Está en la página 1de 3

¿ASÍ QUE QUIERES SER ESCRITOR?

Charles Bukowski

Si no te sale ardiendo de dentro,


a pesar de todo,
no lo hagas.
A no ser que salga espontáneamente de tu corazón
y de tu mente y de tu boca
y de tus tripas,
no lo hagas.
Si tienes que sentarte durante horas
con la mirada fija en la pantalla del ordenador
o clavado en tu máquina de escribir
buscando las palabras,
no lo hagas.
Si lo haces por dinero o fama,
no lo hagas.
Si lo haces porque quieres mujeres en tu cama,
no lo hagas.
Si tienes que sentarte
y reescribirlo una y otra vez,
no lo hagas.
Si te cansa sólo pensar en hacerlo,
no lo hagas.
Si estás intentando escribir
como cualquier otro, olvídalo.

Si tienes que esperar a que salga rugiendo de ti,


espera pacientemente.
Si nunca sale rugiendo de ti, haz otra cosa.

Si primero tienes que leérselo a tu esposa


o a tu novia o a tu novio
o a tus padres o a cualquiera,
no estás preparado.

No seas como tantos escritores,


no seas como tantos miles de
personas que se llaman a sí mismos escritores,
no seas soso y aburrido y pretencioso,
no te consumas en tu amor propio.
Las bibliotecas del mundo
bostezan hasta dormirse
con esa gente.
No seas uno de ellos.
No lo hagas.
A no ser que salga de tu alma
como un cohete,
a no ser que quedarte quieto
pudiera llevarte a la locura,
al suicidio o al asesinato,
no lo hagas.
A no ser que el sol dentro de ti
esté quemando tus tripas, no lo hagas.
Cuando sea verdaderamente el momento,
y si has sido elegido,
sucederá por sí solo y
seguirá sucediendo hasta que mueras
o hasta que muera en ti.
No hay otro camino.
Y nunca lo hubo.

Nacido en 1920, Bukowski no se parece a ningún otro autor de su generación.


Ni siquiera del siglo. Autobiográfico, transgresor, directo y confesional, fue un
poeta y cronista del submundo alcohólico de Los Ángeles. Sus más de mil
poemas están escritos con líneas sólidas, imágenes claras y una voz íntima y
descabellada. (coloco ésta información como para tener la base de sus ideas)
Justificación
Primero que nada quiero aclarar que me siento un poco identificado con este
poema, me gusta la idea que transmite, me gustan las expresiones que el autor
utilizo, y en parte porque me parece algo bastante largo pero que es simple a la
vez.

Simple. Debido a que tal y como expresa el poema, no tenemos que hacer algo
si no nos nace de nuestro interior, si no lo sentimos verdadero; y no solo esta
idea se puede aplicar en la escritura, también en cualquier tipo de acción o
decisión que nosotros tomamos.

No tenemos que hacer un dibujo si no nos nace del corazón, ni decir palabras
que no sentimos, ya que a la larga esas cosas que nosotros hacemos puede
que nos desilusionen. Tal vez el poema no lo diga de forma explícita, pero a mí
me hace sentir que el mensaje “oculto” por así decirlo, seria no hacer las cosas
obligados, de cierto modo. Muchas veces nos podemos sentir mal porque
hacemos cosas que no nos gustan o que no nos nacen; por ejemplo,
ayudamos a una x persona porque frente a la sociedad eso es lo correcto, pero
si tomamos las palabras del poema de una forma general, no tendríamos por
qué hacerlo, ya que no nos nace.

Yo admito que he sido culpable muchas veces de hacer cosas que a mí no me


nacen del interior, sino que las hago por el simple hecho de que eso está bien
moralmente, porque así reflejo los “valores” que me fueron enseñados en mi
hogar; cantidad de veces no he tenido ganas de estudiar, leer, salir, decir
buenos días e infinidad de cosas, que sin embargo a lo largo del año las hago
porque debo hacerlo, y no porque lo siento.

A veces es mejor no hacer nada que no nos identifique, pero son necesarios
hacerlas para cumplir un objetivo; en mi caso, no me gustan mucho algunas
materias, sin embargo las he tenido que cumplir para poder llegar a
“acercarme” un paso más a la visión que tengo de mi futuro.

Capaz es mucho enredo, o no llego a explicar lo que pide la consigna, pero a


este texto lo escribo no obligado, sino porque me nace de la nada hacerlo,
porque no necesite pensar mucho lo que estoy escribiendo; porque sale de
forma espontánea, y yo considero, que ahí es donde cambian las cosas, entre
hacer porque de verdad queremos hacerlo y, hacer por el simple mente hecho
de cumplir.

También podría gustarte