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EL RIVIEL

Se trata de un "endriago" que se deleita causando espanto a los pescadores


nocturnos. Cuentan que el riviel se aparece en un potrillo (canoa) mocho, es decir,
que no tiene proa y en su lugar esta protegido por una tabla que impide la
penetracion del agua. Este espanto se les presenta a los pescadores nocturnos, a
quienes pre¬gunta en forma sencilla "amigo, ¿como esta la pesca?" y cuando el
pescador le responde, siente que el potro empieza a ponerse pesado hasta el
punto de no poder moverlo. Si el pescador no acepta el dialogo propuesto por el
riviel, este se conforma con confundirlo de tal manera que no consigue enrumbar
su embarcacion y solo puede hacerlo al amanecer, cuan¬do ya no recuerda nada
de lo sucedido. Hay quienes afirman que el riviel acostumbra chuparle el cerebro a
algunas de sus victimas, quienes son encontradas con el craneo totalmente vacio.

Cuenta la tradición del Litoral pacífico que en los primeros años del siglo XVII se
presentó una batalla de piratería entre un velero español que llevaba mucho oro y unos
bucaneros que buscaban afanosamente su robo y exterminio. En este enfrentamiento
murió un pirata moro, maldiciendo al Dios de los cristianos. Su alma quedó errando por
los esteros y manglares de la bahía de Buenaventura, por la isla de Gorgona y demás
islas del Pacífico. Algunos han visto al "Riviel" como si fuera un enano de color negro y
de olor nauseabundo, camina con mucha rapidez y se esconde en los manglares, usa un
taparrabo de cuero de caimán, una franela sucia y rasgada; y un sombrero de caña,
perforado, por donde salen sus pelos hirsutos y puntiagudos, tiene ojos de gato,
fosforescente. Al Riviel le gusta surcar el mar en una piragua pequeña. que parece la
concha de una gran tortuga; navega en noches oscuras, cuando no hay estrellas en el
firmamento. le gusta asustar a los contrabandistas y personas extraviadas en el mar o en
el Litoral Pacífico. Hace levantar las olas hasta altura muy elevadas. le complace chupar
los sesos de las personas que mueren debido al terror que causa su espanto. En
Juanchaco y en las cercanías de Buenaventura pesca cangrejos y almejas. Es el terror de
los navegantes en noches de tempestad. Sin embargo el Riviel es enemigo de la luz; por
ello, para que no llegue al lugar de los asentamientos humanos, las gentes acostumbran
a encender fogatas y rociar agua bendita. Algunas gentes del Litoral pacífico dicen que
las piernas del Riviel alumbran como una llamarada azul , la cual ven los pescadores en
el mar y en los rios. Fuente: LEYENDAS POPULARES COLOMBIANAS (Javier Ocampo
López .)

L a canoa del pescador se movía al vaivén musical de las olas. 


Se encontraba cerca de la bocana del río Tapaje, en el litoral nariñense. 
Era una noche fría con fuertes brisas.  El veterano “lobo de mar”, de
nombre Juan, tenía la costumbre de salir, al caer la tarde, en busca del
cotidiano pan para sostener a su mujer y a sus dos pequeños hijos, con
quienes vivía en medio del manglar, donde había levantado
una ramada como casa y en ella protegía su hogar.

Vestido con pantalón y camisa raído, sostenía en sus manos, marchitadas


por el tiempo, los anzuelos en los que tenía puestas todas sus
esperanzas. “Mira hombe, pesca de día y no de noche, ponete serio”, le
decía a menudo su esposa, quien se quedaba calentando agua en una
vieja olla, acompañada de los rostros tristes y taciturnos de sus vástagos.

El nunca hacía caso, siempre escogía la noche para pescar y fueron


muchas veces que regresó con el potrillo vacío.  Pobremente vivía y sus
hijos apenas tenían algo  con que cubrir sus frágiles cuerpecitos.

Solitario, sentado en su embarcación, movida por una pequeña y


remendada vela blanca, fumaba una “cachimba”, cantaba a las estrellas
viejas canciones de sus ancestros africanos; eran tanto los años que
había pasado encima del mar, que ya hasta se sabía de memoria las
figuras geométricas que se formaban en las noches estrelladas del
inmenso cielo. Sabía tantas leyendas de marinos y fantasmas, que era el
único entretenimiento que llevaba a sus hijos cuando llegaba sin una
“peje”, como le llaman al pescado los campesinos del litoral.

Los años cada vez lo traicionaba.  Estaba cabeceando por el sueño,


cuando alzó el rostro y observó una intensa luz que navegaba hacía él. 
“Ve que raro”, murmuró, pues tantos años de pescador nunca había visto
cosa semejante.
Era diferente a las luces de cualquier otro pescador que suelen llevar
consigo sus lámparas de  querosén para alumbrarse y por lo general son
permanentemente sus llamas zarandeadas por el viento, que amenaza
con apagarlas; pero ésta permanecía incólume.  La suya, por ejemplo,
estaba que se apagaba, y “cómo”, pensó, “ que ésta mantenga firme sus
llamas” como si estuviesen cubiertas por algún cristal.  Eso está muy
raro, se insistía para sí, con ojos bien abiertos.

Pero lo más sorprendente es que no se observaba ningún potrillo o


canoa, ni l figura de algún pescador; solo la mecha llameante de una
lámpara “caminando” sobre las olas, empujada por una fuerza invisible.

Se irguió sobre sus flacas piernas, parándose en la embarcación y cogió


la atarraya.  “Sea lo que sea, lo voy a atarrayar, ningún diablo guevón me
va a asustar”, se dijo, al tiempo que recordó la vieja leyenda del Riviel,
aquel personaje mítico-religioso que “ronda” por las costas molestando a
los navegantes, dejando ver la luz de sus piernas, pero que nunca nadie
ha visto en persona.  También se decía que el que lograba “ pescarlo” se
convertía en una hombre rico, pues la pequeña embarcación del Riviel
era de oro.

La luz se acercaba rápido, directo hacia él y cuando menos pensó la tuvo


tan cerca que lo encegueció, pero sin pensarlo siquiera y más por instinto
arrojó con fuerza su atarraya.  Su instrumento de pesca se fue al fondo
con su carnada, la sintió pesada y poco a poco la fue alzando del fondo,
hasta que en medio de las piolas del red vio algo que lo dejó mudo:  Un
hueso fémur estaba dentro.  “Cristo, éste es el Riviel?, se preguntó
aterrado.

Regresó a casa tan aprisa como pudo, con su presa a bordo, seguro de
haber pescado una leyenda.  El hueso, seguramente, pensó es parte del
esqueleto de la esotérica visión.  Lo enterró con todas las ceremonias
religiosas de que tenía conocimiento, al frente de su casa y sobre la
tumba colocó una cruz con la leyenda “aquí yace el Riviel”.

Desde entonces, el hombre se convirtió en el mayor y más rico pescador


de los contornos pero no volvió a hacerlo de noche. 
Este es otro de los personajes siempre presentes en la mitología del pueblo del
pacifico. Al igual que el caso de la Tunda, en relación con el Riviel también existe
una serie de versiones en las cuales se presentan algunas variaciones. Sin
embargo todas ellas coinciden en señalar al Riviel como un personaje de los ríos
que se presenta en forma de una pequeña luz de color azul la cual esta situada
en una canoa pequeña 'mochita'. Este personaje tiende a guiar a los navegantes
a remolinos o correntadas en donde con seguridad perderán la vida.  

Hay quienes afirman que el Riviel se asusta con la atarraya. En una versión muy
más contemporánea y bastante elaborada, se afirma que este personaje es el
alma de un viajero francés llegado a Colombia, de nombre Reiviege, quien al
conocer que su esposa se fugaba con su amante salió en su persecución,
colocando para alumbrarse estopa de coco prendida en la punta de la canoa.
Mientras estaba en ese intento, Reiviege fue apuñalado por la espalda siendo su
alma en pena la que se presenta como el Riviel.

Memoria cultural del Pacífico

En la costa de Curay, llegando a Soledad, se consiguen unas pailas grandísimas y hay unos tres
perros negros cuidando esas pailas. En la Chorrera había otro interés, pero lo sacaron con una
draga.

Informante: Samuel Landázury, pescador, Curay, Tumaco


Compilador Jaime Ariza Tello. Cali, 1972

Mitos y fantasmagorías

Álvaro Pedrosa y Alfredo Landazury


La vertiente Afropacífica de la tradición oral
Editorial Facultad de Humanidades
Universidad del Valle, 1994
El Mito narra los orígenes de las cosas, del mundo, de los animales, del hombre, de las virtudes y
defectos, de las riquezas, de los seres espirituales y fenómenos naturales.

Las fantasmagorías narran sucesos o situaciones en los que aparecen los espantos y visiones
como el Riviel, la Tunda, el Duende, la Madrediagua, etc. cumplen una importante función de
control biológico y social, advirtiéndoles de los peligros de la selva, el agua, la oscuridad, de la
edad misma (sobre todo en el caso de las adolescentes).

El Mito de la Tunda

Advierte a los niños sobre el riesgo de adentrarse solos en la selva y a las madres el riesgo de
dejarlos solos en la casa, porque este personaje los rapta adoptando la forma de una mujer de la
familia (madre, hermana, tía, etc). A los hombres adultos se les presenta igual, pero las
consecuencias son diferentes, aunque igualmente trágicas. Si no se rescatan a tiempo. La victima
no muere, pero puede quedar trastornada de los sentidos para siempre. La Tunda es un espíritu
que se disfraza de mujer conocida y de poder de seducción.

El Riviel

Representa un control ecológico. Los pescadores deben pescar lo necesario, devolverse a sus
casas y no quedarse solos en el mar. Los viajeros deben ser prudentes. En este sentido tiene
similitudes con la Madremonte andina, que asusta a los colonizadores y devastadores de selvas. El
Riviel es una luz que se acerca por el mar al pescador solitario y hunde su barca.

El Duende

Gran señor de la lucha, la guitarra y el enamoramiento, persigue a las preadolescentes para


acariciarlas, sobre todo en los senos. Claramente se está indicando el peligro que representa para
ellas la presencia de desconocidos o de hombres con malas intenciones. Es un ser masculino, casi
enano pero fornido y con tina cabeza grande que cubre con un gran sombrero.

Los Encantos

Son algunos sitios, generalmente acantilados, donde se oyen por las noches, en determinadas
épocas del año, músicas submarinas. Bogas y pescadores se alejan atemorizados de esas zonas y
atribuyen los sonidos a sirenas encantadoras.

Probablemente estos sean efectos del viento y del agua en las grietas y hendiduras, o también en
las raíces de los mangles.

El Mararedí o buque

Cargado de espíritus y de esqueletos endemoniados, de seres que en vida hicieron pacto con el
Diablo para obtener riqueza y poder. Es un buque inmenso negro y silencioso, que desaparece
cuando se lo ilumina y que deja brotar fuertes voces cuando alguien de cerca pronuncia palabras
sagradas. Es la representación de los afanes de riqueza que culminan en las miserias del infierno.

El Hojarasquín del Monte

Es un ser que se identifica con el bosque que está poblado de espíritu y que llena la imaginación
de los narradores.

La Madre de Agua
Es un espíritu que según la tradición, fue creado por los hechiceros, para acechar desde el fondo
del río entre palizadas y remolinos y proteger a la naturaleza de los excesos de los hombres.

La Domitila

Es una mujer negra alta y voluminosa, llena de energía y ritmo, que representa la población negra
de la Costa y que se muestra en los desfiles y festivales folklóricos dirigiendo e invitando al jolgorio.

El tente en el Aire

Es un espíritu que flota en el Aire, que siempre anda errante y se presenta a cualquier hora e
inesperadamente. En el Chocó y por tradición africana, es la creencia del bajeo y que lleva el
nombre de Astarón, cuyo vaho materializado en huellas encontradas en el monte por el nativo,
adquiere en todo el cuerpo una fuerza magnética que puede conducir a la muerte.

Compilador Alfredo Vanín, 1986

Narraciones históricas

De mayor sujeción al hecho histórico,, aunque transmitidas también de boca en boca. Una de las
características que presenta este género para el investigador es el hecho de que casi todos los
relatos son parciales, surgen de la memoria de cada uno de los informantes, con referencia a sus
experiencias particulares. El compilador podrá armar los retazos y realizar inducciones que le
permitan comprender el todo, armando el rompecabezas, sin desechar la riqueza simbólica que
guardan las relaciones populares.

Ejemplo:

HISTORIA DE MOSQUERA

Anteriormente Mosquera se llamaba Tierra Firme, la cual pertenecía a doña Mariquita, que en
aquella época se encontraban los conquistadores y dio la casualidad de pasar don Tomás Cipriano
de Mosquera, quien le compró a dicha señora este terreno.

Por lo tanto, con su nombre, dio nombre a Mosquera. En 1874 se creó Municipio, perteneciendo al
Departamento del Cauca. Dos años después perteneció al Departamento de Nariño. El 12 de
diciembre de 1979, ocurrió un terremoto el cual destruyó parte de la Costa Pacífica, donde hubo
miles de muertos. No andaba, pero andando iba.

Informante: Comunidad de Mosquera Compilador: Alfredo Vanín Romero, 1993

Narraciones didácticas

Es un relato que contiene enseñanzas directas para las nuevas generaciones.

Ejemplo: El pescado que el pescador no quiere. El tamborero tiene su oficio en el agua, vive
encima del agua y por eso es el primero que ve el anzuelo. Como no se come, muchos pescadores
le tienen rabia, pero no saben que sin el tamborero los pescados ya se habían acabado, como él
es tan dientudo, puede cortar un cabo o un volantín, pero también se come la carnada si no queda
enganchado. Un anzuelo sin carnada no coge pescado, Es por eso que el tamborero ampara a los
otros pescados.

Informante: Venildo Ríascos, pescador Compilador: Alfredo Vanín, 1980


Adivinanzas y desates

Plantean un enigma, casi siempre en forma versificada. Sirve para integrar conocimientos entre la
comunidad. El desate es una variante más complicada de la adivinanza.

Muchas de las formas de este género de la tradición oral poseen un gran sentido del juego verbal,
de la abstracción intelectual, a veces rayana en el surrealismo.

Ejemplo:

De mar ajuera vengo

De mar ajuera vengo


de ver al padre Murillo
traigo el hábito negro
y el corazón amarillo.
(la Paila).

Informante: Comunidad de Iscuandé Compilador: Germán de Granda, 1976

Proverbio o refrán, o dicho

Contiene elementos normativos, de conducta y de sabiduría popular. Normalmente se construye en


forma de prosa rítmica o verso pareado.

Ejemplo:

Si
| por mise hizo el verano
Si por mise hizo el verano
Vuelva el invierno a llover.

Informante: Margarita Hurtado

EL RIVIEL

Se trata de un "endriago" que se deleita causando espanto a los pescadores


nocturnos. Cuentan que el riviel se aparece en un potrillo (canoa) mocho, es
decir, que no tiene proa y en su lugar está protegido por una tabla que impide la
penetración del agua.
También se presenta como visión que va caminando y va dejando en su paso
candela. Se forma de los huesos de las personas que se ahogan, asustan a los
navegantes y a los pescadores.

Los pescadores ven dos luces, una verdadera y la otra falsa, hacen confundir al
pescador embrujándolo y les pregunta en forma sencilla "amigo, ¿cómo está la
pesca?" y cuando el pescador le responde, siente que el potro empieza a
ponerse pesado hasta el punto de no poder moverlo; si el pescador no acepta
el diálogo propuesto por el riviel, éste se conforma con confundirlo de tal
manera que no consigue enrumbar su embarcación y sólo puede hacerlo al
amanecer, cuando ya no recuerda nada de lo sucedido. Cuando se dan cuenta
que han sido engañados están mar afuera y comienzan a rezar, ahí es cuando
desaparece la luz y pueden enrutar nuevamente sus embarcaciones. El riviel
emite un grito así: ¡uh ah!.

Hay quienes afirman que el riviel acostumbra chuparle el cerebro a algunas de


sus víctimas, quienes son encontradas con el cráneo totalmente vacío.
Personaje Central: Huesos humanos, el Riviel formado de los huesos de las
personas que se han ahogado y no han sido rescatadas, por el nombre se le
dan las caracteristicas de hombre.

Elementos Culturales: Aquella persona que al morir no recibe sagrada


sepultura, está expuesta a que su espíritu o alma queda penando, llegando a
convertirse en el Riviel. Todo ser humano que fallezca debe ser sepultado en
tierra santa. Así como la maldad está contemplada en todos los actos de vida
como contrariedad a la bondad, aparece el riviel que se le presenta a cualquier
navegante o pescador en forma juguetona pero logrando asustarlos después de
una dura jornada de trabajo en el mar.

En el campo religioso el mar también cumple una misión sagrada, ejemplo: En


ese pasaje del mar rojo cuando Dios separó las aguas para que pasaran los
israelitas a la tierra prometida.
El mar también como símbolo de frescura, temor, desconocido y embrujador,
de espacio amplísimo donde sólo puede aparecer el riviel. Pesca como
Referente Económico: En esta leyenda apreciamos uno de los medios de
subsistencia de la Costa Pacífica como es la pesca, la que se realiza de
manera artesanal, ya que carecen de recursos para adquirir instrumentos más
costosos y buques pesqueros apropiados para la explotación.

El demonio como referente cultural: El diablo se nos muestra a través de la


religión cristiana alrededor de pailas llenas de candela en donde caen las almas
castigadas que han vendido su alma al diablo. El riviel a su paso va dejando
candela, emite una luz y aparece en noches oscuras. Esto demuestra como la
llama ha sido utilizada por el demonio para confundir a los hombres ya que en
este caso los pescadores siguen la luz como signo de orientación, pero la
astucia del riviel los engaña. Aquí la luz y la candela son signo de maldad.
Resaltamos que la iglesia cristiana toma la luz como símbolo del espíritu santo
y propagación de la fe. Ejemplo: La venida de Pentecostés en forma de lenguas
de fuego, el niño cuando se bautiza o hace la primera comunión debe tener un
cirio en la mano como símbolo de su fé. La candela fue utilizada por la santa
inquisición para castigar a las personas que según ellos practicaban la magia o
brujería. Candela – diablo.
Globo (historieta)

Caricatura que en el cómic de George Cruikshank de 1813, integra los diálogos en globos.

El globo o bocadillo ("balloon" en inglés) es una convención específica de historietas y caricaturas,


destinada a integrar gráficamente el texto de los diálogos o el pensamiento de los personajes en la
estructura icónica de laviñeta. Se trata de un indicador fonético con múltiples formas posibles, aunque
predomina la de óvalo, y que apunta a un personaje determinado, al cual se atribuye su contenido
sonoro.

En Italia la historieta se denomina fumetto, precisamente en referencia al nombre del globo en italiano.


Índice

  [ocultar] 

1 Historia

2 Elementos del

globo

o 2.1 Cont

enido

o 2.2 Con

tinente

3 Orden de

lectura

4 Referencias

5 Véase también

[editar]Historia

Ejemplo de utilización de filacterios en un grabado satírico de James Gillray, 1791.


Desde el siglo XVIII, la palabra fue ilustrada en cintas, en banderillas, en rodillos, o en hojas de papel.

El bocadillo tiene a la filacteria como antecedente ilustre. El término proviene del griego "pihlakterion" y
significa "amuleto", siendo aplicado en origen a unas cintas que utilizaban los hebreos y que contenían
textos de las Sagradas Escrituras. Posteriormente, la filacteria pasó a denominar a las bandas incluidas
en la pintura cristiana occidental que contenían textos.

Fueron los ilustradores y caricaturistas ingleses del XVII, los que desarrollaron el uso del globo, pero la
primera serie de historietas que lo aplicó consistentemente fue Hogan's Alley (1895), protagonizada
por The Yellow Kid, de Outcault, de tal forma que hay teóricos, como los reunidos para la ocasión
en Salón de Lucca (Italia), que sostienen que el día 16 de febrero de 1896 fue la fecha del nacimiento
del medio, porque la viñeta de ese día muestra un globo de diálogo mediante el cual un loro exclama:
"Sic em towser!", aunque en la serie nunca dejara de coexistir este recurso con otras formas de
representar los diálogos, como las inscripciones en el camisón de su protagonista. 1 Con todo, lo
adoptado en esa reunión de teóricos está más que superado y discutido, y sostener que el medio nació
con Outcault es un gran error (incluso Topffer llegó a usar estructuras similares a los globos de texto).

En Europa, el uso de globos no se generalizaría hasta la belga Zig et Puce (1925) de Alain Saint-Ogan,


mientras que en Japón habría que esperar hasta los años 30 con series como Speed Taro de Sako
Shishido y Ogon Bat de Ichiro Suzaki/Takeo Nagamatsu.

[editar]Elementos del globo

En un globo, hay que distinguir entre contenido (mensaje que alberga, básicamente textual ya sea
lingüístico o paralingüístico, como sería una onomatopeya) y continente (la forma exterior o silueta que
presenta el bocadillo).
[editar]Contenido

 La rotulación. Es el tipo o fuente de letra empleada en el texto de un bocadillo. En principio, el


rotulado del texto ("lettering" en inglés) no es un simple ornamento, sino que posee también un
carácter expresivo: dependiendo de la fuente, se transmiten sensaciones como miedo, tristeza,
lloriqueo... El rotulado, por regla general, siempre ha sido un sistema artesanal realizado a mano, y
sólo en ocasiones especiales se utilizaba un rotulado de imprenta. Sin embargo, los avances
tecnológicos y la inclusión de ordenadores y programas de edición de imagen en el proceso de
producción de un cómic hacen que hoy en día casi todos los procesos de rotulación se hagan por
ordenador.

Las notas musicales representan una canción.

 La onomatopeya.

 Metáforas visuales. Convención gráfica específica de los cómics, sobre todo de


los humorísticos. Consiste en la representación de un sentimiento, emoción o sonido de forma
icónica, mediante un dibujo que nos remita a ese elemento. Las más conocidas son:

 Bombilla encendida - idea genial.

 Botella de veneno, cabeza de personaje con cuerpo de animal, calavera, culebra, -


insultos, improperios.

 Corazón - amor, enamoramiento instantáneo.

 Símbolo de  dólar  americano - dinero.

 Estrellas, pájaritos,  planeta Saturno - golpe fuerte, conmoción.

 Notas musicales - canción, música.

 Serrucho cortando un leño de madera - sueño profundo.


[editar]Continente
Los tres tipos de bocadillos más comunes, que respectivamente representan la palabra, el pensamiento, y el grito.

 Contorno. La forma exterior del bocadillo puede ser muy variada. Predominan los formatos
raros

, pero también los hay cuadrados, rectangulares, dentados... La elección de estas formas no es
arbitraria, sino que obedece a la intencionalidad del autor: la forma contribuye a adjetivar de una manera
u otra el contenido del bocadillo. Algunos ejemplos son:


 Globo de dientes de sierra, o eléctrico - Indica "enfado", "exclamación" o que la voz
procede de un aparato mecánico, ya sea un micrófono o un robot.

 Globo que chorrea - Indica "frío" o "miedo", "terror".

 Globo con línea temblorosa - Indica "pánico".

 Globo que imita una nube - Indica "ensoñación", "sueño", "pensamiento".

 Globo punteado o de línea discontinua - Indica "susurro", "voz baja".

 Y muchos más...

 La cola o rabo. Dibujo de terminación del globo, que indica de quien procede. Como
indica Oscar Masotta, éste "varía si se trata de una reflexión del personaje, un pensamiento secreto
(lenguaje interior), o si se trata de palabras dichas".2 Si, por ejemplo, corresponde a un personaje
que piensa algo sin llegar a decirlo, "el rabo indicador del bocadillo es sustituido por pequeños
círculos en forma de burbujas".3Finalmente, el rabo puede no apuntar a un personaje, sino a un
espacio fuera de la viñeta, con lo que equivaldría a la voz en off, acercándose a lacartela.
[editar]Orden de lectura

Cuando en una misma viñeta aparecen dos o más globos, su orden de lectura es el mismo que el de las
viñetas y por lo tanto está vinculado con el sistema de escritura, de tal manera que en Occidente se
leerían normalmente de izquierda a derecha y de arriba abajo, mientras que en países con la escritura
de derecha a izquierda (por ejemplo Japón) los globos se leen de derecha a izquierda y de arriba abajo.
Como indica José María Parramón:

"Este orden de prelación obliga normalmente a dibujar en el lado izquierdo al personaje que inicia el diálogo.

En algunos casos, sin embargo, por exigencias de la viñeta, se altera el orden mencionado, recurriendo

entonces a cruzar los rabos indicadores".3

[editar]Referencias

1. ↑ Gubern, Roman en El lenguaje de los comics, Barcelona, Ediciones Península, 1972, p.22.

2. ↑ Masotta, Oscar en Técnica de la historieta, Escuela Panamericana de Arte, Buenos Aires,

Argentina, 1967, p. 8

3. ↑ a b Blasco, Jesús y Parramón, José Mª. en Cómo dibujar historietas, Parramón Ediciones,

S. A., 1966, p. 54.

[editar]Véase también
SUPERIOR

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