HACIA UNA DEONTOLOGÍA DE LAS PROFESIONES PEDAGÓGICAS.

1. Una deontología de las profesiones pedagógicas.

Se comprende como deontología a la ciencia que trata de establecer limitaciones, mandatos o

reglas mínimas comúnmente aceptadas para el ejercicio de una profesión. Su importancia crece
cuando la profesión es susceptible de una gran repercusión social, por ejemplo en campos de la
salud y educación, por otra parte carece de presencia en los campos como la política y economía.

La deontología está orientada a resolver y ayudar en los problemas profesionales que se pueden
presentar en la práctica pedagógica, también contribuye de manera decisiva en tener equilibrio en
los derechos individuales así como los colectivos, ya que hoy en día no debe de tomarse como un
simple conjunto de reglas y deberes común.

Un código deontológico deberá de contener un conjunto de reglas y normas más o menos

detalladas, basadas en códigos éticos y morales, reconocidos por todos. Teniendo en cuenta
diversos factores como la edad, el periodo de formación así como la maduración progresiva del
individuo.

2. Algunos antecedentes, estado de la cuestión.

Muchos han sido los autores que han tocado un tema tan importante como lo es la deontología,
esto demuestra a su vez la gran importancia que tiene en el campo de la pedagogía, ya que esto ha
originado grandes movimientos de renovación pedagógica tal es el caso de Cataluña que ah
presentado interesantes debates sobre la responsabilidad profesional.

Las profesiones pedagógicas tanto de orientación como educación en sus diversos ámbitos han
presentado unas grandes exigencias deontológicas, que no siempre encuentran tratamientos y
respuestas detalladas según sea el caso o la necesidad, específicamente en los planes de estudio
propios de su formación inicial, ya que hay gran cantidad de situaciones que pueden presentar
respuestas muy ambiguas o dispares.

Tal es así el caso que diversas instituciones escolares han presentado diversos documentos en los
cuales se han tomado criterios que se creen correctos y positivos ejemplo de ellos es el trato
entre docentes y alumnos la participación de los padres y la institución así como la sociedad para
la actuación pedagógica.

3. Finalidades de un código deontológico.

Las finalidades de un código deontológico son ofrecer una imagen social de las profesiones
relacionadas con el mundo de la educación presentando el valor que tienen y la estima social que
merecen siendo de utilidad en la formación inicial y en los primeros momentos de acceso a la
profesión ya que servirán de guía para crear una conciencia propia de la responsabilidad social
como educador teniendo efecto sobre la minoría que no tiene sentido aun de la responsabilidad.
 4. Funciones de un código deontológico en educación.

Desde un punto de vista en función se desea definir los principales fines de la profesión y ofrecer
un sentido lo más unitario posible de la misma, dentro de la variedad de profesiones pedagógicas
así como describir las normas y reglas para servir como guía de buenas prácticas, a su vez aclarar
las líneas de acción en los dilemas éticos y morales de la profesión.

5. Principios deontológicos en las profesiones pedagógicas.

Los principios deontológicos no solo deben de ser solo éticos, si no también demostrar la pasión
por la docencia ya que sin estar serian reglas vacías o carentes de sentido alguno, pero sin olvidar
que deben de contener Profesionalidad, preocupación por la formación permanente, ofrecer las
mejores prácticas actitud de servicio, equidad y justicia social, entre otros valores primordiales
como respeto confidencialidad coherencia, democracia y trabajo en equipo.

6. Condiciones. Lo que debe ser y lo que no debe ser un código deontológico.

Lo primordial a resaltar en este tipo de códigos es la ética y la moral, respetuoso extremadamente

con los alumnos, legal y de conocimiento público para los interesados. Teniendo en cuenta que
debe de ser realista, ya que no debe de tener normas o conductas difíciles de cumplir, por ultimo
dotado de gran valides oficial.

Por otra parte lo que no debe de ser un código deontológico es ser tomado como un código civil, y
mucho menos limitar o encerrar la libertad de conciencia en ciertos casos, también no deberá de
limitar las reflexiones particulares de cada profesional y no caer en la infinitas reglas de actuación,
ya que podría convertirse en un papel más sin importancia.

7. Proceso de elaboración de nuestra propuesta de compromiso pedagógico.

El texto utilizado en la mayoría de los códigos se basa en una versión moderna del código
hipocrático, cambiando algunas palabras como salud y bienestar por educación, siendo a su vez un
texto con profundidad si caer en una copia solamente.