Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
TEMA. PÁGINA.
Introducción---------------------------------------------------------------------3
Principios Tributarios.--------------------------------------------------------9
Conclusión-----------------------------------------------------------------------14
INTRODUCCION
Los límites jurídicos de la potestad tributaria del Estado y los límites políticos de
la potestad tributaria están compuestos por los principios de carácter
constitucional que resguardan que la carga tributaria sea justa y equitativa en
relación a los sujetos que afecta, como, asimismo, lograr el respeto de
derechos constitucionales de contenido económico social.
Estos límites están constituidos por los principios de legalidad, equidad o
justicia tributaria, igualdad o generalidad, derecho a la propiedad, estos
principios tributarios corresponden a nuestro sistema tributario guatemalteco,
así mismo es fundamental hacer énfasis en que en la constitución política de la
República de Guatemala están debidamente establecidos, por lo que nosotros
como guatemaltecos responsables tenemos la obligación de contribuir con el
gasto público en la forma prescrita por la ley.
2
LÍMITES JURIDICOS DE LA POTESTAD TRIBUTARIA DEL ESTADO.
3
extraordinarios, arbitrios y contribuciones especiales, conforme a las
necesidades del Estado y de acuerdo con la equidad y justicia tributaria, así
como determinar las bases de recaudación.
El mismo principio de legalidad contempla lo que se conoce como preferencia
de ley, el que reconoce que son nulas las disposiciones jerárquicamente
inferiores a la ley, que contradigan o tergiversen las normas legales
reguladoras de las bases de recaudación del tributo.
4
5
CARACTERES DE LA POTESTAD TRIBUTARIA.
Indica Moya, que los caracteres esenciales de la potestad tributaria son las
siguientes:
1. Abstracto: Para que exista un verdadero poder tributario, es necesario que
el mandato del Estado se materialice en un sujeto y se haga efectivo mediante
un acto de la administración. Alessi (citado en Moya) considera que puede
hablarse de poder tributario abstracto y poder tributario concreto, siendo este,
complementario del abstracto. La Potestad Tributaria, al igual que las leyes, es
abstracta, pero se deben aplicar en concreto.
2. Permanente: La potestad tributaria perdura con el transcurso del tiempo y
no se extingue. Sólo se extinguirá cuando perezca el Estado. Siempre que
exista, ineludiblemente habrá poder de gravar.
6
legislativo, de gestión administrativa y otorgamiento de derechos a los
administrados. Determinando pautas, limites jurídicos al poder tributario del
Estado y garantías de observancia obligatoria.
Como se explicó anteriormente uno de los límites jurídicos principales al poder
tributario es la Constitución, pues en ella se encuentran establecidos los
preceptos constitucionales por medio de los cuales se desarrollará el sistema
tributario nacional; se definen los titulares del poder tributario, sus atribuciones
y obligaciones de manera general. Es decir, se delimitan los parámetros en los
cuales se desempeñará el poder tributario. Sin embargo, es preciso mencionar
que en ella también se encuentran principios tanto de carácter general como
tributarios.
Estos tienen como finalidad última complementar la labor del texto
constitucional para que los derechos individuales de cada contribuyente no se
vean vulnerados por la autoridad estatal. Con la aplicación de dichos principios
se busca prevenir la intervención abrupta del Estado en la esfera individual de
las personas; existe discrepancia acerca de cuáles son los principios
establecidos, pues la mayoría de veces varían de un autor a otro sin embargo
se debe tomar en cuenta que los mismos se modifican según su jurisdicción;
por lo que en siguiente apartado se abordaran los principios esenciales para
todo sistema tributario.
Abordaremos la tarea de analizar el poder tributario en Guatemala consciente
de que en propiedad dicho estudio exigiría referirlo al poder financiero, ya que
el análisis del poder tributario aisladamente pierde razón de ser jurídica, dada
la unidad esencial entre los ingresos públicos y los gastos públicos; esto es, se
establecen tributos y se recauda porque existen necesidades públicas.
En este sentido, la propia regulación constitucional guatemalteca alude al poder
tributario para atender las necesidades del Estado. Sin embargo, el objeto de
nuestro trabajo se limita al análisis del poder tributario en Guatemala, dada las
particularidades jurídico-constitucionales que presenta, que son dignas de
estudio; superando la tendencia a concebirlo, exclusivamente, como poder
legislativo para crear tributos; de la que no está exenta la propia Corte
Constitucional cuando afirma que el poder tributario del estado constituye
básicamente una facultad que posee este ente para crear unilateralmente
tributos.
Debiéndose encontrar el fundamento del poder tributario, no tanto en la
soberanía, arrumbada en el seno de un Estado de Derecho, que lleva acabo
una distribución vertical y horizontal del poder, sino en el propio Ordenamiento
constitucional; concretamente en la atribución al poder público de fines de
Estado, entre otros muchos. En definitiva, en la existencia de necesidades
públicas a atender por el Estado. Fundamento que remarca la propia Corte
Constitucional cuando afirma que la “potestad fiscal”, es la base de la
subsistencia económica del Estado.
Marco jurídico, en cuyo seno el poder tributario aparece configurado como
conjunto de competencias jurídico-constitucionales, atribuidas a entes públicos
territoriales representativos de intereses primarios, que les permite establecer y
aplicar tributos; haciendo realidad el deber contribuir en Guatemala.
7
Lo cual exige, como presupuesto de operatividad, la atribución de dichas
funciones jurídicas, que anclan sus cimientos en la atribución de competencias
normativas y administrativas, a los entes públicos territoriales; permitiéndoles
actuar tributariamente en ambos planos jurídicos: el normativo y el
administrativo.
PRINCIPIOS TRIBUTARIOS
9
acuerdo con el principio de capacidad económica sino, también, conforme a las
necesidades del Estado, que conecta al tributo con los fines de Estado,
proclamados constitucionalmente; de acuerdo con el principio de igualdad,
contemplado en el artículo 4 de la Constitución política de la República de
Guatemala; así como de acuerdo con el resto de principios constitucionales
aplicables en materia tributaria. De forma que, actualmente, el principio de
capacidad económica debe conjuntarse con el resto de principios y fines
constitucionales para configurar la idea de justicia tributaria.
EL PRINCIPIO DE NO CONFISCATORIEDAD
10
política debe dar satisfacción para que la convivencia sea posible y se asegure
el bienestar general.
EL PRINCIPIO DE GENERALIDAD
11
como no puede ser de otra forma, como aquel presupuesto de hecho tipificado
por la norma tributaria para configurar un tributo, determinante del nacimiento
de la obligación tributaria, atribuible al mismo contribuyente y referible al mismo
aspecto temporal, evento o período impositivo, en función de su naturaleza
instantánea o periódica.
El fin de la instauración de la prohibición constitucional de la doble o múltiple
tributación interna es hacer realidad el mandato constitucional de contribuir al
sostenimiento de los gastos públicos de forma equitativa y justa; esto es, hacer
realidad tanto el principio de capacidad de pago, que puede verse vulnerado
por situaciones de doble tributación, como el principio de seguridad jurídica y
certeza del Derecho, evitando que una misma situación determine diversas
consecuencias jurídicas. Sin embargo, esta finalidad, plenamente acomodada a
la idea de justicia constitucional, queda amortiguada con el mandato de
eliminar progresivamente las situaciones de doble o múltiple tributación para no
dañar al fisco.
El constituyente opta por introducir un elemento: el interés fiscal, distorsionador
de la idea de justicia constitucional; además de vulnerador del mandato de
contribuir conforme a la capacidad económica de cada uno y con arreglo al
principio de seguridad jurídica; y además hacerlo con una dosis importante de
indeterminación, al señalar que dicha anomalía deberá eliminarse
progresivamente. Sin que dicha disfunción haya sido radicalmente rechazada
por la Corte Constitucional; limitándose bien a negar la posibilidad, en el marco
de una situación de doble o múltiple tributación, de incrementar el gravamen de
uno de los impuestos afectados porque ese incremento no tendería a su
eliminación progresiva sino que, por el contrario, agravaría la carga tributaria y
constituiría un claro incumplimiento de la citada obligación del Estado.
La prohibición de la doble tributación se construye sobre el hecho generador;
circunstancia que tiene como efecto pernicioso el hecho de que si dos o más
tributos con hechos generadores imponibles diferentes, con independencia de
que sean establecidos por un mismo poder tributario o por diferentes poderes
tributarios, inciden sobre la misma materia imponible, entendida como realidad
económica llamada a soportar el tributo (renta, consumo, patrimonio global o
concreto, actividad económica, etc.), no se produce jurídicamente doble o
múltiple tributación interna.
Abordaremos la tarea de analizar el poder tributario en Guatemala consciente
de que en propiedad dicho estudio exigiría referirlo al poder financiero, ya que
el análisis del poder tributario aisladamente pierde razón de ser jurídica, dada
la unidad esencial entre los ingresos públicos y los gastos públicos; esto es, se
establecen tributos y se recauda porque existen necesidades públicas. En este
sentido, la propia regulación constitucional guatemalteca alude al poder
tributario para atender las necesidades del Estado. Sin embargo, el objeto de
nuestro trabajo se limita al análisis del poder tributario en Guatemala, dada las
particularidades jurídico-constitucionales que presenta, que son dignas de
estudio; superando la tendencia a concebirlo, exclusivamente, como poder
legislativo para crear tributos; de la que no está exenta la propia Corte
Constitucional cuando afirma que el poder tributario del estado constituye
básicamente una facultad que posee este ente para crear unilateralmente
tributos.
12
Debiéndose encontrar el fundamento del poder tributario, no tanto en la
soberanía, arrumbada en el seno de un Estado de Derecho, que lleva a cabo
una distribución vertical y horizontal del poder, sino en el propio Ordenamiento
constitucional; concretamente en la atribución al poder público de fines de
Estado, entre otros muchos. En definitiva, en la existencia de necesidades
públicas a atender por el Estado.
CONCLUSION
13