7.

0 FLUJO REPTANTE

7.1 Introducción

La teoría del flujo de bajo número de Reynolds, también denominado flujo rastrero o flujo de Stokes, tiene
aplicaciones en numerosas tecnologías y fenómenos naturales que involucran escalas de pequeña longitud ( L) y
velocidad (U ) y / o fluidos extremadamente viscosos. Los ejemplos incluyen flujo en medios porosos y en la
microcirculación (L y U pequeñas), reología de la suspensión (L pequeña, dictada por el tamaño de partícula),
el comportamiento de las dispersiones coloidales (L pequeña) y el procesamiento de polímeros fundidos (μ
grande). El enfoque de este capítulo es el flujo progresivo de los fluidos newtonianos.

El capítulo comienza con una descripción general de algunas de las propiedades distintivas del flujo progresivo,
que resultan de la virtual ausencia de efectos inerciales. Luego se discuten varios enfoques para la solución de
problemas de flujo progresivo, comenzando con ejemplos de flujos unidireccionales y casi unidireccionales. Se
introduce la aplicación de la función de flujo a problemas bidimensionales, incluida una derivación de la ley de
Stokes para el arrastre en una esfera. A continuación, se analizan las soluciones singulares (o de fuerza puntual)
de la ecuación de Stokes, que han encontrado mucha utilidad para describir el comportamiento de los sistemas
de partículas. A continuación, se encuentran las derivaciones de algunos resultados fundamentales pertinentes a
las suspensiones, incluidas las leyes de Faxen para el movimiento de una sola esfera y el resultado de Einstein
para la viscosidad de una suspensión diluida de esferas. El capítulo se cierra concentrándose en un aspecto
bastante inesperado de la ecuación de Stokes, a saber, su incapacidad para proporcionar una aproximación
adecuada al flujo lejos de una esfera en un número de Reynolds arbitrariamente pequeño pero distinto de cero.
Se describe el uso de la teoría de la perturbación singular para obtener correcciones a la ley de Stokes para el
número finito de Reynolds.

7.2 Características generales del flujo número bajo de Reynolds

Para un número de Reynolds extremadamente pequeño, la ecuación de Navier-Stokes se aproxima mediante la

ecuación de Stokes,

∇ ℘=μ ∇ 2 ⃗v (7.2−1)
⃗

Como se discutió en la Sección 5.10, se espera que la ecuación de Stokes sea válida para flujo dependiente del
tiempo, así como para flujo constante, si ℜ➔ O y si la escala de tiempo para cualquier fuerza aplicada excede
en gran medida la escala de tiempo viscoso, L2 /v . La eliminación del término ρD ⃗v / Dt de la ecuación de
Navier-Stokes hace que la ecuación. (7.2-1) pseudoestable y lineal. Como se analiza a continuación, las
características distintivas del flujo progresivo son una consecuencia de estas características.
El carácter pseudoestable del flujo progresivo (es decir, la ausencia de una derivada del tiempo en la ecuación
de Stokes) significa que, matemáticamente, el tiempo entra en tales problemas solo como un parámetro.
Físicamente, implica que los campos de velocidad y presión responderán casi instantáneamente a los cambios
en las presiones aplicadas o al movimiento de superficies. Este comportamiento se ilustra bien con películas o
videos del flujo sanguíneo en la microcirculación. Después de la oclusión de un microvaso, el flujo (como lo
revela el movimiento de los glóbulos rojos) no se detiene hasta detenerse, se detiene inmediatamente. La virtual
ausencia de inercia causada por escalas de longitud y velocidad tan pequeñas puede ser difícil de aceptar al
principio, porque contradice la experiencia cotidiana. Esa experiencia con el aire y el agua involucra
principalmente a grandes números de Reynolds.

La ecuación (7.2-1) y la ecuación de continuidad para un fluido incompresible constituyen un conjunto lineal de
ecuaciones diferenciales, hecho que tiene enormes consecuencias para el análisis del flujo progresivo. Esta
linealidad implica que la expansión de la función propia y los métodos de función de Green como los discutidos
en el Capítulo 4, así como muchos otros métodos clásicos para resolver ecuaciones diferenciales parciales
lineales, pueden aplicarse a los problemas de flujo progresivo. Se aplican pruebas de unicidad y se puede
aprovechar la superposición lineal de soluciones. La aplicación de algunos de estos métodos se analiza más
adelante en este capítulo.

Una implicación física importante de la linealidad es que el flujo progresivo es reversible. Considere, por
ejemplo, pasar por un objeto sumergido estacionario donde la velocidad es uniforme lejos del objeto. Es decir,
⃗v ➔ ⃗u como r ➔ ∞, donde u⃗ es un vector constante y el origen está ubicado en el centro del objeto. Debido a que
el campo de velocidad depende linealmente de u⃗ (que es la única no homogeneidad en las ecuaciones
diferenciales y condiciones de contorno), reemplazar u⃗ por −⃗u simplemente cambiará ⃗v por −⃗v . Es decir, hay
una inversión en la dirección del flujo, pero sin un cambio en el patrón de línea de corriente. Una consecuencia
de esto es que el arrastre del objeto no cambiará por la inversión del flujo. (Sin embargo, la invariancia a la
inversión de flujo no implica que el arrastre sea independiente de la orientación del objeto en relación con u⃗ ; eso
es cierto solo para una esfera). Otra consecuencia de la inversión de signo en v⃗ , junto con la naturaleza
pseudoestable de flujo progresivo, es que, si u⃗ se redujera a cero y luego se invirtiera en el mismo experimento,
una partícula de fluido (en principio) trazaría la misma línea de corriente.

La linealidad de las ecuaciones de flujo progresivo es especialmente útil para analizar el movimiento de
partículas suspendidas. Las soluciones a ciertos problemas fundamentales, como (a) el par de torsión en una
esfera que gira en un fluido por lo demás inactivo (ejemplo 7.3-1) y (b) el arrastre en una esfera que se traslada
(sin rotación) en dicho fluido (ejemplo 7.4 -2), se pueden combinar para describir movimientos más complejos.
Esto se hace formulando las relaciones como un problema de álgebra lineal y construyendo matrices de
resistencia que relacionan las velocidades lineales y angulares con las fuerzas y momentos de torsión. Se han
obtenido matrices de resistencia no solo para partículas individuales en fluidos ilimitados, sino también para
partículas que interactúan con otras partículas o con paredes (por ejemplo, Happel y Brenner, 1965).

Una propiedad interesante de la presión en el flujo progresivo se deriva directamente de la continuidad y de la

ecuación de Stokes. Tomando la divergencia de ambos lados de la Ec. (7.2-1), obtenemos

⃗
∇ ∙ (⃗ ∇ ∙ ( μ ∇ 2 ⃗v )=μ ∇ 2 ( ⃗
∇ ℘ ) =⃗ ∇ ∙ ⃗v ) (7.2−2)

Recordando que ⃗ ∇=∇2 y usando la continuidad, se sigue que

∇∙ ⃗

∇ 2 ℘=0(7.2−3)

∇ ∙ ( ρ ⃗g )=0, la ecuación de Laplace gobierna P al igual que ℘. Por lo tanto, si la presión o el gradiente
Porque ⃗
de presión se conocen en todos los límites, el campo de presión se puede determinar sin considerar
explícitamente ⃗v. Se obtiene un resultado complementario para la velocidad. Aplicando el operador de Laplace
en lugar de la divergencia a ambos lados de la ecuación de Stokes, y usando la Ec. (7.2-3), encontramos que

∇ 4 v =0(7.2−4)

Dónde ∇ ( ∇ ) =∇ . Este análogo de la ecuación de Laplace se llama ecuación biarmónica.

2 2 4

Las ecuaciones que gobiernan la función de vorticidad y corriente en el flujo progresivo también tienen formas
simples. Tomando la curva de ambos lados de la ecuación de Stokes y recordando que ⃗ ∇x⃗ ∇ b=0 para
cualquier función escalar b (Tabla A-1), obtenemos

∇2 ( ⃗
∇ x ⃗v )=∇ 2 ⃗
w=0(7.2−5)

Por tanto, la vorticidad también satisface la ecuación de Laplace. Las ecuaciones para la función de flujo se
obtienen reconociendo que los lados izquierdos de las ecuaciones dadas en la Tabla 5-11 provienen de los
términos inerciales en una ecuación de Navier-Stokes. Descuidar esos términos lleva a

∇ 4 ψ=0 E 4 ψ=0(7.2−6)

donde ∇ 4 se usa para flujos planos y E 4 para flujos simétricos (ver Tabla 5-11).
Otra característica importante del flujo progresivo se refiere al cálculo de las fuerzas superficiales. Si se
desprecian los efectos gravitacionales o, de manera equivalente, si σ⃗ se escribe usando ℘ en lugar de P, entonces
la Ec. (7 .2-1) es lo mismo que

⃗ ⃗
∇ ∙ σ⃗ =0(7.2−7)

[Esto se ve más fácilmente en la Ec. (5.3-26).] Aplicando este resultado a un volumen macroscópico V de fluido
limitado por la superficie Sy usando el teorema de divergencia para tensores, obtenemos
❑ ❑

∫ ⃗∇ ∙ ⃗σ dV =0=∫ n⃗ ∙ ⃗σ dS( 7.2−8)

V S

Supongamos ahora que S consta de dos partes, una superficie interior cerrada S1 y una superficie exterior S2 que
rodea completamente a S1, de manera que V es el volumen de fluido entre las dos superficies cerradas.
Entonces, Eq. (7.2-8) conduce a
❑ ❑

∫ ⃗n ∙ ⃗σ dS=−∫ n⃗ ∙ ⃗σ dS (7.2−9)
S1 S2

Lo que indica que la fuerza sobre S1 se transmite completamente a S2. Una forma en que la ecuación. (7.2-9) se
puede utilizar para calcular la fuerza fluidodinámica sobre un objeto sumergido (fluido o sólido), cuya
superficie corresponde a S1. Si se conoce σ , pero si la forma del objeto es irregular, (7.2-9) ofrece la opción de
calcular la fuerza integrando n⃗ ∙ ⃗σ sobre alguna superficie más conveniente S2 en el fluido (por ejemplo, una gran
esfera imaginaria). (Esta simplificación es muy similar a la discutida en el ejemplo 5.5-2, en relación con las
fuerzas de presión en fluidos estáticos).

Otro resultado general para el flujo progresivo que debe mencionarse es el teorema recíproco, reportado
originalmente por H. A. Lorentz en 1906 [ver Happel y Brenner, (1965, pp. 85-87)]. Sea v ' un campo de
velocidad que satisface la continuidad y la ecuación de Stokes a lo largo de un volumen V limitado por la
superficie S(que puede constar de dos o más partes distintas, como se indicó anteriormente), y sea σ ' el tensor
de tensión correspondiente. Como en Eq. (7.2-7), se excluyen las fuerzas gravitacionales y otras fuerzas
corporales. Ahora sean v ' ' y σ ' la velocidad y la tensión para el flujo progresivo del mismo fluido en la misma
geometría, pero con diferentes condiciones de contorno enS. Entonces, el teorema recíproco de Lorentz
establece que

❑ ❑

∫ ⃗n ∙ ⃗
σ ' ∙⃗
v ' ' dS=∫ ⃗n ∙ ⃗
σ ' ' ∙⃗
v ' dS(7.2−10)
S S
Este elegante resultado se utiliza en muchas derivaciones en la teoría del flujo progresivo. Como se ilustra en el
ejemplo 7.6-1, conduce a simplificaciones notables en ciertos cálculos de fuerza.

Siguiendo a Happel y Brenner (1965), la demostración de (7.2-10) comienza usando la ecuación constitutiva de
σ ' como
un fluido newtoniano incompresible para escribir ⃗

σ '=−℘' ⃗δ+2 μ ⃗
⃗ Γ ' (7.2−11)

Se han excluido los efectos gravitacionales, como se mencionó anteriormente, de modo que la presión se escribe

Γ ' ' se obtiene

como ℘ en lugar de P. Al formar el producto de doble punto de cada término con ⃗

Γ ' ' =−℘' ⃗δ : ⃗

σ':⃗
⃗ Γ' '+ 2 μ ⃗
Γ' : ⃗
Γ ' ' (7.2−12)

Se puede demostrar que

Γ ''= ⃗
δ⃗ : ⃗ ∇ :⃗v ' ' =0(7.2−13)

de modo que Eq. (7.2-12) se reduce a

Γ ' ' =2 μ ⃗
σ':⃗
⃗ Γ':⃗
Γ ' ' (7.2−14)

Intercambiar los números primos y dobles primos da el resultado análogo,

σ⃗' ' : ⃗
Γ ' =2 μ ⃗
Γ '' : ⃗
Γ ' ( 7.2−15)

Γ' : ⃗
El producto de dos puntos de dos tensores cualesquiera es conmutativo, de modo que ⃗ Γ ' ' =⃗
Γ' ' : ⃗
Γ ' y, de las
Ecs. (7.2-14) y (7.2-15),

σ⃗' : ⃗
Γ ' ' =⃗σ ' ' : ⃗
Γ ' (7.2−16)

Usando la identidad

Γ =⃗
σ⃗ : ⃗ ∇ ∙ ( ⃗σ ∙ ⃗v ) (7.2−17)

que requiere que Eq. (7.2-7) sea válido, y la integración sobre V , la ecuación (7.2-16) conduce a
❑ ❑

∫ ⃗∇ ∙ (⃗ v ' ' ) dV =∫ ⃗
σ'∙⃗ ∇ ∙ (⃗
σ ''∙⃗
v ' ) dV (7.2−18)
V V

Finalmente, la aplicación del teorema de divergencia para tensores da la ecuación. (7,2-10).

Una fuente estándar de información sobre muchos aspectos fundamentales del flujo progresivo, incluidos los
mencionados anteriormente, es el libro de Happel y Brenner (1965). Un tratamiento informativo y más reciente
del tema se encuentra en Leal (1992, págs. 119-274).

EJEMPLO

Ejemplo 7.3-1 Torque en una esfera giratoria

Considere una esfera sólida de radio Rque gira a una velocidad angular w alrededor del eje z, como se muestra
en la figura 7-1. La esfera está sumergida en un gran volumen de fluido. Las escalas de longitud y velocidad en
este problema son R y wR, respectivamente, lo que sugiere que la ecuación de Stokes será una buena
aproximación si ℜ=wR 2 /v ≪1.

Un buen punto de partida es identificar la forma más simple de campo de velocidad que sea consistente con la
simetría rotacional sobre el eje z, la ecuación de continuidad y las condiciones de contorno. La rotación asegura
que v ∅ será importante, mientras que la geometría axisimétrica implica que ninguna cantidad dependerá de ∅.
Observe en la tabla 5-6 que si v ∅ es independiente de ∅, entonces la ecuación de continuidad se satisface si
v r=v θ=0. Las condiciones de contorno para la velocidad, para r =R, son:

v r=0

vθ =0

v ∅=R∗w∗sen(θ)

Figura 7-1: Rotación de una esfera alrededor del

eje z a una velocidad angular w
Las condiciones de contorno para la velocidad, para r =∞, son:

v r=0

vθ =0

v ∅=0

también son consistentes con la hipótesis de que v r=v θ=0. Prestando especial atención a la dependencia de v ∅
de θ requerida por la Ec. (7.3-1), la forma más simple de la velocidad es evidentemente

v r=0

vθ =0

v ∅=f ( r )∗sen(θ)

Queda por confirmar que esta forma de v satisface la ecuación de Stokes.

∂℘ ∂ ℘
Con v r=v θ=0, los componentesr y θ de la ecuación de Stokes se reducen a = =0 , lo que indica (junto
∂r ∂θ
con la simetría) que ℘ es constante en todo el fluido. El componente ∅ de la ecuación de Stokes se convierte en

Flujo cerca de una esfera que gira lentamente

Una esfera sólida de radio R gira lentamente a velocidad angular constante Ω en un gran cuerpo de
fluido en reposo (véase la figura 3.67). Obtener expresiones para las distribuciones de presión y de
velocidad en el fluido y para el momento de torsión T z , necesario para mantener el movimiento. Se
supone que la esfera gira lo suficientemente lento, de modo que es adecuado utilizar la versión de
flujo reptante de la ecuación de movimiento en la ecuación 3.5-8. Este problema ilustra el
planteamiento y la solución de un problema en coordenadas esféricas.
Las ecuaciones de continuidad y movimiento en coordenadas esféricas se proporcionan en tablas.
Postulamos que, para flujo reptante estacionario, la distribución de velocidad tendrá la forma general
⃗v =⃗δ ϕ v ϕ (r , θ) y que la presión modificada será de la forma ℘=℘(r ,θ). Como se espera que la solución
sea simétrica respecto al eje z, no hay dependencia respecto al ángulo ϕ.
Con estos postulados, la ecuación de continuidad se cumple con exactitud, y las componentes de la
ecuación de movimiento para flujo reptante se vuelven:

Las condiciones límite pueden resumirse como

donde ℘= p+ ρgz, y po es la presión del fluido lejos de la esfera en z=0.

La ecuación 3.6-47 es una ecuación diferencial parcial para v ϕ (r , θ). Para resolverla, intentamos una
solución de la forma v ϕ=f ( r ) sen ( θ ). Esto es sólo una conjetura, aunque es consistente con la
condición límite en la ecuación 3.6-48. Cuando esta forma de ensayo para la distribución de la
velocidad se inserta en la ecuación 3.6-47, se obtiene la siguiente ecuación diferencial ordinaria para
f ( r ):
Ésta es una "ecuación equidimensional", que puede resolverse al suponer una solución de ensayo
f =r n . Al sustituir esta solución de ensayo en la ecuación, se obtiene n=1 ,−2. Así, la solución de la
ecuación es

de modo que

Al aplicar las condiciones limite se muestra que C 1=0 y C 2=Ω R3. Por consiguiente, la expresión
final para la distribución de velocidad es

A continuación, evaluamos el momento de torsión necesario para mantener la rotación de la esfera.

2
Éste será la integral, sobre la superficie de la esfera, de la fuerza tangencial ( τ rϕ ¿r= R ) R sen ( θ ) dθdϕ
ejercida sobre el fluido por un elemento de superficie sólido, multiplicada por el brazo de palanca
R sen (θ ) para ese elemento:
A medida que aumenta la velocidad angular, ocurren desviaciones respecto al "flujo primario" de la
ecuación.

Debido a los efectos de la fuerza centrífuga, el fluido es atraído hacia los polos de la esfera y alejado
de ésta a partir del ecuador como se muestra en la figura.

Para describir este "flujo secundario", es necesario incluir el término [⃗v . ⃗

∇ ⃗v ] en la ecuación de
movimiento, lo cual puede hacerse utilizando un método de función de corriente.

Figura: Bosquejo que muestra el flujo secundario el cual aparece alrededor de una esfera que gira a medida
que se incrementa el número de Reynolds.