MY WORST MISTAKE

Ternarla a mi lado es lo mejor que me ha pasado y si tengo que matar para hacerla feliz,
no dudare en hacerlo, siempre lo dije.
- Aún recuerdo ver sus ojos suplicándome piedad, suplicándome por su vida y sigo
preguntándome cual fue mi error de cálculo para terminar de esta manera, me había
asegura de borrar las coordenadas, los códigos IP. las contraseñas y cada una de las
pistas. tal vez mi error fue enamorarme de ella…

- Porque lo haces, que hice yo para mereces esto.

- ¡callate! – Grite con la voz seca tras la máscara. – Ahora ¿De qué manera desearías
morir? O nunca lo pensaste, es interesante como aprecias la vida cuando estas frente a la
muerte, hasta alguien como tu tiene ese sentimiento, aunque lo dudo – Decía mientras
vertía las gotas de ácido en su piel, la primera tortura de unas cuantas más, me
aseguraría de tenerlo con vida, mis conocimientos de medicina me servirían en esta
como en ocasiones anteriores.
- ¡no por favor! Ya no sigas, te pagare el doble no el quíntuple de lo que te pagaron.
- No podrías pagarme, ahora dame todos los códigos y contraseñas de todas estas cuentas.
– le decía mientras le mostraba el dispositivo signet.
- ¡Púdrete!
- El que se está pudriendo eres tú en estos momentos – Sonreí mientras enroscaba la tapa
de la botella de ácido, y me empezaba a imaginar la siguiente tortura, tomé en mis
manos los clavos y con fuerza los introduje es sus muslos y conecte lo cables de luz en
cada uno de los clavos, encendí la luz y escuche un grito.
- ¡haaaaaaa! ya no sigas por favor…por favor
- Seguí con mi tortura hasta que me dio la información necesaria, pero eso no me detuvo
seguí torturándolo, encendí la luz y lo dejé ahí, bocas hablan de que lo encontraron con
el corazón reventado, pero también encontraron un testigo, un maldito testigo, un niño
de 9 años que por casualidad. Pasaba por ahí y vio mi rostro a la hora que me quite la
máscara para poder limpiarme es sudor de la frente.
- ahora vivo huyendo. Mi crimen fue amarte, pero se me acusa de los múltiples asesinatos
que he cometido. Siempre hice lo que me ordenaste, porque te amaba, nunca pensé que
solo me utilizabas para tus beneficios, maldigo el primer momento que te conocí en la
universidad.
Ahora sentado en este sillón escucho las sirenas de las patrullas que vienen a buscarme,
ya estoy herido tengo una fractura en el brazo y una bala en mi pierna, ya no puedo
seguir huyendo, pero debo tomar venganza contra la mujer que me uso solo para sus
beneficios, debo seguir y creo que mejor sería ejecutar el plan que prepare durante
muchos años, mientras huía, una seria se túneles debajo de la cárcel a donde
seguramente me iban a enviar ya tengo todo preparado, ya es hora de que aprendas de
que del amor al odio hay un solo paso, y juro, juro que te matare.