuentra dentro del 'mueble' de la calefacción. Pueden
ser movidas mecánicamente por mandos deslizantes ubicados en el panel de control, los cuales
están vinculados por cables a esas solapas o trampillas.
Visto en esta entrega de Mecánica básica las líneas generales sobre cómo funciona la
calefacción de un coche, hay que señalar que en vehículos con motores refrigerados por aire, el
aire para la calefacción puede ser calentado canalizándolo alrededor de las aletas en el colector
caliente de escape.
Figura 9. Motor de calefacción por aire
El aire caliente se mezcla a la temperatura adecuada por un sistema de mezcla de aire, el cual
incluye una válvula sensible al calor que mantiene constante la temperatura y en un nivel
confortable para los ocupantes. De ser necesario, el aire puede ser calentado aún más por un
intercambiador de calor encendido eléctricamente por medio de la quema de combustible.
El intercambiador de calor también permite que el calefactor funcione con el motor apagado, a
diferencia del calentado por agua. El resto del sistema y la forma en la que se distribuye el calor
es como la de cualquier otro coche, en realidad.
Mecánicos. Son los más antiguos. Funcionan gracias a un pequeño radiador montado detrás del
tablero de instrumentos que se conecta mediante dos manguitos al sistema de refrigeración del
motor. En muchos casos incorpora un grifo que abre o cierra el paso del agua hacia este radiador
interior.
Otras dos piezas fundamentales del circuito son las trampillas que canalizan el aire por el
interior del calefactor con la ayuda del ventilador, que fuerza la circulación del aire. Para pedir
calor, manualmente se abre el grifo (si lo incorpora) o la trampilla de canalización y se dirige
el aire hacia la salida deseada. Si deseamos más sensación de calor, ponemos en marcha el
ventilador eléctrico que está situado delante del radiador a la velocidad deseada.
Automáticos. Son los más modernos y también son muy variados. La manera de obtener el
calor y su funcionamiento (salvo excepciones como los vehículos eléctricos) es semejante al de
los sistemas antiguos, pero con una diferencia fundamental: todas las acciones se realizan de
manera automática seleccionando (en modo auto) tan solo la temperatura que deseamos. En
estas condiciones, un módulo electrónico controlado por microprocesador verifica las
condiciones climáticas del interior y del exterior del vehículo y en función de ellas adapta los
elementos para conseguir los valores de confort que hemos solicitado.
Calefactores eléctricos. Un cambio sustancial que se ha producido en los sistemas de
calefacción es que muchos de estos utilizan calefactores eléctricos para obtener calor
rápidamente sin tener que esperar a que el motor se caliente.