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INVESTIGACIÓN SOBRE LA TALIDOMIDA

TECNOLOGÍA EN REGENCIA EN FARMACIA


Tercer semestre

INTEGRANTES

Materia:
Farmacoepidemiologia

Universidad del Tolima

Agosto 24, 2021.


INTRODUCCIÓN

De acuerdo a la investigación realizada con la voluntad de tener un enfoque


sobre la TALIDOMIDA, deseamos hacerles un paréntesis y ente llegamos a
que en la década de los 50 - 60 se emplea un medicamento llamado
Contergan®, cuyo principio activo era la talidomida. Era empleado como
sedante y en el tratamiento de los síntomas como náuseas, vómitos y
ansiedad en embarazadas con intención de controlarlos.

Los más ocurrente es que estos En sus comienzos era dispensado sin
receta médica.

Este fármaco estaba indicado como sedante, y se aseguraba más seguro


que los barbitúricos, con la virtud adicional de su nulo poder adictógeno.
Además, se empleó como procedimiento de los indicios que aparecen en el
primer trimestre del embarazo como son la ansiedad, náuseas y vómitos. La
primera actitud adversa que presentaban los pacientes era un mal en los
nervios de manos y pies, polineuropatía, entre otros. Este evento hizo que el
fármaco, que en inicio se adquiría sin receta médica, pasara a ser un
medicamento que precisaba la misma para su dispensación. Más adelante,
nació una alarma calificable de enfermedad pandémica. Tal evento produjo,
en una cantidad enorme de recién nacidos, diferentes partes mal formadas
como: aplasia radial, ausencia de pulgar y del hueso adyacente en la parte
inferior del brazo, cardiopatías congénitas, estenosis del tubo digestivo,
microcefalia, partes mal formadas renales, de los órganos de los sentidos y
la cara entre otras, sin embargo, lo cual más llamó la atención ha sido la
focomelia.
Esto generó que, en 1961, 2 pediatras alemanes comenzaran una
indagación remitiendo formularios a cincuenta clínicas pediátricas y
obstétricas del continente europeo, USA, Canadá y Filipinas. Partiendo de
este caso, Widukind Lenz procedió a la ejecución de un proceso de
averiguación con base en una secuencia de entrevistas a las madres de
chicos focomélicos; de este análisis obtuvo una secuencia de resultados,
entre los que destacaba la coincidencia en la toma de Contergan®.

Este grave suceso incitó otra investigación sobre las posibles causas del
mismo. Se analizó la estructura química de la talidomida, observándose que
se trataba de una mezcla racémica, es decir, existen dos enantiómeros, la
(S)-talidomida, responsable de los efectos, y la (R)-talidomida, causante del
efecto sedante buscado. Se demostró cómo el propio organismo transforma
una en otra, por lo que, aun administrando sólo el enantiómero R aislado en
sangre, estarían presentes ambos;
OBJETIVOS

 Demostrar que la relación beneficio/riesgo es positiva.


 Revisar los protocolos de actuación en función de las características
de los pacientes.
 Acceso y cumplimiento de los protocolos por parte de los centros
hospitalarios.
 Dar a conocer sus riguridades para así decir que la talidomida, a
pesar de su pasado, sigue siendo válida para el tratamiento de
diversas enfermedades siempre que sea administrada en condiciones
rigurosas para prevención de reacciones adversas.
DESARROLLO

Como ya hemos indicado antes, la talidomida es una alternativa terapéutica


notable en el procedimiento de diversas patologías. Esta revisión se va a
centrar en especial en su exclusiva indicación descrita en la ficha técnica de
la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), o sea, como procedimiento
del Mieloma Múltiple no tratado en pacientes más grandes de 65 años o no
aptos para recibir quimioterapia a altas dosis. No obstante, son numerosos
las instrucciones no incluidas en su ficha técnica empero con pruebas
científicas y varios estudios que garantizan su efectividad, lo cual se sabe
en la literatura científica anglosajona como uso off-label, como son
patologías ulcerativas crónicas, aftas, Patología de Behcet, Lupus nudoso
en lepra (autorizado por la FDA, empero no por la EMA), artritis reumatoide,
Patología crónica de injerto contra el huésped, Prurito nodular, etc.

La talidomida ha sido vetada en demasiados lugares por sus antecedentes y


los grandes estragos que pudo y causó durante años, intentado controlar
otro tipo de síntomas. La talidomida parecía condenada a la historia de la
ignominia en el mundo farmacéutico. Sin embargo, algunos clínicos
infirieron que los profundos efectos deletéreos sobre el desarrollo fetal
podrían tener aplicación clínica frenando el crecimiento tumoral. Se suponía
que el rápido crecimiento de los tejidos del feto podría guardar alguna
relación con la progresión del tejido tumoral. A tal fin se planificaron tres
amplios ensayos clínicos para evaluar la eficacia anticancerosa de la
talidomida. Los resultados estuvieron muy alejados de lo esperado; y la
talidomida cayó en el olvido durante las siguientes tres décadas; o casi.
Luego de eso, se iniciaron una serie de investigaciones donde obtuvieron
resultados exitosos, siendo aceptado nuevamente por la OMS; dependiendo
su uso.

En el año 1964, Jacob Sheskin, médico israelí ensayó talidomida en un


paciente con eritema nodular causado por lepra. La talidomida le fue
prescrita como último recurso para aliviar el picor extremo de un enfermo
leproso. No se olvide que se trataba de un fármaco sedante.
Sorpresivamente la talidomida consiguió una resolución completa del
eritema nodular al cabo de tres días de tratamiento. La confirmación de
eficacia siguió de la observación de que el cuadro dermatológico reapareció
tras la suspensión del tratamiento; y se resolvió de nuevo tras reinstaurar la
terapia con talidomida. Este tratamiento ex jubantibus se consolidó con
observaciones en otros cinco pacientes. Las observaciones se consideraron
suficientes para que la Organización Mundial de la Salud aceptase el
tratamiento con talidomida como una de las mejores opciones terapéuticas
para el tratamiento del eritema nodular por enfermedad de Hansen.

Desde ahí ha influido en una cantidad considerable de mejoras en muchas


enfermedades. Como el VIH y SIDA, mieloma múltiple en combinación con
dexametasona o simplemente pacientes que presentan una enfermedad
crónica o gravemente debilitante o que se considera que pone en peligro su
vida y que no pueden ser tratados satisfactoriamente con un medicamento
autorizado.

El mecanismo de acción principal de este es actividad inmunomoduladora,


anti-inflamatoria y potencialmente anti-neoplásica por inhibición selectiva del
TNF-α y de la expresión de moléculas de adhesión involucradas en la
actividad anti-angiogénica. Aumenta la susceptibilidad de las células
cancerosas a la apoptosis bajo la regulación de la proteína anti-apoptótica
Bcl-2 y mejora la sensibilidad a la apoptosis inducida por Fas y NF-kB.
¿Cómo se administra?

La dosis oral recomendada de talidomida en su ficha técnica es de 200 mg


al día, durante un máximo de 12 ciclos de 6 semanas y un mínimo de 2
ciclos de 6 semanas, en función de la evolución de la enfermedad. Debe
tomarse en una sola dosis al acostarse, para reducir así el impacto de la
somnolencia. Este medicamento puede tomarse con o sin alimentos. Sin
embargo, existen numerosos estudios y ensayos clínicos que defienden la
administración de menores dosis, pues los efectos adversos a partir de 100
mg pueden ser una barrera para un tratamiento eficaz de los pacientes. - La
talidomida no se usa como monoterapia, sino que forma parte de terapias
combinadas o politerapias normalizadas. Una de ellas es la combinación de
talidomida con melfalán y prednisona (MPT). El melfalán es un agente
alquilante (quimioterápico), análogo de las mostazas nitrogenadas -.

Como ya está dicho; hay fármacos, tal es el caso, que parecen negarse a
desaparecer.
CONCLUSIÓN

 Tras todo lo expuesto antes tenemos la posibilidad de concluir que la


talidomida, tras los desastrosos acontecimientos ocurridos al rededor
del siglo XX, no ha sido retirada enteramente del mercado puesto que
hay pruebas que garantizan su efectividad como procedimiento de
varias patologías.
 Este medicamento puso una concienciación social del uso racional
del medicamento, así como el desarrollo de la Farmacovigilancia.
 La tragedia de la talidomida supuso un antes y un después no solo en

el ámbito de la farmaindustria sino también en el de la medicina.

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