Está en la página 1de 5

DEFINICIÓN

La infección del tracto urinario (ITU) consiste en la respuesta inflamatoria e infecciosa del
urotelio a la invasión y multiplicación de microorganismos desde la uretra hasta el riñón dando
lugar a alteraciones morfológicas y funcionales.
EPIDEMIOLOGÍA
Las infecciones del tracto urinario representan casi 7 millones de visitas por consulta externa y 1 millón
de visitas a urgencias, resultando en 100.000 hospitalizaciones al año.(4) la prevalencia de infecciones
urinarias aumenta con la edad. las mujeres son mucho más susceptibles que los hombres a las itus. Esto
se puede explicar por los factores anatómicos dentro de ellos una uretra corta, su estrecha relación
con el ano que facilita el ascenso de las bacterias en el tracto urinario y las alteraciones del microbiota
vaginal. En Las mujeres mayores de 65 años es de aproximadamente el 20%, en comparación con el 11%
en la población general. Además, entre el 50% y el 60% de las mujeres adultas tendrán al menos una
infección.

ECUADOR

Ministerio de Salud Pública indican una tasa de 7,8 por cada 10.000 habitantes.
ETIOLOGÍA

En general, se suele aislar un único patógeno en la mayoría de los casos, excepto en casos de anomalías
estructurales del aparato urinario o en pacientes con cateterización crónica de la vía urinaria
(polibacterianas). La bacteria más frecuentemente aislada es la E coli uropatógena, tanto en ITUs no
complicadas (75%) como en ITUs complicadas (65%).

FISIOLOGÍA

En hombres y mujeres la ruta de acceso más sencilla para la colonización de microorganismos, es la vía
ascendente en donde hay un desplazamiento desde recto o bien vagina en el caso de las mujeres, hasta
llegar a vejiga (5). En la fisiopatología de las ITU existen factores patogénicos tanto del huésped como
del germen responsable de la infección.  Factores del huésped: consisten en alteraciones del flujo
urinario, alteraciones químicas y hormonales del epitelio uretral o genital, hábitos higiénicos,
cateterismos y manipulación urinaria, embarazo y diabetes (6).  Factores de microorganismos: poseen
características propias que es facilitan la colonización, algunas de ellos son proteínas como la
hemaglutinina ubicada en el exterior de la membrana celular, estructuras como las fimbrias tipo 1 que
son capaces de ligarse a estructuras ricas en manosa como es el caso de la proteína de Tamm Horsfall la
cual se ubica en orina humana y bien, la presencia de hemolisinas y factor necrotizante citotóxico que
favorecen la patogenicidad del microorganismo (5). Una vez que se instaura el patógeno en las vías
urinarias se abre paso en el intersticio, lo cual genera una respuesta inmune con elevación de sustancias
como histamina, serotonina, citocinas, entre otras; todo esto lleva a un aumento de la permeabilidad
vascular y activación de células endoteliales. Al final, esta reacción química favorece la llegada del
sistema inmune para hacer frente al patógeno el cual estimula fibras nociceptivas que generan el
malestar, el cual es la razón de consulta en la mayoría de los casos (5).

Factores de Riesgo
Las Guías Europeas sobre Infecciones Urológicas [8], clasifican los factores de riesgo de ITUs en 6
categorías con el acrónimo “O R E N U C”:

- O: Sin factor de riesgo conocido, por ejemplo, las mujeres premenopaúsicas no gestantes.

- R: Factores de riesgo de ITUs Recurrentes: actividad sexual, dispositivos anticonceptivos, espermicidas,


diabetes mellitus controlada, déficits hormonales tras la menopausia, algunos grupos sanguíneos.

- E: Factores de riesgo Extra-urogenitales, que conllevan riesgo de peor evolución: inmunosupresión,


enfermedades autoinmune o conectivopatías, hombres, gestación, diabetes mellitus mal controlada,
prematuridad, neonatos.

- N: Factores de riesgo Nefrológicos, con mayor riesgo de peor evolución: poliquistosis renal,
insuficiencia renal.

- U: Factores de riesgo Urológicos, corregibles, pero con mayor riesgo de peor evolución: bacteriuria
asintomática combinada con otro factor de riesgo de las demás categorías, obstrucción ureteral por
litiasis u otras causas, catéter urinario transitorio, disfunción vesical neurogénica controlada, cirugía
urológica.

- C: Factores de riesgo urológicos, no corregibles, y Catéter urinario permanente, con mayor riesgo de
peor evolución: catéter urinario a largo plazo (sondaje permanente, talla vesical permanente, etc…),
obstrucción urinaria irresoluble, vejiga neurógena no controlada.

CLASIFICACIÓN
Las infecciones urinarias se pueden clasificar en función de su evolución y la coexistencia de factores de
riesgo, o de su localización anatómica concreta en el tracto urinario.

- ITU no complicada: las que ocurren en mujeres sanas no gestantes con síntomas de vía urinaria baja
(cistitis: disuria, polaquiuria, urgencia miccional, dolor suprapúbico), o de vía urinaria alta (pielonefritis:
fiebre, dolor en fosa renal, puñopercusión positiva). Pueden ser esporádicas o recurrentes.

- ITU complicada: ITU en pacientes que presentan alguna de las condiciones que determinan mayor
riesgo de evolución desfavorable. Son las que ocurren en mujeres gestantes, hombres, obstrucción,
inmunosuprimidos, insuficiencia renal, trasplante renal, uropatía obstructiva de causa neurológica,
personas con factores de riesgo de ITU recurrente o persistente (litiasis, sondaje vesical, talla vesical,
nefrostomías u otros tipos de drenaje de la vía urinaria).

- ITU asociada a catéter: ITU en presencia de catéter urinario permanente, sin evidencia de otras fuentes
de infección. Se define por ≥ 103 UFC/mL en una muestra de orina de catéter, o en muestra de orina
obtenida 48h después de retirado el catéter.

- ITU recurrente: recurrencias de ITU (no complicada o complicada), con una frecuencia de = 3 ITUs/año
ó = 2 ITUs en los últimos 6m.

- Urosepsis: disfunción orgánica que causa riesgo vital debido a una ITU. Por su localización anatómica,
nos encontraremos con:

- ITU de vía urinaria baja: uretritis, cistitis, prostatitis.


- ITU de vía urinaria alta: pielonefritis, absceso intrarrenal, absceso perinéfrico.

Asintomáticas

BACTERIURIA ASINTOMÁTICA EN ADULTOS. Se define como la presencia en orina de una o más especies
de bacterias comensales, también llamadas bacterias urinarias residentes, que no ocasionan síntomas
(microbiota urinaria). Se trata de una colonización, no de una infección, por lo que no requiere
tratamiento antibiótico [8] [11] [12]. Cuantitativamente se puede considerar bacteriuria asintomática si
se aíslan en urocultivo: - ≥ 105 UFC/mL en 2 muestras de orina evacuada separadas por varios días en
mujeres, o en 1 muestra en hombres.

Es un hallazgo común en mujeres sanas (1-5% en mujeres jóvenes premenopaúsicas); así como en otros
grupos de pacientes: 4-19% en ancianos, 0.7-27% diabéticos, 2-10% en gestantes, hasta 50% en ancianos
institucionalizados y en pacientes con lesiones medulares, y en el 100% de pacientes con catéter crónico
en la vía urinaria.

DIAGNÓSTICO

UROCULTIVO

Se recomienda el cultivo en pacientes cuyas características y síntomas sugieren una


infección urinaria complicada o una indicación para el tratamiento de la bacteriuria. Los
ejemplos comunes incluyen:
 Mujeres embarazadas

 Mujeres posmenopáusicas

 Hombres

 Niños prepúberes

 Pacientes con anomalías del tracto urinario o instrumentación reciente

 Pacientes con inmunosupresión o comorbilidades importantes

 Pacientes cuyos síntomas sugieren pielonefritis o sepsis


 Pacientes con infecciones urinarias recurrentes (≥ 3 al año)

Tira reactiva : Una prueba de nitrito positiva en una muestra de orina reciente (la replicación
bacteriana en el recipiente resta confiabilidad a este resultado si la muestra no se analizó de
inmediato) es muy específica de una IU, pero no es una prueba muy sensible. 

Cistitis
En mujeres sanas, no gestantes, con un tracto genitourinario anatómica y funcionalmente normal. Los
síntomas que la caracterizan son disuria, polaquiuria y urgencia miccional, con poca afectación del
estado general y sin fiebre.

No se precisa urocultivo, salvo en los casos dudosos, con síntomas atípicos, si se sospecha pielonefritis, o
en aquellos que presenten mala respuesta al tratamiento (no se resuelven o recurren dentro de las 4
semanas de finalizado el tratamiento).

Pielonefritis

La pielonefritis aguda no complicada (PNA) es la ITU de vía urinaria alta (pelvis y parénquima renal) que
ocurre de forma aguda en mujeres sanas, no gestantes, con un tracto genitourinario anatómica y

En presencia de síntomas, el urocultivo es diagnóstico si se aíslan ≥102 UFC/mL en mujeres, o ≥103

UFC/mL en hombres. En presencia de síntomas, el urocultivo es diagnóstico si se aíslan ≥102 UFC/mL en


mujeres, o ≥103 UFC/mL en hombres.

En mujeres adultas con infección urinaria no complicadas y síntomas típicos, la mayoría de


los médicos consideran suficiente para el diagnóstico el resultado positivo de la observación
microscópica y de la tira reactiva

Para los pacientes sintomáticos, los criterios del cultivo son


 Cistitis no complicada en mujeres: > 10 3/mL
 Cistitis no complicada en mujeres: > 10 2/mL  (This quantification may be
considered to improve sensitivity to E. coli.)
 Pielonefritis aguda no complicada en mujeres: > 10 4/mL
 Infección urinaria complicada: > 10 5/mL en las mujeres; o > 10 4/mL en los
hombres o en una muestra obtenida por sonda en mujeres
 Síndrome uretral agudo: > 10 2/mL de una especie bacteriana sola
Litiasis

Cuando aparecen síntomas, pueden no correlacionarse con la ubicación de la infección


dentro del tracto urinario debido a que hay una considerable superposición; sin embargo,
son útiles algunas generalizaciones.

En la uretritis, los síntomas principales son la disuria y, especialmente en los hombres, la


secreción uretral. Las secreciones pueden ser purulentas, de color blanquecino o mucoides.
Las características de la secreción, como la cantidad de pus, no diferencian de manera
confiable la uretritis gonocócica de la no gonocócica.
La aparición de la cistitis suele ser abrupta, típicamente con polaquiuria, tenesmo vesical y
ardor o dolor en la micción, que en general es de volúmenes pequeños de orina. Es común la
nocturia, con dolor suprapúbico y a veces lumbar. La orina a menudo es turbia, y puede
aparecer hematuria microscópica (o rara vez macroscópica). Puede aparecer febrícula. Se
observa neumaturia (salida de aire con la orina) cuando la infección está producida por una
fístula vesicoentérica o vesicovaginal, o por una cistitis enfisematosa.
En la pielonefritis aguda, los síntomas pueden ser los mismos que los de la cistitis. Un tercio
de los pacientes presenta polaquiuria y disuria. Sin embargo, en la pielonefritis en general se
incluyen escalofríos, fiebre, dolor lumbar, dolor abdominal en cólicos, náuseas y vómitos. Si
no hay defensa abdominal o ésta es leve, a veces es posible palpar un riñón sensible y de
tamaño aumentado. En el lado afectado, suele presentarse sensibilidad a la percusión en el
ángulo costovertebral. En la infección urinaria en los niños , los síntomas en general son
escasos y menos característicos.

También podría gustarte