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Los Principios básicos de la herencia.

Los caracteres humanos como el color de los ojos y el color del cabello, junto con muchas
otras características, se transfieren de una generación a otra. La herencia, que es la
transmisión de información genética de progenitores a su descendencia, generalmente sigue
patrones predecibles en organismos tan diversos como humanos, pingüinos, levadura de
panadería, y girasoles. La genética, la ciencia de la herencia, estudia similitudes genéticas y
la variación genética, las diferencias entre progenitores y su descendencia o entre
individuos de una población. El estudio de la herencia como una moderna rama de la
ciencia empezó a mediados del siglo xix con el trabajo de Gregor Mendel (1822-1884),
monje que cultivó plantas de guisantes. Mendel fue el primer científico en aplicar de
manera efectiva métodos cuantitativos para estudiar la herencia. Él no sólo describió sus
observaciones, sino que planeó de manera cuidadosa sus experimentos, registró los datos, y
analizó los resultados matemáticamente.
Teoría particulada, la explicación de Mendel
A partir de los resultados de los experimentos anteriormente revisados, Mendel propuso la
existencia de “unidades responsables de la herencia de rasgos específicos”, conocidas
actualmente como genes. Hoy se sabe que los genes se encuentran de a pares para cada
carácter (uno en cada homólogo) y se separan o segregan durante la formación de los
gametos (meiosis). De esta manera, solo una de las unidades apareadas para un carácter es
transferida a un gameto. Es así como cada gameto contiene una unidad o gen y el cigoto
contiene dos para cada carácter, ya que se forma a partir de la unión de los dos gametos. La
aplicación de esta teoría en la primera parte del experimento 1 determina que el progenitor
con semillas de color amarillo presenta un par de genes del mismo tipo, que se denomina A
(alelo dominante), configurando su genotipo como AA (homocigoto dominante), y el
progenitor con semillas verdes presenta dos genes a (alelo recesivo), configurando su
genotipo como aa (homocigoto recesivo). El progenitor AA produce gametos que
contienen, cada uno, un solo alelo A, y el progenitor aa produce gametos con un único alelo
a. Es así como los descendientes de F1 presentarán un alelo A de uno de los progenitores y
un alelo a del otro, configurándose el genotipo Aa (heterocigoto), lo que da como resultado
el fenotipo “semilla amarilla” debido a la dominancia del alelo A sobre el alelo a. A
continuación, se explica la forma de representar los genotipos y fenotipos posibles de este
cruce.
Primera ley de Mendel.
Esta ley, también conocida como ley de la segregación, dice que cuando un organismo
produce gametos, los alelos se separan, de manera que cada gameto recibe solo un miembro
del par de copias del gen. Se debe considerar que Mendel llegó a formular esta ley sin tener
el conocimiento de la presencia de cromosomas ni del proceso de meiosis en la formación
de gametos. Este raciocinio fue la manera de explicar por qué un rasgo recesivo desaparece
en una primera generación cuando es cruzado con una línea pura del rasgo dominante y
luego reaparece en la segunda generación cuando se reproducen los híbridos de la F1 .
Segunda ley de Mendel.
Esta ley, también conocida como ley de la distribución independiente, dice que en una
cruza dihíbrida, los alelos (dominante y recesivo) de genes diferentes se distribuyen en
forma independiente uno del otro durante la formación de gametos. Por esta razón,
aparecen todas las combinaciones posibles para esos caracteres
Tercera ley: Principio de la transmisión independiente.

La tercera de las leyes de Mendel es el principio de la transmisión de caracteres


independientes. Mendel concluyó que los alelos de un gen se transmiten
independientemente de los alelos de otro gen. Es decir, diferentes rasgos son heredados
independientemente unos de otros. No existe relación entre ellos.

Por lo tanto, el patrón de herencia de un rasgo como el color de ojos no influye en la


transmisión en el patrón de herencia de otro rasgo como el color del pelo.

El ADN la molécula de la herencia.


Después del redescubrimiento de los principios de Mendel en 1900, los genetistas
realizaron diferentes experimentos para aprender cómo están ordenados los genes en los
cromosomas y cómo se transmiten de generación en generación. Conforme la ciencia de la
genética se fue desarrollando, los bioquímicos hacían un esfuerzo creciente para
correlacionar las propiedades conocidas de los genes con la naturaleza de varias moléculas
biológicas. Planteándose preguntas como ¿Qué tipo de molécula podría almacenar
información? ¿Cómo se podría recuperar esta información y utilizarse para dirigir las
funciones celulares? ¿Qué tipo de molécula podría ser relativamente estable, pero tener la
capacidad de cambiar bajo ciertas condiciones, dando lugar a una mutación?
Durante la década de 1930 y a principios de 1940, la mayoría de los genetistas le prestaron
poca atención al ADN, convencidos de que el material genético debía ser una proteína. Con
base en la evidencia acumulada de que los genes controlan la producción de proteínas,
ciertamente parecía probable que los genes mismos debían ser proteínas. Los científicos
sabían que las proteínas se componían de más de 20 tipos diferentes de aminoácidos en
muchas combinaciones diferentes, lo cual le confiere características únicas para cada tipo
de proteína. Dada su complejidad y diversidad comparada con otras moléculas, las
proteínas parecían ser el “material” del que están hechos los genes. En cambio, los
científicos habían establecido que el ADN y otros ácidos nucleicos estaban hechos de sólo
cuatro nucleótidos, y lo que se sabía acerca de su organización los hizo relativamente poco
interesantes para la mayoría de los investigadores. Por esta razón, varios de los primeros
indicios de las funciones del ADN fueron un tanto inadvertidos.
El centro de una célula se denomina núcleo.
El núcleo es una estructura propia de las células, en su interior almacenan el material
genético. Sin duda que los componentes esenciales del núcleo corresponden a las moléculas
que contienen la información genética: la cromatina, asociación entre proteínas y ADN, y el
nucléolo.
ADN: unidad del material genético.
Esta molécula constituye el principal material genético de los seres vivos. Contiene la
información necesaria para la conformación y funcionamiento de los organismos gracias a
su capacidad de expresión. Dentro de la estructura del ADN, las bases nitrogenadas son las
que codifican la información genética, ya que es su secuencia la “descifrada” por los
ribosomas y “convertida” en moléculas químicas. El ADN se define químicamente como
un polímero de monómeros. Cada monómero se denomina nucleótido, el que a su vez está
compuesto por un grupo fosfato (P), un azúcar desoxirribosa (D) y una base nitrogenada,
que puede ser una de estas cuatro posibilidades: adenina (A), timina (T), citosina (C) y
guanina (G). La base nitrogenada que forma parte del nucleótido de la imagen lateral es
adenina. Tanto el grupo fosfato como la base nitrogenada están unidos a la desoxirribosa,
que corresponde a una pentosa, azúcar de 5 carbonos. El grupo fosfato de un nucleótido se
une a la pentosa de otro nucleótido, formando una cadena. El ADN es una molécula que
está compuesta por dos cadenas de nucleótidos que se unen entre ellas a través de bases
nitrogenadas complementarias: A con T y C con G. Esta doble hebra se pliega y adquiere
su forma helicoidal característica.
¿Cómo se organiza el material genético?
El ADN no se encuentra aislado en el interior del núcleo, sino que está estrechamente
ligado a proteínas, llamadas histonas, que le permiten condensarse y empaquetarse en
estructuras conocidas como cromosomas. Gracias a este nivel de compactación, durante la
división celular el material genético se podrá repartir de manera equitativa en las células
resultantes. Ahora bien, su nivel de empaquetamiento no es una condición estática, ya que
el material genético cambia su organización según el estado celular en que se encuentre, es
decir, depende de si la célula se va a dividir o no.
Enrollamiento del material genético.
Como está contenida la información en las moléculas de ADN.
¿De qué manera está codificada la información en el ADN?
La respuesta a esta pregunta estaba en la misma estructura de la molécula de ADN y sería
desvelada por el biólogo estadounidense James D Watson y el físico inglés Francis Crikc.
Para desempeñar su función biológica el material genético debía satisfacer, por lo menos,
cuatro requisitos:
 Llevar una gran cantidad de información genética de célula madre a célula hija y de
generación en generación.
 Producir una copia de sí misma previa a cada división celular con gran precisión.
 Ser químicamente estable para justificar el hecho de que información idéntica pasa
de generación en generación y de que la progenie se parece a sus progenitores.
 Ser capaz de cambiar conmutar los errores de copia también deben ser transmitidos
finalmente a la siguiente generación esta es una propiedad muy importante debido a
que es sin la capacidad para replicar los errores no habría variación genética a lo
largo de la historia de la vida.
La molécula de ADN en tenía el tamaño la configuración y la complejidad necesaria para
satisfacer estos requisitos.

Bibliografía
Alvarado López, J., Bustos Villagrán, M., Cortés Cortés, M., & Santibáñez Gómez, D.
(2012). Biología 2 texto del estudiante. Santiago de Chile: Ediciones SM Chile S.A.
Curtis, H., Barnes, S., Schnek, A., & Massarini, A. (2008). Curtis Biología ( séptima
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