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N.

o 9500

Jueves 7 de enero de 2021

Palabras de aliento del Presidente de la SGI

EL VIAJE DEL MAESTRO Y EL DISCÍPULO,


UN FARO DE ESPERANZA Y DE VICTORIA
<Nueva serie>

Hagamos que nuestras comunidades y hogares sean «capitales de la luz tranquila»

Una vez más, este año comenzó con la maratón masculina de relevos de Hakone
Ekiden 1 (que tuvo lugar el 2 y 3 de enero). Quiero aplaudir la unión y el esfuerzo
impresionante de nuestros jóvenes atletas y de los integrantes de los equipos de apoyo.
Con un trabajo colaborativo realmente increíble, el equipo de atletismo de la
Universidad Soka hizo gala de una actuación para recordar. ¡Los felicito por su
desempeño fenomenal, logrado gracias a un firme sentido de propósito, en el inicio de
este año en que nuestra institución cumplirá medio siglo de trayectoria! [El primer día
de la carrera, la Universidad Soka terminó en el primer puesto, y en la carrera total
salió en segundo lugar, habiendo participado en este prestigioso torneo atlético apenas
cuatro veces.]

En el feriado de Año Nuevo, una ola de intenso frío atravesó el territorio nacional,
provocando copiosas nevadas en muchas partes del país. No puedo dejar de pensar en
las dificultades que estarán afrontando nuestros miembros de las áreas donde nieva.
Sepan que estoy orando con más fervor que nunca por la salud, la seguridad y la
protección de todos nuestros preciados compañeros del Japón y del mundo.

1
La maratón de Hakone es una carrera de dos días de duración que se celebra todos los años los días 2 y 3
de enero. Se corre en dos etapas, desde Tokio hasta el lago Ashi de Hakone, en la prefectura de Kanagawa.
La primera jornada, los atletas llegan hasta Hakone y el segundo, vuelven a Tokio. La distancia, de 217
kilómetros, se separa en diez estaciones, la más difícil de las cuales es el arduo ascenso hasta el lago Ashi
desde las montañas de Hakone.
Después de soportar un invierno de heladas inclementes en la isla de Sado,
Nichiren Daishonin escribió: «Dondequiera que vivamos y practiquemos el vehículo
único [es decir, el Sutra del loto], ese lugar será la Capital de la Luz Tranquila».2
Mientras el Daishonin se debatía contra toda clase de dificultades y de
persecuciones, abrió una vía de esperanza y de victoria, mostrándonos el medio que nos
permite superar cualquier circunstancia adversa, con la seguridad de que «el invierno
siempre se convierte en primavera».3
La clave está en seguir practicando la Ley Mística, tal como somos y en el lugar
donde estamos en este momento. Nuestra vida como practicantes que entonamos Nam-
myoho-renge-kyo es una torre de tesoros. Nuestros hogares —donde tenemos
entronizado el Gohonzon— y nuestras comunidades —donde trabajamos por el kosen-
rufu— son «Capitales de la Luz Tranquila».

Mi maestro Josei Toda, el segundo presidente de la Soka Gakkai, daba gran


importancia al hecho de asumir nuevas determinaciones en el inicio del año y decidir
«¡Este será el año!».
Nosotros, al igual que el vasto universo, poseemos en nuestro fuero interno la
inmensa fuerza vital de la Ley Mística, que tiene el poder de transformar todas las cosas
positivamente. Sería una terrible lástima que, habiendo adoptado la fe en el budismo
Nichiren, no nos percatemos de esto.
El maestro Toda recalcaba que el año nuevo es la época para robustecer esa
vitalidad con nuevas decisiones. Nos exhortaba a alinear nuestra vida con el prodigioso
ritmo del universo y a que, en el transcurso de ese año que empezaba, procurásemos
ofrecer una prueba radiante de nuestra propia revolución humana en la vida cotidiana.
En verdad, «cuando accedemos al Camino del Buda, hacemos que […] nuestro
cuerpo y nuestra mente, a cada instante, impregnen todo el mundo de los fenómenos [el
universo]».4
El 4 de enero de 1956, como representante del señor Toda, me puse al frente de
la campaña de Osaka. Ese día, junto a los miembros de Kansai, a quienes me unía un
estrecho vínculo espiritual, declaré que triunfaríamos.
Allí, juramos lograr una victoria en bien del pueblo y de la paz, grabando en
nuestro corazón las palabras del Daishonin que dicen: «En última instancia, los
desastres continuarán sin tregua, a menos que logremos demostrar la supremacía de esta
enseñanza».5

2 Respuesta a Sairembo, en Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág.
332.
3 Véase El invierno siempre se convierte en primavera, en END, pág. 561.
4 Palabras del gran maestro Miao-lo de la China, citadas en El objeto de devoción para observar la vida, en

END, pág. 386.


5 El tratamiento de la enfermedad, en END, pág. 1160.

2
Hoy, 65 años después, comienza a iluminar el mundo la luz brillante del diálogo
orientado a la paz genuina y duradera, basado en el principio del respeto a la dignidad
de la vida.

Nuestros compañeros de Rusia, en pleno invierno, también están muy animados.


Me hizo muy feliz saber que habían comenzado el año nuevo con la sólida unión de
«distintas personas con un mismo propósito».
Rusia es un país enorme; hay diez horas de diferencia entre la localidad situada
más al este y la ciudad ubicada en el extremo oeste. Pese a ello, nuestros miembros
rusos se mantienen en contacto, alentándose y apoyándose mutuamente.
¡Con nuestros jóvenes ciudadanos globales de la Soka en la vanguardia, sigamos
marchando resueltamente también este año, para difundir nuestro movimiento
humanístico de esperanza y de victoria mucho más ampliamente, en nuestras
comunidades y en el mundo!

(Traducción del artículo publicado el 4 de enero de 2021 en el Seikyo Shimbun,


diario de la Soka Gakkai).

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