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ERRNVPHGLFRVRUJ :H82I
SEXTA EDICION •
MAHU
MÉNDEZ EDITORES
ERAKCISCO MÉNDEZ O r i O - FRANCISCO MÍNDtZ CERVANTES
• '
MEXICO. O. F.
....
SEXTA EDICIÓN
C o p y r i q h t © 2 0 0 6 por UNAM
Dr. J o s é F e r n a n d o G u a d a l a j a r a B o o BIBLIOTECA CENTRAL
T o d o s l o s d e r e c h o s r e s e r v a d o s c o n f o r m e a l a ley.
CLASIF
M é n d e z E d i t o r e s , S . A . de C.V.
A r q u i t e c t u r a No. 3 3 , Col. Copilco-Universidad
D e l e g a c i ó n C o y o a c á n , C P . 0 4 3 6 0 , M é x i c o , D.F.
Tels.: 5 6 5 8 - 9 2 6 7 , 5658-7187, Fax: 5 6 5 8 - 7 3 5 5
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S u c u r s a l : Niños Héroes # 2 2 5 - F , Col. Doctores
M é x i c o , D.F. T e l . : 5 5 8 8 - 1 6 2 5
M i e m b r o de la C á m a r a N a c i o n a l d e la I n d u s t r i a Editorial
Registro número 2 4 2 3
T o d o s los d e r e c h o s r e s e r v a d o s . N i n g u n a p a r t e d e e s t a p u b l i c a c i ó n p u e d e s e r r e p r o d u c i -
d a , a l m a c e n a d a e n s i s t e m a a l g u n o d e t a r j e t a s p e r f o r a d a s o t r a n s m i t i d a por o t r o m e d i o
- e l e c t r ó n i c o , m e c á n i c o , fotocopiador, registrador, e t c . - sin p e r m i s o previo por e s c r i t o
d e los a u t o r e s y d e M é n d e z E d i t o r e s , S . A . d e C . V.
A l l r i g h t s r e s e r v e d . No p a r t of t h i s p u b l i c a t i o n m a y b e r e p r o d u c e d , s t o r e d in a r e t r i e v a l
s y s t e m , o r r e t r a n s m i t t e d , in a n y f o r m o r by a n y m e a n s , e l e c t r o n i c , m e c h a n i c a l , p h o t o -
c o p y i n g , r e c o r d i n g o r o t h e r w i s e , w i t h o u t t h e p r i o r p e r m i s s i o n in w r i t i n g f r o m t h e
a u t h o r s a n d t h e P u b l i s h e r M é n d e z E d i t o r e s , S . A . d e C . V.
ISBN: 968-5328-62-5
IMPRESO EN MÉXICO
P R I N T E D IN MEXICO Primera Edición 1981
Segunda Edición 1982
con 1 reimpresión
Tercera Edición 1984
con 6 reimpresiones
C u a r t a Edición 1991
con 4 reimpresiones
Quinta Edición 1997
UNAM con 9 reimpresiones
BIBLIOTECA CENTRAL
Sexta Edición 2006
Reimpresión 2 0 0 8
FACT._JÍ¿í£L---~ Reimpresión 2 0 0 9
Reimpresión 2010
PRECIO.
685846
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8
COAUTORES— - — '
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D R . J O R G E GASPAR H E R N A N D E Z
Cardiólogo Especialista Ecocardiografía, Jefe de Médicos Residentes del Instituto Nacional de Cardiología
"Ignacio C h á v e z " ( 2 0 0 5 - 2 0 0 6 ) , M i e m b r o Afiliado d e la Sociedad Mexicana d e Cardiología.
DRA. A L O H A MEAVE G O N Z A L E Z
v
DR. ERICK A L E X A N D E R S O N ROSAS
Médico Adscrito a Cardiología Nuclear, Instituto Nacional d e Cardiología "Ignacio Chávez". Responsable
de la Unidad PET-Ciclotrón Facultad de Medicina, U N A M . Posgraduado e n Cardiología Nuclear Brigham
and W o m e n ' s Hospital. Harvard Medical School y Cedars-Sinai M e d i c a l Center, U C L A . Fellowship e n
Tomografía por Emisión de Positrones, Depto. de Imagen Molecular d e U C L A y e n el Centro PET del
Hospital Universitario de Turku Finlandia. Entrenamiento en Tomografía Cardiovascular, Brigham a n d
W o m c n ' s Hospital. M i e m b r o Numerario de la A c a d e m i a Nacional de M e d i c i n a . M i e m b r o Titular d e l
Sistema Nacional d e Investigadores. Investigador Titular d e los Institutos Nacionales d e Salud. Profesor
Titular d e Posgrado e n PET, Facultad d e Medicina U N A M . Profesor Adjunto de Posgrado en Cardiología
Nuclear, Facultad de Medicina, U N A M . Jefe de Residentes del Instituto Nacional d e Cardiología "Ignacio
C h á v e z " (1992-1993).
DR. S A N T I A G O NAVA T O W N S E N D
Cardiólogo y Electrofisiólogo egresado del Instituto Nacional de Cardiología "Ignacio C h á v e z " y Hospital
Universitario C l i n i c , Barcelona, España. M é d i c o Adjunto al Servicio d e Electrocardiografía del Instituto
Nacional de Cardiología, "Ignacio Chávez". Profesor Adjunto al Curso de Posgrado para Médicos Especialistas
d e la U N A M en electrofisiologfa C a r d i a c a Diagnóstica y Terapéutica. Profesor d e l Taller C l i c d e
Electrocardiografía de la Facultad de Medicina de la Universidad La Salle. Miembro Titular d e la Sociedad
M e x i c a n a de Cardiología. M i e m b r o Asociado a la Sociedad Española de Cardiología. Miembro Asociado
a la Sociedad Europea d e Cardiología. Vocal del Capítulo de Electrofiología d e la Sociedad Mexicana de
Cardiología, Bienio 2 0 0 4 - 2 0 0 6 . Jefe de Residentes del Instituto Nacional de Cardiología "Ignacio Chávez"
(2001-2002).
VI
A R B O L G E N E A L O G I C O D E LA
CARDIOLOGÍA MEXICANA
HENRYVAQUEZ (1860-1936)
Discípulo de Potain, introductor de la ouabaína
a la terapéutica.
VII
Para mi esposa:
MARÍA CONSUELO
por su comprensión y apoyo incondicional
IX
PREFACIO A
A
LA
P R F F A r i O
i A
SEXTA EDICIÓN
Esta edición nace c u a n d o el libro ha cumplido 25 años d e haber aparecido la primera edición en 1 9 8 1 .
A lo largo d e esta historia, m e he percatado de que he sido privilegiado, al haber compartido una época
en la que la historia clínica y el electrocardiograma era el sustento primordial del diagnóstico, y el
tratamiento, era individualizado por principio; con esta n u e v a e r a , en la que la tecnología, ha tenido
aportaciones tan asombrosas como la posibilidad de estudiar, visualizar y poder reconocer las enfermedades
cardiovasculares por procedimientos de imagen no invasivas, al grado de que aquellas otras que si lo s o n ,
ahora se han convertido primordialmente en métodos terapéuticos; este a su v e z , constituye otro avance
trascendental, ya que ofrecen tratamiento efectivo a padecimientos que otrora eran necesariamente
tratados mediante cirugía cardiaca, obviamente mas dolorosa, de mayor costo y riesgo.
La culminación de todo ello h a sido para el paciente mayor sobrevida c o n mayor calidad. Así,
el haber sido de aquellas generaciones d e transición entre la clínica y la tecnología pura, m e permite
preservar el gran valor de la clínica cardiológica que es muy rica y por ello en el libro se enfatiza la historia
clínica y con ella la auscultación del corazón; por esta misma razón se preserva la fonocardiografía método
que c o m o ningún otro revela objetivamente, y c o n fineza inusual los signos auscúltatenos; así c o m o los
estudios tradicionales del electrocardiograma y la radiografía del tórax, los cuales revelan signos d e gran
valor para el diagnóstico cuando son interpretados c o n un conocimiento cabal del método; y por otro lado
mostrar todos los nuevos procedimientos d e diagnóstico y tratamiento; con ello, he intentado amalgamar
ambos universos, para que el médico por un lado sea un gran clínico pero por otro, sepa utilizar todos los
avances de la tecnología e indicar racionalmente cada método en cada paciente en especial; e n otras
palabras que no pierda el sentido de individualizar el trato del paciente.
C o m o desde 1 9 8 1 , este libro no pretende ser un tratado de la materia, sino por el contrario,
intenta ofrecer al estudiante de medicina, de enfermería, al interno y al residente las bases e n las que se.
sustenta la especialidad, así, se enfatizan los conceptos básicos y la fisiopatología y c o n ello se pretende
que el médico en formación entienda la clínica d e las enfermedades, por otro lado, se ofrecen los
conocimientos básicos d e los métodos de diagnóstico que se utilizan en cardiología para que pueda
entender su utilidad y aplicaciones; c u a n d o estos conocimientos han sido asimilados, es posible que el
médico pueda intentar buscar un diagnóstico y plantear un diagnóstico diferencial.
X!
C u a n d o el médico o la enfermera e n formación han adquirido estos conocimientos, estarán e n
condiciones d e ascender a los tratados de la especialidad, a las revistas científicas y si su vocación se los
d e m a n d a , iniciar e l estudio formal d e esta fascinante especialidad de la medicina pero, si su vocación los
lleva por otro camino, quedarán con la base d e los conocimientos d e la cardiología que todo médico debe
de tener.
- . . . . .
XII
AGRADECIMIENTOS
Después de que a lo largo de 25 años, este libro h a tenido 5 ediciones y 20 reimpresiones no tengo sino
sentir el más grande de mis agradecimientos para mi amigo el Sr. Francisco M é n d e z Cervantes, editor y
por lo tanto, q u i é n ha sido el responsable de una difusión expedita y oportuna hacia toda la república
mexicana de esta obra e n todo este tiempo. Por otro lado, e l arduo trabajo secretarial en el diseño,
captura y formación d e l libro ha sido debido a la dedicación incansable de las Sras. M a r í a de la Luz y
Gloria Olivares Roldan para quienes ofrezco mi más sincero reconocimiento. H e recibido el apoyo
artístico de la Sra. Angélica Basurto Zurita quién realizó una gran parte d e las figuras que aparecen en la
obra; por su parte el Sr. Carlos Soster Espinoza realizó la mayor parte del material fotográfico y al Sr. José
Luis Rubio hizo el diseño de muchas otras imágenes que aparecen intercaladas e n el texto; e n la
adecuación d e las figuras al formato del libro participó el Ing. Christian Cárdenas para q u i é n también
agradezco su noble esfuerzo.
La mayor parte del material didáctico que aparece e n la obra ha sido obtenido e n el Instituto
Nacional de Cardiología "Ignacio Chávez". Doy gracias a todos aquellos que me facilitaron información,
conocimiento originales, trabajos inéditos, trazos, figuras, estudios de gabinete, registros, etc. Asimismo, mi
agradecimiento para aquellos autores quienes m e autorizaron a usar figuras de sus artículos originales cuyo
reconocimiento se encuentra al calce de cada u n a . Todo ello contribuye por un lado, para hacer objetivos
los conceptos vertidos e n la escritura y por otro, para ofrecer una información fidedigna al lector.
El Dr. Jorge Gaspar H e r n á n d e z escribe tres capítulos que tienen el sello de su personalidad en
la que destacan su claridad d e expresión y capacidad de síntesis: Anatomía del c o r a z ó n , Fisiología de la
XIII
Circulación así c o m o , Cateterismo Cardiaco y Cardiología Intervencionista; por su parte el Dr. Llamas
Esperón nos ofrece un capítulo nuevo en el libro: "Síndrome Metabólico"; c o m o sólido internista y
cardiólogo experimentado, el Dr. Llamas Esperón, aporta estos conocimientos que e n la actualidad son
fundamentales para el entendimiento de enfermedades que se constituyen c o m o las mas trascendentes
en la medicina contemporánea c o m o lo son la Hipertensión Arterial y la Aterosclerosis c o n todas sus
complicaciones y nexos con otros padecimientos y el Dr. Alexandeson Rosas, primer Cardiólogo Nuclear
en el país, el de "Cardiología Nuclear y PET", métodos d e diagnóstico, actualmente d e gran importancia
tanto de aplicación clínica c o m o en la investigación.
El joven cardiólogo Santiago Nava Townsend diseña una versión muy didáctica de un capítulo
muy difícil c o m o lo es el de "Electrofisiología Clínica y Terapéutica", la joven D r a . Aloha M e a v e nos
sorprende con el capítulo de "Resonancia Magnética de C o r a z ó n " , tema en la que es nuestra más
destacada representante en el país y que es un nuevo capítulo del Libro. El Dr. Jaime González es
responsable del Capítulo del " C o r a z ó n en otras padecimientos sistémicos" y finalmente el Dr. Ramón
C u é Carpió hace lo propio c o n el capítulo de "Tumores del C o r a z ó n " capítulos de fácil comprensión y
gran utilidad en la práctica médica ambos son nuestros colaboradores más jóvenes a quienes les damos la
mejor d e las bienvenidas. C o m o es evidente, todos estos capítulos enriquecen la obra e n una forma
definitiva por lo cual ofrezco mi más sincero reconocimiento a los coautores por su valiosa aportación.
C o m o puede verse esta o b r a , está formada por la interacción congruente de varias personas
que concurren e n un ambiente v en un momento propicios. Estas condiciones favorecedoras para nosotros,
no surgieron por generación espontánea, sino q u e fueron creadas en otras situaciones, no tan propicias
por la labor titánica d e un hombre: el maestro I G N A C I O C H A V E Z , es por eso, que injusto sería no
reconocer a este creador de nuestra escuela cardiológica cargada de ciencia y humanismo, como promotor
d e ésta y todas las obras que sobre e l tema se han escrito e n e l seno d e nuestra casa: el Instituto Nacional
de Cardiología.
C o m o un h o m e n a j e p o s t u m o , se t r a s c r i b e n al inicio d e c a d a c a p í t u l o p e q u e ñ o s extractos
d e c o n c e p t o s p r o n u n c i a d o s por é l , ya que la corriente f i l o s ó f i c a c r e a d a , c o n s t i t u y e un legado para
n u e s t r a s n u e v a s g e n e r a c i o n e s d e m é d i c o s y p a r a la m e d i c i n a u n i v e r s a l .
XIV
INTRODUCCION
XV
meterlo a un sinnúmero de procedimientos, inclu- anatómicos que son de importancia e n la práctica
so invasivos o de alta tecnología para que algunos clínica de la cardiología y que dan base para enten-
de ellos resuelva el problema diagnóstico, que es der e interpretar las enfermedades cardiovascula-
posible obtener c o n la historia clínica. res y la alteración que producen en la fisiología.
En muchas ocasiones un interrogatorio inten- Este capítulo contempla tres aspectos principa-
cionado, una auscultación cuidadosa o un electro- les: la anatomía de las cavidades cardiacas, que es
cardiograma escrupulosamente interpretado d a n crucial en el entendimiento de la electrocardiografía,
más luz que un estudio invasivo que es más costoso de la fisiopatología de las cardiopatías congénitas,
y no exento de riesgo. de las valvulopatías, así como de la interpretación
El estudiante de medicina, el m é d i c o general, ecocardiográfica y de la angiocardiografia; la anato-
la enfermera o el médico que inicia una especiali- mía del sistema de conducción, fundamental para
zación e n cualquier rama de la medicina, topa fre- entender la electrocardiografía, los trastornos del
cuentemente c o n un gran problema: los millones ritmo y de la conducción, así como los estudios elec-
d e palabras que se escriben a diario e n el m u n d o , trofisiológicos y su interpretación; la anatomía de las
acerca d e temas médicos. Cuando intenta acercar- arterias coronarias que facilita grandemente el en-
se a un t e m a , se pierde en la monstruosa cantidad tendimiento de la cardiopatía isquémica y sus com-
de información q u e tiene que leer. Es por ello que plicaciones, así c o m o también la interpretación de
más fácilmente adopta "rutinas", fórmulas, "esque- la arteriografía selectiva de dichos vasos.
m a s " o algoritmos.
Los profesionales que nos dedicamos a cualquier Capítulo | 2
rama de la medicina estamos obligados a ofrecer, a
quienes vienen detrás d e nosotros, la información F I S I O L O G Í A DE LA C I R C U L A C I Ó N
propia y escalonada de los conceptos más complejos, La circulación se lleva a cabo mediante complica-
todo ello aplicarlo al cuadro clínico y después insistir- dos mecanismos en que se interrelacionan cuatro
Ies en que la observación y el cuadro clínico son de aspectos que son de importancia mayor e n la prác-
gran importancia para formarse un juicio y que ya tica clínica:
alcanzado éste, podremos decidir de acuerdo a cada
problema particular cuál es el estudio que nos dará la 1. Casto cardiaco.
luz diagnóstica y finalmente, decidir cuál es la inter- Z Presión arterial.
vención terapéutica más apropiada en cada paciente. 3. Resistencias vasculares (periféricas y pulmo-
nares).
Las citas bibliográficas, fueron cuidadosamente
4 . Retorno venoso en estrecha relación con la
escogidas c o n la finalidad principal a que se cons-
presión venosa central.
tituyan en una prolongación útil de los temas aquí
tratados, para q u e el lector pueda acudir a ellas a Se analizan e n forma sintética los conceptos teó-
profundizar e n algún tema específico, que le sea ricos que los definen, los parámetros derivados, los
necesario o interesante. métodos de cálculo, su aplicación clínica y la semio-
Hemos intentado complementar el texto con la logía de su interpretación.
reproducción d e múltiples figuras, ilustraciones,
radiografías, esquemas, registros gráficos, etc., que
Capítulo^
favorecen la adquisición del conocimiento median-
te la demostración objetiva de los hechos. HISTORIA CLÍNICA
A continuación se expresan los objetivos que Este capítulo abarca dos aspectos fundamentales: el
busca ofrecer en cada capítulo e n forma sintética. interrogatorio y la exploración física. En el primero se
describe la semiología de los principales síntomas
cardiovasculares y su diferenciación con otros que
P R I M E R A PARTE favorecen la falsa impresión de enfermedad cardiaca.
Cabe mencionar que este es un capítulo general que
deberá complementarse con aquél que trata deter-
Capítulo | i
minada enfermedad en sí, ya que con ello se analiza
ANATOMÍA CLÍNICA DEL C O R A Z Ó N específicamente la semiología de los síntomas a los
C o m o su nombre lo indica, no se ha pretendido que da lugar el padecimiento. D e esta forma se des-
desglosar la extensa anatomía descriptiva, sino por criben la disnea, el edema, la cianosis, la lipotimia, el
síncope, el dolor precordial y las palpitaciones.
el contrario, se busca resaltar los conocimientos
XVI
En la segunda parte se describen los signos que entender la base de la electrocardiografía clínica,
pueden ser recogidos a través de la exploración prescindiendo de los complejos conceptos teóricos
física mediante la inspección, palpación, percusión que se reservan al cardiólogo o al electrocardiogra-
y auscultación del corazón. Se puso especial énfasis fista. Con el método deductivo, se transcriben los
en la auscultación del corazón por lo que se analiza criterios para el diagnóstico electrocardiográfico de
el ciclo cardiaco que sirve d e base para la explica- los crecimientos de las cavidades cardiacas, d e los
ción de los ruidos cardiacos normales y patológicos, trastornos tronculares de la conducción en ambas
así como los ruidos agregados (chasquidos de aper- ramas del haz de H i s , d e los cambios producidos
tura o cierre valvular o vascular). por la isquemia y se introduce a los síndromes de
S e describe el comportamiento del I y II ruidos preexcitación y a las canalopatías (síndromes de Q T
que son de gran utilidad para el diagnóstico clínico largo y de Brugada). Asimismo, se analizan los blo-
en cardiología, los ruidos d e galope, los soplos an- queos fasciculares, los cuales han sido estudiados
orgánicos y funcionales más frecuentes, y por fin, se exhaustivamente en las décadas de los 60's y 70's y
describe la semiología d e los soplos orgánicos. ello nos ha permitido reconocerlos ahora con ma-
yor certeza mediante el trazo electrocardiográfico.
S E G U N D A PARTE Capítulo i 5
Capfluloj 4 T R A S T O R N O S DEL R I T M O Y LA C O N D U C C I Ó N
Este capítulo se inicia con los mecanismos fisiopato-
ELECTROCARDIOGRAFÍA lógicos capaces de generar o perpetuar una arrit-
En esta parte, se transcriben los criterios sustentados m i a , se enfatiza que el diagnóstico debe buscarse
por la Escuela Mexicana de Electrocardiografia, que analizando los trazos acuciosamente, siempre basa-
en las décadas d e los 40's a los 60's revolucionaron dos e n el conocimiento de cómo se altera la activa-
este método auxiliar de diagnóstico, con tres conse- ción del corazón (fisiopatología) y no en "patrones",
cuencias sumamente benéficas para la cardiología: ya que es bien conocido que como arritmias total-
mente diferentes, pueden producir imágenes elec-
a ) Adquirió una base científica al apoyarse en la trocardiográficas casi idénticas, con los catastróficos
experimentación, hecho que rompió con los resultados d e la iatrogenia por la errónea interpre-
obsoletos "patrones" electrocardiográficos. tación del trazado. Se describen las arritmias más
frecuentes, su fisiopatología y su traducción electro-
b) Creó la llamada "electrocardiografía deductiva",
cardiográfica.
lo cual transformó las complejas e inintelegibles
curvas gráficas en un procedimiento de aplica- Con respecto al manejo de las arritmias se anali-
ción universal, al alcance del clínico estudioso, zan en forma suscinta los fármacos antiarritmicos
e n la práctica diaria de la medicina interna y más importantes, sus indicaciones, contraindicacio-
desde luego, de la cardiología. Actualmente cons- nes y peligros potenciales; asimismo, se esbozan
tituye un procedimiento obligado e n el ejerci- las principales indicaciones d e la desfibrilación y
cio de ambas ramas de la medicina. cardioversión eléctrica. Se menciona la utilidad que
tiene el registro continuo del electrocardiograma
c) El conocimiento deductivo de la electrocardio- (Holter) para la valoración, diagnóstico, pronóstico y
grafía, ha permitido una aproximación diagnós- tratamiento de los trastornos del ritmo.
tica tan grande, que sirve realmente c o m o un
Se ha incluido en esta parte la descripción básica
sólido apoyo para el ejercicio del internista y
de los diferentes tipos d e marcapasos cardiacos, la
del cardiólogo, ya que nos enseña las alteracio-
nomenclatura actualmente aceptada para su deno-
nes e n la formación y la conducción del impulso
minación, sus mecanismos d e acción, sus medica-
a través del corazón: esta información no se
ciones y riesgos, ya que es un procedimiento tera-
puede obtener de ninguna otra forma de mane-
péutico de uso c o m ú n que todo m é d i c o d e b e
ra no invasiva.
conocer; también se ha enfatizado en los procedi-
Partimos d e la electrofisiología simplificada de mientos que intentan prevenir la muerte súbita
la célula miocárdica; se puso especial interés e n la (desfibrilador implantable), se discuten sus indica-
ciones y resultados. Finalmente se recalca e l diag-
descripción de la teoría del dipolo, d e la activación
nóstico y manejo del paro cardiaco, q u e debe ser
del corazón, el triángulo de Einthoven intenta con
del dominio de todo m é d i c o .
fines didácticos, filtrar los hechos más útiles para
XVII
Capítulo i g en la radiografía normal simple del tórax, en sus cuatro
posiciones clásicas. Se describe la semiología radio
ELECTROFISIOLOGÍA CLÍNICA, DIAGNÓSTICA lógica de los crecimientos de las diferentes cavida-
Y TERAPÉUTICA des, las alteraciones producidas por el hiperflujo y
Ciertamente este capítulo no es de fácil compren- la hipertensión pulmonar así como la hipertensión
sión y podría no ser de interés para todo médico. venocapilar, por lo que ofrece las bases para q u e
Después de una larga meditación, se decidió in- este estudio sea apropiadamente interpretado por
cluirlo e n esta obra por las siguientes razones: el médico e n lo referente al aspecto cardiovascular.
Creemos que puede ser de gran ayuda para el En este capítulo no se tocan los aspectos técnicos
internista y el médico en entrenamiento cardiológico. ni se detallan los procedimientos utilizados e n los
diversos tipos de cateterismo cardiaco por conside-
Capítulo i 7 rarlos fuera del objetivo de la obra.
R A D I O L O G Í A DEL C O R A Z Ó N Capítulo i 9
La radiología cardiovascular, desde siempre ha consti-
tuido un estudio básico para el diagnóstico clínico en FONOMECANOCARDIOGRAMA
cardiología. Aquí se aprovechan los conocimientos C o m o e n e l capítulo previo, en éste, no se descri-
anatómicos de las cavidades cardiacas y se proyectan ben los equipos utilizados ni la técnica de registro.
XVIII
La atención se dirige a la utilidad del procedimiento pios técnicos que ayudan a comprender c ó m o el
en el diagnóstico clínico y la amplia gama d e posibi- ultrasonido convierte en imagen la silueta cardiaca
lidades que este método ofrece al médico. y de los grandes vasos e n su origen.
S e analiza la utilidad del fonocardiograma para Entendido que la opacificación angiocardiográm a
el reconocimiento de los ruidos y soplos cardiacos delimita la morfología interna d e las cavidades car-
normales y patológicos; la semiología del registro diacas, mientras que la imagen ecocardiográfica con
de los pulsos arteriales (carotídeo, central, radial y técnica bidimensional es la recíproca del estudio
femoral) y venoso (en hipertensión pulmonar, val- radiológico mencionado ya que delimita las pare-
vulopatía tricuspídea y pericarditis constrictiva); el des del corazón, dejando c o m o espacios vacíos las
registro de los movimientos precordiales (precor- cavidades cardiacas, se describen los cortes anató-
diograma y apexcardiograma); se describen las m a - micos principales que permiten estudiar al corazón
niobras clínicas más comúnmente usadas (neumo- en diferentes planos (eje longitudinal, eje transver-
grama, maniobra d e Valsalva, prueba de esfuerzo, sal, visión d e "cuatro cámaras", aproximación su-
ortostatismo), así c o m o también las maniobras praesternal y subxifoidea), se describen las altera-
farmacológicas (nitrito de amilo y metoxamina). Fi- ciones producidas por las valvulopatías, cardiopatías
nalmente se enumeran las indicaciones y limitacio- congénitas, derrame pericárdico, miocardiopatías,
nes del procedimiento e n el estudio de las valvulo- cardiopatía isquémica y la impresionante aportación
patías, cardiopatías congénitas, miocardiopatías, diagnóstica que constituye la inyección de contras-
cardiopatía isquémica y función ventricular. te, combinada c o n la técnica bidimensional en el
estudio d e las malformaciones congénitas comple-
Este capítulo se ha preservado a pesar de que el jas del corazón, asimismo se introduce al tema del
método ha desaparecido en la práctica médica por que contraste miocárdico, las armónicas, inversión de
es la única posibilidad que tiene el médico para apren- armónicas y ecocardiografía 3-D.
der la exploración del corazón en forma objetiva.
Capítulo | 1 0 Capítulo 1 1 2
XIX
describen las limitaciones de la técnica, se introdu- y de la perfusión miocárdica así c o m o de los gran-
ce la ecocardiografía transesofágfica y se mencionan des vasos, c o n tal nitidez que nos permiten gran-
las técnicas ecocardiográficas nuevas, Doppler tisular, des aproximaciones diagnósticas e n e l reconoci-
Ecocardiografía intracardíaca e intravascular. m i e n t o d e la f u n c i ó n v e n t r i c u l a r , i s q u e m i a y
viabilidad miocárdica, cardiopatías congénitas co-
munes y complejas, miocardiopatías, etc.
Capítulo 1 1 3
En este capítulo se analiza el poder diagnóstico
"r—- de esta técnica de imagen, sus aplicaciones y limi-
RESONANCIA MAGNÉTICA NUCLEAR
taciones; esta técnica se ha convertido en la más
Y CORAZON
joven y promisoria de las técnicas de diagnóstico
La cardiología nuclear ha pasado la prueba del tiem-
en cardiología.
po y ahora se ha constituido e n una técnica de gran
utilidad diagnostica.
El desarrollo tan importante d e la tecnología,
radio farmacia v computación en los últimos años T E R C E R A PARTE
la han situado e n una nueva posición dentro de los
métodos diagnósticos cardiológicos. Su estudio y Capítulo 1 1 5
comprensión resultan ahora una necesidad no sólo —
para el cardiólogo e n formación, sino también para FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA
el egresado. Es así que en este capítulo se revisan CARDIACA
los aspectos técnicos básicos para comprender el Consideramos este tema c o m o fundamental en la
principio de la radiación, su captación y el proce- patología cardiovascular, razón por la que precede a
samiento de la información. Se señalan las ventajas las enfermedades específicas del corazón, ya que
d e la técnica planar (casi e n desuso) y técnica cualquiera de ellas es causa potencial de dicho sín-
topográfica SPECT. Se enumeran las características drome. Partimos de la ultraestructura simplificada
más importantes de los principales radiotrazadores de la miofibrilla, conocimiento básico para explicar
útiles para estudios del corazón y los protocolos la contractilidad y el efecto de los inotrópicos; e n -
utilizados con mayor frecuencia. Se señalan las apli- tendida la función contráctil, se analizan las curvas
caciones clínicas más importantes d e l estudio d e de longitud-tensión y fuerza-velocidad del músculo
perfusión miocárdica en el c a m p o de la cardiopa- aislado, lo cual nos d a fundamento para compren-
tía isquémica. der la función del corazón intacto.
Su utilidad en el infarto agudo del miocardio en Se describen las determinantes de la función
la cardiopatía isquémica crónica y e n los síndromes cardiaca y la influencia que tienen en la actualiza-
isquémicos agudos. Se hace una revisión del análi- ción hemodinámica d e l corazón. Se menciona la
sis de la función ventricular sistólica y diastólica a construcción de curvas de función ventricular e n
través de la ventriculografía radioisotópica en equi- la clínica y sus cambios, según diversos estados
librio o de un primer paso. Se explican las nuevas fisiológicos (ejercicio) o patológicos (insuficiencia
técnicas que permiten el análisis simultáneo d e la cardiaca), fundamentados en la comprensión de la
perfusión miocárdica y la función ventricular y se función ventricular y sus determinantes, se anali-
analizan las perspectivas futuras de la cardiología zan sus causas, los mecanismos compensadores que
nuclear. evitan la caída del gasto cardiaco, a pesar de la
deficiente función contráctil y los síntomas a que
En este capítulo se introduce al PET cardiaco
dan lugar. Se describen las curvas d e presión-volu-
q u e ha v e n i d o a revolucionar algunos aspectos
men y la semiología de las mismas para entender la
muy importantes especialmente de la cardiopatía
función contráctil del corazón intacto. Se detalla el
isquémica.
tratamiento de la insuficiencia cardiaca con sus ob-
jetivos actuales, en un sentido estrictamente fisio-
Capítulo1 4 patológico, mencionando la influencia que tiene la
" T — terapéutica del proceso etiológico, la medicación
C A R D I O L O G Í A NUCLEAR Y PET inotrópica, la manipulación de la precarga y de la
El avance de los métodos diagnósticos de imagen poscarga, el efecto de la intervención farmacológica
en las últimas décadas ha sido verdaderamente in- sobre la respuesta neurohumoral, así como el papel
usitado; es precisamente el caso de la R M N la que que juega la asistencia mecánica y el trasplante
no ofrece imágenes del corazón tanto d e sus cavi- cardiaco e n el tratamiento de está enfermedad.
dades como de sus paredes, de la función cardíaca
xx
Capítulo 11 (, En la valvulopatía tricuspídea se describen las
formas aisladas y la que acompaña a otras valvulopa-
FIEBRE R E U M Á T I C A tías; así como también la lesión orgánica y la funcio-
Éste es un breve capítulo que intenta definir con la nal. Se enfatiza el cuidadoso análisis que requiere la
mayor objetividad posible, el concepto de la fiebre indicación quirúrgica de cada una de las enferme-
reumática. Además de mencionar la etiología, dades valvulares.
epidemiología y patogenia, se enfatiza la fisiopato-
logía de la pancarditis y sus consecuencias clínicas;
Capítulo 1
se intenta dar lugar preciso a la interpretación de los
1 8
XXI
diopatía restrictiva simétrica. Las medidas terapéuti- dad, hipercoagulabilidad, albuminuria, hipercoles-
cas indicadas en cada tipo de pericarditis se anotan terolemia, entre otras, realmente solo reconoce la
al final de la descripción clínica. punta del Iceberg c u a n d o dichos padecimientos se
tratan en forma aislada. Por lo tanto, se puede con-
siderar a este síndrome c o m o el más importante
Capítulo | 2 0
factor de riesgo aterogénico. La importancia de con-
HIPERTENSIÓN ARTERIAL ceptualizar al síndrome metabólico como tal, con
todos sus componentes, no solo busca dar un trata-
Por la frecuencia con la que aparece en nuestro
miento más efectivo al intentar evitar o reducir la
medio la hipertensión arterial, se considera que no
disfunción endotelial y el estrés oxidativo, al mismo
es ajena a ningún médico, independientemente de
tiempo que reducir las cifras de presión arterial
la rama que ejerza. Inicialmente se define la nor-
triglicéridos, pero corporal, colesterol plasmático,
motensión, la correcta toma d e la presión arterial y
etc. Sino que también contribuye de una forma más
los posibles errores técnicos en su determinación.
efectiva para prevenir las complicaciones finales
Se analizan los aspectos conocidos de su fisiopatolo-
como lo son la trombosis coronaria, cerebral o la
gía y c o n ello se define la hipertensión esencial con
aterosclerosis periférica, por lo cual dicho capítulo
sus diferentes variantes. Posteriormente se resumen
se ha tomado como fundamental e n la cardiología,
las más importantes formas secundarias y potencial-
neurología, angiología, endocrinología y medicina
mente curables de la hipertensión sistémica.
interna entre otras.
En lo referente al estudio clínico, exámenes de
laboratorio y gabinete, se orientan hacia la búsque-
d a de aquellos signos exploratorios o paramédicos Capítulo |^23
que puedan informar acerca de la naturaleza del
proceso, se discute de acuerdo a la fisiopatología, el
ATEROSCLEROSIS
papel que juegan en el tratamiento los diferentes
En este capítulo se intenta ofrecer un concepto de
fármacos que afectan e n polos específicos la eleva-
aterosclerosis. Se analizan los conocimiento acu-
ción d e la presión arterial, se revisan las complica-
mulados acerca del inicio de la placa de ateroma, su
c i o n e s p a r e n q u i m a t o s a s q u e la h i p e r t e n s i ó n
progresión hacia la obstrucción arterial y las conse-
sistémica es capaz de producir y, finalmente, se de-
cuencias clínicas finales, producidas por la ruptura
fine la crisis hipertensiva, las variedades clínicas en
de la placa ateromatosa y la trombosis arterial con-
las que se presenta así como los fármacos indicados
secutiva. Se enfatiza en aquellos factores conocidos
en cada una d e ellas. Bajo estos aspectos, es muy
capaces d e predisponer al proceso ateroscleroso, o
posible que el lector quede con una idea firme
aquellos otros que favorecen su progresión. La im-
acerca del proceso mencionado y de su manejo.
portancia que la aterosclerosis tiene para favorecer
la frecuencia de enfermedades incapacitantes o
Capítulo | 2 1 mortales e n nuestro medio es el objetivo funda-
mental de este espacio; asimismo se consideran las
A N E U R I S M A D E LOS G R A N D E S VASOS medidas terapéuticas que tenemos a nuestro alcan-
En este capítulo se estudia e l aneurisma aórtico y ce para evitar la progresión de la placa de ateroma,
d e la arteria pulmonar e n lo q u e respecta a etiolo- o aun para inducir su regresión y finalmente cuales
gía, fisiopatología, localización, cuadro clínico, mé- son las medidas que previenen el inicio del proceso
todos d e diagnóstico, tratamiento y pronóstico; se (prevención primaria).
hace hincapié e n la semiología del cuadro clínico
para la sospecha y corroboración d e l diagnóstico
mediante estudios de gabinete; asimismo se enfatiza Capítulo 1 2 4
e n la disección aórtica, su diagnóstico y manejo
médico y quirúrgico. CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
En esta, sección partimos d e l concepto de enfer-
m e d a d isquémica del corazón; se mencionan los
Capítulo 1 2 2
efectos que la isquemia d e l tiene sobre las pro-
SINDROME METABOLICO piedades de la miofibrilla y, por fin, se intenta una
El haber reconocido al síndrome metabólico en dé- clasificación clínica, agrupando las principales for-
cadas recientes realmente ha permitido compren- mas de enfermedad.
der c o m o alteraciones e n la fisiología en diversos El capítulo está dividido e n dos partes: el angor
órganos de la economía forman parte del origen tan pectoris y el infarto del miocardio. En la primera, se
complejo de la aterosclerosis arterial y sus compli- definen sus características fisiopatológicas y de ahí
caciones. En efecto, el diagnóstico de hipertensión se desprende el cuadro clínico y electrocardiográfi-
arterial, angina de p e c h o , diabetes mellitus, obesi- c o . Se menciona la utilidad de otros métodos de
XXII
diagnóstico, pero se enfatiza en los cuatro más i m - mente, el proceso agudo puede dar lugar a una
portantes: la prueba de esfuerzo electrocardiográfi- miocardiopatía dilatada.
ca, la ecocardiografía dinámica, la gammagrafía n u - El análisis d e la etiología, fisiopatología y cuadro
clear y la arteriografía coronaria, mencionando clínico del padecimiento es uno de los objetivos
indicaciones, contraindicaciones, riesgos y el tipo principales de este capítulo. Se enfatiza el papel
de información que dichos procedimientos ofrecen que juega los métodos de diagnóstico, incluyendo
al clínico; se analiza la angioplastia trnsluminal la información que proporciona la biopsia endo-
percutánea y al "stent" c o m o parte del tratamiento. miocárdica.
Posteriormente se describe la angina inestable y se Finalmente se discute la experiencia obtenida
discute la terapéutica médica quirúrgica de estas con la terapéutica y el pronóstico que a largo plazo
formas de insuficiencia coronaria. tiene la miocarditis.
En lo que respecta al infarto del miocardio, ade-
más d e mencionar sus principales alteraciones pa- Capítulo i 2 6
tológicas, el cuadro clínico, electrocardiográfico y
los exámenes de laboratorio y gabinete que auxilian MIOCARDIOPATÍAS
para su diagnóstico y manejo, se enfatiza en las alte- En las tres últimas décadas han venido cobrando cada
raciones hemodinámicas a que la necrosis miocár- vez mayor importancia las enfermedades primarias
dica puede dar lugar y la necesidad de su manejo del miocardio, ya que previamente no se diagnosti-
racional. También se analiza e l infarto del ventrícu- caban o en el mejor de los casos, se confundían con
lo derecho, c o n las peculiares alteraciones electro- cardiopatía reumática o isquémica. En esta sección
cardiográficas y hemodinámicas que produce y las
se detallan la miocardiopatía dilatada, la hipertrófica
que requieren de un manejo específico y diferente
(no obstructiva y obstructiva) y las diferentes varie-
al infarto del ventrículo izquierdo. Se describen las
dades de miocardiopatía restrictiva; se le dio espe-
principales complicaciones del infarto del miocar-
cial interés a la utilidad de los métodos incruentos
dio y su tratamiento actual, incluyendo la trombolisis
y la angioplastia primaria y angioplastia facilitada. para su detección y al diagnóstico diferencial con
Finalmente incluye e l espasmo coronario y breve- otras enfermedades cardiovasculares.
mente y se mencionan algunas alteraciones de los Asimismo, se analizan los procedimientos tera-
pequeños vasos coronarios; se enfatiza el importan- péuticos nuevos que e n algunos casos han logrado
te concepto de "viabilidad miocárdica", su recono- cambiar favorablemente tanto la clase funcional como
cimiento mediante ecocardiografía dinámica, me- el pronóstico de estos pacientes.
dicina nuclear y PET; asimismo, las implicaciones
pronosticas y terapéuticas que esto tiene e n el pa-
ciente afectado por insuficiencia coronaria así como Capítulo | 2 7
su diagnóstico y tratamiento.
T U M O R E S DEL C O R A Z Ó N
Por fortuna, las tumoraciones del corazón benig-
Capítulo i 2 5 nas o malignas, primarias o metastásicas no son
frecuentes; sin embargo, su presencia generalmen-
MIOCARDITIS te, se confunde con otras enfermedades cardiacas
La inflamación del miocardio es producida por d i - de aparición más frecuente e n la clínica diaria (val-
versos agentes infecciosos, alérgicos, autoinmunes, vulopatías, insuficiencia cardiaca o miocardiopa-
tóxicos, etc. En la fase aguda puede ser tan leve, tías). En la actualidad con la posibilidad de visualizar
que pase inadvertida por el paciente, o bien, pue- internamente las cavidades cardiacas y las paredes
den presentarse síntomas generales inespecíficos del corazón mediante la ecocardiografía es posible
acompañados de taquicardia persistente y cardio- hacer un certero diagnóstico e n vida del paciente
megalia. Finalmente, puede ser un proceso grave c o n altas probabilidades de curación mediante tra-
que cause gran postración, cardiomegalia, trastor-
tamiento quirúrgico, c u a n d o estas neoplasias no
nos d e l ritmo e insuficiencia cardiaca inatratable
son malignas. Se enfatiza e n el mixoma cardiaco y
que potencialmente p u e d e ser causa de muerte
su pleomórfico cuadro clínico, ya que es capaz de
para el paciente, las secuelas q u e deja un proceso
simular endocarditis infecciosa, lupus eritemato-
d e esta naturaleza, d e la misma forma pueden no
tener importancia clínica (extrasistolia aislada o tras- so, fiebre reumática, e t c . ; sin embargo, se m e n -
tomos de la conducción intraventricular como blo- ciona.también el diagnóstico y tratamiento de que
queos de rama), o bien, la secuela puede ser dilata- se asientan e n el corazón otras neoplasias benig-
ción de las cavidades ventriculares (cardiomegalia), nas y malignas así c o m o la innovación metastasica,
pero c o n función ventricular conservada y, final- su pronóstico y manejo.
XXIII
Por el contrario, la ignorancia puede ser causante
Capítulo ^28 de que un caso potencialmente curable acorte la
EL C O R A Z Ó N EN O T R O S P R O C E S O S vida de un enfermo al dejado evolucionar natural-
SISTÉMICOS mente por el desconocimiento del proceso. Así,
El corazón puede, e n muchas ocasiones, ser afecta- analizamos la persistencia del conducto arterioso, la
do en su estructura o su función por múltiples pro- comunicación ¡nterventricular, la comunicación in-
cesos sin constituir propiamente una enfermedad terauricular la estenosis pulmonar, la coartación
que lo afecte e n forma directa. aórtica y la trasposición "corregida" de los grandes
Conocer la repercusión que algunas condicio- vasos entre las malformaciones no cianógenas.
nes fisiológicas, c o m o lo es el embarazo, tiene para La tetralogía de Fallot, la conexión anómala de
e l corazón es de gran importancia, tanto para saber venas pulmonares y la trasposición clásica de los
interpretar dichos cambios que frecuentemente son grandes vasos, son las e n f e r m e d a d e s cianógenas
reconocidos c o m o anormales c o m o para intuir el descritas. Se incluye la e n f e r m e d a d d e Ebstein
pronóstico que tiene u n paciente previamente por la relativa f r e c u e n c i a c o n la que ocurre e n
cardiópata con e l propio e m b a r a z o . En otras oca- nuestro medio y por la no rara posibilidad de
siones el corazón sufre indirectamente por pade- diagnóstico diferencial con cardiopatía reumática
cimientos q u e , sin ser propiamente cardiacos, lo y miocardiopatías. En todas, se desglosan los as-
afectan e n ocasiones en forma importante, aun pectos embriológicos básicos, sus variedades clí-
c u a n d o sea indirectamente, tal es el caso d e la nicas, diagnóstico y las medidas terapéuticas más
anemia de gran cuantía y enfermedades endocri- adecuadas.
nológicas (hipertiroídismo o hipotiroidismo, acro-
Las malformaciones cardiovasculares complejas
megalia, etc.).
no son tratadas, porque no entran en el objetivo de
El análisis fisiopatológico de los sucesos permite esta obra. Por último, se analizan el concepto de s/íus
entender los cambios que en la anatomía y fisiología solitus, inversus o isomérico y las alteraciones que se
cardiaca se suceden, lo cual permite al clínico orien- pueden producir cuando la disposición anatómica y
tar el diagnóstico correcto. Se ha incluido a las val- espacial de los órganos es anormal y la forma como
vulopatías y el problema de las prótesis valvulares pueden reconocerse con métodos no invasivos.
especialmente las mecánicas, que requieren anti-
coagulación, con los problemas que ello implica
Capítulo 13Q
toxemia del embarazo por ser un padecimiento fre-
cuente y potencialmente grave. La descripción su- H I P E R T E N S I O N ARTERIAL P U L M O N A R
cinta de las alteraciones cardiovasculares consecuti- La descripción de este s í n d r o m e , se dejó al final
vas a procesos sistémicos extracardiacos es e l intencionalmente y a q u e e n su etiología se e n -
objetivo fundamental d e este capítulo. cuentra la mayoría d e las cardiopatías q u e han
sido tratadas e n capítulos previos. El tema se abor-
d a m e d i a n t e su definición y su etiología, de la
Capítulo^ 129
cual se intenta una clasificación. S e desglosa la
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS información obtenida por los diversos auxiliares
El capítulo d e las malformaciones cardiovasculares d e diagnóstico y se hace hincapié e n la semiolo-
congénitas es tan amplio y actualmente tan comple- gía ecocardiográfica de las causas cardiacas d e l
síndrome y d e las indicaciones precisas del estu-
jo, que por sí mismo ya constituye una subespecia-
dio h e m o d i n á m i c o .
lidad de la cardiología, que para abarcarla, se re-
quiere uno o varios libros para ese único propósito. Se describe el manejo de la hipertensión pul-
Por esa razón se escogieron aquellas cardiopatías monar potencialmente curable y d e la potencial-
congénitas que por la frecuencia c o n la que apare- mente incurable. Complementando esta sección,
cen e n la población general, deben ser conocidas se incluye la cardiopatía pulmonar aguda, consecu-
por todo médico. tiva a embolia pulmonar. Basados en su fisiopatolo-
gía, se explica el cuadro clínico, las alteraciones
En efecto, el reconocimiento precoz de ellas, es
electrocardiocráficas, hemodinámicas y en los gases
realmente una responsabilidad del profesional de arteriales. Se nace hincapié e n la utilidad del gam-
la medicina, si tenemos en cuenta que su diagnósti- magrama pulmonar la tomografía de alta resolución
c o clínico no es especialmente difícil, que los exá- y del ecocardiograma para el diagnóstico y pronós-
menes d e gabinete ofrecen la confirmación de la tico del síndrome.
mayoría de los casos y de que la medicina actual Finalmente se discuten las indicaciones poten-
puede ofrecerle al enfermo un tratamiento, incluso ciales de los diversos procedimientos terapéuticos
curativo, c u a n d o el diagnóstico ha sido oportuno. utilizados e n la embolia pulmonar.
XXIV
f
yue ¿niela /et cawera de medieína eótieíie
en yea/idadtena, matriea/a de eótadiante en fi/n
euváo indefinido(/uertiyincoee/aeáé/& termina
eaande- /a t^'eju elag#tam'tente> Áaeen e/e/
medica m i tmóa/w muid
XXV
1 INDICE GENERAL
Coautores V
Árbol genealógico d e la cardiología m e x i c a n a VII
Prefacio a la sexta edición XI
Agradecimientos XIII
Introducción XV
CAPÍTULO 2 FISIOLOGÍA D E LA C I R C U L A C I Ó N 17
Gastocardiaco 17 flujo Sanguíneo 23
Resistencias periféricas y pulmonares 19 Retorno venoso n
Resistencias periféricas 21 Presión venosa central.. 23
Presión arterial 22 Bibliógrafo 25
CAPÍTULO 4 ELECTROCARDIOGRAFÍA 65
Erectronsnlogta 65 Crecimientos auriculares y ventriculares 84
Propiedadesfisiológicasdel corazón 67 Crecimientos ventriculares 87
Teoría del dipolo. 70 Bloqueo de rama 93
Activación eléctrica del corazón 70 Bloqueos fasckulares - 96
Repolarízación del corazón 73 Infarto del miocardio 104
Triángulo de einthoven 74 Síndrome de WoW-Paríunson-VVl»ite (WPVV) 106
Leyes para calcular el eje eléctrico del corazón 77 Síndrome de Bragada 109
Posición eléctrica del corazón 83 Bibliografía 113
XXVII
Mexiletitia. 184 Adenosina. 188
Propafenona 184 Electrocardiografía ambulatoria 1*
Medicamentos betabloqueadores 185 Paro cardiaco 193
Calcioantagonistas (verapamil ydittiazem) 186 Síndrome QT largo 309
Amiodarona 187 Síndrome de Brugada 211
Tosílatodebretilio 188 Bibliografía 214
XXVIII
Estudio de l.i (unción ventricular 343 Conexiones auriculoventriculares 354
Estudio del ventrículo derecho 345 Conexiones ventriculoarteriales 354
Estudio de la cardiopatía isquémica 345 Nuevas técnicas ecocardiográfkas 362
Derrame pericárdico 345 Ecocardiografía dinámica y contraste miocárdico 366
Ecocardiografía de contraste 354 Ecocardiografia tridimensional 367
Cortocircuitos arteriovenosos 354 Bibliografía 369
Circuitos venoarteriales 354
C A P Í T U L O 13 RESONANCIA MAGNÉTICA,
NUCLEAR Y CORAZÓN 415
Características técnicas de la RMCV 415 Aneurisma aórtico 423
Cardiopatía isquémica 416 Disección aórtica. 424
Miocardiopatías 419 Hematoma intramural , 424
Enfermedad valvular 420 Aneurismas 424
Enfermedad pericárdica 421 Síndrome de Marfan 425
Neoplasias 421 Enfermedad vascular renal 42S
Cardiopatías Congénitas 421 Enfermedad arterial periférica 425
Valvulopatías 423 Enfermedad carotídea 426
Vasos sanguíneos 423 Bibliografía. 427
Patología vascular 423
XXIX
Tratamiento 503 Resine ron i/ación 522
Diuréticos 512 Tratamiento de dase funcional rv 524
Inhibidores de la ECA.. 514 Balón de contrapulsación intraórlko 527
Betabloq ue adores 517 Trasplante cardiaco 529
Tratamiento de dase funcional I 521 Disfunción diastólka 531
521 Bibliografía 535
Tratamiento de clase funcional H-lll
XXX
CAPÍTULO 21 ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS 717
Aneurisma aórtico 717 Diagnóstico de disección aórtica. 729
Fniopatologia 717 Historia natural y tratamiento 733
Factores etiología» _ 718 Tratamiento del aneurisma aórtico abdominal 737
Disección aórtica. 720 Tratamiento de la disección aórtica. 738
Cuadro dánico 721 Aneurisma de arteria pulmonar 739
Diagnóstico. 72S Bibliografía — 743
XXXI
CAPÍTULO 27 TUMORES DEL CORAZON 973
Mixonus auriculares 975 Fonomecanocardiograma 984
Mixoma de la aurícula izquierda 975 Ecocardiograma modo M 984
Ecocardiograma.. 978 Ecocardiograma bidimensional 984
Tomografía computada e imagen de resonancia *ngk)graf(a 985
magnética nuclear 980 Mixomas familiares 987
Estudio angiográfko 980 Tumores malignos 987
Electrocardiograma. 981 Bibliografía 992
Mixoma de aurícula derecha 983
CAPÍTULO 28 EL C O R A Z Ó N E N O T R O S PROCESOS
SISTÉMICOS 995
En el embarazo 995 Vtiocardiopatia r\>st-partum 1006
Cambios hemodinimicos 996 Cardiopatías congénitas y embarazo 1006
Manifestaciones clínicas 996 Hipertensión en el embarazo 1009
Vatvulopatias y embarazo 1000 Enfermedades Endocrinas y corazón 1016
UlerKrsismilr.il 1000 Hipotiroidrsrno y corazón 1021
Insuficiencia mitral .. 1002 Acromegalia y corazón 1024
Estenos» aórtica. 1002 El corazón en las coUngenopatias 1025
InsurVienáa aórtica. 1003 El corazón en el síndrome de anticuerpos anti-fosfolipidos 1026
Prótesis cardiaca. 1003 Bibliografía 1032
Ci rugía card iaca 1006
CAPÍTULO 30 H I P E R T E N SI O N P U L M ON A R 1125
XXXII
1
1
Capítulo 1 I Anatomía clí nica del corazón
•
E
l corazón se localiza en el mediastino medio, ASPECTO EXTERNO
apoyado sobre el diafragma. D e forma cóni
La forma del corazón es la d e un cono irregular
c a , tiene inclinación de su vértice hacia la
c o n una base, un vértice romo y 3 caras. D e aquí
izquierda y abajo, de modo q u e dos tercios del
el origen de los términos usados para referirse a
corazón están a la izquierda de la línea media y
estas superficies del corazón y q u e conviene des-
e l v é r t i c e s e sitúa a n i v e l d e l q u i n t o e s p a d o
cribir (figura 2 ) .
intercostal izquierdo en intersección c o n la línea
medio-clavicular e n donde normalmente puede a) El término base del corazón, considerando
ser palpable. Esta estructura es hueca y forma 4 su forma cónica, tiene localización postero-
cavidades c o n función de b o m b a : 2 aurículas y 2 superior y derecha, corresponde a superfi-
ventrículos. cies auriculares; sin embargo, es más fre-
En la clínica, el término corazón d e r e c h o hace cuente su uso al referirse exclusivamente a
referencia a la aurícula y ventrículo derechos; e l masa ventricular, e n cuyo caso, correspon-
término corazón izquierdo a la aurícula y ventrí- de a las porciones ventriculares más cerca-
culo izquierdos. El corazón d e r e c h o impulsa la nas al piso auricular.
sangre venosa a la circulación arterial pulmonar
de presión baja; el corazón izquierdo impulsa san- b) El ápex o punta del corazón, corresponde al
gre arterial a la circulación arterial sistémica de vértice del cono, tiene localización antero-
presión e l e v a d a . inferior e izquierda y está formado por el
ventrículo izquierdo.
En el corazón normal no hay comunicación
sanguínea entre corazón derecho e izquierdo, los c) La superficie que se apoya sobre el diafragma
que son separados por 2 tabiques musculares ali- se denomina cara diafragmática y correspon-
neados que se denominan septum ¡nterauricular al d e , en su mayor parte, a superficie ventricu-
que separa a las aurículas, y septum ¡nterventricu- lar izquierda; es sinónimo de cara inferior o
lar al q u e separa a los ventrículos. cara posteroinferior.
En la figura 1 se esquematiza la orientación de
d ) En la f i g u r a 3 se ilustra la posición que guar-
los septa, lo que determina a su vez la disposición
da el corazón in situ y muestra q u e la cara
espacial de las cámaras: las izquierdas son más pos-
anterior corresponde a la superficie ventri-
teriores y de éstas la aurícula; las cámaras dere-
cular derecha y septum, y la cara lateral a la
chas son más anteriores y d e éstas el ventrículo; las
superficie ventricular izquierda.
aurículas se localizan cefálicamente respecto a sus
ventrículos y, por último, las cavidades izquierdas Por fuera se visualiza la limitación entre aurícula
se sitúan abajo respecto a las derechas. y ventrículos por una depresión denominada sur-
CARDIOLOCfA
FIGURA 1 Orientación
espacial de los tabi-
ques. A : Vista anterior.
B: Vista lateral izquier-
d a . O b s é r v e s e su di-
rección de arriba hacia
abajo y de atrás hacia
adelante, así como la
inclinación que en la
vista lateral explica la
situación de las cavida-
des izquierdas que es-
tán abajo y atrás, res-
pecto a las derechas
BASE
CARA DIAFRAGMÁTICA
CARA ANTERIOR
M.O.
F I G U R A 2 Esquema representativo del CARA LATERAL
corazón como un cono irregular, para
demostrar sus superficies. M.O. = mar-
gen obtuso, MA. = margen agudo, S.I.V. APEX
= surco ¡nterventricular (léase texto)
OCTAVO CUERPO
VlKTfUAl
(SÓUCO AORIA DESCINDINIi
F I G U R A 3 Esquema de un
corte transverso de tórax, a
SIPTUM nivel del octavo cuerpo ver-
MEMBRANOSO tebral. O b s é r v e s e l a rela-
SEPTUM c i ó n d e l corazón con la pa-
INTERAURIOJLAR
red t o r á c i c a anterior, con el
SIPTLW esófago, c o n los pulmones y
CARA LATERAL
INTERMVTRICUIAR
la situación de la aorta des-
cendente. (A.l. = aurícula
izquierda, A . D . = aurícula
d e r e c h a , V . l . = ventrículo iz-
ESTERNÓN
a uierdo, V.D. = ventrículo
erecho)
ANATOMÍA CLÍNICA DEL CORAZÓN
co auriculovenlricular o coronario. La división e n - to con la pared del tórax, y que el resto se encuen-
tre ambos ventrículos se visualiza por u n surco ¡n- tra cubierta por tejido pulmonar. Si tomamos e n
terventricular anterior y otro surco ¡nterventricular cuenta la localización del esternón sobre esa su-
posterior que corren a lo largo del eje mayor d e los perficie libre del parénquima pulmonar, se obser-
ventrículos por sus caras anterior y diafragmática, vará que el corazón es accesible a través d e los
respectivamente, a partir del surco auriculovenlri- espacios intercostales (por ejemplo, para punción
cular y se unen hada el vértice a la derecha del pericárdica, introducción de marcapasos transto-
ápex. Los surcos descritos están ocupados por va- rácico, proyección de haces de ultrasonido, etc.).
sos que adelante se describen. El punto de con- Sólo e n u n a p e q u e ñ a área c e r c a n a al b o r d e
fluencia del surco auriculoventricular c o n el surco esternal izquierdo. No se señala gráficamente la
¡nterventricular posterior recibe el nombre de cruz relación del bronquio izquierdo y del nervio recu-
del corazón. rrente, situados por e n c i m a de la aurícula izquier-
d a , relación que es importante en cuanto a q u e
con la dilatación de la aurícula izquierda el bron-
RELACIÓN C O N ESTRUCTURAS VECINAS quio puede sufrir desplazamiento hacia arriba, y
el nervio sufre compresión que puede manifestar-
La f i g u r a 3 muestra las relaciones más importantes se c o n distrofia. Por último, las relaciones descri-
del corazón con las estructuras vecinas. C o n v i e n e tas explican los síntomas compresivos q u e sobre
recordar que por la proyección de la columna hada el esófago, tráquea o bronquios puede producir
la cavidad torácica, el diámetro anteroposterior del los aneurismas aórticos, sobre todo si se localizan
tórax es relativamente pequeño y prácticamente e n el cayado.
todo este espado lo ocupan el corazón y los gran-
des vasos, lo que explica por qué las grandes varia-
bles de depresión esternal, deformidad de la c o -
lumna dorsal o las asimetrías unilaterales del tórax ESQUELETO FIBROSO DEL CORAZÓN
son causas frecuen-tes de alteraciones en el tama- C u a n d o se considera la fuerza que el corazón con
ño aparente y forma del corazón e incluso de ha- sus 4 cámaras y un sistema complejo de válvulas
llazgos auscúltatenos anormales. Otra relación im- requiere para contraerse más de 1 0 0 , 0 0 0 veces
portante es la gran cercanía del esófago con la cada día, se comprende que se necesita de u n ar-
aurícula izquierda, lo que explica la utilidad y sen- mazón central c o n resistencia suficiente para so-
sibilidad que tiene el encontrar rechazo esofágico portar tal trabajo diario durante la vida de un suje-
como date indirecto de crecimiento auricular iz- to. Este armazón se llama esqueleto fibroso del
quierdo. Merece atención el hecho de q u e sólo corazón y está formado por 4 anillos fibrosos y las
una pequeña superficie ventricular está en contac- extensiones que de éstos nacen (figura 4 ) . Dos ani-
MÍ \
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AS1UOVUVUIAB RAMONA!
líos rodean a los orificios auriculoventriculares y septum interventricuiar muscular y por la superfi-
los dos restantes sirven de soporte a los troncos cie inferior derecha del septum membranoso c o -
arteriales aórtico y pulmonar y sus anillos valvula- rre el haz d e his. Estas relaciones son de impor-
res; las extensiones separan a las aurículas de los tancia clínica fundamental.
ventrículos y fijan a estas cámaras y a sus septa.
Otras dos extensiones importantes del esque-
VÁLVULAS DEL C O R A Z Ó N
leto fibroso s o n : la q u e extiende hacia abajo y
forma el septum m e m b r a n o s o , que unido a la El corazón tiene 4 válvulas bien definidas. Dos d e
c i m a del tabique ¡nterventricular muscular, d a éstas, (válvulas auriculoventriculares) comunican a
apoyo a las valvas aórticas posterior y coronaria las aurículas con sus ventrículos, y las dos restantes
d e r e c h a ; esto último explia por q u é las c o m u n i - (válvulas sigmoideas o semilunares) a los ventrícu-los
caciones interventriculares altas se pueden encon- derecho e izquierdo c o n las arterias pulmonar y
trar a c o m p a ñ a d a s d e i n s u f i c i e n c i a s i g m o i d e a aórtica respectivamente. Su función es mantener
aórtica. La otra extensión es la que u n e a la válvu- el flujo sanguíneo impuesto por la contracción
l a a n t e r o m e d i a l d e la m i t r a l c o n l a p a r e d miocárdica, en un solo sentido (de aurícula a ven-
posterolateral d e la raíz aórtica (figura 8 ) . En la trículo y d e ventrículo hacia la arteria). N o se hará
f i g u r a 5 se m u e s t r a la r e l a c i ó n d e l s e p t u m aquí mención de las válvulas rudimentarias que
membranoso c o n la válvula tricúspide, por deba- existen a la entrada de los vasos venosos a las
jo d e la cual separa a ambos ventrículos y por aurículas.
e n c i m a de la cual limita al ventrículo izquierdo
En la f i g u r a 4 se observa la relación que guar-
d e la aurícula d e r e c h a (septum atrioventricular,
dan los 4 planos valvulares entre si y la nomencla-
ver capítulo de EMBRIOLOGÍA). Montado sobre el
tura utilizada para designar a las válvulas y a las
valvas q u e las c o m p o n e n . S e l l a m a comisura
valvular a los puntos d e unión de una valva c o n
otra a nivel del anillo valvular: es éste el sitio de
predilección a partir de donde las secuelas cicatri-
zales de la fiebre reumática, causan fusión de las
valvas y por lo tanto estenosis valvular. Respecto a
las válvulas auriculoventriculares, es importante
tener en mente el concepto funcio-nal de que el
aparato valvular comprende al anillo de la válvula,
sus valvas, las cuerdas tendinosas y los músculos
papilares. Además, debe recordarse que por su
origen embriológico, la válvula mitral siempre dará
entrada al ventrículo izquierdo, independiente-
mente de la posición que tengan las aurículas.
VÁLVULA TRICÚSPIDE
' - i r
ANATOMÍA CLÍNICA DEL CORAZÓN
ANILLO
TRCUSKOIO imcúsnDi
VENTRÍCULOS
- 4 - '
CARDIOLOGÍA
VALVAS SIGMOIDEAS
M A R G E N \ A L \ U LAR
PCXKION DI LA VALVA
ASTÍROMETHAL (MITRAL
SIPTUM
(PORCIÓN LISAl
' - i r
ANATOMÍA CLÍNICA DEL CORAZÓN
a la unión d e la vena cava superior (VCS) y la por- hay límite preciso entre una estructura y otra. Mide
ción sinusal de la A D . Se localiza tan sólo a 1 mm 2 a 3 cm de longitud y su grosor no es mayor d e 3
o menos debajo del epicardio por lo cual es muy m m . La porción proximal atraviesa el esqueleto fi-
susceptible de d a ñ o por procesos pericárdicos broso y después el haz corre por el margen inferior
inflamatorios. Es atravesado por su arteria que pa- del septum membranoso montado sobre el septum
rece serle desproporcionalmente grande y se piensa interventricuiar muscular d e l que lo separa una
que por ser esta arteria una ramificación temprana banda densa de tejido fibroso al que se encuentra
de la aorta vía su coronaria, el nodo sinusal puede a d h e r i d o c u a n d o hay d e f e c t o interventricuiar
así sensar la presión sistémica. membranoso (comunicación interventricuiar basa/
media). Se comprende entonces la vulnerabilidad
de esta estructura cuando se corrige quirúrgicamen-
NODO AURICULOVENTRICULAR te un defecto del septum membranoso. Recuér-
dese asimismo la relación estrecha del septum
También se conoce como nodo d e Aschoff-Tawara.
membranoso con la pared posteromedial de la raíz
Es la única vía por la cual el estímulo sinusal pasa
aórtica, lo cual explica los bloqueos de la conduc-
normalmente a los ventrículos y en la que normal-
c i ó n A V c u a n d o hay esclerosis y c a l c i f i c a c i ó n
mente sufre un retardo e n su velocidad de con-
valvular aórtica (enfermedad de Lev) que puede
ducción para dar tiempo a la contracción auricu-
extenderse hacia el borde izquierdo del septum y
lar. Mide aproximadamente 8 mm de longitud y su
aun a la emergencia de la rama izquierda d e l haz
grosor aproximado es de 3 m m . Se encuentra de-
de His (figura 1 0 ) . A los 3 c m d e su origen el haz
bajo del endocardio septal de la A D por encima
de His se divide e n una rama derecha ( R D H H ) y
d e la tricúspide y delante del seno coronario (figu-
otra izquierda ( R I H H ) que corren por debajo del
ras 1 0 y 1 1 ) .
endocardio septal derecho e izquierdo, respecti-
vamente (figura 1 0 ) . La rama derecha de forma
tubular, es larga y delgada, se monta sobre la ban-
HAZDEHIS
da moderadora para dividirse cerca d e l músculo
Es continuación directa del nodo A V en el que las papilar anterior en numerosos haces que se distri-
fibras se han alineado a manera de cordón. No
MITRA!
HAZ I X RACHMAN —
HAZ Df MfNCKf1ACH
RAMA IZQtlURDA D f l HAZ Df HIS
HAZ Df THOREl —
SLBDT.1SION ANTERIOR
buyen por todo el endocardio ventricular derecho En fecha reciente Pastelin, Méndez y M o e han
en donde terminan en fibras de Purkinje. demostrado su participación en la propagación de
La R I H H es más bien plana, tiene dos subdivi- impulsos en Flutter auricular, así c o m o su posible
siones bien definidas; una subdivisión anterior que participación e n el llamado ritmo sinoventricular
se dirige al músculo papilar anterolateral y otra (ver capítulo de ARRITMIAS).
posterior que se dispersa como abanico en direc-
ción del músculo papilar posteromedial.
HACES ANÓMALOS
Las primeras ramificaciones e n red de Purkinje
d e las subdivisiones de la R I H H ocurren cerca de Son puentes de tejido muscular especializado que
estos músculos papilares y se extienden a todo el p e r m i t e n la e s t i m u l a c i ó n p r e m a t u r a d e los
endocardio ventricular izquierdo; sin embargo, es ventrículos (fenómenos de preexcitación). En la fi-
importante señalar que hay una serie de fibras pe- gura 1 2 se esquematizan los haces anómalos cono-
queñas entre el origen d e ambas subdivisiones que cidos y su nomenclatura. Los haces de Kent comu-
forman una red de Purkinje más temprana a nivel n i c a n : músculo banal auricular c o n ventricular,
del tercio medio d e l septum interventricuiar. pasando por el surco auriculoventricular. El haz de
lames es extensión de los tractos intemodales, pri-
mordialmente del posterior, que hace conexión di-
HACES INTERNODALES recta con las regiones caudales del nodo AV o el
haz de His de modo que el estímulo evitaría la por-
Conectan al nodo sinusal con el nodo AV. Son 3
ción cefálica del nodo AV. El haz de Mahaim, está
haces denominados anterior, medio y posterior (si-
constituido por fibras cortas que provienen del haz
n ó n i m o s d e haz de Bachman, Wenckebach y
de His para hacer conexión con la cima del septum
Thorel). En la figura 1 1 se ilustran las direcciones
interventricuiar. Estos haces son de gran importan-
que siguen estos haces. El haz de Bachman rodea
cia en la clínica, pues explican la fisiopatología de
por delante la V C S y se divide en una ramificación
los síndromes de preexcitación o conducción ace-
que cruza hacia la A l (aurícula izquierda) y otra
lerada c o m o el Wolff-Parkinson-Whrte y el Lown-
que desciende por el septum interauricular al nodo
Ganon-Levine (ver capítulo de ARRITMIAS).
A V ; el haz de Wencke-bach rodea por atrás a la
V C S y se divide en 2 ramificaciones que se dirigen
una hada la Al y la otra desciende al nodo A V e n
forma similar al ya descrito; el haz de Thorel des- ARTERIAS Y VENAS CORONARIAS
ciende por la crista terminalis y de ahí al nodo AV.
En los papiros smithsonianos que datan de 200 a.c.
La participación de los tractos internodales e n la
Se tiene la primera referencia que se hace a los
activación auricular en el corazón normal no ha
vasos del corazón. Fue G a l e n o (130 a.c.) quien les
sido bien definida. Se piensa, con base a su rápida
puso el nombre de "coronarias" a estos vasos. H o m -
velocidad de c o n d u c c i ó n , que más bien sirve para
bres célebres c o m o Leonardo, Vesalio y Harvey
asegurar la llegada del impulso sinusal al nodo AV.
describieron y representaron gráficamente los va-
sos coronarios c o n asombrosa exactitud. Sin e m -
bargo, este conocimiento solamente fue de interés
académico inclusive en 1 7 6 8 cuando Heberden
identificó c o m o síndrome a la angina pectoris, y
logró demostrar la relación entre angina pectoris y
obstrucción coronaria e n la autopsia del célebre
cirujano inglés John Hunter en quien se demostró
"osificación" de las coronarias después de haber
padecido en vida angina pectoris; en 1790, los tam-
bién patólogos Hillier, Parry y Jenner fueron los que
propusieron por primera vez en 1799 la creencia
d e que la trombosis coronaria es la causa de la
angina d e p e c h o . Los clínicos Osler, Herrick y
M c K e n z i e a principios d e ese siglo desarro-llaron
los conocimientos sobre la relación entre la angina
y patología coronaria para llegar al concepto gené-
F I G U R A 11 Esquema de los tractos internodales. rico de que el problema central es el deficiente
(léase texto)
ANATOMÍA CLÍNICA DEL CORAZÓN
aporte sanguíneo al miocardio. Vineberg con sus de la circulación coronaria izquierda (anillo
trabajos pioneros intentó en la década de los 4 0 de Vieussans).
mejorar este aporte sanguíneo con el desarrollo de
la técnica d e implantación de arterias mamarias b ) En un 5 5 % d e los casos d a la arteria del nodo
internas a las coronarias. Fue sones quien en 1953 sinusal.
describió la cinecoronariografía selectiva e n el hu- c) Ya s o b r e e l s u r c o a u r i c u l o v e n t r i c u l a r ,
mano y con ello vino el gran auge en el conoci- emergen de 3 a 4 ramas ventriculares dere-
miento de la historia natural d e la cardiopatía chas que son largas y delgadas y corren por
isquémica y el avance de la cirugía de las coronarias, la superficie anterior del V D . La última de
esta última sobre todo a partir d e la década de los
éstas, baja por el margen agudo (arteria mar-
7 0 . En el presente se c o n o c e a la cardiopatía
ginal derecha), y es la mayor de ellas).
isquémica como la causa principal de la muerte
e n países desarrollados. Sobra decir que el cono- d ) A nivel de la cruz del corazón, la C D se aco-
cimiento d e la anatomía de las coronarias ha mos- da e n forma d e «U» e n cuyo vértice nace
trado ser de suma importancia c o m o se verá e n el una rama perforante que va al nodo AV (ar-
capítulo de CARDIOPATÍA ISQUÉMICA. teria del nodo AV) en el 9 0 % de los casos.
Detrás de las valvas de la aorta, la pared de ese e) La rama terminal que se dirige hacia el mar-
vaso tiene tres dilataciones llamadas senos de val- gen obtuso emite ramificaciones ventricula-
salva. En la pared de los senos de Valsalva corres- res izquierdas que irrigan la mitad de la cara
pondiente a las valvas derecha e izquierda, se en- diafragmática del V I , y la descendente pos-
cuentra el orificio d e origen (ostium coronario) de terior da ramas perforantes que irrigan el
las arterias coronarias derecha e Izquierda. tercio posterior del septum cercano a la cara
diafragmática (figura 13). Asimismo, de su
trayecto por el surco auriculoventricular se
CORONARIA DERECHA (CD) desprenden pequeñas ramas auriculares.
De su ostium se dirige hacia adelante y a la dere-
cha, pasa debajo de la orejuela derecha e n direc-
CORONARIA IZQUIERDA (CI)
ción del surco auriculoventricular por el que c o -
rre, rebasa el margen agudo y llega cerca de la cruz Desde su origen en la aorta hasta su división se le
del corazón. En el 9 0 % d e los casos se divide aquí conoce como tronco de la coronaria Izquierda, el
en dos ramas terminales: una de ellas (la descen- que tiene una longitud que varia entre 2 y 2 0 m m .
dente posterior) baja por el surco interventricuiar Se divide después e n dos ramas terminales. La ar-
posterior en dirección del ápex, la otra sigue por el teria descendente anterior que viaja en dirección
surco auriculoventricular para terminar cerca del del ápex por el surco ¡nterventricular anterior, y la
margen obtuso (figura 1 3 ) . circunfleja que se dirige a la izquierda y corre por
el surco auriculoventncular.
Las ramas principales d e la coronaria dere-
La descendente anterior puede terminar cerca
cha son:
d e la punta aunque en el 6 0 % de los casos contor-
a ) La primera de ellas es la arteria del cono que nea el ápex y asciende más de 3 cm por el surco
se anastomosa con su similar que previene interventricuiar posterior.
CARDIOLOGÍA
ItOtaCOOtUUTIRU
COtONAlM l i Q C K I D A
COCI CONO -
AOKIMUlt
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- KAHA V I M I K l ( A i
» PIMOItlMI
F I G U R A 14 Circulación corona-
ria izquierda.
*4r
ANATOMÍA CLÍNICA DEL CORAZÓN
c) Cerca del origen de la marginal obtusa nace mayor c a l i b r e , es el d e las venas cardiacas ante-
una rama auricular izquierda llamada arte- riores que corren paralelas a las ramas de la C D y
ria circunfleja auricular que corre paralela a que confluyen e n una sola v e n a colectora que
la circunfleja sobre la superficie de la A l . desemboca por e l borde inferior d e la orejuela
C o m o ya fue mencionado, e n el 10 % de los d e r e c h a , a la A D . El drenaje venoso d e l VI se
casos, la descendente posterior es rama de l l e v a a c a b o p n m o r d i a l m e n t e por las v e n a s
la circunfleja, en cuyo caso todo el septum tributarias del seno coronario.
es irrigado por la circulación coronaria iz- D e la superficie del VI c o n f l u y e n venas
quierda. tributarias a la vena interventricuiar anterior que
del ápex se dirige al surco auriculoventricular iz-
D e b e aclararse que al hablar de ramas termi- q u i e r d o e n donde recibe e l n o m b r e de gran vena
nales ha sido c o n fines didácticos y a q u e existen cardiaca a la c u a l también d e s e m b o c a n venas
en todos los corazones normales comunicaciones q u e drenan al V I . Poco después de rebasar al
anastomóticas entre ramas d e una misma arteria margen obtuso una valva que emerge d e l borde
coronaria (homoanastomosis) y entre ramas de d i - inferior delimita el punto a partir d e l cual este
ferentes arterias (anastomosis intercoronarias). És- vaso recibe el n o m b r e d e seno c o r o n a r i o . Éste
tas se e n c u e n t r a n e n los septa y e n las paredes sigue por el surco auriculoventricular i z q u i e r d o ,
libres, e n el ápex y e n la c r u z . La longitud y el hasta llegar a la pared posteroinferior y paraseptal
diámetro d e estas anastomosis a u m e n t a n c o n la d e la A D , a d o n d e d e s e m b o c a , poco antes d e su
e d a d y alcanzan sus dimensiones normales a los entrada la A D , el seno coronario recibe a la pe-
2 0 años de e d a d . Bajo la influencia de i s q u e m i a , q u e ñ a v e n a c a r d i a c a y a la interventricuiar pos-
sus dimensiones anatómicas e importancia fun- terior (figura 1 5 ) .
cional aumentan.
Es importante recordar las relaciones entre las
desembocaduras de la V C I , el seno coronario y el
orificio tricuspídeo, cuyo conocimiento es de gran
DRENAJE VENOSO
utilidad práctica durante el cateterismo cardiaco o
U n a parte de éste y proveniente de la A D pri- cuando se instala un marcapasos transvenoso ya
m o r d i a l m e n t e , se hace directamente a cavida- que por su vecindad, frecuentemente se puede
des derechas por las p e q u e ñ a s venas de Tebesio, avanzar el catéter a través de la VCI o del seno
q u e drenan c e r c a d e los tabiques. O t r a v í a , de coronario en lugar de pasar al V D .
(.RAN VINA ( A R D I A ! A
4 *
CARDIOLOGÍA
GRANDES VASOS
De la Cruz M.V., Lecciones de embriología car- del Instituto Nacional de Cardiología, La Prensa
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4
-
., (CO) OTÉ
L
a circulación de la sangre se realiza mediante (subclavia, cava superior o en la aurícula derecha
el concurso de los tres componentes funda- misma) constituye la presión venosa central. La
mentales del sistema circulatorio: sangre llegada al ventrículo derecho es impulsada
hacia los pulmones para su oxigenación.
a) El corazón.
b ) El sistema arterial.
c ) El sistema venoso.
GASTO CARDIACO
El corazón impulsa la sangre hacia las arterias
(gasto cardiaco) en contra de una resistencia a su Es la cantidad d e sangre que sale del corazón en
vaciamiento impuesta por las arteriolas (resisten- un minuto.
cias periféricas); la interacción entre ambas fuer-
zas genera la presión arterial. Estos tres factores in-
fluidos por el sistema nervioso autónomo a través CONCEPTO
especialmente de secreción adrenérgica, es lo que El gasto cardiaco constituye la resultante final de
determina el flujo sanguíneo y la irrigación de los todos los mecanismos que normalmente se ponen
diversos órganos de la economía, lo cual culmina en juego para determinar la función ventricular
con la oxigenación tisular. (frecuencia cardiaca, contractilidad, sinergia de con-
Ya oxigenados los tejidos, el sistema venoso re- tracción, precarga y poscarga). Si tenemos en cuenta
coge la sangre desaturada de oxígeno y concentra- que el gasto cardiaco es de importancia primordial
d a de C O , c o m o producto final del metabolismo
2
para la v i d a , se c o m p r e n d e r á c ó m o en presencia
celular, para llevarla en contra de la gravedad has- de enfermedad cardiaca, la disminución del gasto
ta el c o r a z ó n ; este movimiento de la sangre se d e - c a r d i a c o d e inmediato se normaliza a e x p e n s a s
nomina retorno venoso y está influido por la canti- de utilizar mecanismos c o m p e n s a d o r e s q u e son
d a d d e sangre dentro d e l sistema circulatorio causa de síntomas (insuficiencia cardiaca) y c u a n -
(volumen sanguíneo), el grado de contracción o do a pesar de utilizar todos los m e c a n i s m o s de
dilatación de las vénulas (tono venoso), de la pre- c o m p e n s a c i ó n no se logra m a n t e n e r el gasto
sión intratorácica, que siendo negativa ejerce una cardiaco, estaremos en e l grado extremo de insu-
fuerza de " s u c c i ó n " d e la sangre proveniente de ficiencia cardiaca (choque cardiogénico) q u e ter-
las venas cavas, y por fin, de la presión d e llenado minará inexorablemente c o n la vida del paciente.
del ventrículo derecho. La interacción simultánea Algo similar sucede con la hipovolemia grave (cho-
d e estas fuerzas, determina la presión reinante den- q u e hipovolémico) o con la vasodilatación perifé-
tro del sistema venoso o presión venosa que cuan- rica e x t r e m a ( c h o q u e anafiláctico) aún c u a n d o la
do se determina a nivel de una v e n a intratorácica función cardiaca sea normal.
CARDIOLOGÍA
sup corp ( n v )
0 que cuando entró, por eso se encuentra una
2
Normalmente el índice cardiaco debe ser m a - gran diferencia arteriovenosa. Si por el contrario,
yor de 2.8 L/mVmin. el gasto cardiaco está muy aumentado, la cantidad
4 . Fracción d e e x p u l s i ó n (FE) de sangre también será mayor (figura 3). Si se le
ofrece la misma cantidad de 0 a un mayor volu-
Es el porcentaje d e sangre que sale del corazón en 2
cuando se encuentra por debajo de 5 0 %. sangre (50 mi). En el primer caso el oxígeno está
más concentrado en la sangre que e n el segundo.
EJEMPLO:
Función ventricular n o r m a l :
G s = 150 mi
FE = = 0.75 x 100 = 75 %
Vd = 200 mi
M a l a función ventricular
G s = 5 0 mi
FE = = 0.25 x 100 = 25 % 19 v o l %
Vd = 200 mi
12vol%
CÁLCULO DE GASTO CARDIACO
P r i n c i p i o d e Fick
Según el principio de Fick, e l gasto cardiaco se
puede calcular conociendo el consumo de oxíge- GC =
A-V
no en un minuto ( V 0 ) y dividiéndolo entre la di-
2
18
FISIOLOGÍA DE LA CIRCUIACIÓN
U t i l i d a d c l í n i c a d e l cálculo d e l gasto c a r d i a c o
c) C á l c u l o de cortocircuitos i n t r a c a r d i a c o s ,
arteriovenosos (Cl, CIV, P C A , etc.) venoar-
teriales (tetralogía y trilogía de Fallot, etc.) o
mixtos (atresia tricuspídea, transposición de
10,000 _ 1 mi de 0 es transportado
2
los grandes vasos).
200 en 50 mi de sangre (O2 muy diluido)
En ausencia de cortocircuitos intracardia-
F I G U R A 3 Gasto cardiaco. Principio de Fick cos, el gasto pulmonar total es igual al gasto
sistémico: cuando hay cortocircuitos arterio-
venosos, el gasto pulmonar es mayor que el
sistémico y por el contrario e n los cortocir-
Por lo tanto, obsérvese cómo la sangre sale muy cuitos venoarteriales el gasto pulmonar es
concentrada de 0 cuando el gasto es bajo, con gran
2
menor que el sistémico.
diferencia arteriovenosa (12-19 vol. %) menos con-
centrada cuando el gasto es normal, c o n menor d i - 3. La determinación del gasto cardiaco puede ser
ferencia arteriovenosa (14-19) v o l . %) y muy poco usada e n trabajos de investigación para cono-
concentrada de 0 c u a n d o el gasto es alto, c o n muy
2 cer los efectos que tienen diversos fármacos o
poca diferencia A-V (15-17 vol. % ) . procedimientos de asistencia mecánica sobre
Es importante entender este principio, pues e n dicho parámetro.
él se basa el cálculo del gasto cardiaco por otras
técnicas, c o m o las que utilizan colorantes (verde
de indocianina) en la que c o n el grado d e dilución RESISTENCIAS PERIFÉRICAS Y PULMONARES
del colorante inyectado, estará e n relación c o n e l (figura 4 )
gasto cardiaco o las que utilizan temperatura (ter-
modilución) que también se desprende del mismo Resistencia es la fuerza que se opone a l a presión
fundamento, pero en este caso lo que c a m b i a e n d e l flujo. En el territorio sistémico y pulmonar, la
gran magnitud (bajo gasto) o e n poca cuantía (gasto resistencia a la presión del flujo está determinada
altoi es la temperatura d e la sangre (ver CATÉTER DE fundamentalmente por el diámetro de las arterio-
SWAN-CANZ).
las; así, la arterioloconstricción aumenta la resis-
4^
CARDIOLOGÍA
• -ll-llll -
ciona el sistema d e "resistencia en paralelo". Si
supuestamente en reposo las resistencias en el sis- +
tema esplácnico (E) tiene un valor de 6 0 (la suma
de sus resistencias en serie) en el corazón (C) de 15
y en el músculo esquelético d e 4 0 ( M ) , al final del
sistema la resistencia total será d e 115 (figura 5 ) . Si
A C
lililí-III 11 5
5 B "
se desarrollara un ejercicio físico (figura 6) las re-
sistencias en el sistema muscular (M) disminuirían
para permitir un aumento e n la afluencia de san-
"—mi—mi— +
FIGURA 7 Digestión
—lililí—mil I —lililí —
ni mi mi u n i i II llllllllll
+ R3
R1 + R2 mentarían, disminuyendo su flujo; estos cambios
+ 10 = 30 permiten alterar las resistencias y la afluencia de
10 + in
sangre en ambos territorios, sin cambios significa-
F I G U R A 4 Resistencias en serie. Resistencias en tivos e n las resistencias totales. Si por el contrario,
paralelo se está llevando a cabo la digestión aumentará el
flujo sanguíneo intestinal para llevar a cabo la ab-
sorción de alimentos, lo cual se logra al disminuir
30 30 60 las resistencias de dicho territorio (figura 7) aumen-
tándolas e n el sistema muscular, en donde el aporte
sanguíneo no es tan necesario en ese momento, sin
cambio e n la resistencia total.
^ 4 -
FISIOLOGÍA DE LA CIRCULACIÓN
Resistencias periféricas
EJEMPLO:
a ) El cálculo de las resistencias sistémicas tiene
R p T _ PMAQ x 8 0 70 x 8 0 especial utilidad en las unidades de cuidados
GC intensivos, para el manejo del paciente gra-
5600 ve, especialmente con infarto del miocardio
= 1120 d/seg/cnr
complicado con falla cardiaca o en el trata-
miento de la insuficiencia cardiaca e n el
Resistencias p u l m o n a r e s postoperatorio de cirugía; este parámetro en
La fuerza que se opone al flujo pulmonar depende conjunto con el gasto cardiaco, la presión
por un lado del tono de las arteriolas pulmonares arterial y las presiones de llenado del cora-
(resistencias arteriolares pulmonares) y por otro, de zón son las que determinan el tratamiento
la presión reinante e n las vénulas pulmonares y farmacológico en estos enfermos.
aurícula izquierda, la suma d e ambas constituyen
las resistencias pulmonares totales. b ) Los efectos de diversos fármacos (especial-
mente vasodilatadores u otros antihiperten-
C á l c u l o d e las resistencias sivos) sobre las resistencias periféricas pue-
p u l m o n a r e s totales ( R P T ) den ser investigados c o n el cálculo de este
parámetro en estudios de investigación.
jjpj. _ Presión media de la arteria pulm. x 80
Gasto pulmonar total Resistencias pulmonares
A) VOLUMEN SANGUINEO
B) PRESIÓN INTRATORÁCICA
RETORNO
VENOSO
+ D 2 VD = PVC
C) "BOMBA" MUSCULAR
D) TONO VASOMOTOR
23
CARDIOLOGÍA
A *
1 HIPOVOLEMIA
K -»•
DV
K V
1f D VD =
PVC +
cí ) -»»
2
-»•
| VASOCONSTRICCIÓN
PERIFÉRICA C
RV f + D 2 VD — PVCt
D t
1 INSUFICIENCIA
CARDIACA
A t
B -*
C •*•
D t
RV f D 2 VD -f —
PVCt
•
A -»
B •*
INFARTO DEL VD R V D VD f
C •+ 2
D *
F I G U R A 10
•
4— BIBLIOGRAFÍA
25
Capítulo 3 I Historia clínica
"Quien prefiera la explicación imaginada a la ver-
dad austera, quien huya del análisis y quiera refu-
giarse en la síntesis, quien guste más del ropaje con
que se visten las ideas que el rigor científico que las
nutre, no tiene aptitudes para médico'
L
con afecto y tranquilidad le explica el significado
A HISTORIA CLÍNICA es una importante provee- de sus síntomas y la forma de cómo se debe abor-
dora de datos para el clínico que investiga la dar el procedimiento diagnóstico; asimismo, le dirá
presencia de un padecimiento cardiaco; por cuáles son las probables medidas terapéuticas que
ello, el interrogatorio, lejos de quedar obsoleto permitirán el alivio o la curación de sus males.
por el advenimiento de nuevas técnicas d e diag-
nóstico, ha trascendido a través del tiempo c o m o Ar/fecedenfes
uno d e los procedimientos que orientan firmemen- En este contexto el médico d e b e iniciar el interro-
te al médico hacia la presencia de una e n f e r m e - gatorio abordando ¡nicialmente los antecedentes
d a d . Así, pues, una buena semiología e n el inte- familiares. En cardiología los principales antece-
rrogatorio aportará una cantidad importante d e dentes que d e b e n buscarse son aquellos q u e se
datos, e n ocasiones suficientes para sustentar un refieren a enfermedades que tienen alguna influen-
diagnóstico, por e j e m p l o , angina d e p e c h o , peri- cia hereditaria, c o m o diabetes mellitus, miocar-
carditis aguda, o para sospechar la presencia d e diopatía hipertrófica, hipertención arterial, muer-
un padecimiento, c o m o estenosis mitral, insufi- te súbita e n j ó v e n e s (síndrome d e Q T largo),
c i e n c i a c a r d i a c a por la p r e s e n c i a d e d i s n e a , hiperlipidemias o muerte súbita, valvulopatía reu-
edemas o estenosis aórtica por la referencia d e mática o cardiopatía congénita. La presencia de
un síncope. También es posible descartar la pre- alguno de estos antecedentes familiares constituye
sencia de un padecimiento de origen cardiaco sólo un factor predisponente para que el p a c i e n t e
c o n la c u i d a d o s a semiología d e l s í n t o m a , por desarrolle una de estas enfermedades, sea por la
e j e m p l o , e l dolor torácico que es causado por transmisión hereditaria directa (miocardiopatía
herpes zóster o el e d e m a d e miembros inferiores hipertrófica, diabetes mellitus, hipertensión arterial,
que produce la insuficiencia venosa. síndrome de Q T largo, hipercolesterolemia, etc.),
CARDIOLOGÍA
29
4 -
CARDIOLOGÍA
causar disnea, tales como procesos pulmonares agu- tricuspídea grave, hipertensión pulmonar o infarto
dos y crónicos o grave a n e m i a . El descartarlos me- extenso del ventrículo derecho), el mecanismo fi-
diante la exploración física o c o n los métodos de siopatológico es un tanto distinto. Por un lado, se
gabinete apropiados, nos permitirá llegar a la c o n - produce hipertensión venosa sistémica que se debe
clusión de que la disnea es un síntoma de algún al aumento de la presión diastólica del ventrículo
proceso de origen psicógeno como: disnea suspirosa, derecho debido a la utilización del mecanismo de
crisis de pánico o manifestación de angustia, en cuyo Frank Starling (aumento del volumen diastólico in-
caso, el manejo diagnóstico y terapéutico será com- traventricular). En estas condiciones se produce ele-
pletamente distinto. vación de la presión de la aurícula derecha de las
venas cavas y de todo el sistema venoso sistémico.
Sin embargo, la falla de contracción ventricular trae
EDEMA consigo disminución del gasto cardiaco, lo cual con-
duce a una disminución del flujo renal y ello a su
Se denomina así a la acumulación anormal de lí-
vez estimula la secreción de renina, hormona que
quido en el tejido subcutáneo, el cual puede estar
al aumentar sus concentraciones plasmáticas favo-
localizado en miembros inferiores, cara, sitios d e
rece la generación de angiotensina I que es transfor-
decúbito, cavidad abdominal (ascitis) o generali-
mada hacia angiotensina II mediante la e n z i m a
zado lanasarca). C u a n d o es generalizado, puede
convertidora de la angiotensina (ECA). La angio-
incluir a las membranas serosas como la pleura o
tensina II, a través de sus receptores tisulares (recep-
pericardio Iderrame pleural o pericárdico).
tores AT-I) entre otras acciones producen secreción
En las enfermedades cardiacas ( c u a d r o 2) el de Aldosterona por la corteza suprarrenal, la cual
e d e m a es c a u s a d o p o r h i p e r t e n s i ó n v e n o s a como acciones fundamentales tiene la de producir
sistémica, o sea, la elevación de la presión venosa retención d e agua y sodio por el riñon c o n el
por impedimento al llenado del corazón, como su- consiguiente aumento del volumen ¡ntravascular de
c e d e en la pericarditis constrictiva, la estenosis tri- líquido; este aumento, aunado al incremento de la
cuspídea, miocardiopatía restrictiva o tumores que presión venosa sistémica, condiciona la extrava-
ocupan la aurícula o ventrículo derechos (mixoma sación de líquido al intersticio subcutáneo, el cual
grande, sarcoma cardiaco, etc.). En estos casos los se manifiesta por e d e m a .
pacientes experimentan primero e d e m a de miem-
bros inferiores que pronto asciende de piernas a Por lo tanto, e n e l paciente con insuficiencia
muslos, de muslos hacia e l abdomen (ascitis), el cardiaca congestiva, el e d e m a es progresivo ini-
cual se manifiesta por un aumento progresivo del ciándose en los miembros inferiores de predomi-
volumen abdominal y posteriormente puede nio vespertino y ascendente. C u a n d o este síntoma
culminar con anasarca y derrames pleurales. se acompaña de disnea, taquicardia, cardiomega-
En la insuficiencia cardiaca congestiva, sea glo- lia y ritmo de galope estaremos en presencia de un
bal (falla de contracción de ambos ventrículos) o cuadro de insuficiencia cardiaca congestiva.
sólo insuficiencia ventricular derecha (insuficiencia En los grados extremos, también habrá edema
facial (anasarca). En los niños pequeños, la hiper-
tensión venosa sistémica que acompaña a la insufi-
ciencia cardiaca se manifiesta primeramente por
CUADRO 2 e d e m a facial, porque e n ellos se mantiene en
ENFERMEDADES CARDIACAS decúbito dorsal la mayor parte del tiempo, antes de
CAUSANTES DE EDEMA que se haga evidente en ios miembros inferiores.
id
HISTORIA CLÍNICA
enfermedades que con mayor frecuencia son causa que lisa el coágulo fresco recién formado y se restitu-
de dolor precordial son las alteraciones isquémicas ye la circulación coronaria del área afectada. De esta
del corazón (angina d e pecho o infarto del mio- m a n e r a , se e s t a b l e c e u n a l u c h a d e l s i s t e m a
cardio), la inflamación pericárdica y la disección procoagulante que tiende a obstruir la arteria co-
aórtica. El conocimiento de la fisiopatología de cada ronaria (cascada de la coagulación) c o n el sistema
una de ellas nos permite reconocer c o n cierta pre- fibrinolítico (anticoagulante) que tiende a lisar el
cisión o por los menos sospechar, alguna d e estas trombo; si gana el primero habrá trombosis coro-
causas de dolor precordial y poder diferenciarlo de naria que puede ocluir totalmente la arteria y dar
otros procesos (principalmente psicológicos), aun lugar a un infarto del miocardio, mientras que si
cuando e n ocasiones, a pesar d e una semiología gana el segundo desaparecerá el coágulo y queda-
precisa, no es posible c o n tan sólo el interrogatorio rá la arteria permeable.
diferenciarlo del intenso dolor producido por algu-
Este cuadro fisiopatológico es causa de la angi-
nos padecimientos esofágicos.
na inestable y explica porqué el dolor precordial
El dolor precordial producido por isquemia puede tener mayor duración, desaparecer e n for-
miocárdica tiene su origen e n la falta d e riego ma espontánea y con duración variable sin rela-
coronario e n alguna área del corazón, sea por oclu- ción con e l esfuerzo. Finalmente, la trombosis y la
sión anatómica o funcional, parcial o total, transi- oclusión de una arteria coronaria d a lugar a isque-
toria o permanente d e una arteria coronaria. La mia aguda y absoluta de un área del miocardio,
oclusión parcial pero significativa ( > de 70%) de que de no reperfundirse poco tiempo después dará
una arteria coronaria por una placa de ateroma, lugar a necrosis del miocardio afectado y ello es la
t r a e r á c o m o c o n s e c u e n c i a q u e e l riego d e l causa del infarto del miocardio. Así, pues, la is-
miocardio dependiente de dicha arteria puede ser quemia miocárdica se traduce por la presencia de
suficiente durante el reposo; sin embargo, si el su- d o l o r o p r e s i v o p r e c o r d i a l q u e r e a l m e n t e es
jeto realiza un esfuerzo (caminar, subir escaleras, retroesternal, difuso. El paciente lo refiere como
acto sexual, etc.) el aumento de la demanda de "algo pesado en el pecho", como una "plancha
oxígeno por el corazón no puede ser suplida en la que le oprime el pecho", c o m o "algo atorado" o
región miocárdica irrigada por la arteria parcial- c o m o "opresión retroesternal dolorosa", todo ello
mente obstruida (desequilibrio aporte demanda), en estrecha relación c o n el esfuerzo (angina de
lo c u a l dará lugar a la aparición de i s q u e m i a pecho); se irradia a uno o ambos hombros, al
miocárdica durante el esfuerzo. Ello se traduce por cuello y a maxilar inferior, a uno o ambos brazos o
dolor retroesternal que aparece precisamente re- puede ser transfictivo a la espalda. C u a n d o e l cua-
lacionado c o n el esfuerzo y el cual desaparece unos dro de isquemia es importante puede (además del
minutos después (como máximo 15) de adoptar dolor opresivo) aparecer palidez y diaforesis, todo
el r e p o s o (angina d e H e b e r d e n ) . C u a n d o la lo cual cede en el momento en el que el paciente
isquemia miocárdica es consecuencia de espasmo adopta el reposo o se le aplica una tableta sublingual
coronario (angina de Prinzmetal), el dolor de nitroglicerina o isosorbide. En algunas ocasio-
precordial aparece durante el reposo (preferente- nes, el cuadro clínico lo desencadena la baja tem-
mente durante el sueño), su duración es variable peratura o el ejercicio después de comer y, final-
(entre 10 y 3 0 minutos), usualmente cede en for- mente, el dolor o sensación opresiva no aparece
m a espontánea (cuando cede el espasmo arterial), e n el pecho sino e n los sitios de irradiación: maxi-
pero se debe de tener e n consideración que e l lar inferior (se refiere c o m o "dolor d e dientes"), al
dolor puede llegar a ser intenso y confundirse c o n cuello o a las articulaciones de las "muñecas", siem-
el producido por un infarto del miocardio. pre en relación c o n el esfuerzo.
Otra forma de isquemia miocárdica es la que se La intensidad del dolor es desde leve hasta
presenta cuando una placa de ateroma intracoro- intenso, pero la mayor parte de las veces es mo-
naria se rompe y permite que se ponga en contacto derado. Este cuadro caracteriza a la angina de pecho.
el núcleo lipoídico y el factor tisular de la placa con En la angina de Prinzmetal (espasmo coronario),
la sangre, lo cual constituye el mecanismo gatillo el dolor es casi siempre retroesternal. Puede llegar
para desencadenar la cascada de la coagulación, por a ser intenso e incluso confundirse con la presen-
lo que de inmediato se forma un trombo coronario cia de un infarto del miocardio, aparece caracte-
que obstruye la circulación sanguínea hacia el rísticamente e n el reposo pero cede fácilmente con
miocardio tributario de dicha arteria (isquemia mio- la administración de nitroglicerina o isosorbide
cárdica); de inmediato actúa el sistema fibrinolítico sublingual. El dolor precordial de la angina inesta-
CARDIOLOGÍA
ble puede ser leve o muy intenso, d e duración va- acompañado de palidez y diaforesis, el cual va dis-
riable opresivo, c o n aparición v desaparición irre- m i n u y e n d o e n forma paulatina e n el curso d e las
gular o incluso repetida 'angina subintrante). Todo siguientes horas.
paciente que presenta por primera vez un dolor Finalmente, la dilatación aguda del esófago y el
c o n características de coronario, debe de conside- espasmo esofágico pueden ser causa de un dolor
rarse c o m o angina inestable (angina de reciente precordial imposible de distinguir de un infarto del
comienzo), especialmente si aparece en el reposo. miocardio. En estos casos sólo la evolución de los
Finalmente, e l c u a d r o d i r i i c o d e infarto del cambios electrocardiográficos o la determinación
miocardio se caracteriza por ta aparición súbita de seriada de enzimas séricas (mioglobina, troponina,
un dolor o p r e s i v o retroesternal d e e v o l u c i ó n creatin fosfoquinasa, etc.). En efecto, los cambios
creciente, con las irradiaciones descritas pero que electrocardiográficos característicos de infarto del
llega a ser insoportable por su intensidad; se a c o m - m i o c a r d i o o la e l e v a c i ó n d e la c o n c e n t r a c i ó n
paña de diaforesis pronisa. fría y palidez. En oca- plasmática de las enzimas permiten reconocer la
siones aparece n á u s e a , v ó m i t o y sensación d e presencia de necrosis miocárdica, mientras que la
muerte inminente: e l dolor puede tener duración normalidad de ambos estudios orientan hacia el
de varias horas v n o c e d e c o n vasodilatadores padecimiento esofágico.
coronarios. C a b e me»*donar que aproximadamen-
te en 5 0 % d e los casos e l cuadro de infarto del
miocardio es precédate d e angina d e pecho (esta- CIANOSIS
ble o inestable» v Hasta e n 2 0 % es precedido por
Es la coloración azulosa o violácea de la piel y
angina d e reciente c o a a e n z o
mucosas.
Por su parte, la pericarditis aguda también es Normalmente la sangre venosa pasa al pulmón
causa d e dolor p»ecu»rSal q u e es moderado o in- a oxigenarse; cuando sale a la circulación sistémica,
tenso, difuso mtMMy Las principales característi- va una gran concentración de oxígeno (la molécu-
cas que pcimtten b o n e n t t b ó n diagnóstica son: la de hemoglobina se satura en más d e 9 0 % ) , lo
que por un lado traduce el transporte de oxígeno
a) A u m e r s a s^grexac.-. amenté con los movi- hacia todos los tejidos d e la economía y por otro
mientos respr atunes y especialmente con la contribuye a la coloración normal de la piel. Cuan-
¡nspiraacr. p - . r _ - c ¿ do se reduce importantemente la cantidad d e oxí-
b) A u m e n t a f - a - r a m e n t e c o n e l d e c ú b i t o geno e n la sangre q u e va hacia la circulación
y mejora c o n l a posición sentada y el sistémica (insaturación arterial de oxígeno), apare-
c e cianosis. Así, cuando existe una comunicación
ortostatismo.
anormal entre la sangre venosa y arterial dentro
c) A u m e n t a c o n los movimientos de latero- del corazón o los grandes vasos y por razones ana-
flexión y rotaocn -¿lera! del tronco. tómicas o hemodinámicas (hipertensión pulmonar,
cabalgamiento aórtico, estenosis pulmonar, etc.),
Asimismo, una caracterisbca que también pue-
la sangre venosa (insaturada de OJ) alcanza la cir-
de ayudar a diferenaaric oe j n dolor producido
culación sistémica, aparecerá cianosis. En otras pa-
por u n infarto d e l m i o c a r d i o , es q u e el dolor
labras, hay cardiopatías congénitas llamadas cia-
pericárdico es continuo v puede durar varios días,
nógenas porque dentro de su cuadro clínico está
aun cuando sea muy ¡menso.
precisamente producir cianosis.
El dolor torácico prcdubdo por la disección aórtica
se localiza en el precordio. si la desección es de la aorta En otras ocasiones, son las enfermedades pul-
ascendente, y en la cara posterior del tórax, si la aorta monares agudas (neumonía o embolia pulmonar)
descendente torácica es la que sufre la disección. Este o crónicas (neumopatía obstructiva, restrictiva,
proceso usualmente causa un dolor de gran intensi- intersticial difusa) las que impiden una oxigena-
dad. La característica fundamental para poder dife- ción a d e c u a d a d e la sangre. En ellas la sangre
renciarlo clínicamente del infarto del miocardio, es venosa puede llegar al pulmón y al estar obstrui-
que éste produce un dolor creciente en el que su das las arterias (embolia o trombosis pulmonar) que
intensidad aumenta progresivamente hasta llegara llegan al alveolo, la sangre sigue por otras arterias
ser insoportable. Por el contrario, el dolor de la q u e sin pasar por los alveolos (cortocircuitos
disección aórtica es decreciente. venoarteriales intrapulmonares) alcanzan las venas
pulmonares y las cavidades izquierdas, sale a la cir-
En el momento d e la disección aparece brus-
culación sistémica sin haberse oxigenado y, por lo
c a m e n t e un d o l o r r e t r o e s t e r n a l i n s o p o r t a b l e
E4-
HISTORIA CLÍNICA
tanto, provocan insaturación arterial que cuando es muy intensa, la exploración del área precordial es
de suficiente cuantía pueden llegar a ser causa d e normal, lo mismo que el electrocardiograma, la pla-
cianosis. O t r o mecanismo de insaturación arterial c a de tórax y el ecocardiograma; el individuo se
causado por neumopatía ocurre c u a n d o los bron- encuentra en buenas condiciones generales y prác-
quios o bronquiolos están obstruidos (por m o c o , ticamente asintomático, excepto por la cianosis. La
tumor, secreciones o espasmo) y el oxígeno n o existencia de fístulas arteriovenosas pulmonares que
llega al capilar pulmonar, luego n o hay intercam- se manifiestan por la presencia d e un soplo conti-
bio gaseoso y la sangre venosa alcanza las cavida- nuo e n la espalda, orientan firmemente hacia el
des izquierdas y la aorta sin haberse oxigenado, lo diagnóstico preciso.
que produce cianosis.
Por otro lado, la historia de síntomas de evolu-
En conclusión, aun cuando la cianosis universal c i ó n crónica (tos, expectoración, disnea de tipo
puede tener otras causas, siempre que se aprecia en respiratorio, cuadros repetidos de embolia pulmo-
un paciente debemos pensar en enfermedad cardiaca nar, etc.) evidencian el origen pulmonar d e la cia-
o pulmonar como posible causa (cuadro 3 ) . La cia- nosis. En ellos se deberán practicar los exámenes
nosis producida por cardiopatías congénitas en la d e gabinete de tipo neumológico más apropiados
gran mayoría de los casos se acompaña de soplos para corroborar el diagnóstico.
precordiales, lo que permite la sospecha diagnóstica Finalmente, hay algunas alteraciones hematoló-
de su presencia. En los raros casos de conexión anó- gicas que pueden ser causa de cianosis universales,
mala total de venas pulmonares hacia la vena cava de las cuales la policitemia vera o secundaria son las
inferior puede no haber soplos cardiacos, al igual más frecuentes. En ellas la presencia de un hemató-
que e n los casos de C I A , C I V y P C A que se compli- crito elevado puede dar la clave para el diagnóstico,
can c o n hipertensión pulmonar. En ellos la ciano- e n conjunto con el cuadro clínico (cuadro 3 ) .
sis se acompaña de signos de hipertensión pulmonar •
y la mejor forma d e diagnóstico preciso es el eco-
cardiograma bidimensional con técnica de contraste SÍNCOPE
y técnica Doppler codificada en color, la cual los
descubrirá a la cabecera del enfermo y en forma Es la pérdida transitoria d e la c o n c i e n c i a , debido
incruenta. C u a n d o el paciente tiene una cianosis a déficit de riego cerebral. El síncope es, pues,
uno de los s í n t o m a s más i m p o r t a n t e s e n
cardiología porque indica gravedad. En otras pa-
labras, es un aviso de un grave proceso que puede
causar la muerte y c u y a génesis en muchas oca-
siones se trata médica o quirúrgicamente para evi-
CUADRO 3 tar un desenlace fatal. C u a n d o el síntoma es c o n -
CAUSAS MAS FRECUENTES DE CIANOSIS dicionado por la administración de un fármaco
1. CARDIOVASCULARES: indica sobredosificación o hipersensibilidad del
a) CIA, CIV, PCA con hipertensión pulmonar paciente a la droga (por idiosincrasia o franca in-
toxicación).
b) Tetralogía de Fallo!
• Conexión anómala total de venas Los procesos cardiovasculares que son causa de
pulmonares un síncope pueden estar ubicados e n el sistema
• Trasposición de grandes vasos vascular propiamente dicho, en el corazón mismo
• Cardiopatías congénitas complejas o tener una causa eléctrica (cuadro 4 ) .
cianógenas
El síncope por reflejos vagales es probablemente
c) Fístulas arteriovenosas pulmonares el más c o m ú n y en su génesis siempre está involu-
crada una acción vagal: náusea o vómito, manio-
2. PULMONARES: bra de Valsalva intensa al defecar, etc., que prece-
a) Agudas de al síncope neurocardiogénico.
• Embolia pulmonar
La hipotensión ortostática c o m o causa de sín-
• Neumonía
c o p e , la gran mayoría de las v e c e s es producida
b) Crónicas por fármacos a n t i h i p e r t e n s i v o s ( b l o q u e a d o r e s
• Neumopatía obstructiva ganglionares, vasodilatadores o betabloqueado-
• Neumopatía intersticial res), por lo q u e c u a n d o a p a r e c e , en general, sig-
• Neumopatía restrictiva nifica sobredosificación farmacológica e n un pa-
• Neumopatía vascular ciente hipertenso o la asociación de neuropatía
33
CARDIOLOGÍA
CUADRO 4
SÍNCOPE
Sistema Alteraciones Alteraciones
vascular cardiacas electrofísiológicas
1. Síncope neurocardiogénico 1. Estenosis aórtica grave 1. Síndrome del seno carotídeo
2. Hipotensión ortostática 2. Mixoma auricular 2. Síndrome del seno enfermo
3. Fenómeno de la primera dosis 3. Estenosis pulmonar grave 3. Bloqueo AV de 2o. grado Mciliit/ II
4. Insuficiencia vascular cerebral 4. Miocardiopatía hipertró- 4. Bloqueo AV completo
5. Hipertensión pulmonar grave fica obstructiva 5. Taquicardia ventricular helicoidal
6. Embolia cerebral 6. Taquicardia ventricular sostenida
(monomórfica o polimórfica)
7. Taquicardia auricular en presencia de
estenosis aórtica
8. Fibrilación auricular y Wolff-Parkinson
White
9. Taquicardia auricular de alta frecuencia
10. Flutter auricular 1:1
11. Síndrome de Brugada
visceral en un individuo que además d e ser hiper- diplopia o inestabilidad postural. Este padecimiento
tenso es d i a b é t i c o . generalmente se presenta en pacientes mayores de
En el anciano, los mecanismos cardiovasculares 60 años c o n signos de aterosclerosis acentuada en
hemostáticos frecuentemente aparecen en forma otros territorios y no raramente hipertensos.
retardada o actúan insuficientemente, lo cual pue- Por otra parte, la embolia cerebral puede m a -
de causar síncope por hipotensión ortostática, des- nifestarse primeramente por un síncope, pero se
pués de la ingestión de comida o con la micción. sospecha la oclusión embólica de una arteria cere-
Ello se debe a que la disminución d e la distensibili- bral c o m o causa cuando al despertar el paciente
dad del ventrículo izquierdo no permite un mayor tiene algún déficit neurológico (disfagia, hemipa-
llenado diastólico c u a n d o e l sujeto adopta e l resia, afasia, etc.), transitorio o permanente. Final-
ortostatismo y por ello e l gasto cardiaco no aumen- mente, la hipertensión pulmonar primaria o secun-
ta, disminuyendo así e l riego cerebral. Este hecho daria, cuando es muy grave, puede ser causa de
se magnifica si, por otro lado, se pierde el reflejo síncope, especialmente d e esfuerzo, ya que la inex-
vasoconstrictor ortostático. El resultado final es me- tensibilidad d e la vasculatura pulmonar imposibi-
nos riego cerebral por disminución del gasto cardiaco lita al corazón para aumentar el gasto cardiaco
e hipotensión arterial, lo que da lugar a un cuadro c u a n d o es requerido por un esfuerzo físico.
sincopal.
El síncope de origen propiamente cardiaco se
El fenómeno de la primera dosis aparece des- produce por una grave obstrucción a la salida de
pués de la administración de prazosina, especial- la sangre del corazón por una estenosis aórtica, pul-
mente e n ancianos o pacientes con hipovolemia monar o por un mixoma de la aurícula izquierda.
(diuréticos) y tiene el mismo mecanismo d e hipo- Cuando un paciente tiene un síncope c o m o sínto-
tensión ortostática. m a , la exploración física dará la pauta diagnóstica,
Frecuentemente el síncope puede ser manifes- ya que los signos clínicos de las estrecheces valvu-
tación de insuficiencia vascular cerebral, especial- lares son características y al mismo tiempo se sabrá
mente cuando el tronco vertebrobasilar está par- que la estenosis aórtica (soplo sistólico e n foco
cialmente obstruido por placas de ateroma, o bien aórtico) o pulmonar (soplo sistólico e n foco pul-
cuando esta alteración se acompaña d e espasmo monar) es muy acentuada.
arterial (insuficiencia vascular cerebral transitoria). C o n respecto al mixoma de la aurícula izquier-
Oclusión embólica o trombótica con trombo fresco da, llama la atención que los signos acústicos se-
puede ser lisado fácilmente (fibrinolisis), e n estos mejan mucho a la estenosis mitral; sin embargo,
casos no es raro q u e el síncope sea precedido d e esta valvulopatía rara vez es causa de síncope, de-
34
HISTORIA CLÍNICA
4*
CARDIOLOGÍA
malice la presión arterial; si fuera necesario se miedo y aprensión en algunos pacientes. Convie-
administra una carga de solución salina por vía ne enfatizar que no se d e b e a la extrasístole mis-
intravenosa. La indicación y la cantidad d e solu- ma, sino al latido postextrasistólico que es muy
ción administrada dependerá d e la normalización enérgico debido a la potencialización post-extra-
de las cifras de presión arterial cuando se demues- sistólica d e la contractilidad después d e la pausa
tra la presencia de un síncope neurocardiogénico. compensadora. En otras ocasiones, aparecen e n
El tratamiento de elección es la administración d e forma brusca palpitaciones rápidas, rítmicas e in-
betabloqueadores (especialmente pindolol) (para tensas que desaparecen también e n forma brusca
evitar el aumento de la frecuencia cardiaca y la con una duración variable, usualmente de minutos
contractilidad excesiva del corazón que estimula y más rara vez de horas. Cuando aparece e n jóve-
al reflejo de Bezold-Jarisch) o disopiramida (efecto nes o adultos aparentemente sanos debe sospecharse
anticolinérgico). En casos e x t r e m o s , c u a n d o la la posibilidad de taquicardia paroxística auricular.
bradicardia sinusal es causa del síncope y es re-
C u a n d o estos mismos síntomas aparecen e n un
fractaria a tratamiento farmacológico, se requeri-
adulto maduro o de edad mayor pero las palpita-
rá la instalación de un marcapasos definitivo de
ciones son d e aparición irregular por paroxismos o
doble cámara (ver capítulo de ARRITMIAS: MARCA-
en forma sostenida, debe de sospecharse la posi-
PASOS). Por fortuna, estos casos son raros. El trata-
bilidad d e fibrilación auricular.
m i e n t o s i e m p r e d e b e ir a c o m p a ñ a d o d e una
hidratación suficiente con bebidas que contengan C u a n d o este síntoma con las características des-
NaCI (agua mineral). critas aparece e n un joven sé debe sospechar la
posibilidad de fibrilación auricular en presencia de
valvulopatía mitral. Si el paciente es maduro o de
e d a d m a y o r y sufre d e cardiopatía i s q u é m i c a
LIPOTIMIA (usualmente infarto d e l miocardio antiguo), se re-
Es la sensación de desvanecimiento, sin llegar a fiere palpitaciones autolimitadas acompañadas de
perder la conciencia. Este síntoma, por lo tanto, diaforesis y lipotimias, sospechar la presencia de
tiene la misma semiología, etiología y significancia taquicardia ventricular.
que el síncope, sólo que se considera de menor
gravedad o intensidad, ya que no produce pérdida
FATIGABILIDAD
del conocimiento.
Este síntoma puede definirse como la sensación de
cansancio o debilidad muscular al realizar un es-
PALPITACIONES
fuerzo. La fatigabilidad se debe a la reducción del
Es la percepción consciente del latido cardiaco por gasto cardiaco; al disminuir la cantidad de sangre
el paciente, el cual normalmente no se percibe, lo que sale del corazón n o se logran suplir las de-
que se constituye en un hecho de alarma, aunque mandas metabólicas del músculo esquelético, las
la mayoría de las veces no traduce patología, es- que aumentan al realizar su función durante el ejer-
pecialmente cuando el paciente durante la noche cicio muscular, lo cual se traduce clínicamente por
en estado de quietud percibe sus propios latidos falta d e fuerza al llevar a cabo una actividad física.
del corazón; en otras condiciones, estos son fácil- La fatigabilidad debe de diferenciarse d e la disnea
mente percibidos c u a n d o a p a r e c e t a q u i c a r d i a de esfuerzo, con la que se confunde muy a menu-
sinusal tal y como acontece c o n la ansiedad, ingesta do y cuyo significado semiológico es diferente. En
de medicamentos con efecto anticolinérgico efecto, la fatigabilidad es causada con mayor fre-
(algunos antiespasmódicos) o adrenérgico (algunos cuencia por la insuficiencia cardiaca, especialmen-
antidepresivos o antihipertensivos), anemia o hi- te cuando el paciente se encuentra en clases fun-
pertiroidismo. En estos casos las palpitaciones se cionales III (incapacidad física al hacer pequeños
presentan en forma continua o por largos periodos esfuerzos) o IV (incapacidad física e n el reposo).
y son de aparición y desaparición gradual. También aparece c u a n d o existe alguna limitación
e n la salida de sangre del corazón con el esfuerzo,
Sin embargo, este síntoma d e b e poner alerta c o m o sucede con las estenosis valvulares graves:
al clínico por la posibilidad de arritmias cardiacas. aórtica, mitral, pulmonar y tricuspídea, con las
Es frecuente que el paciente refiera una sensa- masas o tumores que impiden el llenado ventricular
c i ó n de vuelco e n el p e c h o , e n el epigastrio o e n o la salida de sangre del corazón (trombos gran-
el cuello, ello usualmente es la traducción clínica des, mixomas, sarcomas u otros tumores) que ocu-
d e extrasístoles ventriculares; este síntoma causa
HISTORIA CLÍNICA
pan alguna o varias d e las cavidades cardiacas. Los aquellos casos de cardiopatías congénitas que
síndromes restrictivos (pericarditis constrictiva o sobrecargan volumétricamente el ventrículo
miocardiopatía restrictiva) asimismo la ocasionan derecho, dado que esta cavidad, q u e es ante-
y, finalmente, la hipertensión arterial pulmonar rior, se dilata y deforma el tórax cartilaginoso
grave (especialmente la hipertensión pulmonar pri- del recién nacido (cuadro 5), por lo que en el
maria) es causa de fatigabilidad que puede llegar a diagnóstico de cardiopatías congénitas este sig-
ser extrema por la limitación para el aumento del no es de gran valor para distinguir clínicamente
gasto sistémico que impone el incremento excesi- estas entidades de otras que producen sólo hi-
v o de las resistencias pulmonares. Esta condición pertrofia ventricular derecha (estenosis pulmo-
puede ser tan importante que obligue al reposo nar, tetralogía de Fallot) o sobrecarga únicamen-
absoluto e n la cama y que incluso, c o n pequeños t e del ventrículo izquierdo (estenosis aórtica,
esfuerzos, aparezca fatiga extrema o aun síncope. persistencia del conducto arterioso).
1. CONGÉNITAS
Inspección a) Comunicación interauricular
La cuidadosa visualización del área precordial b) Comunicación interventricuiar
permite conocer, primero, la presencia de defor- c) CIA con estenosis pulmonar
maciones torácicas, enseguida la localización y c a - d) Conexión anómala total de venas
racterísticas del ápex cardiaco y, finalmente, la pre- pulmonares
sencia de latidos precordiales anormales.
2. ADQUIRIDAS
4^
CARDIOLOGÍA
CUADRO6 CUADRO 7
CARDIOPATÍAS C O N SOBRECARGA CARDIOPATÍAS C O N DILATACIÓN
DIASTÓLICA DEL V E N T R Í C U L O I Z Q U I E R D O CONSIDERABLE D E LA ARTERIA PULMONAR
38
HISTORIA CLÍNICA
r a z ó n . En efecto, los datos más importantes que usual que e n estos casos el ápex se encuentre
pueden ser reconocidos c o n esta maniobra son localizado e n su sitio normal (figura 1-B).
los que ofrece la semiología de la palpación del C u a n d o aparece una sobrecarga diastólica
ápex, palpación d e levantamiento precordial, la (cuadro 6) de importancia sobre el ventrículo
percepción de ruidos o chasquidos anormales y izquierdo, el ápex cardiaco se aprecia amplio,
la búsqueda de frémitos. desplazado de su sitio normal y se percibe como
"un globo que se infla debajo de la m a n o " (cho-
Palpación del ápex cardiaco que en cúpula de Bard).
C o m o se mencionó e n el inciso previo (inspec- Cabe mencionar que la dilatación cardiaca
ción), la localización del ápex informa acerca d e otra etiología (miocardiopatía dilatada o car-
d e crecimiento de las cavidades cardiacas, pero diopatía isquémica con grave daño miocardios),
cuando no puede encontrarse con la inspec- puede manifestar ápex amplio y anormalmente
c i ó n , se localiza con la palpación. Es cierto que desplazado a la palpación, sin que se trate nece-
e n sujetos c o n músculos torácicos muy pronun- sariamente de una sobrecarga hemodinámica.
ciados, mujeres c o n mamas muy prominentes,
pacientes obesos o c o n sobredistensión pulmo- Doble levantamiento apical
nar importante, e l ápex cardiaco puede llegar
a no palparse; sin embargo, debemos tener en 1 . IV ruido palpable
cuenta que existen padecimientos en los que La presencia de un intenso IV ruido puede
igualmente no es palpable o es muy difícil, tal y hacerlo palpable. En efecto, c u a n d o la con-
c o m o acontece en los trastornos enlistados en tracción auricular impulsa enérgicamente el
el cuadro 8. contenido sanguíneo q u e choca contra una
El ápex se palpa normalmente c u a n d o el pared ventricular inextensible, se genera una
e n f e r m o se encuentra recostado en decúbito onda palpable en la presístole (figura 1 - C ) ;
dorsal o, mejor a ú n , en decúbito lateral iz- ello c o n d i c i o n a un d o b l e levantamiento
q u i e r d o (posición de Pachón). Normalmente apical (uno presistólico y otro sistólico). Las
d e b e percibirse a nivel del quinto E.l.l. y línea condiciones que con mayor frecuencia cau-
medio-clavicular con amplitud no mayor d e san un IV ruido palpable se enumeran en el
una m o n e d a d e 2.5 c m d e diámetro como un cuadro 9 . En estos casos e l diagnóstico se
levantamiento sólo protosistólico (figura 1 - A ) . sospecha c o n la simple palpación del ápex,
cuando el primer levantamiento se siente
La palpación d e un ápex con mayor ampli-
antes que la aparición del pulso carotídeo
tud traduce crecimiento ventricular izquierdo.
(palpación simultánea de ambos eventos) y
Cuando el ápex se palpa d e mayor amplitud y
el segundo coincidiendo con é l .
durante toda la sístole (levantamiento sistólico
sostenido) se podrá establecer el diagnóstico Cabe mencionar que en un paciente con
clínico de hipertrofia ventricular izquierda ma- historia de hipertensión arterial, un IV ruido
yormente producida por sobrecarga sistólica palpable traduce por sí mismo cardiopatía
(hipertensión arterial o estenosis aórtica); es hipertensiva; en un paciente con estenosis
CUADRO 8 CUADRO 9
ÁPEX N O PALPABLE PADECIMIENTOS Q U E SE A C O M P A Ñ A N
^ D I F Í C I L M E N T E PALPABLE) D E IV R U I D O PALPABLE
39
I II III I II
FIGURA 1 Palpación del ápex. A) Se representa el registro gráfico del movimiento
del ápex normal (apexcardiograma). Las líneas punteadas demuestran el momento
en que se palpa normalmente el latido del ápex en el precordio. B) La hipertrofia
ventricular izquierda produce un levantamiento sistólico sostenido del latido apical
palpable. C) El IV ruido palpable produce un doble levantamiento del latido
apical: uno presistólico (IV ruido) y otro sistólico (el latido apical propiamente
dicho). D) El III ruido palpable (galope ventricular) produce también un doble
latido apical: uno sistólico (el latido del ápex propiamente dicho) y otro protodias-
tólico (el galope ventricular). E) La discinergia ventricular ya sea por infarto agudo
o por aneurisma ventricular, se manifiesta por un doble levantamiento sistólico: el
protosistólico es producido por el latido del ápex propiamente dicho y el telesistólico
(señalado con una flecha) por la contracción discinérgica
ñas se contraen la región enferma se abomba, por Palpación del latido de la arteria pulmonar
lo cual puede manifestarse mediante un doble
Normalmente el latido d e la arteria pulmonar
levantamiento sistólico: el latido apical propia-
se palpa c o m o un leve levantamiento protosis-
mente dicho y el abombamiento sistólico que la
tólico que es casi imperceptible en algunos su-
contracción discinética del miocardio infartado
jetos delgados normales.
presenta (figura 1 -El. Cuando un infarto del mio-
cardio transmural deja como secuela un aneuris- Los padecimientos que causan dilatación
ma ventricular, también puede ser reconocido d e la arteria pulmonar ( c u a d r o 7) son los res-
clínicamente por la presencia de un doble levan- ponsables de la presencia de un amplio latido
tamiento sistólico. sistólico que se percibe e n la mayoría de d i -
chos pacientes c u a n d o se palpa cuidadosa-
Latido apical múltiple mente a nivel del foco pulmonar.
// ruido palpable
43
CARDIOIOCÍA
mitral casi en posición de cierre, lo cual favore- la diástole precedente; así, podemos enten-
c e el apagamiento del primer ruido ya que el der que cuando hay diástoles largas el llena-
viaje valvular es pequeño y no permite que di- do ventricular es mayor y la válvula tiene una
cho movimiento adquiera velocidad importan- velocidad de cierre pequeña (primer ruido
te. Ello también se aprecia cuando la válvula mitral apagado después d e diástoles largas), mien-
está importantemente calcificada y esta alteración tras que por el contrario, después de diástoles
no permite gran movilidad de las valvas. Este cortas el llenado ventricular es menor y el
hecho explica el apagamiento del I ruido en la cierre mitral se lleva a cabo desde su máxi-
estenosis mitral calcificada (figura 3). m a apertura, hecho que genera un I ruido
Por último, es característico el apagamiento intenso (I ruido intenso después de diástoles
progresivo del primer ruido en e l fenómeno de cortas); por lo tanto, en la fibrilación auricu-
Wenckebach conforme el espacio PR se va alar- lar el I ruido es variable.
gando. La misma semiología se aplica a la vál-
vula tricúspide. b) Fibrilación auricular asociada a estenosis
mitral:
®
to del I ruido es exactamente contrario al
referido para el tipo I, esto es, el I ruido se
apaga después de diástoles más cortas y se
intensifica después de diástoles largas, lo que
traduce estenosis mitral apretada. En efecto,
cuando la estenosis mitral es grave después
de diástoles cortas, el movimiento valvular
es limitado por la propia estenosis y el pri-
mer ruido es apagado; por el contrario, una
diástole larga permite una mayor apertura
valvular por el gradiente transmitral y c o n
ello un cierre valvular más enérgico (I ruido
reforzado).
A
Desdoblamiento del I ruido HIPERTENSIÓN
NORMAL
Normalmente se cierra primero la válvula mitral ARTERIAL
b) E n f e r m e d a d de E b s t e i n . E n este p a - I llp
d e c i m i e n t o c a r a c t e r í s t i c a m e n t e el c o m -
ponente tricuspídeo del I ruido aparece tar-
díamente y no es raro que tenga carácter A B
ESTENOSIS TRONCO
chasqueante, lo que trae c o m o consecuen- PULMONAR COMÚN
cia un amplio desdoblamiento del I ruido
ll.i
(ver capítulo d e CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS).
ESPIRACIÓN INSPIRACIÓN
IU IU
DESDOBLAMIENTO
FISIOLÓGICO
llp llp
llp llp
DESDOBLAMIENTO
PARADÓIICO
'lia
lia
DESDOBLAMIENTO
"FIJO"
• llp llp
FIGURA 5 Desdoblamiento del II ruido
HISTORIA CLINICA
, 'i
l.
I I I I
NBUMO
ESP
I
FCQ
-S: - íI jl
47
CARDIOLOGÍA
FIGURA 8 Desdoblamiento fijo del II ruido. Registro simultáneo de electrocardiograma (ECG), fonocar-
diograma (FCG) y neumograma (NEUMO). El II ruido se encuentra ampliamente desdoblado (lla-llp),
tanto al final de ía espiración (ESP.) como de la inspiración (INSP.). El comportamiento fisiológico del
desdoblamiento del II ruido se ha perdido y se ha convertido en "fijo" en este caso de comunicación
interauricular
HISTORIA CLÍNICA
FP.A
f i i
NEUMO
4')
CARDIOLOGÍA
ello hace que ambos componentes se en- tantes que causan hipervolemia a través de la válvu-
cuentren tan próximos que a la ausculta- la mitral y frecuentemente se acompañan d e III rui-
ción sólo sea evidente un solo ruido. do patológico originado en el ventrículo izquierdo.
En estos casos la presencia d e III ruido no necesaria-
E l s i g n i f i c a d o d e l III r u i d o mente indica insuficiencia cardiaca.
C o m o se mencionó, el III ruido cardiaco ocurre en
la protodiástole y coincide con la fase de llenado El s i g n i f i c a d o d e l IV r u i d o
rápido ventricular; cuando se ausculta crea un rit- El IV ruido ocurre al final de la diástole (presístole),
mo de tres tiempos (figura 10), un ruido de baja ya que es producido por el choque d e la sangre
tonalidad q u e se e s c u c h a mejor e n el ápex o con el endocardio ventricular, que es condiciona-
mesocardio. Es muy raro auscultarlo en niños sanos do por la energía cinética que impone la contrac-
menores de dos años; por el contrario, es muy fre- ción auricular a la columna sanguínea. En otras
cuente encontrarlo como fenómeno normal en ni- palabras, el IV ruido es realmente un fenómeno
ños de edad escolar y no infrecuentemente en ado- auscultatorio de llenado ventricular, que sólo se
lescentes sin cardiopatía. En niños con taquicardia aprecia cuando el ventrículo se torna rígido, sea
sinusal puede ser muy difícil diferenciar un III ruido por hipertrofia, isquemia o dilatación del corazón
fisiológico de un ritmo de tres tiempos producido (insuficiencia cardiaca); así, la auscultación de un
por un galope ventricular. En muchas ocasiones, para IV ruido casi siempre traduce cardiopatía.
su correcta interpretación es indispensable valerse
Cuando se ausculta, se aprecia como un ritmo
de otros signos de cardiopatía para catalogarlo como
de tres tiempos que desdobla el I ruido (figura 1 1 ) ,
"ritmo de galope" o la ausencia de ella para hablar
ya que el IV ruido es presistólico. El IV ruido pue-
de "III ruido fisiológico".
de auscultarse en aquellas cardiopatías que cursan
El III ruido patológico es causado fundamental- con disminución d e la distensibilidad miocárdica,
mente por dos situaciones: la insuficiencia cardiaca ya sea por hipertrofia o por isquemia (cuadro 11)
(ritmo de galope) y la otra es constituida por todas o bien, puede ser signo de insuficiencia cardiaca
aquellas condiciones e n las que el flujo a través d e cuando se encuentra e n conjunto con el cuadro
alguna d e las válvulas auriculoventriculares está au- clínico de esta enfermedad. Por último, cabe men-
mentando en forma anormal; ejemplo de ello po- cionar que e n la enfermedad de Ebstein es fre-
dría ser el caso de la comunicación interauricular cuente encontrar ritmos d e tres o cuatro tiempos y
e n la que a la sangre venosa sistémica que llega a ocasionalmente hasta d e cinco tiempos (desdobla-
la aurícula derecha se le suma una cantidad adi- miento d e los ruidos normales, III y/o IV ruidos).
cional de sangre que pasa a través de la comunica-
ción anormal y causa hipervolemia. En estos c a -
sos, c u a n d o e l cortocircuito es importante, es EL R I T M O D E G A L O P E
f r e c u e n t e a u s c u l t a r III r u i d o o r i g i n a d o e n e l
En los incisos anteriores se han analizado las posibili-
ventrículo derecho. Otros ejemplos podrían ser la
dades de aparición del III o IV ruidos. Se debe de
persistencia del conducto arterioso, la comunica-
llamar ritmo d e galope c u a n d o a p a r e c e n c o n
ción interventricuiar o la insuficiencia mitral impor-
taquicardia y producen "cadencia de galope": Cuan-
50
HISTORIA CLÍNICA
Ventrículo Ventrículo
SOPLOS INOCENTES
izquierdo derecho
1. Hipertención arterial 1. Hipertensión
Aun cuando el término de "soplos inocentes" no es
pulmonar del agrado de todos los autores para denominar a
2. Estenosis aórtica los soplos cardiacos no patológicos, puede ser útil
2. Estenosis porque expresa la inocuidad del fenómeno aus-
3. Coartación aórtica
pulmonar
cultatorio, sobre todo cuando es necesario explicar a
4. Cardiopatía isquémica los familiares de su existencia. U n problema frecuen-
te y en ocasiones no fácil al que se enfrenta el pedia-
tra, es la evaluación de un niño asintomático con un
soplo cardiaco; en un buen número de casos, cono-
ciendo estos soplos o las maniobras clínicas para
do la frecuencia cardiaca está elevada puede escu- diferenciarlos de los soplos orgánicos, es posible lle-
charse el llamado "galope de suma", que se genera gar al diagnóstico correcto; otras veces es necesario
al fusionarse el galope auricular con el ventricular en realizar estudios como el electrocardiograma y la ra-
un ruido más intenso que aparece en la protodiástole diología de tórax. Por último, si quedara alguna duda,
o mesodiástole (figura 12). Puede ser muy difícil di- en la gran mayoria de los casos el fonocardiograma
ferenciarlo de un galope auricular o ventricular ais- es el mejor método para el diagnóstico y ayudará a
lados; en ocasiones para establecer la diferencia se resolverlo; en ocasiones, la ecocardiografía-Doppler
utilizan las maniobras vagales, que al disminuir la será útil para complementar el estudio.
frecuencia cardiaca es posible que separen los com-
ponentes del galope de suma, haciéndose eviden- Los soplos inocentes aparecen en casi todos los
te un ritmo de cuatro tiempos producido por los niños o adolescentes después del ejercicio. Es cono-
ruidos normales y los dos anormales (figura 13). cido que casi 8 0 % de los recién nacidos pueden
tener soplos cardiacos no patológicos y cerca de
6 0 % de los niños escolares pueden presentarlos.
SOPLOS CARDIACOS El criterio para llamarle "inocente" a un soplo es la
Un soplo cardiaco es un fenómeno acústico produci- existencia de éste e n ausencia de manifestaciones
do por la conversión de un flujo laminar (normal) en clínicas, radiológicas, electrocardiográficas y ecocar-
un flujo turbulento (anormal) dentro de las cavidades diográficas de cardiopatía. A continuación analiza-
cardiacas o grandes vasos. El flujo sanguíneo puede remos brevemente los más frecuentes:
hacerse turbulento en presencia de estenosis o insufi-
ciencias valvulares, o bien por la presencia de comuni- Soplo de SUII
caciones intracavitarias o vasculares anormales (soplos (ver capítulo de FOM3MECANCX>RDIC>CRAFÍA)
orgánicos). En otras ocasiones, la turbulencia del flujo El soplo de Still o "vibratorio" aparece frecuen-
51
CARDIOLOGÍA
temente en niños escolares. Se trata de un soplo intenso, parte del I ruido ocupa toda la sístole, la
que se inicia un poco después del I ruido y o c u - mayoría de las veces se acompaña de frémito, su
pa la primera mitad de la sístole (protosistólico o irradiación es más amplia, especialmente a la
protomesosistólico), que se escucha casi siem- derecha d e l esternón y por su carácter holosis-
pre en el mesocardio o más raramente e n el tólico puede cubrir alguno de los ruidos norma-
ápex. De intensidad l-ll/IV, no borra los ruidos les, lo cual no ocurre c o n el soplo de Still. Tam-
normales, permanece el desdoblamiento fisio- bién p u e d e confundirse c o n e l soplo de la
lógico del II ruido (figura 14-B), es más intenso insuficiencia mitral (figura 18-E); en este caso,
en el decúbito dorsal, se apaga o desaparece la falta de irradiación a la axila y al dorso, así
con la inspiración o con los cambios de posición. c o m o el hecho de que el soplo no parte con el I
Generalmente no se acompaña de otras altera- ruido, descarta la valvulopatía.
ciones e n la auscultación, pero no es raro que
presente III ruido fisiológico. Lo que preocupa a
Soplo sistólico pulmonar no patológico
quien lo escucha es precisamente su carácter
(figuras 1 4 - D y 15)
"vibratorio", que lo hace confundir con el soplo
Se registra en todos los sujetos normales por
de comunicación interventricuiar (figura 14-A);
sin embargo, e n ésta el soplo es mucho más fonocardiografía intracavitaria y quizá sea el so-
plo inocente más frecuente en niños.
HISTORIA CLÍNICA
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F I G U R A 14 Soplos sistólicos I
53
CARDIOLOGÍA
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E) Insuficiencia mitral
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valvular durante la sístole y favorece la aparición de que frecuentemente se confunde con estenosis mitral
insuficiencia tricuspídea sin que la válvula se e n - orgánica.
cuentre anatómicamente dañada (insuficiencia tri- Finalmente, los retumbos de hiperflujo también
cuspídea funcional). La hipertensión arterial pulmo- son soplos funcionales producidos por aumento de
nar grave y de larga evolución dilata el tronco d e la flujo transvalvular mitral (CIV, PCA, insuficiencia mi-
arteria pulmonar y permite la aparición de insufi- tral) o tricuspídea (CIA o insuficiencia tricuspídea)
ciencia pulmonar funcional por falta de coaptación (ver SOPLOS DE HIPERFLUIO).
valvular durante la diástole (soplo de Graham- Still y
soplo de Holdack), aun cuando la válvula se e n -
cuentra intrínsecamente sana. LOS SOPLOS O R G Á N I C O S
Por otro lado, el retumbo de Austin-Flint es un La auscultación de un soplo orgánico indica siem-
soplo diastólico que ocurre como consecuencia del pre cardiopatía. Los soplos orgánicos se distin-
recierre diastólico mitral c o n d i c i o n a d o por un guen d e los " i n o c e n t e s " p o r q u e son más inten-
importante volumen d e regurgitación aórtica. El sos, sus irradiaciones son más extensas y hay algunas
orificio mitral se torna relativamente estrecho para que se a c o m p a ñ a n d e frémito (estenosis pulmo-
el volumen diastólico que pasa de la aurícula al nar, c o m u n i c a c i ó n interventricuiar); se p u e d e n
ventrículo en ese momento y el cual origina un re- modificar pero n o desaparecen c o n los movimien-
tumbo funcional que se ausculta en el ápex sin que tos respiratorios ni c o n los c a m b i o s de p o s i c i ó n ,
la válvula mitral se encuentre a n a t ó m i c a m e n t e p u e d e n borrar alguno d e los ruidos normales (in-
estrecha. El retumbo de Austin-Flint es un fenómeno suficiencia mitral) y llegar a ocupar toda la sístole
C U A D R O 13
CARDIOPATÍAS Q U E SE ACOMPAÑAN D E S O P L O S I S T Ó L I C O
E N EL F O C O A Ó R T I C O
a) Estenosis aórtica (figura 19)
E N EL F O C O PULMONAR
a) Comunicación interauricutar (figura 18-A)
b) Estenosis pulmonar aislada (figuras 7 y 14-C)
c) CIA + estenosis pulmonar (figura 14-C)
d) Tetralogía de Fallo! (figura 18-B)
e) Eslenosis pulmonar asociada a otras malformaciones complejas (ventrículo único,
doble cámara de salida del ventrículo derecho, etc.)
f) Desembocadura anómala de venas pulmonares (figura 18-A)
h) Persistencia de conducto arterioso con hipertensión pulmonar acentuada (figura 3.18-D)
I) Ventana aorto-pulmonar hipertensa (figura 18-D)
III EN EL M E S O C A R D I O
a) Comunicación interventricuiar (figura 14-A) •
b) Insuficiencia tricuspídea congénita aislada:
• Asociada a CIA tostium primum)
• Asociada a atresia pulmonar
• Asociada a atresia mitral
IV EN EL APEX
a) Insuficiencia mitral congénita aislada (figura 18-E)
• Asociada a CIA (ostium primum)
• Asociada a fibroelastosis endocárdica
• Secundaria a origen anómalo de la coronaría izquierda
C U A D R O 14
CARDIOPATÍAS Q U E SE ACOMPAÑAN DE S O P L O D I A S T Ó L I C O
I EN EL F O C O A C C E S O R I O A Ó R T I C O
a) Insuficiencia aórtica (figura 3.19-A)
II EN EL F O C O P U L M O N A R
a) Insuficiencia pulmonar congénita aislada (figura 19-B)
b) Insuficiencia pulmonar secundaria a hipertensión pulmonar grave o extrema
(soplo aspirativo de tipo Graham-Still (figura 3.19-C) o rudo Holdack (figura 3.19-D):
• PCA con hipertensión pulmonar
• CIA con hipertensión pulmonar grave
• CIV con hipertensión pulmonar grave
c) Origen anómalo de la artería coronaria izquierda
d) En la atresia pulmonar con CIV cuando existe insuficiencia valvular de la sig-
moidea única
III EN EL M E S O C A R D I O O F O C O T R I C U S P Í D E O
a) Estenosis tricuspídea congénita aislada:
• Asociada a enfermedad de Ebstein
IV EN E l ÁPEX
a) Estenosis mitral congénita (figura 3.19-EI o adquirida
r—4— C U A D R O 15
CARDIOPATÍAS Q U E SE ACOMPAÑAN D E SOPLOS SISTOLO-DIASTÓLICOS
EN EL F O C O A Ó R T I C O Y A C C E S O R I O
a) Doble lesión aórtica (figura 20-A)
EN EL F O C O P U L M O N A R
a) Persistencia del conducto arterioso asociado a hipertensión pulmonar (figura 20-B)
b) Hipertensión pulmonar primaria (figura 20-C )
III EN EL M E S C K A R D I O
a) CIV asociado a insuficiencia aórtica (figura 20-D)
b) Doble lesión tricuspídea, usualmente secundaria a enfermedad de Ebstein o
reumática
IV EN E l ÁPEX
a) Estenosis mitral congénita (figura 20-E), puede acompañarse de regurgitación
mitral (sin chasquido: congénita, con chasquido: adquirida)
57
CARDIOLOGÍA
SPS II RET
E) Estenosis mitral
(Ápex)
SD
llp
I lia
EL CHASQUIDO PROTOSISTÓLICO
El chasquido protosistólico es un ruido anormal
causado por la apertura de una de las válvulas sig-
C U A D R O 16 moideas (aórtica o pulmonar), cuando tienen al-
CARDIOPATÍAS Q U E SE ACOMPAÑAN guna malformación, o bien puede producirse por
DE S O P L O S C O N T I N U O S el choque brusco de la sangre durante el inicio del
periodo expulsivo ventricular, c o n algunos de los
I EN EL F O C O P U L M O N A R grandes vasos c u a n d o han perdido su elasticidad
a) Persistencia del conducto arterioso típico (sin normal, lo cual usualmente sucede c o n la hiperten-
hipertensión pulmonar) (figura 21-A) sión sistémica o pulmonar.
58
HISTORIA CLÍNICA
lili»
SD
SD
SS Mal
CHPS lia llp llp
SS
lililí I lll
IIIIIIÉ lll
II
l ii
c) En la d i l a t a c i ó n i d i o p á t i c a d e la arteria
pulmonar también se escucha un chasqui-
do protosistólico pulmonar, seguido d e un
soplido mesosistólico expulsivo; el II ruido
es enteramente normal, aun cuando el com-
ponente pulmonar puede estar aparente-
«OTICA
mente reforzado por la cercanía del vaso a
la pared torácica; e n ocasiones un desdo-
AOBT1 « V A L V A blamiento amplio y constante del II ruido,
pero nunca es fijo.
esta lesión (figura 22-B) y su presencia indica que la S e m i o l o g í a d e los s o p l o s (cuadro 17)
estenosis es valvular y no supravalvular o subvalvular. Para interpretar el significado de un soplo cardiaco
En la aorta bivalva, sin obstrucción valvular o siempre se debe hacer una cuidadosa semiología
e n la coartación aórtica (figura 2 2 - C ) , el chasqui- del mismo. A continuación se describen las carac-
do protosistólico puede ir seguido d e un soplo terísticas fundamentales de los soplos que nos permiten,
expulsivo, de mucha menor intensidad y ampli- en la mayoría de los casos, fundamentar un diagnós-
tud que e l soplo de estenosis aórtica, pero que tico clínico c o n la sola auscultación del corazón.
en ocasiones se c o n f u n d e con esta lesión, por lo
que frecuentemente, para su diferenciación, es Epicentro
necesario contar c o n fonocardiograma. L o p r i m e r o q u e d e b e buscarse c u a n d o se
El chasquido protosistólico pulmonar tiene epi- ausculta un soplo cardiaco es el sitio e n donde
centro en el segundo E.l.l. e igual que el aórtico duplica se escucha con mayor intensidad, pues e n la
el primer ruido, pero a diferencia de él se modifica mayoría de las veces, e l epicentro del soplo re-
importantemente c o n la respiración; esto es, se vela el origen del mismo:
intensifica y se separa del I ruido en espiración, mien-
tras que por el contrario se apaga y junta con el I - Foco aórtico: estenosis o esclerosis aórtica.
ruido durante la inspiración (figura 7). Este fenóme- - Foco pulmonar: estenosis pulmonar, CIA, etc.
no aparece en las siguientes condiciones:
- Foco accao: insuficiencia aórtica.
a) En la estenosis pulmonar valvular, del chas-
- Foco tricuspídeo: insuficiencia o estenosis
quido protosistólico parte el soplo típico de
tricuspídea.
esta lesión figuras 7 y 14-C).
- Foco mitral: estenosis, insuficiencia o doble
b) En la hipertensión arterial pulmonar grave,
lesión mitral.
también es frecuente la auscultación de un
chasquido protosistólico pulmonar y n o es M e s o c a r d i o : CIV.
60
HISTORIA CLÍNICA
C U A D R O 17
SOPLOS CARDIACOS
Anomalía Epicentro Cido Timbre Irradiaciones Otros
cardiaco
Estenosis mitr.il
\pex Diastólico Rudo AI endoápex Posición de Pachón
Insufle, mitral *pex Sistólico Suave o "en A la axila A la axila o al
chorro de endoápex o
vapor" al foco aórtico
Sitio que ocupa el soplo en el ciclo cardiaco c u a n d o o c u p a todo el ciclo se habla de soplo
C u a n d o y a se ha determinado su epicentro, continuo (cuadro 1 6 , figura 21).
e l siguiente paso es precisar en qué sitio del
ciclo cardiaco se encuentra; así, el soplo pue- Intensidad
d e ser sistólico (entre I y I I ruidos) y sólo o c u - En tercer lugar es necesario precisar qué intensi-
pa su primera parte (protosistólico), su por- dad tiene el soplo. Así, un soplo puede ser grado
c i ó n media (mesosistólico) o su porción final I (apenas audible); grado II (poco intenso); grado
(telesistólico). Pueden haber soplos que o c u - /// (intenso y puede estar acompañado de Thrill);
pen dos partes d e la sístole (protomesosistólico grado /V (soplo de máxima intensidad).
o mesotelesistólico), o bien, finalmente, soplos
q u e la o c u p e n por completo (holosistólicos) Timbre
(cuadro 1 3 , figura 17). También un soplo pue-
La tonalidad que tiene el soplo cardiaco es de
de ser diastólico y la presentación d e los mis-
gran ayuda para dilucidar su origen; así, los so-
mos será similar a lo referido (prodiastólico,
plos pueden ser rudos de baja tonalidad, tal y
protomesodiastólico, holodiastólico, etc.) (cua-
como acontece con los soplos producidos por
d r o 1 4 , figuras 14-A y 18-E).
obstrucciones valvulares (estenosis aórtica o
C u a n d o un soplo o c u p a tanto la sístole pulmonar, estenosis mitral o tricuspídea). Este
c o m o la diástole, pero ambas partes están se- tipo de soplos se denominan expulsivos espe-
paradas por e l I I ruido, se habla d e soplo cialmente cuando se generan en las válvulas sig-
sistólico-diastólico ( c u a d r o 1 5 , f i g u r a 20) y moideas y característicamente comienzan un
61
CARDIOLOGÍA
poco después del I ruido (recordar que la aper- analizar las cinco características descritas e n ese
tura aórtica pulmonar sucede después de la orden. U n soplo con epicentro en el foco aórtico,
contracción isovolumétrica). Por otro lado, los protomesosistólico, grado II (ruido d e tipo
soplos pueden ser suaves de mediana o alta expulsivo que irradia a los vasos del cuello) co-
tonalidad, como los que se producen por las rresponderá a una estenosis aórtica, mientras que
insuficiencias valvulares, especialmente cuando un soplo con epicentro e n el ápex, holosistólico,
éstas son ligeras o cuando más moderadas (in- grado II, suave, de tipo regurgitante, que irradia
suficiencia mitral o tricuspídea; insuficiencia a la axila, corresponderá a insuficiencia mitral.
aórtica o pulmonar). Los soplos sistólicos sua-
ves que son consecutivos a insuficiencia de las
En conclusión, cuando estudiamos clínicamente un
válvulas atrioventriculares parten del I ruido y
soplo cardiaco y lo analizamos paso a paso reco-
en ocasiones lo borran, por lo que los soplos
nociendo todas las características anotadas, al final
sistólicos regurgitantes parten del I ruido y ello
tendremos un diagnóstico presuncional en la gran
permite diferenciarlos de los soplos expulsivos
mayoría d e los casos: estenosis mitral, comunica-
q u e , como se mencionó, no parten exactamen-
ción interventricuiar, insuficiencia aórtica, etc., y
te del I ruido sino de la apertura d e la sigmoidea
esta i m p o r t a n t e i n f o r m a c i ó n nos p e r m i t i r á
correspondiente (aórtica o pulmonar), por lo
interpretar con mayor exactitud los hallazgos de la
que c o n frecuencia se acompañan del chasqui-
exploración física c u a n d o hemos realizado una
do protosistólico correspondiente. Finalmente,
historia clínica completa, en cerca del 8 0 % de los
hay soplos con timbre piante o musical que fre-
casos podremos tener un diagnóstico presuncional
cuentemente acompañan a rupturas de un apa-
que nos podrá orientar a la solicitud de otro tipo
rato valvular o perforación de una valva.
de estudios, sea para corroborar el diagnóstico, sea
p a r a j u z g a r la g r a v e d a d d e l p r o c e s o o p a r a
establecer un diagnóstico diferencial.Finalmente,
Irradiaciones
el resultado d e los estudios de laboratorio y gabi-
El soplo se irradia hacia donde se dirige el flujo
nete solicitados (electrocardiograma, radiografía d e
turbulento que lo genera; así el soplo de esteno-
tórax, ecocardiograma, prueba de esfuerzo, etc.)
sis aórtica irradia hacia los vasos del cuello y hueco
tendrán que ser cotejados c o n la historia clínica
supraesternal, el de comunicación interventricu-
para corroborar los hallazgos, o bien, dar explica-
iar hacia el borde derecho del esternón, el de
ción a las discrepancias y sólo de esta manera
insuficiencia aórtica hacia el ápex a través del
podremos tener una evaluación clínica acertada
borde paraesternal izquierdo, etc. Cuando se
en la mayoría d e los casos.
escucha un soplo cardiaco siempre se deberán
= 4 -
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1 ri'l
64
Capítulo 4 Electrocardiografía
"Elmédico, mientras más sabio más culto"
L
brana es determinado por varios factores (v/de infra).
AS CÉLULAS M I O C Á R D I C A S SE E N C U E N T R A N DELIMI- Si se colocan dos microelectrodos en la super-
TADAS por una membrana constituida por dos ficie de las fibras miocárdicas normales e n reposo,
capas de fosfolípidos denominada sarcolema, no se registra diferencia de potencial sino única-
la cual no sólo le da la integridad a la célula sino mente una línea horizontal. Si uno d e los micro-
que, además, tiene una selectividad distinta para que electrodos atraviesa la membrana para alcanzar el
los diferentes iones puedan o no difundir a través interior celular, se observa un desplazamiento de
de ella hacia el interior o exterior d e la célula; este la línea horizontal a un nivel diferente hacia abajo.
hecho crea una diferencia de concentración de los Esto obedece a q u e el interior celular tiene un
mismos dentro y fuera de la célula; lo q u e , a su potencial negativo de -90mV, en relación con el ex-
v e z , crea un potencial eléctrico a través de la mem- terior. A este potencial registrado a través de la
brana que es generado por las cargas eléctricas de membrana, durante el reposo, se le denomina po-
acuerdo con las concentraciones de estos iones tencial de reposo transmembrana (figura 1).
dentro y fuera de la célula. Así, el sodio ( N a * ) , cal-
cio (Ca~*) y cloro ( C I ) tienen altas concentracio- En el hombre las fibras musculares del corazón,
nes e n el espacio extracelular, mientras que el de los músculos estriados y las fibras nerviosas están
potasio ( K " ) y los aniones proteicos (-) las tienen al formadas por células que tienen en su interior car-
interior de las células. Los iones simples pueden gas eléctricas positivas y negativas. Éstas también
atravesar el sarcolema a través de canales especí- existen en el medio que circunda o rodea a las célu-
ficos. Estos, usualmente tienen sus "compuertas" las. Las características eléctricas de las células
cerradas de tal manera que los iones extracelulares cardiacas son consecuencia de los movimientos d e
( N a " , C a * ~ y C I ) no pueden atravesar la mem- estas cargas a través de la membrana celular.
brana hacia el interior de la célula en condicio- La diferencia d e cargas a uno y otro lado de la
nes básales. En otras palabras, la membrana celu- membrana celular genera una diferencia de po-
lar es impermeable a estos iones durante el reposo; la tencial q u e se d e n o m i n a potencial de reposo
diferente concentración d e iones y sus cargas eléc-
tricas a través de la membrana determinan una
diferencia de potencial eléctrico a través de ella.
En c o n c l u s i ó n , las grandes c o n c e n t r a c i o n e s de
^\ •
(6 electrodo
+2*
I _ _ _ I i - ; v - 1
N a " e n e l espacio extracelular e n contraposición
c o n las cargas negativas d e los aniones proteicos línej de referencia
intracelulares generan un gradiente eléctrico e n
el interior d e la célula (diferencia d e potencial potencial de reposo Iransmemhrana
eléctrico).
FIGURA 1
CARDIOLOGÍA
transmembrana o polarización diastólica. Las car- cardiacas son excitables, es decir, responden c o n
gas eléctricas son electrolitos disociados (cationes un fenómeno mecánico (contracción), cuando se
y aniones) que se encuentran e n el interior celular les aplica un estímulo. Este fenómeno, desde el
y en la superficie externa de la membrana. Los prin- punto de vista eléctrico, se manifiesta mediante una
cipales cationes son dos: el IC dentro de la célula curva potencial de acción transmembrana (figura 2 ) .
y el N a * e n el medio extracelular. C a b e mencionar que la excitabilidad e n las células
El movimiento de estos iones a través de la miocárdicas opera c o n la ley del "todo o nada",
membrana está determinada por varios factores: esto es, al alcanzar el potencial umbral se desen-
cadena una respuesta independientemente de la
intensidad del estímulo.
P e r m e a b i l i d a d de la m e m b r a n a
Las proteínas (principales aniones intracelulares) son
moléculas grandes, por lo que no atraviesan la
POTENCIAL DE ACCIÓN TRANSMEMBRANA
m e m b r a n a . Durante el reposo la membrana es
(PAT) (figura 2)
permeable al K* y no al N a ' .
FASEO
Concentración q u í m i c a de los electrolitos a tra-
Cuando una célula miocárdica recibe un estímulo
v é s d e la m e m b r a n a
eléctrico, bruscamente cambia la permeabilidad de
Esto determina una fuerza de difusión que apunta
su membrana al N a * debido a la apertura de los
de los sitos de mayor a los de menor concentración.
canales rápidos de N a * . Su alta concentración e n
Así, la concentración intracelular del potasio es ma-
el espacio extracelular y la negatividad intracelular
yor que fuera de las células, por lo que esta fuerza
(fuerza electrostática) condicionan una rápida co-
tiende a sacarlo hacia el espacio extracelular, mien-
rriente de N a * al espacio intracelular, la cual cam-
tras que con el Na* sucede exactamente lo contrario.
bia rápidamente la polaridad intracelular de nega-
tiva a positiva (fase 0 ) . En esta fase el potencial
C a r g a s eléctricas d e los electrolitos intracelular alcanza +20mV.
Las cargas del mismo signo se rechazan y las de sig-
no contrario se atraen. El K \ por tener carga positi-
FASE 1
v a , es atraído por los aniones proteicos intracelula-
res; ello determina una fuerza electrostática, cuya Al ingresar el N a * a la célula, es captado por las
tendencia es impedir la salida del K" de la célula. cargas negativas (-) de los aniones proteicos y ello
Durante el reposo, los movimientos del potasio permite la liberación de K* que ahora sale de la
a través de la membrana celular dependen d e : célula porque denomina su fuerza de difusión, ello
condiciona que la positividad intracelular previa-
a) La permeabilidad que tiene la membrana mente alcanzada comience a disminuir. En esta fase
celular al K*. , el ingreso de cloro (CI') contribuye a la disminu-
b) La fuerza de difusión que tiende a sacar
potasio d e la célula, ya que la concentra- |
ción de este ion es mayor e n el interior que
en el exterior.
+40-1
c) La fuerza electrostática q u e e j e r c e n los
aniones proteicos, mediante la cual tiende a + 20- 1
retener potasio e n el interior celular.
0-
•o
La interacción de estos tres mecanismos es la -20-
que determina el equilibrio del potasio a través de >
E -40-
la membrana celular. Estos movimientos iónicos del
K* permiten que siempre queden libres algunas car- -60- \
gas negativas de los aniones proteicos, lo cual da
V
-80- 4
lugar a la negatividad en el interior celular.
1 1 1 1
( 200 400 600 800
EXCITABILIDAD Tlempo (mseg}
FASE 2
CUADRO 1
El registro intracelular no muestra diferencia de po- E Q U I V A L E N C I A D E LAS FASES
tencial (fase de meseta) debido a que la entrada DEL POTENCIAL D E A C C I Ó N
de N a * y C a " (se abren los canales d e C a " ) es Y EL E C G C L Í N I C O
compensada con la salida de K*.
fases PAT FCG
FASE 3 0 =o Onda R
Punto J
La membrana deja de ser permeable al sodio debi-
2 =o Segmento ST
do a que se cierran los canales rápidos de N a ' y
3 => Onda T
también los canales de calcio, por lo que estos iones
4 =o Diástole
dejan de entrar a la célula. Sin embargo, el sodio ya
ingresado está unido a los aniones proteicos y eso Duración del PAT Intervalo Q T
condiciona que el potasio, al no tener fuerza elec-
trostática que lo retenga, por fuerza de difusión con-
tinúe saliendo de la célula, razón por la que el inte-
rior de la misma continúa perdiendo cargas positivas.
C A P A C I D A D DE R E S P U E S T A
1.(1 o
DE LA M E M B R A N A
68
4~
ELECTROCARDIOGRAFIA
+20 1 1
///. CONDUCCIÓN
0 i r \
Las células son capaces d e conducir los estímulos
-20 i i/ \ sin decremento, esto es, sin que el potencial d e ac-
i ¡/ V
•41! ción pierda intensidad a lo largo d e su viaje a través
-MI i x \ del tejido. La velocidad de conducción a nivel de la
•80
I I aurícula es de I m/seg. En el nodo AV la velocidad es
más lenta (20 cm/seg) y a nivel del haz de His y de la
-100 red de Purkinje mucho más rápida (3 m/seg). La ra-
i i 1
600
1
800 zón d e la disminución d e la velocidad de conduc-
1 200 400
Tiempo (m ción en la unión A V se debe a conducción decre-
mental (ver capítulo 5 d e TRASTORNOS DEL RITMO).
F I G U R A 5.1 El potencial de acción de las células
que poseen la propiedad d e automatismo, se ca- La lentitud de la velocidad a nivel del nodo A V
racteriza por tener una pendiente de despolariza- tiene una razón fisiológica: permite la sincroniza-
ción diastólica (fase 4) ción entre la contracción auricular y ventricular, o
sea, la aurícula logrará vaciar su contenido al final
de la diástole ventricular para q u e después ocurra
la sístole ventricular. La capacidad d e una célula
para transmitir un potencial d e acción a la célula
contigua depende d e su amplitud: si ésta es m u y
pequeña, será incapaz de transmitirse a la otra con-
tigua. Por otro lado, la velocidad de conducción
de un estímulo a través del miocardio depende de
la rapidez con la que éste se despolariza, lo cual
corresponde a la fase 0 del potencial d e a c c i ó n : a
0 200 4O0 600 800 1000 1200
mayor velocidad d e la fase 0 mayor velocidad d e
I irm peí tm*r% conducción y viceversa.
F I G U R A 5.2
-4-*
CARDIOLOGÍA
T
TEORIA DEL D I P O L O
ni
ELECTROCARDIOGRAFIA
4*
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 12 Plano horizontal
dipolos se dirigen hacia arriba, a la derecha y pue- ya que los dipolos de activación ventricular siempre
den orientarse hacia atrás o hacia adelante. se alejan de dicha derivación.
EnaVL
DERIVACIONES UNIPOLARES
El complejo ventricular e n esta derivación varía
La exploración eléctrica d e l c o r a z ó n se registra según la posición del corazón: s i , el corazón es ho-
por medio de derivaciones (son realmente e l e c - rizontal; e, vector 2 apunta hacia aVL y se registra-
trodos) c o l o c a d a s e n p u n t o s u n i v e r s a l m e n t e ra un complejo positivo predominante (qRs). Por
aceptados. el contrario, si el corazón es vertical, el vector 2 se
S e antepone la letra " a " a las siglas V L (brazo aleja de dicha derivación y el complejo ventricular
izquierdo) V R (brazo derecho) y V F (pierna izquier- será predominantemente negativo (rS).
da) para indicar que las deflexiones están aumen-
tadas, ya que son muy pequeñas por tratarse de En aVF
derivaciones alejadas. Si el electrodo explorador En esta derivación, al contrario que aVL, el com-
se coloca en el brazo derecho, obtenemos una de- plejo ventricular será predominantemente negati-
rivación unipolar llamada aVR. v o (rS) si el corazón tiene una posición horizontal,
Las derivaciones unipolares registran directamen- ya que e n estos casos el vector 2 se aleja de aVF. En
te los eventos eléctricos que se suceden por debajo el corazón vertical el vector 2 se dirige hacia abajo
de ellas (dípolos de activación o recuperación que y por lo tanto se acerca a la derivación aVF, por lo
se acercan o alejan). Exploran el corazón desde un que el complejo ventricular será predominante-
plano frontal. Por lo tanto, si los dipolos de activa- mente positivo (qRs).
ción se acercan, producirán una deflexión positiva; En los corazones que tienen posición eléctrica
por el contrario, si se alejan, ésta será negativa. intermedia, el vector 2 está dirigido más o menos
entre + 3 0 y + 6 0 ° , por lo que cae e n el lado posi-
EnaVR tivo, tanto de a V L , c o m o de aVF. En estos casos el
Normalmente la negatividad inicial representa a los complejo qRs es positivo e n ambas derivaciones
vectores 1 y 2 que se alejan de ella, mientras que (v/de infra).
la positividad terminal traduce el vector 3 que se
acerca, razón por la que normalmente e n esta de-
rivación el complejo ventricular es predominante- DERIVACIONES PRECORDIALES
mente negativo (complejo Q r ) . Asimismo, el com- (figura 1 2 )
plejo Q R S es muy constante e n su morfología, Son derivaciones unipolares que registran la activi-
independientemente d e la posición del corazón. dad eléctrica del corazón e n una situación dife-
72
ELECTROCARDIOGRAFÍA
rente a las derivaciones unipolares estándares (ex- se dirigen hacia aVL esta será positiva, pero el mis-
ploran desde un plano horizontal). mo fenómeno registrado en aVF resultará negati-
vo. Por lo tanto, en todo electrocardiograma debe
V , . Unión de 4o. espacio intercostal derecho
cumplirse siempre la ley de Einthoven; de no ser
(EID) con borde derecho el esternón.
así, alguna d e las derivaciones d e registro está mal
V , . U n i ó n d e 4 o . espacio intercostal izquierdo colocada.
(Ell) c o n borde izquierdo esternal.
EIEMPIO I:
V . Entre V , y V , .
3
y línea medio-clavicular.
DI Dll Dlll
V . A la altura d e V y V . e n línea axilar media.
6 A
Ley de Einthoven
DI + D l l l = D l l
En las figuras 11 y 1 2 se representa la tra- 5 + 5 = 1 0
d u c c i ó n e l e c t r o c a r d i o g r á f i c a de la a c t i v a c i ó n
ventricular e n las d e r i v a c i o n e s precordiales. La
activación septal (vector 1 ) , p r o d u c e una "r" e n EIEMPLO I I :
V , y la " q " d e V , V . y V . La despolarización d e
4 6
Ley de Einthoven
DI + D l l l = D l l
DERIVACIONES BIPOLARES ESTÁNDAR
(figuras 13 y 14)
Las deflexiones en las derivaciones bipolares
Las derivaciones bipolares registran la diferencia dependerán de la posición del corazón y de las
de potencial entre dos derivaciones unipolares: diferentes posiciones que pueden tener los vectores
en el espacio (v/de ¡nfra).
DI = A V L - aVR
D l l = A V F - aVR
D l l l = A V F - aVL
REPOLARIZACIÓN DEL CORAZÓN
Las derivaciones bipolares entonces estudian la (figura 1 5 )
resultante eléctrica de dos derivaciones unipola-
res, de tal forma que si, por e j e m p l c , una deriva- La repolarización normal de la fibras miocárdicas
ción unipolar (aVLI tiene un valor d e + IO y la otra auriculares no se reconocen e n el E C G por produ-
(aVR) un valor de - 1 0 , la deflexión que registra la cir potenciales de muy pequeña magnitud que n o
derivación bipolar (DI) será igual a ü (figura 1 3 ) . se registran a distancia y por ser simultáneas con
C o m o el promedio de la dirección de los dipolos las fuerzas d e despolarización ventricular.
(eje eléctrico medio) es definida (por ejemplo ha- La repolarización ventricular se registra c o m o
cia la izquierda y arriba o hacia la derecha y abajo, la onda t del E C G . Normalmente la onda T debe
etc.), se proyectarán en el triángulo de Einthoven ser una deflexión lenta, asimétrica y positiva en
siempre en forma congruente, o s e a . las derivacio- aquellas derivaciones e n las que el complejo Q R S
nes electrocardiográficas registran el mismo even- es predominantemente positivo y negativo en don-
to eléctrico (activación y recuperación del corazón) de el complejo Q R S es negativo. Este comporta-
desde diferentes puntos; por ejemplo, si los dipolos miento se debe a que el potencial de a c c i ó n su-
4=
CARDIOLOGÍA
A ° +,
\r 1
- 0"°
/V Derivación J _ Derivaciór
Unipolar " Derivación Unipolar
Bipolar M
1-0 F I G U R A 13 Deriva-
ción bipolar
bendocárdico tiene una mayor duración que el representan por debajo tendrán un signo positivo
subepicárdico, lo cual permite que la repolariza- ( + ) y los q u e se encuentran por arriba serán ne-
ción ventricular se inicie normalmente e n el sub- gativos (-). Así, la subdivisión de la c i r c u n f e -
epicardio y, por lo tanto, el dipolo de recupera- rencia por diversos ejes q u e cruzan por e l cen-
c i ó n viaja del e p i c a r d i o al e n d o c a r d i o y el tro serán representados en grados q u e se les dará
electrodo explorador localizado e n el epicardio el signo positivo o negativo, d e p e n d i e n d o d e si
registra la carga positiva de d i c h o dipolo que se se encuentran por debajo o por e n c i m a d e l diá-
aleja d e é l . N o r m a l m e n t e la o n d a T d e b e ser ne- metro transversal (figura 17).
gativa e n a V R y V , , y s i e m p r e d e b e r á ser positiva El triángulo de Einthoven es fundamental para
en D. y d e V j a V . 6
entender el electrocardiograma y calcular el eje
En la figura 16 se representan las deflexiones eléctrico d e l c o r a z ó n . En este triángulo se repre-
electrocardiografías, su nomenclatura y sus dura- sentan las deflexiones electrocardiográficas que
ciones normales. son registradas e n las diferentes derivaciones. En
la derivación I, se representa la positividad a la
izquierda, la negatividad a la derecha y el punto
TRIANGULO DE EINTHOVEN " O " d e dicha derivación e n el centro (no es posi-
tivo ni negativo). Si e n la derivación I, la deflexión
es positiva, ésta se representará en e l triángulo
Las derivaciones bipolares estándares ( D I , D l l y
hacia la izquierda (a); si es negativo, se represen-
D l l l ) , delimitan un triángulo, cuyos ángulos es-
tará hacia la derecha (b), y si es isodifásico, e n el
tán constituidos por las derivaciones unipolares
centro (c) (figura 18).
(aVR, a V L y a V F ) (figura 14). El triángulo así cons-
tituido se encierra e n una circunferencia q u e ar- De la misma forma e n la derivación II (Dll), si la
bitrariamente se divide en dos partes: la supe- deflexión es positiva se representará hacia abajo
rior es negativa y la inferior es positiva. D e esta (a) , si es negativa se representará hacia arriba (b) y
forma el diámetro transversal representa el eje si fuera isodifásica en el centro de la derivación (c)
0 - 1 8 0 ° de la c i r c u n f e r e n c i a , los valores que se (figura 19).
El mismo tratamiento se dará a D l l l e n el trián-
gulo, cuando la deflexión es positiva (a), negativo
(b) o isodifásica (c) (figura 20.)
Con las derivaciones unipolares el comporta-
miento es diferente. De acuerdo con la ley del
\ •
JjUj 4^
F I G U R A 14 Derivaciones estándar. Triángulo de
Einthoven F I G U R A 15
74
ELECTROCARDIOGRAFÍA
QRS
<0.10"
0.12"-0.20"
<0.10"
FIGURA 16 La dura-
en relación con la
ción debe m e d i r s e
frecuencia cardiaca
en el borde inferior
d e l trazo ( s e n t i d o
horizontal) y e l vol-
taje desde su borde
superior (sentido
vertical)
4 -
- t
® +
+
+
- J +
a b c
F I G U R A 18 DI
CARDIOLOGÍA
ELECTROCARDIOGRAFÍA
FIGURA 24
CARDIOLOGÍA
-150-J _ +
0 1
i ^ T _ , \
FIGURA 26
FIGURA 28
7(1
4~
ELECTROCARDIOGRAFIA
avíV
+60°
aVL
•Vf
FIGURA 30
4^
CARDIOLOGIA
1— D.20"
1
VOLTAJE
1
J
aÓ4"
FIGURA 33
w
(figura 33). Los aparatos están calibrados para brin-
dar una amplitud d e dos cuadros grandes para cada
milivoltio (1 m V = 2 cuadros grandes).
Dll / Dlll
ELECTROCARDIOGRAMA NORMAL
1. ONDAP
80
ELECTROCARDIOG RAFIA
2. ESPACIO PR
CUADRO 4.2
VALORES NORMALES Q T c
este síndrome es frecuente la muerte súbita por La onda T simétrica y positiva representa cual-
trastornos del ritmo (taquicardia helicoidal y/o fi- quiera de las tres siguientes anormalidades:
brilación ventricular) y lo mismo sucede en el sín-
drome de Romano-Ward en el q u e el espacio Q T a ) Isquemia subendocárdica (figura 6 9 ) .
se encuentra alargado, pero la audición es normal. b) Hiperkalemia (figura 37-A).
Ambas enfermedades constituyen padecimientos
hereditarios q u e se acompañan de muerte súbita c) Sobrecarga diastólica del ventrículo izquier-
(ver capítulo de ARRITMIAS). Por el contrario, la h¡- do (figura 4 9 ) .
perkalemia (figura 3 7 ) , la hipercalcemia y la a c -
C u a n d o la onda T es simétrica y negativa, re-
ción digitálica acortan dicho intervalo.
presentará isquemia subepicárdica (figura 70).
Normalmente la onda T es positiva en D I , D l l
aVF y de V , a V , generalmente es negativa e n aVR
5. ONDA T 6
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FIGURA 36 Hipokalemia. Registro de las primeras derivaciones precordiales. Nótese el importante
alargamiento del espacio Q T ( Q T : V M + 0 . 1 9 " ) a expensas de la onda T debido a una considerable
depleción de potasio plasmático
6 8 5 8 4 6
ELECTROCARDIOGRAFÍA
A
de 5 a 7 mEq/L
FIGURA 37 Hiperkalemia. A:
B
cuando el potasio plasmático
se eleva entre 5 y 7 mEq/L se
acorta el Q T (QT:VM-0.05" en de 7 a 9 mEq/L
el trazo) la onda T se registra
acuminada y simétrica. B: si el
potasio se eleva entre 7 y 9
mEq/L, además se ensancha el
complejo QRS (0.16" en el tra-
zo) y se alarga el espacio Q T
( + 0 . 0 6 " ) . C : Si la hiperkale- c
mia es muy importante des-
aparece la actividad sinusal
(ritmo sinoventricular) exage- de 9 a 11 meq/1
rándose el ensanchamiento
del QRS (0.24" en el trazo) con
alargamiento excesivo del es-
p a c i o Q T ( + 0 . 1 4 " ) , y la
acuminación de la onda T. D:
cuando la elevación del K +
plasmático es mayor de 11
mEq/L se exageran aún más los
D
signos de hiperkalemia y apa-
rece ritmo idioventricular y t de 11 mEq/L
paro cardiaco
BIBLIOTECA CENTRAL
U.N.A.M.
18589
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 38 Corazón horizontal. Al dirigirse el vector 2 hacia arriba se acerca hacia aVL y éste es predomi-
nantemente ( + ) ; se aleja de aVF, el cual es preponderantemente (-). Levorrotación. Nótese la onda " q " en
D I ( Q l ) y la onda " s " en D l l l (Slll) ( Q , S , ) . El áQRS ha rotado a la izquierda (-30°)
FIGURA 39 Corazón vertical. Al dirigirse el vector 2 hacia abajo, aVF es predominantemente (+) y aVL (-).
Dextrorrotación. Se aprecia S en DI (SI) y la onda " q " en D l l l ( Q , ) (S,Q,). El áQRs ha rotado a la derecha (+120°)
ventrículo derecho en las derivaciones precordia- vorrotación enseña mayor porción d e l ventrículo
les hace que e l plano de transición se desvíe hacia izquierdo en las derivaciones precordiales, lo cual
la izquierda (figuras 4 2 , 5 1 , 5 3 y 5 4 ) . Por el con- se traduce por desviación del plano de transición a
trario, la levorrotación en el plano frontal produce la derecha (figura 4 8 ) .
negatividad inicial en DI ( Q , ) y negatividad final
en D l l l (Sj), o sea Q , S , (figuras 3 8 y 46). En el CRECIMIENTOS AURICULARES Y
plano horizontal (derivaciones precordiales), la le- VENTRICULARES
IAHTM3D AD?T0I!ai8
ELECTROCARDIOGRAFÍA
aVL
AVR AVL
: : : : :::: lili
tgj lili
1
trtr : : : :
FIGURA 40 Corazón en posición intermedia. El vector 2 queda en el lado ( + ) , tanto de aVL como de aVF,
por lo que en ambas derivaciones el complejo Q R S es muy positivo y parecido. En este trazo el áQRS se
encuentra en +30° (perpendicular a D l l l )
C r e c i m i e n t o auricular i z q u i e r d o
C r e c i m i e n t o a u r i c u l a r derecho
(figuras 4 3 y 4 4 )
(figuras 41 y 42)
El aumento de las fuerzas d e despolarización de la
1. Desviación del eje de " P " a la derecha, e n - aurícula izquierda magnifica el vector promedio y
tre + 70° y + 9 0 ° (normal a + 5 4 ° ) . lo dirige más hacia atrás, a la izquierda y arriba.
4 . " P " d i f á s i c a y c o n p r e d o m i n i o d e su
positividad (tipo + + + -0 en V , y V , ) .
85
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 42 Crecimiento de
la aurícula derecha. Obsér-
vese e l voltaje aumentado
de la onda P en DI y D l l .
N ó t e s e la o n d a P de de-
flexión rápida e n V, y com-
plejo qR en la m i s m a deri-
i li -4 v a c i ó n . En V la onda P es
de gran predominio ( + ) . La
rotación áP a la izquierda
( + 1 5 ° ) y el aumento en su
duración (0.12") traduce
c r e c i m i e n t o a u r i c u l a r iz-
quierdo agregado
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
D l l ; V 5 ; V6
1. Desviación del eje de " P " a la izquierda (entre
+ 3 0 ° y 0°). V 1 ; V2
CRECIMIENTOS VENTRICULARES
C r e c i m i e n t o biauricular (figura 4 2 )
Se presenta e n padecimientos c o n repercusión Los datos electrocardiográficos que encontramos e n
hemodinámica sobre las dos aurículas. Ejemplo: los crecimientos ventriculares son consecuencia tanto
padecimientos mitrotricuspídeos, míocardopatías del incremento de la masa ventricular como de los
restrictivas, pericarditis constrictiva, etc. cambios e n la posición eléctrica del corazón.
F I C U R A 48
4
CARDIOLOGÍA
¥ i
i
1
|| 1 M :,
H E
11imiiin
01 Dll Dlll
¡¡Si
:::::::::::::
V3
F I G U R A 49 Hipertrofia ventricular izquierda con sobrecarga diastólica. El trazo enseña un corazón verti-
c a l con signos de hipertrofia ventricular izquierda. Nótese la onda T picuda, acuminada y simétrica en
derivaciones precordiales izquierdas ( V ) . El índice de Sokolow es de 66 m m
M
de 3 5 m m se asegura el diagnóstico de
b) Ello también es el causante d e la rota- hipertrofia ventricular izquierda (figura
ción del á Q R S a la izquierda ( á Q R S , arri- 4 9 ) . Si este índice es positivo se asegura
ba de 0° (figuras 3 8 y 4 6 ) . el diagnóstico, si es negativo no se des-
carta la presencia d e hipertrofia ventri-
c) Si el corazón se horizontaliza por causa cular izquierda.
de crecimiento ventricular izquierdo, la
medición del índice de Lewis será de ayu- 7. Sobrecarga diastólica. Cuando existen signos
d a para corroborar e l diagnóstico. S e de crecimiento ventricular izquierdo y éste es
mide la amplitud de R y S (en mm) para causado por sobrecarga diastólica (insuficien-
las derivaciones DI y D l l l con el objeto cia aórtica o mitral, persistencia del conduc-
d e realizar la siguiente ecuación: to arterioso o comunicación interventricuiar),
90
ELECTROCARDIOGRAFÍA
HVD
1 +2d
F I G U R A 50
.1 Jj¿.:S; - L..IJ
,|.,,:,| ;..
i :
aVL avT
m aVR
tricular derecha. Se puede
ver el aumento del voltaje
de R en precordiales dere-
chas, de S en V y de R en
aVR; rotación del AQRS a la
derecha ( + 130°) deflexión
intrinsecoide prolongada en
V, y V (0.04") dextrorrota-
ción del corazón ( S , Q , ) e
inversión s e c u n d a r i a a l a
onda T en precordiales de- .......
rechas (hasta V ) , con plano
de transición desplazado a
la izquierda en V . El índice
s
de Lewis es de -18 mm
CARDIOLOGÍA
J
- i
Transición
FIGURA 53
92
ELECTROCARDIOGRAFÍA
B L O Q U E O DE RAMA
4-=
CARDIOLOGÍA
i p
j a i
i i I ü - . ] . . J - Í H Í Ül••+•••
i::::!
DI Dll DÍil T aVR i aVL
'L I laVF
n/i ,.
tran la repolarización predominantemente del
septum interventricuiar en donde se ha reali- fe
zado el "salto d e o n d a " para despolarizar al ven-
trículo izquierdo (figura 5 7 ) . VA '
7. Rotación del Á T a la derecha, opuesto al á Q R S .
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRAFICO
(figura 59)
3. S empastada e n V ^. 5
4. R tardía y empastada en a V R .
6. O n d a T invertida y asimétrica en V I .
F I G U R A 5 9 Bloqueo de
rama derecha. Comple-
jos rsR' en V , , S empas-
tada en V , , , rotación del
á Q R S a la d e r e c h a
( + 1 0 0 ° ) , inversión se-
c u n d a r i a de la onda T
en p r e c o r d i a l e s d e r e -
c h a s , con el Á T opuesto
(a 0°) al á Q R S . Nótese
el ensanchamiento d e l
complejo Q R S (0.12) y
la R tardía y empastada
en aVR
4- 95
CARDIOLOGÍA
BLOQUEOS FASCICULARES
T—n
• - • :
ii.i..' - t: *
—- - p:.; | : ; • T .
íj... I R
FIGURA 61 Bloqueo de la
subdivisión anterior de la
R I H H . Se nota una desvia-
ción del áQRS a -60° y del
ÁT a +120°. Obsérvese el
tiempo de inscripción in-
trinsecoide en aVL
( 0 . 0 4 5 " ) mucho m a y o r
que en V (0.02"). Ondas
6
empastada en aVR
97
CARDIOLOGÍA
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
2. En presencia de imagen de B R D H H en V I se
5. El á O R S tiende a situarse entre + 60° y + 90°. encuentra rotación del á Q R S a la izquierda e n -
tre -45° y -90°).
6. El á T se sitúa alrededor de - 3 0 ° , lo cual tradu-
c e un c a m b i o secundario en la repolarización 3. Aumento del tiempo d e inscripción de la de-
ventricular. flexión intrinsecoide e n aVL en relación c o n V 6
(más de 0 . 0 1 5 " ) , c o n R empastada en su rama
descendente.
BLOQUEO BIFASCICULAR: BLOQUEO DE LA SUB-
DIVISIÓN ANTERIOR DE LA RAMA IZQUIERDA DEL La mejor forma de sospechar el diagnóstico es
HAZ DE HIS (BSARIHH) ASOCIADO CON BLOQUEO encontrar desviación del á Q R S a la izquierda en
DE RAMA DERECHA (BRDHH) (figura 6 4 ) presencia de B C R D H H .
Proceso d e activación
C u a n d o se asocia el bloqueo troncular de la rama BLOQUEO BIFASCICULAR: BLOQUEO DE LA SUB-
d e r e c h a del haz de His c o n el bloqueo d e l fascí- DIVISIÓN POSTERIOR DE LA RAMA IZQUIERDA
c u l o anterior d e la rama i z q u i e r d a , la morfología DEL HAZ DE HIS (BSPRIHH) ASOCIADO CON BLO-
del c o m p l e j o ventricular e n V , manifiesta e l blo- QUEO DE RAMA DERECHA (BRDHH) (figura 65)
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m
I lll u lll lili IIIB ll:| IM .... ii IÍI lili
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Jt
98
ELECTROCARDIOGRAFIA
¡ l l i B l
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: DI Dll Dlll
1
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aVR j —
aVL ... S
|
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vi-
_
jj ' -jl
F I G U R A 64 Bloqueo blfascicular (BCRDHH y
BSARIHH). El bloqueo de rama derecha se mani-
fiesta por la R empastada en V1-2 y el bloqueo de
fascículo anterior de la rama izquierda por la des-
1 V2 — V3 —
viación del áQRS a la izquierda (-60°). Nótese la — V1 — ~
diferencia del tiempo de deflexión intrinsecoide en
aVL (0.08") y V6 ( 0 . 0 4 " ) , el QRS mide 0 . 1 2 " que se
debe al empastamiento de la R en aVL
sl :
cha, por lo que en las derivaciones precordiales lo
manifiestan ( r S R ) . i V5 — —\ V6 —
C o m o la activación se retrasa considerablemen- F I G U R A 65 Bloqueo i
bifasdcular . i .
(BCRDHH ±
te en las porciones posteroinferiores del ventrículo BSPRIHH). El bloqueo de rama derecha se manifies-
izquierdo (bloqueo del fascículo posterior), se e m - ta por los complejos rSR' en V, Nótese la prolonga-
r
4*
CARDIOLOGÍA
onda S prominente y empastada en V. r ni la onda m o , como dicha activación se dirige hacia arriba y
"r" tardía y empastada e n aVR. a la derecha, produce "r" inicial en aVR y " q " en
D l l , D I I I y a V F (como sucede en el BSPRIHH).
B I O Q U E O TRIFASCICUIAR
aVR
produce la R de V , ; e l vector l l l d la R
6
100
ELECTROCARDIOGRAFÍA
y duración del potencial de acción (figura 68). Lo porque están sometidas a mayor estrés y este es
anterior, se hace evidente en el segmento R-ST del uno d e los mayores determinantes del M V O , (ver
electrocardiograma clínico y se le denomina tejido capitulo d e FUNCIÓN VENTRICULAR). D e b i d o a q u e el
lesionado o zona de lesión. Si este grado intenso de electrocardiograma clínico e s la resultante de los
isquemia se prolonga por más tiempo sobreviene la potenciales subendocárdicos menos los subepi-
muerte celular o necrosis miocárdica, en la que la cárdicos (figura 3), c u a n d o se altera la duración
célula se despolariza completamente (desaparece y/o amplitud d e alguno d e ellos, se reflejan e n el
la diferencia del potencial eléctrico a través de la trazo electrocardiográfico; así, cuando las células
membrana) por lo que la miofibrilla queda eléctri- subendocárdicas se encuentran isquémicas se des-
camente inactivable: zona eléctricamente inactivable polarizan parcialmente y su potencial de acción
o infarto del miocardio, que se ve e n el electrocar- tiene mayor duración, por lo que la diferencia e n -
diograma clínico por ondas Q anormales. tre los potenciales subendocárdicos y subepicárdi-
cos se altera por la mayor duración del primero
(figura 6 9 ) , y por consecuencia la onda T en las
ISQUEMIA SUBENDOCÁRDICA derivaciones unipolares que se encuentran enfren-
te de la z o n a isquémica se encuentra positiva,
Las células del miocardio subendocárdico son sus- acuminada y simétrica.
ceptibles a sufrir de isquemia c o n mayor facilidad
Dll
.•üi Jkf!
ü
Wteir¡ffiBfl¡8l!Tte
Ja La
jj
aVR aVL aVF
IWllii
4 101
CARDIOLOGÍA
-80
LESIÓN SUBEPICÁRDICA
-100 1
NORMAL DISPOIARIZACION
DIASTÓLICA Cuando las capas de tejido subepicárdico sufren
de lesión, el potencial d e acción subepicárdico ten-
FIGURA 68 La despolarización diastólica impor-
tante reduce la amplitud del potencial de acción, la drá menor amplitud y velocidad d e ascenso cuan-
velocidad de ascenso de la fase 0 y la duración de to más intensa sea dicha lesión miocárdica. Si te-
dicho potencial nemos en cuenta que e l electrocardiograma clínico
se integra c o n la resta aritmética de los potenciales
endocárdicos menos los epicárdicos (figura 3 ) ,
entre menor sea la amplitud y duración del poten-
cial subepicárdico más se manifestará el subendo-
cárdico e n las derivaciones unipolares que estén
enfrente d e l tejido lesionado ( f i g u r a 71 [ á r e a
s o m b r e d a ] ) , o sea, que la lesión subepicárdica se
manifiesta en el electrocardiograma por suprades-
nivel del segmento R-ST en las derivaciones que
miran el tejido lesionado.
F I G U R A 69
ISQUEMIA SUBEPICÁRDICA
TEJIDO LESIONADO
102
ELECTROCARDIOGRAFÍA
Potencial
aubendocirdko
A) INFARTO SUBENDOCÁRDICO (figura 73)
103
CARDIOLOGÍA
INFARTO DEL M I O C A R D I O
Mala evolución Buena evolución
EVOLUCION ELECTROCARDIOCRAFICA
(figura 75) F I G U R A 75
a) La activación ventricular normal se manifiesta f) En el infarto anterolateral si afectan los dos ter-
por el complejo Q R S normal que es originado cios inferiores del septum, la región apical y la
por los vectores habituales que despolarizan el región lateral baja del V I . (complejo Q R a Q S
corazón. de V, a V,).
104
ELECTROCARDIOGRAFIA
cual traduce una zona de necrosis en la región anteroseptal y apical. Nótese la ausencia de zona de lesión
e isquemia, lo cual caracteriza al infarto del miocardio antiguo
105
CARDIOLOGÍA
g) El infarto lateral alto se evidencia cuando apare- cial), la lesión subepicárdica (supradesnivel del
cen las alteraciones características en las deriva- segmento ST) se registra c o m o lesión subendo-
ciones D1 y aVL (complejo Q R o Q S ) . cárdica (infradesnivel del segmento ST) y final-
mente, si se acompañara de isquemia subepi-
h) El infarto anterolateral extenso, traduce necro-
cárdica (onda T negativa de ramas simétricas),
sis de dos tercios inferiores del septum, región ésta se manifestará como isquemia subendocár-
apical, pared libre del ventrículo izquierdo con dica (onda T positiva de ramas simétricas) (figu-
extensión a las porciones laterales altas, por lo ras 7 9 - A y 79-B). Las ondas R altas en derivacio-
cual aparece en D I , aVL y de V , a V , . nes precordiales d e r e c h a s p u e d e n simular
i) Infarto diafragmático (inferior) las alteraciones hipertrofia ventricular derecha. Conviene enfa-
de necrosis, lesión e isquemia aparecen en D l l , tizar que la mayor parte de las veces, el infarto
DIIIyaVF. dorsal acompaña al infarto d e la pared inferior
(figura 76).
j) Infarto posterior o dorsal. El infarto transmural
en evolución ocasiona supradesnivel del seg- k) Infarto del ventrículo derecho (ver capítulo de
mento ST y onda Q a n c h a , con muescas y e m - CARDIOPATÍA ISQUÉMICA).
pastamiento e n las derivaciones electrocardio-
gráficas q u e están orientadas h a c i a el área
infartada. El infarto de la pared posterior del SINDROME DE WOLFF-PARKINSON-WHITE
ventrículo izquierdo (dorsal) no tiene deriva- ( W P W ) (figuras 80 y 8 1 )
ciones electrocardiográficas (en el electrocar-
diograma estándar d e 12 derivaciones) que se Normalmente, el único sitio a través del cual un
orienten directamente hacia la pared infartada, estímulo auricular puede alcanzar a los ventrículos
por lo tanto ninguna de las derivaciones revela para despolarizarlos, es el nodo AV. La conducción
los signos clásicos d e infarto del miocardio en del estímulo normal a través d e dicha estructura
evolución ya mencionados (supradesnivel del representa el segmento PR o P Q e n el trazo elec-
ST y onda Q patológica). Sin embargo, se puede trocardiográfico. La presencia de otros haces de con-
hacer el diagnóstico del infarto e n evolución en ducción situados en lugares diferentes al nodo AV,
el infarto que afecta esta región del corazón, pueden favorecer la conducción auriculoventricu-
cuando e n las derivaciones opuestas a la cara lar; más aún c u a n d o dichos haces paraespecíficos
posterior, V , , V y V , (cara anterior), se manifies-
2
tienen una velocidad de conducción mayor a la del
ta la imagen electrocardiográfica "en espejo"; propio nodo AV.
es decir: la onda Q de necrosis (negatividad ini-
cial) se traduce por una onda R (positividad ini- La existencia de un haz de conducción (haz de
Kent) anormal que une a la aurícula con el ventrícu-
106
ELECTROCARDIOGRAFÍA
lo, provoca una preexcitación por lo que el estímu- cordiales usuales, en el lado derecho del tórax (pre-
lo no se conduce a través del nodo, sino a través del cordiales derechas) y siguiendo e l 5o. espacio
haz anómalo y ello hace que la conducción rápida intercostal derivaciones unipolares posteriores iz-
del estímulo acorte e l espacio PR. La preexcitación quierdas (V. a V ) y derechas (V.R a V , R ) .
4
4J07
CARDIOLOGÍA
FIGURA 82 Síndrome de WPW. El trazo enseña un espacio PR muy corto (0.10" en Dll) y una
onda delta positiva en todas las derivaciones precordiales, lo cual significa que el haz de Kent
es posterior (región II, lll o IV)
108
ELECTROCARDIOGRAFÍA
quierdo, la onda delta será negativa en D l l , Dlll y aVF secuencia una imagen electrocardiográfica de PR
(a veces se confunde con imagen d e infarto del mio- corto y onda delta ( W P W ) .
cardio) y positiva e n las derivaciones precordiales
( W P W tipo A) (regiones II, l l l , IV) (cuadro 3).
SÍNDROME DE BRUGADA
Vale la pena mencionar que la existencia de otros
haces paraespecíficos de conducción, c o m o el haz El síndrome está constituido por una peculiar alte-
de lames y el haz de M a h a i m , son capaces de pro- ración del electrocardiograma que se caracteriza
ducir el síndrome d e W P W , por mecanismos dife- por una morfología del complejo Q R s muy similar
rentes al conocido del haz de Kent. al observado en el bloqueo d e rama derecha del
En efecto, si el estímulo se conduce a través de haz de His e n las derivaciones V , a V , que se acom-
un haz d e James, el espacio PR será corto y si tam- paña d e elevación del segmento ST (figura 84).
bién existe un haz d e Mahaim se producirá un La importancia de esta alteración electrocardio-
empastamiento inicial (onda delta), q u e traducirá gráfica y su reconocimiento oportuno estriba en
la preexcitación de los ventrículos y traerá por con- que su presencia condiciona muerte súbita por arrit-
CUADRO 3
ORIENTACIÓN DE LA ONDA DELTA EN EL CÍRCULO TORÁCICO
ONDA DELTA <-) ONDA DELTA (+)
TOVtADO Y MODIFICADO ICON AUTORIZACIÓN) DE ITURRAIDE V COIS. ARCH. INST. CARDIOL MÉX., 1989:557-585.
109
CARDIOLOGÍA
FIGURA 86 Mecanismo de la
elevación del segmento STen
el Síndrome de Brugada. C)
El registro monopolar endo-
cardio (a) tiene mayor dura-
ción que el epicardio (a') en
condiciones normales. D) El
registro bipolar, registra la di-
ferencia de potencial entre el
endocardio y el epicardio (a
- a'). Q El registro monopolar
endocárdico (c) y epicárdico
(c') después de la administra-
ción de silsicainida y pinaci-
dil que alteran las corrientes
iónicas de N a + y K + de-
muestra cortamiento signifi-
cativo en la duración del po-
t e n c i a l e p i c á r d i c o . D ) El
registro muestra la consecuen-
cia en la imagen electrocardio-
gráfica bipolar con la elevación
del segmento ST que pone en
evidencia la dispersión de am-
bos periodos refractarios. (To-
mado de Kimura M. y col.,
Circulation, 2004; 109:125-131)
mias malignas (taquicardia ventricular helicoidal y/o normal e n amplitud-duración. La diferencia del po-
fibrilación ventricular primaria) e n pacientes que tencial subendocárdico menos el subepicárdico
tienen un corazón estructuralmente sano. (anormalmente de corta duración) permite que se
La alteración electrofisiológica fundamental se manifieste más el potencial subencocárdico al fi-
encuentra e n la pared libre del ventrículo derecho nal de la sístole (figura 8 5 ) , lo que hace que e n las
y especialmente en el epicardio d e la pared ventri- derivaciones precordiales derechas (V, a V , ) apa-
cular, en donde el potencial de acción apicárdico rezca una imagen que semeja a una lesión subepi-
presenta una repolarización rápida, perdiendo el cárdica (figura 8 4 ) .
domo d e la fase dos; por ello se acorta su duración Por otro lado, la diferencia en la duración de los
entre 4 0 y 7 0 % cuando ocurre este fenómeno y se potenciales d e acción de las células miocárdicas
mantiene el potencial de acción subendocárdico subepicárdiacas con las células contiguas es causa de
4
CARDIOLOGÍA
dispersión temporal de los periodos refractarios (figu- o bien puede ser la manifestación de repolarización
ra 86), lo que d a lugar a mecanismos de re-entrada precoz del ventrículo derecho (figura 8 5 ) . Cuando
intercelular y arritmias ventriculares malignas. hay sospecha clínica o el electrocardiograma es su-
La imagen de bloqueo de rama derecha puede gestivo pero no diagnóstico (figura 8 7 ) , se debe rea-
ser debida a un bloqueo de conducción a ese nivel lizar la prueba de la Ajmalina (figuras 88).
VI V4 •
i 1
- r — r -
V2 V3
— | p —
Electrocardiograma b u a l PnMtavteAJmalna
F I G U R A 88 Síndrome de Brugada. Prueba de Ajmalina. En el electrocardio-
grama basal se aprecian los cambios característicos del síndrome de Brugada.
Con la administración de ajmalina, dichos cambios se magnifican
(Tomado de Ascensio E. y Cois., Arch. Insl. Nal. Cardiol., 2000;70:301-311,
con autorización)
112
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114i
Trastornos del ritmo
Capítulo 5 y la conducción
"Humanismo quiere decir cultura, comprensión del hom-
bre en sus aspiraciones y sus miserias, valoración de lo
que es bueno, lo que es belloy lo que esjusto en la vida "
REENTRADA INTERCELULAR
f £. 1,0.' .• ' ,1 . ' I
GÉNESIS DE LAS ARRITMIAS Los potenciales de acción de todas las células
L
miocárdicas tienen una duración parecida pero no
os mecanismos responsables de la iniciación igual. C u a n d o por condiciones siempre anormales
de los ritmos cardiacos anormales, no son (isquemia aguda, hipokalemia, efecto excesivo de
necesariamente aquellos que los mantienen; algunos antiarrítmicos, falta de actividad adrenér-
la causa desencadenante de una arritmia de alta gica en un grupo de células miocárdicas, etc.), la
frecuencia es casi siempre una extrasístole o más. duración d e los potenciales de acción de células
Los posibles mecanismos para la génesis de estas contiguas es muy diferente y lo es también su pe-
son los siguientes: riodo refractario: las que tienen duración normal
del potencial de acción tendrán un periodo refrac-
tario relativamente mayor que las que tienen un
potencial d e acción corto; a este fenómeno se le
AUMENTO DEL A U T O M A T I S M O
denomina dispersión de los periodos refractarios.
La dispersión temporal de los periodos refractarios
La a c t i v i d a d de un marcapasos se c a r a c t e r i z a
permite que una célula ya completamente repola-
electrofisiológicamente por una fase de despolari-
rizada (periodo refractario corto) pueda ser reexci-
zación diastólica lenta, que al alcanzar determina-
tada por una célula vecina que tiene un potencial
do umbral inicia un potencial de acción propaga-
de acción normal (reentrada intercelular) (figura 1).
do. Esta actividad es la normal y responsable de
Cuando en amplias zonas aparece este fenómeno
• » iatidos del nodo SA; una actividad similar puede
electrofisiológico, puede surgir fibrilación auricular
demostrarse e n las fibras d e Purkinje del ventrícu-
o ventricular.
lo, células del nodo AV y de las fibras tipo Purkinje
de la aurícula.
Algunas extrasístoles de origen auricular o ven-
REENTRADA A NIVEL PURKINJE-MÚSCULO
tacuiar. los ritmos del nodo AV y la parasístole. son
deoidos probablemente a actividad ectópica, con Si un impulso sinusal llega a un sitio del ventrículo
íenómenos electrofisiológicos muy similares a los donde el estímulo es bloqueado (bloqueo unidirec-
descritos para la actividad del marcapasos normal: cional) puede conducirse por una vía alterna y
'actividad ectópica d e l tipo marcapasos". reexcitar el sitio e n donde inicialmente quedó blo-
CARDIOLOGÍA
3-
Miocardio
POSPOTENCIALES TEMPRANOS
4
CARDIOLOGÍA
s, s 2 s, s 4 s 5
« J ü
FIGURA 4 Pospotenciales tempranos y actividad disparada. Las flechas señalan postpotenciales que
aparecen en la fase 3 (flechas). Nótese el pospotencial que sigue a S, y a S general actividad dispara
(
(t) porque S, y S, son precedidos por pausas largas, hechos que no suceden con los pospotenciales que
aparecen después de S, y S, porque la diástole precedente es corta. (Tomado de La/zara, R., Mechanistic and
clinical aspects of acquired long QTsyndrome, ANN, New Yoyk, Acad., SCI, 1992; 644:48-56)
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
C o n d u c c i ó n d e c r e m e n t a l (figura 5 )
Conducción Decremental Completa
Es un t i p o d e c o n d u c c i ó n e n la q u e las p r o p i e - Nodo AV
d a d e s d e la fibra m i o c á r d i c a c a m b i a n a través
AN N su
d e su l o n g i t u d , d e tal m a n e r a q u e e l p o t e n c i a l
]Vt/\>,
d e a c c i ó n c a d a vez es m e n o s e f e c t i v o c o m o es-
t í m u l o para la p o r c i ó n no e x c i t a d a q u e está por
delante de é l .
La o c u r r e n c i a d e este f e n ó m e n o ha sido de-
mostrada e n el nodo AV. En efecto, la disminu- FIGURA 5-B La velocidad de ascenso de la fase 0
c i ó n d e la velocidad d e c o n d u c c i ó n q u e ocurre disminuye al grado de que la amplitud del poten-
cial de acción es tan pequeño <jue se convierte en
e n el nodo A V normalmente se d e b e a este fenó- subumbral y no es capaz de estimular a las células
m e n o . C u a n d o el estímulo proveniente d e las que se encuentran por delante de é l , por lo que el
aurículas a l c a n z a n la región p r o x i m a l (AN) d e l estímulo deja de conducirse
nodo AV, la v e l o c i d a d d e c o n d u c c i ó n se reduce
paulatinamente de 1 m/seg hasta 2 0 0 cm/seg en la
región central d e l nodo A V (N), para posterior- conducción, es decir, se favorece la conducción
mente aumentar también en forma paulativa cuan- decremental; incluso la estimulación auricular o fre-
do alcanza la región ( N H ) (figura 5-A). En la con- cuencias d e 1 3 0 a 150 x ' e n el hombre sano es
ducción decremental, el potencial de acción tiene capaz de producir fenómenos de Wenckebach a
una v e l o c i d a d d e ascenso cada vez más lenta, lo nivel de la unión A V por este mecanismo.
cual traduce a su vez menor v e l o c i d a d d e c o n -
La mayoría de las condiciones que son capaces
d u c c i ó n ; esto es, el impulso cada vez es menos
de producir bloqueo A V o retraso de la conducción
efectivo c o m o estímulo para las células proximales
a este nivel favorecen la conducción decremental,
a é l ; eventualmente e l decremento d e la c o n d u c -
c o m o las extrasístoles auriculares precoces, las
c i ó n puede ser tan importante, q u e el potencial
arritmias auriculares rápidas, ya sean autóctonas o
de acción sea subumbral y por lo tanto incapaz de
producidas por estimulación auricular, la acetilcolina,
excitar a las células que están por delante de e l ,
la digital y otros fármacos, la hipoxia y las extrasístoles
e n c u y o caso el estímulo q u e d a bloqueado d e n -
ventriculares que penetran al nodo pero que no
tro del nodo (conducción decremental completa)
logran conducirse a la aurícula.
ifigura 5-B).
Asimismo, cuando un estímulo penetra al nodo
Por otro lado, la estimulación precoz del nodo A V y sufre decremento completo de la conducción,
AV alarga su periodo refractario; así pues, si se pro- no es propagado hacia los ventrículos o hacia las
duce una estimulación rápida a altas frecuencias, aurículas (si es retrógrado), pero altera el periodo
cada estímulo caerá precozmente en el periodo refractario de la unión A V y de esta forma la con-
refractario relativo, generando una respuesta más ducción decremental participa e n la génesis de la
pobre y progresivamente c o n menor velocidad de conducción oculta (figuras 6 y 7).
CARDIOLOGÍA
\ \ \ > \ \
FIGURA 8 Conducción oculta en Flutter auricular.
La onda I penetra en el nodo AV incompletamente
(conducción decremental completa) y aumenta su
periodo refractario. Por esta razón la onda f se 2
cular interpolada (no tiene pausa compensadora) culo porque la penetración incompleta de cada una
que penetra incompletamente en forma retrógrada deja un periodo refractario absoluto al nodo AV;
en el nodo AV (con conducción decremental com- sin embargo, la poca penetración de la onda I deja
pleta). La evidencia de dicha penetración se tiene tan sólo un periodo refractario relativo al nodo AV y
al observar el incremento del espacio PR de dura- permite que la onda f se conduzca con lentitud ha-
ción mayor en el latido post-extrasistólico, aue es cia el ventrículo (espacio F-R de 0.28"). La conse-
la consecuencia de que la extrasístole penetro en el cuencia de la penetración incompleta de los estímu-
nodo AV sin alcanzar la aurícula (conducción ocul- los en el nodo AV es el alargamiento del espacio F-R
ta) y lo dejó en periodo refractario relativo (conducción oculta)
120
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
4 . Prolongación del espacio PR en los latidos todos los potenciales de acción fueran idénticos en
capturados c u a n d o existe bradicardia sinu- amplitud y duración en todas las células miocárdi-
sal c o n disociación A V (figuras 6 8 y 701. cas, no seria posible hacer tihril.ir.il corazón; por el
contrario, entre mayor diferencia haya la duración
5. La prolongación del espacio PR del latido cap- de los potenciales de acción, habrá mayor disper-
turado en taquicardia ventricular (figura 9). sión temporal en los periodos refractarios y, por lo
Por otro lado, también puede presentarse e n tanto, mayor posibilidad tendrá e l corazón para
arritmias de aparición poco frecuente, c o m o son: fibrilar, o sea, habrá mayor vulnerabilidad eléctrica.
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121
CARDIOLOCÍA
122
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
55 'y
1
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Si tenemos e n cuenta que el periodo refracta-
PRA
rio tiene una d u r a c i ó n inversa a la f r e c u e n c i a
cardiaca se entenderá q u e la bradicardia se acom- RDHH
paña de un periodo refractario largo y la taquicar-
dia, por el contrario, lo tendrá corto.
C u a n d o el ciclo precedente es largo (bradicar- 1
dia) y aparece un latido prematuro (extrasístole
supraventricular o latido supraventricular precoz RIHH
e n fibrilación auricular) (figura 14), puede encon-
trar en periodo refractario u n a de las ramas del
haz de H i s y se c o n d u c i r á c o n aberrancia. Por lo
2 RDHH
tanto, los ciclos precedentes largos favorecen la
aberrancia (fenómeno de Ashman).
NODAL V VENTRICULAR).
1—*—r
5 52
A
V7YA AV \ 2 U N
^ 20 \ /" \ 2 S
\ 2 0
AV >
V
V
1 1
FIGURA 18 Interpolación. La extrasístole (E) se en-
cuentra aprisionada entre dos latidos sinusales (in-
terpolada); véase como el tiempo de conducción
FIGURA 16 Disociación AV. Dos marcapasos acti- AV (espacio PR) de latido posextrasistólico se en-
van el corazón. El marcapasos inferior tiene mayor cuentra prolongado (conducción oculta)
frecuencia que el superior e interfiere con su des-
censo hacia los ventrículos
A
I
A
AV v / V
. I
AV Anlero r,>da „ .
K
Rplrógradj
1>
FIGURA 19 Conducción retrógrada
T
ducción decremental completa) e n las porciones IBS!
125
CARDIOLOGÍA
Bloqueo de entrada ("protección") (figura 20) se esperaba que la conducción fuera imposible por
Normalmente el estímulo sinusal al propagarse ha- ocurrir en e l periodo refractario absoluto o relativo.
cia el miocardio de todo e l corazón, lo despolariza Este fenómeno es de rara aparición e n la clínica y
y activa eléctricamente. Cuando el estímulo eléctri- sólo se presenta cuando el sistema de conducción
co no penetra en algún sitio del miocardio auricular está deprimido. Se ha descrito en casos con blo-
o ventricular y permite que se genere allí un poten- queo A V completo e n los que una extrasístole auri-
cial de acción, independiente del ritmo normal, se cular precoz puede conducirse en forma anterógrada
habla d e que dicho sitio está "protegido" o que hacia los ventrículos mientras, los impulsos que tie-
tiene "bloqueo de entrada". Característicamente los nen ocurrencia más precoz o más tardía no son con-
focos parasistólicos tienen bloqueo de entrada y por ducidos.
ello aparecen formas independientes de los latidos
sinusales.
ARRITMIAS SINUSALES
RITMO SINUSAL
PARASISTOLIA
El nodo sinoauricular es el marcapasos del cora-
Cuando en el miocardio auricular o ventricular existe zón que controla al mismo, debido a su mayor au-
un foco con automatismo propio y que debido a tomatismo. En el E C G se manifiesta por la inscrip-
bloqueo de entrada no es afectado por la despolari- ción d e la onda F¡ seguida del complejo Q R S a una
zación sinusal, se habla d e un foco parasistólico. En frecuencia de 60/90 m i n . Por debajo de 6 0 , se
estas condiciones, el corazón está comandado por habla de bradicardia sinusal y por arriba de 100/
dos ritmos: el sinusal y el parasistólico; como ambos min d e taquicardia sinusal.
están "protegidos" tienen actividad independiente. La onda P probablemente es el signo electro-
cardiográfico aislado más importante para el diag-
nóstico de las arritmias, por lo que deberá buscar-
CARACTERÍSTICAS DEL FOCO PARASISTÓLICO
se de preferencia en D l l y VI.
(figura 2 0 )
El termino "ritmo sinusal normal" no necesa-
1. Se hace evidente en forma de extrasístoles riamente implica que el impulso se conduzca nor-
auriculares o ventriculares, c u y o intervalo de malmente hacia los ventrículos (figura 21).
acoplamiento siempre es variable; ello tra-
d u c e que el latido parasistólico no tiene re-
lación con el latido previo. ARRITMIA SINUSAL
«4.
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
1. Arritmia sinusal respiratoria (figura 22) La bradicardia sinusal puede alterar la hemodi-
Es la producida normalmente por las fases de la námica circulatoria y causar síntomas (debilidad, li-
respiración. El espacio P-P varía en forma gra- potimia o sincope) en las siguientes condiciones:
dual en relación con las fases d e respiración.
1 . Efecto excesivo o intoxicación por medicamen-
Se exagera con las maniobras vagales y des-
tos: Digital, betabloqueadores o calcioanta-
aparece con la estimulación simpática. Es un
fenómeno normal y más aparente e n niños d e gonistas del tipo del verapamil o diltiazem.
e d a d escolar; su a u s e n c i a f r e c u e n t e m e n t e 2 . Algunos casos de infarto del miocardio infe-
acompañada a cardiopatías. rior por isquemia del nodo sinusal o por efec-
to vagal excesivo.
2. Bradicardia sinusal
3. Enfermedad degenerativa del sistema d e
Ritmo sinusal a frecuencia menor de 60/min,
conducción.
usualmente entre 50/60 m i n . Es una expresión
de vagotonia e n sujetos sanos, d e acción tóxica
Tratamiento:
d e drogas como la digital, los betabloqueado-
res, etc., o de enfermedad del nodo sinusal (sín- 1 . Suspender el fármaco causante cuando sea
drome bradicardia-taquicardia). el caso. Si la alteración hemodinámica es
importante, instalar marcapaso transvenoso
transitorio hasta que desaparezca el efecto
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
tóxico.
a ) Siempre que se encuentre bradicardia sinusal
2 . Cuando la bradicardia sinusal sintomática es
con frecuencia menor de 50/min investigar blo-
causada por efecto vagal excesivo, la admi-
queo sinoauricular, éste se diagnostica cuando
nistración de 1 mg d e Atropina por vía in-
en el mismo trazo la frecuencia se duplica en
travenosa será el tratamiento de elección.
forma brusca o por el contrario la frecuencia se
reduce a la mitad inesperadamente (figura 26). 3 . En el curso de un infarto del miocardio inferior
en evolución instalar un marcapaso transve-
b) Extrasístoles auriculares bloqueadas bigemina-
noso temporal en caso de bradicardia sinu-
das. Aparecen c o m o ondas P anormales que sal sintomática que no responde a la admi-
deforman la onda T del latido precedente (por nistración de atropina por vía intravenosa.
ser muy precoces), sin ser seguidas del com-
plejo O R S (figura 4 5 ) . 4 . C u a n d o la bradicardia sinusal es crónica y
produce síntoma de déficit d e irrigación
sistémica o cerebral (especialmente en su-
TRATAMIENTO DE BRADICARDIA SINUSAL jetos mayores de 6 0 años), se requiere la
La bradicardia sinusal usualmente se presenta en instalación de un marcapaso permanente
sujetos sanos con regulación vagotónica. En estos, AAI (si está preservada la función del nodo
no requiere ningún tratamiento pues no causa sín- AV) o D D D (si está afectada la función del
tomas ni alteraciones hemodinámicas. nodo A V (v/de infra).
FIGURA 22 Arritmia sinusal respiratoria. Con la inspiración aumenta la frecuencia cardiaca y lo contrario
sucede con la espiración
4 127
CARDIOLOGÍA
— — 4 ^
NS 10 10 IO
SA
AV
128
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
e
FIGURA 24 Bloqueo slnoaurícular de 2o. erado que se conduce con fenómeno de Wenckebach (Mobitz I). Se
uede ver el acortamiento progresivo d e l espacio P-P, el cual es seguido de una pausa que termina por un
itido de escape nodal (EN). Como en el retraso en la conducción SA no se manifiesta en el E C G , sólo se
registra la consecuencia de la disminución progresiva del incremento que se traduce en el acortamiento
progresivo del P-P
PARO AURICULAR
3. Ritmo sinoventricular.
2 . Escape nodal.
los haces ¡nternodales sin la activación d e l mio-
3. Escape ventricular.
cardio auricular inespecífico; así, e n la c o n d u c -
4 . Asistolia ventricular. ción sinoventricular no hay onda P a pesar d e que
el ritmo es sinusal, d e b i d o a que no hay activa-
Así, pues, un ritmo sinusal es interrumpido por c i ó n de la a u r í c u l a y puede simular paro s i n u s a l ,
una pausa que puede ser terminada por un latido bloqueo SA completo o ritmo n o d a l . Este trastor-
de escape nodal o ventricular y rara vez causa asis- no es causado por hiperkalemia grave (figuras 2 8
tolia. Se diferencia del bloqueo SA e n que las pau- y 29).
sas no son múltiplos del ritmo sinusal.
Se debe seguir el mismo criterio terapéutico que Este ritmo sinoventricular es c o n s e c u e n c i a d e hi-
el anotado para la bradicardia sinusal sintomática. perkalemia grave, por lo tanto su reconocimiento
electrocardiográfico establece la indicación ur-
gente d e hemodiálisis o diálisis peritoneal, c u a l -
RITMO SINOVENTRICULAR quiera que sea la causa de la hiperkalemia (figura
Se llama así a la transmisión d e l impulso origina- 28). Entre tanto se inicia el procedimiento dialítico:
d o e n el nodo sinusal hacia el nodo A V a través de d e b e administrarse una ampolleta de gluconato
CARDIOLOGÍA
_ . , — , —•
1
"* i _ f _~ I T
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1 1 '
FIGURA 26 Bloqueo sinoauricular Upo Mobitz II. Con relación 2:1. Los primeros tres
latidos son conducidos con bloqueo AV de primer grado (espacio PR 0.28"), después del
3er. latido hay una pausa de 2 600 mseg que termina con un nuevo latido sinusal conduci-
do. Nótese que la pausa es exactamente el doble del ciclo sinusal procedente (1 300 mseg).
1
PARO SINUSAL P O S T - M A N j O B R A * }
FIGURA 27 Paro sinusal. Véase el ritmo sinusal que después de una maniobra vagal es seguido de una
pausa larga, que no es múltiplo del ciclo sinusal. La pausa termina con un nuevo latido normal
FIGURA 28 Electrocardiograma de
hiperkalemia Ritmo sinoventricular.
Ausencia de onda P, ritmo ventricu-
lar con una frecuencia de 65 por
m i n , complejo Q R S ensanchado
( 0 . 2 2 " ) con muescas y empasta-
mientos; onda T picuda acuminada
y simétrica: Q T : V M + 0 . 1 0 " (potasio
plasmático de 9.4 mEq/L)
130
4^
TRASTORNOS DEL RITMO Y IA CONDUCCIÓN
FIGURA 30 En el trazo puede observarse que todos los latidos sinusales (onda P) son seguidos de un
complejo QRS pero el espacio PR e s t a prolongado (0.28")
es debido a un aumento del periodo refractario re- ducción a nivel d e la unión AV, es decir, un espacio
lativo de estos tejidos. PR prolongado (mayor de 0 . 2 0 seg).
El bloqueo puede estar situado a nivel: En casos de taquicardia sinusal por arriba de 100/
min el PR máximo normal es de 0 . 1 8 seg, si lo
1. Del nodo AV.
encontramos de mayor duración se establecerá el
2. Del haz de His. diagnóstico de bloqueo AV d e 1 er. grado.
En casos de taquicardia auricular paroxística,
3. Ramas del haz d e His.
es un fenómeno fisiológico encontrar prolongación
El t i e m p o d e c o n d u c c i ó n a nivel d e la unión del espacio PR, principalmente si la frecuencia de
AV, esta representado e n el E C G por el espacio la taquicardia es elevada.
PR que n o r m a l m e n t e tiene una d u r a c i ó n entre
0 . 1 2 - 0 . 2 0 seg y varía e n forma inversamente C a u s a s de bloqueo AV de p r i m e r g r a d o :
proporcional a la f r e c u e n c i a c a r d i a c a , es decir, 1. Vagotonia o maniobras vagales.
se acorta c o n la taquicardia y se alarga c o n la
bradicardia dentro d e los límites fisiológicos. Esto 2. Drogas c o n e f e c t o vagal (digital, m o r f i n a ,
es debido a que el periodo refractario relativo prostigmina).
de la unión A V también varía e n forma inversa- 3. Bloqueo simpático (reserpina, guanetidina, be-
mente proporcional a la f r e c u e n c i a c a r d i a c a . tabloqueadores).
El bloqueo A V de primer grado se manifiesta
4. Hipokalemia.
en el E C G c u a n d o encontramos que todos los estí-
mulos provenientes del nodo sinusal son conduci- 5 . Cardiopatía coronaria (crónica o infarto agudo
dos a los ventrículos pero c o n un retardo e n la con- del miocardio).
131
CARDIOLOGÍA
7. Cardiopatías congénitas (trasposición corregi- • Aumento progresivo del espacio PR, d e 0 . 1 5 "
d a de los grandes vasos, C . I . A . , enfermedad de a 0 . 4 5 " , hasta que se bloquea el estímulo auri-
Ebstein). cular (figura 3 3 ) .
F I G U R A 31 Bloqueo AV. A) Cuando los periodos refractarios tienen duración normal, el siguiente impulso
encuentra en periodo excitable al tejido y se conduce normalmente. B) Si se encuentra prolongado el
periodo refractario relativo (PRR) el impulso se conduce con lentitud (PR prolongado). C) Si se encuentra
alargado el periodo refractario absoluto el estímulo queda bloqueado dentro del nodo AV
132
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
V v ^ ^ V ^v
I _T1 Ti 23 9
^
8
FIGURA 3 2 Bloqueo AV de segundo grado tipo Mobitz I (fenómeno de Wenckebach). Obsérvese el alarga-
miento progresivo del espacio PR hasta que aparece una onda P bloqueada. El acortamiento también
progresivo del espacio RR, posteriormente, a la pausa larga se reinicia e l ciclo. Obsérvese el acortamiento
progresivo del espacio R-P en cada ciclo
70 70 70 70 70
15 35^%^^ 4 5
^ W 5 0
20 10 5
FIGURA 34 FIGURA 36
70 . 70 70 . 70 70
I1
V
15 ^ 35>^45 > 50^V S
20 10
— 90 — — 75 —
FIGURA 35 FIGURA 37
133
CARDIOLOGÍA
FIGURA 38 Bloqueo
AV de segundo grado
90x' tipo Mobitz II. Onda
AV'V 'v k 'v k 'v k k k 1 P conducida que al-
terna c o n una blo-
queada, sin cam-
bios e n e l e s p a c i o
45x' PR, que permanece
constante
En el bloqueo A V completo ningún estímulo auri- e) Marcapasos inestable. Puede aparecer sistolia
cular se conduce a los ventrículos. o taquicardia ventricular.
El ritmo auricular puede ser:
134
TRASTORNOS DEL RITMO Y I A CONDUCCIÓN
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CARDIOLOGÍA
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FIGURA 42
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FIGURA 44 Extrasístole auricular con aberrancia.
B) EXTRASÍSTOLES AURICULARES CONDUCIDAS Latido muy adelantado, precedido de P', espacio
CON ABERRANCIA PR prolongado, complejo Q R S con imagen de
B R D H H y pausa compensadora Incompleta) (Deri-
Cuando una extrasístole auricular es muy pre- vación V , ) . (Tomado de L. Schamroth, The disorders of
coz, puede alcanzar al sistema d e conducción cardiac rhythm, con permiso de Blackwell Scientific
de la unión A V y rama derecha del haz de His en Publkralions L.T.D., Oxford, England, 1971)
137
CARDIOLOGÍA
T A Q U I C A R D I A PAROXISTICA AURICULAR
DIAGNOSTICO ELECTROCARDIOGRAFICO
(figura 4 5 ) DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
(figura 47)
1. O n d a P' adelantada (usualmente sobre la onda
T) de diferente morfología a la ? ' sinusal, no es 1. OndaP:
seguida de complejo Q R S .
a) Es anormal. Diferente a la P sinusal. El pri-
2. Pausa larga que representa la pausa compensa- mer complejo es prematuro, lo mismo que
dora (incompleta) que sigue a la P' extrasistólica. los siguientes.
4 . Conducción AV:
138
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
b) Pero e n ocasiones puede complicarse con b) Aplicar hielo en la cara (aislándolo c o n una
aberrancia de conducción, sobre todo cuan- toalla).
do la frecuencia ventricular es elevada (QRS
c) Estimular el itzmo d e las fauces c o n un
con morfología d e bloqueo de rama).
abatelenguas (provocar náusea).
7. Maniobra vagal. La maniobra vagal la hace des-
d ) Masaje del seno carotideo por 1 0 " a 1 5 " .
aparecer e n forma transitoria o permanente en
Puede repetirse después de un descanso de
el 75 a 8 0 % de los casos.
uno a dos minutos.
8. Desaparición de la arritmia. Puede descubrir un
e) Compresión dolorosa de los globos oculares.
trazo electrocardiográfico enteramente normal
cuando la arritmia es por foco ectópico o reentra- En 6 0 % de los casos se suprime la arritmia con
da intranodal, o bien, se puede descubrir un sín- estas maniobras. En pacientes de edad avanzada
drome de preexcitación (figuras 46, 47,48 y 49). son menos eficientes y no se recomienda la com-
presión de los globos por el peligro d e desprendi-
TRATAMIENTO miento de retina. Si la arritmia no cede iniciar tra-
tamiento farmacológico.
Maniobras vagales
Éstas pueden comprobar el diagnóstico e incluso
servir de tratamiento. Se pueden recomendar cual- TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
quiera de las siguientes:
1. A d e n o s i n a (amp. d e 6 mg) se puede adminis-
a) Maniobra de valsalva. trar e n bolo rápido de 6 mg por vía IV.
NS ®
139
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 4 7 Taquicardia paroxística auricular. En la primera tira se observa una taquicardia con QRS
normal, a frecuencia de 170 x'; la onda P está fusionada con la onda T y es exactamente rítmica. Puede
verse el efecto de la maniobra vagal (MV), la arritmia es seguida por paro sinusal que termina con un latido
de escape ventricular; posteriormente, un ritmo de escape de la unión AV (34 x') y finalmente ritmo sinusal.
Nótese en la última tira la presencia de un espacio PR corto (0.12") que descubre un síndrome de Lown-
Ganong-Levine)
Digoxina (amp. de 0.5 mg). Se aplica 1 amp IV, si a) Fácil intoxicación de pacientes con hipokale-
no cede se aplica 0.25 a 0.5 mg (1/2 a 1 amp) mia o miocarditis.
cada seis horas hasta completar 1.5 mg; 30 mi-
b) En pacientes por arriba de 6 5 años tener
nutos después de cada aplicación se deben rea-
cuidado por la aparición de asistolia después
lizar maniobras vagales.
de desaparecer la taquicardia que puede
presentarse e n casos con síndrome bradicar-
Ventajas: dia-taquicardia. Ellos requieren marcapaso
Medicamento barato, accesible y muy seguro. temporal antes de la digitalización.
Efectivo e n cerca de 9 0 % de los casos cuando
se asocia a maniobras vagales.
3. Verapamil (amp. 5 mg) se administran 5 a 10
Desventajas: mg por vía IV en un minuto.
En un porcentaje no despreciable de casos puede
tardar varías horas (hasta 24) en revertir de arritmia. Ventajas:
a) Efectivo; revierte la arritmia en cerca de 8 0 %
Precauciones: de los casos.
4_Ü
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 49. Síndrome de Wolff-Parkinson-White. El trazo muestra ritmo sinusal con manifestaciones del
síndrome de W P W tipo B (haz de Kent en región V ) . Corresponde al paciente que presentó taquicardia
auricular en conducción ortodrómica (relación con la figura 48) y antidrómica (relación con la figura 51)
T R A T A M I E N T O D E LA T A Q U I C A R D I A
C a u s a s d e Q R S e n s a n c h a d o en taquicardia s u -
A U R I C U L A R Q U E SE A S O C I A C O N S Í N D R O M E
praventricular (figura 5 0 )
DE WOLF-PARKINSON-WHITE (WPW)
I. Por trastornos en la conducción ¡ntraventricuiar
1. En primer término se debe indicar cuales fár-
a) Bloqueo de rama preexistente.
macos se encuentran contraindicados en pre-
b) Conducción aberrante (por intervalo de aco- sencia de síndrome de W P W : digital, verapamil,
plamiento corto, diferente capacidad de re- betabloqueadores, adenosina y diltiazem.
* iití
jr - &
•
NS NS i**
*
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/
^NAV
•vjp
F I G U R A 50 Taquicardia auricular
-i Bloqueo de
con QRS ancho. A) El Q R S está 1 Aberrancia rama derecha
ensanchado durante la taquicardia
con imagen de BRD y se normaliza
al revertir a ritmo sinusal (aberran-
cia). B) Cuando hay bloqueo de
la rama derecha se hace evidente
tanto en la taquicardia como en el
ritmo s i n u s a l . C ) Cuando el blo- ¿MAY \T V
queo es de la rama izquierda, el
complejo Q R S en V se hará evi-
dente tanto durante la taquicardia
como después de la reversión a rit- R\ \ Ventrículo
mo s i n u s a l . D) Una taquicardia
puede autosostenerse c u a n d o el
frente de onda alcanza a los ventrí-
culos por u n haz d e Kent y la
reentrada hacia la aurícula se hace
por el nodo AV ( c o n d u c c i ó n —^Ux- Ri,m
° ~~A-^ v L ^ .
a n t i d r ó m i c a ) t a n t o d u r a n t e la
taquicardia como en el ritmo normal Y W sinusal
se hará evidente la preexcitación (re- Bloqueo de Síndrome de Wolff-
lación con las figuras 49 y 51) rama izquierda Parkinson-White
4 _ «
CARDIOLOGÍA
11111111111M11
...
A
f - l - i i -
rrl t
F I G U R A 51 Este trazo muestra una taquicardia con QRS ancho, producida por un síndrome de
Wolff-Parkinson-White con conducción antidrómica de una taquicardia auricular (la arritmia la
presentó el paciente cuyo trazo se muestra en la figura 49)
I V
refractario absoluto, en cuyo caso el estímulo auri-
cular quedará bloqueado.
yi
f
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
b) Frecuencia alrededor d e 3 0 0 V ( 2 7 0 - 3 2 0 V ) .
F I G U R A 52 Flutter auricular con circuito en la aurí- c) El eje de las ondas F e n el plano frontal mos-
cula derecha. El flutter auricular típico se perpetúa trará una dirección hacia arriba, porque el
mediante un circuito reentrante (Macroreentrada) frente de o n d a sigue una d i r e c c i ó n
que rota en sentido antihorario y pasa por el itzmo caudoencefálica. Ello trae como consecuen-
delimitado por la vena cava inferior (VCI) y la vál-
cia ondas F negativas en D l l , Dlll y aVF y
vula tricúspide (VT) (área sombreada)
positivas e n aVR y aVL. La parte menos an-
cha de la onda F se encuentra hacia abajo.
demostrado que el frente d e onda nacido con el
latido extrasistólico puede viajar a través d e diver-
//. Conducción AV
sos circuitos q u e describen un movimiento circu-
lar alrededor de la aurícula derecha o izquierda Debido a que la frecuencia del flutter es muy alta, la
viajando por el endocardio de una u otra (figuras unión AV no es capaz, habitualmente. d e conducir
5 2 y 5 3 ) . C a d a uno d e estos circuitos es responsa- todos los estímulos que llegan a dicha estructura.
ble de una forma de flutter. La perpetuación de Así, pues, la conducción A V puede ser "fija" (2 por
este movimiento circular depende de q u e el estí- 1 ó 3 por 1, etc.) lo cual producirá una frecuencia
mulo viaje con la lentitud suficiente para que al ventricular regular que será submúltiplo de la auri-
describir el círculo haya terminado el periodo re- cular (150 x ' c u a n d o el bloqueo funcional es 2 por
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FIGURA 54 flutter auricular tipo I. En esle trazo se puede ver que las ondas F son
negativas en Dll, Dlll y aVF; positivas en aVR y aVL (eje de las ondas F a -90°) a una
frecuencia de 200 por minuto (flutter "lento"). Nótese que el complejo QRS es nor-
mal, a una frecuencia de 100 por minuto (conducción AV 2:1)
M K Í M I I I
FIGURA 55 Flutter auricular. Conducción AV 2:1 en la frecuencia ventricular alrededor de 150 x ' (tira
superior). Nótese que el diagnóstico no es claro. La compresión ocular (CO) aumenta el bloqueo AV,
con lo que se hacen evidentes ondas F del Flutter (tira interior) a una frecuencia de 300 por minuto
1) (figura 55); 100 x ' (frecuencia auricular de 300 x' cia). Por ello, se presta a diagnóstico dife-
< uando sea 3 por 1) y 75 x ' (cuando sea 4 por 1), etc. rencial c o n taquicardia ventricular.
1. Mención especial merece el flutter auricular d) La maniobra vagal es de gran utilidad diag-
cuya conducción es 1:1 (figura 56). Es una arrit- nostica, ya que al aumentar el periodo re-
mia muy grave por la alta frecuencia ventricu- fractario del nodo AV también se aumenta el
lar que alcanza; usualmente produce altera- bloqueo funcional y la conducción A V pasa
ciones hemodinámicas, síncope, choque, edema de 1:1 a 2:1 ó 3 : 1 , con lo que es posible
pulmonar, etc. Por la frecuencia ventricular tan establecer el diagnóstico (figuras 5 5 y 56).
elevada, las ondas F no son claramente visibles
e n el trazo, por lo que el diagnóstico debe sos- 2. El flutter con bloqueo A V 2:1 es probablemen-
pecharse cuando: te el que en la clínica se presenta más frecuente-
mente; siempre deberá sospecharse cuando en
a ) La frecuencia ventricular se encuentra alre- una arritmia supraventricular la frecuencia ven-
dedor de 3 0 0 x'. tricular sea de 150 X ' y rítmica. En ocasiones las
ondas F pueden ocultarse dentro del complejo
b) El ritmo es exactamente regular. Q R S y confundirse con taquicardia auricular, o
c) El complejo Q R S se halla ensanchado por incluso ventricular, cuando el Q R S se encuentra
c o n d u c c i ó n aberrante; la alta frecuencia aberrado por bloqueo de rama. Nuevamente la
hace que el estímulo viaje lentamente a tra- maniobra vagal, al aumentar el grado de blo-
vés del sistema de conducción cuando se queo AV funcional, pone en evidencia al flutter
encuentra en periodo refractario (aberran- auricular (figuras 5 5 , 5 6 y 57).
146
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
I J
T T T
MV
A c -
B t m TT
FIGURA 56 Flutter auricular. A) Conducción 1:1 con frecuencia de 280 x'. B) Aparece aberrancia de
conducción (QRS ancho) por la alta frecuencia ventricular. MV) Maniobra vagal: aumenta el bloqueo AV
funcional y el flutter se conduce 2 : 1 . C) Con frecuencia de 140 x ' (desaparece la aberrancia).
3. C u a n d o la conducción A V es variable, el ritmo completar 1,2 mg), hasta que revierta a ritmo
ventricular será irregular (arritmia completa), se- sinusal o antes, si aparecen signos de intoxica-
gún sea la alternancia del bloqueo AV funcio- ción digitálica. Si el flutter tiene conducción
nal ( 2 : 1 , 3 : 1 , etc.). 1:1 o no revierte c o n digital, se puede aplicar
cardioversion eléctrica que característicamen-
te requiere tan solo de pequeñas dosis de ener-
///. Complejo QRS gía: entre 5 0 y 100 Jouls. La electroversión es
La conducción del impulso hacia los ventrículos se altamente efectiva por revertir la arritmia.
lleva a cabo por vías normales y por ello el com-
b) C r ó n i c o : El flutter crónico debe de ser estudia-
plejo Q R S tendrá morfología normal, semejante al
do electrofisiológicamente y tratado c o n técni-
latido sinusal (figuras 54 y 5 5 ) . C u a n d o hay blo-
cas d e ablación. C u a n d o este trastorno del rit-
queo d e rama preexistente, el Q R S puede ser
mo se origina y perpetúa e n la aurícula derecha,
aberrado y prestarse a confusión c o n taquicardia
la ablación a nivel del itzmo cavo-tricuspídeo
ventricular (figuras 5 6 y 5 7 ) .
(figura 52) hace desaparecer definitivamente
la arritmia e n 70 a 9 0 % de los casos. C u a n d o
el flutter auricular se perpetúa en la aurícula
FLUTTER AURICULAR TIPO II izquierda, el mapeo electrofisiológico permite
conocer la activación eléctrica (figura 53) del
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO circuito; nuevamente los procedimientos de
(figura 58) ablación tienen resultado exitoso en u n alto
p o r c e n t a j e d e los c a s o s (ver c a p í t u l o d e
1 . O n d a s auriculares d e Flutter (ondas F).
ELECTROFISIOICKÍÍA).
En ocasiones el circuito que describe el frente
d e onda del flutter auricular tiene una direc-
ción céfalo c a u d a l , lo cual condiciona que las En el flutter auricular tipo II el resultado del pro-
ondas F sean positivas en D l l , D l l l y aVF. cedimiento de ablación no es tan efectivo como en
el tipo I, excepto que el frente de onda sea único.
2. El resto d e manifestaciones electrocardiográfi-
cas son idénticas a las anotadas para el flutter
auricular tipo I. T A Q U I C A R D I A A U R I C U L A R D E ALTA F R E -
C U E N C I A C O N B L O Q U E O AV
147
CARDIOLOGIA
FIGURA 5 7 Flutter auricular asociado a bloqueo de rama. En la tira superior la arritmia podría confundirse
con taquicardia ventricular. La maniobra vagal pone en evidencia al flutter auricular (tiras inferiores)
1. Actividad auricular (onda P) rítmica a una fre- 1 . La sospecha debe plantearse inicialmente en
cuencia entre 1 7 0 y 300 x'. pacientes que reciban digital y presenten un
supuesto "flutter auricular".
2. Las ondas P tienen un eje eléctrico hacia abajo
(entre + 3 0 y 4 0 ° grados), ya que la activación 2. U n signo útil lo constituye el eje d e las ondas
auricular tiene una dirección cefalocaudal. a u r i c u l a r e s : h a c i a a b a j o e n la t a q u i c a r d i a
ectópica (ondas P positivas en D l l , D l l l y aVF),
3. El complejo Q R S tiene morfología supraventri-
por activación cefalocaudal, y hacia arriba en el
cular, ya que la activación ventricular se lleva a flutter (ondas F negativas en D l l , Dlll y aVF) debi-
cabo por las vías normales de conducción. do a la activación caudocefálica. C a b e mencio-
4 . La frecuencia ventricular siempre será menor nar que aun cuando la mayor parte de las veces
que la auricular (por el bloqueo A V ) . este criterio es válido, p u e d e n haber focos
ectópicos que se localicen en la aurícula baja y
que por lo tanto la activación auricular sea
La importancia que esta arritmia tiene e n la
caudocefálica; por el contrario, en la menor parte
práctica diaria es la confusión que c o m ú n m e n t e
148
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
FIGURA 59 Taquicardia auricular bloqueada. El trazo D l l enseña ondas P positivas (activación cefalocaudal)
que aparece a una frecuencia de 250 x'. El QRS es de tipo supraventricular y aparece a una frecuencia
variable (entre 74 y 9 7 x ' ) , menor que la auricular por el bloqueo AV
de los casos c o n flutter auricular la conducción misma maniobra aumenta la velocidad de con-
es cefalocaudal (flutter tipo II). ducción del flutter auricular dentro de la aurí-
cula, lo cual se traduce en un aumento de la
3. R e s p u e s t a a la m a n i o b r a v a g a l . En la taqui-
frecuencia de las ondas F.
cardia ectópica, la maniobra vagal disminuye
la frecuencia de descarga del foco ectópico, 4. Respuesta a la administración de potasio. La
lo cual se traduce en disminuí ion de la fre- hiperpolarización que produce la administración
c u e n c i a d e las ondas R En contraposición, la de potasio a dosis farmacológicas (v/de infra). su-
4 149
CARDIOLOGIA
Dll
H—I—I H—I-
Arritmia
ventriculo-
fásica
• Frecuencia
i • 4' F r e c u e n c i a
' auricular 1 Maniobra
c • w w ' w v vagal _ A _ A j l y w 4 - a U r i C U , a r
Sin Trat. de
respuest, Infusión de sol. elección
W V ^ V V V ^ gluc. + KCI
prime la actividad del marcapasos ectópico y así siones llega a tener utilidad e n el diagnóstico
hace desaparecer la arritmia, mientras que no tie- diferencial entre una arritmia por movimiento
ne efecto en el movimiento circular del flutter. c i r c u l a r (flutter) y otra por f o c o e c t ó p i c o
(taquicardia con bloqueo).
5. Respuesta a la e s t i m u l a c i ó n a u r i c u l a r con
m a r c a p a s o s . La introducción d e un catéter de En efecto, el envío de estímulos aislados (extraes-
marcapasos hacia la aurícula derecha, en oca- tímulos) a través del marcapasos dentro de la aurícu-
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
la, rompe fácilmente el movimiento circular, ya que al Es necesario estar pendiente de la aparición de
despolarizara! miocardio auricular aumenta su perio- signos electrocardiográficos de hiperkalemia (en-
do refractario y con ello cancela el mecanismo del sanchamiento del Q R S ) , pues su presencia condi-
circuito. Por otro l a d o , los extraestímulos d e l cionará la inmediata suspensión de la infusión. Por
marcapasos en la aurícula derecha no afectan al foco razones obvias, este tratamiento no deberá admi-
ectópico que dis|)ara a una frecuencia más elevada. nistrarse e n pacientes c o n insuficiencia renal o
Para poder capturar el ritmo con el marcapasos acidosis metabólica. Cuando no sea posible infun-
será necesario enviar estímulos repetitivos a una fre- dir KCI, se realizará cardioversion eléctrica.
cuencia mayor que el foco ectópico; pero lo usual
es que al disminuir la frecuencia del marcapasos
reaparezca la taquicardia, ello pone e n evidencia el F i b r i l a c i ó n a u r i c u l a r (figura 61)
mecanismo de foco de automatismo ectópico. La fibrilación auricular es la arritmia cardiaca más
frecuente. En la unión americana se calcula q u e
2.2 millones de personas la presentan; 1 0 % de
TRATAMIENTO
las personas mayores d e 8 0 años la padecen y es
En el tratamiento de la taquicardia auricular de alta responsable del 15 al 2 0 % d e todos los eventos
frecuencia c o n bloqueo AV, e n primer término se tromboembolíticos cerebrales.
debe suspender la medicación digitálica si el pa- La despolarización caótica y desordenada de las
ciente la recibe. Enseguida es necesario instalar un aurículas por múltiples frentes de ondas en forma
catéter en la vena cava superior para administrar simultánea, trae c o m o consecuencia que se pierda
una solución parenteral que contenga cloruro d e la función mecánica d e la contracción auricular. Es-
potasio; se administra a razón d e 0.5 mEq a 1mEq tos dipolos d e activación múltiple y desordenados
por minuto. alcanzan al nodo AV y penetran e n é l , algunos pasan
El médico deberá estar pendiente del electro- hacia el haz de His mientras que otros no lo alcan-
cardiograma qué se registra continuamente durante zan, debido a la penetración parcial del nodo por
toda la administración. Dado que la dosis de clo- conducción decremental completa (conducción ocul-
ruro de potasio es muy alta, la taquicardia ectópica ta); así, la rápida penetración de los estímulos auri-
revierte entre cinco y 25 minutos después de la culares favorece la aparición de conducción oculta,
administración. la cual afecta e n forma ¡mpredecible el periodo
, )
FIGURA 61 Fibrilación auricular. Ausencia de P, ondas F, complejo QRS del tipo supraventricular
y espacio R-R variable. En el diagrama inferior se ejemplifica el descenso desordenado de un gran
número de impulsos provenientes de la aurícula y que despolarizan el nodo AV alternando su
periodo refractario de manera irregular, de tal modo que aquel que encuentra excitable el nodo, lo
penetra completamente hasta los ventrículos. La irregularidad del espacio R-R se debe a la altera-
ción ¡mpredecible del periodo refractario del nodo AV por el estímulo previo (conducción oculta)
4_Ü
CARDIOLOGÍA
refractario del nodo AV, hecho que condiciona que un ciclo largo, favorece la conducción aberrante
el latido siguiente se conduzca con lentitud o no se (fenómeno de Ashman) (figuras 14 y 62). Esto de-
conduzca, hasta que un estimulo encuentra al tejido bido a que la diástole precedente determina la du-
nodal e n periodo excitable y se conduce a los ración del periodo refractario de las ramas del haz
ventrículos. Este fenómeno de conducción oculta es de His (figura 13). Tras una diástole larga el perio-
el responsable de que los estímulos pasen a los do refractario de ambas ramas del siguiente latido
ventrículos en forma irregular y c o n ello condiciona será más prolongado (mayor el de la rama derecha);
arritmia completa, c u a n d o los estímulos pasan el si aparece tempranamente un latido supraventricu-
nodo A V viajan por las vías normales de conduc- lar puede encontrar un periodo refractario a la rama
ción, lo cual condiciona que e l complejo Q R S sea derecha y no conducirse a través de ella (bloqueo
normal en morfología y duración (figura 611. excep- de rama funcional), lo que d a como consecuencia
to cuando esté deformado por un bloqueo de Rama, un complejo ancho con muescas y empastamientos
infarto d e l m i o c a r d i o o S í n d r o m e d e W o l f f - (imagen de bloqueo de rama derecha) que puede
Parkinson-White. ser confundido con una extrasístole ventricular (fi-
gura 6 2 ) .
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
(figura 61)
L E Y E S D E LA A B E R R A C I Ó N E N F I B R I L A C I Ó N
1. A u s e n c i a de o n d a P. Se pierde la despolariza- A U R I C U L A R (figura 6 2 )
ción normal de la aurícula. (Diagnóstico diferencial c o n extrasístoles ven-
triculares)
2. O n d a s F ( F i b r i l a c i ó n ) . En lugar de la onda P
aparecen ondas auriculares pequeñas, irregu- 1. El latido conducido con aberrancia conserva el 1"
lares en tamaño y morfología, todas diferentes Vector de los latidos normalmente conducidos.
entre sí, a una frecuencia entre 4 0 0 y 7 0 0 x ' .
2 . Tiene imagen de bloqueo de rama derecha.
3. C o m p l e j o Q R S . D e tipo s u p r a v e n t r i c u l a r ,
3. El latido conducido c o n aberrancia cierra un
normal.
ciclo corto después d e u n ciclo largo (fenóme-
4 . A r r i t m i a c o m p l e t a . Q u e se manifiesta porque no d e Ashman) (figuras 14 y 62).
todos los intervalos R-R son diferentes.
4 . El intervalo de acoplamiento es variable.
F I G U R A 6 2 Aberrancia en fíbrilación auricular. Tira superior: Después del 6o. latido aparece una pausa
relativamente larga que termina con un latido normalmente conducido (7o.). Posteriormente aparece un
complejo QRS en forma precoz (cierra un ciclo corto después de uno largo) ensanchado ( Q R s : 0 . 1 2 " ) , que
conserva el 1er. vector y tiene imagen de bloqueo de rarña derecha (aberración). El complejo Q R s No. 14
también aparece en forma relativamente precoz, después de una pausa mayor. Nótese que conserva el
1er. vector y tiene menor grado de aberración que el QRS N O . 8.
Tira inferior: Los latidos 4 , 7 y 10 están conducidos con aberración. Nótese que el grado de aberración y el
intervalo de acoplamiento son diferentes
TRASTORNOS DEL RITMO Y I A CONDUCCIÓN
a) El curso de un infarto del miocardio o angi- Se ha encontrado que en este grupo d e enfer-
na inestable. mos la cardioversion eléctrica es exitosa y la pre-
servación del ritmo sinusal se logra a largo plazo si
b) Hipertiroidismo.
se administra tratamiento profiláctico c o n amio-
También se han usado calcioantagonistas del darona, propafenona o flecainida. Si el paciente
tipo de verapamil o diltiazem, con buen resul- logra mantenerse en ritmo sinusal por al menos
tado; sin embargo, pueden provocar hipoten- seis meses y recae nuevamente, conviene intentar
sión arterial en estos enfermos. Están contrain- de nueva cuenta la cardioversion eléctrica; por el
dicados en presencia de insuficiencia cardiaca. contrario, si el paciente permanece poco tiempo
«n-títmo sinusal después de la electroversión, no
II) Fibrilación auricular con frecuencia ventti^ conviene~i«tentarla de nueva cuenta, pues este
hecho anuncia un nuevo fracaso terapéutico.
cular elevada /
La cardioversion eléctrica electiva debe llevar-
Puede aparecer cuando el paciente presenta
se a cabo después de haber realizado un ecocar-
esta arritmia por primera vez, cuando la fibrila-
diograma transesofágico e n busca de trombosis
ción es crónica pero el paciente deja de (ornar
intraauricular, en la orejuela izquierda o "contras-
sus medicamentos o cuando aparece o t r i con-
te espontáneo"; si no hay evidencia de trombosis
dición d e patología extracardiaca (anemia, hi-
intracavitaria conviene preparar al paciente con
pertiroidismo, tromboembolia pulmonar, etc.)
conmarinicos tres semanas antes de realizar la car-
o cardiaca (insuficiencia cardiaca, presencia de
dioversion c o n tiempos útiles de anticoagulación
haces anómalos) (ver FA con W P W ) . En estos
(20" a 30": INR 2 a 3).
casos debe actuarse d e acuerdo con la causa
precipitante (corrección de la anemia, de hi- La cardioversion eléctrica también tiene indica-
pertiroidismo o el tratamiento para la trom- ción precisa cuando el paciente se encuentra en
boembolia pulmonar). En general la taquiarrít- estado crítico por causa de la taquiarritmia:
mia por fibrilación auricular logra controlarse
a ) Edema pulmonar en pacientes c o n esteno-
e n la mayoría d e los casos mediante digitaliza-
sis mitral apretada.
CARDIOLOGÍA
Dll Dlll
DI Dll 1 Dlll
•
aVR aVL aVF
... ; á_nj> • i ¿ i • -i l
N< V4
FIGURA
V(>
flrí
V4 V5
izquierda se puede apreciar la presencia de una arritmia a muy alta frecuencia (hasta 3 5 0 V ) , Q R S muy
aberrado (preexcitación) y espacio R-R muy variable (arritmia completa); la conversión sinusal (trazo de la
derecha) muestra un síndrome de W P W con haz anómalo en la región IV
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
(figura 63)
FIBRILACIÓN AURICULAR Y SÍNDROME DE
WOLFF-PARKINSON-WHITE 1. Arritmia activa con frecuencia ventricular que
puede alcanzar 3 0 0 a 3 5 0 latidos por minuto.
La fibrilación auricular que complica a un síndrome
2. Ausencia onda R
de Wolff-Parkinson-White se torna un grave trastor-
no del ritmo que puede considerarse como poten- 3. Complejo Q R S ensanchado (debido a la preex-
cialmente letal. En la aurícula fibrilante se producen citación) que desorienta al clínico cuando anali-
CARDIOLOGÍA
3. El latido d e escape nodal usualmente no está sinoauricular), si aparece pero muy lento (bradicar-
precedido de onda P (figuras 64 y 65) (paro dia sinusal) o con variaciones e n la frecuencia sinu-
sinusal o bloqueo sinoauricular); sin embargo, sal (arritmia sinusal) y, finalmente, si no es conduci-
la onda P sinusal puede aparecer después del do a través d e la unión A V (bloqueo A V avanzado o
complejo Q R S (bradicardia sinusal) y no con- completo).
ducirse al nodo AV despolarizado por el latido
de escape que apareció inmediatamente antes
(disociación AV) (figura 64). Algo similar acon- III. RITMO NODAL EN PRESENCIA DE PARO
tece cuando el latido sinusal aparece inmediata- SINUSAL
mente antes o sobre e l complejo Q R S , es decir,
Aparecerá en ritmo constituido por complejos Q R S
de cualquier forma el estímulo sinusal ha apare-
de tipo supraventricular normal no precedido de
cido después del latido de escape y se propicia
onda P a una frecuencia entre 4 0 y 6 0 x' (frecuencia
disociación. Cuando aparece inmediatamente
de descarga del nodo A V ) . C a b e mencionar que el
antes del Q R S el espacio PR es anormalmente
corto (menor de 0 . 1 2 " ) , lo cual asegura que el intervalo R-R será rítmico e idéntico al intervalo de
estímulo sinusal no es conducido sino disociado escape (figuras 6 4 , 6 5 y 66).
(figura 65).
IV. RITMO NODAL EN PRESENCIA DE BRADICAR-
DIA SINUSAL
//. RITMO NODAL DE ESCAPE
Aparece un ritmo nodal c o n las características re-
Si se perpetúa la alteración en el automatismo sinu- feridas e n el inciso previo, pero la presencia de
sal o su conducción es llevada a cabo por e l tejido actividad sinusal se manifiesta por la identificación
de la unión AV, aparecerá un ritmo d e escape nodal de ondas P de características normales que apare-
cuyas características serán variables dependiendo si cen a una frecuencia menor y que no son conduci-
no se genera latido sinusal (paro sinusal o bloqueo das por disociación A V (figuras 6 7 , 6 8 y 69).
FIGURA 65 Escape nodal. Los tres primeros latidos de la tira superior son sinusales normal-
mente conducidos; posteriormente, se hace evidente un paro sinusal. Un latido de escape
nodal aparece 1.2 segundos después del último latido sinusal (intervalo de escape). Poste-
riormente, se mantiene un ritmo nodal, nótese que el intervalo R-R es rítmico e igual al intervalo
de escape. Al aumentar el automatismo sinusal, desaparece el ritmo de escape nodal. Los
últimos cuatro latidos de la tira inferior son sinusales
1
1.4 seg
Ir
-'
. i -
1-4 seg
.J 1.4 seg
4— 4
_l
FIGURA 66
4 * *
CARDIOLOGÍA
V. RITMO NODAL CON ARRITMIA SINUSAL observa que ninguna onda P es conducida hacia los
(figuras 6 7 , 6 8 y 69) ventrículos (espacio PR siempre variable) y aparece
regularmente a una frecuencia mayor que el ritmo
Cuando el ritmo nodal de escape se asocia c o n , de escape nodal, que también se hace evidente en
además de bradicardia sinusal, arritmia sinusal, el forma regular y una frecuencia menor e indepen-
ritmo de escape nodal puede alternar con ritmo diente de la sinusal (ver Bloqueo A V completo).
sinusal normal (cuando el nodo sinusal aumenta
su frecuencia) o con latidos sinusales capturados;
cabe mencionar que como la frecuencia del ritmo VII. TAQUICARDIA NODAL
nodal es lenta, las capturas sinusales con mucha (figuras 7 0 , 71 y 72)
frecuencia pueden conducirse con espacio PR pro-
La frecuencia a la que normalmente dispara sus es-
longado (conducción oculta) y aberrancia de con-
tímulos el tejido de la unión AV es entre 4 0 y 60'
d u c c i ó n debido a que representan latidos relativa-
por minuto; la menor frecuencia de descarga propi-
mente adelantados precedidos d e una pausa larga
cia que normalmente el nodo sinusal que tiene
(intervalo de escape); por ello se favorece la con-
mayor automatismo sea el marcapasos dominante.
ducción aberrante.
Cuando por cualquier motivo el automatismo del
tejido de la unión A V aumenta anormalmente o se
establece una reentrada intranodal, aparece una
VI. RITMO DE ESCAPE NODAL POR BLOQUEO
arritmia activa en la que la mayor frecuencia a la
AV COMPLETO
que dispara el tejido del nodo AV lo hace competir
C u a n d o el estímulo sinusal no se conduce hacia el con el nodo sinusal por el mando del corazón. La
nodo A V (bloqueo A V ) puede aparecer un ritmo consecuencia de ello es que simultáneamente hay
de escape nodal que alterna c o n ritmo sinusal. Se dos marcapasos independientes que disparan al mis-
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11
FIGURA 67 Ritmo nodal con disociación AVy capturas sinusales. TIRA S U P I R I O R : El primer latido es sinusal
normalmente conducido, posteriormente ritmo nodal con disociación AV. Nótese la P que aparece
antes del QRS con PR muy corto (no conducida) del segundo al sexto latidos. Cuando la onda P coincide
con el QRS lo deforma (latido séptimo). TIRA I M I K K W : En los dos primeros latidos la onda P aparece
después del QRS sin conducirse a los ventrículos (disociación AV). El cuarto QRS constituye una
captura sinusal. Obsérvese que está adelantado con respecto al ritmo nodal, se conduce con espacio
PR muy largo (0.40") por conducción oculta y el complejo ventricular muestra aberrancia (ensancha-
do). A partir de este latido el marcapasos sinusal toma el mando del ritmo cardiaco
F I G U R A 68
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
1>-<
RS RS RS CN
O © © 0 ©
RN RN e" RS RS
4—*—Ir-
14 son latidos de escape
nodal (EN) que inician un
ritmo nodal (RN) con diso-
ciación AV, (4 a 7 y 14 a 18).
RN
Los QRS 8 y 19 representan
capturas sinusales (c) con- ® @
ducidas con aberrancia
mo tiempo (sinusal y ectópico de la unión), siendo el nal en dos vías con diferentes propiedades elec-
marcapasos inferior más rápido que el superior. Por troíisiológicas: una vía de c o n d u c c i ó n rápida
ello es que se favorece la interferencia y por lo tanto es c o n periodo refractario largo (vía Beta) y otra
obligada la presencia de disociación AV (figura 70). vía de c o n d u c c i ó n mas lenta c o n periodo re-
f r a c t a r i o c o r t o (vía alfa) (ver c a p i t u l o d e
Características (figuras 70 y 71) EiECTROf ISKXOCIA). La taquicardia nodal más fre-
cuente denominada típica o común porque a c -
a) Aparición de complejos Q R S de tipo supraven- rece e n 9 0 % de los casos, es aquella que se
tricular normal a una frecuencia usualmente inicia por una extrasístole auricular que se con-
entre 60 y 130 x ' que aparece e n forma exacta- d u c e por la vía rápida (Beta) y se bloquea; al
mente rítmica. mismo tiempo se conduce por la vía lenta (alfa).
Si la c o n d u c c i ó n es lo suficientemente lenta
b) El ritmo sinusal se hace evidente por la presen-
por está vía, permitirá la recuperación de la vía
cia de ondas P d e morfología normal con una
Beta; el estímulo pasa al ventrículo y se produ-
frecuencia de descarga también normal para el
ce un Q R S normal y rápidamente hay conduc-
nodo sinusal (60 a 100 x') pero menor que la
ción retrógrada hacia la aurícula; ello condi-
que presentan los complejos O R S . ciona una o n d a P negativa que sigue al Q R S
c) La disociación AV se hace evidente porque nin- c o n un intervalo menor d e 70 mseg (intervalo
guna onda P es conducida (espacio PR varia- R-P'corto) (figura 5.72); e n 7 0 % d e los casos la
ble) y aparece e n forma caprichosa inmediata- onda P queda dentro del complejo Q R S .
mente antes del complejo Q R S , sobre éste o
después del mismo. En la taquicardia nodal por reentrada no común
el mecanismo es inverso; la extrasístole entra por la
d) Si por cualquier motivo aumenta la frecuencia
vía lenta (alfa) y la reentrada se produce por vía rápi-
sinusal, pueden surgir capturas sinusales que
da (beta) que tiene un periodo refractario más largo,
siempre aparecerán como latidos adelantados,
por esta razón, la onda P' se encontrará más lejos del
sin olvidar que si son muy precoces puede favo-
recer la aparición de aberrancia d e conducción. Q R s de 70 mseg (R-P' largo). En estos casos la fre-
cuencia ventricular se encuentra usualmente entre
e) En otras ocasiones la taquicardia nodal se produ- 120 y 170 por minuto. El tratamiento de elección es
c e por reentrada intranodal; en efecto, se sabe el verapamil por vía oral o intravenosa (ver capítulo
que en el nodo A V existe disociación longitudi- de ELECTROflSKXOCÍA).
159
CARDIOLOGÍA
160
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
- 4 » !
CARDIOLOGÍA
FIGURA 73 Extrasís-
toles ventriculares
(E), monomórficas.
Latido adelantado,
complejo Q R S e n -
sanchado, diferente
al s i n u s a l , onda T
o p u e s t a al Q R S y
fetilhllJilBi"'
pausa compensadora
" ;
a V F completa
FIGURA 74 Fenómeno R T: Paciente con infarto del miocardio en evolución. En la parle izquier-
da, bradicardia sinusal. Extrasístole ventricular que ocurre con el vértice de la onda T (periodo
vulnerable) v desencadena fibrilación ventricular terminada con desfibrilación eléctrica
lo,
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
163
CARDIOLOGÍA
normal q u e alterna con una extrasístole (b¡- que su automatismo es totalmente independiente
geminismo) (figura 771 o dos exlrasístoles del normal y por lo tanto, el estímulo ectópico pue-
que alternan c o n un latido sinusal (parea- de encontrar el miocardio circundante en periodo
das) (figura 78). excitable o refractario de manera ¡mpredecible.
La frecuencia con que dicho marcapasos despo-
lariza al corazón, depende, por lo tanto, d e tres
TRATAMIENTO DE EXTRASÍSTOLES
factores:
VENTRICULARES
a) Su frecuencia ¡ntrínsec a de descarga.
1. Extrasístoles ventriculares en corazón sano.
b) Q u e el estímulo ectópico encuentre en pe-
Las extrasístoles ventriculares en pac ientes sin car-
riodo excitable el miocardio circundante.
diopatía sólo ext:epcionalmente requieren algún
tipo de tratamiento, especialmente si son mono- c) La presencia de "bloqueo de salida", o sea,
mórficas, no aparecen en forma pareada y no des- que el miocardio circundante, encontrán-
encadenan carreras de taquicardia ventricular. En dose e n periodo excitable, no sea capaz de
ocasiones se índica tratamiento antiarrítmico conducir el estímulo generado.
c u a n d o las extrasístoles son muy frecuentes y
causan angustia o miedo en el pac ¡ente, aun cuan- En el trazo electrocardiográfico, el latido parasistóli-
d o se sabe que raramente se suprimen en 100% co se podrá reconocer cuando aparece un Q R S ade-
y que el tratamiento será indefinido. lantado c o n imagen de bloqueo de rama (foco de
automatismo ectópico ventricular) de la misma mor-
2. Extrasístoles ventriculares en el infarto del fología, que presenta un intervalo d e acoplamiento
miocardio (ver Udocaína). siempre variable, ya que el foco ectópico no tiene
3. Extrasístoles ventriculares en insuficiencia ninguna relación con el latido previo.
cardiaca Por otro lado, el intervalo interparasistólico será
Se han encontrado que el antiarritmico más efi- múltiplo de la frecuencia de descarga del foco ectó-
caz y seguro es la amiodarona. La indicación para pico; esto se debe a que el foco de automatismo
su administración es la extrasistólica frecuente, ectópico dispara rítmicamente y el estímulo gene-
las carreras de taquicardia ventricular no soste- rado puede no conducirse hacia el miocardio cir-
nida, extrasístoles polimórficas y la aparición fre- cundante (bloqueo de salida), pero el intervalo e n
cuente de fenómeno R/T. el que aparece e n el electrocardiograma podrá re-
velar la frecuencia d e descarga del foco ectópico o
4. Extrasístoles ventriculares en otras cardio- un múltiplo d e ella (figuras 20 y 79).
patías
El tratamiento antiarritmico se i n d i c a c u a n - Finalmente, la falta de relación entre los dos
do a p a r e c e n las características anotadas e n focos de automatismo que gobiernan el corazón
el inciso 3 y los fármacos útiles p u e d e n ser: (el sinusal y el parasistólico) favorece que en forma
a m i o d a r o n a , mexiletina, propafenona, quini- ¡mpredecible el frente de onda de ambos despolarice
d i n a y d i s o p i r a m i d a , e n orden de efectividad simultáneamente una parte del miocardio ventricu-
y seguridad. lar y aparezcan latidos de fusión. En conclusión, un
foco parasistólico puede tener las cuatro caracterís-
ticas mencionadas en el trazo electrocardiográfico:
P A R A S I S T O L I A V E N T R I C U L A R (figura 79)
a) Q R S ensanchado y adelantado de igual mor-
fología.
Cuando existe un foco de automatismo ectópico ven-
tricular que no es despolarizado por el frente de b) Intervalo de acoplamiento variable.
onda normal nacido e n el nodo sinusal, se dice que
c) Los intervalos e n que aparece el latido, son
dicho foco está "protegido" o que tiene "bloqueo
de entrada". Este foco ectópico podrá generar estí- múltiplos del ritmo ectópico.
mulos capaces d e despolarizar el miocardio ventri- d) Puede demostrarse la presencia de latidos
cular siempre y c u a n d o lo encuentren e n periodo de fusión.
excitable.
Hay que recordar que este foco no tiene ningu- Si el foco parasistólico tiene una frecuencia de
na relación con la frecuencia sinusal, de tal manera descarga elevada, podrá constituir una "taquicardia
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
- ' \ L _ _ J ' \
ventricular de tipo parasistólico" a cuyas manifesta- n o sostenida cuando su duración n o excede 3 0 se-
ciones electrocardiográficas, además de las que ca- gundos; cuando su duración es mayor, se denomina
racterizan a la taquicardia ventricular (v/de infra), se taquicardia ventricular sostenida.
le sumarán aquellas otras ya mencionadas que ma-
nifiestan a los focos parasistólicos.
DIAGNÓSTICO ELECTROCARDIOGRÁFICO
1. Complejos Q R S e n s a n c h a d o s c o n muescas y
T A Q U I C A R D I A V E N T R I C U L A R (figura 80)
empastamientos. P u e d e ser m o n o m ó r f i c a o
multiforme.
Es la rápida sucesión de tres o más extrasístoles Q oplqmo'j 'x 00!, ob iclinttM9VftlífiO'Ojii ¿i ')ÍOJ
ventriculares. Se denomina taquicardia ventricular 2. Frecuencia d e 140-220/min.
4 165
CARDIOLOGÍA
I [_ i | | i | j_ _i • ' _X_¡,
F I G U R A 80 Taquicardia ventricular. En la tira superior hay derivación I y en las inferiores hay D l l . Obsér-
vese la frecuencia ventricular de 200 x', complejo QRS aberrado y las muescas de la onda P sinusal, que
aparecen a una frecuencia menor (110 x') que la ventricular (disociación AV)
166 „
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
ectópico penetra a las aurículas en forma retró- 1, sugieren fuertemente el diagnóstico de taquicardia
grada a través del nodo AV. Ello se traduce e n el ventricular (figuras 8 4 , 8 5 y 8 6 ' ; asimismo, si el inter-
electrocardiograma por una onda P' negativa en valo Rs (desde el inicio de la onda R hasta el nadir de
Dll que sigue al Q R S aberrado. la ondas), mide más de 1(X) mseg en cualquier deriva-
c i ó n precordial, se establece el diagnóstico d e
Criterios morfológicos para el diagnóstico de ta- taquicardia ventricular (igura 86).
quicardia ventricular (figuras 84 - 88)
2. Taquicardias con Q r s ancho en V_ (BRIHH)
1. Taquicardias con Q R S ancho en V (imagen de
a ) R a n c h a m a y o r d e 30 mseg e n V , o \/
t
BRDHH):
1
(figura 8 6 ) .
a) R pura e n V , .
b) La onda r es mayor e n voltaje durante la
b) Complejo qR en V , . taquicardia e n relación c o n la r e n V, du-
c) Complejo rS con relación R'S< 1 e n V . fc rante ritmo sinusal.
P P P
P P P P P P P P p
FIGURA 81 Taquicardia ventricular. En la tira superior hay derivación I. En la tira inferior, registro
inir.ii a\ it.irio. Obsérvese la deflexión auricular isodifásica (P) (registro a nivel de la aurícula derecha me-
dia), que aparece a menor frecuencia (110 x') y sin ninguna relación con el complejo QRS que aparece a
una frecuencia de 200 x' (disociación AV)
FIGURA 82
CARDIOLOGÍA
taquicardia, sugiere taquicardia ventricular Si en un trazo que presenta una taquicardia con
(figuras 8 5 y 87). Q R s no se encuentra complejo RS en ninguna deri-
vación precordial el diagnóstico d e seguridad de
taquicardia ventricular se establece con un 100 %
3. Eje eléctrico y t a q u i c a r d i a ventricular
de especifidad. Si el intervalo RS es mayor de 70
Taquicardia que tiene complejos Q R S > de 0.14 seg. mseg en cualquiera de las derivaciones precordiales
Con la aQRs localizada en los cuadrantes superiores, i figura 85 y 86) el diagnóstico de taquicardia ventricu-
mena
.rer:.- rute3ri':csai.—Sm
F I G U R A 8 3 . Taquicardia ventricular. Pueden verse los complejos QRS aberrados a una frecuencia relativa-
mente lenta para una taquicardia ventricular, que alternan con latidos sinusales normalmente conducidos
o capturados (C) y con latidos de suma o fusión (F). También es evidente la disociación AV (deformación
del segmento ST cíe los latidos 1 , 2 , 1 1 y 12 de la primera tira; 9 a 12 de la segunda y el último de la tercera;
nótese la onda P no conducida (disociada) del 5o. latido de la 1a. tira y e l 3o. de la cuarta
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
lar se realiza en el 9 8 % ele los casos. La demostración En resumen, la presencia del primer ruido varia-
.:•_• disociación AV (figuras 8 3 , 8 4 y 88i ofrece 100 % ble a la auscultación, pulso alternante a la palpación
especificidad para el diagnóstico. y "ondas en c a ñ o n a z o " a la inspección d e l pulso
Clínicamente hay tres signos que ayudan a esta- yugular son signos que ayudan a establecer el diag-
blecer el diagnóstico de taquicardia ventricular, así nóstico de taquicardia ventricular cuando estamos
lirio el de diagnóstico diferencial c o n otras arrit- en presencia de una arritmia activa con Q R S ancho
mias con las que puede ser confundida: y el diagnóstico diferencial c o n otras arritmias que
se le parecen (taquicardia auricular y bloqueo de
a ) Dado que so pierde la relación cronológica rama izquierda, fibrilación auricular y síndrome de
entre la contrace ion auricular y el ventricular Wolff-Parkinson-White, etc.).
(disociación AV) la intensidad del ruido es va-
riable de latido a latido en la auscultación.
T R A T A M I E N T O DE T A Q U I C A R D I A
b) La disociación A V condiciona que en ocasio- VENTRICULAR
nes las aurículas se contraigan e n contra de
las válvulas auriculoventriculares cerradas, 1. Si la taquicardia ventricular produce grave de-
hecho que en la aurícula derecha produce terioro h e m o d i n á m i c o : hipotensión arterial o
un reflujo de sangre hacia las venas yugulares estado de c h o q u e , manifestación de hipoper-
que se evidencia por un intenso latido yugu- fusión cerebral o coronaria o, finalmente, ede-
lar ("ondas en cañonazo") que aparece en ma pulmonar; la arritmia debe ser terminada
forma irregular e ¡mpredecible. en forma inmediata mediante cardioversion
eléctrica, usualmente se requieren entre 150 y
c) La contracción discinérgica de los ventrículos 3 0 0 jouls d e energía.
producida por una activación ¡ntraventricuiar
anormal a gran frecuencia provoca que el nivel
de presión sistólica sea variable de latido a lati- 2. Si el trastorno del ritmo es tolerado hemodinámi-
d o , hecho que se recoge con la cuidadosa pal- camente puede ser tratado farmacológicamente.
pación del pulso que se percibe de diferente Lidocaína (xilocaína feo. ampula de 5 0 ce a 2 %
intensidad en cada latido (pulso alternante). con 20 mg/ml): se administra a razón de 1mg'
169
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 85 Taqui-
cardia ventricular.
Diagnóstico por cri-
terios morfológicos.
Este t r a z o e n s e ñ a
una taquicardia de
270 m i n . con Q R S
ancho ( 0 . 1 6 " ) . En V ,
y V , existe un com-
pleto RR' con R ma-
yor que R'. El inter-
[ipftl'W " valo rS en Vj es de
120 mseg; el QRS se
encuentra a -60° y la
relación R/S en V , y
V es de 0.6 y 0.75
t
respectivamente
kg (50 a 100 mg) en bolo intravenoso en el curso Asimismo, lo usual es q u e la arritmia termine en
d e un minuto. forma espontánea, pero no es raro q u e pueda per-
manecer como taquicardia ventricular o progrese a
Propafenona (norfenón a m p . de 7 0 mg): se ad-
fibrilación ventricular.
ministran 1 a 2 mg/kg por vía intravenosa en el
Este trastorno del ritmo aparece con mayor frecuen-
curso de cinco minutos.
cia debido a la administración de drogas antiarrítmicas
A m i o d a r o n a (cordarone a m p . 1 5 0 mg): se a d - que alargan el espacio Q T (quinidina, disopiramida,
ministran 5 mg/kg por vía intravenosa en el curso amiodarona, procainamida, flecainida, etc., o la combi-
de dos minutos. nación entre ellas), también ha sido reconocida en el
síndrome de Q T largo, en la hipokalemia, en las
bradicardias (bradicardia sinusal, bloqueo AV. bloqueo
TAQUICARDIA VENTRICULAR HELICOIDAL S:A, etc.) y en la isquemia miocárdica aguda, en la que
(Torsade de Pointes) (figura 8 9 ) el espacio Q T puede no estar prolongado.
En el C u a d r o 1 se enumeran las condiciones
Se ha demostrado fehacientemente que la taquicar-
clínicas que favorecen la aparición de taquicardia
dia ventricular helicoidal tiene su génesis en activi-
ventricular helicoidal.
dad disparada que es condicionada por la aparición
de pospotenciales tempranos. Característicamente la arritmia se inicia después
de un latido normalmente conducido que es prece-
Es una arritmia que se caracteriza por carreras de
dido de una pausa larga (pausa compensadora de
taquicardia ventricular durante las cuales se puede
una extrasístole ventricular, bradicardia sinusal. blo-
observar un cambio progresivo de la amplitud y pola-
queo S: A o AV, etc.), con una extrasístole ventricular
ridad del complejo Q R S , el cual parece rotar alrede-
que es seguida por la carrera de taquicardia helicoi-
dor de su línea isoeléctrica (en forma de hélice); esto
dal. H a y cuatro signos q u e deben ponernos alerta
es, los complejos ventriculares se pueden observar
para la posibilidad de que aparezca esta arritmia:
positivos y paulatinamente disminuye su amplitud, se
torna ¡sodifásico y posteriormente se registra negati- a ) U n alargamiento excesivo del espacio Q T
vo. El evento eléctrico también puede manifestarse (mayor d e 0 . 6 0 seg).
al contrario: primero negativo, después isoeléctrico,
y finalmente positivo. Esta arritmia característicamen- b) U n ensanchamiento del complejo Q R S de
te aparece en pacientes con alargamiento del espa- 2 5 % o más en relación c o n e l valor basal.
cio Q T , la frecuencia que alcanza oscila entre 2 0 0 y
c) Aparición de bradicardia sinusal u otro tipo
250 x', el complejo Q R S es muy aberrado e irregular.
de bradiarritmias.
170
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
TRATAMIENTO
171
CARDIOLOGÍA
síndrome de Brugada hay indicación para apli- re un ritmo de escape que mantenga la actividad del
car un desfibrilador automático, especialmente corazón. C u a n d o el nodo A V (al igual que el seno
si ya han p a d e c i d o uno o varios episodios auricular) no genera un ritmo autónomo, permite
sincópales. la emergencia d e un ritmo de escape nacido e n el
tejido de Purkinje (ritmo idioventricular), que man-
Taquicardia ventricular lenta (figura 90) tiene la actividad del corazón y con ello evila la
asistolia ventricular. El ritmo idioventricular dispa-
El automatismo del tejido de Purkinje origina im-
pulsos que son capaces d e tomar el mando de la ra a una frecuencia muy lenta ( 2 0 a 4 0 x') y la
acti\ idad cardiaca, cuando por cualquier motivo el despolarización del corazón se realiza por tejido
estímulo sinusal no despolariza los ventrículos y e l inespecífico a partir d e l foco d e automatismo ven-
nodo AV no produce un latido d e escape. tricular, lo q u e da lugar a que los complejos Q R S
En efecto, la bradicardia o el paro sinusal (tras- sean anchos con muescas y empastamientos (ima-
torno en la formación del impulso) por un laclo, y el gen d e bloqueo de rama).
bloqueo sinoauricular o auriculoventricular (trastor- Cuando un marcapasos de automatismo idioven-
no e n la conducción del impulso) por otro, pueden tricular adquiere una frecuencia mayor que la habi-
ser la causa de que un estímulo de un marcapasos tual (50 a 100 x') se le denomina ritmo idioventricu-
superior no alcance a despolarizar los ventrículos. lar " r á p i d o " o t a q u i c a r d i a ventricular " l e n t a " .
En estas condiciones, es usual que el nodo AV gene- Conviene enfatizar que esta arritmia continúa apa-
172
TRASTORNOS DEL RITMO V LA CONDUCCION
FIGURA B9 Taquicardia helicoidal. El primer latido es normalmente conducido y seguido por una
extrasístole ventricular; después de la pausa compensadora aparece otro latido normal posterior al que
aparece en la taquicardia helicoidal. Nótese cómo el QRS es positivo del 2o. al 8o. latidos; isodifásico el
9o. y posteriormente, el QRS es negativo del 10o. al 18o. latidos. El eje del QRS va rotando en el espacio.
reciendo como un ritmo de escape q u e emerge 4. Cuando coinciden el ritmo sinusal y la arritmia,
debido a que los ventrículos no han sido despolari- es usual la presencia de disociación AV.
zados por los marcapasos superiores o, si lo han
logrado, es e n forma muy lenta.
TRATAMIENTO
9* .
¡i . . j ' j ! ¡ ! |
F I G U R A 90 Taquicardia ventricular "lenta". En la tira superior: los primeros tres latidos son
sinusales, los tres siguientes provienen de un foco idioventricular a frecuencia de 74 x ' (taquicardia
ventricular "lenta"). Obsérvese la disociación AV. El 7o. QRS representa un latido de fusión. En
la tira inferior: los primeros cinco complejos son sinusales. La bradicardia sinusal permite la
aparición de un ritmo idioventricular "rápido". Las flechas indican las ondas " P " disociadas
173
CARDIOLOGÍA
174
TRASTORNOS DEL RITMO Y IA CONDUCCIÓN
: t : ; r : ' 1
\
i
A V V ) ) ) ) F=F=i
v
EE: t = - H - t
± ± ± ± ± -t-
FIGURA 91 Taquicardia ventricular parasistólica. A) Los dos primeros lalidos son sinusales,
±
normalmente conducidos, el tercero es un latido de fusión. El núm. 4 es el foco parasistó-
lico con disociación AV (nótese el espacio PR muy corto). Del n ú m . 5 al 10 es una carrera
de taquicardia ventricular parasistólica (140 x min) nótese que los dos latidos siguientes
en forma abrupta aparecen exactamente con la milad de la frecuencia (70 x min) (bloqueo
de salida). B) Los cuatro primeros latidos son de la taquicardia ventricular parasistólica
(frec. 140 x min). Los tres latidos siguientes son latidos de fusión y los cinco últimos
representan la taquicardia parasistólica a la mitad de la frecuencia (70 x min) (bloqueo
de salida). C) En esta tira la arritmia se encuentra diagramada. Los dos primeros latidos
son normalmente conducidos, el tercero es un latido de fusión. Del cuarto latido en
adelante aparece la taquicardia parasistólica a una frecuencia de 70 x ' (submúltiplo de
140) con conducción retrógrada (nótese la onda " ? " negativa después del complejo Q R S ,
excepto en el núm. 4 en el que se presenta disociación AV)
4 *
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 93 Taquicardia ven-
tricular polimorfíca. El trazo
enseña carreras repetidas y
autolimitadas de taquicardia
ventricular polimórfica con
frecuencia muy elevada (320
por m i n . ) p r e c e d i d a de
bradicardia sinusal. Nótese
3segundo
ue en el en el primer latido
e las tiras 1, 4 y 5 y en el
de la tira 3 previos
a ta taquicardia, el espacio
Q T se encuentra alargado
(0.58 a 0.60 seg), con onda T
negativa "gigante"; asimis-
m o , los latidos s i n u s a l e s
muestran una zona de lesión
subepicárdica y bloqueo AV
del 1 er. grado que alterna con
bloqueo AV de 2o. grado tipo
Mobitz II (última tira)
sucede con el ritmo nodal, ritmo idioventricular o la el corazón, pero el marcapasos inferior tiene mayor
taquicardia ventricular "lenta". frecuencia que el superior (disociación AV) e inter-
fiere c o n su descenso por las vías normales de con-
Arritmias en presencia de ritmo s i n u s a l ducción (interferencia).
C u a n d o un marcapasos nacido e n el nodo A V (ta- Por el contrario, la bradicardia sinusal impor-
quicardia nodal) o e n el ventrículo (taquicardia tantemente favorece la emergencia de ritmos de
ventricular) dispara más rápidamente que el nodo escape (ritmo nodal, taquicardia nodal, ritmo idio-
sinusal (arritmia activa) se establece una condición ventricular o taquicardia ventricular "lenta") que
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
ARRITMIAS AUTOSOSTENIDAS
L Fibrilación auricular
Rápida^
(activa) f Arritmia supraventricular con aberrancia
QRS ancho < Arritmia supraventricular con bloqueo de Rama
| Arritmia supraventricular con W.RW
l_ Taquicardia ventricular (conducción retrógrada)
pRitmo idioventricular
QRS ancho? Taquicardia ventricular
líenla"
D
• Taquicardia nodal I
s
Taquicardia ventricular o
c
Ritmo de escape nodal I AV
QRS angosti Taquicardia nodal A
c
I
Ritmo idioventricular ó
QRS ancho Taquicardia ventricular lenta"
Capturas sinusales
Bloqueo AV- * Ritmo de escape nodal
Ritmo idioventricular
FIGURA 9 2
alternarán con el ritmo sinusal que por su baja importancia para todo médico que los usa, ya que ello
frecuencia favorecerán la disociación AV. Por otro permitirá buscar un benéfico efecto terapéutico y evi-
lado, la enfermedad del sistema d e c o n d u c c i ó n tará hasta donde sea posible los eventuales efectos
(nodo A V y haz de His producirá trastornos de la nocivos por sobredosificación o, en e! peor de los
conducción que condicionará que los estímulos casos, reconocerá tempranamente los efectos tóxicos
sinusales pasen parcialmente (bloqueo A V de 2o. del fármaco y les dará tratamiento oportuno.
grado) o no pasen (bloqueo A V completo) a los
ventrículos, lo cual dará lugar a arritmias lentas a ) Efectos sobre el nodo sinusal
(latidos sinusales conducidos, ritmo de escape nodal La digital tiene un efecto cronotrópico nega-
o ritmo idioventricular). tivo responsable d e ia disminución de la fre-
cuencia cardiaca que se obtiene después de
su administración. Este efecto es debido tan-
D R O G A S ANTIARRÍTMICAS to a una acción directa del fármaco sobre el
propio nodo sinusal, como a una estimula-
/. DIGITÁLICOS ción vagal (acción indirecta).
Estos medicamentos son probablemente los más anti- b) Efecto sobre el nodo AV
guamente utilizados en la terapéutica cardiovascular, y Estos medicamentos disminuyen la velocidad
por ello, de los más conocidos en sus efectos terapéu- de c o n d u c c i ó n a n i v e l d e l n o d o A V e
ticos y tóxicos. La medicación digitálica ejerce impor- incrementan su periodo refractario. Esta ac-
tantes efectos sobre prácticamente todas las propieda- ción farmacológica es aprovechada en aque-
des miofibrilla y conocerlos es de trascendental llas arritmias e n las que la frecuencia auricu-
4
CARDIOLOGÍA
lar se encuentra exageradamente elevada ampolletas) como dosis máxima. Se puede tam-
como sucede en el flutter auricular o e n la bién realizar un e s q u e m a semejante con
taquiarrítmia por fibrilación auricular en la ouabaína (1 ampolleta de 0 . 2 5 mg por vía intra-
que la conducción de una gran cantidad de venosa cada 6 horas hasta completar 0 . 7 5 a 1
estímulos a los ventrículos puede llegar a mg), c o n digoxina se aplica 1 a m p ( 0 . 5 mg) I V
constituir un grave riesgo para el enfermo, seguida d e 1/2 a m p . I V c/6 hrs hasta alcanzar
como sucede e n el flutter auricular con con- 1 . 5 mg. En presencia de síndrome bradicardia-
ducción 1:1, o deteriorar gravemente la fun- taquicardia la digitalización se puede realizar
ción cardiaca, como acontece e n la segunda; siempre y c u a n d o el paciente (generalmente
por otro lado, e l aumento e n la duración del mayor de edad) tenga instalado un marcapasos
periodo refractario del nodo A V permite su- c o n catéter endocárdico.
primir la taquicardia supraventricular cuando
esta estructura participa e n la perpetuación 3. Fibrilación auricular
de la arritmia, sea por reentrada intranodal o
a) La crisis de fibrilación auricular paroxística
a través de un haz anómalo.
c e d e usualmente c o n la digitalización rápi-
d a por vía intravenosa, por lo que constitu-
c) Efectos sobre el miocardio auricular
ye una indicación precisa para el uso de es-
Los medicamentos digitálicos, al disminuir la
excitabilidad del miocardio auricular, a dosis tos fármacos.
terapéuticas pueden ser benéficos para supri- b) Cuando la fibrilación auricular es crónica y el
mir focos de automatismo ectópico origina- caso no cumple los requisitos para ser benefi-
dos en las aurículas (EXTRASÍSTOLES AURICULARES). ciado mediante la cardioversion eléctrica (v/de
iníra), se debe mantener digitalizado al pa-
ciente. El aumento en el periodo refractario a
INDICACIONES
nivel del nodo A V producido por estos fárma-
cos evita que un gran número de impulsos
1. Extrasístoles auriculares provenientes de la aurícula fibrilante alcance
La digitalización crónica por vía oral puede ser a los ventrículos; eso permite mantener una
utilizada exitosamente e n algunos pacientes frecuencia cardiaca cercana a los límites fisio-
para la supresión de las extrasístoles auriculares lógicos. Si bien es cierto que la arritmia no
y así p a r a p r e v e n c i ó n d e la t a q u i c a r d i a desaparece con la digitalización, el beneficio
paroxística, fibrilación o flutter auriculares. que se le ofrece al enfermo es el de permitir
una función cardiaca aceptable, al mantener
2. Taquicardia paroxística auricular
la frecuencia cercana a los límites normales.
La digitalización rápida por vía intravenosa es la
medida de elección para el tratamiento d e la
4. Flutter auricular
taquicardia paroxística auricular e n la mayoría
En la gran mayoría d e los casos la digitalización
de los casos. La digitalización misma puede aso-
rápida por vía intravenosa culmina con la desapa-
ciarse a las maniobras vagales, lo cual potencia
rición del flutter y el restablecimiento del ritmo
el efecto farmacológico de la digital y por lo
sinusal normal en el curso de unas horas.
tanto favorece la conversión de la arritmia a C a b e mencionar que el aumento de la velocidad
ritmo sinusal. d e conducción inducida por la digital e n e l
En presencia de corazón sano, si el pacien- miocardio auricular, aumenta la frecuencia de
te es j o v e n , no recibe medicación digitálica y las ondas F, pero en contraposición, su acción a
no tiene razón para tener hipokalemia; se pue- nivel del nodo A V disminuye la conducción d e
den administrar dos ampolletas de lanatócido C dichos estímulos hacia los ventrículos (aumenta
( 0 . 8 mg) por vía intravenosa: veinte minutos el bloqueo A V y disminuye la frecuencia ventri-
después realizar maniobras vagales (compre- cular); lo usual es que el paciente pase transito-
sión dolorosa d e globos oculares, aplicación de riamente por un breve periodo d e fibrilación au-
hielo e n la cara del paciente, provocar náusea ricular previa a su conversión a ritmo sinusal.
o practicar masaje del seno carotídeo). Si no El flutter auricular crónico no se beneficia
c e d e la taquicardia, completar la digitalización importantemente con la digitalización por lo
administrando 0 . 4 mg de lanatócido C cada seis que no entra en las principales indicaciones para
horas hasta a l c a n z a r 1 . 2 ó 1 . 6 mg ( 3 ó 4 la administración de estos fármacos.
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
4
CARDIOLOGÍA
Por las razones antes enunciadas los pacientes c u a d o d e medicación digitálica por desconoci-
c o n síndrome d e Wolff-Parkinson-White no miento de su farmacología e indicaciones juega
d e b e n recibir digitálicos y su administración un papel preponderante, pero también debe to-
e n presencia de fibrilación auricular constitu- marse en cuenta la sensibilidad propia d e l p a -
ye una contraindicación formal para su uso. c i e n t e ya sea intrínseca o c o n d i c i o n a d a por su
situación clínica concomitante (insuficiencia re-
7. Miocardiopatía hipertrófica nal, h i p o x i a , h i p o k a l e m i a , miocarditis, e t c . ) .
La estenosis subaórtica dinámica se caracteriza La intoxicación es causa de mortalidad cuando
por tener la contractilidad miocárdica aumenta- no es reconocida oportunamente; por estas razo-
da; más a ú n , todas aquellas intervenciones ca- nes el médico que utiliza estos fármacos está obli-
paces de incrementar esta propiedad agravarán gado al conocimiento cabal de la farmacología e
por sí mismas la obstrucción de la vía de salida indicaciones, así c o m o los posibles signos de toxi-
del ventrículo izquierdo y, por lo tanto, el cua- cidad digitálica y no será sino la vigilancia cuida-
d r o c l í n i c o d e l p a c i e n t e (ver c a p í t u l o d e dosa después de administrados lo que permita un
MIOCARDIOPATÍAS). manejo adecuado de dichos fármacos.
La administración de digitálicos lejos de
ser benéfica p u e d e c o n d i c i o n a r o perpetuar
MANIFESTACIONES
la angina de pecho, lipotimia, síncope que apa-
rece e n las formas graves d e l p a d e c i m i e n t o o a) A n o r e x i a , n á u s e a y v ó m i t o
favorecer su presencia e n las formas menos Estos son los síntomas que aparecen c o n mayor
importantes. frecuencia cuando hay sobredosificación digitá-
En las etapas avanzadas de la enfermedad es lica. La anorexia es la que aparece más tempra-
c o m ú n que se presente fibrilación auricular que namente; si el médico no se percata del síntoma
en ocasiones se acompaña de congestión pul- o el paciente no lo refiere y continúa tomando
monar; aun e n estos casos no se obtiene benefi- el medicamento, aparece náusea que cada vez
cio c o n los digitálicos. es más intensa hasta que culmina c o n la apari-
La taquiarritmia puede ser controlada con be- ción de vómito. Por lo tanto a todos los pacientes
tabloqueadores en estos casos; por otro lado, se q u e reciben medicación digitálica conviene in-
debe recordar que la hipertensión venocapilar terrogarles intencionalmente por estos síntomas
e n estos pacientes no se debe a insuficiencia que ayudarán a descubrir precozmente la so-
cardiaca, sino a la importante disminución de la bredosificación. C o n v i e n e , sin embargo, tener
distensibilidad (rigidez) y a la incapacidad para la en cuenta que los pacientes bajo tratamiento
relajación completa del ventrículo impuesta por digitálico pueden referir los síntomas mencio-
la hipertrofia inapropiada. Es usual que la función nados y ellos tener otra causa (congestión hepá-
sistólica e n estos casos se encuentre preservada. tica, gastritis, uremia, gastroenteritis, hiperten-
sión intracraneana, etc.). Si estamos conscientes
d e ambas posibilidades, no se puede establecer
8. Infarto del miocardio agudo sin insuficiencia el diagnóstico diferencial con certeza, la deter-
cardiaca minación plasmática del digitálico ayudará al diag-
La administración de digital en pacientes sin car- nóstico preciso o, finalmente, e n caso negativo,
diomegalia incrementa el M V O , (ver capítulo de sólo la desaparición del síntoma al suprimir el
INSUFICIENCIA CARDIACA); por esta razón la digitaliza- medicamento apoyará la sobredosis digitálica
ción en pacientes que cursan la evolución de un como causa.
infarto del miocardio agudo pueden extender la
zona necrosada, sin realmente ofrecerle ningún b) Astenia y pérdida de peso
beneficio terapéutico ya que su función sistólica Ciertos pacientes tratados con medicación digi-
se encuentra en límites normales. tálica por largo t i e m p o refieren astenia marca-
d a y pérdida de peso c o m o primeros síntomas
INTOXICACIÓN DIGITÁLICA
de toxicidad; éstos pueden ser causados tanto
La intoxicación digitálica es un evento que se ob- por efecto directo del medicamento c o m o por
serva c o n cierta frecuencia e n la práctica diaria disminución importante del gasto cardiaco, e n
pero es raro ver las formas graves de intoxica- cuyo caso el síntoma se acompaña de bradicar-
c i ó n por estos fármacos; en este h e c h o , desde dia importante, sea sinusal o por ritmos d e es-
luego, intervienen varios factores. El uso inade- cape consecutivos.
TRASTORNOS DEL RITMO Y1A CONDUCCIÓN
TRATAMIENTO
ARRITMIAS P O R I N T O X I C A C I Ó N D I G I T Á L I C A
La intoxicación deberá ser reconocida a la mayor
Los trastornos d e l ritmo ocasionados por intoxica- brevedad posible, pues de no ser así el paciente
ción digitálica dependen d e dos mecanismos fun- podrá tener un cuadro grave e incluso la muerte
damentales: por arritmias reiteradas, malignas y que pueden
tornarse intratables.
1. Aumento de sus efectos electrofisiológicos.
2 . Aparición de propiedades electrofisiológicas
1. La primera medida deberá ser la suspensión
nuevas que sólo emergen con dosis tóxicas.
inmediata del fármaco.
Dentro del primer grupo se encuentran aque-
2 . Se deberá administrar cada 24 horas una so-
llas que afectan al nodo sinusal c o m o la bradicar-
lución glucosada a 1 0 % 1,000 mi más dos
dia sinusal, el paro sinusal o el bloqueo sinoauri-
ampolletas de cloruro de potasio ( 4 0 mEq)
cular, que a su vez pueden condicionar otras como
mediante la instalación de un catéter veno-
los ritmos de escape nodal o la taquicardia ventri-
so central (vena subclavia o cava superior)
cular lenta. En otras palabras, el paciente digitali-
hasta que desaparezcan los signos de toxici-
zado que las presente debe alertar al médico de la
dad digitálica. La dosis de cloruro de potasio
posibilidad de intoxicación farmacológica.
se regulará de acuerdo con las condiciones
El mismo criterio deberá seguirse si e n un pa- de cada enfermo; así, podrá ser mayor si el
ciente digitalizado aparece bloqueo A V de primer paciente tiene hipokalemia y dichos iones
grado o segundo grado tipo Mobitz I. En la actua- estarán contraindicados si el paciente sufre
lidad es raro encontrar pacientes c o n bloqueo A V de insuficiencia renal.
completo por intoxicación digitálica.
Por otro lado, la sobredosificación digitálica po- 3. Si el paciente sufre además de arritmias ven-
drá producir arritmias como la taquicardia auricular triculares malignas (extrasístoles ventricula-
de alta frecuencia c o n bloqueo AV que es originada res pareadas, fenómeno R/T, taquicardia ven-
por aumento del automatismo del miocardio auricu- tricular, etc.) se p u e d e n administrar los
lar (emergencia de focos ectópicos), acción que la siguientes fármacos:
digital no tiene a dosis terapéuticas y la que se com-
bina c o n el aumento del periodo refractario que a ) D i f e n i l h i d a n t o í n a 2 5 0 mg por vía intra-
sobre el nodo A V tiene el fármaco (bloqueo A V ) . Esta venosa, administradas en tres minutos,
arritmia siempre deberá sospecharse cuando un pa- cada seis a ocho horas.
ciente previamente digitalizado presente un "apa-
b) Lidocaína (ver Lidocaína).
rente" flutter auricular, ya que la taquicardia de alta
frecuencia tiene muchas similitudes electrocardio- c) D i s o p i r a m i d a por vía intravenosa a razón
gráficas con el flutter auricular. Asimismo, la intoxica- de 1.5 mg/kg e n 5 minutos.
ción digitálica puede manifestarse por la aparición de
taquicardia nodal con disociación AV. 4. Están contraindicadas la administración d e
amiodarona, quinidina, verapamil y la elec-
Finalmente, la digital es capaz de producir extra-
troversión; esta última es capaz de agravar y
sistolia ventricularque aparece como manifestación
de propiciar arritmias malignas en pacientes
d e toxicidad digitálica. Se ha demostrado que la
intoxicados c o n digital.
extrasistolia y taquicardia ventricular se deben a la
producción de pospotenciales tardíos que son ge- 5. En pacientes afectados por graves trastornos
nerados por sobrecarga de calcio de la miofibrilla. de la conducción AV, se deberá instalar un
Cuando en un paciente que recibe digitálicos apare- marcapasos transitorio.
CARDIOLOGÍA
IV. FLECAINIDA
INDICACIONES
Esta droga tiene como acciones fundamentales la de
Extrasístoles auriculares y ventriculares retrasar la recuperación de los canales rápidos de
La quinidina es una droga muy efectiva para la su- Na* de su inactivación. La consecuencia directa de
presión de extrasístoles nacidas ya sea en el miocar- esta acción es la disminución de la velocidad de la
dio auricular o ventricular y por lo tanto para la fase 0 del potencial de acción sin prolongar su fase de
prevención d e las arritmias activas auriculares (ta- repolarización. Asimismo, aumenta el periodo re-
quicardia paroxística, flutter y fibrilación auricula- fractario efectivo de los haces anómalos del nodo A V
res) y ventriculares (taquicardia ventricular). y el automatismo d e las fibras de Purkinje.
Finalmente, también disminuye la velocidad de
conducción en la unión His-Purkinje y en el mio-
DOSIFICACIÓN
cardio auricular.
La quinidina, usualmente es útil a dosis de 0 . 6 a
0.8 g (tabletas de 0.2 mg) e n 24 horas repartidos
INDICACIONES
en tres dosis diariamente.
1. Prevención de taquicardia paroxística auricular
Intoxicación quinidínica por reentrada intranodal o a través de un haz
La sobredosis del medicamento puede sospecharse anómalo (has de James o Kent) por vía oral.
cuando en el electrocardiograma, además de alarga- 2. Prevención de flutter auricular y fibrilación au-
miento del espacio Q T , se demuestra ensanchamiento ricular por vía oral.
del Q R S . Afortunadamente e n la actualidad ya no se
acostumbra el uso de altas dosis del fármaco, lo cual ' 3. Tratamiento de la fibrilación auricular o del flutter
ha hecho menos frecuente la intoxicación por el mis- auricular paroxístico como segunda opción cuan-
mo. La intoxicación quinidínica frecuentemente es do no se ha logrado la reversión c o n digital y
causa de muerte por taquicardia helicoidal y fibrilación este fármaco ya se ha eliminado del organismo.
ventricular reiterada, refractaria a todo tratamiento
4. Tratamiento de la taquicardia ventricular por vía
(SÍNCOPE QUINIDÍNICO).
intravenosa.
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
4^
CARDIOLOGÍA
4
CARDIOLOGÍA
186
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
malos en las que participa el nodo A V en el un gran porcentaje de los pacientes la extrasis-
circuito. El verapamil se administra por vía intra- tolia auricular o ventricular, por lo que debe ser
venosa a razón de 5 a 10 mg (como máximo) e n considerado de elección, especialmente cuan-
un minuto para este fin. El diltiazem se adminis- do la extrasistolia ha sido refractaria a otro tipo
tra a dosis de 0.25 mg/kg en un minuto por vía de tratamiento antiarrítmico. La supresión del
intravenosa. mecanismo de reentrada evita de manera efec-
tiva la aparición de arritmias activas repetitivas
b) Se ha utilizado en el tratamiento del flutter au- (taquicardia auricular, flutter auricular, taquicar-
ricular y fibrilación auricular para disminuir la dia ventricular, fibrilación auricular, etc.).
frecuencia ventricular. Recordar que para este
fin la digital es el fármaco de elección. b) Prevención de arritmias e n los síndromes de
preexcitación. La propiedad de aumentar los
c) Son d e utilidad para el tratamiento de la taqui-
periodos refractarios a nivel del nodo AV y de
cardia nodal a dosis de 40 a 8 0 mg cada ocho
¡os haces anómalos, evita los mecanismos de
horas por vía oral (verapamil) y 30 a 60 mg macrorreentrada que favorecen y perpetúan
cada ocho horas (diltiazem). arritmias c o m o la taquicardia paroxística auri-
cular, la fibrilación auricular o la taquicardia ven-
CONTRAINDICACIONES tricular cuando están condicionados por la pre-
sencia d e haces anómalos. En efecto, se ha
El verapamil o diltiazem están contraindicados en demostrado la eficacia de la amiodarona e n la
pacientes previamente digitalizados ya que las ac- prevención de estas arritmias cuando complican
ciones sinérgicas d e ambas drogas a nivel del nodo al síndrome d e Wolff-Parkinson-White o al de
sinusal o nodo AV pueden culminar c o n paro si- Lown-Ganong-Levine y que han sido refracta-
nusal, bloqueo AV o asistolia. rios a otros antiarrítmicos.
cinco días de cada semana. La dosis deberá ser indi- infusión a dosis de 1 a 2 mg/min. (Presentación:
vidualizada en cada caso (tabletas d e 2 0 0 mg). írasco-ámpula con 500 m g e n 10 mi).
Por vía intravenosa es útil para dar tratamiento a
la taquicardia ventricular. Se administra a razón de 5
XII. ADENOSINA
mg/kg e n dos minutos (ampolletas d e 1 5 0 mg). Está
contraindicada su administración cuando existe es- La adenosina es una substancia que normalmente
tado d e choque, enfermedad degenerativa del sis- juega un importante papel como potente vasodi-
tema de conducción, cuando el paciente ha recibi- latador en el corazón, especialmente en condicio-
d o b e t a b l o q u e d o r e s , calcioantagonistas o e n nes d e isquemia. Desde el punto de vista electrofi-
insuficiencia cardiaca grave. siológico, tienen una acción cronotrópica negativa
sobre el nodo sinusal, sobre el nodo AV, así como
también e n la red de Purkinje; por otro lado, esta
EFECTOS TÓXICOS substancia bloquea la conducción en la vía lenta
La sobredosificación f r e c u e n t e m e n t e p r o d u c e del nodo AV. Vale la pena mencionar que la acción
fotosensibílización con hiperpigmentación de la piel; antiarrítmica de la adenosina se hace evidente en-
su administración crónica por largo tiempo puede tre 10 y 30 segundos después de administrada y
producir depósitos corneales que desaparecen con desaparece un minuto después.
la supresión del fármaco. Asimismo, interviene con
la función tiroidea por lo que es conveniente ha-
cer pruebas de funcionamiento d e esta glándula INDICACIONES
cada a ñ o y descontinuaría si se demuestra hiper o 1. Tratamiento de la taquicardia paroxística auricu-
hipotiroidismo. lar, c u a n d o ésta se perpetúa por reentrada
Finalmente, conociendo sus propiedades se com- intranodal o a través de un haz anómalo.
prenderá el riesgo que implica su administración e n
2. Taquicardia nodal.
pacientes c o n bradicardia sinusal o trastornos de la
conducción A V q u e , por otro lado, pueden ser ma- 3. Diagnóstico entre taquicardia auricular con Q R S
nifestaciones de toxicidad. Está contraindicada e n aberrado y taquicardia ventricular. En el primer
pacientes con enfermedad tiroidea. caso, cesa la arritmia inmediatamente después
de la administración del fármaco mientras que
la taquicardia ventricular no desaparece.
X/. TOSILATO DE BRETILIO
b) Electrocardiograma telefónico
CONTRAINDICACIONES Y RIESCOS
Este sistema ha sido ampliamente utilizado para
El procedimiento prácticamente es inocuo cuando el seguimiento de los pacientes a quienes se les
la indicación es precisa. Las contraindicaciones para ha implantado un marcapasos definitivo, pero
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
4J2!
CARDIOLOGÍA
acerca de las arritmias que estos pacientes pre- m a estándar, el médico puede establecer el
sentan y la implicación de riesgo que tienen para diagnóstico del origen de los síntomas que el
su vida. paciente refiere; pero c u a n d o no se hacen
La mayoría de los pacientes que han sufrido aparentes, la monitorización continua del elec-
infarto del miocardio presentan algún tipo d e trocardiograma durante 24 horas puede hacer-
arritmia en la etapa tardía de su recuperación, las manifiestas. Por otro lado, e n los pacientes
cerca d e 25 % de ellos presenta extrasístoles c o n síndrome d e sene enfermo el registro am-
ventriculares frecuentes, en ocasiones multifo- bulatorio puede ayudar a establecer la indica-
cales, bigeminadas o con fenómeno R/T. La apa- ción de marcapasos definitivo cuando se demues-
rición de este tipo de arritmias e n pacientes que tra la presencia d e largas pausas de asistolia
cursan su segunda o tercera semana de evolu- espontánea o postaquicardia e n pacientes con
ción de un infarto del miocardio, son los que antecedentes de lipotimia o síncope.
tienen mayor riesgo de muerte súbita.
& SÍNDROME DE APNEA DEL SUEÑO
5. PROLAPSO VALVULAR MITRAL Estos pacientes, usualmente obesos, presentan
Se ha encontrado que los pacientes con prolap- marcada somnolencia diurna y durante la noche
so mitral sufren una mayor frecuencia a arritmias frecuentes episodios d e apnea que traen consi-
activas que la población general. go i m p o r t a n t e h i p o v e n t i l a c i ó n a l v e o l a r e
Algunos autores han demostrado que 90 % hipoxemia. En relación con estos episodios se ha
de los pacientes sintomáticos padecen algún tipo demostrado la aparición de trastornos del ritmo
d e arritmias ventriculares y que e n 50 % de ellos tales como bradicardia sinusal importante, paros
se ha encontrado que la extrasistolia ventricular sinusales prolongados, bloqueos auriculoventri-
es frecuente, sin embargo, no se conoce qué culares y otras arritmias ventriculares.
significado pronóstico tienen las arritmias en es- La demostración de arritmias potenciales le-
tos pacientes. Es de hacer notar que e n este gru- tales en estos enfermos puede constituir la indi-
po hay frecuentemente falta de correlación en- cación de tratamiento quirúrgico para ampliar el
tre los síntomas y la aparición de atritmias, razón itzmo de las fauces.
por la que el tratamiento antiarrítmico no debe-
ría indicarse, a menos que se demuestre la apa-
9. EVALUACIÓN DE PACIENTES BA)0 TRATAMIENTO
rición del tipo de trastornos del ritmo que re-
ANTIARRÍTMICO
quieren de su uso.
Se considera que una droga es efectiva para e l
tratamiento o prevención de una arritmia activa
SÍNDROME DE PREEXCITACIÓN cuando se logra la supresión de más d e 7 0 % d e
La electrocardiografía dinámica será de valor los latidos ectópicos. Usualmente no es necesa-
cuando el paciente refiera síntomas muy suges- rio monitorízar a todo paciente bajo tratamiento
tivos d e arritmias y e n electrocardiograma antiarrítmico y sólo bajo circunstancias especia-
estándar de 12 derivaciones se reconoce algún les conviene indicar el procedimiento:
tipo de preexcitación. La valoración del tipo de
arritmia, la frecuencia con que se presenta y los a ) La persistencia de síntomas que el paciente
síntomas a que da lugar son los parámetros obje- refiere (mareo, lipotimia, palpitaciones o sín-
tivos que ayudan a decidir la indicación para cope), aun con tratamiento antiarrítmico bien
estudio electrofisiológico o para tratamiento llevado.
antiarritmico. En ixasiones se encuentra que dicho me-
dicamento es inefectivo, en otras que la causa
del síncope o lipotimia no son los trastornos
7. ENFERMEDAD DEL NODO SINUSAL
del ritmo y finalmente las palpitaciones pue-
Es importante tener en cuenta que las enferme- den coincidir con ligera taquicardia sinusal que
dades, especialmente degenerativas del sistema traducen sólo la aprensión el paciente.
de conducción, son frecuentemente causa de
bradicardia, paro sinusal o bloqueo sinoauricular b) Desde el punto de vista de investigación del
que favorecen la aparición d e ritmos de escape electrocardiograma ambulatorio es de gran
o asistolia. por lo que a su vez son causa frecuen- utilidad para evaluar el efecto farmacológico
te d e mareo, lipotimia o síncope. Cuando estas d e una droga al correlacionarlo con la con-
arritmias se reconocen en el electrocardiogra- centración plasmática de la misma.
mi.
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
4 ^
CARDIOLOGÍA
queo adrenérgico, era difícil provocar fibri- cierto efecto protector para la fibrilación ven-
lación ventricular. tricular, aún cuando favorece la aparición d e
taquicardia helicoidal.
Conclusión:
La fibrilación ventricular está en relación con
En resumen:
la acción adrenérgica.
1. La agresión aguda al corazón e interacción
b) Harris demostró que los perros sometidos a
c o n secreción de catecolaminas predispone
hipoxia acentuada, desarrollaban hipotensión
a la fibrilación ventricular.
arterial y asistolia ventricular. Si previamente se
secciona al vago, no ocurria asistolia ventricular; 2. Por otro lado, la hipoxia en interacción c o n
sin embargo, recientemente se ha encontrado e l efecto parasimpático predispone a la
que por un lado, la actividad vagal tiene un efec- asistolia ventricular.
to antifibrilatorio, pero por otro, favorece la apa-
rición de postpotencialestempranosy taquicardia Fibrilación ventricular (figura 96)
ventricular helicoidal (figuras 4 y 89).
Es la actividad eléctrica desordenada del corazón
Conclusión: sin función mecánica.
El sistema parasimpático tiene influencia en la Aun cuando la fibrilación ventricular puede ocu-
producción de asistolia ventricular, pero tiene rrir súbitamente (fibrilación ventricular primaria), la
AGRESION AGUDA
CATECOLAMINAS ACETILCOLINA
(Ejem.: infarto del miocardio) (Ejem.: hipoxia, anestesia)
FIBRILACION
VENTRICULAR ASISTOLIA
FALLA E L E C T R I C A PRIMARIA
FALLA M E C A N I C A REANIMACION
SECUNDARIA TEMPRANA RECUPERACION
ACIDOSIS METABOLICA
DISMINUCION DE EXCITABILIDAD
Y CONTRACTILIDAD
T
PARO C A R D I A C O IRREVERSIBLE
(MUERTE)
FIGURA 95
194
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
a ritmo sinusal o de fibrilación ventricular a ta- paro cardiaco, también nos dirá si existe insu-
quicardia ventricular. ficiencia renal como otra causa posible.
b ) Q u í m i c a s a n g u í n e a . O f r e c e información • Inefectivo.
importante acerca de hiperglucemia o hipo- • Fractura de costillas (laceración del pulmón o
glucemia que podrían estar e n relación con el del corazón).
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
2. Escoger el sitio de punción: punto más medial 2. Se localiza el sitio intermedio entre el ángulo
entre la primera costilla y la clavícula. del maxilar inferior y la clavículas, a nivel del
vértice formado entre la unión de los músculos
3 . Lavar este sitio con solución estéril.
vasto interno y externo del esternocleidomas-
4. La aguja d e intracath (No. 1 4 ) , se une a una toideo.
jeringa d e 2 0 c e . y se introduce formando un
3. Se realizan las maniobras propias de asepsia y
ángulo de 1 5 c o n la clavícula.
C
4
CARDIOLOGÍA
FIGURA 97
4. Durante la introducción se ejercerá discreta pre- artificial con un marcapasos en caso de asistolia
sión negativa e n la jeringa hasta encontrar la ventricular; los gases arteriales demuestran
v e n a , de tal forma que al llegar a ella, se llenará acidosis metabólica, o bien, si el paro cardíaco
de sangre. En este momento se toma cuidadosa- sobrepasa cinco minutos y no se logra el resta-
mente el catéter entre el pulgar e índice, se blecimiento del ritmo cardiaco; habrá necesi-
retira la jeringa y se introduce el catéter, calcu- dad de administrar bicarbonato de sodio a dosis
lando que su extremo distal quede a nivel de la de 1 mEq/kg; en caso de no lograrse la reani-
aurícula derecha.
mación cardiaca habrá que administrar una do-
5. Se retira el intracath o jelco de punción con una sis de 0.5 mEq/kg cada 10 minutos, previa valo-
ración de gasometría arterial.
jareta, utilizando seda 0 0 (doble cero).
198
TRASTORNOS DEL RITMO Y I A CONDUCCIÓN
4 ^
CARDIOLOGÍA
200
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
FIGURA 99
4
CARDIOLOGÍA
MARCAPASO A U R I C U L A R (AAI) |
Ventrículo
Aurícula
Amplifi- Detector
de P Generador
cador inhibición
FIGURA 100
FIGURA 101
202
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
dispara e l marcapasos ventricular q u e es inhi- inicial de la cavidad que es sensada por el marcapasos
bido por R Ino dispara si a p a r e c e una R) (figu- (A: aurícula, o V: ventrículo) y finalmente la tercera
ras 1 0 4 y 1 0 5 - A ) . Si n o a p a r e c e onda P, el letra es la modalidad de respuesta (I: inhibido por R
marcapasos auricular genera una espiga y des- o por P; T disparado por R o por P). C u a n d o el mar-
pués d e ésta a p a r e c e una o n d a P y a su v e z , capasos no sensa ni a la aurícula ni al ventrículo, se
después de un retraso A V d e 0 . 1 2 a 0 . 1 6 " utiliza la letra O y lo mismo cuando la respuesta del
dispara el marcapasos ventricular (figuras 1 0 4 marcapasos descarga a frecuencia fija (marcapasos
y105-B).
En caso de que aparezca ritmo sinusal nor-
malmente conducido, el detector de P lo recono-
Aurícula Ventrículo
c e e inhibe al marcapasos auricular (inhibido por
P) y si el estímulo es normalmente conducido a
los ventrículos, la aparición de la onda R normal
será detectada por el sistema y se inhibirá el dis-
paro del marcapasos ventricular (inhibido por R)
(figura 105-C). Los marcapasos de este tipo son,
en la actualidad, los d e mayor eficacia para
estimulación y funcionamiento cardiaco.
F I G U R A 104 Marcapasos doble cámara DDD. TIRA SUPERIOR: Los primeros 6 latidos dispara la
aurícula e inhibe al marcapaso auricular después de 0 . 1 6 " se aparece la espiga del marca-
paso ventricular y captura al ventrículo. Después de la maniobra vagal disminuye la fre-
cuencia de la aurícula y aparece la espiga del marcapaso auricular seguida de la espiga del
marcapaso ventricular. 2 TIRA: termina la maniobra vagal y nuevamente captura la aurícula
S
seguido de la espiga del marcapaso ventricular que captura al ventrículo. 3* TIRA: se repite la
maniobra vagal con el mismo efecto
CARDIOLOGÍA
FIGURA 105
asincrónicos), o sea, la tercera letra será O . En los gramados para cambiar automáticamente a la mo-
marcapasos bicamerales con estimulación secuencial, dalidad W I R , c u a n d o a p a r e c e n taquiarritmias
pueden tener una doble función, así tanto a la auriculares.
aurícula y como al ventrículo, por lo que la primera D e esta manera se tiene una gran variedad de
letra será D ; pueden sensar las dos cavidades men- marcapasos c o n una muy diversa forma, diferente
cionadas, por lo que la segunda letra en este caso es de estimulación, la cual puede ser adaptada a cada
D. La tercera letra dependerá del tipo de respuesta: paciente e n particular, quien será beneficiado con
la implantación de un marcapasos ( C u a d r o 2).
0 Dispara a frecuencia fija.
1 Inhibido por R. II. ELECTRODOS DE ESTIMULACIÓN
T Estimulado por R. La fuente d e poder se conecta al corazón por me-
D Inhibido o estimulado por R (doble función). dio de un cable electrodo que es introducido a
través de una vena periférica que puede ser la
Finalmente, los marcapasos pueden tener otra vena yugular, la subclavia, la vena cefálica o la vena
función potencial que es la d e M O D U L A R la fre- femoral; la punta d e l electrodo se enclava e n las
cuencia cardiaca; esto es, el aparato tiene sensores trabéculas del ventrículo derecho e n donde se deja
que reciben información de otras constantes fi- fija (figura 1 0 6 - B ) .
siológicas, c o m o lo son la temperatura c o r p o r a l , La punta metálica del electrodo queda e n con-
la frecuencia respiratoria, la i m p e d a n c i a intrato- tacto con el endocardio ventricular y de esa forma
rácica y c o n ello p u e d e acelerar o reducir la fre- transmite la corriente eléctrica que producirá la des-
c u e n c i a de descarga del marcapaso c o n el objeto polarización miocárdica. Si el electrodo es bipolar,
d e ajusfar la función c a r d i a c a a las d e m a n d a s ambos polos (cátodo y ánodo), están cercanos el
metabólicas del organismo. Esta función se repre- uno del otro y los dos estimulan al corazón; generan
senta con la " R " , d e tal manera d e q u e si tenemos una espiga pequeña, porque su circuito también lo
un marcapaso u n i c a m e r a l que estimula e l ventrí- es. Por otro lado, cuando la estimulación es unipolar,
culo (v), sensa e l ventrículo (v) e n la modalidad se estimula con el cátodo y el electrodo indiferente
inhibida por R (I) y c o n la función d e modulación está lejano al primero, por lo que el circuito de
d e la frecuencia c a r d i a c a (R) se representaría: estimulación es amplio y por lo tanto, la espiga que
V V I R , o b i e n , si la estimulación es bicameral c o n genera es grande.
m o d u l a c i ó n de la frecuencia c a r d i a c a , se repre-
senta: D D D R . Estos últimos modelos están pro- C u a n d o se instala un marcapasos, e l umbral de
estimulación (es la cantidad mínima d e corriente
204
CUADRO 2
NOMENCLATURA INTERNACIONAL DE LOS MARCAPASOS ARTIFICIALES
FORMA DC II lll IV
CAMARA ( VM U M MOnUIACIÓH DE LA FRECUENCIA FORMA DE RESPUESTA
ESTIMULACIC)N SÍNS V M RESPUESTA Al
ESTIMULADA
SENSADO
A u m e n t a la f r e c u e n c i a de E s t i m u l a c i ó n v e n t r i c u l a r i n h i b i d a p o r "R", s e
I n h i b i d o p o r "R"
VVIR Ventrículo Ventrículo e s t i m u l a c i ó n d e a c u e r d o a las
d e m a n d a s metabólicas
m o d u l a la f r e c u e n c i a v e n t r i c u l a r d e a c u e r d o a
las n e c e s i d a d e s m e t a b ó l i c a s
E s t i m u l a c i ó n v e n t r i c u l a r s i n c r o n i z a d a p o r "K". s i
VVT Ventrículo Ventrículo E s t i m u l a d o por K no a p a r e c e "K" d e s c a r g a a u n a f r e c u e n c i a fija
predeterminada
A u m e n t a la frecuencia d e E s t i m u l a c i ó n v e n t r i c u l a r s i n c r o n i z a d a c o n la R.
e s t i m u l a c i ó n d e a c u e r d o a las Si n o a p a r e c e R d e s c a r g a a f r e c u e n c i a fija.
VVTR Ven tríe uln Ventrículo E s t i m u l a d o por "R"
demandas metabólicas M o d u l a la f r e c u e n c i a v e n t r i c u l a r d e a c u e r d o a
las d e m a n d a s m e t a b ó l i c a s
S e n s a a la a u r í c u l a y e n f o r m a s e c u e n c i a l
VDD Ventrículo Aurícula y Inhibido o estimulado e s t i m u l a al v e n t r í c u l o , si no hay " R o d i s p a r a
-
Aurícula y E s t i m u l a la a u r í c u l a a f r e c u e n c i a fija y e n f o r m a
DVI ventrículo
Ventrículo Inhibido por "R"
s e c u e n c i a l e s t i m u l a al v e n t r í c u l o si n o hay "R"
E s t i m u l a la a u r í c u l a c o n c a d a "P" y e n f o r m a
s e c u e n c i a l al v e n t r í c u l o c o n c a d a K si no
DDT Aurícula y Aurícula y Estimulado por "P" y
a p a r e c e "P" o "R" d i s p a r a el m a r c a p a s o s auricular
ventrículo ventrículo por T T
o ventricular a frecuencia p r e d e t e r m i n a d a
Aurícula y Aurícula y Inhibido por "P" o por Activación atrioventricular secuencial que es
DDI ventrículo ventrículo "R" i n h i b i d a p o r "P" o p o r "R"
CARDIOLOGÍA
COMPL
C
IAC
O
INES
o s e ha d i a g n o s t i c a d o s í n d r o m e d e s e n o
enfermo.
207
CARDIOLOGÍA
4. En cualquiera de las dos formas, se requiere un aná- la aparición de la actividad disparada (extrasístoles o
lisis cuidadoso de la función del marcapasos para taquicardia ventricular) mientras que el segundo pue-
corregir la falla o cambiar la fuente de energía. de condicionar mecanismos de reentrada, especial-
mente si el tejido contiguo tiene potenciales de acción
de diferente duración (dispersión de los periodos re-
MUERTE SÚBITA fractarios). Sin embargo, por otro lado, también se ha
demostrado que la deprivación completa de actividad
DEFINICIÓN adrenérgica en el corazón de estos pacientes favorece
la aparición de insuficiencia cardiaca.
Es la muerte no violenta, no traumática, inesperada
que aparece e n forma instantánea y que ocurre po-
cos minutos después de haber aparecido los sínto- M U E R T E S Ú B I T A EN I N S U F I C I E N C I A
mas. No es recomendable utilizar el término de CARDIACA
muerte súbita para un evento d e reanimación
cardiaca satisfactoria; e n este caso debe preferirse El estiramiento anormal de las miofibrillas (aumento
el término de paro cardiaco no fatal. del estrés parietal) es capaz de generar alteracio-
nes electrofisiológicas que no existen e n condicio-
nes normales; así, el aumento del estrés diastólico
ETIOLOCÍA
produce despolarización diastólica y extrasístoles
Las causas de muerte súbita están en estrecha rela- ventriculares; si el estiramiento miocárdico es brus-
ción con isquemia miocárdica, hipertrófica patoló- co, aparece además taquicardia ventricular no sos-
gica, fibrosis miocárdica que se asocia a dilatación tenida. El aumento del estrés sistólico produce
ventricular (especialmente en relación con insufi- pospotenciales tempranos. Finalmente la dilatación
ciencia cardiaca), reflejos neurogénicos anormales sostenida del corazón reduce la duración del po-
en presencia de cardiopatía o alteraciones elec- tencial de acción y, por lo tanto, del periodo refrac-
trofisiológicas específicas en el corazón cuando éste tario; estos efectos se magnifican con el aumento de
es el causante de ella. Por otro lado, hay otras causas la frecuencia cardiaca.
de origen extracardiaco que pueden condicionar
Estos cambios electrofisiológicos producidos por
muerte súbita (cuadro 3 ) .
el aumento del estrés miocárdico han sido denomi-
« 4 -
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
A) IDIOPÁTICO
Espacio Q T largo
Es una enfermedad hereditaria que se caracteriza por
con onda T bimodal.
alargamiento del espacio Q T , predisposición a la pre-
sencia d e arritmias ventriculares malignas q u e
clínicamente se manifiestan mediante síncope y las
cuales frecuentemente condicionan muerte súbita. Alargamiento
El síndrome puede además acompañarse de sordera del espacio Q T
(síndrome de Jervell-Lange-Níelsen) cuya transmi- con giba en la rama.
sión genética es autosómica recesiva o la audición
puede ser normal (síndrome de Romano-Ward) con
transmisión autosómica dominante. En 1 0 % de los Espacio Q T largo
casos informados no aparecen antecedentes familia- con onda U.
res del síndrome. Se han descrito diversas alteracio-
nes e n el espacio Q T del electrocardiograma que
pueden acompañar a su prolongación. En la figura Alargamiento
108 se esquematizan todas las alteraciones descritas. del espacio Q
el diagnóstico se establece cuando en un electro- con onda U negativa.
cardiograma se encuentra alargamiento del espacio
Q T largo e n una persona sin otras causas posibles de
esta alteración (hipokalemia, antiarritmicos, etc.), (fi- Espacio Q T largo
gura 108 y 109). a expensas del espa-
cio ST.
4 »
CARDIOLOGÍA
4-
TRASTORNOS DEL RITMO Y LA CONDUCCIÓN
produce pospotenciales tempranos, los cuales se su- propafenoma, etc.) se debe a la prolongación exce-
primen con la estelectomía izquierda. siva de la repolarización, c o m o un aumento e n la
d u r a c i ó n d e l e s p a c i o Q T ; la p r o v o c a c i ó n d e
pospotenciales tempranos, actividad disparada y
TRATAMIENTO taquicardia ventricular helicoidal o taquicardia
Los pacientes que han padecido un síncope por este ventricular polimórfica resultan c o m o consecuen-
síndrome tienen una mortalidad de entre 60 y 70 % cia final (figura 108).
dentro de los 10 a 15 años después de haberlo El efecto proarrítmico se condiciona por las do-
sufrido por primera vez. Esta mortalidad tan eleva- sis elevadas a las que se administran estos medica-
d a , dejados los pacientes a su evolución normal, mentos, a la combinación entre ellos o a la disminu-
obliga al reconocimiento adecuado y tratamiento ción de la eliminación plasmática por insuficiencia
oportuno d e este síndrome. renal o hepática.
En primera instancia vale la pena enfatizar que las Por otro lado, la hipokalemia y la hipomagnese-
drogas antiarrítmicas están contraindicadas en estos mia pueden tener el mismo efecto y por consecuen-
pacientes pues lejos de evitar las arritmias ventricula- cia culminar también e n taquicardia ventricular
res malignas, las pueden provocar. El conocimiento polimófica o helicoidal; asimismo, la bradicardia
de la fisiología del síndrome ha permitido orientar sinusal, el bloqueo sinoauricular o el bloqueo AV,
una terapéutica más racional; así como el uso de especialmente si se combinan con alguna de las dro-
betabloqueadores (propranolol, metoprolol, atenolol) gas antiarrítmicas mencionadas.
han mostrado una gran efectividad en un buen nú- En los casos mencionados el tratamiento inme-
mero de casos, ya que se logra acortamiento del es- diato es suprimir el antiarrítmico, corregir el trastor-
pacio Q T , normalización de la morfología de la onda no electrolítico e instalar un marcapasos transitorio,
T y son e n estos casos muy efectivos para evitar las para aumentar la frecuencia cardiaca y así suprimir
arritmias ventriculares malignas y la muerte súbita. la dispersión de los periodos refractarios así c o m o la
Si los fármacos mencionados condicionan bradi- aparición de pospotenciales tempranos, actividad
cardia sinusal importante, paros sinusales o bloqueo disparada y evitar la taquicardia helicoidal en tanto
S:A se requerirá a d e m á s la instalación d e un se corrige la alteración electrofisiológica inducida
marcapasos endocárdico definitivo ( D D D R ) . por el fármaco, la hipokalemia, la hipomagnesemia,
la isquemia o la bradicardia.
Si el paciente continúa presentando cuadros
sincópales a pesar del tratamiento médico, se re- C a b e m e n c i o n a r que la muerte súbita por
querirá entonces simpatectomía cervical izquierda, arritmias p u e d e a p a r e c e r t a m b i é n d u r a n t e la
la cual ha resultado altamente efectiva para preve- isquemia miocárdica aguda (figuras 8 9 y 93) o e n
nir la muerte súbita en estos pacientes. el paciente recuperado de un infarto del miocardio
En efecto, la mortalidad a 15 años sin este trata- extenso (aumento de la vulnerabilidad eléctrica),
miento e n un grupo de 2 3 3 pacientes la observó en los pacientes con miocardiopatía hipertrófica
Schwartz e n 5 3 % de los casos, mientras con el ma- obstructiva o miocardiopatía dilatada (retroalimen-
nejo antes anotado (betabloqueadores, marcapasos tación mecanoeléctrica) y, finalmente en los pacien-
o además denervación simpática cervical izquierda) tes con estenosis aórtica apretada (reflejos vagales).
fue de tan sólo 9 % en el mismo lapso. Si a pesar del
tratamiento triple el paciente continua padeciendo
síncope por arritmias malignas, se ha propuesto la SÍNDROME DE BRUGADA
implantación d e un cardiovertidesfibrilador auto-
mático; ello se ha visto suceder en no más de 3 % de El síndrome de Brugada se caracteriza por un elec-
los enfermos. trocardiograma anormal, aparición de arritmias ven-
triculares malignas (taquicardia ventricular polimór-
B) ADQUIRIDO fica y/o fibrilación ventricular) y muerte súbita.
El espacio Q T puede alargarse por efectos electrofi-
siológicos de algunos fármacos; isquemia miocárdi-
ETIOLOGÍA Y FISIOPATOLOGÍA
ca, alteraciones electrolíticas, bradicardia importante
o algunas alteraciones cerebrovasculares. D e he- Esta alteración electrocardiográfica con graves conse-
c h o , se ha demostrado que el efecto proarrítmico cuencias es debida a una disminución en la función
de un gran número de fármacos (quinidina, disopi- de los canales rápidos de N a + . En efecto, las células
r a m i d a , p r o c a i n a m i d a , a m i o d a r o n a , flecainida. en las que estos canales no funcionan, se encuentran
4
CARDIOLOGÍA
213
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4™>
•
Electrofisiología clínica
Capítulo 6 y terapéutica
1
"El médico no es un mecánico que deba arreglar un
organismo enfermo como se arregla una máquina des-
compuesta. Es un hombre que se asoma sobre otro
hombre, en un afán de ayuda, ofreciendo un poco de
ciencia j un mucho de comprensión j simpatía "
corto en ecocardiografía, es decir con los Es importante comentar que para poder colocar
anillos valvulares de frente. los catéteres e n dichas posiciones debemos recor-
dar que estructuras se encuentran anteriores y pos-
• Anteroposferior (AP): dará una imagen de
teriores; por ejemplo en seno coronario se encon-
las cámaras cardiacas que es una combina-
trará e n e l piso posterior de la aurícula derecha,
ción de lo que encontramos e n la oblicua
cerca del anillo tricuspídeo, por lo que si se quiere
derecha anterior ( O D A ) y la oblicua izquier-
canular el mismo con un catéter desde un abordaje
da anterior ( O I A ) , dando al electrofisiólogo
femoral, se deberá dar un ligero torque horario para
experimentado una forma fácil y rápida para
dirigir la punta del catéter posterior. Por el contra-
poder posicionar los catéteres.
rio, si buscamos la orejuela derecha, e n posición
anterior, se aplicara un torque antihorario etc.
En la figura 1 se muestran las diferentes proyec-
ciones c o n referencias anatómicas.
Registros Intracavitarios:
C o m o ya comentamos el estudio electrofisiológico
POSICIÓN DE LOS CATÉTERES DE ELECTROFISIOLOGÍA se basa e n la interpretación del los electrogramas
El siguiente paso el la correcta colocación de los intracavitarios, estos aportan básicamente informa-
catéteres de electrofisiología para poder realizar un ción d e dos tipos:
estudio básico. Cada laboratorio tiene variantes en 1. Cronológica (tiempo de activación local den-
cuanto al número de catéteres utilizados y la posi- tro del ciclo cardiaco): Podremos obtener el
ción de los mismos esta también varia dependiendo momento exacto e n el que se despolariza el
del diagnóstico c o n el que se aborda al paciente, miocardio en contacto c o n el catéter. Si realiza-
sin embargo e n casi todos se utilizan cuatro posicio- mos en forma secuencial el registro de los po-
nes fundamentales: tenciales locales de una estructura pondremos
obtener la secuencia d e activación eléctrica de
• Orejuela Derecha o aurícula derecha pos-
dicha estructura.
terior: Generalmente se utilizan catéteres de
cuatro electrodos (cuadripolar) que permi- 2. M o r f o l ó g i c a . A n a l i z a n d o la f o r m a d e los
ten el potencial intracavitario de la aurícula electrogramas podemos obtener información
derecha (AD).
4
ELECTROFISIOLOGÍA CLÍNICA Y TERAPÉUTICA
acerca de cómo circula e l frente de despolariza- diferencia entre las derivaciones monopola-
ción c o n respecto a la zona de registro y las res obtenidas de cada uno de los electrodos.
características de la despolarización de la zona La ventaja de las derivaciones bipolares en
registrada. electrofisiología radica e n la menor contami-
nación por ruido externo y por lo tanto
Se utilizan dos tipos de derivaciones para los electrogramas mas claros y fáciles d e inter-
registros intracavitarios. pretar sin embargo siempre se debe recor-
• Monopolares: Registra la diferencia de po- dar que no representa un registro local puro
tencial entre un electrodo explorador y otro sino una sumatoria. El registro bipolar si bien
llamado indiferente, distante d e l corazón. El no aporta información e n cuanto a la direc-
electrodo explorador en este caso estará e n ción del frente de onda, si se v e afectado
contacto directo c o n el endocardio o c o n la cuando la despolarización de dicho tejido es
porción estudiada. Esta derivación estudia la anormal, por lo tanto cuando aumenta la du-
diferencia neta de potencial d e la zona ex- ración o disminuye el voltaje de dicho po-
plorada a lo largo del tiempo. Mas sencillo, si tencial se considera anormal, o bien cuando
el frente d e despolarización se acerca al elec- existen electrogramas antes o después de lo
trodo, se registra una onda positiva, en e l esperado e n relación al ciclo cardiaco.
momento que el frente atraviesa la zona e n
contracto con el electrodo se vera un cambio
CORRELACIÓN DE LOS REGISTROS INTRACAVITARIOS
brusco en la polaridad observándose una
CON EL CICLO CARDIACO
deflexión negativa que retorna al cero con-
Probablemente la parte que inicialmente confunda
forme se aleja e l frente de activación obte-
mas al cardiólogo clínico al momento de interpretar
niendo una morfología RS. Si nuestro elec-
trodo monopolar explorador se encontrara un estudio electrofisiológico sea la correlación de
e n el sitio mismo donde inicia el frente de los registros intracavitarios c o n el ciclo cardiaco y su
activación solamente observaríamos una onda significado.
negativa (QS), por el contrario si estuviera e n En la figura 2 se presenta un ejemplo que pude
el sitio en donde finaliza la activación vería- ayudar a la orientación inicial de un estudio. Siempre se
mos solamente una deflexión positiva (R). mostraran dos o más canales con el E C G de superficie
para la correlación con los electrogramas intracavitarios
y su relación en el ciclo cardiaco. Posteriormente ten-
• Bipolares: Dos electrodos muy próximos dremos diferentes canales con registros intracavitarios,
entre si se conectan a cada uno de los polos por to general un canal auricular que correlaciona con
del amplificador, registrando las diferencias la onda R un canal en His, que correlaciona con el PR y
de voltaje entre cada uno de ellos, es decir la un canal ventricular y de seno coronario. La pantalla del
v -— v — . v
p J\ „ , N. .f\
^ —
ti y
, ,/s
V —* *
- A. _ — _ - A
• —'V —
Ú i .L-l
FIGURA 2 Registro intracavitario de 1— • i |j< - ]<f -
un catéter en la posición del His (H)y >
un catéter en la aurícula (A). Obser-
ve la relación que guarda cada regis- i L i i . l
tro, con el E C G de superficie (flechas)
4 ^
CARDIOLOGÍA
CUADRO 1
Abreviaturas: TRS= Tiempo de recuperación del nodo sinusal; TSVD= tracto de salida del VD; PERA= periodo refractario
de aurícula; PRENAV= período refractario efectivo del Nodo AV; PREVAc = periodo refractario efectivo de vías accesorias;
PREV= periodo refractario efectivo del VD; PRERVA = Periodo refractario efectivo de la conducción VA; PRERVAc= periodo
refractario efectivo retrógrado de vías accesorias.
4 221
CARDIOLOGÍA
Existen dos conceptos básicos relacionados c o n taquicardia e n las 12 derivaciones del E C G , será el
la estimulación cardiaca que son de gran aplicabilidad sitio de origen de la misma.
en los estudio electrofisiológicos y por su importan-
cia los explicaremos a continuación:
APLICACIONES CLÍNICAS DEL ESTUDIO
RESET ELECTROFISIOLÓGICO
Cuando se introduce un extraestímulo sobre una
taquicardia, este quedara entre dos latidos d e la Existen e n la actualidad diferentes aplicaciones clí-
taquicardia. El intervalo entre el latido previo y el nicas y terapéuticas prácticas del estudio electrofi-
extraestímulo se le denomina acoplamiento y el in- siológico y la ablación c o n radiofrecuencia. A medi-
tervalo entre el extraestímulo y el siguiente latido da que evolucionó la electrofisiología y la ablación
se llama ciclo de retorno. se convirtió e n una realidad d e aplicación practica,
Cuando la suma del acoplamiento y ciclo de re- e l enfoque del EEF cambio radicalmente y se con-
torno es igual a dos ciclos de la taquicardia se dice virtió en la antesala d e la intervención terapéutica.
que este ha producido una pausa compensadora Por lo anterior daremos primero una breve reseña
completa, si este intervalo es inferior a dos ciclos de de lo que es e n si la ablación con radiofrecuencia,
la taquicardia se dice que la pausa es incompleta y para pasar posteriormente a las aplicaciones diag-
que el extraestímulo ha producido el reciclaje o nósticas del EEF y posteriormente las aplicaciones
reset de la taquicardia. Esto implica que la activa- terapéuticas e n las taquiarritmias más comunes.
ción que genero el extraestímulo alcanzo y penetro
el circuito de la taquicardia alterando su frecuencia
de descarga y ritmicidad. ABLACIÓN CON RADIOFRECUENCIA
ai.
ELECTROFISIOLOGIA CLINICA Y TERAPEUTICA
La otra forma es el control por temperatura, que más largo entre el último latido auricular estimula-
consiste en adaptar un sensor d e temperatura a la do y el primer latido sinusal.
punta del catéter de ablación que registrará la mis- El protocolo utilizado en el Instituto N a c i o n a l
ma e n la interfase. El generador modificara de for- d e Cardiología consiste e n realizar sobreestimu-
ma automática el poder para alcanzar la temperatu- lación por lapso de un m i n u t o a tres f r e c u e n c i a s
ra rijada (habitualmente 7 0 ° ) , si la temperatura diferentes 6 0 0 m s e g , 5 0 0 mseg y 4 0 0 m s e g . Se
excede este limite se corta el suministro de energía. tomara e n c u e n t a la pausa mas prolongada y se
Esta forma de aplicación es la más utilizada y segura. acepta que e l valor normal es por debajo de 1 5 0 0
a 1 6 0 0 m s e g . Algunos autores c o m o N a r u l a , su-
gieren la utilización del t i e m p o d e r e c u p e r a c i ó n
EVALUACIÓN DE LA F U N C I Ó N SINUSAL del n o d o sinusal corregido c o m o un parámetro
figura 4) más reproducible y se calcula restando el ciclo
sinusal basal al T R N S medido ( T R S C = T R N S - Fre-
La generación y transmisión a la aurícula d e los im-
c u e n c i a Sinusal) estableciendo c o m o valor m á x i -
pulsos a una frecuencia que se adapte a las necesi-
mo 5 2 5 m s e g .
dades biológicas del organismo constituye la fun-
ción sinusal básica. Sin embargo este automatismo La sensibilidad y especificidad para detectar
intrínseco de las células marcapaso, están reguladas e n f e r m e d a d d e l seno es d e 7 3 % y 9 7 % respecti-
por influencias locales, endocrinas y sobre todo del v a m e n t e utilizando un valor m á x i m o de 1 5 0 0
sistema nervioso vegetativo. A d e m á s d e estas in- mseg. Por ultimo se ha utilizado una medida mas,
fluencias, patología propia de estas células marcapaso el T i e m p o de recuperación total del n o d o sinusal
puede alterar su función. En el laboratorio de elec- y su valor normal deberá ser inferior a 4 segundos
trofisiología podemos evaluar esta función y deter- y consiste en medir desde e l último latido esti-
minar si las alteraciones de la misma se deben a mulado hasta que se ha restablecido la frecuencia
alteraciones intrínsecas del nodo o bien por influen- sinusal n o r m a l .
cias extrínsecas a este c o m o en el caso de la
disautonomia.
E V A L U A C I Ó N DE LA C O N D U C C I Ó N
SINOAURICULAR
E V A L U A C I Ó N DEL A U T O M A T I S M O
Implica e l d e t e r m i n a r e l t i e m p o que tarda e n
D e s d e 1 9 7 7 se introdujo al tiempo de recupera- propagarse el impulso sinusal desde su origen hasta
ción del n o d o sinusal c o m o prueba del automatis- el resto de las aurículas.
mo sinusal. Consiste básicamente en suprimir la Existen dos métodos para la evaluación de la
actividad sinusal sobreestimulando la aurícula a fre- misma, el método de Strauss y el método de Narula,
cuencias preestablecidas, al interrumpir esta esti- este ultimo es mas sencillo d e realizar y de enten-
mulación existe una depresión transitoria del a u - der y consiste e n realizar estimulación auricular li-
tomatismo sinusal, tras esta p a u s a el n o d o se
geramente (10 latidos) por e n c i m a de la frecuencia
recupera de forma progresiva hasta llegar nueva-
sinusal en trenes de 8 estímulos, al ciclo postesti-
mente a la frecuencia inicial. El tiempo de recupe-
mulado o ciclo de retorno se le resta el ciclo sinusal
ración del nodo sinusal es entonces el intervalo
basal (normal < 2 0 0 m seg.)
cr.R.N.s.)
TRNS - < 1550 m.rg
TRNS - 100 y 550 m u | .
TRNS > < 160 mtcg.
F I G U R A 4 Evaluación de TCSA • < 200 n « |
la función sinusal
4 22i
CARDIOLOGÍA
1
—w
i;
" I T *
1 -
FIGURA 5 A: Bloqueo H-
auriculoventricular de
f
primer grado en el nodo
A-V. El Intervalo A-H está
prolongada a 240 mseg.
B: Bloqueo ¡nfrahisiano
de grado avanzado con
relación A- V Fija 2 : 1 .
Cada segunda deflexión
hisiana no va seguida de
B
ventriculograma
Taquiarrítmias por reentrada Aurículo-Ventricu- y tratamiento de esta arritmia, a partir de los traba-
lar: Taquicardia Intranodal, Wolf Parkinson W h i t e , jos realizado por e l grupo d e Haissaguerre, que
Vías accesorias Ocultas, y Mahaim. describieron que en pacientes con FA se podía
La doble vía de conducción intranodal es de es- observar la presencia de actividad eléctrica ectópica
pecial interés ya que es el sustrato fundamental para rápida en el interior de las venas pulmonares, de-
la taquicardia por reentrada intranodal común, que bido a la presencia de bandas musculares que se
es la más frecuente de las arritmias supraventricula- extienden desde el miocardio auricular hacia el
res por reentrada. Esta se evalúa realizando un tren interior de la v e n a .
de 8 estímulos (S,-S,) a una frecuencia determinada El propósito del EEF e n estos pacientes será:
y se agrega un extraestímulo con acoplamientos de-
crecientes iS ); conforme se acortan los S , se ob-
2 ;
1. Localización de focos automáticos e n ambas
servara c o m o se va incrementando progresivamen- aurículas, o bien e n cualquiera de las venas
te el intervalo A H hasta que un extraestímulo produce que a ellas desembocan (venas pulmonares y
un incremento brusco, mayor a 5 0 ms del intervalo cavas). Si no es posible localizar c o m o tal fo-
A H (figura 6 ) , en este punto consideramos que al- cos activos, entonces se buscaran conexiones
canzamos el periodo refractario de una vía (rápida) musculares entre las venas y las aurículas,
y el estimulo ha bajado por otra vía d e conducción que sirvan de puente para que focos automá-
mas lenta. ticos penetren a las aurículas e induzcan FA.
225
CARDIOLOGÍA
zación de la inervación autonómica que pue- ser de punta 4 m m , de irrigación externa o bien 8
da influir en la perpetuación de esta arritmia. m m , según cada grupo.
Hay básicamente dos abordajes. El aislamiento
El protocolo estudio incluye los siguientes pa- eléctrico segmentario y el aislamiento circunferencial.
sos: Cateterismo v e n o s o Femoral y c o l o c a c i ó n El primero consiste en solo tratar aquellas venas en
de tres o cuatro introductores v e n o s o s . A v a n c e donde se observen potenciales e intentar eliminar
d e electrocatéteres derechos, habitualmente un todos los potenciales de las 4 venas. El segundo im-
electrocatéter e n s e n o c o r o n a r i o ( S O , otro el la plica el aislamiento completo haciendo una lesión
A D alta. e n toda la circunferencia de las 4 venas pulmonares.
Punción transeptal única o doble para coloca- Cada grupo tiene su propia técnica y varían conside-
c i ó n d e un electrocatéter e n espiral de 10 o 20 rablemente según cada grupo. El éxito varía pero en
polos (Lasso) para el estudio d e los potenciales e n general se acepta un 80 a 90 % de curación para la FA
venas pulmonares. Colocación de un catéter de paroxística y de un 60 a 80 % para la FA persistente. El
ablación. procedimiento de ablación esta en evolución y exis-
ten complicaciones potenciales graves, aunque poco
Anticoagulación completa durante todo el pro-
frecuentes, como el embolismo a S N C , la perfora-
cedimiento.
ción cardiaca y tamponade, la fístula cardioesofágica
Se procede al registro de la actividad eléctrica
y la estenosis de venas pulmonares, siendo esta últi-
en c/u de las venas pulmonares con el electrocatéter
ma la mas frecuente y varia según el grupo desde un
espiral, primero en ritmo sinusal y posteriormente
1 a 2 % hasta un 20 %.
c o n estimulación a través del electrocatéter e n S C
para venas izquierdas y con electrocatéter de la A D
para venas derechas. La o las venas en donde se FLUTTER AURICULAR
registren dobles potenciales (figura 7) ya sea en RS A partir d e la caracterización del flutter c o m o una
o con estimulación se consideran candidatas para la macroreentrada auricular derecha y la definición
ablación. de el istmo cavotricuspideo c o m o el sitio de con-
ducción lenta; la posibilidad d e curar la arritmia
ABLACIÓN mediante ablación c o n radiofrecuencia, con altas
Se realizara bajo control con temperatura a 50° y posibilidades de éxito, ha dado pie a que e n la ac-
con una potencia máxima de 30Watts y se podrá tualidad sea de las arritmias mas estudiadas y tra-
incrementar según sea necesario. El catéter puede tadas en los laboratorios d e electrofisiología.
•
1
— —
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V I
rr r*. -J
FIGURA 6 Doble fisiología del nodo AV e inicio de una taquicardia por reentrada
intranodal común. Observe como se estimula la A D con un S I - S I constante y se
, — i . J
El flutter mas frecuente es aquel en el que la onda Si el paciente esta e n ritmo sinusal, se podrá
reentrante gira en la aurícula derecha alrededor del intentar inducir el flutter a través de estimulación
anillo tricuspídeo y por delante de la crista terminalis, auricular a frecuencias decrecientes. Si no se desea
con un sentido de activación cráneo-caudal en la inducir la arritmia se puede lograr la ablación esti-
p a r e d lateral y c a u d o - c r a n e a l e n e l t a b i q u e mulando al aurícula derecha septal baja con el caté-
interauricular con el istmo cavotricuspídeo como zona ter del seno coronario y observando si existe o no
de conducción lenta. A este flutter se le ha llamado conducción a través del istmo cavotricuspídeo.
común, típico o bien tipo I; sin embargo hoy día la U n a vez definido lo anterior se procederá a la
nomenclatura ha cambiado ( C u a d r o 2) y se clasifica ablación del istmo cavotricuspídeo (si es un flutter
como flutter istmo dependiente antihorario. istmo dependiente) o bien se realizara la abla-
El propósito del estudio electrofisiológico será pre- c i ó n e n e l istmo crítico definido con las técnicas
cisamente definir el tipo de flutter, el sentido de acti- de mapeo.
vación de la onda reentrante y determinar si es o no
ABLACIÓN
dependiente del istmo cavotricuspídeo. El abordaje
Preferiblemente con un electrocatéter de punta 8 m m
de estos pacientes consiste en los siguientes pasos:
o bien con un irrigado externo se procede a la colo-
• Cateterismo femoral derecho y colocación cación del catéter en la z o n a correspondiente al
de tres introductores venosos. istmo (a las 6 : 0 0 hrs e n oblicua izquierda) dejando
el catéter ligeramente por delante de la válvula
• Avance de un electrocatéter d e 2 0 polos y su tricúspide de tal forma que tengamos un potencial
colocación alrededor d e anillo tricuspídeo auricular pequeñito y un potencial ventricular de
por delante d e la crista terminalis. buen tamaño. U n a vez e n esta posición se inicia la
• Avance de un electrocatéter de 10 polos al aplicación de RF controlada por temperatura a 70°
y 5 0 W , cada 20 o 30 segundos se retirara lenta-
seno coronario.
mente el electrocatéter en dirección hacia la vena
• A v a n c e d e l electrocatéter para a b l a c i ó n c a v a , m a n t e n i e n d o s i e m p r e u n ligero t o r q u e
(figura 8 ) . antihorario, q u e ayudara a mantenerlo e n el ist-
mo medio (zona mas delgada y c o n menor tejido
Si el paciente se encuentra e n flutter al momento
muscular) hasta q u e de forma brusca el catéter
del estudio, con el catéter duodecapolar se registra- cae a la v e n a c a v a . En estas últimas porciones la
ra el sentido de la activación de la A D (horaria o aplicación puede ser dolorosa. U n a vez que se ha
antihoraria) y a través de técnicas de arrastre o logrado interrumpir el flutter pasando a ritmo
entrainment, se definirá si es dependiente del ist- sinusal, d e b e m o s estar seguros de que existe blo-
mo cavotricuspídeo o no (figura 9 ) .
CUADRO 2
T A Q U I C A R D I A A U R I C U L A R POR M A C R O R E E N T R A D A I Z Q U I E R D A
• Flutter Mitral
• Flutter alrededor de Venas pulmonares
• Relacionado a Cicatriz
• Flutter S e p t a l .
4 227
CARDIOLOGÍA
FIGURA 7 Dobles potenciales y extrasístoles de vena pulmonar. El primer latido, en ritmo sinusal,
muestra la presencia de dobles potenciales (flecha) en el registro del catéter Lasso (catéter en espiral
en la vena pulmonar). El segundo y tercer latido son extrasístoles provenientes de la vena pulmonar en
cuestión, observe como se invierte el orden de activación y la separación entre el potencial de vena
pulmonar y el de la aurícula. A: auriculograma. P: potencial de la vena pulmonar
TAQUICARDIAS AURICULARES
En las taquicardias auriculares el protocolo de estu-
dio depende de cada laboratorio, sin embargo es
c o m ú n la utilización de al menos un catéter en la
FIGURA 8 Posición de los catéteres en proyección aurícula derecha para estimulación y registro, un
AP para el estudio electrofisiológico y ablación del catéter e n seno coronario y el catéter de ablación.
flutter auricular istmo dependiente. (La línea pun- El catéter de la aurícula derecha en ocasiones podrá
teada representa el catéter en el interior del seno
ser de 10 o 20 polos para facilitar la localización.
coronario)
A través de estimulación auricular programada
se buscara inducir la taquicardia y una vez que se
queo bidireccional del istmo cavotricuspídeo. Esto tiene la misma, se procede a definir el mecanismo,
se realiza estimulando la A D septal baja desde el mediante técnicas de reset y entraintment, así como
catéter e n seno c o r o n a r i o . Por lo general e n este su localización a través de cartografía de activación
punto aun no habrá b l o q u e o , por lo q u e mante- (búsqueda del sitio d e activación mas precoz en el
n i e n d o la estimulación haremos nuevas líneas d e ciclo de la taquicardia c o n respecto a la onda P o
ELECTROFISIOLOGIA CLINICA Y TERAPEUTICA
F I G U R A 9 Registros intracavitarios de un
flutter auricular istmodependiente con acti-
vación en sentido antihorario. Observe que
el sentido de la activación auricular v a del
polo 10 (septal alto) al polo 1 (lateral bajo),
giro en contra de las manecillas del reloj
una referencia fija en la aurícula). U n a vez encon- • Periodos refractarios variables de caso a caso
trado este punto se procede a la ablación c o n u n y este es el determinante principal d e la fre-
electrocatéter punta 4 m m , bajo control d e tempe- cuencia de respuesta ventricular ante una
ratura a 70° y 5 0 W . El criterio de éxito es la inte- arritmia auricular.
rrupción súbita de la taquicardia al aplicar la radio-
f r e c u e n c i a y la n o i n d u c c i ó n d e l a m i s m a • Conducción eléctrica e n ambas direcciones
posteriormente. El éxito varia según la serie pero la (retrograda o anterógrada) o en una sola de
mayoría es arriba del 9 0 % c o n tasas bajas de ellas.
recurrencia, que varían del 1 0 al 15 %
Las vías c o n conducción bidireccional, produ-
cen preexcitación y se manifiesta en el E C G de su-
TAQUICARDIAS POR REENTRADA AV
perficie c o m o la presencia d e una despolarízacíón
Probablemente sean la indicación mas común para
ventricular precoz y lenta (onda Delta); en el regis-
un estudio electrofisiológico, por lo que dedicare-
tro intracavitario del His, se observa un intervalo H V
mos un breve espacio para comentar sobre la fisio-
corto o en algunas ocasiones fusionado con el regis-
logía y localización de las vías accesorias mas comu-
tro ventricular.
nes y acerca de los mecanismos electrofisiológicos
de estas taquicardias. A continuación daremos una Las v í a s c o n c o n d u c c i ó n e x c l u s i v a m e n t e
breve reseña del protocolo de estudio que e l autor retrograda se denominan ocultas y a que no se ob-
considera más sencillo y práctico, para el diagnósti- servan en el E C G durante el ritmo sinusal y el inter-
co de las formas mas frecuentes de este tipo de valo H V es normal.
arritmias y el procedimiento de ablación. La localización podrá ser en cualquier punto alre-
dedor de los anillos mitral o tricuspídeo (figura 12.)
4 ™
CARDIOLOGÍA
FIGURA 10 Interrup-
ción del circuito del
flutter durante la
ablación con radio-
frecuencia del istmo
cavotricuspídeo
f
al estimular el septum bajo de la AO
(catéter en S C ) , existen dos frentes
de activación (flechas) uno prove-
• f
niente de la pared septal (polo 10)
hacia la porción lateral y otro frente
de la porción septal baja, atravesan-
do el istmo y llegando a la pared la-
teral baja (polo 1). Este registro de
la porción lateral baja de la aurícula
« = 3 = 4 = 4
se hace cada vez mas tardío al apli-
car RF en el istmo cavotricuspideo,
hasta que solo existe un solo frente
de activación desde el septum hasta
la pared lateral, quedando bloquea-
do el impulso en el istmo í
Estas ultimas pueden conectar al miocardio auri- MECANISMO ELECTROFISIOLÓGICO DE LAS TAQUICAR-
cular c o n alguna parte del sistema de conducción o DIAS POR REENTRADA AV
miocardio ventricular (aurículo-fasciculares o
aurículo-ventriculares), al nodo A V c o n alguna par- Taquicardia m e d i a d a por vía accesoria c o m ú n
te del sistema d e conducción (nodo-fasciculares) En este grupo de taquicardias e l mecanismo es,
Tienen conducción exclusivamente anterógrada por como su nombre lo indica, la reentrada y las partes
lo que solo producen taquicardias antidrómicas. de este circuito son el nodo A V y una vía accesoria.
Si la vía accesoria es de conducción bidireccional
CONEXIONES FASCÍCULO VENTRICULARES ( c o m o e l W P W ) p u e d e h a b e r dos t i p o s d e
Conectan el haz de His o alguna rama del sistema de taquicardias, la ortodrómica y la antidrómica. En la
conducción con el miocardio ventricular. Pueden primera, la activación anterógrada se realiza por la
dar PR normal o corto con intervalo H V corto y onda vía de c o n d u c c i ó n lenta (nodo A V ) y la activación
delta. No producen taquicardias. retrograda es a través de la vía rápida (vía acceso-
230
ELECTROFISIOLOGIA CLINICA Y TERAPEUTICA
F I G U R A 12 Localización
de las vías accesorias co-
munes
ria). Por esta razón la morfología del Q R S será igual con fisiología de Mahaim. En las vías accesorias ocul-
a la del ritmo sinusal (QRS angosto) y la relación tas, la taquicardia es solo ortodrómica.
e n t r e e l Q R S y la o n d a P es d e gran a y u d a A diferencia de las taquicardias |X>r reentrada AV
diagnóstica, observando las siguientes característi- por vía accesoria, en la reentrada intranodal, las dos
cas: Relación A-V o V-A 1:1 obligada, R P < P R y RR vías participantes en el circuito están dentro del nodo
regular. C o m o la activación retrograda es a través AV, formadas a partir de la orientación variable de las
de una vía accesoria relativamente lejana al nodo fibras en el nodo compacto, dando lugar a zonas de
AV, la distancia entre el Q R S y la P es mayor a 70 conducción rápida y lenta, con periodos refractarios
mseg (figura 1 3 ) . Si e n algún momento una de las
también diferentes. En pacientes con este tipo de
dos vías se bloquea, la taquicardia parara.
taquicardias característicamente se observan curvas
En ocasiones, la frecuencia d e la taquicardia,
puede ser más rápida que el tiempo de recupera-
ción de alguna de las ramas del haz de His, por lo
-JL-JI « IL-A—A.-A-C-K A » » X-k-JL-K..
que se puede observar bloqueo funcional de rama
derecha o izquierda. C u a n d o esto sucede, si la vía
accesoria se encuentra ipsilateral a la rama bloquea-
da, la frecuencia de la taquicardia disminuye (y la
distancia V- A aumenta en el registro intracavitario).
Si por el contrario la vía accesoria esta contralateral
al sitio de la rama bloqueada la frecuencia de la
taquicardia no varía (el V- A no varía).
En las taquicardias Antidrómicas, la activación
anterógrada se realiza por la vía accesoria y la acti-
vación retrograda es a través del nodo AV, por lo
que la morfología del Q R S será muy preexcitada o
bien aberrada, pudiéndose confundir con F I G U R A 13 Taquicardia supraventricular por vía
accesoria común. O b s e r v e como en el E C G de
taquicardias ventriculares. La relación entre A y V es
superficie, la activación retrograda de la aurícula,
igualmente 1:1. Estas taquicardias son más comunes da la clave del diagnóstico, observándose la onda
en presencia de vías accesorias múltiples y en vías P ligeramente por detrás del QRS con un RP<PR
4 231
CARDIOLOGÍA
de conducción nodal discontinua o bien doble vía bidireccional es evidente (Wolf Parkinson White)
intranodal. En la taquicardia intranodal común (lenta- por lo que se pudiera proceder directo a la ablación
rápida), el brazo anterógrado de la taquicardia será la en ritmo sinusal, sin la inducción de la taquicardia.
vía lenta y el brazo retrogrado la vía rápida, dando La localización de la vía accesoria e n este caso, se
una característica diagnostica, la activación ventri- realizara tanto por la polaridad de la onda delta y
cular y auricular prácticamente simultanea (figura Q R S e n el E C G de superficie (figura 14) c o m o por
6) o menor a 5 0 mseg, produciendo también la la activación de los auriculogramas (A) y ventriculo-
característica de un R P < P R . En la taquicardia no gramas (V). Es decir buscaremos el punto en donde
común o rápida-lenta, el brazo anterógrado es la vía el registro en donde la distancia entre A y V sea la
rápida y el retrogrado la lenta lo que da una distan- mas corta o bien se encuentre el ventriculograma
cia V-A mayory una relación R P > P R . En la taquicardia más precoz e n el ciclo cardiaco (sitio de inserción
intranodal, al encontrarse las dos vías dentro del nodo, ventricular de la vía accesoria). El registro de los
teóricamente no es necesaria la activación auricular potenciales en el catéter del seno coronario es de
y ventricular para el mantenimiento de la taquicardia, suma utilidad p.e. Si en el polo distal (polo 1 -2), e n
por lo que en algunas raras ocasiones podremos ver la porción lateral del anillo mitral y la distancia e n -
taquicardias c o n bloqueo 2 . tre A y V es la mas corta (activación ventricular mas
precoz) la vía será lateral izquierda (figura 15). Si
El EEF en estas arritmias dará a conocer el tipo de por el contrario el polo 9-10 o proximal (en la en-
taquicardia, el mecanismo y la localización de las trada del seno coronario) es el que tiene la distancia
vías de conducción dando pie para la ablación de las entre A y V mas corta, la vía probablemente sea
mismas y curación definitiva de la misma. A conti- derecha. Sin embargo en una forma mas ortodoxa,
nuación se hace una breve reseña d e una forma se deberán realizar protocolos de estimulación auri-
simple y practica, a juicio del autor, para abordar cular y ventricular para determinar, localización exac-
estas taquicardias. ta de la vía accesoria, propiedades d e conducción y
periodos refractarios anterógrados y retrógrados así
como la inducción de la taquicardia. A continuación
CATETERISMO FEMORAL DERECHO CON LA COLOCA-
e l catéter de ablación se dirigirá al sitio donde pre-
CIÓN DE DOS O TRES INTRODUCTORES VENOSOS
viamente hallamos localizado la vía accesoria, en la
C o l o c a c i ó n d e electrocatéteres e n AD, S C y VD cara ventricular del anillo valvular correspondiente,
Si e n el E C G d e superficie existe preexcitación el buscando el sitio e n donde los registros de A y V
diagnostico de una vía accesoria de conducción
DIII
A / \
VI VI
+ + / \
/ \ A S D
V2
L I / ALI PSI/PLI y
PSD / PLD LD
232
ELECTROFISIOLOGÍA CLÍNICA Y TERAPÉUTICA
estén mas próximos o incluso fusionados entre si. La incrementando cada vez mas conforme disminuya-
radiofrecuencia se aplicara bajo control por tempe- mos la frecuencia de estimulación hasta que e n un
ratura a 70° y 50 W con un electrocatéter punta punto se bloquee la conducción (comportamiento
4 m m en los sitios donde se registre: 1.- A y V fusio- tipo Wenckebach) o bien se produzca un bloqueo
nados. 2- ventriculograma más precoz respecto a la retrogrado 2 : 1 a frecuencias relativamente lentas,
delta e n el E C G . 3.- Potencial de vía accesoria. 4.- podemos inferir que la conducción retrograda es a
registro unipolar Q S . El éxito se considera cuando través del nodo A V y no d e una vía accesoria.
observamos la pérdida d e la preexcitación en el
E C G y la separación del A y V e n los registros d e La ablación e n el c a s o d e las vías a c c e s o r i a s
ablación, S C y His (figura 16). Se confirma por ulti- ocultas s e realiza de dos m a n e r a s :
mo la ausencia de preexcitación bajo estimulación La primera es, bajo estimulación ventricular a fre-
auricular y con estimulación ventricular se confirma cuencias fijas, se busca en la cara ventricular del
ya sea disociación ventrículo auricular o curvas de anillo correspondiente, el sitio en donde se en-
conducción retrograda de tipo nodal (Wenckebach cuentre el auriculograma mas precoz, dicho auricu-
retrogrado o bloqueo 2 : 1 ) . lograma representa la inserción auricular de la v í a ,
Si no hay evidencia d e preexcitación en el E C G blanco para la ablación. O bien durante la taquicardia
de superficie entonces se puede abordar de la si- ortodrómica se localiza igualmente el auriculogra-
guiente manera: m a más precoz. El éxito se confirma al realizar nue-
vamente la estimulación ventricular y encontrar ya
se disociación V-A o bien curvas retrogradas de con-
Estimulación ventricular a frecuencias d e c r e -
ducción nodal.
cientes para evaluar la c o n d u c c i ó n retrogra-
d a ventrículo auricular Si hasta este punto aun no se indujo ninguna arrit-
Si no hay conducción ventrículo auricular, es decir mia, colocamos el electrocatéter del V D en el His y
hav disociación VA podemos descartar prácticamen- procedemos a realizar estimulación auricular.
te una vía accesoria oculta. Si por el contrario existe Iniciamos el protocolo de estimulación auricular
una conducción fija entre ventrículo y aurícula 1 : 1 a con S, fijo y un S , con acoplamientos progresiva-
pesar de la disminución progresiva de la frecuencia mente mas cortos, y se estudia la curva de conduc-
de estimulación por debajo de S , - S , = 2 5 0 mseg po- ción nodal, en ocasiones al realizar la curva nodal,
dremos sospechar una vía accesoria oculta. Si la con- observaremos una doble vía intranodal (v/de supra)
ducción ventrículo-auricular no esta disociada pero y frecuentemente observaremos el inicio de una
al disminuir la frecuencia de estimulación la distan- taquicardia supraventricular, en donde la distancia
cia entre el ventrículo y la aurícula retrograda se va entre el registro del ventriculograma y el registro
CARDIOIOGÍA
F I G U R A 16 Ablación de vía
accesoria común lateral iz-
quierda, en ritmo sinusal.
Obsérvese como en la posi-
ción lateral izquierda e l ca-
téter de ablación registra un
A y V fusionado (circulo) e
incluso mas precoz que el de
S C 1 -2. En dicho sitio se apli-
c a RF a 70° con lo que a los 4
t- segundos, desaparece la
r—H- preexcitación en el E C G y se
separa el registro de A y V
r •—'W^t- en S C 1-2 (rectángulo)
4^
CARDIOLOGÍA
FIGURA 17 Taquicardia
venlricular izquierda.
Mapeo por activación de
TV, observe como en el
catéter de mapeo o abla-
ción el registro local esta
40 ms antes del inicio del
QRS (flechas), lo que su-
giere que se esta regis-
trando el sitio de salida
de la TV
antitaquicardia) y la definición de los circuitos sus- ha tenido mayor difusión y aceptación a nivel mun-
ceptibles a la ablación. dial es la cartografía electroanatómica tridimensional
En este caso por lo general se colocara un (Sistema Caito) y en la actualidad un numero muy
electrocatéter e n el V D para estimulación, y otro importante de laboratorios cuenta con este sistema
catéter en la A D o His. A través de abordaje arterial además que un gran numero de publicaciones cien-
retrogrado se posicionara otro catéter en el VI para tíficas utilizan este método por lo que creo funda-
cartografía y ablación. mental se conozcan las bases de dicho sistema.
S e procede a la estimulación ventricular pro- La cartografía electroanatómica se basa en tres
gramada c o m o c o m e n t a m o s anteriormente para puntos fundamentales. A través de tres magnetos
la i n d u c c i ó n . U n a vez inducida la TV, si esta es dispuestos en forma triangular, debajo del tórax del
estable, se intentara realizar cartografía d e activa- paciente, se crea un campo magnético miniatura
c i ó n para su localización y posteriormente técni- sobre el tórax. U n parche de referencia a la altura
cas d e entraintment para definir los circuitos po- del corazón es colocado e n el dorso del paciente
tenciales de a b l a c i ó n . representando el centro en donde se juntan los tres
campos magnéticos. El electrocatéter d e ablación,
por lo demás convencional, tiene un sensor magné-
tico especial e n la punta. El sensor determina la
NUEVAS T E C N O L O G I A S
distancia a la que se encuentra de cada magneto de
acuerdo a la intensidad del campo magnético de-
El avance que ha tenido la electrofisiología en los
tectado, permitiendo así la ubicación tridimensional
últimos años ha motivado a la investigación y desa-
de la punta del catéter en un sistema d e computa-
rrollo de nuevas tecnologías para lograr el estudio y
ción. Se procede a la reconstrucción d e la cámara
tratamiento de arritmias complejas que por méto-
estudiada tomando diversos puntos dentro d e la
dos tradicionales muy complicados estudiar. Estas
misma, los cuales proporcionaran información so-
nuevas tecnologías tienen también c o m o propósito
bre la localización anatómica, el voltaje d e registro
el mejorar los porcentajes de éxito en la ablación
bipolar intracavitario y sobre el tiempo d e activa-
d e dichas arritmias complejas y a la vez disminuir
ción local respecto al ciclo de la taquicardia. Esta
los tiempos de fiuoroscopia, que en ocasiones son
información se representa e n colores graduados ya
muy prolongados. Problablemente el método que
2ib
ELECTROFISIOLOGIA CLINICA Y TERAPEUTICA
sea a voltaje o por tiempo de activación local. La Es tal el avance de estas técnicas de cartografía
punta del catéter se representa en el sistema c o m o que ya es una realidad la utilización de imágenes de
un hexágono con cada lado de colores diferentes resonancia magnética nuclear que se incorporan al
obteniendo e n total información sobre la posición sistema (Carto-Merge) permitiendo la reconstrucción
anterior, posterior, izquierda, derecha y rotación (fi- de la cavidad estudiada con una precisión anatómica
gura 17) logrando la navegación tridimensional en extraordinaria. Incluso se puede utilizar sistemas de
tiempo real sin la necesidad de fluoroscopia. posicionamiento automático del catéter (estereotaxial
Las aplicaciones de esta técnica de cartografía en donde el operador indica en la imagen recons-
son muchas y cada día se encuentran nuevas posibi- truida la zona que se desee tratar y el catéter será
lidades. En nuestro instituto se utiliza principalmen- desplazado automáticamente a dichas zonas.
te p a r a la cartografía d e arritmias c o m p l e j a s Existen otras opciones d e cartografía, como los
recidivantes con falla previa e n la ablación con téc- sistemas localiza, en Site, etc que tienen cierta apli-
nicas convencionales, en pacientes con cardiopatía cación pero no tan difundida como el Caito. En opi-
congénita compleja, en arritmias relacionadas a c i - nión del autor los próximos 5 años verán una evolu-
catrices posquirúrgicas, T V inestable y fibrilación c i ó n e n l a electrofisiología tan i m p o r t a n t e y
auricular persistente principalmente, pero las posi- clínicamente relevante, como el que vio la cardiología
bles aplicaciones son múltiples. intervencionista c o n el advenimiento del STENT.
0 ;
I sistei
l ' l
F I G U R A 18 Diferentes componentes del sistema Carto
237
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238
Capítulo 7 Radiología del corazón
"Si la moral individual es la condición primera, el
médico recto y bueno exige al hombre bueno y recto "
KWWSERRNVPHGLFRVRUJ
E
l estudio radiológico del corazón, aunado al ciones así c o m o la localización d e otras estructuras
interrogatorio, la exploración física y el elec- importantes que no necesariamente forman un bor-
trocardiograma, forman la base fundamental d e de la silueta.
del diagnóstico cardiológico.
El método más difundido es el de la telerradio-
PROYECCIÓN POSTEREOANTERIOR ( f i g u r a 2)
grafía de tórax e n la cual el registro gráfico del tó-
rax se obtiene sobre una placa a una distancia de D e arriba hacia abajo el borde derecho de la silue-
1.8 a 2 m del tubo de rayos X , distancia con la cual ta cardiovascular lo forman la vena cava superior y
la deformación que sufre la silueta cardiaca, por la la aurícula derecha. En ocasiones puede verse abajo
divergencia de los rayos, es mínima (menos de 8%) de la aurícula derecha, la entrada de la vena cava
y no se pierde nitidez. inferior. En sujetos de edad avanzada, el perfil supe-
En forma rutinaria se obtienen tres proyeccio- rior puede estar formado por la aorta ascendente.
nes: posteroanterior (PA), oblicua anterior izquier- El borde izquierdo está formado por tres arcos
da (OAI) y oblicua anterior derecha ( O A D ) . bien definidos: el botón aórtico, formado por la
En las tres posiciones e l sujeto se e n c u e n t r a transición de arco aórtico o aorta descendente;
de pie y a p o y a la cara anterior d e l tórax sobre la el arco d e la pulmonar, formado por el extremo
placa d e m o d o q u e el p e d í c u l o cardiovascular más dista d e l tronco pulmonar y el origen de su
q u e d a c e r c a de ella y la exageración d e su tama- rama izquierda; y, el ventrículo izquierdo. La con-
ño resulta la menor posible. En la posición PA se tinuación del perfil por arriba del botón aórtico
apoya toda la cara anterior del tórax, perpendicu- corresponde a la arteria y v e n a subclavia izquier-
lar a la dirección d e los rayos. En la posición O A I da y la continuación por abajo d e l ventrículo iz-
se apoya la cara anterolateral izquierda c o n una quierdo puede ser dado por u n área d e menor
oblicuidad de su eje posteroanterior respecto a la radiodensidad que corresponde a tejido adiposo
dirección d e los rayos de a p r o x i m a d a m e n t e 4 5 epicárdico.
respecto a la incidencia de los rayos (figura 1). En
algunos centros se toma rutinariamente una pro-
y e c c i ó n lateral izquierda e n la cual la cara lateral PROYECCIÓN OBLICUA ANTERIOR IZQUIERDA
izquierda d e l tórax es la q u e se apoya sobre la (figura 3 )
placa radiográfica.
De arriba hacia abajo el perfil anterior de la silueta
A continuación se describen los elementos ana- está formada por el arco aórtico y aorta ascenden-
tómicos que forman los bordes de la silueta car- te, la orejuela derecha y el ventrículo d e r e c h o .
diovascular normal e n cada una de estas proyec- Debe hacerse notar q u e en esta proyección, la
CARDIOLOGÍA
arteria pulmonar no forma parte d e l perfil cardio- El perfil anterior de la silueta, d e abajo hacia
vascular. arriba, lo forman el ventrículo derecho a u n q u e
El perfil posterior, de abajo hacia arriba, lo forman no es infrecuente que c o n grados mínimos de ro-
el ventrículo izquierdo y la aurícula izquierda; sobre la tación el ventrículo izquierdo participe parcial o
superficie posterosuperior de la sombra de la aurícula totalmente e n la formación del borde inferior;
izquierda se visualiza la radiotransparencia del bron- hacia arriba la cámara d e salida d e l ventrículo
quio principal izquierdo cuya continuidad con la trá- derecho se continúa c o n la arteria pulmonar sin
quea (con una angulación no mayor de 45° suele ser que estas dos estructuras definan su punto d e
muy nítida. Con menor claridad se delimita la arteria u n i ó n . En la porción más superior se distingue la
pulmonar y por encima se encuentra el arco aórtico aorta ascendente, su arco, y hacia atrás y abajo la
cuya continuidad hacia atrás y hacia abajo como aorta aorta descendente q u e no se visualiza e n toda su
descendente se define muy bien. extensión.
FIGURA 2 A: Radiografía de tórax de una persona normal en proyección PA. B: Dibujo sobrepuesto a la
misma radiografía A para demostrar la posición de las cámaras cardiacas y los grandes vasos
FIGURA 3 A: Radiografía de tórax de una persona normal en proyección AOI. B: Dibujo sobrepuesto a la
misma radiografía A para demostrar la posición de las cámaras cardiacas y los grandes vasos
4^
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 4 A: Radiografía de tórax de una persona normal en proyección AOD. Las flechas señalan de
arriba hacia abajo las impresiones que sobre el esófago marcan el arco aórtico, el bronquio principal
izquierdo y la aurícula izquierda. B: Dibujo sobrepuesto a la misma radiografía A, para demostrar la
posición de las cámaras cardiacas y los grandes vasos
PROYECCIÓN LATERAL IZQUIERDA (figura 5) es el reflejo de que no hay una forma precisa para
establecer con absoluta certeza el límite entre el
El perfil anterior de la silueta cardiovascular lo for-
corazón aumentado de tamaño y el normal.
man la aorta ascendente en su tercio superior, el
tronco de la arteria pulmonar e n el tercio medio y Por lo anterior, sólo hacemos referencia al índi-
e l ventrículo derecho e n el tercio inferior. ce cardiotorácico de los diámetros transversos del
cora-zón, el cual es la medición más difundida y
El posterior en su parte más baja lo delimita la
aceptada para establecer si existe cardiomegalia.
vena cava inferior seguida hacia arriba del ventrícu-
Un índice cardiotorácico mayor de 0.5 se consi-
lo izquierdo y la aurícula izquierda.
dera sugestivo de cardiomegalia (figura 6 ) . El índi-
c e cardiotorácico también sirve como cifra de re-
CRECIMIENTOS ferencia para juzgar, e n un mismo sujeto, si ha
ocurrido aumento o disminución d e su cardiome-
U n o de los datos más valiosos que se obtienen con galia a lo largo del tiempo; por ello, aun en pre-
el examen radiológico del corazón es el saber si sencia de cardiomegalia inobjetable es útil medir
hay cardiomegalia global, o bien, crecimiento li- dicho índice (figura 7).
mitado a algunas cavidades o vasos.
D e b e tenerse e n cuenta que en individuos con
corazón de tamaño normal pueden haber factores
CARDIOMEGALIA
que modifiquen el tamaño aparente d e la silueta
El crecimiento de la silueta cardiovascular puede ser cardiovascular. Durante la espiración la silueta apa-
obvia; sin embargo, e n ocasiones es difícil precisar renta ser de mayor tamaño que durante la inspira-
si existe un aumento de la misma o si el tamaño ción profunda, una radiografía tomada en proyec-
de la silueta se encuentra dentro de lo " n o r m a l " . ción antero-posterior exagera el tamaño de la silueta
El gran número de métodos que se han propuesto por estar el c o r a z ó n más alejado d e la placa
para medir el tamaño de la silueta cardiaca y definir radiográfica y por lo tanto, se aumenta la diver-
si es normal o se encuentra aumentada de tamaño, gencia dedos rayos X ; en presencia de ascitis, obe-
242
RADIOLOGÍA DEL CORAZÓN
FIGURA 5 A: Radiografía de tórax de una persona normal en proyección lateral izquierda. B: Dibujo sobre-
puesto a la misma radiografía A para demostrar la posición de las cámaras cardiacas y los grandes vasos
j
su tamaño (escoliosis acentuada, pectus excavatum).
Con base en la descripción que se hizo de las
estructuras que forman la silueta cardiovascular e n
las diferentes proyecciones e n que ésta se estudia,
se analizan a continuación las posibilidades d e re-
, B \
7 conocer crecimientos aislados de las cavidades
C c ardiacas, arteria pulmonar y/o aorta.
~ 7
C r e c i m i e n t o d e la aurícula d e r e c h a
A + B La aurícula derecha se estudia mejor e n las proyec-
ICT
C ciones PA y OAI (Cuadro 1). En la primera, puede
observarse un aumento de la prominencia del bor-
FIGURA 6 Medición del índice cardiotorácico por
medio de los diámetros transversos del corazón. Se de inferior derecho hacia el hemitórax derecho aun-
traza una raya vertical que pasa por la línea media que esto puede ocurrir por dilatación ventricular
i apólisis espinosas de los cuerpos vertebrales) y el tlerecha exclusivamente por lo que algunos autores
segmento A se mide del borde más externo del per- señalan que puede ser más específico si se encuen-
fil derecho a la línea media; el segmento B, del bor- tra q u e el a r c o inferior e l perfil d e r e c h o está
de más externo del perfil izquierdo a la línea me-
elongado. En la O A I puede manifestarse por una
dia; el segmento C o diámetro transverso mayor
del tórax en donde éste tiene su diámetro mayor. El prominencia de la orejuela derecha inmediatamente
índice cardiotorácico normal es menor de 0.5 por abajo de la aorta ascendente (figuras 8 y 9 ) .
4
CARDIOLOGIA
29.7
F I G U R A 7 Las radiografías A y B corresponden ala misma paciente con doble lesión mitral grave e
insuficiencia tricuspídea de origen reumático, antes, y 12 días después de recibir tratamiento enérgico
para insuficiencia cardiaca. El índice cardiotorácico se redujo de 0.72 a 0.66. (Cortesía del Dr. S. HorowiLr)
CUADRO 1
E S T R U C T U R A DE C R E C I M I E N T O DE LA A U R Í C U L A I Z Q U I E R D A
PROYECCIONES
PA OAI OAD LATERAL
A U R I C U L A DERECHA + +
VENTRÍCULO DERECHO - + ± +
ARTERIA PULMONAR + - + + +
AURÍCULA IZQUIERDA + ++ + + +
VENTRÍCULO IZQUIERDO + + ± ++
AORTA + + 1 ++
244
RADIOLOGIA DEL CORAZÓN
lo a la silueta de la aurícula derecha. En la O A I se gerada del arco inferior del perfil izquierdo: se dice
detecta por el desplazamiento hacia arriba y/o dis- que si este arco es redondeado c o m o semicírculo
minución de la luz del bronquio principal izquierdo es sugestivo de hipertrofia, en cambio si el arco se
que provoca la aurícula izquierda dilatada (figura encuentra elongado es sugestivo de dilatación (fi-
11) . En la proyección oblicua anterior derecha (OAD) gura 13). En la proyección O A I el arco inferior del
se observa el rechazo hacia atrás y la disminución perfil izquierdo rebasa la columna; se considera
d e la luz del esófago en su tercio inferior (figura aún c o m o normal que la densidad del ventrículo
12) . En la proyección lateral se puede observar un izquierdo e n esta proyección toque la columna
ángulo bien definido que señala e l sitio del surco pero sin ir más allá de la mitad anterior de ésta; el
auriculoventricuar posterior por encima del cual la ángulo que el ventrículo izquierdo forma con el
sombra de la aurícula izquierda dilatada puede ser hemidiafragma izquierdo se considera que puede
vista con claridad. ser útil c o m o cambio sugestivo par diferenciar hi-
pertrofia (si el ángulo es agudo), y d e dilatación (si
el ángulo es obtuso).
C r e c i m i e n t o del ventrículo izquierdo
Conviene aclarar aquí que el estudio radiológico En la proyección lateral se toma c o m o referen-
del tórax proporciona información sobre crecimien- cia la relación entre la radiodensidad del ventrícu-
to ventricular izquierdo (y derecho) sin que se cuen- lo izquierdo y la correspondiente a la vena cava
te con criterios válidos para definir c o n certeza si inferior (figura 5); normalmente la densidad del
existe hipertrofia o dilatación; esto último debe ventrículo izquierdo se sitúa por delante de la V C I ,
investigarse por m e d i o del electrocardiograma, y e n caso d e crecimiento del ventrículo izquierdo
ecocardiograma y ventriculografía. Por eso aquí se su perfil se desplaza para localizarse detrás.
habla de crecimiento y al hacer mención de cam-
bios sugestivos de hipertrofia o dilatación debe Aorta
recordarse que de ninguna manera son específicos.
La dilatación aórtica puede observarse en la pro-
El ventrículo izquierdo se estudia mejor en las yección PA c o m o una densidad mayor que la de
proyecciones PA, OAI y lateral. En la proyección los perfiles inferiores d e la silueta cardiaca, bien
posteroanterior se observa una prominencia exa- definida, y e n la cual se puede distinguir su por-
FIGURA 11 A: Proyección OAI del mismo paciente de la figura 10-A. Obsérvese el bronquio izquierdo
rechazado hacia arriba hasta formar un ángulo de casi 90°, con su luz gradualmente reducida por la compre-
sión externa que ejerce la aurícula izquierda. B: Proyección OAI de la misma paciente de la figura 10-B.
246
RADIOLOGIA DEL CORAZON
CARDIOMEGALIA GLOBAL
4=
CARDIOLOGÍA
insuficiencia mitral, insuficiencia ventricular izquier- y son igualmente verticales; además, los trayectos
da de cualquier causa o restricción al llenado venosos se pueden ver más allá del tercio medio de
diastólico de dicho ventrículo. Este aumento de pre- cada hemitórax.
sión produce dilatación de las venas pulmonares lo A mayor presión en las venas pulmonares y
cual aumenta su visibilidad a los rayos X; las venas capilares, se produce exceso de líquido en el in-
pulmonares se localizan debajo y por dentro de las tersticio pulmonar, e n donde se acumula. Esto pro-
ramas principales de la arteria pulmonar e n la mitad voca q u e las venas pulmonares aparezcan borro-
inferior del tórax en donde son más horizontales sas e n la radiografía y en ocasiones el perfil de la
que las arterias y e n la mitad superior del tórax se aurícula derecha también pierde su nitidez (figura
encuentran por fuera de las ramificaciones arteriales 17); por otro lado, es relativamente frecuente que
248
RADIOLOGÍA DEL CORAZÓN
el acumulo de líquido en los septa interlobulares de líquido intersticial puedo por lo tanto interferir
sea lo suficiente para visualizarse radiológicamente con el drenaje de líquido pleural y es ésta la razón
c o m o pequeñas y finas líneas horizontales predo- de que se acumule líquido en los septa interlobares
minantemente en las bases pulmonares y que re- (lo que manifiesta en la radiografía como cisuras vi-
ciben el nombre de líneas B de Kerley (figura 18). sibles (figura 19) y aparezca derrame pleural, gene-
El líquido intersticial es drenado por los linfáticos, r a l m e n t e d e poca magnitud) lo q u e p r o d u c e
los que a su vez drenan el líquido pleural; el exceso borramiento de los senos costodiafragmáticos.
4"?
CARDIOLOGÍA
siderable, c o m o o c u r r e c o n m a y o r frecuencia
c u a n d o se instala c o n tal rapidez que no da tiem-
po a que a p a r e z c a n ajustes h e m o d i n á m i c o s , e l
líquido pasa del intersticio a los alveolos (edema
alveolar) y su aspecto radiológico es el d e un
moteado c o n disposición e n abanico a partir de
los hilios y que ha sido llamado " e d e m a e n alas
de m a r i p o s a " (figura 2 1 ) .
Después de un episodio d e edema pulmonar
que ha sido resuelto, es frecuente que la radiogra-
fía de tórax muestre cambios importantes de H V C P
que pueden persistir por varios días a pesar de que
el paciente ya se encuentre asintomático. Asimis-
m o , e n los casos de H V C P crónica, el ensancha-
miento venoso puede ser reversible y el repetido
acumulo de líquido en el intersticio provoca cam-
bios fibróticos que dejan líneas de Kerley o cisuras
permanentemente visibles además de los cambios
propios de hipertensión arterial pulmonar secun-
d a r i a , lo c u a l , en conjunto de una imagen su/
generís, que por haberse visto con mayor frecuen-
cia en enfermos con estenosis mitra], se ha llama-
do a esa imagen: "pulmón mitral".
F I G U R A 17 Detalle del perfil de la aurícula dere-
cha de la figura 20-B para demostrar su contorno
borroso y desgarrado HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR (HAP)
252
RADIOLOGÍA DEL CORAZÓN
del conducto arterioso sirve para aclarar la duda ficación valvular. Igualmente puede diagnosticarse
(figura 241. La búsqueda de calcificaciones debe la calcificación d e l anillo mitra) (figura 2 5 ) y d e la
hacerse, para mejores resultados, por medio d e válvula aórtica (figura 26). Sobra decir que en todo
fluoroscopia c o n intensificador de imagen. Este enfermo, a u n q u e la patología sospechada sea car-
procedimiento es de gran importancia e n el estu- diovascular, la radiografía de tórax d e b e ser estu-
dio del paciente c o n estenosis mitral, lo cual sirve diada en su totalidad ya que puede existir patolo-
c o m o elemento de juicio para proponer substitu- gía no sospechada y sobre la cual la radiografía
ción valvular por una prótesis e n lugar de progra- aporta datos, pero también es posible encontrar
marse para comisurotomía e n caso de hallar calci- alteraciones fuera de la silueta cardiovascular y los
4*1
CARDIOLOGIA
campos pulmonares que tengan relación con un risma de la aorta y no son tan raros los casos e n que
padecimiento cardiovascular, aparentemente ñor- ese e n s a n c h a m i e n t o c o r r e s p o n d e a bocio
m a l . C o m o ejemplo, ya e n c i o n a m o s q u e el intratorácico e n un enfermo con fibrilación auri-
mediastino se puede ensanchar cuando existe aneu- cular sin causa aparente; otra causa de ensancha-
254
RADIOLOGIA DEL CORAZÓN
r
FIGURA 24 Coi
de la figura 14-
F I G U R A 26 Calcificación valvular aórtica. La radio-
logía del tórax en posición lateral izquierda demues-
tra la calcificación valvular aórtica (entre flechas).
Es de gran utilidad para el diagnóstico de estenosis
aórtica en el anciano
a
miento mediastinal es el drenaje anómalo total de
venas pulmonares, e n e l cual la imagen global d e
la silueta cardiovascular parece c o m o un número
8. o c o m o otros lo l l a m a n , un " m u ñ e c o d e n i e v e "
figura 2 7 ) . C o m o tal hallazgo se hace casi siempre
desde que el niño es lactante o poco mayor, es
muy necesario diferenciar la radiodensidad pro- FIGURA 27 Drenaje anómalo total de venas pulmo-
ducida por el timo. Por último, hay tomar en cuen- nares. Los vasos anormales ensanchan el mediastino
ta que la coartación de la aorta por la circulación de tal forma que la morfología de la silueta cardio-
vascular semeja un número 8, o como otros lo lla-
colateral importante es causa frecuente de erosio-
man, un "muñeco de nieve"; el estudio angiográfico
nes e n el borde inferior d e las costillas (signo d e de este niño aparece en las figuras 4 y 19 del capítu-
Rossler) (figura 13). lo HfMOOlNAMICA CARDIOVASCULAR V CATIIf RISMO CARDIACO
255
BIBLIOGRAFÍA
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disease,Gruñe and Stratton Inc. New York 1974. 1979;76:45-50.
256
Hemodinámica cardiovascular
Capítulo 8 y cateterismo cardiaco
"Si han de ser médicos, que no pierdan nunca su
carácter esencial de clínicos. Clínica fue la mediana
al nacer y clínica será siempre, por profunda que sea
su transformación científica. De otro modo,
no sería medicina "
E
calizado e n el extremo distal de un catéter. Este
L C A T E T E R I S M O C A R D I A C O E N EL H U M A N O empe- método abrió las puertas para el desarrollo acele-
zó e n 1 9 2 9 cuando W e m e r Forssmann, sien- rado del cateterismo terapéutico con el que en la
do residente de cirugía en A l e m a n i a , se in- actualidad se beneficia un enorme número de pa-
trodujo una sonda desde una vena d e l antebrazo cientes en todo el mundo.
izquierdo hasta la aurícula derecha. Este hecho H o y e n día, la práctica del cateterismo cardiaco
demostró la factibilidad de introducir, sin compli- es r e c o n o c i d a a n i v e l m u n d i a l c o m o u n a
caciones, un catéter al corazón humano. subespecialidad denominada cardiología interven-
Durante los años 4 0 a los 6 0 varios investigado- cionista. A la terapéutica que se realiza mediante
res (entre los que destacan C o u r n a n d , Richards, técnicas de cateterismo se le conoce c o m o trata-
Dexter, Limón-Lason, Sones y Seldinger) perfec- miento intervencionista. El cardiólogo que la realiza
cionaron el método y sentaron las bases sobre las debe estar certificado en esta subespecialidad por
cuales se practica el cateterismo cardiaco en la el Consejo de Cardiología de su país. Debe también
actualidad. Por sus contribuciones "al desarrollo del cumplir con el número anual mínimo de los diver-
cateterismo cardíaco y los cambios fisiopatológi- sos procedimientos de la subespecialidad señalados
cos e n el sistema circulatorio", Werner Forssman, por el Consejo, c o m o requisito para mantener la
André Fredéric Cournand y Dickinson W. Richards habilidad técnica necesaria c o n el fin de garantizar
compartieron e l Premio Nobel d e Fisiología y M e - procedimientos de alta calidad c o n el mínimo de
dicina en 1 9 5 6 . complicaciones.
diferentes proyecciones. Las imágenes obtenidas se zas para extraer cuerpos extraños, transductores (para
reproducen durante el procedimiento mediante vi- la adquisición de imágenes de ultrasonido o la me-
deo analógico, o de preferencia mediante substrac- dición de presión o temperatura).
ción digital. Tradicionalmente, estas imágenes son
grabadas e n cine de 3 5 m m , técnica que se ha ido
substituyendo por la adquisición digital que se graba INDICACIONES
e n discos compactos. Cuenta además con equipos D e l cateterismo diagnóstico
para monitorización electrocardiográfica, para re- El cardiólogo clínico establece la indicación para
gistro de presiones y para la inyección de medio de efectuar un cateterismo una vez que el paciente
contraste radiológico a velocidad y presión ha sido cuidadosamente estudiado por historia clí-
programables. Tiene a disposición inmediata los nica, exploración física, electrocardiograma y (se-
medios para atender cualquier complicación. Ideal- gún se requiera) por estudio radiológico, electro-
mente, debe estar localizada e n un medio hospita- cardiograma de esfuerzo, ecocardiograma y estudios
lario que c u e n t a con programa de cirugía de medicina nuclear o resonancia magnética. Solo
cardiovascular. así se podrá decidir si existe la necesidad de llevar a
cabo un estudio que no está exento de riesgo y es
A c c e s o vacular precisamente esa evaluación previa la que estable-
ce cuál es la información que se busca o las dudas a
El catéter puede ser introducido por dis ección del
resolver por el cateterismo. En ocasiones un pa-
v a s o o por p u n c i ó n p e r c u t á n e a ( t é c n i c a d e
ciente puede ser llevado a cirugía sin cateterismo
Seldinger). Cuando el cateterismo cardíaco se hace
previo cuando toda la información necesaria ha sido
a través de una arteria se llama cateterismo izquier-
satisfactoriamente obtenida por los medios no
do porque el catéter se avanza e n dirección del
invasivos antes mencionados.
ventrículo izquierdo; si es por una vena, se le lla-
m a cateterismo derecho por dirigirse al ventrículo Las indicaciones más frecuentes para realizar
derecho. También se puede llegar a las cavidades un cateterismo diagnóstico s o n :
izquierdas con el cateterismo derecho introducien-
do el catéter a través de un foramen oval permeable a) Cuando es importante confirmar o descartar
o perforando el septum interauricular con una aguja una entidad patológica que se sospecha por
especial, (cateterismo transeptal). Los vasos más clínica y cuya presencia o ausencia, evaluada
comúnmente empleados son los femorales, con por métodos no invasivos, queda en duda.
acceso a nivel inguinal; los humerales, c o n acceso
b) Para obtener la información necesaria para
a 2 c m por arriba del pliegue del codo o los radia-
decidir por la mejor alternativa entre tratamien-
les. Cuando estos accesos no son viables, el cate-
to médico, intervencionista o quirúrgico.
terismo derecho se puede hacer por vía yugular o
subclavia y e l izquierdo por vía axilar o radial. En c) Para definir aspectos fisiológicos y anatómi-
el neonato se puede utilizar la vena umbilical. cos necesarios previos a la realización de
cirugía.
te. Si existe urgencia diagnóstica o de tratamiento, la cuados para su interpretación, es de la mayor im-
presencia de estas contraindicaciones relativas no portancia la calibración adecuada del sistema de
impiden que se realice el cateterismo. registro, la correcta nivelación de la presión de re-
ferencia de 0 m m H g a la altura de la aurícula iz-
quierda y la estricta verificación de que los catéte-
CATETERISMO CARDIACO DIAGNOSTICO res estén c o r r e c t a m e n t e purgados y libres d e
burbujas de aire.
La información que puede obtenerse con un cate-
terismo cardiaco es muy amplia. Sobra decir que Presión en cuña
para el caso individualizado sólo se investiga aquella Para conocer la presión de un vaso o cámara car-
relacionada con la indicación clínica que dio lugar díaca, habitualmente se coloca e l extremo distal
a la indicación del procedimiento. del catéter en dicha estructura. Otras veces se pue-
La información que se obtiene c o n el cateteris- de obtener la presión d e un vaso sin estar necesa-
mo la separamos, c o n fines didácticos, de acuerdo riamente dentro del mismo. Esto se logra con la
c o n los datos derivados d e : la trayectoria del caté- técnica en cuña, en la cual un catéter que solo tie-
ter, e l r e g i s t r o d e p r e s i o n e s , l a s i m á g e n e s ne orificio distal se avanza por un vaso hasta fijar-
angiográfícas, la oximetría. la dilución d e marca- lo a manera de c u ñ a , ocluyendo el vaso; también
dores, los cálculos hemodinámicos, el ultrasonido se puede obtener inflando un catéter con globo
y la angioscopía. distal sin necesidad de avanzar el catéter hasta va-
sos menores de 4 m m de diámetro. C o n esto, la
presión registrada ya no es la del vaso en que se
Trayectoria del catéter
encuentra el catéter sino que corresponde a la pre-
En ausencia de comunicaciones anormales, el c a -
sión del vaso que se encuentra al otro lado del le-
téter sigue un trayecto característico d e acuerdo a
cho capilar ocluido. Este procedimiento se hace
la vía d e inserción (arterial o venosa). Conociendo
con frecuencia en una rama distal de las arterias
la proyección anatómica de las cavidades del co-
pulmonares para conocer la presión de las venas
r a z ó n y los g r a n d e s vasos e n las d i f e r e n t e s
angulaciones d e la fluoroscopía (figura 1), se d e -
duce la posición del catéter dentro d e cada cavi-
dad y vaso (figura 2 ) .
Diferencias en e l trayecto normal del catéter
permiten inferir diferentes cardiopatías congénitas
(figura 3). La sospecha de una alteración cardio-
vascular por el trayecto anormal del catéter debe
ser confirmado por métodos con mayor especifi-
cidad diagnóstica (oximetría y/o angiografía). Por
otro lado, el no demostrar una comunicación anor-
mal por el trayecto del catéter, no descarta la pre-
sencia de dicha anomalía; es la sospecha clínica
de esta última la que orientará al intervencionista
a buscar intencionadamente la misma, lo que dis-
minuirá las posibilidades de que pase inadvertida.
Registro de presiones
Los cambios de presión que ocurren e n la cavidad
cardiaca o vaso en que se encuentra un catéter
son transmitidos a través del agujero o agujeros
distales del catéter a la columna de solución salina
q u e c o n t i e n e y son r e c i b i d o s e n el e x t r e m o F I G U R A 1 Proyección de las cavidades cardiacas y
p r o x i m a l d e l c a t é t e r a l q u e se c o n e c t a u n grandes vasos en proyecciones anteroposterior (AP),
transductor que transforma la señal de presión e n lateral (L) y oblicuas derecha (OAD) e izquierda
señal eléctrica, la cual es a su vez amplificada y (OAI). VCS, vena cava superior. Ao, aorta. AP, arte-
ria pulmonar. A l , aurícula izquierda. A D , aurícula
convertida a registro gráfico para su estudio. Para
derecha. V D , ventrículo derecho. VI, ventrículo iz-
que los registros d e presión sean confiables y ade- quierdo. VCI, vena cava inferior
260
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
261
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 3 Trayectorias anormales del catéter. A-A": C I A en proyecciones AP (A) y O I A (A', A " ) ; se muestra
el paso del catéter de VCI a A D y por la CIA (óvalo) a la vena pulmonar superior izquierda, lo que se
comprueba por angiografía en A " . B-ET: Persistencia de vena cava superior izquierda; el catéter pasa de
VCI a A D , de ahí al seno coronario y asciende por la vena cava superior izquierda, lo que se comprueba
por angiografía en B'. C: PCA; se observa la imagen típica del catéter que avanza de la VCI a la A D , V D , A P
y de ahí pasa por el conducto arterioso (óvalo y flecha) para descender por la aorta
90-140/5-12
Z N. \
- s AP^_
17-35/4-12
V /AI \ m e d i a 5-12
m e d i a 0-5 a=4-16,v=6-21
AD
a = l - 5 , v=2-7
FIGURA 4 Presiones
17-35/4-12 90-140/5-12 normales en el cora-
zón y grandes vasos.
Presiones Normales
en el Corazón y Gran-
des Vasos. Se señalan
las cifras en m m H g
para las presiones sistólica (PS) y diastólica ( P D ) , así como la presión media (PM) e n las aurículas. La
presión media de la arteria pulmonar y aórtica se puede calcular con la fórmula P M = PDx2 + PS/3
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
FIGURA 5 Morfología e interrel.it ion normal de las presiones en el corazón y grandes vasos. Los cambios
de presión guardan relación directa con los eventos del cido cardíaco, los que se señalan en la parte
superior para el corazón izquierdo (CM, cierre mitral; AAo, apertura aórtica; CAo, cierre aórtico; AM,
apertura mitral; entre 1 y 2, fase de contracción isovolumétrica; entre 2 y 3, período expulsivo; entre 3 y 4,
fase de relajación isovolumétrica; entre 4 y 1, período de llenado). Se muestra la nomenclatura de las
curvas de presión auricular (ondas "a", V , V , descensos V y "y", y el punto "z")
pío, en el registro auricular el hallazgo de la fusión inicio de la protodiástole que alcanza meseta al ini-
de la onda c con la v en donde el vértice de esta cio de la mesodiástole es indicativo de restricción al
última está adelantado (onda C-V), sugiere insufi- llenado del ventrículo (figura 8 ) . En aorta o arteria
ciencia de válvula A-V sobretodo si la onda c-v es p u l m o n a r , u n a s c e n s o l e n t o d e la p r e s i ó n
grande (figura 6). También e n el registro auricular, protosistólica es sugestivo de estenosis d e válvula
una onda V grande c o n tiempo normal en la ins- sigmoidea, y un descenso continuo a lo largo de la
cripción d e su vértice y precedida de descenso " X " diástole a valores inferiores al normal sugieren in-
conservado es dato que sugiere restricción al lle- suficiencia de válvula sigmoidea, sobre todo si la
nado d e la aurícula, mientras que un descenso " Y " incisura está poco marcada (figura 9 ) .
lento es una característica de la estenosis de válvu- Debe destacarse que la angiografía es mejor
la A-V figura 7). En el registro ventricular, un as- método que el registro de presión para evaluar la
censo de presión d e inscripción precoz y rápida al magnitud de una insuficiencia valvular.
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CARDIOLOGÍA
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FIGURA 6 Insuficiencia mitral pura, grave. Registro simultáneo de la pulmonar en cuña (presión
capilar pulmonar, PCP) y del ventrículo izquierdo (VI). Los datos de insuficiencia mitral grave
son el ascenso de la PCP durante la sístole ventricular lo que resulta en una onda " c - / y la
elevada presión del vértice de la onda V ("onda V gigante", de 36 mmHg). Son indicativos de la
ausencia de estenosis mitral concomitante el descenso "y" rápido, la ausencia de gradiente
diastólico entre PCP y VI, y el rápido ascenso de la presión ¡ntraventricuiar durante la protodiástole
(compárese con la figura 7)
F I G U R A 8 Restricción al llenado ventricular. La flecha señala la presión diastólica del ventrículo derecho
en una paciente con hipertensión arterial pulmonar primaria severa. Obsérvese el ascenso brusco seguido
de meseta mesodiastólica con PDFVD de 27 m m H g . Esta morfología podría sugerir constricción pericárdi-
ca, diagnóstico que se descarta por e l registro simultaneo de la presión en el VI que es de morfología y
valor normal, y en consecuencia sin similitud ("ecualización") con el registro diastólico del V D
F I G U R A 9 Doble lesión
aórtica, ambas severas.
Registro simultáneo de
p r e s i o n e s e n VI y A o .
Son datos de estenosis
severa la diferencia de
las presiones sistólicas
del VI y A o , los que de-
muestran un gradiente
de —90mmHg (esteno-
sis severa); además, la
pendiente del ascenso
sistólico de Ao es lenta
comparada con el as-
censo en VI. Los datos
indirectos de insuficien-
cia aórtica son la incisu-
ra del cierre sigmoideo
no definible y sobreto-
do el descenso continuo
de la presión aórtica
hasta 40 m m H g o me-
nos en algunos latidos
266
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
FIGURA 10 Coartación de
aorta. El catéter se avanzó
por acceso humeral hacia la
aorta descendente en donde
la p r e s i ó n es de 1 0 0 / 8 0
mmHg lo que da una reduci-
da presión del pulso ( 2 0
mmHg). Al retirar el catéter
y registrar la p r e s i ó n
proximal a la coartación, la
presión es de 180/80 mmHg
y la del pulso es de
lOOmmHg. La similitud de
las cifras diastólicas puede
ser porque la obstrucción no
es crítica o bien porque exis-
te gran desarrollo de colate-
rales, diferencia que solo se
puede establecer por angio-
grafía
administración de catecolaminas para aumen- detección de defectos anatómicos que provoquen cor-
tar la frecuencia cardiaca y con ello evaluar tocircuito sanguíneo entre corazón derecho e iz-
el comportamiento de un gradiente transmi- quierdo y para el cálculo del gasto cardiaco por el
tral, la inducción de bradicardia con betablo- método de Fick. Cada gramo de hemoglobina (Hb)
queador cuando la presencia de taquicardia cuando se satura, fija 1.39 ce de O , (West). C o m o
sinusal basal impide registros adecuados. Con ejemplo, con 15 g de H b por 100 ce de sangre, la
vasodilatadores o con inotrópicos se puede capacidad acarreadora de oxígeno (capacidad de
magnificar o desenmascarar la obstrucción
oxígeno) es de 20.85 ce O , por 100 ce de sangre (15
dinámica de la miocardiopatía hipertrófica.
x 1.39 = 20.85). Como habitualmente se expresa
También, con vasodilatadores u oxígeno al
por litro de sangre, la capacidad de oxígeno para el
100 % se estudia la respuesta de la presión y
ejemplo dado es de 208.5 ce. En vista de que la he-
de las resistencias vasculares e n pacientes con
moglobina normalmente no se encuentra totalmen-
hipertensión pulmonar, información de gran
importancia para definir la utilidad o riesgo te saturada (recuérdese que esto depende fundamen-
con el empleo de vasodilatadores o del cie- talmente de p 0 y el pH), para conocer el contenido
2
4»z
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 11 Manio-
bra de Valsalva, Res-
puesta Normal. A ,
paciente con este-
nosis aórtica: al ins-
p i r a r se p r o d u c e
una caída breve de
la presión e n VI y
Ao (óvalo). A l espi-
rar contra la glotis
c e r r a d a , el incre-
mento de presión
intratorácica se
transmite a VI y A o ,
en los que se regis-
tra un aumento bre-
ve de la p r e s i ó n
sistólica, superior a
la control (fase 1 ) .
Mientras persiste el
esfuerzo de pujar, la
presión intratoráci-
ca e l e v a d a impide
el retorno venoso y
disminuye por tan-
to e l volumen-lati-
do, lo que se refleja en un descenso continuo de la presión sistólica aórtica y de la presión del pulso
(fase 2 ) ; obsérvese que durante la fase 1 y 2, la PDFVI se encuentra elevada y corresponde a la presión
intratorácica. El cese brusco del pujido es seguido de una inspiración a m p l i a , reflejada en una caída
adicional breve de la presión (fase 3). A continuación, el retorno venoso que había sido detenido se
restablece en forma de carga que e n el corazón sano se manifiesta con incremento del volumen latido
que se refleja en un aumento transitorio de la presión sistólica que excede el valora control (línea
punteada) así como de un aumento de la presión del pulso (fase 4)
F I G U R A 11 B. Maniobra
de Valsalva, Respuesta en
Insufíclencia Cardíaca.
Durante la fase 3 no exis-
te caída de la presión, (a
pesar de un marcado in-
cremento de la PDFVI en
este paciente que efectuó
un excelente pujido) lo
que da una imagen e n
meseta durante esta fase
de presión intratorácica
aumentada. Durante la
fase 4 tampoco existe un
sobretiro de l a presión
respecto al valor control
(línea punteada). Esto se
debe a que en insuficien-
cia cardíaca el paciente
se encuentra en el extre-
mo derecho de una cur-
va de Starling deprimida
y por tanto su volumen
latido es insensible a la
disminución del retorno
venoso (fase 2) o a su in-
cremento (fase 4)
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
FIGURA 12 Maniobra
de Valsalva en Miocar-
diopatía Hipertrófica
Obstructiva. Con esta
maniobra se exacerba
el gradiente aórtico
(que en el registro de
control es de 16 mmHg
v aumenta durante la
fase 2 a 64 mmHg) y se
modifica la morfología
de la curva de presión
aórtica, apareciendo en
la fase 2 la clásica ima-
gen de "espiga y domo"
(para su mejor aprecia-
ción, los latidos marca-
dos como " a " y "b" se
reproducen amplifica-
dos en el recuadro de
la derecha. La respues-
ta indica una función
ventricular parcialmen-
te conservada ya que la
presión cae durante la
fase 2 pero no a valores por debajo del control (línea punteada) y tiende a haber una sobretiro de la misma
durante la fase 4 aunque esta se ve alterada por extrasístoles ventriculares. Obsérvese además, como una
extrasístole ventricular (flecha continua de la derecha) es seguida de un latido con gradiente exacerbado
(flecha punteada) pero la extrasístole que la sigue (asterisco), por su precocidad no genera contracción
que resulte en cambio de presión
Por último, esta cifra se expresa convencional- gestivos de cortocircuito de corazón izquierdo a
mente como el porcentaje relativo a 1 0 0 0 ce de corazón derecho (figura 13).
sangre, o volúmenes por ciento de oxígeno (vol. % En condiciones normales no existen cambios
que para el ejemplo sería = 1 6 . 7 vol % ) . Este valor significativos en la saturación de O , de las venas
es el indicador más utilizado para la detección de pulmonares al VI o de éste a la aorta y arterias
cortocircuitos. periféricos.
Normalmente, la sangre venosa tiene un con- En los casos de cortocircuito de derecha a iz-
tenido de oxígeno diferente según el territorio del quierda (cortocircuito venoarterial) se detecta un
cual provenga. Por ejemplo, el contenido de O , descenso del contenido de O , e n la cavidad iz-
de las venas renales es mayor que el que se e n - quierda que recibe la sangre por el cortocircuito.
cuentra e n el seno coronario, ya que la extracción Este descenso no se corrige al respirar oxígeno al
renal de 0¡ es bajo e n comparación c o n la extrac- 1 0 0 % . Se debe recordar que una desaturación d e
ción miocárdica de O , que e n condiciones básales oxígeno e n sangre arterial puede tener su origen a
alcanza 85 %. Por esta razón, la sangre que llega a nivel pulmonar, c o m o consecuencia de un corto-
la aurícula derecha puede tener variaciones nor- circuito vascular (fístula arteriovenosa pulmonar) o
males relativamente amplias en su contenido d e parenquimatosa, por desequilibrio de la relación
O , pero conforme se mezcla la sangre al avanzar entre la ventilación y la perfusión pulmonar.
al ventrículo derecho y a la arteria pulmonar, las
variaciones encontradas serán cada vez menores.
EL M É T O D O DE FICK
Se acepta como diferencia máxima normal del
contenido de oxígeno entre la vena cava y la aurí- Si conocemos el contenido venoso de O , por cada
cula derecha, la de dos volúmenes % ; entre aurí- 100 ce de sangre que llega a los pulmones y si co-
cula derecha y ventrículo derecho un volumen %, nocemos el incremento de O , que se obtuvo e n
v entre ventrículo derecho y arteria pulmonar 0.5 esos 100 ce de sangre al pasar por los pulmones
vol. %. Incrementos mayores son fuertemente su- (contenido arterial menos el contenido de O , ) ,
4
CARDIOLOGÍA
CIA
DAVP
S. de Valsalva roto a a.d. F I G U R A 13 Oximetría
en la detección de corto-
Fístula coronaria a a.d.
circuito intracardíaco.
Las flechas curvas seña-
lan el incremento en vo-
lúmenes % y en satura-
ción % de 0 2 (- 0 2 vol
% y - Sat 0 2 %) por arri-
ba del cual las probabi-
lidades de cortocircuito
a r t e r i o v e n o s o son d e l
9 5 % . Se señalan las pa-
tologías probables que
ocasionan el cortocircui-
CIV to de acuerdo con el si-
PCA con IP tio en que se detecta e l
CIA ostium primum aumento de 0 2 ("conta-
Fístula coronaria a v.d. minación arterial")
podemos fácilmente calcular cuántos ce de sangre relación que corresponde al gasto cardiaco dividi-
atravesaron la circulación pulmonar en determi- do entre la superficie corporal o índice cardiaco;
nada unidad de tiempo. A su vez, si conocemos la sus valores normales oscilan entre 2.8 y 4 . 2 litros/
cantidad de oxígeno que los pulmones extrajeron min/m .2
consumo de 0 (ml/min)x100
2
C o n la inyección d e soluciones opacas a los ra-
cont. arterial de 0 (ml/IOOcc) - cont. venoso
2
yos X (medio de contraste radiológico) se obtie-
de 0 (ml/IOOcc)
2 nen imágenes bidimensionales " e n m o l d e " d e l
aparato cardiovascular. Las imágenes se graban
Normalmente, el gasto del ventrículo derecho
e n v í d e o integrado d e alta definición para po-
es igual al gasto del ventrículo izquierdo, por lo
der revisar las imágenes e n la sala de cateteris-
que el flujo pulmonar calculado por el método d e
m o , facilidad que es requisito indispensable para
Fick p u e d e u t i l i z a r s e p a r a e x p r e s a r e l gasto
procedimientos terapéuticos.
sistémico. Para efectuar este cálculo, la muestra
venosa debe ser de la arteria pulmonar por ser ésta La estructura que se desea estudiar determina
la mejor mezclada. La muestra arterial ideal es d e el sitio en donde se inyecta el medio de contraste,
venas pulmonares para evitar la contaminación de el volumen del mismo y la proyección o proyec-
las venas bronquiales y de Tebesio; sin embargo, ciones radiológicas e n que se debe filmar. En la
esta contaminación es mínima por lo que la mues- figura 1 se esquematiza la posición angiográfica
tra d e cualquier arteria periférica es aceptable siem- normal d e las diferentes estructuras e n las proyec-
pre y cuando no exista cortocircuito venoarterial. ciones de empleo mas frecuente.
El consumo de oxigeno se calcula restando el O , La extensa información que puede brindar la
inspirado (en aire ambiente o con O , al 100 %) angiografía cardiovascular se puede separar, de
menos el O , espirado que se obtiene del análisis acuerdo a sus aplicaciones, en las siguientes:
del aire espirado e n determinada unidad de tiem-
po que es recolectado e n una bolsa especial (bolsa 1. Definición del situs atrial, posición de los
de Douglas). ventrículos y de los grandes vasos {figura
1 4 ) . En el estudio de las cardiopatías congé-
C o m o cifra aislada, e l gasto cardiaco no tiene nitas, es importante poder reconocer una
un valor que pueda considerarse normal o anor- c a v i d a d c a r d i a c a por sus características
mal ya que es directamente proporcional a la s u - angiográficas, independientemente de que
perficie corporal. Por ello, d e b e expresarse esta esto sea posible por su localización espacial
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
Izquierda. Las figuras de la izquierda y centrales corresponden a proyección A P (las izquierdas en diástole
auricular, las centrales en sístole auricular); las figuras de la derecha son en proyección OIA en diástole
auricular. Los recuadros en A y B son amplificaciones de la imagen sobre la que se superponen para mejor
apreciación de las características que distinguen a una orejuela de otra y ayudan para definir el situs en las
cardiopatías congénitas complejas: la derecha es de boca ancha, bordes lisos y vértice romo; la izquierda
es de boca angosta, bordes irregulares y con forma triangular de vértice agudo
FIGURA 15 Tetralo-
gía de Fallot. Angio-
grafía en proyec-
ción frontal con
disparo en ventrícu-
lo derecho (VD). El
llenado de la aorta
(Ao) es p r e d o m i -
nante como resulta-
do del diámetro in-
crementado del
anillo aórtico que
c a b a l g a s o b r e el
septum ¡nterventri-
cular, estando así en
comunicación con
la cavidad ventricu-
lar d e r e c h a . O t r a
característica que
se demuestra es el
infundíbulo estre-
cho del V D (Cortesía
del Dr. Fause Altié)
CARDIOLOGÍA
FIGURA 16 Levofase de Angiografía Arterial. Recuadro: se observa el catéter con trayecto VCI-AD-VCS-
vena innominada y de ahí a un vaso que corresponde al recolector de drenaje anómalo venoso pulmonar
total. A y B corresponden a la fase venosa de la inyección de contraste en ía rama derecha de la arteria
pulmonar (A) y en la rama izquierda (B), que confirman el drenaje venoso total en un solo colector como
identificado en el recuadro. Las líneas punteadas en A señalan la localización de desembocadura del
drenaje venoso del pulmón derecho de acuerdo a lo observado en B
FIGURA 17 Angiografía en Cortocircuitos. Las flechas señalan los sitios del cortocircuito. A , CIA (proyec-
ción OIA-craneal; el catéter pasa de VCI a A D y de ahí por la CIA a A l y hasta la vena pulmonar superior
derecha en donde se hace la inyección). B, PCA (proyección lateral).C, CIV muscular (OIA-craneal). D, CIV
membranosa (OIA craneal; el catéter se avanzó de VCI a A D y por una CIA se pasó a A D y de ahí al VI en
donde se hace la inyección)
276
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
sión media de la pulmonar (PAP) y al circuito vascular tituir el denominador por el flujo correspondiente al
pulmonar en que P = P m A P - P C P (figura 26). Bajo circuito cuya resistencia se desea calcular:
la suposición de que no existen cortocircuitos, el
PmAo - PAD
flujo para los tres circuitos será igual al gasto cardiaco Rs= . " • * 8 0
C á l c u l o d e cortocircuito (figura 2 7 ) .
Cuando se revisó el principio de Fick para calcular
e n donde Rs = resistencias sistémicas, Rpt = el flujo pulmonar se dijo que en condiciones nor-
resistencias pulmonares totales y Rvp = resistencia males éste es igual al gasto sistémico. Cuando exis-
vascular pulmonar; 80 corresponde al factor de te un cortocircuito, el flujo pulmonar es mayor que
corrección para la conversión de m m H g en dinas, el sistémico si el cortocircuito es d e izquierda a
seg, c m " .
5
derecha, o menor si el cortocircuito es de derecha
Cuando existe un cortocircuito entre circulación a izquierda. Por ello, para calcular el gasto sistémico
derecha e izquierda el flujo no es igual para lo» tres e n presencia de cortocircuito AV, se debe obtener
circuitos mencionados; por esta razón, en presen- la diferencia arteriovenosa c o n muestra venosa
cia de un cortocircuito o su sospecha, se debe subs- proximal a las cavidades derechas para evitar que
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
FIGURA 21 Insuficiencia mitral Moderada (A, diástole; A', sístole). Severa (B, diástole; B', sístole). En A' se
observa como se delinea el límite inferior de la Al (flechas), con densidad inferior a la del VI. En B' se ve
con eran nitidez los límites de la A l (flechas negras); como datos de insuficiencia mitral severa se encuen-
t r a n l a mayor densidad de la Al que del VI y de Ao (las flechas abiertas señalan el borde posterior de la
aorta) y la visualización de venas pulmonares (flecha blanca). Debe destacarse que la mejor evaluación de
una insuficiencia valvular es en cine
4 279
CARDIOLOGÍA
FIGURA 22 Insuficiencia aórtica Leve (A), Severa (B). En A, el chorro regurgitante del contraste solo opacifica
la región basal del VI (flechas negras; la línea punteada marca los límites de la cavidad del VI) aun cuando ya
existe completa visualización de las arterias coronarias y la densidad del mismo en VI es inferior al de la
aorta. En B, el VI se llena en su totalidad, con una densidad similar a la de la aorta; las flechas muestran el
margen de la columna regurgitante que abarca el diámetro de la válvula aórtica en su totalidad
I N S T I T U T O NACIONAL D E C A R D I O L O G I A - T E R R A
Lefl Ventricular Wall Mollon
Ti- •
K
FIGURA 24 Alteración Seg-
mentaria de Contractilidad
del VI. Las flechas demarcan
los límites de pared disciné-
tica. Los imagen irregular de
estos segmentos ("waffling"),
es característica del tejido
infartado
í 'T
Q
Pi - P :
R
Q =
F I G U R A 25 Las Relaciones entre Flujo (QJ, Resistencias (R) y Presión (P) en un Sistema Tubular. A menor
radio, hay aumento de R y disminución de Q . A mayor P al inicio del sistema (P,) o menor P al final del
mismo ( P , ) , la presión de perfusión (P,-P¡) aumenta y en consecuencia el flujo aumenta. En la circulación,
R es determinada primordialmente por los vasos de resistencia precapilar
281
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 27 Esquema que señala los sitios en que se toman las muestras de sangre para calcular los gastos
de diferentes sistemas en el corazón normal (A) y en presencia de cortocircuito arteriovenoso (B, CyD). Se
señalan los cortocircuitos más frecuentes (CIA, CIV, PCA) para demostrar gráficamente que para el gasto
sistémico (B) y el pulmonar efectivo (C) en presencia de cortocircuito arteriovenoso, debe tomarse la
muestra venosa de la vena cava superior (VCS) ya que de esta forma el cálculo no se verá alterado por la
contaminación arterial en aurícula, ventrículo o arteria pulmonar. En el caso del gasto pulmonar total ( D ) ,
dado que interesa conocer todo el flujo que atraviesa la circulación pulmonar, la muestra venosa se toma
después de los sitios en que encuentran los defectos y no antes como se hizo para conocer e l gasto
pulmonar efectivo. Lo anterior se refleja en el cálculo de los gastos por el método de Fick. Existen otros
métodos para calcular el gasto como son por la técnica de dilución de colorante que sigue el mismo
principio, o bien, por medio de computación de la curva que en la arteria pulmonar registra un sensor de
cambios de temperatura al inyectar solución fría en la aurícula derecha
6 8 5 8 4 6
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
puede ser significativa. 2) la información que pro- do ¡ntravascular. Su ventaja principal consiste e n
porciona corresponde a una imagen bidimensio- proporcionar información milimétrica sobre la
nal del lumen vascular, sin aportar información di- pared del vaso.
recta acerca de la pared vascular; El primer problema Actualmente se emplea para la evaluación de
disminuye cuando la interpretación la realiza un arterias coronarias o injertos aortocoronarios de
intervencionista experimentado y cuando se em- safena, estructuras sobre las que aporta una mejor
plean los sistemas computarizados para cuantificar definición sobre el diámetro vascular de referen-
las dimensiones angiográficas; el segundo proble- cia (el segmento angiográficamente sano, proximal
ma es intrínseco al método y no se puede ir mas allá o distal a una lesión), el tamaño de la placa y su
d e hacer inferencias indirectas sobre la pared constitución, las características de remodelación
vascular (e.g. datos sugestivos de ulceración, aneu- vascular, la extensión y profundidad de la calcifi-
risma, calcificación). cación, y las características agudas y tardías del vaso
A finales de los ' 8 0 se desarrolló un catéter después de un procedimiento intervencionista.
especial c o n transductor de ultrasonido e n su ex- Se emplea principalmente como instrumento
tremo distal para obtener imágenes d e ultrasoni- de investigación para evaluar la eficacia de nuevos
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UNAM
CARDIOLOGÍA
Angioscopía
1. APERTURA DE ESTRUCTURAS ANORMALMEN-
Emplea un catéter con diminutos lentes y es|>ejos
TE ESTRECHAS O CERRADAS
para obtener imágenes e n vídeo, similar al concep-
to empleado para la endoscopía gastrointestinal. Es El instrumento más utilizada para la dilatación de
un procedimiento que no ha tenido aplicación clí- obstrucciones es el catéter-balón. Este tiene en su
nica extendida ya que para poder visualizar la pa- extremo distal un globo que se infla una vez que
red luminal del vaso se requiere del lavado con so- se ha colocado en el sitio q u e se desea dilatar. U n
lución, seguido de la oclusión d e l vaso. C o m o gran número de padecimientos cardiovasculares
instrumento de investigación ha sido valioso en el son tratados con esta técnica: la estrechez de la
estudio d e los síndromes coronarios en donde la vena cava inferior e n la enfermedad do Budd-
incidencia de trombo intraluminal se encontró que Chiari, la estenosis de la válvula tricúspide afecta-
es mayor que la reconocida por angiografía (80 % vs d a por secuelas de fiebre reumática, la estenosis
20 %) y e n los cuales se ha reconocido que la placa valvular pulmonar, la estenosis de arterias pulmo-
ateroesclerosa tiene características angioscópicas que nares, la estenosis de venas pulmonares, la esteno-
la distinguen de la placa e n la angina estable. sis mitral de origen reumático (figura 29), la este-
F I G U R A 29 Comisuroto-
mía Mitral Percutánea. Pre-
via punción transeptal (cír-
culo punteado), se pasa el
catéter balón de Inoue a la
A l y de ahí al VI. Se efectúa
una isuflación parcial del
balón con lo que solo se
distiende en su segmento
distal; en este momento se
fracciona el balón con lo
que queda anclado en e l
orificio mitral estrecho, si-
tio en donde se efectúa la
insuflación completa del
balón. La imagen muestra
el balón efectuando la di-
latación; se señala con el
óvalo blanco el perímetro
del anillo mitral (caso reali-
zado por e l D r . E. Ban
Hayashi)
284 | J .
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
nosis valvular aórtica (congénita, r e u m á t i c a o mente alta (80 % a un año) y cuando se emplea es en
calcífico-degenerativa), la estenosis aórtica supra- el paciente crítico como tratamiento " p u e n t e " pre-
valvular, la estrechez de la coartación d e la aorta vio a cirugía de recambio valvular. La dilatación de
(figura 3 0 ) y la estenosis coronaria de etiología estenosis múltiples de ramas pulmonares se asocia a
arteroesclerosa. Ocasionalmente, en algunos recién un éxito casi siempre parcial y requiere hacerse más
nacidos c o n cardiopatía congénita cianógena se de un procedimiento, sin embargo, es una enferme-
requiere dilatar el conducto arterioso para mejo- dad para la cual no había tratamiento y cuyo pronós-
rar el flujo pulmonar e igualmente se puede dilatar tico ha mejorado gracias a esta técnica.
las anastomosis creadas c o n este propósito y que El papel del tratamiento intervencionista e n los
han sufrido estenosis; e n pacientes con transposi- demás padecimientos menos frecuentes se dis-
ción de los grandes vasos se amplía el foramen ovale cute en los capítulos correspondientes. El tema
con balón (técnica de Rashkind) o c o n navaja. d e la angioplastia coronaria conviene tratarlo aquí
De los padecimientos mencionados cabe des- mas ampliamente.
tacar que la dilatación c o n catéter es el tratamien-
to de elección para la estenosis valvular pulmonar Angioplastia coronaria transluminal percuta-
(Figura 3 1 ) como para la estenosis mitral, pero no nea (ACTP)
así para la estenosis valvular aórtica calcifico- La A C T P se ha convertido e n la actualidad e n el
degenerativa ya que la reestenosis es inadmisible- procedimiento terapéutico percutáneo d e mayor
FIGURA 30-A Intervención Percutánea de Coartación de la Aorta. A, angiografía control que muestra el
sitio de la obstrucción (proyección lateral izquierda); obsérvese que el diámetro es mayor en la Ao descen-
dente debido a hipoplasia leve de la aorta proximal a la coartación. B, sin predilatar la obstrucción y
guiado por inyección moderada de contraste inmediatamente abajo de la coartación, se posiciona un
stent autoexpandible de diseño en malla (Wallstent®), en donde se libera. C , con balón se efectúa un
mayor expansión del stent. D, resultado final: el stent se colocó para obtener un diámetro similar al
segmento proximal a la coartación y no al distal a la misma para evitar el riesgo de disecar la aorta
proximal (procedimiento realizado por el Dr. |.A. García Montes)
CARDIOLOGÍA
fe
FIGURA 30-B Coartación Aórtica Grave. A, la inyección simultanea con dos catéteres situados en cada
extremo de la obstrucción demuestra su oclusión total. B, se atraviesa la obstrucción con guía rígida introdu-
cido por vía humeral y dirigida en sentido anterógrado; sobre ésta se avanza un catéter multipropósito a la
aorta descendente, en donde se cambia la guía con que se cruzó la obstrucción por una guia en "]". C, la
guía en "J" se avanza a la aorta abdominal en donde es lazada por un catéter especial introducido por la
arteria femoral y se extrae hacia el exterior para recibir el catéter angiográfico (D) y el sistema del stent (E)
para proceder como en la figura 30. F, resultado final. (Caso realizado por el Dr. |.A.García Montes)
286
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
FIGURA 31 Atresia Pulmonar. A , inyección simultánea de contraste en V D y en Ao: existe ausencia del
paso de contraste de V D a AP (flecha), con regurgitación tricuspídea y llenado de AP por el conducto
arterioso. A', comprobación de la atresia pulmonar en proyección lateral. B, demostración del conducto
arterioso; se ha cruzado de VD a AP con guía rígida empleada para ACTP. B', dilalación de la válvula
pulmonar. C y C , ventriculografía derecha en proyecciones lateral y AP demostrando la válvula pulmonar;
en C se observa que al eliminarse la obstrucción al tracto de salida del V D la insuficiencia tricuspídea se
ha corregido. (Caso realizado por el Dr. (.A.García Montes)
287
CARDIOLOGÍA
FIGURA 32 Angio-
plastia coronaria
transluminal percu-
lánea (ACTP). A, le-
sión crítica ( > 85 %)
de la descendente
anterior proximal.
B, por un "catéter
guía" (muy similar
al habitual para an-
giografía) se intro-
duce una guía intra-
coronaria para cruzar la obstrucción; esta guía flexible y suave sirve como riel para que sobre ella se
deslice el catéter balón que se infla una vez colocado en el sitio de la lesión. C , resultado después de la
dilatación con balón, una vez dilatada la lesión, se retira el catéter balón y se introduce el sistema en el cual
va montado el stent (la mayor de las veces sobre un balón). D, resultado después de la colocación del stent
FIGURA 33 Sfenf A,
ejemplo de stent de
diseño en unidades
de anillo, fabricado
mediante corte con
láser de tubo de
acero inoxidable
(Multi-Link®); la
parte superior
muestra como vie-
ne montado de fábrica sobre catéter balón y en la inferior el stent se ha expandido por la insuflación del
balón. B, ejemplo de stent autoexpandible (de anillos de nitinol, Radius ®), al retraer una malla que
contiene al stent, éste se va liberando, como se demuestra de arriba a abajo.C, stent de diseño especial, en
este caso para bifurcaciones, ofreciendo mayor espacio entre anillos para no encarcelar alguna o las 2
ramas de la bifurcación (Bifurcation (oStent ®). D, Corte histológico de coronaria cerdo al que se efectuó
colocación experimental de stent, observándose el adosamiento uniforme de los postes del stent al vaso
288
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
su efecto directo sobre la placa, como la aterectomía dro agudo, justificándose su aplicación mas tempra-
direccional (extracción), rota-ablación (pulveriza- na cuando la angina es refractaria al tratamiento
ción), láser (evaporación). El empleo d e los dos pri- médico. En centros especializados y con experien-
meros h a disminuido a ~ 5 % d e los casos d e cia amplia, se puede realizar la A C T P mas tempra-
angioplastia, mientras que el láser prácticamente se no, siempre con el empleo de inhibidores del re-
ha abandonado para uso en coronarias. ceptor plaquetario de la C P llb/IIA y con el recurso
disponible de técnicas de extracción de trombo y
Efectos de la ACTP exitosa de protección distal contra embolismo (filtros o
globo+aspiración). '
Estos s o n :
En el infarto agudo del miocardio, la A C T P que
a ) Aumento d e la luz del vaso.
se efectúa c o m o primera intervención antes que la
b) Incremento del flujo coronario en los casos fibrinolisis {angioplastia primaria) es el tratamiento
en que se encontraba reducido. de elección (figura 3 4 ) ya q u e comparada con
manejo médico se asocia a reducción de mortali-
c) Normalización de la reserva vasodilatadora dad ( < 3 % vs 5-6 %) así c o m o de recurrencia de
coronaria. infarto. Esta aseveración es válida siempre y cuan-
d ) Mejoría de la contractilidad segmentaria do la realización de A C T P primaria no implique
cuando ésta se encontraba reducida. un retraso mayor de 90 minutos y se cuente c o n el
óptimo de recursos de personal capacitado, equi-
e) Normalización d e l comportamiento de la po radiológico e instrumental de angioplastia.
fracción de expulsión con el ejercicio. Cuando no se reúnan estas condiciones ideales, el
tratamiento deberá ser c o n trombolisis farmacoló-
f) Disminución o eliminación d e la angina.
gica si no existe contraindicación para la misma.
g) Aumento del tiempo de ejercicio en la prue-
El choque cardiogénico asociado a infarto agu-
ba de esfuerzo y mejoría en el comportamien-
do del miocardio se asociaba, hasta hace unos cinco
to electrocardiográfico durante la misma.
años, a una mortalidad muy alta (mayor d e 85 % ) ;
h ) Disminución del riesgo de infarto y de muer- la A C T P ha mejorado e n forma inesperada este
te en el subgrupo de pacientes e n quienes sombrío pronóstico con mortalidad promedio de
el riesgo estimado para estos eventos es alto. 6 0 % e incluso hasta 4 0 % si se lleva a cabo de
manera expedita e n cuanto se concluye que el es-
Tasas de éxito/complicación de ACTP tado de c h o q u e no obedece a dolor, arritmias,
hipovolemia o a ruptura ventricular o de músculo
En angina estable el éxito actual es > 9 5 % c o n in-
cidencia de complicaciones mayores (infarto, muer- papilar (e.g. sin pérdida de tiempo valioso propi-
te) < 1 %. La cifra anterior es d e series e n las cuales ciado por la bien intencionada actitud de primero
el empleo de stent es > 80 % y denota q u e incluso estabilizar hemodinámicamente al paciente).
lesiones complejas que hace una década prede-
cían un éxito reducido (como la localización ostial, Reestenosis coronaria
en angulación o e n bifurcaciones y las lesiones lar- La gran limitante de la A C T P había sido, hasta re-
gas), ya han sido "dominadas". cientemente, la reestenosis coronaria. Este es un
En la angina inestable el éxito inicial y las c o m - fenómeno autolimitado que ocurre en el 30-40 %
plicaciones de la A C T P son actualmente similares de los casos dentro de los 6 meses después de la
a la angina estable si se efectúa una vez que ha A C T P que se realiza solo c o n balón.
sido estabilizado e l cuadro clínico. En angina re- Los mecanismos productores de reestenosis son
fractaria, aunque el éxito angiográfico sigue sien- a) retracción elástica, b) proceso inflamatorio-
d o alto y favorable comparado con el paciente que proliferativo y c) remodelación negativa. El prime-
ha sido estabilizado (90-95 %), el éxito clínico es ro es el fenómeno por el cual >e pierde parte de la
mas bajo (85 %), c o n aumento de las complicacio- ganancia obtenida por la dilatación como conse-
nes mayores (8 %) ya que el substrato anatómico cuencia de la elasticidad vascular que tiende a re-
es el de una placa complicada con fractura, ulce- gresar al diámetro inicial e n el momento que se
ración o trombo y que por tanto tiene potencial desinfla el balón; ocurre en su mayor parte dentro
embolígeno aumentado. Por esta razón se ha su- de los primeros 7-10 minutos; afortunadamente,
gerido que la A C T P e n angina inestable está indi- en el 85 % de los pacientes la pérdida es menor
cada después de 3-5 días de estabilizado el cua- del 10 % del diámetro obtenido c o n el balón infla-
4
CARDIOLOGÍA
FIGURA 34 Angioplastia primaria. A) angiografía de paciente que llegó con infarto anterior extenso
precedido por 3 días de angina de reposo. La descendente anterior (DA) tiene una placa crítica (flecha
gruesa) seguida de defectos de contraste debido a trombos que apenas permiten un llenado tenue de
una rama diagonal (flecha delgada), cuando y a se ha opacificado en su totalidad la circunfleja. B)
debido a la significativa carga de trombo, se efectuó primero extracción de este con catéter X-Sizer, su
extremo distal señalado por la flecha. C) resultado después de la extracción de trombo. D) resultado
final después de la implantación de stent, observándose llenado completo de una gran DA simultaneo
con la opacificación de la circunfleja (flujo TIMI grado 3) y adecuada mancha capilar (perfusión miocár-
dica grado 2)
do. El segundo es un mecanismo complejo mediado lesiones en bifurcación, en ostium, en vasos peque-
por la iniciación del fenómeno inflamatorio activa- ños ( < 2 . 5 m m de diámetro) y e n injerto venoso
do por el trauma sobre la pared vascular y amplifica- aortocoronario; lesiones que correspondían a una
do por la liberación d e factores vasculares prove- oclusión total crónica; lesiones residuales post-ACTP
nientes del trombo que se puede formar y de la mayores de 30 %; diabetes mellitus.
activación plaquetaria; el proceso es seguido por la Es extraordinariamente raro que el paciente que
diferenciación, proliferación y migración de células no se complicó con reestenosis coronaria dentro
de músculo liso y la producción de neomatriz que de los seis meses después de la A C T P la vaya a
protruye hacia el lumen; este fenómeno inicia a los desarrollar después (la reaparición de angina en
minutos de infligido el trauma mecánico de la estos casos suele ser por una lesión e n otro seg-
angioplastia y se extingue hacia el cuarto mes. En el mento o vaso). En los injertos venosos aortocoro-
tercer mecanismo participa la adventicia y su com- narios el proceso de reestenosis se puede exten-
prensión se puede simplificar al describirlo c o m o der hasta los 8-10 meses.
una cicatrización constrictiva; éste proceso parece
Ningún tratamiento farmacológico, solo o com-
iniciarse desde el primer mes después d e la A C T P y
binado, sistémico o local, había logrado reducir de
cesa al sexto mes.
m a n e r a c o n s i s t e n t e y significativa la tasa d e
Se han identificados varios factores predispo- reestenosis (se evaluaron bloqueadores de calcio,
nentes para reestenosis: lesiones largas ( > 1 0 m m ) , bloqueadores de la E C A , esferoides, anticoagulan-
290
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
tes, antiagregantes, colchicina y diversos agentes La llegada de los stents liberadores de fármaco
antineoplásicos; solo algunos antioxidantes han están modificando la práctica d e la revasculariza-
tenido un efecto benéfico débil). ción coronaria ya que se espera que se podrán tra-
En 1 9 9 4 se logró por primera vez reducir la tasa tar c o n A C T P a mas pacientes que hasta reciente-
de reestenosis a cifras de —22 % con el empleo de mente eran llevados a cirugía como son los diabéticos
stents. Con técnicas de colocación óptima del stent (cuya tasa de reestenosis es —40 %, los que tienen
(empleo d e presión alta para ¡mpactar el dispositi- enfermedad multivascular, en vasos pequeños o con
vo y con resultado final óptimo, definido como una lesiones de alto riesgo en caso de complicarse con
estenosis residual < 10 %) se puede predecir una reestenosis como la lesión del tronco de la coronaria
tasa de reestenosis de - 1 5 % . En 2001 se informó izquierda o la que afecta al llamado vaso único del
que la tasa de reestenosis de lesiones cortas en va- que depende la vida (e.g. la lesión en circunfleja
sos no pequeños se había logrado reducir a 0 % proximal que provee circulación colateral al territo-
c o n el uso de un nuevo stent recubierto de un rio de la descendente anterior y la coronaria dere-
polímero al cual se une un fármaco antiproliferativo cha cuando estos últimos dos vasos están ocluidos)).
para su liberación local controlada (stent liberador
de fármaco). Dos años después se ha confirmado
que con el empleo de estos stents para tratar lesio- 2. CIERRE DE ESTRUCTURAS ANORMALMENTE
nes de mayor complejidad, la tasa de reestenosis es ABIERTAS
de —3 %. Los stents liberadores de fármaco en uso
C o n la colocación d e dispositivos especiales se
clínico liberan rapamicina o paclitaxel y otros com-
puede cerrar la comunicación interauricular (figu-
puestos para liberación local se encuentran bajo
r a 3 5 ) , algunas comunicaciones interventriculares
investigación. C o m o se puede comprender, la efi-
de tipo muscular (figura 3 6 ) y el conducto arterioso
cacia del stent per se, se debe a que bloquea los
persistente (figura 3 7 ) . El éxito agudo y tardío del
fenómenos de retracción elástica y de remodela-
cierre percutáneo de estas malformaciones es bue-
ción negativa, mientras que el stent liberador de fár-
no, y e n los casos de C I A y P C A , prácticamente
maco agrega el beneficio adicional del medicamento
comparable con los resultados quirúrgicos. Des-
que inhibe el proceso inflamatorio proliferativo.
afortunadamente, el alto costo d e los dispositivos ha
limitado su aplicación extendida.
FIGURA 35 Cierre
de CIA. A , con in-
yección en la vena
pulmonar superior
derecha y en pro-
yección OIA-cra-
neal se identifica el
defecto septal (fle-
cha). B, con un ba-
lón "compilante" se
mide el diámetro del
defecto para selec-
cionar el tamaño del
dispositivo oclusor
(Amplatzer®). C, co-
locación del oclusor
autoexpandible
contenido por un
malla y que consta
de tres segmentos
circulares: el distal
de diámetro mayor
ancla en el lado iz-
quierdo del septum interatrial, el central de menor diámetro queda justo en el orificio del defecto por
cerrar y el proximal de diámetro poco menor al distal ancla por e l lado derecho del septum. D, Angiografía
en la A D demuestra e l sellamiento del defecto interatrial
291
CARDIOLOGÍA
FIGURA 36 Cierre percutáneo de CIV. A, la flecha señala el sitio de la CIV membranosa. La técnica de
cierre con Amplatzer® es similar a la descripción de la figura 35. B, resultado final
FIGURA 37 Cierre de PCA. A, la angiografía en el arco aórtico (proyección lateral izquierda) demuestra el
conducto (flecha) con llenado franco de la arteria pulmonar. B, colocación del oclusor Amplatzer® de
diseño específico para PCA, pero con características similares a lo descrito en la figura 35. C, resultado
después de la colocación; la inyección de contraste fue similar a la empleada en A, pero al ya no haber
fuga a la AP existe mayor opacificación déla aorta
HEMODINAMICA CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO
D e menor frecuencia d e presentación pero con trombo o como consecuencia de disección), hemo-
alto índice de éxito mediante el cierre percutáneo rrágico (habitualmente en el sitio de acceso vascular),
son las fístulas arteriovenosas, las que se pueden infeccioso o de tipo reactivo (a pirógenos, hipersen-
ocluir c o n la i m p l a n t a c i ó n de espirales sibilidad a contraste, alergia).
trombogénicos ("coils"), globos desprendibles, Para proporcionar una idea general sobre las
< i . i n i " hiato o c o n stents r e c u b i e r t o s d e una complicaciones del cateterismo, hacemos referen-
membrana tstent-injerto). cia al registro multicéntrico de la experiencia du-
rante 24 meses de 16 laboratorios prestigiados de
Estados Unidos; las complicaciones consideradas
3. C O L O C A C I Ó N D E DISPOSITIVOS DIVERSOS como graves (arritmias ventriculares y bloqueo AV;
Además de los dispositivos descritos e n el párrafo perforación del corazón; complicaciones arteriales
precedente, es muy c o m ú n la colocación de mar- como la trombosis, disecciones arteriales y ruptu-
capasos y con menor frecuencia, d e desfibriladores ras; embolismo, principalmente pulmonar e infec-
automáticos. Estos se tratan en capítulo aparte. ciones) ocurrieron e n el 3.4 % de 1 2 , 3 6 7 estudios.
Es d e hacer notar que e n el grupo de edad menor
a un año, la incidencia d e complicaciones graves
COMPLICACIONES fue de 9 %. Se coincidió e n el hecho conocido de
que el cateterismo izquierdo es de mayor riesgo
Las complicaciones el cateterismo pueden ser de
que el cateterismo derecho.
origen eléctrico (arritmias activas auriculares o ven-
triculares, y trastornos de la c o n d u c c i ó n A - V ) , Es bien reconocido que el factor experiencia es
traumático (perforación de cavidades o vasos, di- la explicación fundamental para las diferencias
sección vascular), embotico (trombo, colesterol o publicadas en la incidencia d e complicaciones del
material extraño, incluyendo aire), oclusivo (por cateterismo cardiaco.
293
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Capítulo 9 Fonomecanocardiograma
"Ningún aparato, por maravilloso que parezca,
vale lo que la idea que lo engendró"
L
o s RUIDOS CARDIACOS, los m o v i m i e n t o s I. FONOCARDIOGRAMA
precordiales, los pulsos arteriales y venosos
El registro d e los ruidos y los soplos cardiacos per-
son consecuencia de la dinámica cardiovas-
mite hacer una semiología correcta de estos fenó-
cular, que están e n estrecha relación con la fisiolo-
menos. Es de especial utilidad e n :
gía cardiaca. El estudio de estos eventos brinda in-
f o r m a c i ó n muy valiosa a c e r c a d e la fisiología a) Ruidos cardiacos
cardiovascular y de sus alteraciones por la enfer-
medad. El procedimiento es incruento y se lleva a 1. Corroboración y diagnóstico diferencial del
cabo mediante un equipo de tres o cuatro canales, lll y IV ruidos fisiológicos.
e n donde se registran simultáneamente un elec-
2. Diagnóstico diferencial entre lll ruido fisio-
trocardiograma y un fonocardiograma (registro de
lógico y chasquido de apertura mitral o chas-
ruidos y/o soplos cardiacos), un pulso vascular (ar-
quido protodiastólico d e Lyan de la pericar-
terial o venoso) y/o un movimiento precordial (iz-
ditis constrictiva (ver capítulos de VALVULOWTÚS
quierdo o derecho). El papel se corre a una veloci-
y PERICARDITIS)
dad de 2 5 , 5 0 , 1 0 0 mm/seg o más; para hacer las
mediciones de las fases del ciclo cardiaco se pre- 3 . Diagnóstico diferencial entre lll ruido y re-
fiere la velocidad de 100 mm/seg. tumbo mitral.
Vale la pena aclarar que tanto para la elabora- 4 . Intensidad de los componentes del II ruido
ción y planeación del estudio como para la inter- (especialmente cuando se sospecha de hi-
pretación del mismo, es necesaria una sólida prepa- pertensión pulmonar).
ración clínica del cardiólogo, razón por la que sólo
5. Corroboración del chasquido protosistólico
puede ser realizado parcialmente por técnicos.
aórtico o pulmonar cuando la auscultación
A c o n t i n u a c i ó n a n a l i z a r e m o s todo el p o t e n -
lo sugiere.
c i a l d e i n f o r m a c i ó n q u e este estudio nos p u e d e
ofrecer por las diversas posibilidades d e c o m - 6. Corroboración del chasquido mesosistólico
b i n a c i ó n d e los registros. o telesistólico del prolapso valvular mitral.
U n a de las mayores aportaciones que brinda
al clínico es la enseñanza de la exploración car- b) Soplos cardiacos
diovascular al médico e n formación; así, el apren-
1. Diagnóstico diferencial entre soplos inocen-
dizaje de la inspección, palpación y auscultación
tes y soplos orgánicos (figura 1).
cardiovascular se hará objetiva mediante un estu-
dio f o n o m e c a n o c a r d i o g r á f i c o , mejor q u e c o n 2. Diagnóstico diferencial entre soplos regurgi-
cualquier otro m e d i o . tantes y expulsivos, frecuentemente difícil:
CARDIOLOGÍA
expulsivo de estenosis aórtica (rudo a la auscultación). Nótese cómo las vibraciones de alta fre-
cuencia (registro central) son de mayor intensidad en el ápex ( C ) , fenómeno que favorece su
i s
confusión con insuficiencia mitral (soplo suave de alta frecuencia en el ápex). La irradiación de las
vibraciones de alta frecuencia a través de la masa miocárdica durante la sístole, permite la auscul-
tación de dicho fenómeno de diferente tonalidad en ambos focos
**a\.
FONOMECANOCARDIOGRAMA
• Soplo de Cole-Cecil. Este fenómeno dias- aórtica; entre más grave la obstrucción ma-
tólico traduce insuficiencia aórtica, pero yor es el Pe relativo (más tiempo tarda la
su epicentro se encuentra e n el á p e x . expulsión sistólica).
Cuando la insuficiencia aórtica es aguda y
el paciente presenta insuficiencia cardiaca, b) Su morfología es útil para el diagnóstico de
no es excepcional que se confunda con estenosis aórtica, ya que la obstrucción valvular
insuficiencia mitral, por el timbre del so- produce la característica morfológica "cresta
plo (de alta frecuencia) y por la taquicardia, de gallo" del ascenso de dicho pulso. Ade-
aun cuando el primero sea diastólico y el más, el periodo expulsivo se prolonga e n re-
segundo sistólico (figura 4 ) . lación c o n la gravedad de la obstrucción
valvular (figura 8). En la estenosis subaórti-
• El retumbo de la estenosis mitral congé- ca "dinámica" la morfología "digitiforme" del
nita (diastólico) frecuentemente se con- pulso es característica (figura 91.
funde con el soplo producido por c o m u -
nicación interventricuiar (sistólico) por la 2. Pulso femoral
taquicardia, en lactantes. En estos casos,
el fonocardiograma registrado con el elec- El registro de un pulso femoral d e aparición muy
trocardiograma simultáneamente pone tardía e n la sístole y ascenso muy lento, cuya cima
en evidencia la localización del soplo e n se inscribe después del II ruido, confirma la sospe-
el ciclo cardiaco (figura 5). c h a de coartación aórtica.
297
CARDIOLOGÍA
¡f|i¡!|i.|| :i¡ji ; T .
~—~
qrs
IV
F I G U R A 7 Tabla de Mamen. Esta tabla correlaciona el periodo expulsivo (Pe) en el eje de las
ordenadas con la frecuencia cardiaca (en el eje de las abscisas). Se traza una línea perpendicular
para localizar el valor Pexp medida en el trazo y otra línea perpendicular en la frecuencia cardiaca;
e l cruce de ambas líneas resulta en el "periodo expulsivo relativo". Se traza otra línea imaginaria,
siguiendo la curva hasta el lado derecho de la tabla que tiene los valores % del Pexp. La línea
oscurecida ofrece los valores normales del Pexp (90 y 110%), de acuerdo con la frecuencia cardiaca
un caso de estenosis aórtica. El periodo expulsivo (e-i) está prolongado (350 mseg para 65 latidos
X ' = 120 % ) , lo cual traduce una obstrucción grave
CARDIOLOGÍA
7[ ;— 1
.
ji
FIGURA 10 Flebograma. A: normal, B: con onda a gigante, C: con onda v gigante y D: latido
venoso sistólico (explicaciones en el texto)
FONOMECANOCARDIOGRAV1A
protosistólico (en relación c o n la contrac- d) Las zonas de discinesia ventricular (por infarto
c i ó n isovolumétrica) c o n c a í d a lenta (fase del miocardio) se manifiestan como levanta-
e x p u l s i v a ) y c a m b i o d e d i r e c c i ó n e n la mientos o gibas telesistólicas e n el A C G (son
telesístole. Este trazado tiende a ser más zonas que no se contraen; por el contrario,
sostenido e n sístole q u e e l precordiograma abomban hacia el precordio) (figura 14).
derecho.
e) La fase de llenado rápido se enlentece e n la es-
La depresión diastólica más prominente
tenosis mitral e n relación con el grado de estre-
se denomina punto O y está e n relación c o n
c h e z y, por el contrario, se hace muy promi-
la apertura mitral; posteriormente un ascen-
nente con la insuficiencia mitral.
so hasta el punto F en relación con la fase
de llenado rápido y, por último, del punto F
hasta la onda A que traduce la fase de llena-
do lento o diástasis (figura 12). V. M A N I O B R A S C L Í N I C A S
1. Respiración
Utilidad del apexcardiograma ( A C O Se registra el fonocardiograma simultáneamente
con los movimientos respiratorios (neumograma)
a) La onda A está en relación con la de la presión
Esta maniobra es útil para conocer:
telediastólica ventricular. C u a n d o se eleva la se-
gunda, crece también la primera. a) El tipo de desdoblamiento del I I ruido (ver
Capítulo de HISTORIA CU'NICA)
b) El índice A del apexcardiograma se calcula m i -
diendo la altura de la onda A e n m m ; se m u l - • Fisiológico
tiplica por 1 0 0 y se divide entre la altura total • I I ruido único
del apexcardiograma en m m ; normalmente la • Paradójico
onda A no debe sobrepasar 1 2 % de la altura • "Fijo"
total del trazo. •
c ) Los soplos de origen tricuspídeo se intensifi- b ) El origen " i z q u i e r d o " o " d e r e c h o " de a l -
can al final d e la inspiración y los de origen gunos soplos
mitral tienen un comportamiento contrario. En los soplos de origen derecho (insuficien-
cia tricupídea, estenosis pulmonar, etc.), el
2. M a n i o b r a de Valsalva soplo se incrementa en los primeros cinco
El fonocardiograma puede registrarse solo o con pul- latidos de la pospresión (irrupción brusca de
so i arotideo, durante las t r e s l a s e s de la maniobra sangre al corazón derecho ¡figura 1 7-A
de Valsalva (inspiración profunda, fase de presión mientras que en el soplo de origen "izquier-
lespiración forzada con la glotis cerrada : "pujar"] y do" (insuficiencia mitral, comunicación ven-
fase de pospresión [apnea posespiración forzada!), tricular — f i g u r a 1 7 - B — estenosis aórtica) la
con ello se puede confirmar: intensificación ocurre después del quinto
latido de la fase de pospresión. Ello se debe
a ) T i p o de d e s d o b l a m i e n t o d e l II r u i d o ( f i - a q u e el volumen de llenado del ventrículo
gura 16) izquierdo ocurre tardíamente después de
haber pasado a través del pulmón.
• Fisiológico, desdoblado en el I latido de
pospresión, inmediata y paulatinamente
sus componentes se van juntando hasta 3. O s t o s t a t i s m o
quedar c o m o un ruido único e n la pos- El registro de fonocardiograma c o n los cambios de
presión tardía (figura 16-A). posición es m u y útil, especialmente e n las siguien-
tes condiciones:
• U n i c o , (tronco c o m ú n , hipertensión pul-
monar grave). Sólo se registra un compo- a ) Diagnóstico diferencial entre soplo regurgi-
nente del II ruido durante toda la manio- tante (insuficiencia mitral) y soplo expulsi-
bra (figura 1 6 - B ) . v o (estenosis aórtica). Al adoptar la posición
303
CARDIOLOGÍA
T>
FIGURA 15 Chasquido protosistó-
lico pulmonar. Registro simultáneo
de electrocardiograma y fonocar-
diograma. Se registra duplicación
del I ruido por un chasquido pro-
' m — i tosistólico (ch) que es seguido de
un soplo expulsivo (SS) que alcan-
ch za y sobrepasa al Ha para terminar
en el llp. Nótese el comportamien-
rW*»—
to del chasquido protosistólico con
la respiración; en inspiración, se
aproxima al I ruido, mientras que
en espiración se separa de él (es-
tenosis pulmonar valvular)
HIHHH
1 2 3 4 5
A: Fisiológico
B: Unico
HHHH
FIGURA 16 Maniobra
de Valsalva. Fase de
pospresión inmediata.
Utilidad de la manio-
bra de Valsalva para el
C: Paradójico
HHH
diagnóstico del tipo de
desdoblamiento del II
D: Fijo
ruido (ver texto)
J j
1
• il — -*LJ\_ ~*V
1 2 '•" 3 ¡ 4
5
- ~ P — f * * >—
" * " 'ti
•0—#»—
B
1 2 3 4 '.5 6
FIGURA 17 Comportamiento de soplos cardiacos con la maniobra de Valsalva. A: Los soplos de origen
derecho (estenosis pulmonar en este caso) aumentan la intensidad en los primeros cinco latidos de la tase
de pospresión. B: El fin de la fase de presión está señalado con una flecha. Se puede ver cómo el soplo
regurgitante de una comunicación interventricuiar se refuerza a partir del quinto latido de la fase de
pospresión (comportamiento izquierdo); asimismo, en esta fase aparece bradicardia como consecuencia
del efecto vagal de esta maniobra
305
CARDIOLOGIA
Clinoslatismo
¡ss
¡ SS
II i chp
'chp
CHASQUIDO PROTOSISTÓLICO AÓRTICO
-jlllllllllllll
1 SS ti SS
ch ch
II
CHASQUIDO TilfSISTOUCO MITRAL
tantemente su periodo expulsivo y con ello fuerzo físico, la taquicardia rompe el efec-
anticipa el cierre pulmonar, que se junta con to d e la vagotonia y se eleva la presión
al aórtico (figura 19). intrauricular izquierda, c o n el consiguiente
acortamiento d e l intervalo l l a - c h m , reve-
lando así la verdadera repercusión d e la es-
4. Prueba de esfuerzo (figura 20)
tenosis mitral (figura 20).
El registro fonocardiográfico después de un esfuer-
z o físico dinámico, puede ser útil, especialmente:
306
FONOMECANOCARDIOCRAMA
r REO
. 1S0780 FEM. 22 AÑOS
—
4-
CONTROL NITRITO C _„
2 N I T R I T O DE AMILO
(A E C G FC (1 x mir F C 105 x m i n i
II
, cen
hm
-4— H
..... _
chm
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^¡^Vr <g>l
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4 307
CARDIOLOGÍA
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-i ' ' • i 1
' '
1 *" T y ¡ j t
FIGURA 21 Registro fonográfico a nivel del borde paraesternal izquierdo antes de la inhala-
ción de nitrito de amilo y después de la misma. Nótese el apagamiento del soplo sistólico
con esta prueba (comunicación interventricuiar chica)
Ji _ 1- ^ "
* '
\
II
. i»
«
R a
CONTROL NITRITO
FIGURA 2 2 Registro fonocardiográfico a nivel del foco Ac aórtico. Nótese el reforzamiento del
soplo sistólico después de la inhalación de nitrito de amilo. (Comunicación interventricuiar con
gran cortocircuito arteriovenoso e hipertensión pulmonar hipercinética)
4_3?9
CARDIOLOGÍA
VIII. D I A G N Ó S T I C O DE CARDIOPATÍAS
CONGÉNITAS
IX. E S T U D I O D E LA F U N C I Ó N V E N T R I C U L A R
1. El e s t u d i o f o n o m e c a n o c a r d i o g r á f i c o estable-
El registro fonomecanocardiográfico ofrece infor-
ce c o n c e r t e z a e l diagnóstico d e los siguien-
m a c i ó n muy confiable acerca del f u n c i o n a m i e n -
tes p a d e c i m i e n t o s :
to d e l ventrículo izquierdo. En la f i g u r a 6 se re-
a) Comunicación interauricular. presenta la medición de los intervalos sistólicos.
La sístole electromecánica (intervalo Q-lla) repre-
b ) C o m u n i c a c i ó n interventricuiar.
senta la duración total de la sístole ventricular, des-
c ) Persistencia d e l conducto arterioso. de q u e se inicia la activación eléctrica (onda Q
del electrocardiograma) hasta que se cierra la v á l -
d ) Estenosis aórtica congénita. vula aórtica (primera vibración amplia del lia). En
e ) Estenosis pulmonar. dicho ciclo están comprendidas dos fases: el p e -
riodo preexpulsivo (PPe), que es e l t i e m p o desde
0 Coartación aórtica. que se inicia la activación eléctrica del corazón
hasta que se abre la válvula aórtica y representa
g) Dilatación idiopática d e la arteria pulmonar.
el t i e m p o d e ascenso de la presión ¡ntraventricu-
h) Aorta bicúspide. iar, y e l momento que se inicia la fase expulsiva y
el periodo expulsivo (Pe), que representa el tiem-
i) Ruptura del seno de Valsalva a cavidades
po que d u r a la expulsión de la sangre del ventrí-
derechas.
culo izquierdo. Este intervalo se mide desde el
j) Doble lesión pulmonar congénita. pie d e ascenso del pulso carotídeo hasta la inci-
sura del mismo. C o m o el periodo expulsivo varía
k ) Comunicación interventricuiar asociada a in- inversamente c o n la frecuencia cardiaca (a m a -
suficiencia aórtica. yor frecuencia menor duración del Pe y vicever-
sa) es necesario corregir su valor absoluto con la
2. Es de a y u d a p a r a o r i e n t a r a l e s t u d i o , sin q u e frecuencia c a r d i a c a , lo cual es posible mediante
dicho p r o c e d i m i e n t o sea suficiente p a r a un la tabla de Mainers (figura 7). Para obtener el
diagnóstico s e g u r o :
«4^
FONOMECANOCARDIOGRAMA
periodo PPe se resta el valor absoluto del Pe al normales (7.5 mmHg) y la elevación de la primera
intervalo Q - l l a : traduce elevación de la segunda. El tamaño de la
onda A del precordiograma derecho informa del
(Q-lla)-Pe=PPe
mismo evento e n dicho ventrículo.
El PPe, a su vez, se divide en dos fases: El estudio d e la función ventricular es d e espe-
cial utilidad e n :
1. Fase p r e s i s t ó l i c a ( P F I ) q u e es el t i e m p o
desde q u e se inicia la activación eléctrica a) El seguimiento de los pacientes c o n cardio-
(onda Q del E C O hasta q u e se cierra la patía isquémica.
válvula mitral (primera vibración amplia del
I ruido), por lo q u e también se le c o n o c e b) La evolución postoperatoria d e pacientes
c o m o "intervalo Q - l r u i d o " . La duración valvulares y coronarios.
d e este intervalo d e p e n d e d e l nivel d e la c) Estudios longitudinales de medicamentos
presión d e la aurícula izquierda: si está au- q u e e j e r c e n e f e c t o s s o b r e la f u n c i ó n
m e n t a d a , más tiempo tarda e n cerrarse la cardiaca.
válvula mitral y e l intervalo se prolonga.
Por ello, el Q - l se prolonga e n la estenosis d ) El diagnóstico precoz de mala función ventncular.
mitral grave.
e) El seguimiento de pacientes c o n cardiopatía
hipertensiva.
2. La fase isosistólica (FIS) representa el tiem-
po de contracción isovolumétrica (desde f) Valoración del funcionamiento cardiaco e n
que se cierra la válvula mitral hasta q u e se pacientes con miocardiopatías.
abre la válvula aórtica). Ya obtenida la d u -
ración del PPe, se le resta la duración d e la Limitaciones d e l estudio d e l a f u n c i ó n v e n t r i c u -
FPI y se obtiene la FIS: lar por f o n o m e c a n o c a r d i o g r a f í a
FE=1.125-(1.25 xPPe/Pe)
a ) M i o c a r d i o p a t í a hipertrófica
El índice " a " del apexcardiograma se correla-
1. Establece el diagnóstico de miocardiopatía
ciona c o n la presión telediastólica ventricular iz-
hipertrófica obstructiva (figura 9 ) .
quierda; en relación estrecha c o n la precarga, las
cifras normales (6.1 ± 3.6%) son muy similares a la 2 . Cuaníifica con exactitud el grado d e "obs-
presión diastólica encontrada e n sujetos también trucción dinámica", producido por la mió-
4iH
CARDIOLOGÍA
312
•
1
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314
Capítulo 10 Ecocardiografía "modo M"
"La técnica es sólo un medio, no un fin"
HAZ ULTRASONICO
MODO M MODO B
FIGURA 2 El haz ultrasónico alcanza las estructuras cardiacas y las refleja, como
puntos (modo B). Las i n t e r f a s e s ( p u n t o s ) se d e s p l a z a n a u n s e n t i d o
anteroposterior (se acercan y alejan del transductor), seguiendo el movimiento
de las estructuras cardiacas. Si el registro se desplaza en el tiempo (sentido
horizontal) se obtiene el ecocardiograma modo M. Para sincronizar el registro
con el ciclo cardiaco se obtiene simultáneamente un electrocardiograma
316
ECOCARDIOCRAFIA "MODO M"
F I G U R A 3 Anatomía ecocardíográfíca. Obsérvese el transductor (T) colocado en la pared anterior del tórax
(PAT) hacia la izquierda del esternón. De acuerdo con la orientación que se le dé al T, se obtiene el registro
de las diferentes estructuras cardiacas según su localización y relaciones anatómicas (ver texto). Se
esquematizan las cuatro posiciones clásicas. (VI) = ventrículo derecho; S I V = septum interventricuiar; VI =
ventrículo izquierdo; M P P = músculo papilar posterior; P P V I = pared posterior del ventrículo izquierdo;
V A M = valva anterior mitral; V P M = valva posterior mitral; EN = endocardio; EP= epicardio; PAA= pared
anterior aórtica; PPA= pared posterior aórtica; VAA= valva anterior aórtica; VPA= valva posterior aórtica;
A l = aurícula izquierda)
ventricular comienza a descender la PVI y cuando mitral). Posteriormente, en la fase de llenado lento
cruza la PAI se inicia (Punto D) la apertura de la la válvula mitral sufre un recierre diastólico (movi-
válvula mitral, con un movimiento rápido hacia ade- miento E-F), debido a un aumento de la presión
lante d e la valva anterior (movimiento D-E), que intracavitaria por el llenado ventricular. Al final d e
corresponde a la fase de llenado rápido ventricu- la diástole, nuevamente la contracción auricular
lar, mientras la valva posterior mitral realiza un mo- reabre la válvula y se produce la onda " a " que co-
vimiento contrario, hacia atrás. El momento de incide con el IV ruido cardiaco en el F C G . Al ini-
máxima apertura (punto E) coincide c o n el chas- ciarse el nuevo ciclo cardiaco se produce el movi-
quido de apertura mitral (en casos de estenosis m i e n t o de c i e r r e v a l v u l a r ( m o v i m i e n t o A - C ) .
319
CARDIOLOGÍA
FIGURA 6 A) Válvula mitral normal. Nótese la presencia de re-cierre diastólico (e-f), la re-apertura en
telediástole (A) y el movimiento hacia atrás de la valva posterior. B) Estenosis mitral mínima. Se puede
observar el movimiento normal de la valva anterior durante toda la diástole. Se aprecia un movimiento
hacia adelante de la valva posterior sólo en protodiástole (fusión de comisuras). C) Estenosis mitral. Se
pierde el re-cierre diastólico (e-f) y la onda A, movimiento anterior diastólico de la valva posterior. D)
Estenosis mitral con fíbrosis. La valva anterior pierde el re-cierre diastólico (e-f) y el punto A. La valva
posterior mueve hacia adelante en diástole y está formada por ecos gruesos (fibrosis de la valva posterior).
E) Estenosis mitral calcificada. Tanto la valva anterior como posterioor están formadas por ecos
hiperreflectantes muy gruesos producidos por importantes depósitos calcáreos en ambas valvas. Nótese
la pérdida del re-cierre diastólico de la valva anterior (e-f) y el movimiento hacia adelante de la valva
posterior en diástole
ECOCARDIOGRAFÍA " M O D O M "
FIGURA 7 A) Ecograma normal de la válvula mitral. B) Prolapso valvular mitral telesistólico. Se puede ver
el movimiento hacia atrás de ambas valvas de la mitral al final de la sístole (Síndrome de Barlow). C)
Prolapso valvular mitral holosistólico. Nótese el movimiento hacia atrás "en hamaca" en toda la sístole y el
movimiento anterior diastólico de la valva posterior redundante (pseudo estenosis mitral). D) Endocardi-
tis infecciosa. La apertura de la válvula mitral es normal. Se puede apreciar la presencia de gruesos ecos
hiperreflectantes durante la sístole producida por una vegetación valvular. E) Ruptura del aparato valvular
mitral. Se puede ver el movimiento errático de la valva anterior de la mitral (flecha) que esta suelta por la
ruptura de las cuerdas tendinosas
con el mixoma de la aurícula izquierda. En otros c a - corregido quirúrgicamente la valvulopatía mitral, sean
sos, la evolución clínica nos obliga a investigar parti- candidatos para cardioversion eléctrica por padecer
cipación mitral en su padecimiento cuando la auscul- fibrilación auricular. En los casos con dilatación de
tación no es característica, como sucede e n los aurícula izquierda (diámetro mayor de 4.5 cm), la
pacientes que presentan accidentes vasculares ce- recaída en fibrilación auricular después de conver-
rebrales de tipo oclusivo como primer manifesta- sión eléctrica es muy elevada; en presencia de aurí-
ción de su enfermedad, especialmente si son jóve- culas más chicas la frecuencia de recaídas en fibrila-
nes o pacientes con fibrilación auricular "aislada". ción auricular es mucho menor.
Por último, el ecocardiograma tiene indicación pre- C o n lo anotado anteriormente, nos podemos
cisa cuando sospechamos estenosis mitral "muda", percatar d e los diversos aspectos útiles q u e e l
cuyo diagnóstico clínico es usualmente muy difícil. procedimiento puede ofrecer al clínico en los c a -
C o m o dato adicional útil, que la ecocardiografía sos de estenosis mitral. En la insuficiencia mitral
nos proporciona en la valvulopatía mitral, se encuen- reumática, el estudio ecocardiográfico no tiene la
tra la posibilidad de conocer las dimensiones de la utilidad mencionada ya que las alteraciones ob-
aurícula izquierda, lo cual es de interés c o m o factor servadas en el registro no son características y por
pronóstico en aquellos casos en los que habiendo eso no establecen el diagnóstico; sin embargo, ya
4 321
CARDIOLOGÍA
establecido el mismo por la clínica y/o por otros existe calcificación valvular, dato que podemos ob-
métodos de gabinete, el ecocardiograma informa tener por este medio. El diagnóstico d e estenosis
acerca de la repercusión hemodinámica y de la subvalvular fibrosa fija también es posible d o -
etiología de la lesión. cumentarlo (figura 9) cuando los signos caracterís-
En el primer caso, las dimensiones de la aurí- ticos se buscan intencionalmente.
cula y ventrículo izquierdos informarán si la reper- La insuficiencia aórtica puede ser diagnosticada
cusión es ligera (dimensiones normales), modera- por la presencia de aleteo fino (flutter), causado por
da (dilatación de estas cavidades) o grave (importante el chorro de regurgitación de la válvula anterior de
dilatación del ventrículo izquierdo c o n buena fun- la mitral durante la diástole. Este signo aparece en
ción o con falla contráctilKfigura 6 ) . En cuanto al algunos casos sin lesión mitral; cuando se agrega
segundo punto, es importante subrayar que ciertos esta lesión puede faltar el aleteo. Las vegetaciones
tipos de insuficiencia mitral, c o m o la causada por de endocarditis infecciosa en la válvula aórtica son
prolapso valvular o ruptura d e cuerdas tendinosas, frecuentemente demostrables por ecocardiografía.
son mejor diagnosticadas por ecocardiografía que
por otro método clínico o de gabinete externo. Por
último, es posible demostrar los injertos bacterianos ///. LESIONES DE LA VALVULA TRICUSPIDE
e n la válvula mitral debidas a endocarditis infecciosan
D e s d e e l punto d e vista e c o c a r d i o g r á f i c o , la
(figura 7).
morfología de la válvula tricúspide es igual q u e
la d e la mitral; sólo se diferencian por tener una
posición anterior, la primera con respecto a la se-
//. LESIONES DE LA VÁLVULA AÓRTICA
gunda y la continuidad que normalmente tiene
El ecocardiograma ofrece información valiosa en la mitral con la pared posterior aórtica (o pulmonar
algunas lesiones valvulares aórticas: es posible es-
tablecer el diagnóstico de la aorta bicúspide (figu-
r a 8), e n la mayoría de los casos; se puede saber si
>
F I G U R A 8 Aorta bicúspide. El registro ecocardio- FIGURA 9 Estenosis subvalvular fibrosa fija. Paa=
gráfico demuestra cómo el rafe diastólico valvular pared anterior aórtica. I'l'a = pared posterior aórtica.
se encuentra en posición excéntrica (señalado por El e c o g r a m a a ó r t i c o m u e s t r a s u a p e r t u r a
una flecha), mucho más cercano a la pared anterior protosistólica normal con rápido cierre precoz (fle-
de la aorta (PAA) que a la pared posterior del vaso cha), el cual es seguido de un aleteo fino que se ob-
(PPA). Por detrás se registra la cavidad de la aurícula serva hasta el final de la sístole; estos hallazgos son
izquierda (Al) característicos del padecimiento
322
ECOCARDIOGRAFÍA "MODO M"
en caso d e vasos transpuestos), q u e no tiene la la sístole; por el contrario, la pared posterior mue-
trie úspide (figura 10). v e hacia delante y a ello se debe la disminución
La ecocardiografía se ha utilizado para el diag- del diámetro de la cavidad al final de la sístole.
nóstico d e estenosis tricuspídea, la cual se mani- Durante la diástole, las dos paredes tienen
fiesta e n forma similar o como lo hace la lesión movimiento contrario (el septum hacia delante
mitral, es decir, disminución de la pendiente E-F y la pared posterior hacia atrás), lo cual explica
de la valva anterior y el movimiento hacia adelan- el aumento del diámetro al final de la diástole.
te de la valva septal. Este comportamiento se observa e n el corazón
En la enfermedad de Ebstein se han observado sano, pero puede verse en la insuficiencia mitral.
alteraciones ecocardiográficas características y que son insuficiencia aórtica y comunicación interven-
de gran ayuda para el diagnóstico d e esta mal- tricuiar, c u a n d o son de m í n i m a repercusión
formación, cuando se buscan en forma intenciona- hemodinámica.
da. Por último, es posible documentar el diagnóstico
de endocarditis infecciosa injertada en la tricúspide. 2. M o v i m i e n t o septal exagerado (figura 13-C)
Normalmente el septum mueve hacia atrás y tra- Por último, la exageración del movimiento
ta de aproximarse a la pared [¡osterior durante septal puede ser un mecanismo compensador
FIGURA 10 Registro de válvula tricúspide. El barrido desde la válvula mitral (M) pasando por la válvula
aórtica (Ao), alcanza la válvula tricúspide (Tr) cuando el transductor se angula hacia la derecha y abajo.
Sótese la posición anterior de la válvula tricúspide en relación con la mitral (válvula tricúspide en rela-
ción con la pared anterior del tórax: PAT)
323
CARDIOLOGÍA
30-,
FIGURA 12 Válvula pulmonar normal. Por debajo de la pared anterior del tórax (PAT) apare-
ce un eco diastólico lineal fijo, cuya dirección horizontal se dirige de arriba hacia abajo
(pendiente diastólica), la cual culmina con la onda " a " . Un brusco movimiento posterior (b-
c) revela la apertura valvular: permanece abierta (c-d) hasta el final de la sístole, en que
bruscamente se cierra (d-e)
325
CARDIOLOGIA
vimiento septal. Asimismo, en el infarto del ven- (especialmente de la cámara de salida del ventrículo
trículo derecho se observa el movimiento septal izquierdo) en morfologías valvulares relativamente
paradójico tipo A el cual tiene como objeto la normales y los signos de mala función ventricular
compensación del ventrículo derecho compro- nos dan la clave para el diagnóstico.
metido en su función contráctil. Por último, es A continuación se analiza en forma sucinta la
común que después de la cirugía cardiaca con aplicación que la ecocardiografía modo M tiene e n
circulación extracorpórea aparezca movimiento algunas malformaciones congénitas del corazón:
paradójico del septum, que probablemente se
debe a que la agresión que implica este proce-
VIII. CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
dimiento afecte mayormente la función contráctil
del ventrículo derecho que la del izquierdo; por 1. Comunicación interauricular (CIA)
lo tanto, el movimiento septal tiende a compen-
El ecocardiograma per se no establece el diag-
sar la función del ventrículo más afectado.
nóstico de C I A ; pero si el defecto es grande y
el cortocircuito arteriovenoso es importante,
5. M o v i m i e n t o septal en el bloqueo d e r a m a
podremos conocer sus consecuencias hemo-
izquierda (figura 13-E)
dinámicas, que se traducen en dilatación del
El B R I H H produce un movimiento peculiar e n ventrículo derecho y e n el patrón de sobre-
el septum interventricuiar: inmediatamente des- carga v o l u m é t r i c a d e l m i s m o ( m o v i m i e n t o
pués de la despolarización eléctrica se aprecia paradójico d e l septum). C a b e mencionar que
un breve pero rápido movimiento hacia atrás c u a n d o la C I A es p e q u e ñ a o c u a n d o se acom-
del septum, para posteriormente mostrar mo- paña d e hipertensión arterial pulmonar impor-
vimiento paradójico durante la fase expulsiva. tante, no aparecen los signos ecocardiográficos
Este tipo de movimiento también puede pre- característicos.
sentarse en aquellas circunstancias e n las que
la activación ventricular semeja al del bloqueo 2. Comunicación interventricuiar (CIV)
de rama izquierda (síndrome de Wolf-
C u a n d o la C I V es p e q u e ñ a y el cortocircuito
Parkinson-White [has d e kent paraseptal dere-
es menor d e l doble d e l gasto sistémico, el eco-
cho) y extrasístoles ventriculares que se origi-
cardiograma puede ser normal, mientras que
nan e n el ventrículo derecho).
c u a n d o el defecto es grande y e l cortocircuito
es importante, e l trazo ecocardiográfico nos
informa sobre la repercusión h e m o d i n á m i c a
VI. DIAGNÓSTICO DE DERRAME PERICÁRDICO de la anomalía, aumento e n las dimensiones
El ecocardiograma es un método rápido, incruen- de las cavidades ventriculares y de la aurícula
to y seguro para determinar si la cardiomegalia, en izquierda. También se puede inferir la magni-
caso dado, es debida a dilatación de las cavidades tud del cortocircuito por la relación de diá-
cardiacas o a la presencia de derrame pericárdico, metro entre la aurícula izquierda y la aorta (A
así c o m o también la magnitud aproximada del izq/Ao); un cociente mayor de 1.1 traduce un
mismo y la facilidad con la que podrá extraerse. El gran cortocircuito AV.
método permite diagnosticar el derrame pericár-
dico aun en presencia de derrame pleural. 3. Persistencia del conducto arterioso (PCA)
«•7*1 .4'
4m
CARDIOLOGIA
FIGURA ib Ecocardiograma en el infarto del miocardio. Infarto de la pared posterior (PP) que muestra
acinesia de dicha pared con movimiento exagerado (compensador) del septum ¡nterventricular (SIV)
328
ECOCARDIOGRAFIA "MODO M"
• t i t o
d-e) y sólo la enérgica contracción auricular pue- la rigidez anormal del miocardio conlleva que la
de abrir c o n mayor amplitud la válvula mitral al apertura valvular en la telediástole sea tan sólo
final de la diástole (figura 17-D). discreta. En otras palabras, el ecograma mitral
El impedimento extremo al llenado ventri- refleja un comportamiento recíproco a la curva
cular producido por la infiltración miocárdica o d e presión ¡ntraventricuiar {dip-plateau) q u e
la presencia de trombos endocárdicos (miocar- p r o d u c e la restricción m i o c á r d i c a ; así, d u -
diopatía restrictiva) se manifiesta en el ecograma rante la protodiástole la amplitud de apertura
mitral. ya que el movimiento de esta válvula es valvular es mayor p o r q u e la presión intraca-
el que refleja indirectamente los acontecimien- vitaria es m e n o r y, por el c o n t r a r i o , la a m p l i -
tos hemodinámicos intracavitarios. t u d d e a p e r t u r a v a l v u l a r es m e n o r e n la
telediástole p o r q u e la presión intracavitaria
En efecto, al abrirse la válvula mitral el flujo
está exageradamente elevada e n ese momento
diastólico ocupa rápidamente la cavidad ventri-
(figura 1 7 - C ) .
cular y la apertura es amplia en este momento,
pero el brusco incremento d e la presión ¡ntra- Finalmente, la insuficiencia aórtica aguda
ventricuiar a cifras muy elevadas producida por produce una grave alteración hemodinámica
4
CARDIOLOGIA
330
ECOCARDIOGRAFÍA "MODO M"
FIGURA 20 Estimulación rápida con marcapasos auricular (a partir de la línea gruesa) y supresión brusca.
Nótese el incremento del espesor sistólico del septum (2.1 cm) y de la pared posterior (2.5 cm), así
como la franca disminución del diámetro sistólico (1.4 cm) en el primer latido post-estimulación en
relación con las medidas de reposo (1.6,1.9 y 2.7 cm, respectivamente); nótese la disminución progre-
siva de los espesores del septum (1.8 y 1.5 cm) y pared posterior (1.9 cm) y el aumento del diámetro
sistólico (2.6 y 2.8 cm) en los latidos siguientes. La potencialización de la contractilidad post-estimula-
ción es demostrada por el aumento del espesor sistólico de las paredes y por la disminución del diáme-
tro sistólico del ventrículo izquierdo (Tomado con autorización de Gómez, JA. y cois., Am J Cardiol, 1979; 43:745)
FIGURA 21 A) Un estudio normal enseña un diámetro diastólico del ventrículo derecho de 12mm, (d) el
septum interventricuiar de 9 mm (S); el diámetro diastólico del ventrículo izquierdo de 50 mm; el sistólico
de 30 mm (acortamiento porcentual de 40%) la pared posterior tiene 10 mm. B) Hipertrofia ventricular
izquierda (septum (S) y la pared posterior (PP) de 20 mm) que acompaña la insuficiencia cardiaca: dilata-
ción ventricular izquierda con disminución del acortamiento porcentual, (compárese con A). C) Dilatación
de ambos ventrículos (VD: 40 mm y VI 65 mm non insuficiencia cardiaca (AP 23% (compárese con A).
ECOCARDIOGRAFÍA " M O D O M "
CUADRO 1
E S T U D I O DE LA F U N C I Ó N VENTRICULAR
Valores Valores
normales* normales*
• •VI l i l i l í ' -
• ESPESOR D I A S T Ó L I C O DEL
S E P T U M INTERVENTRICULAR < 1.1 c m
• D I Á M E T R O D I A S T Ó L I C O DEL
VENTRÍCULO IZQUIERDO < 5 cm
( D D = D I Á M E T R O D I A S T Ó L I C O , DS = D I Á M E T R O S I S T Ó L I C O
4 -
• CIFRAS OBTENIDAS EN SUJETOS SANOS CON RECISTRO BIDIMENSIONAL SIMULTANEO
— J U —
333
CARDIOLOGÍA
—
•->. • ^ /s-r\ j ^ A ^ - ^ ^ f i r n A
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Capítulo Ecocardiografía Bidimensional
"La admiración llevada al culto de la máquina pone al
hombre en grave riesgo de secarle el alma. Mientras más
sabio, más se perfila elpeligro de la devastacióny
más necesita equilibrar el espíritu fomentando
•
su cultura humanística"
E
N Ei CAPÍTULO PREVIO se analizó brevemente la sional (cardiopatías congénitas complejas, cardio-
potencialidad informativa q u e ofrece el patía isquémica, función ventricular, etc.).
ecocardiograma Modo M. Realmente el he- Las técnicas ultrasónicas tienen c o m o principal
cho de poder obtener una imagen gráfica d e las limitación la calidad de transmisión del ultrasoni-
estructuras intracardiacas e n relación c o n su fun- do en el tórax. En efecto, la sobredistensión pul-
ción, constituye un avance de gran trascendencia monar, la configuración anormal del tórax, la calci-
para la cardiología clínica, más a ú n , cuando dicho ficación de los cartílagos costales, entre otros, son
registro es incruento y relativamente barato. factores que no infrecuentemente condicionan la
El ecocardiograma bidimensional ofrece además mala calidad del registro por la pobre transmisión
una imagen sectorial del corazón que permite ha- del sonido a través de la caja torácica.
cer un estudio de su anatomía y de la relación que
sus diferentes estructuras guardan en el espacio.
PLANO DE CORTE ULTRASÓNICO
ft>r otro lado, la presentación en la pantalla se
realiza e n movimiento, el cual puede ser grabado Los transductores del equipo bidimensional (me-
en video para su reproducción posterior. En con- cánicos o electrónicos), emiten múltiples haces d e
clusión, c o n la ecocardiografía bidimensional es ultrasonido. C a d a uno de estos haces, al tocar cada
posible estudiar la anatomía cardiaca y sus altera- una de las interfases en el corazón, producen un
ciones al mismo tiempo que se observa su movi- eco que al regresar al transductor se gráfica e n la
miento en tiempo real, lo que también permite el pantalla como un punto (modo B ) . La suma de to-
estudio de su función tanto normal c o m o cuando dos los puntos producen en la pantalla una imagen
es alterada por la enfermedad. sectorial del corazón (figura 1).
En algunas condiciones, la ecocardiografía modo Los haces ultrasónicos son emitidos por el trans-
M es capaz de ofrecer una información más preci- ductor en forma de sector de una circunferencia,
sa que la bidimensional (aleteo diastólico fino de cuyo ángulo de apertura es de 9 0 ° . Así, c u a n d o
la válvula mitral, movimiento anterior sistólico de dicho sector ultrasónico incide al corazón realizar
la mitral e n la miocardiopatía hipertrófica, movi- un corte tomográfico de su estructura que d e p e n -
miento del septum ventricular, etc.); e n otras, la de de la dirección que se le dé al plano de corte
i n f o r m a c i ó n o b t e n i d a es s i m i l a r ( d e r r a m e ultrasónico. En efecto, al plano ultrasónico se le
pericárdico, mixomas, etc.); por ambos métodos y puede dirigir para q u e haga un corte sectorial e n
en otros más, es muy superior la forma bidimen- sentido longitudinal, transversal o anteroposterior
CARDIOLOGÍA
FIGURA 1 A) Haces de ultrasonido que alcanzan al corazón. B: Representación de los ecos de cada
interfase en modo B. La suma de los puntos conforman la imagen sectorial del corazón
del c o r a z ó n ; ello permite tener una imagen ana- La válvula mitral puede visualizarse en este pla-
tómica c o n movimiento en tiempo real de las es- no c o n toda facilidad; debe recordarse que la
tructuras cardiacas cuya morfología ecocardiográ- valva anterior delimita la cámara de salida del
fica d e p e n d e r á d e l plano de corte ultrasónico ventrículo izquierdo e n diástole y que normal-
utilizado. mente se continúa con la pared posterior aórtica
(figura 4-A).
En diástole las dos valvas de la mitral se en-
/. CORTE LONGITUDINAL (EJE LARGO) DEL VEN-
cuentran separadas, son finas y tienen un movi-
TRÍCULO IZQUIERDO
miento uniforme. En la estenosis mitral es carac-
Cuando el transductor se coloca e n el borde pa- terística la morfología de abombamiento que
raesternal izquierdo y el plano d e corte ultrasónico ambas valvas adoptan consecutivamente a la fu-
incide el eje mayor del corazón se logra una aproxi- sión comisural; asimismo, la fibrosis y calcifica-
mación longitudinal (figura 2-A). Este corte permi- ción valvular incrementa la reflectancia y espe-
te visualizar una pequeña parte del ventrículo de- sor de los ecos de la válvula enferma. La dilatación
recho, el septum ¡nterventricular, la pared posterior de la aurícula izquierda es un hallazgo frecuente
del ventrículo izquierdo, el músculo papilar poste- e n estos enfermos (figura 4-B), la presencia de
rior, la válvula mitral, la raíz aórtica y las valvas de- vegetaciones valvulares (Figura 4-C) puede ser
recha y no coronaria de la válvula aórtica, asimis- d e s c u b i e r t a e n e s t e plano c u a n d o d i c h a s
mo se hace evidente parte de pericardio anterior y neoformaciones sépticas son d e por lo menos 3
posterior y la aurícula izquierda por detrás de la m m . Asimismo, el movimiento errático de cual-
aorta (figura 2-B), e n diástole las dimensiones de quiera de las dos valvas o de ambas consecutiva-
las cavidades ventriculares son mayores, la válvula mente a la ruptura de cuerdas tendinosas o mús-
mitral está abierta y la válvula aórtica cerrada (fi- culo papilar, se pueden evidenciar en este plano
gura 3-A); por el contrario, e n sístole las dimensio- (figura 4-D), especialmente en tiempo real.
nes de las cavidades ventriculares son más peque-
ñas, la válvula mitral está cerrada y la aórtica abierta Finalmente, los mixomas de la aurícula izquier-
(figura 3-BI. da (figura 4-E) se pueden registrar con este corte
durante su desplazamiento a través del ciclo
cardiaco; en diástole el tumor protruye a través
del orificio mitral. Durante la sístole (figura 5) la
Semiología del plano longitudinal (eje lar- válvula mitral logra efectuar su cierre, pero los
go) del ventrículo izquierdo cuerpos de ambas valvas nunca sobrepasan su
a) Válvula mitral plano valvular (punteado) (figura 5-A).
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
^ORT^DE^IE^ARGGJ
PIANO
DE CORTE
LONGITUDINAL
FIGURA 2
4 339
CARDIOLOGÍA
o o O
m a l . Si la e s t e n o s i s s u p r a v a l v u l a r es u n a
hipoplasia segmentaría de la aorta, se podrá
demostrar la disminución del calibre d e l vaso
c o n este plano d e corte (figura 6-E).
Las vegetaciones injertadas e n la válvula
aórtica también p u e d e n ser visualizadas en
este plano (figura 6-F); es importante recor-
dar que su t a m a ñ o , forma y localización se-
rán muy diferentes e n cada c a s o ; asimismo,
se podrán localizar c o n m u c h a m a y o r facili-
d a d e n t i e m p o real, que c o n imágenes fijas.
F i n a l m e n t e , la dilatación aórtica y los aneu-
rismas de la raíz aórtica también podrán ha-
FIGURA 5
cerse evidentes c o n este corte (figura 6 - C ) ,
a u n q u e la d i s e c c i ó n parietal es muy difícil d e
asegurar en algunos casos.
La estenosis aórtica valvular se manifiesta
por la limitación e n la apertura d e una o ambas
c) Estudio del ventrículo izquierdo
valvas, la cuales característicamente se abom-
ban (figura 6-A) e n el momento sistólico, Si la El corte longitudinal o eje largo permite visuali-
valva es muy fibrosa o calcificada, el espesor y zar la cavidad del ventrículo izquierdo (VI), el
la reflectancia de los ecos valvulares se obser- septum interventricuiar (SIV) y la pared poste-
varán anormalmente aumentados (figura 6-B); rior (PP) (figura 7-A), por lo que es posible co-
la importancia de la limitación e n el movimien- nocer la dimensión de su cavidad y el espesor
to se hará evidente si la estenosis valvular es d e sus paredes. Ello permite el diagnóstico de
importante. dilatación ventricular (figura 7-B) como suce-
C u a n d o la estenosis aórtica es subvalvular d e e n la insuficiencia mitral y aórtica, miocar-
producida por un rodete o membrana subaór- diopatía dilatada y fases avanzadas de cardio-
tica puede ser descubierta e n el plano longitu- patía i s q u é m i c a . Por otro l a d o , también es
dinal, inmediatamente por debajo del plano posible hacer el diagnóstico de hipertrofia mio-
valvular aórtico, c o m o un eco lineal e n la c á - c á r d i c a , ya s e a c o n c é n t r i c a (figura 7-C) o
mara de salida del ventrículo izquierdo (figu- asimétrica (figura 7-D).
ra 6-C). C u a n d o la estenosis aórtica es supra-
valvular puede visualizarse como una d) Cardiopatía isquémica
membrana por arriba del plano valvular (figu- La cardiopatía en su forma de presentación más
ra 6-D) aórtico q u e mostrará morfología ñor- frecuente y e n etapas iniciales es localizada de
tal m a n e r a que si c o n o c e m o s la a n a t o m í a
topográfica de cada corte ecocardiográfico es
o o 0
posible saber que segmentos han sido afecta-
dos por al isquemia. En el eje longitudinal (fi-
gura 8) se puede visualizar el septum interven-
tricuiar en su poción anterior (parte de ella) a
nivel d e sus regiones basal y media; la porción
septal apical no siempre se puede visualizar con
el corte longitudinal estándar. En la mayoría de
los casos estas regiones están irrigadas por la
arteria coronaria descendente anterior. Por otro
lado, también se puede estudiar la porción basal
y media de la pared posterior como se mencio-
nó, no siempre es posible obtener una imagen
adecuada de la región posterior apical c o n el
plano estándar.
9b
Hipertrofia
-
asimétrica
FIGURA 7
FIGURA 9
•
f) Ventrículo derecho
f C^VD
(C Ao
W VI SIV (7 o Tco
x/^! 1" VAM "A\
. 1
F I G U R A 12
ECOCARDIOGRAFIA BIDIMENSIONAL
Eje Eje
longitudinal V . D . longitudinal V . l .
FIGURA 13
4 343
CARDIOLOGÍA
FIGURA 15
DIASTOLE
B
Hipertro-
fia c o n -
céntrica
Hipertro-
fia a s i m é -
trica
FIGURA 16
344
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
Derrame pericárdico
C o n la aproximación e n eje corto a nivel de los
músculos papilares es posible reconocer fácil-
mente el derrame pericárdico que se albergará
por detrás d e la pared posterior cuando es pe-
queño (figura 20-A) y se demostrará al obser-
var el corazón separado d e l pericardio; cuando
el derrame pericárdico es muy abundante' se
podrá ver el corazón e n medio de un gran es-
pacio producido por el derrame; lo usual es
observar la distorsión del órgano durante cada
latido (figura 2 0 - B ) .
345
CARDIOLOGÍA
DERRAME PERICARDICO
FIGURA 21
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
S e m i o l o g í a d e l e j e c o r t o a n i v e l d e los g r a n -
des vasos TV. APROXIMACIÓN APICAL DE CUATRO GUIARAS
Teniendo en cuenta la posibilidad de visualización Cuando se coloca el transductor a nivel del ápex
de la válvula aórtica, este corte sectorial es muy útil del corazón se obtiene un corte de cuatro cámaras
para el estudio de los padecimientos que la afectan; (figura 26-A).
así, puede demostrarse la aorta bicúspide (figura 23- Debido a que el ápex se encuentra en una po-
A) cuando sólo se visualizan dos valvas con cierre sición más próxima al transductor (campo cerca-
excéntrico, la escasa apertura de las valvas durante no), este plano permite el estudio de la región apical
la sístole (figura 23-B) de la estenosis aórtica, la del corazón. Por el contrario, el septum auricular
fibrosis o calcificación valvular (figura 23-CI. Es po- se encuentra muy apartado (campo lejano) del
sible visualizar los aneurismas del seno de Valsalva mismo y por ello no es la mejor aproximación para
(figura 23-D) e incluso en ocasiones pueden hacer- su semiología. C o n el plano de corte apical de cua-
se evidentes el nacimiento de los gruesos troncos tro cámaras también pueden estudiarse la valva
coronarios (figuras 23-E y F). anterior (VAM) y posterior (VPM) de la válvula
mitral, así c o m o las valvas lateral (VLT) y septal (VST)
La demostración d e vegetaciones valvulares
de la tricúspide; asimismo se puede visualizar la
tricuspídeas pueden efectuarse con este corte cuan-
banda moderadora (B) que identifica al ventrículo
do las valvas anterior y lateral son las afectadas (fi-
derecho (figura 26-B).
gura 4-A); e l mixoma de la aurícula derecha pue-
de demostrarse c o n este plano aun c u a n d o no es C o m o en los cortes anteriores, este plano permi-
la mejor aproximación para lograr tal objetivo. te el diagnóstico d e estenosis mitral (figura 27-A) y
4 347
CARDIOLOGÍA
A
DIÁSTOLE
r
D E
DIASTOLE DIÁSTOLE
FIGURA 23
FIGURA 24
,/ VP '
) (
vp\
A\
( A
° )
v^y
/
TCO
A 1 Ao 1
Q B l l l
FIGURA 25
estenosis tricuspídea (figura 27-B) al demostrar el Por otro l a d o , este corte tomográfico ofrece
abombamiento de las valvas durante su apertura; una importante información para e l diagnóstico
de prolapso valvular cuando las valvas protruyen de masas intracardiacas; así, los m i x o m a s d e a u -
hacia las aurículas durante la sístole (figura 2 7 - Q ; rícula derecha (figura 28-A y de aurícula izquier-
de injertos bacterianos de las valvas visualizadas da (figura 28-B) o d e tumores o trombos dentro
figura 27-D), o bien, d e ruptura d e las cuerdas d e las cavidades ventriculares pueden encontrar-
tendinosas (figura 27-E se sin dificultad e n la mayoría d e los casos (figu-
«4»
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
FIGURA 26
b D
Estenosis Estenosis Prolapso Vegetación Ruptura de cuerda
mitral tricuspídea milral mitral tendinosa
FIGURA 27
i A
•
11 1 m
ri A
\\ AD II Al l¡
A B C
Mixoma Mixoma Tumoración P
de aurícula derecha de aurícula izauierda He V n Trombosis
•níeil
F I G U R A 28
149
CARDIOLOGÍA
350
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
AD I Al // H AD I Al
FIGURA 30
351
CARDIOLOGÍA
A B
A B C
D E C
FIGURA 35 FIGURA 36
4 -
CARDIOLOGÍA
La ausencia d e conexión auriculoventricular presiones dentro de las aurículas son muy simila-
derecha o la atresia tricuspídea también pueden res, no es raro encontrar que algunas microburbu-
ser encontradas mediante esta aproximación al jas pasen hacia la aurícula izquierda (figura 37-B)
demostrar ausencia de válvula tricúspide o la vál- aun cuando la presión pulmonar sea normal y d e
vula imperíorada (atresia verdadera), ventrículo esta forma también es posible documentar dicho
derecho pequeño y los obligados defectos septales defecto. Para la búsqueda d e comunicación inter-
auricular y ventricular (figura 36-C) y de forma si- ventricuiar puede utilizarse la aproximación apical
milar pueden buscarse la ausencia de conexión AV de cuatro cámaras o la subcostal. La inyección e n
izquierda, la atresia mitral y la hipoplasia del ven- vena periférica, del mismo modo mencionado,
trículo izquierdo. puede encontrar la comunicación interventricuiar
cuando se demuestra un defecto "econegativo" por
debajo de la válvula tricúspide (figura 3 7 - C ) . C u a n -
VIII. APROXIMACIÓN SUPRAESTERNAL do la presión sistólica pulmonar es superior a 50
m m H g c o n mucha mayor frecuencia se puede d e -
Cuando los haces de ultrasonido se dirigen desde
mostrar el peso de microbulas hacia el ventrículo
el hueco supraesternal (usualmente con hiperex-
izquierdo (figura 3 7 - D ) y de esta forma d o c u m e n -
tensión d e la cabeza), se puede visualizar el arco
tar el defecto.
aórtico y el nacimiento d e las ramas arteriales que
irrigan ambos brazos y la cabeza. Esta ventana ha
sido usada para el diagnóstico de coartación aórtica,
estenosis aórtica supravalvular y aneurismas B) CIRCUITOS VENOARTERIALES
aórticos, principalmente; sin embargo, no tiene Cuando la hipertensión pulmonar ha complicado
diversidad de aplicaciones descritas para las otras a estos defectos o ello forma parte de malforma-
vistas ecocardiográficas. ciones más complejas (atresia tricuspídea, tetralogía
de Fallot, tronco común, etc.), la inyección de "con-
traste" e n vena periférica demostrará el franco paso
ECOCARDIOGRAFÍA DE CONTRASTE de las microbulas hacia las cavidades izquierdas
(cortocircuito venoarterial) a nivel auricular (figura
La inyección rápida de soluciones por vía intrave- 37-B) o ventricular (figura 3 7 - D ) .
nosa es capaz de producir microburbujas en el to-
rrente circulatorio. Este efecto genera interfases que
son registrados por el equipo de ultrasonido, por O CONEXIONES AURICULOVENTRICULARES
eso es posible conocer la dirección del flujo san- C o m o se mencionó, la localización espacial de los
guíneo e n las cavidades derechas del corazón y ventrículos puede conocerse mediante el registro
hallar cortocircuitos intracardiacos arteriovenosos d e las válvulas auriculoventriculares con aproxima-
o venoarteriales. Asimismo, puede ser de ayuda ción apical de cuatro cámaras teniendo la tricúspi-
para el conocimiento de las conexiones auriculo- de una posición más cercana al ápex que la mitral.
ventriculares y ventriculoarteriales e n algunas car- C o m o la válvula tricúspide se sitúa al ventrículo
diopatías congénitas. derecho es posible conocer la relación espacial que
guarda c o n el izquierdo. Normalmente la inyec-
ción de contraste demostraría la conexión entre la
A) CORTOCIRCUITOS ARTERIOVENOSOS aurícula venosa y ventrículo anatómicamente d e -
recho (concordancia auriculoventricular) (figura 3 8 -
La comunicación interauricular con cortocircuito
A), que usualmente se localizan a la derecha. Cuan-
AV puede hacerse evidente mediante la inyección
do la inyección de contraste demuestra la conexión
de solución glucosada al 5% o solución salina en
entre la aurícula venosa (derecha), c o n el ventrícu-
una de las venas del pliegue del codo cuando las
lo anatómicamente izquierdo (inversión ventricu-
cavidades derechas visualizadas c o n aproximación
lar), se puede establecer el diagnóstico de discor-
apical o subcostal son llenados por microburbujas
dancia auriculoventricular (figura 3 8 - B ) .
y el flujo proveniente de la aurícula izquierda a
través del defecto septal auricular "lava" las micro-
burbujas de la aurícula derecha. Ello produce un
efecto de "contraste negativo" cerca del orificio D) CONEXIONES VENTRICULOARTERIALES
interauricular (figura 37-A), que demuestra la co-
La ecocardiografía de contraste puede ofrecer una
municación interauricular. Por otro lado, como las
información valiosa e n algunos casos de cardiopa-
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
tías congénitas e n las que existen malformaciones posición anterior y del lado contrario. La inyec-
troncoconales, utilizando la aproximación paraes- c i ó n de contraste e n vena periférica es seguida de
ternal en eje corto a nivel d e los grandes vasos es la opacificación de la aorta anormalmente c o n e c -
posible conocer la relación espacial entre ellos y su tada con el ventrículo d e r e c h o que recibe la san-
conexión ventricular. Normalmente la arteria pul- gre venosa (figura 3 9 - B ) . Por lo que respecta a la
monar es anterior. C u a n d o se inyecta "contraste" trasposición "corregida" de las grandes arterias,
en una v e n a periférica, se puede demostrar la apa- también es posible demostrarla mediante la a y u -
rición de éste precisamente en la arteria pulmonar da d e la ecocardiografía bidimensional apoyada
que nace del ventrículo derecho, el cual recibe la con la técnica d e contraste. Primeramente será
sangre venosa (figura 3 9 - A ) necesario demostrar la inversión ventricular y por
lo tanto la discordancia atrioventricular c o m o se
La trasposición clásica de los grandes vasos
señaló, c o n la aproximación apical d e cuatro c á -
puede descubrirse al notar que la aorta nace e n
4^
CARDIOLOGÍA
maras. C u a n d o ya se ha demostrado que e l ventrí- cular izquierda (figuras 40 y 41) y d e esta manera el
culo anatómicamente izquierdo recibe la sangre acortamiento porcentual
venosa, la inyección de contraste mostrará cómo
la arteria pulmonar ahora e n posición posterior es /DD-DS\
"opacíficada" por el contraste proveniente del ven- * DD '
trículo venoso (anatómicamente izquierdo), mien-
tras que la aorta transpuesta ocupa una posición F r a c c i ó n d e e x p u l s i ó n (FE)
anterior y no es alcanzada por el contraste, ya que Mediante ecocardiografía 2-D es posible calcular
está conectada c o n el ventrículo anatómicamente la F E ; en efecto, la aproximación apical de 4 c á -
derecho que e n forma anómala, ahora es el ventrí- maras permite hacer la medición de las áreas dias-
culo arterial (inversión ventricular) (figura 3 9 - C ) . tólica y sistólica y de ellos derivar los volúmenes
Finalmente, cuando ambos vasos nacen del ventrí- ventriculares y la fracción de expulsión, la cual es
culo derecho (doble cámara de salida del ventrícu- c a l c u l a d a a u t o m á t i c a m e n t e por los e q u i p o s
lo derecho) la inyección de contraste será seguida ecocardiográficos. C o n el lápiz electrónico se deli-
de la opacificación simultánea d e los grandes va- nea el endocardio del ventrículo izquierdo con la
sos (independientemente de cuál sea su relación imagen detenida (fijo) en máximo diástole (a nivel
espacial), que nacen del ventrículo venoso (figura de la R del E C O y en máxima sístole y c o n ello
39-D). aparece automáticamente el valor d e la FE (figura
4 2 ) . Esta técnica es útil y fácil de realizar en la gran
D e esta forma la búsqueda intencionada de las
mayoría de los casos; sin embargo.deja de ser váli-
alteraciones basada en el cuadro clínico y otros
d a cuando el corazón tiene alteraciones segmen-
exámenes de gabinete pueden culminar con una
tarias de la contracción por isquemia miocárdica,
información fundamental para establecer el diag-
nóstico y orientar al cateterismo cardiaco así c o m o
el estudio angiográfico para la demostración final
d e la malformación congénita.
E s t u d i o d e la f u n c i ó n v e n t r i c u l a r
FIGURA 41 El trazado demuestra cómo se mide el espesor de las paredes (SIV y PP) y el
diámetro de la cavidad ventricular izquierda en diástole (a la izquierda) y sístole (a la
derecha), de acuerdo con los lincamientos propuestos por la Sociedad Americana de Eco-
cardiografía En este caso, el acortamiento porcentual es de 4 6 % ( á ^ P ) .
4.
CARDIOLOGÍA
C Á L C U L O DE LA F R A C C I Ó N DE EXPULSIÓN ( M É T O D O M O N O P L A N O )
A, 56.5 R, 4.24 R , - R : h,
2 = 1.37
FIGURA 44 Eje corto del ventrículo izquierdo por vía paraesternal. Se delimitan las áreas
epicárdica (A,) y endocárdica ( A ) en diástole con el lápiz electrónico (izquierda). En
sístole se incrementa e l espesor de la pared y se reduce el área de la cavidad. Se delimi-
tan las áreas epicárdica (A,) y endocárdica i A. i (derecha), para el cálculo de la relación h/
r en diástole (n,/r ) y en sístole (hjr )
2 t
r= \ r =
h r
J I <S SISTÓUCO
110 mmHg
4 J 6 1
CARDIOLOGIA
CUADRO 1
MASA VENTRICULAR (gm)
G R U P O TOTAL 130 ± 31
• MASCULINO 148 ± 26
• FEMENINO 108 ± 21
• MV/SUP. CORP. 72 ± 13 gm/m'
• MV/SUP. CORP. M A S C U L I N O 76 13 gm/m 2
M,2
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
C A L C U L O DE LA MASA VENTRICULAR
MI- 1 0 S4 GARCIA
• M V T <LA>td TH5T
17 OCT B l 1 8 : 1 8 CLARA A'.'itd a j e ap 3 5 . S
B
' "'
B C
ji .flS-léürtf DVltd a p i c a l 1. H 3
G 36 C 53 3|ft ttAREA 3 A V l t d a j e MF> n . 3
207LPM Á a*^lCONT. g
:4R
P ¿TK R
1.8 3 1.8 3.6
FIGURA 4 9 A) Aproximación apical de 4 cámaras. Se mide el eje mayor del ventrículo iz-
quierdo desde eí plano valvular mitral hasta el endocardio del ápex. B) Eje corlo paraester-
nal a nivel de músculos papilares. Se dibuja el área epicárdica (A,) y el área endocárdica (A.) en
diástole. El aparato automáticamente calcula la masa ventricular: 149 gm en este caso
4m
CARDIOLOGIA
364
ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL
365
CARDIOLOGÍA
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:¡6<>
Capítulo 12 Ecocardiografía Doppler
"La moral médica comienza en el momento de prestar
al enfermo lo mejor que la medicina presta"
C
OMO SE ANALIZÓ PREVIAMENIE, el e c o c a r d i o Tierra el color adoptado por la luz será a z u l , de
grama "modo M " y el bidimensional per mayor intensidad entre mayor sea su velocidad y,
miten el estudio del corazón en lo referen- por el contrario, si la estrella se aleja, el color q u e
te a su estructura anatómica y función, mediante adopta la luz será el rojo, desde m u y tenue hasta
imágenes en movimiento. Por su parte, el sistema muy acentuado, dependiendo de su velocidad. El
Doppler ofrece la posibilidad de estudiar el flujo cambio de color de la luz producido por su des-
sanguíneo q u e transita dentro del corazón y gran- plazamiento hacia el observador o al alejarse de
des vasos e n lo referente a su dirección, velocidad él, es lo que se denomina efecto Doppler.
y otras características q u e permiten reconocer el
El efecto D o p p l e r no sólo a p a r e c e e n la luz,
estado funcional del corazón, tanto e n sístole (cál-
sino q u e e l sonido t a m b i é n lo presenta y así,
culo del gasto cardiaco) c o m o en diástole (estado
c u a n d o u n a fuente sonora se e n c u e n t r a fija, las
de la relajación y distensibilidad), alteraciones fun-
o n d a s de sonido se d e s p l a z a n a través d e l aire
cionales y estructurales d e las válvulas cardiacas
e n forma de c i r c u n f e r e n c i a s c o n c é n t r i c a s q u e
(estenosis o insuficiencia), así como d e los tabiques
viajan c o n u n a f r e c u e n c i a uniforme (figura 1 ) .
intracardiacos (comunicación interauricular o i n -
Si la fuente sonora se desplaza en un sentido, las
terventricuiar) o comunicaciones anormales entre
ondas sonoras a d q u i e r e n m a y o r f r e c u e n c i a h a -
los grandes vasos (conducto persistente o ventana
c i a d o n d e la fuente sonora se a c e r c a (figura 1-
aortopulmonar). C o n ello se complementa la in-
A), y p o r el contrario, son d e f r e c u e n c i a más baja
formación obtenida mediante las otras dos técni-
si se perciben d e l sitio d e d o n d e se aleja (figura
cas ultrasónicas antes enunciadas.
1-B); e n otras palabras, si la fuente sonora se acer-
c a al observador, e l sonido se e s c u c h a r á c a d a
vez d e mayor f r e c u e n c i a (sonido c a d a v e z más
agudo) y si d i c h a fuente se aleja d e l observador,
EFECTO DOPPLER
el sonido s e e s c u c h a r á d e f r e c u e n c i a c a d a v e z
m á s baja (sonido c a d a v e z m á s grave). C o m o
En 1 8 4 2 , Christian Doppler describió un fenóme-
ejemplo s e p u e d e citar e l sonido q u e e m i t e un
n o astronómico que consistía e n el cambio q u e en
silbato d e ferrocarril y el efecto q u e p r o d u c e so-
el color de la luz emitida por una estrella se produ-
bre un observador estático: al acercarse el pri-
cía, de acuerdo a su movimiento en el espacio con
m e r o (sonido c a d a v e z más intenso y agudo) y a
respecto a la Tierra.
alejarse posteriormente (sonido progresivamen-
En efecto, la luz que emite una estrella es esen- te más grave, hasta d e s a p a r e c e r ) .
cialmente blanca pero puede cambiar en un a m -
plio espectro de colores q u e son debidos a su di- El efecto Doppler en el corazón se manifiesta
rección y Velocidad; así, si la estrella se acerca a la cuando enviamos un haz d e ultrasonido q u e viaja
CARDIOLOGÍA
FIGURA 1 IZQUIERDA:
Cuando la fuente sonora se
encuentra estacionada, la
distribución de las ondas
sonoras se hace en circuios
concéntricos. DERECHA: Si
la fuente sonora se despla-
za, la frecuencia de las on-
das sonoras aumenta hacia
donde se acerca (A) y dismi-
nuye de donde se aleja (B)
a través de los tejidos a una velocidad conocida ventrículos expulsan su contenido sanguíneo, el flu-
( 1 5 4 0 mseg) y dicho haz ultrasónico choca con los jo se dirige hacia los grandes vasos (figura 3-C).
eritrocitos que se acercan, por lo que la frecuencia Si graficamos el efecto Doppler en un oscilosco-
del haz ultrasónico que regresa es mayor. En con- pio, encontramos que cuando el flujo acerca al
clusión, este cambio de frecuencia entre el haz transductor, e n la gráfica se inscribe una línea pro-
emitido y el recibido como eco corresponde esen- gresivamente ascendente e n relación con el punto
cialmente al efecto Doppler (figura 2 ) ; por el con- O (línea horizontal) (figuras 3-A, 3-C y 4). C u a n -
trario, si enviamos un haz de ultrasonido a una fre- d o , por el contrario, el flujo se aleja del transduc-
cuencia conocida y el flujo sanguíneo (los eritrocitos) tor, la gráfica mostrará una línea hacia abajo de la
se alejan del transductor, el e c o recibido tendrá horizontal (punto O ) (figura 3-B, 3 - D y 4).
menor frecuencia que el haz emitido (figura 3-B).
En conclusión, la dirección del flujo podrá regis-
trarse como un fenómeno positivo o negativo, de-
pendiendo desde qué aproximación sea estudiado
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER (figura 4). Por ejemplo, el flujo aórtico se registrará
como un evento sistólico positivo si se estudia des-
í. DIRECCIÓN DEL FLUJO de el hueco supraesternal (el flujo se acerca al
La d i r e c c i ó n del flujo dentro d e las cavidades transductor) mientras que si el mismo evento se es-
cardiacas es uniforme de tipo laminar; e n diástole, tudia desde la región apical, se obtendrá un registro
al abrirse las válvulas atrioventriculares, el flujo lle- negativo (el flujo se aleja del transductor) (figura 4).
na las cavidades ventriculares (figura 3-A), y en Por ello, se comprenderá que el efecto Doppler se
sístole, al abrirse las válvulas sigmoideas, y los hará más evidente cuando el haz ultrasónico sea
372
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
más paralelo al flujo (éste se acerque o aleje del todos los glóbulos rojos se mueven a la misma velo-
transductor), mientras que dicho efecto no se hará cidad, el eco que regresa al transductor es una com-
evidente si el flujo sanguíneo es perpendicular al haz pleja onda que trae consigo la información de to-
del ultrasonido, ya que no se acerca ni se aleja del dos los eritrocitos que se desplazan con una diferente
transductor, sino que pasa por su punto O (figura 5). velocidad dentro del haz de ultrasonido. Esta com-
La diferencia en la frecuencia entre el haz ultra- pleja señal es procesada a través de una computado-
sónico enviado y el eco recibido (variación de fre- ra e n la que se identifican las diferentes variaciones
cuencia por efecto Doppler = A / , puede expresar- de velocidad presentes en la señal (figura 6-A); se
se en Hertz (Hz), usando la siguiente ecuación: agrupan los cambios de velocidad parecidos y se
grafican en el tiempo, dando mayor intensidad al eco
2'fo cosB cuando mayor cantidad de eritrocitos se desplazan a
una velocidad cualquiera (figura 6-B).
En esta ecuación fo representa la frecuencia del La velocidad (y), a la que se desplaza el flujo
haz ultrasónico transmitido en H z ; la v representa sanguíneo dentro de las cavidades cardiacas o los
la velocidad (cm/seg); 8 representa el ángulo entre grandes vasos, puede calcularse cuando se cono-
el flujo sanguíneo y el haz ultrasónico (recordar c e la velocidad a la que viaja el sonido a través de
que entre más paralelos sean mejor calcularemos los tejidos ( 1 5 4 0 m/seg), la frecuencia a la que se
la velocidad a la que regresa el eco) y, finalmente, transmitió el haz ultrasónico (/ o ) , el cambio de
c representa la velocidad del sonido dentro d e los frecuencia que el haz ultrasónico ha sufrido al cho-
tejidos que es de 1 5 4 0 m/seg. car con los eritrocitos ( A / ) y el ángulo entre el
flujo sanguíneo y el haz d e ultrasonido (0):
4 373
CARDIOLOGÍA
Apical de 5 cámaras
PARALELO | NO PARALELO |
+ 130 + 130
FIGURA 5 Si el flujo no es paralelo
al haz de ultrasonido, la velocidad
del mismo se registrará equivocada-
mente menor a la real. Cuando el flu- • = 20
jo es paralelo al haz ultrasónico, la
velocidad máxima del flujo se regis-
trará con exactitud
El cálculo de la velocidad del flujo lo hace auto- ja), y entre punto y punto a cuántos cm/seg de velo-
máticamente el equipo al recibir el eco ultrasónico cidad corresponde (figura 7).
con la información del cambio de velocidad que ha Nuevamente vale la pena enfatizar que la velo-
sufrido al chocar con el flujo sanguíneo. Así, en e l cidad del flujo será medida con mayor exactitud si
osciloscopio es posible ver cuál es la velocidad máxi- el haz de ultrasonido se dirige paralelamente al flu-
ma que puede registrarse, tanto de flujo positivo jo sanguíneo y entre menos paralelo se encuentre
(que se acerca) c o m o de flujo negativo (que se ale- dicho haz al vector del flujo, menos exacta será di-
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
cm/seg. cm/seg.
F I G U R A 6 A: El
ecocardiógrafo jun-
ta automáticamen-
te los grupos de eri-
trocitos que viajan
a velocidad dife-
rente. B: estos gru-
pos de eritrocitos
que viajan a dife-
rentes velocidades
los g r á f i c a en e l
tiempo Tiempo 1 seg.
cha medición. Así, un registro nítido de bordes uni- cardiaco que se acerca al tronco pulmonar. Lo mis-
formes y limpio revelará que el haz de ultrasonido mo sucede cuando se comunican anormalmente
es paralelo al vector del flujo sanguíneo (figura 5). un ventrículo y una aurícula durante la sístole (in-
suficiencia mitral y tricuspídea), creándose un flu-
jo turbulento que pasa en este momento de la c a -
///. CARACTERÍSTICAS DEL FLUJO SANGUÍNEO vidad ventricular hacia la aurícula, o c u a n d o se
Normalmente la sangre y por lo tanto sus elemen- comunica patológicamente durante la diástole uno
tos figurados se mueven uniformemente en una de los grandes vasos con su respectivo ventrículo,
sola dirección dentro d e las cavidades cardiacas y creándose un flujo regurgitante turbulento que so-
los grandes vasos, lo que confiere un carácter la- brecarga d i c h a c a v i d a d c a r d i a c a (insuficiencia
minar al flujo sanguíneo o s e a , la porción central aórtica o pulmonar).
se desplaza a velocidad mayor, y la porción lateral
a velocidad menor. Por lo tanto el flujo sanguíneo
se desplaza c o n facilidad al encontrar menor resis- IV. CARACTERÍSTICAS DEL FLUJO SANGUÍNEO
tencia e n su trayecto (figura 8-A). C u a n d o el flujo NORMAL DENTRO DEL CORAZÓN Y LOS GRAN-
sanguíneo aumenta bruscamente de un segmento DES VASOS
a otro su velocidad, se convierte en un flujo turbu- a) Aurículas
lento y en éste los glóbulos rojos se mueven en
forma irregular a diferentes velocidades y direc-
ciones y ello lo convierte e n un flujo sanguíneo
anormal (figura 8-B). El flujo turbulento puede apa-
recer cuando se establece una obstrucción valvular + 76
(estenosis aórtica o pulmonar, estenosis mitral o
tricuspídea, etc.) o vascular (obstrucción arterial), •
e n la q u e el flujo sanguíneo pasa a gran velocidad
a través del sitio estrecho. Otra condición capaz
de provocar turbulencia en el flujo sanguíneo es la \ •
comunicación anormal de dos cavidades cardiacas
(defectos septales) y una de ella tiene mayor pre-
sión que la otra. Así, c u a n d o se comunican ambos
ventrículos (comunicación interventricuiar), y e l
ventrículo izquierdo tiene mayor presión que e l
derecho, se establece un flujo que pasa a gran v e -
locidad a través del orificio anormal, durante la / - 77
sístole, creando una gran turbulencia e n el flujo
regurgitante, o c u a n d o a través de un conducto FIGURA 7 La velocidad a la que se acerca el flujo al
transductor (histograma positivo) o a la que se aleja
persistente se comunican la aorta y la pulmonar, del mismo (histograma negativo) se puede cuantifi-
creando un flujo turbulento durante todo el ciclo car por la presencia de puntos. En este ejemplo, en-
tre un punto y otro la equivalencia es de 20 cm/seg
375
CARDIOLOGÍA
F L U J O L A M I N A R FLUJO TURBULENTO
CUADROI
V E L O C I D A D DE FLUJO S A N G U Í N E O T I P O LAMINAR (m/seg)
Niños Adultos
• FLUJO MITRAL 1.00 (0.8 - 1.3) 0.90 (0.6 - 1.3)
• FLUJO TRICUSPÍDEO 0.60 (0.5 - 0.8) 0.50 (0.3 - 0.7)
• ARTERIA PULMONAR 0.90 (0.7 - 1.1) 0.75 (0.6 - 0.9)
• VENTRÍCULO I Z Q U I E R D O 1.00 (0.7 - 1.2) 0.90 (0.1 - 1.1)
• AORTA 1.50 (1.2 - 1.8) 1.35 (1.0 - 1.7)
• Tomado de Halle L & Angelsen B„ Doppler ultrasound in cardiology, l e a and Febiger, Phyladelphia, 1982,
página 72.
376
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
FIGURA 9 Si se estu-
dia el flujo de entra-
da del ventrículo iz-
q u i e r d o d e s d e el
ápex, se obtendrá un
histograma positivo
Apical 4 cámaras en diástole (ver texto)
CARDIOLOGÍA
emitir el siguiente pulso de ultrasonido. Se concluye ofrecida por el sistema bidimensional. La señal se
que la frecuencia d e repetición de pulsos (FRP) del coloca en el sitio en donde se desea estudiar el flujo
transductor depende de la distancia a la que se en- sanguíneo (muestra de flujo) y así conocer sus carac-
cuentre la interfase que refleja el ultrasonido, a ma- terísticas e n las diferentes cavidades cardiacas o en
yor profundidad de la interfase, menor frecuencia de los grandes vasos (figura 12).
repetición de pulsos, y viceversa (a menor profundi-
dad, mayor FRP) (figura 11). Límite Ny Quist
La frecuencia de repetición de pulsos (FRP) del
transductor juega un papel primordial e n la veloci-
MUESTRA DE FLUJO (VOLUMEN MUESTRA O MUES-
dad del flujo que puede ser medida mediante la
TRA DE VOLUMEN)
técnica de Doppler pulsado.
El sistema de Doppler pulsado utiliza la imagen de Se denomina límite Ny Quist a la velocidad máxi-
la ecocardiografía bidimensional mediante la cual ma de flujo sanguíneo que puede ser medida por un
se puede escoger el sitio exacto e n donde se estu- transductor de onda pulsada. Debido a que la FRP
diarán las características del flujo sanguíneo, utili- depende de la profundidad a la que se encuentre la
zando una señal que puede desplazarse a volun- muestra de flujo, a mayor distancia de ésta hay me-
tad dentro de la imagen de las cavidades cardíacas nor F R P y menor velocidad del flujo que puede
F I G U R A 11 Frecuencia de
Repetición de Pulsos (FRP).
A : la interfase que refleja e l
ultrasonido está más cerca
del transductor, por lo que el
tiempo de emisión del eco es
más corto y por lo tanto en-
vía otro pulso de ultrasoni-
do más rápidamente. B: si
la interfase está más alejada
del transductor, será mayor
el tiempo de emisión y re-
cepción del ultrasonido, por
lo que el transductor enviará
pulsos ultrasónicos con m a -
yor lentitud
F I G U R A 12 Sistema de
Doppler pulsado. El mues-
tren de flujo se puede hacer
a voluntad: del ápex de la
vía de entrada del ventrícu-
lo izquierdo (A, B, C) o de la
raíz aórtica desde la aproxi-
mación supraesternal
378
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
medirse con exactitud (menor limite Ny Quist) y nivel máximo de velocidad q u e es capaz de regis-
viceversa (figura 11): si la muestra de flujo se estu- trar el equipo; asimismo, el aparato es "engañado"
dia cerca del transductor, es posible cuantificar flu- por el flujo de alta velocidad y e n la gráfica se regis-
jos con mayor velocidad. Este fenómeno limita m u - tra un histograma bifásico; esto es, flujo turbulento
cho la capacidad del sistema Doppler pulsado para positivo que sobrepasa la velocidad máxima que el
cuantificar con exactitud la velocidad de flujo, espe- equipo es capaz de registrar (flujo que realmente se
cialmente cuando su velocidad está aumentada por acerca) y una imagen de flujo negativo (imagen arti-
una estrechez valvular. El limite Ny Quist es enton- ficial de un flujo que ficticiamente se aleja sin ser
ces la velocidad máxima del flujo que puede ser real el fenómeno). También este fenómeno se hace
medida con exactitud mediante el sistema de manifiesto e n forma contraria, si la velocidad a la
Doppler pulsado y equivale exactamente a la mi- que se aleja el flujo es muy grande.
tad de la frecuencia de repetición de pulsos (recor-
dar que un pulso alcanza la interfase y regresa al
Aplicaciones del sistema Doppler pulsado
transductor) (figuras 4 y 11).
1. Diagnóstico de insuficiencias valvulares
+ 160cm/teg
- 70 crrs trg
FIGURA 15 Insuficiencia
[^Rt^O^URBULENToJ
aórtica. A: el estudio del flu-
jo normal en la vía de salida
del ventrículo izquierdo ense-
ña un histograma negativo en + ISOtnvwK
sístole (el flujo se aleja del
transductor). B: insuficien-
cia aórtica, se observa la pre-
sencia de un flujo turbulento
positivo en diástole (el flujo Rrgntro
regurgitante se a c e r c a al ambiguo
transductor)
380
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
®
F I G U R A 16 Insuficiencia
pulmonar. A: normalmen-
te el flujo que se registra en - 60 cm/seg
la cámara de salida del ven-
trículo derecho (muestra de
flujo señalado con un cua-
dro negro) es sistólico ne-
gativo (el flujo se aleja del
transductor) y laminar. B:
®
c u a n d o hay i n s u f i c i e n c i a
pulmonar se podrá obser-
var un flujo turbulento dias-
tólico positivo (el flujo re-
g u r g i t a n t e se a c e r c a a l
transductor)
4 381
CARDIOLOGÍA
VÁLVULA AÓRTICA |
FLUJO NORMAL
+ 200
cm/seg FIGURA 17 Estenosis aórtica.
Cuando el flujo de la raíz
aórtica se estudia desde el
hueco supraesternal, se ob-
tiene un histograma sistólico
positivo laminar (flujo nor-
mal). Cuando hay estenosis
aórtica se registra un flujo
turbulento de alta velocidad
382
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
383
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 20 Gasto cardiaco A : e l diámetro del anillo se mide mediante una aproximación paraesternal
(eje largo) del ventrículo izquierdo en sístole (2.31 c m ) . B: mediante una aproximación apical de 4
cámaras se obtiene e l registro del flujo a nivel del anillo aórtico y al dibujar su contorno mediante el lápiz
electrónico el aparato calcula la integral del flujo (13.9 cm)
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
E
6O-1
•g í\% A
F I G U R A 21 Ecocardiografía Dop- "1a
pler. Función diastólica. El esque- 11
m a de arriba representa los cam-
£§
_o- \\
\
1/
bios instantáneos de la presión 'a"
Diástasis V
auricular con respecto a la ventri-
cular en la diástole. Se puede ver 0-
cómo la fase de aceleración de-
pende de la relajación ventricular /
y se inicia en el cruce de presio-
Si
5 "
nes. La desaceleración se produce
en el momento en el que la pre-
sión ventricular aumenta y alcan- zE
z a la presión auricular. A l final de E
c
la diástole, la contracción auricu-
lar incrementa la presión en esta
:
s
&\ \ l /
. . . Presión ventricular
cavidad y favorece e l llenado ven- E
\ Presión auricular
tricular en ese momento (onda A) /
'1-
b) Precarga b ) D i s t e n s i b i l i d a d ventricular
La disminución del volumen circulante condi- Si el miocardio se torna anormalmente rígido
cionará un menor retorno venoso y, por lo tan- (hipertrofia, isquemia, amiloide, fibrosis, etc.),
to, una menor cantidad de sangre llegará al co- la velocidad del flujo protodiastólico se man-
razón, lo cual causará un menor gradiente de tiene normal, con un punto E de amplitud tam-
presión protodiastólico y por lo tanto, una me- bién normal; sin embargo, el llenado rápido
nor velocidad de aceleración así c o m o una produce un rápido incremento de la presión
menor amplitud del punto E (hipovolemia). Por ¡ntraventricuiar, lo cual reduce rápidamente el
el contrario, el aumento de la precarga tiene gradiente transmitral y la pendiente de desace-
un efecto inverso. leración es anormalmente rápida.
En ella también son dos los procesos que la influyen: Las determinantes de la onda de llenado auricular
(A) son tres:
a ) Relajación ventricular
Normalmente el punto en el que termina la rela- 1. Precarga de l a a u r í c u l a . La energía de la con-
jación ventricular coincide con el punto E del tracción auricular se rige por la ley de Starling,
registro del flujo transmitral. Cuando la relajación de tal manera de que si el volumen auricular y/
es lenta o incompleta (isquemia, hipertrofia, edad o su presión están aumentados, la contracción
avanzada), la relajación se prolonga hasta la fase será enérgica y la energía cinética impuesta al
d e d e s a c e l e r a c i ó n , por lo q u e el gradiente flujo sanguíneo será mayor; por lo tanto, con-
4385
CARDIOLOGÍA
dicionará una onda de llenado auricular de ma- • Patrón restrictivo. C u a n d o la rigidez ventri-
yor velocidad y amplitud y este fenómeno se v e cular es excesiva, la fase de aceleración es
c u a n d o la relajación ventricular es lenta y/o in- rápida y llega a alcanzar una velocidad máxi-
completa (isquemia, hipertrofia, edad avanza- m a mayor d e la normal (punto E), pero lo
da), bloqueo A V de primer grado, insuficiencia característico es un tiempo de desacelera-
ventricular izquierda o taquicardia.. ción particularmente rápido (el llenado rá-
pido reduce rápidamente el gradiente d e
2. Poscarga auricular. C u a n d o la distensibilidad presión transmitral) y la onda de llenado au-
ventricular está disminuida, la carga que tiene ricular es pequeña debido a que la presión
q u e vencer la aurícula es mayor, por lo q u e el ¡ntraventricuiar se encuentra elevada y se
volumen sanguíneo desplazado es menor y la desplaza solamente una mínima cantidad d e
amplitud y velocidad de la o n d a A es reduci- volumen (figura 22-C) (pericarditis constric-
d a ( m i o c a r d i o p a b a r e s t r i c t i v a , pericarditis tiva o miocardiopatía restrictiva).
constrictiva).
4. INSUFICIENCIA CARDIACA
3. Contractilidad de la aurícula. La amplitud de la
onda A también depende de la fuerza de contrac- 1. En ella puede observarse un patrón como el
ción auricular. Se ha demostrado que la falla de q u e aparece e n la relajación lenta (figura 2 2 -
contracción mecánica de la aurícula que existe en B), cuando la enérgica contracción auricular es
el estado poscardioversión por fibrilación auricu- un mecanismo importante para mantener el
lar no se produce onda de llenado auricular en el gasto cardiaco, se puede diferenciar de la is-
registro del flujo transmitral a pesar de que se q u e m i a miocárdica, hipertrofia o edad avan-
registra onda " P " en el electrocardiograma. z a d a ; cuando esta imagen del flujo transmitral
aparece en un corazón dilatado y con signos
d e falla contráctil (aumento d e los diámetros
F l u j o t r a n s m i t r a l e n el c a m p o c l í n i c o diastólico y sistólico con reduccción del acor-
tamiento porcentual y la fracción de expulsión).
• Flujo normal. La aceleración inicial es rápida
y culmina con un punto E cuya velocidad nor-
mal es de 85 + 16 cm/seg; la pendiente de 2. En la insuficiencia cardiaca también puede verse
desaceleración normalmente dura 160 a 190 un "patrón restrictivo" (figura 22-C) cuando la
mseg, y finalmente la amplitud de la onda de elevación de la presión diastólica auricular es
llenado auricular (A) alcanza una velocidad excesiva y/o la contracción auricular es insufi-
de 56 ± 13 cm/seg. ciente. Se puede diferenciar este proceso de
cualquier proceso restrictivo c u a n d o e n forma
• En estas c o n d i c i o n e s , la relación d e E/A es concomitante existen signos d e falla ventricu-
mayor d e 1 (figura 2 2 - A ) ; e n otras pala- lar (dilatación ventricular c o n incremento del
bras el flujo de entrada en condiciones nor- diámetro sistólico y reducción el acortamiento
males tiene mayor v e l o c i d a d (85 + 1 6 c m / porcentual o fracción de expulsión).
seg.) q u e e l producido por la contracción C o n v i e n e mencionar que la presencia d e
auricular (punto A) y si la velocidad d e des- patrón restrictivo en pacientes c o n insuficien-
aceleración es normal ( 1 6 0 a 1 9 0 mseg) cia cardiaca es un factor de mal pronóstico
estaremos e n p r e s e n c i a de un flujo pues se a c o m p a ñ a d e un incremento e n la
transmitral n o r m a l . mortalidad.
A
Flujo transmitral normal. La fase de aceleración al-
canza una velocidad de 104 cm/seg. (Punto E ) , la
velocidad de desaceleración es normal (120 mseg)
y la onda A tiene una velocidad de 53 cm/seg, la
relación E/A es de 1.9
B
Relajación lenta. El punto E tiene menor velocidad
(29.6 cm/seg) que el A ( 6 3 . 0 cm/seg) (relación E/A
de 0.46 ( < 1 )
C
Patrón restrictivo. La fase de aceleración es rápida
con una desaceleración también muy rápida (100
mseg). La onda A es pequeña (27 cm/seg) , (rela-
ción E/A > de 2 (2.38)
se reduce la amplitud de la onda E, la desacelera- administración rápida de una carga de volumen au-
ción se hace mas lenta y aumenta la velocidad de la menta la aceleración, la velocidad del punto E y la
onda A . O sea la reducción de la precarga transfor- d e la desaceleración, por lo que el aumento de la
ma la morfología del flujo mitral de normal a un precarga transforma la morfología de flujo transmural
patrón similar al encontrado en la relajación ventri- e n uno similar al que se encuentra e n la restricción
cular lenta (figuras 22-B y 23) y por el contrario, la al llenado diastólico (patrón restrictivo) (figuras 2 2 -
4 »
CARDIOLOGÍA
C y 23). Por lo tanto, e n la interpretación de la pulmonares, lo cual se logra con una aproximación
morfología del flujo diastólico transmitral, se deben apical de cuatro cámaras, o bien, con ecocardiografía
de tener en cuenta la posible influencia de las car- Iransesofágica. En el primer caso el flujo durante toda
gas hemodinámicas. la diástole es positivo (se acerca al transductor) y sólo
Por otro lado un patrón de llenado anormal como la contracción auricular produce un flujo retrógrado
el que puede ver "Pseudonormalizarse" cuando se (figura 25) cuya velocidad estará anormalmente au-
combinen, aumento importante del volumen dias- mentada cuando la presión diastólica de la aurícula y
tólico con una buena función contráctil de la aurí- ventrículo estén elevados. El flujo transmitral normal
cula izquierda condición en la que un patrón de se acompaña de una velocidad normal del flujo re-
relajación lenta puede normalizar su morfología trógrado a nivel de las venas pulmonares, mientras
(Pseudonormalízación) (figura 24). Finalmente, un que un flujo transmitral "pseudonormalizado" se
patrón restrictivo en insuficiencia cardiaca puede acompañará de un flujo retrógrado d e velocidad
pseudonormalizarse si se reduce el volumen y la mayor que la normal.
presión diastólica con diuréticos (figura 24). En el estudio d e la función diastólica también
La relación entre la onda A del flujo venoso es de importancia, la medición de la Fase de rela-
pulmonar y la onda A del flujo transmitral (A FVP/ jación isovolumétrica. Lo cual puede lograrse me-
A FTM) correlaciona con la presión telediastólica diante la aproximación apical de 4 cámaras cuan-
del ventrículo izquierdo en forma semicuantitativa; do se muestrea el flujo e n un sitio intermedio entre
en efecto cuando esta relación es mayor de 0 . 5 , la la apertura de la valva septal de la mitral y la vía de
presión telediastólica es > de 15 m m H g , por lo salida del ventrículo izquierdo. En este sitio se ob-
cual ayuda a diferenciar un flujo transmitral nor- tiene el flujo de salida aórtica (negativo) y el inicio
mal, d e otro "Pseudonormalizado" (figura 24). del flujo transmitral. Ello permite la medición del
Para diferenciar un patrón de flujo transmitral tiempo entre el fin del flujo aórtico y el inicio del
normal de uno "pseudonormalizado" se debe estu- flujo transmitral (fase de relajación isovolumétrica)
diar el patrón del flujo diastólico e n las venas que normalmente debe de ser menor de 100 mseg.
su aumento indica relajación lenta, su acortamiento
acompaña a la restricción del llenado ventricular
(patrón restrictivo) (figura 26).
CUADRO 2
F U N C I Ó N DIASTÓLICA
M k Al
A
Flujo
transmitral
D D D
s
S /\ S /\ C f\
Onda "A del
-
n.
ílujo de venas
pulmonares
Tiempo de
160 a 190 mseg í f > 200 mseg ^ < 140 mseg 160 a 190 mseg
desaceleración
Relajación
< 100 mseg 1} > 100 mseg O 0^ ít > 100 mseg
isovolumétrica
—-^JU—
cia la válvula pulmonar p r o d u c i e n d o un movi- t e n i d o h a c i a la arterial p u l m o n a r . La falta d e
miento d e cierre q u e ocurre c u a n d o todavía el distensibilidad d e las arterias pulmonares limita
ventrículo derecho se encuentra vaciando su c o n - la expulsión d e sangre y acorta el tiempo e n e l
FIGURA 25 Onda A del flujo de venas pulmonares. Mediante aproximación apical de 4 cámaras se registra
el flujo proveniente de las venas pulmonares (imagen superior de eco 2-D). A la Izquierda: se observa la
onda A del flujo venoso pulmonar negativa a nivel de la onda P del electrocardiograma con una velocidad
normal (23 cm/seg). A la derecha: la onda A del flujo venoso pulmonar se observa con una velocidad aumen-
tada (36 cm/seg) como se observa en el patrón restrictivo, relajación lenta o peseudonormalizado
HIPERTENSION
NORMAL PULMONAR
391
CARDIOLOGÍA
®
Vel. máx. 2.2 m/seg
. i....1.... i . . . . i . . . • i.
— £ f - = 1.5 m/seg
<
Q
U
O
Tiempo transcurrido
entre el gradiente
máximo y el gradiente
medio = 240 mseg
F I G U R A 28 Cálculo del área valvular
mitral. A : se calcula la velocidad
m á x i m a que a l c a n z a el flujo
transmitral (2.2 m/seg). B: la veloci-
..i-T. •— dad máxima se divide entre 1.4 (1.5
mseg). C : se mide cuánto tiempo tar-
Tiempo da e n caer de 2.2 a 1.5 m/seg (240
mseg). D: se divide 220 entre el tiem-
• i -.i 220 B.91 cm2 po de caída al gradiente medio (240
5)
Area valvular mitral = 240 =
l')l
CARDIOLOGÍA
su velocidad máxima permite el cálculo del gra- * C u a n d o hay hipertensión venosa (dilatación de
diente máximo instantáneo transpulmonar utili-
la vena cava inferior - corte subcostal) sistémica
zando la fórmula de Bernoulli modificada.
se le suman 14 m m H g .
De esta manera es posible cuantificar el gra-
diente transpulmonar máximo y con ello evaluar
4. CÁLCULO DE LA PRESIÓN SISTÓLICA DE LA
cuantitativamente la magnitud de la estenosis pul-
ARTERIA PULMONAR EN PRESENCIA DE CIV
monar ligera: gradiente entre 20 y 40 m m H g , mo-
(figura 34)
derada: 4 0 a 5 0 m m H g y g r a v e : > 5 0 m m H g .
C u a n d o ya se ubicó el defecto septal mediante
técnica d e Doppler codificado e n color se ubica
3. CÁLCULO DE LA PRESIÓN SISTÓLICA DE LA
el sitio de mayor turbulencia y se registra la velo-
ARTERIA PULMONAR
cidad máxima del flujo regurgitante a través del
defecto (Doppler continuo). Se utiliza la fórmula
C u a n d o existe hipertensión arterial pulmonar, fre-
d e Bernoulli modificada (V max)-'.4 se calcula e l
cuentemente aparece insuficiencia tricuspídea. El
gradiente m á x i m o d e l flujo regurgitante a través
flujo regurgitante tricuspídeo puede hallarse colo-
del defecto y se le resta a la presión sistólica aórtica
cando el transductor e n el ápex. C o m o con este
(PSAo) y el resultado equivale a la presión sistólica
método de estudio no aparece ambigüedad en el
d e la arteria pulmonar (PS A P ) .
registro del flujo (Aliasing), es posible calcular c o n
exactitud su velocidad máxima mediante la fórmula
de Bernoulli modificada, del reflujo regurgitante PS A P (mmHg) = PS Ao (mmHg) - G r a d .
tricuspídeo. El valor obtenido representa el gradiente
5. CÁLCULO DE LA PRESIÓN SISTÓLICA DE LA
máximo entre aurícula y ventrículo derechos y, por
ARTERIA PULMONAR (PSAP) EN PRESENCIA
lo tanto, cuantifica la presión sistólica de dicho
DE PCA (figura 35)
394
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
1994
63 años
(.I vi medio 21 m m H g
A valvular Ao 1 2 c m 2
1999
roo' • • • • 68 años
• w v >«M z- t <*0>
GTAo medio 44 m m H g
!(*•»
m-v * i n et"! V. »>
A valvular Ao 1.1 c m 2
F I G U R A 32 Gradiente tran-
saórtico medio. Mediante
aproximación de cuatro cá-
maras se obtiene el flujo de
la raíz aórtica con Doppler
continuo y se " d i b u j a " su
contorno con el lápiz electró-
nico. El aparato calcula auto-
m á t i c a m e n t e el valor de 2000
mmHg. En este caso se ejem- 71 años
plifica su utilidad al valorar GTAo medio 59 m m H g
una estenosis aórtica en el
A valvular Ao 0.65 c m 2
Se registra el flujo del conducto (Doppler continuo) a estado que guardan las resistencias pulmonares. Para
nivel de la arteria pulmonar (Eje corto paraesternal) y se el cálculo d e este parámetro se requiere medir la
encuentra la velocidad máxima; mediante la fórmula velocidad máxima del flujo regurgitante tricuspídeo
tic Bernoulli (Vmax)'.4 se obtiene el gradiente máxi- (m/seg.), c i f r a q u e se d i v i d e entre la integral
mo (grad) entre aorta y pulmonar. A la presión sistólica v e l o c i d a d / t i e m p o d e l f l u j o a nivel d e l a n i l l o
Ao. se le resta el gradiente y se obtiene la PSAR pulmonar (cm.) obtenido este resultado se multiplica
por 10 y se le suma la cifra de 0.16 (figura 36). En el
PS A P ( m m H g ) = PS Ao - G r a d . caso de la figura la velocidad máxima del flujo
regurgitante tricuspídeo es de 4.17 m/seg. y la integral
6. RESISTENCIAS VASCULARES PULMONARES v e l o c i d a d / t i e m p o d e l flujo a nivel d e l a n i l l o
pulmonar es de 11.4 cms. El cálculo de las resistencias
C u a n d o ya se ha establecido e l diagnóstico d e
vasculares pulmonares (RVP) es como sigue:
hipertensión arterial pulmonar, conviene saber e l
4395
CARDIOLOGÍA
A B
F I G U R A 33 Cálculo de la presión sistólica de la arteria pulmonar. A) La velocidad máxima del flujo
regurgitante tricuspídeo es de 4.71 m/seg: (4.71 ) x 4 = 8 8 . 7 3 m m H g . B) Nótese la dilatación de la
J
Hld I 1II1IIIMI.IT
Comunicación interventricuiar
Presión sistólica de la arteria pulmonar Presión Sistólica de la Arteria Pulmonar
Ecuación de Bernoulli: (V. máx)2 • 4 Presión Sistólica Aórtica - 4 -(4.2) = PSAP
J
PASistAo - G r a d = PSAP F I G U R A 35
1 1 0 - 8 7 = 23 m m H g
1 A
5 ,
F I G U R A 3 6 Cálculo de las resistencias vasculares pulmonares ( R V P ) : Mediante e l registro de la
velocidad máxima del flujo regurgitante tricuspídeo (A) y de la integral velocidad tiempo del registro del
flujo sistólico a nivel del anillo pulmonar (B) se cuantifican las Resistencias Vasculares Pulmonares (RVP)
(ver texto)
hipertensión pulmonar se debe al aumento de las a nivel de la raíz aórtica (V,), si las áreas a nivel del
resistencias vasculares pulmonares. anillo aórtico (A,) es similar a el área de apertura valvular
aórtica (A.) (Ley de conservación de la energía):
por lo tanto, la velocidad del flujo a nivel del anillo d corresponde al diámetro del anillo aórtico medi-
aórtico (V,) debe de ser igual a la velocidad del mismo do en sístole inediante un eje largo paraesternal.
| ECUACION DE CONTINUIDAD |
Area 2 x v
2 =
^ r e a
1* 1 v
C(FÍ * _^¡==^\^/l
Area 2 • Area 1 x V | j \ _ ^¿J
v 2
A
1 =
( — ) 2 X
' W ? j ? c m
^ 2 x
3.1416 = 3.87
V , = 15.9 cm
AVAo = 0.65 cm 2
continuidad 93*
4 ™
CARDIOLOGÍA
V, = integral del flujo medido a nivel del anillo a) Aproximación apical de 4 cámaras, se mide
aórtico el diámetro transversal del anillo mitral (DM).
V 2 = integral del flujo medido a nivel de la raíz
b) Se registra el flujo de entrada transmitral a
aórtica.
nivel del anillo valvular para calcular la inte-
Se considera apretada una estenosis valvular gral velocidad - tiempo.
aórtica cuando el área valvular alcanza 1 c m - y es
crítica cuando es 0 . 7 5 c m - o menor (figura 3 7 ) . c) G M (cm3)=0.785 X (DM2) x integral del flujo M.
93.4
4) Fracción regurgitante (FR)
FR(%) = G A o - G M x 100
C U A N T I F I C A C I Ó N D E LA INSUFICIENCIA
GAo
AÓRTICA
C u a n d o la fracción regurgitante es mayor del
Para cuantificar la insuficiencia aórtica se requiere
de la combinación entre el ecocardiograma bidi- 5 0 % la insuficiencia aórtica es grave.
mensional, Doppler pulsado y Doppler continuo. C o n técnica del Doppler continuo, se registra el
flujo regurgitante aórtico y se delimita el contorno
1) Cálculo de gasto aórtico (CAo) (figura 3 8 )
de sus bordes con el lápiz electrónico para calcular
a) En e l eje largo paraesternal se mide el diá- su integral velocidad-tiempo.
metro interno de la raíz aórtica ( D A o ) . La división del volumen regurgitante (cm') entre
la integral del flujo regurgitante aórtico (cm) da como
b) En aproximación d e 4 o 5 cámaras se regis-
resultado e l área del orificio regurgitante ( c o r ) que
tra el flujo sistólico de la cámara de salida
cuando es mayor de 0.3 cm- traduce una insuficienia
del ventrículo izquierdo y se dibuja su con-
aórtica grave (figura 4 0 ) .
torno para el cálculo de la integral veloci-
dad tiempo.
CALCULO DE LA PRESIÓN DIASTOLICA DEL VI
c) C A o (cm3) = 0 . 7 8 5 X ( D A o ' ) X Integral del
EN PRESENCIA DE INSUFICIENCIA AÓRTICA
flujo a nivel de la cámara de salida del V I .
En presencia de insuficiencia aórtica se puede
2) Calculo del gasto mitral (GM) (figura 3 9 ) calcular la presión telediastólica d e l ventrículo
F I G U R A 38
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
FIGURA 39
VR = GAo - G M
VR = 146 c m ' - 2 7 . 7 c m ' = 1 1 8 c m '
T É C N I C A (figura 41 y 4 2 )
d p / d T = 36-4 ( m m H g ) = 32 ( m m H g )
A tiempo (seg) A tiempo (seg)
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER C O D I F I C A D O
EN C O L O R
a o L .
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
miento en tiempo real. Cuando el flujo sanguíneo transductor, por lo c u a l colorea de rojo dichas
se acerca al transductor se visualiza e n la pantalla cavidades.
mediante el color rojo. Si por el contrario, e l flujo
se aleja del transductor, se manifestara en la pantalla Flujo de s a l i d a del ventrículo i z q u i e r d o
en color azul. El flujo laminar representa uniformi-
dad en la velocidad y dirección de los glóbulos rojos Cuando se observa la cámara de salida del ventrícu-
de los cuales a mayor velocidad, el color rojo será lo izquierdo, desde un eje largo apical, se puede
más claro (si se acerca al transductor) y más oscuro visualizar c ó m o el flujo sanguíneo abandona la cavi-
si éstos se mueven a menor velocidad. Este hecho dad ventricular hacia la aorta, teñido de azul duran-
también sucede c o n el color azul (si el flujo se te la sístole.
aleja del transductor).
C o m o las diversas muestras de flujo se hacen Flujo de salida del ventrículo derecho
bajo un sistema de Doppler pulsado, si el flujo ad-
Si se estudia desde un eje corto paraesternal a nivel
quiere alta velocidad y se torna turbulento aparece
de los grandes vasos, podremos observar c ó m o el
el fenómeno d e registro ambiguo (Aliasing), ya que
flujo de color azul deja el ventrículo derecho para
sobrepasa su limite Ny Quist, y ello se representa
llenar el tronco de la arteria pulmonar durante la
c o m o un centro de color azul en el flujo de color
sístole.
rojo, que se acerca al transductor o viceversa, un
centro de color rojo e n el flujo de color azul que se
aleja del transductor.
APLICACIONES DEL SISTEMA DOPPLER C O -
El flujo turbulento representa desigualdad e n las
D I F I C A D O EN C O L O R
velocidades y dirección de los glóbulos rojos por un
aumento anormal e n la velocidad del flujo sanguí- 1. DIAGNÓSTICO DE REGURGITACIONES
neo. En el sistema Doppler codificado en color se VALVULARES
agrega el color verde para representar el flujo tur-
a) Regurgitaciones de las válvulas atrioven-
bulento el cual a mayor velocidad, puede ir varian-
do al amarillo y el blanco. triculares
D e tal manera que si al flujo turbulento que se Para su diagnóstico se utiliza la aproximación
acerca al transductor (color rojo) se suman el registro de cuatro cámaras. Normalmente se ve sólo
ambiguo del flujo (centro de color azul) y la turbulen- el flujo diastólico que llena las cavidades
cia (verde, amarillo y blanco) la resultante es una ventriculares (en rojo). En sístole al cerrarse
imagen en la que se visualiza un mosaico d e colores. dichas válvulas se observa el flujo regurgitan-
Este fenómeno aparece igualmente si el flujo turbu- te en azul (se aleja del transductor) c o n un
lento se aleja del transductor. En conclusión, ei mosaico de colores (turbulencia y registro a m -
Doppler codificado en color representa realmente biguo del flujo) que llena la aurícula izquier-
un estudio angiocardiográfico incruento. d a (insuficiencia mitral) o la aurícula derecha
(insuficiencia tricuspídea). Si se observa un
pequeño flujo regurgitante, la insuficiencia
FLUJOS ANORMALES será mínima o ligera y, si se llena toda la
aurícula, será muy importante. En el caso de
C o n mayor frecuencia se utilizan las aproximacio-
insuficiencia tricuspídea, la técnica en color
nes apicales (cuatro cámaras y eje largo apical), para
permite visualizar el área de mayor turbu-
estudiar los flujos de entrada de ambos ventrículos y lencia para orientar a ella el cursor de Doppler
el flujo de salida del ventrículo izquierdo, mientras continuo, medir con certeza gu velocidad
que el eje corto paraesternal al nivel de los grandes máxima y así calcular la presión pulmonar
vasos se usa para estudiar el flujo de salida del con exactitud.
ventrículo derecho, siempre intentando dirigir los
haces del ultrasonido en dirección paralela al flujo
b) Cuantificación de regurgitación mitral
sanguíneo.
Para este fin se utiliza el sistema Doppler
Flujo d e entrada a las cavidades ventriculares codificado en color y el Doppler continuo,
Mediante la aproximación apical de cuatro cáma- los c u a l e s m e d i a n t e la t é c n i c a d e P I S A
ras, p o d e m o s ver e l flujo de llenado de ambas (proximal isovelocity surface área) permiten
cavidades que durante la diástole avanza hacia e l conocer e n forma muy aproximada, tanto el
CARDIOLOGÍA
•_ F I G U R A 43
Ir
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
8. Cálculo del flujo regurgitante instantáneo l FRI) Para investigarla se utiliza el eje largo apical,
( c m )/seg).
1
en el que durante la sístole se observa un flu-
jo en azul (se aleja del transductor), que aban-
El FRI es producto de la velocidad Ny Ouist y el dona el ventrículo izquierdo y alcanza la raíz
área a través de la cual pasa el flujo regurgitante, aórtica y en diástole, la válvula insuficiente
por lo tanto, el área de isovelocidad se multipli- permite que el flujo sanguíneo regrese de la
c a por la velocidad máxima del flujo laminar aorta al ventrículo izquierdo (se acerca al
(limite Ny Quist) que aparece en el mapa de transductor) y se registre como un flujo dias-
tólico en rojo con centro azul (ambigüedad)
color rojo e n el cuadrante superior derecho d e
y mosaico de colores (turbulencia). Si sólo se
la pantalla (figura 43-D).
observa e n la cámara de salida, se tratará de
una insuficiencia aórtica ligera, mientras que
FRI (ctn'lseg) = A.lsov. (cm ) 2
d) Insuficiencia mitral de insuftcierKna tricuspídea. La utilidad que este sistema tiene e n esta
malformación se puede resumir como sigue:
e ) Doble lesión mitral y doble lesión tricuspídea.
AP (cm ) = 0.785 x ( D )
2 2
DOPPLER TISULAR
(|y x I N T . Ao G P = ( y - ) x INT. P
J
GS =
C P = 0.785 x (D) x 17.2 2
GS = 0.785 X ( D ) x I N T A o
2
G P = 2.5 x 1 7 . 2 = 4 3 ce
G S = 1 . 8 6 x 1 8 . 3 = 3 4 ce
G S 3 4 x 8 9 = 3 0 2 6 ce G P = 4 3 x 8 3 = 3 5 6 9 ce
GS = VI x F C G P = 3569 = 1.1 G P = VL x F C
GS = 3026
FIGURA 44
F I G U R A 45 Imagen de Doppler llsular. El registro con Doppler pulsado el comportamiento del anillo
mitral. En el recuadro superior se puede ver la colocación del muestreo en el anillo mitral. El histograma
(abajo) enseña en sístole un movimiento positivo (se acerca al transductor) y en diástole una imagen
negativa recíproco a lo que se observa con el Doppler pulsado transmitral estándar en una persona sana
(A), la relación E/A es de 1.7. Compárese con un patrón de relajación lenta; la relación E/A es de 0.33
4i2Z
CARDIOLOGÍA
de alto riesgo para adquirir la enfermedad (ver capi- ción del seno coronario (figura 47 corte 7). Final-
tulo d e ENDOCARDITIS INFECCIOSA). S e r e a l i z a la mente, con el corte transgástrico se obtiene un per-
endoscopia esofágica con técnica usual para este pro- fecto eje corto del ventrículo izquierdo (figura 47
cedimiento, con la recomendación de que si el pa- corte 8).
ciente tiene historia de padecimientos esofágicos se Por otro lado, las relaciones que guardan el esó-
requiere la endoscopia por especialista e n el ramo, fago y la aorta permiten el estudio de este vaso me-
antes de realizar el estudio ecocardiográfico. diante ecocardiografía transesofágica con gran preci-
sión. En la figura 48 se esquematizan los cortes que
se pueden obtener para el estudio de la aorta a dife-
PLANOS DE CORTE rentes niveles; únicamente debe hacerse notar que
la porción ascendente de la aorta es una reglón ciega
Los planos de corte básicos son tres: eje corto a nivel para la ecocardiografía transesofágica, ya que entre el
de la base del corazón (I); corte de cuatro cámaras (II) vaso y el transductor se antepone la tráquea, que al
(figura 46); a partir de cada uno de ellos, pueden encontrarse llena de aire interfiere definitivamente
obtenerse otros cortes derivados, así, del eje corto a con la imagen ultrasonográfica.
nivel basal (corte 1), es posible visualizar de abajo
hacia arriba angulando el transductor la válvula aórtica
(figura 47 corte 1), el nacimiento de las arterias INDICACIONES
coronarias y la orejuela derecha (figura 47 corte 2 ) ;
1. Enfermedades de la aorta, primeramente se debe
la raíz aorta, la vena cava superior y la orejuela iz- recordar que la aorta ascendente no puede v i -
quierda (figura 47 corte 3), y finalmente, el corte a sualizarse desde la aproximación transesofági-
nivel de la bifurcación de la arteria pulmonar (figura c a ; sin embargo, su raíz puede estudiarse fácil-
47 corte 4). Cuando el piano de corte es el de cuatro mente mediante aproximaciones paraesternales
cámaras (corte II), se pueden obtener tres diferentes y su porción ascendente mediante aproxima-
variedades mediante angulación del transductor, la ción supraesternal. Hasciendo esta salvedad, tanto
primera permite la visualización de la vía de salida el cayado aórtico como la porción descendente
del ventrículo izquierdo (figura 47 corte 5), la segun- torácica pueden ser estudiadas nítidamente c o n
da es una imagen de cuatro cámaras (figura 47 corte ecocardiografía transesofágica.
6) y el corte más posterior que permite la visualiza- Las entidades en las que se ha encontrado
especialmente útil esta técnica de estudio son:
«4-
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
te emboligena. Finalmente, es posible que este conservadoras (plastía), tanto de la válvula mitral
procedimiento sea el más sensible para conocer como aórtica, ya que inmediatamente después
la extensión de tumores primarios o metastásicos de realizado el procedimiento, el registro ultra-
que invaden al corazón. sónico adicionado con Doppler codificado en
color, p e r m i t e s a b e r si ha q u e d a d o o no
La ecocardiogralía transesofágica se lia constituí regurgitación y ae ser atífmaüvo, si'es ligera o
do como el método de elección para e l estudio importante. D e acuerdo a esta información, e l
ecocardiográfico transoperatorio e n cirugía cirujano procederá a terminar la intervención
cardiovascular y ello ha sido especialmente va- en el primer caso o se prepara para un cambio
lioso e n la cirugía reparadora c o n técnicas valvular protésico en el segundo; asimismo, tam-
4
CARDIOLOGÍA
bien puede ser útil en el estudio transoperato- cardiaca, ruptura de algún aparato valvular o
rio del resultado quirúrgico d e algunas malfor- hipovolemia, ello es de especial utilidad cuan-
maciones congénitas. do la ecocardiografía transtorácica no ha sido
óptima en lo referente a la información obteni-
4. La ecocardiografía transesofágica puede ser d e da ante un paciente grave.
gran utilidad en aquellos pacientes q u e se e n -
cuentran en terapia intensiva y que presentan 5. También se ha informado el diagnóstico de cier-
insuficiencia circulatoria después de haber su- tas malformaciones congénitas de no fácil diag-
frido traumatismos torácicos o cirugía cardiaca, nóstico c o m o el c o r triatriatum, coartación
ya que e n estos casos puede saberse, a la cabe- aórtica y pequeños defectos septales, asimismo
cera del enfermo, si el trastorno hemodinámico se han encontrado masas adheridas al miocardio
se debe a hemopericardio, trombosis protésica, o al pericardio y también mixomas con el uso de
infarto agudo del miocardio, grave insuficiencia esta técnica. Este procedimiento prácticamente
410
ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER
no tiene complicaciones cuando lo realiza un ex- Doppler continuo bajo visión directa. Cuando el
perto. Se recomienda que el cardiólogo se entre- flujo no es paralelo al haz d e ultrasonido, se
ne c o n el endoscopista para la técnica de esofa- puede infravaloraren forma muy significativa un
goscopia; ya que se requiere que por lo menos gradiente de presión en p a c i e n t e s c o n
realice 4 0 introducciones del endoscopio, super- cardiopatías valvulares.
visado por el especialista para considerarlo como
apto para realizar el procedimiento. 4. El gradiente transaórtico m e d i d o c o n t é c n i c a
Doppler p u e d e resultar artificialmente mayor
d e lo real si la estenosis aórtica se a c o m p a ñ a
L I M I T A C I O N E S D E LA E C O C A R D I O G R A F I A d e insuficiencia d e la misma v á l v u l a , por lo
DOPPLER m e n o s m o d e r a d a , o q u e e n forma c o n c o m i -
tante hay hipercinesia circulatoria ( a n e m i a ,
1. El método no debe ser usado para substituir la f i e b r e , hipertiroidismo) o si se m i d e e n pre-
auscultación del corazón. Para calificar como sencia d e prótesis de Starr-Edwards o St. Jude.
bien empleado el procedimiento de diagnóstico,
éste debe de ofrecer una información que no 5. El área valvular mitral puede resultar artificial-
puede obtenerse mediante la historia clínica, rea- mente menor (medida c o n técnica Doppler)
lizada por un cardiólogo bien entrenado, asocia- cuando la estenosis mitral coincide c o n cual-
da a métodos de diagnostico más simples (radio- quier condición que aumente el tiempo de re-
grafía del tórax o electrocardiograma), pues d e lajación ventricular (isquemia, hipertrofia o in-
otra forma sólo ayuda al encarecimiento innece- filtración miocárdica), asimismo, la insuficiencia
sario de la medicina, a la deshumanización médi- aórtica grave y y los latidos que aparecen des-
ca, propicia grandemente errores diagnósticos pués d e diástoles cortas e n fibrilación auricular
cuando un hallazgo no es correlacionado con la tienen e l mismo efecto. Por el contrario, la dis-
historia clínica de un paciente en particular y fa- m i n u c i ó n d e la d i s t e n s i b i l i d a d v e n t r i c u l a r
vorece el entorpecimiento progresivo del médi- incrementa artificialmente e l valor del área
co para reconocer y discriminar datos obtenidos valvular mitral.
mediante le exploración física.
4 Ü J
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Derived rale of left ventricular pressure rise. Its 1999, pags. 101-155.
413
Resonancia magnética,
Capítulo 13 nuclear y corazón
"El progreso científico es nuestro ramo, lo mismo que
en cualquier otro, no ha sido patrimonio de ninguna
Ra%a pretendidamente superior ni de ninguna cultu-
ra cerradamente nacionalista. El genio del hombre
de todos los tiempos y de todos los pueblos es el que
ha ido elaborando la cultura universal"
L
a Resonancia Magnética (RM) es un método gador que describió estas unidades, (unidad de
de imagen no invasivo aplicado al análisis de medición de campo magnético) que cuente c o n el
la anatomía y función cardiovascular. Al ad- software cardiovascular avanzado (figura 1).
quirir imágenes con excelente resolución tempo- La obtención de la imagen se realiza con gating
ral, espacial y contraste de tejidos c o n la aplicación cardiaco es decir sincronizando la adquisición de la
de rápidas secuencias permite caracterizar la mor- imagen con el ciclo cardiaco.
fología, disposición, dimensiones y función de las Se aplican secuencias T , e n múltiples planos
cavidades cardiacas, así como también de las estruc- ortogonales al cuerpo (axial, coronal y sagital), las
turas vasculares adyacentes. cuales se utilizan para delimitar la anatomía cardiaca,
La imagen por resonancia magnética se obtiene mediastínica, pericárdica y d e los grandes vasos.
de la interacción entre un gran c a m p o magnético, Posteriormente se aplican secuencias cine eco
un pulso d e radiofrecuencia, una bobina receptora d e gradiente obtenidas c o n p e r i o d o s d e a p n e a
y un sofisticado software. Al exponer los protones cortos, los planos adquiridos son cuatro cámaras,
de hidrógeno del cuerpo a un gran campo magnéti- eje corto d e la p o r c i ó n basal a la a p i c a l , cámara
co, se aplica un pulso d e radiofrecuencia que cam- d e salida d e l ventrículo d e r e c h o , tracto de salida
bia la dirección de los protones que al retirarse d e l v e n t r í c u l o i z q u i e r d o , dos c á m a r a s v e n t r i c u -
condiciona liberación d e energía captada por una lar d e r e c h o e izquierdo, caracterización valvular,
bobina colocada e n la superficie del paciente, que definición de anatomía vascular aórtica y
al ser manipulada por el software del equipo da pulmonar.
lugar a la imagen.
En resumen, las secuencias utilizadas en la R M C V
son las conocidas como imagen en sangre negra
(spin-echo, fast spin-echo, doble inversión recupe-
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS DE LA RMCV ración spin-echo) y sangre blanca (imágenes de cine
La exploración se realiza en un equipo d e Resonan- e n las que la sangre dentro de las cavidades es
cia Magnética de campo magnético alto 1.5 Teslas: hiperintensa y el tejido miocárdico hipointenso).
Unidades de campo magnético que se mide en La R M se aplica al análisis cualitativo y cuantita-
gaus ( G ) 1 Tesla= 10,000 G . Tesla fue el investi- tivo de la función ventricular izquierda y derecha, al
CARDIOLOGÍA
417
CARDIOLOGÍA
Tí
FIGURA 4 Cine en eje corto de la base al apex con los que se obtienen los volúmenes ventriculares
I Si
418
RESONANCIA MAGNÉTICA, NUCLEAR Y CORAZÓN
419
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 6 Valoración de perfusión
miocárdica con técnica de primer paso
en la imagen a un eje corto del
ventrículo izquierdo. A) La estimula-
ción farmacológica con adenosina en
donde se identifica defecto perfusorio
septal-inferior (zona oscura). B) En la
imagen se observa el eje corto en re-
p o s o , nótese que no hay z o n a c o n
déficit perfusorio
bien si está localizada e n el ápex. Se han estableci- ciosa y d e otras patologías que pueden producir a
do diferentes patrones de reforzamiento posterior a lesiones del aparato valvular, hace que e l diagnósti-
la administración del material de contraste e n di- co oportuno y preciso de las lesiones valvulares pueda
versas miocardiopatías. lograrse con certeza. Mediante la R M C V es posible
En el caso de displasia arritmogénica del ventrículo el caracterizar con secuencias de cine, tanto la este-
derecho (VD) permite caracterizar la pared libre del nosis como la insuficiencia valvular al observar un
V D y demostrar la presencia de sustitución grasa o "jet" (flujo sanguíneo diferenciable del resto de la
fibrosis, así como estudiar la función del V D de mane- sangre contenida en una misma cavidad) condicio-
ra cuantitativa. C o m o ya se señaló previamente, es el nado por la patología valvular, el cual se observa en
método de elección en el diagnóstico diferencial en- las imágenes c o m o ausencia de señal. Con esta
tre miocardiopatía restrictiva y pericarditis constrictiva. técnica es posible definir la configuración estructu-
ral d e la válvula, el anillo y área valvular, se puede
En miocarditis se ha definido un patrón de
aplicar la secuencia denominada mapeo d e flujo
reforzamiento de epicardio a endocardio de carác-
que permite cuantificar la velocidad del flujo y de-
ter heterogéneo (figura 10).
terminar un gradiente transvalvular (figura 11). En la
misma exploración se caracterizan las cavidades
cardiacas y se obtienen los volúmenes ventriculares
ENFERMEDAD VALVULAR c o n el fin d e determinar la repercusión hemodiná-
mica y severidad de la valvulopatía. Y se excluye la
Las enfermedades de las válvulas cardiacas constitu- presencia de trombos intracavitarios.
yen un grupo de enfermedades muy frecuentes e n
el campo de la cardiología e n nuestro país. La pre- El método de R M C V tiene una sensibilidad del
sencia de fiebre reumática, de endocarditis infec- 9 8 % y una especificidad del 9 5 % con una precisión
RESONANCIA MAGNÉTICA, NUCLEAR Y CORAZÓN
4«!
CARDIOLOGÍA
v i
V
féí
FIGURA 9 Hematoma intramiocárdico. En la re-
gión apical nótese el engrosamiento heterogé-
neo producido por un hematoma que infiltra la
pared apical del ventrículo izquierdo
FIGURA 11 Estenosis mitral. Se observa impor-
tante calcificación y estenosis valvular
f H
9
tías congénitas simples y complejas.
Para lograr un estudio detallado se aplica el méto-
do de segmentación, el cual consta en delimitar el
situs atrial, la concordancia tanto auriculoventricular
como ventriculoarterial y la valoración de la integri-
dad del septum interauricular e ¡nterventricular. Pos-
teriormente se debe caracterizar la configuración,
el diámetro y la disposición de la aorta, de la arteria
pulmonar y el drenaje venoso. Prácticamente todas FIGURA 12 Pericarditis constrictiva. Se demues-
tra el engrosamiento pericárdico. (Zona blanca
las cardiopatías congénitas pueden ser estudiadas que rodea el corazón)
422
RESONANCIA MAGNÉTICA, NUCLEAR Y CORAZÓN
por medio de la R M , de forma complementaria al puede ser utilizada por e l cardiólogo intervencio-
ecocardiograma. nista o por el cirujano para realizar procedimien-
tos y con una visión tridimensional del c a m p o lo
COMUNICACIÓN INTERATRIAL E INTERVENTRICUIAR cual permitirá una planeación estratégica para abor-
En el caso de una comunicación atrial o ventricular, dar con mayor certeza el tratamiento de cada caso.
además d e que es factible encontrar el defecto septal A d e m á s , permite e l seguimiento a corto y largo
c o n los cortes ordinarios, se puede realizar una plazo de los pacientes una vez que se haya corre-
prueba en la cual se anula la señal d e la sangre que gido la malformación congénita.
existe en el lado izquierdo c o n el fin de delimitar
un cortocircuito, d e esta forma, incluso e n presen-
cia de defectos septales muy pequeños. La sensibi- PATOLOGÍA VASCULAR
lidad y especificidad d e la R M C V es del 9 0 % en la
identificación d e defectos del septum atrial. ANEURISMA AÓRTICO
El eco transesofágico puede ser también utilizado en
COARTACIÓN DE AORTA enfermedad de aorta torácica es|)ecíficamente, parti-
Es una enfermedad congénita frecuente e n nues- cularmente en el diagnóstico de disección aórtica,
tro medio. Mediante la R M C V es posible recono- sin embargo es relativamente invasivo y tiene resolu-
cer la presencia de la coartación y definir la reper- ción espacial limitada lo cual dificulta el diagnóstico
cusión fisiológica que ha tenido sobre el corazón La resonancia magnética (RM) se ha convertido
mediante e l análisis d e la función ventricular iz- en el método d e primera línea e n la evaluación de
quierda. A d e m á s , se puede estimar el gradiente aorta. La R M es capaz de realizar una exploración
de flujo a través de la zona de coartación aplicando multiplanar c o n la utilización d e material de con-
la secuencia de mapeo de flujo, cuantificando a su traste no nefrotóxico y sin la utilización d e radiación
vez la circulación colateral. El volumen de flujo es
estimado e n dos localizaciones: e n la porción jus-
to distal a la coartación y a nivel diafragmático. La
presencia d e circulación colateral indica coarta-
ción significativa (figura 131.
VALVULOPATÍAS
También es posible visualizar las válvulas cardiacas
c o n e l fin de analizar la configuración anatómica y
valorar su funcionamiento.
VASOS SANGUÍNEOS
Es posible, para un mejor estudio de la vasculatura,
realizar angiorresonancia, la cual nos aporta imáge-
nes e n tercera dimensión más claras donde se pue-
den definir adecuadamente las estructuras vasculares
tanto arteriales como venosas y definir su relación
con cavidades cardiacas.
«4.
RESONANCIA MAGNÉTICA, NUCLEAR Y CORAZÓN
aorta descendente. Causas menos frecuentes son y función d e l anillo valvular mitral, función valvular
trauma, anormalidades congénitas, desordenes del aórtica, función ventricular izquierda y
tejido conectivo c o m o Erhlers-Danlos y síndrome angioresonancia posterior a la administración de
de Marfan. La R M es el método ideal e n la evalua- material de contraste endovenoso con manipula-
ción de aneurismas por su capacidad multiplanar. ción M I P multiplanar e n la que se realizan medicio-
Todas las técnicas antes descritas son ideales en el nes segmentarias e n plano valvular aórtico, seno de
diagnóstico de aneurismas; sin embargo la más útil Valsalva, porción sinotubular, aorta ascendente, arco
en este caso es el angiorresonancia para determinar aórtico proximal, arco aórtico distal, aorta descen-
la localización, extensión, diámetro exacto, así como dente torácica (figura 16).
involucro d e troncos supra-aórticos o arterias
viscerales. La R M es utilizada en el monitoreo y
ENFERMEDAD VASCULAR RENAL
seguimiento e n la progresión de la e n f e r m e d a d ,
El método de R M permite u n a exploración no
para obtener resultados óptimos es importante el
invasiva en pacientes c o n sospecha de estenosis ar-
realizar mediciones e n la misma localización para
t e r i a renal s i n u t i l i z a r m a t e r i a l d e c o n t r a s t e
que exista exactitud e n el seguimiento. Se realiza
nefrotóxico, radiación ionizante o angiografía digital
complemento con imágenes de cine para evaluar
c o n todas las complicaciones asociadas q u e esto
la repercusión hemodinámica de la enfermedad
conlleva. Con angiorresonancia se obtiene una ade-
e n el ventrículo izquierdo y la función valvular
cuada valoración de la anatomía vascular renal en
aórtica (figura 15).
caso de planeación d e revascularización renal, can-
didatos a donadores renales para valoración de la
vascularidad para planeación de anastomosis, y eva-
luación de involucro vascular en caso de neoplasia.
SÍNDROME DE MARFAN
426
BIBLIOGRAFÍA
4
I Cardiología nuclear y tomografía
Capítulo 14 1 por emisión de positrones ( P E T )
Ir "El médico ayuda por lo que sabe, no por lo que ignora "
L
inyectado en el paciente y q u e es captado por el
A C A R D I C X O C Í A N U C I E A R SE HA C O N S T I T U I D O C O D I O miocardio o es mezclado c o n la sangre q u e está
una verdadera subespecialidad e n el amplio en la cavidad cardíaca. Idealmente, esta radiación
campo de la cardiología moderna. Los méto- no debe interactuar c o n el paciente y debe ser to-
dos d e i m a g e n c o m o el e c o c a r d i o g r a m a , la talmente absorbida por el detector (gammacámaral.
cardiología nuclear y recientemente en nuestro país Sin embargo, cierta interacción ocurre condicio-
el PET y la resonancia magnética se han converti- nando q u e una pequeña dosis de radiación se de-
do en u n a herramienta de diagnóstico q u e c u e n - posite en el enfermo, generalmente la equivalente
tan c o n la ventaja de n o ser invasivos, así c o m o a la originada por una radiografía d e l tórax.
también disminuyen la cantidad de procedimien- La radiación gamma emitida por el paciente
tos innecesarios. El desarrollo importante de la tec- ¡nteractúa c o n la c á m a r a , la cual tiene 3 principa-
nología e n los últimos años ha propiciado la crea- les componentes: un colimador d e plomo q u e
c i ó n de g a m m a c á m a r a s complejas, programas envía e n dirección apropiada los rayos g a m m a
sofisticados de computación y la utilización de hacia un cristal de yoduro de sodio activado c o n
nuevos radionúclidos permitiendo el crecimiento talio, segundo c o m p o n e n t e del sistema. Al
d e la aplicación de esta disciplina a la práctica clí- interactuar los rayos gamma c o n el cristal se libera
nica y a la investigación. El especial énfasis de la energía en forma de fotones d e luz, visibles (cen-
cardiología nuclear e n la caracterización funcional telleo) q u e pasa a tubos fotomultiplicadores los
de las alteraciones cardiovasculares permite obte- cuales transforman la luz en pulsos eléctricos y
ner información del proceso fisiopatológico no fá- amplifican la señal original.
cilmente observado mediante otros procedimien-
tos diagnósticos. A continuación se describen las Esta señal es convertida en información digital
bases físicas de esta disciplina, después se analiza- y enviada a una computadora, donde se procesa
rán las principales técnicas y aplicaciones clínicas la información y se obtienen imágenes tanto está-
de la misma: ticas c o m o dinámicas que son mostradas e n la pan-
talla de la computadora, para su análisis.
CARDIOLOGIA
El PET es un método d e imagen novedoso en el flujo sanguíneo miocárdico regional, mientras las
cardiología nuclear, que cuantifica procesos fun- tomadas de 4 a 4 8 horas después valoran la viabili-
cionales produciendo información de la fisiología dad miocárdica.
y fisiopatología a nivel molecular no posible de El otro gran grupo utilizado e n cardiología nu-
obtener con otros métodos. El PET es un procedi- clear para valorar la perfusión miocárdica son los
miento extremadamente sensible y específico que agentes unidos al tecnecio''"", como e l - Hexakis
permite inclusive la detección subpicomolar d e 2-metoxi 2-isobutil isonitrilo (Sesta M I B I ) y e l
ciertos componentes. tetrofosmin. Tienen varias ventajas sobre el talio
La técnica se basa e n la utilización de radio- poseen energía ideal para tomar imágenes con
isótopos de vida media corta emisores de positrones la cámara (140 KeV), una vida media más corta (6
producidos e n un ciclotrón. En el ciclotrón un horas) lo que permite utilizar dosis mayores (más
isótopo determinado es bombardeado c o n un haz de 3 0 m C i por día).
d e protones, produciendo un elemento inestable La acumulación inicial e n e l miocardio es simi-
q u e d e c a e produciendo positrones. U n positrón lar a la del talio y depende del flujo sanguíneo
/ 0 1
CUADRO 1
C A R A C T E R Í S T I C A S D E LOS R A D I O N Ú C L I D O S U T I L I Z A D O S E N C A R D I O L O G Í A N U C L E A R
2. V i d a m e d i a física (hr) 74 6 6
6 - 10 m í n i m a
3. Dosis (mCi) 30 30 30
2.5-4
4 . M e d i c i ó n d e flujo s a n g u í n e o Sí Sí Sí
Sí
Sí No -?-
5. Medición de viabilidad Sí
No No
6. R e d i s t r i b u c i ó n Sí Sí ( m í n i m a )
No Sí
7. S i n c r o n i z a c ó n c o n E C G Sí Sí
8. Adquisición de imagen
(mínima):
• Planar (por vista) 10 5 1 -2 5
• SPECT 21 13-21 5 13-21
4 - ^
Modificado de Zaret B.L., Wackers F.J., New England Journal Medicine, 1993;329:775-783.
lidad y de bajo costo en comparación con otras téc- T E C N I C A PLANAR, SPECT, PET Y SISTEMAS
nicas, como e l PET. DE CAMARAS HÍBRIDAS
El P E T c o n " N - a m o n i a es u n a t é c n i c a no
invasiva con mayor precisión que el S P E C T con Tl- Existen varias técnicas para la adquisición y el pro-
201 o Tc-99m-Sestamib¡ para el estudio de pacien- cesamiento de las imágenes de perfusión miocár-
tes con cardiopatía isquémica. El PET tiene una dica, c o m o son: la técnica planar, la tomografía
alta sensibilidad y especificidad para la medición computada por emisión de fotón simple (SPECT),
cuantitativa del flujo coronario, con lo cual pode- el sistema de cámara híbrida o de coincidencia
mos establecer la repercusión fisiológica d e la en- (SPECT-PET) y la cámara PET y PET-CT, esta última
fermedad arterial coronaria a lo largo de su histo- combinando el PET con la tomografía computada.
ria n a t u r a l . B o l y cois d e m o s t r a r o n q u e las En la técnica planar se adquieren las imágenes
mediciones de flujo a través d e PET con ' N-amon¡a !
431
CARDIOLOGÍA
«4.
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
3ítmfcltfAV^lK/JalJEI | I M P R E G N A C I Ó N C O N T A L I O '"
(\ y 'X Antero-
/ s \ lateral
Postero- S e
P t u m
s e
P , a l
Ápex Inferoapical
FIGURA 1 Imagen planar del corazón en sus 3 principales vistas. A: a la izquierda, en posición anterior;
en medio, posición oblicua anterior izquierda; a la derecha en posición lateral izquierda. Se señalan las
regiones anatómicas del corazón que se valoran en cada posición. B: imagen planar de un paciente con un
defecto de perfusión posteroseptal
4
CARDIOLOGÍA
| EJE CORTO~fr-
inferior
w w
Medio Medio
Apical ventricular ventricular
........
DA CD CX
FIGURA 5 Imágenes topográficas del corazón en eje corto y eje largo vertical. Obsérvese cómo la arteria
descendente anterior generalmente irriga la parte anterior y anteroseptal; circunfleja irriga la pared alta e
inferolateral, y la coronaria derecha irriga la región inferior e inferoseptal. El ápex habitualmente es irriga-
do por la descendente anterior, aunque puede hacerlo la circunfleja o la coronaria derecha
4 435
CARDIOLOGÍA
1. Basal anlenor
2 Basal anteroseptal
3. Basal interoseplat
4. Basal interior
5 Basal inferolateral
6 Basal anterolaieral
7 Medo ameno»
8 Medo anterosepial
9. Medo inferoseptal
10 Meólo iníenor
11 M e a o inlerolaterai
12 Medio anlerolaleral
•
16 Apical lateral m a segmentación propuesta
17 Apex para otras técnicas diagnósti-
LAD RCA LCx cas (Resonancia m a g n é t i c a ,
ecocardiografía y PET)
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
« - » - > - > f i f i
I ( p c t ion
fr«tion - BU
.'"-TI I T u
tut.il
Seor» • 7/*.
FIGURA 8 Programa de cuantificación Tool Box (Emory): permite analizar en forma semicuantitativa la
extensión y severidad de los defectos de perfusión, calificando cada segmento miocárdico en una escala
de 0 a 4 de acuerdo al grado de alteración de la perfusión. Se obtiene además la representación de la
perfusión en mapas polares e información de la función ventricular
4¡7
CARDIOLOGÍA
Read
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1- APICAL i* 1 MID-VENTRICLE Jsuxtj e - SGATEO
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438
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
0 • •, •>
FIGURA 10 SPECT sincronizado: mediante esta técnica se obtiene análisis simultáneo de la perfusión
y la función ventricular. Permite representar en forma tridimensional la movilidad del ventrículo
izquierdo. En forma estática, la rejilla delimita el tamaño del corazón en diástole y la en su interior se
observa el tamaño de la cavidad al final de la sístole
Esf • • o O
EC
Esf
ELV ELH
FIGURA 11 Estudio de perfusión miocárdica normal, se observa una captación homogénea del
radiotrazador en todas las paredes del ventrículo izquierdo
4 439
CARDIOLOGÍA
Esf
31 32 35
Rep O O O
31 32
Esf
15
i 4 16
9 9
Rep
14 15 16
440
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
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441
CARDIOLOGÍA
t r e c e
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FIGURA 14 Estudio con dos isótopos (Talio reposo/ Mibi esfuerzo), se observa un infarto del miocardio
inferolateral con isquemia ligera residual. Es un estudio ideal para pacientes con infarto del miocardio
previo porque permite la búsqueda de viabilidad al hacer tomas de redistribución tardía (24 hrs) de talio
Esfuerzo
r
4 hr
24 hr
44.»
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
O O O O O D Q O D O O O
O O O O O O O O O O O G
C O O O P C C C 0 0 0 3
•
A n o n n h í \ h i\
« • O A O í» I I n R *
(i n ft A ÍI ii ii i» H
FIGURA 17 Estudio de perfusión miocárdica con amonia en fase de reposo- estrés- Cold Pressor Test
(CPT) observándose una captación del trazador adecuada en todos los segmentos miocárdicos en las 3
fases del estudio
CARDIOLOGÍA
37« IBdl S - S I t M *
O
lAO LCX ftCA
1 \ 1
\ w
T y
444
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
UNIVKKSIOADNACMONAJ. AUTONOMA U E M E X I C O
UNIDAD PET-OCLOTBON
POOvWMyituiiy
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445
CARDIOLOGÍA
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
4
CARDIOLOGÍA
FIGURA 22 Ventri-
culografía con téc-
nica de primer
paso. Imágenes se-
cuenciales del paso
de re**"', albúmina
por las cámaras
cardiacas, con dia-
gramas explicativos
a su lado. En la ima-
gen 1 se observa el
llenado de la vena
cava superior, aurí-
cula y ventrículo derechos. En la 2 se observa el paso del radiocúclido por la arteria pulmonar y los
pulmones. En la 3 se puede observar el ventrículo izquierdo y la aorta. La número 4 es una imagen más
tardía del paso del radiotrazador por las cavidades izquierdas. (Cortesía Dr. Alberto Zimbrónl
FIGURA 23 Cálculo de
alf . ta«j»T.
un cortocircuito cardiaco
de izquierda a derecha a
través de la obtención de 'oom H U I
I .ul*t"«'H boluaI
una curva tiempo-activi- ' M •»•'* tt-a: 8.07J3
dad del pulmón. Para ello ( .•
r
«na I l » « i 16 . ',00
se necesita determinar la ••Cl'culilio" Curvli
Fu Kart l 19.000
actividad en un sitio de
la vena cava y uno de los Fu ana lian zi.'.oe
pulmones. Normalmente C2 - C I «TMOD
faKCNTOCÍ IS a.3.0
la curva debe descender
una vez que pasa el ma-
terial radioactivo a través
del pulmón. En el caso
mostrado aquí, la curva «.tr I « OS • 2.)u
se mantiene después de
un descenso inicial, con
descenso lento posterior
que indica el paso de
material radioactivo por
segunda ocasión en el
pulmón, diagnóstico de
cortocircuito de izquier-
da-derecha. El Q P Q S
calculado fue de 2.3 y el
paciente tenía una comu-
nica!, ion interventricuiar
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
CUADRO 2
PROTOCOLOS DE ESTIMULACIÓN FARMACOLÓGICA
Radiotrazador
I
DIPIRIDAMOL
DOSIS:
4
0.56 mg/kg
4 min. 7 min.
Caminata en banda
siempre
que sea posible
Radiotrazador
ADENOSINA
I
DOSIS:
140 uglv^min
3 min. 6 min.
Radiotrazador
4 > r
DOBUTAMINA
DOSIS:
na E3 Km
Lig/kg/min
12 14 15 m i n .
de perfusión" los q u e hay q u e aprender a recono- factores q u e pueden condicionar que una imagen
cer para no sobreestimar la presencia de isquemia aparezca c o m o normal c u a n d o existe isquemia
miocárdica. Los factores más importantes que con- miocárdica importante.
dicionan estas imágenes falsas positivas son debi-
das a artefactos de movimiento y de atenuación 1. M o v i m i e n t o d e l p a c i e n t e
durante la adquisición o a errores durante el pro- Es una causa frecuente de artefactos originados
cesamiento de las imágenes. También existen otros durante la adquisición d e las imágenes, afortuna-
4 4 9
CARDIOLOGÍA
damente fáciles de identificar. Los cambios que el la atenuación puede ocurrir no sólo e n la pared
movimiento origina e n las imágenes tomográficas anterior sino también c o n la lateral. El paciente
cardiacas dependen de la dirección del movimien- obeso también puede presentar artificios de ate-
to, el momento en que éste ocurre, si es abrupto o nuación. Los defectos de atenuación en la pared
gradual y si el corazón regresa a su posición inicial. inferior pueden ser evitados si la adquisición se hace
Estos movimientos pueden deberse a una respira- en posición prona. También el estudio de SPECT
ción agitada a movimientos del tórax o más fre- sincronizado (Gated-SPECT) puede ser de utilidad
cuentemente a modificación de la posición del para diferenciar defectos reales de aquéllos debi-
brazo y hombro. Se ha descrito un movimiento dos a atenuación.
paulatino del corazón hacia arriba después de un
ejercicio físico e n la pared inferior, simulando una
4. A u m e n t o local de la actividad m i o c á r d i c a
isquemia inferior.
En ocasiones existe un incremento de la radioac-
El artificio d e movimiento debe ser prevenido tividad en algún punto específico del miocardio,
y reconocido por el técnico responsable del estu- contra el cual se normaliza el resto del las pare-
dio. El paciente debe ser instruido para relajarse y des del corazón lo que hace que esa hiperactivi-
respirar normalmente durante el estudio, así c o m o dad aparezca c o m o normal y en el resto del mio-
para no moverse y d e b e ser observado continua- cardio como una disminución relativa en el número
mente durante la adquisición. de cuentas.
La mejor manera de reconocer un artefacto d e
Alguno de estos focos de hiperactividad pue-
movimiento es por inspección visual d e las múlti-
den ser el músculo papilar anterior y posterior y la
ples imágenes planares adquiridas, vistas en modo
dinámico (cine). hipertrofia del septum.
6. Patrones específicos
2 . Actividad visceral abdominal superimpuesta
Se observa con mayor frecuencia al utilizar el MIBI a) Bloqueo de rama izquierda. Produce una
debido a que su excreción se lleva a cabo princi- disminución d e la perfusión e n el septum.
palmente a través del sistema hepatobiliar, lo que
genera actividad importante e n el hígado e intesti- b) Bloqueo de rama derecha. No produce nin-
no que pueden crear imágenes artificiales de hi- guna alteración específica en la perfusión.
poperfusión, sobre todo, en la pared inferior. Esta c) Hipertrofia miocárdica. Está representada
actividad puede evitarse si se realiza la adquisición por una hipercaptación focal en alguna zona
6 0 min después de la inyección en reposo; 30 min del miocardio. Puede observarse e n la mio-
después del esfuerzo físico ó 60 min después de la
c a r d i o p a t í a h i p e r t r ó f i c a , la hipertensión
estimulación farmacológica.
arterial o la enfermedad valvular.
450
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
después de la oclusión coronaria, probablemente zado (máximo 6-8 horas después de su apli-
debido a la limitación de perfusión en el tejido cación). Las imágenes obtenidas represen-
necrótico y desarrollo lento d e flujo colateral. Sin tarán el flujo sanguíneo miocárdico regional
embargo, algunos estudios han mostrado eviden- existente al momento de la inyección.
cia de que el pirofosfato puede unirse a tejido mio- Se obtendrá información del tamaño del
cárdico isquémico y no necrótico. Ese es uno de defecto d e perfusión e n el área de la arteria
los factores que ha limitado su utilización clínica relacionada con el infarto así como del área
e n el infarto agudo. Su principal limitación ha sido e n riesgo. Nuevas imágenes, previa aplica-
su tendencia a ser negativo e n enfermos c o n infar- ción de otra dosis de M I B I , se pueden tomar
to agudo subendocárdico, que es el grupo que después del tratamiento trombolítico, gene-
generalmente ofrece más duda diagnóstica. ralmente uno o dos días después.
El otro agente, anticuerpo antimiosina unido al Una reperfusión exitosa consistirá en una
i n d i o ' " es un marcardor más específico de necrosis disminución en el tamaño del defecto d e
miocárdica, dirigido contra la miosina. General- perfusión miocárdica. Esto tiene gran utili-
mente es aplicado en las primeras 24 horas des- dad clínica ya que la cuantificación tempra-
pués del infarto, c o n toma de imágenes 24 a 4 8 na del defecto de perfusión miocárdica resi-
horas después. La intensidad de su captación no dual indica el éxito o falla del tratamiento
correlaciona c o n el tamaño del infarto sino con el trombolítico y la extensión del infarto resi-
grado de flujo sanguíneo restablecido e n la zona dual. Si el tratamiento no ha sido exitoso,
del infarto. U n a d e sus desventajas es que un estu- otras medidas terapéuticas pueden ser apli-
dio puede permanecer positivo por varias sema- cadas, tales c o m o angioplastia o cirugía.
nas lo que potencialmente interfiere con la capa-
cidad d e detectar un infarto nuevo de un antiguo.
b) Angioplastia coronaria y colocación de
La inyección de talio-"" y T c " - S e s t a M I B I pue-
m
STENT
de ser útil para valorar la localización y extensión La perfusión miocárdica, principalmente con
del defecto de perfusión, siempre y cuando se tenga T c ^ - S e s t a MIBI o tetrofosmin es un méto-
un estudio previo comparativo. De no ser así, un d o efectivo para definir el éxito del procedi-
defecto d e perfusión que representara un infarto miento en angioplastia, así c o m o para de-
antiguo podría considerarse c o m o reciente. tectar reestenosis, complicación frecuente de
este procedimiento.
Valoración d e la eficacia d e l tratamiento d e Se puede predecir la localización anató-
reperfusión mica del defecto (vaso coronario afectado) y
Esta se ha vuelto actualmente el área donde el es- la cantidad de isquemia presente. Para nom-
tudio d e perfusión miocárdica tiene mayor utili- brar c o m o exitoso a un procedimiento de-
d a d y a q u e o t r o s p r o c e d i m i e n t o s c o m o la ben realizarse dos estudios, uno antes de la
coronariograíía son muy imprecisos para identifi- angioplastia y otro después de la misma (ge-
car el área e n riesgo durante un infarto agudo así neralmente de una a tres semanas después).
c o m o la eficacia del tratamiento de reperfusión. Si el procedimiento es exitoso, ocurrirá
una disminución e n la extensión del defec-
a) Trombolisis to de perfusión después del procedimiento.
El TC^-Sesta MIBI o el tetrofosmin resultan Si se requiere una angioplastia primaria en
ideales para valorar la eficacia del tratamien- caso de un I A M , la inyección del MIBI pue-
to trombolítico en presencia de un infarto d e realizarse inmediatamente antes d e la
agudo del miocardio (IAM). Debido a la casi dilatación del vaso coronario y las imágenes
inexistente redistribución de este agente, las pueden tomarse varias horas después del
características del flujo sanguíneo miocárdi- procedimiento, una vez que e l paciente se
c o existente al momento d e su inyección encuentre estable; estas imágenes represen-
queda "congelada" por varias horas, por lo tarán el estado d e flujo coronario antes de
que las imágenes no necesitan tomarse pron- la dilatación con el balón.
to. Por consiguiente, el radionúclido puede
inyectarse antes d e iniciar el tratamiento
c) Angina inestable
trombolítico y las imágenes pueden tomar-
La eficacia del estudio de perfusión miocár-
se una vez que el paciente se haya estabili-
dica en esta entidad consiste en obtener una
CARDIOLOGÍA
T é c n i c a s d e estudio d e la viabilidad
3 . DIAGNÓSTICO DE VIABILIDAD MIOCÁRDICA miocárdica
La meta de la valoración de la viabilidad miocárclie a
es diferenciar, prospectivamente a los pacientes con a) Análisis de la perfusión miocárdica.
disfunción ventricular izquierda irreversible de la Para que exista viabilidad miocárdica se requie-
potencialmente reversible. Las intervenciones te- re d e la integridad de la membrana celular y
r a p é u t i c a s sobre las regiones m i o c á r d i c a s n o d e una actividad metabólica conservada. La
funcionantes pero viables pueden mejorar nota- captación y retención celular del talio-'"' es un
blemente la función ventricular global, así c o m o el proceso activo que depende de la actividad de
«4-
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
la membrana celular y del flujo sanguíneo, por to del miocardio previo o sin él. Sin embargo, para
lo que el talio es útil como agente marcador de establecer claramente el papel que desempeña este
viabilidad, independientemente de si e n la zona método d e diagnóstico y el valor que aporta e n la
d e su captación está preservada o no la fun- estratificación d e riesgo se requiere la incorpora-
ción ventricular. Los principales protocolos que ción de todos los datos posibles del paciente, es
utilizan talio son las imágenes de esfuerzo-re- decir, aspectos demográficos, historia clínica, exa-
distribución-reinyección o las d e redistribución men físico, función ventricular, anatomía coronaria
tardía de talio, ya sea solo o junto c o n Te-'**" y pruebas d e laboratorio y gabinete.
sestamibi e n el protocolo dual. Se han utiliza- El sistema S P E C T analiza la distribución del
do agentes unidos al tecnecio (sestamibi, tetro- radionúclido dentro del miocardio en imágenes
fosmin) como marcadores de viabilidad, a pe- tomográficas dispuestas e n tres ejes: corto, largo
sar de su poca redistribución. vertical y largo horizontal. Para realizar un análisis
Esta capacidad de detección se incrementa semicuantitativo se puede dividir al corazón e n 17
c o n la utilización de nitratos previo a la aplica- segmentos. C a d a segmento es evaluado en una
ción del radiotrazador. escala de 5 puntos dependiendo de la captación
del trazador:
b) Análisis de la función ventricular. Reserva
0 = Normal
inotrópica.
1 = Ligera disminución de la captación
Gracias a la utilización del SPECT sincronizado
2 = Disminución moderada
y de la ventriculografía radioisotópica se pue-
3 = Disminución importante
de medir la función ventricular global izquier-
4 = Ausencia de perfusión
da y hacer una valoración visual de la función
regional. La premisa principal de su utilización Esta clasificación se realiza tanto e n las imáge-
r a d i c a e n demostrar q u e e n p r e s e n c i a de nes en reposo c o m o e n esfuerzo. La suma de las
disfunción ventricular sistólica, existe reserva calificaciones de las imágenes en reposo constitu-
inotrópica en la fibra miocárdica (lo cual equi- yen la puntuación en reposo ("PR" o " S R S " de sus
vale a asumir la presencia de tejido viable). La siglas en inglés) y las de estrés, la puntuación de
función ventricular sistólica es obtenida en con- esfuerzo ("PE" o " S S S " por sus siglas en inglés). Exis-
diciones básales y después de la administración ten estudios que demuestran la correlación entre
d e dobutamina (inotrópico positivo) a dosis puntuaciones altas d e la PR y PE y una evolución
bajas (5-10 gammas). desfavorable. U n a PR alta i> 12) significa una z o n a
La demostración d e viabilidad se manifiesta de necrosis importante, mientras que una PE alta
c o m o un incremento en la movilidad parietal (>12) en ausencia de defectos e n las imágenes de
d e la zona afectada después de la aplicación reposo indica isquemia importante.
d e l inotrópico y no necesariamente una mejo- U n objetivo importante de los métodos de diag-
ría e n la función global ventricular (incremento nóstico no invasivos es la identificación d e la ex-
e n la fracción de expulsión). tensión de la enfermedad coronaria, la cual de-
O t r o método para el estudio d e la viabilidad pende de dos factores: 1) El número de segmentos
miocárdica es el PET, el cual es considerado involucrados e n el defecto d e perfusión y 2) el nú-
c o m o el "gold standard" por ser la prueba más mero de vasos afectados, el cual es sugerido por el
sensible y específica para el diagnóstico de via- número de territorios coronarios c o n defectos de
bilidad miocárdica. Más adelante describiremos perfusión. Cuanto más territorios se encuentran
c o n mayor detalle esta técnica de estudio. a l t e r a d o s , mayor será el n ú m e r o de vasos
coronarios c o n problemas obstructivos. En general
existe una conelación directamente proporcional
4. PRONÓSTICO DEL ENFERMO CON
entre el grado d e estenosis de un vaso y la severi-
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
dad de un delecto de perfusión.
La valoración pronostica del paciente con car-
diopatía isquémica juega un papel vital en el mo- Los defectos con calificaciones de 3 y 4 están
mento actual. U n a de las mayores aplicaciones de generalmente asociados a lesiones obstructivas
los estudios de perfusión miocárdica es la estratifi- coronarias mayores del 9 0 %, mientras que los de-
cación d e l riesgo en estos pacientes. El valor pro- fectos con calificación 1 y 2 se asocian con esteno-
nóstico d e los estudios de perfusión miocárdica ha sis no significativa (40- 5 0 % ) . Existen otros pará-
sido bien demostrado, tanto en pacientes con infar- metros que son indicadores de gravedad, asociados
4^
CARDIOLOGÍA
con mal pronóstico entre los cuales están los si- D e manera significativa, los principales factores
guientes: predictores para el desarrollo de episodios cardiacos
(muerte, infarto del miocardio, angina recurrente o
1. Aumento de la captación pulmonar de
falla ventricular) son el tamaño final del defecto de
talio. R e l a c i o n a d o c o n e l desarrollo de
perfusión, la presencia d e isquemia residual y la
disfunción ventricular izquierda durante el
fracción d e expulsión.
esfuerzo, f e n ó m e n o q u e también p u e d e
observarse cuando se utiliza T e sestamibi. Por otro lado, la presencia de un estudio d e
perfusión normal e n enfermos c o n cardiopatía
2 . Dilatación postesfuerzo del ventrículo iz- isquémica tiene un pronóstico muy favorable, c o n
quierdo. Manifestación de isquemia impor- muy baja probabilidad de eventos cardiacos (muer-
tante inducida durante el ejercicio, general- te, reinfarto o angina inestable), con una tasa de
mente por isquemia difusa del endocardio mortalidad menor al 0.5 % por año.
o enfermedad coronaria bi o trivascular im-
portante. 5. VALORACIÓN PREOPERATORIA
Una aplicación clínica importante de los estudios
3. Determinación de la fracción de expulsión
d e p e r f u s i ó n m i o c á r d i c a es la e v a l u a c i ó n
global y regional como parámetro de la fun-
preoperatoria de enfermos cardiópatas que ten-
ción ventricular sistólica. Una fracción de ex-
drán una cirugía no cardiaca. La presencia de de-
pulsión baja se asocia con mal pronóstico.
fectos reversibles en los estudios con talio o MIBI
En pacientes c o n infarto antiguo, la extensión ha sido encontrada c o m o el indicador más impor-
del defecto de perfusión e n reposo y el grado de tante para predecir un aumento en el riesgo de
isquemia residual a y u d a n a establecer el pronós- eventos cardiacos isquémicos perioperatorios.
tico del paciente. Se ha observado q u e la existen-
cia d e vasos colaterales e n presencia d e oclusión 6. VALORACIÓN DE LA FUNCIÓN VENTRICULAR
coronaria disminuye la extensión y el grado d e Mediante el uso de radionúclidos es posible eva-
severidad d e un defecto de perfusión analizado luar la f u n c i ó n ventricular de una m a n e r a no
por gammagraíía. La importancia d e la detección invasiva, tanto cualitativa c o m o cuantitativamente.
d e isquemia residual e n pacientes postinfartados En la actualidad existen tres técnicas para valorar
ha sido descrita desde los estudios iniciales c o n la función ventricular: 1) Técnica de primer paso;
-'"'TI y esfuerzo físico. La d e t e c c i ó n d e isquemia 2 ) ventriculografía d e equilibrio y 3) e l C a t e d -
residual y en particular, cuando se localiza en múl- SPECT. Las dos primeras nos sirven para el análisis
tiples territorios anatómicos o es muy grave, cons- de las funciones sistólica y diastólica de los ventrí-
tituye el principal factor pronóstico para el desa- culos, para conocer el volumen y el tamaño de los
rrollo de episodios cardiacos. El factor pronóstico m i s m o s , así c o m o para e v a l u a r la m o v i l i d a d
más importante observado es la presencia d e parietal. El SPECT ayuda a valorar la movilidad y
isquemia en múltiples territorios cardiovasculares. el engrosamiento sistólico de las paredes, así c o m o
Los estudios d e perfusión miocárdica c o n esfuer- para analizar los volúmenes diastólicos y sistólicos
z o f a r m a c o l ó g i c o , m e d i a n t e el uso d e finales del ventrículo izquierdo y con ello calcular
vasodilatadores e n p a c i e n t e s e n etapa aguda la fracción de expulsión.
postinfarto, son igualmente útiles e n la estratifica-
c i ó n d e riesgo.
a) T é c n i c a d e p r i m e r paso
En pacientes que llegan c o n dolor precordial En este procedimiento se analiza el tránsito en
a servicio d e urgencias e l estudio de medicina la circulación (incluyendo la cámara cardiaca)
nuclear nos permite, además d e establecer el de un radionúclido (generalmente tecnecio) ad-
diagnóstico, realizar una estratificación ministrado en un bolo intravenoso. El estudio
pronostica del m i s m o . Basados e n la premisa d e debe hacerse inmediatamente después de la
q u e la identificación oportuna d e pacientes d e inyección y e n los 15 a 30 seg siguientes. La
alto riesgo puede ayudar a incidir y modificar su dosis a administrar varía de 20-30 mili-Curies,
historia natural mediante la toma d e medidas dependiendo del radiofármaco al cual se una
terapéuticas a d e c u a d a s que r e d u z c a n el riesgo, el Tc-99m. El bolo es separado temporal y ana-
la utilización t e m p r a n a de los estudios de perfu- tómicamente e n cada ventrículo por lo que la
sión m i o c á r d i c a c o n m e d i c i n a nuclear p u e d e función ventricular puede ser medida de ma-
modificar e l pronóstico. nera independiente en cada uno d e ellos.
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
4«?
CARDIOIOCÍA
ma constituyen una herramienta de estudio funda- Los métodos de cardiología nuclear e n esta área
m e n t a l e n pacientes c o n e n f e r m e d a d arterial pueden dividirse e n tres grandes grupos, mismos
coronaria, ya que permiten la valoración simultá- que incluyen los estudios de primer paso, la ven-
nea de la perfusión y d e la función ventricular. El triculografía en equilibrio y los estudios de perfu-
uso de radiotrazadores unidos al Te ""'(sestamibi
1
sión miocárdica.
y tetrofosmin), han hecho posible esta adquisi-
c i ó n c o n una sola dosis de radiotrazador. Este Estudios de primer paso.
método permite obtener e n forma cuantitativa la Este método, basado e n la teoría d e dilución de
fracción d e eyección del ventrículo izquierdo, la un indicador, se utiliza principalmente para la de-
movilidad regional parietal y engrosamiento sis- tección, localización y cuantificación de los corto-
tólico, volúmenes telediastólico y telesistólico del circuitos cardiacos antes y después de una cirugía
VI y la presencia de dilatación transitoria del VI correctiva. Permite estudiar también la función
post-esfuerzo. ventricular así como visualizar patrones d e circula-
G e r m a n o y cois., desarrollaron un programa ción normal y anormal e n el corazón, pulmón y
para sincronizar las imágenes de perfusión mio- los grandes vasos.
cárdica con cada ciclo cardiaco mediante el regis- En un estudio normal se obtiene una c u r v a
tro electrocardiográfico del paciente. Se realiza una tiempo-actividad d e l p u l m ó n característica, la
reconstrucción tomográfica de las imágenes, lo cual c u a l muestra una pendiente d e ascenso rápida
permite evaluar en forma bidimensional, tridimen- q u e c u l m i n a e n un pico q u e representa la ra-
sional y en tiempo real las imágenes pertenecien- diactividad q u e a l c a n z a e l p u l m ó n , seguida de
tes al miocardio ventricular. un descenso más lento y posteriormente d e otro
El desarrollo de métodos cuantitativos auto- pico de menor amplitud que representa una frac-
máticos (software Q G S , Cedars-Sinai) reduce la c i ó n d e la cantidad inicial d e l trazador q u e re-
necesidad de una intervención manual del gresa a l p u l m ó n a t r a v é s d e la c i r c u l a c i ó n
procesador delimitando automáticamente las su- sistémica (figuras 22 y 23). Esta c u r v a se altera
perficies epicardicas y endocardicas, a partir d e de manera característica en presencia d e un cor-
lo cual se deriva el cálculo d e las curvas de los tocircuito de izquierda a d e r e c h a , lo que p e r m i -
volúmenes sistólico, diastólico y la FE del VI (fi- te su diagnóstico y c u a n t i f i c a c i ó n , calculando la
gura 7). relación del flujo p u l m o n a r y sistémico ( Q p / Q s )
así c o m o su l o c a l i z a c i ó n .
El estudio con Gated-SPECT cuenta con dife-
rentes aplicaciones clínicas, las cuales se mencio- El método es de menor utilidad en presencia
nan a continuación: d e un cortocircuito d e derecha a izquierda, en
donde se prefiere utilizar el método de partículas
1. D i a g n ó s t i c o de e n f e r m e d a d arterial
marcadas c o n macroagregados de albúmina que
coronaria.
normalmente deben quedar retenidos e n el pul-
2. V a l o r a c i ó n y estratificación de riesgo món; sin embargo, en presencia de un cortocir-
posinfarto. cuito de derecha a izquierda, se observarán en la
circulación sistémica (región cerebral o renal).
3. Estudio de viabilidad miocárdica.
La a d q u i s i c i ó n d e un e s t u d i o d e S P E C T Ventriculografía en equilibrio.
sincronizado generalmente toma entre 20 y 30 min. Al igual que en el adulto, el método permite eva-
El procedimiento permite analizar de manera si- luar la función global y regional de los dos ventrí-
multánea la perfusión miocárdica y la función ven- culos, tanto sistólica como diastólica y, desde lue-
tricular en forma rápida y eficaz. go, la movilidad ventricular.
Perfusión m i o c á r d i c a .
C A R D I O L O G Í A NUCLEAR PEDIÁTRICA Realizada c o n menor frecuencia que e n el adulto,
la perfusión miocárdica en la población infantil se
La aplicación de los procedimientos de cardiología utiliza para valorar áreas de isquemia, d e necrosis
nuclear al estudio del paciente pediátrico es más o de miocardio viable. Algunas de las indicaciones
limitada que en el adulto, debido generalmente e n este grupo de edad son el origen anómalo de la
por desconocimiento de las posibilidades que ofre- arteria coronaria, la enfermedad de Kawasaki y las
ce este recurso. miocardiopatías.
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
TOMOGRAFÍA POR EMISIÓN DE POSI- El carbono-11 es muy útil ya que casi todo com-
T R O N E S (PET) puesto de los sistemas vivos contiene carbono. La
base para utilizar flúor-18 es que e n muchas molé-
La tomografía por emisión de positrones (PET) es una culas un átomo de hidrógeno o un grupo hidroxilo
técnica diagnóstica que permite la evaluación cuanti- pueden ser substituidos por uno d e flúor sin alte-
tativa de procesos fisiológicos y fisiopatológicos "in rar su naturaleza en el cuerpo humano. La vida
vivo" del corazón. El PET es la única técnica que media corta del nitrógeno-13 y el oxígeno-15 limi-
permite la cuantificación no invasiva de la perfusión tan su aplicación e n la síntesis de radioquímicos
regional del corazón e n términos absolutos. El meta- pero ambos son excelentes agentes de perfusión en
bolismo energético del miocardio representa una forma de nitrógeno-13-amonia y oxígeno-15-agua,
unión entre la utilización de oxígeno y su estado respectivamente.
funcional. La cuantificación de la utilización de gluco-
sa por el miocardio, la captación y oxidación de áci-
dos grasos, la perfusión, el consumo de oxígeno, la A P L I C A C I O N E S CLÍNICAS DEL PET
función contráctil, así c o m o la caracterización de la
• M e d i c i ó n d e la perfusión m i o c á r d i c a , del
actividad neuronal cardiaca pre y postsináptica son
flujo d e reserva c o r o n a r i o y diagnóstico
posibles de realizar con esta técnica. Esto nos permi-
d e la cardiopatía i s q u é m i c a .
te, por tanto, estudiar los efectos de intervenciones
En el momento actual, el PET es la única técni-
farmacológicas, de revascularización, nutricionales,
ca que permite la cuantificación no invasiva
de actividad hormonal y neural asi como de los pro-
d e la perfusión m i o c á r d i c a regional e n tér-
cesos de enfermedad en el metabolismo y función
minos absolutos, c a l c u l a n d o el flujo c o r o n a -
del corazón humano.
rio e n ml/minuto/gramo de masa miocárdi-
c a . N o solamente permite evaluar la perfusión
miocárdica sino también el estado funcional
TÉCNICA DE ESTUDIO d e la microcirculación y e l endotelio m i d i e n -
do la reserva d e flujo coronario ( R F C ) , q u e se
Debido a su rápido decaimiento, la mayoría de los
calcula c o m o e l cociente entre el flujo obte-
radiotrazadores deben ser sintetizados e n el mis-
nido durante la vasodilatación c o r o n a r i a o b -
mo sitio donde se encuentra la cámara PET. El
tenida f a r m a c o l ó g i c a m e n t e ( d i p i r i d a m o l o
trazador se inyecta por vía intravenosa o se inhala
adenosina) y el flujo basal (en reposo). La m e -
en forma de gas; se distribuye a través del cuerpo
dición d e la reserva de flujo coronario es v e n -
por vía sanguínea y entra a los diferentes tejidos.
tajosa para c o n o c e r la repercusión fisiológi-
En el tejido miocárdico, los positrones emitidos
ca de la estenosis coronaria e n pacientes con
desde el núcleo chocan con su antipartícula, los
e n f e r m e d a d arterial coronaria ( E A C ) . La sen-
electrones y la masa de ambos se convierte en 2
sibilidad diagnóstica d e l P E T en la d e t e c c i ó n
fotones emitidos simultáneamente e n dirección
d e cardiopatía isquémica oscila entre e l 8 7 y
opuesta. La adquisición de imágenes c o n el PET
el 9 7 % y la especificidad entre el 78 al 100 %.
está basada en la detección de este par de fotones
A u n q u e la evaluación d e la perfusión miocár-
en coincidencia. El PET puede entonces medir la
dica c o n PET es la técnica más segura y precisa
distribución anatómica y temporal de las molécu-
e n la d e t e c c i ó n d e E A C , no se ha utilizado
las unidas al trazador ya que e l sitio de colisión es
m u c h o c o n este propósito debido a la dispo-
registrado por el sistema detector. Entonces, los
nibilidad limitada d e l método y a su relativa
fenómenos fisiológicos y farmacológicos y paráme-
complejidad.
tros biológicos pueden ser estimados in vivo a través
de modelos matemáticos de las curvas tiempo-acti-
vidad sérica y tisular obtenidas. El diagnóstico de cardiopatía isquémica se basa
en la evaluación del flujo sanguíneo miocárdico
El empleo de algunos radionúclidos permite la regional e n r e p o s o y e s f u e r z o u t i l i z a n d o
medición del flujo sanguíneo, transporte de mem- trazadores de perfusión miocárdica. Los más co-
brana, metabolismo, interacción de receptores y múnmente utilizados son el rubidio-82 (vida me-
más recientemente la expresión de genes. Los dia de 75 seg), nitrógenol 3-amonia (vida media
radionúclidos útiles para este propósito son carbo- de 9.9 min) y oxígeno-15 acuoso (vida media de
4
no-11 (vida media de 20 minutos), nitrógeno-13(vida 2 m i n ) . La v i d a m e d i a tan corta d e estos
media d e l 0 min), oxígeno-15 (vida media de 2 min) radiotrazadores hace muy difícil realizar la per-
y flúor-18 (vida media de 110 min). fusión miocárdica en esfuerzo mediante ejercí-
CARDIOLOGÍA
cío físico, y es por ello que se prefiere utilizar la c) Reducción del flujo sanguíneo y ausencia de
estimulación farmacológica. la captación de F D G que representa necrosis
(patrón concordante o "match").
• Evaluación d e la reperfusión coronaria.
d) Flujo sanguíneo normal con captación de F D G
Desde un punto d e vista teórico, se podría ha-
normal o disminuida e n una zona acinética
cer un estudio de la perfusión miocárdica pre-
(miocardio "aturdido").
v i o a la terapia de reperfusión para conocer el
área del miocardio e n riesgo y uno posterior a e) Ausencia de actividad metabólica (captación
la reperfusión para conocer el estado final del de F D G ) con presencia de flujo, reciente-
miocardio: tamaño del infarto. Sin embargo, mente descrito en U C L A y de significado
dadas las limitaciones d e disponibilidad del incierto ("mismatch inverso").
recurso en e l momento actual en nuestro país,
es poco factible un estudio y análisis d e este La mejoría se logra en aquellos segmentos
tipo. En cambio, una vez que se ha completa- discordantes, es decir con una captación ade-
do la terapia de reperfusión y el paciente per- cuada de F D G en ausencia de perfusión, que
manece en el hospital, antes de su alta, se pue- demuestra persistencia de actividad metabólica
de estudiar la perfusión miocárdica con PET e n el miocardio. En cambio, c u a n d o no se ha
para determinar el área de necrosis estableci- demostrado persistencia de actividad
d a , la isquemia residual o a distancia que exis- metabólica (patrón concordante), los resulta-
ta y estratificar al paciente de acuerdo a la in- dos son mejores si el paciente permanece con
formación obtenida. tratamiento farmacológico en lugar de ofrecer-
le una alternativa terapéutica de reperfusión.
* Diagnóstico del m i o c a r d i o viable.
U n a d e las m a y o r e s utilidades d e l P E T c o n - * Estratificación pronostica.
siste e n el doagnóstico d e m i o c a r d i o v i a b l e El reconocimiento d e tejido viable se asocia a
e n pacientes q u e han tenido un infarto d e l buen pronóstico cuando el paciente es revas-
miocardio c o n disfunción ventricular izquier- cularizado pero a un mal pronóstico cuando el
d a . Se utiliza p r i n c i p a l m e n t e c o m o radiotra- enfermo es tratado solo médicamente. A ma-
z a d o r a la 1 8 - F D G para definir la e x t e n s i ó n yor cantidad de tejido viable detectado, la evo-
del miocardio viable o reconocer a una lución del paciente tratado mediante terapia
disfunción contráctil p o t e n c i a l m e n t e rever- de reperfusión mejora. Sin embargo, todavía
sible e n respuesta a algún p r o c e d i m i e n t o de no se ha establecido si la cantidad de tejido
reperfusión diferenciándolo del tejido viable detectado c o n F D G que predice c o n
necrótico cicatrizal o del tejido c o n disfunción mayor exactitud el grado de mejoría d e la fun-
c o n t r á c t i l i r r e v e r s i b l e . Se c o n s i d e r a el ción ventricular post-terapia de reperfusión, sea
"estándar d e o r o " d e las técnicas d e image- el que también tenga el mayor poder predictivo
nología e n la d e f i n i c i ó n d e viabilidad m i o - para la sobrevida del paciente.
cárdica e hibernación.
El P E T p e r m i t e e s t u d i a r d e m a n e r a no
Los estudios d e F D G se combinan con los de invasiva el flujo sanguíneo miocárdico regional
perfusión miocárdica (amonia o agua en el caso y el metabolismo. El metabolismo miocárdico
d e l PET o talio o agentes unidos al tecnecio e n puede ser valorado con C I 1 -palmitato y C11 -
caso d e S P E C T ) debido a que la relación entre acetato.
ambos agentes difiere e n los diferentes tipos
de miocardio. Utilizando un trazador de flujo y
uno de metabolismo se p u e d e n identificar d i - T É C N I C A S ESPECIALES D E I M A G E N
ferentes patrones de viabilidad miocárdica. 11 TERMINACIONES CARDIACAS ADRENÉRGICAS
La inervación del corazón representa un aspecto
a) Flujo normal y captación de F D G que re-
importante para la adaptación del corazón a los
presenta tejido miocárdico normal.
requerimientos hemodinámicos tanto e n el cuer-
b) Reducción del flujo sanguíneo asociado con po sano c o m o en e l de e n f e r m o . La importancia
captación de F D G que representa miocar- del sistema nervioso autónomo e n la fisiopatolo-
dio hibernante (patrón discordante o gía de algunas enfermedades cardíacas c o m o la
"mismatch"). insuficiencia cardiaca y las arritmias ha ¡do incre-
4
CARDIOLOGÍA NUCLEAR Y TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES (PET)
461
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Función ventricular
Capítulo 15 e Insuficiencia cardiaca
"Los médicos debemos conserrar la dignidad de
nuestra misión frente al enfermo"
m iir r i o
SARCOPIASMICO
MITOCONURIA
SAR10MIKS
detina
BANDA A . . BANDA I -
FIGURA 1
464
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
TROPOMIOSINA
Constituye una proteína reguladora de la contrac-
c i ó n miocárdica. Representa aproximadamente
el 10 % de ¡a masa contráctil del miocardio. Esta
proteína se ubica en un canal virtual que se for-
ma entre las dos cadenas de actina globular que
constituyen e l miofilamento fino. Cada molécula
de tropomiosina cubre 7 monómeros de actina
globular.
TROPONINA
F I G U R A 2 Contracción miocárdica Es una proteína reguladora d e calcio. Esta tiene
tres cadenas específicas de polipéptidos con dife-
rentes funciones:
moléculas de actina se desplazan en sentido con-
trario sobre las de miosina, permitiendo la relaja- • Troponina C : puede unirse a dos iones de
ción muscular y el aumento de la longitud de la Ca+ + .
sarcómera, hasta que alcanza su tamaño inicial.
• Troponina T: esta subunidad se encuentra
unida a la la tropomiosina
FIGURA 3 Acoplamiento
electromecánico. En la fase
2 del potencial de acción se 1 Ap
fundamentalmente en el gli-
cocáliz, entra al retículo sar- RS Í—i Sarcolema
coplásmico ( R S ) ; de ahí, el
calcio es donado hacia las | Depósito G H
sarcómeras (maquinaria
contráctil). Esta acción termi-
na al inicio de la fase 3 del
PAT en que se cierran los c a -
nales lentos localizados en el
sarcolema. (Tomado y modifi-
cado con autorización de • Sarcómero
Lossnitzer K., Pfennigsdorf G.,
Brauer H., Miocardio, vasos san-
guíneos y calcio) r
Bandas Z
4 465
CARDIOLOGÍA
Reposo
F I G U R A 4 La actina (filamento
f i n o ) e s t a c o n s t i t u i d a de l a
actina globular ( e n f o r m a de
perlas) que f o r m a cadenas en
forma de espiral. La troponina
tiene tres componentes: la
troponina T (unida a la tropo-
miosina), la troponina C (capta
calcio) y la troponina I (interfie-
re en la unión actina-miosina
durante el reposo). Cada molé-
cula de tropomiosina abarca 7
perlas de a c t i n a globular. La
miosina (filamento grueso) tie-
ne una cabeza que durante el
reposo se encuentra separada
de la actina. Durante la activa-
ción se desconenta la troponina
I de l a tropomiosina y las cabe-
zas de m i o s i n a se fijan e n la
actina globular y con un "movi-
miento de r e m o " se produce el
acortamiento de la sarcomera
466
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
/
C I C L O C A R D I A C O (figura 6) /
El ciclo cardiaco se inicia con la activación eléctri-
ca de los ventrículos; ya ocurrida ésta, se activa el
miocardio y se inicia la contracción miocárdica, la
V 1
cual eleva la presión ¡ntraventricuiar y ésta rápida-
mente sobrepasa la presión auricular (cierre mitral
y tricuspídeo). La presión continúa elevándose a
gran velocidad sin que haya cambio d e volumen,
ya que todas las válvulas cardiacas se encuentran
c e r r a d a s ( c o n t r a c c i ó n isovolumétrica — C I — ) .
C u a n d o se alcanza la presión diastólica aórtica
II s
1
D
(pulmonar para el ventrículo derecho) se abren
las válvulas sigmoideas y se vacía el contenido san- c ONTRAI ( I Ó N H K l I \ | \( I O N D I S T E N S I B I L I D A D
C u a n d o la curva de presión cruza la presión to de succión a través del cual favorece el llenado
auricular se abren las válvulas atrioventriculares y ventricular; cuando se ha completado esta fase, las
se inicia el llenado rápido ventricular, momento presiones dentro de las aurículas son muy simila-
en el que aumenta el volumen ¡ntraventricuiar; res a las ventriculares, sin embargo, dependiendo
como el miocardio sigue relajándose ejerce un efec- de la distensibilidad ventricular (vide infra) se si-
F I G U R A 5 Las moléculas
de actina (arriba) y las de
miosina (abajo) están con-
formados en espiral de tal
manera que en el acorta-
miento de la sarcomera, no
sólo hay un deslizamiento
de una sobre la otra, sino
además, un movimiento de
rotación en el cual se re-
duce el entrelazamiento
(sístole) y durante la rela-
jación vuelve su estado de
reposo (entrelazamiento)
CARDIOLOGÍA
1
contracción isovolumétrica, fase de expulsión y fase
de relajación. 3
Durante la sístole ventricular es c u a n d o el co- i)
razón c o n s u m e gran cantidad d e energía para "O
generar presión y lograr expulsar su c o n t e n i d o
iM 2
D E T E R M I N A N T E S D E LA F U N C I Ó N H E M O -
DINÁMICA DEL C O R A Z Ó N INTACTO
FIGURA 9
1. Volumen sanguíneo.
2 . Distribución del v o l u m e n s a n g u í n e o :
podemos juzgar la contractilidad, o explicado de
otra m a n e r a , la velocidad de acortamiento del a) Posición corporal.
m ú s c u l o c a r d i a c o e n r e l a c i ó n c o n u n a carga b) Presión intratorácica.
sistólica será siempre mayor en el miocardio sano c) Presión intrapericárdica.
(A) que e n el miocardio insuficiente (B), para el d ) Tono venoso.
mismo grado d e carga (figura 8 ) .
3. Contribución auricular al llenado diastólico.
En resumen, la contracción de la miofibrilla ais-
lada depende de su capacidad funcional (contrac- El aumento del volumen sanguíneo incremen-
tilidad! expresada e n velocidad y grado de acorta- ta el retorno venoso, por lo tanto, el llenado ven-
miento, de la longitud c o n la que se inicia la tricular y e l gasto c a r d i a c o ; por el contrario, la
contracción (precarga) y d e la resistencia contra la hipovolemia provoca disminución d e l gasto por
cual se contrae, (poscarga). disminución d e l retomo v e n o s o . El ortostatismo
4*?
CARDIOLOGÍA
1. Volumen 1. Presión
sanguíneo intrapericárdica
2. Posición corporal 2. Tono venoso
3. Presión 3. Contribución
§ i intratorácica
4 . Acción de bomba
auricular al
llenado
del músculo
íj
esquelético
Z 5? 1
V O L U M E N D I A S T O L I C O FINAL
3
V O L U M E N D I A S T O L I C O FINAL
I
| ESTIRAMIENTO DEL MIOCARDIcT
provoca disminución d e l retorno venoso, d e l lle- tas condiciones la presión diastólica intracavita-
nado diastólico y d e l gasto c a r d i a c o ; el efecto ria se incrementa (figura 11).
contrario se obtiene con e l d e c ú b i t o dorsal. La C o m o se ha visto, la presión diastólica ¡ntra-
presión negativa intratorácica favorece el retor- ventricuiar es influida por la cantidad d e volumen
no venoso (efecto d e "succión") e i n c r e m e n t a el ¡ntraventricuiar la mayor volumen mayor presión
gasto cardiaco d u r a n t e la inspiración. En aque- y viceversa); por la distensibilidad ta menor disten-
llos casos e n los q u e la negatividad de la presión sibilidad, mayor presión para aumentar e l volumen
intratorácica desaparece o disminuye importan- diastólico y viceversa) y, finalmente, por la veloci-
t e m e n t e , el retorno venoso también disminuye dad y grado de relajación ventricular. En efecto,
y se nota una caída e n e l gasto c a r d i a c o , tal y cuando la relajación es incompleta el corazón que-
c o m o acontece e n el neumotorax y c o n e l uso d a c o n una presión ¡ntraventricuiar elevada.
de ventiladores de presión positiva. N o r m a l m e n -
El aumento anormal del volumen ¡ntraventricuiar
te la presión intrapericárdica es tan pequeña que
(sobrecarga diastólica o insuficiencia cardiaca), la
no c o n t r i b u y e e n nada para alterar el retorno
d i s m i n u c i ó n de la distensibilidad (infiltración
venoso ni el gasto c a r d i a c o ; e n el caso d e derra-
miocárdica o trombos e n d o c a r d i o » o hipertrofia
me pericárdico importante, el incremento d e la
excesiva) y la relajación incompleta (isquemia
presión intrapericárdica impide e l retorno venoso
miocárdica) pueden ser causa de elevación de la
y el llenado ventricular lo cual se traduce e n una
presión ¡ntraventricuiar (figura 12).
d i s m i n u c i ó n d e l gasto c a r d i a c o , c u a n d o este
efecto es e x t r e m o aparece el taponamiento car- C o m o se vio, la interacción entre la distensibili-
diaco. La venoconstrición incrementa el retorno d a d , la relajación y la estructura del miocardio son
venoso y por e n d e e l gasto c a r d i a c o , mientras los que intervienen e n e l grado de estiramiento
que la venodilatación tiene el efecto opuesto. diastólico de la miofribrilla en el corazón intacto.
Por último, la contracción auricular contribuye En el corazón intacto el grado d e estiramiento
en forma significativa al gasto cardiaco (20-30 % ) , miocárdico al final de la diástole es directamente
ya que incrementa aún más el v o l u m e n diastóli- dependiente del volumen d e sangre que ingresa
co. Normalmente la precarga está principalmente al ventrículo (fuerza que elonga las miofibrillas) y
determinada por el v o l u m e n diastólico; sin e m - tiene una relación inversa con la fuerza que las
bargo, e n condiciones anormales la distensibili- miofibrillas oponen para dejarse distender (dis-
dad miocárdica p u e d e también jugar un papel tensibilidad) la lucha entre estas dos fuerzas cons-
de importancia. C u a n d o por u n a causa patoló- tituye el estrés diastólico que es el fenómeno que
gica c o m o lo es la hipertrofia i n a p r o p i a d a , la is- asegura que el volumen diastólico se adapte a la
q u e m i a o la infiltración d e l m i o c a r d i o , éste se fisiología circulatoria aún c u a n d o la distensibili-
torna más rígido, será necesario ejercer mayor dad se encuentre disminuida, por lo que es real-
presión dentro d e la cavidad para lograr deter- mente e l equivalente de la precarga; e n otras pa-
m i n a d o grado d e estiramiento diastólico. En es- labras, si e l ventrículo es distensible, se llena
fácilmente y logra albergar mayor v o l u m e n , (ma-
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
M> 3 5 V e n t r í c u l o rígido
F I G U R A 11 Disten- 30 100 = .
sibilidad (AV/t\P). A : 25
El c a m b i o de v o l u -
men (AV) de 50 a 5 2 5
150 m i (ingreso de
"O 20
1 0 0 m i ) c a m b i a la
presión (AP) de 3 a
10 m m H g (7 m m H g ) . | 15
B: en e l ventrículo rí-
gido el m i s m o cam- •5 10
Normal
bio (AV de 100 m i ) c
aumenta exagera-
damente la presión :2 100
= 14
(AP de 2 5 m m H g ) ; 7
B tiene menor dis- —
u.
X
n
=
ao
4()fl
1 40F
Volumen Volumen
F I G U R A 12 Presión telediastólica del ventrículo izquierdo. Con líneas punteadas se
esquematiza una curva de presión-volumen normal. Obsérvese que el ingreso de volu-
men diastólico (50 mi) eleva la presión 7 m m H g (de 3 a 10). Cuando existe restricción al
llenado de ingreso de un volumen similar la presión se eleva de 2 a 20 m m H g (distensibi-
lidad disminuida), mientras que en la insuficiencia cardiaca la elevación de la presión
diastólica se debe primordialmente a un aumento del volumen diastólico. En la curva de
presión volumen diagramada a la derecha se demuestra cómo la relajación incompleta no
permite la distensión ventricular a sus valores normales y la presión diastólica permanece
elevada. (Tomada y modificada de Gaasch VV.H. and Leewinler M.M., left ventricular dyastolic
dysfunction and heart failure, Lea and Febiger, 1994)
yor estiramiento diastólico), c o n un aumento li- cardio rígido (poco distensible) (figura 11). Así, la
gero de la presión diastólica; si por el contrario, presión diastólica ventricular se eleva a niveles
el ventrículo es rígido, el ingreso de la misma can- anormales c u a n d o aumenta excesivamente e l vo-
tidad d e volumen sanguíneo al corazón provoca- lumen diastólico (insuficiencia cardiaca), c u a n d o ,
rá un a u m e n t o significativamente mayor d e la aun c o n el ingreso de un volumen sanguíneo nor-
presión ¡ntracavitaria para lograr distender al mio- mal el ventrículo se encuentra rígido o, finalmen-
4i2
CARDIOIOCÍA
te, c u a n d o la relajación ventricular es lenta o in- se considera c o m o e l parámetro más fiel para c o -
completa (figura 1 2 ) . nocer la carga sistólica (poscarga) a la que tiene
En conclusión, con el estiramiento diastólico de que enfrentar el ventrículo durante su contracción.
las miofibrillas (estrés diastólico) se logra con un El estrés parietal se rige por la ley de Laplace en la
volumen y presión diastólica normal; el aumento que el estrés parietal (S) es directamente propor-
excesivo del volumen diastólico, puede elevar la cional a la presión dentro d e la cavidad ventricular
presión diastólica (aumento de la precarga) causa- (P) multiplicado por el radio y es inversamente pro-
do por la utilización de mecanismo de Starling (in- porcional al grosor de la pared (h) (figura 14).
suficiencia cardiaca) o bien, la presión diastólica
puede elevarse anormalmente (para normalizar la
precarga) en presencia d e un volumen diastólico
normal en un ventrículo rígido (figuras 11 y 12).
Ello traduce que c u a n d o aumenta la presión
dentro d e la cavidad o el radio de la misma, ha-
b ) Poscarga o carga sistólica brá un aumento d e l estrés parietal y por lo tanto,
En el corazón intacto la poscarga se traduce en la de la fuerza que el corazón tiene que vencer al
fuerza que el corazón tiene que vencer al contraerse contraerse (aumento d e la poscarga). Por el con-
para vaciar su contenido sanguíneo hacia los gran- trario, e l aumento d e l espesor de la pared (hiper-
des vasos. Todo aquello que aumente esta fuerza trofia miocárdica o aumento del engrosamiento
aumentará su consumo de oxígeno ( M V O , ) y se sistólico) reduce el estrés parietal y c o n ello la
constituirá en un obstáculo para el vaciamiento poscarga. Finalmente, el aumento de la poscarga
ventricular; por el contrario, todo aquello que per- por sobrecargas hemodinámicas (de presión o de
mita un vaciamiento cardiaco e n contra de una volumen) o dilatación del corazón por otras cau-
fuerza menor al contraerse disminuirá el M V 0 y 2
sas (miocardiopatía, infarto d e l miocardio) puede
facilitará el vaciamiento ventricular. ser compensada con hipertrofia miocárdica al nor-
malizar el estrés parietal y c o n ello la fuerza que se
La fuerza que el miocardio tiene que vencer
opone a la contracción y el M V O ¿ (vide infra).
durante su contracción es directamente proporcio-
nal a la tensión de la pared ventricular: a mayor ten-
sión, mayor fuerza se opone a la contracción. La c) Estado contráctil e n el c o r a z ó n intacto
tensión se puede definir como la fuerza que tiende a
separar a las miofibrillas en cm (figura 13) mientras Contractilidad como función miocárdica
que se define como estrés parietal a la fuerza que Tal y como acontece en la fibra miocárdica aisla-
tiende a separar las miofibrillas en varias direcciones d a , la contractilidad e n el corazón intacto se tra-
(cm ) o sea que a mayor estrés de la pared ventricu-
2
(Ley de Laplace). (Tomado y modificado con autorización de Bonow y cois., left venlricular and systolic stress, shortening
and stress relations in humans, A m ) Cardiol, 1982; 50:1301-1318)
pendiente de la poscarga, pero es influenciado por gasto cardiaco (gasto sistólico, trabajo c a r d i a c o ,
la precarga (a mayor estiramiento diastólico, m a - índice cardiaco).' En condiciones fisiológicas, el
yor dp/dt), por esta razón se ha propuesto calcular gasto cardiaco es normal (contracción ventricular
el dp/dt a nivel de 4 0 m m H g (dp/dt/40), es decir, a normal), son normales también el volumen y pre-
nivel d e 40 m m H g , de tal forma que el parámetro sión diastólica ventricular (precarga) (figura 15 A).
es relativamente independiente también d e l volu-
men y presión diastólica, aun cuando d e cualquier
forma tiene influencia de la precarga.
Por otro lado, también es posible el grado de
contracción miocárdica mediante la velocidad de
acortamiento circunferencial (Vd), o sea el núme-
ro de circunferencias que el corazón disminuye el
área de su cavidad en la unidad de tiempo; como
este parámetro se mide en la fase expulsiva, ade-
más d e ser influenciado por la precarga es impor-
tantemente alterado por el grado de poscarga.
C o m o se puede ver, estos parámetros son útiles,
pero e n clínica no cuantifican con exactitud el es-
tado contráctil del corazón intacto ya que están
influenciados e n m e n o r o m a y o r grado por la
precarga y poscarga.
4 473
CARDIOLOGÍA
ta e n g í ' c m ' ) . A m a y o r
poscarga menor Vcf. (Toma-
do con autorización de Colon S.D.,
Borow K.M., Nevvman, Left ventri-
2 0.8 -
cas) y la aurícula izquierda (que es una cámara de informa acerca del estado de la precarga. En efec-
baja presión y por lo cual la poscarga en esta situa- to, la D_, en el ventrículo izquierdo ( D V , ) , nor-
2
CUADRO 1
F U N C I Ó N VENTRICULAR Y C O N T R A C T I L I D A D
b) Miocarditis, miocardiopatía,
infarto miocárdico
•
>
f+++ + +
c) E. Ao., PCA, I. Ao., CIV
d) Insuficiencia mitral
475
CARDIOLOGÍA
de deberse a hipertrofia miocárdica (estenosis sistólica del ventrículo izquierdo (ver capitulo
aórtica grave, miocardiopatía hipertrófica, hi- de E C O C A R D I O G R A F Í A M O D O M ) .
pertensión arterial), isquemia (infarto agudo del
miocardio) o restricción al llenado diastólico 3. La medición d e los intervalos sistólicos también
(miocardiopatía restrictiva o pericarditis). ofrece una buena información acerca de la fun-
ción sistólica del ventrículo izquierdo e n au-
2. El ecocardiograma modo M mostrará a u m e n - sencia de valvulopatías (ver capítulo de F O N O -
to del diámetro diastólico d e la cavidad ven- MECANOCARDIOGRAFÍA).
tricular y la p r e s e n c i a de m u e s c a B e n el
e c o g r a m a m i t r a l e n caso d e i n s u f i c i e n c i a
cardiaca, mientras que e n el caso de hiper- E S T U D I O D E LA P O S C A R G A
tensión diastólica por restricción al llenado,
las dimensiones d e las cavidades ventricula- La única forma de estudiar la poscarga es la d e
res serán normales c o n una apertura " d - e " muy calcular el estrés parietal durante la sístole ventri-
prominente, breve apertura telediastólica y d i - cular lo cual se logra si se tiene la determinación
latación de las cavidades auriculares (ver c a - simultánea del radio de la cavidad ventricular, el
pítulo de E C O C A R D I O G R A F Í A M O D O M ) . espesor de su pared y la presión intracavitaria de-
sarrollada durante la sístole. Este cálculo se puede
3. El registro del flujo de la cámara de entrada de llevar a cabo mediante estudio de cateterismo car-
los ventrículos nos informará de la presencia diaco y angiografía o con ecocardiografía bidimen-
d e restricción al llenado diastólico, alteraiones sional (ver capítulo de E C O C A R D I O G R A F I A BIDI-
d e la relajación o insuficiencia cardiaca (ver MENSIONAL).
capítulo de E C O C A R D I O G R A F Í A D O P P L E R ) .
!
culografía por substracción digital, ecocardiogra- n
fía bidimensional o ventriculografía nuclear, son 100 D 0
los métodos idóneos para conocer la función Z •
1
sistólica del ventrículo izquierdo (la fracción de
expulsión normal es aquélla de 6 0 % o mayor
E 80 a
b
E
(ver capítulos de C A T E T E R I S M O C A R D I A C O , 1 ©.
—
s 0
ción ||
esión
rresponde c o n una presión ¡ntraventricuiar normal mmhg sólo expulsará 4 0 mi el ventrículo izquier-
IA); conforme se inicia el llenado diastólico y se do (curva 3) (se queda con 6 0 mi); y, finalmente, si
incrementa el volumen diastólico, la presión tam- incrementamos a 200 m m H g la presión sistólica,
bién aumenta paulatinamente (A-B). La pendiente el ventrículo es incapaz de vaciarse, lo cual d a lu-
de la curva estará determinada por la distensibili- gar a una contracción isovolumétrica, o sea que se
dad miocárdica, es decir, a mayor rigidez se gene- queda c o n todo su contenido (100 mi), durante la
rará mayor presión para la misma cantidad de vo- sístole. En esta relación se puede observar c ó m o a
l u m e n ( f i g u r a 1 1 ) . N o r m a l m e n t e la p r e s i ó n mayor poscarga (presión sistólica), el ventrículo iz-
telediastólica ¡ntraventricuiar no es mayor d e 12 quierdo puede expulsar menor cantidad d e san-
mmhg. Terminado el llenado diastólico (B), se ini- gre, q u e d a n d o cada vez c o n m a y o r v o l u m e n
cia la contracción ventricular. Durante su fase iso- sistólico dentro de su cavidad.
volumétrica (B-C) se incrementa rápidamente la
presión intraventricular, sin que haya un cambio
en e l volumen intracavitario. Al abrirse la válvula RELACIÓN PRESIÓN-VOLUMEN EN DIÁSTOLE
aórtica, comienza ¡a fase expulsiva en la que se (figura 20)
reduce significativamente el volumen intraventri-
En la figura 20 se esquematizan las relaciones pre-
cular ( C - D ) . Con el cierre aórtico se inicia la relaja-
sión-volumen e n diástole. Si ahora no mantene-
ción isovolumétrica en la que ocurre un descenso
mos fijo el volumen diastólico, podemos observar
muy rápido de la presión intraventricular sin cam-
que el ventrículo izquierdo puede expulsar 50 mi,
bios e n el volumen (D-A) hasta encontrarse sus
si su contración se lleva a cabo e n contra d e 100
valores básales.
m m H g (curva 1); si aumentamos la presión a 130
m m H g . soto podría expulsar 2 5 mi (curva 2). pero
si se aumenta a su vez el volumen diastólico d e 70
E S T U D I O D E LA C O N T R A C T I L I D A D EN EL a 105 mi (mecanismo d e Frank-Starling), el v e n -
t r í c u l o nuevamente puede expulsar 60 mi (curva
C O R A Z Ó N INTACTO
3) y compensar el aumento d e poscarga; las con-
tracciones 1, 2 y 3 demuestran cómo al aumentar
C o m o se mencionó, la contractilidad en e l cora-
la poscarga, el volumen telediastólico es incremen-
zón intacto es muy difícil conocerla, pues este ór-
gano siempre se e n c u e n t r a sometido a cargas
hemodinámicas, que hace ¡mpredecible el estado
contráctil intrínseco instantáneo. El mejor conoci-
miento de la fisiología cardiaca nos ha permitido
un estudio más racional d e esta propiedad funda-
mental de la miofibriila en el corazón intacto. En
efecto, el entendimiento de las curvas de presión-
volumen y de su relación instantánea, tanto en sístole
como en diástole, nos ofrece la información del es-
tado contráctil intrínseco en el corazón intacto.
mmHg 0
'100 mi '100 mi 100 mi
Insuficiencia Ventrículo Efecto
cardiaca normal inotrópico positivo
O O G
FIGURA 21 Curvas de presión-volumen. A: el ventrículo normal acorta la longitud de
sus sarcómeras, reduce el radio de cavidad, emgruesa su pared (contractilidad) y ge-
nera 120 mmHg de presión sistólica; tiene 100 mi de volumen diastólico y expulsa 60
mi en sístole (gasto sistólico), es decir, el 60 % de su volumen diastólico (fracción de
expulsión). Para 120 mmhg se queda con 40 mi al final de la sístole (volumen sistólico
final). B: en insuficiencia cardiaca se expulsa sólo el 40 % del volumen diastólico
(disminución de la fracción de expulsión), el acortamiento de las miofibrillas es menor
y por lo tanto, también la reducción del radio de la cavidad y el aumento del espesor
de la pared para la misma presión sistólica (120 mmHg); asimismo, se expulsa una
menor cantidad de sangre (40 mi de gasto sistólico) que el ventriculo normal y se
queda con una mayor cantidad de sangre al final de la sístole (60 mi), o sea, el
volumen sistólico es mayor que el normal para la misma presión sistólica. C: el
aumento de la contractilidad se caracteriza por mayor acortamiento de las sarcómeras,
engrosamiento de la pared ventricular y reducción del radio de la cavidad. Esto pro-
duce un mayor gasto sistólico (80 mi) en relación al normal, una mayor fracción de
expulsión (80 %) y el volumen sistólico final es menor (20 mi) que el ventrículo
normal para la misma presión sistólica (120 mmHg)
í Contractilidad
_ „ Normal
479
CARDIOLOGÍA
tracción de todas los miofibrillas e n forma sinérgica) gasto cardiaco se mantiene normal (4 8 0 0 mi) c o n
genera presión dentro de las cavidades cardíacas y el solo aumento del estiramiento diastólico (au-
desplaza volumen. D e tal manera que normalmen- mento del volumen diastólico), este también ge-
te el volumen recibido por el corazón a través del nera una fuerza de contracción más enérgica (Ley
retorno venoso (pulmonar y sistémico) es despla- de Starling) ( c u a d r o 3 ) .
zado hacia los grandes vasos para oxigenar la san- Este mecanismo es utilizado por el corazón
gre (arteria pulmonar) o para ofrecer oxígeno a los cuando hay disminución d e la función ventricular
tejidos (aorta). e insuficiencia cardiaca (vide iníra).
Por otro lado, la relajación permite el llenado El límite que tiene el corazón para utilizar su
del corazón y este depende fundamentalmente d e reserva diastólica está determinado por la conges-
que dicha relajación se lleve a cabo completamente tión y edema pulmonar que son producto del a u -
y de que el miocardio (miofibrillas e intersticio) sea mento excesivo del volumen y presión diastólica
distensible. En condiciones normales, el volumen intraventricular.
sanguíneo q u e llena los ventrículos ( v o l u m e n
diastólico) es suficiente al ser expulsado por el co-
razón e n el latido siguiente para perfundir adecua-
damente los tejidos del organismo. Si el volumen
" CUADRO 2
d i a s t ó l i c o es n o r m a l , y t a n t o la a r q u i t e c t u r a
RESERVA C R O N O T R Ó P I C A
miocárdica c o m o su función también son norma-
les, la presión q u e genera el ingreso d e la sangre al Insufítíencia Insuficiencia
corazón (presión diastólica) será normal. C u a n d o Normal cardiaca cardiaca
el corazón expulsa una cantidad normal de sangre compensada
e n cada latido (60 a 1 0 0 ce) la frecuencia cardíaca
permitirá regular la cantidad de sangre que sale Gasto
por minuto (gasto cardiaco) de acuerdo con las sistólico 60 (ce) 4(1 40
necesidades tisulares (reposo o ejercicio). FC 80 x min 80 120
RESERVA CARDIACA
La capacidad que e l corazón tiene para incremen-
.ÍU
tar su gasto cardiaco. Representa su grado de re-
serva funcional.
CUADRO 1
RESERVA CRONOTRÓPICA
VOLÚMENES VENTRICULARES NORMALES Y EN
Es la capacidad del corazón para aumentar el gas- INSUFICIENCIA CARDIACA
to cardiaco a través del aumento de la frecuencia
Normal Insuficiencia cardiaca
cardíaca. La reducción del gasto cardíaco produci-
compensada
do por la insuficiencia cardiaca puede normalizar-
lo a través de aumento de la frecuencia cardiaca VD(cc) 100 200
icuadro 2 ) .
VS(cc) 40 140
C S (ce) 60 60
RESERVA DIASTÓLICA
FC (x min) 80 80
Es la capacidad del corazón para aumentar e l gasto
cardíaco a través del mecanismo d e Frank-Starling. FE (%) 60 30
Su límite es el e d e m a pulmonar. En el c u a d r o 3
G C (ml/min) 4 800 4 800
se ejemplifica la forma c o m o el mecanismo d e
F r a n k S t a r l i n g c o m p e n s a l a c a í d a d e l gasto VD: Volumen diastólico; VS: Volumen sistólico; GS:
c a r d i a c o , se p u e d e ver q u e el simple c a m b i o Gasto sistólico; FC: Frecuencia cardiaca; FE: Frac-
g e o m é t r i c o d e l c o r a z ó n n o r m a l i z a e l gasto ción de expulsión; G C : Gasto cardiaco
cardiaco; nótese c o m o a pesar d e la reducción
significativa de la fracción de expulsión ( 3 0 %) el
480
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
Fisiopatología
BIBLIOTECA C E N T M U * »
U.N.A.M. ^
CARDIOLOGÍA
CONCENTRACIONES PLASMATICAS
DE FACTOR N A T R I U R É T I C O AURICULAR (aFNA)
600
<
^ 500
*O «o
300
200
100
res y de su presión diastólica, reducción de la frac- tractilidad; asimismo, durante la relajación, se li-
ción de expulsión y del gasto cardiaco. bera el C a + + c o n rapidez lo cual permite una
S e ha demostrado que la reducción de la frac- relajación completa.
ción de expulsión y del gasto cardiaco se convier- En conclusión, el efecto adrenérgico en un pa-
ten en mecanismos gatillo para activar al sistema ciente c o n insuficiencia cardiaca aguda, eleva el
neuroendocrino (figura 27). gasto cardiaco mediante la utilización de la reser-
va cronotrópica (cuadro 2 ) , de la reserva sistólica
ACTIVACIÓN DEL SISTEMA SIMPÁTICO (figura 23) y de efecto Bowditch (figura 29).
Se ha demostrado que la reducción significativa Si el mecanismo adrenérgico persiste en el tiem-
de la fracción d e expulsión es el m e c a n i s m o ga- po aparece e n forma paulatina redistribución del
tillo que activa al sistema neuroendocrino (figu- flujo sanguíneo, con lo que se favorece el flujo para
ra 2 7 ) ; así, c u a n d o se reduce el gasto cardiaco al los órganos vitales mediante la vasodilatación (ce-
grado d e no lograr una perfusión tisular a d e c u a - rebro y corazón) y se sacrifican los tejidos no vita-
d a , de inmediato se estimula el sistema simpáti- les mediante la vasoconstricción (piel, músculo
c o , el cual mediante secreción de c a t e c o l a m i - esquelético, sistema esplácnico) (figura 30).
nas (adrenalina y noradrenalina) e l e v a e l gasto
cardiaco ya que mediante su efecto cronotrópico
positivo a u m e n t a la f r e c u e n c i a cardiaca y c o n 3 . SISTEMA RENIÑA - ANGIOTENSINA -
ello el gasto cardiaco (reserva cronotrópica: C u a - ALDOSTERONA
dro 2 ) ; d e b i d o a su efecto inotrópico positivo
La activación persistente del sistema adrenérgico
a u m e n t a n la contractilidad y c o n ello se desvía
condiciona redistribución del flujo sanguíneo (figu-
la curva d e Starling a la izquierda (figura 2 3 ) .
ra 30) y con ello hipoperfusión renal figura 31). La
C u a n d o c o n este m e c a n i s m o se n o r m a l i z a el
disminución del flujo sanguíneo renal por un lado
gasto cardiaco la función cardiaca se ha norma-
hace que la mácula densa estimule la secreción de
lizado y el paciente solo presentará taquicardia
renina plasmática y por otro la reducción del filtra-
sinusal, palidez (vasoconstricción periférica) y
do glomerular condiciona desequilibrio glomerulo-
diaforesis (figura 28). Por otro lado, la taquicardia
tubular; esto es: se reduce el flujo plasmático filtra-
sinusal por si misma a u m e n t a la contractilidad
do, pero la reabsorción de sodio continúa sin cambio
(relación-fuerza-frecuencia o efecto B o w d i t c h
en el asa ascendente de Henle lo que realmente
(figura 29) c o n ello se c o m p l e m e n t a la mejoría
constituye una mayor reabsorción tubular de Sodio.
d e la función ventricular.
En conclusión, la hipoperfusión renal condiciona
secreción de renina y retención de N a + y por lo
Se ha demostrado que el aumento de la fre-
tanto de H , 0 (figuras 31 y 32). La secreción d e
c u e n c i a cardiaca, permite una mejor captación
renina estimula a su vez secreción angiotensina I
del C a + + citosólico c o n lo que aumenta la c o n -
484 1
— r
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
NOREPINEFRINA RENIÑA
600 -i , - P<0.002
<
5
500 •
f 3§ts
400 • P<0.02-
LU
300 •
z
— 200 •
100 •
0 -
(246-446) (282-249) (350-698) (0.3-0.8) (0.04-2.1) (0.5-8.7)
VASOPRESINA
<
Q P<0.05
2
a.
>
FIGURA 2 7 Mecanismo de estimulación del sistema neurohumoral en insuficiencia cardiaca. Las barras
negras representan las concentraciones plasmáticas en sujetos normales de noreprinefrina, renina, vasopresina
y factor natriurético auricular (FNA); en las barras blancas se observan los mismos parámetros en sujetos
con disfunción diastólica y FE > de 4 5 % y en las barras con líneas cruzadas las de aquellos otros con FE <
4 5 % . Nótese que a excepción de la vasopresina, el resto de neurohormonas están significativamente ele-
vadas en pacientes con insuficiencia cardiaca: FE á 4 5 % . (Tomado de Benedict y col. J Am Col Cardiol, 1993;
22(SupplA): 146A-53A)
RESPUESTA H U M O R A L A LA Efecto B o w d i t c h
FALLA C A R D I A C A
Daño miocárdico o sobrecarga excesiva
,FE
,L t Casto cardiaco
t- -A
\
A
\ ft
J 1 I 1
I Gasto cardiaco
L LLL J L
Contractilidad ' 1 1 ' ' ' 1 L
70 X 130 X'
l Presión arteria!
Palidez \ FIGURA 29
diaforesis (Perfusión tisular
Vasoconstricción „
periférica
Estimulación
adrenérgica
F I G U R A 28
ta FC
Inotropismo
Estos cambios en el medio interno, se traducen
clínicamente por oliguria, aumento del volumen
circulante, aumento del retorno venoso, aumento
del volumen diastólico (cardiomegalia) e hiperten-
sión venosa sistémica y pulmonar (figura 3 3 ) .
4
485
CARDIOLOGÍA
\ Gasto cardiaco
t Secreción
de Catecolaminas
Vasoconstricción
f Gasto periférica
cardiaco
Ni Mantiene
perfusión Redistribución
M e c a n i s m o de • Presión tisular d e l flujo
F. S t a r l i n g venosa sanguíneo
- Edema
t Retorno • Congestión - Cerebro
f Volumen
venoso
pulmonar tf: Corazón f- Piel
diastólico - Hepatomegalia ,L J - Territorio
- Ascitis * \ esplácnico
v- Rinón
Cardiomegalia
| Espacio
extravascular \ Perfusión renal
\ S e c r e c ion
ión X
de r e n i n a
Angiotensina I
_ Enzima
conversora
A
\ A n g i o t e n s i n a II
\ f Secreción
Aldosterona I Filtración
v Glomerular
\
Desequilibrio
R e t e n c i ó n de - glomerulo
H 0 y Na+
2 tubular
Oliguria
FIGURA 33
cesos d e remodelación ventricular para normali- tante de miofibrillas; es decir, aumenta el volumen
zar el estrés diastólico (aumento de volumen) o sis- de las células miocárdicas. Este proceso es realmen-
tólico (aumento de presión). te una forma de hipertrofia y no es consecutivo a
Durante la vida fetal y el primer trimestre de la una enfermedad cardiaca, sino por el contrario, es
vida extrauterina del ser humano, el crecimiento parte de un mecanismo normal de desarrollo, por
d e l corazón se realiza mediante el aumento de lo que sin temor se le puede considerar un tipo de
células miocárdicas (hiperplasia). Posteriormente, hipertrofia fisiológica.
durante el desarrollo normal, el corazón incrementa La hipertrofia constituye un m e c a n i s m o de
su tamaño mediante la adición de nuevas proteí- adaptación que ocurre e n respuesta de un incre-
nas contráctiles a un número virtualmente cons- mento crónico del trabajo cardiaco, esto es, ya sea
4«z
CARDIOLOGÍA
porque maneje un mayor volumen sanguíneo o porcional crecimiento d e la masa miocárdica que
porque se enfrente a una presión aumentada d u - se lleva a cabo mediante una forma de hipertrofia
rante la sístole ventricular. fisiológica. En efecto, el aumento del volumen cir-
Normalmente durante el desarrollo, el corazón culante (aumento del volumen diastólico) durante
va incrementando el diámetro d e sus cavidades y dicho proceso es compensado mediante hipertro-
el espesor de sus paredes; sin embargo, la relación fia fisiológica, el cual permite un funcionamiento
entre el espesor d e la pared y el radio de la cavi- cardiaco normal a pesar del incremento e n los re-
d a d (h/r) permanece constante (figura 35). Este querimientos de oxígeno y d e trabajo periférico.
comportamiento fisiológico se debe a que — d e C o m o el estrés parietal no está aumentado, la fun-
acuerdo con la ley d e L a p l a c e — e l estrés es direc- ción ventricular se mantiene normal y el M V 0 no 2
tamente proporcional a la presión intracavitaria (P) aumenta (los principales determinantes del M V 0 2
NIÑO ADULTO
H I P E R T R O F I A F I S I O L Ó G I C A (figura 3 5 )
tenía el concepto de que la hipertrofia miocárdica hipertorfia miocárdica constituye, en este caso, el
siempre manifestaba enfermedad del corazón. mecanismo compensador que ayuda al corazón a
El atleta entrenado mantiene un gasto cardiaco mantener un trabajo eficiente, al normalizar el
igual q u e el sujeto sedentario, pero c o n una fre- estrés de la pared durante la sístole (aumento del
cuencia cardiaca significativamente menor, lo cual engrosamiento sistólico) y con ello el M V 0 . En 2
se lleva a cabo con un mayor gasto sistólico. Para este caso, la hipertrofia es compensadora y ade-
lograr esto, el corazón aumenta su v o l u m e n dias- c u a d a ; la relación h/r e n diástole se v e aumentada
tólico (radio de la cavidad ventricular) y conse- dentro de ciertos límites. Se ha demostrado en ani-
cuentemente aumenta e n forma proporcional el males de experimentación que cuando se produ-
espesor de la pared (hipertrofia fisiológica), la cual c e una sobrecarga d e presión e n el corazón y se
permite mantener sin cambios la relación h/r y inhibe la síntesis proteica (y c o n ello la hipertrofia
c o n ello el estrés parietal; d e esta forma hay un compensadora) con actinomicina D, aparece in-
considerable ahorro M V 0 2 y un aumento en la suficiencia cardiaca por la ausencia de la hipertro-
reserva cardiaca (recordar que la manera más efi- fia compensadora; ello demuestra el papel que jue-
c i e n t e de i n c r e m e n t a r e l gasto c a r d i a c o es la ga la hipertrofia ante la sobrecarga de presión.
taquicardia) (figura 3 6 ) .
En condiciones normales la relación h/r en diástole
medida por ecocardiografía bidimensional es de
0 . 4 7 ± 0.05 y se incrementa en sístole hasta 1.1 +
H I P E R T R O F I A A D E C U A D A (figuras 3 6 y 3 7 ) 0.1 (ver cap. de ECOCARDIOGRAFÍA BIDIMENSIONAL).
/^JTcrn
/ |í=2.55cm\ \
1 l r = 2 7
? c m
\ 1
489
CARDIOLOGÍA
Normalización del
estrés sistólico (s-»-)
/ \ esNtréosrmdiaalizastólcióicnodel(s-f)
F I G U R A 37
go coronario; por lo mismo, disminuye la reserva Ello explica la aparición de angor en los pacientes
coronaria, todo lo cual culmina con isquemia mió- c o n estenosis aórtica apretada sin obstrucción de
cárdica aun en presencia de coronarias normales. las arterias coronarias y también contribuye a la
f J2.3cm
NORMAL / S N. \
FIGURA 38
4<l()
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
aparición del mismo síntoma en algunos pacientes acompañadas de hipertrofia inadecuada con las
con cardiopatía hipertensiva. Por otro lado, la hi- consecuencias ya señaladas.
pertrofia puede ser inapropiada cuando aparece
sin ninguna sobrecarga hemodinámica evidente,
tal y c o m o acontece c o n la miocardiopatía hiper- M E C A N I S M O C O M P E N S A D O R D E LA
trófica. En este padecimiento el incremento despro- HIPERTROFIA MIOCÁRDICA
porcionado de la relación h/r en diástole se ve se-
guido de una pequeña cavidad ventricular y estrés C o m o se mencionó previamente, las sobrecargas
parietal anormalmente bajo con la misma consecuen- hemodinámicas cuando están presentes juegan un
cia ya mencionada, en el que hay desproporción entre papel importante en la función del corazón. Nor-
la circulación coronaria y la masa miocárdica. malmente, cuando las presiones y las dimensiones
d e las cavidades son normales y asimismo el gro-
sor parietal, también lo es, la función del corazón
H I P E R T R O F I A I N A D E C U A D A (figura 38) se realiza normalmente. Por otro lado, c u a n d o
aumenta la presión sistólica intraventricular (hiper-
Cuando la hipertrofia es incapaz d e normalizar el tensión arterial, estenosis aórtica, hipertensión pul-
estrés parietal en diástole o en sístole. monar, estenosis pulmonar) el ventrículo corres-
pondiente tiene que vaciarse contra una presión
C u a n d o ante una sobrecarga de presión o de
mayor o sea, el estrés sistólico (postcarga) aumen-
volumen o por destrucción amplia, difusa o parce-
ta, y ello conduce a una sobrecarga de presión; o
lar d e miofibrillas (miocardiopatía dilatada o infar-
sea, que la contracción miocárdica tendrá que ser
to del miocardio) la hipertrofia no es suficiente para
más enérgica para lograr el vaciamiento ventricu-
normalizar el estrés diastólico (disminución de la
lar y a su v e z , se incrementa significativamente el
relación h/r) por dilatación d e la cavidad ventricu-
consumo de oxigeno miocárdico ( M V O , ) . El au-
lar, la contracción se deprime y el engrosamiento
mento del estrés parietal sistólico máximo, se con-
sistólico se torna insuficiente para normalizar el
vierte e n un "mecanismo gatillo" para generar hi-
estrés parietal (poscarga), la cual aumenta el con-
pertrofia miocárdica, lo cual normaliza el estrés
sumo de oxígeno miocárdico ( M V O , ) . La hipertro-
sistólico (figura 37). De esta manera, la hipertrofia
fia inadecuada se presenta e n los estadios avanza-
aumenta la fuerza de contracción, que se traduce
dos de cardiopatía hipertensiva y estenosis aórtica
en aumento del engrosamiento sistólico d e la pa-
grave; por esta razón la disminución anormal de la
red y una reducción concomitante del área de la
relación h/r e n diástole (dilatación ventricular) e n
cavidad, c o n lo que se normaliza el estrés parietal
estos pacientes representa la ineficiencia d e la
sistólico y con ello, el corazón mantiene un gasto
hipertorfia c o m o mecanismo compensador, o sea
cardíaco normal, a pesar d e que se vacía ante una
la sobrecarga ha sobrepasado la capacidad com-
mayor presión, sin aumento e n el c o n s u m o de
pensadora de la hipertrofia.
oxígeno miocárdico (figura 37).
En estas condiciones la insuficiencia ventricu-
lar puede tener c o m o consecuencia la pseudonor- Por otro lado, cuando aumenta el volumen dias-
malización d e la presión sistólica intracavitaria e n tólico del corazón (Insuficiencia aórtica), aumenta
estos pacientes. el radio d e la cavidad ventricular, por lo cual au-
La hipertrofia también se constituye en inade- menta el estrés diastólico (figura 37) y el corazón
cuada c u a n d o ante una sobrecarga volumétrica tiene que aumentar considerablemente su fuerza
importante (insuficiencia aórtica o pulmonar, in- de contracción (contractilidad) para desplazar una
suficiencia mitral o tricuspídea, C I V o P C A , etc.) mayor cantidad de v o l u m e n ; nuevamente, la hi-
de curso crónico, el radio de la cavidad excede pertrofia miocárdica normaliza el estrés diastólico
desproporcionadamente el espesor d e la pared y permite que el corazón logre desplazar una ma-
ventricular (disminución d e la relación h/r e n yor cantidad d e v o l u m e n , hacia la circulación
diástole); y ello trae c o m o consecuencia la dilata- periférica. En ambos casos, la hipertrofia miocár-
ción ventricular excesiva, c o n aumento del estrés dica evita que e l corazón se torne insuficiente al
parietal (y d e l M V O , ) y contracción miocárdica tener que realizar una función ante una mayor carga
insuficiente. de trabajo (figura 37). Esta acción compensadora
de la hipertrofia, permite incrementar significati-
Finalmente la gran dilatación ventricular que se
vamente la función hemodinámica en respuesta al
observa en la miocardiopatía dilatada y e n algunos
ejercicio. En otras condiciones patológicas como el
casos de cardiopatía isquémica también se v e n
CARDIOLOGÍA
infarto del miocardio transmural, en el que la ex- normal, pero conduce a la disfunción diastólica y
pansión adelgaza y desfuncionaliza un área mio- a la insuficiencia coronaria.
cárdica de extensión variable, la hipertrofia de las
paredes no infartadas intentan suplir la función d e l
miocardio inactivado por la necrosis. F I S I O P A T O L O G Í A D E LAS M A N I F E S T A C I O N E S
La relación entre el espesor de la pared y el CLÍNICAS DE INSUFICIENCIA CARDIACA
radio de la cavidad (relación grosor/radio: h/r) o lo
que es lo mismo, entre la masa miocárdica y el Son causadas fundamentalmente por la activación
volumen ventricular (masa/volumen), es una cons- neurohumoral que se desencadena c o n la caída
tante fisiológica de gran importancia en la fisiolo- del gasto cardiaco. En efecto, la función ventricu-
gía del corazón, ya que c o m o se mencionó previa- lar puede estar importantemente deprimida pero
mente, participa en interacción con la precarga, el gasto cardiaco puede ser preservado, c o m o ya
c o n la reserva cronotrópica y con la poscarga en la se mencionó por incremento de los volúmenes
regulación del M V 0 y d e la función ventricular,
2 ventriculares y la ley d e Starling (cuadro 3).
ya que cuando la relación mencionada (h/r o masa/
El aumento d e la presión diastólica ventricular,
volumen) se pierde, aparecen consecuencias e n el
incrementa también la presión de las cavidades
funcionamiento cardíaco y en el M V O , .
auriculares, lo cual se convierte en el estímulo para
En efecto, mientras la relación h/r e n diástole promover la secreción del Factor Natriurético A u -
se mantiene normal ( 0 . 4 7 ± 0.05) también lo será ricular (figura 26), el cual, como ya se mencionó,
el M V O j y la función ventricular. Por el contrario, tiene una doble a c c i ó n : natriurética (diurético
c u a n d o d i c h a relación disminuye (insuficiencia endógeno) y bloqueador d e la secreción de Renina
mitral, miocardiopatía dilatada, fases avanzadas de (figura 24) hechos que permiten al paciente afec-
insuficiencia aórtica o infarto del miocardio exten- tado por i n s u f i c i e n c i a c a r d i a c a c r ó n i c a estar
so transmural), aumenta la poscarga, el M V 0 y se2
asintomático; es decir, mantiene un gasto cardiaco
reduce la función ventricular (fracción de expul- adecuado por el efecto compensador de la precarga
sión); e n otras palabras, la hipertrofia es insuficien- (Cuadro 3) al mismo tiempo que no tienen con-
te para compensar la función (hipertrofia inade- gestión pulmonar (figura 25) ni visceral.
cuada) (figura 38). Por el contrario, en algunas
En estas condiciones el paciente puede estar
sobrecargas de presión (estenosis aórtica, hiperten-
e n insuficiencia cardiaca franca y al mismo tiempo
sión arterial) o e n la miocardiopatía hipetrófica, la
estar en clase funcional I.
hipertrofia puede ser excesiva (hipertrofia inapro-
Cuando la reducción d e la fracción de expul-
piada) figura 38) y solo por ello, favorece la pre-
sión condiciona disminución del gasto cardiaco,
sencia d e isquemia miocárdica, ya que se pierde
se activa el sistema neurohumoral (simpático y
la relación entre ramos coronarios y masa miocár-
renina-angiotensina-aldosterona) (figura 27) y se
dica irrigada, con el aumento exagerado de esta
bloquea la acción del factor natriurético auricular.
última que no se acompaña del aumento de las pri-
meras; asimismo, se reduce la reserva coronaria y La activación del sistema simpático causa ta-
por última, la elevación de la presión diastólica in- quicardia, palidez, piloerección y oliguria. Por su
traventricular, inducida por la hipertrofia inapropia- parte, la activación del sistema RAA es causa de
d a , reduce el gradiente aorto coronario con lo que retención de líquidos que al asociarse con la hi-
también se reduce el flujo sanguíneo al miocardio. pertensión venosa sistémica (elevación d e la pre-
sión diastólica del ventrículo derecho) e hiperten-
En conclusión, la hipertrofia como mecanismo sión venosa pulmonar (hipertensión diastólica del
adaptativo (hipertrofia adecuada) permite mante- ventrículo izquierdo), condicionan la congestión
ner una función ventricular normal a pesar de que venosa sistémica y pulmonar. En efecto la hiper-
la carga hemodinámica se encuentre anormalmen- tensión venosa sistémica es causa de la plétora
te aumentada, cuando la hipertrofia es insuficien- yugular, hepatomegalia, edema de miembros in-
te para mantener normal el estrés diastólico (so- feriores y cuando es extrema: ascitis. Por otra par-
brecarga de volumen) o la poscarga (estrés parietal te, la elevación de la presión venosa pulmonar in-
sistólico), el corazón se dilata en desproporción al terfiere c o n la hematosis y es causa de la disnea,
espesor de la pared (hipertrofia inadecuada) y se q u e d e p e n d i e n d o d e l g r a d o d e hipertensión
deprime la función ventricular. venocapilar puede ser de grandes, medianos o
pequeños esfuerzos. En casos extremos: disnea de
Por el contrario, la hipertrofia excesiva (hiper- reposo, ortopnea, disnea paroxística nocturna o
trofia inapropiada) mantiene la función sistólica
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
CUADRO CLINICO
TAQUICARDIA
La falla hemodinámica del corazón trae c o m o con-
secuencia caída del gasto cardiaco. El aumento de
F I G U R A 39 Edema agudo del pulmón. La radio- la frecuencia cardiaca es un mecanismo de com-
grafía del tórax muestra cardiomegalia (ICT:0.56) y pensación que normaliza el volumen/minuto y ello
signos de hipertensión venocapilar muy importan- se lleva a cabo, como fue mencionado, mediante
te, con áreas de edema intersticial, con tendencia a estimulación adrenérgica. Sin embargo, para que
la imagen en "alas de mariposa"
la taquicardia pueda ser considerada c o m o mani-
festación de insuficiencia cardiaca debe acompa-
ñarse de las otras dos manifestaciones enunciadas:
cardiomegalia y "ritmo de galope". Debemos re-
MANIFESTACIONES CLINICAS DE cordar que el aumento de la frecuencia cardiaca
I N S U F I C I E N C I A C A R D I A C A II no necesariamente traduce falla contráctil del co-
razón, ya que puede ser consecutiva a disminu-
ción del gasto cardiaco por otros motivos como lo
Mecanismo Sistema RAA son la hipovolemia (deshidratación o hemorragia),
adrenérgico el taponamiento cardiaco, o bien, por aumento de
las demandas tisulares de oxígeno como sucede
en la fiebre, embarazo o hipertiroidismo; finalmen-
Palidez
Diaforesis
te, la hipoxemia de cualquier etiología pero ma-
Piloerección yormente manifiesta e n la embolia pulmonar, es
Taquicardia Edema causa ineludible de taquicardia, sin que necesa-
Hepatomegalia riamente ésta signifique insuficiencia cardiaca.
Plétora yugular
Disnea
Cardiomegalia
CARDIOMEGALIA
Ritmo de galope La dilatación del corazón es una manifestación obli-
gada en la insuficiencia cardiaca, ya que constituye
F I G U R A 40 la traducción clínica de la utilización d e la ley de
Frank-Starling como mecanismo compensador para
la disminución d e l gasto cardiaco ( C u a d r o 3 , figu-
edema agudo del pulmón (figura 39). El aumento ras 2 5 , 34 y 3 9 ) .
del volumen circulante causado por la retención Así pues, no hay insuficiencia cardiaca sin car-
de agua y sodio incrementa a su vez el retorno v e - diomegalia. En efecto, las manifestaciones de hi-
noso al corazón, lo cual es causa del aumento del pertensión venosa sistémica (ingurgitación yugular,
volumen diastólico y ello a su vez condiciona la hepatomegalia, edemas), que se observan en una
cardiomegalia que cuando coincide c o n taquicar- pericarditis constrictiva (corazón de tamaño nor-
dia (catecolaminas) y mala función ventricular (rit- mal) no se deben a insuficiencia cardiaca, sino al
mo d e galope) constituyen la triada de los signos impedimento mecánico al llenado diastólico del
centrales de insuficiencia cardiaca (taquicardia, corazón, impuesto por la coraza pericárdica. Igual-
cardiomegalia y ritmo d e galope) (figura 4 0 ) . mente la disnea y otros signos de hipertensión
venocapilar que se observan en algunos pacientes
En la figura 41 se esquematizan las manifes-
c o n infarto del miocardio e n evolución sin cardio-
taciones de insuficiencia cardiaca congestiva y
4*»
CARDIOLOGÍA
y Gasto cardiaco
Secreción de Secreción de
catecolaminas <• angiotensina II
y Vasoconstricción 1*^-,
periférica
^
Aldosterona
Taquicardia
Palidez Retención de w
diaforesis
H OyNa+
2 + ° ^ u n a
piloerección
f Volumen circulante
i Volumen diastólico
Congestión
ventricular
Ritmo de galope pulmonar
Disnea Cardiomegalia
F I G U R A 41
megalia. traducen hipertensión diastólica del ven- En estos casos, la sobrecarga volumétrica es la
trículo izquierdo por relajación lenta e incompleta causante d e la cardiomegalia y la cavidad sobre-
(figura 12). producida por la isquemia y no falla cargada puede mantener una función a d e c u a d a
contráctil de dicho ventrículo. En estos casos, las por largo tiempo.
manifestaciones clínicas pueden ser las mismas que
se presentan e n la insuficiencia cardiaca, pero como R I T M O DE GALOPE
los mecanismos fisiopatológicos que las generan El ritmo d e galope es un signo presente en casi la
son distintos, no se pueden considerar como con- totalidad de los casos con insuficiencia cardiaca;
secuencia de falla contráctil del corazón a esta al- sin embargo, no siempre se logra auscultar clara-
teración se le denomina "disfunción diastólica". mente por las siguientes razones:
Por el contrario, no todo paciente que presen- 1. Falta de entrenamiento del m é d i c o para re-
te cardiomegalia necesariamente se encuentra e n conocer el signo por auscultación. Esta es la
insuficiencia cardiaca; así, todas las condiciones causa más frecuente por la que el ritmo ga-
que provoquen sobrecarga diastólica (de volumen) lope pasa inadvertido.
de una o ambas cavidades ventriculares condicio-
narán la dilatación de las mismas, sin que ello tra- 2 . Apagamiento de los ruidos c a r d i a c o s , sea
duzca necesariamente insuficiencia cardiaca; como por la propia insuficiencia cardiaca o por
por ejemplo, se pueden citar la dilatación del ven- otros factores c o m o son la obesidad y la so-
trículo izquierdo que se observa en la insuficiencia bredistensión pulmonar.
mitral, conducto arterioso persistente, insuficien- 3. La presencia d e otros fenómenos acústi-
cia d e las sigmoieas aórticas o la dilatación del cos c o m o soplos cardiacos o estertores pul-
ventrículo derecho en presencia d e insuficiencia monares, dificulta en forma muy importan-
tricuspídea o comunicación interauricular. te el reconocimiento de los ruidos de galope.
4^r
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
495
CARDIOLOGÍA
l l l . CARDIOPATÍAS C O N SOBRECARGA
DIASTÓLICA
a) Estadio avanzado de insuficiencia
tricuspídea o insuficiencia pulmonar. CUADRO 6
CAUSAS D E INSUFICIENCIA CARDIACA
c) CIA en adulto GLOBAL
I. CARDIOPATIA I S Q U E M I C A :
h e m o d i n á m i c a se traduce por caída del gasto a) Infarto del miocardio extenso de
cardiaco derecho y consecutivamente del gasto ambos ventrículos
sistémico (hipotensión arterial), lo cual se traduce II. M I O C A R D I O P A T Í A DILATADA
clínicamente por colapso vascular periférico, que
al mismo tiempo se a c o m p a ñ a de hipertensión III. MIOCARDITIS
venosa sistémica, mayormente manifiesta por ele-
IV. GRANDES C O R T O C I R C U I T O S AV (PCA Y
vación de la P V C , ingurgitación yugular y hepato-
C I V ) , O MIXTOS (TRASPOSICIÓN DE LOS
megalia congestiva; raramente aparece edema de-
GRANDES VASOS, D O B L E CÁMARA DE
bido a la instalación aguda del cuadro.
SALIDA DEL V E N T R I C U L O D E R E C H O SIN
Por el contrario, c u a n d o el ventrículo dere- ESTENOSIS PULMONAR) EN EL RECIÉN
cho c l a u d i c a después de haber soportado una NACIDO).
sobrecarga por largo t i e m p o , la disminución d e l
gasto p u l m o n a r i n m e d i a t a m e n t e es c o m p e n s a - V. VALVULOPATÍAS:
d o , mediante m e c a n i s m o d e Starling (aumento a) Graves lesiones bivalvulares
d e v o l u m e n y presión diastólica d e l ventrículo (mitrotricuspídeas) o trivalvulares
d e r e c h o ) . Este m e c a n i s m o compensador c o n d i - (asociadas a valvulopatía aórtica).
c i o n a hipertensión venosa sistémica, tanto m a - b) Estadio final de valvulopatía aórtica.
yor, cuanto m a y o r m e n t e se e n c u e n t r a d e p r i m i -
d a la curva de función ventricular d e r e c h a . A este
496
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
antes descritas para la insuficiencia contráctil de cada trabajo cardiaco y el M V 0 y algo similar sucede
2
ventrículo. En tales casos, la retención de líquidos cuando el corazón se dilata por destrucción par-
no sólo se debe al incremento de la presión hidros- celar (infarto del miocardio) o difusa (miocarditis o
tática del compartimiento ¡ntravascular, sino que miocardiopatía dilatada), en efecto la hipertrofia
además intervienen mecanismos renales que son de las miofibrillas no afectadas por el proceso pa-
desencadenados por el bajo gasto cardiaco (figuras tológico se hipertrofian con el intento adaptativo
2 8 , 2 9 , 3 0 , 3 1 , 32 y 33). En efecto, la disminución de normalizar el estrés parietal y el funcionamien-
del filtrado glomerular promueve la retención de to cardiaco (figura 37).
N A + y agua, tanto en el túbulo proximal (desequili-
brio glomerulotubular), como en el túbulo distal (sis-
tema renina-angiotensina-aldosterona) lo cual trae
E V O L U C I Ó N N A T U R A L D E LA I N S U F I C I E N C I A
como consecuencia la aparición de edema genera-
CARDIACA
lizado (anasarca) que alterna con oliguria.
Se denomina así al proceso que promueve el cam- La activación permanente del sistema renina an-
bió de la masa y volumen ventricular, así c o m o de giotensina-aldosterona conforme pasa el tiempo se
la relación entre ellos (relación masa/volumen (M/ torna nocivo para el organismo y para el propio
V) o grosor/radio (h/r) para permitir que el corazón corazón (figuras 4 5 , 4 6 , 4 7 , 4 8 y 49) y ello condi-
pueda adaptar su funcionamiento a nuevas condi- ciona la perpetuación de las manifestaciones clíni-
ciones de trabajo. En efecto, cuando aparece una cas, la progresión de la enfermedad hasta la muer-
sobrecarga d e presión (estenosis aórtica o hiper- te del enfermo. A continuación se enumeran los
tensión arterial) aparece hipertofia para mantener efectos adversos del aumento sostenido de la acti-
el gasto cardiaco sin mayor costo metabólico de la vación adrenérgica, angiotensina II y aldosterona:
punción ( M V 0 normal) aun cuando el trabajo rea-
2
4ÜZ
CARDIOLOGÍA
498
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
(fmol/mg)
100 r , WM Control
• ICC
FIGURA 43 Densidad de receptores . p<0.05
P en membrana de miofibrillas de su-
jetos sin insuficiencia cardiaca (Con-
trol) y de sujetos c o n insuficiencia
cardiaca crónica (ICC) por miocardio-
patía dilatada. Se observa la reduc-
ción significativa de receptores p en
los pacientes con I C C a expensas de
los receptores P-1. (Tomado de Gilbert
E.M., y col., Am J Cardiol, 1993; 71:
(Suppl.)12C-22C) B-total 8-2
1
do a que se reduce su acoplamiento con el "primer Taylor sugiere que estos cambios fisiopatológi-
mensajero" (noradrenalina) lo cual reduce la respues- cos pueden servir teóricamente c o m o un meca-
ta agonista hasta en un 30 %, al parecer este desaco- nismo "cardioprotector" ante la exagerada estimu-
plamiento se debe a un aumento en la actividad de la lación adrenérgica en las etapas tempranas de la
proteina C inhibitoria que pude ser hasta de un 3 0 %. insuficiencia cardiaca; sin embargo, a medida que
Finalmente, trabajos experimentales recientes, el daño progresa, estos cambios comprometen la
señalan por otro lado que la función de la proteína habilidad d e l complejo R C C para mantener la fun-
C excitatoria puede estar disminuida. ción cardiaca, especialmente e n momentos don-
Puesto que el corazón humano no parece tener de el inc remento ele la contrac tilidad es nec esaria,
receptores beta-adrenérgicos de "reserva", la reduc- como sucede durante el ejercicio.
ción final en la densidad de los receptores beta-1 y C o m o ya fue mencionado, en la fase de c o m -
la mala función de los receptores beta-2 e n la insu- pensación, el mecanismo inicial es la estimulación
ficiencia cardiaca, resulta en la disminución hasta adrenérgica, que intenta normalizar el gasto car-
en un 5 0 % de la respuesta contráctil, tras la admi- díaco. Este mecanismo es activado precisamente a
nistración endógena de beta agonistas (figura 44). través d e los receptores beta-1 ubicados e n e l
sarcolema.
RESPUESTA I N O T R O P I C A AL I S O P R O T E R E N O L EFECTO S I S T É M I C O DE LA A C T I V A C I Ó N
SOSTENIDA DEL SISTEMA A D R E N É R G I C O
EN LA INSUFICIENCIA CARDIACA
4 499
CARDIOLOGIA •
Efecto Bowditch
Hearí/1994; 15:164-170.)
509L
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
gura 47). Estos hechos explican porqué la concen- mueve la síntesis de colágena en el intersti-
tración elevada de noradrenalina e n el plasma cio del miocardio, hecho que condiciona
constituye un factor de mal pronóstico para el pa- que la hipertrofia se torne patológica, cuan-
ciente con insuficiencia cardiaca (figura 4 8 ) . do aumenta la concentración d e colágena
Finalmente, el efecto adrenérgico sostenido en forma excesiva.
inhibe al sistema vagal, lo cual trae c o m o conse-
3. La angiotensina II p r o m u e v e la hipertrofia
cuencia que se pierda la variabilidad de la frecuen-
m i o c á r d i c a y vascular. En un principio esta
cia cardiaca y si a ello se le agrega el aumento e n la
hipertrofia ayuda a normalizar la función
vulnerabilidad eléctrica que tiene el miocardio in-
cardiaca, pero con el tiempo el aumento de
suficiente y la presencia d e isquemia miocárdica,
la masa miocárdica también se hace a ex-
se podrá entender la propensión que estos enfer-
pensas d e un incremento a n o r m a l de la
mos tienen para la muerte súbita.
colágena intersticial, lo cual convierte a la
hipertrofia e n un proceso patológico cuan-
do se suma a la acción de la aldosterona.
A C T I V A C I Ó N S O S T E N I D A D E L SISTEfvlA RAA
4 . Inhibición d e l factor natriurético a u r i c u -
C o m o sucede con la activación sostenida del siste- lar lo c u a l lo c a n c e l a c o m o m e c a n i s m o
ma adrenérgico, la perpetuación e n el aumento de compensador.
la concentración de angiotensina II trae una serie
5. E s t i m u l a c i ó n de v a s o p r e s i n a a nivel del
de consecuencias que se enumeran a continuación:
hipotálamo, lo cual favorece la retención de
1. Vasoconstricción periférica acentuada. Esta agua e n exceso de Na + y c o n ello la apari-
acción, por un lado, aumenta la poscarga a ción d e hiponatremia por dilución.
un corazón que ya de por sí tiene mala fun-
6. Apoptosis (muerte celular p r o g r a m a d a ) .
ción, por lo que favorece la depresión paula-
Las células de un organismo vivo, al nacer tie-
tina de la fracción de expulsión y por otro
ne ya la información genética de su tiempo de
lado, perpetúa los efectos ya mencionados
vida y el tiempo en el que deben de morir.
por el riñon y con ello la activación sostenida
del sistema renina-angiotensina-aldosterona. C u a n d o las células son especializadas
pierden su capacidad de reprodución y el
2 . Estimulación d e la secreción d e aldoste- fenómeno d e apoptosis puede acelerarse
r o n a . Este efecto favorece la retención de cuando son estimuladas por factores de cre-
sodio, la expansión del espacio extracelular c i m i e n t o . En e l c a s o d e i n s u f i c i e n c i a
por retención de agua y c o n ello la conges- cardiaca, la angiotensina II y el factor de
tión visceral, pulmonar y la cardiomegalia. necrosis tisular alfa (TNT-a) inducen apop-
Por otro lado, la aldosterona también pro- tosis e n las células miocárdicas.
n
TuUI
p. 0.IMM11
501
CARDIOLOGÍA
Retención
H O y Na +
\ Secreción
H. Antidiurética
i
Vasoconstricción 2
Muerte de
4 f * miofibrillas Edemas
i Gasto
cardiaco Hiponatremia
FIGURA 49
Catecolaminas
Efecto
cardiotóxico
I
1 Postcarga Fibrosisl
miocárdica Hormona
intersticial antidiurética
Necrosis
* Casto cardiaco
I Capacidad física
Cardiomegalia
Edema
Disnea Hiponatremia
Progresión Muerte
FIGURA 50
502
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
En conclusión, la activación persistente del sis- En los pacientes con insuficiencia renal
tema neuroendocrino en pacientes c o n insuficien- crónica e n los que coincide anemia impor-
cia cardiaca, deteriora progresivamente la función tante con insuficiencia cardiaca, la adminis-
del corazón y finalmente condiciona la muerte (fi- tración de eritropoyetina subcutánea mejora
guras 4 9 y 5 0 ) ; así un proceso que se inicia c o n importantemente e l cuadro de insuficiencia
una falla hemodinámica termina por ser una en- cardiaca al corregir la anemia.
4i?_3
CARDIOLOGÍA
c) La hiperviscosidaci que puede ser consecuen- persistente que puede llegar a ser e l único
cia de policitemia vera o secundaria a enfer- tratamiento capaz d e yugular el c u a d r o de
medades pulmonares c on insuficieni i.i res- insuficiencia c a r d i a c a . En estos casos, la
p i r a t o r i a c r ó n i c a , p u e d e ser c a u s a r reducción de la sobrecarga diastólica e x c e -
insuficiencia cardiaca cuyo tratamiento efi- siva es la medida adecuada para lograr el
caz será reducir el hematócrito exagerada- mejor funcionamiento del c o r a z ó n , lo cual
mente elevado. se hace evidente al normalizarse los volú-
menes diastólicos y por lo tanto las presio-
d) Cuando la causa de la insuficiencia cardiaca nes de llenado d e las cavidades ventricula-
es una sobrecarga sistólica grave aguda o res, esto trae c o m o c o n s e c u e n c i a la
sostenida, c o m o la hipertensión arterial sis- reducción el tamaño del corazón y la nor-
témica, el uso racional de una medicación malización d e la frecuencia cardiaca. En to-
a n t i h i p e r t e n s i v a a p r o p i a d a , r e d u c i r á la dos estos casos c o n sobrecarga d e presión
poscarga excesivamente aumentada y me- o d e volumen c u a n d o la insuficiencia car-
jorará consecuentemente la función ventri- diaca se debe a la sobrecarga misma (diso-
cular y lo mismo es cierto para el recién na- ciación entre función ventricular y contrac-
cido en insuficiencia cardiaca refractaria por tilidad), la corrección de la misma culminará
coartación aórtica, e n quien la única opción en normalización d e la función ventricular,
terapéutica para salvar la vida es el alivio de debido a que no existe daño miocárdico.
la obstrucción mediante angioplastia o ciru-
gía. En el curso de una embolia pulmonar
f) La p r e v e n c i ó n d e la extensión d e tejido
grave, la meta e n el tratamiento de la insufi-
muerto e n el curso del infarto del miocardio
ciencia ventricular derecha será abatir las
y la recuperación de miocardio viable afec-
resistencias pulmonares que generan una
tado por isquemia externa mediante angio-
importante hipertensión arterial pulmonar
plastia primaria es una forma de tratar la in-
ante la cual dicho ventrículo claudica. El
suficiencia cardiaca, ya que cuando la cantidad
c a m b i o valvular aórtico podrá corregir la
de tejido necrosado alcanza suficiente ex-
sobrecarga d e presión impuesta al ventrícu-
tensión, el miocardio sano restante no puede
lo izquierdo por una estenosis aórtica apre-
ejercer una función de bomba adecuada y
tada; mientras que la valvulotomía pulim mar
aparece la falla hemodinámicay aun el cho-
podría ayudar al funcionamiento ventricu-
que cardiogénico.
lar derecho al disminuir su carga sistólica en
O t l V h I' l*> tn 910ll bU8>> -•'
caso de estenosis pulmonar valvular.
g) La presencia de una extensión importante de
miocardio no funcionante (viable) por grave
e) Las sobrecargas de v o l u m e n (diastólicas) isquemia (miocardio hibernante) puede ser
pueden llevar al sujeto a la insuficiencia car- causa d e insuficiencia cardiaca de evolución
d i a c a . La sustitución p r o t é s i c a mitral o crónica cuyo único tratamiento eficaz es la
aórtica para corregir una insuficiencia val- revascularización coronaria quirúrgica.
vular grave, al cancelar la importante so-
brecarga h e m o d i n á m i c a , mejora e n forma h) La insuficiencia cardiaca condicionada por
definitiva la actuación del corazón. El re- una taquicardia supraventricular incesante
sultado de la terapéutica quirúrgica en oca- c u a n d o ha p e r m a n e c i d o por semanas o
siones llega a ser espectacular, c u a n d o un meses, no podrá ser aliviada hasta no dar
c a m b i o valvular mitral corrige una insufi- tratamiento a la arritmia mediante ablación
ciencia ventricular izquierda aguda condi- (figura 51). Por el contrario, la insuficiencia
cionada por una ruptura de cuerdas tendi- cardiaca condicionada por bradicardia con-
secutiva a un bloqueo AV completo cróni-
• nosas del aparato valvular e n el curso de c o , solo podrá ser tratada efectivamente
un infarto d e l miocardio o e n e l caso de la mediante la instalación de un marcapaso
sustitución valvular aórtica para el trata- definitivo bicameral.
miento de una insuficiencia cardiaca refrac-
taria, causada por la perforación o ruptura En conclusión, para e l tratamiento d e la insu-
valvular c o m o consecuencia d e un injerto ficiencia cardiaca el c o n o c i m i e n t o del proceso
infeccioso. Algo similar sucede e n el recien etiológico y d e los factores contribuyentes o per-
nacido c o n el cierre de un gran conducto petuantes es fundamental porque su corrección,
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
J A A A
F C 150 /jnin
1 cm i FCrIOÓÍmin . ¡f ¡FC 80 / mm
4^ *t\ ¿*
11-04-88
AP = 1 3 % AP = 1 2 % AP = 2 9 %
4
CARDIOLOGÍA
OUABAÍNA
dP/dt (%A)
+50
P
+40
Después
+30 / < 2 5 seg-1
•mué?
Antes
+20
+ 10 1 /< 41 seg-1
0
Normal
D VI
2
megalia y la congestión pulmonar
P.A.
media
(mmHg)
Flujo
sanguíneo
en antebrazo
(ml/100g/min)
Resistencia
vascular
del antebrazo
(mmHg/ml/min)
Tono
venoso
(mmHg)
3430 1461
Resist. perif.
gasto cardiaco
1.84 3.50
OUBAÍNA -L -L
( 0 . 6 g) 0 10 20 30 40 50 60
Tiempo (min)
FIGURA 54 En pacientes con insuficiencia cardiaca la digital produce vasodilatación periféri-
ca con disminución de las resistencias, aumento del flujo y del gasto cardiaco. (Tomado de
Masón D.T., Zelis R-, Heart Bull. 1968;17:109-112)
507
CARDIOLOGÍA
B
F I G U R A 54 A: Paciente en insuficiencia cardiaca. Se aprecia cardiomegalia, signos de hipertensión veno-
3
capilar incluso edema pulmonar. B: el paciente, cinco días después de tratamiento para insuficiencia
cardiaca con digital y diuréticos muestra desaparición de la cardiomegalia y de la congestión pulmonar
periféricas por estimulación adrenérgica, hecho ciamiento (se reduce el volumen sistólico y se au-
que aumenta la poscarga, q u e a su v e z , reduce el menta tanto el gasto sistólico, como el gasto cardia-
gasto cardiaco innecesariamente aumentado e n co), y por otro, se disminuye el llenado ventricular,
estas condiciones por la acción digitálica, d e tal con lo que reduce el volumen diastólico (el radio
manera que este mecanismo de autorregulación de la cavidad ventricular) y con ello la cardiomega-
normaliza el gasto cardíaco, a pesar de la acción lia; a estos efectos se le agrega el efecto vagal que
digitálica (figura 56). (coincide con la falta de efecto adrenérgico) reduce
la frecuencia cardiaca. En conclusión, el balance fi-
nal de los efectos hemodinámicos de la digital (au-
mento d e la contractilidad, reducción de la poscar-
E F E C T O DE LA D I G I T A L SOBRE EL M V 0
ga y de la frecuencia cardiaca), culmina c o n la
2
508
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
100
R A . media
90
(mmHg)
80
70
3.0
Flujo
2.5
sanguíneo
e n antebrazo 2.0
(mmHg/ml/min) ^ ^
50
Resistencia _i-
vascular
del antebrazo 4 0
(mmHg/IOOg/min) 3 5
30
Tono
venoso
(mmHg/ml)
1071
Resist. perif.
gasto c a r d i a c o
5.6 5.3
OUBAÍNA B B B B — -L -L J I
( a 5 8 )
0 10 20 30 40 50 60
Tiempo (min)
509
CARDIOLOGÍA
Resistencias periféricas [
t
Tono venoso í 1 E F E C T O DE LA DIGITAL SOBRE LA CLASE FUNCIO-
Frecuencia cardiaca -#> NAL DEL PACIENTE EN INSUFICIENCIA CARDIACA
Gasto cardiaco t —*
-f-
" La administración de medicamentos digitálicos en
Presión telediastólica i pacientes c o n insuficiencia cardiaca aumenta el
gasto cardiaco (figuras 5 3 y 5 4 ) , reduce los volú-
Tamaño del corazón \
->•
menes ventriculares y la frecuencia cardiaca; asi-
MV0 2 \ t mismo, inactiva la secreción adrenérgica (figura
FIGURA 58 Acciones de la digital
segundos uU mi
FIGURA 59 Efectos de la
monoterapia con digital
(barras negras) en com-
-20 paración con placebo
-2 (barras grises) en relación
-40 al t i e m p o de e j e r c i c i o ,
concentración de nore-
-3
-60 pinefrina y renina plas-
mática en pacientes con
-80 -4 insuficiencia cardiaca
después de 6 m e s e s de
80 -100 -5 . tratamiento. (Tomado de
Van Veldhuisen D.|., ) Am
Tiempo de ejercico Norepinefrina Renina
Cardiol, 1993; 22:1564-73)
--4-
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
F I G U R A 60 Digital y efecto
Bowditch. En pacientes con
insuficiencia cardiaca, la ad- A C C I Ó N DIGITAL
ministración de digital no SOBRE EL EFECTO B O W D I T C H
sólo incrementa la contracti- EN INSUFICIENCIA CARDIACA
lidad por su efecto inotrópi-
co, sino también lo hace al
reducir la frecuencia cardia-
ca a l b l o q u e a r el s i s t e m a i ñ 1
adrenérgico y por su efecto
vagal (erecto Bowditch inver-
so). Este efecto también se
obtiene con la administra-
ción de betabloqueadores
Contractilidad / u -
160 **
trt 140
<Z
-O
"re 120
c
;©
100
Ü 80
e
OI
o 60
15
E 40
rO
•:';.i:J
OI
20
•o *-
0
SDNN rMSSD pNN50 LF HF
59) y mejora la perfusión renal; todo ello va segui- po de ejercicio del paciente y reduce también sig-
d o de una reducción significativa de la congestión nificativamente las neurohormonas plasmáticas (fi-
de la congestión pulmonar (figura 5 5 ) , de la reten- gura 59).
ción hídrica con incremento concomitante de la diu- Es importante destacar que la dosis c o n la que se
resis y por lo tanto, de una mejoría muy significativa logra bloquear al sistema neurohumoral es menor a
de la disnea, d e los edemas y d e la tolerancia al la que se utiliza usualmente por lo que ahora se
esfuerzo, lo cual, sin duda mejora la clase funcional. recomienda usar la digital a dosis menores con las
Se ha demostrado que la digital tiene un efecto be- que se obtiene un efecto benéfico y además se redu-
néfico, tanto en pacientes con insuficiencia cardiaca cen las posibilidades de intoxicación digitálica. Se ha
muy grave y moderada, c o m o e n aquellos otros en demostrado fehacientemente que el mejor resulta-
los que los síntomas de la falla cardiaca son leves ya do se obtiene utilizando digital asociada a diuréticos
que la digital incrementa significativamente el tiem- e inhibidores de la ECA (vide infra).
4JU
CARDIOLOGÍA
D i g o x i n a ( c o m p r i m i d o 0.25 m g ) . La dosis total de rápida, los que también deberán ser utilizados para
digoxina para impregnación se encuentra entre 1.25 tratar la taquicardia paroxística auricular, el flutter
y 1.5 mg. La digoxina tiene una vida media de 36 a auricular y la taquiarritmia por fibrilación auricular
4 8 horas, lo cual la hace fácil su manejo. Su princi- con respuesta ventricular rápida (ver TRATAMIEN-
pal vía de eliminación es a través del riñon. T O DE INSUFICIENCIA CARDIACA A G U D A ) .
Esquemas de impregnación
DIURÉTICOS
• U n comprimido cada 8 horas (0.75 mg) duran-
te 2 días (dosis total 1.5 mg).
INDICACIONES PARA EL U S O DE D I U R É T I C O S EN
• Un comprimido cada 12 horas ( 0 . 5 0 mg) d u - PACIENTES C O N INSUFICIENCIA C A R D I A C A
rante 3 días (dosis total de 1.5 mg).
La administración intravenosa d e furosemida es
• U n comprimido diario (0.5 mg) durante 5 días
imperativa para el tratamiento del e d e m a agudo
(dosis total 1.25 mg).
pulmonar que e n una condición potencialmente
Es importante tener e n cuenta que si se logra la mortal. En efecto, la administración d e este fár-
impregnación antes de alcanzar la dosis recomen- maco (20 a 4 0 mg) e n estos pacientes culmina e n
dada querrá decir que ésa es la dosis requerida una mejoría rápida (figura 55) y, en ocasiones es-
por ese enfermo en especial, y es importante no pectacular, de este grave cuadro c o m o resultado
afanarse en alcanzar la dosis total recomendada de la rápida movilización del líquido pulmonar
que para ese enfermo puede ser tóxica. hacia la circulación y su eliminación renal, así
c o m o su efecto venodilatador, se valora a los 30 a
Esquema de mantenimiento 6 0 minutos después y de acuerdo c o n e l estado
clínico y la respuesta diurética se administran en-
• U n comprimido diario (0.25 mg) de lunes a sá- tre 20 y 60 mg c/6 u 8 hrs. A l mismo tiempo d e -
bado d e cada semana. berá administrarse cloruro de potasio (amp. de
20 mg) por vía intravenosa (catéter venoso cen-
• Medio comprimido diario (0.125 mg) de lunes
tral) a razón de 4 0 a 8 0 mEgL e n 24 hrs para evi-
a sábado de cada semana.
tar la hipokalemia. El potasio no d e b e adminis-
• U n comprimido ( 0 . 2 5 mg) o medio comprimi- trase si existe insuficiencia renal.
do cada tercer día.
C u a n d o el cuadro ha mejorado se inicia trata-
• Medio comprimido o un comprimido diaria- miento por vía oral (v/de infra).
mente excepto miércoles y domingo. Para el tratamiento c r ó n i c o se administran
diuréticos d e asa (furosemida o b u m e t a m i d a )
Es conveniente siempre dejar un día a la sema-
asociados a diuréticos ahorradores d e potasio
na para la eliminación del fármaco y evitar su acu-
(espironolactona o esplenorona) y si la respues-
mulación e n el plasma y la eventual intoxicación.
ta no es s a t i s f a c t o r i a p u e d e n a s o c i a r s e c o n
Cuando se dejen dos días deberá ser separado para
tiacidas (metolazona).
evitar la eliminación completa del fármaco. La gran
mayoría de los enfermos puede ser adecuadamente En pacientes con insuficiencia cardiaca de evo-
controlada c o n los esquemas antes propuestos o lución crónica se pueden utilizar los siguientes es-
c o n pequeños ajustes entre ellos, adaptados e n quemas diuréticos:
cada paciente.
1. a ) F u r o s e m i d a (lasix tab. 20 y 4 0 mg) 20 a
4 0 mg a las 8 a m , dosis que puede repe-
tirse a las 2 R M . En pacientes con insufi-
DIGITAUZACIÓN RÁPIDA ciencia renal pueden requerir hasta 300
m g e n 24 hrs.
La digitalización por vía intravenosa es utilizada
para el tratamiento d e aquellas condiciones clíni- b ) E s p i r o n o l a c t o n a (Aldactone t a b . de 2 5
cas e n las que se requiera un efecto digitálico ur- y 1 0 0 m g ) 2 5 a 5 0 mg a las 8 a m evita
gente sobre el corazón. El tratamiento de la insufi- la h i p o k a l e m i a , potencia e l efecto diu-
ciencia cardiaca aguda o cuando sin ser aguda es rético del furosemida y tiene un efecto
muy grave y por fin en el edema agudo pulmonar demostrado para prolongar la vida del
debe iniciarse c o n el uso de digitálicos de acción paciente.
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
3 . M e t o l a z o n a (Zaroxolin tab. 5 y 10 m g . ) .
Este diurético puede administrarse a razón
de 5 a 10 mg. a las 8 a m e n conjunto c o n
cualquiera d e los esquemas previos. Su in-
dicación precisa es la aparición de resisten-
cia a los diuréticos y/o insuficiencia cardia-
ca refractaria.
513
CARDIOLOGÍA
160 **
140
120
>*
100
80
60
40
**
20
FIGURA 63 Digital y variabilididad 0 J i
de la frecuencia cardiaca SDNN rMSSD pNN50 LF HF
crementa la tolerancia al ejercicio y por lo sis de colágena por e l fibroblasto, deja de estimu-
tanto mejora la clase funcional este efecto lar la secreción hipotálamica de vasopresina, y por
se p i e r d e si se suspende la m e d i c a c i ó n lo tanto, a u m e n t a la excreción d e agua libre por
digitálica (Estudios P R O V E D y R A D I A N C E ) el r i ñ o n , c o n lo q u e tiende a normalizarse la
(figura 64). osmolaridad plasmática; asimismo, deja de ejer-
cer el efecto inhibitorio para la respuesta renal
3. Reducen significativamente la mortalidad. del factor natriurético auricular y finalmente deja
Sin embargo, cabe mencionar que a pesar del de estimular la secreción de aldosterona, hecho
beneficio que resulta, la acción hemodinámica que promueve la excreción de agua y sodio, lo
d e estos fármacos e n insuficiencia cardiaca cró- cual favorece la reducción y aun la desaparición
nica no constituye su efecto más importante. En d e la retención de líquidos, se reduce la cardio-
efecto, la acción del bloqueo de la e n z i m a con- megalia, se retiene potasio y magnesio y finalmen-
versora es más importante por la inactivación del te, se deja de producir colágena e n e l intersticio
sistema neuroendocrino, y la reducción e n la con- miocárdico y se evita la apoptosis. Este efecto bio-
centración plasmática de la angiotensina II, ya que lógico es muy importante, ya que al inactivar a la
además de dejar de ejercer su efecto vasocons- angiotensina II, déla de actuar ésta c o m o factor de
trictor periférico, deja de promover la hipertrofia crecimiento en las miofibrillas y no se adelanta la
vascular y miocárdica; deja de estimular la sínte- muerte celular programada ( A P O P T O S I S ) de los
4
CARDIOLOGÍA
mismos, por lo cual tiene un efecto cardioprotector ello la sobrecarga hemodinámica. La consecuen-
y evita la progresión de la enfermedad. cia es la franca reducción de la cardiomegalia, la
Todas estas acciones en conjunto revierten el mejoría de la función ventricular y la desapari-
efecto nocivo d e la activación del sistema neuro- ción de la insuficiencia cardiaca si no existe daño
humoral, y por lo tanto, se retrasa o se detiene la miocardio) intrínseco (figura 66). En estos pa-
evolución del paciente con insuficiencia cardiaca cientes la administración de inhibidores de la
crónica hacia la muerte (figura 6 5 ) . ECA tiene tres consecuencias de gran utilidad
clínica:
INDICACIONES
a) Reduce o hace desaparecer la insuficiencia
1. Insuficiencia cardiaca crónica e n pacientes c o n cardiaca.
miocardiopatía dilatada. En este grupo de e n -
b) Si la insuficiencia cardiaca se reduce consi-
fermos se ha demostrado no soto una mejoría
derablemente, lo mismo que la cardiome-
significativa de la clase funcional, sino un a u -
galia, informa al cardiólogo de que no exis-
mento en la sobrevida, especialmente cuando
te daño miocárdico intrínseco, por lo tanto,
el tratamiento se hace e n conjunto con digital
el paciente será grandemente beneficiado
y diuréticos.
con el tratamiento quirúrgico. Si la cardio-
2. Insuficiencia cardiaca crónica e n pacientes re- megalia y la insuficiencia cardiaca no tienen
cuperados de infarto del miocardio, especial- una mejoría considerable, traducirá daño
mente de localización anterior. En este grupo miocárdioco intrínseco.
d e pacientes se han encontrado espec ¡alíñen-
te útiles estos fármacos, ya que no sólo mejo- c) El tratamiento p r e o p e r a t o r i o p e r m i t e a l
ran la clase funcional, sino que también redu- p a c i e n t e ser intervenido q u i r ú r g i c a m e n t e
cen o aun evitan el proceso de remodelación e n c o n d i c i o n e s h e m o d i n á m i c a s óptimas,
ventricular postinfarto (ver capítulo de C A R - c o n lo q u e se r e d u c e i m p o r t a n t e m e n t e la
Diopatía I S Q U É M I C A ) y por lo tanto la progresión mortalidad.
d e la enfermedad y con ello se reduce signifi-
cativamente la mortalidad; asimismo, se ha no-
EFECTOS COLATERALES INDESEABLES
tado que también se reduce la frecuencia de
los eventos de isquemia miocárdica aguda (an- 1. H i p o t e n s i ó n a r t e r i a l . Si a un paciente c o n in-
gina inestable o infarto del miocardio). suficiencia cardiaca se le produce hipotensión
c o n estos fármacos, será razón para reducir la
3. Pacientes c o n insuficiencia cardiaca debida a dosis o interrumpirlos; esta c o n d i c i ó n usual-
insuficiencias valvulares del corazón izquierdo mente traduce la falta de reserva sistólica del
(insuficiencia aórtica o mitral) de importante re- corazón, ya que al producir vasodilatación no
percusión hemodinámica). La disminución de se i n c r e m e n t a c o n c o m i t a n t e m e n t e el gasto
la poscarga reduce asimismo en forma muy im- cardiaco y c o m o consecuencia c a e la presión
portante, las regurgitaciones valvulares y c o n arterial.
ICCV
_I_
Digital Diurético Inhibidor
de la ECA
516
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
F I G U R A 66 Insuficiencia mitral pura grave. A : en insuficiencia cardiaca con índice cardiotorácico de 0.71.
B: después de tratamiento con inhibidores de la ECA desaparece la congestión pulmonar y se reduce la
cardiomegalia (ICT 0.57)
DOSFIC
IACÓ
IN
de presión sistólica < de 100 m m H g .
4
CARDIOLOGÍA
100 r Basal
Tratamiento
p<0.05
F I G U R A 6 7 La administración de
betabloqueadores (metropolol y
carvedilol) a pacientes con insufi-
ciencia cardiaca de evolución cróni-
ca (barras grises) se acompañó de
un incremento significativo de re-
ceptores 0-1 miocárdicos en el sar-
colema en comparación de aquellos
pacientes a los que se les adminis-
tró placebo (barras negras). (Tomado
de Gilbert E.M. y col., Am | Cardiol, 1993;
Metoprolol Placebo Carvedilol Placebo 71:<Suppl.|12C-22C)
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
F I G U R A 6 8 La administra- • • Basal
ción sostenida de betablo- I I Tratamiento
queadores (metropolol y
carvedilol) a pacientes con p<0.05
insuficiencia cardiaca cróni-
ca fue seguida de un incre-
m e n t o s i g n i f i c a t i v o de l a
fracción de expulsión (FE)
(barras grises) en compara-
ción con los valores básales
(barras negras) y con los en-
contrados en aquellos pa-
cientes a los que se les ad-
ministró placebo. (Tomado de
Gilbert E.M. y col., Am) Cardiol,
1993; 71:(Suppl.)12C-22C) Metoprolol Placebo Carvedilol Placebo
519
CARDIOLOGÍA
\
/
1 i d a el si t Concentración l Vari,lll i idad Isquemia
eléctrica de catecolaminas de la F C miocárdica
MUERTE SUBITA
BETABLOQUEADORES
* Frecuencia cardiaca
1 Variabilidad de la FC
\
\ Vulnerabilidad MUERTE
eléctrica SUBITA
• Activación
adrenérgKa
i Activación
eje RAA
• PROGRESION
mencionar que e l efecto inotrópico positivo apa- anterior tolerada, la cual deberá continuarse por
rece alrededor d e la tercera semana d e iniciado dos o tres semanas y de nueva cuenta intentar el
el tratamiento. incremento d e la dosis; si entonces se tolera, de-
El fármaco c o n el que se tiene más experiencia berá continuarse con la misma; de no ser tolerada
y el que ha demostrado los efectos benéficos más se regresará a la dosis previa tolerada c o n lo que se
importantes es el Carvedilol, el que d e b e iniciarse mantendrá e n forma permanente; sin embargo,
el tratamiento con la dosis más pequeña (3.12 mg), debe tomarse en cuenta que en algunos pacientes
y si es tolerada la primera dosis, se administra cada con insuficiencia cardiaca grave, la administración
12 horas y en forma paulatina e n el curso de cada de carvedilol no ha sido tolerada y el paciente se
3 semanas se incrementa la dosis (3.12 mg el 12 ha agravado de su condición clínica ya d e por sí
horas, 6.25 mg c/12 horas, 12.5 mg c/12 horas y precaria, por lo que es recomendable en pacien-
25 mg c/12 horas); c u a n d o aparezca fatigabilidad tes que se encuentran en insuficiencia cardiaca lll
o hipotensión arterial, se deberá regresar a la dosis o IV administrar las primeras dosis de betabloquea-
520
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
dor cuando están internados en un hospital para por tos u otro efecto colateral indeseable puede
vigilancia cardiológica estrecha de la posibilidad iniciarse tratamiento con Carvedilol o Bisoprolol.
de efectos adversos (hipotensión arterial grave, o
edema pulmonar).
TRATAMIENTO D E LA INSUFICIENCIA C A R D I A C A
D a d o q u e se h a d e m o s t r a d o que tanto e l
EN CLASE FUNCIONAL ll-lll
Carvedilol como el Bisoprolol logran prolongar la vida
e n pacientes con clase funcional IV, es importante El objetivo final del tratamiento de estos pacientes
el uso de estos fármacos e n estos pacientes y para es mejorar la clase funcional (calidad de vida) y
lograr un efecto óptimo en ellos se recomienda: reducir la mortalidad (prolongar la vida).
4
CARDIOLOGÍA
522
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
CUADRO 7
C R I T E R I O S D E S E L E C C I Ó N PARA R E S I N C R O N I Z A C I O N C O N M A R C A P A S O T R I C A M E R A L
I C s i n t o m á t i c a e n C F l l l y IV N Y H A
Tratamiento farmacológico óptimo 1) 2 Criterios mayores
FE < 3 5 % II) U n o mayor y 2 menores
lll) Cuatro menores
CRITERIOS MAYORES
Doppler T i s u l a r
1) a u m e n t o d e l a d i s p e r s i ó n intraventricular de l a c o n t r a c c i ó n m e c á n i c a > 5 5 ms
2) s u m a d e d i s p e r s i ó n intra e i n t e r v e n t r i c u i a r de la c o n t r a c c i ó n m e c á n i c a > 1 0 0 m s
CRITERIOS MENORES
1) i n c r e m e n t o d e l a d i s p e r s i ó n intraventricular de l a c o n t r a c c i ó n m e c á n i c a > 4 0 m s
2) i n c r e m e n t o d e la d i s p e r s i ó n interventricuiar de l a c o n t r a c c i ó n m e c á n i c a > 4 0 m s
3) t i e m p o d e llenado d e l VI r e d u c i d o < 4 0 % d e l c i c l o
4) t i e m p o p r e - e x p u l s i ó n > 1 4 0 ms
5) e v i d e n c i a de r e t r a z o i n t e r v e n t r i c u i a r > 4 0 ms
6) QRS>130ms
lañe RE. Heart 2004;90 (Suppl IV):V110-V116
CARDIOLOGÍA
Kl
|
20 • 11.1-..1I
1
•
Sruuimirnto
10
_ • 1n H
N 30 N*Í1
1 mes 3mese*
N.SO N-ll
F I G U R A 75 Efecto de la resincronización cardiaca
sobre la fracción de expulsión. La activación cardiaca
FIGURA 74 Marcapaso tricameral. Efecto sobre la
con el marcapaso tricameral mejora la función
duración del espacio QRS. La resincronización cardiaca
ventricular, lo cual se hace evidente por un aumen-
trae como consecuencia la reducción significativa del
to de la fracción de expulsión
espacio QRS en pacientes con insuficiencia cardiaca
y bloqueo avanzado de la rama izquierda del haz de
His, efecto que se sostiene en el tiempo
de demostrar la sincronía (figura 77-A) o asincronía
(figura 77-B) de la contracción segmentaria del
3. > C o n s u m o de oxígeno. ventrículo izquierdo.
4. < Hospitalizaciones por IC descompensada. En base a estos estudios y al cuadro clínico se
5. < En la clasificación de clase funcional N Y H A . han establecido criterios para indicar la resincroni-
6. < Episodios de arritmias ventriculares (TV/FV). z a c i ó n eléctrica e n pacientes c o n insuficiencia
7. < Episodios d e angor. cardiaca (Cuadro 7).
8. < Grado d e insuficiencia mitral.
7. D o p a m i n a ( a m p . d e 2 0 0 mg.) la dopamina
es una amina simpaticomimética con propie-
Clase Funcional dades muy peculiares que dependen de la
C l a s i f i c a c i ó n de M i n n e s o t a dosis a la cual se administra; así, si la dosis es
baja (2 o 4 meg/kg/min.) tiene únicamente
efecto vasodilatador especialmente en el te-
rritorio renal por lo que produce un a u m e n -
to de la filtración glomerular por estimula-
tul ción de los receptores Dopaminérgicos (efecto
JnJ B
- Vrgu.m.rnto
Dopa). Este efecto es especialmente útil e n
la insuficiencia cardiaca refractaria ya que
potencia la acción de los diuréticos. Si se
administra a una dosis mayor (5 a 10 meg/kg/
min.) su efecto fundamental es inotrópico al
estimular a los receptores B1 del miocardio
(efecto Beta) y si finalmente se administra a
FIGURA 76 Efecto de la resincronlzación cardiaca una dosis mayor ( 1 0 a 15 meg/kg/min.) se
sobre la calidad de vida. El marcapaso tricameral produce vasoconstricción periférica a que
en pacientes con insuficiencia cardiaca aumenta la se estimulan los receptores alfaadrenérgicos
capacidad física (A) y consecuentemente mejora la (efecto alfa). En la insuficiencia cardiaca gra-
clase funcional (B) v e su efecto mas útil es el efecto D o p a a
una solución glucosada al 5 % d e 2 5 0 c e se
le agregan 2 ampolletas de dopamina. C a d a
1. Reposo absoluto en posición de Fowler. microgota contiene 2 6 . 6 meg y para c a l c u -
lar la dosis en el p a c i e n t e :
2. Oxigeno continuo a razón de 2 a 4 litros por
minuto.
Dosis x Peso - microgotas por minuto
3. Dieta blanda suave hiposódica estricta (1 gm.
de Nací e n 24 hrs.)
4 525
CARDIOLOGÍA
•i
• •
Sincrónico Asincrónico
A B
Heart 2 0 0 4 : 9 0 ( S u p p l Vl)v¡10-v¡1£
F I G U R A 77
Histamina
v t
Membrana B e t a - A d ^ n o c e p t o r ^ A d e n y l . c y c l a s a ^ ^ Receptor
ATP
Amrinona
Fosfodiesterasa
Teofilina
Teofilina
F I G U R A 78 Esquema de los sitios de acción de los inotrópicos no digitálicos. Tomado con autoriza-
ción de Schoolz H., Inotropic drugs and their mechanism of action, Jacc 1984; 4:389-397
arteriolar como venoso, por lo cual reduce tan- fármaco no aumenta las concentraciones
to la pre como la postcarga. citosólicas de calcio. Por otro lado, este me-
Se administran por vía intravenosa, ini- dicamento tiene efecto vasodilatador a través
cialmente mediante una dosis de 0.75 mg/kg de favorecer la apertura d e los canales de
en 3 minutos seguida de una infusión conti- potasio del músculo liso, así como también
nua a razón de 5 a 10 mcg/kg/min. dosis que mediante el bloqueo d e la endotelina-1.
se ajusta a la respuesta hemodinámica del La consecuencia final de la administra-
paciente. Este fármaco puede utilizarse e n ción intravenosa d e Levosimendan es el au-
conjunto con digital y con los otros fármacos mento del gasto cardiaco, aumento del flujo
usados para el tratamiento d e insuficiencia coronario, reduce la resistencia vascular co-
cardiaca grave. ronaria, no aumenta el M V 0 2 , reduce la re-
sistencia del territorio venoso, y la resisten-
La m i l r i n o n a ( a m p . de 2 ce c o m 20 mg) cia vascular pulmonar, la presión capilar
es de la misma familia que la amrinona pero pulmonar, mejora la distensibilidad miocár-
es 30 veces mas potente que ella, comparte dica, sin ningún efecto e n la relajación ven-
sus acciones y se administrapor vía intrave- tricular. Su efecto máximo se obtiene a los 10
nosa a razón de 0 . 3 5 0 a 0.750 mcg/kg/min. a 30 minutos de iniciar la administración y la
duración de sus efectos es entre 1 y 2 horas.
c) L e v o s i m e n d a n (ampolleta de 5 ce c o n 2.5
m g ) . Este fármaco se administra por vía intra-
venosa continua, aún cuando algunos grupos 9. B A L Ó N D E C O N T R A P U L S A C I Ó N
utilizan una dosis inicial de impregnación, se I N T R A Ó R T I C O ( F I G U R A 78)
prefiere iniciar c o n una dosis entre 0.2 a 0.9 Se introduce por medio de inserción percutánea
mcg/kg/min para evitar hipotensión arterial, a través de la arteria femoral; el balón se coloca
regulando el goteo de acuerdo a la respuesta a nivel de la aorta torácica descendente; este
hemodinámica de paciente. El levosimendan que esta colocado en la porción distal del caté-
tiene un poderoso efecto inotrópico positi- ter se infla d e gas y se desinfla en forma
v o , a través de sensibilizar a los filamentos sincronizada con el electrocardiograma, de tal
miocárdicos al calcio, para favorecer su unión manera que durante la sístole ventricular el ba-
con la troponina C de manera calcio-depen- lón se encuentra vacío y e n la diástole, inflado.
diente. Vale la pena mencionar, que este Esto permite generar una onda retrograda de
527
CARDIOLOGÍA
INDICACIONES
CONTRAINDICACIONES
F I G U R A 79
• Insuficiencia aórtica.
• Disección aórtica.
1. Reposo absoluto.
D I S M I N U C I Ó N DEL C O N S U M O DE O X Í G E N O
MIOCÁRDICO (MVO,) 2. Oxigeno continuo a razón de 4 litros por mi-
nuto a través de puntas nasales.
En los párrafos precedentes se ha insistido en las inter-
venciones que incrementan 0 disminuyen el M V O ,
3. Posición de Fowler
de acuerdo con la forma en que se modifican los de-
terminantes más importantes del mismo. Se debe agre-
4. Sangría " s e c a " (como medida inmediata e n
gar que el reposo en cama y la sedación, contribuyen
caso de edema agudo del pulmón). Consiste
importantemente para evitar el aumento no sólo del
e n ligar e n forma alterna 3 de los 4 miem-
M V O , , sino también de los requerimientos tisulares
bros del paciente; el grado de comprensión
periféricos de oxígeno que el corazón está incapacita-
no debe hacer desaparecer e l pulso distal.
do para donar, por lo que constituye parte importante
El cambio de los torniquetes se realiza c/15
en el tratamiento de la insuficiencia cardiaca.
minutos, con ello, se reduce efectivamente
el retorno venoso y la congestión pulmonar.
4 »
CARDIOLOGÍA
531
CARDIOLOGIA
CUADRO 8
FISIOPATOLOGÍA
V o l u m e n diastólico ventricular *
Fracción de expulsión • 50% •50%
D i á m e t r o diastólico ventricular * * ó *
Secreción adrenérgica *
A n g i o t e n s i n a II *
Factor natriurético a u r i c u l a r
Aldosterona
^^/U
CUADRO 9
TRATAMIENTO
Digital SI NO
Diuréticos SI SI
IECA SI
B o l q . AT-1 SI
Calcioantagonistas NO SI
Nitratos En fase a g u d a SI
Hidralazina SI NO
mi
FUNCIÓN VENTRICULAR E INSUFICIENCIA CARDIACA
C U A D R O 10
M O R T A L I D A D (%) EN INSUFICIENCIA C A R D I A C A Y D I S F U N C I Ó N D I A S T Ó L I C A
CLASE F U N C I O N A L 1
FE 40 - 50 % 1 30 70
FE < 40% 2 40 82
C L A S E F U N C I O N A L II - IV
FE < 50% 18 68 90
V A L O R P R O M E D I O D E LA F R A C C I Ó N D E E X P U L S I Ó N (FE)
Mortalidad (%) a 37 m e s e s
C U A D R O 11 C U A D R O 12
D I S F U N C I Ó N D I A S T Ó L I C A DEL DISFUNCIÓN DIASTÓLICA BI-VENTRICULAR
VENTRÍCULO IZQUIERDO
1) M I O C A R D I O P A T Í A R E S T R I C T I V A :
1) C A R D I O P A T Í A I S Q U É M I C A :
a) Fibrosis endomiocárdica bi-ventricular.
a ) Disnea de esfuerzo (equivalente b) Amiloidosis cardiaca.
anginoso). c) Fibrosis intersticial difusa idiopática.
b) Infarto del miocardio agudo (edema d) Glucogenosis (Enfermedad de Pompe).
pulmonar). e) Ausencia de compactacion miocárdica.
f) Sarcoidosis cardiaca.
2) HIPERTROFIA VENTRICULAR PATOLÓGICA:
2) P E R I C A R D I T I S C O N S T R I C T I V A .
a ) Miocardiopatía hipertrófica.
b) Cardiopatía hipertensiva.
c) Estenosis aórtica apretada de larga
evolución.
mal y un patrón de flujo mitral d e tipo restrictivo se
3) M I O C A R D I O P A T Í A RESTRICTIVA Q U E establece el diagnóstico de un síndrome restrictivo
AFECTA AL V E N T R Í C U L O I Z Q U I E R D O : (pericarditis constrictiva o miocardiopatía restricti-
a ) Fibrosis endomiocárdica. va) y se descartará la posibilidad de insuficiencia
b) Amiloidosis cardiaca. cardiaca congestiva.
En la figura 11 se esquematiza el efecto que la
disminución de la distensibilidad ventricular (ven-
trículo rígido) tiene sobre la presión diastólica in-
des ventriculares normales (Eco 2-D. aproximación traventricular. Este mecanismo es el responsable de
apical de cuatro cámaras) con gran dilatación de que la miocardiopatía restrictiva, eleve la presión
ambas aurículas con una fracción de expulsión nor- diastólica de uno o ambos ventrículos, sin aumento
533
CARDIOLOGÍA
I 4r^ C U A D R O 13
D I A G N Ó S T I C O D I F E R E N C I A L ENTRE D I S F U N C I Ó N D I A S T Ó L I C A E I N S U F I C I E N C I A C A R D I A C A
Diámetro sistólico •
Acortamiento porcentual < 25 % > 30 %
Aurícula izquierda ó •
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537
Capítulo 16 1 F ¡ e b r e reumática
"Clínica fue la medicina al nacer y clínica será
siempre, por profunda que sea su transformación
científica. De otro modo no sería medicina"
KWWSERRNVPHGLFRVRUJ
E
S UN PADECIMIENTO INFLAMATORIO de CUTSO agU- la pronta eliminación del germen interrum-
do o subagudo de carácter auto-inmune que pe la cadena de eventos que preceden al
involucra las articulaciones, el corazón, el sis- cuadro agudo de fiebre reumática.
tema nervioso central y el tejido celular subcutá-
neo. Es capaz de producir daño miocárdico con se-
4. La respuesta inmune específica (elevación
cuelas cicatriciales en el tejido específico de d e antiestreptolisinas) en contra del
conducción (trastornos del ritmo), en el miocardio, estreptococo que aparece invariablemente
inespecífico (dilatación del corazón e insuficiencia en los pacientes con un brote agudo de fie-
cardiaca), y en las estructuras endocárdicas (valvu- bre reumática.
lopatía reumática).
5 . La profilaxis en forma crónica c o n penicili-
na evita definitivamente nuevos brotes de
fiebre reumática.
ETIOLOGÍA
C a b e señalar que la sola infección estreptocó-
En la actualidad existen pruebas fehacientes de que
cica no explica por sí misma la aparición de fiebre
el estreptococo betahemolítico del grupo A de la
reumática, ya que prácticamente todos los sujetos
clasificación d e Lancefield está definitivamente
en la etapa escolar se ponen en contacto con d i -
involucrado e n la génesis de la fiebre reumática:
cho germen y no necesariamente desarrollan un
1. El estreptococo betahemolítico es el único brote de fiebre reumática. En otras palabras, a pe-
germen causante de epidemias que se pre- sar de que las epidemias de faringitis estreptocóci-
sentan e n forma paralela a las epidemias de ca afectan a un gran número de sujetos, sólo una
fiebre reumática, con una coincidencia en pequeña proporción de ellos desarrolla la enfer-
las estaciones del año e n que ambas apare- m e d a d , lo cual ha dado lugar para esgrimir que
cen y que además tienen la misma distribu- existe un factor que predispone al sujeto que se
ción geográfica. pone en contacto con el estreptococo para pade-
cer fiebre reumática. En los últimos años han surgi-
2. El estreptococo betahemolítico del grupo A do evidencias de que dicho factor es heredado y
es aislado mediante exudado faríngeo en pa- de que el sujeto que lo porta es susceptible a pa-
cientes con amigdalitis aguda que precede decer la fiebre reumática c u a n d o se pone e n con-
al cuadro de fiebre reumática. tacto con el estreptococo. Patarroyo ha encontrado
una proteína en las células mononucleares circulan-
3. El tratamiento agresivo de la infección es- tes en el 75 % de pacientes que han padecido fiebre
treptocócica con penicilina previene los bro- reumática, en contraposición con sólo el 16 % de
tes de fiebre reumática, lo cual sugiere que
CARDIOLOGÍA
Por otro lado, en los tejidos, el monocito acti- antígeno anticuerpo a nivel celular, en este caso, a
vado se convierte e n un macrófago y presenta al nivel del miocardio (figura 3).
antígeno fijado e n su membrana al linfocito T, el Por otro lado los linfocitos T activados forman
cual a su vez representa parte del sistema de in- grandes acúmulos en los bordes de las válvulas
munidad celular. Los macrófagos activados proba- cardiacas y dan lugar a la valvulitis reumática, que
blemente se convierten e n unas células gigantes se manifiesta por inflamación y formación de pe-
llamadas células deAnitschkow (figura 2) y forman queñas verrucosidades de los bordes valvulares.
el nodulo de Aschoff que es una lesión granulo- Los linfocitos T activados p r o d u c e n , entre otras
matosa que aparece e n el seno del miocardio y el substancias, las linfocinas que pueden a su vez ac-
cual representa la manifestación d e la reacción tivar los fibroblastos para producir colágena. Estos
FIGURA 2 Células de
Anitschkow (señala-
das con una flecha)
con su característi-
co núcleo alargado
y el aspecto en
c i e n p i é s " q u e le
imparte la disposi-
ción de la cromati-
na hacia el centro
del núcleo, (Hema-
toxilina - Ensilla
3 5 0 x ) . (Cortesía del
Dr. Roberto Barros)
FIGURA 3 Corte de
miocardio de un pa-
ciente con pancardi-
as reumática activa.
Pueden a p r e c i a r s e
las fibras miocárdi-
cas (M) y la presen-
cia de infiltrado infla-
matorio linfocitario
(L), así como un no-
dulo de Aschoff (N)
en el intersticio y cer-
ca de un vaso sanguí-
neo (Y). (Hematoxili-
n a - Eosina lOOx).
(cortesía del Dr. Ro-
berto Barrios).
541
CARDIOLOGÍA
procesos que se llevan a cabo en el miocardio y e n clínicamente se hace evidente por la apari-
los aparatos valvulares son los que explican proba- ción de movimientos incoordinados e
blemente la inflamación en la fase aguda de la e n - involuntarios d e las extremidades y de los
fermedad (valvulitis y miocarditis) y sus secuelas músculos de la cara, lo cual a su vez trae en
cicatriciales (valvulopatía reumática). consecuencia trastornos en el habla. Estos
síntomas aparecen sólo durante el estado de
vigilia para desaparecer durante el sueño. La
CUADRO CLÍNICO duración del estado coreico puede ser d e
Las manifestaciones de un brote agudo de fiebre algunas semanas o prolongarse durante al-
reumática aparecen e n el paciente después d e 2 ó gunos meses, pero característicamente no
3 semanas de haber padecido un cuadro de farin- deja s e c u e l a p e r m a n e n t e e n la f u n c i ó n
goamigdalitis. Los síntomas se inician con malestar neurológica.
g e n e r a l , astenia, mialgias, a d i n a m i a , artralgias,
hiporexia y fiebre de predominio vespertino que 3. N o d u l o S u b c u t á n e o de M e y n e t . L o s
usualmente no es muy elevada, ya que no sobre- nodulos subcutáneos aparecen e n las super-
pasa los 3 8 . 5 ° C . ficies extensoras de las articulaciones, no son
En algunos casos aparece gran ataque al esta- dolorosos, son móviles y constituyen un sig-
do general y postración extrema, signo clínico que no específico de actividad reumática. Estas
augura gravedad d e la enfermedad y mal pronós- lesiones — a l parecer— son menos depen-
tico. A este c u a d r o general pueden asociarse c u a - dientes de inmunidad humoral, al igual que
lesquiera de las siguientes manifestaciones o to- las lesiones del corazón.
das ellas:
1. Artritis. Inflamación de las articulaciones 4. Eritema marginado. Este signo cada vez se
medianas que se manifiestan c o n dolor, e n - v e c o n menor frecuencia en la clínica y se
rojecimiento, tumefacción e impotencia fun- caracteriza por la aparición d e manchas re-
cional en las articulaciones afectadas que dondeadas, confluentes, de borde eritema-
pueden ser rodillas, tobillos, codos y muñe- toso no pruriginosas y que se distribuyen
cas. Característicamente se respetan las gran- preferentemente en el tronco. El eritema
des articulaciones (cadera y articulaciones marginado tiene un carácter migratorio.
sacroiliacas), así como también las peque-
ñas (interfalángicas, intervertebrales y tem- 5. Ataque reumático al corazón (carditis reu-
poromaxilares). La artritis de la fiebre reu- mática). El ataque d e reumatismo agudo al
mática tiene como identificación especial su corazón se caracteriza por la inflamación
carácter saltón; esto es, pasa d e una articu- del pericardio (pericarditis), del miocardio
lación a otra en el curso del tiempo y no (miocarditis) y el endocardio (endocarditis),
deja secuelas permanentes después de ha- por lo que realmente se constituye e n una
ber pasado el brote agudo, pero es usual que pancarditis.
haya más de una articulación inflamada al
mismo tiempo. La artritis se debe a inflama-
ción extravascular de la cavidad articular por
la acción de complejos inmunes y se acom- A T A Q U E AL M I O C A R D I O ( M I O C A R D I T I S )
paña de activación y consumo de comple-
mento ¡n situ. La presencia de artralgias es A) ATAQUE AL MIOCARDIO CONTRÁCTIL
síntoma inespecífico y no debe tomarse en La inflamación de la miofibrilla condicionada por
todos los casos como patognomónico de fie- la fiebre reumática trae consigo la disminución
bre reumática, aunque algunos pacientes e n d e la fuerza contráctil y la dilatación d e l corazón.
la fase aguda manifiestan este síntoma. Esta alteración se traduce e n la clínica por la pre-
sencia de cardiomegalia, taquicardia y ritmo de
galope que no son sino manifestaciones de insu-
2. Corea de Sydenham. La manifestación del ficiencia cardiaca. Ello se puede corroborar fácil-
ataque reumático agudo al sistema nervioso mente con una radiografía d e tórax y un ecocar-
central se localiza fundamentalmente e n los diograma (figura 4).
núcleos extrapiramidales, por lo que su m a - En casos extremos puede aparecer insuficien-
nifestación fundamental es la corea, la cual cia cardiaca refractaria c o n cardiomegalia que pue-
FIEBRE REUMÁTICA
4«!
FIEBRE REUMÁTICA
EXÁMENES DE LABORATORIO
1. B i o m e t r í a h e m á t i c a . Este e x a m e n puede
carditis reumática.
ne afinidad específica para fijarse e n los
miocitos inflamados; de tal manera q u e ,
c u a n d o se a d m i n i s t r a e s t e i s ó t o p o
radioactivo por vía intravenosa y el gam-
D I A G N Ó S T I C O DE FIEBRE REUMÁTICA
magrama dibuja la silueta del corazón
(captación difusa) estamos e n presencia
D a d o que la fiebre reumática es un padecimiento
de miocarditis. C u a n d o este dato se con-
p l e o m ó r f i c o , su d i a g n ó s t i c o se e s t a b l e c e
junta con otras manifestaciones de acti-
conjuntando manifestaciones clínicas c o n hallaz-
vidad reumática se puede establecer el
gos de laboratorio. Desde hace muchos años se
diagnóstico de miocarditis reumática. Se
han establecido los criterios de Iones, los cuales
ha encontrado que esta técnica tiene un
han sido modificados e n varias ocasiones en un
valor predictivo de 100 % en estas con-
intento de lograr con mayor precisión el diagnósti-
diciones. C u a n d o e l corazón no capta el
c o de fiebre reumática. Estos criterios conjuntan
isótopo se considera que el estudio es
manifestaciones que con mayor seguridad funda-
FIEBRE REUMÁTICA
mentan el diagnóstico (signos mayores) c o n aque- tía orgánica después de haber padecido carditis reu-
llas otras que sin ser específicas del padecimiento mática. Se encontró que el número de brotes re-
(signos menores) ayudan al diagnóstico. Así, cuan- conocidos clínicamente influye e n el tipo de se-
d o podemos reconocer la presencia de un signo cuela valvular ya que la insuficiencia mitral pura
mayor que coexiste con dos signos menores, o bien, apareció en el 31 % de los pacientes c o n un solo
dos signos mayores se puede establecer con gran brote, mientras que su presencia fue mucho me-
probabilidad el diagnóstico de fiebre reumática nor (8 %) en los pacientes con tres brotes recono-
activa (Cuadro1). La experiencia ha enseñado que cidos. Por el contrario, la estenosis mitral pura se
los criterios de Jones modificados son una forma encontró c o m o secuela e n el 15 % de los pacien-
muy fidedigna para establecer el diagnóstico de tes con un solo brote d e pancarditis, frecuencia
fiebre reumática e n niños y adolescentes. que se duplicó (33 %) en aquellos con 3 brotes
clínicamente reconocidos. Estos hallazgos sugieren
C o n v i e n e enfatizar q u e , con el advenimiento
que la fibrosis y cicatrización llevan a la estrechez
de nuevas técnicas de diagnóstico (especialmen-
valvular con mayor probabilidad entre más ataques
te el ecocardiograma), el m é d i c o , ha ido perdien-
de valvulitis haya padecido el enfermo. La doble
do paulatinamente, la habilidad clínica d e la aus-
lesión mitral queda c o m o secuela en la mitad de
c u l t a c i ó n , h e c h o q u e se h a t r a d u c i d o e n su
los pacientes sin que en ello influya el número de
incapacidad para reconocer soplos cardiacos y con
brotes de actividad reumática. Estos hallazgos de-
ello pasar inadvertido el diagnóstico de actividad
muestran c ó m o la valvulitis reumática se manifies-
reumática.
ta c o m o insuficiencia mitral en la fase aguda que
puede quedar c o m o tal e n la fase crónica, espe-
EVOLUCIÓN cialmente si no ocurren nuevos brotes, pero c o n el
tiempo puede progresar a la cicatrización y fusión
El seguimiento de pacientes con carditis reumática de los velos valvulares y del aparato de sostén, lo
por más de 20 años en e l Instituto Nacional de que conduce a la doble lesión; ésta, eventualmen-
Cardiología "Ignacio Chávez", ha demostrado que te puede evolucionar a estenosis predominante o
la valvulopatía mitral puede quedar como insufi- pura lo cual es influido por los repetidos brotes de
ciencia mitral pura (19 % ) , doble lesión mitral (53 %) actividad reumática.
o estenosis mitral pura (23 % ) ; una pequeña pro-
porción d e casos (5 %) quedaron sin secuela val- La importancia de la lesión también se vio in-
vular, ya que no fue posible demostrar valvulopa- fluida por el número de brotes de actividad reu-
mática, ya que ninguno de los pacientes c o n insu-
ficiencia mitral pura (mayormente consecutiva a
un solo brote) llegó a requerir tratamiento quirúr-
gico, lo cual contrasta c o n el alto porcentaje de
CUADRO 1 pacientes con doble lesión mitral (52 %) o esteno-
C R I T E R I O S DE JONES, M O D I F I C A D O S sis mitral pura (40 %) que padeció dos o más brotes
y a quienes se les practicó tratamiento quirúrgico.
Signos mayores Signos menores
C o n respecto a la valvulopatía aórtica, e n c o n -
tramos q u e e l 12 % de los enfermos presentó
1. Carditis 1. Antecedentes
esta afección durante la fase de carditis; es d e -
2. Artritis de brote reumático
cir, q u e apareció e n una frecuencia m u c h o m e -
3. Corea 2. Artralgias
nor q u e la afección mitral; sin embargo, c o m o
4. Nodulos de Meynet 3. Fiebre
secuela definitiva se encontró en el 33 % del gru-
5. Eritema marginado 4. Bloqueo AV de pri-
p o , lo cual q u i e r e d e c i r q u e la e n f e r m e d a d val-
mer grado.
vular aórtica se instaló posteriormente al primer
5. Leucocitosis* brote, de éstos, el 12 % se manifestó c o n insufi-
J ciencia sigmoidea p u r a , mientras que e l 21 % lo
• SEDIMENTACIÓN GLOBULAR ACELERADA O PRO- tuvo c o m o d o b l e lesión. En ninguno d e ellos se
TEÍNA C REACTIVA POSITIVA EN PRESENCIA DE IN- encontró estenosis aórtica p u r a . En la mayoría
FECCIÓN ESTREPTOCÓCICA DEMOSTRADA (EXU- d e los casos, la valvulopatía aórtica se asoció a la
DADO FARÍNCEO O ELEVACIÓN DE LAS mitral; sin e m b a r g o , h u b o e n f e r m e d a d valvular
ANTIESTREPTOLISINAS). i aórtica aislada en e l 2 % . En esta valvulopatía
4J£Z
CARDIOLOGÍA
dos válvulas d e l corazón izquierdo. clave para el diagnóstico clínico d e miocarditis reu-
La valvulopatía pulmonar reumática sólo se ha mática en el adulto; sin embargo, n o existen traba-
encontrado por excepción, casi siempre en estu- jos q u e demuestren su utilidad e n estos casos.
dios de necropsia, en nuestra serie no se diagnos- U n hecho de observación frecuente ha sido el
ticó ningún caso con esta valvulopatía. de sospecha clínica de endocarditis infecciosa del
Finalmente, es de gran importancia saber que paciente c o n valvulopatía establecida y el hallazgo
el número d e brotes también influye e n el número anatómico de pancarditis reumática aislada o com-
de válvulas afectadas; así, en el grupo estudiado se binada efectivamente c o n endocarditis infecciosa.
notó un 16 % de afección plurivalvular en pacien- Asimismo, la demostración de nodulos de Aschoft
tes con un solo brote lo cual contrasta con el 8 4 % en las orejuelas auriculares y en músculos papila-
de lesiones plurivalvulares encontradas e n pacien- res de pacientes operados sugiere la presencia de
tes c o n tres brotes clínicamente reconocidos. carditis reumática "subclínica"de estos enfermos.
Finalmente, es posible q u e e n alguna medida
los brotes "silenciosos" de actividad reumática e n
CARDITIS REUMÁTICA EN EL ADULTO el adulto pueden influir e n la reestenosis mitral del
paciente previamente comisurotomizado o en la
Debido a q u e el paciente susceptible a padecer aparición tardía de la valvulopatía aórtica en pa-
fiebre r e u m á t i c a se pone e n contacto c o n el cientes adultos con antecedentes de fiebre reumá-
estreptococo reumatogénico en las primeras fases tica pero n o recientes.
de la vida (usualmente en la edad escolar), es q u e En conclusión, la actividad reumática existe e n
los brotes d e actividad reumática aparecen prefe- el adulto pero hasta la fecha no hay criterio seguro
rentemente entre los 5 y 15 años d e e d a d . Por esta para verificar su existencia e n estos pacientes.
razón es excepcional q u e el primer brote de fiebre
reumática aparezca e n la edad adulta; e n otras
palabras, todo adulto con fiebre reumática ya tie- TRATAMIENTO
ne la secuela valvular establecida. Los criterios de MEDIDAS GENERALES
Iones han resistido la prueba del tiempo y conti-
núan siendo los más sensibles y específicos para el Esto incluye reposo e n c a m a , dieta blanda y admi-
diagnóstico d e la actividad reumática e n los niños nistración de laxantes suaves para evitar la consti-
o adolescentes, pero desde hace varias décadas pación q u e es favorecida por el reposo. Esta pres-
diversos autores han notado la falta d e aparición cripción se prolonga por un periodo q u e va de
de los signos clínicos característicos de fiebre reu- cuatro a seis semanas, dependiendo del cuadro
mática en adultos o ancianos con los brotes d e ac- clínico y d e la respuesta al tratamiento.
tividad reumática demostrados por necropsia. Así,
es rara la presencia de artritis y excepcional la corea, Erradicación del estreptococo
los nodulos de Meynet, o el eritema marginado, a ) Penicilina procaínica a dosis de 8 0 0 , 0 0 0 U l
por lo q u e e n el adulto es imposible sustentar el por vía intramuscular cada 2 4 horas, duran-
diagnóstico d e actividad reumática basado en los te 1 0 días.
criterios de Iones. Se ha encontrado que la carditis
es el único signo constante de actividad reumática b) S u l f a m e t o x i p i r i d a z i n a a dosis de 1 gramo
e n el adulto; sin embargo, es muy difícil de reco- por v í a oral el primer d í a , seguido de 5 0 0
nocerla clínicamente en pacientes de edad adulta. mg cada 24 horas durante 1 0 días.
4
CARDIOLOCÍA
corticoide de la prednisona e n caso d e que el pa- de alojarse e n otra región del aparato respi-
ciente la reciba. ratorio en ausencia de amígdalas; por el con-
trario, se priva el organismo de un sistema
natural de defensa contra las agresiones in-
PROFILAXIS fecciosas. La infección estreptocócica debe
El seguimiento de los pacientes después de un brote ser erradicada mediante tratamiento antibió-
agudo de fiebre reumática, por más de 30 años ha tico efectivo (penicilina, sulfas, eritromicina,
demostrado que la prevención de un nuevo con- etc.) y no mediante la extirpación irracional
tacto del huésped con el estreptococo reumatogé- de las amígdalas.
nico, también previene las recaídas de fiebre reu- La amigdalectomía está indicada cuan-
mática; así, este padecimiento es susceptible de do por reiteradas infecciones bacterianas,
prevenirse por los siguientes medios: virales, micóticas o mixtas no tratadas o mal
tratadas, el tejido amigdalino se ha conver-
a) Nivel socioeconómico de la población tido e n una bolsa de criptas llenas de secre-
Influye importantemente e n la prevalencia ción purulenta y tejido necrótico en donde
de la enfermedad; así, el hacinamiento, la no llega la irrigación sanguínea y por ende
vida en un medio pobre en higiene favore- tampoco el antibiótico administrado. Dicho
ce la infección estreptocócica reiterada y con tejido inerte ha perdido su función fagocita-
ello la aparición de brotes agudos de fiebre ria e inmunológica capaz de ser utilizada
reumática repetidos. Los países con mayor c o m o defensa ante la agresión bacteriana.
nivel socioeconómico han logrado disminuir En estas condiciones, las amígdalas son fo-
importantemente la prevalencia de la enfer- cos sépticos depositarios del estreptococo
medad al mejorar las condiciones higiéni- betahemolítico y de otros múltiples micro-
cas e n la vida d e la población. En contrapo- organismos que pueden condicionar por un
sición, e n países subdesarrollados y en zonas lado, los brotes de actividad reumática, o
pobres de países desarrollados, la fiebre reu- bien, por otro, ser los puntos de partida para
mática todavía se contempla como un pro- una diseminación hematógena que puede
blema de salud pública. ser causa entre otras complicaciones de me-
ningitis purulenta o abscesos cerebrales. Por
lo tanto, la indicación de amigdalectomía e n
b) Erradicación de focos sépticos estos casos es precisa.
En los pacientes que han sufrido un brote
de fiebre reumática es importante erradicar
los focos potenciales de asiento para e l c) Antibióticos
estreptococo; así, se deberá hacer una revi- Penicilina benzatínica. Después de haber
sión cuidadosa d e las caries dentarias y su dado un tratamiento completo de erradica-
tratamiento adecuado; lo mismo se puede ción con penicilina procaínica de larga ac-
mencionar para la sinusitis y faringoamigda- ción, a dosis de 6 0 0 , 0 0 0 U l por vía intramus-
litis estreptocócica aguda o crónica. cular cada veintiún días para niños y de
C u a n d o la caries dentaria sea muy avan- 1 ' 2 0 0 , 0 0 0 U l para adolescentes y adultos.
zada, a juicio del odontólogo, deberá ser ex- Con esta medida se logra la protección del
traída la pieza. Las amígdalas están consti- paciente para el contacto con el estreptococo
tuidas por tejido linfoideo, razón por la cual durante un tiempo que oscila entre 3 ó 4 se-
sirven c o m o barrera de contención para la manas. Este tipo de penicilina no alcanza al-
entrada d e microorganismos al aparato res- tas concentraciones en el plasma, pero sí per-
piratorio y tubo digestivo. Esta función d e manece sostenidamente a niveles suficientes
defensa la cumplen en forma sumamente para tener un efecto bactericida en contra del
efectiva y coadyuvan para evitar la disemi- nuevo germen que se albergue en la faringe
nación bacteriana. Este comportamiento ex- del paciente. Este esquema es altamente efec-
plica el a l o j a m i e n t o p o t e n c i a l del tivo para la prevención de nuevos brotes de
estreptococo e n el tejido amigdalino; sin fiebre reumática; sin embargo, debido a lo
embargo, la amigdalectomía en estas condi- doloroso de la inyección se tiene por expe-
ciones no resuelve el problema de la infec- riencia que hay un alto índice de deserción
ción estreptocócica, porque el germen pue- para el tratamiento sostenido a largo plazo.
FIEBRE REUMÁTICA
El uso de este antimicrobiano e n todo el mun- vida, una vez hecho el diagnóstico de certe-
do ha demostrado la disminución en las re- za de cardiopatía reumática. Es posible que
caídas de fiebre reumática. Gracias a este tra- ésta sea la única forma de prevenir la agrava-
tamiento profiláctico, actualmente ya no es ción de las lesiones valvulares ya establecidas
tan frecuente ver los casos de graves lesiones o la lesión de otras inicialmente no afecta-
plurivalvulares con cardiomegalia y caquexia das. En los pacientes alérgicos a la penicilina,
que terminaban con la vida del enfermo a la profilaxis puede hacerse con sulfametoxi-
edades tempranas. El comportamiento de la piridazina a dosis de 500 mg al día o eritro-
fiebre reumática en el adulto y en el anciano micina a dosis de 500 mg/día. Este tratamiento
(cuadro pleomórfico y a menudo subclínico) no es tan efectivo para la prevención de la
sugiere que el tratamiento profiláctico de la fiebre reumática c o m o lo es la penicilina
fiebre reumática debe administrarse de por benzatínica.
4 551
BIBLIOGRAFÍA
S53
Capítulo 17 I Valvulopatías
"La medicina —como conocimiento científico—
ha exigido siempre del médico un fino espíritu
de observacióny un rectojuicio en la interpretación de
los datos. El razonamiento lógico ha sido
su mejor apoyo para elaborar un diagnóstico.
Vara ello, el cultivo de la inteligencia es la clavey el
cerebro su mejor instrumento "
L
as enfermedades que afectan las válvulas La estenosis mitral comienza a tener repercusión
cardiacas constituyen un importante capítulo hemodinámica cuando el área valvular disminuye
de la cardiología, ya que su frecuencia es alta, más de 2 cm-'. Se habla de estenosis mitral ligera
especialmente en aquellos países afectados por la cuando el área valvular mitral mide entre 2 y 1.5 cm-,
fiebre reumática; sin embargo, en aquellos otros moderada cuando mide entre 1.5 y 1.1 c m , y apre-
2
países en los que este padecimiento ha dejado de tada cuando el área valvular es de 1 cm-' o menor.
ser un p r o b l e m a d e s a l u d , se e n c u e n t r a n las
valvulopatías de origen congénito, aquellas produ-
cidas por enfermedades hereditarias, infecciosas o FISIOPATOLOGÍA
las enfermedades degenerativas que en los países Cuando la estenosis mitral obstruye el libre flujo
industrializados han alcanzado un lugar prepon- de sangre que pasa hacia el ventrículo izquierdo
derante (estenosis aórtica y calcificación del anillo aumenta la presión dentro de la aurícula izquier-
mitral), por lo que la presencia de una enfermedad d a , ello hace que el miocardio auricular realice un
valvular siempre será motivo de consulta para el trabajo mayor (sobrecarga sistólica para d i c h a
cardiólogo. En los siguientes párrafos analizarán no aurícula) e n un intento de vaciar su contenido ha-
sólo las manifestaciones y diagnóstico de las enfer- cia la cavidad ventricular a través de un área estre-
medades valvulares, sino los nuevos conocimien- cha. Por esa razón aparece hipertrofia d e la aurícula
tos acerca d e la fisiopatología, pronóstico y trata- izquierda. Si persiste el obstáculo, la cavidad auri-
miento de estos padecimientos. cular termina por dilatarse y transmite la elevación
de su presión hacia las venas pulmonares y los ca-
pilares, todo por el impedimento al vaciamiento
auricular (barrera mitral).
ESTENOSIS MITRAL
Cuando se eleva la presión hidrostática dentro
El área valvular mitral mide de 4 a 6 cm-'. Cuando el del capilar disminuye progresivamente el intercam-
área mitral disminuye por procesos cicatriciales que bio de 0 alveolocapilar; si la presión hidrostática
2
afectan sus comisuras (fiebre reumática) o por de- sobrepasa ciertos límites comienza a transudar lí-
fectos embriológicos en la formación de dicha vál- quido del capilar hacia el intersticio (edema inters-
vula (origen congénito), se habla de estenosis mitral. ticial), dicho líquido es drenado e n forma muy efec-
CARDIOLOGÍA
tiva por los linfáticos yuxtaalveolares hacia el con- cular izquierdo disminuido), pero e n esta área, si
ducto torácico. C u a n d o este mecanismo deja d e la estrechez es importante, se palpa un frémito dias-
ser suficiente para drenar el líquido intersticial pro- tólico; por el contrario, e n el borde paraesternal
veniente del capilar, se llega a inundar el alveolo izquierdo se palpa un levantamiento sistólico sos-
(edema alveolar) lo cual interfiere importantemen- tenido (crecimiento ventricular derecho), y en el
te en el intercambio gaseoso alveolocapilar y se segundo espacio intercostal izquierdo, choque de
traduce clínicamente por un grave cuadro de ede- cierre pulmonar palpable (hipertensión pulmonar).
ma agudo pulmonar (manifestación extrema de hi- A la auscultación en el foco mitral se hace evi-
pertensión venocapilar) (v/de infra). dente el típico ritmo de Duroziez (figura 1 ) que
C u a n d o la hipertensión venocapilar es crónica consta de un intenso I ruido ("brillante"), la sístole
aumenta la resistencia al vaciamiento d e la arteria "limpia", el II ruido duplicado por un chasquido
pulmonar por lo cual se eleva la presión dentro d e de apertura mitral que es seguido de un retumbo
dicho vaso. (obstrución al flujo sanguíneo por la válvula estre-
La elevación d e la presión pulmonar ¡hiper- cha), q u e termina en un refuerzo presistólico (de-
tensión arterial pulmonar), constituye una sobre- bido a la contracción auricular). En el foco pulmo-
carga sistólica para e l ventrículo d e r e c h o , y a la nar se puede auscultar el reforzamiento del llp.
larga termina por hipertrofiarlo. Si la hipertensión C u a n d o la estenosis mitral es apretada y se acom-
pulmonar es importante y por tiempo relativamen- paña d e hipertensión pulmonar considerable, es
te prolongado, puede llegar a dilatar dicho v e n - c o m ú n que se acompañe de insuficiencia tricuspí-
trículo y aparecer insuficiencia mecánica de esta dea (soplo sistólico e n el foco tricuspídeo). En las
c a v i d a d c o n e l e v a c i ó n de la p r e s i ó n v e n o s a estenosis mitrales apretadas y antiguas también es
sistémica; por otro lado, la dilatación de dicho frecuente encontrar signos d e insuficiencia cardia-
ventrículo al aumentar el diámetro de su anillo ca derecha. La valvulopatía mitral es la causa más
auriculoventricular es frecuente q u e produzca in- frecuente de fibrilación auricular crónica.
suficiencia tricuspídea funcional.
C u a n d o aparece fibrilación auricular se pier-
de el refuerzo presistólico (en relación c o n la con-
tracción auricular) y la semiología del I ruido es
CUADRO CLÍNICO
d e gran utilidad para conocer la gravedad de la
Los síntomas iniciales d e la estenosis mitral son obstrucción mitral. En efecto, c u a n d o el I ruido se
aquellos producidos por hipertensión venocapilar esfuerza después de diástoles cortas y se apaga
pulmonar; esto es, disnea de esfuerzo (alteracio- después d e diástoles largas (comportamiento tipo
nes de la hematosis). D e p e n d i e n d o del grado de I), la estenosis mitral es ligera. C u a n d o el I ruido
hipertensión venocapilar, la disnea podrá ser d e tiene un comportamiento contrario se apaga des-
grandes, medianos o pequeños esfuerzos; no es pués de diástoles cortas y tiene mayor intensidad
raro que dicha disnea cuando aparece sea progre- después d e las largas (comportamiento tipo II), la
siva, desde los grandes hasta los pequeños esfuer- estenosis es apretada y finalmente c u a n d o el I
zos y la disnea en reposo. La disnea de decúbito ruido es apagado sin variaciones importantes en
(ortopnea) y la disnea paroxística nocturna traducen su intensidad en los diferentes latidos (comporta-
grave hipertensión venocapilar y su manifestación miento tipo lll), la válvula mitral está calcificada
clínica extrema es el edema agudo del pulmón (dis- (explicación e n el capítulo de H I S T O R I A C L Í N I -
nea intensa, angustia, tos, esputo a s a l m o n a d o , C A sección AUSCULTACIÓN).
estertores audibles a distancia). Otras manifesta-
ciones de hipertensión venocapilar son la tos y la
E l e c t r o c a r d i o g r a m a (figura 2)
hemoptisis, aquélla especialmente aparece con el
esfuerzo o con el decúbito. Los pacientes con es- 1. Crecimiento de la aurícula izquierda C P " mitral).
tenosis mitral, tardíamente pueden presentar insu-
ficiencia cardiaca derecha (edema, plétora yugu- 2. á Q R S girado a la derecha.
lar, hepatomegalia congestiva, oliguria). 3. Signos de crecimiento ventricular derecho c o n
sobrecarga sistólica.
4»z
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 2 Electrocardiograma
de estenosis mitral. El creci-
miento de la aurícula izquier-
da m a n i f i e s t a la onda " ? "
bimodal con duración de 0 . 1 2 "
con el áT a +30°. La rotación
del áQRS a +130°, las R altas
en V I y ondas " S " profundas en
V6 traducen crecimiento ven-
tricular derecho con dilatación
del mismo. Obsérvese la pre-
sencia de c r e c i m i e n t o de la
aurícula derecha y bloqueo de
rama derecha agregadas
558
CARDIOLOGÍA
1 \ VAM J c a
i f
d 1
d J c
B
VALVULA MITRAL N O R M A L ESTENOSIS MITRAL
FIGURA 5
FIGURA 6 Área valvular mitral. A: Ecocardiograma bidimensional (eje corto paraesternal): muestra un
área valvular mitral normal de 4.7 cm . B: Ecocardiograma correspondiente a una estenosis mitral apreta-
2
FIGURA 7 Trombosis intrauricular izquierda. Ecocardiograma 2-D. El eje largo para esternal demuestra la
presencia de estenosis mitral (la válvula abre "en cúpula") y de un trombo alojado en la aurícula izquierda
(Al) dilatada. B: En la aproximación de 4 cámaras es también evidente el trombo intrauricular (Cortesía del
Dr. lorge Várela)
FIGURA 8 A: Registro con técnica de Doppler pulsado mediante aproximación apical de cuatro cámaras.
Se coloca la señal en la vía de entrada del ventrículo izquierdo y se obtiene una muestra del flujo transmi-
tral el cual es laminar, diastólico y positivo en el caso de ausencia de estenosis mitral (área valvular mitral
de 4.4 c m ' ) . B: La estenosis mitral provoca un flujo turbulento diastólico positivo de gran velocidad que
descubre inobjetablemente la obstrucción valvular (área valvular mitral de 1 cm-')
561
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 9 Estenosis mitral. A : Con técnica Doppler se mide el tiempo de caída al gradiente medio que es
de 50 mseg y que corresponde a un área valvular de 4.4 c m en un sujeto sin obstrucción. B: El tiempo de
2
caída al gradiente medio es de 210 mseg. en un paciente con estenosis mitral apretada. El área valvular se
calcula en 1.04 c m (ver capítulo de ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER)
2
biológicas o mecánicas (por trombosis) , e n posi- arteria pulmonar hasta que se enclava en las
ción mitral, diagnóstico clínico que a menudo es arteriolas, la luz del catéter registra la presión
muy difícil. Finalmente, el sistema Doppler codifi- capilar, que es prácticamente la misma presión
cado en color tiene su especial utilidad al descu- auricular izquierda. La P C P se eleva, en rela-
brir la estenosis mitral congénita y diferenciarla de ción directa con el grado de estenosis mitral,
la ausencia de conexión AV izquierda, al enseñar de tal forma que las obstrucciones ligeras pue-
primero flujo transvalvular y turbulencia del flujo den mantenerla normal, mientras que las que
(mosaico d e colores) e n la vía de entrada del ven- son apretadas la incrementan considerablemen-
trículo izquierdo. te (figuras 1 y 10); sin embargo, la determina-
ción única de P C P no diferencia si la elevación
Cateterismo cardiaco d e la presión e n la aurícula izquierda se debe a
una "barrera" mitral o a elevación de la presión
a) Presión c a p i l a r p u l m o n a r (PCP, presión e n -
diastólica del ventrículo izquierdo por insufi-
c l a v a d a , presión e n c u ñ a ) (figura 10). C u a n -
ciencia cardiaca. El registro simultáneo d e P C P
d o mediante un cateterismo derecho el catéter
y de presión intraventricular izquierda hará el
se avanza a través de una de las ramas d e la
ECG
110
-
VI
00 - F I G U R A 10 Gradiente transmitral. El registro
I 0
jPCPJ yíL.
| l simultáneo de la presión intraventricular iz-
E 50 quierda ( V I ) y de la presión capilar pulmonar
E - (PCP) permite cuantificar el gradiente trans-
mitral (sombreado), y el tiempo de llenado
diastólico (entre flechas) que inicia y termina
B—™
en el cruce de ambas presiones, parámetros
O necesarios para calcular el área valvular mitral
(ver texto)
VALVULOPATÍAS
diagnóstico diferencial. Si hay gradiente trans- Gorlin, para la cual es necesario haber obteni-
mitral (figura 1 y 1 0 ) el diagnóstico será de es- do primero una determinación confiable del
tenosis mitral, y si no lo hay, de insuficiencia gasto cardiaco y del gradiente transmitral.
cardiaca. Primeramente se calcula el gasto cardiaco
En la estenosis mitral con bradicardia (regula- por método de Fick, termodilución o dilución
ción vagotónica), la PCP puede tener cifras cer- de colorantes y se mide el tiempo de llenado
canas a lo normal aun cuando la estenosis valvu- diastólico q u e se obtiene del registro simultá-
lar sea importante (se f a v o r e c e el l l e n a d o neo de presión intraventricular izquierda y P C P
ventricular por aumento en la duración de la (figura 1 0 ) .
diástole). En estas condiciones la PCP se elevará a Cuantificado el FTM se divide entre la raíz
más de 25 mmHg cuando se provoca taquicardia cuadrada del gradiente transmitral (GT/vO y se
mediante esfuerzo dinámico o administración de multiplica por una constante que para la válvu-
isoproterenol por vía intravenosa. la mitral es 3 7 . 7 , con lo cual se obtiene el área
valvular mitral (AVM):
b) Gradiente transmitral. El registro simultáneo
de la PCP y la presión intraventricular izquier- AVM = F T M _ _
da (cateterismo retrógrado), puede cuantificar 37.7VGTM
el gradiente transmitral (figuras 1 y 1 0 ) . El gra- C u a n d o el método se ha realizado correcta-
diente transmitral se mide por planimetría (área mente se puede obtener e n forma confiable el
sombreada de la figura 1 0 ) en cinco latidos. El área valvular mitral y por lo tanto cuantificar
promedio e n m m se multiplica por el factor de con exactitud el grado de estenosis mitral para
escala de amplificación. decidir el tratamiento.
Ejemplo:
e) Determinación de la presión pulmonar y del
1 0 0 m m corresponden a 4 0 mmHg.
ventrículo derecho. La cuantificación de la pre-
1 mm corresponde a x.
sión pulmonar informa indirectamen-te del gra-
40 do de estenosis mitral. En las que son ligeras la
•JQQ- = 0 . 4 (factor de corrección) presión pulmonar es normal, mientras que es
c o m ú n q u e las graves se acompañen de hiper-
si el gradiente transmitral resultó de 6 0 m m : tensión pulmonar. Por otro lado, la presión
6 0 x 0 . 4 = 2 4 mmHg (gradiente transmitral) telediastólica del ventrículo derecho informará
del estado funcional del mismo, ya que su ele-
c) Cálculo del flujo transmitral (FTM). Para co- vación traduce insuficiencia contráctil lo cual
nocer el FTM primeramente se calcula el tiem- acontece e n las faes avanzadas de las estenosis
po de llenado diastólico el cual se considera mitrales apretadas.
c o m o el número d e segundos de cada minuto
que corresponde a la diástole o sea el tiempo
que utiliza el flujo para pasar a través d e la vál- ESTENOSIS MITRAL "MUDA"
vula mitral (tiempo de llenado diastólico en mm
dividido entre la velocidad del papel y multi- La ausencia d e los clásicos signos auscultatorios de
plicado por la frecuencia cardiaca). Obtenido la estenosis mitral o su amortiguación por otros fe-
el tiempo de llenado diastólico se calcula la nómenos acústicos es lo que induce a denominar
cantidad de sangre que pasa a través de la vál- c o m o " m u d a " a la valvulopatía que se presenta en
vula mitral e n la unidad de tiempo: flujo trans- tales condiciones. Se ha calculado que e n el 7 5 %
mitral (FTM): de los casos de estenosis mitral sin retumbo pasa
inadvertido el diagnóstico.
FTM (mi/seg) = gasto cardiaco (ml/min)
La estenosis mitral puede ser silenciosa c u a n d o
tiempo de llenado
por ser ligera no produce obstrucción al vaciamiento
diastólico (seglmin)
auricular, sino en determinadas circunstancias q u e
d) Cálculo del área valvular mitral (AVM). C u a n - aumentan la frecuencia cardiaca (fiebre, embara-
do el paciente se encuentra en ritmo sinusal y z o , etc.); en estos casos, generalmente el diagnós-
la estenosis mitral es pura, se puede calcular el tico se establece cuando se ausculta al paciente e n
área valvular mitral mediante la fórmula de decúbito lateral izquierdo o después de ejercicio.
4^
CARDIOLOGÍA
En otras ocasiones, la estenosis mitral poco apreta- d a d pulmonar si los síntomas de hipertensión v e -
d a se asocia a otras valvulopatías más importantes nocapilar son especialmente graves aun en a u -
hemodinámicamente y ello hace que los fenóme- sencia de las manifestaciones acústicas típicas de
nos acústicos producidos por lesiones valvulares estenosis mitral.
aórticas o tricuspídeas enmascaren a los fenóme- En la exploración física debe buscarse algún sig-
nos auscultatorios de origen mitral. no que refuerce la sospecha de valvulopatía mitral.
Por último, la estenosis mitral puede ser " m u d a " En primer término, la presencia de fibrilación auri-
cuando por ser muy cerrada, el flujo que pasa a tra- cular es más c o m ú n en la estenosis mitral que en
vés de la válvula es muy reducido. En estos casos, la ningún otro padecimiento; el I ruido reforzado, una
atenuación de los fenómenos acústicos también pue- diástole " i m p u r a " a la auscultación o un chasquido
de estar influida por calcificación valvular, hiperten- de apertura mitral que puede volverse audible con
sión arterial pulmonar grave, trombosis masiva de el ortostatismo (figura 11) al separarse del II ruido
la aurícula izquierda, dextrorrotación del corazón, pueden ser signos d e apoyo. Conviene recordar
caída del gasto ventricular derecho por insuficien- que una buena proporción de casos se acompaña
cia contráctil o por sobredistensión pulmonar. de signos auscultatorios de insuficiencia tricuspídea.
El cuadro clínico consiste, fundamentalmente, El electrocardiograma puede ser de ayuda cuan-
en hipertensión arterial pulmonar grave, con insu- do se observa una franca "P mitral", desafortuna-
ficiencia cardiaca derecha y frecuentemente c o n damente no en todos los casos aparece c o m o tal,
antecedentes sugestivos de embolia pulmonar. En aun cuando son frecuentes los signos de crecimiento
la mayoría de los casos, se ausculta un soplo meso- auricular izquierdo e n mayor o en menor grado.
cárdico bajo, de insuficiencia tricuspídea, que no La desviación del á Q R S a la derecha, así como la
es raro se irradie hasta la axila izquierda por lo que imagen de bloqueo de rama y crecimiento ventri-
frecuentemente se interpreta c o m o insuficiencia cular derechos, son hallazgos comunes e n estos
mitral. En estos casos, la ecocardiografía modo M , casos y se deben a la repercusión que sobre las
2-D y Doppler es más útil para el diagnóstico (fi- cavidades derechas del corazón tiene la hiperten-
guras 4 , 5, 6, 8, 9 y 13). El cuadro referido explica sión arterial pulmonar casi siempre importante.
el porqué es usual catalogar a éstos como portado-
La clásica "silueta mitral" en la telerradiografía
res de cardiopatía hipertensiva pulmonar secun-
PA de tórax (perfil izquierdo c o n cuatro arcos) aso-
daria a neumopatía crónica.
ciado a signos de hipertensión venocapilar, orien-
En el interrogatorio puede sospecharse que el tan firmemente hacia el diagnóstico. Si a ello agre-
cuadro del enfermo no se deba sólo a enferme- gamos la visualización de calcificación valvular
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1. E d e m a a g u d o p u l m o n a r
El grado extremo de la hipertensión venocapilar se
traduce por edema agudo del pulmón. Esta es una
condición muy grave q u e requiere tratamiento ur-
gente, ya q u e puede producir la muerte del enfer-
m o . En condiciones normales, la circulación capi-
lar mantiene e n situación ¡ntravascular a la sangre,
por las condüones físicas reinantes entre el capilar
y el intersticio pulmonar. L a presión hidrostática
intracapilar y la intersticial son muy similares (entre
8 y 10 mmHg), mientras q u e la presión oncótica
intracapilar es mucho mayor que la hidrostática ya
que alcanza entre 2 8 y 3 0 m m H g . El concurso si-
multáneo de estas fuerzas q u e accionan en forma
opuesta (la presión hidrostática tiende a extravasar
el líquido mientras q u e la oncótica lo retiene),
FIGURA 12 Estenosis mural "muda", Radiografía
mantiene la sangre dentro d e los vasos sanguíneos
del tórax. La imagen del corazón ha perdido la clá-
sica "silueta mitral". La cardiomegalia se debe a porque la presión oncótica ¡ntravascular es defini-
dilatación del ventrículo derecho. Obsérvese la im- tivamente mayor q u e la presión hidrostática. Las
portante hipertensión venocapilar pulmonar (ede- condiciones patológicas q u e dificultan el llenado
ma intersticial) que se confunde con enfermeda- de las cavidades izquierdas sea por obstrucción me-
des intersticiales del pulmón. cánica (estenosis mitral, mixoma de la aurícula iz-
quierda, trombosis intracavitaria) o por elevación
de la presión diastólica ventricular (insuficiencia
encontrada c o n el intensificador d e imágenes, el cardiaca, miocardiopatía restrictiva, distensibilidad
diagnóstico es casi seguro. Sin embargo, no siem- disminuida, etc.), constituyen un obstáculo para el
pre encontramos la imagen radiográfica típica (fi- vaciamiento de las venas pulmonares lo cual trae
gura 12). La aurícula izquierda poco crecida no es como consecuencia elevación la presión venosa
excepcional a u n en estenosis mitrales m u y graves, pulmonar y consecutivamente de la presión capi-
debida a la poca distensibilidad de aurículas hiper- lar pulmonar (hipertensión venocapilar). L a eleva-
trofiadas, lo q u e a su v e z condiciona importantes ción de la presión intracapilar aumenta concomi-
elevaciones tensionales, tanto venocapilar c o m o tantemente la presión hidrostática y el aumento de
arterial del circuito pulmonar. Por otro lado, no es dicha presión dentro d e los vasos fuerza la salida
excepcional confundir la imagen radio lógica de la del líquido hacia el intersticio pulmonar.
hipertensión venocapilar c o n la producida por pa-
decimientos intersticiales del pulmón.
U n a presión capilar pulmonar alrededor d e 2 0
El estudio ecocardiográfico es el más informa- m m H g p r o d u c e e d e m a intersticial. El l í q u i d o
tivo y es definitivo para el diagnóstico pues e n extravascular es efectivamente removido hacia el
todos ellos se muestran los signos típicos d e este- conducto torácico por los linfáticos pulmonares. El
nosis mitral (figura 1 3 ) ; para ello, la ecocardio- edema intersticial puede ser reconocido en la ra-
grafía Doppler d a gran certeza diagnóstica (figu- diografía del tórax c o m o moteado difuso e hilios
ras 8 y 9 ) . diíuminados d e tipo venoarterial. Mayores grados
En c o n c l u s i ó n , la historia clínica minuciosa, de hipertensión venocapilar condicionan mayor
acompañada d e los estudios d e gabinete habitua- extravasación d e líquido al intersticio, al grado de
les podrá orientar firmemente hacia el diagnóstico q u e aparece ingurgitación linfática (líneas A y B de
correcto el cual podrá ser confirmado mediante un K e r l e y ) y e d e m a seroso ( d e r r a m e l a m i n a r e
estudio ecocardiográfico técnicamente satisfacto- intercisural). El edema intersticial interfiere c o n la
565
CARDIOLOGÍA
¡ ! • •
f a»»-r. « P V « --C*. .
FIGURA 13 Ecocardiograma en estenosis mitral calcificada "muda". Se puede observar la dilatación del
ventrículo derecho (VD) y aurícula izquierda (Al). El escaso movimiento de las paredes aórticas y la breve-
dad de la apertura de la válvula aórtica (Ao) traducen bajo gasto cardíaco. Obsérvese la válvula mitral (m)
con ecos muy densos, signos indudables de estenosis calcificada. Pequeño derrame pericárdico posterior
hematosis y, por lo tanto, se manifiesta clásicamente venientes de los capilares pulmonares), la cianosis
por disnea, tanto más intensa cuanto mayor sea el distal, los tiros intercostales y el "aleteo" nasal, son
edema intersticial (figura 12). signos también frecuentes.
Si la hipertensión venocapilar es más acentua- A la auscultación pulmonar son evidentes los
da, los linfáticos llegan a ser insuficientes para re- estertores crepitantes y subcrepitantes, acompaña-
mover el líquido de edema a la velocidad necesa- dos de estertores silbantes espiratorios, la taquicar-
ria para descongestionar el p u l m ó n , y si se alcanza dia es un hallazgo constante y la exploración pre-
o sobrepasa la presión oncótica ¡ntravascular, el cordial es difícil por la transmisión de los estertores
paso del líquido del capilar alcanza al intersticio y pulmonares y el apagamiento de los ruidos cardiacos.
de ahí pasa al alveolo (edema alveolar). El edema El ritmo de galope traducirá insuficienica ven-
alveolar produce una alteración d e la hematosis t r i c u l a r i z q u i e r d a , m i e n t r a s q u e el r i t m o d e
por engrosamiento de la membrana alveolocapilar Duroziez dominará el cuadro auscultatorio si la
causada por el trasudado, lo que rápidamente se estenosis mitral es la causa. Cualquiera que sea el
traduce en hipoxemia grave. En este estadio, la ra- origen del edema pulmonar, si no es tratado ur-
diografía del tórax muestra abundantes exudados gentemente, sobreviene la muerte del enfermo.
"algodonosos" confluentes, diseminados en ambos
campos pulmonares característicos del edema agu-
do pulmonar (figura 14). TRATAMIENTO
Objetivos:
• La administración de furosemide ( 2 0 a 60
mg) por vía intravenosa es de gran ayuda para
el tratamiento del edema pulmonar porque
promueve la movilización de líquido del ede-
ma pulmonar con sorprendente rapidez. Asi-
mismo, su efecto diurético disminuye la can-
tidad de líquido ¡ntravascular y c o n ello el
retorno venoso, resultando finalmente una
efectiva disminución d e la presión capilar
exageradamente elevada.
-ÁJÉ1
CARDIOLOGÍA
la mejor ventilación alveolar; asimismo, su 2 0 0 x ' ) , lo que acorta la diástole y por ello
efecto diurético potencia la acción del furo- agrava los efectos hemodinámicos de la obs-
semide (una ampolleta de 2 5 0 mg por vía trucción mitral favoreciendo la hipertensión
intravenosa muy lenta). venocapilar y aun el edema pulmonar. Por
ello, la digitalización rápida por vía intrave-
• La intubación orotraqueal se utiliza sólo e n nosa (lanatócido-C u ouabaína) tiene una in-
casos extremos de edema pulmonar refrac- dicación precisa e n estos casos y la digitali-
tario con el objeto d e aspirar directamente zación crónica (digoxina) por vía oral para
una mayor cantidad de líquido de e d e m a , mantener la frecuencia ventricular media
así c o m o para asegurar la oxigenación me- entre 80 y 100 x'. La cardioversion eléctrica
diante el uso de ventiladores. tiene su indicación precisa cuando se ha co-
rregido quirúrgicamente la estenosis mitral,
c) Tratamiento de la enfermedad causal la arritmia tiene menos de un año de insta-
lada y la aurícula izquierda no está muy di-
• En la mayoría de los casos c o n estenosis
latada (menor d e 4 . 5 c m ) . Si no se toman en
mitral, el tratamiento médico yugula el cua-
cuenta estos hechos, la posibilidad de recaí-
dro d e edema agudo del pulmón. Todo pa-
da e n fibrilación auricular después d e la elec-
ciente que presente un edema pulmonar,
troversión es muy alta.
c o m o consecuencia de una estenosis mitral,
es portador de una lesión valvular apretada;
luego la aparición de este cuadro es Lina in- b ) La taquiarritmia favorece la caída en insufi-
dicación relativa para tratamiento quirúrgi- ciencia cardiaca congestiva por aumento
co electivo de la estrechez valvular. brusco e n la sobrecarga ventricular derecha
y disminución del gasto cardiaco.
• Cuando la estenosis mitral es muy apretada,
c) La pérdida d e contracción mecánica de la
el cuadro de edema agudo del pulmón pue-
aurícula, favorece la formación de trombos
de ser refractario a todo tratamiento médi-
co. En estos casos, la comisurotomía mitral intracavitarios.
de urgencia constituye la alternativa salva-
dora del paciente, que de no llevarse a cabo, 3. E m b o l i a s s i s t é m i c a s
sucumbe c o m o consecuencia del cuadro La obstrucción mitral, la dilatación auricular con-
congestivo pulmonar. secutiva y la fibrilación auricular crónica son los
factores que favorecen la formación de trombos
• Cuando el edema agudo pulmonar es conse- intrauriculares (figura 7). La trombosis intrauricu-
cuencia de la insuficiencia cardiaca izquier- lar constituye un riesgo potencial d e embolias
da se deberá administrar además med¡< ac ion sistémicas; en efecto, la fragmentación del tromlx)
digitálica de acción rápida (ouabaína 0.25 mg va s e g u i d o d e e m b o l i a s p e r i f é r i c a s ( c e r e b r a l ,
por vía intravenosa cada 6 horas (previa va- mesentérica, renal, a la bifurcación aórtica, e t c . ) ,
loración médica), o lanatócido-C 0.4 mg por complicación frecuente e n pacientes con esta val-
vía intravenosa cada 6 horas), la dosis total vulopatía. La estenosis mitral es la causa más fre-
de digitálicos deberá ser individualizada para cuente de accidentes vasculares cerebrales de tipo
cada enfermo (alrededor de un miligramo oclusivo e n pacientes menores de 4 0 años.
para la ouabaína y de 1.2 a 1.6 mg para el El tratamiento quirúrgico de la valvulopatía
lanatócido-C en 24 horas). (cuando tiene repercusión considerable), la reins-
talación d e l ritmo sinusal (cuando es factible) y la
2. Fibrilación auricular anticoagulación crónica por vía oral (acenocou-
m a r i n a ) , son las medidas terapéuticas capaces de
Esta arritmia es frecuentemente causada por valvulo- prevenir las complicaciones embólicas. El ecocar-
patía mitral y tiene las siguientes consecuencias: diograma bidimensional es muy útil para el diag-
a ) La frecuencia de descarga auricular aumen- nóstico de trombosis intrauricular izquierda (figura
ta enormemente (400 a 7 0 0 x ' ) ; afortuna- 7). C u a n d o un paciente c o n estenosis mitral ha
damente el periodo refractario del modo AV sufrido un proceso embólico y el ecocardiograma
no permite la conducción d e todos los im- 2-D no demuestra trombosis intrauricular, el es-
pulsos, pero d e cualquier forma el latido tudio transesofágico la demostrará e n mayor pro-
ventricular alcanza frecuencia elevada (170- porción d e ellas.
VALVULOPATÍAS
569
CARDIOLOGÍA
brecarga hemodinámica impuesta por la le- se encuentre calcificada, es por ello que este pro-
sión valvular, la cual le permitirá saber si el cedimiento se contraindica si se demuestra calcifi-
cambio producido por el tratamiento qui- cación comisural ya que en este caso la posibilidad
rúrgico será benéfico o no para el paciente. de ruptura valvular es muy alta.
La valvuloplastia mitral es un procedimiento d e
En el caso de la estenosis mitral sabemos que
uso c o m ú n , los resultados a largo plazo son exce-
cuando es ligera, no produce síntomas y dejada a
lentes, comparables a los obtenidos con comisuro-
su evolución natural la sobrevida es muy buena
tomía quirúrgica. Los riesgos que tiene el procedi-
figura 15). La indicación quirúrgica se establece
miento son los implícitos al cateterismo transeptal
cuando el paciente tiene una estenosis mitral apre-
(hemopericardio 0.5 al 12 %, tromboembolia 0.5
tada (área valvular de 1 cm-' o menor), ya que en
al 5 % ) : la posibilidad de provocar una insuficien-
estas condiciones no sólo mejoran los síntomas del
cia mitral importante por ruptura valvular ( 2 al 10 %;
paciente así como su capacidad funcional, sino que
requiere cirugía de urgencia; acontece en el 1 %
también aumenta su sobrevida. La forma ideal d e
de los centros con experiencia), así como la crea-
cuantificar la estenosis mitral es el cálculo del área
ción de una comunicación interauricular (peque-
valvular mitral mediante la fórmula de C o r l i n con
ños cortocircuitos se encuentran e n el 4 0 a 80 %
cateterismo cardiaco; sin embargo, e n la actuali-
de los casos inmediatamente al procedimiento con
dad la ecocardiografía bidimensional adicionada
Doppler calor). A este respecto, cabe mencionar
del sistema Doppler nos permite cuantificar con
que previo al procedimiento es indispensable con-
gran precisión la magnitud de la estenosis mitral y
tar c o n u n e c o c a r d i o g r a m a b i d i m e n s i o n a l
su repercusión hemodinámica, por lo que en la
transtorácico y transesofágico si hay fuerte sospe-
actualidad el cateterismo cardiaco se indica sola-
cha clínica de trombosis auricular, ya que su pre-
mente cuando hay discrepancia entre el cuadro
sencia contraindica la valvuloplastia.
clínico y los métodos ecocardiográficos; en este
caso, el resultado del cateterismo nos dará la últi- La valvuloplastia mitral es un procedimiento con
ma palabra. En ciertas condiciones especiales, una baja morbimortalidad (similar a la de la comisuro-
estenosis mitral moderada (1.1 a 1.3 cm-') se pue- tomía 0 al 3 % ) . Los pacientes jóvenes sin calcifica-
d e indicar el tratamiento quirúrgico tal y c o m o su- ción valvular y sin gran fusión subvalvular son los
c e d e en pacientes obesos, o e n mujeres embara- que se ven más beneficiados con este procedimien-
zadas, en las que la repercución hemodinámica to. En ellos los resultados satisfactorios se obtienen
de la lesión valvular puede ser muy importante aun e n el 9 3 % de los casos, en pacientes c o n válvulas
c u a n d o la estenosis mitral no sea crítica. muy engrosadas, rígidas, calcificadas y c o n gran
fusión subvalvular sólo e n el 50 % se benefician
con el procedimiento y la posibilidad de reestenosis
es muy alta; en ellos es mejor la elección quirúrgi-
VALVULOPLASTIA MITRAL
c a . Se ha encontrado que en el 80 % de los pa-
cientes se obtiene un resultado satisfactorio a largo
La dilatación de la válvula estrecha mediante cate-
plazo. La reestenosis aparece en el 30 % de los
terismo cardiaco se ha constituido a la fecha e n el
pacientes con calcificación valvular mayor d e + + .
procedimiento de elección para tratar la estenosis
mitral pura, apretada.
El procedimiento consiste en pasar un catéter a
TRATAMIENTO Q U I R Ú R G I C O
través d e la vena femoral hasta la aurícula izquier-
da por medio d e la vía transeptal (ver capítulo d e C o m i s u r o t o m í a mitral abierta
C A T E T E R I S M O C A R D I A C O ) . Se coloca el globo en el ori- La comisurotomía abierta requiere de circulación
ficio mitral y se infla a una presión d e 3 atmósferas extracorpórea y permite abrir la válvula estrecha
por periodos de 15 seg. e n dos o tres ocasiones, se bajo visión directa. Está indicada cuando el paciente
utilizan balones desde 18 hasta 25 mm d e diáme- es mayor de 35 años, presenta trombosis intrauri-
tro (inflados), con ello se logra disminuir efectiva- cular, calcificación valvular o fibrilación auricular.
mente el gradiente transmitral y aumentar el área En estos pacientes se obtienen benéficos resulta-
valvular de 1.5 a 3 cm-'. Estudios anatómicos e n dos con baja mortalidad (alrededor del 2%). C u a n -
válvulas que han sido dilatadas mediante valvulo- d o la válvula se encuentra muy deformada y calci-
plastia, enseñan que la dilatación se lleva a cabo ficada se tendrá que realizar cambio valvular mitral
mediante el despegamiento de las comisuras fu- por una prótesis artificial o también cuando duran-
sionadas y no ruptura, aun cuando la válvula mitral te el procedimiento el cirujano juzga que la comi-
VALVULOPATÍAS
4
CARDIOLOGÍA
A B C
Normal Valvulopatía reumática Prolapso valvular
D E
Disfunción del músculo Ruptura de cuerda tendinosa
papilar por isquemia o músculo papilar
F I G U R A 16 Etiología de la insuficiencia mitral. A : Fisiología normal del aparato valvular mitral. Durante la
contracción isovolumétrica la presión intraventricular tiende a protruir las valvas hacia la cavidad auricu-
lar, pero la contracción de los músculos papilares mantiene cerrada la válvula. B: La retracción valvular y
la fusión subvalvular evita la coaptación de las valvas como consecuencia en la enfermedad reumática. C :
Obsérvese el movimiento que realiza la valva que prolapsa: si el grado de prolapso es mayor, puede
producir insuficiencia valvular. D: El músculo papilar isquémico no es capaz de contraerse en sístole y
permite la apertura de la válvula. E: La ruptura de músculo papilar o cuerdas tendinosas producen
insuficienica mitral aguda
^4-
VALVULOPATIAS
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i Ut 1
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ch
4^
CARDIOLOGÍA
1 o
FIGURA 20 Prolapso valvular mitral. A : un corle longitudinal del ventrículo izquierdo enseña la protrusión
sistólica (prolapso) de la válvula mitral hacia la aurícula izquierda (Al) señalado con una flecha. B: Se
puede ver el prolapso mitral (también señalado con una flecha) en aproximación apical de cuatro cámaras.
Se considera como más específica la demostraci6n del prolapso en el eje largo paraesternal.
FIGURA 21 Insuficiencia mitral por ruptura de cuerda tendinosa por un infarto del miocardio. A: Fonocar-
diograma: se registra un soplo holosistólico regurgitante en el ápex. El amplio desdoblamiento del II ruido
se debe a la anticipación del l i a por acortamiento del periodo expulsivo (disminuci6n del gasto sistólico).
B: Ecocardiograma. (SIV = septum interventricuiar, V M = válvula mitral). Obsérvese el movimiento errá-
tico de la válvula mitral
4»
CARDIOLOGIA
d e insuficiencia aórtica h e m o d i n á m i c a m e n -
te importante, de larga evolución c o n gran
dilatación ventricular.
FISIOPATOLOGÍA
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4iz*
CARDIOLOGÍA
t S(tpostcarga)
t™
FIGURA 25 Insuficiencia mitral. Función ventricular. A la izquierda se demuestra la sobrecarga diastólica
del ventrículo izquierdo (doble flecha) que es la responsable de su dilatación. Durante la sístole el ven-
trículo izquierdo tiene dos vías de salida: la aorta a través de la cual se enfrenta a resistencias periféricas
(RP) y la aurícula izquierda que es una cámara de baja presión. Ello permite que la poscarga (S) sea baja y
la funci6n ventricular (FE) normal o incluso elevada, aun cuando exista insuficiencia contráctil. A la dere-
c h a se puede ver el deterioro aparentemente paradójico de la funci6n ventricular (FE) al desaparecer la
insuficiencia mitral (prótesis mitral) y enfrentarse el ventrículo izquierdo únicamente a las resistencias
periféricas (RP) (aumento brusco de la poscarga) cuando existe daño miocárdico
A — . : — FJ:
F I G U R A 26 Insuficiencia mitral pura grave. A: El ecocardiograma bidimensional (eje corto paraesternal)
enseña dilatación del ventrículo izquierdo fuera de proporción de la hipertrofia parietal (hipertrofia inade-
cuada). La relación grosor-radio (h/r) está disminuida (0.34). D: En sístole puede observarse un engrosa-
miento parietal normal con incremento significativo de la relación h/r (1.83), lo cual denota una función
ventricular normal a pesar de la sobrecarga volumétrica
VALVULOPATÍAS
4»»
CARDIOLOGÍA
I,
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F I G U R A 28 Insuficiencia
SS mitral reumática. Soplo
" I ti holosistólico (SS) decrecien-
te de tipo regurgitante, chas-
" ^ f l V.', q u i d o de a p e r t u r a m i t r a l
(chm) y retumbo en el foco
C4.5 mitral (C^.
soplo holosistólico e n el ápex, sin chasquido sistó- y ventrículo izquierdos. El perfil izquierdo ten-
lico (figura 19-A), ni d e apertura mitral, similar a lo drá cuatro arcos.
que se ausculta e n ruptura de cuerdas tendinosas
o músculo papilar (figura 21-A). En ambos casos el 3. En el intensificador de imágenes se puede buscar
ecocardiograma es el método que ayuda a diluci- la expansión sistólica de la aurícula izquierda.
dar la causa d e insuficiencia mitral (figuras 4 , 1 7 , 4. La presencia de signos radiológicos de hiper-
1 9 , 2 0 , 21). tensión venocapilar pueden indicar insuficien-
cia ventricular i z q u i e r d a o estenosis mitral
Electrocardiograma (figura 29) agregada.
1 . Crecimiento de la aurícula izquierda ("P"mitral). 5. La calcificación del anillo mitral puede hacerse
evidente e n radiografías penetradas (figura 22).
2. N o es rara la fibrilación auricular, especialmen-
te en pacientes mayores de 3 0 años.
Fonomecanocardiograma
3. á Q R S conservado o desviado a la izquierda.
1. Es útil para certificar el diagnóstico de insufi-
4. Crecimiento ventricular izquierdo con sobre- ciencia mitral y establecer el diagnóstico dife-
carga diastólica. rencial c o n otros soplos que pueden ser con-
fundidos con los de esta valvulopatía (estenosis
5. En el síndrome de Barlow se encuentran cam-
subaórtica dinámica, estenosis aórtica calcifi-
bios en la repolarización ventricular (figura 18). c a d a , comunicación interventricuiar).
R a d i o g r a f í a d e l t ó r a x (figura 30)
2. Puede clasificar el grado de regurgitación:
1. C o r a z ó n de t a m a ñ o n o r m a l :
a ) Insuficiencia mitral ligera. Soplo protosistóli-
a) Insuficiencia mitral ligera de evolución crónica.
co decreciente o mesotelesistólico crecien-
b) Es usual verlo así en la insuficiencia mitral te, sin signos de hipertensión pulmonar ni
aguda por ruptura de cuerdas tendinosas o crecimiento de cavidades. Las fases del ci-
músculo papilar (en presencia de e d e m a clo cardiaco son normales.
pulmonar) (figura 27).
b) I n s u f i c i e n c i a mitral m o d e r a d a . S o p l o
2 . Cardiomegalia indica regurgitación mitral (por protomesosistólico u holosistólico, lll ruido,
lo menos moderada), crecimiento de la aurícula crecimiento del ventrículo izquierdo, sin sig-
380
VALVULOPATÍAS
: :
~'! - 1::::l¡:-:l---dl.:¿
í • mm
F I G U R A 29 Insuficiencia
mitral pura. Electrocardiogra-
ma. El trazo enseña ritmo si-
nusal con frecuencia de 72 x'.
Crecimiento de la aurícula iz-
quierda P bimodal en D I , aVL,
V y V con duración de 0.14",
6
F I G U R A 30 Insuficiencia
mitral pura. Radiografía
del tórax. Se puede ver la
iresencia de cardiomega-
Íia (índice cardiotorácico
d e 0 . 5 4 ) a e x p e n s a s de
ventrículo izquierdo,
orejuela izquierda y pro-
minente ausencia de hi-
pertensión venocapilar.
581
CARDIOLOGÍA
nos de hipertensión pulmonar. Las fases del 3. Estado funcional del ventrículo izquierdo (diá-
ciclo cardíaco son normales. metro sistólico final y de acortamiento porcen-
tual), en registros simultáneos modo M y bidi-
c) I n s u f i c i e n c i a m i t r a l i m p o r t a n t e . S o p l o
m e n s i o n a l ; a s i m i s m o se p u e d e calcular la
holosistólico " e n barra", lll ruido y retumbo
relación h/r (figura 26).
de hiperflujo mitral. signos d e hipertensión
arterial pulmonar, crecimiento ventricular 4. La técnica de Doppler pulsado (figura 31) y
izquierdo y disminución del periodo expul- codificado en color, son útiles para la confir-
sivo "relativo" (tabla d e Meiners). mación de la presencia de regurgitación mitral,
asimismo es posible cuantificar el grado de in-
3. El registro de chasquido de apertura mitral su-
suficiencia mitral con técnica de PISA median-
giere la etiología reumática (figura 28), mien-
te el cálculo del volumen regurgitante y el área
tras que si el chasquido es telesistólico, asegura
del orificio regurgitante (ver capitulo de Eco-
el prolapso valvular (figura 17).
CARDIOCRAFÍA DOPPIER).
Ecocardiograma 1. C a t e t e r i s m o d e r e c h o
•y
d ) La calcificación del anillo mitral puede de-
mostrarse, tanto por ecocardiografía modo -
t it i if-
2. Puede informar acerca de la repercusión he-
modinámica de la lesión valvular.
a) I n s u f i c i e n c i a m i t r a l ligera ( + ) . El me-
Insuficiencia mitral moderada
dio de contraste i n y e c t a d o en el
Requiere tratamiento profiláctico para la fiebre reu-
ventríulo izquierdo pasa hacia la aurí-
mática (penicilina benzatínica), si la valvulopatía
cula izquierda y desaparece e n cada la-
es de este origen, y vigilancia periódica. Se con-
tido, por lo que nunca llega a opacificar
templará la posibilidad quirúrgica cuando se note
la cavidad auricular.
rápida progresión de la cardiomegalia.
b ) I n s u f i c i e n c i a m i t r a l m o d e r a d a ( + -1-).
El material d e contraste pasa h a c i a la Insuficiencia mitral importante
a u r í c u l a i z q u i e r d a , no d e s a p a r e c e e n
c a d a latido y la opacifica l e v e m e n t e
c o n menor d e n s i d a d q u e el v e n t r í c u l o TRATAMIENTO MÉDICO
izquierdo. Si la valvulopatía es de etiología reumática deberá
recibir profilaxis para fiebre reumática. Usualmen-
c) Insuficiencia mitral importante ( + + + ) .
te después de los 3 0 años aparece fibrilación auri-
La aurícula izquierda es completamente
cular (fatigabilidad y palpitaciones), que favorece
opacificada y el grado de opacificación a la posibilidad de trombosis intrauricular y embolias
es similar al que se observa en el ven- sistémicas, especialmente al cerebro. Estos pacien-
trículo izquierdo. tes deben recibir medicación digitálica para man-
d) I n s u f i c i e n c i a m i t r a l m u y grave tener la frecuencia ventricular cercana a lo normal
( + + + + ) : L a a u r í c u l a i z q u i e r d a se y medicación anticoagulante (acenocumarina o
warfarina).
opacifica desde el primer latido y pro-
gresivamente la opacificación es más den-
sa, incluso pueden opacificarse las venas
INDICACIÓN QUIRÚRGICA
pulmonares.
(Ver también "indicación quirúrgica en una valvu-
Por otro lado, la ventriculografía izquierda per- lopatía": Pág. 569).
mite cuantificar la fracción de expulsión y las cur- La sustitución valvular a la fecha no ha cambia-
vas depresión/volumen, parámetros muy útiles para do la historia natural de la insuficiencia mitral he-
decidir la indicación quirúrgica (v/de infra). modinámicamente importante (figura 3 2 ) ; en efec-
to, la mortalidad a largo plazo ha resultado similar
e n los pacientes operados que e n los q u e son tra-
HISTORIA NATURAL tados médicamente, y ello se debe a que el mio-
La historia natural d e la insuficiencia mitral pura, cardio ventricular se lesiona e n forma impercepti-
depende de varios factores: etiología grado de re- ble, ya que la fracción de expulsión se mantiene
gurgitación y estado anatomofuncional del miocar- normal, incluso haya insuficiencia contráctil, por-
dio del ventrículo izquierdo; así, la insuficiencia que el ventrículo izquierdo se contrae en contra
mitral ligera prácticamente no afecta la sobrevida de una poscarga baja (figura 25-A). Cuando a un
de los pacientes, excepto si la valvulopatía se v e paciente se le practica sustitución valvular mitral,
complicada c o n endocarditis infecciosa. La insufi- el ventrículo se enfrenta solamente a las resisten-
ciencia mitral progresa más rápidamente en pacien- cias periféricas (lo que significa un aumento brus-
tes con enfermedades del tejido conectivo (síndro- co de la poscarga) y si tiene daño contráctil, la re-
m e de Marían, Ehler-Danlos, etc.). En un grupo d e sultante es una disminución de la fracción de
pacientes c o n insuficiencia mitral seguido a largo expulsión, aumento de la cardiomegalia y falla ven-
plazo se observó que el 8 0 % estaba vivo a 5 años, tricular (figura 25-B y 3 3 ) , lo cual refleja que el
e l 6 0 había sobrevido a los 10 de seguimiento y e l daño contráctil ventricular estaba "enmascarado"
4 6 % a los 20 (figura 32). por la disminución de la poscarga que constituía la
CARDIOLOGÍA
X Estenosis aórtica
O Insuficiencia mitral
A Insuficiencia aórtica
+ Prótesis mitrales
• Prótesis aórticas
fuga hacia la aurícula izquierda. Si el paciente se lla ventricular culmina con la muerte. Por lo tanto,
opera precozmente (sin cardiomegalia o con car- se comprende la dificultad que implica hacer una
diomegalia discreta) la historia natural no es afec- indicación quirúrgica precisa para realmente cam-
tada (figura 3 2 ) , porque el paciente está expuesto biar la historia natural del padecimiento.
a las complicaciones inherentes a las prótesis (trom- En la actualidad debe de indicarse el tratamiento
bosis, embolias, hemorragias, dehiscencias, endo- quirúrgico e n un paciente c o n insuficiencia mitral
carditis, etc.) y si es intervenido tardíamente, la fa- muy importante:
VALVULOPATÍAS
- 7 .
\
B
quirida), subvalvular fibrosa fija (rodete fibroso sub- En los niños, la estenosis aórtica siempre será
valvular aórtico), supravalvular (rodete fibroso o congénita (valvular, subvalvular o supravalvular); en
estenosis por encima del plano valvular aórtico) que los adolescentes será congénita cuando se encuen-
siempre es congénita o subaórtica "dinámica" (mio- tre aislada; si se asocia la estenosis mitral será de
cardiopatía hipertrófica obstructiva). origen reumático aun c u a n d o este comportamien-
VALVULOPATÍAS
to es más frecuente en los adultos. No es infre- diaca son eventos que aparecen tardíamente en la
cuente que la estenosis aórtica aislada del adulto evolución d e esta valvulopatía y preceden a la
sea congénita y, finalmente, la estenosis aórtica del muerte del paciente.
paciente mayor de 65 años generalmente se debe
a depósitos calcicos que inmovilizan la válvula.
SÍNTOMAS
4iH
CARDIOLOGÍA
que son secundarias a hipoperfusión miocárdica. al ápex (figura 361. Cuando el soplo es pro-
El cuadro se caracteriza por una pérdida transitoria tosistólico traduce esclerosis aórtica, aorta
de la conciencia, o c u a n d o es menos grave, apare- bicúspide sin obstrucción o estenosis aórtica
c e sólo una lipotimia que es la sensación de desva- ligera. Cuando el soplo es mesosistólico, la
necimiento. estrechez es moderada y cuando el acmé
del soplo es telesistólico, invariablemente la
estenosis aórtica es grave.
MUERTE SÚBITA
• En el ápex se escucha él primer ruido, dupli-
cado por un chasquido protosistólico de ori-
La muerte súbita puede ser el primer síntoma de
gen aórtico (apertura valvular) (figura 36).
una estenosis aórtica apretada (aproximadamente
en el 3 % ) , pero ocurre más comúnmente en pa- • En el ápex frecuentemente se ausculta IV
cientes que ya previamente han presetado lipoti- ruido (traduce hipertrofia miocárdica).
mias o síncope. Cuando un episodio de síncope se
torna irreversible culmina c o n muerte. • El desdoblamiento fisiológico del II ruido
(II ruido desdoblado en inspiración y úni-
co en espiración), traduce estenosis aórtica
E X P L O R A C I Ó N FÍSICA
ligera.
Signos centrales
• El desdoblamiento paradójico del II ruido (II
• Ápex e n su sitio normal c o n levantamiento ruido desdoblado en espiración y único e n
sistólico sostenido (sobrecarga sistólica del inspiración), traduce estenosis aórtica grave
ventrículo izquierdo). (figura 36).
• Frémito sistólico en el foco aórtico. Su pre- • El II ruido único traduce estenosis aórtica
sencia traduce estenosis importante. moderada.
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589
CARDIOLOGÍA
FIGURA 38 Estenosis aórtica. A) La radiografía de tórax enseña un corazón de tamaño normal (ICT: 0.42); se
hace evidente la dilatación de la aorta ascendente (dilatación posestenótica en un caso de estenosis aórtica
valvular apretada. El perfil del ventrículo izquierdo esta redondeado, lo que denota hipertrofia concéntrica.
Nótese que la circulación pulmonar es normal y no hay signos de hipertensión venocapilar. B: Estenosis
aórtica complicada con insuficiencia cardiaca. El estudio radiológico pone en evidencia la presencia de car-
diomegalia (ICT: 0.57) a expensas de crecimiento del ventrículo izquierdo que se acompaña de signos radio-
lógicos de hipertensión venocapilar e hipertensión arterial pulmonar. Nótese el cayado aórtico permanente
590
FIGURA 40 Estenosis subaórtica fibrosa fija. El registro demuestra un soplo sistólico expulsivo (SS), con
epicentro en el foco accesorio aórtico ( C , ) y con irradiaciones al ápex (C J y al foco aórtico (C, J , no se
;
aprecia chasquido protosistólico. El pulso carotídeo muestra ascenso vibrado y cima tardía con incisura alta
4i21
CARDIOLOGÍA
c a r d í a c o es n o r m a l y equivale a un gradiente
transaórtico pico a pico d e 5 0 m m H g y por catete-
rismo. Asimismo, es posible cuantificar el área val-
vular aórtica mediante la ecuación de continuidad
(ver capítulo de E C O C A R D I O C R A F Í A D O P P L E R ) .
Cateterismo cardiaco
Se realiza cateterismo cardiaco izquierdo (retró-
grado):
podrá reconocer la aorta si es bicúspide (ver capí- CÁLCULO DEL ÁREA VALVULAR AÓRTICA
tulo de E C O C A R D I O G R A F Í A M O D O M ) .
El cálculo del área valvular aórtica es de especial
utilidad cuando por disminución del gasto cardíaco
b) Ecocardiografía bidimensional
(hipovolemia o insuficiencia cardiaca), el gradiente
El estudio bidimensional ofrece aspectos importan- transaórtico estará pseudonormalizado y no refleja-
tes e n el diagnóstico: el primero es el d e conocer rá con exactitud la gravedad de la obstrucción.
la localización d e la obstrucción: subvalvular (figu-
En otras palabras, un área valvular reducida
ra 42-A), o valvular (figura 43-A), y el segundo, en
(menor de 0.75 c m ) e n presencia d e un gradiente
2
el caso de ser valvular, se podrá saber si la válvula transaórtico poco importante (menor d e 5 0 mmHg)
está o no calcificada. traducirá hipovolemia o mala función ventricular.
592
VALVULOPATÍAS
FIGURA 42 Estenosis subaórtica fibrosa. A: El ecocardiograma 2-D demuestra la presencia de un rodete fibroso
subvalvular (señalado con una flecha). B: El resisto de Doppler pulsado enseña un flujo turbulento sistólico en
la cámara de salida del ventrículo izquierdo (véase la señal de muestreo en el registro 2-D). Ei flujo diastólico
también demuestra regurgitación aórtica; en ambos se encuentra registro ambiguo del flujo (Aliasing)
593
CARDIOLOGÍA
<N Nlp-"-
.A i«n
r r . r
160
140
f
170
\
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ap
F I G U R A 44 Estenosis
aórtica. Registro simultá-
neo de presiones del ven- J
trículo izquierdo y la raíz 40
aórtica. Nótese la presen-
L
cia de un importante gra- 20
diente transvalvular aór- A «/A,
tico "pico a p i c o " (60
m m H g ) . (Cortesía del Dr. 1 7:« «A»
; " 7:43:47 AH 7:43:49 AM
lorge Gaspar) 1
' ' I i ' ' ' '• -•
F I G U R A 45 Estenosis aórtica.
Trazo de retiro. A: Obsérvese
el salto brusco de presiones
entre el ventrículo izquierdo
y aorta, lo cual revela el nivel
valvular de la obstrucción. B:
El trazo de retiro del ventrícu-
lo izquierdo a la aorta revela
un gradiente sistólico a un
n i v e l e n donde la p r e s i ó n
diastólica es todavía ventricu-
lar, lo cual denota una obs-
trucción subvalvular. Obsér-
vese que no hay gradiente
entre este nivel y la presión
s i s ! ca aórtica. C : En este
caso el trazo de retiro de-
muestra que la presión
sistólica es similar en el ven-
trículo izquierdo y en la raíz
aórtica. El gradiente se de-
muestra en la propia aorta
por encima de su raíz (este-
nosis supravalvular)
existen discrepancias en la magnitud de la es- hay riesgo para su vida. Aquel paciente que pre-
tenosis con métodos no invasivos. senta lipotimias o sincope manifiesta una estenosis
aórtica apretada y dejado a su evolución natural
tiene una alta mortalidad en poco tiempo, ya que
HISTORIA NATURAL el 5 0 % ha fallecido después de 2 años (figura 32).
El paciente c o n estenosis aórtica ligera o modera- Cuando se presenta angina d e pecho, es necesario
d a , generalmente se encuentra asintomático y no cuantificar el gradiente transaórtico mediante téc-
594
VALVULOPATÍAS
nica d e Doppler (figura 43-B) o cateterismo car- fieste ningún síntoma (angor, sincope o insu-
diaco (figura 441 la gravedad de la lesión, pues si ficiencia cardiaca). Es probable que la a u -
es apretada tendrá e l mismo pronóstico q u e el re- sencia del síntoma se deba a que llevan una
ferido para el sincope, mientras que si la lesión es vida sedentaria con una actividad física muy
limitada.
ligera, seguirá un curso benigno. En estos casos es
imperativo el estudio d e arteriografía coronaria, ya Asimismo, no es raro que padezcan otras
que la presencia de enfermedad obstructiva atero- enfermedades concomitantes (obesidad, in-
matosa es muy factible. suficiencia respiratoria, osteoartritis, insufi-
ciencia vascular cerebral, etc.) que hagan
El paciente que llega a la insuficiencia cardiaca
prohibitivo el riesgo quirúrgico. En estos pa-
tendrá una sobrevida aproximada de dos años con
cientes probablemente una conducta con-
tratamiento médico y finalmente, no es raro que
haya pacientes en los que exista una estenosis servadora podría darles mayor beneficio y
aórtica apretada y se encuentren completamente mayor sobrevida.
asintomáticos. Estos pacientes tienen una alta mor- • En los lactantes y recién nacidos la esteno-
talidad a corto plazo (figura 3 2 ) , dejados a su evo- sis aórtica apretada puede solucionarse me-
lución natural, ya que e n ellos el primer síntoma diante comisurotomía valvular, ya que d e -
puede ser la muerte súbita. jados a su historia natural, prácticamente
fallecen todos los pacientes; sin embargo,
la mortalidad quirúrgica e n este grupo de
TRATAMIENTO e d a d , también es elevada e n los mejores
centros (alrededor de 4 0 % ) . En la actuali-
1. Estenosis aórtica ligera d a d la valvuloplastia a ó r t i c a se prefiere
• Vigilancia periódica. Es c o m ú n que con el c o m o tratamiento paliativo.
paso del tiempo (años) la estrechez progrese
• En los niños escolares la situación es com-
y lo usual es que después de los 4 0 años de
pletamente diferente ya que la mortalidad
edad la válvula se encuentre calcificada.
operatoria por comisurotomía aórtica es muy
• Profilaxis de bacteremia (extracciones den- baja (2%) y los resultados muy buenos; sin
tarias, manipulaciones urológicas o gine- embargo, a largo plazo aparece reestenosis
cológicas instrumentales), por la posibili- valvular prácticamente en todos los casos,
d a d d e injerto bacteriano ( e n d o c a r d i t i s por lo que en un segundo tiempo se tendrá
infecciosa), c o m p l i c a c i ó n temible e n estos que realizar un cambio valvular aórtico por
casos. una prótesis. La intervención en estos casos
evita la muerte prematura, y el uso de pró-
tesis artificiales en niños es inconveniente por
2 . Estenosis aórtica moderada
la anticoagulación.
• Vigilancia periódica. La radiografía d e tórax,
el electrocardiograma y la ecocardiografía • El cambio valvular aórtico por una prótesis
Doppler nos darán la evidencia del momen- en adolescentes, adultos o ancianos es el
to e n que la lesión es apretada y requiere tratamiento de elección d e una estenosis
valoración hemodinámica y/o cirugía. aórtica apretada.
La mortalidad operatoria oscila entre 1
3. Estenosis aórtica apretada y 2 % y los resultados a corto y largo plazos
son muy buenos, ya que es posible c a m -
• Requiere tratamiento quirúrgico. Por otro
biar la historia natural de la enfermedad (fi-
lado, en estos casos puede aparecer muerte
g u r a 3 2 ) , y por lo t a n t o a u m e n t a r la
súbita como primera manifestación de la en-
sobrevida de los pacientes c o n esta valvu-
fermedad (3 a 4 % de mortalidad anual). Por
lopatía, ya que la mortalidad a los 5 años
lo tanto, en estos casos es conveniente indi-
después de operados es de 15 %, a los 10
car la intervención quirúrgica c u a n d o el pa-
años d e 32 %, a los 15 d e 5 6 % y a los 2 0
ciente todavía está asintomático.
años d e 7 8 %; curva que es definitivamen-
• En pacientes ancianos es muy frecuente e n - te mejor que si los pacientes no se operan
ya que la mortalidad de estos alcanza el
contrar una estenosis aórtica valvular calcifi-
1 0 0 % antes de los 10 años.
cada muy grave sin que el paciente mani-
CARDIOLOGÍA
- EAo.^f- I.C.
aórtica (EAo + IC). El tra- 0.5
>s
tamiento quirúrgico nor-
maliza la función ventricu- 0.4
lar. La m i o c a r d i o p a t í a
dilatada (MD) muestra fa-
lla ventricular izquierda
0.3
M. D.
0.2
(h,-r 4) sin un aumento co-
4
c) Prolapso valvular.
4iH
CARDIOLOGÍA
i
SS
II sd
- r)(i'í.'*i*»«*
Mr*
FIGURA 4 7 Insuficiencia aórtica pura. Véase el soplo diastólico (sd) decreciente en el foco accesorio
aórtico. El soplo sistólico (ss) registrado es de hiperflujo
F I G U R A 48 Insuficiencia
aórtica muy importante. El
registro f o n o c a r d i o g r á f i c o
Mm
demuestra un intenso IV rui-
do, seguido de un retumbo
funcional (ret) de Austin-Flint.
El pulso carotídeo muestra su
i-i i -l i
morfología bisferiens y la in-
cisura borrada.
i -1-1
2. Puede cuantificar el grado de la lesión en sura del pulso carotídeo poco marcada, re-
ligera, moderada o importante. tumbo de Austin-Aint y crecimiento ventri-
cular izquierdo, son signos que correspon-
a ) El soplo protodiastólico, el periodo expulsi-
d e n a una lesión de moderada repercusión
v o normal, la incisura del pulso carotídeo hemodinámica.
conservada, sin signos de crecimiento iz-
quierdo corresponde a una lesión ligera.
c) Soplo holodiastólico, periodo expulsivo muy
b) Soplo protomesodiastólico, periodo expul- prolongado o de duración normal (bajo gas-
sivo prolongado, fase isosistólica corta, inci- to), c u a n d o se acompaña d e desdoblamien-
599
CARDIOLOGÍA
I .w
~JwJ J
de 0.05" en V aseguran la hipertrofia ventricular izquierda. Nótese la onda " r acuminada (V, J que revela
6
la sobrecarga diastólica.
3. I n f o r m a a c e r c a d e la posibilidad de c r e c i -
m i e n t o ventricular izquierdo y d e su estado
f u n c i o n a l , mediante el a p e x c a r d i o g r a m a y
la m e d i c i ó n de las fases del c i c l o c a r d i a c o ,
respectivamente.
E c o c a r d i o g r a m a m o d o M (figura 51)
600
VALVULOPATÍAS
FIGURA 53 Insuficiencia aórtica aguda. A l El registro simultáneo de presiones del ventrículo izquierdo (VI) y
aorta (Ao) demuestra cómo las presiones de ambas cámaras se iguala a un nivel exageradamente elevado (45
mmHg) para el VI (flecha) antes de que ocurra la sistole ventricular. Bl El ecograma mitral enseña un cierre
precoz (c') señalado con una flecha en mesodiástole, resultado de gran hipertensión intraventricular
Ecocardiografía D o p p l e r
El estudio mediante técnica Doppler es confirma-
torio del diagnóstico (figura 5 6 ) .
En efecto, la técnica de Doppler pulsado es la
más útil para este fin y su principal indicación es
para establecer el diagnóstico diferencial entre in-
suficiencia aórtica y pulmonar cuando se escucha
FIGURA 54 Prolapso valvular aórtico. El ecocardio-
un soplo diastólico en el foco accesorio aórtico e n
grama 2-D (eje largo paraesternal) demuestra cla-
presencia de hipertensión pulmonar (hecho más ramente el prolapso de la válvula aórtica (señalado
frecuente e n estenosis mitral). con una flecha) durante la diástole
VALVULOPATÍAS
F I G U R A 55 Insufícienica aórtica. Relación h/r. ARRIBA: La dilatación del ventrículo izquierdo se encuentra
equilibrada con aumento del grosor de la pared y la relación h/r se mantiene normal (0.46). Nótese el
incremento de la relación en sístole, lo cual demuestra buena función (hipertrofia adecuada). A B A J O : El
radio de la cavidad se ha excedido en relación con el espesor de la pared, lo cual produce una disminución
de la relación h/r (0.32). Nótese el precario incremento de la relación en sístole por disminución de la
función sistólica (hipertrofia inadecuada)
F I G U R A 56 Insuficiencia
aórtica. C o n la t é c n i c a
Doppler pulsado se regis-
tra el flujo de la cámara de
salida del ventrículo iz-
quierdo (arriba) y se de-
muestra un flujo diastólico
turbulento producido por la
i n s u f i c i e n c i a sigmoidea
(abajo). Nótese el registro
ambiguo del flujo (Aliasing)
ral d e la enfermedad; por el contrario, si se opera se corre el riesgo de que haya aparecido lesión irre-
tardíamente cuando ya se ha presentado la insufi- versible de la miofibrilla y el paciente queda en in-
ciencia cardiaca y, eventualmente se ha lesionado suficiencia cardiaca a pesar del buen resultado qui-
la miofibrilla, la mortalidad operatoria es mayor y la rúrgico inmediato; en otras palabras, el paciente tiene
evolución a largo plazo tampoco es satisfactoria. Por una miocardiopatía dilatada.
esta razón, tradicionalmente ha sido difícil escoger
el momento óptimo para cambiar la historia natural
del padecimiento con la cirugía. El ecocardiograma INSUFICIENCIA TRICUSPÍDEA
_'-D nos ha permitido la relación h/r y con ello es ETIOLOGÍA
posible saber si la hipertrofia es adecuada o no (fi-
gura 55). Idealmente es posible seguir en el tiempo La insuficiencia tricuspídea se produce cuando por
la relación h/r en el paciente con insuficiencia aórtica cualquier mecanismo las valvas de la tricúspide no
gravo, y en el momento que se reduce dicha rela- coaptan completamente e n sístole y permiten el
ción por debajo de las cifras normales (0.47 ± 0.05). regreso de la sangre del ventrículo hacia la aurícula
querrá decir que la hipertrofia ha dejado de ser com- derecha.
pensadora. Los mejores resultados se han obteni-
1. Insuficiencia t r i c u s p í d e a funcional
do c u a n d o se lleva a tratamiento quirúrgico al pa-
c i e n t e e n e l m o m e n t o q u e la h i p e r t r o f i a e s La causa más frecuente de insuficiencia tricuspídea
inadecuada (reducción anormal d e la relación h/ es la dilatación del anillo tricuspídeo.
r e n diástole), pero la fracción de expulsión es En efecto, el ventrículo derecho tiene varias
normal y a q u e ello a n u n c i a la próxima caída d e desventajas desde el punto d e vista anatómico
la fracción de expulsión pues el mecanismo de para soportar sobrecargas d e presión y debido a
compensación (la hipertrofia) ha dejado de ser efi- ellas, es q u e puede dilatarse c u a n d o este tipo de
ciente para mantener la función ventricular e n cargas aparecen e n forma aguda, tal y c o m o acon-
presencia de la sobrecarga hemodinámica, la mor- tece c o n la súbita hipertensión del circuito m e -
talidad operatoria es baja, se observa reducción nor, causada por una embolia pulmonar, o bien,
de la cardiomegalia y buena evolución a largo pla- c u a n d o existe grave hipertensión arterial pulmo-
z o , mientras q u e si se opera al paciente con mala nar sostenida y que es secundaria a estenosis mitral
función ventricular, la mortalidad operatoria es apretada, o a hipertensión pulmonar de evolución
mayor y n o siempre se nota reducción de la car- crónica de cualquier otra etiología (neumopatía,
diomegalia ni d e la insuficiencia cardiaca, y la evo- hipertensión pulmonar primaria, etc.).
lución a largo plazo n o siempre es buena porque En tales casos, la dilatación aguda o crónica del
ventrículo derecho se acompaña de dilatación del
VALVULOPATÍAS
Insuficiencia tricuspídea
2. Insuficiencia t r i c u s p í d e a orgánica
Cuando es grave, en las fases iniciales puede cur-
a) La insuficiencia tricuspídea de carácter orgá- sar asintomática, pero con el tiempo causa hepa-
nico más frecuente es la d e etiología reumáti- tomegalia congestiva, la cual usualmente produce
c a , que es producida por retracciones cicatri- dolor en el hipocondrio derecho, sordo, continuo,
ciales de los velos valvulares y por fusión que se exacerba c o n el ejercicio y es debido a la
subvalvular con acortamiento de sus cuerdas distensión d e la cápsula d e Glisson. Si la valvulo-
tendinosas. Siempre se verá acompañada por patía además de ser grave, persiste en forma cróni-
valvulopatía mitral de la misma etiología. ca (por largo tiempo), puede ser causa de conges-
tión y necrosis centrilobulillar hepática ("hígado
b) La enfermedad de Ebstein puede ser causa tricuspídeo"), que incluso puede eventualmente lle-
de insuficiencia tricuspídea (ver capítulo de ga a constituir una verdadera cirrosis hepática
CARDIOPATÍAS CONCÉNITAS). ("cirrosis cardiaca"). Los síntomas e n este estadio
son aquellos causados por la insuficiencia hepática
c) La ruptura de cuerdas tendinosas o la perfo-
crónica (adelgazamiento, astenia, hiporexia, atro-
r a c i ó n v a l v u l a r c r e a d a por un i n j e r t o
fia muscular, disminución del vello axilar y pubiano,
bacteriano e n la válvula tricúspide es tam-
discreta ictericia de tipo hepatocelular, etc.). Por
bién causa de que este aparato se torne in-
otro lado, la insuficiencia tricuspídea grave de evo-
competente. Esta forma de insuficiencia tri-
lución crónica también produce síntomas de bajo
cuspídea aparece en forma aislada,
gasto cardíaco que se manifiesta por fatigabilidad
especialmente e n adictos a la heroína.
fácil e intolerancia al ejercicio.
d) La disfunción del músculo papilar consecu-
tivo o infarto del ventrículo derecho también
Signos
puede ser causa d e insuficiencia tricuspídea.
1. Centrales:
e) Otras causas de insuficiencia tricuspídea son
a) Dilatación del ventrículo derecho. A la ins-
excepcionales en nuestro medio (fibrosis en-
pección y palpación se puede apreciar un
domiocárdica tropical o africana, endocarditis
levantamiento sistólico e n la región paraes-
de Libman-Sachs, síndrome carcinoide, trau-
ternal izquierda baja y frecuentemente tam-
m a , etc.).
bién en el epigastrio. C u a n d o la dilatación
ventricular derecha ha sido de larga evolu-
FISIOPATOLOGÍA ción puede haber abombamiento de la re-
gión precordial, especialmente e n niños y
La regurgitación sistólica de sangre hacia la aurícu- adolescentes.
la derecha representa una sobrecarga de volumen,
tanto para esta cavidad c o m o para el ventrículo b) Soplo de insuficiencia tricuspídea. En el
derecho ya que recibe la cantidad regurgitada en foco tricuspídeo se ausculta un soplo sistólico
el latido previo. La consecuencia de dicha sobre- de tipo regurgitante cuya intensidad está e n
carga es la dilatación tanto d e la aurícula derecha relación c o n la gravedad d e la lesión. C u a n -
como del ventrículo derecho. do es importante, se acompaña de III ruido
4
CARDIOLOGÍA
FIGURA 5 7 Insuficiencia tricuspídea. Registro fonocardiográfíco a nivel del foco tricuspídeo (C J. IZ- t
duce por la presencia de una " V prominen- 3. Presencia de signos de hipertrofia y dilatación
te en el pulso venoso yugular (figura 581. del ventrículo derecho, con sobrecarga sistólica.
Dicha onda de regurgitación al trasmitirse
4. Puede estar presente la imagen de bloqueo de
al hígado puede llegar a producir latido he-
rama derecha.
pático, signo característico d e insuficiencia
tricuspídea hemodinámicamente muy im-
portante (figura 581. Dicho signo puede bus- Radiografía de tórax (figura 59)
carse presionando con el puño d e la m a n o Forma aislada
derecha el hipocondrio derecho del pacien-
te a nivel del borde hepático para percibir 1. Orgánica:
su latido (maniobra de Dresslerl. a) Dilatación de la aurícula derecha y ven-
La onda " V " prominente ocasionalmen- trículo derecho.
te puede observarse e n las venas de la cara
2. Funcional:
y extremidades (gran insuficiencia tricuspí-
dea). Por último, si la valvulopatía es impor- a) Signos radiológicos d e algún tipo de neu-
tante, se a c o m p a ñ a r á de hepatomegalia mopatía e n las formas crónicas.
congestiva (dolorosa a la presión).
b) Dilatación del cono de la arteria pulmonar
b) Si la valvulopatía es importante y de larga y otros signos de hipertensión pulmonar.
evolución, aparecerán signos de insuficien-
c) Dilatación de la aurícula derecha y ven-
cia hepática crónica: adelgazamiento (ca-
trículo derecho.
q u e x i a tricuspídea), atrofia de músculos
maseteros y temporales, discreta ictericia
asociada a palidez y discreta cianosis (fascies Asociada a estenosis mitral
tricuspídea), disminución del vello púbico y 1. Silueta "mitral" c o n crecimiento d e la aurí-
axilar, palmas hepáticas, etc. cula derecha y ventrículo derecho.
1. " P " mitral, con rotación del " a p " a la derecha. 1. La derivada de .alteración estructural de la
válvula.
2. " P " mitral en las derivaciones estándar y " p "
acuminada de deflexión rápida e n ventrículo 2. La debida a la sobrecarga diastólica que im-
izquierdo. pone al ventrículo derecho esta valvulopatía.
CARDIOLOGIA
F I G U R A 58 Insuficiencia tricuspídea. Registro fonocardiográfico (FCG) a nivel del foco tricusptdeo, simul-
táneo con hepatograma (HG). I Z Q U I E R D A : Obsérvese el soplo sistólico (SS), el chasquido (cht) y el retum-
bo tricuspídeo. DERECHA: Reforzamiento con la apnea post-inspiratoria (insp). El hepatograma muestra
una onda "\ " gigante que se incrementa en forma franca con la apnea post-ispiratoria (insp)
1. I n s u f i c i e n c i a t r i c u s p í d e a o r g á n i c a b) El ecocardiograma p u e d e d o c u m e n t a r la
presencia de vegetaciones valvulares injer-
a) La valvulopatía tricuspídea de origen reumá-
tadas en la tricúspide, o bien, la ruptura de
tico produce alteraciones ecocardiográficas
sus cuerdas tendinosas.
idénticas a las producidas por la estenosis
mitral. C o n esa imagen) es posible asegurar 2 . S o b r e c a r g a diastólica d e l v e n t r í c u l o d e r e c h o
e l origen orgánico d e la valvulopatía. a) Dilatación del ventrículo derecho.
608
VALVULOPATÍAS
F I G U R A 60 Insufi-
ciencia tricuspídea.
ARRIBA: Mediante
técnica Doppler pul-
lll., »
sada se estudia el flu-
jo en la aurícula dere-
c h a (eje largo del
ventrículo derecho
paraesternal). ABAJO:
Se demuestra la pre-
sencia de flujo turbu-
lento negativo (flujo
regurgitante tricuspí-
deo). Nótese el regis-
tro ambiguo del flujo
(Aliasing)
4
CARDIOLOGIA
ir
VALVULOPATÍAS
todo tratamiento y recidivante cuando es extraída b) Ingurgitación de las venas de la cara y extre-
mediante paracentesis, que no en pocas ocasiones midades.
llega a estar en tensión.
c) Hepatomegalia congestiva, que frecuente-
Finalmente, los enfermos en fases avanzadas
mente alcanza grandes dimensiones.
muestran caquexia "tricuspídea", en cuya génesis
también interviene la mala absorción intestinal por d ) Puede haber esplenomegalia.
la congestión esplácnica crónica. Vale la pena men-
cionar que esta tensión disminuye el gasto cardiaco, e) Red venosa colateral e n el a b d o m e n .
por lo que produce fatigabilidad fácil. f) Ascitis frecuente a tensión que contrasta con
En condiciones especiales (taquicardia paroxísti- edema de miembros inferiores que es dis-
ca auricular, flutter auricular o taquicardia por fibri- creto o cuando más, moderado.
lación auricular) también puede producir lipotimias
g) La estenosis tricuspídea grave protege d e la
o síncope.
hipertensión pulmonar causada por la val-
vulopatía mitral concomitante.
Signos
Centrales Electrocardiograma
Las manifestaciones auscultatorias d e la estenosis 1. Crecimiento de la aurícula derecha.
tricuspídea son la presencia de un chasquido de
apertura y un retumbo e n el foco tricuspídeo que 2. Signos electrocardiográficos concomitantes de
se incrementan con la apnea post- inspirataria (ma- la valvulopatía mitral.
niobra d e Rivera Carvallo positiva) (figura 62).
Radiografía de tórax
Periféricos:
1. Crecimiento de la aurícula derecha.
1. Hipertensión venosa sistémica:
2 . Signos radiológicos de la valvulopatía mitral
a ) Ingurgitación yugular muy evidente. concomitante.
.A t AJ
cht
SS
ii
•i MU*»» RE
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611
CARDIOLOGÍA
612
VALVULOPATÍAS
613
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4
Capítulo 18 Endocarditis infecciosa
"Las máquinas podrán hacer muchas cosas, pero
nunca comprender el sufrimiento del enfermo ni menos
segar su angustia"
E
s UNA ENFERMEDAD INFECCIOSA que se asienta en padecimientos que podían ocasionar fiebre de ori-
el endotelio vascular, en las válvulas cardiacas gen oscuro; sin embargo, e n la actualidad es me-
o en el endocardio auricular o ventricular y que nos frecuente el cuadro de endocarditis infecciosa
se caracteriza por la formación de verrucosidades que pasa inadvertido al diagnóstico clínico.
constituidas por colonias de gérmenes que se alo-
jan en redes de fibrina. La colonización de los
gérmenes puede destruir los aparatos valvulares, F A C T O R E S P R E D I S P O N E N T E S (Cuadro 1)
producir abscesos en el corazón, perforar las pa-
redes endoteliales, producir un cuadro C o m o se mencionó, la vía de llegada de los gér-
septicémico, embolias sépticas y, finalmente; cau- menes al corazón es la hematógena; sin embargo,
sar una respuesta inmunológica sistémica. es raro que e n una bacteremia o aun e n una septi-
cemia el endocardio o e l endotelio vascular se in-
fecten, por lo que es necesario que existan otros
GENERALIDADES factores que coadyuven para que los gérmenes cir-
culantes colonicen e n las superficies internas del
El corazón es un órgano que difícilmente participa corazón o en el endotelio vascular.
de procesos infecciosos porque su localización ana- A continuación se analizan los factores que se
tómica lo protege del contacto c o n el ambiente han hallado c o m o favorecedores de la endocardi-
exterior; por lo tanto, la posibilidad más factible tis infecciosa:
para la infección de dicho órgano es la vía hemató-
gena. De hecho, la forma mediante la que se loca-
liza un injerto infeccioso e n el endocardio o e n un BACTEREMIA
endotelio es esta v í a . A u n cuando una bacteremia se produce en multi-
La endocarditis infecciosa es un proceso gene- tud de personas (extracción dentaria, cistoscopia,
ralmente grave, y e n nuestro país es relativamente histerosalpingografía, cateterismo cardiaco, alimen-
frecuente entre los pacientes cardiópatas con afec- tación parenteral, etc.), es relativamente poco fre-
ciones valvulares y congénitas especialmente. cuente que los gérmenes infecten el endocardio o
Antes del advenimiento de la ecocardiografía, el endotelio vascular, por lo que se requieren otros
esta enfermedad se situaba dentro del grupo de factores (vide infra), que se conjunten c o n la inva-
CARDIOLOGIA
CUADRO 1
ALTERACIONES CARDIACAS Y VASCULARES Q U E PREDISPONEN
A ENDOCARDITIS INFECCIOSA
-JU—
sión sanguínea de los gérmenes para que se inicie amigdalectomía y en una menor proporción
un proceso endocardítico. en la práctica d e broncoscopia, esclerotera-
El factor que se ha reconocido e n los gérmenes pia de várices esofágicas e intubación, y eco-
infectantes, fundamentalmente es su capacidad de cardiografía transesofágica.
adherencia para colonizar en algún sitio, así, algu-
nas cepas de estreptococos producen dextrán que 2. Tubo digestivo. De 5 a 8 % de los pacientes
les confiere mayor capacidad adherente y por ello sometidos a gastroscopia presenta bactere-
les da mayor posibilidad para producir endocardi- m i a ; en el colon por enema la presenta el
tis; por el contrario, los gérmenes gramnegativos 10 % d e los pacientes (enterococos otros
tienen mucha menor capacidad de adherencia, por gramnegativos) y la colonoscopia se acom-
lo que también c o n mucha menor frecuencia se paña de invasión bacteriana en el 1.9 % de
reconocen c o m o factor etiológico de endocarditis, los casos.
a pesar d e que no es rara la bacteremia por este
tipo de gérmenes. 3. Vías u r i n a r i a s . En el 34 % d e los pacientes
c o n resección transuretral d e próstata apa-
rece bacteremia; e n el 19 % de los pacien-
ORIGEN DE LA BACTEREMIA tes a quienes se les realiza cistoscopia; en el
10 % de aquellos que son sometidos a dila-
Se ha hallado que el 9 3 % de los pacientes con tación uretral, y el sondeo vesical en el 7 %;
endocarditis tiene un sitio de origen de bacteremia: asimismo en las mujeres, durante el trabajo
1. O r o f a r i n g e . La bacteremia (más c o m ú n - de parto aparece hasta e n el 4 %; en el 8 5 %
mente estreptococo) se ha encontrado e n de las pacientes a quienes se les realiza un
el 8 5 % de los pacientes con extracción den- aborto, y en el 13 % de las mujeres a quienes
t a l ; en e l 3 0 % d e aquellos sometidos a se les cambia un dispositivo intrauterino.
618
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
4«2
CARDIOLOGÍA
620
E N D O C A R D I T I S I N F E C C I O S A
ETO
ILOGA
Í
(lesiones de Bracht-Wachter), que remplazan
al miocardio normal, lo cual ha sido hallado
en el 8 8 % de los casos de necropsia, o más
rara vez, microabscesos miliares. También Aun cuando prácticamente cualquier germen pue-
pueden formarse por el mismo mecanismo de infectar el endotelio vascular o el endocardio,
abscesos cerebrales o pulmonares (endocar- e n la práctica diaria se v e que la endocarditis in-
ditis derecha). C o m o el proceso de repara- fecciosa puede aparecer por dos tipos de gérme-
ción de la vegetación es un evento muy acti- nes: unos, que muestran gran virulencia, provo-
vo, si la endocarditis se cura, se esteriliza de cando una enfermedad que se instala y progresa
gérmenes, hay depósito de fibroblastos y la hacia la gravedad con gran rapidez y que no rara
verrucosidad puede evolucionar hacia la cal- vez conducen a la muerte (endocarditis aguda) ta-
cificación. En estudios de necropsia se han les como el Stdphyfococcus aureus, Streptocoecus
encontrado embolias sépticas periféricas en pneumoniae, Neisseria meningitidis, Neisseria
el 85 % de los casos, esplénicas en el 44 %, gonorrhoeae, Streptocoecus pyogenes y Haemophilus
renales en el 56 % y cerebrales en el 3 3 %. influenzae. Otros, que pueden infectar el corazón
En vida estos procesos se diagnostican con y/o los grandes vasos y que producen una enfer-
mucha menor frecuencia. Las macroembo- medad infecciosa de curso larvado (endocarditis
lias son características muy peculiares de las subaguda) tales c o m o el Streptocoecus viridans o
endocarditis por hongos. el Sfaphy/ococcus epidermidis (32 % de los casos).
En el 10 % de enfermos puede ser un germen
gramnegativo el agente causal (E. coli, Pseudomona,
c) La extensión local del proceso infeccioso K/ebsiW/a, Salmonvlla, etc.).
puede dar lugar a ulceración, abscesos o a
C u a n d o se trata d e infecciones e n e l post-
la destrucción d e l aparato valvular con la
operatorio temprano (dentro de los primeros 60
consiguiente sobrecarga aguda o subaguda
días después d e la intervención) en prótesis valvu-
del ventrículo involucrado, lo cual será cau-
lares, los gérmenes involucrados con mayor frecuen-
sa de insuficiencia cardiaca progresiva y a
cia son: el Staphyfococcus aureus y S. epidermidis,
veces mortal, si no recibe tratamiento agre-
así como el Streptocoecus viridans, aunque estos
sivo, complicación que ha sido hallada en-
pacientes desafortunadamente también son infec-
tre el 5 9 y 75 % d e los casos de necropsia.
tados por otros gérmenes poco comunes pero que
Así también se ha demostrado la perforación
causan e n f e r m e d a d m u y grave, tales c o m o la
de los velos valvulares, ruptura de aneuris-
Brucella, la Candida albicans; otros gérmenes
ma de los senos de Valsalva hacia las cavida-
gramnegativos como la E. coli, E. serraría, Klebsiella,
des derechas, ruptura de cuerdas tendino-
Aerobacter, Acinetobacter, diversos tipos de
sas o músculo papilar, dehiscencia d e suturas
Pseudomonas (cepacia, aeruginosa, miltophilia),
de las prótesis valvulares c o n su desprendi-
Salmonella, Bacteroides y otros aún m á s raros
miento parcial, la extensión del proceso ha-
(Echvardsiella tarda, Flavobacterium, Eukevella),
cia el pericardio, dando lugar a la formación
hasta e n el 20 % de los casos.
de pericarditis purulenta, o bien, su exten-
sión al septum interventricuiar, lo cual da La infección tardía (después de 6 0 días d e la
lugar a trastornos de la conducción c o m o intervención) de las prótesis valvulares es produ-
4™
CARDIOLOGÍA
2. Manifestaciones e m b ó l i c a s
CUADRO CLÍNICO
Sistema nervioso central
Las manifestaciones clínicas de este padecimiento
Las embolias sépticas aparecen en el 2 0 al 4 0 % d e
serán las consecutivas a los aspectos patogénicos
los casos y pueden alcanzar el árbol arterial del
ya mencionados:
sistema nervioso y producir síndromes neurológi-
1. M a n i f e s t a c i o n e s d e p r o c e s o i n f e c c i o s o cos, d e los cuales, probablemente el más frecuen-
sistémico grave, d e instalación aguda y te es la hemiplejía (oclusión de la arteria cerebral
subaguda. media). Puede complicarse c o n la formación de
aneurismas "micóticos" (del 2 al 1 0 % de los casos)
2. Síntomas y signos consecutivos a embolias que al romperse pueden dar lugar a hemorragia
sépticas q u e p u e d e n ser m i c r o e m b o l i a s cerebral intraparenquimatosa o subaracnoidea, o
múltiples o macroembolias que condicionan bien, la extensión d e la infección al cerebro puede
infartos sépticos, c o n la posibilidad poten- condicionar la formación de abscesos cerebrales.
cial d e formación de abscesos en los órga-
nos "blanco" d e los procesos embólicos. Otras formas de complicación neurológica son
las del cuadro de meningitis aguda c o n líquido
3. Manifestaciones inmunológicas (reacción cefalorraquídeo estéril pero c o n aumento en el
antígeno-anticuerpo) producidos por la re- número de células y sin disminución de la glucosa,
acción del sistema inmunocompetente y el o la ceguera súbita consecutiva a la obstrucción
germen infectante. embólica de la arteria central de la retina.
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
4
CARDIOLOGÍA
sa y son hemorragias ovoideas con centro blanco, lar. Aparece en el 8 % d e los pacientes con endocar-
usualmente cercanas a la papila. También puede ditis infecciosa por abuso de drogas intravenosas.
ocurrir embolia a la arteria central de la retina, lo La endocarditis localizada a la válvula aórtica
cual es causa de amaurosis de aparición súbita. debe sospecharse clínicamente cuando e n un pa-
ciente con fiebre de evolución subaguda aparece:
Manchas de Jenaway
a) Aparición de un soplo diastólico aórtico que
Son lesiones indoloras hemorrágicas, eritematosas
no se había auscultado antes, en un pacien-
nodulares que aparecen en las palmas de las ma-
te portador de aorta bivalva.
nos o en las plantas de los pies y que tienen una
marcada tendencia a la ulceración. Se han atribui- b) Intensificación franca de un soplo diastólico
do a embolias sépticas e n la piel. Aparecen en el aórtico, previamente presente.
10 al 25 % d e los casos, especialmente e n los casos
de endocarditis aguda. c) U n soplo diastólico aórtico de timbre m u -
sical, q u e sugiere perforación o ruptura
valvular.
Nodulos de Osler
Son formaciones nodulares dolorosas que apare- d) U n soplo diastólico de alta frecuencia de tipo
cen e n los pulpejos de los dedos de las manos y los piante ("canto de gaviota") que también su-
pies en el curso de la endocarditis. Pueden durar giere perforación d e alguna de las valvas
hasta cinco días y no evolucionan hacia necrosis. aórticas.
e) S o p l o aórtico r u d o , q u e se a c o m p a ñ a d e
Manifestaciones articulares
frémito diastólico (lo c u a l es e x c e p c i o n a l
Es c o m ú n (hasta en el 5 0 % de los casos) la presen-
e n los soplos d e insuficiencia aórtica) q u e
cia de artralgias, mialgias y en ocasiones intenso
sugiere ruptura d e l aparato v a l v u l a r c o n
dolor lumbar o sacro de semiología imprecisa que
paso libre de sangre h a c i a el v e n t r í c u l o
se debe a depósito d e complejos inmunes e n la
izquierdo.
membrana sinovial.
f) Aparición de soplo de Cole-Cecil (soplo dias-
Hipocratismo digital pálido tólico aórtico que se ausculta e n el ápex y
Este signo aparece en el 10 al 20 % de pacientes no en el borde paraesternal izquierdo), su-
con endocarditis de larga evolución y su patogenia giere insuficiencia aórtica aguda por ruptura
no es conocida. valvular.
Por otro lado, la endocarditis infecciosa aguda,
g) A u n cuando no es frecuente, puede apare-
contrariamente a la subaguda, tiene un inicio brusco
cer un soplo sistólico producido por la obs-
e n un paciente que previamente estaba en buenas
trucción que las vegetaciones valvulares im-
condiciones y rápidamente evoluciona con gran-
ponen a la salida del flujo a nivel de la válvula
des elevaciones térmicas (39 a 41 °C) a un grave
aórtica (especialmente e n endocarditis por
cuadro séptico; usualmente no hay evidencia e n
hongos).
los estadios tempranos de enfermedad valvular o
disfunción protésica, pero rápidamente evolucio- h) El injerto bacteriano e n la válvula aórtica (es-
na a la destrucción valvular con aparición de nue- pecialmente e n la aorta bicúspide), puede
vos soplos cardiacos, embolias sépticas a cerebro, llegar a perforar un seno de Valsalva hacia
pulmón, riñon y periféricos, así c o m o manifesta- las cavidades derechas del corazón (aurícu-
ciones purpúricas e n piel y mucosas. la o ventrículo), lo cual provoca un cortocir-
cuito arteriovenoso con hiperflujo pulmonar
4. Manifestaciones producidas por la destruc- y sobrecarga diastólica del ventrículo izquier-
ción valvular do. C u a n d o este cortocircuito es muy im-
portante puede conducir rápidamente a la
Válvula aórtica insuficiencia cardiaca, mientras que cuando
La aorta bivalva y la estenosis aórtica valvular con- es pequeño, generalmente es bien tolerado
génita son los principales factores predisponentes e incluso el corazón mantiene su tamaño
para un injerto infeccioso en la válvula aórtica. La normal o aparece sólo discreta cardiomega-
valvulopatía aórtica de etiología reumática también lia. La comunicación aorto-cavidades dere-
puede ser terreno que favorezca la infección valvu- chas (aurícula o ventrículo) se manifiesta por
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
C-2-9
I
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•» fr I wm
> 8
1
1 '
« . CONTINUO
i
li VT
FIGURA 3 Corte anatómico de una vegetación aórtica que perfora su pared y produce una
comunicación aorta-aurícula derecha. (Ao = aorta, AD = aurícula derecha, VI = ventrículo
izquerdo, VD = ventrículo derecho, VT = válvula tricúspide). (Tomado con autorización de Kissio
y col., HERZ 1983; 82: 271-279)
4 625
CARDIOLOGÍA
Al VSM
4
CARDIOLOGÍA
3 . Se d e b e r á n t o m a r c o m o m í n i m o tres
Signos mayores (confirmatorios) hemocultivos en diferentes sitios d e veno-
punción. El germen aislado deberá ser e l
Hemocultivo
mismo en los diferentes cultivos.
La importancia del hemocultivo es capital para el
diagnóstico d e endocarditis infecciosa, ya que ante 4. Los hemocultivos deberán tomarse al inicio
un c u a d r o clínico sugestivo, la positividad d e l del proceso febril (fase de calofrío) o e n su
hemocultivo tendrá un valor confirmatorio para el curso temprano, ya que la bacteremia es más
diagnóstico. Sin embargo, esta interpretación de- intensa antes del inicio de la fiebre y pocos
berá siempre estar supeditada al cuadro clínico, ya minutos después.
que un hemocultivo positivo sin manifestaciones
ni factores predisponentes de endocarditis infec- 5. En el adulto, deberá tomarse una cantidad
ciosa puede ser consecuencia de una bacteremia de sangre de 1 0 , 20 y 30 mi para la siembra
transitoria (extracción dentaria) o sostenida (salmo- del hemocultivo que asegure un inoculo
nelosis, brucelosis), o bien, de una septicemia sin adecuado, ello es especialmente importan-
que la endocarditis infecciosa sea la responsable. te e n bacteremias de baja magnitud.
Por otro lado, el hemocultivo también tiene im- 6. Se deberán examinar diariamente los hemo-
portancia primordial debido a que nos permitirá cultivos durante una semana para vigilar la
seleccionar el antibiótico específico dependiendo del presencia de turbidez, hemolisis, producción
germen agresor, y por último, podremos conocer el de gas, formación de colonias y sólo se inter-
pronóstico del cuadro al conocer el tipo de germen. pretarán como negativos hasta 3 ó 4 semanas
C o m o se m e n c i o n ó , la endocarditis d e b i d a a después de la inoculación, ya que algunos
Staphylococcus aureus, hongos, e n t e r o c o c o s , gérmenes requieren para su crecimiento un
Neisseria o Salmonella tienen una evolución malig- periodo más prolongado de incubación.
na, mientras q u e , por otro lado, cuando el proceso
se d e b e a Staphylococcus epidermidis o a En presencia de endocarditis infecciosa, un
Streptocoecus viridans el pronóstico no es tan grave.
hemocultivo puede ser negativo cuando el pacien-
CARDIOLOGÍA
F i n a l m e n t e , c u a n d o por lo m e n o s e n dos
hemocultivos se aisla el mismo germen, se puede
considerar c o m o el causante d e la endocarditis. La
endocarditis puede tener origen polimicrobiano en
forma excepcional, por lo que c u a n d o se aislan
diferentes gérmenes debe pensarse primeramente
e n contaminación.
Ecocardiograma
La ecocardiografía es capaz de demostrar la pre-
sencia d e lesiones vegetantes en el 6 0 a 70 % de
pacientes c o n endocarditis infecciosa. En efecto,
el estudio ultrasónico permite el diagnóstico del
padecimiento in vivo. El ecocardiograma modo M
puede descubrir las vegetaciones mediante la pre-
sencia de ecos densos y oscilantes c o n el ciclo car-
díaco a nivel de las válvulas cardiacas (figuras 7 y
8). El ecocardiograma bidimensional puede c o n
mayor precisión conocer el tamaño forma e im-
plantación d e las lesiones vegetantes (figuras 9 y
10) las cuales se manifiestan mediante masas que
se mueven hacia adentro y afuera de los orificios
valvulares en sístole y diástole. Por otro lado, este
estudio puede descubrir la presencia de trombos
murales e n d o c a r d i o » en donde se ha injertado un FIGURA 7 Vegetaciones en la válvula mitral. ARRI-
proceso séptico o vegetaciones sésil es en prótesis BA: El ecocardiograma modo M enseña una vege-
tación valvular que distorsiona el ecocardiograma
valvulares.
mitral en sístole (flechas). ABAJO: El ecocardiogra-
ma 2-D muestra la m i s m a vegetación (flechas) in-
Es importante enfatizar que el ecocardiograma jertada en la valva anterior (eje largo paraesternal)
modo M puede evidenciar la insuficiencia aórtica
aguda que es una complicación potencial del in-
jerto infeccioso, mediante la demostración del cie- válvulas del corazón (figura 11). A pesar de q u e ,
rre precoz d e la mitral (figura 5) diagnóstico que a sin duda, el ecocardiograma se constituye e n el
menudo es muy difícil en clínica. mejor método no invasivo para el diagnóstico de
El estudio ecocardiográfico (especialmente el endocarditis infecciosa, cuando se realiza por vía
bidimensional) puede demostrar otras complica- transtorácica puede tener limitaciones importan-
ciones de la endocarditis infecciosa como la insufi- tes c o m o lo son: mala ventana acústica y la pre-
ciencia mitral aguda por ruptura d e cuerdas tendi- sencia d e material sintético muchas veces metáli-
nosas o m ú s c u l o papilar (ver capítulo de co que dificulta importantemente la visualización
VALVULOPATÍAS) c o n comunicación aorta-cavidades de las vegetaciones, tal y c o m o acontece c o n las
derechas o la formación de abscesos e n d o c a r d i o » prótesis valvulares.
(figuras 3 y 4). También el ecocardiograma puede En épocas recientes surgió el ecocardiograma
demostrar la presencia de vegetaciones en varias transesofágico que puede salvar estos inconvenien-
630 L
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
FIGURA 8 Endocar-
ditis injertada en la
válvula aórtica. Eco-
cardiograma. Se re-
gistra la válvula
aórtica (Ao) que en
sístole muestra una
apertura normal,
pero en diástole el
espacio se llena de
ecos densos produci-
dos por la existencia
de vegetaciones (veg)
tes la mayoría de las veces. En efecto, se ha de- Otra gran ventaja que tiene la ecocardiografía
mostrado que pose una sensibilidad definitivamente transesofágica es el diagnóstico de absceso peri-
más alta (entre el 9 5 y 100 %) lo mismo que su anular que aparece en el 20 al 30 % de los casos,
especificidad (98 %) para el diagnóstico de vegeta- el cual puede ser visualizado e n el 8 7 % de ellos y
ciones valvulares especialmente en presencia de sólo e n el 2 8 % por vía transtorácica.
prótesis, e n donde el ecocardiograma transtorácico A pesar de la alta confiabilidad del método para
apenas alcanza una sensibilidad del 20 al 30 % el diagnóstico de endocarditis, los hallazgos eco-
para dicho fin. cardiográficos deben acompañarse de imágenes su-
CARDIOLOGÍA
y
••1,
« 1 ~
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
4*»
CARDIOLOGÍA
• Sin evidencia de evidencia anatomopatológica 4. Siempre que sea posible, se debe adminis-
en autopsia o cirugía después de tratamiento trar el antibiótico específico para el germen
antibiótico por 4 días. causal obtenido e n el hemocultivo por el
tiempo necesario para lograr la curación. En
los C u a d r o s 2 a 7 se sintetiza el tratamiento
TRATAMIENTO de elección para endocarditis por los gér-
El objetivo del tratamiento de la endocarditis in- menes más frecuentes. La mortalidad de la
fecciosa será la erradicación completa del micro- endocarditis infecciosa sin diagnóstico m¡-
organismo infectante. Para el tratamiento de este crobiológico es doble que cuando se cono-
padecimiento d e b e n tenerse en cuenta los siguien- c e el agente causal.
tes aspectos:
5. En la mayoría de los casos es conveniente
1. Se deberán utilizar los antibióticos con ac- combinar dos antibióticos:
ción bactericida. Se considera como bacte-
a ) Para cubrir empíricamente un amplio es-
ricida a un antibiótico que es capaz de inhi-
pectro.
bir el crecimiento de un germen con una
dilución mínima durante 24 horas (la míni- b) En la necesidad de incrementar la activi-
ma concentración requerida para inhibir su dad bactericida d e los antibióticos, espe-
crecimiento es igual a la concentración que cialmente en ciertos microorganismos
reduce en el 9 9 . 9 % el número d e bacterias (enterococos, estreptococos resistentes,
de 24 horas) ya que los que sólo tienen ac- bacilos gramnegativos).
ción bacteriostática inhiben el crecimiento
de los microorganismos y permiten que los c) En infección por múltiples patógenos.
leucocitos los destruyan. Sin embargo, los
leucocitos no son capaces de penetrar e n el
Endocarditis con hemocultivo negativo
interior de las vegetaciones; ello permite la
Con el avance de las técnicas microbiológicas para
sobrevida de los gérmenes a pesar del trata-
el reconocimiento de gérmenes comunes o de los
miento; así, cuando se interrumpe la medi-
otros reconocidos c o m o poco frecuentes, en la
cación bacteriostática, las colonias de micro-
actualidad es raro que en presencia de una bacte-
organismos se multiplican n u e v a m e n t e y
remia el hemocultivo resulte negativo; la endocar-
recidiva la enfermedad. Se considera a un
ditis c o n hemocultivo negativo se presenta en el
antibiótico como bacteriostático cuando hay
2.5 al 64 %. En endocarditis injertadas en el cora-
una diferencia de 16 diluciones o más entre
zón derecho o e n pacientes en los que tienen pró-
la concentración mínima para inhibir el cre-
tesis v a l v u l a r e s , p u e d e r e s u l t a r n e g a t i v o e l
cimiento in vitro y la mínima concentración
hemocultivo;en el primer caso, porque los gérme-
para disminuir el número de bacterias e n e l
nes no pasan a la circulación sistémica hasta des-
9 9 . 9 % e n 24 horas.
pués de haber producido un infarto pulmonar,
mientras que e n el segundo por recibir tratamiento
2. La dosis de antibióticos debe ser suficiente- antibiótico previo. La endocarditis injertada en pró-
mente elevada para destruir el germen c a u - tesis cardiacas también tiene una mayor frecuen-
sante (alrededor d e 4 veces más alta de la cia de cultivo negativo. Vale la pena enfatizar que
dosis que tiene acción bactericida in vitro) y se han encontrado gérmenes que pueden no cre-
administrarse por tiempo prolongado ya que cer o hacerlo muy lentamente e n los cultivos de
los tratamientos cortos dan lugar a recaídas. sangre, lo cual puede dificultar mucho el diagnós-
tico y el manejo de la endocarditis infecciosa. En-
3 . El antibiótico deberá tener la propiedad de tre estos gérmenes se encuentran los del grupo
penetrar en la fibrina, ya que las colonias de H A C E K , Clostridium, Legionella, Brucella, Neisseria,
gérmenes se albergan en lo más profundo de Chlamydia, Mycoplasma y otros.
las vegetaciones, por lo que el bactericida
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
4J35
CUADRO 2
TRATAMIENTO A N T I B I Ó T I C O DE E L E C C I Ó N EN LA E N D O C A R D I T I S I N F E C C I O S A POR <
GÉRMENES G R A M P O S I T I V O S
CUADRO 3
T R A T A M I E N T O A N T I B I Ó T I C O D E E L E C C I Ó N E N LA E N D O C A R D I T I S I N F E C C I O S A P O R G É R M E N E S G R A M N E G A T I V O S Y H O N G O S
6
PSEUDOMONA • Piperacilina 3 g c / 4 h. Intravenosa
6
: : i
AERUGINOSA • Ceftazidina 2 g c/8 h. Intravenosa
• Imiperem 0.1 - 1 g c/6 h. Intravenosa 6
• Aztreonam 2gc/6h. Intravenosa 6
.,
• Tobramicina 1. 7 mg/kg c/8 h. Intravenosa 6
5
CUADRO 4
T R A T A M I E N T O A N T I B I Ó T I C O D E E L E C C I Ó N EN E N D O C A R D I T I S P O R E N T E R O C O C O S RESISTENTES A PENICILINA,
AMINOCLUCOSIDOS Y VANCOMICINA
Ampicilina
Ciprofloxacina
DOSIS
PEDIATRICA
100 m g c/24 hrs. Intravenosa
Ceftriaxona En una dosis
z
•
75 mg/kg c/6 h r s . Intravenosa
Ampicilina-
Sublactum
20-30 mg/kg Intravenosa
-
Ciprofluoxacina c/24 hrs. dividida •
en 2 dosis
Q
CARDIOLOGIA
CUADRO 6
E N D O C A R D I T I S I N F E C C I O S A EN PRÓTESIS TRATAMIENTO A N T I M I C R O B I A N O
I m g k g c/8hrs. Intravenosa
Gentamicina
Cuando el
Staphylococo es
resistente a Vancomicina 15 mg/kg c/12 h r s . Intravenosa
nafícilina
Se sustituye del
esquema por:
adquirirla. Si d e antemano sabemos que la bacte- cialmente si se realizan en un paciente que tiene
r e m i a p r o p i c i a d a por diversos procedimientos uno o varios factores predisponentes son los siguien-
instrumentales predispone al injerto infeccioso, es tes:
indispensable que todo sujeto predispuesto a la
enfermedad se someta a un tratamiento profilácti- 1. Procedimientos dentarios, incluyendo lim-
c o mediante la administración de antibióticos an- pieza dental.
tes del procedimiento instrumental, con el objeto
de i ombatir la bacteremia y evitar el injerto infec- 2. Amigdalectomía y adenoidectomía.
cioso dentro del corazón. 3. Procedimientos quirúrgicos que invaden la
Se recomienda administrar profilaxis en las si- mucosa dental o bronquial.
guientes condiciones:
4 . Broncoscopia.
1. Prótesis valvulares o material protésico e n el
5. Ecleroterapia para várices esofágicas.
corazón o grandes vasos.
6. Dilatación esofágica.
2. Antecedente d e endocarditis infecciosa aun
e n ausencia d e cardiopatía. 7. Colecistectomía.
640
ENDOCARDITIS INFECCIOSA
CUADRO 7
E N D O C A R D I T I S I N F E C C I O S A C O N H E M O C U L T I V O NEGATIVO X I N C L U Y E BARTONELLA)
TRATAMIENTO A N T I M I C R O B I A N O
PRÓTESIS
+
Rifampicina 300 mg c/8 h r s . Intravenosa
+
Cefepime 2 gm c/8 hrs. Intravenosa
Los esquemas propuestos son los siguientes: seis horas después. El mismo esquema se
puede aplicar por vía intramuscular o in-
1. En procedimiento dentales, cirugía y/o en-
travenosa e n pacientes que no pueden
doscopia de vías respiratorias superiores:
recibir medicamentos por vía bucal.
a) A m o x i c i l i n a . 3 g por vía bucal una hora
d) A m p i c i l i n a . 2 g por vía intramuscular o
antes del procedimiento. 1.5 g, seis ho-
intravenosa, 30 minutos antes del proce-
ras después de la primera dosis.
dimiento y 1 g seis horas después.
b) E r i t r o m i c i n a . 1 g por vía bucal, dos ho-
e) V a n c o m i c i n a . 1 g administrado por vía
ras antes del procedimiento y 5 0 0 mg seis
intravenosa, una hora antes d e l proce-
horas después. dimiento (en casos d e muy alto riesgo o
c) C l i n d a m i c i n a . 300 mg por vía bucal, una alergias a la penicilina). No se requiere
hora antes del procedimiento y 150 mg otra dosis.
4 641
4—
CARDIOLOGÍA
CUADRO 8
S. A u r e u s o coagulasa (-),
Endocarditis tardía en prótesis
Streptococo v i r i d a n s ,
Enterococo, hongos,
Corynebacterium
CUADRO 9
VEGETACIONES
D I S F U N C I Ó N VALVULAR
I n s u f i c i e n c i a m i t r a l aguda
I n s u f i c i e n c i a a ó r t i c a aguda
I n s u f i c i e n c i a c a r d i a c a refractaria
Ruptura o perforación v a l v u l a r
EXTENSIÓN PERIVALVULAR
D e h i s c e n c i a valvular
Ruptura o fistulización
A b s c e s o m i o c á r d i c o d e l anillo v a l v u l a r
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H
4^
Capítulo 19 Pericarditis
"El espíritu analítico, la observación saga%¡ eljuicio
que interpreta y valora, esto es la base. Ea aptitud
para ascender a las ideas generales y hacer obra de
síntesis, ésta vendrá más tarde con la madure^ del
pensamiento "
E
l pericardio está formado por dos membra- •
FISIOLOGIA
nas que a manera de saco envuelven el cora-
z ó n ; la membrana adyacente al corazón se Los ligamentos que sostienen al pericardio sujetan
denomina pericardio visceral y está constituida por al corazón y evitan su movilidad excesiva con los
una capa d e células mesoteliales que se adhiere cambios de posición del c u e r p o . Asimismo, el
firmemente al epicardio y se refleja sobre el origen pericardio reduce la fricción entre el corazón y los
de los grandes vasos; a la capa externa se le nom- órganos que lo rodean y proporciona una barrera
bra pericardio parietal y es una membrana fibrosa, contra la propagación de infecciones y procesos
compuesta por fibras de colágena intercaladas con malignos d e órganos a d y a c e n t e s . El papel d e l
abundantes fibras elásticas; esta capa es adyacen- pericardio e n la regulación de la circulación ha
te al pericardio visceral y entre ambas se encuen- causado controversia dado que la ausencia congé-
tra un espacio virtual que contiene pequeñas can- nita de pericardio no ha sido asociada con trastor-
tidades d e líquido (alrededor de 50 ce), el cual al nos importantes de la función cardiaca. Sin em-
parecer es un ultrafiltrado del plasma. bargo, existe evidencia en humanos que sugiere
que el pericardio juega un papel importante e n : 1)
El pericardio está unido por medio de fuertes
la distribución de las fuerzas hidrostáticas del co-
ligamentos e n su porción anterior al esternón y al
razón, 2) la prevención de la dilatación cardiaca
apéndice xifoides, en su parte posterior a la c o -
aguda y 3) el acoplamiento de los dos ventrículos
lumna vertebral y en su región inferior al diafragma.
durante la diástole.
El pericardio recibe nutrición a través de peque-
ñas arterias q u e son ramas de la aorta, de la
mamaria interna y d e las arterias frénicas. Está Distribución d e las fuerzas hidrostáticas del
inervado por los nervios vago, recurrente laríngeo corazón
izquierdo y plexo esofágico; a s i m i s m o , recibe La presión intrapericárdica normal es igual a cero
inervación simpática d e los plexos estelar, cardia- o negativa; este hecho es importante ya q u e per-
co, aórtico y diafragmático y del primer ganglio
mite comprender la influencia que ejerce la pre-
CARDIOLOGÍA
1. PERICARDITIS VIRAL
Esta variedad de pericarditis aguda quizá sea la más
frecuente, aparece preferentemente e n sujetos jó-
venes del sexo masculino y está en relación con
infecciones por virus de las familias coxsakie b, echo,
influemae, adenovirus, mononucleosis, etc.
El cuadro clínico se caracteriza por la instala-
ción de un proceso infeccioso (ataque al estado
general, fiebre y mialgias) al cual se le suman los
síntomas que produce la inflamación pericárdica
(vide infra).
2. PERICARDITIS POSIMFARTO
El infarto del miocardio transmural puede compli-
carse con pericarditis aguda. Dicha pericarditis ge-
neralmente aparece en los primeros días de evolu-
F I G U R A 1 La curva de presión intraventricular de- ción del infarto del miocardio.
recha enseña en su porción diastólica la imagen es Es importante tener en cuenta esta posibilidad
"raíz cuadrada"; nótese que la presión diastólica para no clasificar un dolor precordial d e tipo peri-
inicial ( d i ) que es de 5.8 m m H g (dip) es seguida
cárdico como angina residual posinfarto, cuyo p r o
de un rápido ascenso hasta llegar a un nivel en el
cual se mantiene elevada (plateau) hasta el final de nóstico y tratamiento son diferentes. El curso de
la diástole (d2) en donde la presión es de 13 m m H g : este tipo d e pericarditis es favorable hacia la cura-
imagen de "dip y plateau" ción en la gran mayoría de los casos.
4™
CARDIOLOGÍA
VH
w
FIGURA 2 Interde-
pendencia ventricu-
lar. La c o n s t r i c c i ó n
pericárdica condicio-
na un comportamien-
to peculiar de los flu-
jos de entrada de las
cámaras cardíacas y
del septum ventricu-
lar. En inspiración: Se
Inspiración Espiración incrementa el llenado
del ventrículo dere-
cho ( V D ) , se reduce el del ventrículo izquierdo (VI) y por ende el flujo se aleja de las venas hepáticas (VH)
y se reduce el flujo diastólico de las venas pulmonares (VP). El septum interventricuiar se desplaza hacia la
izquierda: aumenta el diámetro del V D y se reduce el del VI. En espiración: Se obtiene el efecto exacta-
mente contrario: se incrementa e l llenado del VI y se reduce el del VD. Se reduce el flujo en las V H , incluso
hay reflujo diastólico y aumenta el flujo de las VP, el septum se desplaza hacia la derecha y aumenta el
diámetro del VI y se reduce el del V D . (Tomado de OH J.L. y c o l . ; Am Coll Cardiol, 1994;23:154-162
6 5 0 ^
P E R I C A R D I T I S
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CARDIOLOGÍA
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ECG
I
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, ,
652
PERICARDITIS
aparecer secundarios aun d e r r a m e pericárdi- ba en casi todas las derivaciones. Estos cambios al
co dependen fundamentalmente de dos even- parecer son debidos a q u e se genera una corriente
tualidades: de lesión subepicárdica producida por la inflama-
ción del epicardio (epicarditis).
1. La cantidad de líquido acumulado e n el saco
Esta alteración puede confundirse c o n los cam-
pericárdico.
bios producidos por un infarto del miocardio en
2. L a v e l o c i d a d c o n q u e se a c u m u l e d i c h o evolución. Los puntos q u e sirven para el diagnósti-
líquido. co diferencial s o n :
I —A-
~~::\r
en V1 y aVR
653
CARDIOLOGÍA
FIGURA 5 Derrame pericárdico. Radiografía de tórax. A la Izquierda puede verse una gran cardiomegalia
("imagen en garrafal con pérdida de los perfiles normales del corazón que sugiere derrame pericárdico.
A la derecha, la extracción del líquido pericárdico y la inyección de aire en la cavidad vacía revela la
dimensión real del corazón, y con las flechas se demuestra la delgada capa pericárdica que delimitaba la
cardiomegalia por la presencia de gran derrame. (Cortesía del Dr. Luis Mañero)
PERICARDITIS
F I G U R A 7 Gran derrame pericárdico. Ecocardiograma. Pat (pared anterior del tórax), vd (ventrículo dere-
cho), ao (aorta), ai (aurícula izquierda), v m (válvula mitral), SIV (septum interventricuiar), pp (pared pos-
terior), per (pericardio), dp (derrame pericárdico). El "barrido" ecocardiográfico desde la base (aorta y
aurícula izquierda) hasta la punta, demuestra la separación progresiva de las paredes del corazón (ante-
rior y posterior) de la pared anterior del tórax (pat) y del pericardio posterior (per) respectivamente,
producida por la presencia de una gran cantidad de líquido que rodea a la viscera cardiaca. Obsérvese la
distorsión que se produce en la motología de las estructuras intracavitarias (válvula mitral y septum inter-
ventricuiar). Nótese líquido de derrame incluso por detrás de la aurícula izquierda
vm
Si hay compresión del corazón por e l líquido cho es total (figura 1 2 ) ; asimismo, el colapso sistó-
pericárdico se notará que durante la inspiración el lico d e la pared auricular derecha (figura 13) tiene
ventrículo derecho incrementa su diámetro (au- el mismo significado.
menta el retorno venoso) a expensas de disminuir Es importante hacer notar que el ecocardiogra-
el del ventrículo izquierdo el cual no puede expan- m a puede dar un falso diagnóstico de derrame
dirse porque el líquido lo comprime. Por el contra- pericárdico, especialmente en pacientes muy obe-
rio, durante la espiración (disminuye el retorno ve- sos quienes frecuentemente tienen aumento de la
noso al corazón), se reducen las dimensiones del grasa pericárdica la cual se manifiesta, al igual que
ventrículo derecho y aumentan las del izquierdo el líquido, por un espacio libre de ecos que rodea
figura 9) (interdependencia ventricular). al corazón (figura 15) hecho que además es causa
El ecocardiograma bidimensional además nos frecuente de cardiomegalia radiológica ficticia, y
ofrece la información c o n mayor precisión, no sólo que tanto las cavidades cardiacas como el espesor
d e la cantidad del derrame, sino también d e su d e sus paredes son normales.
localización y distribución (figuras 10 y 11).
C o n respecto al diagnóstico de taponamiento TAPONAMIENTO CARDIACO
cardiaco, el estudio bidimensional puede ofrecer
Cuando el derrame pericárdico llega a ser impor-
dos signos útiles: uno es el del colapso diastólico
tante, impide la dilatación diastólica del corazón y
del ventrículo d e r e c h o , signo q u e se observa es-
con ello el llenado ventricular. El impedimento al
pecialmente en la c á m a r a de salida del ventrícu-
llenado diastólico trae consigo dos consecuencias:
lo derecho cuya pared anterior se desplaza hacia
atrás en la protodiástole (figura 11) incluso en oca- 1. Elevación de la presión venosa sistémica, tan-
siones el colapso diastólico del ventrículo dere- to por el impedimento mecánico al llenado
«4,
PERICARDITIS
F I G U R A 9 Taponamiento
cardiaco. Ecocardiograma
modo M. En i n s p i r a c i ó n
(insp) aumenta e l diáme-
tro del ventrículo derecho
a expensas del desplaza-
miento del septum inter-
ventricuiar y la consiguien-
te reducción del diámetro
del ventrículo izquierdo. El
fenómeno contrario suce-
de en espiración (esp). Nó-
tese el derrame pericárdi-
co (dp) tanto en el saco
pericárdico posterior
como anterior (interdepen-
dencia ventricular)
F I G U R A 10 Derrame pe-
ricárdico. Ecocardiograma
bidimensional. El eje largo
paraesternal m u e s t r a la
657
CARDIOLOGÍA
a) Turgencia yugular.
b) Plétora de las venas de la cara.
c) I m p o r t a n t e e l e v a c i ó n d e la p r e s i ó n
venosa central.
d) Congestión pasiva del hígado
2. Hipotensión arterial:
a) Colapso circulatorio.
b) Obnubilación mental.
3. Reacción adrenérgica:
a) Taquicardia.
b) Diaforesis.
c) Piloerección.
d) Palidez.
e) Oliguria.
F I G U R A 13 Tapona-
miento cardiaco. El eco-
cardiograma bidimen-
sional ( a p r o x i m a c i ó n
apical de 4 cámaras)
muestra el colapso dias-
tólico total del ventrícu-
lo derecho producido
por compresión del de-
rrame sobre el corazón
en un caso de tapona-
miento cardiaco. (Corte-
sía del Dr. David Huerta)
F I G U R A 14 Taponamienio cardia-
co. M e d i a n t e la a p r o x i m a c i ó n
apical de cuatro cámaras se pue-
de observar el corazón rodeado
de d e r r a m e p e r i c á r d i c o ( D P ) .
PULSO PARADÓJICO DE KUSSMAUL (figura 16) sistémico al corazón disminuye importante mente;
durante la inspiración se fuerza la entrada de san-
Normalmente, durante la inspiración aumenta el
gre al ventrículo derecho por el efecto de "suc-
retorno venoso a cavidades derechas y disminuye
c i ó n " de la presión negativa del tórax, el incre-
hacia las cavidades izquierdas. Este hecho hace que
e n condiciones fisiológicas se note una discreta mento de tamaño del ventrículo derecho se hace a
disminución del gasto cardíaco y por lo tanto de la expensas de desplazar al septum interventricuiar
presión arterial durante la inspiración (generalmen- hacia el ventrículo izquierdo que no puede a u -
te menor de 8 m m H g ) . mentar su tamaño por la compresión que ejerce el
líquido de derrame (figuras 9 y 13), por esta ra-
C u a n d o el derrame pericárdico, por su gran
cantidad o por su rapidez de acumulación compri- z ó n , e n el momento inspiratorio se reduce consi-
m e al v e n t r í c u l o d e r e c h o , el r e t o r n o v e n o s o derablemente el volumen del ventrículo izquier-
4
CARDIOLOGÍA
vi a) Traumatismo torácico.
b) Consecutivo a cirugía cardiaca.
c) Hemodiálisis crónica.
d) Uso de anticoagulantes.
e) Pericarditis purulenta o amibiana.
f) Ruptura cardiaca o d e aneurisma aórtico.
g) Padecimientos malignos primarios (mesote-
F I G U R A 15 Grasa pericárdica (GP). La aproxima- lioma) o metastásico.
ción subcostal (corte de cuatro cámaras) muestra
una separación entre el corazón y el pericardio ocu- h) Heridas del corazón por proyectiles d e arma
pada por grasa pericárdica ( G P ) , la cual muy fre- de fuego.
cuentemente se manifiesta como un espacio libre
de ecos y se confunde con derrame pericárdico;
asimismo, es causa de cardiomegalia radiológica DIAGNÓSTICO
C u a d r o clínico
El diagnóstico de taponamiento cardiaco es clíni-
do y el gasto sistémico, de tal suerte que el fenó- co (hipertensión venosa, hipotensión arterial, pul-
meno fisiológico se exagera, dando c o m o resulta- so de Kussmaul y reacción adrenérgica) por lo que
do que la disminución d e la amplitud del pulso y el cuidadoso estudio mediante la exploración físi-
d e la presión arterial sean muy marcadas durante ca orienta definitivamente al diagnóstico.
el momento inspiratorio (la presión sistólica des-
c i e n d e más de 10 mmhg). Este fenómeno (pulso Radiografía s i m p l e d e tórax
paradójico de Kussmaul), debe buscarse cuando se Es muy útil al encontrar gran cardiomegalia c o n
sospecha taponamiento cardiaco, ya que está pre- "imagen en garrafa" (figura 5 ) , la cual es muy va-
sente en prácticamente todos los casos. liosa, más todavía si se cuenta c o n radiografías pre-
Debe tenerse en cuenta que cuando el estado vias que permiten demostrar la evolución del cre-
de taponamiento cardiaco es muy grave el pulso cimiento de la silueta cardiaca.
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PERICARDITIS
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CARDIOLOGÍA
FIGURA 19 Interdependencia ventricular. Flujo transmitral, respiración. Nótese que la velocidad del punto E es
mayor en inspiración (65 cnvs) que en espiración (52 c m s ) , lo que no sucede en miocardiopatía restrictiva
FIGURA 20 Punción pericárdica. El registro electrocardiográfico durante una punci6n pericárdica enseña
el momento en que la punta de la aguja de punción toca al epicardio (flecha), cuando en el trazo se
evidencia una zona de lesión que desaparece inmediatamente que se retira la aguja y deja de hacer
contacto con el corazón. Este registro sirve de guía para la punción pericárdica
d) Hemorrágica (neoplasias, pericarditis tuber- tratamiento quirúrgico, sea por falta de mejoría del
culosa, ruptura d e corazón o aorta, hemo- cuadro clínico o por recidiva. El drenaje quirúrgi-
pericardio traumático. co se requiere con mayor frecuencia e n el tapona-
miento c a r d i a c o por causas traumáticas. C a b e
El análisis microscópico y cultivo de líquido mencionar que en el 9 5 % de los casos puede ex-
podrán confirmar la naturaleza bacteriana, amibia- traerse el líquido pericárdico cuando la punción
na o neoplásica del derrame pericárdico. se realiza c o n guía ecocardiográfica; c o n ella se
evitan las complicaciones graves y se asegura la
2. Fines terapéuticos extracción del líquido.
La evacuación de un derrame pericárdico es una
medida de urgencia y salvadora en el taponamiento
TECNICA
cardiaco, ayuda e n forma definitiva a la mejor evo-
lución de la pericarditis bacteriana o amibiana. En La mejor vía de acceso para efectuar una pun-
estos casos se prefiere dejar un drenaje continuo ción pericárdica es la subxiíoidea. El m é d i c o ten-
de la cavidad pericárdica por medio d e la realiza- drá que estar vestido c o n todos los implementos
ción d e una ventana pericárdica, e n el quirófano, para realizar un procedimiento quirúrgico estéril.
en donde además se podrá tomar cultivo y biopsia Se realiza una escrupulosa asepsia y antisepsia de
del pericardio. Se ha demostrado que el tapona- la región mitad superior del a b d o m e n y mitad in-
miento cardiaco se puede resolver e n aproxima- ferior d e l tórax) la cual es delimitada mediante
damente el 6 0 % de los casos c o n tan sólo pun- campos estériles. Se aplica una pequeña dosis de
ción pericárdica. El resto de los pacientes requieren un anestésico local e n el sitio donde se hará la
662
PERICARDITIS
punción (lidocaína 20 a 50 mg). Se utiliza una aguja tis reumática, generalmente tienen buen pro-
larga calibre 16 a 1 8 con bisel corto, la cual se nóstico. Rara vez se complican con tapona-
conecta a una jeringa de 50 c e . a través de una miento cardiaco y no dejan secuelas. La peri-
llave d e tres vías. carditis viral puede tener recaídas semanas o
La aguja se introduce por debajo y a la izquier- meses después de desaparecido el primer bro-
da (2 cm) del apéndice xifoides dirigiéndola hacia te y p u e d e n a c o m p a ñ a r s e d e m i o c a r d i t i s
la región medioclavicular izquierda con un ángulo (miopericarditis).
de 4 5 ° respecto a la pared abdominal, hasta alcan-
zar el saco pericárdico a través del diafragma. La b) Las pericarditis infecciosas y parasitarias son
punción pericárdica siempre deberá ser guiada con muy graves, evolucionan rápidamente hacia el
control electrocardiográfico (figura 18) y de prefe- taponamiento cardiaco, que si no es drenado
rencia también ecocardiográfico, que nos permiti- culmina con la muerte; asimismo, no es raro
rá evacuar el líquido de derrame a través d e la je- que dejen constricción pericárdica después de
ringa conectada a la llave d e tres vías, sin lacerar o terminada la fase aguda.
perforar la pared ventricular. Para obtener el regis-
c) El taponamiento por ruptura cardiaca o de un
tro electrocardiográfico se conecta la derivación " V "
aneurisma aórtico es fatal e n la mayoría de los
del electrocardiógrafo a la llave de tres vías, y e n
casos, aun c u a n d o e n la literatura hay infor-
otra más estará conectada a una solución salina.
mes aislados de pacientes q u e han sido salva-
dos mediante oportunas intervenciones qui-
rúrgicas de urgencia.
RIESGOS
d ) El pronóstico de las pericarditis neoplásicas en
A pesar de que la punción pericárdica es un proce-
general es malo porque muestran evolución
dimiento técnicamente sencillo, las complicaciones
desfavorable relativamente a corto plazo, a
potenciales a que puede dar lugar son muy graves,
pesar del tratamiento quimioterápico.
por lo que este procedimiento debe ser llevado a
cabo por manos experimentadas e n una sala d e
terapia intensiva, o mejor todavía, e n un quirófano T R A T A M I E N T O D E LA P E R I C A R D I T I S A G U D A
con registro electrocadiográfico y ecocardiográfi-
co, así como monitorización tanto d e la presión a) El tratamiento deberá ser etiológico siempre
venosa central como d e la presión arterial; se debe que sea posible; el tratamiento antibiótico ade-
tener disponible un desfíbrilador. Los peligros po- cuado en las pericarditis infecciosas, antifímico
tenciales de una punción pericárdica s o n : en las tuberculosas, antiamibiano c u a n d o se
debe a este parásito, quimioterápico e n las pe-
a) R e a c c i ó n vagal (bradicardia, hipotensión ricarditis neoplásicas, inhibidores de la res-
arterial, náusea, vómito, sialorrea y hasta puesta inmune en las enfermedades de la co-
asistolia ventricular). lágena, etc.
1. Adelgazamiento. 4. F i b r i l a c i ó n auricular. Se e n c u e n t r a e n
aproximadamente una cuarta parte d e los
2. Atrofia muscular.
casos y probablemente se debe a la impor-
3. Otros signos de desnutrición crónica. tante elevación de la presión intrauricular,
con la distensión del miocardio auricular y
Electrocardiograma (figura 22) la dilatación d e estas cavidades.
Los cambios electrocardiográficos en la pericardi-
tis constrictiva no son patognomónicos, sin embar-
Radiografía d e tórax
go, a continuación se enumeran los signos que c o n
El estudio radiológico del corazón puede brindar
mayor frecuencia aparecen e n este padecimiento:
alteraciones que son inespecíficas, tales c o m o sig-
1. Complejos de bajo voltaje. Esta alteración nos d e hipertensión venocapilar de grado varia-
se encuentra en una tercera parte de los c a - ble, dilatación de la v e n a cava superior o ausen-
sos y traduce trastorno del medio conductor. cia de cardiomegalia, pero puede ayudarse c o n
signos patognomónicos d e l p a d e c i m i e n t o ; e n
2. Alteraciones de la repolarización ventricu- efecto, el hallazgo d e calcificación pericárdica e n
lar. Es muy frecuente la presencia de una conjunto c o n un cuadro clínico sugestivo, esta-
imagen de isquemia subepicárdica especial- blece c o n gran certeza el diagnóstico d e pericar-
mente e n las derivaciones precordiales. Esta ditis constrictiva.
alteración traduce la extensión del proceso
inflamatorio de la membrana pericárdica Es i m p o r t a n t e e n f a t i z a r q u e este hallazgo
hacia el epicardio ventricular. radiológico puede existir sin q u e haya constric-
ción p e r i c á r d i c a , e n c u y o c a s o , la calcificación
3. Signos de crecimiento auriculares. Apare- pericárdica no necesariamente h a c e el diagnós-
cen comúnmente (en cerca d e la mitad de tico de pericarditis. La calcificación pericárdica
los casos) en la pericarditis constrictiva. Este d e b e buscarse intencionalmente en las tres po-
hecho se encuentra en relación con la so- siciones clásicas del estudio radiológico del c o -
brecarga hemodinámica que soportan las razón (figura 23) (aparece e n el 50 % d e los c a -
PERICARDITIS
FIGURA 23 Calcificación pericárdica. Radiografías oblicuas, derecha e izquierda del tórax que demuestra
una calcificación pericárdica señalada con las flechas
sos), p u e d e hacerse evidente en cualquiera d e que aparece en 0 . 1 0 a 0.12 segundos después del
los bordes del c o r a z ó n . c o m p o n e n t e aórtico d e l II r u i d o . Su carácter
"chasqueante" de alta frecuencia y su tiempo de
Fonomecanocardiograma aparición (coincide con el punto F del apexcar-
El estudio fonomecanocardiográfico demuestra la diograma) permiten su diferenciación del chasqui-
presencia del chasquido protodiastólico de Lyan do de apertura mitral (aparece más precozmente)
667
CARDIOLOGÍA
y del lll ruido que es de baja frecuencia (figura 2 1 ) dinámicos que ocurren en las cavidades cardiacas al
y por otro lado, el flebograma hace objetivo el diag- ser el septum ¡nterventricular la única estructura
nóstico de hipertensión venosa sistémica (latido que se contrae libremente, mientras q u e el resto
sistólico yugular) debido al impedimento del lle- de las paredes ventriculares se encuentran aprisio-
nado ventricular (colapso " y " profundo (figura 24). nadas (figura 2 5 ) .
La curva diastólica del apexcardiograma se a l - C o m o se puede apreciar en la figura 2 5 , la con-
tera en forma muy similar a c o m o lo hace la curva tracción auricular derecha distiende al ventrículo
de presión intraventricular (vide infra). Se puede derecho y desplaza al septum hacia atrás; e n se-
obtener la típica morfología d e "raíz c u a d r a d a " guida, la c o n t r a c c i ó n de la aurícula izquierda
("dip y p l a t e a u " ) , que demuestran el impedimen- distiende al ventrículo izquierdo y produce un des-
to al llenado diastólico, alteración hemodinámica plazamiento del septum hacia adelante.
que caracteriza al padecimiento (figura 2 1 ) .
Ecocardiograma bidimensional
Ecocardiograma El ecocardiograma bidimensional puede mostrar
A u n cuando algunos ecocardiografistas difunden un pericardio engrosado y poco móvil (figura 25).
con entusiasmo. El método para cuantificar el es- Sin embargo, los datos mas relevantes son la pre-
pesor del pericardio engrosado, en realidad no en sencia d e dilatación de ambas aurículas con ven-
todos los casos es cierto, y el método es muy inse- trículos pequeños, c o n desplazamiento brusco del
guro para certificar el diagnóstico de pericarditis septum interventricuiar hacia el lado izquierdo
constrictiva, aunque e n algunos casos sí es posible durante la protodiástole y protrusión del tabique
demostrarlo (figura 2 5 ) . interauricular hacia e l lado izquierdo durante la
inspiración; puede haber interrupción brusca del
Ecocardiograma Modo M llenado ventricular y es característica la dilatación
La verdadera utilidad del Ecocardiograma M o d o de las venas hepática y cava inferior, así como el
M para realizar el diagnóstico de pericarditis cons- pobre o nulo colapso de la vena cava inferior en
trictiva es q u e permite valorar el movimiento del inspiración.
septum interventricuiar, e l cual incluye un movi-
miento brusco, posterior, durante la protodiástole Ecocardiografía Doppler
que coincide con el chasquido pericárdico y un El estudio del flujo sanguíneo en las vías de entra-
movimiento septal posterior durante la sístole au- d a de ambos ventrículos permite reconocer la pre-
ricular; estos hallazgos reflejan los cambios hemo- sencia de interdependencia ventricular (figura 2 )
que es una característica fisiopatológica de la peri-
carditis constrictiva que permite diferenciarla de la
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FLEBO
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miocardiopatía restrictiva simétrica cuyo cuadro piratorias en la velocidad del flujo con Doppler en
clínico puede ser idéntico al de constricción peri- pacientes con pericarditis constrictiva; utilizando
cárdica. En efecto, como se mencionó previamen- Doppler transtorácico encontraron una diferencia
te, e l septum interventricuiar es la única pared del respiratoria d e 25 % comparada con menos de 15 %
corazón que se encuentra libre de constricción d e e n pacientes con miocardiopatía restrictiva. Por su
tal manera que con la inspiración, aumenta el lle- parte, Klein y colaboradores informaron una rela-
nado del ventrículo derecho; lo que aumenta la ción de flujo sistólico/diastólico mayor de 0.65
valocidad del llenado protodiastólico (aumenta el durante la inspiración y un %E para el flujo diastó-
punto E del flujo transtricuspídeo) y simultánea- lico mayor d e 4 0 % en pacientes con pericarditis
mente se reduce e l volumen de llenado del ven- constrictiva, así c o m o también un cambio d e 1 8 %
t r í c u l o i z q u i e r d o , p o r lo q u e la v e l o c i d a d en el tiempo de relajación isovolumétrica entre la
protodiastólica (punto E) d e l flujo transmitral se espiración y la inspiración en la pericarditis cons-
reduce drásticamente con la inspiración (figuras trictiva y 3 % de cambio e n la miocardiopatía res-
18 y 19-A), por el contrario, con la espiración se trictiva (figuras 2 , 1 8 y 19).
reduce el llenado del ventrículo derecho y con ello,
El mecanismo de las variaciones del flujo du-
la velocidad del punto E del flujo transtricuspídeo.
rante la respiración es el mismo señalado previa-
Por el contrario, aumenta el llenado del ventrículo
mente de interdependencia ventricular causada por
izquierdo y con ello la velocidad del punto E del
la constricción pericárdica que aisla las cámaras
flujo transmitral con la espiración (figuras 1 8 y 19-
cardiacas (pero no las venas pulmonares ¡ntratorá-
A). C u a n d o no hay inierdependencia ventricular,
cicas) d e los cambios de la presión intratorácica
como sucede en la miocardiopatía restrictiva si-
durante la respiración, la cual además se exagera a
métrica, la velocidad del punto E del flujo transmi-
causa de las limitaciones del espacio intrapericár-
tral no sufre las variaciones anotadas (figura 19-B).
dico. Estos dos factores ocasionan las elevadas va-
riaciones d e flujo medido por Doppler e n las ve-
Ecocardiografía transesofágica nas pulmonares durante la respiración. D e esta
manera, es posible diferenciar la pericarditis cons-
Varios autores han investigado la utilidad de la
trictiva de la miocardiopatía restrictiva durante la
ecocardiografía transesofágica, para analizar el pe-
respiración por una relación venosa pulmonar
ricardio. Klein y colaboradores informaron exce-
sistólica/diastólica más alta y una mayor variación
lente correlación entre la ecocardiografía transe-
del flujo diastólico venoso pulmonar. Estos hallaz-
sofágica y las imágenes obtenidas c o n resonancia
gos demuestran que la evaluación del flujo venoso
magnética para evaluar la distribución del engro-
pulmonar mediante registro Doppler a través de
samiento p e r i c á r d i c o . Los resultados de d i c h o
ecocardiografía transesofágica constituye un mé-
estudio sugieren que e n segmentos adecuadamen-
todo muy útil para diferenciar la pericarditis cons-
te visualizados, el ecocardiograma transesofágico
trictiva de la miocardiopatía restrictiva simétrica.
puede demostrar aumento e n el grosor d e l peri-
cardio de alrededor de un milímetro en c o m p a -
ración c o n el estándar.
Doppler tisular
Finalmente, aunque no todos los pacientes con C o m o ya se ha mencionado, la pericarditis cons-
engrosamiento pericárdico presentan constricción trictiva se asocia fundamentalmente a dos trastor-
su presencia en un enfermo con un cuadro clínico nos: uno anatómico y el otro funcional. El anató-
de pericarditis constrictiva puede ayudar para es- mico consiste básicamente e n un engrosamiento
tablecer el diagnóstico; por el contrario la demos- pericárdico, mientras que el trastorno funcional es
tración de un pericardio c o n grosor normal habi- el impedimento al llenado ventricular. Reciente-
tualmente excluye el diagnóstico de constricción. mente se ha utilizado el Doppler tisular c o m o un
Por otra parte, la ventana transesofágica permi- método adicional para evaluar el trastorno funcio-
te evaluar c o n técnica Doppler el flujo e n venas nal de la pericarditis constrictiva y diferenciar esta
pulmonares y a través de la válvula mitral, infor- entidad de la miocardiopatía restrictiva, basado en
mación importante porque refleja la dinámica d e el hecho de que las propiedades mecánicas elásti-
llenado del ventrículo y la aurícula izquierdos. Los cas del miocardio se encuentran preservadas en la
registros del flujo venoso pulmonar se pueden ob- primera. Con este método se mide la velocidad de
tener tanto aproximaciones transtorácicas como por acortamiento del plano longitudinal obtenido a
imágenes transesofágicas. Hatle y colaboradores partir del movimiento del anillo mitral. En efecto,
fueron los primeros e n describir las variaciones res- el desplazamiento del anillo mitral refleja la inten-
4*69
CARDIOLOGÍA
sidad d e acortamiento d e las fibras miocárdicas en como aumento en el llenado de los ventrículos al
el plano longitudinal y dado que la enfermedad inicio de la diástole. La falta de visualización de la
miocárdica afecta el porcentaje de relajación ven- pared posterolateral del ventrículo izquierdo me-
tricular izquierda, la determinación directa de las diante T A C sugiere fibrosis o atrofia miocárdica
velocidades de expansión puede ser útil para dife- coexistentes que generalmente se asocian a malos
renciar restricción de constricción. resultados post-pericardiectomía.
Cateterismo cardiaco
Las alteraciones hemodinámicas encontradas en
estos enfermos, son característicos y dependen de
los cambios fisiopatológicos que impone la cons-
tricción pericárdica:
igual que con la TAC mediante R M N es posible obte- b) Las presiones de la aurícula derecha y capi-
ner información acerca de otras estructuras que su- lar pulmonar (en relación con la aurícula iz-
fren cambios secundarios a las constricción, como quierda) se encuentran elevadas en cifras
son: dilatación de la aurícula derecha, de las venas muy parecidas, dicha alteración es conse-
cavas inferior y superior y de las venas hepáticas. cuencia del impedimento al llenado ventri-
FIGURA 28 Pericarditis constrictiva. La tomografía axial computada del corazón enseña el engrosamiento
de la capa pericárdica (A) que se señala con una flecha. (B) El estudio demuestra la calcificación y engro-
samiento del pericardio a nivel de la región apical del ventrículo izquierdo. (Cortesía del Dr. Yuki Kimura.
Unidad radiológica. Clínica Londres y Dr. David Huerta, Hospital Central Militar)
CARDIOLOGÍA
cular (figura 29). La curva d e la aurícula de- lineal (figura 27) y axial computarizada del tórax
recha adopta una forma en " M " por el des- (figura 28-A) y la R M N (figura 2 8 - B ) . Sin embar-
censo " X " (sistólico) y el descenso " Y " (pro- go, la ausencia de calcificación pericárdica no des-
todiastólico) (figura 29). carta dicho diagnóstico, por lo que el ecocardio-
grama se constituye e n el estudio más útil para
c) La presión arterial pulmonar generalmente establecer el diagnóstico diferencial (figuras 1 8 , 1 9
se encuentra e n cifras normales o ligeramen- y 26). En efecto, si las cavidades ventriculares se
te elevada (ver F I S I O P A T O L O G Í A ) . encuentran dilatadas hay signos d e falla contráctil
d) El gasto cardiaco se puede encontrar nor- y de hipertensión telediastólica, el cuadro clínico
mal o disminuido. corresponde a insuficiencia cardiaca congestiva que
puede ser debida a una valvulopatía " m u d a " , a
e) La construcción de curvas d e función ven- infarto del miocardio o a miocardiopatía dilatada;
tricular en estos enfermos demuestra que el en cualquier caso, el ecocardiograma orientará ha-
corazón funciona en la porción ascendente cia el diagnóstico definitivo. La dilatación de las
de la curva. La imposibilidad de aumentar cavidades ventriculares traducirá un aumento del
su volumen diastólico condiciona la dismi- volumen y la presión diastólica por la utilización
nución d e su gasto sistólico. En otras pala- del mecanismo de Frank-Starling para compensar
bras, la función ventricular es " i n a d e c u a d a " la falla contráctil del corazón. Si por otro lado, las
(ver F I S I O P A T O L O G Í A ) . cavidades ventriculares son normales, el cuadro
congestivo no se debe a insuficiencia cardiaca, sino
a un síndrome de impedimento al llenado diastó-
D I A G N Ó S T I C O D I F E R E N C I A L (figura 30) lico ventricular. Las dos posibilidades serán peri-
carditis constrictiva o miocardiopatía restrictiva. El
Ante un paciente con edema generalizado, de evo- diagnóstico diferencial se establecerá primeramente
lución crónica que muestra manifestaciones clíni- investigando la semiología del movimiento septal
cas de hipertensión venosa sistémica y pulmonar, con ecocardiograma modo M (figura 26) (caracte-
el diagnóstico diferencial se debe establecer entre rístico e n la pericarditis constrictiva y sin ninguna
tres entidades: pericarditis constrictiva, miocardio- semiología particular e n la miocardiopatía) así
patía restrictiva o insuficiencia cardiaca. como las características del flujo transmitral con
La radiografía del tórax sirve en cuanto puede registro d e Doppler pulsado cuyo comportamien-
mostrar calcificación pericárdica (figura 23) y lo to con la respiración (figuras 18 y 19) no lo pre-
mismo puede decirse en relación con la tomografía
672
PERICARDITIS
Hipertensión venocapilar
sistémica
ECOCARDIOGRAMA
T
PERICARDITIS MIOCARDIOPATÍA
CONSTRICTIVA RESTRICTIVA "A"
CATETERISMO CARDIACO
Curvas de presión
diastóiicas simultáneas
R
Imagen en Imagen en
"raíz cuadrada" "raíz cuadrada"
a idéntico nivel a diferente nivel
senta ¡a miocardiopatía restrictiva; finalmente, el constrictiva los niveles de presión son similares e n
registro de las curvas hemodinámicas simultáneas ambos ventrículos .figura 29) mientras que e n las
e n ambos ventrículos nos permitirá el diagnóstico miocardiopatías restrictivas son francamente dife-
diferencial. En efecto, aun cuando ambos padeci- rentes en ambas cavidades ventriculares. El diag-
mientos producen impedimento al llenado diastó- nóstico diferencial (figura 30) es de gran impor-
lico ventricular y por e n d e , una curva diastólica tancia en la clínica, ya q u e lo c o m ú n es que a los
con forma de "raíz cuadrada", en la pericarditis pacientes que sufren de pericarditis constrictiva se
673
CARDIOLOGÍA
les diagnostique equivocadamente insuficiencia car- a los mismos niveles de presión en ambos ventrícu-
diaca y se les administre tratamiento médico para los (figura 29) y de esta forma establecer el correcto
este fin por largo tiempo, desde luego, con resulta- diagnóstico de constricción pericárdica.
dos infructuosos y ésta es una de las razones por las
que en estos pacientes se llega tardíamente al diag-
nóstico correcto y, por lo tanto, al tratamiento espe- TRATAMIENTO
cífico. En los centros cardiológicos especializados el Cuando el paciente se encuentra con gran anasarca
problema diagnóstico fundamental se establece con conviene internarlo dos semanas e n el hospital,
la miocardiopatía restrictiva que afecta a los dos ven- prescribirle reposo, dieta hiposódica y diuréticos.
trículos (simétrica), lo cuales son causa d e un cuadro Si se logra la reducción o desaparición d e la reten-
clínico en ocasiones idéntico al de la pericarditis ción de líquidos, el paciente podrá ser llevado a
constrictiva y hasta no hace mucho tiempo era muy cirugía e n estas condiciones. En caso de que el
acostumbrado llevar al paciente con miocardiopatía paciente, a pesar de dicho tratamiento permanez-
restrictiva al quirófano con el diagnóstico equivoca- ca con derrames pleurales y ascitis, conviene lle-
d o de pericarditis constrictiva no certificaba la nor- var a cabo paracentesis para la extracción d e di-
malidad del pericardio. En la actualidad, como se cho l í q u i d o . Posteriormente es r e c o m e n d a b l e
mencionó, la radiografía de tórax, la tomografía remplazar el volumen de líquido extraído con plas-
torácica, el ecocardiograma y las curvas de presión m a o albúmina libre d e sal c o n el objeto de no
interventricuiar se constituyen en métodos que pres- depletar las proteínas al paciente.
tan una ayuda de valor incalculable para el diagnósti-
co diferencial cuando son utilizados con el raciocinio El tratamiento definitivo consiste e n la extirpa-
y el acertado juicio clínico que caracterizan al buen ción quirúrgica el pericardio engrosado o calcifi-
médico. cado. La mortalidad operatoria se encuentra alre-
dedor del 11 % (entre 7 y 19 % ) . El resultado de
una decorticación completa. Es muy bueno a lar-
go plazo; sin embargo, puede notarse que en el
PERICARDITIS CONSTRICTIVA OCULTA periodo posoperatorio inmediato, en algunos pa-
cientes aparece cardiomegalia e insuficiencia car-
En ocasiones, el paciente que padece pericarditis diaca hecho que ha sido atribuido a que el mio-
constrictiva es tratado c o n diuréticos y desapare- cardio restringido en su función por largo tiempo
cen los edemas, disminuye el líquido de ascitis o sufre a t r o f i a , h e c h a q u e se h a c e e v i d e n t e a l
incluso llega a desaparecer éste; si en este momento decorticar el corazón. El síndrome de bajo gasto
se practica cateterismo cardiaco, las curvas de pre- cardiaco posoperatorio aparece entre el 14 y 28 %
sión intracavitaria resultarán completamente nor- de los casos.
males. En estas condiciones se puede considerar al Los pacientes que sobreviven a la operación en
paciente e n forma errónea c o m o sano del cora- el 90 % tienen mejoría sintomática y el 5 0 % que-
zón. C u a n d o se sospecha el diagnóstico de peri- da completamente asintomático; la sobrevida a cin-
carditis constrictiva y ésta es la situación clínica del co años es d e 74 a 84 %. Si se demuestra o se
paciente, se debe administrar una infusión de so- sospecha el diagnóstico d e tuberculosis como causa
lución salina isotónica a razón d e 5 0 0 a 1 0 0 0 mi de la pericarditis constrictiva, se deberá dar trata-
en el curso de 8 minutos e n la misma sala de cate- miento (tres drogas) antifímico por dos a cuatro se-
terismo y hacer una nueva determinación de pre- manas antes de la operación y continuarlo por seis
siones simultáneas e n ambos ventrículos. C o n este meses después. Se ha encontrado que los pacien-
procedimiento es posible hacer patente el impe- tes d e alto riesgo quirúrgico son aquellos c o n im-
dimento al llenado diastólico al adoptar la típica portante cardiomegalia los que están en clase fun-
curva diastólica con morfología d e "raíz cuadrada" cional lll o IV, los ancianos y los desnutridos.
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676
Capítulo 20 Hipertensión arterial
"No hay peor jornia de mutilación espiritual en un
médico que lajaita de cultura. Quien carezca de ella
podra ser un gran técnico en su ojicio, un sabio en su
ciencia, pero en lo demás no pasará de ser un bárbaro
ayuno de lo que da la con/prensión humana"
KWWSERRNVPHGLFRVRUJ
L
T é c n i c a s i n a p r o p i a d a s e n el registro d e la
A DETERMINACIÓN Di LA PRESIÓN ARTERIAL por el p r e s i ó n arterial
método auscultatorio se basa e n la percep-
ción d e una serie de ruidos con el estetosco- 1. Si la cápsula del estetoscopio no se aplica fir-
pio, c u a n d o la cápsula se coloca a nivel de la arte- memente en el brazo, pueden pasar inadverti-
ria humeral después de haberla comprimido con dos los primeros ruidos de alta frecuencia (fase
el manguito del esfigmomanómetro y de efectuar I) e infravalorar la cifra sistólica de la presión
la descompresión paulatina. arterial; ello puede ocurrir especialmente en
Primeramente se obtiene, por la palpación, la sujetos obesos.
presión sistólica (la necesaria para hacer desapare-
2. La aplicación de la cápsula del estetoscopio a
cer el pulso radial); después se incrementa la pre-
la piel con demasiada presión podrá enmasca-
sión del manguito 20 ó 30 m m H g más arriba de
rar el cambio de la fase IV a la V y continuarse
este nivel; se aplica la cápsula del estetoscopio so-
escuchando los ruidos hasta el nivel d e cero
bre la arteria humeral y se desciende lentamente
m m H g sin una diferencia que pueda orientar
la presión del manguito. La aparición de ruidos de
al explorador para conocer el nivel real de la
ligera intensidad que rápidamente se intensifican,
presión diastólica. Ello puede acontecer espe-
marcan la fase I de Korotkof que está e n relación
cialmente cuando hay aumento de la presión
c o n la presión arterial sistólica.
diferencial (insuficiencia aórtica, síndromes
Si la presión del manguito continúa descendien- hipercinéticos y aterosclerosis aórtica).
do paulatinamente aparecen ruidos c o n carácter
soplante (fase II) y posteriormente ruidos nueva- 3. Pausa auscultatoria. Es importante conocer
mente claros e intensos (fase lll); el punto e n el este fenómeno porque es causa de una deter-
cual estos ruidos cambian a un carácter sordo, re- minación errónea de la presión arterial. En al-
presentan la fase IV y, por fin, cuando desapare- gunos individuos, después de que aparecen los
c e n , la fase V. La determinación intrarterial de la ruidos de la fase I de Korotkof, desaparecen y
CARDIOLOGÍA
conforme se reduce la presión que ejerce el b) Los manguitos muy anchos, en niños o e n
manguito, reaparecen nuevamente a un nivel sujetos c o n brazos muy alargados dan lectu-
más bajo d e presión. La desaparición temporal ras erróneamente bajas de las cifras de pre-
de los ruidos de Korotkof (pausa auscultatoria) sión arterial.
puede abarcar hasta 30 ó 4 0 m m H g , por lo
que si no se determina correctamente la fase I, c) En sujetos muy obesos, la determinación de
la presión sistólica se catalogará incorrectamen- la presión arterial con manguitos de dimen-
te e n valores muy inferiores a los reales. La de- siones estándar dará lecturas erróneamente
terminación del nivel sistólico de la presión elevadas. C u a n d o se determina la presión
arterial por palpación, ayudará a evitar este error. arterial en sujetos muy obesos con brazalete
estándar, se recomienda sustraer 15 ó 20
4. Determinación de la presión arterial e n pre- m m H g a la lectura de la presión sistólica para
sencia de arritmias: no establecer un diagnóstico erróneo de hi-
pertensión arterial. Las cifras diastólicas su-
a) La existencia de extrasistolia ventricular fre- fren menos variaciones en estas condicio-
cuentemente produce cambios en el nivel nes. Asimismo es posible e n estos casos
sistólico de la presión arterial (recordar el determinar exactamente la presión arterial,
efecto de la pausa compensadora sobre el aplicando el brazalete a nivel del antebrazo
latido posextrasistólico). Este efecto a u m e n - tomar lectura mediante la auscultación de
ta el gasto sistólico y por lo tanto el nivel la arteria radial. Lo recomendable para una
sistólico de la presión arterial; en conclusión, lectura exacta de la presión arterial e n suje-
la p r e s i ó n sistólica d e los latidos post- tos muy obesos es utilizar un brazalete más
extrasistólicos no será el nivel real de dicha ancho (de 18 a 20 c m ) , lo que también pue-
presión. de ser útil para tomar la presión arterial en
los miembros inferiores.
b) En el bloqueo A V completo es c o m ú n el
incremento e n la presión diferencial que
6. D e t e r m i n a c i ó n de la presión arterial e n
es debida al estímulo que las pausas largas
miembros inferiores. Cuando se toma la pre-
tienen sobre la contractilidad, lo cual se tra-
sión arterial en los miembros inferiores aplican-
d u c e e n un aumento de la presión sistólica,
do el manguito estándar al muslo y haciendo
mientras q u e las mismas pausas largas con-
las lecturas mediante la auscultación d e la re-
d i c i o n a n una disminución e n la presión
gión poplítea, normalmente se obtienen cifras
diastólica. En otras palabras, el efecto he-
sistólicas mayores (entre 20 y 4 0 mmHg) en
modinámico de la bradicardia importante
comparación con las obtenidas e n miembros
es la causante d e l aumento de la presión
superiores. Si se utiliza el brazalete ancho (de
diferencial y e n sí no representa un estado
1 8 a 20 cm) se obtienen lecturas de 10 a 15
hipertensivo.
m m H g mayores que e n los miembros superio-
res y las cifras diastólicas son casi idénticas en
c) En la arritmia completa por fibrilación auricu-
ambos sitios. C a b e mencionar que esta dife-
lar, la determinación del nivel sistólico de la
rencia se debe, principalmente, a efectos d e
presión arterial no es tan sencillo. Se recomien-
las dimensiones del brazalete, ya que las deter-
da elevar la presión del manguito 2 0 ó 30
minaciones intrarteriales simultáneas en arte-
m m H g por encima del nivel palpatorio de la
rias humerales y femorales dan diferencias de
presión sistólica y disminuir muy lentamen-
sólo 2 ó 3 m m H g en ambos sitios.
te la columna de mercurio; se considera que
el nivel exacto de la presión sistólica se e n -
contrará en el momento e n que se escucha
mayor número de latidos y no precisamen-
N O R M O T E N S I Ó N VS H I P E R T E N S I Ó N
te cuando se comienzan a escuchar éstos.
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
DEFINICIÓN Y DIAGNÓSTICO
4^
CARDIOLOGÍA
—Ny-^
CUADRO 1
I N D I C A C I O N E S PARA LA REALIZACIÓN
DE MAPA
1. Elevación de la T.A. durante la visita médica
sin signos de daño en órganos "blanco" (sos-
pecha de efecto de "bata blanca").
2. Cifras normales de T.A. en la visita médica
con signos de daño en órganos "blanco".
3. Hipertensión arterial esporádica o en crisis.
4. Síntomas sugestivos de cambios bruscos de
la presión arterial.
5. Pacientes con el diagnóstico de hipertensión
arterial en los que a pesar de tener cifras nor-
males de T.A. en la visita médica se nota pro-
gresión en la retinopatía o no reduce la hi-
pertrofia ventricular.
0 ! 7
CUADRO 2
C L A S I F I C A C I Ó N D E LA PRESIÓN ARTERIAL
PRESIÓN ARTERIAL
3. Cifras normales en clinostatismo e hipoten- cias periféricas y el gasto cardiaco. Cuando por me-
sión e n ortostatismo = efecto antihiperten- canismos anormales aumenta en forma inapro-
sivo excesivo. piada cualquiera de ellos, el resultado será la ele-
vación de las cifras de presión arterial.
4. Cifras altas e n clinostatismo y ortostatismo
En condiciones normales, los factores hemodi-
= tratamiento insuficiente.
námicos que mantienen la presión arterial, son re-
5. Cifras altas en clinostatismo y baja a valores nor- gulados por hormonas provenientes del sistema
males en ortostatismo = tratamiento adecuado nervioso autónomo (aminas simpaticomiméticas)
(especialmente e n pacientes ancianos con que tienen efectos directos sobre los receptores
hipertensión sistólica), se llega a esta conclu- alfadrenérgicos y betadrenérgicos, tanto de los va-
sión cuando con el tratamiento antihipertensi- sos sanguíneos c o m o del corazón. Asimismo, hay
vo las cifras de presión arterial son normales en factores humorales como las hormonas c o n efec-
el decúbito y aparece hipotensión ortostática. tos mineralocorticoides, las prostaglandinas y el sis-
Este comportamiento de la presión arterial pue- tema renina-angiotensina-aldosterona que influyen
de causar mareo, lipotimia o sinco|>e en estre- e n forma por demás importante y compleja e n el
cha relación con el ortostatismo. mantenimiento de la presión arterial.
4^
CARDIOLOGÍA
CUADRO 3
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
ESENCIAL
Aumento de volumen.
Aumento de resistencias.
Aumento del gasto cardiaco.
SECUNDARIA
(i
Glomerulonefritis: aj aguda,
b) crónica.
I. NEFRÓGENA Nefropatía diabética.
Pielonefritis crónica.
V. POUCITEMIA
• Trasudado excesivo
• Hemorragia
• Depleción de Na i Vol. sanguíneo [—*>\ i PA [—»| l Perfusión renal |
• Deshidratación
t Resistencias
T
Secreción renina
T
periféricas Angiotensina II |
t Volumen -
extracelular *<
4J*3
CARDIOLOGÍA
Na +
H^O
a ) O b s t r u c c i ó n aterosclerosa de la arteria re-
n a l . Pacientes mayores de 50 años, prefe-
FIGURA 4 Hipertensión maligna
rentemente del sexo masculino, c o n ateros-
clerosis en otros territorios (periférica, fondo
del ojo, aorta, etc.).
11 -hidroxilasa o 17-h¡droxilasa), son causa de hi-
pertensión arterial c o n hipokalemia debido al im- b) D i s p l a s i a f i b r o m u s c u l a r de la a r t e r i a re-
portante efecto mineralocorticoide de la desoxi- n a l . Se presenta e n personas jóvenes (me-
corticosterona ( D O C A ) , que promueve una nores de 30 años) y p r e d o m i n a e n e l sexo
expansión del espacio extracelular por retención f e m e n i n o . H a y una v a r i e d a d e n d o n d e la
de sodio y agua. En estos síndromes además hay estenosis de arteria renal es bilateral, lo
virilización (hirsutismo, irregularidades menstrua- cual provoca una hipertensión arterial h¡-
les) y trastornos e n la aparición de caracteres p e r r e n i n é m i c a muy grave, de difícil con-
sexuales secundarios. trol y que se a c o m p a ñ a de insuficiencia re-
Renina 1 Renina t
Aldosterona t Aldosterona t
FIGURA 5 Hipertensión arterial de origen adrenal. Fisiopatología de las diferentes formas de hiperten-
sión arterial de origen adrenal que cursan con hipokalemia
4 685
CARDIOLOGÍA
nal rápidamente progresiva y oliguria; cuan- su excreción exagerada en la orina El resultado final
do se descarta la obstrucción ureteral y apa- del proceso es la presencia de hipertensión arterial
rece después de haber iniciado tratamien- generalmente importante con hipokalemia marca-
to c o n inhibidores de la E C A , la posibilidad d a . La producción aumentada de aldosterona se
de obstrucción bilateral d e las arterias re- puede demostrar en la clínica por:
nales es muy alta. Puede ser causada por
aterosclerosis bilateral de las arterias rena- 1. Excreción urinaria d e potasio aumentada
les (pacientes mayores d e 50 años), o por (mayor de 30 mEq/24 hr) en presencia de
displasia fibromuscular (pacientes jóvenes). hipokalemia (menor de 3 mEq/L de K + plas-
mático).
c) Arteritis diseminada inespecífica (enferme-
2. La kaliuresis se e x a g e r a en forma d e s p r o -
dad de Takayasu). Cuando en un caso de
p o r c i o n a d a c o n la a d m i n i s t r a c i ó n de d i u -
arteritis diseminada se encuentra hiperten-
sión arterial, la mayoría de las veces se debe réticos.
a la participación de las arterias renales en 3. La aldosterona plasmática y urinaria se en-
la enfermedad inflamatoria vascular. Es ex- cuentra elevada (figura 5).
cepcional la arteritis localizada, por lo que
la presencia de obstrucción arterial (ausen- 4. La dieta hiposódica corrige la hipokalemia.
cia de pulsos en otros territorios) ayuda a 5. La a d m i n i s t r a c i ó n d e dieta h i p e r s ó d i c a ,
sospechar el diagnóstico. La hipertensión
acentúa la hipokalemia y la kaliuresis.
renovascular de evolución crónica termina
c o n la atrofia del riñon isquémico. 6. La espironolactona corrige la hipokalemia y
en algunas ocasiones la hipertensión arterial.
Astenia
Debilidad muscular
Extrasistolia ventricular
Taquicardia ventricular
Fibrilación ventricular FIGURA 6 Aldoste-
ronismo primarlo
«4-
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
cativo de una producción independiente (pri- carbohidratos por la acción glucogenolítica de las
maria) d e aldosterona y se confirma el diag- catecolaminas), que no infrecuentemente se inter-
nóstico de aldosteronismo primario. preta erróneamente c o m o debida a diabetes
mellitus. Recientemente se ha encontrado que la al-
teración en el metabolismo de los carbohidratos es
HIPERPLASIA ADRENAL BILATERAL también causada por la inhibición activa en la libera-
En algunos pacientes que presentan un cuadro de ción de insulina por los efectos alfadrenérgicos de la
aldosteronismo primario clásico con todos sus com- noradrenalina y adrenalina sobre los islotes de
ponentes (astenia, adinamia, hipokalemia e hiper- Langerhans. La extirpación del tumor hiperfuncionan-
tensión arterial), el proceso responsable no siem- te es el único tratamiento efectivo de estos casos.
pre es un tumor h i p e r s e c r e t a n t e , sino q u e la
hiperplasia adrenal bilateral idiopática es la respon-
sable. En estos casos, la prueba de supresión de COARTACIÓN AÓRTICA
aldosterona (previamente mencionada) suprime la La coartación aórtica congénita es una forma po-
secreción de dicha hormona en niveles entre 5 y 10 tencialmente curable de hipertensión arterial. El
ng/dL). Por otro lado, ante un cuadro clínico de estrechamiento congénito d e la aorta a nivel del
aldosteronismo primario, el encontrar suprarrenales ligamento arterioso en el inicio de su porción
normales mediante la T A C del abdomen también torácica descendente produce elevación de la pre-
apoya el diagnóstico. sión arterial e n las porciones proximales a la obs-
El tratamiento adecuado es la administración trucción (raíz aórtica, arterias cerebrales y las que
de espironolactona con la que se logra control tanto irrigan los miembros superiores), mientras que la
de las cifras d e presión arterial como de la hipoka- presión será normal o baja e n las porciones distales
lemia; es c o m ú n que dicho fármaco se asocie a a la obstrucción (aorta abdominal y arterias que
tiazidas para el control adecuado del cuadro. irrigan los miembros inferiores). La corrección q u i -
rúrgica de la malformación generalmente va se-
La hiperplasia suprarrenal bilateral idiopática es
guida de la normalización de la presión arterial.
causa de aldosteronismo primario e n aproximada-
mente el 30 % de los casos
La extirpación d e l tumor productor d e la hor-
USO DE ANTICONCEPTIVOS ORALES
mona suprime la hipertensión arterial y el cuadro
clínico. En 5 % d e pacientes a quienes se les ex- Se ha calculado que el 5 % de las mujeres que
tirpa el tumor productor d e aldosterona no regre- utilizan anticonceptivos orales presentan hiperten-
san a la normotensión, debido a que presentan sión arterial.
hipertensión arterial esencial preexistente o a que El uso de medicamentos anticonceptivos que
la hipertensión sostenida ya produjo nefropatía contienen estrógenos pueden causar hipertensión
secundaria. arterial, especialmente en mujeres que los han
tomado por más d e cinco años, que tienen más
d e 35 años de e d a d , que son obesas, q u e fuman
FEOCROMOCTTOMA (figura 7) y/o que ingieren grandes cantidades d e bebidas
Los tumores de la médula suprarrenal (feocromo- alcohólicas, la hipertensión arterial generalmente
citomas), o de los ganglios simpáticos (paragan- es ligera o moderada y no es raro que persista
gliomas) son grandes productores de adrenalina y después d e haber descontinuado el consumo d e
noradrenalina. EMO % d e estos tumores son ma- dichos fármacos.
lignos. La producción aumentada de estas cateco- El mecanismo fisiopatológico involucrado es a
laminas c u l m i n a c o n la exageración d e sus efec- través del aumento en la síntesis de angiotensinóge-
tos s o b r e los r e c e p t o r e s a l f a d r e n é r g i c o s y no en el hígado que es inducido por los estrógenos,
betadrenérgicos. el cual al ponerse en contacto c o n la renina circu-
Cuando la descarga adrenérgica es aguda e in- lante (aun cuando no se encuentre elevada) se con-
termitente, el cuadro clínico aparece por crisis que vierte en angiotensina I, la cual a su vez se convierte
se manifiestan por angustia, palidez, taquicardia, e n angiotensina II, ésta estimula la secreción de
diaforesis, cefalea e hipertensión arterial. C u a n d o aldosterona, la cual causa retención de N a y H ,0,
la descarga adrenérgica es sostenida, además de c o n expansión del espacio extracelular. Al mismo
los síntomas referidos aparece adelgazamiento (hi- tiempo, la angiotensina II aumenta las resistencias
permetabolismo) e hiperglucemia (intolerancia a los periféricas; la consecuencia final es el aumento de
4«z
CARDIOLOGÍA
F E O C R O M O C I T O M A
T
t Adrenalina
\
Noradrenalina
l A c . Vanillil I Secreción
Receptores alfa Receptores beta
mandélico de insulina
+
' t tGlucogenolisis
Vasoconstricción Taquicar dia
Orina periférica t Incilm lismo
t Gasto cardiaco
Hiperglucemia
V
• Diaforesis t Presión t Presión
diastólica sistólica Glucosuria
• Palidez
Hipertensión
arterial
FIGURA 7
aórtica, remplazo valvular aórtico y trasplante branas, una respuesta simpática exagerada al estrés, o
cardiaco), aparece c o n frecuencia hipertensión bien, combinación de dichos factores. El espectro
arterial que generalmente observa un comporta- fisiopatológico de este tipo de hipertensión arterial
miento transitorio en la cual intervienen diversos es muy variado debido a que los factores que deter-
mecanismos: secreción aumentada de catecolami- minan la elevación de la presión arterial interaccionan
nas (reacción al trauma quirúrgico), dolor, hipovole- entre sí de manera compleja.
mia, hipoxia, sobrecarga de volumen, síndrome de
supresión de betabloquedores cuando el paciente
HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL
los tomaba previamente en forma crónica y el uso de
c i c l o s p o r i n a así c o m o g l u c o c o r t i c o i d e s e n e l HIPERRENINÉMICA
posoperatorio inmediato del trasplante cardiaco. En este tipo d e hipertensión arterial la actividad de
la renina plasmática está elevada en ausencia de
isquemia renal y nefropatía demostrable. La eleva-
HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL
ción de la presión arterial se debe fundamental-
La hipertensión arterial de tipo esencial tiene una mente al aumento d e las resistencias periféricas por
franca tendencia familiar, las características genéticas la acción d e la angiotensina II y por el incremento
de transmisión no se han identificado a la fecha. Al de la reactividad vascular inducida por la retención
parecer, los trastornos heredados pueden ser un de- de Na-t- (aldosteronismo secundario) (figuras 3 , 4 , 5
fecto en el transporte de sodio a través de las mem- y 9 ) . D e 6 0 % de los pacientes c o n hipertensión
PRECLAMPSIA
l dr la síntesis de
D E S E Q U I L I B R I O E N T R E LA M A S A prostaglandinas
PLACENTARIA Y SU FLUJO S A N G U Í N E O (PCE,)
HIPOPERFUSION
UTEROPLACENTARIA
I
de renina uterina
Liberación de tromboplastina
tde angiotensina I angiotensina
1. periférica uterina
Depósito de fibrina en
el glomerulo
1 de la prostaciclina
vascular
Proteinuria
Vasoconstricción
I d e l.i filtración i;loiTterular~[-
t Agregación
Tromboxano A. de plaquetas
1 de la reabsorción de Na*~| circulantes
I
Expansión
Hipertensión
del volumen extracelular
T
Edema
FIGURA 8
4
CARDIOLOGIA
arterial esencial tiene aumento de las concentracio- duce en taquicardia, hipertensión arterial y caracte-
nes de renina plasmática. r í s t i c a m e n t e la respuesta hipertensora c o n e l
ortostatismo (hipertensión arterial al adoptar la po-
sición de pie). En estos casos, la elevación de la
HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL presión arterial se debe predominantemente a la
HIPORRENINÉMICA alteración de factores hemodinámicos mientras que
En pacientes con hipertensión arterial esencial es los factores humorales pueden no estar involucra-
factible que la actividad de la renina plasmática se dos. Por lo tanto, e n estos pacientes la actividad de
encuentre disminuida cuando existe aumento del la renina plasmática se encuentra normal.
volumen ¡ntravascular (figuras 3 , 6 y 9 ) . En efecto, Aproximadamente el 1 0 % de los pacientes con
en el 3 0 % de los pacientes hipertensos, la eleva- hipertensión arterial esencial, tiene valores norma-
ción de las cifras tensionales es dependiente de un les de renina plasmática. C o m o ya se mencionó, e n
aumento del volumen extracelular (en ausencia de un grupo de ellos el efecto adrenérgico puede ser
aldosteronismo primario o secundario) y ello inhibe preponderante; sin embargo, e n otro grupo cuya
la secreción de renina plasmática. proporción es ¡mpredecible, pueden ser varios los
factores influyentes (defecto en la excreción renal
de sodio, defecto en el transporte transmembrana
HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL de sodio, aumento de la concentración de calcio en
NORMORRENINÉMICA (figuras 7 y 9) la membrana celular, etc.).
El aumento del gasto cardiaco consecutivo a síndro-
me hipercinético idiopático consecutivo a un au-
mento de receptores adrenérgicos e n el sarcolema TIPOS CLÍNICOS DE HIPERTENSIÓN
puede conducir a hipertensión arterial. En estos ca- ARTERIAL
sos, es c o m ú n que la hipertensión arterial sea d e
HIPERTENSIÓN ARTERIAL DIASTÓLICA
predomino sistólico y de comportamiento lábil.
En ocasiones hay aumento de la actividad simpá- Independientemente de la etiología, la elevación
tica (en ausencia de feocromocitoma) y ello se tra- de la presión arterial se nota e n la cifra sistólica pero
H I P E R T E N S I Ó N ARTERIAL ESENCIAL
Reninat I
Vasoconstricción pettférica
• i
1. Betabloqueadores
2. Diuréticos
3. Vasodilatadores
4. Inhibidores de la ECA
5. Bloqueadores de los
receptores AT-I
Difídl control
Complicaciones frecuentes
FIGURA 9
690
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
ractividad adrenérgica, en quienes el aumento del dicales hidroxilo ( O H - ) , otros peróxidos lípidos,
gasto cardiaco es el responsable (hipotensión arterial etc. Estos radicales, no son solo productos tóxicos
normorreninémia (figura 9 ) . para el endotelio sino q u e participan e n la tras-
cripción genética para el crecimiento del músculo
liso vascular (hipertrofia) a través de favorecer los
factores d e transcripción c-fos y c-jun (protoonco-
SÍNDROME METABÓLICO
genes). Por otro lado, los radicales de oxigeno l i -
bres, participan en la oxidación de las lipoproteínas
Se ha visto que frecuentemente, hipertensión arterial
d e baja densidad (LdL) en el subendotelio, que es
se asocia c o n obesidad y d e ahí se ha partido para
una función patogénica fundamental para la géne-
descubrir que e n algunos casos, no solo coinciden
sis d e la aterosclerosis.
estas alteraciones sino que también aparece, resis-
tencia a la insulina, alteraciones del metabolismo Finalmente, la albuminuria es uno de los signos
de lípidos específicos (hiperlipidemia aterogénica), iniciales no solo de disfunción endotelial sino d e
aumento de factores procoagulantes (fibrinógeno, daño renal en pacientes con síndrome metabólico
inhibidor del activador del plasminógeno, anorma- y con diabetes mellitus.
lidades e n la función plaquetaria), por lo que real- Se considera q u e la diabetes mellitus tipo 2 es
mente la hipertensión arterial en estos casos forma el producto final de años de alteraciones
parte de un síndrome metabólico, el cual a su vez se metabólicas que acompañan a un estado de resis-
constituye c o m o un poderoso factor de riesgo tencia a la insulina; parece ser, que la resistencia a
aterogénico para enfermedad cardiovascular; al pa- la insulina, es el detonante q u e inicia el proceso
recer la hiperglucemia en el síndrome metabólico de aterogénesis mucho antes d e que se haga pre-
acelera e l proceso de aterogénesis por la formación sente la hiperglucemia.
de proteínas glicosiladas y un aumento considera-
El síndrome metabólico, aumenta 4 veces el ries-
ble en la disfunción endotelial.
go de padecer un infarto del miocardio fatal, y au-
CARDIOLOGÍA
FIGURA 10 Regresión de hipertrofia. A: Ecocardiograma 2-D (eje largo paraesternal) que enseña
hipertrofia concéntrica del ventrículo izquierdo (SIV de 20 mm y PP de 12 mm) en enero de 1989.
B: 2 años y 6 meses después (julio de 1991) se nota la reducción del espesor de las paredes
ventriculares (SIV y PP 10 mm). Nótese que se mantiene igual al diámetro diastólico de la cavidad
(38 mm) después de tratamiento satisfactorio
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
DE PROTEÍNAS
Glomerulo
Flujo Aferente s—v Eferente
plasmático
Presión
hidrostática
AUTORREGULACIÓN
Aferente Eferente
Í
Flujo
plasmático
Presión —
"*
hidrostática
HIPERTENSIÓN
ARTERIAL
(Hiperfiltración)
FIGURA 11
4«
CARDIOLOGÍA
4
CARDIOLOGÍA
3. Electrolitos 5. E x a m e n general de o r i n a
a) La presencia de hipokalemia plasmática ( 3
mEq/L) sugiere el diagnóstico de aldosterismo. a) Hipostenuria persistente (daño tubular).
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
4«
CARDIOLOGÍA
FIGURA 13 Hiperten-
sión renovascular.
ARRIBA: Renograma.
La fase arterial en el
riñon izquierdo (Rl) es
muy corta y la fase
E arenquimatosa muy
ñi
mta, en relación con
el riñon derecho (RD).
ABAJO: El gammagra-
ma renal es posición
posteroanterior
muestra una impreg-
nación lenta e incom-
pleta del riñon iz-
q u i e r d o , lo cual
traduce insuficiencia
perfusoria por esteno-
sis de la arteria renal.
(Cortesía del Dr. Alberto
Zimbrón)
•. r
V
RO
FIGURA 14 Agene-
s/'a del riñon Izquier-
do. IZQUIERDA: se
ve la ausencia gam- Rl
magráfica del riñon
izquierdo (Rl). DE-
RECHA: la curva del
renograma confirma
la ausencia renal iz- Rl
quierda. (Cortesía del
Dr. Alberto Zimbrón)
702
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
En la hiperplasia adrenal bilateral idiopática que practicarse nefrectomía bilateral que será seguida
puede ser causa de aldosteronismo primario se ha de éxito en un alto porcentaje.
demostrado que el tratamiento más eficaz debe ser
médico a base de espironotactona y tiazidas. Por b) Potencialmente Incurable
otro lado, en la toxemia del embarazo se recomien- En otras ocasiones conocemos la etiología d e la
da una dieta normal en sal, pequeñas dosis d e aspi- hipertensión, pero su erradicación sólo se plantea
rina (80-160 mg diarios) asociado a fármacos antihi- en casos extremos. Tal condición ocurre con las
pertensivos como son la alfametildopa o hidralazina; nefropatías crónicas o e n la hipertensión maligna.
la mejor experiencia se ha informado c o n betablo- En estos casos se prefiere dar tratamiento médico
queadores, alfabloqueadores (prazosín) y fármacos de la hipertensión arterial y sólo en aquellos casos
que tienen ambas acciones como el labetalol; tam- en los que es imposible el control satisfactorio de
bién se ha utilizado la nifedipina con buenos resul- las cifras tensionales se plantea la necesidad de
tados. Es por ello que la historia clínica cuidadosa es nefrectomía bilateral (recordar que en estos casos
fundamental para indicar en forma racional el estu- la hipertensión es hiperreninémica).
dio de laboratorio y gabinete en la búsqueda de
causas potencialmente curables d e hipertensión
arterial. El estudio "rutinario" c o n métodos especia-
lizados d e diagnóstico en nuestro medio es inacep- HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL
table por su alto costo, molestia y riegos potenciales
que implica para el enfermo. Por ejemplo, no es Cuando después de un estudio clínico cuidadoso
conveniente practicar a todo enfermo hipertenso apoyado por los exámenes de laboratorio y gabi-
una arteriografía renal selectiva, si no hay algún sig- nete pertinentes se llega al diagnóstico de hiper-
no clínico, de laboratorio, gammagrafía o radiológico tensión arterial esencial, se pueden hacer dos con-
q u e s u g i e r a la p o s i b i l i d a d d e h i p e r t e n s i ó n sideraciones:
renovascular. Por el contrario, si este estudio de-
1. No se dará tratamiento etiológico y el obje-
muestra estenosis d e la arteria renal (hipertensión
tivo terapéutico estará encaminado sólo a
renovascular), el tratamiento indicado será la
normalizar las cifras de presión arterial me-
angioplastia renal con stent de la arteria obstruida,
diante medicamentos antihipertensivos.
alivia la estenosis e n el 94 % de los casos, se ha
encontrado que los pacientes > d e 50 años con 2 . Si las cifras d e presión arterial no se m a n -
estenosis d e arteria renal e n los que el péptido tienen en niveles normales ( 1 4 0 m m H g o
natriurético cerebral se encuentra e n cifras > d e menos para la presión sistólica y 9 0 m m H g
8 0 pg/ml. son a q u i é n e s les reduce la presión o m e n o s para la presión diastólica), e l s u -
arterial después de aliviar la obstrucción d e la arte- jeto desarrollará las complicaciones ya men-
ria renal. cionadas d e la hipertensión arterial sisté-
mica c r ó n i c a . En otras palabras, otro de los
Por otro lado, si la hipertensión arterial es se- objetivos importantes d e la terapéutica, será
cundaria, difícilmente el tratamiento será satisfacto- el de e v i t a r — h a s t a d o n d e sea p o s i b l e — e l
rio si no es erradicada la causa. Se comprende que desarrollo de las c o m p l i c a c i o n e s arteriales
sería inadecuado intentar controlar con medicamen- y p a r e n q u i m a t o s a s d e la h i p e r t e n s i ó n
tos antihipertensivos a un paciente cuya hiperten- arterial sostenida (cardioprotección y ne-
sión arterial es secundaria a un feocromocitoma. froprotección).
Esta actitud sólo deberá ser tomada cuando las con-
diciones generales del enfermo impongan un ries- C o n el advenimiento de nuevos y más potentes
go quirúrgico prohibitivo o cuando la hipertensión fármacos antihipertensivos, e n la actualidad afortu-
pase a u n segundo plano e n importancia por coinci- nadamente ya es raro ver las complicaciones poten-
dir con otro padecimiento más grave (carcinomatosis, cialmente mortales de la hipertensión arterial, como
hemorragia cerebral, etc.) en donde está por demás lo son el edema agudo del pulmón o la hemorragia
el tratamiento primario de la hipertensión arterial. cerebral intraparenquimatosa.
Desde luego, en aquellos pacientes que sean La falta del conocimiento etiológico en la hiper-
candidatos para recibir un trasplante renal pueden tensión arterial esencial nos obliga a utilizar medi-
curarse de la hipertensión arterial en un porcenta- camentos que pueden normalizar la presión arterial
je significativo de los casos; en aquellos que no se por muy diversos mecanismos pero sin tratar la cau-
reduzcan las cifras tensionales además deberá sa (figura 9 ) .
4™
CARDIOLOGÍA
Retención Na VASODILATADORES
Diuréticos y
Espironolactona
Vasoconstricción
Aldosterona arteriolar
Bloqueadores
Ganglionares
Angiotensina II \ ^
Bloqueadores |
i— AJJ 1 Altame-
Inhibidor de la tildopa
Angiotensina enzima
convertidora
Secreción Estimulación
de renina simpática 7^ H a Receptores I
i ; 1
P Bloqueadores ^ \ a
Bloqueadores |
. Frecuencia
cardiaca
3 f
t d e la
contractilidad
efectos hemodinámicos, pero mucho más acentua- (varios fármacos simultáneamente) y como se m e n -
das que los mencionados para el consumo d e taba- cionó antes, es primordial individualizar el esque-
co y alcohol. Enseguida, la historia clínica cuidadosa ma terapéutico. Se deberá buscar la normalización
nos debe orientar hacia la presencia de una forma de la presión arterial y al mismo tiempo evitar los
secundaria de hipertensión para realizar los estu- efectos indeseables.
dios pertinentes y d e comprobarse el diagnóstico Recordar que los pacientes diabéticos requie-
ofrecer el tratamiento específico. Finalmente, cuando ren siempre dentro del esquema terapéutico un
llegamos al diagnostico de hipertensión arterial esen- inhibidor de la E C A ; si no es tolerado se deberá
cial deberemos intentar individualizar el tratamien- administrar un bloqueador de los receptores AT-I; si
to farmacológico. Si el sujeto muestra hipertensión el paciente diabético presenta albuminuria y no
arterial c o n hipercinesia circulatoria (taquicardia de desaparece utilizando inhibidores de la ECA se debe
reposo, respuesta ortostática exagerada de la pre- agregar a estos, bloqueadores d e receptores AT-I ya
sión arterial), la mejor opción para iniciar el trata- que con un bloqueo mas completo de la angiotensina
miento serán los betabloqueadores. Si se trata de (II) se logra un efecto nefroprotector mas potente y
una mujer, con cifras de presión levemente elevada desaparece la albuminuria en un alto porcentaje de
sin signos de daño en órganos "blanco", la primera los pacientes.
posibilidad será una forma hiporreninémica de hi-
pertensión y la mejor opción para empezar el trata-
miento serán los diuréticos y por fin, si el paciente
tiene cifras de presión muy elevadas, c o n signos de MEDICAMENTOS ANTIHIPERTENSIVOS
daño en órganos "blanco", la mayor posibilidad es
que se trate de hipertensión hiperreninémica y la BETABLOQUEADORES
mejor forma d e iniciar este tratamiento es con Propranolol, nadolol, metoprolol, atenolol,
fármacos que bloquean su secreción o alguno de los
bisoprolol, carvedilol
pasos metabólicos antihipertensivos más útiles en la
terapéutica de este proceso. En estos casos solo se El bloqueo de los receptores betadrenérgicos a ni-
logrará el control adecuado con terapia combinada vel del corazón produce disminución de la frecuen-
cia cardiaca y de la contractilidad; ello se traduce en
4*5
CARDIOLOGÍA
Recordar que la medicación diurética puede pro- 12 horas, y el lisinopril a dosis de 10 a 4 0 mg cada
ducir deshidratación, hipovolemia, hipokalemia y 24 horas; el fosinopril a 10 mg cada 12 ó 24 horas;
alcalosis metabólica cuando durante su administración el quinapril, de 10 a 20 mg cada 12 horas, y el
crónica no se controla al paciente adecuadamente en ramipril, de 5 a 10 mgcada 12 ó 24 horas.
forma periódica. Asimismo, puede causar hiperurice- El fosinopril es especialmente útil e n pacientes
mia y favorecer los ataques de podagra, por lo que con insuficiencia renal ya que la eliminación prin-
deberá administrarse con cautela en pacientes que cipal del fármaco se lleva a cabo a través del híga-
padecen gota. En la práctica diaria se utiliza clortalidona do. Estos fármacos pueden encontrarse asociados
asociada a espironolactona en dosis única por la maña- a tiazidas, lo cual les confiere mayor efectividad
na, o bien, se puede contar con la alternativa de medi- como medicación antihipertensiva. En la hiperten-
camentos que en una sola tableta tienen hidrodorotia- sión grave pueden utilizarse e n conjunto c o n beta-
zida asociada a triampterene, tiabutazida asociada a bloqueadores, diuréticos y vasodilatadores, mien-
espironolactona y los cuales también se administran tras que las mezclas de inhibidores de la enzima
en dosis única por la mañana. Conviene recalcar que conversora con diuréticos son especialmente úti-
los medicamentos "ahorradores" de potasio se en- les como medicación única e n hipertensión hipo-
cuentran contraindicados en pacientes con insuficien- rreninémica cuando no se logra el control adecua-
cia renal por el peligro de producir hiperkalemia. En d o de estos pacientes sólo c o n diuréticos. Los
estos enfermos únicamente podrá utilizarse furosemide inhibidores de la enzima conversora no son útiles
como diurético, en estos casos se encuentra en su e n aquellas formas normorreninémicas de la hi-
capacidad para eliminar Na y H O para disminuir el pertensión, en las que predominan la hipercinesia
volumen circulante. circulatoria, en donde los betabloqueadores tienen
indicación precisa. Los efectos colaterales más im-
Finalmente, los diuréticos tiazidicos tienen la con- portantes de estos fármacos son: la presencia de tos
veniencia de retener calcio, hecho vital en mujeres s e c a , irritativa e intratable a menos de que se
hipertensas posmenopáusicas, ya que este efecto descontinúe la ad-ninistración del fármaco; este efec-
coadyuva con otras medidas para evitar la osteoporosis. to al parecer se debe al aumento de concentración
de bradiquinina en el plasma; este síntoma aparece
e n el 15 a 20 % de los pacientes que reciben esta
I N H I B I D O R E S D E LA E N Z I M A C O N V E R S O R A medicación y que obliga a la descontinuación. Final-
mente, pueden presentarse hiperkalemia, especial-
(Captopril, enalapril, lisinopril, fosinopril. mente en pacientes con insuficiencia renal.
quinapril, ramipril)
Conviene mencionar que los inhibidores de la
Estos fármacos son inhibidores específicos competi- ECA tienen un poderoso efecto de cardiorrepara-
tivos de la enzima convertidora de angiotensina I ción. En efecto, si al paciente se le normaliza la
hacia angiotensina II. Este bloqueo en la formación presión arterial y en el esquema utilizado se encuen-
de la segunda enzima trae c o m o consecuencia la tra un inhibidor de la ECA, se promueve reducción
cancelación de su potente efecto vasoconstrictor por de la hipertrofia ventricular izquierda, lo cual coinci-
un lado, y de la secreción de aldosterona por el otro de con una función ventricular normal; por otro lado,
(figura 19). Por otro lado, los inhibidores de la ECA estor fármacos poseen un poderoso efecto de
evitan la degradación de bradiquinina y la acumula- nefroprotección (prolongan o evitan la aparición de
ción d e ésta e n el medio interno incrementa la sín- insuficiencia renal), por lo que todo paciente con
tesis de prostaglandinas vasodilatadoras ( P C I , y P G E , ) , albuminuria, con síndrome metabólico o con diabe-
efecto que también tiene una acción antihipertensiva tes mellitus, deben de recibir dentro del esquema
importante. El resultado neto de la administración antihipertensivo un inhibidor de la ECA.
de ellos es la disminución d e las resistencias perifé-
ricas, de la excreción de potasio plasmático y eleva-
ción de la concentración de renina por bloqueo al
B L O Q U E A D O R E S D E L O S R E C E P T O R E S AT-I
mecanismo de retroalimentación. Por lo tanto estos
D E LA A N G I O T E N S I N A
medicamentos son eficaces en la hipertensión, es-
pecialmente en la hipertensión hiperreninémica. El
captopril se puede utilizar a dosis de 50 a 150 mg al (Losarían, candesartán, ibesartán, telme-
día, dividido e n tres tomas (una cada 8 horas); el s a r t á n , etc.)
enalapril puede utilizarse a dosis de 5 a 40 mgcada Estos fármacos bloquean la acción de la angiotensina
II, al ocupar los receptores AT-I de la angiotensina; es
CARDIOLOGÍA
decir, un paso mas abajo del bloqueo de la enzima o asociados a diuréticos. Finalmente, hay contrain-
convertidora de la angiotensina. Con ello, se produ- dicación para usarlos en pacientes con insuficiencia
ce vasodilatación periférica y reducción de las resis- cardiaca por la depresión d e l estado contráctil
tencias peroféricas, aumento en la excresión renal miocárdico que producen.
de N a " y retención de potasio. De esta manera, El verapamil se podrá utilizar a dosis de 120 a
estos fármacos tienen un efecto muy similar a los 240 mgcada 24 horas en su forma de acción prolon-
inhibidores de la ECA, con la ventaja de que produ- gada; asimismo, el diltiazem podrá también ser uti-
cen tos como efecto indeseable en una proporción lizado e n forma de acción prolongada a dosis 45 mg
mucho menor que los otros fármacos (2-5 % ) . (media tableta) a 90 mg (una tableta) cada 12 horas e
Finalmente, estos medicamentos también tienen igualmente la nifedipina de acción prolongada a do-
efecto de cardiorreparación en la cardiopatía hiper- s i s d e 3 0 a 6 0 m g cada 12 horas. Recientemente se
tensiva (reducción de hipertrofia) y un poderoso efec- han introducido nuevos calcioantagonistas deriva-
to de nefroprotección (retarda o evita la aparición de dos de las dihydropiridinas q u e tienen efecto muy
insuficiencia renal, especialmente en pacientes dia- parecido a la nifedipina c o m o la nicardipina que se
béticos, aquellos otros con síndrome metabólico. Por administra a dosis de 2 0 a 30 mg cada 8 horas, o la
esta r a z ó n , e n pacientes dentro d e l e s q u e m a amlodipina o felodipina que tienen acción prolon-
antihipertensivo, siempre debe de haber un inhibidor gada y que pueden administrarse a dosis de 5 mg
de la ECA o un bloqueador de receptores AT-I. cada 24 horas la primera y 5 a 10 mg la segunda.
Conviene recordar q u e la nifedipina, amlodipina y
En aquellos pacientes en los que la albuminuria
felodipina en algunos pacientes producen síndro-
no desaparece con inhibidores de la ECA o con
me hipercinético (taquicardia por vasodilatación
bloqueadores d e los receptores de la angiotensina,
excesiva), cefalea muy molesta y e d e m a de miem-
se deben administrar ambos fármacos, que al pro-
bros inferiores. La aparición de estos síntomas es
mover un bloqueo mas completo de la angiotensina
indicación para interrumpir el fármaco. El principal
ofrecen un mayor efecto de nefroprotección.
efecto indeseable del verapamil es la constipación.
MEDICAMENTOS CALCIOANTAGONISTAS
V A S O D I L A T A D O R E S (figuras 9 y 19)
(Verapamil, diltiazem, nifedipina, a m l o d i p i n a ,
1. Arteriolares
felodipina, lacidipino)
Estos medicamentos inhiben el transporte de calcio Hidralazina, minoxidil, diasóxido
iónico a través de la membrana celular y de esta Producen relajación directa de la capa muscular de
forma bloquean el mecanismo excitación contrac- las arteriolas lo cual condiciona vasodilatación y dis-
ción del músculo liso de los vasos sanguíneos; este minución de las resistencias periféricas c o n la con-
efecto promueve una vasodilatación significativa siguiente caída de la presión diastólica. Este efecto
délas arteriolas periféricas, por lo que culmina con produce secundariamente estimulación simpática
una caída de las resistencias periféricas y, por lo (taquicardia, aumento de la contractilidad del cora-
tanto, de la presión arterial. A diferencia de los va- zón), por lo que aumenta e l gasto cardiaco y se
sodilatadores de acción directa, el verapamil y el estimula la secreción de renina plasmática; ello con-
diltiazem no causan secreción adrenérgica secun- duce a una fase de "reajuste" hemodinámico que
daria ni aumentan tampoco la secreción de renina culmina e n el desarrollo de "tolerancia" del orga-
plasmática. En conclusión, tienen una adecuada ac- nismo hacia e l efecto antihipertensivo d e estos
ción antihipertensiva que puede ser efectiva, c u a n - fármacos, además producen aumento del consumo
do se administran como medicación única, o bien, de oxígeno miocárdico por lo que es inconveniente
e n caso de hipertensión de más difícil control pue- su u t i l i z a c i ó n e n p a c i e n t e s c o n i n s u f i c i e n c i a
den asociarse con diuréticos. D a d o que estos medi- coronaria. Por esta razón, su utilización c o m o fár-
camentos (especialmente el verapamil y el diltiazem) maco único e n el tratamiento de la hipertensión
pueden actuar tanto en el aonotripismo sinusal como arterial, tiene importantes limitaciones; sin embar-
en la conducción AV, deben usarse con cautela cuan- go, su acción vasodilatadora puede ser aprovechada
do se asocian con betabloqueadores. cuando se cancela su efecto adrenérgico mediante
la adición de medicamentos betabloqueadores; asi-
Estos fármacos se han encontrado especialmen- mismo, se potenciará el efecto antihipertensivo de
te útiles en la hipertensión de predominio sistólico ambos fármacos. El vasodilatador más utilizado es la
que presentan los ancianos como medicación única
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
hidralazina, que se usa a dosis de 30 a 150 m g e n 24 b) De preferencia iniciar los vasodilatadores como
horas dividido en 3 tomas. Conviene iniciar con la medicación única. Posteriormente si fuera
dosis menor (10 mgcada 8 horas) y dependiendo de necesario adicionar en forma paulatina la
la respuesta se podrá incrementar paulatinamente medicación diurética y/o betabloqueadora.
la dosis (50 m g en 24 horas, 50 mg cada 12 horas y
50 mg cada 8 horas); se debe recordar que en el 10 c) Recomendar al enfermo que adopte el or-
al 20 % de los casos pueden presentar un síndrome tostatismo con todo cuidado, de preferencia
de lupus eritematoso sistémico, c u a n d o la dosis de con un lapso previo de unos minutos en que
este fármaco sobrepasa los 4 0 0 m g al d í a . permanezca sentado. Esta recomendación se
hará especialmente si recibe diuréticos.
V a l e m e n c i o n a r q u e la a d m i n i s t r a c i ó n d e
m i n o x i d i l (por vía oral) d e d i a s ó x i d o (por vía
parenteral) deberá hacerse siempre con medica- INHIBIDORES SIMPÁTICOS
ción diurética (además de los betabloqueadores)
porque promueven por sí mismos la retención de ( R e s e r p i n a , alfametildopa, clonidina)
N a + y H , 0 . La mezcla de betabloqueadores, vaso- La reserpina depleta los depósitos tisulares de ca-
dilatadores y diuréticos ha resultado especialmente tecolaminas, el alfametildopa se introduce e n el
benéfica e n la hipertensión arterial grave de difícil metabolismo de las catecolaminas como un falso
control del paciente nefrópata crónico o e n la transmisor y evita así el efecto adrenérgico e n los
hipertensión arterial maligna (figuras 9 y 19). El centros vasomotores bulbares y e n las terminacio-
diasóxido sólo está i n d i c a d o e n las urgencias nes neuronales simpáticas, cancelando así su efec-
hipertensivas. to constrictor arteriolar; la clonidina produce una
i n a c t i v a c i ó n p o s i n á p t i c a d e los r e c e p t o r e s
2. Alfabloqueadores adrenérgicos e n los centros cardiovasculares del
bulbo raquídeo. A u n cuando estos fármacos (es-
Prazosina pecialmente los dos primeros) han sido utilizados
Estos f á r m a c o s p r o d u c e n tanto vasodilatación extensamente, sus efectos colaterales indeseables
arteriolar como venodilatación; sin embargo, no limitan importantemente su uso e n la práctica dia-
poseen efecto adrenérgico secundario. Por lo tanto ria. La reserpina y la clonidina e n la actualidad se
disminuyen las resistencias periféricas (caída de la utilizan ya sólo por excepción; la alfametildopa pue-
presión diastólica) y el gasto cardiaco (por disminu- de tener indicación en el tratamiento de la hiper-
ción del retorno venoso) con la consiguiente dismi- tensión leve, o e n aquellos otros de hipertensión
nución de la presión sistólica. La prazosina por vía grave asociada a insuficiencia renal, así como a
oral ha demostrado la aparición del "fenómeno de vasodilatadores y diuréticos.
tolerancia", por lo que el tratamiento en hipertensión
crónica es inefectivo. No se ha demostrado su utili-
d a d c o m o medicación única e n hipertensión esen- C R I S I S H I P E R T E N S I V A (Cuadro 5)
cial moderada o grave. El riesgo fundamental de la
prazosina es el llamado "fenómeno de la primera La elevación exagerada d e las cifras de presión
dosis", que consiste en la aparición de lipotimia y arterial ( > 180 m m H g para la presión sistólica y/o >
síncope del paciente, cuando inicia el tratamiento 130 m m H g para la presión diastólica) siempre es un
vasodilatador y que al parecer se debe a que el signo de alarma clínica. Sin embargo, el médico
efecto venodilatador del fármaco disminuye debe de diferenciar con claridad dos aspectos: si
importantemente el retorno venoso al corazón con dicha elevación exagerada se acompaña de daño
la caída del gasto cardiaco; el efecto arteriolar del agudo y/o progresivo e n los órganos blanco o si el
medicamento no permite la vasoconstricción com- paciente se encuentra asintomático.
pensadora con la consiguiente caída de la presión En el primer caso, estaremos ante una emer-
arterial e hipoperfusión cerebral. Este efecto se ob- gencia hipertensiva, cuyo diagnóstico implica gra-
serva principalmente en aquellos sujetos tratados vedad inminente, peligro de daño permanente a un
con diuréticos. El conocimiento de estos riesgos órgano de " i m p a c t o " o de muerte próxima para el
potenciales debe hacer al médico prescribirlo con paciente.
cautela, y para evitarlo, tomar las precauciones ne- En estos casos, es imperativoiiri tratamiento in-
cesarias tales como: mediato que reduzca las cifras'de presión arterial
e n el curso de minutos o c u a n d o mas horas, para
a) Iniciar el tratamiento con dosis pequeñas. evitar un daño irreversible o mortal para el enfer-
CUADROS
FÁRMACOS EN EMERGENCIA HIPERTENSIVA
ESMOLOL 200 - 500 ug/Kg/min en 1 - 2 min 10 - 20 min Bradicardia , hipotensión Insuficiencia cardiaca,
4 min. Después 50 - 300 bloqueo AV,
u.g/Kg/min espasmo bronquial.
CUADRO 6 CUADRO 7
EMERGENCIAS HIPERTENSIVAS URGENCIAS HIPERTENSIVAS
—-4—
• Hipertensión descontrolada con disección
aórtica
• Hipertensión descontrolada con angina ines-
table o infarto del miocardio
• Hipertensión descontrolada con hemorragia c a , lo vasos sanguíneos han sufrido un proceso de
cerebral adaptación y e l edema cerebral aparece sólo con
• Eclampsia ^ ^ cifras muy elevadas de presión arterial; sin embar-
go, cuando la elevación tensional es brusca en suje-
tos que no han sido previamente hipertensos (niños
con glomerulonefritis aguda o mujeres jóvenes con
siderablemente el M V O , lo cual es deletéreo, para eclampsia), pueden presentar encefalopatía
un miocardio insuficiente e incrementa la isquemia hipertensiva a niveles de hipertensión mucho me-
en miocardio con insuficiencia coronaria. nores a los mencionados previamente.
Paradójicamente, en pacientes con hipertensión
H i p e r t e n s i ó n arterial grave c o m p l i c a d a con arterial crónica, si se reduce la presión arterial con
encefalopatía hipertensiva aguda fármacos antihipertensivos rápidamente, el cere-
La importante elevación d e la presión arterial pue- bro puede sufrir hipoperfusión que se manifiesta
d e producir hipertensión intracraneana y edema por isquemia cerebral transitoria. El paciente con
cerebral, que se manifiesta por intensa cefalea, vi- una crisis hipertensiva complicada con encefalo-
sión borrosa, náusea, vómito, somnolencia, estupor, patía hipertensiva debe ser tratado con rapidez,
coma y crisis convulsiva. Si esta complicación no es sin embargo, se debe evitar producir un descenso
inmediatamente tratada e n forma efectiva, el pa- brusco d e la presión arterial; la mayor parte de las
ciente puede morir e n pocas horas. complicaciones de la encefalopatía hipertensiva se
C u a n d o hay cambios bruscos d e la presión producen cuando se reduce bruscamente la pre-
arterial, los vasos cerebrales se dilatan o se contraen sión arterial; en estos pacientes se recomienda re-
para mantener un flujo cerebral constante ducir la presión arterial solo un 2 5 % de las cifras
(autorregulación del flujo cerebral), aún cuando en con las que llega el paciente; por ejemplo, si el
paciente es visto por primera vez c o n el cuadro de
el ser humano no ha sido estudiado por razones
crisis hipertensiva con cifras de 260/150 m m H g , se
obvias, en el mono normotenso cuando la presión
debe d e reducir inicialmente a 195/112 m m H g , y
aórtica media ed > de 150 m m H g o en el hipertenso
posteriormente reducirla e n forma paulatina, ha-
es > de 1 7 0 m m H g la vasoconstricción es vencida
ciendo cambios cada 30 minutos hasta alcanzar ci-
por estas cifras exageradamente elevadas de pre-
fras no peligrosas en el curso de 1 o 2 hrs. Las drogas
sión y los vasos se dilatan, primero e n aquellas zo- que pueden ser útiles para el tratamiento d e . la
nas con menor tono vasomotor, lo cual produce una encefalopatía hipertensiva son el nitroprusiato de
afluencia irregular del flujo en diferentes áreas del sodio, el labetalol, la nicardipina y el trimetafán (cua-
territorio cerebral y finalmente vasodilatación cere- dro 5 ) .
bral generalizada; ello condiciona hiperperfusión
cerebral con salida de liquido al intersticio y edema Recordar que en tales casos está contraindicada la
cerebral. C u a n d o este fenómeno ocurre en un pa- administración de fármacos que produzcan depresión
ciente c o n hipertensión arterial de evolución cróni- del sistema nervioso central (reserpina o atfameuldopa)
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
porque dicho efecto farmacológico podría enmas- aparición d e un intenso dolor torácico, transfictivo,
carar la recuperación de la encefalopatía hiperten- continuo, progresivo, que se acompaña de palidez,
siva; asimismo, podría simular la instalación de un diaforesis y q u e , si no se trata inmediatamente, pue-
accidente vascular cerebral (oclusivo o hemorrágico), de en pocas horas terminar con la vida del enfermo
o bien, por el contrario, la depresión central podría por disección extensa de la aorta o por ruptura del
ocultar signos neurológicos de una trombosis o he- aneurisma con choque hipovolémico. En estos c a -
morragia cerebral e n evolución. sos, los medicamentos de elección son el nitropru-
Si después de haber controlado adecuadamente las siato de sodio, el trimetafán oesmolohcuadro5). En
cifras de presión arterial el paciente persiste en estado ellos está c o n t r a i n d i c a d a la administración d e
de coma o con signos de lateral izadón neurológica, se diasóxido y de hidralazina porque el aumento del
debe sospechar la instalación de un accidente vascular gasto cardiaco y de la velocidad de expulsión del
cerebral de tipo trombótico o hemorrágico. corazón pueden favorecer la disección aórtica.
713
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4
I
Aneurisma
Capitulo 21 I de los grandes vasos
"La investigación del especialista se agota pronto si
éste la efectúa sólo como clínico o como técnico, sin
tener la preparación científica de base"
L
sístole, en la pared aórtica se genera tensión parietal
a aorta es la arteria más grande del cuerpo (o) que es la fuerza que tiende a separar las células
humano y transporta el contenido sanguíneo d e la pared d e l v a s o . La tensión parietal por
del corazón hacia prácticamente todo el orga- cm'lestrés parietal), se rige por la ley d e Laplace (a
nismo. Normalmente su diámetro es de 3 cm y está mayor presión dentro del vaso, mayor estrés); así,
formada por tres capas: la adventicia, que está cons- a mayor estrés habrá mayor adelgazamiento de la
tituida fundamentalmente por tejido colágeno y a pared d e l vaso y a que la tensión desarrollada es
través de ella se localizan los linfáticos y la vasa- inversamente proporcional al espesor de la pared
vasorum, que son los vasos que irrigan a la propia (figuraD.
pared aórtica; la capa media o muscular está forma- Cincuenta por ciento de los aneurismas de la
da por una pared de músculo liso, colágena entrete- aorta torácica afectan la raíz aórtica o la aorta ascen-
jida con fibras elásticas, lo cual le confiere al vaso dente; 1 0 % involucran al arco aórtico, 3 0 % afectan
fuerza de contención por un lado y elasticidad por la aorta torácica descendente y 1 0 % la porción
otro, y finalmente, la capa más interna o capa íntima toráco-abdominal.
que es una delgada y delicada capa de endotelio.
FIGURA 1 Tensión de
la pared aórtica. La
t e n s i ó n de la pared
aórtica (o) se rige por
la ley de Laplace. Cuan-
do aumenta la presión
intrarterial (P) aumen-
ta el radio y la tensión
parietal (o). Si el au-
mento de la tensión es
excesiva puede dar lu-
gar a ruptura de la ín-
tima y c o n s e c u e n t e -
mente a la disección de
la pared
Aneurisma de la aorta
torácica descendente
4^
CARDIOLOGÍA
I
• PERFORACIÓN DE LA ÍNTIMA
Ruptura de la
vasa-vasorum Perforación
% Disección •
de la capa exterior
media FIGURA 3 Fisiopatología de
la disección aórtica
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
TIPO I
F I G U R A 4 Clasificación de De
Bakeypara la disección aórtica. Tipo
I: disección proximal con extensión
hacia toda la pared aórtica. Tipo II:
disección proximal localizada. Tipo
Proximal y Distal Proximal Distal lll: disección distal con extensión
hacia la aorta abdominal
721
CARDIOLOGÍA
CUADRO 1
S Í N D R O M E DE MARFÁN
Alteraciones antropomórficas
• Extremidades largas.
• El segmento inferior (planta-pubis). Exce-
de el Superior (pubis-vertex).
• Relación segm. sup/segm inf. menor 0.90.
• La brazada excede la estatura.
• Aracnodactilia.
• Signo de Steinberg.
* Signo de Walker-Murdoch.
• Xifoescoiiosis.
• Paladar ojival.
• Tórax en "quilla".
• Dolicocefalia.
• Hiperextensibilidad articular. F I G U R A 5 Aracnodactilia. E s q u e m a que
ejemplifica esta alteración propia del síndrome
• Divertículos sinoviales. de Marfán
• Dislocación de caderas, rótula, etc.
• Pie plano.
• Hipotonía muscular.
~ jL
• Hernias.
4
CARDIOLOGÍA
—4—
ventrículo derecho condiciona la aparición de un
soplo continuo precordial.
726
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
aneurismas aórticos; sin embargo, se debe tener en tomografía computada es de especial valor para el diag-
cuenta a aquellos pacientes menores de 4 0 años en nóstico. Finalmente, cabe mencionar que pueden exis-
los q u e , sin ser hipertensos aparece un aneurisma tir p e q u e ñ o s a n e u r i s m a s saculares q u e pasan
de la porción ascendente d e la aorta y que además inadvertidos a las radiografías simples de tórax; usual-
no tienen estigmas antropomórficos del síndrome mente se descubren mediante angiocardiografía.
de Marfán. Estos casos, que no son raros, correspon-
den a las formas familiares de necrosis medioquística Ecocardiografía
de la aorta aislada ya que el estudio macroscópico La ecocardiografía modo M es de utilidad para estu-
de la pared aórtica usualmente enseña las alteracio-
diar los aneurismas que involucran la raíz aórtica o
nes histológicas del padecimiento.
la aorta ascendente (figura 11) y lo mismo se puede
decir de la ecocardiografía bidimensional, que tie-
Estudio radiológico de tórax ne gran sensibilidad para demostrar la presencia de
La radiografía de tórax es de gran utilidad y permite los aneurismas aórticos de esta localización (figura
sospechar fuertemente el diagnóstico de aneurisma 12). Mediante aproximación supraesternal se pue-
aórtico tanto de la aorta ascendente (figuras 8 y 18), den demostrar los aneurismas del cayado aórtico,
como del cayado (figura 9) y aorta torácica descen- sin e m b a r g o , m e d i a n t e la e c o c a r d i o g r a f í a
dente (figuras 9 y 1 0 ) ; las calcificaciones lineares transesofágica es posible demostrar la presencia de
de la pared permiten sospechar la etiología luética aneurismas aórticos del cayado y aorta torácica des-
del aneurisma (figura 9 ) . cendente c o n gran precisión y si ellos se han c o m -
Por otro lado, la normalidad de la silueta cardiaca plicado c o n trombosis o disección (figura 13).
permite exduir la posibilidad de una insuficiencia aórtica El sistema Doppler es útil para corroborar la pre-
de importante repercusión hemodinámica (figura 9 ) , sencia de insuficiencia aórtica, especialmente e n
mientras que la dilatación ventricular izquierda en au- aneurismas que involucran la raíz del vaso. La ultra-
sencia de signos de hipertensión venocapilar sugiere la sonografía abdominal es muy útil para reconocer
presencia de insuficiencia aórtica con importancia he- aneurismas de esta localización (figuras 14 y 15).
modinámica agregada (figuras 8 y 18). Se debe tener en
cuenta que en ocasiones los aneurismas aórticos se ma- Tomografía computarizada de alta resolución
nifiestan radiológicamente como masas mediastinales (TAC)
que son muy difíciles de distinguir de tumoraciones La T A C de tórax tiene su especial indicación cuando
originadas en ese sitio (linfoma, hamartoma, tumores se observa una masa mediastinal cuyo origen no ha
embrionarios, etc.), por lo que en estos casos la podido dilucidarse con radiografías simples, tomografía
FIGURA 10 Aneurisma de la aorta torácica descendente. La radiografía de tórax PA (A) y lateral (B)
demuestra la dilatación aneurismática de la porción descendente de la aorta torácica (flechas)
727
CARDIOLOGÍA
FIGURA 12 Aneurisma de la raíz aórtica. A: el ecocardiograma 2-D (eje largo paraesternal) demuestra la
dilatación aneurismática de la raíz aórtica en donde alcanza un diámetro de 70 mm. El ventrículo izquierdo
se encuentra dilatado (diámetro diastólico de 65 mm) por la insuficiencia aórtica concomitante. B: el eje
corto paraesternal enseña la dilatación de la aórtica (diámetro 70 mm). Nótese el orificio central que
demuestra la falta de coaptación valvular y que es la condicionante de la insuficiencia aórtica presente en
este caso. I: Valva izquierda; NC: no coronariana; D: Valva derecha.
728
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
Estudios angiográficos
La aortografía demuestra, sin lugar a dudas, la pre-
sencia de un aneurisma aórtico, su extensión, si es o
no acompañada de insuficiencia aórtica, y su locali-
zación precisa (figuras 1 8 , 19 y 2 0 ) . Este estudio
está indicado especialmente e n aquellos pacientes
en los que después de haber hecho el diagnóstico
se quiere valorar la posibilidad quirúrgica. En estos
casos es de importancia recalcar que esta informa-
ción en ocasiones, puede recabarse en forma com-
pleta con métodos de diagnóstico incruentos tales
c o m o la ecocardiografía paraesternal (aneurismas
de la raíz aórtica (figuras 11 y 1 2 ) , ecocardiografía
transesofágica (aneurismas del cayado y aorta des-
FIGURA 15 Aneurisma de la aorta abdominal. La cendente (figura 13), ultrasonografía abdominal (fi-
ultrasonografía abdominal (corte transversal) de- guras 14 y 1 5), tomografía axial computada (figura
muestra la dilatación aneurismática de la aorta 16 y 17). El estudio angiográfico (figuras 1 8 , 1 9 y 20)
con un diámetro máximo de 50 mm. (Cortesía del
Dr. Sergio Fernández. Unidad radiológica. Clínica Londres) demuestra la localización, la extensión y las compli-
caciones del aneurisma.
4
CARDIOLOGÍA
A n e u r i s m a d e la A o r t a A b d o m i n a l
(TAC helicoidal 3D)
Eosición delimita el aneurisma de la porción ascendente de la aorta. La dilatación del anillo valvular y
i importante insuficiencia aórtica que permite el llenado franco de la cavidad ventricular izquierda que
se encuentra dilatada (hágase la correlación anatómica entre la placa de tórax y el estudio angiográfico)
FIGURA 19 Aneurisma del cayado aórtico. Estudio angiográfico (posición lateral izquierda). A la izquier-
da: se puede ver la normalidad de la válvula aórtica y lateral de la raíz del vaso. Por arriba ,se delimita
un enorme aneurisma que involucra el cayado aórtico. A la derecha: el disparo de medio de contraste
en el seno del aneurisma demuestra el gran tamaño del mismo
CARDIOLOGÍA
FIGURA 21 A) Insuficiencia aórtica aguda. El ecocardiograma modo M demuestra que la válvula mitral
tiene una apertura normal (d-e) pero se muestra un cierre precoz (c') de la válvula mitral, hecho que
denota elevación extrema de la presión intraventricular. Nótense los signos de dilatación del ventrículo
izquierdo (VI): diastólico de 65 mm, con signos de falla contráctil (diámetro sistólico 50 mm), con
acortamiento porcentual de 23%. Este hallazgo implica tratamiento quirúrgico de urgencia. B) Insu-
ficiencia aórtica aguda. El disparo de medio de contraste en la raíz aórtica (Ao) demuestra una
dilatación aneurismática de ese sitio y el llenado masivo del ventrículo izquierdo (VI) condicionado por
una insuficiencia aórtica aguda (posición lateral izquierda)
A N E U R I S M A D E L O S G R A N D E S VASOS
único camino que permite un tratamiento médico o realizar inmediatamente ecocardiografía transeso-
quirúrgico oportuno. fágica que demostrará c o n seguridad el diagnóstico
El primer paso constituye un alto índice de sos- de disección aórtica (figura 13) ya que se ha demos-
pecha clínica por el médico tratante. C o m o ya se trado que este procedimiento tiene una sensibili-
mencionó, el cuadro clínico es de gran importancia dad de 9 9 % y especificidad de 9 7 % para este fin. Si
para establecer la sospecha inicial que permite orien- el cuadro es de extrema gravedad, con sólo este
tar correctamente el diagnóstico. En efecto, la apari- estudio podrá llevarse al paciente a tratamiento qui-
ción súbita de dolor torácico de gran intensidad plan- rúrgico. Si se ha logrado la estabilización hemodi-
tea al médico la primera disyuntiva de diagnostico námica puede practicarse tomografía computada in-
diferencial: infarto del miocardio contra disección yectando contraste o resonancia magnética nuclear
aórtica. Dos son los hechos que permiten la orienta- (figura 23), y aortografía (figura 24) si es que se
ción inicial: las características del dolor en el tiempo y requieren mayores datos anatómicos sobre el aneu-
el electrocardiograma. En el infarto agudo, el dolor risma o la disección; sin embargo, en algunos cen-
tiene una intensidad creciente hasta ser insoportable tros sólo se requiere de estos tres últimos estudios
mientras que el dolor de la disección aórtica tiene su sólo en el 10 % de los casos para decidir la cirugía.
máxima intensidad cuando ocurre la disección y aun La importancia del diagnóstico diferencial estriba
cuando se mantiene en el tiempo su intensidades es en que a una disección aórtica proximal se le puede
progresivasmente menor que cuando apareció o sea dar tratamiento trombolítico equivocadamente cuan-
tiene un carácter decreciente. Por su parte, el elec- do el diagnóstico establecido es de infarto del mio-
t r o c a r d i o g r a m a m a n i f i e s t a i m a g e n d e lesión cardio agudo, hecho que culmina con la evolución
subepicárdica o subendocárdica en la gran mayoría de fatal del enfermo. Otras enfermedades con las que
los casos; por el contrario, un electrocardiograma nor- se puede confundir la disección aórtica aguda son:
mal que coincide con dolor torácico súbito de gran angina inestable, neumotorax, pericarditis aguda,
intensidad debe orientar al clínico hacia el diagnóstico embolia pulmonar. Con lo que respecta a la disec-
de disección aórtica. ción de un aneurisma abdominal, primeramente
debe sospecharse con el cuadro clínico y ante la
En segundo término, se debe tener en cuenta sospecha de disección, la tomografía computada (fi-
que la disección aórtica puede constituirse en un gura 25) o la resonancia magnética nuclear serán
evento catastrófico y en conjunto con el dolor torácico capaces de demostrar el diagnóstico.
puede aparecer estado de choque, taponamiento
cardiaco, ausencia de alguno de los pulsos periféricos
y debe tenerse muy presente que la aparición de un
soplo de insuficiencia aórtica es un signo d e gran HISTORIA NATURAL Y TRATAMIENTO
ayuda para sospechar el diagnóstico. En otras oca- I) A n e u r i s m a de aorta torácica
siones, puede existir insuficiencia aórtica aguda y
no escucharse el soplo por coincidir con un cuadro En las series de Yale c o n estudio longitudinal se
de edema agudo pulmonar, o bien, el cuadro agudo encontró:
puede acompañarse de algún signo de déficit de
a) El promedio de crecimiento anual de aneurismas
irrigación cerebral (hemiparesia, hemiplejía, disfasia,
de aorta torácica fue de 0.1 cm por año.
amaurosis, etc.) C u a n d o el hematoma disecante
ocluye una carótida. Recordar que en el 90 % de los b) La velocidad de crecimiento es mayor en los
casos la radiografía de tórax es anormal e n estos que se localizan e n la aorta torácica descen-
casos (figuras 8 , 9 y 10). Ante un cuadro agudo de dente que e n la porción ascendente
estas características, el ecocardiograma transtorácico
puede ser de gran ayuda, pues el no demostrar al- c) C r e c e n más rápidamente e n los pacientes
guna alteración segmentaria d e la contracción ven- c o n síndrome de Marfán o en el aneurisma
tricular (hipocinesia, acinesia o discinesia) descarta familiar.
infarto del miocardio agudo; el demostrar cierre d) El tamaño inicial del aneurisma es un impor-
precoz de la mitral asegura el diagnóstico de insufi- tante factor predictivo del crecimiento del
ciencia aórtica aguda (figura 2 1 ) ; asimismo, puede aneurisma.
corroborar el diagnóstico de taponamiento cardiaco,
el diagnóstico de disección aórtica en su porción e) En aneurismas < d e 5 cms. el crecimiento
ascendente (figuras 13 y 22), sin embargo, si el anual es del 2 % ; en aquellos otros entre 5 y
estudio transtorácico no es concluyente, se debe 5.9 cms. es de 3 % y finalmente en los > de
6 c m s , es del 7 %, por lo tanto el riesgo de
4_Z33
CARDIOLOGIA
FIGURA 22 Disección aórtica. Ecocardiograma modo M. El barrido desde la aorta ascendente hasta la
válvula mitral (m) demuestra la gran dilatación del vaso por encima de la raíz con disección de su pared
anterior (flechas), la dilatación del ventrículo izquierdo se debe a insuficiencia aórtica agregada
734
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
FIGURA 24 Aneurisma
disecante de aorta (tipo
lll de Bakey). A: el dis-
paro de medio de con-
traste demuestra
cómo se llena la aorta
(Ao), y a nivel de su
porción descendente
torácica se abre una
falsa vía (señalada con
una flecha), que comu-
nica con la porción di-
secada de la aorta. B:
la aorta ya se vació de
medio de contraste y
éste permanece en la
porción disecada del
vaso. (Cortesía el Dr. Jesús
Vázquez)
FIGURA 25 Aneurisma disecante de la aorta abdominal. La tomografía axial computada del abdomen
(corte transversal) demuestra (a la izquierda) la aorta (Ao) distorsionada por un hematoma disecante
(A) de gran magnitud (diámetro de 16 cm). A la derecha un corte más abajo demuestra la dilatación
aneurismática de la aorta (Ao) y el hematoma disecante (B). Se puede observar la presencia de un
trombo mural (C) que oblitera parcialmente la luz de la aorta. Nótese la calcificación de la pared del
vaso y las relaciones de la aorta con los ríñones y las vértebras (V). (Cortesía del Dr. Sergio Fernández. Unidad
radiológica. Clínica Londres)
4 735
CARDIOLOGÍA
i FIGURA 26 El aneurisma
i aórtico es resecado y re-
emplazado por un tubo de
736
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
A n e u r i s m a de la aorta a s c e n d e n t e y c a y a d o
Tratamiento quirúrgico
FIGURA 27 El aneurisma de
la aorta a s c e n d e n t e que
involucra el cayado aórtico, se
reseca y el injerto de Dacrón
se une tanto a la raíz aórtica
y a la aorta torácica descen-
dente como a los vasos que
n a c e n del c a y a d o : Tronco
bronquiocefálico, carótida iz- Tomado de Isselbacher
quierda y subclavia izquierda Circulation 2005; 111:8t 6-828
con autorización
en forma selectiva
4 737
CARDIOLOGÍA
A n e u r i s m a d e la a o r t a d e la a o r t a t o r á c i c a d e s c e n d e n t e
Tratamiento quirúrgico
Tomado de Uselb.icher
Circulation 2005; 111:816-828
con autorización
2LL
ANEURISMA DE LOS GRANDES VASOS
De ellos, tuvo que ser reoperado el 25 %; seis (5 %) excesivo de la presión pulmonar(hipertensión pul-
se reoperaron e n dos ocasiones y dos ( 1 . 8 % ) tuvie- monar) , aumentará también excesivamente el
ron que ser reoperados en tres ocasiones. La morta- estrés de la pared y será factor predisponente para
lidad se incrementa con cada reoperación: una in- la formación de un aneurisma d e la arteria pulmo-
tervención, 1 3 . 3 % ; dos intervenciones, 2 0 % ; tres nar. Por otro lado, la alteración estructural de la
operaciones, 3 0 %. La mortalidad hospitalaria fue pared (síndrome de Marfán) permitirá la dilatación
influida por realizar de urgencia la intervención y aneurismática sin que se encuentre una elevación
reemplazo de aorta toracoabdominal; la evolución d e la presión intrarterial. Si coincide la hiperten-
tardía enseñó una sobrevida d e 89.6 % a un a ñ o ; sión pulmonar c o n síndrome de Marfán el aneuris-
79.3 % a 5 años; 53.9 % a 1 0 años y 3 5 % a 12 años. ma se producirá con mayor facilidad. Asimismo,
c o n más frecuencia la hipertensión pulmonar al-
Vale la pena hacer notar que otros padecimien-
canza niveles excesivamente altos en pacientes con
tos frecuentemente son erróneamente confundidos
cardiopatías congénitas del tipo de la c o m u n i c a -
con disección aórtica como lo son cólico por cálculo
ción interauricular o interventricuiar, o b i e n ; per-
uretral, hernia encarcelada, colecistitis aguda, infar-
sistencia del conducto arterioso que se ha compli-
to mesentérico, embolia arterial hacia algún miem-
c a d o c o n g r a v e h i p e r t e n s i ó n , p u l m o n a r . La
bro pélvico, dolor por compresión de hernia de
hipertensión pulmonar primaria también puede al-
disco intervertebral, etc.
canzar niveles exageradamente altos de presión
pulmonar pero es un padecimiento raro e n estos
ANEURISMA DE ARTERIA PULMONAR casos, una d e las complicaciones probables es la
aparición de un aneurisma pulmonar. Por otro lado,
FISIOPATOLOGÍA se han informado casos de síndrome de Marfán
complicados con un aneurisma pulmonar. En estos
Para que se forme un aneurisma en la arteria pul- casos es frecuente la muerte por la ruptura del
monar, es necesario que prevalezcan las mismas a n e u r i s m a (figura 3 0 ) . A n t a ñ o la p r e v a l e n c i a
condiciones anatómicas y hemodinámicas e n di- etiológica d e l aneurisma del tronco de la arteria
c h a arteria, q u e las referidas para la formación de pulmonar correspondía a la tuberculosis (aneuris-
aneurismas aórticos. En otras palabras, el aumento
4*
CARDIOLOGÍA
PCA H.A.P.
CIV Primaria
/
CIA
H.A.P.I
PX D Síndrome
de Marfán
1
DILATACION
1
MEDIONECROSIS QUISTICA
PULMONAR D E LA A R T E R I A P U L M O N A R
\A N E U R I S M A D E LA
ARTERIA P U L M O N A R
Ruptura
Muerte
súbita
4=
CARDIOLOGÍA
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•
Síndrome metabólico
como factor de riesgo
Capítulo 22 cardiovascular
- i
"Quien aspire a ser médico, debe saber que cuando
el titulo se adquiere; el estudio ba de ser de todos los
días y de todos los años y de toda la vida "
L
a Primera descripción clínica de lo que aho- des cardiovasculares relacionadas al síndrome. Lo
ra conocemos como "Síndrome Metabólico" anterior ha determinado que hoy día sea priorita-
es probablemente la que realizaran Eskyl Klin rio dentro de los programas nacionales d e salud
y por otro lado Gregorio Marañon a principios del ofreciéndole especial atención a su prevención, su
siglo pasado (1920). Ellos encontraron una estrecha detección temprana y tratamiento y de ésta forma
relación clínica entre la presencia de hipertensión evitar la aparición de sus severas consecuencias.
arterial, hiperglucemia e hiperuricemia, observando El SM es pues un conjunto de condiciones clí-
que coexistían en el mismo paciente con relativa fre- nicas que han sido involucradas como importan-
cuencia. Más de medio siglo después, a raíz de la tes factores de riesgo de enfermedades aterotrom-
descripción del "Síndrome X" realizada por Reaven en bóticas. Todos ellos interactúan en forma sinérgica
1988, quién lo aplico a un conjunto de factores de causando una aceleración en la progresión de la
riesgo cardiovascular donde ademas de los menciona- ateroesclerosis.
dos agrego la presencia de hiperinsulinemia y un per-
fil lipidico anormal (hipertrigliceridemia y niveles ba-
jos de lipoproteínas de alta densidad). Más tarde fueron DEFINICIÓN
•
4— CUADRO 1
DEFINICIÓN DEL SÍNDROME METABÓLICO DE A C U E R D O A LA OMS
índice cintura/cadera
Mujeres > 0.85
Hombres > 0.90
2. Trigliceridos > 150 mg/dl
3. Colesterol HDL
Mujeres < 30 mg/dl
Hombres < 35 mg/dl
4. Presión Arterial > 140/90 mmHg
5. Microalbuminuria > 20 mcg/min o relación albúmina/
creatinina > 30 mg/gr I
como un valor anormal, por lo que actualmente se resistencia a la insulina y/o hiperglucemia como
sugiere tener dicho valor como criterio para clasifi- un componente necesario mientras que en este ul-
cación del Síndrome Metabólico. timo es tan solo un componente más de los 5 posi-
Para realizar el diagnostico de Síndrome Meta- bles factores de riesgo.
bólico de acuerdo a esta clasificación es necesario
contar con 2 factores de riesgo sumados a la resis-
4r—
tencia a la insulina. Una desventaja de esta clasifica-
ción es la necesidad de pruebas especiales para
verificar el estado de glucosa sérica posprandial en CUADRO 2
búsqueda de intolerancia a la glucosa. DEFINICIÓN CLÍNICA DE SÍNDROME META-
El Programa Nacional de educación sobre el B Ó L I C O DE ACUERDO AL ATP lll
C o l e s t e r o l en los Estados U n i d o s (National FACTOR
Cholesterol Education Program -NCEP-) en el Tercer DE RIESGO NIVEL DEFINIDO
Panel de Tratamiento del Adulto (Adult Treatment
Panel lll -ATP lll-) definió como portador de Síndro- Obesidad Abdominal Circunferencia de cintura
me Metabólico en 2001, a aquel paciente que conta- Mujeres > 88 cm
ra con la presencia de tres ó más criterios de los Hombres >102 cm
enunciados en el (Cuadro 2). En esta clasificación
Trigliceridos 2150 md/dl
no es necesaria la demostración explícita de re-
sistencia a la insulina, ya que se considera que el Colesterol HDL
sobrepeso y la obesidad están asociados a su re- Mujeres < 50 mg/dl
sistencia y considera que la obesidad abdominal Hombres < 40 mg/dl
esta mas fuertemente relacionada como factor
de riesgo metabólico que el índice de Masa Cor- Presión Arterial 2130/85 mmHg
poral (IMC). La diferencia más importante entre Glucosa en ayuno ü 110 mg/dl i
las dos definiciones es que la primera incluye
7
Mr
SÍNDROME METABÓLICO COMO FACTOR DE RIESGO CARDIOVASCULAR
4r— CUADRO 3
CRITERIOS DE CLASIFICACIÓN SEGÚN LA SOCIEDAD AMERICANA
DE ENDOCRINÓLOGOS CLÍNICOS ( AACE 2002)
4 *
CARDIOLOGÍA
Ir
SÍNDROME METABÓLICO COMO FACTOR DE RIESGO CARDIOVASCULAR
central, que la simple medición del perímetro ab- densidad: VLdL) . A u n q u e este ultimo no se en-
dominal, por lo que e n un futuro tomaran valor cuentra dentro de los criterios de definición para
algunos marcadores bioquímicos que han demos- el síndrome metabólico, es hoy e n día uno d e los
trado tener buena capacidad diagnostica. Se han valores de fundamental importancia dentro de las
hecho múltiples esfuerzos para definir sobrepeso y metas de manejo en estos pacientes. La resistencia
obesidad e n términos clínicos simples. Idealmente a la insulina y la hiperinsulinemia compensadora pro-
debe hacerse tomando en consideración la concen- ducen una sobreproducción de partículas V L D L . En-
tración de grasa corporal en relación a la altura, tre las características bioquímicas de las L D L peque-
sexo y edad del individuo. Existen métodos muy ñ a s y d e n s a s q u e i n c r e m e n t a n su p o t e n c i a l
precisos pero desafortunadamente caros, como se- aterogenico se encuentra el hecho de tener un
ria la Tomografía Computada y la Resonancia Mag- menor contenido de fosfolipidos y colesterol no
nética que permiten medir con precisión el conte- esterificado e n su superficie, lo c u a l c o n d i c i o n a
nido de tejido adiposo corporal. En la práctica clínica c a m b i o s e n la c o n f o r m a c i ó n d e la a p o p r o t e i n a
sin embargo, las medidas antropométricas han mos- B-100 q u e c o n d i c i o n a una mayor a f i n i d a d d e
trado ser efectivas para ello. En términos generales estas partículas por proteoglicanos arteriales, ma-
para definir un incremento en la grasa corporal se yor c a p a c i d a d d e migración al espacio subendo-
ha utilizado el I M C : peso corporal e n Kilogramos telial y m a y o r s u s c e p t i b i l i d a d a la o x i d a c i ó n
dividido entre la estatura en metros al cuadrado = Kg/m-'. lipídica Estas a n o m a l í a s (fenotipo l i p o p r o t e i c o
El valor así obtenido permite definir si el peso e n aterogenico c o n patrón B) c o n t r i b u y e n de m a -
relación a la talla del individuo es bajo, normal o se nera significativa al incremento de riesgo de e n -
encuentra elevado, e n cuyo caso se hablaría de fermedad cardiovascular e n pacientes con resis-
sobrepeso u obesidad. ( C u a d r o 4). Estos valores de tencia a la insulina.
corte p e r m i t e n ubicar el grado de riesgo
cardiovascular e n estos pacientes. A u n q u e el I M C La H i p e r t e n s i ó n Arterial esta asociada fuerte-
es un instrumento practico para estimar la grasa cor- mente con la obesidad y la resistencia a la insulina,
poral hay que reconocer que tiene sus limitaciones, por lo que se ha llegado a un consenso general e n
sin embargo se ha podido demostrar un incremento incluirlo como parte importante del síndrome me-
significativo en la mortalidad total cuando el I M C es tabólico no obstante que muchos investigadores lo
superior a 25 Kg/m-' y de mortalidad cardiovascular consideran c o m o el factor "menos metabólico" de
cuando el I M C se eleva a valores > 2 9 Kg/m-'. todos los demás componentes del síndrome. El pa-
pel de la resistencia a la insulina c o m o coadyuvante
En S M , la D i s l i p i d e m i a aterogénica se carac- fisiopatológico e n hipertensión arterial esta bien
teriza fundamentalmente por incremento e n los definido. Entre los mecanismos implicados en su
niveles plasmáticos d e trigliceridos y baja con- génesis se han señalado activación del sistema ner-
centración d e colesterol-HDL, así como prepon- v i o s o s i m p á t i c o por h i p e r a c t i v i d a d d e l e j e
derancia de partículas L D L pequeñas y densas hipotálamo-hipofisario-adrenal con aumento del in-
(contenidas e n las lipoproteínas de m u y baja tercambio N a + / H + y aumento e n la reabsorción
tubular de N a , hipertrofia del músculo liso vascular
4— CUADRO 4
CLASIFICACIÓN DE SOBREPESO Y OBESIDAD
secundaria a la acción mitógena d e la insulina y la
modificación del transporte d e calcio a través de la
membrana celular. Además se ha demostrado que
la hiperglucemia condiciona disfunción endotelial.
Los sujetos Hipertensos con Hipertrofia del Ven-
SEGÚN IMC
trículo izquierdo demostrada por ecocardiografía,
LIMITES IMC CLASIFICACIÓN tienen niveles de insulina e n ayunas significativa-
mente superiores a los hipertensos sin hipertrofia.
<18.5 Bajo peso
18.5 - 25 Normal La r e s i s t e n c i a a la i n s u l i n a esta presente e n
25 - 30 Sobrepeso la mayoría de los pacientes c o n S M . A u n q u e e n
30 - 35 los estadios iniciales la tolerancia a la glucosa es
Obesidad Grado 1
normal por la función c o m p e n s a d o r a d e la c é l u -
35 - 40 Obesidad Grado II
las beta, los pacientes que cursan con un periodo
> 40 Obesidad Grado lll largo de resistencia a la insulina, terminan por
(Mórbida) 1 manifestarse c o m o intolerancia a la glucosa que
puede finalmente evolucionar a Diabetes Mellitus.
4™
CARDIOLOGÍA
Se han utilizado varios métodos para medir el grado na favorece la expresión de la sintetasa del óxido
de resistencia a la insulina. El más exacto es la técni- nítrico (ONS), lo cual aumenta sus concentraciones
ca de "clamp" o pinza euglicémica hiperinsulinémi- vasculares y con ello produce vasodilatación arterial;
ca, que consiste en inyectar por vía intravenosa una este efecto liberador de oxido nítrico, también lo
dosis de insulina fija y predeterminada, y una infu- ejerce a nivel de las plaquetas. Por otro lado, la
sión variable de glucosa suficiente para lograr man- insulina tiene un poderoso efecto antioxidante que
tener valores normales durante toda la prueba; sin se manifiesta al reducir la generación de radicales
embargo el hecho de requerir para su realización superóxido (ROS) y con ello el estrés oxidativo, tam-
de instrumental sofisticado, personal entrenado y
bién posee un efecto antiinflamatorio intrínseco que
varias horas de estudio así como el riesgo de
reduce la expresión genética de los factores pro
hipoglucemia, lo hace poco accesible a todos los
inflamatorios como el factor nuclear kappa B (NFKB),
medios. La medición de los niveles de insulina en
moléculas de adhesión-1 de los monocitos (ICAM-
ayunas y/o 2 horas después de una carga oral de
1), proteínas quimiotácticas de los monocitos (MCP),
glucosa se considera la forma más practica de medir
resistencia a la insulina. En México, la ENEC demos- proteínas C reactiva (PCR), y metaloproteinasa
tró que la percentila 75 de la concentración de (MMP), y por el contrario favorece la expresión del
insulina basal corresponde a un valor mayor de inhibidor del factor nuclear Kappa B (IKB); también
22.5 mU/ml, y por ello en nuestro medio el valor la insulina es capaz de suprimir los medidores infla-
por arriba de esta cifra establece el diagnostico de- matorios como la interleucina 1 -B (IL-1B), interleu-
finitorio de resistencia a la insulina. cina-6 (IL-6) y el factor de necrosis tumoral (TNF-a).
Tiene un efecto antitrombóticos al inhibir la expre-
sión del factor tisular (FT) y fibribolítico al inhibir la
FISIOPATOLOGÍA expresión del inhibidor del activador del plasminó-
geno (PAI-I); asimismo se ha demostrado que la
A C C I O N E S N O METABÓLICAS D E LA INSULINA insulina activa los receptores tisulares de la insulina
(figura 1) (IRS) lo cual al favorecer su acción tisular tiene un
En condiciones normales, la insulina tiene diversas efecto anti-ateroscleroso: Finalmente, la insulina tie-
acciones que favorecen la integridad y la normali- ne una acción antiapoptótica, y con ello ofrece un
dad en la función endotelial. En efecto, esta hormo- efecto cardioprotector, ya que reduce el tamaño
INSULINA
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ira
54-
SÍNDROME METABÓLICO COMO FACTOR DE RIESGO CARDIOVASCULAR
Vasoconstricción
T Reactividad vascular i Cardioprotección
¿Flujo de reversa
C r * n inferió
ION IC
Efectos vasculares de
la resistencia a la
T ROS
T Estrés oxidativ
insulina Aterosclerosis
i ChudM NADPH
¿ Superixido nwtoinntinjJ
TfNkB
AlkB
TMIF
TPCR
TTNF-
Circulation 2005;111:1448-1454
FIGURA 2
751
CARDIOLOGÍA
s e n d a de otros factores de riesgo cardiovascular, ellos son re-esterificados para formar trigliceridos
c o m o son la alteración en el metabolismo lipídico y los cuales cuando se acumulan en el hígado dan
la presión arterial, esta ultima desencadenada por lugar a la esteatosis hepática (hígado graso), hecho
diferentes mecanismos, entre los cuales se sobresa- frecuente en el síndrome metabólico, por la insufi-
len: reabsorción tubular renal de sodio, activación ciente oxidación de los ácidos grasos libres. La pre-
del sistema nervioso adrenérgico, proliferación de sencia d e lipólisis excesiva en los adipositos produ-
células musculares lisas y alteración d e la función c e una elevación importante de los ácidos grasos
endotelial. La resistencia a la insulina en el músculo
libres con el plasma; este hecho e n conjunto con
esquelético conduce a intolerancia a la glucosa,
hiperlipoproteínemia de muy baja densidad: V L D L
incrementa la gluconeogenesis hepática y produc-
intercambian esteres del colesterol (CE) por la ac-
ción de partículas V L D L ricas e n trigliceridos.
ción de la proteína de transferencia d e colesterol
( C E T P ) , con las lipoproteínas de alta densidad
RESISTENCIA A LA INSULINA Y M E T A B O L I S M O ( H D L ) ; los C E en mayor proporción van hacia las
L I P I D O (figura 3) V L D L y de ahí por la misma C E T P hacia la síntesis de
Lipoproteínas de baja densidad: Ldl que se llenan
La insulina, normalmente inhibe la liberación d e
de LdL pequeñas y muy densas, las cuales regresan
á c i d o s grasos l i b r e s por las c é l u l a s a d i p o s a s
alosVLdL.
(adipositos). C u a n d o hay resistencia a la insulina
esta no llega a los adipositosy no bloquea la lipólisis, A la elevación de las V L d L , se le ha llamado
por lo que estas células liberan una cantidad exage- "hipercolesterolemia no L d L " y es parte d e la
rada d e ácidos grasos libres que son transportadas al hiperlipidemia aterogénica que en resumen esta
hígado y al músculo; ahí estimulan la síntesis d e constituida por:
glucosa hepática que no es captada por el hígado
por la falta de insulina, hecho que provoca o exa- a) Elevación de los trigliceridos
cerba la hiperglucemia. b) Reducdón délas HdL
c) Elevación de las V L D L
HIPERLIPIDEMIA ATEROGÉNICA
La hiperlipidemia aterogénica tiene la misma
Los ácidos grasos libres en el hígado son oxidados potencia aterogénica que la elevación del coleste-
en una pequeña proporción, pero la mayor parte de rol a expensas de las LdL.
Hiperlipidemia Aterogénica
AdipotHos
t Trigliceridos ( T C )
T Lipoproteínas de muy baja densidad t VLDL I
i Lipoproteínas de alta densidad ( HDL )
| Clin Invest 2000;I06:4S1
FIGURA 3
732
SINDROME METABOLICO COMO FACTOR DE RIESGO CARDIOVASCULAR
4*»
CARDIOLOGÍA
4*
CARDIOLOGÍA
-4— CUADRO 5
RECOMENDACIONES DE ACTIVIDAD FÍSICA MODERADA A INTENSA
Debido a las evidencias que demostraban que la gliceridemia y HDL-col bajo) no se han establecido
hipercolesterolemia era un factor de riesgo causal aun metas claras de tratamiento. Sin embargo pode-
significativo para la aparición de enfermedades car- mos considerar razonable que estas deben corres-
diovasculares, desde la década de los 7 0 ' se han ponder a valores que no sean considerados como de
realizado estudios diseñados para evaluar los efec- riesgo. Tales serian: niveles de trigliceridos < 150
tos de la reducción de lípidos por fármacos sobre la mg/dl y de HDL-col, mayores de 4 5 y 40 mg/dl para
incidencia de enfermedades cardiovasculares. Si los mujeres y hombres respectivamente. El grupo latino-
efectos e n el cambio de estilo de vida no han sido americano de la Oficina Internacional de Informa-
suficientes para reducir los niveles de lípidos, debe ción e n Lípidos (ILIB LA), propone que el S M sea
considerarse el tratamiento farmacológico. A u n - considerado como una condición de riesgo interme-
que la elevación de colesterol LDL no se considera dio para desarrollar enfermedad cardiovascular, de
c o m o parte del síndrome metabólico, frecuente- manera que las metas a lograr con el tratamiento
mente este se encuentra e n valores por arriba ele hipolipemiante corresponden a los pacientes d e esta
9 5 mg/dl, por lo que dependiendo d e la magnitud categoría de riesgo (Cuadro 8 ) .
e n la elevación de C o l - L D L y la situación clínica
Si no se han logrado las metas terapéuticas luego
(presencia o ausencia de manifestaciones clínicas
de 3 meses de modificación del estilo de vida inclu-
de ateroesclerosis) d e b e de considerarse el mane-
yendo dieta, actividad física, consumo d e alcohol y
jo del C o l - L D L c o m o parte del síndrome metabóli-
tabaco, deberá iniciarse el tratamiento farmacológi-
c o c o n la finalidad d e prevenir la ocurrencia ele
co. Las estatinas son capaces de reducir todas las
enfermedades cardiovasculares.
lipoproteínas que contienen apoproteina B, y con
Las recomendaciones para la elección del fár- ellas frecuentemente se logran alcanzar las metas
maco para el tratamiento de los diferentes tipos d e del ATP lll tanto de LDL c o m o de H D L . Los fibratos
dislipidemias se encuentran en la Cuadro 6. En cada son capaces de mejorar todos los componentes d e
caso e n particular debe ser seleccionado e n base a la dislipidemia aterogénica del S M y han mostrado
la experiencia, eficacia, y efectos secundarios m i s reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular. El
comunes. (Cuadro 7 ) . empleo de estos últimos en combinación a estatinas
es muy atractivo, aunque se sabe que la combina-
En la practica clínica se han planteado con fre-
ción de ambas puede potencializar el riesgo de pro-
c u e n c i a metas útiles para e l tratamiento d e las
ducir miopatia. Existen informes aislados de miopatia
dislipidemias. Dentro de los criterios d e manejo del
grave condicionada por la combinación de estatinas
ATP lll, se subraya una meta para LDL-col de 95 mg/dl
y genfibrozil. El fenofibrato no parece interactuar
o menor en sujetos d e alto riesgo. Sin embargo, para
adversamente con el catabolismo de las estatinas y
las dos anormalidades de lípidos consideradas como
parece ser más seguro si se emplea en combina-
importantes dentro de los criterios del S M (hiperti i-
CUADRO 6
FÁRMACOS DE ELECCIÓN PARA DIFERENTES DISLIPIDEMIAS
757
CARDIOLOGÍA
CUADRO 7
AGENTES REDUCTORES DE LÍPIDOS
CUADRO 8
METAS TERAPÉUTICAS EN C O L E S T E R O L LDL S E G Ú N ATP lll
EN DIFERENTES C A T E G O R Í A S S E G Ú N EL R I E S G O
El Riesgo se refiere a la probabilidad de desarrollar enfermedad arterial coronaria y eventos cardiovasculares mayo-
res en un seguimiento a 10 años.
Los riesgos equivalentes a EAC se refiere a otras formas de enfermedad aterosclerotica (enfermedad Arterial periférica,
aneurisma de aorta abdominal, enfermedad arterial carótida sintomática), así como a la suma de + de 3 factores de
riesgo mayores.
Son considerados factores de riesgo al tabaquismo Hipertensión arterial con ó sin tratamiento, Colesterol HDL 40
mg di. Historia familiar de enfermedad arterial coronaria prematura (familiares hombres en primer grado 55 años
y mujeres 65 años), Edad (Hombres 45 años, mujeres 55 años).
La Diabetes Mellitus es considerada como un factor de riesgo equivalente a enfermedad arterial coronaria.
759
CARDIOLOGÍA
que han sido tratados c o n estos agentes. Los IECA y El efecto e n la reducción de los niveles de glu-
los bloqueadores de la angiotensina II se recomien- cosa es a través de la supresión d e la producción
dan c o m o antihipertensivos d e elección en los pa- endógena de glucosa por el hígado y e n la mejoría
cientes con S M , dado que al producir vasodilatación en la utilización de glucosa por el músculo y los
y disminuir los niveles de noradrenalina circulantes tejidos periféricos, resultando en reducción de los
(efecto simpaticolítico), son capaces de condicionar niveles plasmáticos d e glucosa en ayuno y
un incremento en la sensibilidad a la insulina con la postprandial.
consecuente reducción en los niveles de insulina
circulante. Estos han demostrado también se capa-
ces de ocasionar una disminución en los niveles de 5) AGONISTAS D E RECEPTORES DE ACTIVA-
colesterol total y trigliceridos. CION DE LA POLIFERACION DE PEROXISO-
MAS (AGONISTAS PPAR)
760
SINDROME METABOLICO COMO FACTOR DE RIESGO CARDIOVASCULAR
músculo. Los PPAR-á promueven la activación de C o l - H D L plasmático y d e mas del 3 0 % de la excre-
genes i n v o l u c r a d o s e n la d i f e r e n c i a c i ó n d e c i ó n fecal d e esteróles, correspondiente a remo-
adipocitos, lo que puede explicar la ganancia de ver aproximadamente 500 mg de exceso de coles-
peso e n los pacientes tratados con T Z D s . Se ha en- terol, lo cual implica un mecanismo de estimulación
contrado además que dentro de los efectos benéfi- de transporte reverso d e colesterol. En un grupo
cos de estos fármacos se encuentran la reducción d e estudio, a pacientes c o n síndrome coronario
del nivel de fibrinogeno y PAI-1 plasmáticos. La tro- agudo se les administraron cinco infusiones sema-
glitazona ha sido d i s c o n t i n u a d a por su nales d e apo A-1 Milano mulante (una partícula
hepatotoxicidad marcada. (Cuadro 10). artificial de H D L - C o l ) , y en ellos fue posible obser-
var una reducción del 1.06 % del volumen d e l
ateroma, m e d i d o por ultrasonido intravascular,
6) E L E V A C I Ó N DE L I P O P R O T E Í N A DE ALTA
comparado c o n 0.14 % d e incremento e n el volu-
DENSIDAD (HDL-COL) POR INFUSIÓN DE
m e n del ateroma del grupo placebo.
APOLIPOPROTEÍNA A-1 RECOMBINANTÍ.
CUADRO 9
CARACTERÍSTICAS Y C O R R E L A C I Ó N CLÍNICA DE PPAR-a.
Higado
Sitios de expresión Tejido adiposo
Riñon
Corazón
Músculo esquelético
Agonistas Clofibrato
Farmacológicos Gemfibrozil
Fenofibrato
4 761
C U A D R O 10
CARACTERÍSTICAS Y C O R R E L A C I Ó N C L Í N I C A D E PPAR-Y.
Hbw?—
Metabolismo de ácidos grasos
Lipogenesis
Aunque no se han empleado medicamentos para Las futuras terapias para el manejo del SM esta-
control del estado pro-inflamatorio presente en el rán encaminadas al descubrimiento de nuevos agen-
SM, algunos hipolipemiantes y fundamentalmente tes de acción molecular. La búsqueda a través de
del grupo de las estatinas han mostrado reducir los mapeos de haplotipos podrán identificar segura-
niveles de PCR que de alguna forma confirma la mente genes involucrados en el desarrollo de obe-
presencia de un efecto antiinflamatorio de éstas. sidad, resistencia a la insulina y diabetes.
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•
Capítulo 23 Aterosclerosis
"Ningún trabajo humano, si el médico pone en el
sujo ciencia y amor, paga con más pura moneda de
satisfacción "
L a aterosclerosis es una enfermedad vascular mente la frontera del contacto c o n la sangre circu-
de evolución crónica, dinámica y evolutiva lante ya ha quedado atrás, debido a que son tantas y
que aparece por el concurso de tres factores tan importantes sus funciones, que realmente se ha
principales: disfunción endotelial, inflamación y llegado a considerar actualmente al endotelio como
trombosis. Se caracteriza por la oclusión progresi- un órgano multifuncíonal. En el Cuadro 1 se enu-
va de las arterias por placas de ateroma que pueden meran las funciones que realiza dicha estructura.
llegar a producir insuficiencia arterial crónica (an- Por otro lado, las células endoteliales pueden ser
gina de pecho, isquemia cerebral transitoria o angi- dramáticamente alteradas por diversos mecanismos
na mesentérica) o bien déficit agudo de la circula- y la respuesta del endotelio dañado puede manifes-
ción por trombosis oclusiva (infarto del miocardio, tarse por alteraciones en su función. En el Cuadro 2
cerebral o mesentérica). se mencionan las manifestaciones de disfuncíón
endotelial.
CUADRO 1
—|—
CUADRO 2
FUNCIONES DEL ENDOTELIO VASCULAR
MANIFESTACIONES DE DISFUNCIÓN
1. Contenedor de la sangre. ENDOTELIAL
2. Barrera con permeabilidad selectiva. 1. Alteración de la permeabilidad para macro-
3. Órgano que sintetiza y secreta sustancias. moléculas.
4. Regulador del tono vascular. 2. Incremento de la adhesión leucocitaria.
5. Regulador del crecimiento vascular. 3. Producción de factor de c r e c i m i e n t o y
6. Regulador de la respuesta inflamatoria e citocina.
inmune. 4. Aumento de actividad procoagulante.
7. Regulador de la actividad homeostática y 5. Disminución de la actividad fibrinolítica.
trombótica. 6. Alteración en el balance de las sustancias
8. Superficie "blanco" de la acción hormonal. vasoactivas.
Membrana
C l l u l M da muaculo
Nao a n la c a p a
Ait.n.ti. u me du
FIGURA 1 Acute coronary syndromes. Tomado de Davis M.J. Am.C oll.Cardiol. 19W.
Con autorización
liso. Normalmente el endotelio regula la vasomoción, sustancia se secreta en forma continua mantenien-
inhibe la actividad plaquetaria, mantiene e l equili- do el tono vasomotor, previniendo la agregación
brio entre trombosis y fibrinolisis y regula la activi- plaquetaria y la adhesión d e los leucocitos a la su-
dad de las células inflamatorias en la pared del vaso. perficie endotelial. Normalmente el endotelio es
C o m o se mencionó, el principio mediador de estas una superficie no trombogénica a través de la pro-
funciones es el óxido nítrico (también llamado (ac- ducción d e óxido nítrico, activador tisular del plas-
tor relajante derivado del endotelio o E R D F ) . Esta minogeno y heparansulfatos.
ATEROSCLEROSIS
4
CARDIOLOGÍA
Disfunción Endotelial
Hipercolesterolemia
Angiotensina II -Hipertensión arterial
Oxidasa de la nicotinamida
Tabaquismo 1» Adenina - dinucleotido - fosfato Resistencia a la
insulina
(NAD (P)H)
Obesidad- Diabetes
7
Donación de radicales Superóxido
( H 2 0 2 , peroxinitrrto (OONO" l . O i O H -
Inactivación del ON
endotelial
Disfunción
endotelial
I
Oxidación
de las LdL I
Degradación de elastina y
Hipertrofia Expresión de:
colágena de la Membrana fibrosa
vascular - Interleucinas -1 y -6
- Factor de necrosis tumoral a
- E - selectina
t de las resistencias. Moléculas de adhesión
vasculares . p a c t o r q ¡miotáctico de los
U
Aterosclerosis
monocitos
Erosión o A) Progresión
INFLAMACION "^ruptura de la - * * B ) síndromes
placa fibrosa coronarios agudos
FIGURA 2
fibrinogeno y LDL (lipoproteínas de baja densidad); glicocáliz del endotelio tiene menor grosor, la acu-
asimismo, son sitios e n los q u e se a c u m u l a el mulación de monocitos tiene predilección por esos
colesterol en la íntima arterial en casos de hiperco- sitios, el recambio celular a través del endotelio
lesterolemia. Por otro lado, e n estas regiones el también es mayor en esas regiones y es por ello que
ATEROSCLEROSIS
la aterosclerosis tiene una distribución peculiar en lipídico de la placa aterosclerosa. Los radicales
ciertas regiones de la aorta, de las arterias coronarias, superóxido producidos (como consecuencia de la
las carótidas y arterias renales. disfunción endotelial) oxidan las lipoproteínas de
baja densidad (LdL) contenidas en el núcleo lipídico
Lesión endotelial y ello genera un intenso proceso inflamatorio que
Cuando por cualquier razón (estrés de razonamien- promueve por un lado la migración de células del
to, inflamación, sustancias proteolíticas, etc.) hay músculo liso provenientes de la capa media, por
denudación del endotelio, las plaqueta se adhie- otro, se sintetiza colágena y finalmente el proceso
ren a la colágena contenido en la placa intima a inflamatorio atrae a los linfocitos T; todo ello, con el
través de sus receptores la/Ib (figura 3-1) en un fin de formar una membrana fibrosa que aisle el
intento de reparar la lesión endotelial, lo cual es proceso inflamatorio del resto de la pared arterial.
seguido de adhesión plaquetaria o sea se forman Así, la placa asterosclerosa queda formada por el
conglomerados de plaquetas que se fijan a otras a núcleo lipídico y por la membrana fibrosa (figura 4).
través de redes de fibrina que se unen a los recep-
tores llb/llla de las plaquetas (figura 3-2). De esta Progresión de la placa a t e r o s c l e r o s a
manera se forma el "trombo blanco"que repara la
Ya formada la placa aterosclerosa, sigue penetran-
denundación endotelial.
do colesterol al subendotelio lo mismo que los
monocitos.
Inicio d e la aterosclerosis El núcleo lipídico se forma fundamentalmente
El aumento del colesterol plasmático favorece que del colesterol que dejan libre las células espumosas
estas moléculas traspasen el endotelio, se localizan que mueren. La proliferación de células de múscu-
en el subendotelio y sean reconocidas como un lo liso depende fundamentalmente de ios factores
cuerpo extraño, por lo que, se atrae a los glóbulos de crecimiento proveniente de los macrófagos.
blancos de circulantes (mon<x;itos) hacia el endotelio. El intenso proceso inflamatorio producido por
Los monocitos pueden verse adheridos al endo- la placa aterosclerosa en el subendotelio es c a -
telio sólo ocasionalmente en arterias normales. Cuan- paz de producir denudación endotelial que de
do existen moléculas del colesterol en el subendo- inmediato intenta ser separado por adhesión pla-
telio, se inicia el acumulo de monocitos en los sitios quetaria (figura 3-1); pero estas pueden ser acti-
predispuestos del endotelio arterial; la adhesión vadas por trombina, lo cual favorece la expresión
endotelial está mediada por moléculas de adhesión de los receptores llb/llla (figura 3-2) lo cual favo-
leucocitaria al endotelio (ELAMs) y por la secreción rece la agregación plaquetaria; también el trom-
de citocinas adhesivas como la interleucina 1 -B y el boxano A , que es producido vía ciclooxigenasa,
¿
factor estimulante de colonias de monocitos. Ya ad- también favorece la expresión de los receptores
heridas, emigran al espacio subendotelial guiadas llb/llla (este paso puede ser bloqueado con aspi-
por una substancia llamada factor quimiotáctico de- rina) también, el adenosin difosfato (ADP) favore-
rivado de las células del músculo liso, recién de- ce la expresión de los receptores plaquetarios
mostradas como proteína 1-quimiotáctica específi- llb/llla por lo que favorece la agregación plaque-
ca para monocitos (MCP-1). taria (figura 3-2).
Cabe decir que la oxidación de las LDL aumenta Este último camino puede ser bloqueado por
la producción de MCP-1 y ello favorece la acumula- clopidogrel. Finalmente, el abxicicimab, el tirofiban
ción de monocitos en el endotelio vascular. y el epifibatide bloquean directamente los recepto-
res llb/llla y con ello, la agregación plaquetaria. Por
F o r m a c i ó n d e células e s p u m o s a s otro lado, el factor tisular secretado proveniente del
Cuando los monocitos alcanzan el subendotelio, tejido inflamado favorece microtrombosis en el si-
se transforman en macrófagos y fagocitan los esteres tio de la lesión endotelial.
del colesterol ahí depositados al reconocerlos En conclusión, la erosión endotelial, promueve
como un cuerpo extraño. Los macrófagos carga- la presencia de "Trombo blanco" (agregación pla-
dos de esteres del colesterol se denominan célu- quetaria) y "trombo rojo" (microtrombosis) y de esta
las e s p u m o s a s . manera cuando este proceso se repite en forma
continuada y asintomática. la placa ateromatosa pri-
F o r m a c i ó n de las placas d e a t e r o m a mero protruye levemente en la íntima arterial y
Las células espumosas y los esteres del colesterol con el tiempo obstruye la luz arterial en forma
contenidos en el subendotelio forman el núcleo progresiva.
4*?
CARDIOLOGÍA
EndoMIo ^
0 Colat|Ci i gn la inlim.i
U m l n j «Urálica ln«m»
770
ATEROSCLEROSIS
^4
plasmático está elevado por lo menos al doble de lo
normal, mientras que en las formas homocigotas las
cifras de colesterol pueden alcanzar hasta cuatro
veces por encima de los valores normales. En estos
B
casos la aterosclerosis coronaria es particularmente
grave y aparece e n forma prematura.
771
CARDIOLOGÍA
lares y neurológicas, causadas por isquemia, conse- intersticiales hacia los capilares linfáticos del plexo
cutivas a aterosclerosis. mesentérico y, finalmente, al torrente circulatorio
a través del conducto torácico. Ahí, la molécula
METABOLISMO DE LAS LIPOPROTEINAS a d q u i e r e la a p o p r o t e i n a C q u e p e r m i t e l a
catalización d e la molécula a través d e la enzima
M e t a b o l i s m o d e los q u i l o m i c r o n e s (figura 6) lipoproteinlipasa ( L P L ) ; d e esta forma, los produc-
La grasa de la dieta penetra al organismo a través tos de la hidrólisis son grasas y monoglicéridos que
del intestino, la cual es hidrolizada y absorbida con son incorporados a los tejidos e n donde constitu-
la ayuda de los ácidos biliares. En la pared intesti- yen una importante fuente energética. Q u e d a n
nal se sintetizan los quilomicrones, que son las c o m o restos de la hidrólisis los llamados "rema-
moléculas responsables de transportar las grasas n e n t e s " , q u e son partículas f o r m a d a s por
d e l intestino a los diversos tejidos. A u n cuando los apoproteínas B-48 y E c o n trigliceridos. Estos re-
quilomicrones son moléculas de gran tamaño, éste manentes de quilomicrones quedan e n la circula-
depende directamente de los trigliceridos que con- c i ó n , viajan al hepatocito y mediante un receptor
tienen, y los ácidos grasos de éstos están en fun- capta la a p o p r o t e i n a E, pero no la B - 4 8 . Las
ción de la dieta; así, los quilomicrones sintetizados apoproteínas C, los fosfolípidos y el colesterol se
e n el ayuno tienen un tamaño menor que los que transfieren a las lipoproteínas de alta densidad
se sintetizan después de una dieta alta en conteni- ( H D L I . Sobre estas moléculas actúa la lecitincoles-
do graso. Los quilomicrones contienen apoproteina terol-acetiltransferasa ( L C A T ) y permite la capta-
B-48 (que es la parte proteica d e la lipoproteína), ción de colesterol esterificado, así son captados
así c o m o apoproteínas del tipo A (A-1, A-ll y A-IV). por los receptores hepáticos y convertidos dentro
Estas moléculas pasan a través d e los espacios del hígado en ácidos biliares.
FIGURA 5 Génesis y
progresión de la ate-
rosclerosis coronaria.
1) Arteria coronaria
Circulation 2001:104:365-372 normal, 2) Deposito
de colesterol en el su-
bendotelio y la disfunción endotelial atrae a los macrófagos, 3) Adhesión de monocitos al subendotelio,
4) Formación de núcleo lipídico, células espumosas, membrana fibrosa. Activación de citokinas infla-
matorias con degradación de la membrana fibrosa, 5) Ruptura de la membrana fibrosa, expresión del
factor tisular. Trombosis suboclusiva, agregación plaquetaria, 6) Si la trombosis es oclusiva causa
infarto del miocardio o muerte súbita, si es suboclusiva causa angina inestable o infarto subendocárdico,
7) Las erosiones superficiales favorecen trombosis ligera con agregación plaquetaria, reabsorción,
fibrosis o calcificación de la placa, lo cual progresivamente aumenta el grado de obstrucción. Tomado de
Libby P. Circulation 2001; 104:365-372. Con autorización
772
M E T A B O L I S M O D E LOS Q U I L O M I C R O N E S
G r a s a intestinal Ácidos
(ácidos grasos y biliares
trigliceridos)
Quilomicrones
(apoproteínas A I,
A II, A IV y B-48)
A b s o r c i ó n intestinal
Quilomicrones
Apoproteina C
Fuente
energética REMANENTES Apo- C
para los (apo B-48 - apo E Fosfolípidos
tejidos 1 trigliceridos) Colesterol
Monoglicéridos
LdL LCAT
Hepatocito
(receptor apo-E) HdL
Colesterol
Acidos biliares
FIGURA 6
CARDIOLOGÍA
Trigliceridos Apoproteina C
Apoproteina E
Colesterol libre
Fosfolípidos
LPL
LDL HdL
FIGURA 7
774
ATEROSCLEROSIS
I LDL
(colesterol plasmático)
t LdL
(colesterol plasmático)
t Actividad de t de receptores
Hmg-CoA LdL
reductasa
1 actividad de i de receptores
Hmg-CoA LdL
reductasa
t Síntesis f captación
hepática de hepática de
colesterol colesterol
\ t
1 Síntesis ICaptación
hepática de hepática de
VLDL colesterol colesterol
FIGURA 8
ATEROSCLEROSIS
T
Remanentes LDI
Apo-C Apo C
Fosfolípidos Apo E
Colesterol Colesterol
Fosfolípidos
LCAT HdL,
HIGADO
E x c r e c i ó n por
Metabolismo Colesterol
ácidos biliares
FIGURA 9
El posible camino fisiopatológico para explicar estes ello reduce la aterogénesis; por el contrario, la reduc-
hallazgos es la inhibición que ejerce la LP(al sobre ción de la concentración plasmática de HDL se asocia
el fenómeno de la fibrinolisis, lo cual favorece la con un franco aumento de aterosclerosis coronaria. Se
formación de trombo intravascular con ruptura o sin considera como normal una concentración de HDL
ésta, de la placa de ateroma; asimismo, la formación mayor de 40 mg/dL y como factor de riesgo aterogenico
del trombo va seguido de un proceso de prolifera- cuando se reduce más de 35 mg/dL (Cuadro 31.
ción de células de músculo liso que también es
inducido por la LPIa) a través de inhibir la produc-
ción del factor B que a su vez es inhibidor del cre-
cimiento de células musculares lisas. Esta lipoproteína
puede ser indicador de riesgo de enfermedad coro- CUADRO 3
naria cuando su concentración plasmática es mayor FACTORES QUE REDUCEN
de 30 mg/dL aparece aterosclerosis coronaria, el LA CONCENTRACIÓN DE HDL
riesgo relativo de aterosclerosis aumenta 6 veces si
están elevadas las LDL; aumenta en capacidad de
los macrófagos para producir células espumosas y 1. Tabaquismo. 7. Anabólicos
finalmente contribuye al aumento del tamaño de la 2. Obesidad. esteroideos.
placa ateromatosa. 3. Vida sedentaria. 8. Progestágenos.
4. Andrógenos. 9. Genéticos.
5. Betabloqueadores.
Lipoproteínas de alta densidad (HDL colesterol) 6. Hipertrigliceridemia
La elevación de la concentración plasmática del H D l
se acompaña de un incremento de apoproteina A-I \
777
CARDIOLOGÍA
quismo es considerado hoy en día, como uno de los coronarios agudos como la angina inestable, el in-
mayores factores de riesgo aterogenico. farto del miocardio y la muerte súbita.
Los mecanismos mediante los que el tabaquis-
mo promueve la aterogénesis son diversos. Diabetes mellitus
D e los conocidos se encuentran: La presencia d e diabetes mellitus es, sin d u d a , un
factor generador de aterosclerosis y d e sus compli-
a ) En animales de experimentación, la nicotina
caciones vasculares. Esta enfermedad condiciona,
p r o d u c e d a ñ o estructural en las células
tanto enfermedad aterosclerosa de las arterias de
endoteliales. En el ser humano se ha demos-
mediano y gran calibre, c o m o daño a las pequeñas
trado un aumento del número de células
arterias. También es importante mencionar que la
endoteliales circulantes (lo que refleja (dis-
diabetes mellitus se asocia frecuentemente con hi-
función endoteliall cuando a sujetos ni) fu-
pertensión arterial, con hipertrigliceridemia y dis-
madores se les hace fumar con propósitos
minución d e la concentración de H D L (Síndrome
e x p e r i m e n t a l e s . La disfunción endotelial
Metabólico, ver capítulo 22) que son también facto-
también se favorece al aumentar la produc-
res aterogénicos.
ción de radicales superóxido.
4™
CARDIOLOGÍA
que la respuesta psicológica de cada sujeto es im- que también promueve la producción de ácidos
predecible y diferente en cada uno, es que ha sido grasos libres, los cuales se encuentran disponibles
prácticamente imposible estudiarla e n una forma e n el medio interno c o m o metabolitos energéticos
q u e sea reproducible y cuyos resultados puedan rápidamente utilizables por el músculo esqueléti-
permitir una interpretación confiable. co. D e esta manera, el organismo estaba listo en una
Inicialmente se ha estudiado la respuesta y las forma inmediata y podía optar por la lucha o la huida;
consecuencias orgánicas que tiene el estrés en ani- sin embargo, poco tiempo ha pasado e n la historia
males. Se encontró que la aterosclerosis en aves y del hombre, y la transformación de su forma de vida
mamíferos del zoológico d e Filadelfia era 10 veces y de su medio externo han sido profundas; en otras
mayor, aun c u a n d o fueran sometidos a una dieta palabras, el ser humano lleva alrededor de 10 mil
constante, lo que sugiere que el estrés provocado años d e vida en los bosques, 3 0 0 años en ciudades
por la sobrepoblación y el cautiverio incrementaron y 100 años e n el mundo actual industrializado, e n
la susceptibilidad para la aterosclerosis coronaria; la donde ya no tiene que utilizar su fuerza muscular
aterosclerosis aórtica en conejos puede ser aumen- en la lucha o la huida como el hombre primitivo: sin
tada o disminuida si se les administra psicosedantes embargo, el estado de tensión emocional activa
o psicoestimulantes. En ratas sometidas a dietas ricas (agresividad del medio, probabilidad de defender-
en colesterol se produce mayor grado de ateroscle- se ante un ataque, un asalto, etc.), o pasiva (necesi-
rosis coronaria si además son sometidos a estrés. d a d de llegar a una cita importante puntualmente o
Por otro lado, algunas observaciones en el ser h u - encontrarse e n un embotellamiento de tránsito), es-
mano también han sugerido la relación entre el estrés timula el sistema adrenérgico aumentando la fre-
y la aterosclerosis. Los monjes benedictinos inge- cuencia cardiaca y la presión arterial, asimismo,
rían dietas altas en colesterol, mientras que los mon- aumentan el M V O , , producen vasoconstricción
jes trapistas ingerían dietas bajas en colesterol. A m - coronaria; estos efectos en pacientes c o n ateros-
bos grupos sin estrés emocional. Los primeros tienen clerosis coronaria producen isquemia miocárdica.
cifras de colesterol mayores que los segundos, pero Por otro lado, se ha demostrado recientemente
en ambos es especialmente baja la prevalencia de que el estrés mental produce disfunción endotelial
cardiopatía coronaria; la tribu Masai y los camelleros y agregación plaquetaria. Por lo tanto, participa en
d e Somalia, en Africa, no padecían cardiopatía co- la génesis de aterosclerosis.
ronaria a pesar d e ingerir dietas ricas e n colesterol,
lo cual sugiere q u e la falta de estrés en esos sujetos Por otro lado, el estrés relacionado a grandes
los protege d e alguna manera e n contra d e la ate- desastres (terremotos, incendios) o estrés personal
rosclerosis, por e l contrario, el estrés ambiental al agudo (grandes perdidas financieras, a m e n a z a in-
que se encuentra sometido el habitante de las gran- minente de muerte) se ha observado como predece-
des ciudades industrializadas se ha constituido en sor de eventos coronarios agudos o muerte súbita.
un factor de riesgo aterogenico que también puede El efecto que el estrés tiene sobre e l sistema
ser importante; así, la aterosclerosis coronaria, el adrenérgico y su consecuencia en la producción de
infarto del miocardio, la muerte súbita y los acci- ácidos grasos libres, ha sido demostrada de diver-
dentes vasculares cerebrales aparecen con mayor sas formas, por ejemplo: se h a encontrado eleva-
frecuencia precisamente en habitantes de las ciuda- ción e n la concentración d e catecolaminas e n los
des altamente industrializadas. corredores d e carreras de autos antes d e iniciar la
carrera y conforme se desarrolla ésta, disminu-
La forma c o m o el estrés puede contribuir en yen las c o n c e n t r a c i o n e s d e estas hormonas y se
producir aterosclerosis no se c o n o c e , aun cuando elevan consecutivamente las concentraciones de
se aduce que el efecto nocivo de la tensión emocio- ácidos grasos libres. Si e l estímulo a m b i e n t a l
nal se debe al uso inadecuado del mecanismo de (estrés) es c o n t i n u o , la estimulación del sistema
alarma del que estamos dotados para responder a adrenérgico es sostenido, y el efecto aterogenico
las situaciones de peligro. Este mecanismo, que he- es constante.
mos heredado a través de la evolución de otros Por otro lado, si a la a c c i ó n del estrés sobre el
seres del reino a n i m a l , está mediado por el sistema individuo se suman los efectos nocivos de la civi-
adrenérgico. En efecto, los hombres primitivos res- l i z a c i ó n (vida s e d e n t a r i a , dieta rica e n grasas
pondían a las situaciones de peligro de inmediato animales, tabaquismo y obesidad), la interacción
disparando su sistema adrenérgico, el cual no sólo d e ellos favorece el proceso aterogenico. En con-
aumenta la frecuencia cardiaca y la contractilidad c l u s i ó n , la vida e n las grandes ciudades favorece
cardiaca con el consiguiente del gasto cardiaco, sino un estado constante de tensión emocional q u e
ATEROSCLEROSIS
782
ATEROSCLEROSIS
portantes para producir aterosclerosis, son la hiper- luego, las verduras, las frutas y los carbohidratos son
colesterolemia, la hipertensión arterial y el taba- alimentos que están permitidos y que complemen-
quismo; sin embargo, e n la práctica clínica es muy tan la dieta en forma muy conveniente; e n conclu-
frecuente encontrar los otros factores de riesgo sión, se recomienda que la ingesta de colesterol no
anotados c o m o mayores e n pacientes que sufren sobrepase 3 0 0 mg/día. En el Cuadro 4 se anota el
alguna de las complicaciones isquémicas de la ate- contenido aproximado de colesterol, grasas satura-
rosclerosis y, por el contrario, es menos frecuente das e ¡nsaturadas en algunos alimentos.
encontrar un paciente c o n aterosclerosis compli-
c a d a , sin factores de riesgo aterogenico presentes
(ver capítulo 22). TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
4
CARDIOLOGIA
CUADRO 4
ALGUNOS ALIMENTOS Y SU C O N T E N I D O DE COLESTEROL, GRASAS SATURADAS
Y GRASAS INSATURADAS
CONTENIDO D E COLESTEROL
(mg) (mg)
CONTENIDO DE GRASA
4^
CARDIOLOGÍA
REGRESION DE LA ATEROSCLEROSIS
En humanos se ha logrado demostrar regresión
En las últimas décadas se han acumulado evidencias de la ateromatosis coronaria; por lo tanto, el control
tanto en animales c o m o e n humanos, que demues- de los factores de riesgo aterogenico es capaz de
tran que la aterosclerosis puede sufrir regresión cuan- reducir e l grado de aterosclerosis e incluso, provo-
do se reduce la concentración de colesterol plasmático car una regresión del proceso ateroscleroso, lo cual
con dieta y fármacos. se ha logrado con el uso d e estatinas.
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Capítulo 24 Cardiopatía isquémica
"El confinamiento es una forma de miopía y consti-
tuye un serio riesgo para el avance del médico "
E
L M I O C A R D I O ES U N T E J I D O eminente- c o m o son la compresión sistólica que sufren los va-
mente aeróbico ya que su función depende sos e n el seno d e l miocardio y las resistencias
de la oxigenación de los substratos para pro- vasculares coronarías. A estos factores se suman otros
ducir energía. El metabolismo intrínseco del cora- de origen humoral y metabólico, que en conjunto
zón representa sólo una mínima proporción del con- c o n los p r i m e r o s p e r m i t e n q u e e x i s t a u n a
sumo de O , (0.5%) y es similar al necesario para que autorregulación del flujo sanguíneo que asegure una
e l corazón realice su actividad eléctrica (0.5 % del cantidad suficiente de O , para ser dispuesto e n la
consumo total de energía). Por el contrario, la acti- función del corazón en relación con la presión de
vidad mecánica de la contracción miocárdica, la fre- perfusión, o sea, si ésta aumenta, disminuye la resis-
cuencia con que se realiza dicha contracción y la tencia vascular coronaria y viceversa.
fuerza que tiene que vencer para contraerse son los
Normalmente la presión de perfusión y el gra-
determinantes más importantes de consumo de O ,
diente aorta-arteriolas asegura una perfusión mio-
cardiaco (MVO,) ya que consumen el 9 9 % del O ,
cárdica a d e c u a d a ; sin embargo, esta perfusión es
disponible. Estos factores se traducen en el corazón
intermitente para e l ventrículo izquierdo, porque
intacto a través d e la contractilidad miocárdica, la
durante la sístole no hay gradiente aorta-capilares,
frecuencia cardiaca y la poscarga (ver capítulo d e
ya que la presión es igual en la aorta y en la cavidad
FUNCION VENTRICULAR).
ventricular; por otro lado, la contracción miocár-
Normalmente e l oxígeno llega al miocardio a dica c o m p r i m e los vasos coronarios, aumentando
través de la sangre oxigenada que proviene del ven- su resistencia al flujo y, finalmente, la apertura
trículo izquierdo, entra por los ostia coronarios, via- valvular aórtica obstruye los ostia coronarios. Por
ja a través d e las arterias coronarias epicárdicas y de todas estas razones el llenado coronario disminuye
ahí penetra por los vasos intramurales hasta el seno considerablemente durante la sístole, mientras que
del tejido m i o c á r d i c o . Los factores que durante la diástole ventricular se cierra la válvula
fisiológicamente favorecen este proceso son: la pre- aórtica dejando libres los ostia coronarios, se es-
CARDIOLCXÍÍA
18
.E 16
1
f 1 4
S
£ 12
I*
A •
FIGURA 1 A: En condicio-
nes normales el flujo
coronario responde en • • • A » A*
forma inmediata a las ne- 1
.
cesidades miocárdicas de
oxígeno (consumo de oxí- o
geno miocárdico: M V G y I 8
esta estrecha relación es
lo que define a la suficien-
'§ A • • •
A
cia coronaria. (Tomado de •o 6
Berne RM, y Rubio R. o
Coronary circulation. En E
• * A A
4^
CARDIOLOGÍA
lo cardiaco. Estos cambios son los que defi- nan inmediata ausencia de contracción (aci-
nen la muerte celular. nesia) de la región afectada cuando se redu-
c e el aporte sanguíneo en un 8 0 % y un abom-
g) Se ha demostrado que durante los primeros
bamiento sistólico (discinesia), c u a n d o se
2 0 minutos de anoxia miocárdica aparecen
graves cambios estructurales y funcionales de reduce su aporte en un 9 0 %. En las áreas no
la célula que pueden desaparecer mediante isquémicas se podrá observar hipercontracti-
la reperfusión c o n sangre oxigenada. Esto es, lidad compensadora.
se puede hablar de alteraciones reversibles. e) M i o c a r d i o "hibernante"', c u a n d o la perfu-
Después de 2 0 minutos de anoxia comienza a sión miocárdica de una región está importan-
aparecer muerte celular: 1 a 2 horas después temente reducida por obstrucción crítica de
de isquemia, la mayoría de las células del teji- la arteria tributaria, la función sistólica de di-
do se encuentran irreversiblemente dañadas. c h a región (contracción) se hace imposible
("down regulation"), ya que la pequeña canti-
2. Efecto de la I s q u e m i a sobre l a función mecá- dad de sangre que llega permite sólo mante-
n i c a d e la c é l u l a m i o c á r d i c a . ner la integridad celular, pues el aporte
aeróbico es tan bajo que es sólo suficiente
a ) La anoxia miocárdica cancela el metabolismo
para mantener el metabolismo basal de la
de Krebss, y por lo tanto, la producción d e
célula (recordar q u e el metabolismo basal
ATP que es indispensable para la contracción
del miocardio solo representa el 0 . 5 % del
miocárdica. Esta ausencia de substrato, con-
M V O , total), lo cual preserva indemne el apa-
diciona una rápida declinación de la contrac-
rato contráctil y la capacidad productora de
ción del miocardio.
energía de la célula. La restauración del flujo
b) Hay evidencia de la disminución de entrada sanguíneo es seguido de una función con-
de C a ' * a la c é l u l a d u r a n t e el episodio tráctil normal de la región previamente afec-
isquémico debido a que la propia isquemia tada por la isquemia. La condición para que
evita la liberación del calcio contenido e n esta grave isquemia no cause necrosis, es que
el sarcolema. la disminución del riego sanguíneo sea de
instalación muy lenta y progresiva hasta re-
Asimismo, la acidosis celular incrementa
ducirse el riego coronario en forma crítica.
importantemente la afinidad de C A " • al retí-
culo sarcoplásmico. Por ambas razones el ion
no llega (o lo hace en forma insuficiente) para f) M i o c a r d i o " a t u r d i d o " . Cuando un área del
catalizar el acomplamiento actina-miosina; al miocardio ha sufrido gravemente por un even-
parecer, el aumento de concentración de to isquémico agudo prolongado (horas) debi-
hidrogeniones dentro de la miofibrilla c o m - do a obstrucción total de la arteria tributaría,
pite con el C a * * por los receptores localiza- pero el tejido de riesgo no llegó a la necrosis,
dos en las moléculas de troponina, por lo sea por reperfusión oportuna (trombolisis
que en ellos se sitúa el ¡on H * en lugar del coronaria, angioplastia transluminal o revas-
C a " , lo cual da lugar a una depresión de la cularización quirúrgica) o por circulación co-
fuerza contráctil. lateral. El miocardio agredido no recupera
inmediatamente su función contráctil, sino
c) Paradójicamente, la depresión rápida de la que queda acinético por un determinado
contractilidad e n el tejido isquémico consti- tiempo a pesar de que la arteria responsable
tuye una forma de defensa biológica. En efec- ya está permeable y paulatinamente recupe-
to, al atenuarse la actividad mecánica (alto ra su capacidad contráctil en forma espontá-
consumidor de ATP) se conserva energía para nea (disfunción miocárdica posisquémica).
preservar la integridad celular y con ello se Aun cuando el proceso íntimo del miocardio
retarda la aparición de necrosis. Si bien es aturdido no está completamente aclarado, hay
cierto que para el organismo es deletérea la evidencia de que varios factores pueden in-
disminución de la función miocárdica, a la tervenir en e l proceso fisiopatológico como
célula le permite permanecer viable por l o s o n la p r e s e n c i a d e r a d i c a l e s d e
mayor tiempo (estado de hibernación). superóxido, la sobrecarga intracelular d e
C a * * , alteraciones e n el proceso de excita-
d) Estos efectos que produce la isquemia mio- ción-contracción por falta de liberación de
cárdica sobre una región del tejido condicio-
CARDIOPATIA ISQUEMICA
Ca"" por el retículo sarcoplásmico, depre- ses 0 y 1), y la duración del mismo (se redu-
sión del sistema productor de ATP acción de ce el periodo refractario). Estos cambios con-
citocinas (interleucinas) y ausencia de óxido dicionan alteraciones electrocardiográficas
nítrico. específicas; así, si la isquemia afecta al su-
bendocardio y es de gran magnitud (lesión
Efectos de la Isquemia sobre las propiedades subendocárdica) producirá los cambios ano-
diastólicas de la miofibrilla. tados en las células subendocárdicas, lo cual
La isquemia también produce importantes cam- será responsable de que en el electrocar-
bios en la función diastólica del miocardio. En diograma clínico se vean primordialmente
efecto, al parecer, la falta de ATP disponible evi- los potenciales subepicárdicos y aparezca
ta que el C a ' " captado por la maquinaria con- infradesnivel del segmento ST. Por el con-
tráctil sea liberado hacia el retículo sarcoplásmi-
trario, si la isquemia afecta al subepicardio
co, lo cual se traduce en un impedimento para
(lesión subepicárdica), la disminución en
la relajación miocárdica que se manifiesta por
amplitud y duración de sus potenciales de
un aumento significativo del tiempo de relaja-
acción favorece el predominio de los po-
ción isovolumétrica. Clínicamente este hecho
tenciales subendocárdicos, alteración que en
se hace evidente mediante el alargamiento del
tiempo de relajación isovolumétrica (demostra- electrocardiograma se manifiesta por el su-
do por técnica Doppler) y la relajación incom- pradesnivel del segmento ST (ver capítulo
pleta q u e se manifiesta por hipertensión de ELECTROCARDIOGRAFÍA).
diastólica ventricular y cuando ésta es muy im- d) En el tejido isquémico también aparece au-
portante, por congestión pulmonar. mento del automatismo ectópico y activi-
dad disparada debida a la presencia de pos-
Alteraciones electrofisiológicas producidas por p o t e n c i a l e s tardíos por la sobrecarga
la isquemia miocárdica intracelular de calcio (vide infra) lo cual fa-
vorece la aparición de extrasistolia y taqui-
a) En el potencial de acción transmembrana. La cardia ventricular.
isquemia acentuada de las células miocárdi- i
cas crea primero acortamiento en la dura-
ción del potencial de acción, debido a un 5. Papel del calcio en la lesión Isquémica.
acortamiento de la fase 2 que incrementa su El primer efecto metabólico de la isquemia tisular
pendiente de repolarización. También dis- miocárdica es la drástica reducción de las reser-
minuye la amplitud y velocidad de la fase O y vas de ATR ello evita la función de la bomba de
el potencial de reposo (despolarización sodio, evitando el intercambio Na'-K" a través de
diastólica). Por lo tanto, la magnitud del po- la membrana, ello eleva la concentración intra-
tencial de acción, se reduce tanto en voltaje celular de Na", aumentando consecutivamente
como en tiempo. la concentración intracelular de C a " . Por otro
lado, la falta de compuestos de alta energía (ATP),
b) Sobre el periodo refractario. La disminuí ion reduce la captación del C a " ' por el retículo sar-
en la duración del potencial de acción se ve coplásmico y a su vez su salida de la célula, todo
acompañado también por acortamiento del ello resulta en el aumento de la concentración
periodo refractario. En el tejido isquémico la de C A " intracelular, lo que causa sobrecarga
disminución del periodo refractario es dife-
mitocondrial de calcio, que a su vez, inhibe la
rente en cada célula, por lo que esta distor-
producción de ATR Este mecanismo parece ser
sión de dicho peritxlo (dispersión temporal
el responsable, por lo menos en parte, de la
de los periodos refractarios) condiciona vul-
necrosis tisular.
nerabilidad eléctrica para la aparición de fi-
brilación al favorecer los mecanismos de
reentrada. 6. Papel de los radicales de superóxido en la
necrosis miocárdica.
c) Cuando en un área aparece isquemia mio- Los radicales superóxido son moléculas que con-
cárdica de gran magnitud, ésta se despolariza tienen un número non de electrones, lo cual les
(disminuye su potencial de reposo); se re- confiere la capacidad de provocar reacciones
duce la amplitud de su potencial de acción químicas en cadena. Hay 3 radicales de oxígeno
(disminuye la velocidad y amplitud de l.i fa- libres que primordialmente participan en la le-
4 »
CARDIOLOGÍA
sión tisular isquémica: aniones superóxido (O,-) involucrada e n la génesis del infarto d e l miocar-
peróxido de hidrógeno ( H , O , ) y el radical dio.
hidróxilo(OH-).
La isquemia aguda y de gran magnitud da Embolia coronaria
lugar a la producción d e radicales libres por di- La obstrucción de un arteria coronaría puede tam-
versas vías: disociación del transporte mitocon- bién acontecer cuando dichos vasos son sanos; en
drial de electrones, conversión d e la e n z i m a efecto, la embolia coronaría puede complicar pa-
xantina-deshidrogenasa a xantina-oxidasa, la cual decimientos del corazón izquierdo en los que por-
e n presencia de xantina, produce radicales li- ciones de material extraño pueden constituirse en
bres; activación del complemento e n el tejido émbolos que van a alojarse e n alguna parte del ár-
lesionado, el cual promueve la acumulación de bol coronario, lo cual condiciona I. isquemia parce-
neutrófilos que liberan radicales superóxido y lar aguda, cuya extensión dependerá del calibre de
la misma concentración aumentada d e Ca " in- la arteria obstruida.
tracelular activa la fosíolipasa que a través del El proceso embólico puede tener por origen una
metabolismo del ácido araquidónico produce trombosis intracavitaria auricular o ventricular iz-
también radicales libres. La presencia de radi- quierda, un proceso tumoral (embolia mixomatosa)
cales superóxido en el tejido miocárdico pro- o infeccioso (vegetaciones valvulares o protésicas).
fundamente isquémico causa peroxidación d e
las membranas celulares y de esta manera con- Puentes musculares
tribuye a la muerte celular; asimismo, se han Los troncos coronarios subepicárdicos al penetrar
encontrado responsables del daño isquémico en el seno del miocardio pueden ser comprimidos
irreversible d e las mitocondrias y del retículo transitoriamente durante la sístole y reducir su flujo
sarcoplásmico. sanguíneo en forma considerable. En algunas oca-
siones la reducción del calibre es tan importante
ETO
ILOGA
Í que se produce isquemia miocárdica. Debe tenerse
e n cuenta que el flujo coronario es máximo durante
la diástole por lo que al parecer en condiciones
1. Enfermedades de los gruesos troncos corona-
normales este mecanismo no es causa de isquemia
rios (Cuadro 1)
miocárdica significativa, pero puede limitar la irri-
a) Alteraciones anatómicas gación miocárdica cuando es necesario aumentar el
Aterosclerosis coronaria flujo sanguíneo coronario. En aquellos pacientes que
Ateromatosis coronaria. El déficit d e riego tienen importante compresión sistólica de algún tron-
coronario puede ser causado por una obstruc- co coronario, la aparición de isquemia después del
c i ó n anatómica de las arterias coronarias grue- ejercicio (prueba electrocardiográfica con respues-
sas; e n e f e c t o , la aterosclerosis d e dichos va- ta isquémica) o aumentando la frecuencia cardiaca
mediante estimulación auricular se les encuentra au-
sos condiciona asimismo e l depósito d e placas
mento en la concentración de lactato en el seno coro-
d e ateroma e n el endotelio vascular q u e e n
nario como manifestación de la mencionada isquemia.
forma progresiva va obliterando la luz del vaso.
En este caso, la obstrucción es fija, c r ó n i c a y La gran mayoría d e los pacientes no refieren
lentamente progresiva, c l í n i c a m e n t e está re- molestias, pero en algunos otros puede aparecer
l a c i o n a d a c o n la angina de p e c h o clásica de angina de pecho o infarto del miocardio. Cabe men-
Heberden. cionar que la arteria coronaria descendente ante-
rior es c o n mucho la que es afectada por puentes
musculares, por lo tanto cuando se complica con
Trombosis coronaría
infarto, este tiene localización anterior. Finalmente
Cuando un trombo consecutivo a la ruptura de una un número considerable de pacientes además de
placa ateromatosa coronaria vulnerable que per- tener puentes musculares tienen aterosclerosis
mite ponerse e n contacto el factor tisular conteni- coronario con obstrucción anatómica. Las opciones
d o e n el núcleo lipídico d e la placa, c o n la sangre, terapéuticas para los pacientes sintomáticos son tres:
ocluye una arteria previamente ateromatosa causa
déficit súbito de irrigación sanguínea e n el miocar- a) Tratamiento médico. Betabloqueadores o cal-
dio tributario de la arteria obstruida. La isquemia cioantagonistas e n caso de que haya contraindi-
resultante es aguda, grave y a m e n u d o irreversi- cación para administrar los primeros. Frecuen-
ble, causando e n poco tiempo necrosis miocárdi- temente se obtiene mejoría de los síntomas.
c a . Esta a l t e r a c i ó n a n a t o m o p a t o l ó g i c a e s t á
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
b) Colocación de stent coronario. Produce franca artritis reumatoide, fiebre reumática), o infecciosas
mejoría de la isquemia y de los síntomas, existe (salmonelosis, tuberculosis, tifo). Deberá sospecharse,
el riesgo de estenosis del stent. siempre que aparezcan síntomas o alteraciones elec-
trocardiográficas, de isquemia miocárdica en el curso
c) Tratamiento quirúrgico: Puede ser miotomía
de alguno de los procesos mencionados.
para liberar la compresión coronaria o revascu-
larización con hemoducto de mamaria. Este tra- b) Alteraciones funcionales (Cuadro 1)
tamiento se reserva para cuando hay falla al tra- Espasmo coronario (angina de Prinzmetal)
tamiento médico o cuando hay estenosis del stent La obstrucción espástica transitoria total o casi
coronario. total d e una arteria coronaria anatómicamente
normal es lo que constituye la clásica angina de
Arteritis coronaria Prinzmetal. Este tipo de isquemia miocárdica no
está determinada por una obstrucción anatómi-
La inflamación arterial puede causar isquemia cuan-
ca de la luz arterial del tono arterial que está
do la disminución del calibre de la luz del vaso es lo
influido por las substancias circulantes con ac-
suficientemente importante para limitar el aporte san-
c i ó n v a s o c o n s t r i c t o r a , por los r e c e p t o r e s
guíneo al miocardio tributario. Por fortuna, la arteritis
adrenérgicos de las paredes arteriales, disfun-
coronaria es un proceso raro que ha sido descrita en
ción endotelial con déficit de oxido nítrico y por
enfermedades inflamatorias arteriales difusas (enfer-
la capacidad d e la capa media para reducir por
medad de Takayasu). Enfermedad de Kawasaky en la
constricción la luz arterial.
que se producen dilataciones aneurismáticas de las
arterias coronarias que se complican c o n trombosis
c) Alteraciones mixtas
intraarterial, afecta primordialmente niños y jóve-
Recientemente se ha puesto atención al hecho
nes, enfermedades del colágeno (periarteritis nodosa,
de que en la producción d e isquemia miocárdi-
C U A D R O 1
a) Endocarditis infecciosa.
b) Mixoma de la aurícula izquierda
ENFERMEDAD Embolia coronaria c) Trombosis intracavitaria.
d) Prótesis valvulares.
DE
ANATOMICA Puentes musculares I Obstrucción coronaria
LOS [_durante la sístole.
TRONCOS
a) Artritis reumatoide.
CORONARIOS b) Enfermedad de Takayasu.
Arteritis coronaria c) Periarteritis nodosa.
d) Fiebre reumática.
e) Salmonelosis.
f) Enfermedad de Kawasaky.
FUNCIONAL Espasmo coronario
(angina de Prinzmetal)
ALTERACIONES Anatómicas y
MIXTAS funcionales
795
CARDIOLOGIA
ca se ponen en juego tanto la obstrucción anató- 2. Enfermedades de los pequeños vasos corona-
mica d e la luz coronaria c o m o los cambios que rios (Cuadro 2).
sufre e l calibre de la arteria por constricción o
a ) En épocas relativamente recientes se han des-
dilatación de la misma. En efecto, cuando la ar-
crito alteraciones anatomopatológicas de los
teria es normal a n a t ó m i c a m e n t e o la placa
pequeños vasos coronarios en ciertos padeci-
ateromatosa obstruye en forma insignificante la
mientos (amiloidosis, síndrome de Marfán, sín-
luz vascular y la constricción espástica juega un
drome de Q T largo, etc.) que consisten en hi-
p a p e l p r e p o n d e r a n t e e n la génesis d e la
perplasia de la capa interna arterial, así como
isquemia, estaremos e n presencia de angina de
degeneración y necrosis de la capa media; se
Prinzmetal; por el contrario, hay casos en que la
ha notado que las arterias que irrigan el sistema
presencia de una placa de ateroma es la respon-
específico de conducción, están importante-
sable de la disminución significativa del calibre
mente involucradas. A estos cambios anatómi-
de la luz arterial; en estos casos, pequeños cam-
cos de los pequeños vasos coronarios se han
bios en el tono vascular pueden ser decisivos
atribuido las manifestaciones clínicas frecuen-
para incrementar la isquemia o desencadenar
temente observadas en estos casos y que con-
accidentes coronarios agudos y graves. En esta
sisten en arritmias, sincope, dolor precordial
última contingencia, el factor obstructivo anató-
atípico, trastornos de la conducción, alteracio-
mico es el más importante, mientras que el fac-
nes electrocardiográficas de la repolarización
tor funcional que promueve los cambios del c a -
ventricular y también la muerte súbita.
libre vascular, es completamente secundario,
incluso, se podría decir que constituyen c a m -
b) Recientemente se ha dado importancia cre-
bios fisiológicos d e l tono coronario; sin embar-
ciente a los estudios experimentales que han
go, se puede comprender que estos discretos
demostrado el papel que juega la agregación
cambios del tono en una arteria importantemen-
plaquetaria en la obstrucción trombótica de la
te obstruida, pueden fisiopatológicamente ser
microcirculación coronaria. En efecto, la acti-
muy importantes e n la génesis de isquemia mio-
vación de la agregación plaquetaria mediante
cárdica.
el adenosín difosfato (ADP) ha demostrado in
vivo la producción de necrosis miocárdica.
Recientemente se ha encontrado que la placa
aterosclerosa puede causar hipercontractilidad Estos conocimientos han dado base para asegu-
de la pared arterial por sí m i s m a ; la lesión rar que la agregación plaquetaria juega un papel
endotelial producida por la misma placa produ- importante en la producción de isquemia miocárdi-
ce vasoconstricción arterial que es consecutiva a ca aguda especialmente en pacientes con ateroscle-
la secreción d e substancias vasoactivas. rosis coronaria.
CUADRO 2
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
• Vasodilatación
PEQUEÑOS FUNCIONAL inadecuada Síndrome X.
* Microvasoespasmo
796
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
CUADRO 3
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA lll
4 797
CARDIOLOGÍA
1. Signos consecutivos a la Isquemia miocárdica vantamiento presistólico del ápex (en posi-
aguda ción de Pachón). Si el paciente ya previa-
a) Doble levantamiento sistólico palpable mente tenía un IV ruido auscultable, se in-
del ápex tensifica considerablemente durante el
En la zona del miocardio que sufre isquemia, episodio isquémico (figura 1-B).
no sólo disminuye su función contráctil, sino Tener en cuenta que el IV ruido puede
que puede dejar de contraerse (zona de aci- auscultarse en muchas otras condiciones y
nesia ventricularl o abombarse (discinesia aun en sujetos normales por arriba de los 40
ventricular) durante la sístole, Este comporta- años, razón por la que la sola auscultación de
miento se traduce clínicamente a la palpa- este ruido presistólico, por sí mismo, no esta-
ción (de preferencia en posición de Pachón) blece el diagnóstico de isquemia miocárdica.
en una doble giba sistólica: la primera pro-
ducida por el impulso apical y la segunda |x>r c) Aparición de soplos cardiacos
el abombamiento (discinesia) del miocardio Si la isquemia llega a afectar a un músculo
isquémico. Esta alteración de la contracción papilar, éste dejará de ejercer la tensión
de la pared ventricular desaparece al cesar el sistólica para dar soporte al aparato valvular
episodio isquémico y el ápex vuelve a tener mitral y condicionará por lo tanto, insufi-
sus características normales (figura 1-B). ciencia mitral que se manifiesta clínicamen-
te por la aparición de un soplo sistólico re-
gurgitante, generalmente no muy intenso,
b) IV ruido
en el ápex y que desaparece al disiparse el
La isquemia es una de las más importantes
dolor anginoso (disfunción del músculo
causas de disminución de la distensibilidad
papilar).
ventricular. En otras palabras, la pared ventri-
cular se torna rígida durante el episodio is-
2. Signos de reacción adrenérgica
quémico y por ello aparece un intenso IV
ruido que generalmente se ausculta y en oca- La aparición de taquicardia, palidez y diaforesis
siones puede llegar a palparse como un le- fría son manifestaciones comunes del ataque
FICURA 1-B Angor pectoris. Registro simultáneo de una derivación Dll del electrocardiograma, un
apexcardiograma ( A C O y un fonocardiograma en el ápex. IZQUIERDA: Registro durante un ataque
anginoso. Obsérvese la lesión subendocárdica en el E C C , la giba telesistólica (señalada con una flecha)
del ACG v la presencia de IV ruido en el FCG. DERECHA: la normalización del ECG y la desaparición
tanto de la giba telesistólica del ACG como del IV ruido, después del ataque anginoso. (Cortesía del Dr.
8. íisíiíciíiT i
4
799
CARDIOLOGÍA
estudio para demostrar la presencia de isquemia mio- demanda de O , por el corazón, normalmente es
cárdica o ausencia de ésta para confirmar o descartar el compensado con un aumento del flujo coronario
diagnóstico. Cuando el dolor precordial no es caracte- con e l consiguiente incremento del aporte de O ,
rístico y el electrocardiograma es anormal, hay altas hacia el tejido contráctil. Para que el aporte corres-
probabilidades de que el paciente padezca insuficien- ponda al incremento d e la demanda, se necesita la
cia coronaria; sin embargo, en estos casos también normalidad del árbol arterial coronario (como fac-
será necesario demostrar la presencia de isquemia tor principal); hay otros factores que influyen en el
miocárdica (vide infra) para precisar el diagnóstico. aporte de 0 hacia el miocardio, tales c o m o : la
2
Sólo e n condiciones muy especiales será necesario presión atmosférica, y por consiguiente la presión
practicar arteriografía coronaria para confirmar el parcial de 0 en los alveolos pulmonares ( P A 0 ) y
2 2
diagnóstico de angina de pecho (vide infra), ya que en la sangre arterial ( P O , ) la concentración de he-
moglobina circulante, la función de la membrana
en la gran mayoría d e los casos podrá establecerse
alveolocapilar, la permeabilidad de las vías respira-
m e d i a n t e el c o n j u n t o d e historia c l í n i c a ,
torias e incluso la curva de disociación de la hemo-
electrocardiograma de reposo y prueba de esfuerzo,
globina. En otras palabras, si la respiración pulmonar
cuando está indicada {vide infra).
es adecuada, si no hay anemia considerable y si las
arterias coronarias no están obstruidas, al realizar
un ejercicio se incrementará el aporte de 0 hacia
D I A G N Ó S T I C O P R E C O Z D E C A R D I O P A T I A IS- 2
BASAL
MVO.)
2
EQUILIBRIO
INSUFICIENCIA EIERCICIO
CORONARIA
OBSTRUCCIÓN
( - > ) t + + + MVOj t + + + vo
SIGNIFICATIVA 2
DESEQUILIBRIO
u n i d a d e s : W es igual a kilográmetros por minuto, minuto por kilogramo corporal y a esta unidad se
M es igual a kilogramos, y V es igual a metros por le h a d e n o m i n a d o M E T , así, un sujeto d e 70 kg
minuto. c o n s u m e 3.5 x 7 0 = 2 4 5 mi O , x m i n e n c o n d i -
ciones básales. Así, e l M E T es una u n i d a d útil
para cuantificar el e s f u e r z o .
UNIDADES DE MEDIDA
200
190
180
¡
170
o 1""
£ 140
3
ti
£ lio
u_
120
Ir
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
5. Por aparecer mareo, palidez, sensación de lipo- 3. El único signo específico de isquemia miocárdi-
timia (bajo gasto cardíaco). ca es la depresión del segmento S T que reúna
ciertas características.
6. Por falta de ascenso de la presión arterial o más
aún disminución de la misma (falla miocárdica). 4. Habrá alteraciones del punto J, de la onda T y de la
onda U que deberán considerarse inespecíficas.
7. Por elevación d e la presión sistólica d e 2 5 0
m m H g o más, y de 1 2 0 m m H g o más de la pre-
Prueba normal (Cuadro 4)
sión diastólica (hipertensión reactiva).
1. Sin cambios en la repolarización ventricular ex-
8. Por falta de aumento de la frecuencia cardiaca
cepto las causadas por el ejercicio.
d e acuerdo c o n el esfuerzo (betabloqueadores
o enfermedad del nodo sinusal). 2. Depresión del p u n t o ) c o n segmento ST ascen-
dente y pendiente no patológica que dure me-
9. Por la aparición de ritmo de galope. nos de 3 minutos e n la recuperación.
10. Por presentarse arritmias paroxísticas (flutter 3 . N o deben aparecer:
auricular o taquicardia auricular). a) Angor.
b) Arritmias.
11. Por iniciarse extrasístoles ventriculares parea-
c) Trastornos de la conducción.
das o taquicardia ventricular.
d) Galope.
12. Por la aparición de signos electrocardiográficos
de isquemia miocárdica. Prueba anormal
804
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
A •
_ II _
CUADRO 4
INTERPRETACIÓN DE LA PRUEBA
DE ESFUERZO
NEGATIVA:
*1 1 FC más del 85 % de la esperada.
2 Respuesta presora normal.
3 No angor.
u A-fj
4 No arritmias.
5 E C G normal.
-5 -^fWfej^ir-«i . , j j
!
b) Son más frecuentes en personas con enfer- a) Hipertensión arterial reactiva de esfuerzo.
m e d a d coronaria y electrocardiograma de
b) Distonía neurovegetativa:
reposo anormal.
• Reacción simpaticomimétic-, (taquicardia
c) N o necesariamente se acompañan de res- exagerada).
puesta isquémica. • Reacción vagal (bradicardia e hipotensión).
4^
CARDIOLOGÍA
B
cha). B: Arteriografía coro-
naria (posición OIA con an-
gulación caudal). El estudio
demuestra la presencia de
una enorme placa atero-
matosa que p r o d u c e la
obstrucción significativa de
un largo tramo del tronco
(T) de la arteria coronaria
izquierda (señalado con
una flecha). (Cortesía del Dr.
Jorge Gaspai)
a ) Depresión del apunto) mayor d e 1 m m , c o n b) Otros estados patológicos que alteran el seg-
segmento ST ascendente y pendiente no pa- mento ST:
tológica.
Sobrecargas ventriculares
b) Aplanamiento o inversión de la onda T. Bloqueo de rama izquierda.
Síndrome de Wolff-Parkinson-White.
c) Descenso del segmento ST no mayor de 1 Acción digitálica.
milímetro. Hipokalemia.
d) Aparición o modificaciones de la onda U. Acción quinidínica.
IKIb '
CARDIOLOGÍA
cioso del engrosamiento sistólico d e las paredes canzado éste en todas las aproximaciones requeri-
d e l v e n t r í c u l o izquierdo e n todas sus regiones das y que la imagen tenga una calidad óptima para
(figura 6), tanto en condiciones básales como des- su correcta interpretación.
pués de realizar un ejercicio (ecocardiograma de Por otro lado, el ecocardiograma con dipirida-
esfuerzo) o d e estimular el ¡notropismo (dobuta- mol tiene dos inconvenientes importantes como lo
mina) y cronotropismo (atropina) cardiacos en for- son las molestias q u e produce la administración
m a simultánea c o n e l objeto d e incrementar sig- del fármaco e n una gran proporción de pacientes y
nificativamente el M V O , y descubrir si e n alguna que el efecto isquémico se produce con una sola
de las regiones se obtiene una respuesta isqué- dosis d e l fármaco (respuesta "todo o n a d a " , lo cual
m i c a (vide infra). T a m b i é n p u e d e p r o v o c a r s e puede ser peligroso c u a n d o existen obstrucciones
isquemia miocárdica por efecto de " r o b o " cuando c r í t i c a s d e l t r o n c o d e la c o r o n a r i a i z q u i e r d a ,
se p r o d u c e e n forma aguda vasodilatación d e la bivasculares o trivasculares.
c i r c u l a c i ó n c o r o n a r i a y el flujo sanguíneo fluye
Es por estas razones que paulatinamente se ha
preferentemente por las arterias dilatadas e n re-
generalizado el uso d e la ecocardiografía dinámica
lación a las arterias parcialmente obstruidas. Este
con dobutamina-atropina, pues es la que se realiza
efecto se obtiene c o n la administración de dipiri-
con mayor facilidad, se obtienen imágenes de ma-
d a m o l o adenosina.
yor calidad al no interferir importantemente la res-
Aun cuando e n la actualidad se ha generalizado piración, su administración se realiza i n c r e m e n -
el uso de esos tres métodos, el ecocardiograma di- tando paulatinamente la dosis, lo cual la hace muy
námico con dobutamina-atropina es el que mayores segura al no producir bruscamente isquemia de
ventajas ofrece (figura 7) ya que sus efectos son los gran magnitud, la breve duración de las acciones
que mayormente se parecen a los que produce el del fármaco revierte rápidamente el efecto isqué-
ejercicio sin tener los importantes inconvenientes mico, la duración d e la prueba es corta e n el tiem-
que el eco de esfuerzo tiene para la correcta adqui- po, c s un estudio relativamente barato \ con alta
sición de las imágenes en el momento máximo del sensibilidad ( 8 8 - 9 0 % ) , especificidad ( 8 8 - 9 2 %) y
esfuerzo dentro del primer minuto después de al- valor predictivo ( 9 1 % ) .
808
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
4
CARDIOLOGÍA
CUADRO 6
ECOCARDIOGRAFÍA DINÁMICA CUANTITATIVA
(DIAGNÓSTICO DE ISQUEMIA CARDIACA)
FE ESCALA
ISQUEMIA FE BASAL (%) POST-DOBUTAMINA POST-DOBUTAMINA
810
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
de de qué tanto desequilibrio aporte-demanda efecto, cuando la isquemia se produce por altera-
(deuda de oxígeno) se requiere para alterar la ciones de la microcirculación en el electrocardio-
prueba; así, la deuda de O , primeramente apare- grama aparece infradesnivel del segmento ST pero
ce un defecto de perfusión en el gammagrama la contracción segmentaria tiene una respuesta nor-
cardíaco o en el ecocardiograma de contraste mal al esfuerzo o a la estimulación farmacológica, lo
miocárdico, enseguida se altera la relajación y la cual denota la presencia de una deuda de oxígeno
función diastólica ventricular, después se altera la en el corazón, pero no en forma segmentaria.
contracción segmentaria (ecocardiografía dinámi-
ca), si la isquemia es extensa habrá una caída de la
fracción de expulsión (ecocardiograma dinámico ISQUEMIA SILENCIOSA
o gammagrama cardiaco). Posteriormente se
infradesnivela el segmento ST del electrocardio- La isquemia miocárdica que tiene una duración
grama y se requiere que la deuda de oxígeno sea menor de 3 minutos y que produce una elevación
mayor para que se haga presente el dolor anginoso
de la presión diastólica intraventricular menor de 7
ifigura 8>. Se ha demostrado que la sensibilidad
mmHg, se asocia a isquemia silenciosa, pues es un
que tiene la prueba de esfuerzo electrocardio-
estímulo insuficiente para causar el dolor anginoso.
gráfica para reconocer la presencia de isquemia
Por el contrario, cuando la isquemia miocárdica tie-
se encuentra entre el 6 5 y 7 0 %, mientras que la
ne una duración mayor de 3 minutos y es de la
ecocardiografía dinámica y el gammagrama
cardiaco tienen una sensibilidad y especificidad intensidad suficiente para elevar la presión
definitivamente mayor para reconocer la presen- telediastólica ventricular más de 7 mmHg se consti-
cia de isquemia miocárdica (85 a 8 8 % para la tuye en un estímulo suficiente para causar dolor
primera 90 a 9 2 % para la segunda). anginoso; sin embargo, hay pacientes en quienes a
pesar de padecer un ataque isquémico agudo sufi-
El ecocardiograma dinámico tiene como ventaja ciente para producir alteraciones hemodinámicas y
adicional la posibilidad de reconocer si la isquemia electrocardiográficas, no manifiestan angor pectoris,
se debe a obstrucción de una arteria coronaria en ellos, la isquemia miocárdica es "silenciosa". Este
epicárdica o a alteraciones de la microcirculación fenómeno se ha visto predominantemente en los
por hipertrofia inapropiada o por síndrome X. En sujetos diabéticos y en los ancianos.
Angina
FIGURA 8 Sensibilidad de
los métodos para provocar y Depresión ST
descubrir la presencia de
isquemia miocárdica. Con- I Fracción de expulsión
forme aumenta el ejercicio,
en forma paralela aumenta
el M V O j . La obstrucción 1 Contracción segmentaria
anatómica de uno o varios
troncos coronarios produce
un desequilibrio aporte-de- Defecto de perfusión
manda y el ejercicio prime-
ramente reduce el flujo Flujo coronario 1
coronario de la arteria obs-
truida; aparecen consecuti-
vamente el defecto de per-
fusión en el gammagrama
cardíaco o en el eco de con-
traste miocárdico, altera-
ción en la c o n t r a c c i ó n
segmentaria en el ecocar-
diograma, caída de la frac-
ción de expulsión, depresión
en el el ECG del segmento
ST, y finalmente aparece el Ejercicio
dolor anginoso Tiempo en la banda *~
CARDIOLOGÍA
En los pacientes con angina de pecho estable se invasivos como la T A C helicoidal de alta resolución
ha demostrado mediante registro electrocardiográ- se ha perfeccionado considerablemente y ofrece
fico continuo d e 24 horas (Holter), que en más del imágenes coronarias cada vez mejores, todavía no
80 % de ellos aparece depresión del segmento ST han desplazado a la arteriografía coronaria selecti-
d e 1 mm o mayor (lesión subendocárdica), sin que va directa. La técnica del procedimiento, sin ser
el paciente manifieste ningún síntoma; por otro lado, especialmente difícil, sí requiere d e un adiestra-
el tratamiento c o n fármacos antianginosos reduce miento completo y especializado, e n un centro e n
s i g n i f i c a t i v a m e n t e los e p i s o d i o s d e i s q u e m i a donde estos estudios se realicen en forma completa
asintomática. Muchos de estos episodios isquémicos por médicos especialmente preparados para tal fin.
silenciosos (75 %) no son desencadenados por au- Se insiste e n estos aspectos porque son de funda-
mento d e la frecuencia cardiaca ni de la presión mental importancia para el resultado satisfactorio
arterial, pero sí se ha demostrado que son desenca- d e l e x a m e n ; en efecto, se ha demostrado amplia-
denados por el frío ambiental, por fumar cigarrillos mente c ó m o la aparición de complicaciones gra-
y por estados d e tensión emocional; asimismo, es- ves a consecuencia de la arteriografía coronaria
tos episodios de isquemia silenciosa en pacientes están en relación inversa al adiestramiento de quien
con angor estable siguen un ritmo circadiano y su practica el estudio; e n otras palabras, el procedi-
presencia en ellos implica mayor posibilidad d e in- miento tiene muy bajo riesgo cuando es realizado
farto del miocardio futuro y muerte súbita, en rela- por manos expertas.
ción a aquellos pacientes con angor estable que no
padecen isquemia silenciosa. Por otro lado, se debe insistir que la realización
de estudios angiográficos coronarios d e b e n
En pacientes sanos es excepcional la presencia restringirse a cardiólogos entrenados, especialmen-
de isquemia; por otro lado, la presencia de depre- te en cateterismo cardiaco y arteriografía coronaria,
sión asintomática del segmento ST (isquemia silen- ya que las complicaciones potenciales del estudio
ciosa) e n pacientes con obstrucciones significativas son precisamente d e tipo cardiológico: arritmias
de los gruesos troncos coronarios y finalmente, la ventriculares, fibrilación o asistolia ventricular, re-
isquemia silenciosa también es frecuente e n p a - acción vagar, insuficiencia coronaria aguda o infarto
c i e n t e s c o n s í n d r o m e X . P a r a e s t a b l e c e r este del miocardio, etc., las cuales, en su gran mayoría,
diagnóstico diferencial se p u e d e realizar un e c o - no constituyen mayor problema (excepto el infarto
cardiograma dinámico c o n dobutamina-atropina, del miocardio) cuando son adecuadamente tratadas
o b i e n , u n g a m m a g r a m a c a r d i a c o (ver c a p í t u l o por personal especializado, pero q u e , por el con-
de C A R D I O L O G Í A N U C L E A R ) . trario, pueden ser fatales si el médico que realiza el
estudio no está preparado para reconocer el pro-
blema y tratarlo c o n oportunidad
ARTERIOGRAFÍA CORONARIA SELECTIVA
Por último, este tipo de procedimiento tan es-
El c a t e t e r i s m o d e las arterias c o r o n a r i a s y su pecializado, no puede realizarlo una sola persona,
opacificación con medio de contraste, constituye en sino que se requiere de toda una infraestructura
la actualidad el único método mediante el cual se que está constituida por los costosos equipos
puede delimitar con toda exactitud la anatomía in- radiográficos con aditamentos específicos para la
terna y las alteraciones por enfermedad (obstruc- obtención de películas o angiocardiogramas bipla-
ción, fístulas aneurismas, etc.) de dichas arterias; nos, mediante seriografía, equipos d e revelado,
por lo tanto, este estudio ofrece valiosa información diferentes tipos de catéteres (para toma d e presio-
tanto diagnóstica como pronostica al poder clasificar nes, para inyección de medio de contraste en las
el tipo y cuantificar el grado de daño de los gruesos cavidades cardiacas y otros para cateterizar selecti-
troncos coronarios. Por otro lado, la información ob- vamente las coronarias), equipo para desfibrilación,
tenida por este medio, constituye la piedra angular marcapasos, polígrafos para registro de las presio-
sobre la cual se apoya la indicación para decidir el nes intracavitarias, transductores, computadoras
tratamiento definitivo d e cualquier paciente con an- para el cálculo del gasto cardiaco, así c o m o tam-
gina de pecho (tratamiento médico, intervencionista bién personal paramédico especialmente adies-
o quirúrgico). trado (enfermeras circulantes y técnicos radiólogos)
y por si fuera poco, se requiere que el hospital e n
Por lo anteriormente mencionado, se podrá
donde se realizan dichos estudios esté dotado de
comprender q u e e n la actualidad dicho procedi-
unidad de cuidados intensivos y de cirugía cardio-
miento es insustituible cuando se pretende obtener
vascular, por si se hace necesario un control.estric-
esta información a pesar de que los métodos no
CARDIOPATIA ISQUEMICA
4^
CARDIOLOGÍA
ti
4
CARDIOLOGÍA
cualquier método diagnóstico en pacientes asin- 13. Pacientes c o n infarto del miocardio agudo:
tomáticos, hay indicación para realizar arteriogra-
a) Durante las primeras cuatro horas para eva-
fía coronaria. Conviene enfatizar la necesidad de
luar la posibilidad de angioplastia primaria
corroborar el diagnóstico con los métodos que
(vide infra).
mayor sensibilidad y especificidad tienen (eco-
cardiografía dinámica o medicina nuclear) para b) Insuficiencia mitra! aguda (ruptura de cuer-
evitar realizar procedimientos cruentos y costo- das tendinosas o músculo papilar), ruptura
sos en pacientes sanos (falsas positivas). del septum inteventricular o ruptura
"subaguda" (pseudoaneurisma) e n el curso
9. Enfermedades cardiacas de origen obscuro.
de un infarto del miocardio.
En ocasiones c o n v i e n e precisar si la existencia
de un aneurisma ventricular, una arritmia auri- 14. C i r u g í a valvular. Convienie contar con una ar-
cular o ventricular, d e etiología no aclarada, o teriografía coronaria, si el paciente será some-
bien, una aparente miocardiopatía dilatada con tido a cirugía valvular, es del sexo masculino y
insuficiencia cardiaca son debidas a enferme- tiene más de 4 0 años de edad, con el objeto de
d a d coronaria (miocardio hibernante). En estos descubrir enfermedad coronaria significativa,
casos la d u d a diagnóstica justifica el estudio inadvertida por falta ele síntomas, pero que pue-
arteriográficc. da causar complicaciones graves en el trans o
posoperatorio.
10. Valoración posoperatoria de pacientes so-
metidos a revascularización m i o c á r d i c a o
posangioplastía. En pacientes que hayan sido CONTRAINDICACIONES
revascularizados por cualquier m é t o d o , h a -
1. El estudio está contraindicado cuando no se cuen-
brá indicación para realizar arteriografía c o -
ta c o n un médico especialmente entrenado en
ronaria siempre q u e el paciente manifieste
el procedimiento, o c o n el equipo apropiado
angina residual o c u a n d o por cualquier mé-
para la realización del estudio, o bien, con el
todo no invasivo se demuestra la presencia
personal paramédico necesario para auxiliar al
d e isquemia residual.
hemodinamista. Cuando estos estudios se reali-
11. Pacientes recuperados de un paro cardiaco. zan e n forma improvisada, con personas no e n -
Pacientes que presentan un cuadro de taqui- trenadas y c o n equipo inapropiado, los resul-
cardia ventricular, fibrilación o asistolia ventri- tados son definitivamente insatisfactorios y la
cular, e n ausencia de infarto del miocardio y se morbimortalidad del procedimiento se eleva
recuperan c o n tratamiento médico se les debe considerablemente.
investigar la presencia de isquemia miocárdica
y si se demuestra habrá indicación para realizar 2. Pacientes con insuficiencia cardiaca grave, cuan-
arteriografía coronaria. do ésta no es posible resolverla mediante trata-
miento quirúrgico. En la ruptura del septum o
12. Espasmo coronario. Cuando el dolor precordial insuficiencia mitral aguda por ruptura de las cuer-
es característico de angina, se presenta solamente das tendinosas o músculo papilar, vale la pena
en el reposo o cuando se demuestra en conjunto correr el riesgo del estudio, en un intento de
al síntoma la elevación del segmento ST (en el resolver quirúrgicamente estas graves compli-
E C C aislado, o durante la grabación mediante caciones, ya que la insuficiencia cardiaca es se-
electrocardiografía ambulatoria), o bien, cuando cundaria, precisamente a la sobrecarga aguda
' el dolor precordial de reposo es atípico, pero del corazón.
sugestivo de isquemia miocárdica, la coronario-
grafía permitirá establecer el diagnóstico diferen- 3. Pacientes ancianos c o n demencia, en quienes
cial entre angina de Prinzmetal (coronarias independientemente del resultado del estudio,
epicárdicas normales y espasmo inducido con la el riesgo quirúrgico es prohibitivo. En ellos, no
inyección de ergonovinai, obstrucciones anató- vale la pena correr el riesgo del procedimiento,
micas de las arterias coronarias con espasmo agre- ya que no influirá en la decisión terapéutica.
gado y microvasoespasmo o sin ellos (coronarias 4. Pacientes e n q u e , además de padecer insufi-
epicárdicas normales, sin espasmo con la admi- ciencia coronaria, presentan graves enfermeda-
nistración de ergonovina, pero seguido de angor des ¡ntercurrentes (accidente vascular cerebral
y depresión del segmento ST). reciente, insuficiencia renal progresiva, sangrado
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
del tubo digestivo, infección activa, cáncer, insufi- si la mala función ventricular es consecutiva a mio-
ciencia respiratoria grave o hepática, anemia im- cardio no funcionante por isquemia extrema pero
portante, hipertensión desconrrolad.i,desequilibrio vivo (miocardio hibernante), el tratamiento de re-
hidroelectrolítico, enfermedades psk|iiiátricas avan- vascularización será la única forma de tratamiento
zadas e irreversibles). eficaz para la insuficiencia cardíaca (Vide infra: via-
bilidad miocárdica).
5. Pacientes bajo efectos tóxicos de drogas, como
digital o quinidina tienen alto riesgo de presen-
tar arritmias potencialmente letales, frecuente- PARÁMETROS DE FUNCIÓN VENTRICULAR ÚTI-
mente irreversibles durante el procedimiento y LES EN EL PACIENTE CORONARIO
lo mismo ocurre cuando el estudio se realiza en
pacientes con d e s e q u i l i b r i o electrolítico Aún cuando se pueden calcular innumerables pará-
(hipokalemia). metros que miran diversos aspectos de la función
ventricular, unos para el mejor entendimiento de la
6. Antecedentes de reacción anafiláctica a medios fisiopatología de la cardiopatía isquémica (estudio
de contraste. En estos pacientes se puede reali- de la distensibilidad ventricular, de la masa cardia-
z a r el e s t u d i o p r e v i a m e d i c a c i ó n c o n ca, etc.) u otros que son afectados por fármacos (dp/
antihistamínicos y corticoesteroides. dt, Vmáx, trabajo cardiaco, etc.) y que se utilizan por
razones de investigación clínica. En la práctica, tres
han sido los parámetros útiles para evaluar la fun-
RIESGO DE LA ARTERIOGRAFÍA CORONARIA ción ventricular del paciente coronario:
4ÜZ
CARDIOLOGÍA
diastólico. Cuando el corazón no es capaz de expulsar 2. Angina de pecho con lesiones obstructivas de
por lo menos el 50 % de su volumen diastólico (frac- los gruesos troncos coronarios, que no sean téc-
ción de expulsión menor de 50 %) se encontrará con nicamente adecuadas para un tratamiento qui-
insuficiencia ventricular izquierda (figura 14) rúrgico o intervencionista.
Se debe tener e n cuenta que la fracción de ex-
3. Angina de pecho en pacientes c o n importante
pulsión es un parámetro de función hemodinámica
d e t e r i o r o d e la f u n c i ó n v e n t r i c u l a r (gran
y que se deprime cuando una cantidad suficiente de
cardiomegalia, insuficiencia cardiaca refractaria
miocardio ha sido lesionado reversible o irreversi-
o importante depresión de la fracción de expul-
blemente por la isquemia por lo que la disminución
d e este parámetro representa daño miocárdico con sión) sin que se demuestre viabilidad miocárdi-
deterioro funcional. ca significativa (v/de ¡ntra).
F E =
4uF - = 7 5 ( 7 5 % )
f e = 4ÜF - = 25 ( 2 5 % )
BUENA F U N C I O N MALA F U N C I O N
FIGURA 14
819
CARDIOLOGÍA
820
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
Aspirina
El efecto antitrombótico más importante de la
TÉCNICA
aspirina se debe a la inhibición de la síntesis
plaquetaria de tromboxano A , a través de inhibir El procedimiento se inicia d e la misma forma que se
irreversiblemente la acción de la cicloxigenasa, lleva a cabo una arteriografía coronaria. Se utiliza un
la cual cataliza el paso de ácido araquidónico catéter especial que cerca de la punta tiene un balón
hacia tromboxano A „ poderoso vasoconstrictor inílable con doble luz que permite simultáneamente
y agregante plaquetario. Por el contrario, a nivel tomar presión e inyectar material de contraste. Se
de la pared vascular la cicloxigenasa cataliza el introduce el catéter y se canaliza la arteria coronaria
paso de ácido araquidónico hacia prostaciclina y después se hace un disparo de medio de contraste y
prostaglandina E,, cuyas propiedades son, por el se reconoce la lesión obstructiva (figura 17A), se co-
contrario, de vasodilatación y antiagregantes loca el balón e n el sitio ocluido y es inflado por 3
plaquetarios. La administración de bajas dosis de segundos (figura 17-B-C) y después es desinflado. El
aspirina (100 mg c/24 hrs.) inhiben la agregación disparo de medio de contraste después de realizado
plaquetaria durante 7 a 9 días. Asimismo, se ha el procedimiento nos permite conocer el resultado
demostrado que la aspirina reduce el riesgo para de la dilatación (figura 17-D). Puede aplicarse el pro-
la trombosis ¡ntrarterial o intracardiaca y esta ac- ceso en varias ocasiones si no se ha considerado que
ción es la responsable para la reducción d e apa- el resultado es satisfactorio durante el primer inten-
rición de síndromes isquémicos agudos. to. Se recomienda preparar al paciente durante los
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
días previos con medicación antiplaquetaria (aspirina exitosamente con este procedimiento (especialmen-
y clopidogrel) y en el mismo momento de la angio- te las de tipo A) y esta indicación se vuelve particu-
plastia se administran 1 0 0 0 Ul de heparina intravenosa larmente importante cuando el paciente tiene alto
inmediatamente antes de realizar el procedimiento riesgo para revascularización quirúrgica.
se administra nitroglicerina intravenosa o intracoro-
naria para evitar el espasmo coronario.
CONTRAINDICACIONES
El paciente puede darse de alta 24 horas des-
pués de ser vigilado e n una unidad de cuidado co- Lesiones obstructivas tipo C.
ronario intermedio y de no haber presentado com-
plicaciones. La forma como actúa la angioplastia es
realmente comprimiendo la placa ateromatosa ha- COMPLICACIONES
cia la pared arterial y de esa forma aumentando el Las complicaciones se presentan en menos del 4 %
diámetro de la luz. Por ello, es comprensible que de los pacientes con lesiones tipo A, en menos del 8 %
las lesiones a'.eromatosas calcificadas puedan llegar de las lesiones tipo B y aun cuando las lesiones tipo
a ser resistentes para la dilatación.La angioplastia C tienen una menor probabilidad de éxito. C o n el
transluminal percutánea se ha convertido en uno de advenimiento de nuevos tipos de catéteres se han
los principales procedimientos para aliviar las obs- logrado mejorar los resultados en ese tipo de lesio-
trucciones coronarias en pacientes con angina de nes. Las complicaciones más importantes de una
pecho estable.Las indicaciones para realizar una angioplastia son la trombosis coronaria aguda y la
angioplastia coronaria transluminal percutánea e n reestenosis a seis meses.
un paciente con angina de pecho estable están de-
La angioplastia con balón constituye una "agre-
terminadas fundamentalmente por las característi-
sión controlada" de la pared arterial al comprimir y
cas anatómicas de las obstrucciones coronarias para
romper la placa ateromatosa con la expansión con-
las cuales se ha hecho una clasificación de acuerdo
comitante de la pared. Este trauma de la íntima,
c o n la posibilidad para realizar el procedimiento, la
usualmente no interfiere con el flujo sanguíneo y se
probabilidad de éxito y el riesgo de complicaciones
reendoteliza e n 4 a 6 semanas. Cuando hay una
inmediatas (cuadro 7).
disección excesiva entre la íntima y la m e d i a , d a
lugar a oclusión total por la misma capa disecada,
por espasmo o trombosis concomitante. Ello causa
INDICACIONES infarto de miocardio y colapso cardiovascular si no
se logra una reperfusión inmediata. Esta complicación
D a d o que este procedimiento no puede ser aplica-
es efectivamente tratada con nueva angioplastia inme-
do a cualquier tipo de pacientes, se requiere una
diata con insuflación prolongada (20 minutos) utilizan-
cuidadosa selección de la cual en mucho depende-
do catéteres con perfusión distal y después colocando
rá que el procedimiento resulte exitoso:
los nuevos stents liberadores de fármacos. Con este
1. Pacientes que padezcan angina de pecho con tratamiento se ha logrado un éxito en el 9 5 % de los
lesiones coronarías obstructivas significativas casos, cuando se presenta esta complicación.
(70 % o mayor) que sean del tipo A o B en
La oclusión aguda complica una angioplastia co-
una o más arterias coronarias y en quien se
ronaria es baja (0.5 % ) .
haya demostrado isquemia miocárdica por
Por otro lado, la reobstrucción aparecerá a los 6
electrocardiografía de esfuerzo, ecocardio-
meses en 3-6 % de los casos, después de una dilata-
grafía dinámica o gammagrafía cardiaca.
ción exitosa. Se considera como reobstrucción cuan-
2. Pacientes con obstrucción significativa de un do el grado de reestenosis es mayor del 6 0 % y es
hemoducto aortocoronario demostrado d u - clínicamente significativa cuando se manifiesta por
rante el estudio angiográfico. angina o cuando se puede inducir isquemia c o n
prueba de esfuerzo electrocardiográfica, ecocardio-
grafía dinámica o gammagrafía cardiaca.La reestenosis
ANGIOPLASTIA DE MÚLTIPLES VASOS puede ser tratada con nueva angioplastia, aplicación
de férula intracoronaria (Stent), aterectomía o ciru-
En la actualidad más del 50 % de las angioplastías rea-
gía (especialmente si la reestenosis es de múltiples
lizadas son de vasos múltiples. Se debe enfatizar que la
vasos). En la actualidad es excepcional que de los
probabilidad de éxito depende mayormente de las
pacientes con reobstrucción univascular requiera
características anatómicas de la lesión (cuadro 7), y a
cirugía mientras que en enfermedad multivascular
q u e las l e s i o n e s t i p o A o B p u e d e n tratarse
CARDIOLOGÍA
A B C D
FIGURA 17 Angioplastia coronaria transluminal percutánea. A: La angiografía coronaria muestra una
obstrucción crítica de la arteria coronaria descendente anterior. B: Se pasa el catéter a través del sitio
estrecho y la inyección de una pequeña cantidad de contraste lo demuestra. C: Se infla el balón para
comprimir la placa de ateroma. O : La angiografía coronaria después del procedimiento demuestra una
obstrucción residual del 20%. (Tomado d e : Krayenbuel, H.P., Gruentzig A.R., Sienthaler W.E.,
Percutaneous transluminal coronary angioplasty. U p date III.The heart. J. W. Hurst (Ed.) Pág 3 5 , 1 9 8 0 ,
con permiso de los autores)
CUADRO 7
CARACTERÍSTICAS DE LAS LESIONES OBSTRUCTIVAS CORONARIAS
TIPO A TIPO B
(Éxito > 85 %, riesgo bajo) (Éxito en 60 - 80%, riesgo moderado)
TIPO C
(Éxito < 60%, riesgo alio)
4^
CARDIOLOGÍA
anualmente. 15 años después de operados sólo el 15 % rosclerosis) la placa aterosclerosa esta constituida
de los pacientes está libre de angina, infarto del por un núcleo lipídico (esteres del colesterol), que
miocardio o muerte. C a b e mencionar que los han penetrado al subendotelio y que han sido reco-
hemoductos venosos están permeables en el 4 0 a nocidos como un cuerpo extraño. Los monocitos
60 % a los 12 años, mientras que los hemoductos de atraídos hacia la placa aterosclerosa, llegan al su-
arteria mamaría están permeables e n más del 9 0 % bendotelio y fagocitan el colesterol, formándose las
e n el mismo lapso. células espumosas. La oxidación de las lipoproteínas
de baja densidad (LdL) produce un intenso proceso
inflamatorio que por un lado lesiona e l endotelio,
REVASCUIARIZACION MIOCÁRDICA EN PACIEN- por otro, atrae la presencia de linfocitos T, de célu-
TES MAYORES DE 70 AÑOS las de músculo liso que sintetizan colágena y elastina,
todo ello para formar una membrana fibrosa que
La mortalidad quirúrgica que ha sido informada por
aisle el proceso inflamatorio (figura 18). D e tal
los mejores centros, varía entre e l 2.7 y 7.7 % para
manera que la placa aterosclerosa queda formada
este grupo de e d a d ; en general, se ha notado que la
por el núcleo lipídico (esteres d e colesterol y célu-
mortalidad es francamente mayor e n los pacientes
las espumosas) y una membrana fibrosa (colágena,
que tienen más de 75 años; y de los principales
elastina, células musculares lisas) (figura 19). La acu-
factores asociados a la mortalidad, están la mala fun-
mulación de colesterol dentro del subendotelio
ción ventricular o la asociación de otros padeci-
produce una expansión de la placa fibrosa hacia
mientos coincidentes con la enfermedad coronara;
fuera, lo cual preserva la luz arterial a este efecto
sin embargo, si los pacientes sobreviven, e n un 9 0
se le ha d e n o m i n a d o "remodelación positiva" o
% de los casos mejoran notablemente sus síntomas y
fenómeno de Glagov (figura 19) y ello permite
la sobrevida a 5 años es excelente. La cirugía a cora-
q u e la arteria no se obstruya.
zón abierto e n pacientes mayores de 80 años tam-
bién se ha realizado y se ha visto que la mortalidad es La placa aterosclerosa es un sitio extraordinaria-
de aproximadamente el 14.7 %. Los factores que in- mente activo e n lo referente tanto el proceso infla-
fluyen principalmente e n la mortalidad de estos matorio como a la síntesis de colágena y elastina por
pacientes son: el tiempo de pinzamiento aórtico (a las células musculares lisas que intentan engrosar la
mayor tiempo de pinzamiento mayor mortalidad, y capa fibrosa y así aislar el núcleo lipídico.
viceversa), la cirugía de urgencia, la caquexia, la
Sin embargo la producción d e interferona 6 por
intubación por más de 72 horas, la mala función
los linfocitos T por un lado, bloquea la síntesis de
ventricular, la necesidad preoperatoria d e balón de
colágena y elastina por las células d e músculo liso y
contrapulsación, la angina inestable y el infarto del
por otro estimula a las células espumosas para que
miocardio antiguo. Si el paciente sobrevive, lo hará
sinteticen proteasas, colagenasasy gelatinasas, enzimas
por más de cinco años; por lo tanto cuando la indi-
que digieren la membrana fibrosa (figura 20).
cación d e la cirugía es precisa, no hay factores d e
riesgo mayor (antes anotados) y el grupo quirúrgi-
co es d e alta calidad, se puede beneficiar impor- PLACA VULNERABLE
tante mente a estos pacientes. Se denomina c o m o "placa v u l n e r a b l e " a aquella
placa aterosclerosa q u e t i e n e un gran n ú c l e o
lipídico que alterna con una membrana fibrosa
delgada (figura 19). El termino "vulnerable" implica
A N G I N A INESTABLE la posibilidad de que se rompa la membrana fibrosa
El término de "angina inestable", se ha acuñado para y que permita que se ponga en contacto el núcleo
denominar al cuadro producido por insuficiencia lipídico con la sangre. En efecto, c u a n d o en una
coronaria aguda y grave, que no llega a producir placa aterosclerosa v u l n e r a b l e , se adelgaza la
infarto del miocardio, y que aparece e n forma im- membrana fibrosa (figura 20) al grado de sufrir
predecíble durante el reposo. u n a e r o s i ó n , d e i n m e d i a t o es r e p a r a d a por
agregación plaquetaria y una pequeña cantidad de
El conocimiento de la fisiopatología que involucra
trombo rojo (coagulación). Así las microrupturas
la biología molecular que se sucede e n una placa
de la membrana fibrosa favorecen el aumento de
aterosclerosa intracoronaria es lo que nos ha permi-
v o l u m e n d e la p l a c a d e n t r o d e la a r t e r i a
tido entender el cuadro clínico, los cambios elec-
(remodelación negativa) y por lo tanto el aumento
trocardiográficos, los factores pronósticos, el trata-
progresivo y lento de la obstrucción coronaria
miento y la prevención de este cuadro. En efecto,
(figura 19 y 21). Sin embargo, si la ruptura d e la
c o m o se mencionó previamente (capítulo de ate-
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
827
GVRDIOLOGÍA
Capa fibrosa
Capa m adía
Placa Vulnerable
té
- Llntocito-T
CMuta npufflou FIGURA 19 Placa ateros-
(tactor tisular ) clerosa: Vulnerable: El
núcleo lipídico (COL) es
Stlula m jjcu:ar n í a «covada
muy grande y la placa
C é l u l a m u s c u i a r ll»a n o r m a l
fibrosa delgada, lo cual la
Placa Estable hace susceptible a rom-
perse y provocar un acci-
iiiLilinn 1995)9112844 dente coronario agudo
(angina inestable o infar-
to del miocardio). Nótese que la placa aterosclerosa crece hacia afuera y preserva la luz vascular:
Remodelación positiva (fenómeno de Glagov). Estable: Cuando una placa aterosclerosa tiene una
membrana fibrosa gruesa y un núcleo lipídico (COL) pequeño, la posibilidad de causar un síndrome
coronario agudo es remota. Sin embargo si la luz de la arteria se obstruye > del 70 % causa angina de
pecho. Remodelación negativa. (Tomado de Libby P. Circulation 1993:91:2844-2850, con autorizac ion).
Capa
l fibrosa
TNF - o t
M-CSF
Untocito - T MCP - 1
Núcleo Célula
Lipídico espumosa
FIGURA 20 Fisiopatología de la ruptura de la placa. En la membrana fibrosa las células musculares lisas
sintetizan colágena y elastina para engrosar la capa fibrosa. Los linfocitos T a través de la secreción de
interferona-d inhiben la síntesis de colágena y elastina por el músculo liso y estimulan a las células
espumosas (núcleo lipídico) para producir coíagenasas, proteasas, gelatinasas, los cuales digieren la
colágena de la membrana fibrosa, la adelgazan y eventualmente causan su ruptura. Esta acción
también esta favorecida por otras sustancias inflamatorias (factor de necrosis tisular a, factor
quimiotáctico de monocitos, etc.). (Tomado de L i b b y P. y col. Circulation 1 9 9 5 ; 9 1 : 2 8 4 4 - 2 8 5 0 ) con autorización.
ATEROSCLEROSIS IV
FIGURA 21 Fisiopatología de los síndromes
it isquémicos. Las placas aterosclerosas
pueden sufrir erosión o ruptura de su
Placa vulnerable membrana fibrosa. Cuando hay erosio-
nes, la agregación plaquetaria evita la
\ ruptura, pero favorece el aumento de
volumen de la misma placa o sea favore-
Ruptura o erosión ce la progresión obstructiva la arteria.
Factor
Sangre
titular
4 Cuando aparece una ruptura franca se
pone en contacto el FACTOR TISULAR
Trombo oclusivo
4"
C i s c a d a de la
coagulación Microrupturas
(Poderoso factor pro-coagulante) con la
sangre, hecho que desencadena en for-
4- 4. ma a b r u p t a la t r o m b o s i s c o r o n a r i a .
Cuando el trombo causa oclusión total
Trombo
Infarto del miocardio d a lugar a m u e r t e s ú b i t a o infarto
o muerte súbita S U . X K lusivo Progresión
transmural; si la oclusión no es comple-
ta (trombo suboclusivo) dará lugar a in-
Angina inestable farto subendocárdico o angina inestable
4 ™
CARDIOLOGÍA
del miocardio; aquellas otras cifras > 0.06 y < de 0.8 ronarios produce un cuadro de inestabilidad clínica
la proporción de complicaciones mayores es de 10.5 % que puede culminar c o n la muerte del paciente, el
y si la cifra es > 0.18 las probabilidades son de 16.1 % . infarto del miocardio o la desaparición espontánea
Finalmente, estos marcadores guían el tratamien- d e los síntomas, es por ello que cuando se hace el
to; así, la heparina de bajo peso molecular (detaparina diagnóstico de angina inestable S Í ' deben seguir los
o enoxaparina) y el uso d e los mas poderosos siguientes lincamientos terapéuticos.
antiplaquetarios como lo son los bloqueadores de los
1. Hospitalización del paciente en un área d e
receptores llb/llla (abciximab, tirofiban y lamifiban)
unidad coronaria.
reducen significativamente la mortalidad cuando se
utilizan en conjunto de tratamiento intervensionista 2. Reposo absoluto.
(angioplastia y stent), lo que no ocurre en pacientes
3. Vía venosa permeable.
con troponinas (-), sin embargo, las troponinas que
tienen una alta especificidad en la angina inestable, 4. Estabilización de la placa inestable
tienen una sensibilidad diagnóstica baja (22 a 50 % ) .
a) Efecto sobre el trombo blanco
- Aspirina 325 mgc/24 hrs. (reduce la mor-
PROTEINA C REACTIVA (PCR) talidad 5 0 % ) .
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mm
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A
FIGURA 22 Angina inestable A) En el momento del dolor coronario, aparece isquemia subepicárdica
anterior (V a V ). B) Al desaparecer espontáneamente el dolor, se normaliza la repolarización de
v a v
i ** V
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
831
CARDIOLOGÍA
1. Clopidogrel (75 mgc/12 hrs.) por vía oral (reduce el contrario, si se demuestra isquemia residual, será
31 % la posibilidad de un nuevo infarto o muerte). necesario practicar arteriografía coronaria para re-
conocer si las obstrucciones coronarias residuales
2. Inhibidores de la glicoproteína llb/llla
son tributarias de tratamiento médico, intervencio-
Se puede administrar cualquiera de los fármacos nista o quirúrgico.
siguientes:
8. Isquemia residual
a) Abciximab: inyección de un bolo de 0.25
mg/Kg. seguido de una infusión de 0.125 mg/ TRATAMIENTO
kq/min en el curso de 19 hrs. también se
Si la arteriografía coronaria demuestra lesión de tronco
puede utilizar:
o trivascular proximal permiten indicar tratamiento
b) Epifibrato: bolo inicial de 180 mg/kg. siguien- quirúrgico de urgencia. La mortalidad quirúrgica
do de una infusión continua de 2 mg'kg. Se- es del 1.7 %, la sobrevida a 5 años es de 92 % y de
guido de 0.15 mg/kg/min. en 24 hrs. o bien: 83 % a 10 años. Obstrucciones coronarias univascu-
lares o bivasculares tipo A apretadas requieren de
c) Tirofiban: bolo inicial de 10 mg/kg seguido angioplastia; las lesiones obstructivas significativas
de 0.15i g/kg/min. en 24 hrs. bivasculares o trivasculares tipo B se deben indivi-
dualizar e indicar la mejor terapéutica: angioplastia o
Después de la administración de este tratamien-
cirugía, y el mismo criterio debe usarse con las lesio-
to se lleva el paciente a arteriografía coronaria y se
nes univasculares tipo C. Las lesiones obstructivas tipo
lleva a cabo angioplastia transluminal percutánea
C , especialmente son bivasculares o trivasculares y
con aplicación de stent de la lesión responsable del
requieren tratamiento quirúrgico.
evento isquémico.
En el cuadro 10 se enumeran todas aquellas con- Finalmente, cuando en la arteriografía corona-
diciones clínicas en las que hay indicaciones para ria se encuentra una placa ateromatosa poco
tratamiento intervencionista temprano. obstructiva (< 60 %) y trombosis parcial ¡ntracoro-
naria, el tratamiento debe ser médico, como el ya
6. Tratamiento médico antiisquémico referido previamente e iniciar un estricto progra-
ma de prevención secundaria.
La administración de nitroglicerina y betabloquea-
En caso de que persista la inestabilidad clínica y
dores tienen un poderoso efecto antiisquémico, pero
el substrato anatómico de la angina inestable sea
cuando persiste la angina o aparece en forma recu-
una enfermedad del tronco de la coronaria izquier-
rrente se puede agregar al tratamiento diltiazem
da o una grave enfermedad trivascular, es convenien-
que por su efecto calcioantagonista coadyuva para
te instalar un balón de contrapulsación intraaórtico y
evitar la isquemia miocárdica. Se administra a razón
llevar al paciente a tratamiento quirúrgico.
de 30 mg. c/8 hrs. por vía oral. Debe de vigilarse
que la frecuencia cardiaca no disminuya de 60 por
min. y la TA de 100/60 mmHg. PROGRAMA DE PREVENCIÓN SECUNDARIA
Cuando el paciente ha sufrido cualquier tipo de
7. Estratificación de riesgo
evento isquémico coronario (angina de pecho o in-
Si el paciente fue llevado a tratamiento intervencio- farto del miocardio) y ha sobrevivido a el, debe de
nista temprano y se resolvió el problema responsable seguir todas aquellas medidas que reduzcan al máxi-
del cuadro agudo en forma satisfactoria, debe de en- mo la posibilidad de que aparezca un nuevo evento
trar en un programa de prevención secundaria (vide coronario: Prevención secundaria.
infra), pero si el paciente recibió tratamiento médico
1. Tratamiento del síndrome metabólico:
y se logró una estabilización satisfactoria del cuadro
a) Dieta de reducción, la meta es alcanzar un
dínico. Se debe buscar la presencia de isquemia
residual sea mediante prueba de esfuerzo electro- índice de masa corporal de 25 kg/m2 y un
cardiográfica. ecocardiografía dinámica con Dobuta- perímetro abdominal de < 90 cms.
mina-atropina o grammagrama perfusorio del mio- b) La presencia de hiperglucemia de ayuno (111
cardio. Se debe de recordar que los dos últimos a 140 mg/dL) por resistencia a la insulina debe
tienen mayor sensibilidad y especificidad para reco- de ser tratada con dieta de reducción y
nocer isquemia miocárdica. Si no se demuestra la metformind, para mantener una cifra de glu-
presencia de isquemia residual, el paciente debe de cosa en ayunas < de 110 mg/dL. El paciente
entrara un programa de prevención secundaria. Por diabético tiene las mismas metas terapéuticas.
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
C U A D R O No. 9
EFECTOS ANTIINFIAMATORIOS DE LAS ESTATINAS
C U A D R O 10
INDICACIONES PARA TRATAMIENTO INTERVENCIONISTA TEMPRANO DE ANGINA INESTABLE
1) Troponinas positivas
2) Isquemia de reposo o angina recurrente a pesar de tratamiento
antiisquémico
3) Aparición de depresión del segmento ST
4) Aparición de angina en presencia de insuficiencia cardiaca
5) Inestabilidad hemodinámica
6) Aparición de taquicardia ventricular sostenida
7) Antecedentes de angioplastia o revascularización quirúrgica
833
CARDIOLOGÍA
En los casos e n que se realizó la administración Aspectos patológicos del Infarto del miocardio
de estatinas para estudiar la posible regresión de la 1. Los infartos subendocárdicos (infarto "no Q " abar-
aterosclerosis, se encontró que, sorprendentemen- can el 25 al 35 % del espesor de la pared ventri-
le, a pesar de que la regresión de la placa alcanzó cular (tercio interno) (figura 24) mientras que
apenas el 1% e n las obstrucciones coronarias, la los infartos transmurales (infarto " Q " ) abarcan
r e d u a ion de infarto del miocardio, angina inesta- entre el 75 y e l 90 % del espesor de la pared
ble y de muerte súbita alcanzó hasta el 73 %. En ventricular (figura 2 5 ) .
efecto, la reducción de las lipoproteínas de baja
densidad (LDL) condiciona la disminución del co- 2. El infarto subendocárdico se debe a una oclu-
lesterol que penetra e n la placa y probablemente sión subtotal trombótica de la arteria coronaria,
permite la salida del mismo través de las H D L . culpable en el 75 % d e los casos, o bien, a oclu-
sión trombótica total c o n gran circulación cola-
La salida de lípidos permite un aumento relativo
teral, mientras que el infarto transmural obedece
del contenido de colágena en la placa, lo cual hace
a una trombosis coronaria total.
a la placa fibrosa, más resistente, y con ello menos
probable su ruptura. Asimismo, se han utilizado los 3. 87% de los pacientes c o n infarto del miocardio
inhibidores de la ECA y los betabloqueadores que agudo presentan trombosis coronaria completa-
también evitan la ruptura de la placa al reducir el mente oclusiva dentro d e las primeras cuatro
estrés de la pared arterial. Con estas medidas, tam- horas de iniciado el cuadro clínico; esta propor-
bién se evitan las "minirroturas" que aun cuando ción decrece al 65 % entre las 12 y 24 horas, lo
son asintomáticas contribuven a la progresión e n el cual sugiere que la trombosis coronaria sufre
crecimiento de la placa ateromatosa. Finalmente, la recanalización y reperfusión espontánea, o bien,
aspirina modifica las consecuencias de la ruptura de que una trombosis coronaria parcial se acompa-
la placa y reduce la aparición de infarto del miocar- ñó de espasmo coronario, que fue consecuencia
dio en un 87 % e n los pacientes con angina estable. de la fisura de la placa, agregación plaquetaria y
secreción de tromboxano A . Es posible que am-
;
«34
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
4^
CARDIOLOGÍA
AIN I
i * * áWF
. —'
k s .
FIGURA 25 Infarto del miocardio trans-
mural. El corte anatómico transversal del
c o r a z ó n a nivel de los m ú s c u l o s
papilares, muestra un importante adel-
gazamiento de la pared ventricular (ex-
pansión) en las regiones anterior del
septum interventricuiar (S), pared ante-
rior (ANT) y lateral (L) del ventrículo iz-
quierdo (VI) (señalados con flechas), con
hipertrofia de la pared inferior (INF). Se
puede observar el aumento de las di-
mensiones de la cavidad del ventrículo
izquierdo
Efecto del infarto del m i o c a r d i o sobre la fun- edema pulmonar, aun cuando la función sistólica
ción diastólica del ventrículo izquierdo sea normal.
La isquemia miocárdica aguda causa aumento de la
presión diastólica intraventricular, sin aumento del Efecto del Infarto m i o c á r d i c o s o b r e la f u n -
volumen diastólico (relajación e incompleta y/o dis- c i ó n sistólica
minución de la distensibilidad ventricular), lo cual La pérdida extensa de miofibrillas por necrosis se
da lugar a disfunción diastólica, hecho que puede traducirá e n disminución de su función sistólica. El
condicionar hipertensión venocapilar, disnea y hasta corazón será afectado e n su función sistólica en for-
836
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
m a directamente proporcional a la cantidad de El factor que provoca la mayor elevación del estrés
miocardio perdido por el infarto, o sea, estará e n parietal es la expansión del infarto ya que entre mayor
relación con la extensión del infarto. En otras pala- sea el área con expansión es que mayormente elevan
bras, los infartos que son pequeños en extensión la presión y radio diastólico; los infartos de localiza-
(menores del 15 % de la masa miocárdica), manten- ción anterior son más extensos que los inferiores, y
drán una función hemodinámica normal, mientras asimismo la pared anterior normalmente tiene un gra-
do de engrosamiento sistólico mayor que la pared
que aquellos otros más extensos ( 2 0 a 25 % de la
inferior, por loque la depresión contráctil de la prime-
masa miocárdica infartada o más) se manifestarán
ra aumentará mayormente el estrés parietal. Las con-
por insuficiencia cardiaca clínica.
secuencias hemodinámicas de este proceso que ha
sido denominado de "remcxielación" (figuras 26 y 27)
C a m b i o s adaptativos del c o r a z ó n d e s p u é s d e
se pueden observar en las primeras dos semanas de
un infarto del m i o c a r d i o ( r e m o d e l a c i ó n
evolución de un infarto miocárdico y ellas culminan
ventricular)(figura 27)
en la normalización de la función hemodinámica del
Durante la evolución d e un infarto del miocardio, el corazón; así, no es raro que la insuficiencia cardiaca
corazón sufre una serie de cambios adaptativos que leve sea seguida de la normalización de la función
son consecuencia de la extensión del área infartada, ventricular en los días subsecuentes; sin embargo, tam-
d e su localización anatómica y de los efectos que bién es muy frecuente observar cómo la dilatación del
sobre el estrés de la pared ventricular del miocardio corazón y la insuficiencia cardiaca tienen un carácter
necrosado, y del miocardio no isquémico tiene el progresivo meses después de haberse presentado el
infarto miocárdico. Cuando aparece un infarto del infarto. Este efecto negativo probablemente sea con-
miocardio transmural, aparece ruptura intramural de secuencia de la expansión de extensas áreas infartadas,
las miofibrillas, lo cual da lugar al adelgazamiento y ya que la hipertrofia, compensadora del miocardio no
dilatación del área infartada. A este proceso se le ha infartado, llegue a ser inadecuada para mantener la
denominado expansión del infarto (figuras 25 y 26). función hemodinámica del corazón. En conclusión,
Dependiendo d e su extensión, la expansión del todas aquellas maniobras que disminuyen el estrés
infarto condiciona una serie de cambios adaptativos parietal favorecen la función ventricular y evitan la
a las nuevas condiciones hemodinámicas; así, si el remodelación del corazón y viceversa.
infarto es extenso (con expansión), reduce su fun-
ción sistólica y aumenta sus volúmenes diastólico y
sistólico (insuficiencia cardiaca); se estimula el me- Efectos del infarto del m i o c a r d i o s o b r e la cir-
canismo adrenérgico y al sistema Renina-Angio- culación sistémica
tensina-Aldosterona que por un lado mantienen la
a) Reacción vagal (figura 28)
presión arterial y el gasto cardiaco, pero por otro,
La instalación aguda de un infarto del miocardio
aumentan la precarga (aumenta e l retorno veno-
puede producir una secreción exagerada de
so), y la poscarga (vasoconstricción), todo ello re-
acetilcolina por estimulación parasimpática. Esta
sulta de un aumento, tanto de la presión como del
reacción no es muy frecuente, pero se presenta,
radio diastólico de la cavidad, lo cual e n combina-
principalmente, complicando al infarto de cara
c i ó n aumenta el estrés diastólico d e la pared ven-
diafragmática y es resultado d e l reflejo d e
tricular, asi c o m o también e l estrés sistólico d e las
Bezold-Jarish, que ha sido demostrado e n ani-
áreas infartadas, ya que su engrosamiento sistólico
males de experimentación.
es precario o nulo.
b) Reacción adrenérgica (figura 29)
Debido a que el área infartada se encuentra
Con mayor frecuencia la instalación de un infar-
adelgazada, realmente tiene que soportar el estrés
to del miocardio va seguida de una reacción d e
que se ejerce sobre ella durante cada ciclo; así, si el
alarma, manifestada por secreción de catecola-
estrés es excesivo y el área infartada se encuentra
minas. Aparece con mayor frecuencia e n infarto
muy adelgazada, puede producirse la ruptura de la
de localización anterior.
misma. Sin embargo, generalmente el área infartada
forma una cicatriz fibrosa. Por otro lado, en las áreas
no infartadas el aumento del estrés parietal diastólico, CUADRO CLÍNICO
estimula la producción de hipertrofia, mecanismo
que intenta normalizar el estrés parietal diastólico 1. Historia previa d e dolor anginoso se e n c u e n -
así como también el estrés sistólico y la desarrollada tra e n e l 4 0 - 5 0 % d e los pacientes c o n infarto
durante la sístole. del m i o c a r d i o .
4 ™
CARDIOLOGÍA
Z El dolor es el síntoma más característico y apare- 7. El infarto puede ser diagnosticado por un elec-
c e e n la mayoría de los enfermos con infarto del trocardiograma de rutina.
miocardio.
8. En el anciano, el infarto del miocardio se pre-
3. El dolor precordial es opresivo, aparece durante senta d e una forma muy peculiar:
el reposo o el esfuerzo, irradia hacia ambos hom- a) Sólo la minoría presenta el cuadro clínico
bros, brazo izquierdo, ambos brazos, maxilar in- característico.
ferior, de gran intensidad de carácter creciente b) En la mayoría, se manifiesta en forma atípica,
y puede llegar a ser intolerable, con duración c o n síntomas tales c o m o :
mayor de 3 0 minutos, no c e d e con el reposo ni
con vasodilatadores coronarios, acompañado por • Disnea por insuficiencia ventricular iz-
manifestaciones de reacción adrenérgica (diafo- quierda.
resis fría y palidez) o vagal (náusea y vómito). • Confusión (por bajo gasto cardiaco).
• Palpitaciones (arritmiasl.
4. El 15 % de los enfermos que presentan infarto • Náusea y vómito incoercible.
del miocardio, no presenta dolor. El infarto " i n - • Debilidad, secundaria a bajo gasto cardía-
doloro" es más frecuente en los pacientes dia- co, condicionado por mala función ventri-
béticos, ancianos y mujeres. cular consecutiva al infarto del miocardio.
• Síncope.
5. El infarto del miocardio puede pasar inadverti-
• Cangrena periférica por embolia prove-
d o , sin el cuadro clínico característico, debido a
niente de un trombo mural de la zona
lo siguiente:
infartada.
a) Anestesia. • Embolia pulmonar.
b) Accidente vascular cerebral. • Muerte súbita.
c) C o m a diabético.
d) Enfermos psicóticos.
E X P L O R A C I Ó N FISICA
6. En ellos, el cuadro clínico puede iniciarse c o n :
a) I n s p e c c i ó n general:
a) Colapso vascular, náusea y vómito.
1. El paciente puede estar asintomático.
b) Edema agudo pulmonar.
c) Síncope por hipotensión postural. 2. La mayoría de las veces se encuentra c o n
d) Muerte súbita. intenso dolor precordial, angustia y signos de
INFARTO S U B E N D O C Á R D I C O
A D E L G A Z A M I E N T O DE LA PARED INFARTADA
D I L A T A C I Ó N DE LA CAVIDAD VENTRICULAR
1 DEL E N G R O S A M I E N T O S I S T Ó L I C O
í DEL V O L U M E N Y ESTRÉS S I S T Ó L I C O V E N T R I C U L A R
H I P E R T R O F I A DE LA PARED 1 DE LA F U N C I Ó N VENTRICULAR
N O INFARTADA
INSUFICIENCIA CARDIACA
HIPERTROFIA INADECUADA
CARDIOMEGALIA PROGRESIVA
B39
CARDIOLOGÍA
INFARTO DEL M I O C A R D I O
Estimulación vagal
(Reflejo de Bezold-)arish)
i De las resistencias
periféricas
INFARTO AL MIOCARDIO
Secreción de catecolaminas
Aumcnlo transito-
rio de la TA
FIGURA 2 9
840
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
4JÜ
CARDIOLOGÍA
•co
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• 0» .
- i— - 1
ir i,
2. La posibilidad de calcular la fracción de ex- El catéter de Swan-Ganz (figura 43) está especial-
pulsión mediante una técnica incruenta du- mente diseñado para obtener constantes hemodi-
rante la evolución de un infarto utilizando el námicas en pacientes que se encuentran en estado
método de Simpson (ver capítulo de ECOCAR- crítico por una afección cardíaca. Consiste en un
DIOGRAFIA BIDIMENSIONAL) y en forma catéter que tiene cuádruple luz:
seriada es de gran utilidad para conocer la
repercusión del accidente isquémico sobre la 1. La conexión mediante la cual se infla el globo.
función global del corazón y por lo tanto el 2. La luz que conecta el orificio distal al globo y
pronóstico que tendrá el enfermo después del mediante la cual se puede cuantificar la pre-
infarto del miocardio. sión capilar pulmonar (PCP).
FIGURA 35 Expansión del infarto del miocardio. La ecocardiografía mediante una aproximación apical
(eje largo) muestra a la izquierda el adelgazamiento de la región apical del ventrículo izquierdo
(expansión del infarto). Durante la contracción sistólica (a la derecha) se puede apreciar la acinesia de
la región apical y la discinesia del tercio distal del septum interventricuiar (señalado con una flecha)
4^
CARDIOLOGÍA
cardio se ha complicado con falla hemodinámica (insu- si dicha afección es de suficiente cuantía y exten-
ficiencia cardiaca o choque), o con alguna ruptura (insu- sión, deprime en forma proporcional al daño la fun-
ficiencia mitral, comunicación interventricuiar o de la ción hemodinámica del corazón.
pared libre). Con este catéter es posible cuantificar la La afección funcional dependerá de la cantidad
presión capilar pulmonar (PCP) en relación con la pre- de masa ventricular dañada, d e la proporción en
sión diastólica final del ventrículo izquierdo, así como que cada ventrículo sufra de la isquemia, de la res-
también el gasto cardiaco por termodilución y de esta puesta vascular periférica compensadora, del volu-
forma es posible construir curvas de función ventricular. men circulante y del daño cardíaco previo. Esto ex-
plica la n e c e s i d a d i m p e r i o s a d e c o n t a r c o n
parámetros hemodinámicos que sean capaces de
ALTERACIONES HEMODINÁMICAS EN EL INFAR- informar c o n precisión la calidad funcional de a m -
TO DEL MIOCARDIO bos ventrículos por separado, el tipo de respuesta
La isquemia tiene un efecto deletéreo sobre la fun- vascular imperante en cada momento y la cantidad
ción contráctil de la miofibrilla y, por consecuencia, de volumen circulante.
Diagnóstico
Extensión
FIGURA 36 Ecocardiograma de la unidad coronaria. Utilidad del ecocardiograma para la evaluación del
infarto del miocardio agudo en la cavidad coronaria
846
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
4«z
CARDIOLOGÍA
Cubo 1
C u a n d o el p a c i e n t e m a n t i e n e una presión
telediastólica ventricular izquierda (D2 o PCP) en
cifras normales y el índice cardiaco es normal (ma-
yor de 2.2 L/min/nr), lo mismo que la presión arterial
sistémica. se puede concluir que la función hemo-
dinámica del corazón es normal. Dentro de la uni-
dad coronaria, estos pacientes tienen una mortali-
dad muy baja, prácticamente nula, ellos no requieren
ninguna medida terapéutica con respecto a la he-
modinámica cardiovasc ular (clase funcional I), apa-
rece en el 8 5 % de los pacientes.
Cubo 2
Cuando el índice cardiaco se mantiene a expensas
de elevar la presión telediastólica ventricular (des-
viación de la curva de Stariing a la derecha), el pa-
ciente se encuentra en insuficiencia cardiaca, en ellos
el índice cardiaco conservado mantiene buena pre-
sión arterial.
Cabe mencionar que no es raro encontrar ele-
FIGURA 39 Comunicación ¡nterventricular. El eco- vación de la presión diastólica final del ventrículo
cardiograma 2-D (aproximación apical de 4 cá- sólo por alteración en la función diastólica (relaja-
maras) demuestra la comunicación interventri- ción lenta y/o incompleta o rigidez parietal), conse-
cuiar mediante la inyección de contraste. Las
cutiva a la isquemia aguda. Esto último no represen-
microbulas llenan las cavidades derechas (C) y
pasan hacia el ventrículo izquierdo (VI) a través ta insuficiencia cardiaca, aun cuando se puede
de la disrupción septal (señalado con una flecha). acompañar de hipertensión venocapilar.
(Cortesía del Dr. |. A Kisslo, Duke University Medical Center) Una forma practica de diferenciar a ambas con-
diciones es la presencia de cardiomegalia; la insufi-
ciencia cardiaca se acompaña necesariamente de
Este esquema hemodinámico permite reconocer c ardiomegalia (clínica, radiológica o ecocardiográfi-
ocho clases funcionales en el infarto del miocardio ca), mientras que encontrar signos de congestión
que requieren un manejo específico y diferente, y pulmonar con un corazón de tamaño normal, sugie-
cuyo pronóstico también varía de acuerdo con cada re fuertemente la posibilidad de disfunción diastóli-
clase funcional. ca como causa de la hipertensión venocapilar.
FIGURA 41 Pseudoaneurisma o "falso" aneurisma (FA). A: El eje corto paraesternal enseña la ruptura de
la pared Inferior (señalada con una flecha) del ventrículo izquierdo que comunica la cavidad ventricular
con el falso aneurisma (FA) mediante una "boca" estrecha. B: El corte apical de dos cámaras también
pone de manifiesto la comunicación del ventrículo izquierdo (VI) con el falso aneurisma (FA) a través
de la ruptura parietal (señalada con una flecha).
Cubo 3
Las características hemodinámicas d e estos pacien- ra, lo que se traduce en disminución de la frecuen-
tes traducen hipovolemia; en efecto, presentan un cia cardiaca, de la palidez y diaforesis y las resisten-
índice cardiaco disminuido (menor d e 2.2 L/min/ cias periféricas.
m-'), consecutivo a una disminución de la presión de
llenado ventricular (D2 o PCP), la presión e n cuña Cubo 4
es menor de 12 m m H g . La presión arterial en estos La elevación d e la D2VI o (PCP) del ventrículo iz-
c a s o s se m a n t i e n e a e x p e n s a s d e r e a c c i ó n quierdo con caída del índice cardiaco denotan un
adrenérgica (taquicardia y vasoconstricción perifé- grado más acentuado de insuficiencia cardiaca iz-
rica). La administración de líquidos aumenta la q u i e r d a . La e l e v a c i ó n d e l v o l u m e n y presión
precarga y consecutivamente el gasto cardiaco, y
telediastólica ya no son capaces de compensar la
esto cancela la reacción adrenérgica compensado-
caída del índice cardiaco (mayor desviación de la
CARDIOLOGÍA
Jo
(termistor). D: La punta del catéter se
ha "enclavado" en una rama pulmonar
pequeña para obtener la presión de la
aurícula izquierda a través del agujero
distal (presión enclavada).
850
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
Cubo 5 Cubo 6
La situación hemodinámica de estos pacientes es El paciente en esta clase funcional está gravemente
muv peculiar. Presentan hipotensión arterial, a pe- enfermo, pues constituye una etapa más avanzada
sar de tener una función ventricular normal (índi- de la clase II. En otras palabras, el índice cardiaco se
ce cardiaco y presión telediastólica normales). Esto mantiene en cifras normales, a expensas de utilizar
acontece especialmente en aquellos sujetos con la ley de Starling (elevación de la presión distólica);
infarto diafragmático, en quienes se presenta una sin embargo, el gasto cardiaco no es suficiente para
importante reacción vagal (bradicardia, broncoes- mantener la presión arterial debido a una inapropiada
pasmo, sialorrea.etc). Efectivamente, la vasodila- arteriodilatación periférica.
tación periférica excesiva, condiciona la caída de El manejo racional de estos casos, incluye el uso
la presión arterial, lo cual, a su vez, puede ser de inotrópicos (dobutamina, levosimendan, digital
potenciada si se acompaña de bradicardia. En estos y/o amrinona) asociado a dopamina a dosis mayores
casos, la administración de atropina corrige la res- de 10 mg/kg/min (efecto alfa) con el objeto de in-
puesta vascular exagerada y consecutivamente, la crementar levemente las resistencias periféricas y
presión arterial. mantener una presión arterial adecuada y, por lo
4¿s
CARDIOLOGÍA
C U A D R O 10
D O S I S DE I N F U S I Ó N DE ATAQUE Y D E M A N T E N I M I E N T O
PARA UNA PREPARACIÓN DE LEVOSIMENDAN DE 0.025 mg/ml
8S3
CARDIOLOGÍA
2. Más del 40 % de los pacientes fallecen en la 13. Flutter auricular: es una complicación rara
primera hora d e la instalación del infarto. del infarto del miocardio ya que la vemos en
1 al 3 % de los casos; sin embargo, debemos
3. Más del 6 0 % d e los pacientes fallecen antes
tener cuidado de su aparición, especialmente
de llegar al hospital.
si se conduce 1:1 ya que su diagnóstico es
4. La fibrilación ventricular primaria tiene su difícil y requiere tratamiento inmediato.
máxima posibilidad de complicar un infarto
14. Fibrilación auricular: la sufre el 20 % de los
del miocardio dentro de las primeras tres
pacientes c o n infarto agudo del miocardio.
horas de evolución y aparece e n el 5 al 10 %
La taquiarritmia y la falta de contribución
de los casos de infarto del miocardio.
auricular, disminuven el gasto cardiaco, por
5. Existe una relación causal entre el fenómeno lo que es una arritmia mal tolerada. Aparece
R/T y la fibrilación ventricular; sin embargo, e n forma paroxística la mayoría de las veces
no todas las extrasístoles ventriculares c o n pero puede sostenerse e n el tiempo; esta
CARDIOPATIA ISQUEMICA
4. El bloqueo A V que complica el infarto del 6. Puede producir imagen de lesión subendo-
cárdica anterior y lateral e n el E C G .
miocardio es transitorio (94 %) y sólo por ex-
cepción es permanente (3.3 % ) . f) Ruptura del m ú s c u l o papilar
5. La mortalidad es mayor en pacientes con blo- 1. Produce una insuficiencia mitral aguda y gra-
queo A V que complica el infarto anterior, que ve, se presenta en el 0.5 al 5 % de los infartos
en pacientes con infarto diafragmático ya que del miocardio, con evolución fatal.
la aparición del bloqueo AV en estas condi-
ciones implica un infarto muy extenso que 2. Aparece entre el 2 y 7° día de evolución del
a
9. Generalmente la ruptura del músculo papilar (64 % ) , y con menor frecuencia enfermedad
complica el infarto del miocardio pequeño, d e 3 vasos (29 %) y d e 2 vasos (7 % ) , pero
especialmente cuando el músculo dañado es siempre es consecutivo a un infarto del mio-
posteromedial y a pesar de la poca extensión cardio transmural.
del infarto, la gravedad y mortalidad del cua-
dro son muy graves por la repercusión he- 13. Se han informado casos con más de una
modinámica de la insuficiencia mitral. ruptura septal en el curso del infarto, ello
adquiere importancia para la completa re-
10. El ecocardiograma es el estudio más útil para paración quirúrgica.
establecer el diagnóstico (figura 37). ¿'•MlHli«.{¡~ '
14. Las condiciones clínicas que se han visto aso-
g) Ruptura del septum Interventricuiar ciadas a la ruptura septal son: hipertensión
arterial, tratamiento anticoagulante, e d a d
1. La perforación del septum interventricuiar
avanzada y terapia trombolítica.
complica entre el 1 al 3 % de los pacientes
con infarto del miocardio con mayor frecuen- 15. El ecocardiograma bidimensional acompa-
cia de localización anterior. ñado de técnica Doppler en todas sus varie-
dades y la técnica d e contraste (figura 38 y
2. Produce aproximadamente el 5 % de las muer-
39), es e l método de elección para estable-
tes por infarto del miocardio.
cer el diagnóstico de esla grave complica-
3. Ocurre principalmente e n el curso de la pri- ción del infarto del miocardio.
mera semana de instalado el infarto del mio-
16. Debe sospecharse con la aparición de un so-
cardio, el promedio es 16 hrs. desde el inicio
plo holosistólico rasposo e intenso, acompa-
del cuadro clínico.
ñado de frémito en el mesocardio (figuras 31
4. El 55 % de estos pacientes presenta choque y 32) el cual aparece en el 50% de los casos.
cardiogénico y representa el 3.9% de los pa- En algunos con insuficienc ia mitral muy grave
cientes con choque cardiogénico y cuando el soplo es poco intenso o no es audible.
este se presenta la mortalidad es de 8 7 % .
h ) Ruptura c a r d i a c a
5. El estado de choque cardiogénico está condi-
1. Es mortal en del miocardio.
cionado principalmente por la falla ventricu-
lar derecha. 2. Causa el 15 % de las muertes ocurridas en
pacientes c o n infarto del miocardio hospita-
6. El 25 % de las rupturas e n el infarte) del mio-
lizados.
cardio es del septum.
3. Ocurre e n el transcurso de la primera sema-
7. Es menos frecuente que la ruptura d e la pa-
na de evolución del infarto.
red libre.
4. Complica un infarto transmural.
8. El 24 % d e los pacientes fallece e n las prime-
ras 24 horas de aparecido el cuadro, el 54 % 5. Aparece más frecuentemente en infarto an-
ha fallecido en la primera semana, el 65 % e n terior que en el diafragmático (más del 50 %
las primeras 2 semanas, el 81 % e n las 8 pri- aparece en la pared anterior cerca del ápex).
meras semanas, el 92 % e n el primer año
posterior a la ruptura. La sobrevida mayor de 6. El cuadro clínico se caracteriza por la apari-
un año es sólo del 7 %. ción brusca d e dolor precordial, bradicardia
sinusal y signos de taponamiento cardiaco, lo
9. Aparece con mayor frecuencia pacientes del cua! culmina con disociación electromecáni-
sexo femenino mayores de 70 años. ca. C a b e mencionar que este cuadro puede
aparecer en un paciente previamente
10. La mayoría de las veces ocurre en el curso
asintomático o e n aquel otro durante la evo-
del primer infarto.
lución de un infarto del miocardio y se re-
11. Aparece cuando hay poca circulación cola- quiere gran sagacidad clínica para sospechar
teral. el diagnóstico precozmente.
8. Aparece más frecuentemente en mujeres que caracteriza por tener abombamiento diastólico, "cue-
e n hombres y ello complica con preferencia llo" con "boca" ancha y "abombamiento" discinético
a los ancianos. durante la sístole (figura 45-C); concepto anatómi-
co fundamental, q u e lo diferencia de la discinesia
9. La ruptura de la pared se lleva a cabo a través
(figura 45-D).
de la disminución d e l grosor parietal e n una
El aneurisma ventricular está formado por tejido
zona pequeña del endocardio q u e rápida-
necrótico (infartado) que alterna con tejido fibroso
mente se extiende hasta alcanzar el epicar-
(cicatriz):
dio, de una forma similar a como se produce
la disección aórtica se puede disecar la pared 1. La frecuencia de formación aneurismática,
y producir un hematoma disecante que pue- como consecuencia de infarto del miocardio
d e culminar c o n la ruptura de la pared. varía de 12 a 15 % (necropsia).
4«?
CARDIOLOGÍA
Pericardio
(O)
sístole diastóle sístole diástole
FIGURA 45 Esquema de las alteraciones geométricas del ventrículo izquierdo. A: Contracción ventricu-
lar n o r m a l , B: Discinesia, C: Aneurisma, D: Pseudoaneurisma o falso aneurisma. Explicaciones en el
texto, i Tomado con autori/ac ion de Cabin H.S. y Roberts W.C., Chest. 1080; 77:5).
859
CARDIOLOGÍA
C U A D R O 11
TRATAMIENTO DEL INFARTO DEL M I O C A R D I O
HOSPITALIZACION
REPOSO
VÍA VENOSA
ANALGESIA
OXÍGENO
M O N I T O R I Z A C I Ó N N O INVASIVA
M O N I T O R I Z A C I Ó N INVASIVA
(ALTERACIONES HEMODINÁMICAS)
ASPIRINA
CLOPIDOGREL
ESTATINAS
INHIBIDORES DE LA ECA
(EXCEPTO EN HIPOTENSIÓN ARTERIAL)
HEPARINA
BETABLOQUEADORES
(EXCEPTO EN INSUFICIENCIA CARDIACA)
Reperfusión temprana
V
Angioplastia rTPA o TNK
primaria
Angioplastia
facilitada
de los receptores llb/llla en el momento in- deberá efectuar trombolisis farmacológica (fi-
tervencionista (ver tratamiento de angina gura 47y 48) cuyos esquemas que han proba-
inestable). do mayor efectividad para la reperfusión son:
^4-
CARDIOPATIA ISQUEMICA
1. TNK 0.25 mg/kg. Bolo asociado a Abciximab • El infarto del miocadio tiene localización
un bolo de 0.125 mg /kg. seguido de una anterior.
infusión de 0.0625 mg/kg'min.
• Se demuestra la presencia de trombo en
2. Activador tisular del plasminogeno con un la arteria coronaria responsable del even-
bolo de 7.5 mg directo seguido de 42.5 mg. to isquémico.
en infusión por 1 hora asociado a tirofibán:
• Se demuestra trombo en la cavidad ven-
0.2 t/cq/kg/min. en 30 minutos seguido de
tricular izquierda.
una infusión continua de 0.05^cq/kg/min.
• Se demuestra la presencia de embolia
C o n cualquiera de estos dos esquemas,
pulmonar durante la evolución del infarto.
permitirán q u e el p a c i e n t e tenga una
reperfusión temprana y alcance a llegar a un Por el contrario, no es conveniente su
hospital preparando para realizar angioplastia uso en la evolución de un infarto del miocar-
primaria con stent. Se ha demostrado que dio cuando:
cuando se logra un flujo coronario normal (Tirni-
3) antes de la angioplastia sea en forma • El paciente es hipertenso o anciano.
espontánea o consecutiva a este tratamiento
combinado, se preserva la función ventricular, • Cuando se utiliza activador tisular del plas-
hay menos probabilidad de hipotensión arterial minogeno.
por insuficiencia cardiaca y se reduce la Se ha demostrado que en estos grupos
mortalidad. 5 % de pacientes sin tratamiento
de pacientes aparece con mayor frecuencia
llegan con flujo coronario TIMI-3, mientras que
la hemorragia cerebral. En todos los estu-
con el tratamiento combinado, se logra un flujo
dios multicéntricos se ha demostrado que el
TIMI-3 en alrededor del 70 % de los pacientes;
exceso de anticoagulación se asocia a even-
a s i m i s m o , se r e d u c e la m o r t a l i d a d , la
tos hemorrágicos, razón por la que lo ideal
posibilidad de reinfarto o revascularización
quirúrgica urgente (5.6 % vs 16 % ) . Sin embargo es mantener el tiempo parcial de trombo-
existe el riesgo de sangrado el cual aparece plastína al doble del basal y nunca exceder
la cifra de 100 segundos.
CARDIOLOGÍA
daño irreversible de las células se va produ- crosis, la repertusión tardía permite el salva-
ciendo primero en el endocardio, después mento de los miocitos que no han sufrido
en la parte media del miocardio v finalmente daño irreversible y en los que su vasculatura
en el subepicárdico. Este daño se caracteriza todavía se halla indemne y de esta forma es
por la lesión irreversible del sarcolema, la posible transformar un infarto transmural en
a c u m u l a c i ó n m a s i v a d e c a l c i o e n las uno subendocárdico.
mitocondrias y desintegración celular acele-
rada. Para que el daño se torne irreversible M e c a n i s m o de reducción de la mortalidad con
no sólo depende de que las células miocár- la reperfusión m i o c á r d i c a .
dicas se encuentren deprfvadas de oxígeno, Tanto los estudios clínicos como los experimentales
sino también del daño progresivo que sufre han demostrado que la reperfusión del miocardio
la vasculatura coronaria; la cual también se isquémico reduce primordialmente la mortalidad
daña irreversiblemente primero en el suben- del infarto agudo del miocardio mediante el salva-
docardio, después en la parte media del mio- mento del miocardio que está en riesgo de necrosis;
cardio y, finalmente, en el subepicardio. D e - sin embargo, hay otros factores que influyen defi-
bido a que el área isquémica irregularmente nitivamente en dicha disminución de la mortalidad,
va presentando la necrosis, o sea que e n f< >r- evitar la expansión del infarto, evitar la formación de
un aneurisma ventricular, disminución del estrés
ma indistinta se encuentran miocitos con ne-
4*
CARDIOLOGÍA
Mediante diversos métodos (estudios de Holter Este fenómeno consiste e n que después d e una
y electrofisiológicos) se ha demostrado la inestabili- a n g i o p l a s t i a p r i m a r i a al c o m p r i m i r la p l a c a
dad eléctrica que la isquemia residual produce en obstructiva dentro d e la arteria c u a n d o se infla el
estos enfermos, lo cual sugiere que es uno de los globo d e l catéter para la angioplastia, se despren-
factores principales que condicionan la muerte. den grumos d e agregados plaquetarios q u e van a
ocluir las arteriolas y capilares coronarios distales,
Complicaciones d e tal manera de q u e a pesar de que la circulación
La principal complicación potencial es el sangrado que coronaria de las arterias epicárdicas queda normal
puede ser desde sin ninguna importancia (hematomas la sangre no llega al miocardio por obstrucción d e
cutáneos), hasta muy graves (hemorragia cerebral, san- la microcirculación y ello condiciona la aparición
grado del tubo digestivo, hematuria, etc.). Las complica- de un infarto transmural. Por otro lado, los agrega-
ciones hemorrágic as se han encontrado en pn >|x>rc ion dos plaquetarios activan a los neutrófilos, al estrés
similar con ambos tromboliticos (estreptcJcinasa. activador oxidativo c o n la producción d e radicales d e oxíge-
tisular del plasminogeno), sin embargo, en lo referente no libres y por ello disfunción endotelial, lo cual
a la hemorragia cerebral se ha demostrado una fre- además causa daño microvascular y vasoconstric-
cuencia casi del doble con la administración de c i ó n . Esta complicación es terrible pues la conse-
activador tisular del plasminogeno e n relación a la c u e n c i a se traduce en la dilatación del c o r a z ó n ,
estreptokinasa. Los factores de riesgo para que se insuficiencia cardiaca y muerte o sea se comporta
presente esta complicación son: bajo peso corporal c o m o si no le hubiera recanalizado la arteria obs-
170 kg), antecedentes de hipertensión arterial, edad truida a u n q u e angiográficamente se visualice
mayor de 65 años y sexo femenino. permeable.Para prevenir esta complicación, la ad-
ministración de bloqueadores de los receptores
La reoclusión coronaria c o n la instalación de un llb'llla, antes y durante la angioplastia, es muy efec-
nuevo cuadro del infarto del miocardio. La asocia- tivo, por otro lado hay dispositivos antiembólicos,
ción d e aspirina, a bajas dosis, desde el inicio del
866
CARDIOPAITA ISQUÉMICA
que permiten evitar la migración de los grumos plazo se duplica. Por ello se ha reconocido como un
plaquetarios y recuperarlos. tactor predictivo de mal pronóstico la oclusión perma-
C u a n d o se ha presentado ya el problema se pue- nente de la arteria responsable del infarto.
den utilizar dialtazem 2.5 m g . en 1 minuto o
verapamil a razón de 0.5 a 1 mg. intracoronario e n 9. Inhibidores de la e n z i m a c o n v e r s o r a
2 minutos, otros fármacos usados para este fin son el Los estudios multicéntricos realizados en un gran
N I C O R A N D I L que es un nitrato que abre los cana- número de pacientes han demostrado q u e los
les de potasio dependientes de ATP \ la adenosina, inhibidores de la ECA tienen gran utilidad en el trata-
ambos efectivos para e: :e fin. miento de infarto en tres circunstancias especiales;
1. La insuficiencia cardiaca.
C O N T R A I N D I C A C I O N E S PARA T R A T A M I E N T O
2. Infarto del miocardio localización anterior.
TROMBOLÍTICO
3. Efecto antiinflamatorio e n presencia d e pla-
El uso d e medicamentos trombolíticos e n el curso
cas vulnerables.
d e un infarto miocárdico agudo está contraindica-
do en pacientes c o n trastornos d e la coagulación En tales casos se ha visto una reducción significa-
(hemofilia, púrpura trombocitopénica, etc.) e n pa- tiva d e la mortalidad, de la expansión del infarto, la
c i e n t e s c o n s a n g r a d o a c t i v o (tubo d i g e s t i v o , dilatación v e n t r i c u l a r y de las c o m p l i c a c i o n e s
relroperitoneal, etc.), hipertensión arterial descon- cardiacas cuando estos fármacos se administran den-
trolada (de 180/1 (X) m m H g o más), accidente vascular tro de las primeras 24 horas d e evolución. Se pre-
cerebral reciente, lesiones traumáticas agudas, re- fiere el uso d e captopril 6.25 a 12.5 mg. Por su
acción corta, se debe valorar al paciente previa-
animación cardiopulmonar prolongada, cirugía re-
mente a cada dosis y no administrarla en caso de
ciente (especialmente neurológica u ortopédica),
hipotensión ya que e n este caso, se ha visto que
pancreatitis aguda, a punción de un vaso compresi-
estos medicamentos están contraindicados porque
ble, aneurismas. En ellos la producción de un san-
definitivamente aumentan la mortalidad.
grado incontenible e n zonas vitales hace al procedi-
miento trombolítico prohibitivo. Es recomendable administrarlos, especialmente
cuando el infarto es extenso y/o de localización an-
terior, hay alto riesgo d e muerte para el paciente,
CONTRAINDICACIONES PARA ANGIOPLAS- hay historia d e infarto del miocardio previo, o evi-
TIA PRIMARIA dencia de insuficiencia cardiaca.
4
CARDIOLOGÍA
100 r
B
70 -
c 50 -
30 -
I I I L J I I I
Control 0 1 2 3 4 5 0 24 48 72 7 DIAS
HORAS
FIGURA 49 Miocardio "aturdido". El engrosamiento sistólico basal (control) se
considera el 100 %. Cuando se obstruye significativamente la arteria que irriga esa
región durante 5 horas se reduce importantemente el engrosamiento sistólico
(área con rayas). La reperfusión no es seguida de la normalización inmediata del
engrosamiento sistólico, ya que esta función regional se recupera basta el sépti-
mo dfa (disfunción miocárdica posisquémica). (Tomado con autorización de Matsuzaky y
col., Circulation, 1983; 68:170-182)
4J*?
CARDIOLOGÍA
3. La extensión a la masa ventricular derecha, tam- e) Pulso paradójico d e Kussmaul (Vide infra)
bién tiene importancia capital en el pronóstico,
Más todavía, si aparecen e n ausencia de hiper-
pues si es muy extensa, condiciona choque car-
diogénico aunque la masa del ventrículo izquier- tensión venocapilar pulmonar.
do destruida sea menor del 30 %. En el 2.8% de
los casos el choque cardiogénico se debe a in- DIAGNÓSTICO ELECTROCADIOGRÁFICO
farto, exclusivo del ventrículo derecho.
El diagnóstico electrocardiográfico se basa en la
4. En un porcentaje elevado de los pacientes c o n demostración de zona de necrosis (onda " q " anor-
infarto del ventrículo derecho se ha encontrado mal c o m p l e j o Q R o Q S ) , z o n a d e lesión (supra-
infarto de la aurícula derecha, hecho que es d e s n i v e l d e l segmento R-ST) y de i s q u e m i a in-
importante pues juega un papel no desprecia- versión simétrica de la o n d a T ) , e n d e r i v a c i o n e s
ble e n la génesis de arritmias auriculares, espe- q u e registran la a c t i v a c i ó n e l é c t r i c a d e l ventrí-
cialmente la fibrilación auricular. c u l o d e r e c h o . Para la b ú s q u e d a i n t e n c i o n a l d e
d i c h o diagnóstico, se c o l o c a n derivaciones pre-
5. Frecuentemente se acompaña d e bloqueo A V cordiales derechas ( V , R , V , R , V . R , V hasta V R ) .
4 9
4ÍZ?
CARDIOLOGÍA
4 875
CARDIOLOGÍA
876
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
mmHg para la presión sistólica) tienen mor- nistas (angioplastia, Stent), etc.), de acuerdo con la
talidad elevada (35.1 %) en relación con las indicación precisa en cada caso.
que tienen una presión sistólica normal (9.46 %).
b) I s q u e m i a silenciosa
La presencia de infradesnivel del segmento ST en
E V O L U C I Ó N TARDIA D E LOS ENFERMOS R E C U - ausencia de síntomas, que aparece en forma inter-
P E R A D O S D E U N I N F A R T O DEL M I O C A R D I O mitente y que es demostrado mediante el registro
electrocardiográfico ambulatorio continuo durante
Estudios recientes han permitido conocer algunos
24 horas (Holter), es un marcador de isquemia resi-
de los factores que influyen en la sobrevida a largo
dual. En efecto, la mortalidad a largo plazo de este
plazo del paciente que ha sido afectado por un in-
grupo de pacientes es de 30 % en relación con
farto del miocardio. A continuación se analizan bre-
aquellos otros que no la tienen (11 % ) .
vemente algunos de estos factores que nos permi-
ten reconocer aquellos pacientes que tienen mayor c) Paciente asintomático posinfarto del m i o -
riesgo de sufrir un nuevo infarto o morir relativa- cardio
mente a corto plazo. En todo paciente que ha sufrido un infarto del mio-
cardio y se encuentra asintomático es obligado in-
a) Angina de pecho residual
vestigar la presencia de isquemia residual. En la ac-
Se ha demostrado que los enfermos recuperados de
tualidad existen tres técnicas para lograr ese objetivo:
un infarto del miocardio en quienes el dolor anginoso
la prueba de esfuerzo electrocardiográfica, el eco-
persiste o reaparece, tienen definitivamente un
cardiograma dinámico con dobutamina atropina y el
mayor riesgo para presentar un nuevo evento
gammagrama perfusorio con esfuerzo o con inter-
coronario y también mayor mortalidad que aquéllos
venciones farmacológicas.
que no presentan este síntoma. En estos pacientes
es imperativo realizar una arteriografía coronaria ya d) Trastornos del ritmo
que la angina residual es un marcador para la apari- El estudio de electrocardiografía ambulatoria (Holter)
ción de nuevos eventos coronarios futuros a corto realizada a la tercera semana de evolución del in-
plazo (angina inestable, infarto del miocardio y/o farto del miocardio, ha logrado identificar aquellos
muerte súbita). La demostración angiográíica de obs- enfermos que tienen un mayor riesgo de muerte
trucciones significativas de una o más arterias por arritmias. En efecto, los pacientes quienes en
coronarias epicárdicas deberán ser aliviadas mediante esta época presentan extrasistolia ventricular con
cirugía de revascularización o métodos intervencio- c o m p l e j o s muy a b e r r a d o s , f e n ó m e n o s R/T,
877
CARDIOLOGÍA
Trombosis ^Q'""''0
Descendente Posterior
posterior
extrasistolia multiforme o carreras de taquicardia (amiodarona) está indicado c o n buenos resulta los
ventricular son candidatos a tener muerte súbita por para el enfermo.
esta razón en los siguientes 12 meses. En ocasiones,
estas arritmias están concurriendo c o n muy mala e) Papel de la función ventricular e n el pro-
función cardiaca consecutiva a un infarto extenso nóstico de los enfermos r e c u p e r a d o s e n
(v/de ¡níra), cuando es éste el caso, el pronóstico del un infarto del m i o c a r d i o
enfermo depende esencialmente del funcionamien- Los estudios prospectivos han demostrado que los
to del corazón; e n los casos e n los q u e el daño enfermos en quienes queda una mala función ven-
m i o c á r d i c o es irreversible la única manera d e tricular (frac ción de expulsión menor de 40 "'.ii < orno
mejorar e l pronóstico d e estos enfermos es la ins- secuela de un infarto del miocardio, son los
talación d e un desfíbrilador automático, el cual Cuando aparece necrosis miocárdica, el segmen-
debe de ir acompañado de tratamiento antiarritmi- to miocárdico deja de tener función, o sea, deja de
co a base de amiodarona. Por el contrario, cuando tener engrosamiento sistólico y éste p u e d e ser
las arritmias aparecen concomitantemente c on buena visualizado sea por ventriculografía angiográfica, ra-
función ventricular, el tratamiento antiarrítmico dio isotópica o mediante el ecocardiograma. En estu-
878
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
B
A p r o x i m a c i ó n Apical de
Aproximación Subcostal Cuatro Cámaras
Diástole Sístole
Infarto del ventrículo derecho Infarto del ventrículo derecho
FIGURA 5 5 Infarto del ventrículo derecho. Ecocardiograma. A) El corte subcostal enseña la enorme
área sistólica que deja el ventrículo derecho con falla ventricular consecutiva a un infarto. B) La
aproximación apical de cuatro cámaras demuestra dilatación del ventrículo derecho (mayor que el
izquierdo) con hipocinesia de la pared lateral y discinesia de la región apical. Nótese la normalidad de
la contracción segmentaria del ventrículo izquierdo.
879
fr-
CARDIOLOGÍA
ECG
30
r~
io
15 r -
r ~
20 v
Vo,
Ó~ mmhg
FIGURA 56 Infarto del ventrículo derecho. Curva de presión intraventri-
cular. El registro demuestra una franca elevación tanto de la presión
diastólica inicial (DI), como de la diastólica final (D2), que revelan la
falla ventricular derecha. La curva diastólica dibuja la imagen típica de
impedimento al llenado intraventricular (en "raíz cuadrada"). (Reprodu-
cido con autorización de Cárdenas M., Diaz del Río A.. González Hermosillo |. A. y col.,
Arch Inst Cardiol Méx, 1980; 50:295)
Finalmente, el uso de Tecnesio 99-Tetrafosmin miofibrilla tenga metabolismo, pero no alcanza para
(235 pacientes) demostró una sensibilidad de 95 % que la miofibrilla realice su función (contracción).
con especificidad de 77 %. La presencia de miocardio hibernante solo es
La decisión para escoger el mejor estudio de- posible cuando la región afecta ha sido deprivada
pende de los siguientes factores: de oxígeno en forma paulatina y muy lenta (de otra
forma, la deprivación rápida de oxígeno es causa
a) Disponibilidad (medicina nuclear)
de necrosis miocárdica), lo que permite a las fibras
b) Tanto el ecocardiograma dinámico como miocárdica adaptarse a la isquemia, primero con
el estudio nuclear son o p e r a d o r depen- d i s m i n u c i ó n de su función (hipocinesia) y
diente, de tal manera que en manos de un finalmente c o n a c i n e s i a . Este f e n ó m e n o es
experto se obtienen los resultados arriba realmente un mecanismo adaptativo para evitar la
mencionados, pero si quien realiza el es- necrosis. Ello implica una obstrucción coronaria
tudio no tiene el entrenamiento apropia- crítica que se ha instalado lentamente; sin embargo
d o , no se o b t i e n e n i n t e r p r e t a c i o n e s no existe daño en su sistema mitocondrial ni
confiables.
sarcomérico, por lo que la reperfusión, restaura de
inmediato la contracción miocárdica del área
c) Costo. El estudio nuclear es significativa-
mente más costoso que el ecocardiograma afectada (miocardio viable).
dinámico.
Miocardio aturdido (disfunción contráctil
Viabilidad m i o c á r d i c a posisquémica)
Se denomina miocardio viable aquella región Con el término de Aturdimiento se conoce el fenó-
miocárdica que carece de función contráctil meno q u e a c o n t e c e c o m o c o n s e c u e n c i a de
(acinesia) pero que sus miofibrillas tienen vida. reperfundir (angioplastia 0 trombolisis) a un área
que fue deprivada bruscamente de oxígeno (trom-
M i o c a r d i o hibernante bosis coronaria). Si la reperíusión se lleva a cabo
El concepto de hibernación implica que un área de antes de que aparezca necrosis miocárdica. Se ha
tejido miocárdico ha sido deprivada de oxígeno en encontrado que la reperfusión brusca daña el siste-
forma extrema, el grado de que la mínima cantidad ma mitrocondrial de la miofibrilla a través de radi-
de sangre que llega es solo suficiente para que la cales superóxido e interleucinas. Sin embargo, el
8 8 0
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
daño de las estructuras subcelulares es reversible, a) Con esta técnica, la perfusión del área afec-
de tal manera que después de la reperfusión, la tada por un infarto dejará un defecto de
función contráctil se restaura paulatinamente en el perfusión que aparece con el esfuerzo,
curso de días o meses. (Figura 48) a pesar de que la persiste c o n el reposo y con la re-inyec-
arteria responsable del episodio isquémico ya se ción a las 24 hrs.
encuentra permeable.
b) C u a n d o h a y u n á r e a d e m i o c a r d i o
hibernante habrá un defecto de perfusión
1) Ecocardiograma con dobutamina (figura 57)
con el esfuerzo y con el reposo (isquemia
a) Respuesta normal (figura 57-A). Arte- extrema) pero c o n la re-inyeccíón a las 24
rias c o r o n a r i a s p e r m e a b l e s , e s t u d i o hrs. aparecerá perfusión en el área afec-
ecocardiográfico basal enseña contracción tada, lo cual traduce integridad celular y
normal (engrosamiento sistólico) de las con ello viabilidad.
paredes ventriculares. La administración
de dosis bajas de dobutamina (10 mcq/kg/
3) Tomografía por emisión de positrones (PET)
min.) aumenta el engrosamiento sistólico
(figura 60).
y con dosis altas (40 mcq/kg/min.) aumen-
ta más dicho engrosamiento. a) Normal. La administración de a m m o n i o "
permite conocer la perfusión miocárdica
b) Infarto transmuraKfigura 57-B). Arteria 2que es normal, lo cual coincide c o n el
coronaria con oclusión total, el estudio metabolismo normal de las células mio-
basal muestra adelgazamiento c o n o sin cárdicas visualizada por la captación tisular
fibrosis del área infartada que muestra defluorodeoxiglucosa marcada,hay
ulfll
2) Cammagrama perfusorio con Talio 201 y re- Estos resultados se explican en base a que el
inyección a las 24 hrs. (Ver c a p í t u l o d e Talio 201 efectivamente tiene mayor sensibilidad
cardiología nuclear) para reconocer miocardio viable, sin embargo, no
4
CARDIOLOGÍA
todas las células c o n viabilidad, son capaces de te- q u é m i c a y e n quienes al demostrar miocardio
ner recuperación funcional (capacidad contráctil). hibernante en áreas extensas del corazón son gran-
En conclusión: El PET y el Talio 201 tienen ma- demente beneficiadas, tan sólo c o n la revasculari-
yor sensibilidad (88 %) para reconocer miocardio zación miocárdica quirúrgica. Finalmente, cuando
viable (mayor valor predictivo negativo) o sea cuan- el paciente tiene una fracción de expulsión menor
do en estos estudios no hay signos de viabilidad la del 4 0 % y ello es debido a necrosis extensa de las
posibilidad de daño miocárdico irreversible paredes ventriculares, el pronóstico del paciente a lar-
(necrosis) es muy alta. go plazo es malo, como se refiere en incisos previos.
Por el contrario, el ecocardiograma con dobuta- Asimismo, en pacientes que se encuentran e n
mina tiene mayor especificidad (84 %) para recono- insuficiencia cardiaca consecutiva a cualquier for-
cer miocardio q u e tendrá recuperación funcional ma d e cardiopatía isquémica y e n quiénes por te-
(mayor valor predictivo positivo) (figura 62). ner enfermedad coronaria susceptible para revas-
Recientemente ha aparecido una nueva técnica c u l a r i z a c i ó n se l l e v a n a c i r u g í a s i n h a b e r s e
de imagen derivada de Doppler tisular a la que se demostrado viabilidad miocárdica, no obtienen
ha denominado S T R A I N RATE (cambio de estira- mejoría clínica, no se cambia el pronóstico para la
miento o compresión miocárdica entre dos puntos vida y tienen mayor mortalidad tanto quirúrgica
adyacentes). Mediante esta técnica se calcula las como tardía (figura 64).
diferencias espaciales de velocidad entre dos regio-
nes o sea el grado d e estiramiento o comprensión g) Papel de la permeabilidad de la arteria res-
entre 2 puntos con el espacio, que se traduce e n un ponsable del Infarto en el pronóstico tar-
gradiente de velocidad. dío del paciente posinfarto del miocardio
Cuando se estudia mediante esta técnica un área
En los grandes estudios multicéntricos recientes se ha
infartada se podrá encontrar ausencia o muy breve
d e m o s t r a d o e n forma incontrovertible q u e la
gradiente de velocidad entre dos regiones adyacen-
recanalización de la arteria culpable del infarto es un
tes. Si se administra dobutamina a dosis bajas y se
factor pronóstico fundamental para la evolución tar-
demuestra q u e aumenta gradiente de velocidad
día posiníarto; e n efecto, la recanalización temprana
sistólica entre las mismas regiones se demostrará la
da lugar a recuperación del miocardio amenazado
presencia de miocardio viable (figura 63).
con necrosis, mejoría de función ventricular y mejo-
Esta técnica se encuentra en un intenso estudio ría del pronóstico; sin embargo, la reperfusión tardía
clínico y al parecer es una de las más importantes de la arteria responsable del infarto mejora también
avances para el reconocimiento de viabilidad mio- el pronóstico ya que están demostrados los efectos
cárdica. benéficos sobre la remodelación ventricular (dismi-
nución de los volúmenes ventriculares, mejoría de la
IMPORTANCIA CLÍNICA DE LA VIABILIDAD fracción de expulsión), prevención de la expansión
MIOCÁRDICA ventricular, mejoría de la función diastólica y reduc-
En un paciente c o n mala función ventricular y ción d e la mortalidad a largo plazo.
miocardio "aturdido" e n un área extensa, tiene un
Por lo anterior, se recomienda la recanalización
buen pronóstico a largo p l a z o , pues e l miocardio
de la arteria responsable del infarto para mejorar el
viable recupera su función e n forma paulatina y
pronóstico a largo plazo.
por ello tanto la función global del corazón; c o m o
el pronóstico d e l e n f e r m o , mejorarán considera-
blemente y e n consecuencia n o se requiere de h) Papel de la variabilidad de la frecuencia
ningún tratamiento, pues la evolución natural per- cardiaca en el pronóstico del paciente re-
mitirá la mejoría d e la función ventricular. cuperado de un Infarto del miocardio
C u a n d o la mala función ventricular se debe a Se ha demostrado que el infarto del miocardio trans-
una extensa zona de miocardio hibernante, la re- mural daña a la inervación tanto simpática como
vascularización coronaria mejora significativamente parasimpática del miocardio, o sea, produce una
el pronóstico d e estos enfermos, ya que la reperfu- -denervación miocárdica- en el sitio infartado, lo
sión miocárdica será seguida d e una mejoría signifi- cual es seguido de una sensibilidad exagerada para
cativa de la función ventricular. Este efecto benéfico las catecolaminas; hecho capaz de desencadenar
ha sido de tal impacto, que se ha reducido la reali- arritmias ventriculares durante el evento isquémico
zación d e trasplante cardiaco e n forma muy signifi- agudo. C o m o es bien sabido, la acción simpática e n
cativa en aquellos pacientes con miocardiopatía. is- presencia de isquemia aguda acorta bruscamente el
88,
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
DOBUTAMINA
Engrosamiento Dosis baja D o s i s alta
sistólico (10 pcq/Kg/min) (40 ucq/Kg/min)
Normal
A) Normal
Tt
Infarto
Acinesia o
B) Acinesia Acinesia
Discinesia
del miocardio
Reperfusión
C) Acinesia tt
(Aturdido)
Obstrucción
critica V / V /
D) Á //// Acinesia 4.4.
(Hibernante)
FIGURA 57 Ecocardiograma con dobutamina. Diagnóstico de viabilidad miocárdica. Respuesta: A)
NORMAL. Cuando la arteria coronaria esta permeable y el miocardio es normal. El engrosamiento
sistólico basal es normal, la administración de dosis baja de dobutamina (10 mcq/Kg/min) produce un
aumento de la contractilidad, la cual aumenta todavía más con dosis alta del fármaco (40mcq/Kg/min).
B) INFARTO DEL MIOCARDIO. La oclusión total de una arteria coronaria depriva completamente la
circulación del área tributaria hasta que sobreviene el infarto, por lo que la zona afectada muestra
acinesia. La administración tanto de dosis baja como alta no es seguido de contracción miocárdica. C)
MIOCARDIO ATURDIDO: La reperfusión aguda de una arteria coronaria previamente ocluida, recanaliza
la circulación coronaria y puede causar daño pos-reperfusión, que se manifiesta cuando al administrar
dosis bajas aparece contracción miocárdica, la cual aumenta significativamente con dosis alta. D)
MIOCARDIO HIBERNANTE: La oclusión crítica de una arteria coronaria, reduce en forma drástica el
riesgo coronario de esa región al grado de dejarla acinética (sin necrosis). La viabilidad se manifiesta
cuando aparece contracción con dosis bajas y la isquemia extrema cuando se aparece la acinesia con
dosis alta (respuesta bifásica)
periodo refractario y reduce importantemente el mismo, la dilatación del corazón estimula la secre-
umbral de fibrilación, mientras que la acción para- ción de catecolaminas, y a su vez, se reduce la acti-
simpática tiene un efecto exactamente opuesto. El vidad parasimpática.
infarto del miocardio altera esta interacción autonó- El infarto transmural extenso favorece la predo-
mica por varios mecanismos: la denervación en la minancia de la actividad simpática y la reducción
zona del infarto favorece la hipersensibilidad para de la actividad parasimpática, hecho que se tradu-
la acción adrenérgica que interviene e n la génesis ce e n que la frecuencia cardiaca se torna crítica;
de arritmias e n ese sitio, la destrucción de los qui- por lo tanto, aquellos pacientes en los que la varia-
miorreceptores y mecanorreceptores locales tam- bilidad de la frecuencia cardiaca disminuye o des-
bién altera la regulación autonómica al no participar aparece después de un infarto del miocardio son
en el mecanismo de autorregulación y ello pro- los que están e n riesgo d e muerte súbita por
mueve la activación adrenérgica persistente; asi- fibrilación ventricular.
CARDIOLOGÍA
FIGURA 58 Miocardio aturdido. A: El ecocardiograma basal (eje largo paraesternal) muestra una zona
de discinesia del tercio distal del septum interventricuiar y de ía región apical del ventrículo izquierdo
en un paciente revascularizado con hemoducto a la arteria descendente anterior. B: La estimulación
farmacológica (dobutamina) promueve el engrosamiento sistólico de las regiones que antes mostra-
ban discinesia ("miocardio aturdido")
FIGURA 59 Miocardio hibernante. A: El estudio basal enseña acinesia (ausencia de engrosamiento sistólico)
de la pared inferior del ventrículo izquierdo. B: La administración de dobutamina a dosis bajas normaliza la
contracción de la pared inferior en un paciente con obstrucción crítica de la arteria coronaria derecha
(miocardio hibernante). A dosis altas nuevamente aparece acinesia (respuesta bifásica)
884
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
NHa FDG
V
Infarto anteroseptal. OMiocardio hibernan-
te: Se demuestra la hipoperfusión grave de
la pared de la pared anterolateral (NH,) pero
dicha área muestra metabolismo (viable)
KsUulios:
I
icia clanein
r>l>C¿-Mflt-
lO ECO Dom.TAMINA
BONOW R O
CIRCULATION 1996; 94:2674-2680
885
CARDIOLOGÍA
potenciales tardíos que aparecen como potenciales lo referente al peso corporal, la capacidad físi-
en los 40 mseg terminales del complejo QRS con ca, estado psicológico la reducción de ácidos
un voltaje mayor de 40 uV, el significado que tienen grasos, libres, trigliceridos, glucemia, grasa cor-
dichos potenciales es que representan la activación poral y calidad de vida.
eléctrica de c o n d u c c i ó n lenta del miocardio
2. Obesidad.
isquémico; por lo tanto, su presencia indica isquemia
Si el paciente es obeso, es necesario intentar
residual y la posibilidad de aparición de arritmias
llevarlo a un índice de masa corporal (IMC) <
malignas en la evolución tardía del paciente
de 30 kg/m- (peso ideal: 25 kg/m-') y reducir el
posinfarto. Se ha demostrado que la reperfusión
diámetro de la cintura a < de 100 cms. en el
(trombolisis o angioplastia) del tejido isquémico pre-
hombre y < de 85 cms. en la mujer. Ello sólo es
serva la regulación autonómica y hace desaparecer
posible mediante una dieta balanceada de re-
la presencia de potenciales tardíos.
ducción asociada al programa de ejercicio diná-
Cuando un paciente que ha sufrido un infarto
mico (idealmente el programa de rehabilitación).
del miocardio queda sin isquemia residual, sin
cardiomegalia, con función ventricular y variabili- 3. Tabaquismo.
dad cardiaca normales y sin potenciales tardíos ten- El paciente tiene que abandonar necesariamen-
drá buena evolución tardía. te el tabaquismo como requisito indispensable
para evitar un nuevo evento coronario. 40% de
PREVENCIÓN SECUNDARIA los fumadores que mueren es por un infarto
Todo paciente que ha sobrevivido un infarto del del miocardio.
miocardio debe necesariamente entrar a un pro-
4. Hipertensión arterial.
grama de prevención secundaria cuyo objetivo es
Se requiere un control adecuado de las cifras de
evitar que vuelva a tener un evento coronario.
presión arterial: < 140/90 mmHgO < de 130/
Las medidas que han logrado acercarse al obje-
80 mmHg si el paciente es diabético.
tivo primario son:
5. Diabetes mellitus.
1. Rehabilitación cardiovascular. Es indispensable un control estricto de las cifras
Idealmente el paciente debe de entrar a un de glucemia; idealmente la glucemia de ayuno
programa de acondicionamiento físico progra- debe de estar < 110 mg. % y la post-prandial de
mado por un experto, basado fundamentalmen- 2 hrs. < de 140 mg. % la hiperglucemia aumen-
te e n e j e r c i c i o d i n á m i c o , p r o g r a m a d o , ta la mortalidad cardiovascular en un 6 9 % .
cuantificable, reproducible, creciente y super-
visado, lo cual redunda en efecto benéfico en 6. Lípidos.
Viabilidad. Diagnostico
PET y perfusión Mayor sensibilidad (88%) Mayor valor
con talio 201 (Viabilidad) predictivo
negativo
reinyección tienen una mayor sensibilidad para reconocer viabilidad miocárdica (hibernación o aturdimien-
to), y el Eco o la RMN con Dobutamina tienen una mayor especificidad o sea, no todos los casos que
reconoce el PET o el Talio-" recuperan función a pesar de que las células están vivas, o sea cuando estos son
01
negativos, es seguro que no hay viabilidad (mayor valor predictivo negativo). El Eco-Dobuta reconoce solo
a las células que conservan su función contráctil (mayor especificidad) y no aquellos que estando vivos
tienen perdida la función (mayor valor predictivo positivo). J Am Coll Cardiol, 2002; 39: 428-435.
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
STRAIN RATE
2.0 : :
•: •
a
1.0 : A
1/S
0.0
-1.0
-2.0 —
JACC 2002;39:443-449
FIGURA 63 Con esta técnica y utilizando Dobutamina es posible discriminar si existe
recuperación funcional (línea punteada) con la administración de Dobutamina, cuando
en el estado basal el área se encuentra acinética por hipofunción muy importante (línea
continua) la administración de dobutamina (línea punteada) demuestra el gradiente de
velocidad (contracción) de la región previamente acinética (línea continua)
4«E
CARDIOLOGIA
- 79.6% 23.0%
X =147
2
X =1-43
2
20 p<0.0001 p=0.23
16.0
I 10 H
FIGURA 64 Im-
portancia del
diagnóstico del
miocardio viable
Revasc. Medica Revasc. Medica en pacientes con
Viable insuficiencia
No-Viable cardiaca por car-
JACC.2002;39:1151-1158 diopatía isqué-
mica. El recono-
cimiento de viabilidad miocárdica cambia significativamente el pronóstico de los pacientes con
insuficiencia cardíaca con revascularización miocárdica (mortalidad anual de 3.2%) en relación a los
que únicamente se les da tratamiento médico (mortalidad anual 16%). Por el contrario, la revascula-
rización quirúrgica no influye en la mortalidad anual cuando la insuficiencia cardiaca se debe a necrosis
miocárdica extensa
cerebrales o periféricos) e n personas sanas de cora- En el miocardio normal, es muy difícil provocar
z ó n predispuestos a padecerlos.En efecto, aquellos fibrilación mientras que el miocardio isquémico es
sujetos c o n antecedentes familiares de eventos 10 veces más susceptible para fibrilar. El substrato
coronarios, aquellos otros con síndrome metabólico anatómico de la muerte súbita es la obstrucción co-
o con diabetes mellitus, también los que padecen ronaria, ya sea parcial (angor pectoris, angina inesta-
hipertensión arterial o hipcrlipidemias tienen que ble o muerte súbita), o total (trombosis coronaria).
entrar a un programa de prevención primaria. La isquemia miocárdica aguda e intensa acorta
drásticamente la duración del potencial de acción
1. Colesterol.
de las células afectadas, que al estar en relación
La cifra de colesterol recomendada es < 2 0 0
con células contiguas no afectadas por la isquemia
mg/dL.
(cuyo potencial de acción tiene duración normal),
2. LdL colesterol. se provoca una dispersión en la duración de los
La cifra recomendada es < de 130 mg/dL; e n periodos refractarios con lo cual se favorece gran-
pacientes diabéticos o con síndrome metabólico demente la vulnerabilidad eléctrica (ver capítulo
< 1 0 0 mg/dL o < de 75 mg/dL e n pacientes de de A R R I T M I A S ) , y a que se favorecen el mecanis-
alto riesgo. mo de reentrada intercelular y la fibrilación ven-
tricular. En estas condiciones todos aquellos facto-
Si con medidas dietéticas no se obtienen las
res que c o n d i c i o n e n isquemia miocárdica aguda
cifras deseables, esta indicando utilizar estatinas.
propiciarán asimismo, la muerte súbita; así, el es-
3. H d L colesterol. pasmo coronario puede favorecer este fenómeno
La cifra recomendada es > de 4 0 mg/dL si no se y la posibilidad de muerte súbita, especialmente
logra con dieta baja en carbohidratos y ejerci- en aquellos pacientes q u e tienen tejido miocárdi-
cio, esta indicado usar a c , nicotinico (4 a 6 gm. co isquémico por obstrucción ateromatosa de las
C/24 hrs.). arterias coronarias, este fenómeno puede ser evi-
tado con el uso de calcioantagonistas.
4. Trigliceridos.
La cifra recomendada es < de 1 5 0 mg/dL si no El estrés emocional y el tabaquismo, por un
se obtiene c o n dieta baja en carbohidratos y lado producen secreción adrenérgica y extrasistolia
ejercicio dinámico, esta indicada la administra- ventricular, y por otro, favorecen la agregación pla-
ción de fibratos (Bezafibrato 4 0 0 mg c/24 hrs. o quetaria, la cual puede obstruir mecánicamente la
genfibrosil (600 a 1200 mg. en 24 hrs). microcirculación y también al provocar liberación
de tromboxano A , que condiciona una vasocons-
tricción intensa; todo ello produce isquemia mio-
M U E R T E SÚBITA cárdica aguda e n áreas diversas d e l miocardio, la
cual nuevamente dispersa los refractarios y favore-
La muerte repentina e inesperada es por un lado ce la fibrilación ventricular por hacer al miocardio
una forma desafortunada de presentación de la car- peligrosamente vulnerable. Estos fenómenos usual-
diopatía isquémica en pacientes asintomáticos; por mente se evitan c o n medicamentos betabloquea-
otro, una complicación final que se presenta e n un dores, cuya administración crónica cancela los efec-
paciente recuperado de un infarto del miocardio tos del estrés sobre el corazón y medicamentos
previo, y finalmente, puede aparecer e n pacientes antiplaquetarios que evitan las consecuencias d e la
con angina de pecho estable o inestable.Como ya se agregación plaquetaria.
mencionó, en la fase aguda del infarto del miocar- Desde luego, es conveniente evitar el estrés
dio hay un porcentaje muy elevado de pacientes intenso en los pacientes afectados por cardiopatía
que fallecen súbitamente e n la primera hora de isquémica crónica, pues se ha demostrado que en
ocurrido el evento, o antes de llegar al hospital. Por estos pacientes los grandes choques emocionales
otro lado, también se mencionó que los pacientes (asalto con intento homicida, grandes pérdidas fi-
que quedan con mala función ventricular (fracción nancieras, fuertes disgustos familiares, etc.) se com-
se expulsión menor del 4 0 % ) , tienen mayor proba- plican con muerte súbita e n un número no despre-
bilidad de presentar muerte súbita, especialmente ciable de casos.
si además presentan arritmias ventriculares com-
plejas (extrasístoles ventriculares muy aberradas, muy Finalmente, cuando un paciente recuperado de
frecuentes, pareadas o e n salvas, multifocales o con un infarto del miocardio ha quedado con un exten-
fenómeno R/T). so daño miocárdico irreversible (fracción de ex-
pulsión menor d e l 4 0 %) también tiene mayor
4»?
CARDIOLOGÍA
propensión a la muerte súbita, ya que ha q u e d a - Se han reconocido las importantes diferencias que
d o demostrado en forma fehaciente q u e e l c o r a - este cuadro tiene con la angina clásica descrita por
z ó n t i e n e una vulnerabilidad eléctrica mucho Heberden. Estas diferencias son, fundamentalmente:
m a y o r q u e a q u e l l o s pacientes c o n b u e n a f u n -
a) La aparición de la sintomatología en el repo-
c i ó n ventricular. En e f e c t o , e n e l 9 0 % d e los
p a c i e n t e s c o n mala f u n c i ó n ventricular se d e - so (especialmente durante el sueño), al con-
muestra la presencia de arritmias v e n t r i c u l a r e s trario de la típica angina de esfuerzo.
complejas; asimismo, e n estos pacientes, se pue- b) La aparición de lesión subepicárdica transito-
d e n d e s e n c a d e n a r la t a q u i c a r d i a y fibrilación ria (figura 65) e n contraposición c o n la angi-
ventricular con dosis muy pequeñas d e catecola- na clásica, que se caracteriza por lesión su-
minas ( m u c h o m e n o r e s q u e en sujetos sanos o
bendocárdica.
c o n b u e n a f u n c i ó n v e n t r i c u l a r ) , la c u a l los h a c e
m u y susceptibles para la m u e r t e súbita. Por lo c) La prueba de esfuerzo programada, frecuen-
t a n t o , e n p a c i e n t e s r e c u p e r a d o s d e un infarto temente negativa e n la angina de Prinzmetal
del miocardio que quedan con insuficiencia y habitualmente positiva en el angor pectoris.
c a r d i a c a y arritmias p o t e n c i a l m e n t e malignas,
d) La evolución relativamente desfavorable de la
se d e b e d e v a l o r a r la p o s i b i l i d a d d e i m p l a n t a r
un d e s f í b r i l a d o r a u t o m á t i c o , e n u n i n t e n t o d e angina Prinzmetal, con la aparición de trastornos
p r e v e n i r la m u e r t e s ú b i t a . del ritmo y conducción con cierta frecuencia
letales, contraria a la angina de esfuerzo, cuya
evolución puede ser estable por largo tiempo.
FIGURA 65 Angina de Prinzmetal. Registro electrocardiográfico continuo ID2). Durante la aparición del
dolor se observa una elevación del segmento RS-T seguido de extrasístoles ventriculares (É). La lesión
subepicárdica va desapareciendo paulatinamente basta normalizarse completamente el trazo en el
último complejo QRS al desaparecer el dolor
4i2!
CARDIOLOGÍA
FIGURA 66 Espasmo coronario. Coronariografía en posición OIA A: Se puede ver el intenso espasmo
coronario segmentario de la arteria coronaria descendente anterior (da). B: Con la administración de
nitroglicerina desaparece el espasmo coronario segmentario. (Cortesía del Dr. Marco A Martínez Ríos)
los de elección para el tratamiento de la angina de las porciones básales (figura 67 A). Lo sorprendente
Prinzmetal. En efecto, estos medicamentos calcio- es la normalidad de la circulación coronaria encon-
antagonistas evitan la reactividad vasoconstrictora trada en la arteriografía selectiva, de las enzimas
anormal y con ello previenen la contracción cardiacas con reversibilidad completa hacia lo nor-
espástica de la capa media arterial. La administra- mal de los cambios angiográficos (figura 67 B) sin la
ción de 30 a 60 mgde nifedipina cada 24 horas, o aparición de necrosis en el electrocardiograma. Esta
de 60 a 90 mg de nicardipina cada 24 horas es capaz afección no deja secuelas en el corazón.
de prevenir los cuadros de espasmo coronario; vale Afecta predominantemente al sexo femenino,
la pena enfatizar que durante el cuadro agudo con- es desencadenado por el estrés emocional, la ma-
viene administrar nitroglicerina o isosorbide por vía
yoría de los pacientes informados en la literatura
sublingual debido a que su rapidez de acción yugula
tienen origen japonés aún cuando, hay 4 casos in-
los cuadros en forma casi inmediata. También se
formados que no tienen esta ascendencia.
han logrado yugular los cuadros agudos de angina
vasoespástica con nifedipina administrada por vía
Cuadro clínico:
sublingual. Las crisis pueden ser también preveni-
das con la administración de otros antagonistas del Dolor precordial de tipo coronario de instalación
calcio (verapamil o diltiazem). aguda puede acompañarse de disnea y en raros ca-
sos de sincope o estado de choque cardiogénico.
Electrocardiograma:
OTRAS FORMAS DE ENFERMEDAD
Supradesnivel del segmento ST mayor de V a V
CORONARIA 4 b
ir
CARDIOPATÍA ISQUÉMICA
893
4
CARDIOLOGÍA
894
CARDIOPATIA ISQUEMICA
evolución aparecen surcos transversales en las uñas Angitis microvascular, endarteritis y perivas-
de las manos (74 y 94 %) culitis coronaria epicárdicos, miocarditis, tras-
tornos d e la c o n d u c c i ó n , muerte por insufi-
5. Exantema polimorfo. ciencia cardiaca y arritmias activas.
Q u e aparece al 5° día de evolución en el 92 % de los
casos, localizado en el tronco y extremidades, que 2. 10 a 27 d í a s .
adquiere una apariencia de urticaria o escarlatina con F o r m a c i ó n d e a n e u r i s m a s de las a r t e r i a s
lesiones maculopapulosas de 5 a 30 mm de diámetros, coronarias y trombosis pancarditis, muerte por
desaparecen pocos días después de su aparición. insuficiencia cardíaca, arritmias activas, infar-
to d e l m i o c a r d i o y ruptura de a n e u r i s m a s
6. Linfadenopatía cervical. coronarios.
Q u e aparece simultáneamente con el inicio de la
fiebre en el 75 % de los casos, desaparece al des- 3. 28 a 31 d í a s .
aparecer la fiebre. Granulación de las arterias coronarias c o n im-
En conjunto con las manifestaciones generales, portante crecimiento de la íntima, muerte por
aparecen otros síntomas y signos de consecuencia infarto del miocardio.
d e la inflamación de diversos órganos: meningitis
aséptica, uretritis, cardiomegalia insuficiencia car- 4. > de 40 d í a s .
díaca, pericarditis, insuficiencia hepática y manifes- Ruptura de la íntima, estenosis coronaria, fibrosis
taciones de insuficiencia coronaria (angina de pe- miocárdica y endocárdica, muerte por infarto
cho o infarto del miocardio). del miocardio.
895
CARDIOLOGÍA
oclusión parcial o completa de otros segmentos dosis. Cuando la fiebre se ha controlado se debe
(figura 69). de reducir la dosis a 3 a 5 kg/kg/día sin pasar de
80 mg en dosis única.
TRATAMIENTO
3. Corticosteroides
Fase aguda (primeros 10 días) Se encuentran contraindicados ya que se asocia
a una mayor frecuencia de aneurisma coronario.
1. Inmunoglobulina intravenosa
Con el tratamiento adecuado y precoz se redu-
Dosis fraccionada:
cen las posibilidades de insuficiencia cardíaca y la
a) 400 mg/Kg en infusión intravenosa en 2 formación de aneurismas coronarios; asimismo con
hrs. c/24 hrs. por 4 días este tratamiento se ha visto regresión de aneurismas
coronarios ya formados.
Dosis única:
Los aneurismas coronarios gigantes tienen ma-
b) 2 mg/kg administrada en infusión durante yor riesgo de oclusión coronaria.
10 hrs. se pude utilizar cualquiera de los Cuando ha pasado la fase aguda, y han quedado
dos esquemas mencionados. obstrucciones coronarias graves, que alternan con
aneurismas coronarios pueden recibir tratamiento
2. Aspirina quirúrgico (revascularización coronaria) con éxito
Se administra como tratamiento antiinflamatorio que se manifiesta por baja mortalidad operatoria
a razón de 80 a 100 mg/kg/día dividida en cuatro (1.1 %) tardía (4.7%)
896
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ii'i'i
Capítulo 25 Miocarditis
"Inútil la sonrisa del escéptico que crea que
con su técnicay su ciencia no necesita más
para dominar la cardiología. Ese hombre
será mutilado si no es también rico en cultura
y hondamente impregnado de humanismo"
M
iocarditis es la inflamación focal o difusa neral) sugiere que el daño miocárdico se produce,
del tejido miocárdico con signos de fundamentalmente por un mecanismo inmunoló-
necrosis tisular y/o degeneración de las gico. La miocarditis viral es particularmente peli-
células miocárdicas adyacentes, que no es conse- grosa e n lactantes y mujeres embarazadas.
cutiva a isquemia miocárdica y que puede originar- Se ha encontrado que los virus Coxsackie tipo B
se por infecciones bacterianas o virales, infestaciones son los que con mayor frecuencia causan miocardi-
parasitarias, reacciones alérgicas o autoinmunes o tis de origen viral. La mayor parte de las miocarditis
causadas por efectos tóxicos de agentes externos virales son autolimitadas y subclínicas; sin embargo,
como substancias químicas o radiaciones que pue- e n algunos casos puede aparecer cardiomegalia, in-
den afectar a la miofibrilla en sí, al intersticio y/o a suficiencia cardiaca (incluso edema pulmonar) y
sus componentes vasculares. frecuentemente estos síntomas se acompañan de
La agresión miocárdica por infección puede lle- pericarditis (dolor y frote pericárdicos). Desde el
varse a cabo mediante invasión del tejido, produc- punto de vista anatomopatológico se han encon-
ción d e toxinas o daño inmunológico. trado infiltrados inflamatorios mononucleares con
necrosis en forma difusa, o bien, necrosis focal muy
La miocarditis viral es la forma más c o m ú n ; aun
similar a la producida por el infarto del miocardio,
cuando e n Centroamérica y Sudamérica la enfer-
pero con las arterias coronarias normales.
medad de Chagas es la que con mayor frecuencia
causa miocarditis. H a sido informado que en más Otros virus también pueden causar miocardi-
del 10 % de las autopsias e n hospitales generales tis, c o m o lo son los Echovirus, los virus Coxsackie
hay evidencia de miocarditis, y e n el 5 al 15 % de tipo A , Adenovirus, Citomegalmirus. virus de S I D A ;
los pacientes que padecen enfermedades infeccio- i n f l u e n z a , mononucleosis infecciosa, hepatitis,
sas comunes. poliomielitis, etc. D e estas entidades, la miocar-
ditis es encontrada en un alto porcentaje d e los
casos fatales; sin embargo, es un proceso auto li-
ETIOLOGIA mitado y casi siempre asintomático en los casos
no fatales.
MIOCARDITIS VIRAL
Hay evidencia que revela que aproximadamen-
El hecho d e que la miocarditis viral aparezca se- te el 5 % d e la población infectada por virus tiene
manas d e s p u é s d e una i n f e c c i ó n v i r a l (rinitis, algún d a ñ o e n e l c o r a z ó n . En los lactantes y
odinofagia, tos, mialgias, artralgias y malestar ge- neonatos el 5 0 % de los infectados por virus desa-
CARDIOLOGÍA
trolla miocarditis, enfermedad q u e en estos pacien- conocer tres fases: 1 : infección viral; 2: autoinmu-
tes se observa frecuentemente un curso fulminan- nidad y 3: miocardiopatía dilatada.
te; por el contrario, en los adolescentes y adultos
la evolución es más lenta y raramente fatal. Fase 1 : Infección v i r a l
La preponderancia de miocarditis viral por virus
Coxsackie y adenovirus se debe a q u e se ha en-
E T I O P A T O C E N I A (figuras 1 v 2 ) contrado un receptor específico en mamíferos para
a m b o s v i r u s ; e s t e r e c e p t o r f a v o r e c e la
C u a n d o hay una miocarditis viral aguda aparece internalización del virus en la célula miocárdica.
infección de las células miocárdicas con replicación Cuando los virus infectan el miocardio desencaden
viral y lisis celular. Los virus son inactivados y re- una respuesta inmune q u e es mucho mas intensa
movidos por macrófagos y anticuerpos neutralizan- que la propia infección primaria.
tes si el sistema d e defensa es eficiente y no existe
predisposición genética o de otro tipo (desnutri- Fase 2 : A u t o i n m u n i d a d
ción, embarazo, etc.); el virus es abortado y puede La respuesta inmune atenúa la proliferación viral
no quedar daño miocárdico, sin embargo, si el pero favorece la entrada de virus al tejido miocár-
paciente es susceptible la infección viral producirá dico. Idealmente la respuesta inmune reduce con-
inflamación de las miofibrillas e infiltración mio- siderablemente la proliferación viral hasta llegar a
cárdica por células inflamatorias y se producen controlarla; sin embargo, la perpetuación de este
anticuerpos anticorazón, cititóxicos, antirreceptores mecanismo inicia la fase 2, a pesar de q u e el virus
B, antimiosina, y de esta manera, la infección viral haya sido eliminado. En efecto, la activación (le-
desencadena u n a respuesta de inmunidad celular los linfocitos T ahora toman como " b l a n c o " e l pro-
y humoral q u e da lugar a inflamación y daño mio- pio tejido miocárdico, mediante la activación de
cárdico q u e termina en necrosis celular. las c i t o k i n a s (factor d e n e c r o s i s t u m o r a l a ,
¡nterleucina-1 e interleucina-6l, los anticuerpos cru-
El daño celular miocárdico también se produ-
zados aceleran el proceso inflamatorio.
c e por medio d e la replicación viral; se ha demos-
trado por otro lado, la presencia de anticuerpos Desde el punto de vista clínico, cuando la res-
especiales para componentes ¡ntracelulares y por puesta inmune a la infección es intensa y tempra-
fin hay anticuerpos q u e manifiestan inmunidad na (mayor concentración d e IgC circulante), me-
cruzada entre los virus y algunas proteínas miocár- nos daño sobre la función ventricular, menor
dicas q u e pueden causar daño miocárdico de tipo posibilidad d e congestión pulmonar, menor grado
inmunológico. C a b e mencionar q u e el proceso de cardiomegalia, mayor tolerancia al esfuerzo,
inflamatorio producido por la infección viral pue- menor posibilidad de insuficiencia cardiaca y me-
den tener un curso agudo crónico. nor duración de la enfermedad.
Por el contrario, aquellos pacientes en los que
fases de miocarditis viral la respuesta inmune se presenta tardíamente, con
En los últimos años se ha encontrado que en la mayor probabilidad generan una respuesta
fisiopatología d e la miocarditis viral se pueden re- autoinmune (mayores niveles de linfocitos T circu-
M K X A R D I T I S VIRAL EXPERIMENTAL
Mi,- ,r..l....
Hiportrofia
ImulklMKU
FIGURA 1 En la fase inicial, la inflama-
. ..'"I 1 ción y necrosis de las miofibrillas, es
seguida de fibrosis cicatricial. La hi-
I I I I I I I I I I I I I I I I pertrofia miocárdica intenta compen-
sar la d i s m i n u c i ó n de la función
DfM ventricular. Finalmente aparece la in-
Ij.oil'i , m < P r . . - ( h r k I . i j n I. Phytl..l. P h . m . . . . . . I . l.J. tW.'.l'MM.
suficiencia cardiaca y la muerte
902
MIOCARDITIS
M I O C A R D I T I S VIRAL
Dx: Rx Tórax
Dx: Aislamiento Dx: Biopsia
Eco
de virus - Marcadores
- Inmunológicos
- Gammagrama
Infestación
MIOCARDITIS BACTERIANA El ciclo del parásito se inicia c u a n d o el vector que
es un insecto hematófago (Tríatoma) denominado
La miocarditis bacteriana es rara debido principal- popularmente "vinchuca" (en Sudamérica) o "chin-
mente a que la localización anatómica del corazón che h o c i c o n a " (en México y Centroamérica), al pi-
lo protege en contra del contacto directo c o n el car y chupar sangre de animales infestados que sir-
exterior, y por e n d e , con las bacterias comunes del ven de reservónos (armadillos, perros, gatos, ratas,
medio ambiente. Q u i z á la forma más frecuente de tlacuaches), ingieren los parásitos, los cuales viven
miocarditis bacteriana en la actualidad es la que y se multiplican profusamente dentro del insecto.
complica a la endocarditis infecciosa, ya que la te- Cuando éste pica a los humanos defeca al mismo
mible miocarditis diftérica se encuentra práctica- tiempo, y en las heces va el parásito, el cual penetra
mente erradicada c o n los programas nacionales de a través de la solución d e continuidad d e la piel,
vacunación; la miocarditis por Salmonella se pre- provocado por el piquete del insecto, o por el ras-
senta en forma excepcional, debido a los fármacos cado del mismo sujeto. Otras veces ei parásito pe-
antimicrobianos que son altamente efectivos para netra a través d e las conjuntivas oculares.
eliminar el germen y que aplicados en forma opor- El Triatoma, generalmente habita en las pare-
tuna no dan lugar a que se presente la inflamación des, en las vigas de los techos de las casas. Durante
m i o c á r d i c a . Por o t r o l a d o , la i n f e c c i ó n por la noche cae sobre la persona (generalmente niños)
neumococo y clostridia sólo causa miocarditis en y para alimentarse los p i c a , y c o n esto favorece la
pacientes desnutridos o diabéticos con estadios ter- infestación humana. Cuando la picadura del vector
minales del proceso; en otras palabras, sólo se han se hace cerca de uno de los ojos, o cuando el pará-
encontrado en los casos fatales. Algo similar sucede sito entra a través d e la conjuntiva de uno de los
c o n las m i o c a r d i t i s por hongos (aspergilosis, ojos, aparece edema periorbitario y bipalpebral
candidiasis, histoplasmosis, cryptococosis, e t c . ) , unilateral no doloroso; complejo perioftalmogan-
que sólo son capaces d e producir miocarditis e n glionar, hipertermia conjuntival, escasa secreción y
. 4^
CARDIOLOGÍA
adenopatía local, que desaparece e n 10 ó 15 días suficiencia cardiaca), del tejido miocárdico especí-
(signo de R o m a n a ) , que aparece e n el 20 % d e los fico (bloqueo de rama derecha asociado a bloqueo
casos, y cuando penetra por otro sitio aparece una de la subdivisión anterior de la rama izquierda,
lesión cutánea que se caracteriza por un nodulo extrasistolia, fibrilación auricular y ventricular); la
subcutáneo acompañado de microadenitis regional destrucción de los plexos nerviosos y ganglios auto-
y localizado en el sitio de inoculación del parásito nómicos son causa de megaesófago, megacolon, así
(generalmente en la cara), denominada "chagonoma como la dilatación del estómago o bronquios; por lo
de inoculación" (complejo cutáneo-ganglionar) que t a n t o , e l c u a d r o c l í n i c o se m a n i f i e s t a p o r
aparece en menor proporción que el signo de cardiomegalia, principalmente a expensas de las
Romana. Se debe tener en cuenta que la transmi- cavidades derechas, insuficiencia cardiaca
sión del parásito puede ser a través de transfusiones congestiva, c o n insuficiencia tricuspídea y. e n oca-
sanguíneas o a través de la placenta durante el e m - siones, también mitral, que se acompañan frecuen-
barazo. La enfermedad tiene tres fases: aguda, la- temente de un bloqueo bifasic.ular (rama derecha) y
tente y crónica. subdivisión anterior de la rama izquierda) y arritmias
ventriculares.
FSIO
IPATOLOGA
Í cuatro caminos:
insuficiencia cardiaca congestiva que pue- miocarditis cuya evolución depende mucho de la
d e n , en ocasiones, acompañarse de soplos gravedad del ataque sistémico del padecimiento,
d e insuficiencia mitral. Este cuadro puede pero e n general puede observarse remisión espon-
ser reversible c u a n d o desaparece espontá- tánea o inducido por tratamiento en una proporción
neamente o c o n tratamiento médico la in- significativa d e los casos y de hecho, esta forma de
flamación miocárdica, o bien, puede ser re- miocarditis tiene por un lado mejor pronóstico y
fractaria a todo tratamiento y culminar c o n por otro mejor respuesta terapéutica a los medica-
un grave c u a d r o de insuficiencia cardiaca mentos antinflamatorios y corticoesteroides.
acompañada de arritmias activas, trastornos
d e la conducción que a la postre, lleva hacia Miocarditis bacteriana
la muerte al paciente. En este tipo de miocarditis los infiltrados inflamato-
rios están compuestos principalmente por leucocitos
polimorfonucleares como células inflamatorias pre-
ETIO PATOGENIA
dominantes.
3I : "
I I JIt
y
mi. "•—
¡X3,.;
V2
A— va VS
fase 3 se observa gran dilatación del corazón c o n para predecir la buena o mala evolución del pa-
grave falla ventricular, lo cual fácilmente puede ciente; ios que la conservan tienen buena evolu-
demostrarse ecocardiográficamente (figura 9), por ción (figura 8), mientras que aquéllos en los que
lo que el estudio e n estas condiciones no sólo ayu- disminuye importantemente, tienen mal pronóstico
d a al diagnóstico, sino también al pronóstico, ya (figura 9).
q u e es d e esperarse una mala evolución clínica en -
leve falla contráctil que clínicamente pasa inadver- isótopo radiactivo e n los focos de inflamación pro-
tida pero que ecocardiográficamente se pone en ducidas por la miocarditis, por lo que e n conjunto
evidencia (figura 10). U n o de los índices pronósti- con el cuadro clínico y los otros estudios de gabine-
cos más sensibles es la relación grosor/radio (h/r) te mencionados, éste puede ser de gran utilidad
FIGURA 5 Miocarditis. Evolución radiológica. A: Radiografía PA de tórax antes del brote de miocarditis
(índice cardiotorácico 0.42). B: El mismo estudio durante la etapa de miocarditis activa. Nótese el franco
aumento de la cardiomegalia (índice cardiotorácico de 0.55). C: Dos meses después de que ha desapare-
cido la inflamación miocárdica se observa una normalización del tamaño del corazón (índice cardiotorácico
de 0.41). En un caso de miocarditis con buena evolución
9118
MIOCARDITIS
después de haber administrado al paciente 5 mCi 3 = Visualización del corazón con la misma
de citrato de galio'' en las diferentes proyecciones.
7
intensidad que el esternón.
Las imágenes se gradúan del 0 al 4 :
4 = Captación cardiaca con mayor intensidad
0 = N o hay captación cardiaca. que el eslernón.
FIGURA 7 Miopericarditis.
Ecocardiograma modo M. El
trazo muestra la normalidad
en las dimensiones, tanto del
ventrículo derecho (19 mm)
como del izquierdo (diámetro
diastólico de 44 mm). El diá-
metro sistólico es amplio (34
mm) y consecuentemente hay
disminución del acortamien-
to porcentual (22 % ) , hecho
que pone en evidencia la
insuficienica contráctil. Nóte-
se el breve espacio libre de
ecos por detrás de la pared
posterior (PP), del ventrículo
izquierdo (VI), que traduce la
presencia de un discreto de-
rrame pericárdico
4*2
CARDIOLOGÍA
Se considera positivo para miocarditis cuando la de 92 %, valores que son mejores a los obtenidos
captación es de grado 2 o mayor. Recientemente se con el gammagrama cardiaco con galio '". Reciente-
1
91(1
MIOCARDITIS
Biopsia e n d o m i o c á r d i c a
La biopsia endomiocárdica ha sido un procedimien-
to controvertido a través del tiempo; pero e n lo
referente al diagnóstico d e miocarditis ha sido muy
útil, ya que c o n él se confirma la sospecha clínica
por un lado, y por otro se conoce el resultado del
tratamiento o la evolución y, por lo tanto, el pronós-
tico. En el espécimen obtenido es posible primera-
mente revisar un hallazgo histológico, pueden tam-
b i é n h a c e r s e pruebas b i o q u í m i c a s y estudios
inmunológicos para determinar el diagnóstico y ori-
gen de la miocarditis. Se utiliza un biotomo que
consta de unas pequeñas "mandíbulas con dientes"
colocadas e n el extremo distal d e un catéter de 50
c m , que se introduce al ventrículo derecho a través
d e la vena yugular interna o subclavia. La poca lon-
gitud del catéter permite al operador maniobrar con
FIGURA 10 Miocarditis. Secuelas. El ecocardio- mayor facilidad y exactitud el biotomo y tomar las
grama modo M, en ocasiones muestra como úni- biopsias de los sitios apropiados. Generalmente se
ca secuela un discreto aumento del diámetro
sistólico (32 mm), y con una disminución del acor- pueden obtener especímenes de 1 a 3 c m para su
tamiento porcentual (27 %) en aquellos casos de estudio microscópico.
miocarditis con buena evolución. Estos hallazgos
traducen buen pronóstico para el enfermo Este procedimiento se lleva a cabo en la sala de
hemodinámica, con una rigurosa asepsia y antisep-
sia y con anestesia local; en manos expertas es un
sensibilidad de 76 %, especificidad de 9 5 % y valor procedimiento seguro, ya que se puede esperar una
predictivo positivo d e 8 5 %. c o m p l i c a c i ó n , taponamiento cardíaco, e t c . , e n
menos del 1 % de los casos.
6 . Determinación de enzimas séricas
La determinación de crealinfosfoquinasa (CPK), y es- Diagnóstico d e miocarditis viral
pecialmente de su fracción MB, se elevan en la fase En épocas recientes, se han desarrollado técnicas a
aguda de la miocarditis debida a necrosis tisular del través del D N A recombinante para establecer el diag-
tejido cardiaco; también puede hallarse elevación nóstico de miocarditis viral. Se han utilizado espe-
de la transaminasa glutámica oxalacética ( T C O ) , y de cialmente dos métodos: La reacción de la cadena de
la deshidrogelasa láctica ( D H L ) , por lo que tanto la polimerasa(PCR) y la hibridación in situ. Estas técnicas
elevación enzimática como su curva en el tiempo, moleculares reconocen el genoma viral e n el 35 %
son d e utilidad; la primera para confirmar el diagnós- de los pacientes que se encuentran en la fase 1 (in-
tico, y la segunda, para conocer la fase de actividad; fección y replicación viral) y e n el 2 0 % de los pa-
4^
CARDIOLOGÍA
el antibiótico específico d e acuerdo con el ger- prolongado (varios meses), para lograr una re-
m e n causal, y si la inflamación miocárdia acom- misión completa, y no es raro que también se
paña a la endocarditis infecciosa, además podrá requieran dosis pequeñas de prednisona (5 a 1 0
recibir tratamiento quirúrgico si hay indicación mg/día), mantenidos por tiempo indefinido para
para dicha terapéutica (ver capítulo de ENDOCAR- evitar la recaída.
DITIS INFECCIOSA).
II. Medidas generales
c ) Miocarditis chagásica El paciente con miocarditis aguda debe permanecer
Se ha empleado un sinnúmero d e medicamen- en reposo absoluto si el cuadro es m u y grave, o
tos para combatir este padecimiento; sin em- relativo si e s l e v e . S e utilizarán analgésicos y
bargo, ninguno ha demostrado ser completamen- antipiréticos para combatir la fiebre y las mialgias.
te e f i c a z , d e b i d o a q u e g e n e r a l m e n t e son Conviene administrar dieta blanda y laxantes suaves
efectivos para las formas circulantes del parási- para evitar el aumento de trabajo cardiaco consecu-
to, pero n o para aquellas otras intracelulares. tivo a una digestión laboriosa y la constipación indu-
Actualmente se utiliza el nifurtimox (lampit), a cida por el reposo. Finalmente, si el cuadro es grave
dosis d e 2 5 mg/kg/día en cuatro tomas por 1 5 y habrá de mantener al paciente en reposo por tiem-
días; después se reduce la dosis a 15 mg/kg/día po prolongado, se deben usar medias elásticas para
durante 75 días. Este esquema es usado e n ni- evitar la estasis venosa y la flebotrombosis, se debe
ños durante la fase aguda d e la enfermedad. En de enfatizar que los antinflamatorios no esteroides
los adultos, durante la fase crónica, se utiliza a están contraindicados, ya que se ha encontrado que
dosis d e 5-7 mg/kg/día durante las dos primeras f a v o r e c e n la necrosis c e l u l a r e n las fases
semanas, después se incrementa la dosis dos inflamatorias agudas d e las miocarditis.
mg'kg/día cada dos semanas hasta completar 10
semanas y, finalmente, se administran 1 5 a 1 7
III. Tratamiento d e la insuficiencia c a r d i a c a
mg/kg/día, hasta completar 1 2 0 días.
Si la miocarditis sólo se manifiesta por taquicardia
sinusal, ritmo d e galope y cardiomegalia ligera, con
d ) Miocarditis autoinmune el solo tratamiento antiinflamatorio asociado a las
En el capítulo 15FIEBRE REUMÁTICA, se analiza el medidas generales será suficiente para lograrun ade-
tratamiento de la miocarditis, los de fármacos cuado control del cuadro. Si la insuficiencia cardiaca
útiles así como la indicación para su administra- es grave y se acompaña de importante congestión
ción y su dosificación. pulmonar y visceral, se deberá iniciar digitalización y
C o n respecto a la miocarditis lúpica, el trata- medicación diurética. Se debe recordar que en la
miento se encuentra supeditado al grado d e ac- miocarditis puede aparecer intoxicación digitálica con
tividad sistémica del padecimiento, ya que afor- gran facilidad, por lo que se deberá valorar al pacien-
tunadamente lo c o m ú n es que la miocarditis no te clínica y electrocardiográficamente antes de cada
provoque alteraciones mayores y su presencia dosis, mientras se logra la impregnación y, por la
se haga evidente por taquicardia sinusal, cardio- misma razón, generalmente las dosis d e impregna-
megalia discreta o moderada, boqueo A V d e ción son menores que en sujetos sin inflamación mio-
primer grado o extrasistolia ventricular; sin e m - cárdica. En estos casos, el uso de inhibidores de la
bargo, aquellos casos e n los que aparece insufi- enzima conversora es de gran utilidad pues su com-
ciencia cardiaca grave, la inmunosupresión con binación con digitálicos permiten reducir significati-
m e d i c a c i ó n esteroidea a dosis elevadas vamente las dosis de estos últimos, para lograr u n
(prednisona 1 mg/kg/día), que por lo general fluc- efectivo control de la insuficiencia cardiaca, sin pro-
túa entre 6 0 y 8 0 mg/día, permite inducir la ducir intoxicación digitálica.
remisión que se reconoce por el control de la
insuficiencia cardiaca, la reducción de la cardio-
IV. T r a t a m i e n t o d e l o s t r a s t o r n o s d e l r i t m o
megalia, disminución de la frecuencia cardiaca,
Los bloqueos A V de tipo Mobitz II o c o m p l e t o ,
y la desaparición de las arritmias, se comienza la
deberán ser tratados c o n la instalación d e marca-
disminución paulatina de la dosis de prednisona.
pasos transitorio. Las arritmias ventriculares acti-
Vale la pena enfatizar que los signos clínicos de
vas, c u a n d o no c e d a n con el tratamiento antiinfla-
actividad constituyen la guía más precisa para
matorio o inmunosupresor, se d e b e n tratar
reducir paulatinamente la dosis del esteroide.
preferentemente con lidocaína o amiodarona, pues
Es c o m ú n el requerimiento d e u n tratamiento
son fármacos bien tolerados, sin efecto inotrópico
MIOCARDITIS
negativo a dosis terapéuticas. Las arritmias supra- monar condicionados por la arritmia, ya que cada
ventriculares activas preferentemente deberán ser choque eléctrico despolariza el miocardio que por
controladas c o n la administración cuidadosa de sí mismo se constituye en un efecto proarrítmico.
digitálicos.Debe recordarse que la electroversión En estos casos, los choques eléctricos repetidos
sólo debe utilizarse en casos extremos do fibrila- condicionan arritmias en ocasiones intratables que
ción ventricular, estado d e choque o e d e m a pul- pueden condicionar la muerte.
915
I
BIBLIOGRAFIA
I O'Connnell J.B., Kenkin R.E., Robinson J.A., nic Chagas d i s e a s e " . Cardiovasc Potito!,
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" G a l l i u m , cardiopathy and biopsy-proven
h 7
• •
S
nido sanguíneo en contra de una presión mayor, tal
E DENOMINA MIOCARDIOPATÍA a la enfermedad que y como sucede en la hipertensión arterial o en la
afecta primariamente al músculo cardíaco, in- estenosis aórtica, la hipertrofia permite una c o n -
dependientemente de su etiología, que se ma- tracción miocárdica más enérgica y el corazón no se
nifiesta por dilatación, hipertrofia o restricción al torna insuficiente ante la mencionada sobrecarga
llenado del corazón sin que esté presente una so- h e m o d i n á m i c a . D e esta m a n e r a , la hipertrofia se
brecarga hemodinámica y que en forma secundaria constituye e n un mecanismo compensador fisioló-
puede involucrar el funcionamiento de las válvulas gico de gran eficacia. Si el corazón no está sometido
auriculoventriculares. a ninguna sobrecarga hemodinámica y aparece hi-
pertrofia de sus paredes, el proceso es debido a la
En efecto, las cavidades cardiacas pueden dila-
presencia de una enfermedad primaria del
tarse por la presencia de una sobrecarga volumé-
miocardio que se manifiesta por hipertrofia patoló-
trica c o m o es la insuficiencia aórtica o mitral para
g i c a a la c u a l se le d e n o m i n a miocardiopatía
el ventrículo izquierdo o la insuficiencia pulmonar
hipertrófica. F i n a l m e n t e , c u a n d o las f i b r a s
o tricuspídea para el ventrículo derecho; en estos
miocárdicas son substituidas por tejido fibroso
casos, la dilatación cavitaria obedece a que las
(fibrosis intersticial difusa idiopática) o se infiltran
mismas albergan una mayor cantidad de volumen
por materiales extraños como glucógeno o amiloide,
sanguíneo proveniente de una comunicación anor-
el miocardio pierde su capacidad de distenderse
mal o de una válvula insuficiente. C u a n d o el cora-
durante e l llenado ventricular esto es, durante la
z ó n se dilata sin que exista una sobrecarga v o l u -
diástole o sea que el corazón se torna rígido y de
métrica, lo hace por daño intrínseco de la fibra
esta manera se constituye en un impedimento de
miocárdica, o sea por una miocardiopatía, que e n
llenado ventricular para el retomo venoso pulmonar,
este caso se denomina miocardiopatía dilatada. Este
si se trata del ventrículo izquierdo, y venoso sistémico
tipo de miocardiopatía dilata las cavidades ventri-
si el ventrículo derecho es el afectado; por lo tanto,
culares por insuficiencia de contracción miocárdi-
a este tipo de enfermedad miocárdica primaria se le
ca. Por otro lado, la hipertrofia miocárdica consti-
da nombre de restrictiva, porque la consecuencia
tuye un mecanismo adaptativo que el corazón utiliza
CARDIOLOGÍA
MIOCARDIOPATIA HIPERTROFICA
CUADRO 1
TIPOS DE MIOCARDIOPATÍA R E C O N O C I D A S C L Í N I C A M E N T E
No obstructiva
Hipertrófica
f • Asimí
{: Obstructiva
- ¿ • Simét rica
¡oventricular
I
•
I • Medii
v. • Apical
Apica
MIOCARDIOPATÍAS Dilatada
Simétrica (tipo A)
Asimétrica del ventrículo izquierdo
Restrictiva (tipo B)
Asimétrica del ventrículo derecho
(tipo C)
•"-iil
MIOCARDIOPATÍAS
MIOCARDIOPATIAS
Hipertrófica
Obstructiva No Obstructiva Dilatada Restrictiva
++++
++ + + 4.4.
4 . ++ ++++
+ + + + + + a + + +
cromosoma 1 (troponina T ) , dos mutaciones en la breactivación de los genes (up regulador)) q u e ge-
tropomiosina (cromosoma 15q2!, en el cromosoma neralmente se estimulan en la hipertrofia compen-
11 p 1 3 - q l 3 ; e n el cromosoma 7q 3 en relación con sadora c o m o lo son los péptidos d e h o r m o n a
miocardiopatía hipertrófica familiar asociada a sín- natriurética y de enzima conversara de angiotensina.
drome de Wolf-Parkinson-White. El reconocimiento de tales alteraciones genéticas
A l parecer, la hipertrofia miocárdica es una res- tiene importantes implicaciones pronosticas debido
puesta compensadora a las mutaciones genéticas a q u e existen algunas (alteraciones genéticas d e la
antes mencionadas, lo cual se sugiere por la so- miosina y de la troponina) que están asociadas a buen
CARDIOLOGÍA
FISIOPATOLOGÍA
. : j *
\\
\
maquinaria contráctil. Esta rigidez ventricular
se traduce e n restricción al llenado diastólico y j
ello a su vez s e manifiesta clínicamente por la
p r e s e n c i a d e un I V r u i d o a n o r m a l q u e se • 0
ausculta y es posible también palparlo como
un doble levantamiento a p e x i a n o , uno
FIGURA 3 Miocardiopatía hipertrófica. Apexcardio-
presistólico (en concordancia con la contrac- grama. El fonomecanocardiograma enseña la pre-
ción auricular) y otro sistólico, e n relación c o n sencia de un intenso ruido IV y un soplo (SS)
la contracción ventricular. El apexcardiograma expulsivo (miocardiopatía obstructiva). El apexcar-
revelará una onda " a " grande (figura 3). Si es- diograma demuestra la presencia de una gran onda
tas alteraciones modifican importantemente la "a" con un levantamiento sistólico sostenido (hi-
pertrofia ventricular izquierda)
función diastólica se elevará la presión diastó-
lica del ventrículo y será causa de hipertensión
venocapilar, del crecimiento de la aurícula iz-
quierda, y de la disnea que esa el síntoma mas valva septal de la mitral y provoca q u e ésta se
frecuente en estos enfermos. aproxime al septum inteventricular; ello trae dos
consecuencias funcionales: por un lado obstru-
ye la vía de salida del ventrículo izquierdo (este-
2. La función ventricular en la miocardiopatía hi- nosis subaórtica dinámica), y por otro, no permi-
pertrófica es peculiar, y a q u e por un lado la te la coaptación sistólica completa de la válvula
relación grosor/radio (h/r) se incrementa no rara mitral con la insuficiencia mitral funcional con-
vez en forma excesiva c o n relación a los valo- secutiva. Este comportamiento de la valva septal
res normales (hipertrofia inapropiada (figura 4), de la mitral se ha denominado movimiento ante-
y ello trae c o m o consecuencia q u e la contrac- rior sistólico (MAS), y es el fenómeno fisiopato-
c i ó n sistólica sea m u y enérgica, ya que el v e n - lógico que caracteriza a la miocardiopatía hiper-
trículo se c o n t r a e e n contra d e u n a carga trófica obstructiva (vide infra). El grado d e
sistólica normal (figura 5), por lo q u e la resul- obstrucción y de insuficiencia mitral depende del
tante es la hipercontractiiidad. momento en que ocurre el movimiento anterior
sistólico, su contacto c o n el septum
¡nterventricular q u e e n ocasiones produce un
3. C o m o se mencionó, c u a n d o el corazón se h i -
chasquido (figura 7) y la duración de este fenó-
pertrofia y la carga contra la cual se vacía no
meno; en efecto, si el contacto de la valva ante-
está aumentada, la contracción sistólica d e l
rior con el septum es precoz y duradero, la obs-
miocardio hipertrofiado es m u y enérgica (hi-
trucción gradiente transaórtico y duración del
percontractiiidad), y la velocidad a la que sale
periodo expulsivo será mayor y la insuficiencia
la sangre hacia la aorta se encuentra significati-
mitral más importante que si el mas es tardío y
vamente aumentada. Este fenómeno condicio-
breve, ambos fenómenos (la obstrucción y la re-
na un efecto Venturi a nivel d e la v í a de salida
gurgitación) serán leves.
del ventrículo izquierdo, por el cual se atrae la
122
MIOCARDIOPATÍAS
Obstrucción medioventricular
La miocardiopatía hipertrófica medioventricular
Normales
es una variedad que se caracteriza por hipertro-
fia predominante e n la región de los músculos
papilares, hecho que produce la obstrucción a
la salida d e la sangre, precisamente en donde la
hipertrofia es más importante (obstrucción
90 110 medioventricular), no produce obstrucción suba-
mmHg órtica ni tampoco insuficiencia mitral. Produce
las alteraciones diastólicas antes mencionadas y
FIGURA 5 Relación h/r en sujetos sanos y en pacien-
su diagnóstico se puede hacer mejor mediante
tes con miocardiopatía hipertrófica. En los pacien-
tes con miocardiopatía hipertrófica la relación h/r estudio angiocardiográfico e n posición oblicua
en diástole se encuentra exageradamente aumenta- derecha anterior (figura 8-B). Esta variedad de
da (1.36 ± 0.32) en sístole para desarrollar una pre- miocardiopatía hipertrófica se ha encontrado aso-
sión sistólica (112 ± 6 mmHg) similar a la de los ciada c o n infarto del miocardio apical que coin-
sanos (106 ± 12); la relación h/r se incrementa cide c o n coronarias normales.
desproporcionadamente (3.45 ± 1.48) (hipercontrac-
tiiidad) en relación a los normales (1.1 ± 0.01)
5. Si la hipertrofia asimétrica,(figura 8-A) concéntrica
o apical es excesiva se torna e n hipertrofia
4. C u a n d o la hipertrofia septal asimétrica se acom- inapropiada rompiendo de esta forma la relación
paña de obstrucción dinámica se c r e a un gra- entre el número de arterias coronarias y la masa
CARDIOLOGÍA
FIGURA 6 Electrocardiograma
en un paciente de 25 años con
miocardiopatía hipertrófica.
Obsérvense los signos de hiper-
trofia ventricular izquierda, es-
pecialmente en Dll, Dlll, aVF y
V6 por ser un corazón vertical
dextrorrotado. Ondas Q anor-
males (hipertrofia septal) en
aVL signos que podrán sugerir
lesión subepicárdica en precor-
diales derechas (V1 a V3), así
como en DI y aVL e isquemia
subepicárdica en precordiales
izquierdas (V4 a V6)
924
MIOCARDIOPATÍAS
que éstas irrigan; ello se manifiesta en isquemia este síntoma se agrava con la administración de ni-
miocárdica, lo cual sumado al daño d e las peque- troglicerina, o bien, este mismo medicamento, pa-
ñas arterias y a la disminución del gradiente d e radójicamente es capaz de producir el angor.
perfusión aortaventricular (disminución de la re- Ello se debe a que toda intervención fisiológica
lajación y la distensibilidad), puede culminar en o farmacológica que aumente la contractilidad, au-
insuficiencia de riego coronario, sin que exista menta también la obstrucción dinámica (isoprote-
obstrucción anatómica o funcional de estas arte- renol, digital, vasodilatadores, etc.), y por el contra-
rias. Ello puede traducirse clínicamente por angi- rio, todas aquellas maniobras que disminuyen la
na de pecho o por alteraciones electrocardiográ- fuerza de contracción del corazón disminuirán la
ficas de isquemia miocárdica (figura 6). obstrucción dinámica. Es por ello que el tratamien-
También se ha demostrado disminución de la to médico de elección de la miocardiopatía hipertró-
capacidad vasodilatadora de la red coronaria y fica es la administración d e betabloqueadores.
compresión de las arterias septales perforantes La disnea puede ser un síntoma prominente en
como contribuyentes para la isquemia miocár- este padecimiento si la función diastólica se encuentra
dica; ésta ha sido demostrada mediante estudios gravemente comprometida y se comportará como lo
perfusorios con talio-' ' , producción d e lactatOS
1 1
hace el síntoma cuando es consecutiva a hipertensión
en el seno coronario por estimulación auricular venocapilar. Vale la pena enfatizar que en estos casos
y con tomografía por emisión de positrones. la disnea no se debe a insuficiencia cardiaca, sino a
relajación lenta e incompleta y rigidez de la pared
venlricular impuesta por la hipertrofia inapropiada.
C U A D R O CLÍNICO
B
ipcrlrófica
FIGURA 9 Miocar-
diopatía hipertrófi-
ca. Electrocardio-
grama. El trazo
demuestra la pre-
sencia de ondas
"q" anormales en
Dll, Dlll, aVF y de
V4 a V6. Se puede
notar que en forma
concomitante au-
menta el voltaje de
la onda R en VI y
V2 (hipertrofia
septal). Estos cam-
bios son acompa-
mm
ñados de isquemia -~- j^A.
subepicárdica de
V1 a V 3
FIGURA 10 Miocardiopatía
hipertrófica. Electrocardio-
grama atípico. El trazo mues-
tra signos que sugieren una
gran hipertrofia ventricular
derecha en el caso de una
grave miocardiopatía hiper-
trófica obstructiva (caso de
figuras 11 y 20). Nótese la
imagen de isquemia
subepicárdica anterolateral
V6 (VI-V5)
927
CARDIOLOGÍA
aumento en la amplitud del pulso aórtico o mo, puede también demostrarse un cierre mesosis-
radial (figura 12-AI. En el sujeto que padece tólico de la válvula aórtica e n relación con la dismi-
una miocardiopatía hipertrófica, el aumento nución del flujo por el obstáculo dinámico y la dila-
de la contractilidad producido por la poten- tación de la aurícula mitral y a la rigidez venlricular
ciación postextrasistólica incrementa signifi- impuesta por la hipertrofia (figuras 17 y 18).
cativamente la obstrucción dinámica y cs por
ello que el aumento de la presión intraven- 5. E c o c a r d i o g r a m a b i d i m e n s i o n a l
tricular contrasta con la disminución de la Mediante este estudio puede corroborarse c o n
presión aórtica; ambos eventos se traducen mayor certeza el diagnóstico de hipertrofia septal
en un aumento del gradiente transaórtico y asimétrica (figura 19), ya que evita el posible diag-
una disminución de la presión diferencial, lo nóstico erróneo por angulación incorrecta del
que se manifiesta por una disminución de la transductor del ecocardiograma modo M con res-
amplitud del pulso del latido posextrasistólico pecto al corazón (corte tangencial) (ver capítulo d e
(figura 12-B). Mediante los métodos incruen- EcocAROioc.RArÍA MODO M ) ; asimismo, permite re-
tos también es posible reproducir dichos cam- conocer hipertrofia septal asimétrica d e localiza-
bios (figuras 1 3 y 1 7 ) . ción poco usual no visualizadas con ecocardiogra-
fía m o d o M (porción posterior el septum) y la
distribución de la misma hipertrofia (figura 2 0 ) . Fi-
2. M i o c a r d i o p a t í a hipertrófica no obstructiva
nalmente, es posible visualizar el movimiento anor-
(figura 3)
mal d e la valva anterior de la mitral (MAS), me-
a) La hipertrofia ventricular izquierda se mani- diante las aproximaciones apicales (figura 2 1 ) ,
fiesta en el apexcardiograma por un levan- cuando la miocardiopatía es obstructiva.
tamiento holosistólico.
(101 «r»)
):.)! • i r ;.'t?3¥f
FIGURA 11 Estenosis subaórtica dinámica. Maniobra de valsalva. Se muestran los primeros latidos de la
fase de presión. Obsérvese cómo a partir del primer latido se refuerza el soplo expulsivo, el pulso se torna
bisferiens y el periodo expulsivo (PE) medido desde el pie de ascenso (e) hasta la incisura (i) se prolonga
importantemente (115 %) en comparación con el latido previo. La disminución del llenado ventricular
Izquierdo favorece la obstrucción dinámica
F I G U R A 12 A: potenciación post-
extrasistólica de la contractilidad. Nor-
malmente el latido que sigue a una ex-
trasístole ventricular (EV), desarrolla una
presión sistólica intraventricular mayor
(efecto inotrópico positivo), que se hace 4-
evidente por un franco aumento en la
amplitud del pulso arterial (entre fle-
chas). B: efecto de Brockenbrough. La
potenciación post-extrasistólica de la
1001
contractilidad produce o incrementa la AO
obstrucción dinámica que se manifies-
ta por la aparición o el franco aumento í —^/
del gradiente transaórtico (en este caso, E
de 70 mmhg) el cual se traduce por una
i—VI
franca disminución de la amplitud del
pulso (entre flechas) del latido post-ex-
trasistólico el cual muestra morfología
digitiforme 0 \/ _ . -.• __
929
CARDIOLOGÍA
FIGURA 13 Estenosis
subaórtica dinámica. Se
puede apreciar la exis-
tencia de un soplo
sistólico (SS) expulsivo y
un retumbo mesodias-
tólico (ret). El E C G
muestra un síndrome de
Wolff-Parkinson-White.
Aparece una extrasísto-
le (E) ventricular. Obsér-
vese cómo después de
la pausa compensadora
el latido sinusal muestra un franco incremento del SS y del "ret" concomitantemente; el pulso carotídeo
(PC) enseña una típica morfología bisferiens (señalado con una flecha). El trazo demuestra cómo la
potenciación postextrasistólica de la contractilidad provoca o incrementa la obstrucción dinámica.
Efecto Brockenbrough: el latido postextrasistólico muestra amplitud francamente menor del pulso en
relación con el latido preextrasistófico, manifestando así el incremento en la obstrucción dinámica.
FIGURA 14 Estenosis subaórtica dinámica. Inhalación de nitrito de amilo. El trazo de control (a la izquier-
da) muestra un soplo expulsivo (SS) y un pulso carotídeo (PC) de morfología normal. La inhalación de
nitrito de amilo (a la derecha) desencadena un grave obstrucción dinámica a juzgar por el importante
reforzamiento del SS, la prolongación del periodo expulsivo (PE) y la transformación del pulso carotídeo a
morfología de bisferiens; asimismo nótese el franco refuerzo del retumbo (ret)
MIOCARDIOPATÍAS
PRONÓSTICO TRATAMIENTO
2. Aparición a edad temprana (antes de los 3 0 2. La naturaleza del trastorno genético molecu-
años). lar en relación muy apegada al pronóstico.
4-231
CARDIOLOGÍA
FIGURA 16 Ecocardiografía de un
caso de miocardiopatía hipertrófica
obstructiva. Obsérvese el espesor
a n o r m a l m e n t e a u m e n t a d o del
septum (SIV) en relación con la pa-
red posterior (PP). Lo cual establece
el diagnóstico de hipertrofia septal
asimétrica. Es evidente la obstrucción
que produce el movimiento anterior
sistólico (MAS) de la válvula (VM) en
la cámara de salida del ventrículo iz-
quierdo
3. Si se trata de una forma no obstructiva. en 2 4 horas, (40 a 8 0 m g cada 8 horas), dosis que
deberá ser individualizada en cada paciente. C o n
4. Si se trata d e miocardiopatía hipertrófica,
este esquema se mejora substancialmente la rela-
obstructiva variedad mesoventricular.
j a c i ó n ventricular y por lo tanto se reduce la pre-
5. Miocardiopatía hipertrófica obstructiva (es- sión diastólica intraventricular por lo que e l trata-
tenosis subaórtica dinámica). miento es especialmente útil e n los pacientes c o n
este padecimiento que manifiestan disnea.
Miocardiopatía hipertrófica n o obstructiva C u a n d o el verapamil no es tolerado puede a d -
En estos casos está indicado dar tratamiento cuan- ministrarse propranolol a dosis de 60 a 1 2 0 mgcada
do hay alteraciones de la función diastólica o 24 horas (20 ó 40 mg cada 8 horas), que al reducir la
isquemia miocárdica. En ello el medicamento de frecuencia cardiaca mejora la isquemia miocárdica
elección es el verapamil a dosis d e 120 a 2 4 0 m g y c o n ello la relajación ventricular y la presión
MIOCARDIOPATÍAS
1 J J A,
4*5
CARDIOLOGÍA
Los mecanismos a través de los cuales se re- región apical del ventrículo derecho y la reduc-
duce la obslrucción dinámica, al parecer s o n : ción de la contractilidad del ventrículo izquier-
el movimiento paradójico del septum ¡nterven- do cuando la activación eléctrica no se lleva a
tricular que se produce cuando la activación eléc- cabo a través del sistema específico de conduc-
trica proviene del ventrículo derecho, la activa- ción. Se ha encontrado que el gradiente se va redu-
ción tardía d e la base del ventrículo izquierdo, ciendo paulatinamente en el tiempo, lo cual sugie-
cuando la estimulación eléctrica proviene de la re que también se va produciendo un mecanismo
MIOCARDIOPATIAS
4
CARDIOLOGÍA
vo se requiere realizar una arteriografía corona- En algunos pacientes aparece bloqueo de rama
ria; localizar las ramas septales de la arteria derecha.
desdendente anterior e inyectar alcohol e n la
primera septal evitando que esta sustancia refluya d) Tratamiento combinado
a la arteria descendente anterior. Ello provoca En algunos pacientes el tratamiento médico
un infarto del miocardio en el área irrigada por (propranolol, verapamil y cuando hay indica-
dicha rama (1a. septal). Para conocer el área ción amiodarona) produce una mejoría clínica
miocárdica que será afectada por la necrosis, importante; sin embargo, con el tiempo reapa-
p r e v i o al p r o c e d i m i e n t o se r e a l i z a u n recen los síntomas a pesar de este tratamiento
ecocardiograma con contraste miocárdico e n el (figura 23-A). En ellos puede instalarse u n
mismo momento que se ha cancelado la 1a. rama marcapaso bicameral y reducir el gradiente (fi-
septal; se inyecta el contraste miocárdico en ella gura 23-B).
y se localiza el área que será necrosada. Ideal-
C u a n d o c o n el tiempo este tratamiento deja
mente, se pretende producir e l infarto e n la
d e ser efectivo, se valora la posibilidad de la
porción basal del septum interventricuiar que
ablación con alcohol y el tratamiento combina-
es el que colinda con la cámara de salida del
do obtiene una respuesta terapéutica muy satis-
ventrículo izquierdo. Previo al procedimiento
factoria (figura 23-C) en un alto porcentaje de
se registran curvas de presión simultáneas en el
pacientes, e n la figura 24 se puede apreciar la
ventrículo izquierdo y aorta; se cuantifica el
reducción del espesor septal después de la abla-
gradiente "pico a pico" basal y se llevan a cabo
ción. Finalmente, si el tratamiento combinado
maniobras provocadoras de la obstrucción diná-
no alivia los síntomas o la obstrucción dinámica,
mica (efecto de Brockenbrough y maniobra de
se debe de contemplar la posibilidad de trata-
Valsalva) para cuantificar la magnitud d e la obs-
miento quirúrgico.
trucción dinámica (figura 22-A). Posteriormente
se realiza la ablación septal con alcohol y se
repiten las mismas maniobras para conocer el e) Tratamiento quirúrgico
gradiente residual y el obtenido después de las Cuando el tratamiento médico, la instalación de
mismas maniobras provocadoras para conocer marcapasos D D D o el tratamiento interventricu-
el resultado (figura 22-B). iar no alivian la obstrucción dinámica en forma
significativa y/o los síntomas (lipotimia, angor,
C u a n d o mediante contraste miocárdico se disnea o síncope), se deberá contemplar la indi-
reconoce que el área afectada por la necrosis cación quirúrgica; asimismo, la aparición de
es muy pequeña (lo cual no predice que el re- fibrilación auricular también será razón para pro-
sultado hemodinámico no sea óptimo) se estu- poner la miomectomía. Este procedimiento con-
d i a la 2 a . rama septal y se valora el área que siste en la extirpación quirúrgica de una porción
será afectada; si con la alcoholización de las el septum interventricuiar engrosado, lo que trae-
ramas el área afectada es suficiente, procede a rá c o m o consecuencia ampliación de la vía de
realizar de esta forma la alcoholización en busca salida del ventrículo izquierdo y la abolición el
siempre del beneficio hemodinámico. Si por el movimiento anterior sistólico así como d e la in-
contrario, el contraste miocárdico indica que la suficiencia mitral. Con este procedimiento se
alcoholización de las septales producirá un in- reduce el gradiente en el 9 5 % de los casos y en
farto extenso (región media y apical del septum, el 8 0 % d e ellos, el gradiente desaparece o se
músculo papilar, ventrículo derecho) sabemos reduce muy importantemente. En centros es-
que el procedimiento esta contraindicado, pues pecializados en los que se realiza esta inter-
en estas condiciones los resultados son malos, vención se informa una mortalidad del 3 al 4 %
ya que la técnica se verá complicada con insufi- c o n una mortalidad anual entre el 1 y 2 %. La
ciencia cardiaca, estado de choque y en algunos insuficiencia mitral se reduce en un 70 % y la
casos podrá haber mortalidad. En grandes series mejoría sintomática es muy evidente, c o n un
se ha demostrado que el gradiente puede redu- a u m e n t o e n la c a p a c i d a d f í s i c a p a r a e l
cirse significativamente hasta e n el 80 % de los ejercicio.Por otro lado, e n los centros e n los
casos (figura 22-B). que esta cirugía es una especialidad la mortali-
d a d quirúrgica se ha reducido hasta el 0.8 % y
Cuando el procedimiento se valora previa- la sobreviva a 1.5 y 10 años es d e 9 8 , 9 6 y 8 3 %
mente con el contraste miocárdico la posibili- respectivamente.
dad de éxito es alta y de complicaciones es baja.
MIOCARDIOPATÍAS
FIGURA 22 A: El registro simultáneo entre el ventrículo izquierdo y la aorta muestran un gradiente basal
de 98 mmHg, que se eleva a 130 mmHg después de la extrasístole ventricular (efecto de Brockenbrough).
Nótese la morfología digitiforme de la presión aórtica. B: Después de la ablación septal, desaparece el
gradiente transaórtico y se normaliza la morfología de la curva aórtica. (Cortesía del Dr. Jorge Gaspar)
937
CARDIOLOGÍA
te muestra la obliteración de la región apical del biopsia endomiocárdica compatibles con miocardi-
ventrículo izquierdo, lo cual da una imagen de "hoja tis, por lo que hay alta probabilidad de que por lo
de otoño". menos algunos casos de miocardiopatía dilatada
idiopática tengan este origen.
Esta miocardiopatía no es obstructiva y su pronóstico
a largo plazo no es diferente al de la población general; En la figura 28 se muestra la secuencia fisiopato-
por lo tanto no requiere ningún tratamiento específico. lógica de la miocarditis viral en animales de experi-
MIOCARDIOPATÍAS
mentación desde el inicio del proceso inflamatorio "fase dilatada de la cardiopatía hipertensiva", ya que
hasta la muerte del animal. realmente el daño miocárdico difuso impuesto por la
Cuando la hipertensión arterial es d e larga evolu- sobrecarga crónica ha dado lugar a una verdadera
ción, las cifras se encuentran elevadas en forma im- miocardiopatía dilatada.
portante de presión a través del tiempo, ya sea por Cuando un paciente ha tenido un infarto del
ausencia de tratamiento o mal manejo de este proce- miocardio extenso, o varios infartos que han dejado
so, el corazón puede caer en insuficiencia cardiaca extensas áreas del corazón con incapacidad funcional
cuando la hipertrofia deja de ser un mecanismo acentuada o total, la consecuencia es la cardiomegalia,
compensador eficaz (hipertrofia inadecuada), y cuando la insuficiencia cardiaca, los trastornos de la conducción
además ya hay daño miocárdico intrínseco con depó- y las arritmias, por lo que realmente ésta se puede
sito excesivo de colágena en el intersticio. En estas considerar una forma de miocardiopatía dilatada en la
condiciones aparece cardiomegalia, ritmo de galope que el paciente puede no tener además angor residual;
y otras manifestaciones de insuficiencia cardiaca, que a esta forma de miocardiopatía dilatada sin temor se le
generalmente se acompañan de pseudonormalización puede denominar miocardiopatía isquémica, y lo mis-
de las cifras de presión arterial. En muchos de estos mo sucede cuando la enfermedad plurivascular causa
casos, no se logra corregir la insuficiencia cardiaca ni isquemia miocárdica grave y en áreas extensas del cora-
la cardiomegalia al normalizar las cifras de presión zón y que lleva al paciente hasta la insuficiencia cardiaca
arterial debido a que ya existe daño cardiaco intrín- por miocardio hibernante ( m i o c a r d i o v i v o no
seco. Por lo que con justicia se le ha denominado funcionante); en otras palabras, causa una miocardiopa-
FIGURA 25 Miocardio-
patía hipertrófica api-
V3 cal. Electrocardiogra-
ma. El trazo muestra
signos de hipertrofia
ventricular izquierda. El
aumento de voltaje de
la R en V1 revela la hi-
pertrofia septal. En es-
tos casos es caracterís-
tica la p r e s e n c i a de
ondas T negativas gi-
gantes, tal y como se
observa en las deriva-
ciones precordiales iz-
quierdas
940
MIOCARDIOPATÍAS
FIGURA 26 Miocardiopatía hipertrófica apical. Ecocardiograma. Barrido desde la aorta hasta la punta del
corazón. Obsérvese el incremento progresivo, tanto del septum interventricuiar (S) como de la pared
posterior del ventrículo izquierdo desde la base del corazón hasta la región apical (barras negras)
FIGURA 27 Miocar-
diopatía hipertrófica
apical. La aproxima-
ción apical de cuatro
cámaras demuestra
una importante hi-
pertrofia del septum
¡nterventricular y re-
gión apical del ven-
trículo izquierdo.
Nótese el espesor
normal de la porción
basal del septum y
de la pared lateral.
A: Diástole, B: Sístole
tía dilatada, con la particularidad de que esta puede ser un daño irreversible que se traduzca en insuficien-
reversible cuando se alivia la isquemia mediante trata- cia contráctil. En efecto, este fenómeno es frecuen-
miento intervencionista o quirúrgico. te verlo e n pacientes afectados por sobrecargas
Por otro lado, el estiramiento excesivo y sosteni- hemodinámicas de gran magnitud (estenosis aórtica
do e n el tiempo de la miofibrilla que se acompaña o insuficiencia aórtica c o n insuficiencia cardiaca, o
de una falta d e soporte de colágena intersticial ade- insuficiencia mitral grave) y de evolución crónica en
cuado (insuficiencia mitral) o por el contrario, cuan- las que al corregir la sobrecarga hemodinámica
do el intersticio se llena excesivamente d e colágena mediante tratamiento no se corrige la insuficiencia
(hipertrofia patológica) puede llegar a provocarle cardiaca ni la cardiomegalia, ya que es c o m ú n la
CARDIOLOGÍA
Miocarditis experimental
Míocitolisis
Necrosis
Fibrosis
Hipertrofia
Insuficiencia
cardiaca
Muerte
25 50 75 100 125 150 1 75 200 225 250 275 300 325 350 375
Días
latmln c. and Prorctoli L, Can I. Phy.iul. Ptimnicol,, vol 62, un, 1M4.
FIGURA 28 La infección viral experimental en animales ¡nicialmente (a los 25 días)
produce destrucción celular que culmina con necrosis. Desde el día 50 comienza a
aparecer fibrosis de reparación celular y a partir del día 75 aparece hipertrofia
miocárdica en un intento de compensar la función de las miofibrillas pérdidas; a
partir del día 150 comienza a presentarse la muerte de los animales con una
extensa necrosis miocárdica y aquellos otros que no mueren, empiezan a presentar
insuficiencia cardiaca cuando la necrosis y fibrosis miocárdica es tan extensa que no
puede normalizarse la función con la hipertrofia. La insuficiencia cardiaca culmina
con la muerte de los animales entre el día 250 a 300 del único del proceso. Este
proceso es el que hipotéticamente podrá ser la consecuencia de la miocardiopatía
dilatada en el ser humano
942
MIOCARDIOPATÍAS
sarcoplásmico y las sarcómeras al grado de producir se desvían lateralmente y la tensión que de-
insuficiencia cardiaca; por otro lado, también se sarrollan es aplicada tangencialmente a las
reduce la liberación de C a " por la maquinaria con-
+
valvas. Por lo tanto, a mayor desviación, ma-
tráctil, lo cual trae por consecuencia una relajación yor desventaja mecánica (figura 32). Por otro
incompleta. Esta forma de miocardiopatía es cura- lado, la destrucción de tejido miocárdico del
ble cuando por cualquier mecanismo se normaliza sistema de conducción (específico), condi-
la frecuencia cardiaca como sucede con la ablación ciona la aparición de trastornos de la conduc-
en la taquicardia auricular "incesante" (figura 2 9 ) , p ción del impulso (principalmente bloqueos
mejora considerablemente con tratamiento tronculares o fasciculares de alguna de las ra-
farmacológico en la insuficiencia cardiaca o fibrila- mas del haz de His) (figura 33), o arritmias acti-
c i ó n auricular con frecuencia elevada (digital y vas (extrasistolia auricular o ventricular y no in-
betableq ueadores). frecuentemente taquicardia ventricular), la
presencia de bloqueo avanzado de la rama iz-
Finalmente, una miocardiopatía con caracterís-
quierda del haz de His condiciona una contrac-
ticas peculiares es la causada por ausencia de
ción discinérgica del ventrículo izquierdo, lo
compactacion miocárdica que se caracteriza por
cual es causa de una disminución de la eficien-
falla contráctil muy evidente (fracción d e e x p u l -
cia contráctil en un corazón ya insuficiente.
sión < de 5 0 %) pero que puede no acompañarse
de di lalación ventricu lar y si de una franca disfunción
diastólica por distensibilidad reducida (ventrículo
rígido) (figura 3 0 ) . Esta alteración se debe a una C U A D R O C L Í N I C O (figura 1)
detención en el proceso d e la morfogénesis endo- En los pacientes asintomáticos, el diagnóstico se
miocárdica en la que la compactacion trabecular sospecha al encontrar cardiomegalia en la radio-
no se realiza y este hecho da lugar a la presencia grafía de tórax (figura 3 1 ) o alteraciones electro-
de profundos recesos que alternan con pronuncia- cardiográficas (bloqueos de rama o extrasístoles)
das trabeculas, lo cual además también dan lugar a (figura 3 3 ) lo cual ocurre e n el 4 al 13 % de los
isquemia miocárdica y trombosis en los recesos pacientes. El estudio fonomecanocardiográfico pue-
intertrabeculares y arritmias potencialmente leta- d e demostrar la presencia de soplos d e insuficien-
les. El ecocardiograma es el método idóneo para cia mitral y tricuspídea así c o m o insuficiencia ven-
establecer el diagnóstico (figura 3 0 ) . tricular izquierda. El estudio ecocardiográfico es
definitivo al demostrar la dilatación de las cavida-
des ventriculares con signos de mala función v e n -
FISIOPATOLOGÍA tricular en ausencia de enfermedad valvular
autóctona (figuras 3 4 y 3 5 ) .
Consecuencias funcionales de la pérdida di-
fusa de tejido miocárdico Los pacientes sintomáticos, generalmente son
La sustitución d e miocardio inespecífico por tejido portadores de una enfermedad más avanzada. En
fibroso o la falta de contracción eficiente de la ellos las manifestaciones clínicas son las propias de
miofibrilla produce deterioro funcional hemodiná- la insuficiencia cardiaca congestiva, d e aparición
mico del corazón que condiciona caída del gasto insidiosa. La exploración física puede mostrar signos
sistólico. El organismo utiliza sus m e c a n i s m o s de hipertensión venosa sistémica (ingurgitación y u -
compensadores (secreción de catecolaminas, hiper- gular, hepatomegalia congestiva y edema d e miem-
trofia y ley de Starling) para normalizar el gasto car- bros inferiores) que se conjugan con cardiomegalia,
díaco y trae como consecuencia manifestaciones de ritmo de galope, y muy frecuentemente, con signos
insuficiencia cardiaca, hipertrofia inadecuada y d i - de i n s u f i c i e n c i a mitral pura e hipertensión
latación del corazón (figura 3 1 ) . En estos casos, la pulmonar: los signos de insuficiencia tricuspídea
cardiomegalia llega a ser muy importante y ello con- aparecen en menor proporción. Esta es la razón de
diciona insuficiencia valvular mitral y tricuspídea (fi- por qué e n antaño a estos enfermos se les diagnos-
gura 32) por dos mecanismos: ticaba como portadores de cardiopatía reumática,
con lesiones valvulares por este padecimiento, sin
a) Dilatación del anillo valvular. embargo, hay signos clínicos que podrán ayudar al
diagnóstico diferencial c o m o lo s o n :
b) Pérdida de la orientación de los músculos
papilares, que normalmente guardan una
posición casi perpendicular a las válvulas; en a ) La ausencia de chasquido de apertura mitral
el corazón dilatado, los músculos papilares (falta de daño orgánico de la válvula).
CARDIOLOGÍA
c) Falta de proporción entre el grado de insufi- El diagnóstico puede sospecharse e n la historia clíni-
ciencia mitral y el grado de cardiomegalia; c a , con las manifestaciones mencionadas. El E C G
v. gr.; insuficiencia mitral ligera con cardio- mostrará crecimiento de cavidades, trastornos de la
megalia muy importante. conducción intraventriuclary/o frecuentes trastornos
del rilmo (80 % de los casos) la fibrilación auricular
En una buena proporción de estos enfermos exis- aparece en el 2 0 % de los casos. La radiografía de
te fibrilación auricular. tórax es d e ulilidad para descubrir el grado de
La manifestación inicial más frecuente es la insu- cardiomegalia y de congestión pulmonar (figura 31).
ficiencia cardiaca (85 %) y de ella la disnea aparece
c o n mayor frecuencia (86 % de los casos) y c o n El estudio ecocardiográfico es definitivo para el
menor frecuencia la manifestación primera es el diagnóstico de este padecimiento al demostrar la
e d e m a (29 %) si las palpitaciones (30 % ) . dilatación de las cavidades ventriculares y la norma-
En la evolución d e la enfermedad el 9 5 % de los lidad ecocardiográfica de las válvulas auriculoven-
pacientes presenta insuficiencia cardiaca. triculares ¡figura 34), lo cual descarta el diagnóstico
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944
MIOCARDIOPATÍAS
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
4^
CARDIOLOGÍA
mos; ello se manifiesta por incremento paulatino nuo del electrocardiograma (Holter) se ha po-
en el grado de cardiomegalia, la aparición de insu- dido demostrar la presencia de arritmias po-
ficiencia mitral e insuficiencia tricuspídea cuando el tencialmente letales de aparición muy frecuen-
grado d e cardiomegalia llega a ser considerable y te e n estos enfermos, eventos que preceden y
finalmente la muerte llega por cualquiera de los son capaces de condicionar muerte súbita. En
mecanismos siguientes: e s t o s c a s o s , u n o d e los m e c a n i s m o s
89U»U3ra%rUMU3rdn9V «stóaiSBíJX:' .¡11.0 9b ">q ot*q¡ arritmogénicos mas importante es la retroali-
1. Insuficiencia cardiaca refractaria o trata- mentación mecanoeléctrica, lo cual depende
miento médico. del aumento del estrés parietal e n relación
2 . Muerte súbita por inestabilidad eléctrica. Se directa con la dilatación ventricular (ver capítu-
ha encontrado que aquellos pacientes con gran lo de ARRITMIAS: MUERTE SÚBITA).
dilatación del corazón y falla contráctil tienen
un umbral m u c h o menor para presentar 3 Los enfermos con dilatación considerable de
arritmias ventriculares, incluyendo la fibrila- las cavidades cardiacas e insuficiencia cardia-
ción ventricular primaria, cuando se les infun- ca congestiva crónica e n una no despreciable
de catecolaminas, y asimismo, al registro conti- proporción fallecen por embolia pulmonar o
948
MIOCARDIOPATÍAS
MIOCARDIOPATIA RESTRICTIVA
CARACTERIZACIÓN ANATOMO-FUNCIONAL
Normal
951
CARDIOLOGÍA
muertes por cardiopatía), pero se han encontrado na la caída del gasto sistólico izquierdo, pero la frac-
casos e n la India, Brasil, Venezuela, Colombia y ción de expulsión se mantiene en cifras normales.
México.
F i n a l m e n t e , se ha descrito un tipo de miocar-
CUADRO CLÍNICO
diopatía restrictiva bilateral q u e se c a r a c t e r i z a
por la presencia d e fibrosis intersticial difusa Las manifestaciones que dominan el cuadro clínico
i d i o p á t i c a , la c u a l c o n f i e r e rigidez al m i o c a r d i o son las d e grave hipertensión venosa sistémica ca-
el que pierde su capacidad d e distensión diastó- racterizada por ingurgitación yugular, hepatomega-
l i c a , c o n s t i t u y é n d o s e e n una forma d e miocar- lia congestiva, ascitis recidivante, derrame pleural y
diopatía restrictiva. edema de miembros inferiores que alterna con gra-
dos variables de disnea. Estos síntomas generalmen-
te incapacitan al paciente y son refractarios a trata-
FISIOPATOLOGÍA
miento médico (diuréticos, vasodilatadores,
El impedimento al llenado diastólico en ambos ven- paracentesis, etc.). La exploración física, además de
trículos condiciona una elevación de la presión in- los signos ya anotados de hipertensión venosa
tracavitaria muy importante que repercute esencial- sislémica, revela la ausencia d e soplos en el área
mente sobre las aurículas, las cuales por esta razón precordial y frecuentemente se ausculta un lll ruido
se dilatan considerablemente. Asimismo e n el cir- chasqueante que puede confundirse con chasquido
cuito pulmonar se produce una acentuada eleva- de apertura mitral o chasquido protodiastólico de
Lyan de pericarditis constrictiva. En ocasiones, tam-
ción de la presión venocapilar que a su vez encausa
bién puede auscultarse un intenso IV ruido (figura
a hipertensión arterial pulmonar. En el circuito v e -
42) que domina el cuadro auscultatório.
noso sistémico también aparece una acentuada ele-
vación de la presión condicionada por el impedi- Son síntomas comunes el adelgazamiento, aste-
mento al llenado del ventrículo derecho (Cuadro nia, adinamia y mal estado general c o m o conse-
3 ) . La disminución del volumen diastólico condicio- cuencia del bajo gasto cardiaco crónico y la con-
CUADRO 3
MIOCARDIOPATÍA R E S T R I C T I V A — H A L L A Z G O S H E M O D I N Á M I C O S (mmHg)
AD 15 15
56 ± 16 20 + 4
21 ± 6 14 ± 5
56 ± 16 20 ± 4
56 ± 16 83 ± 29 20 ± 4
AP 31 ± 15 36 ± 8 9 + 5
PCP 28 ± 10 23 ± 4 6 ± 4
S 118 ± 19 114 ± 3 104 ± 4
VI 19 + 5 13 ± 6 0
- A A 28 ± 8 22 ± 7 7 ± 3
A D = a u r í c u l a d e r e c h a , V D = ventrículo d e r e c h o , A P = arteria p u l m o n a r , P C P =
presión venocapilar pulmonar, VI = ventrículo izquierdo, S = sistólica, d , = diastólica 1,
d = diastólica 2
Ir-
2
952
MIOCARDIOPATÍAS
953
CARDIOLOGÍA
La dilatación de la aurícula izquierda es hallazgo los cambios hemodinámicos que se suceden den-
característico e n el ecocardiograma modo M de este tro de las cavidades ventriculares se traduzcan en
tipo de miocardiopatías. los cambios del movimiento septal a través del
ciclo cardiaco; así, después de la contracción au-
2. Ecograma mitral (figura 45) ricular derecha el septum mueve hacia atrás, lo
cual es seguido de un movimiento hacia adelante
C u a n d o la restricción v e n t r i c u l a r es m u y a c e n -
que es condicionado por la contracción auricular
t u a d a , el ecograma mitral refleja los cambios he-
izquierda (figura 47-B). La semiología del movi-
m o d i n á m i c o s q u e se s u c e d e n e n el v e n t r í c u l o
miento septal ayuda grandemente ai diagnóstico
i z q u i e r d o ; así, la presión al inicio de la diástole
diferencial entre la miocardiopatía restrictiva si-
( D , ) mucho menor, permite una apertura valvular
métrica y la pericarditis constrictiva cuando se
m a y o r mientras que la gran e l e v a c i ó n d e la pre-
busca intencionalmente.
sión intracavitaria al final d e la diástole ( D , ) , pro-
v o c a una apertura valvular m u y limitada e n este
momento. La morfología del ecograma mitral ayu- Ecocardiograma b i d i m e n s i o n a l
d a a establecer e l diagnóstico d i f e r e n c i a l c o n El ecocardiograma bidimensional puede demos-
relación de la presión telediastólica del ventrículo trar una rcflcctancia particularmente aumentada
i z q u i e r d o por insuficiencia cardiaca e n donde la d e las paredes ventriculares c u a n d o el miocardio
m u e s c a " B " del ecograma mitral y el alargamien- está infiltrado por amiloide (figura 48).
to d e l intervalo A - C , son las características d e Asimismo, este estudio es de mayor sensibilidad
ésta (ver capítulo de E C O C A R D I O G R A F Í A para demostrar el engrosamiento de las paredes ven-
M O D O M). triculares del miocardio infiltrado, pero quizás es el
signo más útil para el diagnóstico apical de cuatro
3. Semiología del movimiento septal cámaras al demostrar las dimensiones normales o
(figura 47) reducidas de las cavidades ventriculares que con-
trastan con la enorme dilatación de las cavidades
a) Miocardiopatía restrictiva simétrica
auriculares (figuras 46 y 49).
En esta entidad el septum interventricuiar parti-
El derrame pericárdico es un hallazgo frecuente
cipa por igual que las paredes ventriculares de
como consecuencia de la hipertensión venosa sistémica.
la infiltración y rigidez miocárdica, de tal forma
que el movimiento septal está escasamente in-
f l u i d o p o r los e v e n t o s h e m o d i n á m i c o s Ecocardiografía D o p p l e r (figura 50)
intracavitarios (figura 47-A). Cuando se estudia el flujo en la vía de entrada de las
cavidades ventriculares se puede apreciar cómo la
b) Pericarditis constrictiva velocidad del flujo es mayor al principio d e diástole
Dado que la coraza pericárdica aprisiona las pa- (punto E) (cuando la presión intraventricular se en-
redes ventriculares, el septum interventricuiar es cuentra menos elevada), y se reduce drásticamente
la única pared no constreñida; ello favorece que al final de la misma (punto A), debido a que la presión
954
MIOCARDIOPATÍAS
Gammagrama cardiaco
La captación de ácido propano dicarboxllico-1-2,
difosfato - 3 - 3, marcado con 99 mTc (99mTc-
D P D ) . Por el corazón permite reconocer la
presencia de amiloidosis por inmunoglobulinas de
cadenas ligeras (amiloidosis familiar) y la
relacionada con transtiretina (amiloidosis cardiaca
senil) (figura 51).
Cateterismo cardiaco
a) Registro de presiones
956
MIOCARDIOPATÍAS
vm* 1
* *• v
¿4» j y i S » ^ P P
- 4 ™
FIGURA 47 Ecocardiograma modo M. En la miocardiopatía restrictiva simétrica (A), las cavidades ventri-
culares (VD y VI) tienen dimensiones normales y lo mismo sucede en la pericarditis constrictiva (B). Dado
que el septum interventricuiar (S) es la única pared libre en la constricción pericárdica, muestra un doble
desplazamiento como consecuencia de la contracción auricular; el primero hacia atrás 1 I como conse-
cuencia de la contración auricular derecha, y el segundo hacia adelante (t) después de la " q " del ECG
(línea obscura) como consecuencia de la contracción auricular izquierda. Este comportamiento no se
observa en el septum infiltrado de la miocardiopatía restrictiva (A)
CUADRO CLN
ÍC
IO
vación de la presión capilar primero, y de la arteria
pulmonar después; la hipertensión pulmonar i m -
portante (Cuadro 3) causa hipertrofia primero y
dilatación poco después del ventrículo derecho, el Estos pacientes están importantemente incapacita-
cual c l a u d i c a s i e n d o la causa d e insuficiencia dos por la disnea que es la traducción d e la hiper-
tricuspídea funcional por dilatación del anillo tri- tensión venocapilar imperante; asimismo, presen-
cuspídeo (figura 54) y de hipertensión venosa tan m a n i f e s t a c i o n e s d e i n s u f i c i e n c i a c a r d i a c a
sistémica por falla ventricular derecha. congestiva (ingurgitación yugular, hepatomegalia
congestiva, hepatalgia de esfuerzo, edemas, ascitis y
mi*-
frecuentemente orienta e n forma errónea hacia la
valvulopatía reumática por los datos anotados. El ata-
que al estado general es acompañante c o m ú n del
cuadro clínico.
FIGURA 50 Miocardio-
patía restrictiva. Ecocar-
diografía Doppler. El re-
gistro del flujo en la vía
de entrada del ventrícu-
lo izquierdo demuestra
cómo la velocidad del
flujo es mucho mayor al
principio de la diástole
(E) (cuando la presión in-
terventricuiar es más
baja) que al final de la
misma (por la gran ele-
vación de la presión in-
tracavitaria) en donde la
velocidad del flujo es sig-
nificativamente menor
(A). (Nótese la rapidez de
la fase de desacelera-
ción, lo cual traduce la ri-
gidez ventricular
959
CARDIOLOGÍA
FIGURA 51 Gammagrama cardiaco cpm 99M TC-DPD. A) Gammagrama cardiaco negativo (ausen-
cia de captación del radioisótopo). B) Gammagrama cardiaco que capta el radioisótopo y pone en
evidencia el diagnóstico de amiloidosis cardiaca. Tomado Perigini y col./Am Coll Cardiol. 2005;46:1076-1084.
Con autorización
FIGURA 52 Miocardio-
patía restrictiva simétri-
ca. El cateterismo car-
diaco con registro
simultáneo de presiones
intraventriculares (VI y
VD) revela imagen de
2
raíz cuadrada en la cur-
2
va diastólica de ambos
registros (restricción si-
métrica). Nótese que los
niveles de presión son
distintos en ambos ven-
trículos, lo cual diferen-
cia a esta miocardiopa-
tía de la c o n s t r i c c i ó n
pericárdica en donde el
impedimento al llenado
diastólico es similar para
ambas cavidades. (Corte-
sía del Dr. Jorge Gaspar)
FIGURA 54 Miocar-
diopatía restrictiva
B. El fonocardiogra-
ma en el ápex de-
muestra la presen-
c i a de un soplo
sistólico regurgitan-
te de origen tricus-
pídeo (nótese como
sobrepasa el Ha y
termina en el llp),
que generalmente
se confunde con so-
plos de origen
mitral por su locali-
zación
r~
H\—INR
lir—f--
i 3 mm en D l l , + +-
en VI y + + + - e n V 2
con aP a +60° y qR
en VI). Bloqueo de
ü liijiTJi
rama d e r e c h a del
haz de His con hi-
pertrofia del ven-
trículo derecho (ín-
dice de Lewis de -19
mm; R alta de V3 a
V5 y R alta en aVR)
con dilatación del
1\ • •:. ; mismo (transición
en V5/. Nótese la
normalidad de la ac-
tivación del ventrícu-
lo izquierdo en V6
962
MIOCARDIOPATÍAS
4 963
CARDIOLOGÍA
•M
ello condiciona una exagerada elevación de la pre- pulmonar y por ende una disminución en la pre-
sión diastólica del ventrículo derecho y de la aurícula sión pulmonar; hecho que trata de contrarrestarse
derecha; asimismo, aparece hipertensión en todo por la enérgica contracción de la cámara de salida
el territorio venoso sistémico. de dicho ventrículo y del septum interventricuiar,
El impedimento al llenado diastólico ocasiona- por lo tanto, las presiones de llenado y el gasto de
do en la cámara de entrada ventricular derecha las cavidades izquierdas se encuentran reducidos
tiene por consecuencia una reducción del gasto (Cuadro 3).
MIOCARDIOPATÍAS
Electrocardiograma
ción auricular.
derecha, al ventrículo derecho y al tronco de la ar-
teria pulmonar. La levo fase del disparo en el tron-
co pulmonar demuestra la dilatación de la aurícula Radiografía d e tórax
izquierda (Al) y la obliteración del ventrículo izquier-
do por trombos endotelizados. Nótese la irregula- El estudio radiográfico revela c a r d i o m e g a l i a i m -
ridad de los bordes endocárdicos del ápex portante q u e contrasta c o n f r a n c o s signos d e
hipoflujo p u l m o n a r (figura 63). Los datos e l e c -
CUADRO CLN
ÍC
IO
trocardiográficos previamente referidos aunados
a estas manifestaciones radiológicas son los q u e
h a c e n a este p a d e c i m i e n t o c l í n i c a m e n t e similar
El cuadro clínico que caracteriza a dicha entidad se a la a n o m a l í a de Ebstein. La c a r d i o m e g a l i a se
manifiesta por la presencia de hipertensión venosa d e b e al desmesurado c r e c i m i e n t o de la a u r í c u l a
sistémica intratable (ingurgitación yugular, d e r e c h a y c á m a r a de salida d e l v e n t r í c u l o dere-
hepatomegalia congestiva, ascitis recidivante, ede- cho (figura 64).
, íl 965
CARDIOLOGÍA
966
MIOCARDIOPATÍAS
F I G U R A 64 Miocadiopatía
restrictiva tipo C. El estudio
angiocardiográfico demuestra
la gran d i l a t a c i ó n de la
aurícula derecha (AD) y del
anillo tricuspídeo (T); se ob-
serva la obliteración de la re-
gión apical de lá cámara de
entrada (CE) que contrasta
con la importante dilatación
de la c á m a r a de s a l i d a
ventricular derecha (CSVD).
(A), la cual realiza una enér-
gica contracción en sístole (B).
(Cortesía del Dr. Jorge Gaspar)
trículo d e r e c h o , la dilatación d e su c á m a r a de
salida, que mostrará asimismo, una contracción
enérgica; la dilatación del anillo tricuspídeo y,
por f i n , la enorme dilatación de la aurícula de-
recha (figura 6 3 ) .
c) Biopsia
La biopsia endomiocárdica es de gran utilidad
diagnóstica.
PRONÓSTICO Y TRATAMIENTO
967
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 69 Cateterismo
cardiaco. El registro simul-
táneo de presiones en am-
bos ventrículos (VD y VI)
revela la curva de impedi-
mento al llenado diastólico
(dip y plateau) sólo en el
ventrículo derecho lo cual
contrasta con la normalidad
de la curva ¡ntraventricuiar
izquierda. (Cortesía del Dr. Jor-
ge Gaspar)
FIGURA 70 Pulsoparajójico de
Kussmaul. La restricción locali-
zada al ventrículo derecho (tipo
C) también puede ser causa de
pulso paradójico de Kussmaul.
(Cortesía del Dr. Jorge Gaspar)
969
CARDIOLOGÍA
CUADRO 4
TRATAMIENTO Q U I R Ú R G I C O D E LA FIBROSIS E N D O M I O C Á R D I C A
Lepley (1974) 1 0 0 1 0
Laing (1977) 1 0 0 1 0
Dubost (1977) 20 5 9 6 3 (15 %)
Hess (1978) 4 1 3 0 0
Cachera (1980) 6 0 3 3 1 (16%)
Cherian (1983) 6 0 0 6 2 (32 %)
Moraes (1983) 30 13 3 14 6 (20 %)
Valiathan (1983) 17 2 5 10 5 (29 %)
Metras (1984) 55 20 18 17 9(16%)
Martínez (1989) 15 6 3 6 3 (20 %)
Almeida (1990) 9 7 2 0 ñ
u
Total 164 54 46 64 29(17.7%)
I
I
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L
as neoplasias que afectan primariamente al CUADRO I
corazón son muy raras ( 0 . 0 2 % ) en grandes F R E C U E N C I A RELATIVA D E L O S T U M O R E S
serles de autopsia y más del 7 5 % de ellas son CARDIACOS PRIMARIOS EN A D U L T O S
benignas; la invasión metastásica del corazón apa-
TIPO %
rece c o n mayor frecuencia, siendo los principales BENIGNOS
tumores el de pulmón, m a m a , riñon y los linfomas. Mixoma 46
(Tablal). Lipoma 21
Fibroelastoma papilar 16
La importancia en el reconocimiento d e los tu- Rabdomioma 2
mores cardiacos, estriba e n la eventual posibilidad r-l_
3
de ofrecer una terapéutica quirúrgica c o n la extir- Fibroma
Hemangioma
5
pación del tumor lo cual se practica con éxito en un Teratoma 1
importante número d e casos e n la actualidad. MAUCNOS
C u a n d o las neoplasias no son malignas, como Angiosarcoma 33
sucede con el mixoma, el tratamiento, y a sea cura- Rabdomiosarcorna 21
Fibrosarcoma 11
tivo o paliativo es posible gracias a la posibilidad de Mesotelioma 16
demostrar el diagnóstico en vida con las modernas y Linfoma 6
avanzadas técnicas de imagen cardiovascular, tales Leiomiosarcoma 1
como la ecocardiografía, la tomografía computada o De Allard MF, Taylor GP, Wilson |E, McManus BM: "Primary
la resonancia magnética nuclear. Cardiac Tumors", en Goldhaber S, Braunwald E (eds): Alias
of Heart Díseases. Filadellia, Currenl Medicine, 1993; pags
En el corazón pueden originarse tumoraciones de 15.1-15.22.
la estirpe de los fibromas, hamartomas o rabdomiomas.
Todas estas tumoraciones se presentan predominan-
temente en niños menores de 10 años (los dos pri-
meros), y menores de un año los últimos. Cuando cualquiera de ellos involucra al nodo
Los rabdomiomas están frecuentemente asocia- AV (principalmente angiomas y mesoteliomas), pue-
dos a esclerosis tuberosa (un 3 0 % d e los pacientes den llegar a condicionar trastornos de la conduc-
lo presentan). Los rabdomiomas generalmente son ción A V que son causa de bloqueo AV, asistolia o
múltiples y crecen e n los ventrículos y c u a n d o son muerte súbita; asimismo, su localización auricular
de tamaño considerable, pueden causar obstruc- puede ser causa de extrasistolia, taquicardia o
ción al llenado ventricular, hipertensión venosa, fibrilación de estas estructuras y lo mismo sucede
cardiomegalia, cuadro que los lleva a la muerte. cuando emergen del miocardio ventricular.
CARDIOLOGÍA
Se han informado casos de taquicardia ventricu- confiere una apariciencia de "cuerpo de avispa" al
lar incesante que sólo ha desaparecido con la extir- septum interauricular (figura 1). Esta entidad no es
pación quirúrgica del tumor. una verdadera neoplasia, pero su presentación en
Por otro lado, los lipomas son tumores general- clínica es relativamente frecuente, constituyendo
mente sésiles o polipoides que pueden emerger una causa muy común de fibrilación auricular a i s l a -
del endocardio o epicardio, aun cuando algunos de d a - , q u e hasta antes d e l a d v e n i m i e n t o d e la
ellos son completamente ¡ntramurales. ecocardiografía bidimensional no se reconocía e n
Dependiendo de su tamaño son los síntomas que vida. Precisamente la aproximación subcostal del
pueden causar; así, los subendocárdicos si son gran- ecocardiograma (figura 1) y la tomografía axial com-
des, causarán obstrucción al llenado o al vaciado del putada (figura 2), nos permiten e n la actualidad rea-
corazón, mientras que los subepicárdicos serán la lizar el diagnóstico en vida de estos pacientes.
causa de compresión cardiaca y derrame pericárdico. Los tumores papilares de las válvulas atrioventri-
Aquellos tumores intramiocárdicos podrán ser cau- culares son otra dase de tumoraciones benignas que
sa d e t r a s t o r n o s d e la c o n d u c c i ó n A V o nacen en las superficies auriculares d e las válvulas
intraventricular, dependiendo de su localización. alrioventriculares y e n las superficies ventriculares
C u a n d o el fibroma se localiza e n la cavidad de las valvas sigmoideas, tienen de 2 a 4 c m de
ventricular y produce obstrucción, debe resecarse diámetro, generalmente no producen síntomas y no
quirúrgicamente. En aquellos imposibles de extir- se ha demostrado que dichas tumoraciones tengan
par por su magnitud o localización se practica el implicaciones de gravedad o mortalidad en los pa-
trasplante cardíaco c o n é x i t o . M u c h a s de estas cientes que la padecen. Se pueden reconocer con
neoplasias pasan inadvertidas e n vida y algunas otras relativa facilidad mediante ecocardiografía
se e n c u e n t r a n s o r p r e s i v a m e n t e e n e s l u d i o s bidimensional (figura 3).
radiológicos, ecocardiográficos o tomográficos rea- El quiste pericárdico es también una condición
lizados por otras razones. que se manifiesta c o m o cardiomegalia radiológica
En este espacio bien vale la pena mencionar la con deformación o sin ésla, de la silueta cardiaca
hipertrofia lipomatosa del septum interauricular (figura 4-A). La tomografía axial computada y la
más acertadamente d e n o m i n a d a infiltración resonancia magnética de corazón permiten el diag-
lipomatosa, la cual se caracteriza por la presencia nóstico de este proceso, al demostrar la presencia
de células grasas (adipositos), que e n gran cantidad de una lumoración llena de líquido localizada den-
se a c u m u l a n e n e l s e p l u m p r i m u m y s e p t u m tro de la silueta cardiaca (figura 4-B), generalmen-
s e c u n d u m , respetando el foramen ovale, lo cual le te el quiste pericárdico no causa síntomas y la evolu-
974
TUMORES DEL CORAZÓN
CUADRO 2 2. Embólicas:
ENTIDADES QUE SE CONFUNDEN A El desprendimiento d e porciones de tumor, cul-
M E N U D O C O N MIXOMAS AURICULARES mina con embolias sistémicas, que pueden afec-
tar los más diversos territorios: cerebral, gan-
Aurícula izquierda grena d e la nariz, o d e algunos d e los dedos,
Valvulopatía mitral reumática ( E M , IM) insuficiencia arterial periférica de los miembros
Hipertensión pulmonar (primaria o secundaria inferiores, etc. Más aún si además se eleva la
a valvulopatía mitral o ICC) V S C , la ¡nmunoglobulina C (IgC), y en contadas
Enfermedad vascular cerebral ocasiones la IgA; se han informado casos en los
Endocarditis q u e el mixoma se asocia a mieloma múltiple,
Fiebre reumática fibroadenomas mamarios, f e n ó m e n o de
MiocarditisVasculitis Raynaud e hipocratismo digital, se ha encontra-
do un subgrupo de pacientes con mixoma que
Aurícula derecha se asocia a lesiones cutáneas pigmentadas y
Valvulopatía tricuspídea reumática (ET, IT) neoplasias endocrinas, cuya e d a d d e aparición
Anomalía de Ebstein es m e n o r y t i e n e u n a alta f r e c u e n c i a d e
Embolias pulmonares recurrencia en tumores múltiples así c o m o una
Pericarditis constrictiva marcada tendencia familiar.
Enfermedad carcinoide
E X P L O R A C I O N FISICA
1. Obstructivas:
C u a n d o el tumor obstruye la válvula mitral, el La auscultación del ápex puede revelar soplos de
cuadro clínico puede estar constituido por la insuficiencia mitral, o bien, "chasquidos de apertu-
súbita instalación de un edema agudo pulmonar, ra", que realmente es un "golpe d e tumor", al po-
síncope o convulsiones (isquemia cerebral), nerse en tensión e n la protodiástole, seguido de un
hipotensión arterial o estado de choque (bajo retumbo; por esta razón, la simple auscultación fá-
gasto cardiaco). cilmente se confunde con estenosis mitral. Una ca-
Si la obstrucción es intermitente, el paciente racterística clínica importante para sospechar el diag-
puede llegar al médico refiriendo disnea de de- n ó s t i c o c o n la e x p l o r a c i ó n f í s i c a es q u e los
cúbito, que mejora al sentarse (efecto de vaivén fenómenos soplantes pueden cambiar radicalmen-
del tumor c o n oclusión parcial del flujo d e las te con la variación d e posición; así, la aparición de
venas pulmonares). fenómenos auscultatorios de doble lesión mitral con
976
TUMORES DEL CORAZÓN
el ortostatismo que desaparecen c o n el decúbito, pe de tumor" producido por el choque del mis-
deben sugerir m i x o m a . mo con la pared auricular izquierda, durante el
Por otro lado, vale la pena recordar que debido principio de la sístole.
a la variabilidad con que el tumor se desplaza en su
movimiento intermitente, los signos auscultatorios, b) Soplo sistólico. No es un componente obligado
también pueden ser muy variables en diferentes de la exploración, pero puede hacerse evidente
momentos d e la exploración física. cuando el tumor interfiere con el cierre valvular
mitral, lo cual d a la impresión acústica de doble
Fonomecanocardiograma (figura 7). lesión mitral.
FIGURA 3 Tumor papilar de la válvula mitral. Ecocardiograma bidimensional. A: El eje largo paraester-
nal demuestra tumoración adosada a la cara auricular de la válvula mitral. 6: La aproximación apical
de cuatro cámaras también muestra la tumoración.(Cortesía del Dr. David Huerta)
977
CARDIOLOGÍA
"1
de apertura mitral y que corresponde a la pene- En efecto, este registro demuestra nítidamente
tración del tumor hacia la cavidad ventricular. la penetración de la masa tumoral a través de la
válvula mitral hacia la cavidad ventricular izquier-
d) Retumbo y soplo presistólico. La penetración d a . Característicamente se observa un c ú m u l o de
del tumor a la cavidad ventricular a través de la ecos anormales q u e o c u p a n el espacio diastólico
válvula mitral, obstruye el flujo sanguíneo y gene- d e la válvula mitral, dejando un espacio limpio
ra un retumbo. N o es raro que además se registre entre el e c o valvular y el tumoral, al principio de la
un soplo presistólico o un IV ruido izquierdo. misma diástole.
El ecocardiograma bidimensional brinda una
imagen topográfica del tumor y su movimiento a
£COC4/cD/OG«4/vfA (FIGURA 8) través del ciclo cardiaco (figura 9 y 10). Los mixomas
La imagen ecocardiográfica es típica del de la aurícula izquierda se han clasificado de acuer-
p a d e c i m i e n t o , tanto q u e e n la a c t u a l i d a d se do c o n su aspecto en la ecocardiografía e n : clase I,
considera que este estudio es el más adecuado son tumores pequeños que prolapsan a través de la
para establecer el diagnóstico de certeza. válvula mitral; clase II, son tumores pequeños y que
TUMORES DEL CORAZÓN
V• ' 'i
FIGURA 8 Mixoma de la
aurícula izquierda. Obsér-
vese la ocupación del es-
pacio diastólico de la vál-
vula mitral por ecos
anormales que represen-
tan la penetración del
mixoma (M) en el orificio
mitral en el momento de
la apertura valvular. Carac-
terísticamente al principio
del movimiento diastólico
hay un espacio libre de
ecos. (Cortesía del Dr. Adolfo
• Vera.-Cali, Colombia)
no prolapsan; clase l l l , son tumores grandes y que posterior de la aurícula. En algunos mixomas auricu-
prolapsan; y clase IV, son tumores grandes y que no lares, se pueden ver zonas ecolúcidas dentro de la
prolapsan. masa del tumor, lo que correspondería a zonas
Por otro lado, la ecocardiografía bidimensional hemorrágicas en el interior del tumor.
puede ayudar a diferenciar entre trombos de la Las ventajas potenciales de la ecocardiografía tran-
aurícula izquierda y mixomas, ya que los primeros sesofágica i n c l u y e n u n a mejor r e s o l u c i ó n d e l
tienen un aspecto característico en capas y se sitúan tumor y de su implantación.
generalmente en la porción posterior de la aurícula, Recientemente el ecocardiograma tridimensio-
mientras que los últimos tienen un aspecto a menu- nal " 3 D " ha sido usado para una mayor caracteriza-
do abigarrado y rara vez se sitúan en la porción ción de los mixomas auriculares, siendo la princi-
CARDIOLOGÍA
•M.
FIGURA 10 Mixoma de la
aurícula izquierda. Eco-
cardiograma bidimensio-
nal. La a p r o x i m a c i ó n
apical de cuatro cámaras
demuestra la presencia
de un enorme tumor
mixomatoso cuyo pedícu-
lo nace en el s e p t u m
intrauricular. Durante la
diástole penetra a la ca-
vidad ventricular izquier-
da a través de la válvula
mitral
pal ventaja de esta modalidad la mejor apreciación secundaria y del tamaño de las cavidades cardiacas
c u a n d o s e observa e n formato cine movimiento q u e la ecocardiografía b i d i m e n s i o n a l . El realce
c o n contraste utilizando gadolinio y la adquisi-
" 4 D " (figura 11).
c i ó n d e i m á g e n e s m u l t i c o r t e e n los p l a n o s
transaxial, sagital y en los ejes largos pueden apor-
TOMOGRAFÍA COMPUTADA E IMAGEN DE tar información tridimensional precisa. La R M tam-
RESONANCIA MAGNÉTICA NUCLEAR bién aporta información a c e r c a de la composi-
La tomografía a x i a l c o m p u t a d a d e l corazón t a m - ción d e los tejidos que pueden ayudar a diferenciar
bién nos puede ofrecer imágenes suficientes para tumores de trombos.
establecer el diagnóstico incontrovertible d e mixo-
m a auricular (figura 12), y algo similar ocurre c o n Estudio angiográfico
la imagen de resonancia magnética nuclear (figu- La aurícula izquierda es la cavidad cardiaca más difícil
ra 13), y a q u e brinda u n a mejor d e f i n i c i ó n d e l de abordar mediante el estudio angiográfico. Puede
prolapso de los tumores, de la obstrucción valvular llegarse a ella a través d e cateterismo transeptal; sin
980
TUMORES DEL CORAZÓN
FIGURA 11 "ECO 3 D " A: muestran en el eje largo del ventrículo izquierdo un mixoma que prolapsa a
través de la válvula mitral. B: el cual muestra la presencia de un mixoma auricular izquierdo y otro a
nivel de la vía de salida del ventrículo izquierdo (cortesía Dra. Clara Vázquez Antona)
LABORATORIO
La actividad tumoral produce anemia normocítica Electrocardiograma
normocrómica, en ocasiones puede producir El trazo electrocardiográfico se altera en forma
anemia hemolítica, leucocitosis, aceleración de la inespecífica con este padecimiento. Desde luego,
sedimentación globular e hiperglobulinemia, así puede haber signos de crecimiento auricular izquier-
c o m o t r o m b o c i t o p e n i a . Estas a l t e r a c i o n e s d o ; pueden aparecer arritmias auriculares paroxís-
desaparecen c o n la extirpación del tumor. licas y en casos aislados se han descrito bloqueos de
CARDIOLOGÍA
Radiografía de tórax
También demuestra signos inespecíficos. Si el t u -
mor produce obstrucción de consideración en el
orificio mitral, habrá hipertensión venocapilar y hasta
edema pulmonar. U n signo que pudiera llegar a ser
de gran valor es la calcificación del tumor que oca-
sionalmente puede verse e n una radiografía técni-
camente satisfactoria, lo cual sí es de gran ayuda
para la búsqueda del diagnóstico.
TRATAMIENTO
El mixoma debe ser extirpado quirúrgicamente
mediante visión directa, utilizando circulación
extracorpórea a la mayor brevedad posible antes de
que aparezca cualquiera de las complicaciones
mortales del tumor.
Múltiples trabajos han documentado curaciones
completas de mixomas de la aurícula izquierda y
derecha con periodos de seguimiento de entre 10 y
15 años. En el 1 al 5 % de los casos, se han descrito
recurrencias d e un segundo mixoma tras la resec-
ción del mixoma inicial. Las posibles causas del se-
FIGURA 13 Mixoma de la aurícula izquierda. Es- gundo tumor incluyen la resección incompleta del
tudio angiográfico. Levofase de angiografía pul- tumor original con nuevo crecimiento; crecimiento
monar en posición lateral izquierda. Obsérvese
desde un segundo foco " p r e t u m o r a l " , es decir
el defecto de llenado en la aurícula izquierda
producido por el mixoma (flechas).(Cortesía del Dr. metasíncrono; o implantación intracardíaca desde
Efrén Gutiérrez Fúster) el tumor original. Debido a las dos primeras posibi-
lidades, algunos cirujanos han apoyado la resección
del área completa de la fosa oval con la reparación
posterior de la comunicación interauricular resul-
rama y alteraciones del segmento S T que pueden
tante para poder desalojar concentraciones proba-
simular isquemia miocárdica.
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TUMORES DEL CORAZÓN
nrauciar xnrauoxot
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1
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KCO THICUSPIDEO
FIGURA 15 Mixoma de la aurícula derecha. Maniobra de Rivero Carvallo. A la izquierda se registra el
retumbo tricuspídeo en apnea post-espiratoria. A la derecha la apnea post-inspiratoria se traduce en un
franco incremento del fenómeno auscultatorio
blemente altas de células pretumorales que se cree ricular izquierdo que frecuentemente pueden su-
que pueden estar localizadas en esta zona. También gerir enfermedad d e la colágena (especialmente
se ha sugerido como medio para erradicar células lupus y periarteritis nodosa); pero además la hiper-
pretumorales sin necesidad de crear una comunica- tensión auricular derecha e n ocasiones favorece cor-
ción interauricular la fotocoagulación con láser de tocircuitos venoarteriales a nivel auricular (a través
zonas de 1 cm alrededor del punto de implantación d e l foramen ovale) y ello a su vez es causa de hi-
del pedículo. p o x e m i a , cianosis, policitemia y en ocasiones
Hoy se cree que aproximadamente e l 7% de hipocratismo digital.
pacientes c o n 1 i historia familiar d e mixomas car- En otras ocasiones, la policitemia se debe a la
díacos, 21 características del complejo de lentiginosis producción d e eritropoyetina por el propio mixo-
y otras anormalidades o 3) aparición sincrónica de ma. Las complicaciones emboticas se localizan en el
tumores (es decir, numerosos tumores e n el mo- pulmón y pueden ser confundidas con metástasis,
mento d e presentación), la probabilidad de que un tuberculosis, micosis pulmonares o tromboémbolos
segundo tumor se presente en algún momento fu- sanguíneos provenientes de lechos venosos.
turo es del 12 % al 2 2 % , en comparación con aproxi- Las complicaciones obstructivas producen hi-
madamente el 1 % e n pacientes con mixomas auri- pertensión v e n o s a s i s t é m i c a ( p l é t o r a yugular,
culares esporádicos. Por lo anterior se recomienda h e p a t o m e g a l i a c o n g e s t i v a , ascitis, e d e m a de
un seguimiento ecocardiográfico cuidadoso para miembros inferiores, e t c . a c o m p a ñ a d a s de bajo
detectar tumores metasíncronos e n todos los pa- gasto c a r d i a c o ) , por lo que el cuadro clínico se-
cientes tras la resección d e un m i x o m a . meja insuficiencia cardiaca derecha o pericarditis
constrictiva.
Se han informado casos en los que se produce
MIXOMA DE AURÍCULA DERECHA síndrome de vena cava superior con edema facial,
turgencia de las venas de la cara, edema de miem-
El mixoma de la aurícula derecha es menos fre- bros superiores y en ocasiones cianosis de ¡as mis-
cuente que el de la aurícula izquierda (15 al 18% de mas regiones; este tumor p u e d e ser causa de
los casos), puede producir las mismas manifestacio- sincope, especialmente en relación con los cam-
nes sistémicas que las referidas para el mixoma au- bios de posición.
4¡*B
CARDIOLOGÍA
FIGURA 16 Mixo-
ma de la aurícula
derecha. Ecocar-
diograma. Se regis-
tra la válvula tri-
cúspide (VD con la
característica ima-
gen producida por
el mixoma (M). El
barrido hacia la vál-
vula mitral (VM) que
normalmente ocupa
una posición poste-
rior con respecto a la
válvula tricúspide
asegura el origen de-
recho del tumor
mixomatoso
TUMORES DEL CORAZÓN
FIGURA 17 Mixo-
ma de la aurícula
derecha. Ecocardio-
grama. Se registra la
válvula tricuspídea
(VT). Nótese cómo
la diástole es ocu-
pada por ecos anor-
males producidos
por la penetración
del mixoma (M) en
el orificio tricuspí-
deo dejando un es-
pacio libre de ecos
al pricipio de la
diástole
nal. Cuando el tumor es grande y prolapsante, pue- la i n t r o d u c c i ó n del catéter a las c a v i d a d e s dere-
de demostrarse fácilmente mediante las aproxima- c h a s o la i n y e c c i ó n de material de contraste e n
ciones paraesternales e n eje largo del ventrículo la a u r í c u l a d e r e c h a es peligrosa por la posibili-
derecho (figura 19), y eje corto a nivel de los gran- dad d e producir e n c l a v a m i e n t o o fragmentación
des vasos (figura 20), y desde luego mediante aproxi- del t u m o r c o n las consiguientes c o m p l i c a c i o n e s
mación apical de cuatro cámaras (figura 21). En este obstructivas o e m b ó l i c a s d e c o n s e c u e n c i a s ¡m-
estudio puede reconocerse el tamaño, implanta- p r e d e c i b l e s , d e p e n d i e n d o d e la magnitud de la
ción y movilidad del tumor. o b s t r u c c i ó n d e l o r i f i c i o t r i c u s p í d e o o d e las
embolias tumorales al p u l m ó n . En la a c t u a l i d a d ,
el estudio ecocardiográfico es c a p a z de d e m o s -
Angiografía
trar c o n t o d a c e r t e z a e l d i a g n ó s t i c o , r a z ó n por
El disparo de medio d e contraste e n la vena cava
la q u e y a es raro q u e se tenga n e c e s i d a d d e
superior p u e d e revelar e l defecto d e llenado en
r e a l i z a r e s t u d i o a n g i o g r á f i c o para c e r t i f i c a r e l
la c a v i d a d a u r i c u l a r d e r e c h a , p r o d u c i d o por la
diagnóstico.
masa t u m o r a l ; c o n v i e n e llamar la a t e n c i ó n q u e
""'••jl-
CARDIOLOGÍA
FIGURA 19 Gran mixoma de la aurícula derecha. Ecocardiograma bidimensional. (Eje largo del ventrículo
derecho) A: En diástole el enorme tumor mixomatoso (M) penetra en el ventrículo derecho (VD). B:
En sístoíe el tumor (M) se alberga en la aurícula derecha
FIGURA 20 Mixoma de la aurícula derecha. (Eje corto paraesternal). A: En diástole el mixoma (M)
penetra al ventrículo derecho (VD) a través de la válvula tricúspide. B: En sístole el tumor emigra hacia
la cavidad auricular derecha)
TRATAMIENTO CUADRO3
Extirpación quirúrgica d e la neoplasia. Se han des- S I N D R O M E D E CARNEY
crito casos de mixomas implantados en uno u otro
"LAMB" "ÑAME" Otras
ventrículo ( 4 % en el ventrículo d e r e c h o y 4 % e n Asociaciones
el i z q u i e r d o ) , más rara v e z e n estos tumores e n
las dos aurículas pueden implantarse o incluso e n Lentiginosis Nevos Fibroadenoma
las cuatro cavidades cardíacas, c u a n d o aparecen mamario
se d e b e de sospechar síndrome d e C a r n e y (vide Adenoma
infra) (figura 21). Mixoma Mixoma
auricular auricular hipofisiario
4 i H
CARDIOLOGÍA
las suprarrenales y hueso. Generalmente estos t u - temente formas polipoides que ocluyen las válvulas
mores se presentan entre la tercera y quinta déca- cardiacas por lo menos en el 50 % de los casos y que
das d e la vida. f a v o r e c e n su c o n f u s i ó n c o n e l m i x o m a ; los
La forma de presentación más frecuente la cons- fibrosarcomas infiltran extensamente al miocardio y
tituyen las manifestaciones de hipertensión venosa su rápido crecimiento culmina e n extensas zonas d e
sistémica progresiva (edema, hepatomegalia, ascitis, necrosis y hemorragia, que dan lugar a la formación
plétora yugular, derrame pleural y pericárdico). Este de trombos intracavitarios que llegan a ocluir las
cuadro puede acompañarse de trastornos del ritmo venas pulmonares o cavas.
o la conducción AV; en ocasiones puede aparecer Finalmente, el linfoma invade al corazón en
un síndrome de la vena cava superior y no rara vez aproximadamente el 30 % de los casos aun cuando
puede culminar el cuadro con taponamiento cardiaco el linfosarcoma primario del corazón es bastante
o muerte súbita. más raro. La infiltración miocárdica de este tipo de
Los angiosarcomas se originan primordialmente linfoma ha llegado a confundirse con miocardiopatía
en el septum interauricular, en la aurícula derecha y hipertrófica, sin embargo, el melanoma maligno in-
en el pericardio; los rabdomiosarcomas invaden al vade metastásicamente el corazón e n más del 50 %
miocardio en forma difusa, pero adquieren frecuen- d e los casos, el carcinoma d e mama y el pulmón lo
988
TUMORES DEL CORAZÓN
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CARDIOLOGÍA
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o :
i
•
i
•
994
•
El corazón en otros
Capítulo 28 procesos sistémicos
"La capacidad del olvido j el rápido envejecimiento
de ios conocimientos obligan al médico a mantenerse
al día so pena de ir avanzando su ignorancia hasta
ser un peligro social"
Crecimiento del
sistema útero-
placentario
Síntesis de
estrógenos y
progesterona
i
Síntesis de
angiotensinógeno Renina
Angiotensina I
_ Enzima
converlidora
Angiotensina II
Aldosterona
Retención de
H 0 y Na
2
í
•f-VOLUMEN
CIRCULANTE
FIGURA 1
996
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
i
Sistema Fístula arterio-venosa Estrógenos
•
Renina-angiotensina- Prolactina
aldosterona
I Vasodilatación
periférica
Retención de
H 0 y Na + RESISTENCIAS
PERIFÉRICAS
2
Efecto inotrópico
del volumen positivo de los
x DEL GASTO \J estrógenos
Íirculante r CARDIACO ^
FIGURA 2
•
T
t Presión sistólica
Í Presión diastólica
. /
Taquicardia
' de la presión
diferencial V
HIPERCINESIA
CIRCULATORIA
FIGURA 3
997
CARDIOLOGÍA
• Restricción pulmonar.
FATIGA -fe • t del peso del embarazo.
• Hipercinesia circulatoria.
PALPITACIONES
• Taquicardia.
por aldosterona
998
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
HIPERCINESIA
Taquicardia CIRCULATORIA t del llenado
• " ventricular
.1.
Soplos "funcionales"
f de la presión \jr.
diferencial Y lll ruido
i
1. Soplo sistólico pulmonar
2. yugular.
Pulso'saltón 3. Soplo sistólico carotídeo
no patológico.
FIGURA 5
4 999
CARDIOLOGÍA
-fidrmiíoisjum n-j .-n>i;> ¡Sót^B .*Ód' WBtesrí oldíbuA'' IEIUJJI»\' 'jwnov obidmuS
Estenosis mitral (figura 6)
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Antes de escribir los cambios hemodinámicos que
se suscitan en la paciente embarazada con estenosis Si la estenosis es ligera, la enferma p u e d e sólo
mitral, es importante el tener e n mente que los manifestar disnea de esfuerzo, la cual obedece a
síntomas dependen fundamentalmente de la grave- hipertensión venocapilar pulmonar.
dad de la obstrucción al libre flujo de sangre que Se m e n c i o n a q u e c e r c a d e l 2 5 % d e las p a -
pasa hacia el ventrículo izquierdo y así, cuando la cientes c o n estenosis mitral d e s a r r o l l a n sínto-
estenosis es critica (área valvular de 1 c m o menor) 2
mas d e congestión p u l m o n a r d u r a n t e e l e m b a -
la e l e v a c i ó n brusca y sostenida d e la presión r a z o ; g e n e r a l m e n t e e l gasto c a r d í a c o t i e n d e a
intrauricular es la responsable d e los síntomas de e s t a b i l i z a r s e a l r e d e d o r d e la s e m a n a 3 0 , d e c l i -
congestión pulmonar; asimismo, la obstrucción crí- nando incluso (por c o m p r e s i ó n del útero
tica en la vía de entrada es la responsable de la fatiga gestante s o b r e la v e n a c a v a inferior) e n las últi-
extrema (disminución del gasto anterógrado). En la m a s s e m a n a s d e g e s t a c i ó n , lo c u a l h a c e q u e
mujer embarazada, al aumento del volumen circu- m u c h a s pacientes m e j o r e n e x c l u s i v a m e n t e por
lante, la taquicardia y la reducción de las resisten- esta s i t u a c i ó n .
cias periféricas impuestas por la gestación pueden
ser los responsables del deterioro hemodinámico D u r a n t e el trabajo de parto d e n u e v a c u e n t a ,
progresivo, e n presencia de estenosis mitral la taquicardia y el incremento del gasto cardiaco,
(magnifican hemodinámicamente la estenosis). p u e d e n agravar los síntomas d e congestión p u l -
monar. Es muy importante e l tener presente q u e
C o m o q u e d ó descrito, d u r a n t e el e m b a r a z o e n p r e s e n c i a de estenosis mitral grave, el gasto
aumenta hasta e n un 5 0 % el volumen circulante y sistólico se m a n t i e n e e n cierta m e d i d a por la
la frecuencia c a r d i a c a . Si el c o r a z ó n es estructu- elevación d e la presión auricular, por lo que toda
ralmente sano, estos cambios hemodinámicos sólo reducción del retorno venoso especialmente
condicionan aumento del gasto cardiaco y del con- c u a n d o la p a c i e n t e a d o p t a e l d e c ú b i t o dorsal
s u m o d e o x í g e n o ; sin embargo, e n la paciente p u e d e c o n d i c i o n a r m a r e o , hipotensión e inclu-
c o n estenosis mitral, el aumento d e la frecuencia so s í n c o p e .
c a r d i a c a r e d u c e el t i e m p o d e v a c i a m i e n t o a u r i -
cular (llenado diastólico), lo c u a l hace q u e el
m a y o r v o l u m e n c ¡rculante no p u e d a ser e x p u l - TRATAMIENTO
sado c o m p l e t a m e n t e hacia e l ventrículo izquier- En aquellas pacientes c o n estenosis mitral grave y
d o . Este a u m e n t o del v o l u m e n e n la a u r í c u l a iz-
que desean e m b a r a z a r s e , deberá ofrecerse en la
quierda eleva la presión dentro de d i c h a c a v i d a d
medida de lo posible valvuloplastia mitral
la c u a l p e r se se e n c u e n t r a a u m e n t a d a gracias al
percutánea con balón previa al embarazo. Se debe
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
- Disnea V
- Edema - Edemas
pulmonar - Congestión
hepática
- Ascitis
FIGURA 6
tener especial cuidado e n aquellas pacientes que 1. Desaparece la contracción atrial, lo cual re-
no son candidatas a dicho procedimiento. En dichos duce el gasto sistólico.
casos es preferible; si la sintomatología y situación
2. Acorta la duración de la diástole y eleva la
cardiovascular lo permiten, optimizar e l tratamiento
médico para disminuir la frecuencia cardiaca y la presión intrauricular.
presión d e la aurícula izquierda antes d e optar por Evidentemente si la fibrilación auricular no com-
el c a m b i o valvular mitral. promete el gasto cardiaco, el tratamiento de elec-
En el caso de pacientes embarazadas con estenosis ción será la digitalización (digoxina 0 . 5 0 mg/día d u -
mitral se deberá determinar la gravedad de las lesiones rante tres días, dosis d e impregnación) y 0.25 mg/'
valvulares. Actualmente el empleo de la ecocardiografía día como dosis de mantenimiento.
ofrece la mejor opción de control ya que no implica Otra alternativa segura de tratamiento durante
ningún riesgo para el binomio materno-fetal. el embarazo es el empleo de p-bloqueador es para
Si la estenosis mitral es ligera, basta el reposo y control de la frecuencia cardiaca.
la restricción e n la ingesta de sal para mejorar los Si la paciente, a pesar del tratamiento médico
síntomas de congestión pulmonar. En caso de este- persiste c o n fibrilación auricular con frecuencia
nosis mitral moderada o grave con manifestaciones ventricular r á p i d a , o b i e n , a p a r e c e n datos de
de congestión pulmonar, los diuréticos d e asa en hipotensión, estado de choque y/o e d e m a agudo
primera línea y los venodilatadores (nitratos de ac- pulmonar, la conducta apropiada será cardioversion
ción prolongada) y los P-Bloqueadores son los eléctrica, previa administración d e 1 0 , 0 0 0 U de
fármacos de elección. Recordar que la paciente con heparina por vía endovenosa, lo cual previene la
estenosis mitral puede caer en fibrilación auricular, posibilidad de embolia sistémica.
lo cual puede agravar ios síntomas de congestión y Si la paciente es fibrilante crónica es indispensa-
fatiga por dos mecanismos a saber: ble la administración de anticoagulantes. Por el riesgo
1001
CARDIOLOGÍA
mas de congestión pulmonar son raros durante el permite al ventrículo izquierdo irse adaptando pro-
embarazo y así sólo es c o m ú n observar d e p e n - gresivamente (a mayor estiramiento diastólico m a -
diendo d e la gravedad de la obstrucción, fatiga, yor fuerza de contracción) sin necesidad d e elevar
angor y síncope. su presión.
En relación al tratamiento, en las pacientes con
estenosis ligera la conducta adecuada será sólo la
vigilancia médica periódica; sin embargo, e n los PRÓTESIS CARDIACA Y EMBARAZO
casos más graves es necesario evitar a toda costa la
caída del gasto cardiaco, para lo cual hay que res- C o n e l a d v e n i m i e n t o d e las prótesis cardiacas h a
tringir la actividad física y evitar al m á x i m o la sido posible tratar q u i r ú r g i c a m e n t e todas las
hipovolemia (por ejemplo, durante la operación valvulopatías en el adulto que no p u e d e n ser co-
cesárea o el trabajo de parto) y los cambios bruscos rregidas por técnicas conservadoras. Las prótesis
de posición. biológicas tienen la gran ventaja de no requerir el
Recordar que la tasa d e mortalidad en este gru- uso de anticoagulantes, pero su mayor desventaja
po de enfermas es hasta del 1 7 % y se aproxima al es su poca durabilidad (entre 5 y 1 0 años después
4 0 % cuando se interrumpe el embarazo, tal vez de implantadas); por otro lado, las prótesis m e c á -
porque tiende a ocurrir hipovolemia en asociación nicas tienen la ventaja sobre las prótesis biológi-
con el procedimiento. En aquellos casos refracta- cas d e su mayor durabilidad; sin embargo, su des-
rios a tratamiento médico o con sintomatología grave ventaja principal es la alta posibilidad de trombosis
se debe considerar la valvuloplastia c o n balón ya protésica y muerte de la paciente o la d e apari-
que se ha asociado c o n una menor incidencia de c i ó n d e procesos embólicos, especialmente c e -
perdida fetal en comparación c o n la cirugía. rebrales que pueden dejar secuelas incapacitantes
e n los pacientes a quienes se les ha implantado;
por lo tanto, es absolutamente indispensable la
•
administración de anticoagulación c r ó n i c a para
INSUFICIENCIA AÓRTICA
asegurar el buen funcionamiento protésico y c o n
ello la sobrevida del paciente y su calidad de v i d a .
Lo mismo que para la insuficiencia mitral, la insu-
ficiencia aórtica suele tolerarse bien durante el Cuando una mujer se encuentra e n e d a d fértil y
embarazo, c o n base e n que este tipo d e valvulopa- requiere tratamiento quirúrgico sobre una o varias
tía produce una sobrecarga volumétrica, lo cual válvulas cardiacas se intentará a como dé lugar, reali-
I
AÓRTICA
t Gradiente
transaórtico,
4 i()(i:¡
CARDIOLOGÍA
zar una intervención conservadora (plastia valvular), como tratamiento de primera elección si no existen
c o n el objeto d e permitir una mayor sobrevida y la contraindicaciones. Si bien el embarazo se consi-
posibilidad d e embarazo. dera como una contraindicación relativa para el tra-
C u a n d o no es posible realizar una operación tamiento trombolítico existen varios informes en los
plástica, la lesión d e b e r á ser r e p a r a d a m e d i a n t e que se ha utilizado por diversas indicaciones en
la sustitución protésica y se preferirá una prótesis mujeres embarazadas c o n resultados favorables en
biológica para permitir un eventual e m b a r a z o , a la mayoría d e los casos. A u n q u e también se ha re-
sabiendas d e q u e e n un futuro p r ó x i m o , se re- portado falla del tratamiento, hemorragia e incluso
querirá una nueva intervención quirúrgica y sólo muerte en algunos casos.
q u e la paciente no acepte esta proposición o q u e C u a n d o el trombo es pequeño y no obstructivo
por cualquier otro motivo no sea posible sustituir se puede utilizar heparina únicamente, especial-
la válvula e n f e r m a por una prótesis biológica, se mente e n casos con contraindicaciones para trata-
h a r á una sustitución valvular por una prótesis me- miento trombolítico. Debido al riesgo elevado d e
c á n i c a . Si la enferma tiene implantada una próte- perdida fetal durante e l embarazo e l tratamiento
sis valvular m e c á n i c a , no es aconsejable el e m b a - quirúrgico se deberá reservar para aquellas pacien-
razo debido a que las graves complicaciones a las tes e n quienes la trombolisis esta contraindicada o
que se e x p o n e n , tanto el producto (cuadro 2 ) , no fue efectiva.
c o m o a la madre (cuadro 1), ya q u e eleva grande-
m e n t e la morbimortalidad d e a m b o s . Por otro lado, la administración de anticoagulan-
tes orales (coumarínicos), durante el embarazo no
La joven embarazada, portadora d e una prótesis está exenta d e riesgos, ya que estos fármacos se
m e c á n i c a t o l e r a a d e c u a d a m e n t e los c a m b i o s asocian a la aparición d e aborto hasta e n el 3 5 % d e
hemodinámicos impuestos por el embarazo, pero los casos y d e alteraciones e n el feto, hasta e n el
requiere forzosamente la anticoagulación crónica 3 0 % (embriopatía coumarínica). El riesgo máximo
para evitar la trombosis protésica y los fenómenos para producirle d a ñ o al producto es la etapa de
embólicos sistémicos; aún así, se h a informado una embriogénesis (6a a 1 2 a semanas de embarazo),
mortalidad del 3 % e n estas enfermas por trombosis por lo que la medicación coumarínica debe quedar
protésica. La razón de esta complicación que se pre- proscrita durante el primer trimestre del embarazo.
senta a pesar d e seguir una anticoagulación apropia- La embriopatía coumarínica consiste en la presen-
d a , parece ser debida a que e n el embarazo apare- cia de retardo mental, hipoplasia de los huesos pro-
c e un "estado de hipercoagulabilidad" causado por pios d e la nariz, atrofia del nervio óptico (ceguera),
una mayor concentración d e fibrinogeno circulante microcefalia y alteraciones óseas (condrodisplasia
y mayor adhesividad plaquetaria. punectata) (Cuadros 2 y 3). Asimismo, el uso de
coumarínicos durante las últimas dos semanas del
Los lincamientos actuales d e tratamiento de la
embarazo, lleva mayor morbimortalidad fetal debi-
trombosis protésica recomiendan a la trombolisis
CUADRO1
PRÓTESIS CARDÍACA Y EMBARAZO. E F E C T O SOBRE LA MADRE
- 4 _ _
Tomado de: Salazar y col., Circulation, 1984; 70(Supl):1-169.
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
i —
CUADRO 2
P R Ó T E S I S C A R D I A C A Y E M B A R A Z O . E F E C T O S O B R E EL P R O D U C T O
Antiplaquetarios, Cumarínicos Heparina Prótesis biológica
(68) (128) (12) (15)
4 1005
CARDIOLOGÍA
MIOCARDIOPATÍA m i o c a r d i t i s i n f l a m a t o r i a y se ha c o n s i d e r a d o e l
uso d e i n m u n o s u p r e s o r e s e n a q u e l l o s p a c i e n -
POST-PARTUM tes q u e n o m e j o r a n d e s p u é s d e 27 s e m a n a s de
t r a t a m i e n t o , ( v e r c a p í t u l o s d e INSUFICIENCIA
CARDIACA Y DE MIOCARDITIS).
Es una entidad poco frecuente y que se caracteriza
por la aparición de insuficiencia cardiaca congestiva
sin razón aparente e n pacientes que se encuentran
en el puerperio inmediato, pero que puede, inclu-
so, aparecer hasta después d e 6 meses d e ocurrido CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
el parto (el tiempo promedio de aparición de este
cuadro es de dos semanas después del parto). L a Y EMBARAZO
causa de este cuadro n o es conocida, pero la hipó-
tesis más aceptada es la que sugiere que se trata de
Las cardiopatías congénitas son un grupo de enfer-
una miocarditis viral, ya que los estudios histológicos
medades heretogéneas que tienden a manifestarse
en estos casos, realizados a través de biopsia endo-
desde etapas muy tempranas de la v i d a , por lo que
miocárdica, han demostrado la presencia de u n a
generalmente cuando la paciente se encuentra e n
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
etapa reproductiva y a ha sido estudiada o incluso cambios hemodinámicos durante el embarazo, ge-
tratada quirúrgicamente. neralmente son bien tolerados. Es necesario sin
En aquellas pacientes tratadas quirúrgicamente, embargo, tener e n mente que en pacientes c o n
el embarazo no ofrece per se ningún riesgo para su grandes sobrecargas hemodinámicas (producto de
función cardiaca; sin embargo, es necesario el infor- la cardiopatía) el incremento del volumen circulan-
marle a ella y a su pareja, el riesgo potencial que te durante el primero y segundo trimestre del e m -
entraña la transmisión genética de la enfermedad. barazo, puede ocasionar hipervolemia del circuito
Hay que recordar que la mayoría de las cardiopatías pulmonar, lo cual finalmente sobrecarga volumétri-
congénitas son heredadas vía ruta poligénica/ camente al ventrículo izquierdo haciéndolo claudi-
multifactorial, por lo que el riesgo d e lesión congéni- car. Hay que recordar que en este tipo de enferme-
ta fetal puede llegar a ser hasta del 5%. A l describir el d a d , el hiperflujo pulmonar mantenido e n forma
grupo de cardiopatías congénitas es necesario seña- crónica puede provocar hiperactividad vascular de
lar que existen dos grupos diametralmente distintos: las arterias pulmonares que finalmente se traduce
en elevación de las resistencias pulmonares e hi-
1. Las cardiopatías congénitas acianógenas. pertensión pulmonar secundaria. En estos casos, el
mejor consejo por parte del médico es la no gesta-
2. Las cianógenas.
ción, ya que el riesgo de mortalidad materna es
cercano al 50 % y del 4 0 % de mortalidad perinatal.
En el primer grupo la cardiopatía puede llegar a Si la paciente nos llega y a embarazada (conducto
ser bien tolerada a lo largo de toda la v i d a , por lo hipertenso), debe ser estrechamente vigilada, evi-
que son las más frecuentes e n asociación con el tando al máximo todo aquel factor que reduzca el
embarazo. Dentro de éstas mencionaremos a la coar- volumen circulante y el retorno venoso ya que el
tación aórtica, y a la estenosis pulmonar, a la persis- descenso de los mismos puede condicionar una caí-
tencia del conducto arterioso, a la comunicación d a dramática del gasto cardiaco. Al igual que para
interventricuiar y a la comunicación interauricular. cualquier tipo de cardiopatía, es necesario durante
El segundo grupo, e n cambio, está representa- el trabajo del parto y la operación cesárea, profilaxis
do por enfermedades más complejas que por ende antimicrobiana contra la endocarditis infecciosa. El
son mal toleradas por la enferma, lo cual hace que riesgo de que el producto presente cardiopatía con-
muy pocas pacientes alcancen la etapa reproducti- génita oscila entre el 4 y 11 %.
v a ; sin embargo, ocasionalmente p u e d e n obser-
varse pacientes c o n tetralogía de Fallot y enferme-
dad d e Ebstein. C o m u n i c a c i ó n interventricuiar
En este tipo d e cardiopatía, el riesgo potencial d e
C o a r t a c i ó n aórtica deterioro durante el embarazo depende del tama-
El embarazo e n pacientes c o n coartación aórtica ño del defecto y de las resistencias pulmonares. En
usualmente es bien tolerado, sin embargo se puede efecto, e n aquellos casos c o n defectos pequeños,
complicar con hipertensión arterial d e muy difícil el cortocircuito es pequeño a pesar de incremen-
control, insuficiencia cardiaca, endocarditis o disec- tarse el volumen circulante (como sucede durante
ción aórtica. La posibilidad d e que e l producto el embarazo); sin embargo, en aquellos c o n gran-
presente una malformación cardiaca congénita es del des defectos y amplios cortocircuitos, la hipervo-
3 %. Por otro lado, se han informado casos con rup- lemia pulmonar puede llegar a condicionar falla
tura de aneurisma cerebral, lo recomendable es del ventrículo izquierdo por excesiva sobrecarga
corregir la coartación antes del embarazo. de volumen. A igual que en el conducto hipertenso,
existe un grupo pequeño d e enfermas e n la cual
existe hipertensión arterial pulmonar que no es
Estenosis p u l m o n a r aislada
secundaria a hiperflujo; en estos casos el respon-
Cuando la estenosis es grave, la complicación más
sable de la hipertensión pulmonar es e l aumento
frecuente es la insuficiencia cardiaca derecha pro-
d e las resistencias vasculares pulmonares: asimis-
gresiva. En estos c a s o s se d e b e d e practicar
m o , e l riesgo q u e implica el e m b a r a z o es e n o r m e ,
valvulotomia pulmonar percutánea.
y q u e también la mortalidad materna oscila e n un
50 % y la perinatal en un 4 5 % .
Cortocircuito de Izquierda a d e r e c h a
Si es el caso de una enferma con persistencia en el En los casos de comunicación interventricuiar
conducto arterioso y a operado, el curso de embara- con defecto pequeño y poca repercusión hemodi-
zo es excelente. Si la paciente no se ha operado, los námica, la conducta apropiada es la vigilancia perió-
CARDIOLOGÍA
CUADRO 4
EMBARAZO Y C A R D I O P A T Í A — R I E S G O D E M O R T A L I D A D MATERNA
BAJO RIESGO RIESGO INTERMEDIO RIESGO ELEVADO
(menos del 1%) (5 al 15%) (25 al 50%)
tis infecciosa, arritmias y se presentan e n aproxima- C o m o se analizará más adelante, aunado a la eleva-
damente el 30 % d e los casos, asimismo el aborto ción d e la presión arterial, la mujer preeclámptica
espontáneo aparece en más del 50 % de los casos; manifiesta edema y proteinuria. De acuerdo a las
las complicaciones, e n el producto son bajo peso al cifras de presión arterial y al grado de proteinuria,
nacer y la posibilidad de cardiopatías congénitas, se h a dividido a la preeclampsia en tres subgrupos:
1009
CARDIOLOGÍA
d) Eclampsia. Se define c o m o aquella situación Es muy probable que esta reactividad vascular
e n la c u a l e x i s t e n crisis c o n v u l s i v a s no alterada obedezca a disfunción primaria del
atribuibles a otra patología cerebral e n una endotelio. La causa de la disfunción endotelial no
paciente con preeclampsia. está del todo clara, por ahora se piensa que la pro-
ducción por parte d e la placenta de substancias
2. Hipertensión crónica citotóxicas, substancias mitogénicas y factores de
La p a c i e n t e e m b a r a z a d a p u e d e tener cifras d e crecimiento puedan ser los detonantes d e esta alte-
presión arterial p r e e m b a r a z o superiores a los ración del endotelio vascular. Recientemente se ha
1 4 0 / 9 0 m m H g , o b i e n , a p a r e c e hipertensión demostrado q u e en la mujer preeclámptica existe
arterial antes d e la vigésima s e m a n a d e la gesta- un desequilibrio en la producción de prostaciclina y
c i ó n . C u a n d o la hipertensión arterial persiste más tromboxano A¿. En efecto, durante el embarazo
d e seis s e m a n a s p o s p a r t o , el d i a g n ó s t i c o d e normal la placenta produce cantidades equivalen-
hipertensión c r ó n i c a p u e d e h a c e r s e e n forma tes d e prostaciclina (sustancia vasodilatadora) y trom-
retrospectiva. boxano A (sustancia vasoconstrictora) condicionan-
2
FISIOPATOLOGIA
¿ Flujo Uuteroplacentario
ltrru •i
VASOCONSTRICCIÓN
Degeneración
4 . .
del
trofoblasto
1
• Liberación de
HIPERTENSIÓN
ARTERIAL
renina-uterina
I
' Angiotensina II
FIGURA 8
4 1011
CARDIOLOGÍA
CAMBIOS HEMODINÁMICOS
Alteración de
la memebrana
glomerular
Proteinuria
i
(eini_
•i Presión
resu
oncótica
l
• ICOti'
Pérdida de
líquidos
•
4 Volumen
circulante
i PVC
4
$• RESISTENCIAS — > TAQUICARDIA
SISTÉMICAS
i HIPERTENSION
•
ARTERIAL
FIGURA 10
cuadrante superior derecho del a b d o m e n , el cual tener anemia hemolítica microangiopática secun-
es de presentación brusca, intenso, continuo e irra- daria a la lesión del endotelio vascular, producto de
diado a espalda o el hombro. la vasoconstricción arterial sostenida o incluso,
En relación a la ruptura hepática, los signos son brus- coagulopatía por consumo.
cos y dramáticos (signos de irritación peritoneal con Recientemente se h a descrito e n la literatura,
instalación de choque hipovolémico) por lo que su pre- que e n algunos casos d e pacientes c o n toxemia
sencia representa una auténtica emergencia médica. grave un cuadro clínico caracterizado por hemolisis,
A nivel renal la ¡suficiencia renal aguda por el elevación d e enzimas hepáticas y trombocitopenia
depósito directo de los complejos fibrinógeno-fibrina (síndrome d e Hellp), el cual puede ocurrir e n au-
e n el glomerulo, es la complicación más frecuente. sencia de e d e m a o proteinuria se d e b e , al igual
En cerebro la hemorragia cerebral es la compli- que la anemia hemolítica microangiopática, al daño
cación más temida. D e hecho, la causa más c o m ú n endotelial.
de muerte en la paciente eclámptica es justamente
la hemorragia cerebral, la cual se presenta hasta e n
TRATAMIENTO
el 60 % d e las pacientes que mueren después de
iniciadas las crisis convulsivas. El único tratamiento definitivo para la preeclampsia
En el corazón el incremento de las resistencias es la terminación del embarazo. Deben contraba-
vasculares sistémicas puede llegar a condicionar clau- lancearse cuidadosamente los riesgos y beneficios
dicación del ventrículo izquierdo (por la grave so- materno-fetales antes d e tomar una decisión, pero
brecarga d e presión). existen indicaciones definitivas para interrumpir el
Finalmente, a nivel hematológico, las complica- embarazo (cuadro 6).
ciones pueden abarcar toda una gama de posibilida- El fin básico al tratar una mujer con preeclampsia
des y así, e n casos no graves, la enferma puede es una buena culminación del embarazo, c o n el me-
4
CARDIOLOGÍA
i
—HV- Si no se logra disminuir la presión arterial diastó-
lica a cifras inferiores a los 1 0 0 m m H g después de
CUADRO 6 24 a 4 8 horas de terapia intensa, la conducta ade-
cuada será la interrupción del embarazo.
INDICACIONES FETALES
Si bien es cierto que la piedra angular en el
• Alteración grave del crecimiento tratamiento debe ser la reducción d e la presión
intrauterino. arterial a niveles donde la autorregulación del flujo
• Mal pronóstico para la vida del feto sanguíneo cerebral trabaje adecuadamente, es ne-
• Oligohidramnios grave cesario tener presente que una reducción rápida y
marcada de la presión sanguínea puede reducir el
INDICACIONES MATERNAS flujo uteroplacentario (ya marginal) a niveles peli-
grosos, lo cual evidentemente puede incrementar
• Edad gestacional de 38 semanas o más
la morbimortalidad fetal.
• Trombocitopenia < a 100 000
• Deterioro progresivo de la función hepática En relación al manejo propiamente farmacológi-
• Deterioro progresivo de la función renal co, vale la pena señalar que prácticamente todos los
• Sospecha de desprendimiento de placenta antihipertensivos en existencia han sido estudiados
• Cefalea persistente o alteraciones visuales en la paciente embarazada; sin embargo, debido al
• Dolor epigástrico intenso, nausea o vómito potencial efecto teratogénico de alguno de ellos y la
limitada experiencia clínica e n otros, ha hecho que
sólo unos cuantos sean los de mayor uso en este
grupo de enfermas. Los esquemas propuestos ac-
tualmente se mencionan en la Cuadro 7.
ñor traumatismo posible para madre y feto. Para ello,
el producto tiene que nacer sano y viable, los trastor- Toxemia leve
nos d e la coagulación y las anormalidades hepáticas En general no suele ser necesario indicar e n este
no deben d e llegar a progresar ni tampoco elevarse grupo de enfermas terapia antihipertensiva. En ellas
la presión arterial hasta niveles peligrosos. basta limitar la actividad física con reposo relativo y
Idealmente, ante la sospecha de preeclampsia restringir la ingesta d e sal e n la dieta para mantener
se debe de indicar la hospitalización ya que es la cifras adecuadas de presión arterial.
mejor forma de incrementar la supervivencia fetal.
Cuando la preclampsia aparece en el último trimes- Toxemia m o d e r a d a
tre del embarazo o con el embarazo a término, es En este grupo de enfermas nuevamente surge la
recomendable la inducción d e l parto. controversia d e tratar o n o por vía farmacológica a
Si la preeclampsia se presenta m u c h o antes de la paciente c o n preeclampsia leve a moderada, ya
término y ést.i es moderada o grave, la conducta que ninguno de los estudios controlados con me-
adecuada será la hospitalización, con el fin de con- dicamentos hipotensores en la paciente con
trolar la presión arterial y contemporizar en la m a - toxemia leve a moderada, se ha demostrado una
nera de lo posible hasta que el feto sea viable, c o n reducción significativa en la frecuencia de muerte
la esperanza de que la enfermedad no evolucione perinatal. En general no suele ser necesario tratar
tanto, que ponga en peligro a la madre y obligue e n presiones diastólicas menores a 9 5 m m H g e n el
forma inmediata a la interrupción d e l embarazo. segundo trimestre, y d e 100 m m H g e n e l tercero o
presiones sistólicas de 1 6 0 m m H g o menores, a
Durante la hospitalización es recomendable el
menos de que la presión previa al e m b a r a z o ya se
conservar la presión diastólica por debajo de 100
conociera que era m u c h o más baja (por ejemplo,
m m H g y la presión sistólica por debajo de 160 m m H g ,
diastólica de 50-60 mmHg).
vigilando clínicamente a la paciente y los valores de
laboratorio: hemoglobina y hematócrito, glucosa, Con respecto a la terapia propiamente fármaco-
creatinina, transaminasas y tiempos de coagulación. lógica, se dispone de varios medicamentos para tra-
Las crisis eclámpticas suelen ir precedidas d e tar la hipertensión e n la población no grávida pero
signos premonitorios c o m o son cefalea, trastornos son pocos los datos acerca de la eficacia de este
de la visión, dolor epigástrico o e n cuadrante supe- tratamiento durante el embarazo y los efectos in-
rior derecho o hiperreflexia, por lo que su presen- mediatos y a largo plazo en el feto.
c i a j u s t i f i c a e l m a n e j o e n é r g i c o c o n drogas C o m o lo analizaremos en breve, con cada grupo
antihipertensivas potentes por vía parenteral. de antihipertensivos la mayor experiencia está cir-
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
CUADRO 7
M E D I C A M E N T O S U T I L I Z A D O S EN EL TRATAMIENTO D E LA H I P E R T E N S I O N
GRAVE EN EL E M B A R A Z O
cunscrita a la metildopa, a la hidralazina a los beta- de hace mucho tiempo e n la hipertensión del e m -
bloqueadores y la nifedipina. En casos graves, resis- barazo con aceptable respuesta. Se recomienda una
tentes a los medicamentos previos, se pueden uti- dosis promedio d e 75 a 1 0 0 mg/día repartida e n 3 a
lizar nitroglicerina o nitroprusiato de sodio e n 4 dosis ya que los beneficios obtenidos e n pacientes
invasión continua intravenosa. embarazadas justifican el riesgo de su uso. En últi-
En relación a la metildopa, su acción predomi- mas fechas, varios grupos de investigación señalan
nantemente central (agonista alfadrenérgico a nivel q u e los calcioantagonistas, p a r t i c u l a r m e n t e la
cerebral) y su comprobada seguridad en la paciente nifedipina de liberación prolongada o incluso cual-
embarazada, la han hecho el fármaco d e elección quier presentación d e nifedipina de liberación pro-
en la mujer toxémica, su margen terapéutico es muy longada puede ser utilizada c o m o fármaco inicial e
amplio; sin embargo, se recomienda una dosis pro- incluso c o m o monoterapia de la paciente c o n
medio d e 7 5 0 a 1 5 0 0 mg/día repartidos durante el preeclampsia moderada. Varios ensayos clínicos han
día. En la gran mayoría de los casos de toxemia mo- demostrado que es un fármaco relativamente segu-
derada, la simple monoterapia con metildopa con- ro, bien tolerado, con baja frecuencia de efectos co-
trola las cifras d e presión arterial; sin embargo, exis- laterales para la madre y deletéreos para el producto.
te un grupo e n el cual la sola administración de Se recomienda una dosis 30 mg/día e n el caso
metildopa no basta para controlar las cifras de pre- de nifedipina de liberación prolongada. Los p-beta-
sión arterial. En estos casos es recomendable la aso- bloqueadores son otra alternativa con seguridad y
ciación de metildopa con un vasodilatador arteriolar eficacia clínica comprobada durante el embarazo.
tipo hidralazina. Este fármaco a pesar d e estar cata- Se pueden emplear el labetalol (dosis inicial d e 20
logado como droga tipo D) (fármaco con riesgo com- m g . e n bolo IV, seguido d e otro bolo de 4 0 m g . y
probado para el feto humano) por la Secretaria de hasta dos dosis más d e 80 m g . e n intervalos de 10
Alimentos y Fármacos de E U A , se ha empleado des- a 20 m i n . o e n infusión continua a 1 -2 mg/min).
1015
CARDIOLOGÍA
A continuación se analizan los fármacos útiles en el sible el pensar que los inhibidores de la ECA pueden
tratamiento de enfermedad gestacional hipertensiva: tener un papel preponderante en el manejo de este
tipo de pacientes. Sin embargo actualmente esta
Diuréticos proscrito su uso durante el embarazo o en mujeres
D e b i d o a q u e e l gasto cardiaco y e l v o l u m e n de edad fértil, debido a q u e se han asociado a mal-
¡ntravascular están disminuidos e n la p a c i e n t e formaciones congénitas e n el producto.
preeclámptica, la mayoría de los autores sostienen
que su uso está totalmente contraindicado en este Toxemia grave
grupo de enfermas, máxime si se analizan también En relación a esta última entidad, varios son los pun-
los posibles efectos deletéreos e n e l producto tos q u e conviene analizar:
(hiponatremia, hipoglucemia y trombocitiopenia).
1. La mayoría de los autores están de acuerdo en
Recientemente un meta-análisis que involucró
que no existe un fármaco específico para el
a más d e siete mil mujeres embarazadas demostró
control del grave deterioro hemodinámico. Aún
que los diuréticos tiazídicos no son tan peligrosos
más, muchos grupos clínicos señalan que aun-
c o m o se consideraban e incluso su uso en la mujer
que se logre una correcta estabilización de las
hipertensa embarazada puede prevenir el desarro-
cifras tensionales, esta medida no ha mejorado
llo de la enfermedad gestacional hipertensiva.
la morbimortalidad fetal. Por lo anterior es el
consenso general que ante un estado de
Betabloqueadores preeclampsia, la mejor decisión es la interrup-
Una serie d e ensayos controlados tanto en la pa- ción inmediata del embarazo. Se prefiere la
ciente preeclámptica moderada como grave, sugie- operación cesárea por la rapidez del abordaje.
re que este grupo de fármacos son tan eficaces como
la metildopa. Esto es particularmente cierto c o n los 2 . En aquellos casos que así lo permitan y nunca
betabloqueadores de segunda generación (cardio- más de 24 horas, se puede intentar el manejo
selectivos) como lo son el metoprolol y el atenolol. médico farmacológico. Pocos son los fármacos
Recientemente salieron al mercado los betabloquea- investigados, sin embargo, una vez más la
dores de tercera generación como el carvedilol, hidralazina por vía endovenosa es el fármaco de
fármacos carentes de investigación e n este terreno; elección. Desafortunadamente no se encuen-
sin embargo, por su perfil hemodinámico pueden tra disponible e n todos los países, por lo que
ser útiles e n esta enfermedad. una medida paralela es el empleo de nitrogli-
A pesar de estas ventajas potenciales, diversos cerina por vía endovenosa. C o m o se recordará,
informes indican que el uso materno de betablo- la nitroglicerina es un potente venodilatador y
q u e a d o r e s p u e d e c o n d i c i o n a r e n el producto e n forma menos importante vasodilatador
hipoglucemia, bradicardia, dificultad respiratoria y arterial. Su empleo en la gran mayoría de los
retraso del crecimiento intrauterino. casos logra bajar las cifras tensionales, permi-
tiendo al gineco-obstetra y al cardiólogo hacer
Además estudios en animales indican que con el
los preparativos necesarios para la interrup-
uso de antagonistas de receptores beta se condicio-
ción del embarazo. La dosis es variable y tam-
na bradicardia fetal y se perturba la respuesta fetal al
bién la dosis-respuesta; se recomienda diluir
estrés hipóxico, lo cual puede confundir al clínico,
50 mg de nitroglicerina en 250 mi de solución
especialmente e n la preeclampsia grave, e n donde
glucosada y pasar a dosis de 10 microgramos
la bradicardia es señal d e sufrimiento fetal.
por minuto, o bien, dosis-respuesta hasta la
Durante la hospitalización es muy recomenda- estabilización de las cifras tensionales.
ble conservar la presión diastólica por debajo de
100 m m H g , vigilando clínicamente a la paciente y
los valores de laboratorio: hemoglobina y hemató-
crito, glucosa, creatinina, transaminasas y tiempos
de coagulación. ENFERMEDADES
ENDOCRINAS Y C O R A Z O N
Inhibidores de la enzima conversora y anta-
gonistas del receptor de angiotensina
HIPERTIROIDISMO Y CORAZON
Si recordamos que en el substrato fisiológico de la
paciente toxémica, el sistema renina-angiotensina- Desde hace varias décadas se ha estudiado en forma
aldosterona juega un papel importante, se antoja po- exhaustiva la relación existente entre las hormonas
1016»
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
tiroideas y el corazón. En estudios experimentales cía cardiaca producen aumento del gasto cardiaco.
se ha demostrado un efecto directo de las hormonas Este efecto puede revertirse, ya sea con la adminis-
tiroideas sobre la contractilidad miocárdica y sobre tración de medicación betabloqueadora o anti-
el cronotropismo; sin embargo, las manifestaciones tiroideos y desde luego, c u a n d o el paciente ha lle-
clínicas son aquellas producidas por la estimulación gado al eutiroidismo (figura 11).
adrenérgica (taquicardia, aumento de la contractili-
dad, del gasto cardiaco, diaforesis, etc.) y se supri- 2. Cambios circulatorios en el hipertiroidismo
m e n c o n bloqueadores de los receptores betadre- (Cuadro 8 y figura 12)
nérgicos, por lo que hay una tendencia a pensar que En el hipertiroidismo existe aumento del gasto cardiaco,
las hormonas tiroideas de alguna forma aumentan la lo cual se traduce clínicamente por aumento de la
sensibilidad del miocardio al efecto adrenérgico en presión sistólica. Por otro lado, el hipermetabolismo
forma directa, o bien, aumentan la cantidad de re- tisular producido por el exceso de hormonas tiroideas
ceptores beta en el miocardio y ello se traduce por aumenta la producción de calor e n los tejidos, condi-
manifestaciones de hiperactividad simpática. cionando vasodilatación periférica y con ello disminu-
ción de las resistencias periféricas, lo cual a su vez
1. Cambios en la función ventricular favorece el aumento del gasto cardíaco.
Ya sea por efecto directo o a través de estimulación
adrenérgica, e l exceso de hormonas tiroideas con- 3. Cambios electrofisiológicos
diciona aumento de la contractilidad miocárdica, la El hipertiroidismo causa también un aumento del
cual conjuntamente c o n el aumento e n la frecuen- automatismo sinusal (efecto cronotrópico positivo)
CUADRO 8
PARÁMETROS F O N O M E C A N O C A R D I O G R Á F I C O S EN H I P E R T I R O I D I S M O
Sanos Hipertiroidismo
(n = :1 41) (n = 9) , , p <
FC = frecuencia cardiaca, PAS = Presión arterial sistólica, PAD presión arterial diastólica, Q-llAc
= sístole electromecánica corregida para la frecuencia cardiaca, PEc = periodo expulsivo corregi-
do para la frecuencia cardiaca, PPE = periodo preexpulsivo, FPI = fase preisosistólica, FIS = fase
isosistólica, CoW = cociente de Weissler, FISV = fase isosistólica verdadera, FE = fracción de
expulsión, lla-o = fase de relajación isovolumétrica, O-f = fase de llenado rápido.
E F E C T O S S O B R E LA C I R C U L A C I O N S I S T E M I C A
t GC
t PAS
Hipercinecia
-> k P.
P. Diferencial
Di
Circulatoria
•
I RP PAD
j Vasodilatación
XJr" periférica
que se traduce por taquicardia sinusal. Este efecto nos casos informados e n la literatura e n los que
es debido al aumento e n la velocidad de la despola- existe hipertensión telediastólica venlricular e n au-
rización diastólica de las células automáticas y a una sencia de insuficiencia ventricular (disminución de
disminución en la duración del periodo refractario. la distensibilidad ventricular), la aparición de infarto
Por otro lado, hay acortamiento del periodo refrac- del miocardio en sujetos jóvenes incluyendo muje-
tario del nodo AV, por lo que los estímulos auricula- res c o n hipertiroidismo florido, en q u i e n e s la
res pasan con mayor velocidad hacia los ventrículos. arteriografía coronaria no demuestra la presencia
La fibrilación auricular aparece en el 1 5 % de los pa- de aterosclerosis coronaría o espasmo d e las mis-
cientes con hipertiroidismo y se debe al acortamiento mas arterias; asimismo, en algunos de esos pacien-
desigual en la duración del periodo refractario (dis- tes se ha demostrado la producción de lactato en el
persión de los periodos refractarios e n el miocardio seno coronario e n exceso, alteración funcional que
auricular). Finalmente, en el 15 % de los pacientes traduce isquemia miocárdica. Todos estos hechos
hipertiroideos aparece bloqueo de rama derecha. sugieren que la cardiopatía tirotóxica es realmente
una forma de cardiopatía isquémica que se produce
por el desequilibrio aporte-demanda que se esta-
4. Cardiopatía tirotóxica
blece por el exagerado aumento del M V 0 , a pesar
El hipertiroidismo grave y de larga evolución es c a -
2
E F E C T O S S O B R E LA S U P E R F I C I E C O R P O R A L
30
IT
4L
E F E C T O S S O B R E EL C O R A Z O N
Taquicardia Inotropismo •
t Inotropismo Taquicardia
Hipermetabolismo >.
; Retorno
I venoso
MV0 ffff
N V
Retorno 2
t ve l i o s o
Isquemia
relativa
difusa
¡i
| Distensibilidad
\f ventricular D V Izq
2 I
lamínica y que se manifiesta por estimulación de sistémico, por lo tanto, el betabloqueador dismi-
la f u n c i ó n v e n t r i c u l a r (efecto c r o n o t r ó p i c o e n u y e significativamente e l gasto c a r d í a c o sin re-
inotrópico positivo) y por otro lado, e l efecto re- ducir tanto los requerimientos periféricos d e oxí-
flejo producido por el desproporcionado a u m e n - g e n o , por lo q u e interfiere c o n el m e c a n i s m o
to d e las demandas metabólicas, producido por el compensador que mantiene la homeostasis en es-
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
CUADRO 9
CAMBIOS HORMONALES
.' :
•. •
1 lll IV
tas condiciones; por lo tanto, no parece deseable gasto cardiaco, lo cual e n ocasiones puede contri-
y tampoco recomendable utilizar el betabloquea- buir a la presencia del síntoma de fatiga, c o m ú n e n
dor c o m o m e d i c a c i ó n única e n el hipertiroidis- estos pacientes.
m o , sino asociada a drogas antitiroideas q u e sí Indudablemente, la depresión del automatismo
r e d u c e n significativamente el hipermetabolismo sinusal, es la responsable d e la bradicardia sinusal la
tisular (figura 1). depresión d e la conducción de los trastornos de la
conducción auriculoventricular, característicos de
este grupo d e enfermos, que pueden manifestarse
por bloqueos A V de primero y segundo grados (fi-
HIPOTIROIDISMO Y gura 18-A).
Es interesante el señalar q u e el hallazgo más
CORAZÓN frecuente e n el paciente hipotiroideo es la presen-
cia de derrame pericárdico (su causa muy probable-
FISIOPATOLOGÍA CARDIOVASCULAR mente obedece a exudado proteico más la infiltra-
ción miocárdica de mucopolisacáridos).
La presencia de hipotiroidismo profundo con su re-
Generalmente la producción del líquido no es
presentación de mixedema, asociado a trastornos
rápida ni e n cantidades significativas, por lo que la
cardiacos, es una situación poco frecuente; sin e m -
presencia de restricción al llenado diastólico (ta-
bargo, es necesario el tener presente que la existen-
ponamiento cardíaco) es e x c e p c i o n a l : la frecuen-
cia de edema periférico más crecimiento inexplica-
cia de derrame pericárdico se estima hasta e n el
ble de la silueta cardiaca, puede tener como origen
5 0 % d e los casos y es con m u c h o la causa más
primario, déficit circulante de hormonas tiroideas.
frecuente d e "cardiomegalia", vista a los rayos X. El
A nivel cardiovascular, la ausencia parcial o total depósito e infiltración miocárdica d e mucopolisa-
de hormonas circulantes puede condicionar: cáridos es q u i z á , el factor q u e explique las m a n i -
festaciones d e falla cardiaca y congestión pulmo-
1. Depresión de la función contráctil (por falta
nar encontradas en algunos enfermos con
d e efecto inotrópico (figuras 16 y 17).
hipotiroidismo.
2 . D e p r e s i ó n del a u t o m a t i s m o sinusal (efecto
Es necesario resaltar q u e los pacientes con
cronotrópico negativo) (figura 18-A).
hipotiroidismo tienen mayor frecuencia d e cardio-
3. D e p ó s i t o e i n f i l t r a c i ó n m i o c á r d i c a d e patía aterosclerosa. El porqué d e esta asociación se
mucoproteínas y mucopolisacáridos. desconoce a ciencia cierta; sin embargo, se piensa
q u e la mayor incidencia d e hipertensión arterial
4. N e c r o s i s m u s c u l a r y degeneración sistémica y d e hipercolesterolemia e n este grupo
fibrinoide. d e enfermos son ios factores que pueden predis-
poner al desarrollo progresivo de aterosclerosis
En el primero de los casos, la depresión d e la
coronaria.
función contráctil es la responsable d e la caída en el
4 1021
CARDIOLOGÍA
METHIMAZOL
Propanolol
'3r
Metabolilo
inactivo
Hipermetabolismo
Taquicardia
t Producción
de calor
Vasodtlalación
periférica
Retorno
venoso
FIGURA 15
1022
EL CORAZON EN OTROS PROCESOS SISTEMICOS
V i. l./,..i,~——.
FIGURA 16 Mixede-
ma. Fonomecanocar-
diograma. La medi- ' i l\ ~Pf>f.
ción de los intervalos .!'•: '- /¡vi \
sistólicos demuestra
un franco alargamien-
to del periodo pre-
expulsivo (155 mseg) — ^
a expensas de la fase
•: W r
isosistólica (Fis: 7 5
mseg), así como la /V-L4^
disminución del co-
ciente sistólico PE/PPE >* V • :
•
a 1.5 todo lo cual tra-
duce enlentecimiento
de la contracción ven-
tricular por falta de H i-i.
efecto inotrópico
, I : i
¡111»
anormalidades de la repolarización y trastor-
nos de la conducción auriculoventricular (fi-
gura18-A).
medad hipotalámica.
TRATAMIENTO
ciencia suprarrenal aguda c u a n d o el hipotiroidis- tención de sodio y agua por acción directa de la
m o ha sido de larga evolución y se ha a c o m p a ñ a - hormona de crecimiento sea el mecanismo respon-
do d e infiltración mixedematosa d e las glándulas sable de la hipertensión.
suprarrenales. Los enfermos con acromegalia e n la cuarta o
quinta década de la vida, tienen con mayor frecuen-
cia aterosclerosis coronaría; de nueva cuenta, la ra-
ACROMEGALIA Y CORAZÓN zón de esta asociación no es del todo clara. Es inte-
resante señalar que cerca del 20 % de los pacientes
Debido a que la hormona de crecimiento condicio- con acromegalia desarrollan diabetes mellitus en el
na múltiples efectos metabólicos (retención de sodio, transcurso de su enfermedad.
potasio y fosfatos), no es infrecuente por tanto, e n - La causa es fácil de entender: la hormona de
contrar e n e l paciente acromegálico, manifestacio- crecimiento incrementa la glucogénesis e inhibe la
nes e n la esfera cardiovascular. acción periférica de la insulina. Es posible que en
Es importante señalar que aunque la mayoría de un grupo pequeño de estos pacientes la isquemia
los efectos metabólicos son producto de la acción miocárdica esté mediada por "enfermedad d e pe-
directa de la hormona de crecimiento, una parte no queños vasos" más que por aterosclerosis coronaria.
despreciable de los mismos puede estar mediada La presencia de cardiomegalia puede encontrar-
por la acción de la somatomedina (un factor d e cre- se hasta e n el 4 0 % de los casos. La causa de creci-
cimiento, producido en el hígado e n respuesta al miento de la silueta cardiaca es multifactorial y así,
estímulo de la hormona de crecimiento). la suma de hipertensión arterial sistémica, diabetes,
Dentro de los hallazgos más frecuentes tenemos aterosclerosis coronaría y el efecto proliferativo de
el desarrollo de hipertensión arterial sistémica, la la hormona de crecimiento e n el miocardio pueden
cual puede encontrarse hasta en el 5 0 % de los c a - ser los responsables de la cardiomegalia.
sos. El mecanismo de la hipertensión no se conoce Ocasionalmente el paciente acromegálico pue-
con exactitud ya que la mayoría d e los pacientes de tener trastornos de la conducción intraventricu-
tienen niveles bajos de renina; quizá la simple re- lar y manifestaciones de falla cardiaca, secundarios
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
a fibrosis miocárdica, hipertrofia y dilatación del cuya afección determina la morbimortalidad en estos
ventrículo izquierdo ( M I O C A R D I O P A T Í A F O R A C R O M E G A L I A ) . pacientes, y por lo tanto su pronóstico.
IÍIVÍI La afección cardiaca por estos procesos será bre-
vemente tocada en esta sección.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
se tratarán con medicación esteroidea (prednisona substrato fisiopatológico basado en el daño miocárdi-
30-80 mg/día), c u y o manejo a largo plazo depen- co inflamatorio producido por la reacción antígeno-
derá d e la respuesta clínica. En este respecto vale la anticuerpo que se lleva a cabo a este nivel en el
pena mencionar que se requiere e n estos casos e l paciente c o n lupus eritematoso y que se hará e v i -
consejo de un reumatólogo, especialmente para el dente mediante la presencia d e cardiomegalia, rit-
correcto tratamiento del proceso lúpico que se con- mo de galope y otros signos de insuficiencia cardiaca
jugará con el cardiólogo para el correcto manejo de clínicos, radiológicos o ecocardiográficos e n un pa-
las complicaciones cardiovasculares del proceso. ciente afectado por lupus eritematoso sistémico
activo (miocarditis lúpica).
La punción pericárdica sólo estará indicada cuan-
do haya evidencia clínica de importante impedi- En los estudios de autopsia del corazón casi siem-
mento al llenado diastólico o franco taponamiento pre se encuentran alteraciones que demuestran su
cardiaco, e n donde el drenaje del líquido (pericar- afección por el proceso. Las lesiones consisten e n la
diocentesis), aliviará definitivamente al paciente. Por presencia d e necrosis fibrinoide que aparece en el
otro lado, también es indicación para la punción intersticio, así c o m o cambios de vasculitis en las
pericárdica, la sospecha de pericarditis purulenta. pequeñas arterias (microvasculares), cabe mencio-
Finalmente, en aquellos casos con pericaditis nar que se ha informado la presencia de infarto del
aguda, c o n derrame e n quienes se investiga la etio- m iocardio consecutivo a la arteritis lúpica de las gran-
logía del cuadro, el examen del líquido puede ofre- des arterias.
cer gran información diagnóstica en el caso d e lupus Al parecer, los anticuerpos en contra d e los com-
eritematoso, ya que encontraremos un líquido cla- ponentes del núcleo de la miofibrilla (anticuerpos
ro, c o n aumento de polimorfonucleares, pero con antinucleares), forman un complejo al unirse c o n el
una marcada actividad inmunológica, que se hará complemento (complejos inmunes) e n el seno del
evidente por la presencia de células L E , anticuerpos intersticio y más rara vez en el propio miocardio
antinucleares o hipocomplementemia. que producen una reacción hiperinmune tisular. No
se sabe a ciencia cierta si los anticuerpos anticorazón
•
encontrados e n los pacientes son los que participan
e n esta reacción tisular o aparecen después de que
MIOCARDITIS LÚPICA
la reacción inmune a nivel de la miofibrilla ha c a u -
sado inflamación y por esta causa se han liberado
En años recientes se ha encontrado una menor
antígenos hacia la circulación, los cuales a su vez
participación miocárdica en el lupus eritematoso
producen la liberación de anticuerpos específicos.
e n comparación con la é p o c a preesteroidea. Este
comportamiento e n la frecuencia ha sido atribuido Conviene también enfatizar el hecho d e que la
al uso adecuado de corticoesteroides e n esta e n - arteritis puede involucrar la arteria del seno auricu-
fermedad. lar y ser causa de arritmias sinusales (paro sinusal,
Antes del uso de esteroides se encontraba la bloqueo sinoauricular, etc.) y también a la arteria
presencia d e miocarditis tópica hasta e n el 5 0 % d e del nodo AV, lo cual puede causar trastornos de la
ios casos, mientras que la frecuencia informada en conducción A V (bloqueos A V ) .
las series más recientes oscila entre el 10 y 4 0 % d e
los casos, aun cuando en estudios de necropsia la
frecuencia alcanza hasta el 4 0 %. ENDOCARDITIS LUPICA
Se debe recordar que los pacientes afectados por
lupus eritematoso sistémico pueden tener cardiopa- La "endocarditis verrucosa atípica" o endocarditis
tía por otros procesos que son concomitantes a la de Libman-Sacks está constituida por la presencia
enfermedad autoinmune pero que no son parte de de vegetaciones estériles y fibrinosas, las cuales apa-
ella; así, los pacientes con nefropatía frecuentemen- recen e n los bordes de cualquiera d e las válvulas
te desarrollan hipertensión arterial que se incrementa cardiacas, aun cuando la válvula mitral es la princi-
significativamente con la medicación esteroidea, por palmente involucrada (figura 19). Estas formaciones
lo que los pacientes pueden sufrir cardiopatía hiper- se han encontrado hasta e n el 4 7 % en los estudios
tensiva; la misma terapia esteroidea recibida en for- de autopsia.
m a crónica puede acelerar el proceso de ateroscle- Clínicamente es difícil reconocer estas altera-
rosis, cuya afección coronaria puede culminar con ciones, incluso c o n el ecocardiograma, debido a su
cardiopatía isquémica; por lo tanto, denominaremos pequeño tamaño (generalmente menores de 5 mm),
a la miocardiopatía c o m o lúpica cuando tenga un aunque si sus dimensiones son mayores pueden
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
4
I
I
I
I
• «q N
r
1
I
I
F I G U R A 19 Endocarditis
verrucosa de Libman-Sacks. La 1
flecha señala una verrucosi-
dad injertada en la valva an-
terior de la mitral (VAM). Su
localización explica la falta de
manifestaciones clínicas y
ecocardiográficas C
nocido e n las últimas épocas con menor frecuencia La enfermedad coronaria se considera como la com-
y se piensa que ello se debe al adecuado uso de plicación menos frecuente del lupus eritematoso.
terapia esteroidea. La experiencia ha enseñado que la paciente con
Generalmente la valvulopatía lúpica no sólo no este padecimiento puede presentar enfermedad
produce alteraciones hemodinámicas sobre el co- coronaria por dos mecanismos:
razón, sino que tampoco es causa d e soplos cardía-
cos. En casos raros puede ser causa de insuficiencia 1. El tratamiento crónico con corticoesteroides
aórtica pura (valvulopatía más frecuente), insuficien- favorece trastornos metabólicos c o m o la
cia o estenosis mitral que son de ligera magnitud. En hiperglucemia, así como también la hiperten-
casos raros estas valvulopatías pueden tener impor- sión arterial; por otro lado, si la paciente ade-
tante repercusión hemodinámica. más padece nefropatía lúpica, también se ge-
Cuando la valvulopatía lúpica tiene importante nera hipertensión arterial por lo q u e se
repercusión hemodinámica puede llegara requerir encuentra elevación significativa de las cifras
tratamiento quirúrgico que generalmente es la susti- tensionales al sumarse ambos factores. En es-
tución valvular por una prótesis, procedimiento que tos pacientes también puede existir hiperco-
en pacientes afectados por lupus eritematoso sistémico lesterolemia, y todos estos factores en conjun-
se ve acompañado de una mayor mortalidad, en rela- to c u a n d o tienen una evolución crónica,
ción a los pacientes no afectados por este padeci- conducen a un proceso de aterogénesis ace-
miento, lo cual es debido a que los pacientes con lerada que culmina con aterosclerosis corona-
lupus eritematoso frecuentemente tienen e n forma ria obstructiva, la cual puede llegar a causar
c o n c o m i t a n t e insuficiencia r e n a l , hipertensión angina de pecho o infarto del miocardio.
arterial, diabetes esteroidea y menor resistencia a la
En efecto, Roberts y col. estudiaron des-
infección, etc., algunos de ellos producidos por la
de el punto de vista anatomo-patológico 22
terapéutica prolongada a base d e m e d i c a c i ó n
casos de lupus eritematoso, que al momento
esteroidea y/o inmunosupresora con otros fármacos.
de morir se encontraban entre los 10 y 3 7
El riesgo potencial de las vegetaciones endocár- años. Encontraron que en 10 pacientes exis-
dicas de origen lúpico es el de infectarse y conver- tía obstrucción coronaria mayor del 5 7 % en
tirse e n una endocarditis infecciosa, lo cual ocurre por lo menos un vaso epicárdico principal.
primordialmente en pacientes inmunodeprimidos, En estos pacientes también existió hiperten-
y ello se convierte e n una complicación temible por sión arterial e hipercolesterolemia, Estos ha-
su alta morbimortalidad. llazgos ponen de manifiesto por qué la ate-
CARDIOLOGÍA
rosclerosís coronaria puede ser causa de car- dicho síndrome es mucho más amplio, incluyendo
diopatía isquémica e n estos pacientes, todo alteraciones neurológicas, obstétricas, mucocutáneas
ello debido a un proceso de aterogénesis y cardiovasculares.
acelerada. Este síndrome puede presentarse e n forma ais-
lada o asociado a una enfermedad sistémica, parti-
2. La cardiopatía isquémica en el paciente lúpico
cularmente lupus eritematoso sistémico (LES).
puede, por otro lado, ser causada por vasculitis
La trombosis relacionada c o n el síndrome pue-
coronaria que involucre las pequeñas arte-
d e ocurrir prácticamente a cualquier nivel d e l
rias o a los troncos e p i c á r d i c o s (arteritis
organismo.
coronaria). En ellos, las manifestaciones del
cuadro coinciden generalmente con una exa- Los anticuerpos e n estos pacientes, principal-
cerbación florida de vasculitis sistémica. mente d e los tipos IgC e IgM, se dirigen contra ios
complejos proteína-fosfolipido de una amplia gama
La arteritis coronaria que afecta a vasos epicárdicos d e tejidos en el organismo, entre ellos las válvulas
es rara y las lesiones desde el punto de vista histológico cardiacas y el endocardio mural. A d e m á s , se sabe
consisten en un infiltrado inflamatorio y necrosis que que los anticuerpos, cuando están presentes en con-
involucra todas las capas d e la pared arterial. centraciones moderadas o altas, se asocian con un
La arteriografía coronaria muestra la presencia alto riesgo de trombosis prácticamente e n cualquier
de irregularidades localizadas e n segmentos de la vaso sanguíneo.
luz arterial, obstrucción d e algún vaso y e l diagnós- Diversos estudios ecocardiográficos, han docu-
tico puede ser mayormente apoyado, si además se mentado las alteraciones valvulares en pacientes con
encuentran dilataciones aneurismáticas de una o SAAF, s i e n d o característicos e l e n g r o s a m i e n t o
varias arterias comprometidas. verrucoso asociado o no a disfunción d e las válvulas
La diferenciación clínica tiene importancia, ya aórtica y mitral. La prevalencia aproximada de di-
que la obstrucción ateromatosa debe tratarse médi- chas lesiones, fluctúa entre el 32 y 38 % e n las
c a o quirúrgicamente, según se indica e n los pa- diversas series. Estas anormalidades valvulares son
cientes con este padecimiento que no tienen lupus similares a las observadas e n pacientes c o n LES e n
eritematoso. En estos pacientes el tratamiento qui- general. La válvula más comúnmente afectada es la
rúrgico (revascularización miocárdica), no tiene mitral seguida d e la aórtica.
mayor mortalidad y sólo se recomienda interrumpir Se han descrito dos tipos de lesiones valvulares,
temporalmente la medicación esteroidea, c o n e l que bien pueden representar distintos estadios de
objeto d e evitar alteraciones e n la cicatrización de un mismo proceso patológico:
la herida quirúrgica.
1) Vegetaciones fibrinoides estériles (Libman-
Por otro lado, los pacientes c o n arteritis corona-
Sacks) q u e pueden asentarse e n cualquier
ria deben d e ser tratados mediante ciclos cortos de
sitio de endocardio, pero c o n cierta predis-
corticoesteroides e n altas dosis, asociados c o n
posición por las válvulas izquierdas, particu-
azathioprina, medicamento cuya administración se
larmente en la superficie ventricular de la
prolonga por más tiempo.
v á l v u l a m i t r a l , c a r a c t e r í s t i c a m e n t e son
sésiles y pequeñas (2 a 4 mm) (figura 19).
plasmáticas de unión a fosfolípidos (cofactores) más anticoagulación óptima está indicado solo e n situa-
que a los propios fosfolípidos. Las más comunes d e ciones q u e ponen e n riesgo la vida del paciente
estas proteínas son la glicoproteína 8 y la protrom-
2
como el SAF catastrófico.
bina, aunque también se pueden ver involucradas Estudios retrospectivos e n pacientes adultos han
otras c o m o la proteína C , proteína S y anexina V. demostrado que la trombosis asociada a aPL tiende
Los subgrupos más comúnmente encontrados de a la recurrencia, de ahí q u e en estos pacientes este
a P L son A L , a C L y B - G P I . El A L es identificado por
2
indicado el tratamiento anticoagulante oral
pruebas d e coagulación e n las que prolonga el tiem- (coumarínicos) para obtener niveles de I N R entre
po de la misma. En contraste a C L y a 8 - G P I son 2
2.0 y 3.0 e n forma indefinida, aunque hasta el mo-
r e c o n o c i d o s por i n m u n o e n s a y o q u e m i d e , la mento no se ha llegado a un consenso sobre el
reactividad inmunológica contra el fosfolipido o con- tiempo necesario. La indicación quirúrgica d e las
tra el cofactor (cardiolipina y a 8 - G P I respectiva-
2
valvulopatías que acompañan al síndrome es similar
mente). En términos generales, A L es más específi- a la de cualquier otro paciente con lesión valvular.
co para SAF, mientras que a C L son más sensibles.
Debido al margen d e error relativamente a m -
plio de los niveles absolutos, se prefiere el uso d e ARTRITIS R E U M A T O I D E
medidas semicuantitativas para el informe d e los
resultados ( < 20 U normal, 20 a 80 U moderada- En relación a este tipo de colangenopatía, el involu-
mente positivo, > 80 U altamente positivo). cro a la esfera cardiovascular no es frecuente. Los
El análisis para A L mide la capacidad d e este síntomas fundamentalmente son articulares, secun-
subgrupo de aPL para prolongar las pruebas de coa- darios a la erosión y deformación articular, C u a n d o
gulación c o m o e l tiempo parcial de tromboplastina, existen síntomas extraarticulares, éstos tienden a ser
el tiempo d e veneno de la víbora de Russel o el inespecíficos (fiebre, pérdida d e peso, a n e m i a ,
tiempo de coagulación con kaolina. La inhibición linfadenopatía, etc,); sin embargo, en grupos peque-
de la coagulación in vitro es causada por el bloqueo ños pueden presentarse síntomas claros de afección
de la conversión de protrombina a trombina. Este cardiaca. Al igual que sucede en el lupus eritematoso
proceso retrasa la formación de fibrina y prolonga el sistémico, pueden verse involucrados el pericardio,
tiempo para la formación del coagulo. Sin embargo, el miocardio y el aparato valvular.
in vivo, la presencia d e A L está paradójicamente En relación a la afección pericárdica se estima
asociada con eventos trombóticos mas que con he- que puede haber pericarditis asintomática hasta en
morragias. Los criterios actuales para el diagnóstico e l 30 % d e los casos, C o m ú n m e n t e es del tipo
de A L requieren de la prolongación del tiempo de "fibrinosa" y su curso clínico es "benigno". En raras
coagulación e n al menos uno de los análisis m e n - ocasiones, la pericarditis reumatoide es lo suficien-
cionados. D e acuerdo a las guías d e diagnóstico, se temente importante como para condicionar gran-
requiere que dos o más análisis sensibles a este des cantidades de derrame pericárdico o incluso
anticuerpo sean negativos para descartar la presen- "taponamiento cardiaco". En estos casos, al igual
cia de A L . que e n cualquier otra etiología, q u e d a plenamen-
te indicada la pericardiocentesis o incluso la "ven-
tana pericárdica". En aquellos casos de pericarditis
TRATAMIENTO m u y sintomática, pero sin evidencia d e derrame
pericárdico, son de utilidad los antiinflamatorios
A pesar de la asociación establecida entre a P L y
no esteroideos (aspirina o indometacina) e incluso
trombosis, la mayoría d e las personas asintomáticas
los esteroides a dosis bajas.
e n quienes de forma incidental se encuentran nive-
les positivos d e aPL, no desarrollan trombosis. C o n m e n o s f r e c u e n c i a q u e la a f e c c i ó n a l
En el momento actual a estos pacientes general- pericardio se ha descrito una "miocarditis reumatoi-
mente se les deja sin tratamiento o solo c o n aspirina d e a " . Su presencia es poco frecuente (2 al 3 % de los
a dosis baja c o m o prevención. casos) y al igual que cualquier tipo de miocarditis,
El tratamiento d e la trombosis aguda e n pacien- puede condicionar trastornos d e la conducción au-
tes con SAF no difiere del tratamiento de la trombo- riculoventricular, intraventricular o incluso manifes-
sis por cualquier otra causa. taciones d e insuficiencia cardiaca. Finalmente, se
El tratamiento c o n corticosteroides a altas dosis, ha descrito infiltración focal del endocardio por los
ciclofosfamida y plasmeíeresis para reducir transito- nodulos reumatoideos. Si su localización es en el
riamentc los niveles circulantes ele aPL junto con miocardio o e n el septum interventricuiar, general-
CARDIOLOGÍA
mente no existe compromiso hemodinámico; sin medades de la colágena que con mucha frecuencia
embargo, si se localizan en las comisuras valvulares, involucra a la esfera cardiovascular e n algún mo-
en las valvas cardiacas o e n el aparato subvalvular, mento d e su curso clínico. Puede afectar práctica-
pueden condicionar insuficiencia valvular, la cuál se mente todas las estructuras cardíacas, d e aquí el
magnificará e n la medida que el nodulo c r e z c a , o nombre de "corazón esclerodérmico", introducido
bien, sufra erosión o necrosis. Así, sé han señalado por Weiss en el año de 1 9 4 3 .
en la literatura casos aislados de insuficiencia valvular Se estima que cerca del 80 % de los enfermos
grave incluso c o n ruptura de cuerdas tendinosas. llegan a manifestar signos y síntomas de enferme-
dad cardiovascular; los cuales pueden obedecer al
daño vascular primario o bien secundarios a daño
ESPONDILITIS ANQUILOSANTE renal o pulmonar. La afección cardiaca es c o m ú n ,
aunque no siempre clínicamente manifiesta. Ha-
A diferencia del lupus eritematoso sistémico y de la llazgos de autopsia revelan que puede ocurrir hasta
artritis reumatoide, e n donde la mujer se ve afecta- en el 50 % de los pacientes.
da hasta en una proporción de 4 a 1, en la espondilitis El daño característico e n e l miocardio es justa-
anquilosante la frecuencia es mayor en el hombre, mente la fibrosis, la cual se ha pensado, obedece a
la cual llega a ser incluso d e 8 a 9 : 1 . lo que se le ha llamado "fenómeno de Raynaud del
Esta enfermedad se caracteriza por condicionar corazón", en d o n d e el vasoespasmo asociado a
una extensa reacción inflamatoria articular, con pre- reperfusión i n t e r m i t e n t e , p r o d u c e b a n d a s de
dominio franco en los cuerpos vertebrales, lo que a necrosis y en consecuencia fibrosis difusa en par-
la larga condiciona fusión costovertebral. La afec- ches. Es probable también que c o n el tiempo las
ción cardiovascular no es frecuente, y aún más raro lesiones inicialmente vasoespáslicas se tornen e n
es el derrame pericárdico. La lesión característica lesiones cstruc.luralmente fijas, lo cual puede com-
es un proceso inflamatorio esclerosante, que tiene prometer la circulación epimiocárdica e intramio-
particular predilección por el área de la raíz aórtica; c á r d i c a , condicionando contracción y fibrosis.
sin embargo, es habitual que se extienda por arriba A diferencia de otras colangenopatías, la partici-
y por abajo de la válvula aórtica, condicionando in- pación pericárdica es rara, benigna y silenciosa,
suficiencia de dicha válvula o incluso insuficiencia observándose aproximadamente en el 5 al 1 0 % de
mitral si es que esta válvula se v e involucrada e n su los casos. El líquido pericárdico cuando está presen-
porción basal, la cual está e n íntima continuidad con te es generalmente un exudado que puede conte-
la válvula aórtica. Hay que tener presente que cuan- ner complejos inmunes, autoanticuerpos, etc.
do existe insuficiencia mitral asociada, pueden exis-
La afee ción miocárdica está presente hasta en el
tir trastornos del ritmo y de la conducción interven-
5 0 % d e los casos de estudio anatomopatológico. Su
tricuiar, por infiltración del septum interventricuiar.
representación clínica es la insuficiencia cardiaca
No se conoce con precisión la frecuencia con la que
congestiva venosa por dilatación de las cavidades
se afecta la raíz aórtica, es alrededor del 1 0 %.
ventriculares c o n síncope o muerte súbita como
Debido a que en la lesión cardiaca predomina la manifestaciones iniciales.
esclerosis sobre la inflamación, son de poca utilidad Es c o m ú n e n este grupo de enfermos el encon-
para el control de la lesión aórtica los esteroides. trar cifras elevadas de presión arterial. Se ha infor-
Comúnmente, el curso de la insuficiencia aórtica es mado generalmente como secundaria la insuficien-
silencioso; sólo en contados casos surge la necesi- cia renal c r ó n i c a ; sin embargo, no es requisito
dad del cambio valvular. Más raro a ú n , la espondilitis indispensable el daño renal para el desarrollo de
anquilosante puede acompañarse de trastornos de hipertensión arterial, por lo que al igual que para el
la conducción y manifestaciones de insuficiencia daño miocárdico, el "fenómeno de R a y n a u d " pue-
cardiaca, las cuales c o m o sucede en el resto de las de jugar un papel importante en el desarrollo de
colangenopatías, son atendidas con el tratamiento esta complicación.
convencional.
Seguramente la fibrosis miocárdica es la res-
ponsable d e esos trastornos de la c o n d u c c i ó n que
se presentan e n este padecimiento, siendo los más
ESCLEROSIS SISTÉMICA PROGRESIVA frecuentes los bloqueos d e rama y el bloqueo
auriculo-ventricular d e primer grado. S u frecuen-
C o m o sucede en el lupus eritematoso sistémico, la cia se ha informado en alrededor del 30 al 4 0 % de
esclerosis sistémica progresiva es una de las enfer- los casos.
EL CORAZÓN EN OTROS PROCESOS SISTÉMICOS
La misma infiltración miocárdica bien podría ex- sistémica progresiva y lupus eritematoso sistémico;
plicar los trastornos del ritmo observados e n estos a esta situación primeramente le llamó síndrome de
casos siendo los más frecuentes las extrasístoles s u - sobreposición y más tarde enfermedad mixta del
praventriculares y ventriculares, las cuales pueden tejido conjuntiva.
demostrarse hasta e n el 2 0 % d e los electrocardio- Los síntomas d e la enfermedad son múltiples y
gramas de reposo y en más del 6 0 % mediante la variados; sin embargo, es c o m ú n encontrar poliar-
electrografía ambulatoria (Holter). tralgias, fenómeno de Raynaud, artritis, edema de
La afección endocárdica también puede existir, manos, hipomotilidad esofágica y miositis. La afec-
caracterizándose por engrosamiento de las válvulas ción cardiovascular no es infrecuente, y al igual que
auriculoventriculares y raramente d e la válvula para el LES, puede haber pancarditis incluso c o n
aórtica. A la par de la afección cardiaca, la enferme- afección a las arterias coronarias.
dad pulmonar es sumamente frecuente y la hiper- El pericardio es el más afectado, pudiendo es-
tensión arterial pulmonar es su forma d e presenta- tar inflamado hasta e n el 4 5 % de los casos. La peri-
ción. La frecuencia es estimada hasta en el 5 0 % de carditis frecuente es de curso silencioso, "fibrinosa"
los casos ( 3 3 - 6 0 % ) . y autolimitada, excepcionalmente condiciona gran-
Hasta hace pocos años, se pensaba que esta com- des derrames pericárdicos o taponamiento
plicación dependía del grado de fibrosis intersticial cardiaco.
pulmonar; sin embargo, se ha demostrado que es La miocarditis puede estar presente hasta e n el
justamente la enfermedad vascular obliterante, la 20 % de los casos y sus síntomas primarios son tras-
principal causa de hipertensión arterial pulmonar. tornos de la conducción auriculoventricular, aumen-
C o m o es d e esperarse, dependiendo del tiempo y to del automatismo ventricular y manifestaciones de
de la gravedad de las lesiones, el enfermo podrá o falla cardiaca. Finalmente, puede haber involucro
no tener manifestaciones d e cardiopatía hipertensiva endocardico, sin embargo, la afección valvular es
pulmonar. rara en esta enfermedad.
El tratamiento d e las complicaciones cardiacas
habitualmente no requiere mayor cambio a lo y a
E N F E R M E D A D MIXTA DEL T E J I D O señalado en líneas anteriores. Q u i z á valga la pena
CONJUNTIVO señalar q u e al contrario d e las lesiones d e la
espondilitis anquilosante y d e la artritis reumatoide
En 1972 Gordon Sharp describió un grupo de enfer- se considera que las pacientes con enfermedad mixta
mos e n los cuales existía una combinación de ha- tienen un pronóstico más halagador y una respuesta
llazgos clínicos entre dermatomiositis, esclerosis más favorable al uso de esferoides.
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A S C A R D I O P A T Í A S C O N G É N I T A S aparecen yor, por lo que la improvisación e n el manejo diag-
apj^xjmadarnerite err 7 . x 1000. niños naci- nóstico o terapéutico de estos niños debe ser con-
dgs_viwQ5- Dos tercios de ellos mueren en el siderada c o m o una aventura e n la que las proba-
primer año, si no se diagnostica oportunamente y bilidades d e éxito son prácticamente nulas. En e l
no se aplica el tratamiento apropiado. El reconoci- paciente de mayor e d a d , debemos establecer e l
miento oportuno de las cardiopatías congénitas más diagnóstico d e las cardiopatías congénitas más
frecuentes en el niño escolar y e n el adolescente c o m u n e s , y diferenciarlas de los fenómenos aus-
es de importancia trascendental pues la mayoría cultatorios " i n o c e n t e s " c o n las que p u e d e n con-
de ellas puede sertratada con cirugía, exitosamente. fundirse o bien, d e llegar a la conclusión d e que
Es obligación del médico general y del pediatra re- la cardiopatía es compleja y se requiere manejo
conocer la posibilidad de cardiopatía congénita, y diagnóstico especializado. Las cardiopatías c o n -
obligación del cardiólogo establecer el diagnóstico génitas se subdividen e n dos grandes grupos:
especializado; él indicará los estudios apropiados
que deban realizarse y en conjunto con el ciruja-
a) N o c i a n ó g e n a s
no cardiovascular planeará la posible indicación
Estas malformaciones congénitas se caracterizan por
quirúrgica.
tener alguna alteración estructural de las válvulas
El diagnóstico de las cardiopatías graves d e l cardiacas (aorta bicúspide, estenosis aórtica, este-
recién nacido es responsabilidad del neonatólogo nosis mitral, estenosis pulmonar, etc.), d e los_gran-
y del cardiólogo pediatra. Este diagnóstico está des vasos (coartación aórtica, estenosis pulmonares
fuera del alcance d e médicos q u e no tengan e n - distales, etc.), o d e la pared ventricular propiamen-
trenamiento especializado e n el manejo de estos te dicha (fibroeslastosis endocárdica, síndrome de
niños. La sospecha del padecimiento, la indica- ventrículo izquierdo hipoplásico, etc.), e n los que
c i ó n d e estudios h e m o d i n á m i c o s , e l e s t u d i o no h a y c o m u n i c a c i o n e s i n t r a c a r d i a c a s o
ecocardiográfico orientado hacia la búsqueda del intravasculares (cortocircuitos), o bien, aquellas otras
diagnóstico y el planeamiento quirúrgico son con- malformaciones en las que sí hay cortocircuitos (co-
diciones que requieren de la fina sagacidad del municaciones intracardiacas o intravasculares), pero
especialista, y a q u é la forma c o m o los padeci- la sangre oxigenada pasa hacia las cavidades dere-
mientos se presentan y su pronóstico son total- chas (cortocircuito arteriovenoso), por lo q u e no
mente diferentes que e n e l niño mayor y, más a ú n , aparece cianosis, c o m o acontece e n la comunica-
que e n los adultos; asimismo, el cateterismo car- ción interauricular, interventricuiar o persistencia
díaco y la cirugía del neonato son d e riesgo m a - del conducto arterioso.
CARDIOLOGÍA
- monares, etc.).
naoáslc >. ra m y ÍBU
r
ÍI9 ¿9JIT9109T
Cardiopatías c o n vascularidad pulmonar
¡iioqrrñ '»b sa
disminuida por estenosis p u l m o n a r y dis- ves uq^r-ltaob
m i n u c i ó n d e l flujo h a c i a l a c i r c u l a c i ó n
•Egiido ii
m e n o r , e n c u y o caso p u e d e h a b e r c o r t o -
c i r c u i t o v e n o a r t e r i a l o m i x t o (tetralogía
• I Teoofto:
d e Fallot, trilogía d e Fallot, t r a n s p o s i c i ó n óbügüdc,
ÜGbíXJi
d e los g r a n d e s v a s o s c o n e s t e n o s i s
pulmonar, etc.).
VCI
PERSISTENCIA DEL C O N D U C T O
ARTERIOSO (PCA)
-nornoiqcnq islushJnav boisq_ &) ab o ( . 3 J a ¿dlfiféib
v
primera hacia la segunda, lo que provoca hiper- estos niños se utilizarán digital y diuréticos, pero se
volemia del circuito menor. La cantidad de san- intentará lograr el cierre farmacológico del c o n -
gre que pasa de la aorta a la pulmonar depende ducto mediante inhibición farmacológica d e la sín-
de la diferencia de presiones entre ambas c á - tesis de prostaglandinas, utilizando indometacina a
maras y del diámetro del conducto. dosis de 0.2 mg/kg e n 2 0 minutos, se puede a d m i -
nistrar una segunda o tercera dosis, y se valoran
2. El aumento del flujo pulmonar llega a las cavida- resultados e n las siguientes 24 a 4 8 horas. Aproxi-
des izquierdas y las sobrecarga volumétricamen- madamente e n el 1 0 % d e estos pacientes el trata-
te. La cantidad de sangre que sale a la aorta está miento médico fracasa, por lo que se recurre a
a u m e n t a d a , pero al fugarse hacia el circuito tratamiento quirúrgico (ligadura del conducto).
p u l m o n a r , a t r a v é s d e l c o n d u c t o , e l flujo
sistémico disminuye. Síntomas
En sujetos mayores
Persistencia del c o n d u c t o arterioso e n el niño
p r e m a t u r o y e n e l lactante. a) En éstos pueden estar ausentes (conductos
En las primeras horas de vida del niño a término, se pequeños).
produce una constricción del conducto arterioso de-
b) Los pacientes refieren "bronquitis" frecuen-
bido fundamentalmente a la contracción de las fibras
tes crónicas, c o m o consecuencia de conges-
musculares lisas de su capa media, que oblitera
tión pulmonar (conducto grande).
funcionalmente al conducto, hecho que se debe a la
alta saturación de 0 de la sangre circulante que
2
c ) El hipodesarrollo ponderal, es un síntoma muy
produce aumento d e la contractilidad del músculo frecuente por disminución del flujo sistémico
liso. 2 a 3 semanas después prolifera la Capa íntima (conducto grande).
que se acompaña de pequeños focos de necrosis,
que va seguida la formación de tejido conectivo y d) P u e d e ser c a u s a d e i n s u f i c i e n c i a c a r d i a -
obliteración anatómica del conducto. En los niños c a del r e c i é n n a c i d o , c u a n d o e l c o n d u c t o
prematuros el proceso del cierre funcional se halla es g r a n d e .
considerablemente retardado; asimismo, en los ni-
ños que nacen en grandes altitudes, la relativamente Signos
baja saturación de 0 ambiental favorece la persis-
¿ C u a n d o el corto circuito es igual o mayor al
tencia del conducto arterioso. Si el conducto persis- doble del sistémico;
tente es pequeño puede no causar ningún trastorno ..Kg • Í « « t ¡ i> «ngosf s-b 'XJSTKÍ fe i o q i-boi;bcnq
hemodinámico significativo; si por el contrario, tiene s.i'iH¡'P ¡ O B O I O B I S D Í lüiwieib I Ü U D O Í .oijubnoa
4 1037
CARDIOLOGÍA
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1039
CARDIOLOGÍA
busca e n el eje corto a nivel de los grandes vasos. En ra 7). Finalmente, cuando el conducto persistente
dicho corte se puede visualizar el conducto persis- se ha complicado con hipertensión arterial pulmonar
tente comunicando la arteria pulmonar con la aorta e insuficiencia pulmonar funcional la técnica Doppler
descendente (figura 6). lambién puede reconocerla cuando se estudia el
Asimismo, mediante técnica Doppler continuo se flujo en la vía de salida del ventrículo derecho (eje
demuestra en el tronco d e la arteria pulmonar la corto paraesternal a nivel de los grandes vasos), y se
presencia de un flujo sístolo-diastólico positivo (figu- demuestra un flujo turbulento diastólico positivo (se
ra 7). Este diagnóstico también puede lograrse cuan- acerca al transductor) (figura 8).
do se demuestra la presencia de flujo turbulento (mo-
saico de colores), que pasa de la aorta hacia la arteria Cateterismo cardiaco
pulmonar a través del conducto persistente, utilizan- Cuando el cuadro clínico no es característico, el
do el sistema Doppler codificado en color. soplo no tiene la localización habitual, ha dejado de
El Doppler d e onda continua puede ser de utili- ser continuo, existe duda diagnóstica, o existen otras
dad para cuantificar la presión sistólica de la arteria malformaciones asociadas o bien c o n los métodos
pulmonar a través de la velocidad máxima del flujo no es posible asegurar el diagnóstico, hay indica-
regurgitante registrado e n la arteria pulmonar (figu- ción para realizar cateterismo cardiaco derecho.
Oximetría
El cortocircuito arteriovenoso a través del c o n -
ducto producirá un a u m e n t o en la situación de
oxígeno, a nivel de la arteria pulmonar. El e n c o n -
trar un a u m e n t o d e 2 v o l . % o más de 0 a nivel
¿
EJEMPLO:
SATURACIÓN DE 0 2
Sitio O , vol.%
14
ves
AD
14 2
VD
16
Tco. AP FIGURA 8 Insuficiencia pulmonar. Ecocardiogra-
fía Doppler. El registro a nivel de la cámara de
Tensiometría salida del ventrículo d e r e c h o (eje corto
La cuantificación de la presión pulmonar general- paraesternal), enseña la presencia de un flujo
mente es normal, lo mismo que las resistencias pul- diastólico positivo (se acerca al transductor), que
monares. El P C A puede acompañarse de un gran pone de manifiesto la insuficiencia pulmonar
FIGURA 10 Persisten-
cia del conducto arte-
rioso. El estudio angio-
cardiográfico con
disparo de medio de
contraste en la aorta
(Ao) descubre el con-
ducto persistente (se-
ñalado entre flechas)
al demostrar el paso
de medio de contraste
hacia la arteria pulmo-
nar (Ap). (Cortesía del Dr.
M. A. Martínez Ríos)
l II I II I II
<»> (b) (c)
i i
FIGURA 11 Persistencia del conducto arterioso típico. A: La presión pulmonar es normal, el gradiente
aortopulmonar existe a lo largo de todo el ciclo cardiaco, por lo que el cortocircuito arteriovenoso (paso
de sangre de la aorta a la pulmonar), sucede tanto en sístole como en diástole; el resultado es un soplo
continuo. B: La hipertensión pulmonar puede hacer desaparecer el gradiente entre ambos vasos
durante la diástole, por lo que el cortocircuito sólo ocurre en la sístole y, por lo tanto, desaparece el
componente diastólico del soplo. C: Cuando la elevación de la presión pulmonar es extrema y alcanza
niveles sistémicos, desaparece el gradiente aortopulmonar y con ello el soplo que caracteriza al
conducto
— • . ^ ^ »-
r s
'.
4^
CARDIOLOGÍA
J ss 1
tí FIGURA 13 Persistencia del con-
ducto arterioso con grave hiper-
tensión arterial pulmonar (simi-
lar a la presión sistémica); se
puede apreciar la presencia de un
chasquido protosistólico pulmo-
nar (chps) seguido de un peque-
ño soplo expulsivo (SS), el II rui-
do con un desdoblamiento muy
e s t r e c h o y un importante
reforzamiento del componente
pulmonar del II ruido (llp)
ijrÜ
V
••\fV
FIGURA 14 Persistencia del conducto arterioso con hipertensión pulmonar, soplo de
Graham-Steel. El foco pulmonar del I ruido está desdoblado (Im e IT); hay un chasquido
protosistólico (ch), seguido de un pequeño soplo sistólico (SS), el II ruido demuestra
reforzamiento de su componente pulmonar (llp) y de él parte un soplo diastólico
decreciente de insuficiencia pulmonar (llp) (soplo de Graham-Steel)
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
tricular derecha y corazón d e tamaño normal son ria pulmonar (figura 9) o c o n el estudio angiocar-
manifestaciones clínicas del conducto hipertenso. diográfico (figura 10).
El soplo de Holdak ayuda a sospechar el diagnósti-
co. La ecocardiografía mediante aproximación s u -
TRATAMIENTO
praesternal acompañada de técnica d e contraste,
puede poner de manifiesto el conducto persisten- El conducto sin hipertensión pulmonar tiene indi-
te (figura 16), pero e l diagnóstico de certeza sólo cación de cierre percutaneo o quirúrgico e n c u a n -
se obtiene mediante el cateterismo cardiaco dere- to es diagnosticado, ya que en nuestro medio, su
cho, al pasar el catéter hacia la aorta desde la arte- mortalidad es prácticamente nula. Conviene indi-
11045
CARDIOLOGÍA
C o m u n i c a c i ó n Interventricuiar c h i c a , sin r e -
percusión h e m o d i n á m i c a
Este defecto septal está localizado a nivel el septum
membranoso. En este caso, la magnitud del cortocir-
cuito es mínima y por lo tanto, el hiperflujo pulmonar
y la sobrecarga en ambos ventrículos es pequeña o no
existe. Asimismo, no hay cardiomegalia, hipodesarrollo
pondoestatural, ni hipertensión pulmonary la cardio-
patía sólo s e manifiesta por un pequeño soplo
regurgitante, decreciente, de alta frecuencia localiza-
do e n el borde paraesternal izquierdo (figura 19).
1048?,
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
J . R. S. 159443 21-IV-78
1051
CARDIOLOGÍA
Saturación de 0
1. Trayecto del catéter
2
C u a n d o e l d e f e c t o es g r a n d e , p u e d e s e r Sitio O Vol.%
J
81 .
FIGURA 27 Comunicación
interventricuiar. Ecocar-
diografía Doppler. El estu-
dio del flujo en la región
paraseptal derecha, me-
diante técnica de Doppler
continuo, bajo visión di-
recta (a la derecha), de-
muestra la presencia de
un flujo turbulento sistóli-
co positivo producido por
el chorro regurgitante que
se acerca al transductor (a
la izquierda). (Cortesía del
Dr. David Huerta. Hospital cen-
tral militar)
11053
CARDIOLOGÍA
Evolución natural
1. La CIV chica, con mucha frecuencia evoluciona
hacia el cierre espontáneo. Algunos autores han
llamado la atención acerca de la alta frecuencia
con que se encuentra comunicación interven-
tricuiar chica en niños preescolares y escolares,
y por el contrario, la rareza con que ésta es
diagnosticada en el adulto, lo cual ha sido atri-
buido precisamente a que dichos defectos se
cierran espontáneamente en cerca del 70 % de
los casos. Sin embargo, este tipo de CIV tiene el
riesgo potencial de endocarditis infecciosa in-
jertada en la válvula tricúspide, razón por la
q u e su p r e s e n c i a implica profilaxis c o n
antibióticos cuando el paciente se somete a
procedimientos con bacteriemia potencial como
extracciones dentarias (ver capítulo de E N D O -
CARDITIS INFECCIOSA).
ventricular disminuye paulatinamente el gra- diante cierre del defecto c o n un parche de mate-
diente sistólico existente, en relación c o n el rial sintético. La indicación quirúrgica deberá ser
ventrículo izquierdo y, por lo tanto, disminuye individualizada e n cada c a s o , de a c u e r d o c o n el
concomitantemente el cortocircuito arteriovenoso; grado de hipodesarrollo físico, presencia de insu-
este hecho condiciona la disminución del soplo de ficiencia cardiaca o ausencia de ésta, e d a d y peso
CIV y de la sobrecarga volumétrica del ventrículo del paciente, cantidad de cortocircuito y resisten-
izquierdo, lo cual, a su vez, se traduce por disminu- cias p u l m o n a r e s . El tratamiento quirúrgico tiene
ción de la cardiomegalia. Cuando la presión del muy buenos resultados e n centros especializa-
ventrículo derecho ¡guala a la presión ventricular dos, ya que la mortalidad es prácticamente nula
izquierda (gran hipertensión pulmonar), desapare- por arriba de los 2 años. En niños más pequeños
c e el cortocircuito arteriovenoso y con él el soplo de tres meses, la mortalidad es e l e v a d a (8.3 a
de CIV y el corazón adquiere el tamaño normal, 37.5%).
persistiendo el abombamiento del cono de la arte-
ria pulmonar, ahora por la acentuada elevación de
la presión pulmonar (figura 32). A la exploración INDICACIÓN QUIRÚRGICA
física sólo será manifiesta la hipertensión pulmonar
1. Lactantes menores de 3 meses
(figura 13), e incluso un soplo de Graham-Steel
(insuficiencia pulmonar) (figura 14). Finalmente el En estos pacientes la intervención quirúrgica está
cortocircuito puede tornarse venoarterial y apare- indicada cuando cursan con cuadros de insuficien-
cer cianosis periférica por el paso d e sangre cia cardiaca intratable médicamente. La mortali-
insaturadaa la circulación sistémica. dad es elevada cuando se intenta la corrección
quirúrgica del defecto septal ventricular, debido a
la necesidad de intervenir a "corazón abierto" y el
uso de la bomba de circulación extracorpórea, es-
TRATAMIENTO pecialmente debido a la inmadurez del riñon, por
La C I V ( Q P / Q s < 1.5)chica y la d e tipo Roger, no ello, se prefiere realizar una constricción de la
arteria pulmonar, la cual disminuye drásticamente
requieren de tratamiento específico. La C I V gran-
el cortocircuito arteriovenoso y reduce consecuti-
de c o n insuficiencia cardiaca d e l recién nacido
vamente la sobrecarga de las cavidades ventricula-
debe ser manejada con digoxina y diuréticos. La
res y con ello desaparece la insuficiencia cardiaca;
C I V grande requiere tratamiento quirúrgico, m e -
4 ^
CARDIOLOGÍA
FIGURA 31 Aneurisma del septum membranoso. Ecocardiograma bidimensional. A: El eje largo apical
demuestra un aneurisma del septum membranoso (señalado con una flecha) que protruye hacia el
ventrículo derecho (VD). B: La aproximación apical de cuatro cámaras enseña también un aneurisma
del septum membranoso (señalado con una flecha) (Cortesía del Dr. Adolfo Vera D.- Cali, Colombia)
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
gre, n o sólo a la pulmonar, sino también hacia la de un orificio que permita la comunicación entre
aorta. El cierre del defecto será equivalente a un ambas aurículas, localizado en la parte baja del septum
incremento en la sobrecarga ventricular dere- interauricular (figura 33).
cha aguda, ya de por sí en niveles extremos, q u e Los defectos de tipo seno venoso s e localizan
no será tolerada por el corazón y se traducirá en en la parte dorsal y posterior del tabique q u e en su
dilatación aguda del mismo y paro cardiaco. unión c o n el techo cerca d e la desembocadura d e
las venas cavas o del seno coronario puede aso-
ciarse a drenaje anómalo de venas pulmonares (fi-
COMUNICACIÓN gura 33).
INTERAURICULAR (CIA)
Aspectos a n a t ó m i c o s (figuras 33 y 34)
Las comunicaciones interauriculares se pueden ori- 1. Tipos de defecto
ginar por falta de crecimiento de los tabiques atriales
a ) Septum rudimentario o ausente (aurícula única).
y/o por zonas de necrosis celular. C u a n d o el defecto
septal auricular se origina por alteraciones en la b) D e tipo ostium primum (falta d e septum
formación del tabique interauricual sin que inter- primum), frecuentemente se asocia a insufi-
vengan alteraciones e n el septum atrioventricular, ciencia mitral y/o tricuspídea por defecto en
se le denomina ostium secundum. Los tipos más la formación de los cojinetes valvulares y por
frecuentes son: el orificio oval, el foramen secundum lo tanto, la formación de hendidura de las
y el seno venoso. válvulas septales mitral o tricúspide, o ambas
Existen comunicaciones grandes e n que se invo- (canal atrioventricular incompleto) desapare-
lucran la zonas de dos tipos: la ausencia de tabicación c e el septum atrioventricular y ambas vávulas
origina la aurícula única, y los defectos e n el orificio (mitral y tricúspide quedan al mismo nivel).
oval están circunscritos por el limbo de ese orificio
constituido por e l reborde circular d e l septum c) Persistencia del foramen secundum comuni-
secundum y constituyen el 6 9 % d e las c o m u n i c a - cación a nivel del ostium secundum.
ciones atriales. d) F o r a m e n o v a l p e r m e a b l e o f o s a o v a l
Las comunicaciones denominadas d e tipo fora- fenestrada multiperforada.
men secundum están cerca de la desembocadura de
la vena cava superior, cuando son amplias llegan
hasta el techo del atrio, por lo q u e se establece un ves
drenaje venoso pulmonar al atrio derecho. Este de-
fecto se origina por necrosis del septum secundum,
frente al foramen secundum.
FISIOPATOLOGÍA
flujo pulmonar que condiciona un aumen- nar grave, el II ruido presenta un escaso
to del periodo expulsivo derecho y tam- desdoblamiento del II ruido, c o n el llp
bién un retraso en el cierre pulmonar (llp) muy reforzado.
y a la disminución del gasto sistémico que
anticipa el cierre aórtico (lia). La amplitud b) La "fijeza" del desdoblamiento, se debe a
del desdoblamiento del II ruido (distancia que el septum interauricular separa los
lla-llp), depende específicamente de las eventos hemodinámicos que normalmen-
resistencias pulmonares. C u a n d o existe te ocurren en ambas aurículas y que son
hipervolemia pulmonar y las resistencias exactamente contrarios con la respiración.
pulmonares son bajas, la capacitancia de Durante la inspiración aumenta el retor-
las mismas permite el vaciamiento d e la no hacia la aurícula derecha y aumenta,
cantidad aumentada de sangre hacia el cir- por lo tanto, el gasto pulmonar (retraso e n
cuito menor, y por lo tanto, el retraso con- la aparición del llp); por el contrario, el
comitante del cierre pulmonar (llp retra- aumento d e capacitancia d e las venas
s a d o II r u i d o m u y d e s d o b l a d o ) ; e l pulmonares disminuye el retorno hacia la
incremento de las resistencias pulmonares aurícula izquierda y, por lo tanto, dismi-
h a c e m e n o s d i s t e n s i b l e el sistema nuye el gasto sistémico (anticipación del
arteriolar, lo cual produce una disminu- lia). La suma de estos efectos trae por con-
ción inversamente proporcional del secuencia desdoblamiento (fisiológico) del
hiperflujo pulmonar, y por lo tanto, el II ruido e n la inspiración.
periodo expulsivo derecho previamente Durante la espiración los sucesos he-
prolongado, se acorta de manera también modinámicos son exactamente contrarios:
proporcional, la consecuencia es la anti- se anticipa el llp y se retrasa el lia, ello
cipación del llp y la disminución en la trae c o m o consecuencia que en espira-
amplitud del desdoblamiento del II ruido. ción el II ruido se ausculta c o m o ú n i c o .
C u a n d o aparece la hipertensión pulmo- La presencia de un defecto septal auricu-
FIGURA 35 Desdoblamiento "fijo" del II ruido. El registro fonocardiográfico, a nivel del foco pulmonar
(c-2-2) simultáneo con un electrocardiograma (ECG) y un neumograma (neumo) pone en evidencia la
relación constante en la separación de los componentes del II ruido (Ha y llp) independientemente del
ciclo respiratorio; se ha perdido el comportamiento fisiológico. Nótese la presencia de un retumbo
(ret) de hiperflujo tricuspídeo
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
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c) Prominencia del cono de la arteria pulmonar. cuenta de que en presencia de defecto septal
auricular nunca se podrá obtener una onda
d) Aorta pequeña, consecuencia de la disminución
" a " gigante, porque la presión "se escapa"
del gasto sistémico.
precisamente a través del defecto septal.
1062 i
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
FIGURA 38 Comunicación
interauricular variedad
ostium primum. Electrocar-
diograma. El trazo demuestra
la presencia del bloqueo de
rama derecha (rSR' en VI) con
rotación del áQRs a la iz-
quierda (-40°)
1063
CARDIOLOGÍA
presiones e n ambas aurículas son muy similares y certificarse c o n exactitud, mediante métodos in-
en un momento dado puede haber cortocircuito c r u e n t o s y no es n e c e s a r i o e l c a t e t e r i s m o car-
mixto lo cual hace posible la visualización d e diaco. Si la C I A es grande, el cateterismo cardiaco
microbulas en la aurícula izquierda. podrá c o m p l e m e n t a r el estudio p r e o p e r a t o r i o
Asimismo, se puede calcular con exactitud el del paciente, especialmente con la cuantificación
corto circuito AV mediante técnica de Doppler pul- de la m a g n i t u d d e l cortocircuito a r t e r i o v e n o s o
sado (ver capítulo de Ecocardiografía Doppler). de la presión p u l m o n a r y de los cálculos d e las
resistencias p u l m o n a r e s . En el caso d e una C I A
Cateterismo cardiaco h i p e r t e n s a , se p o d r á establecer el diagnóstico
d e c e r t e z a c o n este estudio y v e r i f i c a r e l c o m -
Si el defecto septal es chico y no tiene repercusión
portamiento d e las resistencias p u l m o n a r e s tal y
hemodinámica (sin hipodesarrollo, sin cardiomega-
c o m o se analizó para la c o m u n i c a c i ó n interven-
lia, ni hipertensión pulmonar), el estudio puede
CARDIOPATIAS CONGENITAS
tricular. En la actualidad, el diagnóstico clínico con la indicación quirúrgica y del pronóstico futu-
completamentado con el ecocardiograma certifica ro del paciente (ver capítulo de H E M O D I N Á M I C A
el diagnóstico, y el cateterismo cardiaco, en la mayor CARDIOVASCULAR Y CATETERISMO CARDIACO)
parte d e los casos es terapéutico (vide infra), la
utilidad diagnóstica del cateterismo cardiaco se 4 . Cálculo del cortocircuito
resume a continuación: S e podrá c a l c u l a r la m a g n i t u d d e l c o r t o c i r c u i t o
arteriovenoso y del gasto p u l m o n a r total (ver c a -
1. Trayecto del catéter pítulo de H E M O D I N Á M I C A C A R D I O V A S C U L A R
Cuando se sospecha el diagnóstico de C I A se aborda y C A T E T E R I S M O C A R D I A C O ) , datos que son úti-
el corazón desde la vena femoral derecha, ya q u e les para la v a l o r a c i ó n quirúrgica d e l p a c i e n t e
por la posición anatómica del septum interauricular, c u a n d o e l c o r t o c i r c u i t o es m a y o r o igual que e l
la llegada del catéter a través de la vena cava infe- doble d e sistémico y las resistencias pulmonares
rior encuentra con toda facilidad los defectos septales son n o r m a l e s , se e s t a b l e c e c o n c e r t e z a la indi-
(figura 4 6 ) , el paso del catéter hacia la aurícula iz- cación q u i r ú r g i c a . C u a n d o hay cortocircuito A V
quierda establece el diagnóstico cardiaco se resu- aun c u a n d o sea m e n o r d e l d o b l e d e l sistémico
m e a continuación: se d e b e c o n s i d e r a r la posibilidad d e l c i e r r e d e l
d e f e c t o . Si no se d e m u e s t r a cortocircuito se tra-
2 . Oximetría t a r á de un f o r a m e n oval sin r e p e r c u s i ó n
hemodinámica.
L a concentración de 0 será mayor e n la aurícula
;
1066A
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
portante cortocircuito arteriovenoso. La historia na- ser causa de que aparezca un cortocircuito venoso-
tural del padecimiento enseña que los pacientes arterial y cianosis periférica e insaturación arterial.
pueden sobrevivir hasta la 7- y aun 8 década de la a
Por último, la comunicación interauricular sin re-
vida; sin embargo, c u a n d o el defecto es grande, la percusión hemodinámica alguna, probablemente
hipertensión pulmonar con todas sus graves compli- tiene una evolución natural comparable a la de los
caciones irreversibles como la trombosis pulmonar sujetos sanos; sin embargo, este tipo de defectos e
y el Cor pulmonale, hace su aparición muy frecuen- incluso el solo foramen oval permeable, se han
temente por arriba de la 4 década de la vida, lo
S
FIGURA 45 Comunicación
interauricular. Cateterismo
cardiaco. El catéter llega a
la aurícula derecha (AD) a
través de la vena cava infe-
rior (VCI) y pasa a la aurícula
izquierda (Al) por un defec-
to septal auricular. (Cortesía
del Dr. VI. A. Martínez Ríos)
1067
CARDIOLOGÍA
genada a las c a v i d a d e s i z q u i e r d a s y a la c i r c u l a -
ción sistémica.
Aspectos a n a t ó m i c o s
1. Cuando por alguna aberración e n el desarro-
llo embriológico las venas pulmonares no lle-
gan a la aurícula izquierda, estaremos en pre-
sencia de una desembocadura, conexión o
drenaje anómalo total de las venas pulmona-
res. Las 4 venas pulmonares pueden drenar a
un colector venoso, conectado a la vena cava
izquierda persistente, la cual a su vez conec-
ta a la vena ¡nominada y ésta a la vena cava
superior (figura 47-A) (forma supracardiaca).
O t r a forma puede ser que las cuatro venas
pulmonares desembocan en un colector v e -
noso, el cual a su vez se conecta con el seno
coronario y éste desemboca en la aurícula
derecha (forma cardiaca) (figura 47-B). La
tercera variedad la constituye la desemboca-
dura directa de las cuatro venas pulmonares
en la aurícula derecha (figura 47-C) (forma
FIGURA 46 Ostium primum. El catéter alcanza al cardiaca). En la variedad infracardiaca las cua-
ventrículo izquierdo (VI) después de haber pasado tro venas pulmonares llegan a un colector
de la aurícula derecha (AD) a la aurícula izquierda venoso y éste se conecta al sistema venoso
(Al) a través de la CIA. El medio de contraste dibu- umbilicovitelino que se comunica a la porta o
ja la imagen de "cuello de ganzo" producida por al
a la vena cava inferior (figura 47-D).
estrechez de la cámara de salida del ventrículo
izquierdo (flechas). (Cortesía del Dr. M. A. Martínez Ríos)
2. Dilatación de aurícula y ventrículo derechos.
el defecto es grande, un volumen considerable de Cuando por cualquier motivo existe obstrucción al
contenido sanguíneo pasa a la circulación general. flujo venoso pulmonar, ello traerá como conse-
En ambos casos el flujo pulmonar se encuentra cuencia hipertensión venocapilar en grados varia-
exageradamente aumentado. Si la comunicación bles, pero puede llegar al edema pulmonar.
interauriculares pequeña (restrictiva), se propicia-
rá una importante elevación de los volúmenes y 2. Cuando el drenaje venoso pulmonar anómalo to-
presión diastólica del ventrículo derecho, por lo tal no se acompaña de obstrucción, el flujo sanguí-
que será causa de insuficiencia cardiaca. Uno de neo pulmonar puede ser hasta de 3 a 5 veces
los puntos fundamentales que confluyen en el cua- mayor al flujo sistémico y éste, generalmente es
dro clínico y la mortalidad de este padecimiento normal, la saturación arterial suele ser normal (gran
es la presencia o ausencia de obstrucción del tra- cortocircuito arteriovenoso). La consecuencia del
yecto venoso anómalo. En efecto, el diámetro y la aumento exagerado del flujo pulmonar es la insu-
permeabilidad del trayecto venoso son los que ficiencia cardiaca derecha y la presión pulmonar
determinan la resistencia que se opone al flujo y puede estar sólo discretamente elevada. La h ¡per-
esta resistencia puede ser intrínseca (diámetro del tensión pulmonar sólo se hará evidente si el pa-
conducto, o aumento de su tono) o extrínseco (com- ciente llega a la adolescencia o edad adulta sin
presión por estructuras externas como el diafragma). corrección quirúrgica de esta malformación.
1069
CARDIOLOGÍA
3. C u a n d o existe obstrucción a cualquier nivel de cardiaca y en los que tienen una comunica-
retorno venoso pulmonar: ción interauricular restrictiva la cianosis es
un síntoma prominente.
a) Hipertensión venocapilar que puede condi-
cionar edema pulmonar.
II. Drenaje anómalo total de venas pulmonares
b) G r a n hipertensión arterial pulmonar, gene- con obstrucción
ralmente con cifras a nivel sistémico.
vel sistémico, el corazón derecho tarde o tem- Vale la pena mencionar que en esta entidad el
prano claudica y aparecen manifestaciones de hallazgo más sobresaliente es el de hipertrofia ven-
insuficiencia cardiaca derecha (cardiomegalia tricular derecha (ondas R altas e n V , y S profunda e n
moderada, taquicardia, ritmo de galope, hepato- V ). En los lactantes, predominan los signos de hiper-
(>
Síntomas S i n e m b a r g o , p u e d e e n c o n t r a r s e la imagen
Los síntomas d e estos pacientes (por lo general con d e " 8 " o e n f o r m a de " m u ñ e c o d e n i e v e " (figura
CIA grande y sin hipertensión pulmonar), son pocos 4 8 ) , q u e se e n c u e n t r a e n aquellas formas supra-
y parecidos a los que tienen los pacientes con C I A d i a f r a g m á t i c a s q u e c o n e c t a n c o n la v e n a
grande, de tipo ostium secundum, o sea, hipode- ¡ n o m i n a d a (figura 4 7 - A ) , y a q u e la parte s u p e -
sarrollo físico, bronquitis frecuente y puede haber rior de la imagen (por e n c i m a d e la silueta car-
cianosis d e aparición intermitente. d í a c a ) está d a d a por la v e n a c a v a izquierda per-
sistente, la vena ¡nominada y la vena cava superior
Signos clínicos dilatadas. Este hallazgo es muy sugestivo del diag-
nóstico. En a q u e l l o s pacientes q u e sufren obs-
a) Hipodesarrollo físico. trucción pulmonar, son m á s evidentes los signos
de hipertensión v e n o c a p i l a r y el c o r a z ó n p u e d e
b) Abombamiento del área precordial.
tener t a m a ñ o c e r c a n o a lo n o r m a l .
c) Levantamiento sistólico paraesternal derecho.
2. Oximetrías
a) Uno de los signos más importantes para el diag-
nóstico de esta malformación es sin duda el
salto de 4 vol. % o más, entre la vena cava
inferior y la aurícula derecha, lo cual traduce el
FIGURA 53 Conexión anómala de venas pulmona- gran cortocircuito arteriovenoso en las varieda-
res. Ecocardiografía bidimensional. La aproxima-
ción de las cavidades derechas (AD y VD) y las des supradiafragmáticas; por el contrario, este
reducidas dimensiones del ventrículo izquierdo (VI) importante salto oximétrico será entre v e n a
CARDIOLOGÍA
3. Tensiometría
4. Angiocardiografía
cava superior y aurícula derecha en las varieda- Este estudio confirma el diagnóstico e n todos los
des infradiafragmáticas. La saturación de 0 será
2 casos. Se avanza el catéter por vía venosa hasta
similar en todas las cavidades cardiacas. el tronco de la arteria pulmonar y se realiza un
b) La saturación arterial dependerá fundamen- disparo de medio de contraste. La levofase de la
talmente d e la existencia de obstrucción arteriografía pulmonar enseña la anatomía del
venosa pulmonar o ausencia de ésta, ya que retorno venoso pulmonar anómalo (figura 55).
si no existe, la saturación arterial puede ser Cualquiera que sea su variedad.
Esta malformación tiene una evolución maligna deja- 1. La estrechez valvular se d e b e a la fusión
da a su historia natural, ya que sin tratamiento, más comisural y la reducción consecutiva del área
del 8 0 % fallece durante el primer año de vida y sólo valvular pulmonar.
el 10 % alcanza la edad adulta. El pronóstico está 2. La estenosis pulmonar se acompaña d e dila-
regido fundamentalmente por la presencia de obs- tación posterocstenótica del tronco de la ar-
trucción al retorno venoso pulmonar o ausencia de teria pulmonar.
ésta, y al tamaño de la comunicación interauricular.
3. Hipertrofia del ventrículo derecho.
La ausencia de obstrucción venosa y la presencia
de una CIA amplia, permiten una mayor sobrevida y 4. La hipertrofia del infundíbulo es frecuente
esta variedad es generalmente la que se encuentra e n estenosis pulmonar apretada, de larga
e n adultos. Por el contrario, la obstrucción venosa evolución.
pulmonar no permite generalmente una sobrevida
mayor de 6 meses, por lo que e n ellos el tratamien- 5. Hipertrofia auricular d e r e c h a e n las este-
to quirúrgico es urgente. nosis p u l m o n a r e s i m p o r t a n t e s de larga
evolución.
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
FISIOPATOLOGÍA
En los recién nacidos se utiliza la técnica de paro circu-
La obstrucción parcial de la válvula pulmonar, pro-
latorio y la hipotermia profunda con circulación
duce un obstáculo al vaciamiento del ventrículo
extracorpárea, mediante la cual se repara la malforma-
derecho, consecuentemente ocurren dos hechos:
ción a través de esternotomía media, generalmente el
aumenta la presión sistólica de dicho ventrículo y se
colector venoso se anastomosa a la aurícula izquierda
prolonga el tiempo de expulsión d e la sangre por
después de haber realizado una amplia incisión, tanto
dicha cavidad. El aumento de la presión sistólica
en el coletor venoso como en la mencionada aurícula.
estará en proporción con el grado de la estenosis. A
Posteriormente se cierra el defecto septal auricular. La
mayor grado d e obstrucción, mayor nivel de pre-
técnica quirúrgica varía, dependiendo del tipo d e co-
sión sistólica ¡ntraventricuiar. El orificio estrecho no
nexión anómala de la que se trate.
permite que dicha presión se comunique al tronco
de la arteria pulmonar, la cual mantiene una presión
RESULTADOS sistólica normal. La diferencia entre las presiones a
través de la válvula (gradiente transpulmonar), está
Cuando el diagnóstico se lleva a cabo oportunamen- e n relación directa con el grado de obstrucción: a
te, los resultados quirúrgicos e n los mejores centros mayor gradiente, la estrechez será más importante.
son muy alentadores, ya que tienen una mortalidad Por otro lado, la prolongación del periodo expulsivo
de 7.9 % en niños menores de un año d e edad, derecho, también está e n relación directa con el
cuando la cirugía se realiza dentro del primer mes de grado de obstrucción, así el periodo expulsivo más
edad, la sobrevida es mayor del 7 5 % . Por lo tanto, en largo será consecuencia d e la obstrucción más gra-
la actualidad se recomienda indicar la cirugía en cuan- v e . Es de hacer notar que el gasto pulmonar (canti-
to se tenga el diagnóstico; se considera innecesario dad d e sangre que sale del ventrículo derecho) es
esperar a que el lactante gane peso, ya que cono- normal a pesar de la estenosis valvular debido a que
ciendo lo maligno de la evolución natural de esta por la válvula estrecha sale la misma cantidad de san-
malformación, sólo se logra exponer a la muerte al gre en cada latido (gasto sistólico) pero en un tiempo
niño, sin ofrecerle la posibilidad terapéutica. m á s prolongado (aumento de la duración del perio-
do expulsivo). El gasto pulmonar solo disminuye cuan-
do aparece insuficiencia cardiaca derecha.
b) Soplo sistólico. La estenosis pulmonar causa c) En las estenosis pulmonares ligeras puede tan
la aparición de un soplo sistólico de tipo ex- sólo haber un aumento discreto del voltaje
pulsivo, con epicentro en el foco pulmonar, de la R e n precordiales derechas, pero ca-
cuya intensidad está en estrecha relación con racterísticamente se acompañan de onda T
la gravedad de la obstrucción. Soplos peque- positiva. La onda S en precordiales izquier-
ños: estenosis ligera, soplos m u y intensos das es ligeramente mayor q u e lo normal y el
acompañados de frémito: estenosis apretada, a O R S tiene una rotación tan sólo ligeramen-
asimismo, el soplo será tanto más tardío cuan- te desviada a la derecha (figura 6 1 ) .
to más importante sea la estrechez (figura 58);
soplo protosistólico traduce una estenosis li-
Radiografía d e tórax (figuras 6 3 y 6 4 )
gera y un soplo con acmé telesistólico traduci-
rá una estenosis grave. 1. Corazón d e tamaño normal. La cardiomega-
lia indica insuficiencia cardiaca.
c) Semiología del 11 ruido. El 1 1 ruido estará tanto
2. Prominencia del cono de arteria pulmonar (dila-
más desdoblado cuanto más apretada sea la
tación posteroestenótica), la cual se debe a que
estenosis pulmonar (prolongación del perio-
la salida del flujo por un orificio estrecho y ex-
do expulsivo derecho), asimismo, la intensi-
céntrico, lo hace con gran fuerza y dilata el sitio
dad del llp será menor, cuanto más importante
de la arteria pulmonar en donde hace contacto.
sea la estrechez, de tal forma que en las este-
nosis graves, el II ruido se ausculta c o m o úni- 3. Vascularidad pulmonar normal o disminuida.
co, debido a que el llp se encuentra tan apaga-
d o , que es inaudible (figuras 5 7 y 58). 4 . Cuando la estenosis pulmonares infundibular,
el arco medio se encuentra excavado, con
Electrocardiograma (figuras 61 y 6 2 ) vascularidad disminuida e hipertrofia ventri-
cular derecha (punta levantada) (figura 63).
a) Hay signos d e hipertrofia ventricular derecha
por sobrecarga sistólica.
Fonomecanocardiograma
b) Frecuentemente hay crecimiento de aurícula Es de gran utilidad, tanto para establecer el diagnós-
derecha, la cual se manifiesta por los signos clá- tico, c o m o para conocer su gravedad (figuras 5 7 y
sicos o por la presencia de complejos Q R en Vil. 58); asimismo, el precordiograma derecho demues-
•
FIGURA 5 7 Estenosis
pulmonar valvular. Regis-
tro simultáneo de elec-
trocardiograma,
neumograma y fonocar-
diograma. En espiración
el chasquido (ch) se se-
para del I ruido (I) e
incrementa su amplitud.
En inspiración, por el
contrario, dicho fenóme-
no se apaga y se acerca
al I ruido. Nótese que el
chasquido es seguido de
un soplo expulsivo (SS) y
el II ruido se encuentra
V
desdoblado (A-P) con el
componente pulmonar
retrasado
1077
CARDIOLOGÍA
Ecocardiografía
El ecocardiograma modo M no ofrece signos diag-
nósticos de certeza, a no ser por la hipertrofia septal
asimétrica, que traduce hipertrofia ventricular dere-
cha. El ecocardiograma bidimensional puede demos-
trar el engrosamiento d e la válvula pulmonar y d u -
rante su apertura sistólica adquiere una morfología
en cúpula, todo ello se busca mediante el eje corto a
nivel d e los grandes vasos a través de aproximación
paraesternal (figura 6 4 ) ; sin embargo, la técnica
imm muí 11 m if>t$ty:é£$fy<f> Doppler es la que mayor utilidad ofrece, ya que el
estudio del flujo en la raíz de la arteria pulmonar
revelará la presencia de un flujo turbulento sistólico,
que será traducción d e la estenosis valvular, y el
D o p p l e r d e o n d a c o n t i n u a permitirá medir el
gradiente transpulmonar (figura 6 5 ) , c o n lo que se
podrá cuantificar con exactitud la gravedad de la es-
tenosis pulmonar; al medir la velocidad máxima del
FIGURA 58 Estenosis pulmonar valvular apretada. flujo y mediante la fórmula de Bornoulli modificada
El fonocardiograma a nivel del foco pulmonar de-
cuantificar el gradiente transvalvular pulmonar (ver
muestra un I ruido (I) desdoblado por la presencia
de un chasquido protosistólico (chps). El soplo sis- capítulo de ECOCARDIOGRAFÍA DOPPLER). Por otro
tólico (SS) es romboidal, sobrepasa al lia y termi- lado, la medición d e la velocidad máxima del flujo
na un poco antes del llp. Nótese el desdoblamien- regurgitante tricuspídeo elevado al cuadrado y multi-
to del II ruido y la poca amplitud del llp
plicado por 4 (fórmula de Bernoulli), nos podrá cuan-
tificar la presión sistólica del ventrículo derecho.
.
—————-——-
51079
CARDIOLOGÍA
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1080Í
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
pulmonar ligera es bien tolerada, e incluso puede dado que este método es incuento, se constituye
pasar sin síntomas toda la vida. La calcificación valvu- como el de elección para este seguimiento.
lar es un riesgo potencial de aumentar la importancia
de la estrechez, después de la tercera década de la
vida, la mejor forma de seguimiento a largo plazo de TRATAMIENTO
estos enfermos es la ecocardiografía Doppler, ya que La estenosis p u l m o n a r leve p u e d e vigilarse p e -
periódicamente (cada 6 meses o cada año), puede r i ó d i c a m e n t e ; si el paciente tiene un gradiente
cuantificarse la gravedad de la estenosis pulmonar transpulmonar mayor de 4 0 m m H g o la presión
sistólica del ventrículo derecho es superior a 70
m m H g se propone valvuloplastia pulmonar per-
cutánea (vide infra), ya que este procedimiento se
ha constituido de elección para el tratamiento d e
la estenosis pulmonar por su alta efectividad y su
bajo riesgo. La estenosis infundibular p u l m o n a r
FIGURA 63 Estenosis pulmonar infundibular. Radio- FIGURA 64 Estenosis pulmonar valvular o Ecocardio-
grafía de tórax. Corazón de tamaño normal con pun- grama bidimensional. El eje corto paraesternal a nivel
ta levantada (hipertrofia ventricular derecha), arco de los grandes vasos demuestra la apertura en "cú-
medio excavado con disminución de la vascularidad pula" de la válvula pulmonar (señalada con flechas)
pulmonar periférica signo característico de estenosis pulmonar valvular
-42SE
CARDIOLOGÍA
Resultados inmediatos
Todos los grupos que han realizado este procedi-
miento informan excelentes resultados c o n una re-
ducción muy significativa del gradiente transpulmo-
nar y de la presión sistólica del ventrículo derecho;
el primero se reduce a cifras alrededor de 3 5 m m H g
y la segunda prácticamente a cifras normales 20 ± 9
m m H g . Asimismo, los pacientes seguidos a largo pla-
z o , no han presentado reestenosis. Durante el proce-
dimiento pueden presentarse complicaciones, tales
como perforación del ventrículo derecho, aparición
de extrasistolia ventricular, y en algunas ocasiones
queda una pequeña insuficiencia pulmonar. La per-
foración ventricular es un riesgo especialmente en
lactantes muy pequeños; dados los excelentes resul-
tados d e este procedimiento, y su bajo riesgo, se ha
convertido en el método de elección para el trata-
miento de la estenosis pulmonar valvular aislada.
Valvuloplastia p u l m o n a r p e r c u t á n e a
(figura 69) C O A R T A C I Ó N D E LA A O R T A
•
4^
CARDIOLOGÍA
6. Hay dilatación de las arterias intercostales con 8. Dilatación aórtica inmediatamente distal a la
erosión del borde inferior de las costillas. coartación.
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
6. Soplo sistólico e n región interescapular, es c a - f ) Corazón d e tamaño normal con signos de hi-
racterístico de la coartación aórtica. pertrofia concéntrica (punta redondeada).
1085
CARDIOLOGÍA
R e s o n a n c i a magnética n u c l e a r
C o n este método diagnóstico se obtiene una ima- •
F I G U R A 70 Coartación
aórtica. Radiografía de tó-
rax. En este acercamiento
se puede notar la erosión
del borde de las costillas
(signo de Roessler), produ-
cido por la ingurgitación
de las arterias intercosta-
les hipertensas. (Cortesía
del Dr. Carlos Zamora)
1086J
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
1087
CARDIOLOGÍA
portante insaturación sanguínea periférica, con de manos y pies (figura 76) por lo que tam-
hipoxia cerebral. Estos cuadros se presentan bién se denomina "dedos en palillo de tam-
preferentemente en la tetralogía de Fallot, y bor" y que en estos pacientes se acompaña
su aparición traduce por sí misma, gravedad de cianosis universal. Al parecer, esta ano-
del padecimiento. Estas crisis son debidas a malía se debe a que los megacoriocitos pro-
"espasmo del infundíbulo" pulmonar con obs- venientes de la médula ósea que normal-
trucción crítica o completa, que evita la oxige- mente son fragmentados en el pulmón,
nación sanguínea (el P 0 puede caer a cifras
2 cuando existe un corto circuito venoarterial
de 35 mmHg o menor) y consecuentemente tan importante como en la tetralogía de
irritación cortical producida por hipoxia cere- Fallot, grandes fragmentos de megacoriocitos
bral cn'tica. Un caso de tetralogía de Fallot que y plaquetas pasan directamente a la circula-
no presenta crisis hipóxicas, se puede consi- ción sistémica y llegan a los sitios mas
derar como bien tolerado y, por el contrario, distales; ahí activan a las células endoteliales
la presencia de crisis hipóxicas están en favor y provocan secreción de factores de creci-
de una mala evolución de la enfermedad. miento por los fibroblastos e inducen el en-
grosamiento distal de los dedos (figura 77).
Durante una crisis hipóxica, la falta de
oxígeno puede causar acidosis láctica debido
a que el metabolismo sólo se lleva a cabo por Signos
la vía anaerobia, y por ello puede haber le- 1. Hipodesarrollo físico.
sión renal, hepática o cerebral irreversible;
razón por la que la aparición de crisis hipóxi- 2. Cianosis universal de piel y mucosas.
cas en estos niños es un signo de gravedad 3. Corazón de tamaño normal a la percusión. Es
extrema, que amenaza su vida. Todos los me-
una de las pocas cardiopatías congénitas
dicamentos que producen efecto inotrópico
cianógenas que no tiene cardiomegalia, y ello
positivo, la atropina, la hipcrventilación (llan-
se debe a que la sobrecarga del ventrículo de-
to, dificultad para defecación, fiebre, etc.). y
recho es sistólica, la cual, compensada por hi-
la anemia, favorecen la aparición de crisis
pertrofia y es sólo tardíamente (durante la ado-
hipóxicas.
lescencia) que aparece cardiomegalia (dilatación
ventricular derecha), e insuficiencia cardiaca.
4. Encuclillamiento
Este síntoma también se presenta preferen- 4. Soplo sistólico expulsivo causado por la este-
temente en la tetralogía de Fallot cuando los nosis pulmonar, comúnmente acompañado
pacientes alcanzan la edad escolar. Los niños de frémito en el foco pulmonar.
enfermos al caminar, aumentan el gasto
cardiaco, a expensas de sangre insaturada, lo 5. El II ruido se ausculta único y aparentemente
cual produce fatigabilidad y aumento de la reforzado. La estenosis pulmonar provoca que
cianosis. el llp se halle retrasado y de tan poca amplitud
que no se escucha; así pues, sólo se ausculta
El encuclillamiento por un lado hace que
el componente aórtico (lia) del II ruido.
el enfermo repose y con ello disminuye los
requerimientos de 0 periférico, y por otro,
2 6. La CIV no produce soplo porque ambos ven-
incrementa importantemente el retorno ve- trículos tienen la misma presión sistólica.
noso y mediante dilatación del infudíbulo se
favorece el paso de sangre hacia la arteria 7. La semiología del soplo sistólico es muy impor-
pulmonar, con lo que mejora la oxigenación tante para juzgar la gravedad de la repercusión
y disminuye, por lo tanto, la insaturación hemodinámica del padecimiento. Si el soplo es
periférica. El aumento de las resistencias intenso, sugiere que una mayor cantidad de san-
sistémicas también favorece el paso de san- gre pasa a la arteria pulmonar y por lo tanto, el
gre a la arteria pulmonar. padecimiento es menos grave; si por el contra-
rio, el soplo sistólico es muy ligero, se debe casi
5. Hipocralismo cianótico siempre a que la estenosis pulmonar es
Después del primer año de vida, es común la "puntiforme" y la cantidad de sangre que pasa a
aparición de hipocratismo cianótico en ma- oxigenarse es menor. La ausencia de soplo
nos y pies. El hipocatismo digital es un abom- sistólico traduce atresia pulmonar, o sea, es el
bamiento de la porción distal de los dedos grado extremo de gravedad del padecimiento.
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
FIGURA 76 Hipocratismo
digital. Mecanismo fisiopa-
tológico. Los megacarioci-
tos provenientes de la mé-
dula ósea, se fragmentan
en el s i s t e m a venoso
sistémico y debido al cor-
tocircuito venoarterial a ni-
vel del ventrículo derecho
p a s a n a la c i r c u l a c i ó n
sistémica y no al pulmón
en donde normalmente se
destruyen. Estos fragmen-
tos llegan a las porciones
más distales de la circula-
ción en donde activan a las
células endoteliales y pla-
quetas, los cuales promue-
ven la secreción de factores
de c r e c i m i e n t o por los
fibroblastos que inducen la
aparición de dedos hipocrá-
ticos. (Tomado de Martínez
Lavin M. Current opinión in CífulAí «ndoltüai**
rheumatology, 1997;9:83- Hlpoeiatismo alfllwí
factores de
86 con autorización). crecimiento
FIGURA 78 Tetralogía de
Fallot. Electrocardiogra-
ma. El trazo demuestra la
hipertrofia de la pared li-
bre del ventrículo derecho
(R alta en V , S profunda
en V - V, y rotación del
aQRS a -130°). Nótese la
c a í d a p r o g r e s i v a de las
ondas R y las ondas S pro-
minentes de las d e r i v a -
c i o n e s precordiales que
alternan con una impor-
tante amplitud de la R en
aVR; datos que demues-
tran la hipertrofia de las
regiones básales del mis-
mo ventrículo
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
2. Tensiometría
1 094;
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
meses va seguido d e agravamiento del cuadro y la carbonato de sodio 1 mol), por vía intravenosa se
muerte. En los casos menos graves, la cianosis apare- realiza una gasometría arterial, y de acuerdo con la
c e en el curso de los primeros meses, el hipocratismo fórmula de Astrup calcula la cantidad de bicarbo-
digital, después del primer año, el encuclillamiento nato de sodio, habrá que administrar: exceso de
se hace evidente en la edad preescplar, después del baseporkg. depesoporO.3 = mi de bicarbonato
cuarto año de vida, los niños están ya muy cianóticos. de sodio que el niño necesita. Se administrará a
La policitemia secundaria predispone a estos pacien- dosis de 10 ml/min y la determinación posterior
tes a presentar trombosis cerebrales por la hipervis- de la gasometría arterial y p H regirá la administra-
cosidad sanguínea consecutiva al incremento del c i ó n s u b s e c u e n t e d e esta s u s t a n c i a , o su
hematócrito. Asimismo, la frecuencia de abscesos d i s c o n t i n u a c i ó n . En estos casos, la acidosis
cerebrales es mayor en estos enfermos que en la metabólica es la causa de la prolongación del cua-
población general e n relación a que forman circula- dro. El propranolol se ha encontrado muy útil, tan-
ción colateral exuberante a partir de las arterias bron- to para prevenir dichas crisis como para yugularse
quiales que funcionan como fístulas arteriovenosas. (evita el espasmo del infundíbulo pulmonar).
La insuficiencia cardíaca es un evento que acontece
tardíamente y es de mal pronóstico. Algunos enfer-
2. Anatomía quirúrgica
mos pueden alcanzar una sobrevida hasta la segunda
Dado que la variedad anatómica de la tetralogía de
o tercera década de la vida, aun cuando la mayoría de
Fallot es muy amplia, es que los cirujanos han adop-
ellos están importantemente incapacitados. La muer-
tado algunos lineamientos que les ayudan a saber
te acontece por insuficiencia cardíaca o por acciden-
cuál definitivamente no; es por ello que se ha
te vascular cerebral. En los raros casos en que las
denominado una anatomía favorable, aquélla que
alteraciones anatómicas son muy leves (discreta
no ofrece contraindicación para una corrección
dextroposición aórtica y estenosis pulmonar muy li-
total y estas características incluyen la normalidad
gera) el pronóstico para la sobrevida es mejor y los
en el calibre de las ramas pulmonares, el tamaño
síntomas pueden ser mínimos.
normal del ventrículo izquierdo y la ausencia de
graves malformaciones asociadas. Se debe de en-
fatizar que el calibre de las ramas de la arteria
TRATAMIENTO pulmonar es un dato fundamental que determina
el pronóstico quirúrgico de esta malformación ya
1. Crisis hipóxicas
que cuando están hipoplásicos impide un buen
Deben ser tratadas mediante la administración de
resultado con la corrección total; en estos casos
0 con mascarilla o couppette, la aplicación de
2
estará indicada solo el tratamiento paliativo
fenobarbital a dosis de 3.5 mg/kg por vía intramus-
cular, se considera el tratamiento específico para Por el contrario, aquellos casos con anatomía
el cuadro y, comúnmente lo yugula. Cuando la desfavorable incluyen a los que tienen malfor-
crisis no cede con la administración d e 0 , el bi-
2
maciones graves asociadas. D e esta forma a los
carbonato de sodio puede coadyuvar para la cesa- pacientes que tienen anatomía desfavorable se
ción de la crisis hipóxica a dosis de 2 mt/kg (bi- les realiza cirugia paliativa mientras aquéllos que
CARDIOLOGÍA
tienen una anatomía favorable se les indicará metro normal, con hipertrofia infundibular
corrección total y éstos han sido clasificados e n localizada o difusa.
cuatro categorías:
Tipo II (Fallot Intermedio). Anillo valvular
Tipo I (Fallot leve). Tiene un tronco pulmo- pulmonar de diámetro normal, c o n infun-
nar normal, anillo valvular pulmonar d e diá- díbulo hipoplásico o por el contrario, anillo
^1097
CARDIOLOGÍA
A s p e c t o s a n a t ó m i c o s (figura 85)
FISIOPATOLOGÍA
La sangre venosa llega a las cavidades derechas del
corazón y, de ahí pasa a la aorta traspuesta, llevando
nuevamente la sangre a la circulación sistémica sin
oxigenarse en el pulmón. Por otro lado, la sangre
oxigenada proveniente del pulmón llega a las cavi- FIGURA 85 Transposición de los grandes vasos. La
dades izquierdas del corazón y sale a la arteria pul- sangre venosa alcanza a la aorta (Ao) a través del
ventrículo derecho (VD) mientras que la sangre
monar, la cual hace recircular la sangre oxigenada arterial alcanza a la arteria pulmonar (Aa) a través
nuevamente por el pulmón. En otras palabras, la del ventrículo izquierdo (VÍ). La presencia de de-
sangre venosa recircula sin pasar por el pulmón y la fectos septales (CIA, CIV, PCA), permite que se es-
sangre arterial, también recircula por el circuito tablezca un cortocircuito mixto, a través del cual la
menor sin alcanzar la circulación sistémica. En estas sangre venosa puede llegar al pulmón, y la sangre
oxigenada a la periferia. Estos cortocircuitos son Tos
condiciones, es comprensible que la vida sea impo-
que permiten ¡a vida del paciente. (Cortesía del Dr.
sible. La Presencia de un cortocircuito a nivel auri- Carlos Pérez Trevino)
cular (CIA), ventricular (CIV) o entre los grandes
vasos (PCA) es obligado para que la vida sea posible.
La sangre venosa alcanza el pulmón a través de estas del tamaño de los defectos septales: si son
comunicaciones (cortocircuito venoarterial) y la san- pequeños, gran cianosis; mientras que si son
gre o x i g e n a d a ; asimismo llega a la periferia tam- grandes, la cianosis será de menor cuantía.
b i é n por las mismas (cortocircuito arterioveno-
La cantidad del flujo pulmonar efectivo
so) comunicaciones. En estos casos, si los defectos
no sólo depende del tamaño de los defectos
septales son grandes, aseguran la o x i g e n a c i ó n
septales, sino también de la localización de
d e la sangre e n e l p u l m ó n y su paso a la perife-
éstos; así, una comunicación interauricular
ria; sin e m b a r g o , los grandes cortocircuitos mix-
d e tipo venoso facilita el paso de la sangre
tos p r o v o c a n sobrecarga v o l u m é t r i c a de ambos
proveniente de las cavas hacia la aurícula iz-
ventrículos, hiperflujo pulmonar y fácilmente
quierda (sangre que va a oxigenarse al pul-
p u e d e n llegar a la insuficiencia c a r d i a c a al pa-
món), y de las venas pulmonares a la aun'cula
c i e n t e . Si por el c o n t r a r i o , los defectos septales
derecha (sangre ya oxigenada que va hacia la
son p e q u e ñ o s , la insaturación arterial será m u y
circulación sistémica); asimismo, la c o m u n i -
importante y c o n ello l a cianosis y la g r a v e d a d
cación ¡nterventricular subaórtica permite
d e l c u a d r o c l í n i c o ( f i g u r a 85). El v e n t r í c u l o d e -
el fácil paso d e la sangre proveniente del
r e c h o presenta hipertrofia v e n t r i c u l a r por e n -
ventrículo izquierdo (sangre oxigenada) h a -
frentarse a las resistencias sistémicas y r á p i d a -
cia la aorta; además esta variedad de tras
m e n t e h a c e i n s u f i c i e n c i a , lo c u a l d a lugar a su
posición desarrolla estenosis infundibular
dilatación progresiva.
pulmonar, lo cual protege al paciente de la
hipertensión pulmonar grave y del hiperflujo
causante de insuficiencia cardiaca, por lo
Síntomas c u a l , los pacientes la toleran muy acepta-
1. C i a n o s i s u n i v e r s a l desde e l n a c i m i e n t o . El blemente por largo t i e m p o .
grado de cianosis depende primordialmente
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
Signos
1 . Cianosis universal desde el nacimiento.
a) Taquipnea.
b) Taquicardia.
c) Cardiomegalia.
FIGURA 86 Transposición clásica de los grandes
d) Ritmo de galope. vasos. La radiografía de tórax pone en evidencia la
e) Hepatomegalia congestiva. cardiomegalia global (ICT: 0.60) con arco medio
excavado y el hiperflujo pulmonar
f) En casos graves, anasarca.
3. Deformación precordial por abombamiento
debido a la dilatación del ventrículo derecho. mación paraesternal utilizando el eje corto a nivel de
los grandes vasos primeramente pone en evidencia
4. Pueden haber soplos de comunicación ¡nter- que la disposición espacial de éstos es contraria a lo
ventricular, estenosis pulmonar o conducto normal; e n otras palabras ahora la aorta es anterior
arterioso persistente. (figura 87-A), con respecto a la pulmonar y ello se
demuestra al encontrar que el vaso posterior es el
Electrocardiograma que se bifurca en dos ramas (figura 85-B), o sea,
Habrá signos d e crecimiento biventricular. corresponde a la arteria pulmonar traspuesta.
En ocasiones es posible demostrar que la arte-
Radiografía d e tórax (figura 86) ria pulmonar (que es la q u e se bifurca e n dos ra-
1. Cardiomegalia global. El grado de cardio- mas) nace d e l v e n t r í c u l o i z q u i e r d o m e d i a n t e
megalia está en relación directa al tamaño de aproximación subcostal (figura 88) o apical de c u a -
los defectos septales, c u a n d o son grandes, tro cámaras.
los cortocircuitos son importantes y la cardio- Finalmente, la inyección de "contraste" e n una
megalia también lo será; si por el contrario, vena periférica demostrará que el vaso anterior (la
los defectos septales son pequeños, la car- aorta) es el que está conectado al ventrículo venoso
diomegalia puede ser tan sólo discreta. (anatómicamente derecho) (ver capítulo d e E C O C A R -
D I O G R A F Í A B I D I M E N S I O N A L ) . Este signo aunado a los pre-
2. El hiperflujo pulmonar también está en re- viamente mencionados contribuye a la demostra-
lación directa al tamaño d e los defectos ción de la trasposición completa dé los grandes vasos.
septales. En la actualidad, el diagnóstico de trasposición clási-
ca de los grandes vasos, se establece mediante estu-
3. Arco medio excavado. El arco medio se en-
dio ecocardiográfico en la gran mayoría de los casos
cuentra excavado debido a que el tronco de la
y el cateterismo cardiaco es y a un procedimiento
arteria pulmonar no está en su sitio ya que está
terapéutico (vide infra).
traspuesto, naciendo del ventrículo izquierdo.
HISTORIA NATURAL
TRATAMIENTO
El 50 % de los pacientes con transposición completa
d e los grandes vasos de todas las variedades fallece 1. Transposición de las grandes arterias con
e n el primer mes de e d a d . septum interventricuiar Intacto
D e los sobrevivientes no tratados, el 15 % sobre- A los pacientes con transposición de los grandes
vive seis meses, y sólo el 10 % un año. C u a n d o la vasos y septum ¡nterventricular intacto se les debe
transposición se acompaña de septum interventri- practicar septostomía, especialmente si la C I A
FIGURA 87 Transposición de los grandes vasos. Ecocardiograma bidimensional. A: El eje corto paraesternal
a nivel de los grandes vasos demuestra una disposición espacial contraria a la normal: la aorta (Ao) es
anterior con respecto a la pulmonar (P). B: El mismo plano de corte demuestra que el vaso posterior es el
que se bifurca, o sea, es la arteria pulmonar traspuesta (en posición posterior)
1100Í
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
es pequeña (el paciente estará muy cianótico), d) Si el paciente no mejora, se lleva a cabo c o -
mediante la técnica de Rashkind; a través de la rrección total mediante técnica de Mustard,
vena safena se introduce un catéter de Rashkind la cual consiste e n dirigir el flujo proveniente
hasta la aurícula izquierda, localizada la punta d e , las venas cavas (sangre venosa), hacia el
e n d i c h a cavidad se infla un balón y se extrae ventrículo izquierdo (conectado c o n la arte-
enérgicamente el catéter hasta pasar el balón a ria pulmonar), para llevar esa sangre a que se
la aurícula derecha, c o n esta maniobra se a m - oxigene al pulmón. Por el contrario, la san-
plía el diámetro d e la comunicación interauri- gre proveniente de las venas pulmonares (oxi-
cular (figura 91). La septostomía, comúnmente genada) se dirige hacia el ventrículo derecho
ofrece un satisfactorio tratamiento paliativo, ya (conectado con la aorta) para llevar sangre
que al ampliar c o m u n i c a c i ó n interauricular se oxigenada a la circulación sistémica. Ello se
favorece la mezcla de sangre venosa y arterial a logra para hacer las conexiones mencionadas
nivel auricular y de esta forma se aumenta el y aislar la circulación de sangre venosa de la
flujo p u l m o n a r y disminuye la insaturación sangre arterial. La mortalidad operatoria se
aórtica. C u a n d o después de una septostomía encuentra entre el 2.5 y 11 % en los mejores
persiste h i p o x e m i a considerable, el fracaso centros. Las complicaciones más frecuentes
puede deberse a la persistencia d e un patrón encontradas en este tipo de intervenciones
fetal de las resistencias pulmonares o a dismi- son las derivadas de la lesión del nodo sinusal
nución e n la distensibilidad del ventrículo de- o los haces internodales, lo cual da lugar a
recho. En esos casos pueden tomarse las si- síndrome d e seno enfermo, fibrilación auri-
guientes alternativas: cular, flutter auricular, etc., y ello deriva una
mortalidad tardía entre el 4 al 8 %.
a) Administrar prostaglandina E y evitar el cie-
2. Transposición de las grandes arterias con co-
rre del conducto arterioso, el cual favorece
municación interventricuiar
una mejor oxigenación sistémica.
En esta variedad de trasposición, generalmente
b) Crear un defecto septal auricular quirúrgica- los métodos terapéuticos paliativos dan malos
mente (operación de Blalock-Hanlon). La mor- resultados, por lo que se prefiere llevar a cabo
talidad operatoria oscila entre el 10 y 15 %. corrección total con cualquier técnica:
c) Crear un defecto septal auricular catéter- a ) Corrección del trastorno de la dirección del
cuchilla. flujo a nivel a u r i c u l a r y por t é c n i c a d e
Si la septostomía da buen resultado (me- Mustard (previamente mencionada), o técni-
jora la saturación arterial y se reduce la cia- ca de Senning, la cual tiene los mismos efec-
nosis), la mayoría de los autores prefieren tos pero técnicamente es más sencilla y su
esperar hasta los seis meses para la realiza- mortalidad hospitalaria oscila entre 5 y 13 %
ción de corrección total. e n los mejores centros, los cuales deben
AC-
4
CARDIOLOGÍA
acompañarse del cierre d e la comunicación las arterias coronarías a la raíz de la arteria pul-
interventricuiar. monar (que manejará la sangre oxigenada que
v a a la circulación sistémica). Actualmente la
b) Corrección anatómica tipo jalene con rransloca-
mortalidad operatoria se encuentra entre el 11
ción coronaria. En la actualidad se considera (al
y el 30 %, dependiendo de los diversos grupos
menos teóricamente) en la solución ideal de la
quirúrgicos.
trasposición de los grandes vasos. Su inconve-
niente principal se encuentra en la dificultad c) Corrección del trastorno de la dirección del
técnica que implica el reimplante de las arte- flujo a nivel ventricular (técnica de Rastelli),
rias coronarias; consiste e n conectar la raíz que consiste en efectuar una conexión del
aórtica (que lleva sangre venosa) con el tronco ventrículo izquierdo (sangre arterializada), con
de la arteria pulmonar y la raíz de la arteria la aorta a través de la comunicación interven-
pulmonar (que lleva sangre arterializada), con tricuiar y por medio de un tubo valvado se
el tronco de la aorta ascendente. Este procedi- conecta el ventrículo derecho (sangre venosa),
miento debe ir acompañado del reimplante de con el tronco de la arteria pulmonar, este pro-
FIGURA 89 Transposición
de tos grandes vasos. An-
giocardiograma. A: El dis-
paro de medio de contaste
en el ventrículo anatómica-
mente derecho (VD) (el
más trabeculado) es segui-
do del llenado aórtico (Ao)
en posición AP. B: En posi-
ción lateral izquierda se
demuestra que la aorta
(Ao) nace en posición an-
terior (traspuesta) del ven-
trículo derecho (VD). (Cor-
tesía del Dr. Carlos Zamora)
FIGURA 91 Septostomía con técnica de-Rashkind. El catéter se introdujo a través de la vena cava inferior
(VCI). A: el balón (entre flechas) está pasando de la aurícula izquierda (Al) a la aurícula derecha (AD) con
el fin de ampliar la comunicación interauricular. B: el balón (entre flechas) se encuentra en la parte
baja de la aurícula derecha, después de haber practicado la septostomía
1103
CARDIOLOGÍA
((
¡Mi
atresia aórtica o interrupción del arco aórtico.
ad «d \ \
Desde el punto de vista embriológico, la inver-
sión ventricular se d e b e a que la torsión d e l tubo Mi
c a r d i a c o e n el plano frontal se i n c u r v a h a c i a la
izquierda (en lugar d e hacerlo h a c i a la d e r e c h a ) ,
por lo q u e el v e n t r í c u l o primitivo (morfológica-
mente izquierdo), se sitúa a la d e r e c h a del bulbus FIGO RA 92 Transposición corregida de los grandes
cordis (que será el v e n t r í c u l o a n a t ó m i c a m e n t e vasos. La sangre venosa proveniente de las venas
derecho). cavas llega a la auricula derecha (AD) y pasa al
ventrículo izquierdo (VI) (inversión ventricular que
Debido a que el situs atrial no se modifica, a m - condiciona discordancia AV). De ahí la sangre va
bas aurículas establecen una conexión discordante a oxigenarse a través de la arteria pulmonar (dis-
con los ventrículos. La falta de torsión del tabique cordancia ventriculoarterial). La sangre oxigena-
tronco-conal, el cual es recto, condiciona que el da llega a la aurícula izquierda (Al) y pasa afven-
trículo derecho (VD), el cual soporta la presión
vaso anterior originado del ventrículo anatómica- sistémica al estar conectado con la aorta (Ao). La
mente derecho, sea la aorta y el posterior (pulmonar) circulación se corrige porque la sangre venosa va
del ventrículo morfológicamente izquierdo (discor- al pulmón a oxigenarse, y la sangre oxigenada
dancia ventrículo-arterial). alcanza la circulación sistémica
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
Síntomas
Si el padecimiento no tiene malformaciones: aso-
ciadas, el paciente puede encontrarse completa-
mente asintomático y característicamente no pre-
senta cianosis.
Signos
La exploración física puede ser completamente nor-
mal y el único signo constante en estos casos es la
presencia del II ruido particularmente intenso e n
el segundo espacio intercostal izquierdo, el cual
es debido a que la aorta o c u p a una posición ante-
rior e izquierda; este ruido es, e n ocasiones palpa-
ble. N o es raro que e n el ápex se escuche un soplo
regurgitante, q u e la primera impresión que deja,
es que se trata de insuficiencia mitral, siendo real-
mente un soplo de insuficiencia tricuspídea (re-
cordar que la válvula tricúspide ahora se e n c u e n -
tra a la izquierda) (vide infra).
FIGURA 93 Transposición corregida de los gran-
des vasos. Radiografía de tórax. El estudio mues-
tra arco medio excavado. Aorta que sube por el DIAGNÓSTICO
lado izquierdo. (Nótese que no se observa su
porción ascendente por el lado derecho del es- Si el paciente no tiene malformaciones agregadas,
ternón) y la prominencia del perfil izquierdo (fle- el diagnóstico clínico no es fácil; asimismo, a pesar
chas) producido por el infundíbulo del ventrículo de que se han descrito múltiples "patrones" electro-
derecho situado a la izquierda
cardiográficos, la verdad es que ninguno es especí-
fico, y por otro lado, frecuentemente trazos elec-
FIGURA 94 Transposición corregida de los grandes vasos. Ecocardiograma modo "M". Se puede ver
el movimiento paradójico del septum interventricuiar (S). La inyección de contraste (C) en vena
periférica llena inicialmente el ventrículo izquierdo (VI) conectado con la aurícula derecha (discor-
dancia AV) y posteriormente el ventrículo derecho (VD) a través de un defecto septal ventricular
1 11)5
CARDIOLOGÍA
la izquierda del paciente por la implantación del ani- el ventrículo Izquierdo y de éste, las microbulas pa-
llo tricuspídeo, el cual está conectado con el atrio san a la arteria pulmonar en posición posterior (trans-
que no se llena de contraste (figura 97-B). puesta) (figuras 98 y 99-B).
El diagnóstico de trasposición de los grandes vasos Desde luego, el estudio angiocardiográfico cs defi-
se establece cuando mediante una aproximación pa- nitivo para el diagnóstico, ya que a través de la vena cava
raesternal se demuestra que la arteria pulmonar (se y aurícula derecha se penetra al ventrículo localizado a
identifica por su bifurcación), es posterior a la aorta y la derecha y el cual tiene morfología del ventrículo
no se cruza con ella (figuras 98 y 99-A) y el diagnós- izquierdo (endocardio liso y forma ovoidea), y éste asu
tico de discordancia ventrículo arterial se establece vez, conecta con la arteria pulmonar (figura 100-A);
utilizando la técnica de contraste, la cual, mediante asimismo, el disparo de medio de contraste en el ven-
una inyección venosa de solución glucosada al 5 % se trículo alcanzado a través de la aorta, es anterior y su
puede demostrar cómo las microbulas provenientes endocardio es muy trabeculado, lo cual lo identifica
de la circulación venosa alcanza la aurícula derecha, como anatómicamente derecho (figura 100-B).
1107
CARDIOLOGÍA
FIGURA 100 Transposición "corregida de las grandes arterias". A: El estudio angiocardiográfico de-
muestra la conexión del ventrículo anatómicamente izquierdo (endocardio liso) con la arteria pulmo-
nar (AP) (posición AP). B: El ventrículo anatómicamente derecho (endocardio trabeculado) está conec-
tado a la aorta (AP) (posición anterior). (Cortesía del Dr. Fause Attie)
1108(1
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
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CARDIOLOGÍA
es "amortiguada" por la gran aurícula derecha y por incremento de la duración de la onda " P " s c
lo tanto no se manifiesta en el pulso venoso. El soplo encuentra en relación con el grado d e dilata-
de insuficiencia tricuspídea es muy variable en in- ción de la cavidad auricular derecha.
tensidad y no es raro que se ausculte e n el endoápex
o ápex mismo debido al desplazamiento que las 3. Bloqueo de rama derecha. En la gran mayo-
cavidades derechas sufren (dextrorrotación). N o es ría de los casos (75 % o más) se hace evidente
excepcional la presencia de doble lesión tricuspídea. un bloqueo de rama derecha.
4. Síndrome de Wolff-Parklnson-Whlte. En 20
Electrocardiograma (figura 104)
a 25 % d e los casos se hace evidente un sín-
El trazo electrocardiográfico ofrece muchos signos drome de Wolff-Parkinson-White tipo B, la
con los que es posible sospechar el diagnóstico cuan- presencia d e esta alteración electrocardio-
do se conjunta con la clínica y la radiografía de tórax. gráfica de un paciente cianótico con hipoflu-
jo pulmonar sugiere enfermedad de Ebstein.
1. Signos de crecimiento auricular derecho:
a) Ondas P de alto voltaje, c o n franco pre- 5. Trastorno del ritmo:
dominio positivo en las derivaciones pre-
a) U n tercio d e los pacientes presenta epi-
cordiales derechas (V. ,).
sodios recurrentes de taquicardia pa-
b) Complejos qR en las derivaciones pre- roxística auricular, flutter o fibrilación
cordiales derechas (V, a V , o V , ) , cs un auricular.
hallazgo frecuente.
b) En ocasiones se presenta extrasistolia au-
c) Se h a encontrado a u m e n t o en la dura-
ricular o ventricular y más rara vez taqui-
ción de la o n d a " P " q u e correlaciona
cardia nodal con disociación AV.
con el grado de dilatación de la aurícula
derecha.
Radiografía de tórax (figura 105)
2. Bloqueo A V de primer grado. El bloqueo A V El estudio radiológico del corazón puede variar des-
de primer grado aparece aproximadamente de una morfología cercana a lo normal hasta una
en el 25 % d e los casos y al igual que el configuración que es muy sugestiva del padecimiento.
2. l a vascularidad p u l m o n a r generalmente
correlaciona con la presencia o el grado de
cianosis; así, los pacientes acianóticos gene-
ralmente muestran Irania vascular normal,
mientras que entre mayor sea el grado d e
cianosis será más acentuada la disminución
del flujo pulmonar.
E c o c a r d i o g r a m a m o d o M (figura 103-B)
Es d e gran utilidad para el diagnóstico mostrando
signos característicos que permiten reconocer el
padecimiento en un gran porcentaje de casos:
— _ . ,
np
ña
M^L^^MÉMÉUb^^^^aWtf ¿ ^nililiiLh'—HliiÉ'i *t
-&-v..i.
1111
CARDIOLOGÍA
do en uno de los procedimientos más usados para tal principal pueden ser las arritmias reiteradas de difí-
fin. El signo más característico se encuentra mediante cil control y que e n ocasiones adquieren un carác-
la aproximación apical de cuatro cámaras y consiste en ter "maligno", debido a que son capaces d e termi-
el registro de una gran cavidad auricular derecha por nar c o n la vida de estos enfermos. El a v a n c e tan
el desplazamiento que hacia el ápex sufre el orificio prodigioso d e la electrofisiología y de las técnicas
valvular tricuspídeo consecutivo al adosamiento de las percutáneas d e ablación han permitido dar trata-
valvas en el endocardio venlricular derecho. miento a la mayoría de las arritmias auriculares
(tanto las favorecidas por el Wolf Parkinson-white
Cateterismo cardiaco c o m o las que se producen por otros mecanismos)
que antaño se constituían en un factor de riesgo de
a ) El registro de las presiones muestra morfolo-
mortalidad en estos pacientes.
gía auricular derecha hasta cruzar el orificio
tricuspídeo. El tratamiento quirúrgico n o h a d a d o todavía
los resultados que e n otros p a d e c i m i e n t o s c o n -
b) El angiocardiograma c o n disparo e n la aurí- génitos se ha conseguido. Consiste en la plicatura
cula derecha demuestra, el gran tamaño d e longitudinal d e la p o r c i ó n atrializada d e l v e n -
esta cavidad y el desplazamiento del orificio trículo d e r e c h o , desinsertar e implantar las valvas
tricuspídeo hacia el ápex ventricular dere- anterior y posterior al a n i l l o tricuspídeo y refor-
cho (figura 105). zar éste c o n un anillo protésico p o s t e r i o r m e n t e
C a b e mencionar que se ha reconocido c o m o cierre de la C I A . Este p r o c e d i m i e n t o es i n d i c a d o
especialmente riesgoso este procedimiento e n la en pacientes sin i n s u f i c i e n c i a t r i c u s p í d e a por-
enfermedad de Ebstein por la facilidad con la que se q u e c u a n d o ésta está p r e s e n t e y es i m p o r t a n t e ,
provocan arritmias potencialmente letales, e inclu- se p r e f i e r e tratamiento q u i r ú r g i c o c o n s e r v a d o r
so se ha producido la muerte d e alguno d e ellos (plastia tricuspídea).
durante el estudio por este motivo.
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FIGURA 104 Enfermedad de Ebstein. Electrocardiograma. El trazo muestra un enorme crecimiento
de la aurícula derecha a juzgar por el alto voltaje de la onda P, de D, y D y todas las derivaciones
precordiales, así como el complejo qR en VI tiene el mismo significado. Nótese el bloqueo AV de
primer grado y el bloqueo de rama derecha de haz de His
CARDIOPATIAS CONGENITAS
¡1113
CARDIOLOGÍA
les se encuentran a la derecha e izquierda, res- mones, bronquios y atrios tendrán la misma morfo-
pectivamente. logía derecha o izquierda según se trate, de un dex-
El situs torácico está basado en la lobulación troisomerismo o un levoisomerismo, respectivamen-
pulmonar: tres lóbulos e n el pulmón derecho y dos te. Las v i s c e r a s i m p a r e s c o m o e l h í g a d o c o n
en el izquierdo, normalmente. frecuencia se encuentran en una posición central
El situs bronquial está determinado por la mor- e n ambos tipos d e isomerismo, el bazo puede ser
fología de los bronquios principales, desde la carina múltiple o estar ausente en los isomerismos izquier-
hasta su primera bifurcación; esto es, el bronquio do y derecho, respectivamente.
derecho tiene aproximadamente la mitad de la lon- Las c o n e x i o n e s v e n o s a s sistémicas y p u l m o -
gitud que tiene el bronquio izquierdo. nares n o son d e t e r m i n a n t e s d e un situs atrial, y a
El situs atrial se determina por la arquitectura q u e p u e d e n tener a n o m a l í a s d e lugar y de c o -
interna de los atrios y externamente por la morfolo- n e x i ó n . Existe c o n f r e c u e n c i a b i l a t e r a l i d a d de
gía d e las orejuelas. El atrio derecho se caracteriza venas cavas superiores por persistencia de la v e n a
por la existencia de musculatura pectínea, cresta cava superior izquierda la c u a l d e s e m b o c a e n e l
terminalis y una orejuela de base ancha, forma trian- t e c h o d e l atrio a la i z q u i e r d a o e n el s e n o c o r o -
gular y punta roma, mientras que el atrio izquierdo n a r i o , estructura a u s e n t e e n el d e x t r o i s o m e r i s -
es de paredes lisas y la orejuela tiene su base estre- mo. La conexión de las venas pulmonares se hace
cha, forma encurvada y bordes festoneados. El tabi- anormalmente c o n frecuencia e n el dextroisome-
que interatrial del lado derecho tiene el limbo de la r i s m o , y a q u e no existe un techo d e atrio iz-
fosa oval y el pliegue oval del lado izquierdo. q u i e r d o q u e las i n d u z c a a c o n e c t a r s e a é l ; sin
embargo, en el levoisomerismo la c o n e x i ó n suele
El situs bronquial y el atrial son los que mejor se hacerse a a m b o s atrios, ya que a m b o s son de
correlacionan entre sí. morfología i z q u i e r d a .
Situs inversus
Los órganos se encuentran en imagen en espejo al
DIAGNÓSTICO RADIOGRÁFICO
situs solitus. El hígado está a la izquierda, la vena cava
inferior asciende por el lado izquierdo hasta un atrio El diagnóstico radiográfico del situs visccroatrial se
de posición izquierda pero de morfología derecha; o hace mediante una placa simple de tórax en inci-
sea la triada bepato<avo-atrial se localiza a la izquier- dencia posteroanterior, por medio d e una placa
da. El atrio de morfología izquierda se encuentra a la penetrada d e tórax e n la misma posición o bien,
derecha y el corazón tiene su eje mayor orientado de utilizando una tomografía frontal con lo que se logra
i z q u i e r d a a d e r e c h a (dextrocardia) el p u l m ó n identificar mejor al árbol bronquial.
bilobulado y el bronquio más largo están situados al •
lado derecho, el pulmón trilobulado y el bronquio Situs solitus (figura 109)
más corto están del lado izquierdo (figura 107-B). La placa simple d e tórax muestra al hemidiafrag-
ma d e r e c h o a un nivel más alto q u e e l izquierdo
Situs isomérico (figura 108) por la presencia e n ese sitio, d e l hígado, y al es-
En esta malformación la morfología de las visceras tómago a la izquierda, identificable por medio de
pares tienen tendencia a la simetría, así ambos pul- la i m a s e n hidroaérea de su c á m a r a . El c o r a z ó n
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
" '•^•:"v-.:.'
Situs inversus (figura 110)
D e x t r o i s o m e r i s m o (figura 112)
Los hemidiafragmas se encuentran a un mismo
nivel por la presencia d e l hígado, el c u a l tiene
posición m e d i a l .
La c á m a r a gástrica no o c u p a una posición uni-
f o r m e , y por lo tanto su localización no tiene va-
lor diagnóstico. El eje m a y o r d e l c o r a z ó n está
orientado c o n mayor f r e c u e n c i a hacia la derecha
(figura 112-A).
U n a placa penetrada de tórax y la tomografía de
tórax muestran a ambos bronquios verticales y cor-
tos (dextroisomerismo bronquial) (figura 112-B).
L e v o i s o m e r i s m o (figura 113)
Los hemidiafragmas en esle sitas) lo m i s m o q u e
e n el d e x t r o i s o m e r i s m o , están a un mismo n i v e l .
FIGURA 110 Situs inversus. Tomografía de tórax. La silueta cardíaca tiene su eje mayor dirigido in-
El bronquio principal largo (pulmón anatómica-
distintamente hacia la derecha o hacia la izquierda
mente izquierdo), va hacia la derecha y el bron-
quio principal corto (pulmón anatómica mente (figura 113-A). La posición d e l estómago e n este
derecho), se dirige hacia la izquierda. Nótese que situs tampoco tiene valor diagnóstico por tener gran-
la punta del corazón se dirige hacia la derecha des variaciones.
(dextrocardia)
La tomografía revela una simetría bronquial iz-
quierda al observar ambos bronquios horizontales y
se v e e n e l situs solitus; es decir, el b r o n q u i o largos (figura 113-B).
m á s largo se e n c u e n t r a a la d e r e c h a y e l corto a O t r o método radiográfico útil e n el diagnóstico
la i z q u i e r d a . El c o r a z ó n tiene su eje m a y o r d i r i - d e los situs viceroatriales es la broncografía que
gido de izquierda a derecha (dextrocardia). C u a n - permite visualizar con toda precisión las caracterís-
do e n u n situs in versus l a p u n t a d e l c o r a z ó n se ticas anatómicas observadas e n la tomografía bron-
dirige h a c i a la i z q u i e r d a , se habla d e levocardia quial. Su práctica rutinaria, sin embargo, no es acon-
(figura 111). sejable por no estar exenta de riesgos.
FIGURA 111 Situs in versus y levocardia. A: La placa simple de abdomen demuestra la existencia del
hígado localizado a la izquierda del cuerpo (h) y el estómago (e) con bario a la derecha (situs inversus). B:
En la misma paciente la dirección del eje mayor del corazón se dirige a la izquierda (levocardia). Cuando
de acuerdo con el situs debería dirigirse hacia la derecha
CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS
F I G U R A 113 Levoisomerismo. A : La radiografía de tórax demuestra corazón con punta hacia la izquier-
d a con ambos hemidiafragmas a la misma altura. B: La tomografía lineal de tórax enseña que los dos
bronquios principales son igualmente largos (anatómicamente izquierdos)
1117
CARDIOLOGÍA
2. El atrio izquierdo se identifica mediante recha del cuerpo (figura 116-Bí. Esta imagen debe
aproximación apical de cuatro cámaras al obtenerse c u a n d o se aplica el transductor e n la
demos-trar la llegada de las venas pulmona- región apical del corazón c o n la m u e s c a dirigida
res a dicha cavidad (figura 114-B), situada a hacia la izquierda del c u e r p o .
la izquierda del cuerpo, la cual se logra cuan- Cuando estudiamos los vasos abdominales, abor-
do la muesca del transductor se dirige a la dando la vía subcostal a nivel de la décima vértebra
izquierda del paciente. dorsal y obtenemos un eje corto de éstos, podemos
demostrar que la vena cava inferior (VCI) asciende
3. El corte transversal de los vasos abdominales a por el lado izquierdo del cuerpo y la aorta (Ao) por
nivel del décimo cuerpo vertebral dorsal, nos el lado derecho en íntima relación con el cuerpo
podrá mostrar que la vena cava inferior (VCI) vertebral (figura 117).
asciende por el lado derecho de la columna Deben tomarse en cuenta las mismas considera-
vertebral del cuerpo en el seno del hígado (H) ciones con respecto al reconocimiento de la aorta y
mientras que la aorta (Ao) lo hace por el lado de las desembocaduras de las venas pulmonares
izquierdo del cuerpo e n estrecha relación con que se mencionan en el diagnóstico de st'tus atrial.
la columna vertebral (figura 115).
Levoisomerismo
1. En esta malformación la porción intrahepática
de la vena cava inferior está ausente, por loque
es posible demostrar la llegada directa de las
venas hepáticas al atrio colocado a la derecha
(figura 118). Este hallazgo se logra sólo me-
diante la aproximación subcostal. Debe de
recordarse que no es rara la presencia de atrio
único en esta malformación (figura 118).
J1119
CARDIOLOGÍA
VENAS
HEPATK
(A)
VCI
VCI
VCI
Ao.
te
Vertebro Ver tebro
DEXTROISOMERISMO
iV.Cava VCavo
A o
.'e'r t e b r o Vertebro
L E VOI S O M E R I S M O
¡sos
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V Vertebro Vertebro
1121
4
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11241
Capítulo 30 Hipertensión Pulmonar
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de oxígeno arterial y a la acción de las prostaglandinas
ormalmente, las resistencias pulmonares F2 y A 2 . En el curso de los primeros meses continúa
son muy altas, con engrosamiento de la reduciéndose la resistencia vascular pulmonar y
c a p a media arteriolar e n el p u l m ó n adelganzándose en forma progresiva la pared mus-
colapsado del feto. Por io íanto, en circulación fe- cular de las arteriolas. En el adulto existe una doble
tal la sangre oxigenada llega a la aurícula derecha circulación pulmonar: e n efecto, recibe la sangre
por la vena cava inferior, pasa a la aurícula izquier- venosa proveniente d e las venas cavas y seno
da por la fosa oval y del foramen secundum al ven- coronario, sangre que va hacia la arteria pulmonar;
trículo izquierdo, aorta y vasos craneales. La sangre pero por otro lado, el pulmón recibe la sangre
desaturada regresa por la vena cava superior, aurícula arterial proveniente de las arterias bronquiales que
derecha y ventrículo derecho hasta alcanzar la arte- va a suplir de oxígeno a todo el árbol respiratorio;
ria pulmonar. D a d o q u e la resistencia vascular dichas arterias terminan e n una red capilar que drena
pulmonar es muy elevada en el pulmón del feto, hacia las venas bronquiales, y éstas a su vez, al siste-
sólo entre 10 y 3 0 % del flujo que llega ai tronco de m a venoso sistémico, pero algunas capilares bron-
la arteria pulmonar pasa a través de las pulmonares, quiales drenan hacia las venas pulmonares, lo cual
el resto atraviesa el conducto arterioso y, así, alcan- realmente constituye un cortocircuito venoarterial
z a a la placenta. que por su magnitud tan pequeña (1 % del gasto
cardíaco), no produce realmente insaturación arterial
Al nacimiento del niño, con la primera respira- y sólo e n algunas e n f e r m e d a d e s p u l m o n a r e s
ción ya fuera del útero, con el incremento del P O , (bronquiectasias, fibrosis quística, etc.), que la cir-
sanguíneo se produce dilatación de las arteriolas culación bronquial puede incrementarse importan-
pulmonares c o n marcada caída en las resistencias temente (hasta el 3 0 % del gasto cardiaco) y producir
arteriales, que favorece el franco aumento del flu- un significativo cortocircuito venoarterial y con ello
jo pulmonar y de la presión intrauricular izquier- cianosis.
d a , por lo que se cierra la válvula del foramen oval
e n el curso de la primera hora de vida. Normal- La presión pulmonar normal se encuentra entre
mente el conducto arterioso se cierra en las prime- 18 y 25 mmhg para la sistólica, 6 a 10 m m h g para la
ras horas de vida como resultado d e la intensa va- diastólica (muy parecida a la de la aurícula izquier-
soconstricción d e l m i s m o , que se produce e n da), y 12 a 16 mmhg para la presión media. Normal-
CUADRO 1
HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR
b) Impedimento al
llenado diastólico • Miocardiopatía Simétrica (tipo A) o del ven-
restrictiva trículo izquierdo, (tipo B)
mente el lecho vascular pulmonar opone resisten- endoteliales; por el contrario el tromboxano A se 2
cia aproximadamente diez veces menor a la que sintetiza por las plaquetas promueve la agregación
opone la vasculatura sistémica. A nivel del mar las plaquetaria y es un poderoso vasoconstrictor. El oxi-
resistencias arteriolares pulmonares son de 67 +_23 do nítrico es vasodilatador y la endotelina produce
d/seg/cnr ; o < d e 1 unidad Wood pero en países
5
vasoconstricción.
arriba de 1500 m sobre el nivel del mar las resisten- En conclusión, la regulación del tono de la
cias vasculares pulmonares son definitivamente más vasculatura pulmonar es extremadamente compleja
altas en sujetos normales (140 ±_ 27 d/seg/cm ), lo 5
En estos casos inicialmente la hipertensión pulmonar caído en insuficiencia contráctil. En estas condicio-
es de tipo hipercinético (hiperflujo pulmonar), pero nes, los esfuerzos físicos no van seguidos del au-
conforme se v a hipertrofiando la capa muscular d e mento proporcional del gasto cardiaco y por ello es
las arteriolas, las resistencias pulmonares van a u - frecuente q u e estos pacientes presenten
mentado y en forma recíproca el corto circuito AV y fatigabilidad, lipotimia, o aun síncope de esfuerzo
el flujo pulmonar van disminuyendo. Finalmente, la (déficit de riego cerebral) o dolor precordial de
importante elevación de las resistencias arteriolares esfuerzo (déficit de riego coronario).
condiciona una hipertensión pulmonar casi siem- La hiperventilación relacionada con el esfuerzo
pre irreversible c o n cifras similares y aun superio- también es un síntoma frecuente que acompaña a la
res a las resistencias sistémicas que favorecen la hipertensión pulmonar y se debe a un mecanismo
inversión de los cortocircuitos (previamente arte- compensador que intenta aumentar la oxigenación
riovenosos) y c o n ello la aparición d e cianosis. sanguínea en presencia de un gasto cardiaco fijo. El
La obstrucción anatómica de la luz de los vasos reconocimiento de estos síntomas, en hipertensión
pulmonares puede llegar a causar hipertensión pulmonar, es importante por dos razones:
pulmonar, cuando es de suficiente cuantía ya sea
d e aparición aparatosa y brusca (embolia pulmo- 1. Traducen gravedad en la elevación de la pre-
nar), o de curso crónico e insidioso (tromboembo- sión pulmonar y son d e mal pronóstico, ya
lismo pulmonar crónico, arteritis pulmonar, etc.). que la muerte por lo general, sobreviene en
La obstrucción funcional debido a vasoespasmo, el curso de los 5 años siguientes de que hi-
consecutivo a hipoxia y por la acción de sustancias cieron su aparición.
vasoactivas (histamina, serotonina, prostaglandinas, 2. La insuficiencia cardiaca derecha es un even-
etc.), es un factor coadyuvante en la génesis de la
to tardío que aparece e n las etapas muy avan-
hipertensión pulmonar producida por la oclusión
zadas del padecimiento.
embólica d e los vasos pulmonares. Por último, la
hipertensión arterial pulmonar cuando aparece sin
ninguna causa conocida, se le denomina hiperten- E X P L O R A C I Ó N FÍSICA
sión pulmonar primaria.
Signos centrales (complejo de la pulmonar de
Chávez):
1. Levantamiento sistólico en el segundo Ell (a
DIAGNÓSTICO
la inspección o a la palpación), como conse-
La historia clínica proporciona datos muy impor- cuencia de la dilatación del tronco de la arte-
tantes para el diagnóstico de la hipertensión pul- ria pulmonar.
monar, de a c u e r d o c o n su etiología (valvulopatía
2. Choque de cierre pulmonar palpable, lo cual
mitral, n e u m o p a t í a c r ó n i c a , c a r d i o p a t í a congé-
nita, etc.). traduce reforzamiento del II ruido pulmonar.
Cuando la hipertensión arterial es muy grave y 3. Faja de matidez mayor d e 2.5 c m por fuera
de evolución crónica, por sí misma es capaz de del borde paraesternal Izquierdo a nivel del
producir síntomas independientemente de su etio- segundo Ell a la percusión (dilatación del
logía. Estos síntomas aparecen con mayor frecuen- tronco de la arteria pulmonar).
cia e n las cardiopatías congénitas con cortocircui-
tos arteriovenosos en la que tardíamente aparece 4. A la auscultación (figura 1A):
hipertensión pulmonar o en ¡a hipertensión pul- a) Importante reforzamiento del compo-
monar primaria, ya que e n estos padecimientos es nente pulmonar del II ruido.
en donde se alcanzan las cifras más altas de presión
pulmonar. En efecto, la hipertensión crónica requie- b) Es frecuente escuchar el II ruido único o
re ser m u y e l e v a d a p a r a p r o d u c i r s í n t o m a s c o n escaso desdoblamiento de sus com-
autóctonos. ponentes, hecho que se debe a la poca
o nula distensibilidad d e las arteriolas
La hipertensión pulmonar grave es causa de que pulmonares, mismas que no permiten
el gasto cardiaco disminuya y sufra pocas variacio- ningún incremento del gasto d e l ven-
nes; la falla de distensibilidad del lecho vascular trículo derecho.
p u l m o n a r no p e r m i t e a u m e n t a r e l gasto d e l
ventrículo derecho (gasto fijo), que por el contrario c) Chasquido protosistólico pulmonar que
puede encontrarse disminuido si el ventrículo ha es de origen vascular (choque de la co-
HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR
»,VP
lumna sanguínea en la protosístole contra también a las neumopatías avanzadas con corto-
la arteria hipertensa) seguido de un soplito circuitos venoarteriales intrapulmonares.
expulsivo consecutivo a la dilatación del
tronco pulmonar. Electrocardiograma (figura 4)
1. Signos de hipertrofia ventricular derecha con
5. Crecimiento ventricular derecho (figura 2 ) :
sobrecarga sistólica. C u a n d o la sobrecarga
a) A la palpación se encuentra un levanta- sistólica es importante, la repolarización ventri-
miento sistólico sostenido, a nivel del bor- cular puede adquirir morfología de isquemia
d e paraesternal izquierdo bajo. subepicárdica o lesión subendocárdica.
1129
CARDIOLOGIA
• i ' '
I aVR
I V1
- ' V A
1 JJ
I
•
II aVL V2 V5
i
RHYTHH S T R J P s II
acompañado de dilatación del mismo (zona de transición desviada hasta V i . En un paciente con grave
neumopatía obstructiva crónica e insuficiencia cardiaca derecha
1130A
HIPERTENSIÓN ARTERIAl PULMONAR
CUADRO 2
D I A G N Ó S T I C O D E LAS CAUSAS CARDIACAS D E HIPERTENSIÓN P U L M O N A R
MEDIANTE E C O C A R D I O R A F Í A
1133
CARDIOLOGÍA
Cateterismo cardiaco y
I N D I C A C I O N E S P A R A EL E S T U D I O H E M O D I -
arteriografía p u l m o n a r
N Á M I C O
El cateterismo derecho, puede dar la siguiente informa-
ción valiosa en los pacientes con hipertensión pulmonar: C o n la historia clínica (figuras 1 , 2 y 3), el electro-
cardiograma (figura 4), la radiografía de tórax (figu-
1. C o n la d e t e r m i n a c i ó n de la presión capilar
ra 5) y el ecocardiograma e n todas sus modalida-
pulmonar se establece el diagnóstico diferen-
cial entre las causas de hipertensión pulmonar des (figuras 1, 6, 7, y 9), podemos establecer el
q u e se originan en el corazón izquierdo (este- diagnóstico de hipertensión arterial pulmonar; si
nosis mitral, m i x o m a , insuficiencia c a r d i a c a , éste se acompaña o no de cardiopatía hipertensiva
e t c . ) , d e las c a u s a s p a r e n q u i m a t o s a s o pulmonar crónica, si el Cor pulmonale se e n c u e n -
vasculares p u l m o n a r e s . Estará elevada e n las tra en fase d e compensación o ya existe falla ven-
primeras, y normal e n las segundas; sin e m - tricular derecha y se puede cuantificar c o n sufi-
bargo, vale la p e n a enfatizar q u e no es raro ciente precisión la presión sistólica de la arteria
que e n pacientes c o n grave hipertensión pul- pulmonar (figura 6), y las resistencias pulmonares
monar no se logre enclavar el catéter para (figura 8).
cuantificar dicha presión. Finalmente, con el estudio ecocardiográfico po-
demos sin duda establecer prácticamente todas las
2. El trayecto del catéter puede descubrir cardio- causas "cardiogénicas" de la hipertensión arterial
patías congénitas c l í n i c a m e n t e inadvertidas pulmonar (Cuadro 2).
(PCA, CIA, CIV) que pueden ser la causa de la Por último, c o n las pruebas de función respira-
hipertensión pulmonar.
toria, e n conjunto con la radiografía de tórax y e l
3. La oximetría puede poner e n evidencia corto- gammagrama pulmonar podemos encontrar las cau-
circuitos intracardiacos (arteriovenosos, sas de origen parenqu¡matoso o vascular primario o
venoarteriales o mixtos). secundario, causantes d e la hipertensión pulmonar
y el grado de deterioro de la función respiratoria.
4. La tensiometría cuantifica con exactitud los ni-
En otras palabras, mediante el estudio clínico y
veles de la presión pulmonar. La respuesta de la
la ayuda de métodos incruentos tenemos la certeza
hipertensión pulmonar a la administración de
diagnóstica en la gran mayoría de los casos de
oxígeno, de oxido nítrico o epoprostenol es muy
hipertensión pulmonar, de tal forma que las indica-
importante para conocer el carácter espástico
ciones para el estudio hemodinámico son muy es-
(funcional) d e la elevación de las resistencias
pulmonares o por el contrario, su elevación pecíficas:
irreversible y permanente por avanzado daño 1. Paciente con hipertensión arterial pulmonar,
a n a t ó m i c o de las arteria las p u l m o n a r e s en quien a pesar d e contar con todos los es-
(vasculopatía pulmonar)(ver capítulo de tudios de gabinete mencionados, no se tiene
CAKOIOPATÍAS CONGÉNITAS). c o n certeza el diagnóstico etiológico.
Í1135
HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR
nexión anómala total de venas pulmonares), no es nar, que predispone a la microtrombosis in situ. Se
capaz d e generar estos cambios e n la vasculatura han informado casos de fibrosis mediastinal que se
pulmonar en esta forma de hipertensión pulmonar acompañan de enfermedad venoclusiva pulmonar,
primaria, característicamente el gammagrama también se han descrito casos de este padecimiento
pulmonar ventilatorio/perfusiorio es n o r m a l . relacionado a enfermedades virales o a quimiotera-
pia; sin embargo, la enfermedad venoclusiva pul-
2. Arteriopatía p u l m o n a r t r o m b ó t i c a monar es un padecimiento m u y raro, y a q u e hay
Esta forma de hipertensión pulmonar primaria se menos de 1 0 0 casos informados en la literatura y
caracteriza por la presencia de lesiones e n las que constituyen menos del 7 % de los casos de hiperten-
predomina la fibrosis de la capa íntima c o n una dis- sión pulmonar primaria. Característicamente esta
tribución excéntrica e n arterias y arteria las que se forma de hipertensión pulmonar primaria se acom-
asocia a hipertrofia de la capa media y a lesiones paña de hipertensión venocapilar clínica (disnea en
fibrosas de la íntima distribuidas e n forma d e "par- todas su formas), radiológica (líneas B de Kerley,
ches", pero sin lesiones plexiformes. Característica- moteado difuso, redistribución del flujo, etc.), y
mente existen trombos antiguos, recanalizados, espe- hemodinámicos (elevación d e la presión capilar
cialmente en las arteriolas pequeñas (microtrombosis). pulmonar).
Al parecer, la elevación de la presión pulmonar lesio- • " "
na el endotelio vascular hasta el grado de crear
4. Hipertensión p u l m o n a r e n las colagenopatías
disrupción, lo cual dispara el mecanismo de la coa-
Una forma d e hipertensión pulmonar primaria es la
gulación; sin embargo, no se conoce a ciencia cierta
asociada a enfermedades de la colágena. En efecto,
cuál es e l estímulo q u e cambia el carácter del
algunos de estos padecimientos se acompañan de
endotelio vascular de anticoagulante a procoagu-
una neumopatía ¡ntersticia difusa, que consecutiva-
lante; de esta manera, este proceso se constituye en
mente causa hipertensión pulmonar grave; en otros,
una enfermedad vascular pulmonar generalizada en
la causa es una vasculitis pulmonar difusa. El síndro-
la que hay una proliferación difusa de la íntima acom-
me de Crestse acompaña de hipertensión pulmonar
pañada de trombosis arteriolar, que va progresando
primaria c o n cambios histopatológicos idénticos a
en el tiempo e n lo que respecta a gravedad. C a b e
los encontrados e n la forma plexogénica d e la
mencionar q u e en ocasiones la distinción entre h i -
hipertensión pulmonar primaria. Finalmente, s e ha
pertensión pulmonar primaria de variedad plexo-
encontrado que el 4 0 % d e los pacientes con hiper-
génica y la trombótica puede ser difícil porque algu-
tensión p u l m o n a r p r i m a r i a t i e n e a n t i c u e r p o s
nas pacientes pueden presentar manifestaciones
antinucleares positivos. Por toda esta evidencia se
histológicas d e a m b a s f o r m a s . L a arteriopatía
ha pensado que la hipertensión pulmonar primaria
pulmonar trombótica constituye el 20 al 5 6 % de los
es una enfermedad vascular de la colágena confina-
casos de hipertensión pulmonar primaria. En esta
da al pulmón.
variedad d e hipertensión pulmonar primaria el
gammagrama pulmonar V/Q muestra múltiples de-
fectos d e perfusión (en parches) no coincidentes
con defectos ventilatorios. DIAGNÓSTICO
1137
CARDIOLOGÍA
¡
¡
1138:;
HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR
H I P E R T E N S I O N PULMONAR
CAUSAS NEUMOIÓCICAS
Campos Alteraciones
• pulmón, ^hijersti
¡impíos
Enfermedad fcnfermcdad
parenquimatosa venoclusiva
PRUEBAS DE FUNCION
RESPIRATORIA
Neumopatía /
Hipertensión Neumopatía
obstructiva
pulmonar restrictiva
primaria
/
CASES ARTERIALES
Normocapnia o Hipercapnía
hiporapnia
GAMAGRAMA
\ Síndromes de
hipoventilacion
GAMAGRAMA
VENTILATORIO
PERFUSIORIO
\ \
Normal
Defectos
segmentarios
Angiografía
pulmonar
Tromboembolia Normal
FIGURA 14
1139
CARDIOLOGÍA
F I G U R A 16 Trombosis
venosa profunda. Al ultra-
sonido venoso demuestra
la presencia de un trombo
oclusivo en la vena femo-
ral profunda
a) Clase funcional: La clase fruncional > de clase e) O x í g e n o nocturno (2 L/min, por puntos
II que no mejora c o n tratamiento médico es un nasales).
signo de mal pronóstico. f) Digital y diurético para la insuficiencia cardiaca
derecha.
b) Función ventricular derecha: La insuficiencia
ventricular derecha que no revierte con el trata- 2. Tratamiento farmacológico:
m i e n t o m é d i c o t a n t o de la h i p e r t e n s i ó n
a) Calcioantagonistas (Nifedipina)
pulmonar como de la propia falla ventricular es
Indicados en pacientes en los que se demues-
un marcador de mal pronóstico.
tra en el cateterismo cardiaco que la presión
c) Caminata de 6 minutos: La incapacidad para media pulmonar desciende > 10 m m H g , y
c a m i n a r por lo m e n o s 3 0 0 metros o u n a alcanza < de 40 m m H g con un aumento con-
desaturación arterial > d e 10 unidades es un comitante d e l gasto cardiaco y que se e n -
marcador de gravedad y por ende de mal pro- cuentran en una clase funcional de I a l l l . Se
nóstico, asimismo un consumo de oxígeno máxi- administran dosis altas de nifedipina (240 mg.
m o ( V O , ) < d e 10.4 ml/Kg/min tiene el mismo dividida e n dos o tres dosis). Estos pacientes
significado. alcanzan una sobreviva de 9 5 % a 5 años e n
comparación con aquellos que no respon-
d) Cateterismo cardiaco: marcadores de menor d e n a este tratamiento en quienes la sobrevi-
sobrevida: va en el mismo lapso es de tan solo 36 %.
Conviene mencionar que el tratamiento debe
1) La ausencia de reserva vasodilatadora ante el
d e iniciarse a dosis bajas, la cual debe au-
reto farmacológica marca una reducción franca
mentarse paulatinamente hasta la mayor do-
de la sobreviva.
sis tolerada, siempre intentando que se al-
2) U n a presión media de la aurícula derecha > cance la dosis mencionada.
d e 10 m m H g .
3) La mezcla de saturación venosa < de 6 0 % .
b) Prostaciclina (Epoprostenol o PG1 )
4) Indice cardiaco < 2L/'m /min. que no aumenta
J 2
- 4 ^
CARDIOLOGÍA
EMBOLIA PULMONAR
V
Oclusión Estimulación
receptores Tromboémbnlo
vascular
yuxta-alveolares
Agregación plaquetas
Desequilibrio V/Q Liberación: serotonina,
Estimulación
bistamina, tromboxano A,
central núcleo ADP
respiratorio
, ! . AVolurr
c Volumen X Resistencias al
•
f espacio muerto I . flujo aereo
corriente
{• Distensibilidad •
pulmonar •
II
FIGURA 17 5fecfo de la oclusión
1 vascular pulmonar sobre la mecánica
pulmonar
PA CO2 7
cativamente la sobreviva de los pacientes mas ción oral lo cual ofrece una importante ven-
graves y usualmente es bien tolerada; sin taja para el paciente c o n un tratamiento cró-
embargo, su administración crónica puede nico. Este fármaco puede administrarse e3n
producir síntomas colaterales indeseables conjunto con calcioantagonistas inhibidores
como rubicundez facial, diarrea y en ocasio- de la ECA y anticoaguiantes.
nes dolor en el maxilar inferior al masticaren Se debe iniciar c o n una dosis de 6 2 . 5 mg
unos pacientes y dolor crónico d e los pies. c/12 hrs. por un mes y después intentar el
Su administración también causa taquifilaxla aumento a 125 m g . c/12 hrs. por un mes y
por lo que e n el tratamiento crónico e n oca- después intentar el aumento a 125 mg c/12
siones es necesario el aumento periódico de hrs. Este m e d i c a m e n t o ha demostrado una
la dosis. H a y casos documentados de trata- sobreviva de 9 3 % a un año y 8 4 % a dos años
miento de este grupo d e pacientes por mas e n pacientes c o n hipertensión pulmonar pri-
d e 10 años c o n efecto satisfactorio. maria c o n clase funcional 11l—IV. Desafortu-
Finalmente, en pacientes con clase fun- nadamente en el 11 % d e los pacientes pro-
cional IV la prostaciclina puede ser tratamien- d u c e daño hepático c o n elevación d e la
to puente para el trasplante de pulmón. aminotransferasa que obliga a suspender el
fármaco.
Bosentan
Este fármaco es un bloqueador de los recep- d) Sildenafil
tores de endotelina lo cual le confiere su Se e n c u e n t r a n en proceso estudios
efecto vasodilatador e n la vasculatura prospectivos con este fármaco en pacientes
sistémica y pulmonar. Su presentación es en con hipertensión pulmonar primaria en clase
tabletas de 6 2 . 5 y 125 m g . Para administra- funcional lll. Su efecto vasodilatador es debi-
1144»
HIPERTENSIÓN ARTERIAL PULMONAR
1145
CARDIOLOGÍA
Ventilación CC inlrapul- i c c
intrapul-
monares manares
monares
• desperdiciada
DESEQUILIBRIO
V/Q
FIGURA 18 HIPOXEMIA
1147
CARDIOLOGÍA
OCLUSIÓN VASCULAR
PULMONAR
SEROTONINA
HIPERTENSION
ARTERIAL PULMONAR
ESPASMO ARTERIOLAR
:
SOBRECARGA SISTÓLICA VASOCONSTRICCIÓN
AGUDA V. D.
HIPOXEMIA
FIGURA 19