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Jesus, El Rey de reyes

La revelación de Jesús al Creyente


Texto: Juan 1.1

Introducción: El Señor Jesucristo es la figura central de toda la realidad cristiana;


por consiguiente, las verdades acerca de Él son centrales en el cristianismo. Jesús
significa el cumplimiento de muchas profecías del Antiguo Testamento, y es el
autor de las enseñanzas del Nuevo. Los cristianos lo consideran como el creador,
el Cordero sacrificado desde la fundación del mundo, y también el Rey que vendrá
(Apocalipsis 13:8; 19:11–16).
Es importante destacar que este autor era el discípulo amado de Jesús. Por
corolario, nadie
conoció a Jesús mejor que él. En la noche más sagrada de todas, la noche de la
Cena, se reclinó en su pecho.
Permaneció junto a su cruz. Llegó, incluso, a entrar en el sepulcro 13:25; 19:26; 20
:8. Y,
con todo, es este mismo discípulo el que, como escritor del cuarto Evangelio, no
se retrae de
proclamar abiertamente a todos que este Jesús de la historia a quien él conoció
tan bien, ¡es
Dios mismo!

1. Jesús como Creador 1.1


a. El es desde la eternidad. Dios no tubo principio, él es eterno, lo que
quiere decir que no tuvo un inicio ni tiene un final.
Para la cosmovisión humana pobre esta comprensión se hace
imposible, pues todo a nuestro alrededor tiene un inicio y un final.
Empero, es absurdo aplicar las mismas leyes a Dios, pues
Él es fuera del tiempo. De no ser así, no sería Dios. Dependería de
alguien más para existir.
Este es el absoluto que confunde y ofende a la humanidad. Pues si
hay un ser así, es el Señor de todo y todos viven para su gloria, lo
quieran o no. A lo largo de las Escrituras este es un hecho innegable.
b. Es el autor de todas las cosas. Colsenses 1.16 “Porque en él fueron
creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la
tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean
principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para
él.”

2. Jesus como el Salvador 1.29; 19.30


a. El es la luz del mundo
b. Se sacrifico como el cordero que debía morir por nosotros. Su
sacrificio
redimió la humanidad y puso en orden el caos. Al morir el Verbo
exclamó: consumado esta.
c. Jesus como salvador ofrece salvación a través de su muerte
expiatoria
3. Jesus como El Rey de reyes. Apocalipsis 1.12-19; 5.1
a. Aparecera nuevamente
b. Tomara lo que es suyo
c. Es digno de suprema alabanza

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