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PLANIFICACIÓN DE SESIÓN DE APRENDIZAJE
TÍTULO DE LA SESIÓN
APRENDIZAJES ESPERADOS
SECUENCIA DIDÁCTICA
Inicio ( 10 minutos)
El docente lee o pide un voluntario que lea en voz alta el siguiente texto del
libro Educación, convivencia y agresión escolar del módulo de Biblioteca
escolar 2015.
Yo tenía el poder de poner los apodos humillantes. Recuerdo muy bien a CocoTango, era el
lelo del salón, era nuestra diversión. En fin… la historia de por qué le decíamos CocoTango es
así: nos reuníamos enfrente de los lockers del salón 9.°, y yo les decía: «ahí viene
CocoTango, ¿listos?». Mientras se acercaba con mirada de miedo y sonrisa nerviosa, nos
saludaba como quien quería pertenecer al grupo, pero temiendo lo que le iba a pasar.
«¡Quiubo, CocoTango!», empezábamos a empujarlo de un lado a otro, como si fuera una
pelota, como cuando uno jugaba Tingo Tango. «Tango-Tango-Tango», y el pobre indefenso
recibía empujones y carcajadas de cada uno de los del círculo que lo rotaban… Finalmente a
alguien le tocaba dar el ´toque final´, que era darle un calvazo por el coco [golpe en la cabeza]
… «Tango-Tango-Tango, ¡¡coco!!», y seguía una carcajada… «Eres un tonto,
¡cocotangooooo! ¡Te acabas de ganar tu entrada al salón!». Él tenía que pasar por este ritual
de tortura antes de entrar al salón, se secaba las lágrimas mientras se sentaba adolorido en
su pupitre. (Hombre de veinticinco años recordando su tiempo en el colegio).
(Chaux 2013: 125)
Inicio (5 minutos)
El docente indica que en esta hora analizarán un caso sobre acoso escolar y
los organiza en pares. El docente procura que sean pares mixtos (sexo,
origen étnico, aspectos culturales, etc.).
Los estudiantes leen el texto “Jokin” del libro Aprende a resolver conflictos
del módulo de biblioteca escolar 2015 (anexo 2).
Luego de la lectura, los estudiantes completan una ficha de trabajo (anexo
3). Puede ver las respuestas a esta ficha en la página 64 del libro
anteriormente mencionado.
Los estudiantes comparten sus respuestas a solicitud del docente.
Cierre (5 minutos)
Cierre (5 minutos)
Ninguna.
MATERIALES O RECURSOS A UTILIZAR
1. MINISTERIO DE EDUCACIÓN DEL PERÚ (2012). Texto escolar 1.° grado de Educación
Secundaria. Formación Ciudadana y Cívica. Lima: ed. Santillana.
2. ÁLVAREZ, D., L. ÁLVAREZ Y J. NÚÑEZ (2013). Aprende a resolver conflictos. Programa
para mejorar la convivencia escolar. Lima: Libro amigo.
3. CHAUX, E. (2013). Educación, convivencia y agresión escolar. Lima: Taurus.
Anexo 1
La violencia
Consecuencias de la violencia
La violencia trae consigo toda una serie de consecuencias negativas, tanto para el que la
sufre como para el que la ejerce. De ahí que sea rechazable no solo desde un punto de
vista moral, sino también desde un punto de vista práctico. La violencia causa daño a
quien la padece y genera en él sentimientos o bien de humillación o miedo ante el
maltrato sufrido o bien de enfado, rabia, resentimiento, rencor, los cuales pueden derivar
en violencia hacia el agresor. Además, la violencia, si no es atajada a tiempo, puede
agravar el conflicto. Las partes en conflicto se dedicarán más a atacarse entre ambas que a
tratar de solucionar el conflicto que comparten.
Violencia en la escuela
En el ámbito educativo, la violencia se puede manifestar en una multitud de formas:
violencia verbal (insultos, apodos, amenazas, hablar mal de alguien, sembrar rumores,
expresiones de falta de respeto), exclusión social (ignorar, rechazar, no dejar participar),
violencia física (peleas, golpes, agresiones con objetos), actos disruptivos (levantarse
constantemente del asiento sin consentimiento o tirar cosas por el aula durante la clase),
robos, destrozos, esconder cosas…(Defensor del Pueblo - Unicef, 2000, 2007; Fernández,
1999, 2001.
Cabe destacar un tipo particular de violencia compuesta por muchas de estas
manifestaciones: el bullying o acoso entre estudiantes. En una situación de bullying se
produce un maltrato continuado por parte de uno o varios estudiantes agresores hacia un
estudiante víctima. Entre ambas existe un claro desequilibrio de poder que es el que
posibilita el abuso. Los agresores aprovechan la debilidad de la víctima para abusar de ella
a través de conductas violentas variadas. Este abuso suele provocar en la víctima miedo y
humillación, así como un sentimiento de vergüenza que le hace que le sea difícil compartir
lo que le está sucediendo con otras personas y trate de disimular las agresiones que está
padeciendo. En esta situación, los espectadores también tienen un papel importante:
pueden contribuir a agravar el problema o ayudar en su solución. El alumno espectador
del maltrato estará fomentando el acoso de forma pasiva si mira hacia otro lado, o
animando a los acosadores si se ríe de las agresiones o incluso se une a ellas. Puede
comportarse así por amistad con el acosador o por miedo a que a él también lo acosen. En
cambio, puede detener el acoso o mejorar la situación de la víctima si no se une a los
acosadores, si no se ríe de las agresiones, si comenta con los demás que no le gusta la
situación, si denuncia el incidente, si pide ayuda a un adulto, si se queda junto al acosado,
si le pregunta si se encuentra bien, si se ofrece a jugar con él, si distrae al acosador, si se
lleva a otra parte al acosado, si se enfrenta al acosador y trata de detener la agresión.
(Álvarez, Álvarez y Núñez 2013: 51-52)
Anexo 2