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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN

MARCOS
Universidad del Perú, Decana de América
Fundada en 1551

FACULTAD DE ODONTOLOGÍA
Escuela Académico - Profesional de Odontología

“CAPACIDAD ANTIBACTERIANA DEL YODURO DE POTASIO YODADO


AL 2% COMO SOLUCION ANTISÉPTICA DEL CONDUCTO RADICULAR
EN PACIENTES CON PIEZAS NECRÓTICAS”

TESIS PARA OPTAR


EL TÍTULO DE CIRUJANO DENTISTA

Bachiller: Rosa Nadheza García Villegas

LIMA – PERÚ

1
2010
CAPACIDAD ANTIBACTERIANA DEL YODURO DE POTASIO

YODADO AL 2% COMO SOLUCION ANTISÉPTICA DEL CONDUCTO

RADICULAR EN PACIENTES CON PIEZAS NECRÓTICAS

I. INTRODUCCIÒN 1
II. MARCO TEÓRICO
2.1 Antecedentes 4
2.2 Bases teóricas 14
2.2.1 Enfermedad pulpar 14
2.2.1.1. Necrosis pulpar 16
2.2.1.2. Reacciones inflamatorias de la pulpa 17
• Mecanismo de la inflamación 17
• Microbiología endodóntica 20
2.2.1.3. Infecciones de la pulpa 28
2.2.1.4. Vías de acceso de las bacterias al tejido pulpar 29
• Caries dental 29
• Enfermedad periodontal 30
• Anacoresis 31
• Fractura o exposición mecánica 32
2.2.1.5. Infección bacteriana de la pulpa 33
• Toxinas y otros factores 34
2.2.2 Tratamiento de endodoncia 37
2.2.2.1. Preparación biomecánica 37
2.2.2.2. Irrigación 39
• Objetivos 42
• Beneficios 43
• Mecanismo de la irrigación 45
• Técnica de irrigación 46

2
• Soluciones irrigantes 48
o Clasificación 49
- Alcoholes 49
- Compuestos fenólicos
50
- Sales de metales pesados 50
- Detergentes catiónicos 51
- Peróxido de hidrógeno
51
- Gluconato de clorhexidina
52
- Halógenos 52
ƒ Hipoclorito de sodio 52
ƒ Yoduro de potasio yodado
55
2.2.3 Diagnóstico microbiológico de las infecciones pulpares
69
2.2.3.1. Indicaciones para la recogida de la muestra 71
2.2.3.2. Recogida de la muestra 71
2.2.3.3. Métodos para el control microbiológico de los
conductos radiculares 72
2.2.3.4. Técnica de cultivo e identificación 74
2.2.3.5. Medios de cultivo 77
2.2.3.6. Medios de transporte 79
2.2.3.7. Técnica para determinar el número y la viabilidad de las
células 79
2.3 Definición de términos básicos
82
2.4 Planteamiento del problema 83
2.4.1. Área problema 83
2.4.2. Delimitación del problema 87
2.4.3. Formulación del problema 89

3
2.5 Justificación 89
2.6 Objetivos 92
2.6.1 Objetivos general 92
2.6.2 Objetivos específicos 92
2.7. Hipótesis 93

III. MATERIALES Y MÉTODOS


94
3.1 Tipo de estudio 94
3.2 Universo 94
3.2.1. Población 94
3.2.2. Muestra 94
3.2.3. Distribución de la muestra 95
3.2.4. Tipo de muestreo 95
3.2.5. Unidad de muestreo 95
3.2.6. Unidad de análisis
95
3.2.7. Criterios de inclusión 96
3.2.8. Criterios de exclusión 96
3.3 Operacionalización de variables 97
3.4 Método, técnica e instrumento de recolección de datos
98
3.4.1 Recursos 98
3.4.2 Procedimiento para la recolección de muestra 101
3.4.3 Métodos e instrumento para la recolección de datos
101
3.4.4 Registro de datos 108
3.4.5. Procesamiento para la recolección de datos 108

IV. RESULTADOS 109

V. DISCUSIÓN 128

4
VI. CONCLUSIONES 132

VII. RECOMENDACIONES 134

RESUMEN/ABSTRACT 135

REFERENCIAS BIBLIOGRAFÍAS 137

ANEXOS 144

5
JURADO DE SUSTENTACIÓN

PRESIDENTE : Mg. Blga. Hilda Moromi Nakata

MIEMBRO : C.D. Tulio Abuhadba Hoyos

MIEMBRO ASESOR : C.D. María S. Ventocilla Huasupoma

6
DEDICATORIA

A Dios por ser mi fortaleza


y por darme la dicha de
haber logrado cumplir mi
primer objetivo.
A mi madre María Villegas,
por su amor, esfuerzo, apoyo
incondicional, por ser la
verdadera artífice de este
trabajo y por ser mi guía y
ejemplo a seguir.

A mi padre Pedro García,


mi angelito desde hace dos
años, porque sé que desde
el cielo me brinda una
sonrisa por la satisfacción
de la promesa cumplida.

A mis tíos Luis y Rosa, por el


cariño y apoyo constante en
el transcurso de toda mi vida
y por permitirme ser parte
importante en su hogar.

7
AGRADECIMIENTOS

A la C.D. María S. Ventocilla Huasupoma por su amistad, asesoría


permanente y apoyo incondicional en la realización del presente
trabajo.

A la Mg. Blga. Hilda Moromi Nakata por su asesoría y constante


orientación científica en el transcurso de la ejecución y redacción del
presente trabajo de investigación.

Al C.D. Tulio Abuhadba Hoyos por su motivación, por sus


conocimientos impartidos y por su interés desarrollado en el tema.

A la Srta. Violeta Chavesta y a la Sra. Maximiana Aquino, personal


técnico del laboratorio de Microbiología de la Facultad de
Odontología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos por su
valiosa ayuda durante el proceso de ejecución del presente trabajo.

A Edward Chávez, por su apoyo incondicional y motivación constante


para la culminación del presente trabajo.

A todos mis amigos de mi Alma Mater, en especial a Jorge, Jeinmy,


Melissa, Jocy, Vanessa y Magaly, por la amistad brindada durante
todos estos años, por los momentos compartidos y por el apoyo
desinteresado durante la ejecución del presente trabajo de
investigación.

8
I. INTRODUCCIÓN

Los microorganismos orales y las sustancias producidas por ellos

pueden invadir el conducto radicular y lesionar a los tejidos pulpares y

perirradiculares produciendo un cuadro inflamatorio.

La importancia del tratamiento de endodoncia se basa en la obtención

de una conformación cónica de los conductos radiculares por medio de

la preparación biomecánica y alcanzar la máxima limpieza del mismo a

través de diversos agentes físicos, químicos y mecánicos, a fin de

lograr su desinfección completa.

La irrigación, acompañada de la aspiración, es un auxiliar importante

en la instrumentación del conducto radicular que permite la remoción

de los detritos, la reducción del número de bacterias (por acción

mecánica y antimicrobiana de la sustancia utilizada), y el facilitar la

instrumentación al mantener las paredes dentinarias hidratadas,

ejerciendo acción de lubricación.

En piezas dentarias que presentan vitalidad, sin contaminación

bacteriana, se prefiere la aplicación de sustancias biocompatibles que

respeten el remanente pulpar, el tejido periapical y que favorezcan el

reparo posterior. Pero en el caso de piezas dentarias no vitales, el

objetivo de la irrigación será lograr la desinfección del conducto

radicular y la neutralización de las toxinas presentes en el contenido

9
necrótico, optando por productos que cumplan dichos requisitos y que

no agredan a los tejidos periapicales.

En el mercado odontológico existen diferentes tipos de irrigantes que

buscan alcanzar una mejor desinfección y limpieza. Debido a su gran

acción antibacteriana y por ser disolvente tisular, además de

neutralizante de tejidos tóxicos, el hipoclorito de sodio es considerado

el irrigante de primera elección en el tratamiento de piezas no vitales.

Sin embargo, se señala que su poder bactericida es proporcional a su

concentración, además de los diversos reportes de accidentes

ocurridos cuando se sobrepasa más allá del ápice dentario

produciendo diversos síntomas y molestias en el paciente.

La flora de los conductos radiculares relacionados con fracasos en el

tratamiento de endodoncia está formada por un limitado número de

especies microbianas predominantemente grampositivas, entre las

cuales algunas sobreviven al tratamiento quimiomecánico, siendo uno

de ellos el Enterococcus faecalis, con gran capacidad de adaptación y

tolerancia a las condiciones de un medio adverso, siendo difícil su

erradicación.

Se han realizado diversos estudios basados en la búsqueda de la

solución ideal que desinfecte el conducto necrótico sin causar daños a

los tejidos de la mucosa oral.

10
Las soluciones a base de yodo han sido empleadas por décadas en la

odontología, siendo el yodo molecular (I2) el responsable de la

actividad antimicrobiana. Dentro de estas soluciones, el yoduro de

potasio yodado (IKI) ha sido comúnmente utilizado en el campo de la

endodoncia como irrigante y medicación entre citas, demostrando una

alta efectividad, incluso sobre el Enterococcus faecalis.

El propósito del trabajo de investigación es evaluar clínicamente la

capacidad antibacteriana del yoduro de potasio yodado al 2% sobre

bacterias anaerobias como solución irrigante del conducto radicular en

piezas dentarias con necrosis pulpar, bajo la técnica telescópica o Step

Back, comparándolo con el hipoclorito de sodio al 2,5% por ser la

solución de mayor uso y con el suero fisiológico como grupo control.

11
II. MARCO TEÓRICO

2.1. ANTECEDENTES

• Tello (2008) investigó el efecto in vitro del yoduro de potasio yodado

(IKI) al 2% posterior a la preparación quimiomecánica de conductos

radiculares infectados con Enterococcus faecalis. Para ello, empleó

72 primeras molares inferiores permanentes humanos y los infectó

con E. faecalis ATCC 29212, preparó los conductos mediante

instrumentación rotatoria y los distribuyó de manera aleatoria en

cuatro grupos según el irrigante empleado: agua destilada estéril,

hipoclorito de sodio (NaOCl) 1%, NaOCl 1% más IKI 2% durante

cinco minutos y NaOCl 1% más IKI 2% durante 15 minutos. Se

tomaron muestras postoperatorias de los conductos y se realizó la

semicuantificación microbiológica de las unidades formadoras de

colonias (UFC) de las bacterias, para luego comparar los grupos

usando la prueba de Kruskal Wallis con un nivel de significancia de

p>0.05. Los resultados señalaron que el E. faecalis demostró ser

capaz de infectar in vitro consistentemente el sistema de conductos

radiculares y que todos los irrigantes empleados fueron capaces de

disminuir el E. faecalis con el siguiente orden de efectividad de

mayor a menor: NaOCl al 1% más IKI al 2% durante 15 minutos

(95%), NaOCl al 1% más IKI al 2% durante 5 minutos (44%), NaOCl

al 1% (17%) y agua destilada (0%), concluyendo así que bajo las

12
condiciones in vitro del estudio, el uso del yoduro de potasio yodado

al 2% empleado después de la instrumentación por 15 minutos fue

capaz de disminuir significativamente el número de UFC de E.

faecalis con respecto a la irrigación con NaOCl al 1% (p>0,001),

demostrando ser el método más efectivo para eliminar las bacterias

del conducto radicular.1

• Calderón y col (2007) compararon la capacidad de tres

medicamentos intraconductos: clorhexidina (CHX), hidróxido de

calcio (Ca(OH)2) y yoduro de potasio yodado (IKI), individualmente y

en diferentes combinaciones, para inhibir el crecimiento de

Fusobacterium nucleatum. Se sembró dicho microorganismo en

placas de agar y se embebieron discos de papel filtro con cada

medicamento colocándolos sobre la superficie de agar. Las placas

fueron incubadas en una cámara de anaerobiosis durante 7 días. Se

efectuó el registro en milímetros de los radios de las zonas de

inhibición del crecimiento obteniendo que la capacidad

antimicrobiana fue mayor para CHX, seguida por IKI con una

actividad moderada y Ca(OH)2 que presentó escasa capacidad para

inhibir el crecimiento del F. nucleatum. La CHX al 2% inhibió

significativamente mejor el crecimiento bacteriano que el IKI al 4% +

2% y mostró una capacidad antimicrobiana significativamente mayor

que cualquiera de las concentraciones de Ca(OH)2. Por otro lado,

ninguna de las combinaciones de medicamentos intraconductos

13
potenció los efectos antimicrobianos de los medicamentos

evaluados.2

• Baker y col (2004) investigaron la eficacia del Ca(OH)2, Betadine,

Betadine Scrub y del yoduro de potasio yodado (IKI) en la

eliminación de E faecalis de túbulos dentinarios infectados y el

aumento de su acción antimicrobiana con la adición de surfactantes,

además, si el efecto de los medicamentos que contenían yodo

ocurrían durante el tiempo de exposición o si era un efecto residual.

Para ello, se seccionaron 5 mm de discos de dentina de 129 raíces

de incisivos bovinos y se infectaron con E faecalis. Los conductos

fueron instrumentados y se colocaron en cada uno de ellos uno de

los siete medicamentos (10% Ca(OH)2, Betadine e IKI, cada uno con

o sin surfactante, y Betadine Scrub), mientras que los controles

recibieron solución salina. Las muestras fueron incubadas y divididos

en dos grupos según tiempo de exposición: 15 minutos y 24 horas.

Los hallazgos determinaron que a las 24 horas, tanto el Betadine

Scrub como el IKI arrojaron 90% de muestras estériles, el Betadine

sólo un 10% y el Ca(OH)2 fracasó en la eliminación del E. faecalis.

Por otro lado, Betadine (3.3 ± 1.6) y Betadine Scrub (1.8 ± 1.7)

fueron significativamente menos efectivos a los 15 minutos que a las

24 horas, mientras que el IKI (0.1 ± 0.4) fue el único agente eficaz en

ambos casos, por lo que se concluyó que tiene una muy alta

probabilidad de eliminar E .faecalis cuando el tiempo de contacto es

14
corto, como son 15 minutos, lo cual corresponde al tiempo clínico de

contacto de un irrigante endodóncico. Además, los resultados

mostraron que la adición de surfactante no mejoró la acción

antimicrobiana de ningún medicamento y que ningún efecto residual

del yodo contenido en los medicamentos podía ser confirmado.3

• Sirén y col (2004) basándose en diversos estudios que demostraron

una alta tasa de éxito cuando la terapia de canales radiculares se

encuentran libres de bacterias al momento de la obturación y la

asociación existente del Enterococcus faecalis con infecciones

endodóncicas persistentes, decidieron comprobar la efectividad in

vitro del hidróxido de calcio y de su incremento en su actividad

antibacteriana en conjunto con el yoduro de potasio yodado y

clorhexidina, y evaluar la citotoxicidad de dichas combinaciones y su

efecto en la alcalinidad. Trabajaron con muestras de dientes de

bovino; mientras que el hidróxido de calcio era incapaz de matar E.

faecalis en la dentina, el IKI fue el agente más efectivo logrando una

desinfección hasta de una profundidad de 700 µm en un día,

mientras que la clorhexidina, y las combinaciones de hidróxido de

calcio con clorhexidina y con IKI respectivamente mostraron

actividad antibacteriana poco más de 200 µm; en una segunda

revisión, luego de 7 días, recién se observó una actividad tanto de la

clorhexidina, IKI y combinaciones a una profundidad de 950 µm,

siendo nula para el hidróxido de calcio; todo esto sin afectar la

15
alcalinidad de la suspensión del hidróxido de calcio. Esto podría ser

asumido como que las combinaciones tienen el potencial para ser

usado como medicamentos de largo plazo, sin resultar más tóxicos

que sus componentes puros.4

• Portenier y col (2002) investigaron la actividad antibacteriana del

digluconato de clorhexidina y del yoduro de potasio yodado sobre el

Enterococcus faecalis en presencia de dentina, matriz de dentina,

dentina tratada previamente por EDTA y ácido cítrico, colágeno y

células muertas de Enterococcus faecalis y Candida albicans. Las

bacterias sobrevivientes fueron tomadas como muestras después de

una hora y de 24 horas de incubación. La matriz de dentina y las

células muertas fueron los inhibidores más efectivos de la

clorhexidina, la dentina pretratada por ácido cítrico y EDTA mostró

solo una pequeña inhibición, mientras que la dentina y las fibras de

colágeno mostraron poca inhibición a la hora pero no después de las

24 horas. El yoduro de potasio yodado fue efectivamente inhibido

por la dentina, matriz de dentina y células microbianas muertas,

mientras que las fibras de colágeno y dentina pretratadas por EDTA

o por ácido cítrico mostraron un pequeño o casi ningún efecto

inhibitorio, concluyéndose así que los diversos componentes de la

dentina son responsables por los patrones divergentes de inhibición

de la actividad antibacteriana del digluconato de clorhexidina y el

yoduro de potasio yodado, y que el tratamiento químico de dentina

16
antes de la aplicación de la medicación dentro de los canales

radiculares podría alterar el efecto antibacteriano de la medicación.5

• Basson y col (2001) evaluaron la efectividad de dos medicamentos

radiculares y de la clorhexidina en solución con respecto al

Actinomyces israelii en los túbulos dentinarios in vitro, debido a la

persistencia de las bacterias anaeróbicas en el sistema de canales

radiculares, y a su retención en los túbulos dentinarios, lo cual a

menudo conlleva a un tratamiento no exitoso. Los túbulos

dentinarios de las paredes radiculares fueron experimentalmente

infectados con A. israelii y posteriormente expuestos a IKI, hidróxido

de calcio o clorhexidina al 2% por periodos de 3, 7 y 60 días. Al final

del periodo de medicación, las muestras fueron removidas a

diferentes profundidades y se midió la viabilidad del A. israelii,

hallando que la solución de clorhexidina fue el único desinfectante

capaz de eliminar dicho microorganismo de todas las muestras

mientras que el 25% de especies tratadas con IKI y 50% de especies

tratadas con hidróxido de calcio todavía tenían dichas bacterias

viables luego del tratamiento, concluyendo así la superioridad de

dicho irrigante sobre los otros dos medicamentos en la eliminación

del A. israelii.6

17
• Peciuliene y col (2001) en un estudio realizado determinaron la

frecuencia y el rol de cepas gramnegativas y especies de

Enterococcus en dientes obturados asintomáticos con periodontitis

apical crónica y el efecto antimicrobiano de la irrigación del yoduro

de potasio yodado. Los pacientes fueron divididos en dos grupos: en

el grupo A los conductos radiculares fueron medicados con hidróxido

de calcio por 10-14 días luego de haber sido instrumentados,

mientras que el grupo B los canales fueron irrigados con IKI por 5

minutos luego de la instrumentación. Muestras biológicas fueron

tomadas antes y después de la preparación quimiomecánica y luego

de la irrigación con IKI (grupo B) Los resultados mostraron que los

microorganismos aislados fueron Escherichia coli, Klebsiella

pneumoniae y Proteus mirabilis, pero con predominio del E. faecalis.

En el grupo A se detectó un 82,5% de crecimiento bacteriano, con E.

faecalis presente en el 64% de los cultivos positivos, mientras que

en el grupo B todas las muestras excepto una (2.5%) fueron

negativos. Se concluyó que existe una alta prevalencia de bacterias

entéricas en dientes obturados con periodontitis apical crónica, y que

la solución de yoduro de potasio yodado (IKI) mejoró el efecto

antimicrobiano del tratamiento.7

• Gencoglu y col (1992) estudiaron in vitro la efectividad antibacteriana

de cuatro medicamentos intraconductos: hidróxido de calcio

(CALACEPT), paraclorofenol alcanforado (CPCP), Cresophene y

18
yoduro de potasio yodado (IKI) al 2% contra cuatro

microorganismos anaeróbicos obligados como son Streptococcus

mutans, Peptostreptococcus anaerobius, Porphyromonas gingivalis y

Fusobacterium nucleatum, por 10 y 15 minutos. Se utilizaron 24

puntas de papel absorbente reesterilizadas donde 20 fueron

sumergidos en una placa petri conteniendo el inóculo (de uno de los

microorganismos) por 3 minutos mientras que las 4 puntas restantes

fueron usadas como control. 10 ml de uno de los medicamentos a

evaluar fueron colocados en cada una de las 20 placas, donde se

colocaron las puntas de papel para ser removidas diez de ellas

después de 10 minutos y las diez restantes luego de 15 minutos, y

ser colocadas en tubos con 10 ml de tioglicolato, para luego ser

transportadas a placas con agar sangre, dentro de un Sistema de

Jarra Gas Pack Anaeróbica para lograr condiciones anaeróbicas,

incubadas a 37°C por 72 horas. IKI al 2% resultó ser efectivo sólo

contra F. nucleatum y P. gingivalis, mientras que los otros fueron

efectivos contra los cuatro microorganismos.8

• Ørstavik y col (1990) probaron la efectividad de ciertos irrigantes y

medicamentos endodóncicos sobre microorganismos en muestras

de dentina de bovinos infectados experimentalmente con

Enterococcus faecalis, Streptococcus sanguis, Escherichia coli y

Pseudomona aeruginosa. Los conductos radiculares fueron

preparados y limpiados con tratamiento ultrasónico con EDTA e

19
hipoclorito de sodio, para luego ser infectados con dichos

microorganismos por un periodo no menor de 14 días. E. faecalis

infectó rápidamente la longitud total de los túbulos dentinarios, S.

sanguis requirió 2 semanas para una completa infección, E. coli sólo

penetró 600 micrones luego de un largo periodo de incubación,

mientras que P. aeruginosa infectó la dentina rápidamente pero en

muy baja cantidad. E. faecalis persistió al menos 10 días después

del retiro de los nutrientes mientras que los otros murieron en un

periodo de 4 a 48 horas. Los medicamentos endodóncicos fueron

aplicados a fin de realizar una comparación de su potencia

antimicrobiana, hallándose que el paramonoclorofenol alcanforado

fue más eficiente que el Calasept (hidróxido de calcio), y que de los

irrigantes puestos a prueba, el yoduro de potasio yodado resultó ser

más potente que el hipoclorito de sodio y la clorhexidina, además de

ser capaz de penetrar los túbulos dentinarios para eliminar S.

sanguis a una profundidad mayor de 1000 µm dentro en un tiempo

de 5 minutos. La presencia del barro dentinario retrasó, pero no

eliminó los efectos de dichos medicamentos.9

• Safavi y col (1990) realizaron un estudio en el cual infectaron in vitro

Streptococcus faecium dentro de los túbulos dentinarios de canales

radiculares. Dichas muestras, divididas en dos grupos, fueron

expuestas a hidróxido de calcio y a yoduro de potasio yodado por

separado, en distintos periodos de tiempo. Los efectos de los dos

20
agentes sobre la viabilidad microbiana fueron evaluados y

comparados, resultando que el yoduro de potasio yodado logró una

desinfección efectiva, eliminando Streptococcus faecium de los

túbulos dentinarios infectados en 10 minutos, en contraste con las

bacterias que permanecieron viables en la dentina después de

tratamiento de hidróxido de calcio, al cual le tomó 24 horas.10

21
2.2. BASES TEÓRICAS

2.2.1. ENFERMEDAD PULPAR

La mayor parte de la terapia de endodoncia está encaminada,

directa o indirectamente, a la eliminación de los microorganismos

existentes y a la prevención de la infección o reinfecciones de la

pulpa y tejidos periapicales.

Dos hechos pueden tener lugar después de un primer daño a la

pulpa: las lesiones desaparecen después de algún tiempo, o se

destruye gradualmente y finalmente se necrosa.11

Entre los factores que causan la inflamación de la pulpa dental

destacan los siguientes:

- Pérdida de tejido dental (caries, abrasión, atrición, erosión, al

dejar los túbulos dentinarios expuestos a las bacterias y sus

productos)

- Tratamientos restauradores (al seccionar los procesos

odontoblásticos, generar calor y provocar deshidratación).

- Materiales de restauración (toxicidad, acidez, calor que generan

al fraguar y su capacidad de producir deshidratación, eliminación

incompleta de la caries, contaminación salivar e incorporación de

bacterias a la capa de barrillo dentinario durante la preparación

de la cavidad)

22
- Microfiltraciones (las bacterias y sus productos pueden

difundirse por los túbulos dentinarios e inducir una respuesta

inflamatoria)12

La causa más común de una destrucción pulpar son los

microorganismos orales, cuyos productos nocivos aumentan la

necrosis de dicho tejido, directa o indirectamente a través de una

reacción inflamatoria.11

Por lo general, los análisis radiográficos de los dientes infectados

presentan destrucción periapical, mientras que los dientes estériles

no muestran señales radiográficas de inflamación en el periápice.13

Las características patogénicas de una infección endodóncica

dependen de las propiedades de las especies bacterianas

infectantes, las condiciones de los tejidos de la pulpa y los factores

de defensa del hospedador.11

Ingle muestra estudios realizados por otros investigadores en el

que más de 60% de todas las pulpas necróticas estaban infectadas

en el momento de la apertura inicial. En dientes que también tenían

lesiones periapicales, un 80% en promedio estaban infectados.

En un estudio pequeño pero bien controlado de pulpas necróticas

que tenían intactas las cámaras, por medio de una técnica

anaeróbica estricta, Sundqvist observó que todas las piezas con

radiolucidez periapical estaban infectadas. El tipo de

23
microorganismos señalados varió notablemente e incluyó todas las

especies bacterianas de la cavidad bucal. La mayor parte de los

microorganismos infectantes eran anaerobios.14

2.2.1.1. NECROSIS PULPAR

Es la muerte de la pulpa y el final de su patología, cuando no

pudo reintegrarse a su normalidad funcional. Se transforma en

gangrena por invasión de los gérmenes saprofitos de la cavidad

bucal que provocan importantes cambios en el tejido

necróticos.15

Por lo general son dientes asintomáticos ante cualquier tipo de

estímulo (frío, calor, vitalómetro, percusión, prueba cavitaria,

etc.), con cambio de coloración de la corona. Radiográficamente

se observa caries profunda con formación de un área

radiolúcida, indicativa de la lesión. No presenta vitalidad, dolor,

movilidad ni edema.16

La necrosis puede aparecer tras una pulpitis irreversible o como

consecuencia de un traumatismo que interrumpa el aporte

sanguíneo pulpar. No se obtienen resultados en las pruebas

pulpares térmicas o eléctricas, aunque en un diente posterior

puede mantener su vitalidad el tejido pulpar de más de un

conducto, por lo que los resultados no serán concluyentes. En la

mayoría de los casos se observarán cambios perirradiculares en

las radiografías. La palpación y la percusión darán resultados

24
positivos si la alteración pulpar se ha extendido al tejido

perirradicular.12

Pueden considerarse dos situaciones:

• Necrosis aséptica. Es la muerte pulpar sin participación de

microorganismos. Generalmente es originada por

traumatismos que provocan la ruptura del paquete vásculo

nervioso a nivel del foramen apical. Al quedar sin irrigación el

tejido pulpar se necrosa. También ocurre en traumatismos

progresivos de mediana intensidad como en la oclusión

traumática.17

• Necrosis séptica. Es la muerte pulpar por invasión bacteriana,

frecuentemente a causa de la caries dental. También es

causada por una pulpitis crónica no tratada. El proceso es

continuo y progresivo hasta comprometer íntegramente la

pulpa dentaria, no sólo el conducto radicular directamente

relacionado sino también los conductos radiculares más

distantes.17

2.2.1.2. REACCIONES INFLAMATORIAS DE LA PULPA

o MECANISMO DE LA INFLAMACIÓN

Las estructuras y funciones pulpares son alteradas, en

ocasiones en forma radical, por las lesiones y la inflamación

resultante.18

25
Como parte de la reacción inflamatoria, los leucocitos

polimorfonucleares son atraídos por quimiotaxis hasta el sitio

afectado tratando de establecer una barrera en la zona de

ataque. Las bacterias o las células pulpares moribundas son

fagocitadas y expuestas a estímulos mortales, causando la

liberación de enzimas lisosómicas, pudiendo atacar al tejido

normal circundante, dando por resultado daño adicional.15, 18

Los subproductos de la hidrólisis de colágeno y fibrinógeno

pueden actuar como cininas, produciendo vasodilatación y

aumento en la permeabilidad vascular. El líquido que escapa

tiende a acumularse en los espacios intersticiales de la pulpa,

pero debido a que estos espacios son limitados, se eleva la

presión dentro de la cámara pulpar. Esta presión tisular elevada

produce graves efectos sobre la microcirculación local.

Cuando la presión tisular local excede a la presión venosa local,

los vasos locales tienden a cerrarse, lo que incrementa su

resistencia; de este modo la sangre se aleja de esta zona de

mayor presión tisular en busca de zonas de menor resistencia.18

La presión persistente continúa obstaculizando la circulación.

Las consecuencias de un descenso en el flujo sanguíneo son

mínimas en los tejidos normales pero graves en los tejidos

inflamados, debido a que el bloqueo de la circulación permite

que se acumulen irritantes tales como enzimas nocivas, factores

quimiotóxicos y toxinas bacterianas.

26
Este evento puede propiciar el desarrollo del “síndrome de

compartimento”, en el cual la presión tisular elevada en un

espacio limitado altera la estructura y deprime gravemente el

funcionamiento de los tejidos localizados dentro de ese espacio,

lo que conduce a la muerte celular, que a su vez produce

inflamación con escape de líquido y aumento de la presión

dentro del compartimento. El aumento de la presión cierra las

venas, incrementando así la resistencia al flujo sanguíneo a

través de los capilares. La sangre es entonces desviada de las

raíces de presión alta hacia áreas más “normales”. Así, se

produce un círculo vicioso en el que las regiones inflamadas

tienden a inflamarse más debido a que tienden a limitar su

propio flujo de nutrientes sanguíneos.18

La inclusión del tejido pulpar dentro de las duras paredes de

dentina previene su expansión durante las fases hiperémica y

edematosa de la inflamación, con lo que ésta da lugar a un

incremento de la presión interna. Este hecho afecta seriamente a


11
la circulación de la pulpa inflamada, con la imposibilidad de

lograr una cicatrización calcificada y puede consecuentemente

necrosarse, con el exiguo escombro de elementos destruidos a

través del foramen apical.15

El efecto simultáneo de productos tóxicos y otros irritantes da

lugar a menudo a una muerte más rápida y una necrosis final de

27
toda la pulpa. Si se elimina el irritante o se debilita en un estadío

precoz de la inflamación, la pulpitis aguda evoluciona a una

pulpitis crónica o puede revertir. La mayor parte de las pulpas

infectadas necróticas no producen dolor.11

En base a ciertos hallazgos, se asume que los lipolisacáridos de

bacterias gramnegativas juegan un rol en las respuestas

inflamatorias e inmunológicas de los tejidos periapicales con

canales radiculares infectados. Gunnar señala que la actividad

de las endotoxinas de muestras de canales radiculares fue

correlacionada con la presencia y el número de bacterias

gramnegativas en los conductos radiculares.13

Si el irritante perdura, la pulpitis crónica desemboca en una

necrosis completa de la pulpa. 11

o MICROBIOLOGÍA ENDODÓNTICA

Las bacterias son microorganismos unicelulares, procariotas,

que no tienen núcleo ni orgánulos internos. Presentan una

amplia variedad de tamaños y formas, en la que se distingue tres

tipos fundamentales: coco, bacilo y formas helicoidales (vibrio,

espirilo, espiroqueta)

ESTRUCTURA DE LA CÉLULA BACTERIANA

Carecen de un núcleo delimitado por una membrana aunque

presentan un nucleoide. El citoplasma carece de orgánulos

28
delimitados por membranas y de las formaciones

protoplasmáticas propias de las células eucariotas. Presenta

plásmidos, pequeñas moléculas circulares de ADN que

coexisten con el nucleoide, vacuolas (gránulos que contienen

sustancias de reserva) y ribosomas de tipo 70S (utilizados en la

síntesis de proteínas).

Una membrana citoplasmática compuesta de lípidos rodea el

citoplasma. La mayoría posee una pared celular, compuesta por

peptidoglicano. Algunas bacterias presentan una segunda

membrana lipídica (membrana externa) rodeando a la pared

celular. El espacio comprendido entre la membrana

citoplasmática y la pared celular (o la membrana externa si esta

existe) se denomina espacio periplásmico. Algunas presentan

una cápsula y otras son capaces de evolucionar a endosporas.

Entre las formaciones exteriores propias de la célula bacteriana

destacan los flagelos y los pili. (Figura 1)

jkkA. Pili
jkkB. Ribosomas
jkkC. Cápsula
jkkD. Pared celular
jkkE. Flagelo
jkkF. Citoplasma
jkkG.Vacuola
jkkH. Plásmido
jkkI. Nucleoide
J-J. J. J. iiiiiJ. Membrana
iiiiiiiiicitoplasmática

FIGURA 1. ESTRUCTURA DE LA CÉLULA BACTERIANA.

29
ESTRUCTURAS INTRACELULARES

La membrana citoplasmática bacteriana es una bicapa lipídica

compuesta fundamentalmente de fosfolípidos en la que se

insertan moléculas de proteínas. Realiza numerosas funciones

entre las que se incluyen las de barrera osmótica, transporte,

biosíntesis, transducción de energía, centro de replicación de

ADN y punto de anclaje para los flagelos. Muchas importantes

reacciones bioquímicas que tienen lugar en las células se

producen por la existencia de gradientes de concentración a

ambos lados de una membrana. La ausencia de membranas

internas en las bacterias significa que estas reacciones tienen

que producirse a través de la propia membrana citoplasmática.

Las bacterias carecen de núcleo celular, mitocondrias,

cloroplastos y de los otros orgánulos presentes en las células

eucariotas, tales como el aparato de Golgi y el retículo

endoplasmático. El material genético está organizado en un

único cromosoma situado en el citoplasma, dentro del nucleoide,

y contiene al cromosoma, proteínas asociadas y ARN.

ESTRUCTURAS EXTRACELULARES

Disponen de una pared celular que rodea a su membrana

citoplasmática, compuesta de peptidoglicano, sustancia formada

por cadenas de polisacárido enlazadas por péptidos que

30
contienen aminoácidos D, que no se encuentran en las

proteínas, y protegen a la pared de las peptidasas.

Existen dos tipos de pared celular:

- Grampositivas, con una pared celular gruesa conteniendo

numerosas capas de peptidoglicano en las que se inserta

ácido teicoico.

- Gramnegativas, con una pared fina, consistente en pocas

capas de peptidoglicano, rodeada por una segunda

membrana lipídica (membrana externa) conteniendo

lipopolisacáridos y lipoproteínas. (Figura 2)

Bacteria Grampositiva. 1. Membrana


citoplasmática. 2. Pared celular. 3. Espacio
periplásmico.

Bacteria Gramnegativa. 4. Membrana


citoplasmática. 5. Pared celular. 6.
Membrana externa. 7. Espacio
periplásmico.

FIGURA 2. PAREDES CELULARES BACTERIANAS.

Muchas bacterias son capaces de acumular material en el

exterior para recubrir su superficie. Dependiendo de la rigidez y

su relación con la célula se clasifican en cápsulas y glicocálix.

Estas estructuras protegen a las bacterias pues dificultan que

sean fagocitadas por los macrófagos. También pueden actuar

como antígenos y estar implicadas en el reconocimiento

31
bacteriano, así como ayudar a la adherencia superficial y a la

formación de biopelículas.

La invasión bacteriana de las superficies dentinarias expuestas

dentro de los túbulos dentinarios es menos extensiva en dientes

vitales que en no vitales debido a que los primeros tienen

procesos odontoblásticos con vida y soporte de fibras colágenas

dentro de los túbulos que dirigen el flujo del fluido de dentina de

la pulpa a una presión constante.19

En la actualidad, son más de 300 especies bacterianas

reconocidas como habitantes normales en la cavidad oral,

aunque muy pocas han sido aisladas de los conductos

infectados.4

La variedad de gérmenes es mucho menor en contacto con la

zona periapical y predominan en la mayoría de los casos los

Estreptococos viridans (alfahemolíticos), pudiendo encontrarse

también, aunque en una proporción muy inferior, otras

variedades de estreptococos (betahemolíticos, gamma no

hemolíticos y enterococos), Estafilococos albus y aureus

(predominando los primeros), lactobacilos y hongos (Candida

albicans). La presencia de lactobacilos y hongos en la

profundidad del conducto indica generalmente contaminación del

medio bucal.15

32
Los microorganismos anaerobios han sido encontrados en

ciertos casos de necrosis pulpar y lesiones periapicales.8 Según

Muñante, en un estudio realizado en 18 conductos radiculares

con diagnóstico de necrosis pulpar séptica asintomática, se

identificaron bacterias anaerobias estrictas y facultativas

obteniendo que los géneros bacterianos más frecuentemente

aislados fueron: Actinomyces, Fusobacterium, Prevotella,

Bifidobacterium, Veillonella y Lactobacillus, concluyendo así que

las infecciones predominantes en los conductos radiculares son

del tipo mixto, existiendo un alto porcentaje de microorganismos

anaerobios estrictos involucrados en la patología pulpar y

periapical.20

Asimismo, Pumarola y colaboradores definen que las bacterias

anaeróbicas juegan un papel trascendente en las gangrenas

pulpares y periodontitis apicales, colonizando con mayor

prevalencia ambas floras microbianas.

Por otro lado, siendo las bacterias anaeróbicas las observadas

en mayor número en los canales radiculares dolorosos,

comparado con las vistas en aquellos canales sin dolor, esto es

un indicador de su papel en la patogénesis del dolor.21

En los casos de conductos infectados que no han estado en

contacto aparente con el medio bucal, los microorganismos que

33
se localizan casi con exclusividad son los estreptococos, y en

alguna ocasión los estafilococos, e incluso los neumococos.15

Concretamente se han encontrado que microorganismos

anaerobios gramnegativos predominan en los canales

radiculares con pulpas necróticas de piezas donde no se ha

efectuado tratamiento y que están asociados a procesos

agudos.13 Por otra parte, y luego de efectuado el tratamiento de

conductos, el número de estos anaerobios gramnegativos es

reducido considerablemente cediendo paso a una microflora

dominada por bacterias anaerobias facultativas grampositivas

que son, aparentemente, mucho más resistentes a las medidas

terapéuticas.

Cuando las condiciones ecológicas en el conducto radicular

cambian durante el tratamiento, los microorganismos que

sobreviven a ellos puedan tolerar la alcalinidad, la carencia de

nutrientes y el incremento del nivel de O2. Por ello, la infección

cambia de ser polimicrobiana hacia una población de flora

anaeróbica a una facultativa, o inclusive monoinfecciosa, siendo

el E. faecalis reportado como capaz de sobrevivir en un

ambiente alcalino, y sus especies asociados a menudo con

infecciones endodóncicas persistentes.4

34
CUADRO 01. BACTERIAS AISLADAS FRECUENTEMENTE DE PULPAS
22
NECRÓTICAS INFECTADAS

GÉNERO ESPECIES COMUNES

BACTERIAS ANAEROBIAS
ESTRICTAS

Porphyromonas P. gingivalis, P.
endodontalis

P. oralis, P. oris
Prevotella P. buccae, P. Intermedia
Bacilos gramnegativos
P. melanigenica

Mitsuokella

Fusobacterium F. nucleatum
F. necrophorum y otras

Selenomonas S. sputigena

Treponema

Bacilos grampositivos Eubacterium E. alactolyticum, E.


lentum

P. anaerobius, P. micros
Cocos grampositivos Peptostreptococcus P. prevotti, P. magnus

P. Asaccharolytictus

Cocos gramnegativos Veillonella V. parvula

BACTERIAS ANAEROBIAS
FACULTATIVAS

Streptococcus S. mitis, S. Anginosus


Cocos grampositivos S. oralis, S. intermedius

Enterococcus E. faecalis, E. faecium

Campylobacter

35
2.2.1.3. INFECCIONES DE LA PULPA

Los microorganismos pueden encontrarse libres en el conducto

radicular o colonizando en grado variable las paredes de los

conductos y los túbulos dentinarios hasta el agujero apical.12

El carácter y la extensión del daño, las condiciones del tejido

pulpar, el número total de bacterias y los factores de virulencia

de los microorganismos infectantes determinan el curso de la

infección bacteriana.

Los factores de virulencia tienen un efecto directo en los tejidos

iniciando las reacciones inflamatorias. Las combinaciones de

distintas especies bacterianas a menudo se potencian causando

una infección más grave.11

Una flora mixta parece en mejores condiciones de sobrevivir que

las monoinfecciones, ya que una cepa puede sintetizar

nutrientes que necesita otra; sin embargo, la proliferación de una

especie puede producir la desaparición de otra.

Al cambiar la fuente de nutrientes y las concentraciones de los

diversos productos metabólicos también varía la flora

microbiana, y de esta relación entre los microorganismos y las

condiciones imperantes dependerán qué cepas sobreviven. Por

consiguiente, la virulencia de la flora puede variar con el tiempo.

Los microorganismos pueden quedar suspendidos en la luz del

conducto radicular si éste se llena de líquido, o en las paredes

36
de los conductos radiculares formando colonias de una sola

forma bacteriana o agregados de varias formas.12

2.2.1.4. VÍAS DE ACCESO DE LAS BACTERIAS AL TEJIDO PULPAR

Las bacterias, para producir problemas endodóncicos deben

llegar a la cavidad pulpar, lográndolo por diversas vías.14, 23

• Caries dental

Es la causa más frecuente de muerte pulpar.15 En los procesos

cariosos las bacterias se identifican siempre en los túbulos de

dentina ya que el tamaño promedio de las bacterias (0.3 µm)

aisladas de la cavidad pulpar es menor del diámetro promedio

del túbulo (1 a 3 µm)

La muerte de la pulpa como consecuencia de la acción

toxicobacteriana en una caries penetrante, anula la barrera

defensiva que impide a los gérmenes alcanzar las paredes del

conducto y el tejido conectivo periapical.15 El resultado es la

comunicación de los tejidos pulpares blandos con la cavidad

bucal a través de los túbulos dentinarios, como se ha

demostrado por estudios de penetración de colorantes y por

experimentos con marcadores radiactivos.18

Las bacterias grampositivas predominan entre las bacterias

invasoras en un proceso carioso. Algunos investigadores han

encontrado exclusivamente lactobacilos, mientras que otros

37
también han encontrado estreptococos (p.e. Streptococcus

oralis y Streptococcus arginosus), propionibacterias,

Actinomyces spp, y algunos bacilos grampositivos y

gramnegativos anaerobios estrictos no esporulados, la mayoría

no móviles.11, 24

Si parte de la pulpa está dañada e incluso necrótica, las

bacterias aumentan rápidamente en número, y numerosos

leucocitos polimorfonucleares contribuyen a la formación de

pus.11

• Enfermedad periodontal

Las bolsas periodontales profundas permiten el acceso a las

bacterias y sus productos al espacio pulpar a través de los

canales bilaterales que a menudo surgen en la región de

bifurcación de las raíces y en el tercio apical.14, 23

En piezas intactas pero con ataque del periodonto, la mayor

parte de las pulpas (79%) muestran algún grado de inflamación

con pulpitis (37%), pulposis (32%) y necrosis (10%). Sin

embargo, Langeland ha señalado que la pulpa queda seriamente

dañada sólo cuando las bacterias penetran en el agujero apical y

en los grandes vasos sanguíneos.14, 23


Se han encontrado que

anaerobios como Veillonellas, Fusobacterium y Actinomyces

tienen especial predilección por esta vía.23

38
Proliferación selectiva después de invasión bacteriana de

caries y lesiones periodontales

Las dos entidades patológicas comunes que son caries y

periodontitis “escogen” a las bacterias para la infección pulpar,

microorganismos que toleran los medios anaerobios y

acidúricos.

Dentro de la dinámica de estas lesiones, muchas especies

proliferan y desaparecen. Al tener edad la lesión, el número

relativo de anaerobios obligados como son Veillonella,

Fusobacterium, y Actinomyces aumenta a expensas de bacterias

aerobias como Nocardia y especies aerobias de Neisseria.14

• Anacoresis

La pulpa también puede quedar sembrada de microorganismos

por el mecanismo de la anacoresis, en el cual el tejido enfermo

atrae bacterias cuando ocurre bacteremia.14 Si bien no ha podido

probarse la localización de gérmenes provenientes del sistema

circulatorio en la pulpa sana de un diente normal, esta fijación

parece ser factible en pulpas previamente inflamadas.15 Stanley

ha llegado inclusive a encontrar cepas de Mycobacterium leprae,

lo que da a entender que cualquier microorganismo presente en

una bacteriemia puede llegar al tejido pulpar.23

Casi todas las bacterias aisladas de piezas no vitales intactas se

han calificado como especies que residen en la cavidad bucal.

39
Una gran proporción de ellas son anaerobios de los géneros

Bacteroides, Peptostreptococcus y Corynebacterium.

Grossman intentó identificar el origen de las bacterias en dientes

intactos al colocar una especie bacteriana fácilmente

identificable Serratia marcesens dentro del surco gingival de

dientes de perro, y sólo después que fueron sometidos a

traumatismo intenso, pudo recuperarse de la pulpa la especie

mencionada. Según se piensa, las vías que mediaron entre el

surco gingival y el tejido traumatizado fueron la hematógena o

por los conductos linfáticos.14

• Fractura o exposición mecánica

La exposición o descubrimiento del tejido pulpar en un diente

intacto asintomático permite la penetración de bacterias

residentes y transitorias provenientes de la cavidad bucal. Las

primeras habitan por lo regular en tejidos blandos y duros de la

boca, en tanto que las segundas incluyen miembros de la familia

Enterobacteriaceae, como son Escherichia coli, Pseudomona

aeruginosa y Proteus vulgaris.

Por esta vía obviamente no hay una “selección” activa de los

microorganismos, sino la casualidad es la que rige la naturaleza

y el número de bacterias que infectan la pulpa.14

Si un golpe provoca la muerte de la pulpa y no la expone al

medio bucal, el tejido pulpar necrótico suele permanecer mucho

40
tiempo encerrado en su rígida cubierta por esmalte sin

infectarse; pero los microorganismos pueden también alcanzarlo

por distintas vías, dándole carácter infeccioso al trastorno.15

2.2.1.5. INFECCIÓN BACTERIANA DE LA PULPA

Algunas especies bacterianas aisladas del espacio pulpar tienen

características que complican el proceso patológico y su

tratamiento:

1. Algunas son refractarias a la acción de antibacterianos

(Bacteroides fragilis, Pseudomona aeruginosa,

Staphylococcus aerus y Streptococcus faecalis)

2. Algunas pueden sintetizar productos que cambian el equilibrio

del proceso infeccioso a favor del microorganismo invasor,

como toxinas, cápsulas, irritantes metabólicos y enzimas

extracelulares que degradan tejidos o inactivan antibióticos.

3. Algunas pueden iniciar infecciones en sitios distantes de la

pieza dental por la aparición de bacteremia.14

Suelen aceptarse que estas características, junto con otras,

generan los atributos invasores, tóxicos o de ambos tipos, que

se necesita para que ocurra a plenitud la invasión bacteriana. La

invasividad es la capacidad de la bacteria para pasar por el

punto de entrada y diseminarse a otras regiones, ocasionando

lesión notable de los tejidos en la vecindad inmediata al punto de

41
entrada, en tanto que las toxinas dañan los tejidos en sitios

distantes.14

• Toxinas y otros factores

En el tejido pulpar infectado también se han identificado

endotoxinas y enzimas extracelulares. Las primeras son un

componente superficial integral de la pared de los gramnegativos

y casi todas las bacterias de esta categoría elaboran endotoxina

en forma de complejos de los lipopolisacáridos de la pared. La

endotoxina es liberada después de la desintegración de la

partícula bacteriana, y es la que produce diversos efectos

biológicos que incluyen fiebre, intensificación de las respuestas

sistémicas a la adrenalina, choque vasomotor, estimulación de la

actividad linfocítica y reabsorción de hueso.14

La importancia clínica de la fase de proliferación o crecimiento

muestra la eficiencia y velocidad con la cual se sintetizan las

toxinas, enzimas extracelulares, e irritantes metabólicos. La

obturación de un canal radicular que cierra el orificio de la raíz al

paso de estas sustancias aminora sin duda la posibilidad de que

persistan lesiones activas.

En una pulpa o tejido periapical fuertemente infectado cabe

recurrir a medicamentos, sustancias de irrigación antibacteriana

o antibióticos, ya que es importante la asepsia y el

42
desbridamiento meticuloso del conducto radicular para mejorar

la curación y la eficacia de los agentes endodóncicos.14

El mayor problema en el tratamiento de un conducto con

gangrena pulpar es la presencia de gérmenes en las paredes de

la dentina, en la profundidad de la misma y en los posibles

conductos laterales y delta apical. Si estos gérmenes persisten

después de la intervención y son capaces de alcanzar el tejido

conectivo del periápice, provocarán, mantendrán o agravarán

una lesión periapical de acuerdo con el número, patogenicidad y

virulencia de las bacterias presentes.15

Numerosos estudios clínico-prospectivos efectuados posterior a

la fase de obturación han demostrado la importancia de la

eliminación bacteriana en el éxito del tratamiento de

conductos.24, 25

La causa principal de la infección residual en los conductos fue

la eliminación incompleta del sustrato,18 mostrando algunos

estudios una alta tasa de éxitos en casos donde los conductos

estaban libres de microorganismos al ser obturados.4

Aunque la complicación periapical es un problema agregado al

de la gangrena pulpar, conviene dejar bien establecido que por

tratarse de una consecuencia de esta última, sólo si se elimina la

infección del conducto, es decir, la causa originaria, se logrará

43
su curación y la restitución del tejido conectivo a su normalidad

funcional.15

Sjögren y col, luego de un seguimiento de 5 años de piezas

dentarias obturadas con periodontitis apical inicial, observaron

que aquellos que presentaban cultivos negativos sucedió una

completa curación periapical en un 94%, mientras que en las

muestras que tenían cultivo positivo, el éxito solo fue de 68%,

hallando diversas especies de Actinomyces en la mayoría de

fracasos, lo cual implica que su eliminación completa de los

conductos radiculares favorece el pronóstico de la terapia.25

Otros estudios además, han manifestado que la total eliminación

de microorganismos de los canales radiculares es una tarea

sumamente difícil sino imposible de realizar, existiendo una

variedad de factores no microbiológicos de carácter clínico-

técnico indicados como causales de la persistencia de

infecciones endodóncicas posteriores al tratamiento.

Entre estos factores se encuentran, por ejemplo, el uso de

técnicas inadecuadas de instrumentación mecánica, irrigación

insuficiente con agentes antimicrobianos, el desuso de

medicación intracanal entre citas, obturaciones deficientes, etc.

No obstante, y sin ánimo de desmerecer la importancia que

tienen estos factores técnicos en el éxito del tratamiento de

conductos, se han reportado ciertos casos donde, a pesar del

44
control minucioso de la técnica, se han producido infecciones

recidivantes.

Esta circunstancia indica claramente la existencia de otros

determinantes, no controlables por el operador, que influyen en

la persistencia de microorganismos en los conductos

radiculares.24

Recientes investigaciones han demostrado que la flora

predominante en casos de fracasos endodóncicos, con lesiones

periapicales persistentes, fueron microorganismos grampositivos,

siendo la bacteria más comúnmente aislada el E. faecalis,26,27

anaerobio facultativo, asociado con periodontitis apical

persistente y capaz de sobrevivir en los túbulos dentinarios luego

de una semana de exposición de Ca(OH)2.3, 28, 29

2.2.2. TRATAMIENTO DE ENDODONCIA

Al revisar el efecto de los antimicrobianos se observó que la

preparación biomecánica del conducto de la raíz, junto con el

lavado y la aspiración, constituían el principal método para

aminorar en gran medida la población bacteriana del conducto.14

2.2.2.1. PREPARACIÓN BIOMECÁNICA

El tratamiento de elección para la enfermedad periapical es la

eliminación de los microorganismos y sus productos del sistema

45
de conductos radiculares por medios mecánicos o químicos,

mas la complejidad de los mismos hace casi imposible

esterilizarlos. En la mayoría de los casos de tratamientos de

endodoncia es suficiente una reducción del contenido

microbiano de los sistemas de conductos para que se produzca

la cicatrización perirradicular, en otros casos, la cicatrización

puede deberse a una flora residual alterada y menos

patológica.12

La instrumentación mecánica por sí sola no es capaz de tornar

estéril el sistema de conductos radiculares. Ella reduce la

infección bacteriana en el interior de los conductos en apenas

50%,30 existiendo la necesidad de usar un lavado abundante

como arrastre mecánico.11

La porción apical del conducto radicular es muy importante, en

virtud de su relación con el tejido perirradicular y si bien la

instrumentación constituye el método primario para la limpieza

del conducto, la irrigación representa un auxiliar decisivo ya que

las irregularidades en los sistemas del conducto, como los

istmos estrechos y los deltas apicales, impiden el

desbridamiento completo si sólo se recurriera a la

instrumentación mecánica.14 Además, aparte del arrastre de los

detritus, se debe ejercer una acción bactericida y/o

46
bacteriostática que estimule las defensas inespecíficas del

organismo por parte de los irrigantes.11

2.2.2.2. IRRIGACIÓN

Es la maniobra conjunta destinada a coadyuvar en la limpieza de

la cámara pulpar, conducto radicular, o ambos, por el

movimiento y renovación de un líquido en su interior.31

La irrigación de la cámara pulpar y de los conductos radiculares

es una intervención necesaria durante toda la preparación de

conductos,32 siendo sus ventajas actualmente reconocidas por la

mayoría de los autores.15

La irrigación acompañada de la aspiración, es un auxiliar muy

importante durante la instrumentación del conducto radicular

cuyo objetivo es la remoción de los detritos,30 llámese restos

pulpares remanentes, virutas de dentina movilizados durante la

preparación y en el caso de conductos comunicados con la

cavidad bucal, la remoción de restos de alimentos o sustancias

extrañas introducidas durante la masticación.15 También permite

la reducción del número de bacterias existentes en el interior de

los conductos radiculares, tanto por la acción mecánica como

por la acción antimicrobiana de la solución utilizada,30 consigue

la disolución de restos orgánicos,33 facilita la instrumentación al

mantener las paredes dentinarias hidratadas, ejerciendo acción

47
lubricante,30,34 y permite la apertura de los túbulos dentinarios

para la remoción del smear layer.14,33

El empleo sistemático del aspirador permitirá efectuar un

abundante lavado; en condiciones semejantes, cuanto mayor

sea la cantidad de líquido empleado, tanto más efectiva resultará

la limpieza de las paredes del conducto.

Terminada la irrigación, se prolonga durante aproximadamente 1

minuto la acción del aspirador a la entrada del conducto, para

facilitar la eliminación del líquido contenido en el mismo y lograr

una discreta deshidratación de las paredes dentinarias.15

Es muy recomendable que siempre se instrumenten los

conductos mientras contengan una solución de irrigación, un

agente lubricante, o ambos a la vez. La instrumentación de esta

manera evitará la complicación de que se pierda contacto con el

control de la medida debido a la acumulación de residuo en el

segmento apical del conducto,14 aunque pueden suceder dos

problemas:

1. Puede ser difícil asegurar que el irrigante penetre hasta el

estrecho ápice y hasta las ramificaciones del sistema del

conducto radicular.

2. Incluso si se consigue la penetración, la naturaleza de las

colonias microbianas, que son de varias capas y

tridimensionales, así como las características de su matriz de

48
polisacáridos, pueden proteger a las capas más profundas de

los microorganismos.

El primer problema se soluciona agrandando lo suficiente el

conducto radicular para que el irrigante penetre hasta el ápice

utilizando una aguja hipodérmica estrecha. El segundo puede

solucionarse utilizando una concentración y un volumen de

irrigante suficiente como para evitar que se consuma por

reacción química con el detritus orgánico y los

microorganismos.12

Buchanan observó que las soluciones irrigantes solas son las

que limpian los conductos accesorios ya que de ninguna manera

los instrumentos pueden llegar hasta estos rincones. Sólo el

empleo generoso de una solución de irrigación que disuelva los

tejidos y que se deje colocada durante 5 a 10 minutos asegurará

una y otra vez la limpieza de los conductos auxiliares.14

En los dientes con vitalidad pulpar, la ausencia de contaminación

bacteriana incipiente excluye el uso de productos antisépticos y

en su lugar se recomienda la aplicación de sustancias

biocompatibles, que respeten el remanente pulpar y los tejidos

periapicales, para favorecer la reparación. En los dientes sin

vitalidad, la irrigación ayuda a la desinfección del conducto

radicular y a la neutralización de las toxinas presentes en el

contenido necrótico. La preferencia es, entonces, por productos

49
con acción antiséptica, poder de disolución de material orgánico

y capacidad de neutralizar las toxinas sin agredir los tejidos

periapicales.30

Es posible que la irrigación extruya de manera forzada la

solución y los residuos hacia el vértice. Esto plantea dudas en

torno a la mejor solución de irrigación, el mejor método para

aplicarla y el volumen que debe utilizarse.14

OBJETIVOS DE LA IRRIGACIÓN

1. Limpieza o arrastre físico de trozos de pulpa esfacelada,

sangre líquida o coagulada, virutas de dentina, polvo de

cemento, plasma, exudados, restos alimenticios, medicación

anterior, etc.32

2. Neutralizar y diluir sustancias (irritantes, toxinas)

3. Lubricar el conducto para facilitar la instrumentación

mecánica.

4. Reducir el número de microorganismos.

5. Acción detergente y de lavado por la formación de espuma y

burbujas de oxígeno naciente desprendido de los

medicamentos usados.31

6. Acción antiséptica o desinfectante propia de los fármacos

empleados.

50
7. Acción blanqueadora, debido a la presencia de oxígeno

naciente, dejando el diente así tratado menos coloreado.32

8. Humedecimiento de los remanentes tisulares

9. Humectación del diente

10. Ampliar el área de limpieza, desinfección o ambos,

11. Mejorar el contacto y acción farmacológica de los

medicamentos locales.

12. Presentar baja toxicidad, no ser agresivo para los tejidos

perirradiculares. 31

Las sustancias químicas en endodoncia deben presentar

biocompatibilidad y tensoactividad en el sentido de evitar los

tejidos remanentes participantes del proceso reparador y al

mismo tiempo, auxiliar la preparación quirúrgica del conducto

radicular.

BENEFICIOS DE LA IRRIGACIÓN

• Desbridamiento quimiomecánico

La eliminación de los residuos del conducto radicular mediante la

irrigación se trata del proceso más importante en el tratamiento

endodóncico19 y está relacionado con la viscosidad o tensión de

superficie de la solución, el diámetro y la profundidad de

penetración de la aguja para irrigación, las características

51
anatómicas del conducto y del volumen y la frecuencia de la

solución empleada.14

Una cantidad de irrigante apropiada es al menos de 1-2 ml cada

vez que se limpia el canal. La clave para mejorar la eficacia de

los irrigantes en el ápice es utilizar una lima maestra antes de

cada irrigación ya que suelta los detritos compactados dentro del

ápice y ayuda a suspenderlos en los líquidos del canal, siendo

así más susceptibles de ser expulsados.11

• Eliminación de los microorganismos

La solución irrigante ideal debe ser bactericida, actuando contra

hongos y esporas, desinfectando la luz y las paredes de los

conductos radiculares, destruyendo las bacterias y sus

componentes y cualquier sustancia de naturaleza antigénica.

Desde principios de siglo se han utilizado una serie de

sustancias como irrigantes incluyendo soluciones químicamente

inactivas y activas, como enzimas, ácidos, álcalis, agentes

quelantes, agentes oxidantes, agentes antibacterianos y

detergentes.35

• Disolución de restos pulpares

Una de las funciones más importantes del irrigante es la

disolución del detritus orgánico de la pulpa, tanto en la luz de los

conductos principales como en la totalidad del sistema,

52
sobretodo en aquellos conductos accesorios que se dirigen

hacia el periodonto.35

• Eliminación del barrillo dentinario

El barrillo dentinario se compone de detritos compactados,

trozos de dentina resquebrajada y de tejidos blandos del canal

dentro de de los túbulos dentinarios por la acción de los

instrumentos. Estos materiales se liberan del hueco de las

estrías de los instrumentos, ensuciando la superficie del canal al

arrastrar las puntas de los mismos. Dado que el barrillo

dentinario está calcificado, la manera más eficaz de eliminarlo es

mediante la acción de ácidos débiles y de agentes quelantes.11

MECANISMO DE LA IRRIGACIÓN

Movimiento ordenado = chorro (flujo) Æ área de impacto

(superficie/partícula) Æ energía cinética Æ presión

hidrodinámica Æ movimiento desordenado (turbulencia o

torbellino) Æ reflujo 31

La membrana bacteriana constituye una barrera selectiva que

regula la concentración de sustancias vitales en el interior y

exterior de la célula, y es necesaria para el metabolismo y

función, por lo que se necesita que esté intacta. Algunas

53
sustancias, como los detergentes, actúan como germicidas al

modificar y dañar las propiedades físicas y químicas de la

membrana bacteriana, provocando la desnaturalización de las

proteínas del microorganismo.14

Las proteínas enzimáticas que contienen cisteína poseen

cadenas laterales que terminan en grupos sulfhidrilo (_SH). Las

sustancias como el yodo, el cloro y los metales pesados que

oxidan o se ligan a los grupos _SH, son potentes inhibidores

enzimáticos que también tienen efecto destructivo en los

microorganismos.14

TÉCNICA DE IRRIGACIÓN

La técnica consiste en insertar la aguja en el conducto,

procurando no obliterarlo para facilitar la circulación de retorno y

que no pueda penetrar más allá del ápice, e inyectar lentamente

de medio a un centímetro cúbico de la solución irrigadora, para

que la punta del aspirador absorba todo el líquido que fluye del

conducto, en secuencias alternantes con el aumento gradual en

el calibre de los instrumentos empleados.32

El peligro es máximo cuando se fuerza la solución de irrigación,

y el residuo del conducto hacia el tejido perirradicular debido a

un efecto semejante al de un pistón.

54
Se han hallado complicaciones graves por forzar las soluciones

de irrigación más allá del ápice al encajar la aguja en el conducto

y no permitir un flujo retrógrado adecuado ya que cuanto más

cerca esté la punta de la aguja del ápice, tanto mayor será la

posibilidad de que se dañen los tejidos perirradiculares.14

Se emplea como complemento de la irrigación el uso sistemático

de los conos de papel para lograr una completa limpieza e

irrigación e los conductos, durante la preparación biomecánica y

después de ella. Tanto en este uso, como cuando se utilizan

para tomar las muestras de cultivo y realizar las siembras en los

medios apropiados, es aconsejable que los conos de papel sean

calibrados, para evitar que traspasen el ápice y provoquen

hemorragias o lesionen el tejido periapical.

Los conos absorbentes son esenciales en el proceso de lavado o

irrigación y a veces son indispensables para llevar el líquido

irrigador al tercio apical, sobre todo en conductos estrechos.32

Existe otra forma de aplicación como es por medio de una bolita

de algodón dentro de la cámara pulpar, aunque es más empírica

y no tiene tanta exactitud ya que requiere vaporización del

medicamento para que alcance a los microorganismos en el

espacio pulpar. Para que sean eficaces, los vapores germicidas

deben disolverse en tejidos y células, la concentración del

55
medicamento al ser aplicado en una bolita de algodón debe ser

ciento de veces mayor que la eficaz cuando se aplica

directamente. Además, sólo unos cuantos antisépticos poseen

capacidad “vaporógena” notable, como aquellos que contienen

cloro, yodo y formaldehido, que sí son eficaces.14

Casi todos los antisépticos depositados se inactivan en el

conducto radicular en breve lapso. Los compuestos de yodo y

cloro pierden gran parte de su actividad en término de un día, los

fenoles alcanforados lo hacen en término de tres a cinco días, y

el formocresol en término de una semana.14

SOLUCIONES IRRIGANTES

Clínicamente la efectividad antimicrobiana de un agente

dependerá de la cantidad de microorganismos presentes en el

conducto radicular, de la virulencia de los mismos y de la

anatomía del conducto.

Según Ringel y colaboradores, la diversidad de microorganismos

encontrada en el sistema de conductos radiculares indica que

estos existen en relaciones simbióticas, lo que confiere

resistencia adicional a la desinfección química.30

Teniendo en cuenta que los objetivos de la irrigación de

conductos son el lavado de los residuos (arrastre mecánico),

56
disolución hística, acción antibacteriana y lubricación de los

mismos y que estos restos a eliminar son de distinto tipo: vitales,

necróticos, blandos y calcificados (barro dentinario) es de

suponer que no todos los antisépticos utilizados actúan con igual

eficacia.11

ƒ CLASIFICACIÓN

Se dispone de una amplia gama de agentes para irrigación,

debiendo comprenderse las posibles ventajas y desventajas del

agente a utilizarse.14

El suero fisiológico puede utilizarse como único irrigador cuando

se han empleado otros, como el último a usar cuando se desea

eliminar el remanente líquido anterior.32

1. Alcoholes

Los alcoholes etílico (CH3-CH2-OH) e isopropílico ((CH3)2-

CHOH) desnaturalizan proteínas y se aplican en grandes

concentraciones. Los alcoholes secundarios son más eficaces

que los primeros. En ausencia de agua, hay menor posibilidad

de que surja la desnaturalización, lo cual explica por qué el

alcohol de 70% es más eficaz que los alcoholes de 96, 99 ó

100%. No se recomienda el uso de alcoholes como antisépticos

intracanaliculares por su poco efecto antimicrobiano; sumergir o

flamear los instrumentos tampoco constituye un método seguro

57
para destruir microorganismos. Sin embargo, el alcohol utilizado

para deshidratar la dentina en el conducto radicular mejorará la

capacidad de la obturación de algunos selladores

endodóncicos.14

2. Compuestos fenólicos

El fenol (C6H5OH) o ácido carbólico constituye una base para

diversos derivados usados ampliamente en odontología. Es un

tóxico del protoplasma, y por ello es muy eficaz inclusive en

concentraciones de 1 a 2%, como medicación que forma vapor a

nivel intracanalicular. Dentro de este grupo se encuentra: el fenol

alcanforado, el monoclorofenol (paramonoclorofenol), el cresol

(formocresol), entre otros.14

3. Sales de metales pesados

Las sales de plata, cobre y mercurio coagulan proteínas y actúan

como inhibidores enzimáticos y suelen ser tóxicas. En

circunstancias normales, las sales de mercurio son buenos

antisépticos para desinfectar materiales desvitalizados, sin

embargo, constituyen alternativas poco prácticas en la

medicación intracanalicular porque pierden gran parte de su

eficacia en contacto con las proteínas de los líquidos tisulares.14

58
4. Detergentes catiónicos

Los compuestos de amonio cuaternario son soluciones inodoras

y estables que tienen alguna acción tensioactiva y buen efecto

limpiador. Si bien fueron considerados como antisépticos

óptimos, según nuevas investigaciones su toxicidad puede ser

notable, sin embargo, concentraciones bajas in vivo, no causan

una reacción inicial inflamatoria mayor que otros antisépticos de

acción moderada. Además, inhiben y retrasan la cicatrización de

los tejidos, no constituyendo así como líquido ideal para lavado,

por su efecto en la cicatrización, y su limitada acción

antimicrobiana.14

5. Peróxido de hidrógeno

El peróxido de hidrógeno es otra de las soluciones usadas por

muchos operadores como irrigante, alternando con el hipoclorito

de sodio, cuya interacción produce una efervescencia de

oxígeno naciente y cloro, lo que facilita la extrusión y eliminación

del material residual, producto de la propia

instrumentación.14,36,37

Su uso como irrigante es dudoso ya que el peróxido de

hidrógeno es un veneno protoplasmático y Schilder y Amsterdam

(1959) han demostrado que la soda clorada es dañina a los ojos

y al tejido conjuntivo subcutáneo del conejo, asumiendo así que

será perjudicial también a los tejidos periapicales del hombre.36

59
6. Gluconato de clorhexidina

Es un agente antiséptico eficaz, con acción antimicrobiana de

amplio espectro, sustantividad y falta relativa de toxicidad; sin

embargo, no se sabe si posee propiedad disolvente de tejido.

Confiere actividad antimicrobiana eficaz durante muchas horas

después de la instrumentación.14

7. Halógenos

El cloro y el yodo son la base de diversos antisépticos oxidantes

muy usados en endodoncia.17

• Hipoclorito de Sodio

Grossman preconiza al hipoclorito de sodio como coadyuvante

químico para la disolución de los materiales orgánicos

remanentes en el interior del conducto,38 además de ser

excelente antiséptico por la liberación de iones de cloro. Se

utiliza desde 1920 en diferentes concentraciones que varían del

0,5% al 5,25%. Tiene baja tensión superficial razón por la cual

se difunde rápidamente por las superficies duras con las cuales

entran en contacto. Allí actúa sobre la materia orgánica viva, en

descomposición o descompuestos, desnaturalizando las

proteínas y transformándolas en aminoácidos hidrosolubles de

fácil eliminación. Su avidez por el agua acaba por propiciar la

ruptura de las paredes celulares bacterianas retirando el agua,

60
componente vital del protoplasma celular.37 Su actividad continúa

por lo menos una hora después del contacto de los tejidos.

Las interrogantes en torno al empleo del hipoclorito de sodio a

menudo se enfocan a la concentración apropiada, el método de

administración y la preocupación por el daño celular que

ocasiona la extrusión hacia los tejidos perirradiculares. Los

investigadores no se ponen de acuerdo sobre la concentración

precisa del hipoclorito de sodio que es aconsejable utilizar.14

Ingle sugirió que una solución al 0.5% (solución de Dakin) que

tenía poca toxicidad, atacaba sólo el tejido necrótico. Sin

embargo, la solución de hipoclorito de sodio al 1% es “agresiva”

aunque tiene un mejor efecto antimicrobiano. Las

concentraciones de NaOCl mayores (2,5 y 5%) atacan el tejido

vivo activamente sin mejorar notablemente el tratamiento. Su

efecto decrece en forma notable en zonas confinadas, y dado

que la actividad de las soluciones débiles decrece rápidamente,

el lavado debe ser frecuente y abundante. Aunque otros autores

señalan que sin un medicamento antibacteriano entre citas, la

instrumentación mecánica y el lavado con hipoclorito de sodio

sólo podrían eliminar el 50% de los microorganismos, lo cual

resultaría en una completa falla del tratamiento del canal

radicular a largo plazo.8

61
El empleo de antisépticos coaguladores de proteínas y el

formocresol alterará el tejido de la pulpa en grado tal que se

necesita una concentración mucho mayor del irrigante (o debe

permanecer por un lapso mucho mayor) para que haya

disolución del tejido. Por lo expuesto, cuando se utiliza

formocresol o paraclorofenol como antisépticos, se necesitan

concentraciones de hipoclorito dos o tres veces mayores de lo

común, para disolver los restos de tejido necrótico.

También se señala que la eficacia de las bajas concentraciones

de NaOCl mejora con el uso de mayores volúmenes de solución

de irrigación o con la presencia de solución de irrigación

restituida en los conductos por periodos más prolongados.14 Por

otra parte, una mayor concentración de hipoclorito de sodio

podría tener la misma eficacia en periodos más breves.14

“El irrigante puede ser expulsado durante la instrumentación y si

es hipoclorito puede dar reacciones violentas en los tejidos y

dolor insoportable”, según Leonardo.11 No obstante las

propiedades ventajosas que posee, es preciso establecer que en

concentraciones elevadas es un agente extremadamente

cáustico pudiendo generar accidentes graves al no ser selectivo

para el tejido vivo actuando sobre ellos y desnaturalizándolos de

manera definitiva.

62
Durante la instrumentación pueden producirse algunos

accidentes como la extrusión de una solución irrigante a la zona

periapical o tejidos de vecindad producido por una falsa vía o

perforación como por el ajuste excesivo de la punta de la aguja

de la jeringa a la luz del conducto radicular, no permitiendo el

retorno del irrigante e impulsándolo hacia el periápice a través

del foramen.37 En ambos casos el cuadro clínico es similar, La

reacción será violenta, inmediata y muy dolorosa acompañada

de sensación de quemaduras, equimosis, tumefacción, edema,

aumento de volumen, necrosis y abscesos. Las complicaciones

se producen por el efecto oxidante del hipoclorito de sodio sobre

los tejidos vitales que rodean al diente en tratamiento seguido de

una reacción inflamatoria del organismo.33, 37

• Yoduro de Potasio Yodado

El yodo ha sido utilizado durante años, y tiene un efecto de

mediana intensidad en tejido vivo,14 por ser efectivo contra una

amplia variedad de microorganismos encontrados.4

En odontología, específicamente en endodoncia, se emplean las

soluciones yodo yoduradas de enérgica acción antiséptica, fácil

manejo y resolutiva en procesos de periodontitis aguda.32

La fuerte acción antimicrobiana del yodo sobre las diferentes

especies de microorganismos ha sido demostrada y se sabe que

resulta eficaz contra bacterias grampositivas y gramnegativas,

63
actuando también como fungicida y virucida, además de mostrar

efectos esporicidas.39

Las dos preparaciones más comunes usadas en odontología son

la tintura (5% en alcohol) y el yodo yoduro de potasio (IKI). La

primera solución se utiliza para desinfección de los campos

quirúrgicos en endodoncia, y la segunda como medicación

intracanalicular14 con la siguiente fórmula:

a. Yodo Æ 5 g (2%)

b. Yoduro potásico Æ 10 g (4%)

c. Agua destilada, c.s.p. Æ 100 ml (94%) 32

Preparación. Se disuelve el yodo (50 g) y yoduro de potasio

(100 g) en agua destilada cada 100 ml y después se agrega

suficiente agua purificada hasta completar 1000 ml. El yoduro de

potasio (IKI) sólo se agrega para aumentar la solubilidad del

yodo.40

Usos. La presencia de yodo libre en la solución de yodo fuerte

hace que este preparado sea muy útil como germicida y

fungicida. En consecuencia conserva la mayoría de las

propiedades de la tintura de yodo, sin la irritación que produce el

alcohol de esta última.40

64
Es un desinfectante tradicional del canal radicular,34 y al igual

que el cloro, ha sido utilizado en medicina durante muchos años.

Se lo encuentra codificado en la farmacopea como solución débil

de yodo, con una concentración al 2% y solución fuerte al 7%,41

teniendo la solución del 2% una muy baja toxicidad a los tejidos

vivos en comparación a otros medicamentos intracanales,

inclusive que el hidróxido de calcio.4

Posee gran capacidad germicida dada su alta

reactividad.41Actúa sobre un gran espectro de microorganismos

encontrados en los canales radiculares,34 bacterias

gramnegativas, grampositivas, esporas, hongos y virus,41 pero

mostrando una relativamente baja toxicidad en experimentos

usados en cultivo de tejidos,34 así como poca capacidad de irritar

tejidos, de forma que su efecto antimicrobiano activo persiste en

concentraciones que no son citotóxicas.

Como medicamento intracanal, es una muestra sobresaliente de

una antiséptico que combina una excelente actividad

antimicrobiana con baja irritación tisular.8 También es adecuado

su efecto de formación de vapores y con ello posee actividad

antimicrobiana. Sin embargo, antes de utilizar cualquier producto

de yodo hay que interrogar al paciente sobre posible sensibilidad

a estos compuestos.14, 41

65
FIGURA 3. TOXICIDAD DE LOS ANTISÉPTICOS ENDODÓNCICOS. EFECTO
CITOTÓXICO DE CÉLULAS L929 IN VITRO.

Las barras indican diluciones en las que el antiséptico destruye todas las células en el
cultivo. Mientras más larga la barra, mayor la toxicidad (escala logarítmica) 14

FIGURA 4. EFECTO ANTIMICROBIANO DE LOS ANTISÉPTICOS ENDODÓNCICOS


EN CUATRO ESPECIES DIFERENTES DE MICROORGANISMOS AISLADOS DE LOS CONDUCTOS
RADICULARES.

Las barras indican diluciones en las que el antiséptico es eficaz y destruye todos los
microorganismos en el cultivo. Mientras más larga la barra, más potente el efecto
antimicrobiano (escala logarítmica) La dilución denota la solución de las concentraciones
utilizadas: -10-1 _ 10 veces la dilución, etc. 14

66
El yodo fue utilizado durante años por Lambert, R.A: (1916) y

Salle A.S. (1937) con una fórmula de yoduro de potasio (yodo

2%, yoduro de potasio 4% y agua destilada 94%), pero se

reconoció claramente como antiséptico eficaz recién en 1974 al

ser aprobado por el Consejo de Terapéutica Dental de la

Asociación Dental Americana. Además es reconocido por

Spanberg por tener una actividad antimicrobiana excelente, no

ser citotóxico pero tener en cuenta las reacciones alérgicas de

algunos pacientes. 41

Si bien inicialmente los problemas iniciales fueron el olor

desagradable, la tinción, la inestabilidad y la toxicidad, estos

fueron superados a medida que aparecieron nuevas

formulaciones. Pero se debe evitar la ingesta prolongada de

yodo pues puede interferir con el metabolismo tiroideo.41

La primera solución de lugol fue empleada por los investigadores

suecos Nyborg y Tullin (Malmo, 1965) y Strindberg (Estocolmo,

1956 y 1963), demostrando el último de los autores citados que

el yodo es tan antibacteriano como la penicilina, la

estreptomicina y los compuestos de amonio cuaternario,

teniendo mayor espectro bacteriano que ellos.

Las soluciones de yodo yoduro potásico son ampliamente

utilizadas en los países escandinavos, en restauraciones

67
oclusales. Spangberg y cols (1973) consideran que una solución

de yodo al 2% y yoduro potásico al 4% en agua destilada es tan

efectiva como el formocresol y el clorofenol alcanforado, pero

mucho menos tóxico.

Para Hasselgren y Stromberg (Suecia, 1976), la solución

propuesta por Strindberg en 1956 (yodo 10%, yoduro potásico

20% y agua destilada 70%), no solamente es un buen fármaco

para ser sellado en cura oclusiva, sino que puede servir como

material de contraste roentgen opaco intradental, llevándolo a la

cámara pulpar y al interior de los conductos.32

Mecanismo de acción

El yodo y sus compuestos penetran rápidamente a través de las

paredes celulares de los microorganismos y se cree que los

efectos que producen resultan de la desnaturalización de las

proteínas y de la inactivación de los ácidos nucleicos,34 actuando

como un agente oxidante al reaccionar con grupos libres

sulfidrilos de enzimas bacterianas, resultando en enlaces

bisulfuros.4, 34

Es poco soluble en agua, acción que favorece al agregarle

yoduro de potasio. La mezcla de yoduro de potasio y compuesto

clorado libera yodo libre y ácido hipoiodoso, el yodo libre es

constantemente regenerado ya que en contacto con sustancia

68
orgánica se reduce a yoduro y vuelve a reoxidarse por el cloro

que permite este reciclaje.41

En solución acuosa, forma el sistema complejo yodo-agua, que

genera gran variedad de iones: ácido hipoiódico (OI–O2), ion

triioduro (I3), ion molecular (I2), ácido hipoiodoso (HOI) y

catión hidratado (HB2OI+).

El yodo molecular I2 y el ácido hipoiodoso HOI (libera yodo con

pH entre 6 y 9), se encuentran en cantidades apreciables y son

los que ejercen su acción microbicida.

El I2 penetra la pared celular bacteriana y actúa bloqueando la

unión hidrógeno en proteínas, oxida uniones sulfidrilos y

reacciona con los ácidos grasos alterando las propiedades de la

membrana lipídica.

La concentración del yodo molecular (I2) y ácido hipoiodoso

(HOI) presentes en la solución a 25°C depende del pH del medio

y de otras sustancias. Reacciona con grupos nitrogenados

básicos y grupos sulfidrilos de aminoácidos, dando lugar a N-

yododerivados y disulfuros. También se forman mono y

diyododerivados.

Según la Enciclopedia Británica, “la acción protoplasmática del

yodo puede utilizarse con fines terapéuticos para acelerar la

reabsorción de exudados. Los yoduros modifican el estado

fisicoquímico de los coloides, aumentando la dispersión y la

69
solubilidad; a esta propiedad se atribuyen algunos de sus

efectos por vía interna, como la fluidificación de secreciones

bronquiales y la reabsorción de tejidos patológicos” 41

Spangberg y col estudiaron la acción tóxica y el efecto

antimicrobiano de algunas soluciones irrigadoras y

medicamentos usados en forma tópica en el interior de los

conductos radiculares, destacando que el yodo al 2%

desempeña una acción antimicrobiana diez veces mayor de la

necesaria para la muerte de los microorganismos estudiados.11

En la actualidad, una variedad de agentes antimicrobianos han

sido probados por su habilidad en erradicar microorganismos

hidróxido de calcio resistentes de los conductos radiculares y

túbulos dentinarios, incluyendo al paramonoclorofenol

alcanforado, combinaciones de esteroides y agentes

antibacterianos e irrigantes como IKI, clorhexidina e hipoclorito.

Dichos estudios in vitro mostraron que los componentes

fenólicos IKI y clorhexidina pueden matar E. faecalis en los

túbulos dentinarios más efectivamente que el hidróxido de

calcio.4 Por otro lado, Santander reafirma lo dicho por Ingle: “Si

todos los factores son considerados, es evidente que el

antiséptico intracanalicular más eficaz e inocuo,

70
independientemente de su forma de aplicación es el yodo yoduro

de potasio en concentración del 2%.”14

De acuerdo a un estudio in vitro realizado en el cual los valores

antibacteriales y ausencia de toxicidad fueron combinados para

conformar un índice de biocompatibilidad, el yodo yoduro

potásico ocupó el primer lugar, seguido por el eugenol, EDTA,

NaOCl, formocresol, cresatín y el paramonoclorofenol

alcanforado.14, 23

CUADRO 02. EFECTO GERMICIDA DE DISTINTOS FÁRMACOS


14
SEGÚN SU CAPACIDAD DE FORMAR VAPORES.

EFECTOS GERMICIDAS DE FÁRMACOS


MEDICAMENTO INHIBICIÓN (EN MM)
Yodoyoduro de potasio (5%) 37
Yodoyoduro de potasio (2%) 29
Formocresol 82
Fenol alcanforado 0
Paramonoclorofenol alcanforado 0
Agua destilada 0

Cada cifra representó la media de 10 experimentos, donde se

observa que el fenol alcanforado y el paramonoclorofenol

alcanforado parecen ser muy poco activos cuando se utilizan de

esta forma.14

71
Como ya se mencionó, muchos medicamentos, tales como el

fenol, soluciones yodadas, formocresol y otros antibióticos han

sido usados para desinfectar los conductos radiculares. Lo que

aún es cuestionable es si suficiente cantidad de los

medicamentos comúnmente usados pueden penetrar dentro de

los túbulos para lograr la desinfección.19

Biral, en condiciones clínicas simuladas, observó que la solución

de yodo al 2% presentaba acción antiséptica a una distancia de

3 mm del foramen apical. En pruebas de acción indirecta, por

medio de vapores, el mencionado producto reveló eficaz acción

antiséptica mientras que el paramonoclorfenol, tanto en

concentraciones bajas como en las elevadas, se mostró efectivo

contra los microorganismos estudiados, con excepción de P.

aeruginosa.11

Siqueira y col demostraron en un estudio in vitro que la pasta

Ca(OH) – PMCP alcanforado eliminó efectivamente los

microorganismos en los túbulos luego de un periodo de una hora

de exposición, excepto por el E. faecalis que requirió un día de

exposición, en contraste con la pasta de Ca(OH) que resultó ser

inefectiva contra E. faecalis y F. nucleatum luego de una semana

de exposición concluyendo así el incremento del poder

antibacterial del Ca(OH) con la adición del PCMP alcanforado.28

Por ello, si bien, el Ca(OH)2 ha mostrado su efectividad al

eliminar una gran cantidad de microorganismos cuando es

72
usado por 7 días,42 el E. faecalis, es capaz de sobrevivir en los

túbulos dentinarios a pesar de largos periodos de terapia de


3,4,28,29
dicho medicamento, incluso superficialmente mientras

que el yoduro de potasio yodado sí mostró mayor efectividad,3,43

siendo capaz de matar bacterias hidróxido de calcio resistentes.4

Fuss y col en un estudio demostraron que el yoduro de potasio

yodado aumenta significativamente las propiedades

antibacterianas del hidróxido de calcio en los túbulos dentinarios,

reduciendo la viabilidad bacteriana en dichos túbulos a una

profundidad de 200 – 500 µm.44

Por otro lado, Ingle señala que en experimentos en animales

para evaluar las propiedades de irritación inicial de los tejidos, se

observan variaciones notables en la respuesta inflamatoria a los

antisépticos usados. El menos tóxico resultó ser el yodo yoduro

de potasio y los más tóxicos el formocresol y el

paramonoclorofenol alcanforado, seguidos muy de cerca por el

Cresatín.14

La acción terapéutica del yodo en las distinta fórmulas

presentadas, ha sido corroborada experimental y clínicamente

desde hace muchos años por diversos autores y en definitiva

para la práctica endodóncica la clínica resulta importante.41 Pero

pese a sus cualidades, ha sido relegado muchas veces debido a

su fuerte olor y a la marcada pigmentación de las coronas

dentales, la cual ha sido corregida con el aislamiento coronario.23

73
CUADRO 03. ACTIVIDAD DE DISTINTOS IRRIGANTES CONTRA
7
MICROORGANISMOS.

ACTIVIDAD DE DISTINTOS IRRIGANTES CONTRA MICROORGANISMOS

HIPOCLORITO DE CLORHEXIDINA YODURO DE POTASIO


HIDRÓXIDO DE CALCIO
SODIO (NaOCl) (CHX) YODADO (IKI)

Enterococcus

3 minutos al 7 días de 0.5% de 24 horas de exposición 24 horas para reducir el cultivo


0.0005% de recubrimiento resultó de yodo (2%) en yoduro de bacterias debajo del límite de
solución de en una eliminación de potasio (4%) resultó detección, pero su actividad es
especies en papel completa de restos de en la eliminación inhibida por el barrillo
de filtro. dentina a una completa de los restos de dentinario, hidroxiapatita y suero
profundidad de 950 dentina a una de albúmina
15 minutos al µm. profundidad de 700 µm
0.25% de 7 días para rendir conductos
solución en restos 24 horas para reducir 1 hora para reducir las libres de bacterias, pero mostró
de dentina el cultivo de bacterias bacterias por debajo del poca efectividad contra
contaminada. debajo del límite de 0.1% y 24 horas para Enterococcus faecalis, resultando
detección. reducir debajo del límite en la eliminación completa en los
30 minutos al de detección; sin restos de dentina a una
0.5% de solución embargo, la pérdida de profundidad de 950 µm
y 2 minutos al actividad se nota a través
5.25% de del barillo dentinario. 7 días de Ca(OH)2 en 0.5% de
solución en recubrimiento de acetato de
contacto directo clorhexidina resulta en una
con la bacteria completa eliminación de los
restos de dentina a una
profundidad total de 950 µm.

Actinomycess

1 minuto al 1% No hay crecimiento


de solución. directamente después
de la aplicación de
10 segundos al clorhexidina al 2% en
0.5% de solución pacientes con necrosis
en contacto pulpar y/o granuloma
directo con la apical
bacteria.
3 días para que la
clorhexidina al 2%
elimine Actinomyces
israelii de todas las
muestras de dentina
infectada.

74
Candida

1 hora al 1% o 1 hora en la solución 30 segundos para las Después de 1 hora y 24 horas


5% sobre dentina al 0.12% sobre dentina soluciones al 2% y al 4% solo una pequeña reducción de
radicular con radicular con barro para eliminar todo tipo de UFC fue observada.
barro dentinario. dentinario. células en el cultivo. Las
soluciones del 0.2% y
30 segundos para 10 segundos en la 0.4% fueron tan efectivos
soluciones de solución del 0.5% en como 0.5% de
0.5% para matar contacto directo con la clorhexidina.
todas las células bacteria.
en cultivos. .
5 minutos en la
solución del 0.5% para
matar todo tipo de
hongos y 1 hora en
solución al 0.05%.
Resultó ser menos
efectivo que IKI y
NaOCl.

Distribución sistémica de sustancias desde la dentina y la pulpa

El índice de riego sanguíneo en la pulpa es moderadamente alto

y ésta se clasifica en un lugar intermedio entre los órganos de

perfusión baja, como los músculos esqueléticos, y los órganos

de perfusión alta, como el cerebro o el riñón.

Dado que el líquido dentinario se encuentra comunicado con el

tejido vascular de la pulpa, en teoría las sustancias colocadas

directamente sobre la pulpa o la dentina se difunden hacia el

líquido intersticial y son absorbidas rápidamente por el torrente

circulatorio o los linfáticos. La prueba en vivo indica que ambas

situaciones pueden presentarse.

Numerosos autores han demostrado que las sustancias

colocadas sobre la dentina o en las cámaras pulpares son

absorbidas en forma sistémica. Entre ellas se incluyen cortisona,

75
tetraciclina, plomo y formocresol con marcas radioactivas. Esta

comunicación directa de la dentina con la circulación general fue

comprobada por Pashley, quien demostró que el yoduro y la

albúmina radioactivos colocados en la dentina de perros

produjeron niveles determinables en sangre de estas sustancias.

La aparición sistémica del yodo fue medida en sitios de

pulpotomía en monos tanto antes como después del tratamiento

de los muñones pulpares con formocresol.

Por ello se señala que la relación de los dientes con los sistemas

linfáticos y cardiovasculares es íntima y absoluta, lo cual es

necesario recordar ya que la colocación de materiales sobre la

dentina o la pulpa puede dar como resultado la distribución

amplia de ese material o medicamento.18

76
2.2.3. DIAGNÓSTICO MICROBIOLÓGICO DE LAS INFECCIONES

PULPARES

El propósito más importante del tratamiento endodóncico es

eliminar bacterias del canal y de los dientes con pulpas

necróticas,22 dañando en el menor grado posible los tejidos

encargados de la reparación que son los responsables del éxito o

del fracaso,15 por lo que es necesario incluir un control de la

eficacia del tratamiento.22,38

Ya en 1901, Onderdonk sostenía que “debe hacerse el cultivo de la

punta absorbente en que se lleva la medicación y de otra tomada

después de la desinfección completa del conducto, una vez que

éste se considere en condiciones de ser obturado” 38

Existen dos razones clínicas para hacer cultivos de materiales de

conductos radiculares:

a. Precisar el estado bacteriológico del sistema de canales

radiculares antes de la obturación, y con ello evaluar la eficacia

de las técnicas de desbridamiento.

b. Aislar la flora microbiana para hacer estudios de

antibioticogramas y perfil de resistencia microbiana,

especialmente en caso de infecciones persistentes.14

77
La esterilidad de un conducto no puede determinarse por la vista y

el olfato. No todos los microorganismos producen olores

desagradables y sólo unos pocos son cromógenos.38

La complejidad de la anatomía interna del conducto radicular y las

limitaciones en la obtención de muestras de dicho conducto,

compuestos por coágulos y restos histológicos, contribuyen a los

errores de muestreo y la incertidumbre de detectar toda la flora del

conducto. Además, no hay un solo medio de cultivo que permita

niveles de proliferación óptima de todos los microorganismos

aislados en los conductos.14 Los caldos que facilitan la proliferación

de algunas bacterias anulan la de otras.

Los buenos resultados sin la práctica de cultivos se han atribuido a

algunos de los factores siguientes:

1. Empleo de técnicas asépticas

2. Eliminación mecánica, química o de ambos tipos, de casi todos

los restos tisulares y microorganismos.

3. Empleo de medicamentos.

4. Obturación completa del espacio pulpar, con “sepultamiento”

de los microorganismos y tejidos residuales.14

Un grupo holandés justifica el hecho de no hacer las técnicas

bacteriológicas de cultivo en caso de no haber zonas radiolúcidas

periapicales señalando que en esos casos identificaron cultivos

positivos sólo en 28% de las muestras.14

78
También debe destacarse que en un porcentaje elevado de casos,

aunque muy variable entre las comprobaciones de distintos

autores, conductos con pulpa necrótica y zonas periapicales

patológicas a la visión radiográfica, dieron repetidamente cultivos

negativos. Ostrander y Crowley (1948) obtuvieron cultivos

negativos en el 38% de 199 dientes con complicaciones

periapicales. Además, la flora microbiana de los dientes cerrados

es apreciablemente menor que la de dientes cuyos conductos

están comunicados con el medio bucal.15

2.2.3.1. INDICACIONES PARA LA RECOGIDA DE MUESTRA

- Síntomas persistentes (fracaso del tratamiento)

- Población de riesgo (tratamiento inmunosupresor, riesgo

elevado de endocarditis, prótesis valvulares múltiples)

- Control de la técnica (control de la esterilidad) 22

2.2.3.2. RECOGIDA DE MUESTRA

Se realiza tras la esterilización con un desinfectante tópico

(clorhexidina o derivado yodado) del campo operatorio.

El área de entrada del canal dental no debe tratarse con ningún

antimicrobiano. La muestra se recoge mediante puntas de papel

absorbente que se introducen en el canal; una vez extraídas, se

introducen en un medio de transporte para enviarse al

laboratorio de microbiología en el menor tiempo posible. 20

79
2.2.3.3. MÉTODOS PARA EL CONTROL MICROBIOLÓGICO DE CONDUCTOS

RADICULARES

Se describen dos métodos para investigar la presencia de

gérmenes en el conducto radicular:

ƒ Frotis

Técnica sencilla (extensión sobre portaobjetos, fijación,

coloración por el método de Gram u otros y examen al

microscopio) y de resultado prácticamente inmediato, aunque

inseguro. No exige elementos de laboratorio que no están

dentro de las posibilidades de un consultorio.45

ƒ Cultivo

De resultado mediato, posee gran precisión para determinar

el estado bacteriológico del conducto.15,38 El cultivo es el

desarrollo de los microorganismos en el laboratorio, en un

medio propicio de nutrición semejante al que encuentran en

sus ambientes naturales.

Debido a la compleja flora microbiana del conducto radicular,

sólo será útil un adecuado medio de cultivo, lo cual deberá

favorecer el desarrollo, tanto de las bacterias aerobias como

de las anaerobias. Permitirá también la proliferación de las

levaduras y neutralizará in vitro la posible acción bacteriana

residual de antibióticos y antisépticos empleados en la

esterilización de los conductos radiculares y que pudieran

80
venir acompañados con la muestra tomada del conducto,

impidiendo el desarrollo de los gérmenes en el cultivo.

Hoy en día, los medios de cultivo más utilizados en

endodoncia son los caldos de glucosa-ascitis, cerebro-

corazón, soya tripticasa y tioglicolato, con el agregado

frecuente de 0,1 a 0,3% agar, para enriquecer el medio y

estimular el crecimiento bacteriano, así como de glucosa para

favorecer el desarrollo de los microorganismos acidógenos.

Para la identificación de levaduras en el conducto radicular

(Candida albicans) se utiliza especialmente como medio de

cultivo el de Sabouraud, que suprime el desarrollo

bacteriano.15

Se cultiva las muestras del canal dental utilizando medios

para cultivos de microorganismos anaerobios y facultativos y

que indiquen las proporciones relativas de las cepas

presentes.

Es una técnica exacta, se debe realizar evitando cualquier

contaminación durante la recogida de muestras clínicas para

interpretar posteriormente los resultados; las muestras

contaminadas con saliva o instrumentos mal esterilizados

pueden conducir a decisiones erróneas en el tratamiento.22

81
2.2.3.4. TÉCNICA DE CULTIVO E IDENTIFICACIÓN

El objetivo del tratamiento endodóncico es eliminar bacterias de

los canales radiculares de los dientes afectados y permitir

además resolver y reparar cualquier tejido perirradicular

dañado.

Muchos autores no suelen realizar este procedimiento porque

las actuales técnicas estándar han probado ser eficaces para

eliminar la mayoría de estos microorganismos.

Es posible realizar una prueba para comprobar la esterilidad

del cultivo. La muestra, colocada en un medio que soporte un

gran crecimiento de microorganismos, sólo requiere un análisis

de crecimiento-no crecimiento para ver si el operador mantiene

una técnica aséptica en el campo o en la operación. El proceso

actual de muestreo del cultivo microbiano debe practicarse

adecuadamente para que los resultados sean fiables.46

Toma de cultivos

Para poder analizar los microorganismos de la pulpa necrótica

y del periápice se requiere la obtención de muestras, un medio

de transporte anaeróbico y técnicas de cultivo para anaerobios

estrictos.39

La toma de muestra del canal radicular requiere el uso de

técnicas que permitan el crecimiento de la bacteria facultativa y

de la anaeróbica. El clínico debe tener presente que la

82
contaminación con la flora oral normal como consecuencia del

contacto con la saliva o debido a una manipulación poco

cuidadosa puede dar lugar a resultados de cultivo falsos.46

Una técnica con buena asepsia en el proceso de recogida es

un requisito absolutamente necesario.15, 18


Lo siguiente en

importancia es llevar la muestra a un laboratorio microbiológico

donde poder realizar el proceso con la menor demora posible.

Debe utilizarse un medio de transporte que mantenga la

viabilidad de todos los organismos de la muestra. En realidad,

la técnica de muestreo no es difícil de llevar a cabo. Es

importante recordar que la preparación inicial de la zona

determina en gran medida el éxito o el fracaso de una buena

muestra de cultivo.

En los dientes de los que se toma una muestra, es esencial

aislarlos en primer lugar y desinfectar la corona y el dique de

goma.46 El conducto radicular no debe haber sido tratado con

agentes antimicrobianos antes de la toma y debe estar aislado

para evitar una contaminación con saliva que conduciría a

resultados erróneos.39

Se debe retirar y desechar cualquier empaste. También hay

que tener cuidado de eliminar cualquier exceso de

desinfectante que pueda contaminar la muestra bacteriológica.

83
Las sustancias químicas antibacterianas no deben colocarse

en el canal radicular antes de tomar la muestra.

Una vez expuesto el canal, se inserta una punta absorbente

estéril en el interior del mismo y se deja ahí para que absorba

toda la exudación posible, si la hubiera.

Si el canal está seco, es posible humedecerlo utilizando una

punta de papel húmedo y estéril. Se extrae esa punta,

utilizando para ello una pinza estéril para algodón, y se coloca

lo antes posible en un medio o solución transportadora.46 Si se

emplean varias puntas absorbentes, son las dos primeras las

de mayor valor para lograr el crecimiento bacteriano.45

La rapidez de la manipulación y el cuidado en la elección del

medio aumentan las posibilidades de aislar los

microorganismos más problemáticos.

Una vez recogida la muestra, es importante llevarla al

laboratorio de microbiología lo antes posible con el fin de

asegurar el éxito en los resultados del cultivo. La mayoría de

los odontólogos no tienen contacto directo con un laboratorio

adecuado, por lo que deben utilizar los medios apropiados y los

procedimientos de incubación necesarios para conseguir el

crecimiento de los organismos anaeróbicos y facultativos.46

Se acepta que si el conducto está estéril tiene que estarlo

también el periápice; este concepto enunciado por Hedman en

84
1938 y citado por Rickless, ratifica la importancia que tiene la

certidumbre de esta comprobación bacteriológica. 32

2.2.3.5. MEDIOS DE CULTIVO

Existen varios medios para cultivar el material de conductos

radiculares.38

Los medios de cultivo son sustancias nutritivas que permiten

obtener in vitro, el desarrollo de los microorganismos, que debe

aportar los nutrientes adecuados para el microorganismo que

se desea cultivar en él, conteniendo por lo general

aminoácidos, nucleótidos, factores de crecimiento, glucosa y

ciertos iones inorgánicos.39

Clasificación

- Naturales (leche, suero, papa)

- Artificiales, como todos los que se preparan en el laboratorio,

pudiendo ser líquido, semisólido y sólido. Dentro de estos

últimos tenemos los medios comunes (caldo, agar caldo o

agar nutritivo) y los enriquecidos si se les agrega suero o

sangre (agar sangre o agar suero) para microorganismos

con más requerimientos nutritivos.39

Los medios que utilizan habitualmente la mayoría de los

laboratorios permiten el crecimiento de la bacteria que suele

85
quedar identificada como causante de las infecciones

endondóncicas.46

El medio más usado es probablemente el caldo infusión

cerebro-corazón, por ser muy favorable para el desarrollo de

los microorganismos del conducto radicular. El agregado de 0,1

a 0,2 por ciento de agar, enriquece el medio de cultivo y

estimula el desarrollo de los microorganismos anaerobios.38

• El agar sangre (sanguíneo) enriquecido para apoyar el

crecimiento de las especias Brucella puede servir como

excelente medio para los microorganismos facultativos y para

los anaeróbicos dañinos.



El caldo de carne permite igualmente el crecimiento de

ambos. Los medios que se acomodan a las necesidades

específicas de los organismos, como la levadura, el moho o las

especies Mycobacterium, pueden obtenerse con facilidad y

pueden utilizarse siguiendo las instrucciones del microbiólogo.

Es fácil conseguir la identificación específica de una amplia

gama de microorganismos orales.46

• El agar Schaedler, es un medio de aislamiento particularmente

útil para la detección de bacterias anaerobias estrictas y

facultativas. La presencia de factores de crecimiento como el

extracto de levadura, la hemina y la vitamina K3 y la adición de

sangre de cordero permite el crecimiento incluso de las

especies más exigentes. El agente reductor (L-cistina) y la

86
elevada concentración de dextrosa en el medio favorecen el

crecimiento de especies anaerobias.47

• El caldo de thioglicolato, (suplementado con hemina y

vitamina K1) permite el crecimiento de microorganismos

anaerobios, microaerófilos y aerobios, por lo que es apropiado

como medio de enriquecimiento directo de muestras clínicas.

Disminuye el potencial de óxido-reducción del medio, hecho

que le hace especialmente adecuado para el crecimiento de

bacterias anaerobias.

2.2.3.6. MEDIOS DE TRANSPORTE

Sirven para trasladar el material obtenido de un paciente y

brindan las condiciones adecuadas para mantener la viabilidad

de la especie que se sospecha que causa la lesión. Se trata de

medios de gran utilidad, sobre todo si se desea aislar

gérmenes anaerobios.

2.2.3.7. TÉCNICA PARA DETERMINAR EL NÚMERO Y LA VIABILIDAD DE LAS

CÉLULAS

Existen distintas técnicas, siendo una de ellas el recuento de

elementos viables. Para ello hay que cultivar las células y partir

de la base de que cada bacteria es capaz de originar una

colonia. Esto requiere un tiempo mínimo de 24 horas, para

87
confirmar el número de elementos viables expresados como

unidades formadoras de colonias (UFC).

Los microorganismos no sólo necesitan nutrientes para crecer;

también dependen de la temperatura, el pH, la presión

osmótica y las condiciones atmosféricas adecuadas. Además

influyen otros factores como la humedad, la desecación y las

radiaciones.39

La siembra o cultivo debe hacerse durante cada sesión y,

después de permanecer en la incubadora o estufa 48 a 72

horas, será examinado o “leído” macroscópicamente. Si

pasado dicho tiempo el líquido aparece transparente y diáfano,

se interpreta como negativo; si por el contrario, ha quedado

turbio o con masas blanquecinas, es positivo.32 El medio de

cultivo deberá incubarse durante un periodo mínimo de 48

horas en una estufa automática de cultivo regulada a 37°C.

Grossman comprobó sobre aproximadamente 1000 casos, que

el 2% de los cultivos que se mantenían negativos a las 48

horas de incubados, resultaban positivos después de 10 días

de permanecer en la estufa, por lo tanto, aconseja prolongar la

incubación por un periodo mayor de 2 días.15

Dos cultivos negativos se interpretan como comprobación de la

esterilidad del conducto. Para algunos autores y cuando se

trate de urgencia bastará con un solo cultivo negativo.32

88
Causas que invalidan el resultado del control microbiológico

- El medio de cultivo puede no ser el adecuado para el

desarrollo de las distintas variedades de gérmenes

existentes en el conducto radicular.

- Los restos de antisépticos remanentes en el conducto

radicular pueden interferir el crecimiento microbiano en el

medio de cultivo, acusando un control negativo erróneo.

- La cantidad de material infectado tomada del conducto

radicular puede no ser suficiente para provocar el

crecimiento bacteriano en el medio de cultivo.

- Cuando el cultivo se realiza con material obtenido de

conductos de dientes multiradiculares, si se pretende

individualizar la raíz o las raíces infectadas.

- El material infectado se toma generalmente de la parte

accesible del conducto radicular. Resulta problemático hasta

el momento actual controlar por medio de los cultivos, la

infección de la zona periapical y de la profundidad de la

dentina.

- El control microbiológico negativo informa con respecto a la

acción de las drogas utilizadas en el tratamiento sobre

microorganismos sensibles, pero no asegura el éxito a

distancia de la intervención, ni permite prejuzgar la evolución

de los tejidos periapicales posterior a la obturación de los

conductos.15

89
2.3. DEFINICIÓN DE TÉRMINOS BÁSICOS

• Antisepsia. Conjunto de procedimientos destinados a destruir o

inhibir los microorganismos hallados en los tejidos vivos.

• Antiséptico. Sustancia química que actúa matando o inhibiendo

microorganismos, pudiendo usarse sobre piel y mucosas.

• Asepsia. Medida encaminada para impedir el acceso de

microorganismos al campo de trabajo.

• Agente antimicrobiano. Agente físico, mecánico o químico

producido en forma natural o sintética en el laboratorio. Puede ser

antibacteriano, antifúngico o antivírico en cuanto a su espectro de

acción y en cuanto a su actividad, bacteriostático o bactericida.

• Bactericida. Sustancia capaz de eliminar a las bacterias, ejerciendo

una acción letal e irreversible sobre el mismo.

• Bacteriostático. Sustancia que inhibe el crecimiento de las

bacterias, sin causar su muerte, permitiendo que las propias

defensas del huésped pueden eliminar a las bacterias.

• Necrosis pulpar. Muerte pulpar a consecuencia de una inflamación

aguda o crónica. Puede ser asintomática (necrosis aséptica) o

sintomática (gangrena pulpar) en la que hay una invasión bacteriana,

producción de supuración y dolor.

• Sepsis. Es la presencia (entrada) de gérmenes patógenos en el

organismo, capaces o no de producir enfermedad, dependiendo de

su virulencia, la puerta de entrada, la cantidad y el estado defensivo

del organismo.

90
2.4. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

2.4.1. ÁREA PROBLEMA

La necrosis pulpar es un cuadro irreversible caracterizado por la

destrucción del tejido pulpar, siendo uno de los orígenes la caries

dental, cuyas toxinas bacterianas presentes son las causantes de

dicha destrucción,15 la misma que va a ser directamente

proporcional a los niveles de endotoxinas, lo que muchas veces

produce una alta reproducción celular y síntesis de colágeno por

parte de la pulpa como mecanismo de defensa.

Además, está comprobado que las bacterias y sus productos

juegan un papel fundamental en el desarrollo de las patologías

pulpares y periapicales, por ese motivo es fundamental lograr la

asepsia de los conductos radiculares antes de su obturación y

mantenerla después de la conclusión del tratamiento.15,30

El tratamiento de conductos es el indicado en estos casos, ya que

tiene como uno de sus principales objetivos la desinfección, el

lograr la completa remoción del tejido pulpar y de los

microorganismos que se encuentren dentro de la cámara pulpar y

en los conductos radiculares,33,45 otorgando de esta manera un sitio

apropiado para su posterior obturación y reparación de los tejidos

circundantes.48

91
Asimismo, es vital y primordial mantener la cadena aséptica,

teniendo cuidado en la limpieza en todo momento pues los

microorganismos contenidos en la saliva podrían penetrar de la

cámara pulpar al periápice provocando alguna reacción

indeseable.21

El tejido pulpar que no ha sido adecuadamente removido por la

instrumentación y/o por los agentes irrigantes puede dar lugar a

que las proteínas se descompongan formando productos tóxicos,

filtrándose en los tejidos periapicales y originando una infección.49

Para tal fin es que se realiza la preparación biomecánica de los

canales radiculares, siempre teniendo en cuenta que todas las

fases del tratamiento: instrumentación, desinfección y obturación

están correlacionadas y cualquier descuido en una de ellas podría

provocar el fracaso del tratamiento endodóncico; aunque ciertos

autores como Auerbach (1953), Stewart (1955), Vella (1955)

consideran la preparación biomecánica como la fase más

importante del tratamiento de conducto. Asimismo, Leonardo

(1991), en base a innumerables trabajos científicos comparte la

idea del papel relevante de la preparación biomecánica de los

canales radiculares señalando que “lo más importante de la terapia

de los canales radiculares es lo que se retira del interior y no lo

que en él se pone" 14

92
La preparación biomecánica es realizada por medio de la

instrumentación manual y/o mecánica del canal radicular utilizando

limas en conjunto con soluciones irrigadoras debido a las

irregularidades morfológicas dentro del conducto; la limpieza

mecánica por sí sola no elimina todos los remanentes de tejido de

paredes radiculares.33

Leonardo señala también que “la preparación biomecánica

desempeña un importante papel en la desinfección, pero no pone

al conducto radicular en condiciones de ser obturado. Reduce

parcial y temporalmente la cantidad de microorganismos, debiendo

ser complementado por la acción coadyuvante de agentes

antimicrobianos para actuar sobre las bacterias que escaparon a la

acción mecánica y que se encuentran alojadas en zonas

inaccesibles a dicha acción”.11

Diversos estudios han demostrado que la instrumentación

mecánica no es suficiente para la desinfección de los conductos

radiculares; soluciones irrigantes son requeridas para eliminar los

microorganismos, existiendo una variedad de soluciones químicas

para este propósito.34

Dichos antisépticos son medicamentos inespecíficos, con

propiedades tensoactivas, histolíticas o descalcificantes14 que

actúan sobre todas las especies bacterianas por desnaturalización

de las proteínas celulares. La selección de dichos medicamentos

93
han sido basados en la efectividad, toxicidad, potencial de

inflamación y difusibilidad.8 Todos ellos poseen al mismo tiempo

una acción tóxica inespecífica sobre las células vitales y una

posible acción inmunógena, ya que son haptenos que pueden

transformarse en inmunógenos completos al combinarse con las

lipoproteínas del mismo organismo.

Los antimicrobianos comunes atacan las células en diversas

formas, pero muchas de ellas no se conocen a fondo. Sin embargo,

se sabe que en grandes concentraciones, muchos preparados

tienen efecto destructivo directo en las bacterias al grado de

producir, entre otras cosas, desnaturalización de las proteínas del

microorganismo.

En la endodoncia moderna el empleo indiscriminado de

antimicrobianos tóxicos poco a poco ha sido sustituido por una

técnica de enfoque más biológico. De ese modo, hay que

considerar la presencia de microorganismos residuales que quedan

en el sistema de conductos radiculares como una complicación

indeseable y un problema importante que altera los resultados del

tratamiento. De este modo, queda a criterio del clínico escoger

entre los diversos antisépticos, aquel que permitirá el tratamiento

sin retrasos en la cicatrización.14

94
2.4.2. DELIMITACIÓN DEL PROBLEMA

Diversos trabajos de investigación están encaminados a comprobar

la eficacia, la mayoría de veces in vitro, de los distintos productos

usados en endodoncia contra la gran variedad de microorganismos

patógenos, sobre todo anaeróbicos, que frecuentemente se

encuentran alojados en los conductos radiculares necróticos y

zonas adyacentes, y que probablemente sean los responsables del

dolor y agudización; por lo tanto, el alto índice del dolor referido por

los especialistas que oscila entre 3,17% hasta más del 50% en

algunos casos se erradicaría considerablemente de existir una

solución para irrigar con mayor capacidad bactericida y más

biocompatibilidad.21

Si bien Siqueira (2002) enfatiza la importancia del uso de irrigantes

antimicrobianos durante la preparación quimiomecánica sea cual

sea el tipo de solución o la técnica utilizada, es necesario conocer

los beneficios y las desventajas de los más usados.14, 50

El irrigante ideal o combinación de irrigantes elimina las bacterias,

disuelve tejido necrótico tisular, lubrica el canal, remueve el barrillo

dentinario y no irrita los tejidos tisulares.34 Además debe ser un

antiséptico de amplio espectro y eficaz, que cause mínimo o nulo

daño a los tejidos.14

95
El compuesto universalmente más usado como solución irrigadora

endodóncica es el hipoclorito de sodio, en soluciones del 1 al 5%.37, 51

Se ha venido utilizando durante décadas en endodoncia, es una


21
solución fuertemente alcalina, con un pH de 12,09, de gran

poder bactericida y capaz de disolver tejidos orgánicos vitales y

necróticos.37 Produce reacción exotérmica, y en contacto con los

tejidos libera energía calórica.21

Sin embargo, es cáustico e irritante para los tejidos periapicales,

por tal motivo debe tenerse precaución ya que su paso forzado

más allá del ápice radicular puede provocar fenómenos tóxicos

severos, lesiones tisulares y sintomatología sumamente aguda y

dolorosa, además de tumefacción.21,33,37

Debido a estos posibles accidentes, algunos profesionales

prefieren utilizar soluciones menos comprometedoras, aunque sean

menos eficaces en pulpa necrótica.21

Existen otras sustancias como la solución de yoduro de potasio

yodado (IKI) la cual posee un potente efecto antibacteriano, capaz

de eliminar microorganismos resistentes a otros antisépticos,4

mínima toxicidad y poca capacidad de irritar tejidos de forma que

su efecto antimicrobiano persiste en concentraciones que no son

citotóxicas,14 con un buen grado de penetración según señalan

algunos estudios.

96
Señalado por algunos autores como irritante, algunos estudios

realizados evaluaron su efecto sobre la irritación tisular

(permeabilidad capilar) en comparación con otros medicamentos

como el PCMF alcanforado, fenol alcanforado, cresatina y

formocresol, concluyendo que el menos tóxico fue el yoduro de

potasio yodado. Además, ciertos autores mencionan que poseen

gran acción en un corto periodo de tiempo y una amplia difusión

debido a su actuación por vapores.

2.4.3. FORMULACIÓN DEL PROBLEMA

¿Cuál es la capacidad antibacteriana del yoduro de potasio yodado

al 2% como solución irrigante del conducto radicular en pacientes

con piezas necróticas en comparación con el hipoclorito de sodio al

2,5%?

2.5. JUSTIFICACIÓN

Ha sido objeto de gran disputa la necesidad de que la solución

irrigadora utilizada en endodoncia posea cualidades antimicrobianas

notables. Los investigadores han demostrado que el empleo de una

solución de lavado o la simple solución salina, en combinación con

un desbridamiento mecánico adecuado, basta para eliminar o

aminorar el número de microorganismos en el espacio pulpar. El

efecto del lavado puede mejorar si se agrega una sustancia

tensioactiva o una sustancia proteolítica al líquido.

97
El efecto antimicrobiano podría ser deseable en algunas

circunstancias, pero la toxicidad de una solución también debe

considerarse por el notable daño a los tejidos que causa. Todo

agente antimicrobiano puede ser tóxico y ello anularía las ventajas

buscadas de contar con un tratamiento químico más “agresivo”

contra los microorganismos.

Es sabido que el hipoclorito de sodio, tanto por su actividad

antibacteriana como por ser un disolvente del tejido vital y necrótico,

es considerado tradicionalmente como el irrigante de elección para

el tratamiento de conductos desvitalizados.

Pero desde el momento en el que las consideraciones biológicas

tomaron cada vez mayor relieve, el potencial citotóxico e irritante

para los tejidos perirradiculares del hipoclorito de sodio (siendo más

irritante cuanto mayor es su concentración) llevó a disminuir

manifiestamente su concentración para atenuar sus efectos

adversos, y al depender estrechamente de la concentración, su

actividad disolvente y bactericida disminuye significativamente, en

razón que en el proceso desvitalizante y necrosante del tejido pulpar

las bacterias anaerobias, facultativas y estrictas desempeñan un rol

significativo, por lo que se considera que la actividad antibacteriana

sobre ellas adquiere particular importancia.

Por otro lado, existen reportes de accidentes en el tratamiento

endodóncico luego del uso terapéutico del hipoclorito de sodio.

Barbas reporta un caso de una mujer de 52 años con hemorragia

98
cerebral fatal que probablemente fue el resultado de la estimulación

del quinto nervio por NaOCl y dolor antes del tratamiento

endodóncico.

Esto hace deseable el empleo de otro irrigante igualmente efectivo

para el control bacteriológico pero sin presentar los efectos adversos

del hipoclorito de sodio con relación a su toxicidad, o en el mejor de

los casos, escoger una solución irrigadora que logre una tarea

específica y no utilizarla rutinariamente en todos los tratamientos.

La presente investigación se orienta precisamente a la búsqueda de

alternativas de un irrigante de canales radiculares desvitalizados que

proporcionen una marcada efectividad bactericida pero a su vez que

presente mínimos efectos adversos.

Se considera que el empleo de IKI supone de cierto respaldo que

hace que sea de interés particular, estableciendo su gran utilidad en

conjunción con la terapia endodóncica.

Son muy pocas las investigaciones realizadas sobre el yoduro de

potasio yodado como irrigante, las cuales algunas se contradicen

acerca del nivel de toxicidad y de tinción que presenta. Lo que sí es

cierto es que varias de ellas manifiestan que posee una gran acción

antibacteriana en corto tiempo, pudiendo reemplazar a las

soluciones actualmente utilizadas, debido a la efectividad

presentada.

99
2.6. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN

2.6.1. GENERAL

Determinar la capacidad antibacteriana del yoduro de potasio

yodado al 2% (IKI) como solución antiséptica del conducto radicular

en el tratamiento de piezas necróticas en comparación con el

hipoclorito de sodio al 2,5 %.

2.6.2. ESPECÍFICOS

• Cuantificar el número de UFC/ml de los conductos de piezas

necróticas monoradiculares antes del inicio del tratamiento (pre

irrigación).

• Cuantificar el número de UFC/ml de los conductos de piezas

necróticas monoradiculares luego de la primera sesión (post

irrigación), donde se utilizará yoduro de potasio yodado al 2% o

hipoclorito de sodio al 2,5% como solución antiséptica, o suero

fisiológico (grupo control)

• Cuantificar el número de UFC/ml de los conductos de piezas

necróticas monoradiculares 72 horas después del tratamiento

(pre obturación), luego del uso de yoduro de potasio yodado al

2% o hipoclorito de sodio al 2,5% como solución antiséptica, o

suero fisiológico (grupo control)

• Comparar los números de UFC/ml producidos antes (pre

irrigación) y después de la primera sesión (post irrigación),

100
luego del uso del yoduro de potasio yodado al 2%, hipoclorito de

sodio al 2,5% o suero fisiológico (grupo control)

• Comparar los números de UFC/ml producidos después de la

primera sesión (post irrigación) y después de 72 horas (pre

obturación), luego del uso del yoduro de potasio yodado al 2%,

hipoclorito de sodio al 2,5% o suero fisiológico.

• Comparar los números de UFC/ml producidos antes de la

primera sesión (pre irrigación) y después de 72 horas (pre

obturación), luego del uso del yoduro de potasio yodado al 2%,

hipoclorito de sodio al 2,5% o suero fisiológico.

• Comparar los números de UFC/ml producidos luego de la

primera sesión (post irrigación) entre las distintas soluciones

irrigantes utilizadas como el suero fisiológico, yoduro de potasio

yodado al 2% e hipoclorito de sodio al 2,5%.

• Comparar los números de UFC/ml producidos a las 72 horas

después (pre obturación) entre las distintas soluciones irrigantes

utilizadas como el suero fisiológico, yoduro de potasio yodado al

2% e hipoclorito de sodio al 2,5%.

2.7. HIPÓTESIS

“El yoduro de potasio yodado al 2% como solución antiséptica del

conducto radicular en el tratamiento de piezas necróticas presenta

una capacidad antibacteriana muy alta en comparación al

hipoclorito de sodio al 2,5%”

101
III. MATERIALES Y MÉTODOS

3.1. TIPO DE ESTUDIO

El presente estudio es de corte longitudinal y experimental.

Es longitudinal, porque las variables en estudio serán observadas a

lo largo de un tiempo determinado.

Es experimental debido a que los grupos en estudio, elegidos al

azar, por muestreo y conveniencia, se someterán a la acción de

una variable para determinar su efecto, en conjunto con la

presencia de un grupo control.

3.2. UNIVERSO

3.2.1. POBLACIÓN

La población estará compuesta por pacientes que presentan piezas

monoradiculares de un conducto con diagnóstico de necrosis

pulpar y con ausencia de reacción periapical radiográfica, previa

calibración.

3.2.2. MUESTRA

Se seleccionarán según criterios de conveniencia 30 pacientes con

piezas monoradiculares de un conducto con diagnóstico clínico y

radiográfico de necrosis pulpar, clínicamente establecido por

ausencia de síntomas y de respuesta a los test de vitalidad pulpar,

y radiográficamente con ausencia de reacción periapical.

102
3.2.3. DISTRIBUCIÓN DE LA MUESTRA

La muestra estará distribuida en tres grupos: 10 pacientes en cuyo

tratamiento de endodoncia sólo se irrigará con solución salina al

9% como grupo control (grupo A), 10 pacientes en los que se

irrigará con hipoclorito de sodio al 2,5% (grupo B) y otros 10

pacientes en los cuales se irrigará con la solución antiséptica de

yoduro de potasio yodado al 2% (grupo C). Esta asignación se

realizará de una forma no probabilística: el primer paciente será

asignado al grupo A, el segundo paciente al grupo B, el tercer

paciente al grupo C, y así sucesivamente hasta completar la

muestra.

3.2.4. TIPO DE MUESTREO

El tipo de muestra será no probabilístico e intencionado (por

conveniencia)

3.2.5. UNIDAD DE MUESTREO

Constituido por 30 canales radiculares de piezas dentarias de

pacientes con diagnóstico de necrosis pulpar.

3.2.6. UNIDAD DE ANÁLISIS

La unidad de análisis estará formada por las placas conteniendo

agar schaedler, sembrados con las muestras pre irrigación, post

irrigación y pre obturación de 30 canales radiculares de piezas

dentarias de los pacientes con diagnóstico de necrosis pulpar.

103
3.2.7. CRITERIOS DE INCLUSIÓN

- Pacientes en buen estado general, según datos obtenidos y

registrados en la historia clínica del paciente.

- Pacientes que presentan al menos una pieza dentaria para

tratamiento endodóncico registrados en la historia.

- Piezas dentarias monoradiculares de un solo conducto

- Piezas dentarias con necrosis pulpar y con ausencia de reacción

periapical radiográfica.

- Piezas dentarias que presenten conductos radiculares, rectos y

permeables.

- Pacientes que no hayan recibido terapia antibiótica previa.

3.2.8. CRITERIOS DE EXCLUSIÓN

- Pacientes que hayan recibido terapia antibiótica previa al

tratamiento.

- Pacientes que manifiesten presentar reacciones alérgicas.

- Piezas dentarias con evidencia clínica de lesiones periodontales.

- Piezas dentarias con evidente reacción periapical radiográfica.

104
3.3. OPERACIONALIZACIÓN DE VARIABLES

VARIABLES DEFINICIÓN INDICADORES ESCALA CATEGORÍA


CONCEPTUAL

Sustancias
antisépticas ƒ Suero fisiológico
utilizadas como
Soluciones agentes de Compuestos Nominal ƒ IKI 2%
irrigantes limpieza y químicos
ƒ NaOCl 2,5%
desinfectantes
de las paredes
del conducto
radicular.

Microorganismos
Bacterias presentes en el
del conducto Crecimiento Nominal UFC
conducto bacteriano
radicular radicular de
piezas
necróticas

Capacidad de
destrucción de
bacterias Recuento
Capacidad presentes en el
bacteriano en ▪ 0 UFC/ml = Muy alta
antibacteriana conducto
de las radicular de etapas de ▪ Menos de 103 UFC/ml = Alta
soluciones piezas
necróticas Ordinal ▪ 103–105 UFC/ml = Moderada
irrigantes ƒ1= Pre irrigación
según etapas usando una
ƒ2= Post irrigación
▪ 106–108 UFC/ml = Baja
de solución
irrigante en ƒ3= Pre obturación ▪ Más de 108 UFC/ml= Muy baja
tratamiento
distintas etapas (72 horas)
en las que se
realizarán la
toma de
muestras.

105
3.4. MÉTODOS, TÉCNICA E INSTRUMENTO DE RECOLECCIÓN DE

DATOS

3.4.1. RECURSOS

3.4.1.1. RECURSOS HUMANOS

- Investigador

- Odontólogo de la especialidad de Endodoncia (asesor)

- Consultora en Microbiología

- Personal auxiliar (Microbiología)

3.4.1.2. INFRAESTRUCTURA

- Clínica del Sistema de Atención Rápida (SAR) de la Facultad

de Odontología – UNMSM.

- Laboratorio de Microbiología (Facultad de Odontología –

UNMSM)

3.4.1.3. RECURSOS MATERIALES

ƒ Materiales de diagnóstico

- Películas radiográficas

- Guantes

- Mascarillas

ƒ Materiales e instrumental de inspección, anestesia,

aislamiento y desinfección

- Campos descartables

- Instrumental de inspección (espejos bucales, exploradores

dentales biactivos, curetas de dentina, pinzas porta algodón)

106
- Instrumental y material de anestesia (jeringa cárpule,

cartuchos de anestesia: lidocaína 2% con vasoconstrictor,

agujas cortas)

- Instrumental y material de aislamiento (arco de young,

portaclamp, perforador de dique, clamps superiores e inferiores

para dientes anteriores y premolares, dique de goma)

- Etanol 70%

- Algodón

ƒ Material e instrumental para la apertura, instrumentación

y toma de muestra

- Guantes quirúrgicos estériles 6½

- Pieza de mano de alta velocidad

- Fresas redondas medianas y de fisura estériles

- Limas flexofile estériles de primera serie (Dentsply Maillefer)

- Limas flexofile estériles de segunda serie (Dentsply

Maillefer)

- Limas Hedstrom estériles de primera serie (Dentsply

Maillefer)

- Puntas de papel absorbente estériles de primera serie

- Jeringas y agujas descartables de tuberculina

- Jeringas descartables de 10cc.

- Solución de yoduro de potasio yodado al 2%

- Solución de hipoclorito de sodio al 2%

- Solución salina de suero fisiológico 9%

107
- Solución tiosulfato de sodio al 5%

- Tubos con tapa rosca conteniendo tioglicolato fluido (medio

de transporte)

ƒ Material e instrumental de obturación

- Óxido de Zinc – Eugenol

- Espátulas (de cemento y portacemento)

ƒ Equipos, materiales e instrumental para procesamiento

de muestras en el laboratorio de Microbiología

- Autoclave

- Incubadora

- Medio de cultivo (agar schaedler)

- Reactivo de anaerobiosis AnaeroGen (Oxoid)

- Jarra de anaerobiosis

- Placas petri

- Tubos de ensayo

- Mechero

- Asa de siembra

- Porta asa de siembra

- Espátula de Digraslky

- Ron de quemar

- Micropipeta

ƒ Materiales de escritorio

- Fotocopias

- Plumón indeleble

108
3.4.2. PROCEDIMIENTO PARA LA RECOLECCIÓN DE MUESTRA

El presente estudio se llevó a cabo considerando un número de

piezas dentarias que cumplió determinados requisitos, siguiendo

una secuencia de procedimientos, tanto clínicos como de

laboratorio.

3.4.3. MÉTODOS E INSTRUMENTOS PARA LA RECOLECCIÓN DE DATOS

a. Pasos previos

1. Se preparó los medios de transporte y de cultivo.

b. Procedimientos clínicos (Anexos N°3, N° 4 y N° 5)

1. Selección de pacientes

Los pacientes presentaron piezas dentarias monoradiculares de

un solo conducto con diagnóstico de necrosis pulpar, el cual fue

estandarizado y determinado clínicamente por la observación de una

lesión cariosa profunda, cambio de coloración y por la falta de

respuesta a las pruebas de vitalidad pulpar (respuesta negativa)

al aire, agua fría y a la gutapercha caliente, existiendo ausencia

de lesión periapical, determinado por ausencia de una imagen

radiolúcida perirradicular en la radiografía periapical.

Aislamiento y apertura del acceso cameral:

Luego de realizar el diagnóstico se procedió a realizar el

aislamiento absoluto de la pieza dentaria con la subsiguiente

109
desinfección de la misma (corona clínica y campo quirúrgico) por

medio de la acción bactericida del etanol 70% para así evitar

falsos positivos.

Después se procedió a realizar el acceso cameral, y a

desinfectar la porción coronal de la cámara pulpar, previo

aislamiento de ésta por medio de una bolilla de algodón.

Calibración de la muestra:

- Cambio de coloración de la corona dental.

- Ausencia de respuesta a pruebas de vitalidad pulpar

(asintomática)

- Ausencia de IRL a nivel periapical.

2. Toma de primera muestra (pre irrigación)

- Se empleó 2 ml de suero fisiológico al 9% como solución

irrigadora en la cámara pulpar y en el canal radicular por

considerarla inocua para las especies bacterianas presentes.

- Se realizó un leve desbridamiento por 30 segundos con una

lima 15 para así conseguir una máxima suspensión de

bacterias en el medio.

- Luego de haber realizado este procedimiento, se insertó

puntas de papel seco y estéril dentro del conducto radicular

por 60 segundos.

- La muestra obtenida fue colocada inmediatamente dentro de

un tubo de ensayo conteniendo el medio de transporte (caldo

110
de thioglicolato) y se llevó al laboratorio para su cultivo en

medio agar schaedler (cultivo pre irrigación)

3. Preparación biomecánica

- Se realizó la preparación biomecánica con la técnica

telescópica y se irrigó con 2 ml de yoduro de potasio yodado

(IKI) al 2%, con hipoclorito de sodio (NaOCl) al 2,5% o con

suero fisiológico al 9%, según fue el paciente seleccionado,

luego del empleo de cada instrumento. El volumen total de

solución antiséptica empleado para la irrigación durante esta

fase fue de 20 ml.

- En la primera sesión se realizó la completa instrumentación

del canal radicular.

- Se instrumentó apicalmente hasta el instrumento N° 35 y el

último instrumento dependió de la longitud de trabajo y del

diámetro del conducto radicular.

- Luego de haber culminado con la instrumentación se irrigó

con 10 ml de suero fisiológico al 9% para eliminar cualquier

residuo producto de la instrumentación y del irrigante

empleado, y se secó el canal con conos de papel.

- Seguidamente se irrigó 1 ml de tiosulfato de sodio (inactivador

de compuestos halogenados, en los casos de IKI 2% y NaOCl

2,5%) dejando actuar por 3 minutos para luego irrigar con 10

111
ml de suero fisiológico a fin de eliminar restos de esta

sustancia.

4. Toma de segunda muestra (post irrigación)

- Se realizó un ligero desbridamiento de las paredes del

conducto con una lima estéril por 30 segundos, para introducir

puntas de papel estériles por 60 segundos, las cuales fueron

llevadas a otro tubo de ensayo conteniendo el medio de

transporte, para su cultivo en agar schaedler (cultivo post

irrigación)

- Se irrigó el conducto de la pieza dentaria con 10 ml de suero

fisiológico al 9% y fue secado con conos de papel para su

obturación provisional

- La siguiente sesión fue realizada transcurriendo 3 días (72

horas) durante los cuales al paciente no se le administró

ninguna terapia antibiótica.

5. Toma de tercera muestra

En la siguiente sesión se tomó la tercera muestra para lo cual se

procedió a:

- Aislamiento absoluto de la corona clínica.

- Remoción de la obturación provisional de la pieza dentaria.

- Desinfección de la corona clínica y área a trabajar.

- Evaluación del silencio clínico.

112
- Se introdujo en el conducto 10 ml de suero fisiológico 9%

para luego realizar un ligero desbridamiento de las paredes

del conducto radicular.

- Se procedió a secar con conos de papel estériles, los cuales

permanecieron en el canal por 60 segundos.

- Estos conos fueron colocados posteriormente en un tubo de

ensayo que contenía caldo de thioglicolato fluido (medio de

transporte) para ser conducidos al laboratorio.

Muestras Pre Obturación. En los casos de las piezas del grupo B

y C se procedieron de la siguiente manera:

- Aislamiento absoluto de la corona clínica.

- Remoción de la obturación provisional de la pieza dentaria.

- Desinfección de la corona clínica y área a trabajar.

- Evaluación del silencio clínico.

- Si la pieza dentaria estaba apta para la obturación, se procedió

a irrigar el conducto con 10 ml de yoduro de potasio yodado

(IKI) al 2% o hipoclorito de sodio (NaOCl) al 2,5% (según fue el

caso), se aspiró y se introdujo en el conducto 10 ml de suero

fisiológico al 9%.

- Luego se irrigó con 1 ml de tiosulfato de sodio, dejando actuar

por 3 minutos, para luego irrigar nuevamente con 10 ml de

suero fisiológico.

113
- Se realizó un ligero desbridamiento del conducto radicular para

después secarlos con conos de papel, los cuales

permanecieron en el canal por 60 segundos.

- Estos conos fueron colocados posteriormente en un tubo de

ensayo que contenía caldo de thioglicolato fluido (medio de

transporte) para ser conducidos al laboratorio.

Transporte y procesamiento de muestras (Anexo N° 6)

Se utilizó el caldo de thioglicolato fluido como medio de transporte y

el agar schaedler como medio de cultivo. Ambos medios fueron

necesarios para el transporte y crecimiento de bacterias

anaerobias.

Las muestras contenidas en el medio de transporte se trasladaron

al laboratorio de microbiología de la Facultad de Odontología de la

UNMSM, donde se sembraron a partir de diluciones de 1/100 y

1/1000 suero fisiológico en placas petri que contenían el medio de

cultivo (agar schaedler).

Las placas fueron incubadas a 37°C por 3 días (72 horas) en

condiciones de anaerobiosis. Transcurrido este tiempo de

incubación, los cultivos fueron observados para detectar la

presencia de colonias bacterianas anaeróbicas.

114
FIGURA 5. PROTOCOLO DE PROCESAMIENTO DE MUESTRAS 52,53

MUESTRA

PRE IRRIGACIÓN POST IRRIGACIÓN PRE OBTURACIÓN

TRANSPORTE
Caldo de tioglicolato fluido

SIEMBRA Agar Schaedler

INCUBACIÓN
37°C por 72 horas
en anaerobiosis

LECTURA
UFC/ml

INTERPRETACIÓN

En las placas que hubo crecimiento (cultivo positivo), se procedió a

realizar el conteo de UFC/ml. Hubo casos en que en las placas

petri de los cultivos pre irrigación no hubo crecimiento bacteriano

(cultivo negativo), esas muestras no fueron tomadas en cuenta.

Se registró el conteo obtenido y se interpretó el resultado siguiendo la

escala propuesta por Kuruvilla y Kamath54:

115
CUADRO 04. NIVEL DE EFECTIVIDAD ANTIBACTERIANA DE SOLUCIONES
54
IRRIGANTES.

0 UFC/ml Æ Efectividad muy alta


Bajo: Menos de 103 UFC/ml Æ Efectividad alta
Moderado: 103 – 105 UFC/ml Æ Efectividad moderada
Moderadamente alto: 106 – 108 UFC/ml Æ Efectividad baja
8
Alto: Más de 10 UFC/ml Æ Efectividad muy baja

3.4.4. REGISTRO DE DATOS

Para el desarrollo de esta investigación se elaboró:

ƒ Ficha de consentimiento informado del paciente

ƒ Ficha de Endodoncia – Prueba Microbiológica:

- N° de ficha. Nombres, apellidos y edad del paciente

- Pieza dentaria

- Fecha de toma de muestras (pre y post irrigación y pre obturación)

- Recuento de bacterias e interpretación

- Leyenda

3.4.5. PROCESAMIENTO PARA LA RECOLECCIÓN DE DATOS

Se llevó a cabo mediante el uso del programa SPSS versión 12. Se

elaboraron tablas y cuadros de acuerdo a los objetivos planteados.

La tabulación y el análisis estadístico de los valores obtenidos

fueron realizadas utilizando pruebas no paramétricas: Test de

Friedman, prueba de Wilcoxon, test de Kruskal Wallis y la prueba

de Mann Whitney, trabajándose todas ellas con un nivel de

confianza de 0.05.

116
IV. RESULTADOS

CUADRO 05. RECUENTO BACTERIANO DEL CONDUCTO RADICULAR (UFC/ML)


CON EL USO DEL IKI AL 2%

PACIENTE PRE IRRIGACIÓN POST IRRIGACIÓN PRE OBTURACIÓN

1 2 x 104 2320 7

2 464 x 104 20 0

3 240 x 104 65 x 102 38

4 2 x 104 1 1

5 2 x 104 1 0

6 1 x 104 0 0

7 204 x 104 10 x 102 10

8 1 x 103 11 0

9 4 x 104 0 0

10 936 x 105 260 x 102 45

El cuadro 05 muestra los recuentos de UFC/ml de microorganismos

anaerobios obtenidos de los cultivos de las muestras pre irrigación, post

irrigación y pre obturación con el uso del yoduro de potasio yodado (IKI) al

2%, en los que se aprecia que el número disminuyó notoriamente a

medida que se avanzó en el tratamiento (pre irrigación Æ post irrigación y

post irrigación Æ pre obturación), obteniendo que en 2 pacientes se

eliminó por completo en la toma post irrigación y que en 5 de 10 pacientes

se eliminó completamente en la última toma de muestra (pre obturación)

(ver Anexo N° 7)

117
CUADRO 06. RECUENTO BACTERIANO DEL CONDUCTO RADICULAR (UFC/ML)
CON EL USO DEL NAOCL 2,5%

PACIENTE PRE IRRIGACIÓN POST IRRIGACIÓN PRE OBTURACIÓN

1 2220 660 0

2 1672 520 14 x 10

3 ND 10 42 x 10

4 68 x 104 0 210 x 10

5 260 x 105 160 x 102 104 x 10

6 480 x 105 112 x 102 33 x 10

7 ND 127 x 102 240 x 10

8 576 x 105 1680 x 102 180 x 10

9 180 x 105 105 x 102 48 x 10

10 960 x 105 80 x 102 252 x 10

ND: No determinado, numerosas colonias no contables

El cuadro 06 muestra los recuentos de UFC/ml de microorganismos

anaerobios obtenidos de los cultivos de las muestras pre irrigación, post

irrigación y pre obturación con el uso del hipoclorito de sodio (NaOCl) al

2,5%, donde se observa que el número de UFC/ml disminuyó a medida

que se avanzó el tratamiento (pre irrigación Æ post irrigación y post

irrigación Æ pre obturación), obteniendo que sólo en 1 de 10 pacientes se

eliminó por completo en la toma post irrigación, y que sólo en 1 de 10

pacientes se eliminó completamente en la última toma de muestra (pre

obturación) (ver Anexo N° 8)

118
CUADRO 07. RECUENTO BACTERIANO DEL CONDUCTO RADICULAR (UFC/ML)
CON EL USO DE SUERO FISIOLÓGICO

PACIENTE PRE IRRIGACIÓN POST IRRIGACIÓN PRE OBTURACIÓN

1 9 x 104 5000 936 x 10

2 410 56 1238

3 10 x 104 10840 ND

4 5 x 103 103 ND

5 228 x 105 1116 x 102 ND

6 1440 x 105 316 x 102 ND

7 90 x 105 77 x 102 1440 x 10

8 2250 x 105 12 x 102 2452 x 10

9 2440 x 105 43 x 102 ND

10 17 x 105 200 x 102 596 x 10

ND: No determinado, numerosas colonias no contables

En el cuadro 07 se observa los recuentos de UFC/ml de microorganismos

anaerobios obtenidos de los cultivos de las muestras pre irrigación, post

irrigación y pre obturación con el uso del suero fisiológico (grupo control),

donde se aprecia que el número de UFC/ml disminuyó de la fase de pre

irrigación a post irrigación, pero de la etapa de post irrigación a pre

obturación el N° de UFC/ml aumentó en 9 de 10 pacientes. (Ver Anexo N°

9)

119
CUADRO 08. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL IKI AL 2% SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

TEST DE FRIEDMAN WILCOXON


TIEMPO Mínimo Máximo Mediana Chi P
cuadrado Pre irrigación Post irrigación Pre obturación

Pre irrigación
10000 93600000 300000 P=0.005** P=0.005**

Post irrigación 18.18 0.00*


0 65000 155 P=0.018**

Pre obturación 0 380 5

* Prueba Test de Friedman: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

** Prueba de Wilcoxon: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

120
FIGURA N° 06. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL IKI
AL 2% SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

En el cuadro 08 se observa que la mediana del número de UFC/ml en la toma

pre irrigación es de 300000 UFC/ml (10000 - 93600000 UFC/ml), en la toma

post irrigación con el uso del IKI al 2% es de 155 UFC/ml (0 - 65000 UFC/ml) y

en la toma pre obturación la mediana es de 5 UFC/ml (0 - 380 UFC/ml).

Acorde con el test de Friedman (Chi cuadrado=18.18, P=0.00), existen

diferencias significativas entre las tres medianas obtenidas del número de

UFC/ml al inicio del tratamiento (pre irrigación) y los n° de UFC/ml luego del

uso del IKI 2%, tanto en la toma post irrigación como en la toma pre obturación.

Según la prueba de Wilcoxon, se aprecia que el número de UFC/ml en el

momento de la pre obturación es menor que en el momento de la pre irrigación,

existiendo diferencia significativa (P=0.005) Además que el número de UFC/ml

en la toma pre obturación es menor significativamente (P=0.018) que en la

toma post irrigación y por último el número de UFC/ml en la toma post irrigación

es menor significativamente (P=0.005) que en la toma pre irrigación.

121
CUADRO 09. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL NAOCL AL 2,5% SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

TEST DE
FRIEDMAN WILCOXON

Mínimo Máximo Mediana Chi


TIEMPO P Pre irrigación Post irrigación Pre obturación
cuadrado

Pre irrigación P=0.007** P=0.005**


2220 1000000000 33000000
Post irrigación 0 11200000 9250 14.60 0.001* P=0.013**

Pre obturación 0 2520 760

* Prueba Test de Friedman: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

** Prueba de Wilcoxon: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

122
FIGURA N° 07. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL

NAOCL AL 2,5% SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

En el cuadro 09 se observa que la mediana del número de UFC/ml en la pre

irrigación es de 33000000 UFC/ml (2220 - 1000000000 UFC/ml), en la toma

post irrigación con el uso del NaOCl al 2,5% es de 9250 UFC/ml (0 - 11200000

UFC/ml) y en la pre obturación de 760 UFC/ml (0 - 2520 UFC/ml).

Acorde con el test de Friedman (Chi cuadrado=14.60, P=0.001) existe

diferencia significativa entre las tres medianas obtenidas del número de UFC/ml

al inicio del tratamiento (pre irrigación), y los n° de UFC/ml luego del uso del

NaOCl 2,5% tanto en la toma post irrigación como en la toma pre obturación.

Según la prueba de Wilcoxon, la mediana del número de UFC/ml en la pre

obturación es menor que en el momento de la pre irrigación, existiendo

diferencia significativa (P=0.005). Asimismo, el número de UFC/ml en la toma

pre obturación es menor significativamente (P=0.013) que en la toma post

irrigación, y este último es menor significativamente (P=0.007) que el número

de UFC/ml de la toma pre irrigación.

123
CUADRO 10. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL SUERO FISIOLÓGICO SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

TEST DE
FRIEDMAN WILCOXON
TIEMPO Mínimo Máximo Mediana
Chi P
cuadrado Pre irrigación Post irrigación Pre obturación

Pre irrigación 4100 244000000 5350000 P=0.005**

560 111600 15000 12.2 0.002*


Post irrigación P=0.013**

Pre obturación 5960 1000000000 500046800

* Prueba test de Friedman: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

** Prueba de Wilcoxon: P < 0.05. Existen diferencias significativas.

124
FIGURA N° 08. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML CON EL USO DEL

SUERO FISIOLÓGICO SEGÚN ETAPAS DEL TRATAMIENTO

De acuerdo al cuadro 10, se observa que la mediana del número de UFC/ml en

la toma pre irrigación es de 5350000 UFC/ml (4100 - 244000000 UFC/ml), en

la toma post irrigación con el uso del suero fisiológico de 15000 UFC/ml (560 -

111600 UFC/ml) y en la pre obturación es de 500046800 UFC/ml (5960 -

1000000000 UFC/ml).

Según el test de Friedman (Chi cuadrado=12.2, P=0.002) existe diferencia

significativa entre las tres medianas obtenidas del número de UFC/ml al inicio

del tratamiento (pre irrigación), y los n° de UFC/ml luego del uso del suero

fisiológico, tanto en la toma post irrigación como en la toma pre obturación.

Asimismo, acorde con la prueba de Wilcoxon se aprecia que la mediana del

número de UFC/ml en la toma post irrigación es menor significativamente

(P=0.005) que la mediana del número de UFC/ml de la toma pre irrigación, y

menor significativamente (P=0.013) que la toma pre obturación.

125
CUADRO 11. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA PRE

IRRIGACIÓN

TEST DE KRUSKAL WALLIS


SOLUCIONES
IRRIGANTES
Mínimo Máximo Mediana
Chi cuadrado P

IKI 2% 10000 93600000 300000

NaOCl 2.5% 2220 1000000000 33000000


2.14 0.34*
Suero fisiológico 4100 244000000 5350000

* Test de Kruskal Wallis: P>0.05. No existen diferencias significativas.

FIGURA N° 09. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA PRE

IRRIGACIÓN

En el cuadro 11 se observa que la mediana del número de UFC/ml en la pre

irrigación con el grupo que usó IKI 2% es de 300000 UFC/ml (10000 -

93600000 UFC/ml), con el grupo que usó NaOCl 2,5% 33000000 UFC/ml

(2220 - 1000000000 UFC/ml) y en el grupo del suero fisiológico, 5350000

UFC/ml (4100 - 244000000 UFC/ml). De acuerdo con el test de Kruskal Wallis

(P=0.34) no se encontró diferencias significativas entre los valores de las

medianas de los números de UFC/ml antes de iniciar el tratamiento (pre

irrigación) en los tres grupos de soluciones irrigantes.

126
CUADRO 12. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA
POST IRRIGACIÓN

SOLUCIONES TEST DE KRUSKAL WALLIS


Mínimo Máximo Mediana
IRRIGANTES
Chi cuadrado P
IKI 2% 0 65000 155

NaOCl 2.5% 0 11200000 9250 4.26 0.11*

Suero fisiológico 560 111600 15000

* Test de Kruskal Wallis: P>0.05. No existen diferencias significativas.

FIGURA N° 10. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA


POST IRRIGACIÓN

En el cuadro 12 se observa que la mediana del número de UFC/ml en la etapa

post irrigación en el grupo que utilizó como solución irrigante IKI 2% es de 155

UFC/ml (0 - 65000 UFC/ml), con el grupo que usó NaOCl 2,5% resultó 9250

UFC/ml (0 - 11200000 UFC/ml) y en el grupo que usó suero fisiológico 15000

UFC/ml (560 - 111600 UFC/ml).

Acorde con el test de Kruskal Wallis (P=0.11) no se encontró diferencias

significativas entre los valores de las medianas de los números de UFC/ml en

la etapa post irrigación entre los tres grupos de soluciones irrigantes.

127
CUADRO 13. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA PRE OBTURACIÓN

TEST DE
KRUSKAL WALLIS MANN WHITNEY
SOLUCIÓN
Mínimo Máximo Mediana
IRRIGANTE Chi IKI NaOCl Suero
P 2% 2.5% fisiológico
cuadrado

IKI 2% 0 380 5 P=0.001** P=0.000**

NaOCl 2.5% 0 2520 760 12.2 0.002* P=0.000**


Suero fisiológico 5960 1000000000 500046800

* Test de Kruskal Wallis: P<0.05. Existen diferencias significativas.

** Prueba de Mann Whitney: P<0.05. Existen diferencias significativas.

128
FIGURA N° 11. COMPARACIÓN DE MEDIANAS DEL N° DE UFC/ML EN LA ETAPA
PRE OBTURACIÓN

En el cuadro 13 se observa que la mediana del número de UFC/ml en la etapa

pre obturación en el grupo que utilizó como solución irrigante IKI 2% es de 5

UFC/ml (0 - 380 UFC/ml), en el grupo del NaOCl 2,5% es 760 UFC/ml (0 -

2520 UFC/ml) y en el grupo que usó suero fisiológico 500046800 UFC/ml

(5960 - 1000000000 UFC/ml).

Acorde con el test de Kruskal Wallis (Chi cuadrado=12,2, P=0.002) se encontró

diferencias significativas entre los valores de las medianas de los números de

UFC/ml en la etapa pre obturación entre los tres grupos de soluciones irrigantes.

Según la prueba de Mann Whitney, en la etapa pre obturación la mediana del

número de UFC/ml del grupo que utilizó IKI 2% es menor que en el grupo que

utilizó NaOCl 2,5% existiendo diferencia significativa (P=0.001), También se

encontró que el grupo que usó IKI 2% es menor significativamente que el que

utilizó suero fisiológico (P=0.000), y que el grupo que empleó NaOCl 2,5%

también es menor significativamente que el que utilizó suero fisiológico

(P=0.000).

129
CUADRO 14. NIVEL BASAL BACTERIANO DE TRES GRUPOS DE SOLUCIONES IRRIGANTES

NIVEL BASAL BACTERIANO

SOLUCIONES IRRIGANTES Muy baja Baja Moderado Total

n % n % n % n %

IKI 2% 0 0% 4 13.3% 6 20.0% 10 33.3%

NaOCl 2.5% 2 6.7% 6 20.0% 2 6.7% 10 33.3%

Suero fisiológico 3 10.0% 5 16.7% 2 6.7% 10 33.3%

Total 5 16.7% 15 50.0% 10 33.3% 30 100.0%

* Chi cuadrado: 5.01. P=0.02 < 0.05. Existe relación estadística.

130
FIGURA N° 12. NIVEL BASAL BACTERIANO DE TRES GRUPOS DE SOLUCIONES
IRRIGANTES

De acuerdo al cuadro 14 se observa que del total de pacientes (30) se

encontró que del nivel basal bacteriano perteneciente al ítem efectividad muy

baja: 3 (10%) corresponden al grupo seleccionado para ser irrigado con suero

fisiológico y 2 (6.7%) pertenecen al grupo del NaOCl 2,5%; con efectividad

baja 6 pacientes (20%) corresponden al NaOCl 2,5%, 5 (16,7%) al suero

fisiológico y 4 pacientes (13,3%) al grupo que posteriormente fue irrigado con

IKI 2%; mientras que los pertenecientes a efectividad moderada 6 de ellos

(20%) pertenecen al grupo del IKI 2%, 2 (6,7%) al NaOCl 2,5% y los otros 2

(6,7%) al grupo del suero fisiológico.

131
CUADRO 15. CAPACIDAD ANTIBACTERIANA EN LA ETAPA POST INSTRUMENTACIÓN DE TRES SOLUCIONES IRRIGANTES

CAPACIDAD ANTIBACTERIANA EN EL POST INSTRUMENTACIÓN

Baja Moderado Alta Muy alta Total


SOLUCIONES IRRIGANTES
n % n % n % n % n %

IKI 2% 0 0% 4 13.3% 4 13.3% 2 6.7% 10 33.3%

NaOCl 2.5% 1 3.3% 7 23.3% 1 3.3% 1 3.3% 10 33.3%

Suero fisiológico 0 0% 9 30.0% 1 3.3% 0 0% 10 33.3%

Total 1 3.3% 20 66.7% 6 20.0% 3 10.0% 30 100.0%

* Chi cuadrado: 4.74. P = 0.03 < 0.05. Existe relación estadística.


** Test de Fischer: IKI 2% vs NaOCl 2.5% P=0.01 < 0.05. Existe relación estadística.
*** Test de Fischer: IKI 2% vs Suero fisiológico P=0.02 < 0.05. Existe relación estadística.

132
FIGURA N° 13. CAPACIDAD ANTIBACTERIANA EN LA ETAPA POST INSTRUMENTACIÓN
DE TRES SOLUCIONES IRRIGANTES

En el cuadro 15 se halló que del total de pacientes (30) se encontró durante la

etapa post irrigación con efectividad baja: 1 paciente (3.3%) correspondiente

al NaOCl 2,5%; con efectividad moderada 9 pacientes (30%)

correspondientes al suero fisiológico, 7 de ellos (23%) al NaOCl 2.5% y 4

pacientes (13,3%) al IKI 2%; con efectividad alta, 4 (13.3%) pertenecientes al

IKI 2%, 1 paciente (3,3%) al NaOCl 2,5% y 1 (3,3%) al suero fisiológico;

mientras que con efectividad muy alta 2 pacientes (6.7%) correspondientes al

IKI 2% y 1 (3,3%) al NaOCl 2,5%.

Además se encontró que la diferencia hallada entre los valores de la capacidad

antibacteriana en la etapa de post irrigación de las tres soluciones utilizadas

presenta relación estadística (Chi cuadrado = 4.74, P=0.03)

Asimismo, acorde con el Test de Fischer, se observa que existe diferencia

significativa entre los valores del IKI 2% y del NaOCl 2,5% (P=0.01) y entre los

valores del IKI 2% y el suero fisiológico (P=0.02)

133
CUADRO 16. CAPACIDAD ANTIBACTERIANA EN LA ETAPA PRE OBTURACIÓN DE TRES SOLUCIONES IRRIGANTES

EFECTIVIDAD DE LA CAPACIDAD BACTERIANA EN LA PRE


OBTURACIÓN
SOLUCIONES Total
IRRIGANTES Muy baja Moderada Alta Muy alta

n % n % n % n % n %

IKI 2% 0 0% 0 0% 6 20.0% 4 13.3% 10 33.3%

NaOCl 2.5% 0 0% 6 20.0% 3 10.0% 1 3.3% 10 33.3%

Suero fisiológico 5 16.7% 5 16.7% 0 0% 0 0% 10 33.3%

Total 5 16.7% 11 36.7% 9 30.0% 5 16.7% 30 100.0%

* Chi cuadrado: 26.83. P = 0.0000 < 0.05. Existe relación estadística.


** Test de Fischer: IKI 2% vs NaOCl 2.5% P=0.001 < 0.05. Existe relación estadística.
*** Test de Fischer: IKI 2% vs Suero fisiológico P=0.0045 < 0.05. Existe relación estadística.

134
FIGURA N° 14. CAPACIDAD ANTIBACTERIANA EN LA ETAPA PRE OBTURACIÓN DE TRES
SOLUCIONES IRRIGANTES

En el cuadro 16 se halló que del total de pacientes (30) pertenecen a

efectividad muy baja 5 pacientes (16,7%) irrigados con suero fisiológico; con

efectividad moderada, 5 (16,7%) corresponden al suero fisiológico y 6 (20%)

al NaOCl 2.5%; con efectividad alta 6 pacientes (20%) pertenecen al IKI 2% y

3 (10%) al NaOCl 2,5%; y con efectividad muy alta 4 (13.3%) corresponden al

IKI 2% y 1 (3,3%) al NaOCl 2,5%.

Además se encontró que la diferencia hallada entre los valores de la capacidad

antibacteriana en la etapa de pre obturación de las tres soluciones utilizadas

presenta relación estadística (Chi cuadrado = 26.83, P=0.00)

Asimismo, acorde con el Test de Fischer, se observa que existe diferencia

significativa entre los valores del IKI 2% y del NaOCl 2,5% (P=0.001) y entre

los valores del IKI 2% y el suero fisiológico (P=0.0045)

135
V. DISCUSIÓN

La cámara pulpar y los conductos radiculares de dientes no vitales no

tratados se llenan con remanentes de pulpa necrótica y líquido tisular, cuya

eliminación es esencial para el éxito del tratamiento de endodoncia. Si bien

la instrumentación del conducto radicular constituye el método primario para

su limpieza, la acción complementaria de sustancias químicas es

imprescindible para la eliminación de la microflora presente en aquellos

conductos contaminados, a fin de lograr aumentar las posibilidades de éxito

en el tratamiento endodóncico. 14,31

Acorde con Tello1, las muestras preoperatorias, previo a la preparación

quimiomecánica, obtuvieron los mayores niveles de contaminación, similar al

presente estudio donde el número de UFC/ml promedio fue de 5350000,

demostrándose que en piezas con pulpas necróticas, la mayor parte de los


8,14
microorganismos infectantes eran anaerobios, siendo el Enterococcus

faecalis la especie más comúnmente hallada en casos de fracaso en el

tratamiento de endodoncia.4, 9, 26

Por otro lado, en concordancia con los resultados obtenidos referente al

grupo control donde se halló una capacidad antibacteriana moderada del

suero fisiológico al finalizar la preparación biomecánica y capacidad

antibacteriana moderada y baja a las 72 horas del tratamiento, Pappen y

col30, demostraron, in vitro, que la instrumentación mecánica por sí sola no

es capaz de tornar estéril el sistema de conductos radiculares, reduciendo la

infección bacteriana en apenas 50%, reforzando la necesidad del uso de una

136
solución irrigadora con acción antimicrobiana, similar a Tello1, quien

evidenció también que el agua destilada tuvo menor efecto en la disminución

del número de UFC/ml de Enterococcus faecalis con respecto al hipoclorito

de sodio (NaOCl) al 1% y al yoduro de potasio yodado (IKI) al 2% (p>0,05).

El IKI es considerado un agente antimicrobiano efectivo en la terapia

endodóncica con baja irritación tisular4, 8, 14. En este estudio se obtuvo que la

solución IKI al 2% presentó una capacidad antibacteriana alta (p=0,00) a las

72 horas del tratamiento en conductos radiculares necróticos, mientras que

se obtuvo una capacidad antibacteriana entre moderada y alta (p=0,03) al

finalizar la preparación biomecánica.

Ese resultado es similar a los obtenidos en otras investigaciones. Tello1,

halló que tanto el NaOCl como el IKI fueron capaces de disminuir el número

de UFC/m de E. faecalis, siendo el más efectivo el NaOCl al 1% + IKI al 2%

durante 15 minutos (95%). Ørstavik y col9, comprobaron que el IKI resultó

ser más potente que el NaOCl y la clorhexidina, además de ser capaz de

penetrar los túbulos dentinarios para eliminar S. sanguis a una profundidad

mayor de 1000 µm dentro de un tiempo de 5 minutos, resultado que

concuerda con el presente trabajo donde se halló una mayor efectividad del

IKI al 2% versus el NaOCl al 2,5% (P=0,01) y que el suero fisiológico

(P=0,02)

Baker y col3, demostraron que a las 24 horas, el Betadine Scrub y el IKI

arrojaron 90% de muestras estériles en la eliminación del Enterococcus

faecalis, el Betadine sólo un 10% y el Ca(OH)2 fracasó, mientras que el IKI

fue el único agente eficaz, con muy alta probabilidad de eliminar E. faecalis

137
en 15 minutos, con un tiempo de contacto corto, lo que corresponde al

tiempo clínico del contacto de un irrigante endodóncico, lo cual también

respalda lo hallado en esta investigación, donde se observa una variación

del 99,95% al término de la preparación biomecánica, y una efectividad del

100% a las 72 horas, aunque ningún efecto residual del yodo contenido

podría ser confirmado3.

En lo que respecta a la mayor efectividad antibacteriana del IKI con respecto

al Ca(OH)2, muchos estudios han validado dicha información. Sirén

comprobó que mientras el Ca(OH)2 era incapaz de matar el Enterococcus

faecalis en dentina, el IKI fue el agente más efectivo logrando la desinfección

en una profundidad de 700µm en un día, mayor que la clorhexidina y las

combinaciones de Ca(OH)2 con clorhexidina e IKI respectivamente que

mostraron actividad antibacteriana poco más de 200 µm4. Resultado también

comprobado por Peciuliene y col, donde en el grupo medicado con Ca(OH)2

se detectó un 82,5% de crecimiento bacteriano, mientras que en el grupo del

IKI, con irrigación por 5 minutos, todas las muestras excepto una (2,5%)

fueron negativos; y por Safavi, quien halló que el IKI logró una desinfección

efectiva eliminando Streptococcus faecium de los túbulos dentinarios

infectados en 10 minutos en contraste con el Ca(OH)2, al cual le tomó 24

horas.10

Sin embargo, difiere de lo hallado por Gencoglu y col8 donde el IKI resultó

ser efectivo sólo contra F. nucletaum y P. gingivalis, mientras que el

Ca(OH)2, el paraclorofenol alcanforado y el Cresophene fueron efectivos

contra ellos y contra el S. mutans y el Peptoestreptococcus anaerobius.

138
Asimismo, también contrasta con lo encontrado por Basson y col6, quienes

hallaron que la solución de clorhexidina fue el único desinfectante capaz de

eliminar al Actinomyces israelii de todas las muestras, mientras que el 25%

de especies tratadas con IKI y 50% con Ca(OH)2 todavía tenían dichas

bacterias viables luego del tratamiento, concluyendo su superioridad; y con

lo hallado por Calderón y col2, quienes en un estudio in vitro hallaron que el

IKI mostró una actividad antibacteriana moderada contra la especie

Fusobacterium nucleatum, microorganismo anaerobio más frecuentemente

aislado en piezas con pulpas necróticas20, por debajo de la clorhexidina, que

en sus diferentes concentraciones (4%, 2% y 1%) presentó una actividad

antimicrobiana elevada.

Si bien estos resultados difieren con los anteriores, debe tenerse en cuenta

que el IKI puede ser inhibido con gran efectividad por la dentina, matriz de

dentina y por las células microbianas muertas.5

139
VI. CONCLUSIONES

De acuerdo a los resultados del presente trabajo se concluye que:

1. El uso del IKI 2% disminuyó significativamente el número de UFC/ml con

respecto a la irrigación con el NaOCl al 2,5% (P=0,01) y con respecto a la

irrigación con suero fisiológico (P=0,02) luego de la preparación

quimiomecánica, demostrando ser el irrigante más efectivo en la

eliminación de microorganismos anaerobios presentes en conductos de

piezas necróticas al finalizar la primera sesión.

2. El uso del IKI 2% disminuyó significativamente el número de UFC/ml con

respecto a la irrigación con el NaOCl al 2,5% (P=0,01) y con respecto a la

irrigación con suero fisiológico (P=0,0045) 72 horas después de la primera

sesión, mostrando una mejor capacidad antibacteriana como solución

antiséptica en conductos de piezas necróticas.

3. El IKI al 2% demostró una alta capacidad antibacteriana disminuyendo las

UFC/ml de los conductos radiculares de piezas necróticas después de la

primera sesión (post irrigación) obteniendo una reducción significativa

(P=0.005) en comparación a la muestra pre irrigación, así como a las 72

horas después del tratamiento (pre obturación) con una reducción

significativa con respecto a la muestra post irrigación (P=0.018) y a la

muestra pre irrigación (P=0.005) por lo que se demuestra su efectividad

como solución antiséptica, con un posible efecto residual.

4. El NaOCl al 2,5% demostró una capacidad antibacteriana moderada al

disminuir las UFC/ml de los conductos radiculares de piezas necróticas

140
después de la primera sesión (post irrigación) con una reducción

significativa (P=0.007) con respecto a la muestra pre irrigación, así como a

las 72 horas después del tratamiento (pre obturación) con una reducción

significativa en comparación a la muestra post instrumentación (P=0.013) y

a la muestra pre irrigación (P=0.005) concluyendo así su efectividad como

solución antiséptica.

5. El suero fisiológico (grupo control) demostró una capacidad antibacteriana

moderada al disminuir las UFC/ml de los conductos radiculares de piezas

necróticas después de la primera sesión (post irrigación) (P=0,005), mas

presentó una capacidad antibacteriana muy baja, con un aumento

significativo de UFC/ml a las 72 horas después del tratamiento con

respecto a la muestra post irrigación (P=0,013), por lo que se concluye que

el suero fisiológico logra la elminación parcial de los microorganismos por

su función de arrastre mecánico, pero con un efecto nulo como solución

antiséptica.

141
VII. RECOMENDACIONES

• Se sugiere el realizar trabajos de investigación, que comparen la

capacidad antibacteriana del yoduro de potasio yodado como irrigante

endodóncico en sus diferentes concentraciones, así como sus posibles

efectos residuales una vez finalizado el tratamiento.

• Se recomiendan estudios que investiguen el nivel de toxicidad del yoduro

de potasio yodado al ser utilizado como solución antiséptica y como

medicación intraconducto en los tratamientos de endodoncia.

• Si bien se ha comprobado la efectividad del yoduro de potasio yodado al

2% sobre el Enterococcus faecalis, se sugiere la realización de trabajos

de investigación, in vitro, que evalúen la capacidad antibacteriana del

yoduro de potasio yodado frente a otros microorganismos prevalentes

asociados a conductos necróticos con lesiones periapicales resistentes.

• Se sugiere realizar estudios que comparen, in vivo, la efectividad

antibacteriana del yoduro de potasio yodado al 2% con diversas

soluciones antisépticas como el gluconato de clorhexidina y el ácido

cítrico.

142
RESUMEN

El objetivo del presente trabajo fue determinar la capacidad antibacteriana del

yoduro de potasio yodado (IKI) al 2% como solución antiséptica del conducto

radicular en el tratamiento de piezas necróticas en comparación con el

hipoclorito de sodio al 2,5%, después de la preparación quimiomecánica y a las

72 horas posteriores a ella. Se seleccionaron 30 pacientes con piezas

monoradiculares de un conducto con diagnóstico clínico de necrosis pulpar,

ausencia de reacción periapical radiográfica y sin tratamiento antibiótico previo.

La muestra fue distribuida de forma no probabilística en tres grupos de 10

pacientes cada uno: Grupo A, IKI al 2%; Grupo B, NaOCl al 2,5% y Grupo C:

suero fisiológico. Después del acceso al canal radicular, se obtuvo la primera

muestra (pre irrigación) con conos de papel estériles y fue llevada a un medio

de transporte anaerobio (caldo thioglicolato), la segunda muestra fue tomada

inmediatamente después de la preparación quimiomecánica (post irrigación), la

cavidad fue sellada con una torunda estéril de algodón y cemento de óxido de

zinc eugenol, sin medicación alguna. Después de 72 horas se procedió a la

remoción del cemento provisional para proceder a tomar la tercera muestra

(pre obturación). Las muestras fueron sembradas en agar schaedler en medio

anaerobio por 3 días y luego se realizó el conteo de UFC/ml. Los resultados

indicaron que el IKI al 2% redujo significativamente el número de UFC/ml de

microorganismos anaerobios presentes en conductos radiculares de piezas

necróticas tanto al finalizar la preparación quimiomecánica como a las 72 horas

después de realizado el tratamiento. Asimismo se concluyó que posee una alta

capacidad antibacteriana como solución antiséptica en conductos de piezas

necróticas en comparación con el NaOCl al 2,5%.

143
ABSTRACT

The aim of this study was to determinate the capacity antibacterial of 2% Iodine

Potassium Iodide (IKI) as antiseptic solution of the root canal in the treatment of

necrotic teeth in comparison with the 2,5% Sodium Hypochlorite (NaOCl) after

chemomechanical preparation and 72 hours after it. Thirty patients with one root

canal and clinical diagnosis of pulp necrosis, absence radiographically of

periapical reaction and whitout antibiotic therapy before the treatment were

selected. The sample was assigned to three experimental groups of ten patients

everyone: in group A, root canals were irrigated with 2% IKI; in group B, with

2,5% Sodium Hypochlorite (NaOCl) and in the group C, with saline solution.

After accesing to the root canal, the first sample was obtained (pre irrigation)

with sterile paper points that were transferred to a tube containing an anaerobic

transport (thioglicolate broth), the second sample was taken immediately after

the chemomechanical preparation (post irrigation sample). A small sterile cotton

pellet was placed at the root canal entrance, and the cavity was sealed with

Zinc Oxide-eugenol cement, without any kind of medication. After seventy two

hours, the provisional sealer was removed in order to take the third sample (pre

obturation). The samples were subjected to microbiologic processing, including

anaerobic incubation on schaedler agar for three days in order to count the

number of UFC/ml. The results indicated that 2% Iodine Potassium Iodide (IKI)

reduced significantly the number of UFC/ml of anaerobic microorganisms

placed in root canals of necrotic teeth, when the chemomechanical preparation

was ended and seventy two hours after finished the treatment. In addition, it is

also concluded that it has a high capacity antibacterial as antiseptic solution in

root canals of necrotic teeths in comparison with the 2,5% Sodium Hypochlorite.

144
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soluciones de gluconato de clorhexidina al 0,12% y 2% con NaOCl al

5,25% en el tratamiento de conductos radiculares. (Tesis para optar el título

150
de Cirujano Dentista) Lima: Universidad Nacional Mayor de San Marcos;

2008.

53. Santos Enciso, A. Efectividad antibacteriana del gluconato de clorhexidina

al 0,12% y el hipoclorito de sodio al 2,5% como soluciones antisépticas del

conducto radicular. (Tesis para obtener el título de Cirujano Dentista) Lima:

Universidad Nacional Mayor de San Marcos; 2003.

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as endodontic irrigants. J Endod. 1998; 24 (7): 472-6.

151
152
ANEXO 1

UNMSM FACULTAD DE ODONTOLOGÍA

CONSENTIMIENTO INFORMADO

ESTUDIO : CAPACIDAD ANTIBACTERIANA DEL YODURO DE POTASIO YODADO


AL 2% COMO SOLUCION ANTISÉPTICA DEL CONDUCTO
RADICULAR EN PIEZAS NECRÓTICAS

INVESTIGADOR: Rosa Nadheza García Villegas


Telf. 991028803 – 5369710
______________________________________________________________________

Por el presente documento, Yo, ………………………………….……………,


identificado con DNI N°……………………..., tengo pleno conocimiento del trabajo de
investigación que está realizando la bachiller Rosa Nadheza García Villegas de la
Facultad de Odontología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y me
comprometo a participar dentro de la muestra que será evaluada en el presente estudio,
bajo mi consentimiento y sin haber sido obligado o coaccionado.

Autorizo a que el investigador, previo examen clínico y radiográfico y determinado


el diagnóstico clínico, me realice el tratamiento de endodoncia utilizando el producto
Yoduro de Potasio Yodado al 2% (IKI 2%) como solución antiséptica al momento de la
irrigación del conducto radicular. Declaro que el investigador me ha explicado en forma
clara el propósito del estudio, cómo se desarrollará y los procedimientos a seguir. A su
vez, dejo en manifiesto que he tenido la oportunidad de realizar todas las preguntas que
considere necesarias antes de aceptar mi participación.

______________________ ______________________
FIRMA DEL PARTICIPANTE FIRMA DEL INVESTIGADOR

153
ANEXO 2

N° de ficha: N° HC:

Nombres y apellidos: Teléfono:

Pieza dentaria:

I. Fecha de toma de primera muestra (pre irrigación):

II. Fecha de toma de segunda muestra (post irrigación):

III. Fecha de toma de tercera muestra (pre obturación):

IV. Solución antiséptica empleada

A. Yoduro de Potasio Yodado (IKI) al 2%

B. Hipoclorito de Sodio (NaOCl) al 2,5%

C. Suero fisiológico

V. Conteo de bacterias anaerobias presentes en el Agar Schaedler

PRE IRRIGACIÓN POST IRRIGACIÓN PRE OBTURACIÓN

Conteo Interpretación Conteo Interpretación Conteo Interpretación

Leyenda

ƒ 0 UFC/ml Æ Efectividad muy alta

ƒ Bajo: Menos de 103 UFC/ml Æ Efectividad alta

ƒ Moderado: 103 – 105 UFC/ml Æ Efectividad moderada

ƒ Moderadamente alto: 106 – 108 UFC/ml Æ Efectividad baja

ƒ Alto: Más de 108 UFC/ml Æ Efectividad muy baja

154
ANEXO 3. PROCEDIMIENTO: IRRIGACIÓN CON YODURO DE POTASIO

YODADO (IKI) AL 2%

PRIMER DÍA

1. ANESTESIA LOCAL 2. APERTURA CAMERAL

3. ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO 4. IRRIGACIÓN (SUERO FISIOLÓGICO)

5. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 20) 6. TOMA DE 1A MUESTRA


(Pre instrumentación)

155
7. PREPARACIÓN BIOMECÁNICA 8. IRRIGACIÓN CON IKI 2%
(Step back) (Durante instrumentación)

9. IRRIGACIÓN 10. APLICACIÓN DE TIOSULFATO


(Suero fisiológico) DE SODIO

11. IRRIGACIÓN 12. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 25)


(Suero fisiológico)

156
13. TOMA DE 2ª MUESTRA 14. MEDIO DE TRANSPORTE
(Post instrumentación) (Caldo tioglicolato)

15. OBTURACIÓN
PROVISIONAL

SEGUNDO DÍA (72 HORAS DESPUÉS)

1. AISLAMIENTO ABSOLUTO 2. REMOCIÓN DE OBTURACIÓN


PROVISIONAL

157
3. ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO 4. IRRIGACIÓN CON IKI 2%

5. IRRIGACIÓN 6. APLICACIÓN DE TIOSULFATO


(Suero fisiológico) DE SODIO

7. IRRIGACIÓN 8. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 35)


(Suero fisiológico)

158
9. TOMA DE 3ª MUESTRA 10. MEDIO DE TRANSPORTE
(Pre obturación) (Caldo tioglicolato)

11. OBTURACIÓN PROVISIONAL 12. MUESTRA PRE OBTURACIÓN

159
ANEXO 4. PROCEDIMIENTO: IRRIGACIÓN CON HIPOCLORITO DE
SODIO (NaOCl) al 2,5%

PRIMER DÍA

1. ANESTESIA LOCAL 2. AISLAMIENTO ABSOLUTO

3. APERTURA CAMERAL 4.ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO

5. IRRIGACIÓN (SUERO FISIOLÓGICO) 6.DEBRIDACIÓN (LIMA N° 20)

160
7. TOMA DE 1A MUESTRA 8. PREPARACIÓN BIOMECÁNICA
(Pre instrumentación) (Step back)

9. IRRIGACIÓN CON NAOCL 2,5% 10. IRRIGACIÓN


(Durante instrumentación) (Suero fisiológico)

11. APLICACIÓN DE TIOSULFATO 12. IRRIGACIÓN


DE SODIO (Suero fisiológico)

161
13. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 35) 14. TOMA DE 2ª MUESTRA
(Post instrumentación)

15. MEDIO DE TRANSPORTE 16. OBTURACIÓN PROVISIONAL


(Caldo tioglicolato)

SEGUNDO DÍA (72 HORAS DESPUÉS)

1. AISLAMIENTO ABSOLUTO 2. REMOCIÓN DE OBTURACIÓN


PROVISIONAL

162
3. ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO 4. IRRIGACIÓN CON NAOCL 2,5%

5. IRRIGACIÓN 6. APLICACIÓN DE TIOSULFATO


(Suero fisiológico) DE SODIO

7. IRRIGACIÓN 8. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 35)


(Suero fisiológico)

163
9. TOMA DE 3ª MUESTRA 10. MEDIO DE TRANSPORTE
(Pre obturación) (Caldo tioglicolato)

11. OBTURACIÓN PROVISIONAL 12. MUESTRA PRE OBTURACIÓN

164
ANEXO 5. PROCEDIMIENTO: IRRIGACIÓN CON SUERO FISIOLÓGICO
(GRUPO CONTROL)

PRIMER DÍA

1. ANESTESIA LOCAL 2. AISLAMIENTO ABSOLUTO

3. APERTURA CAMERAL 4.ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO

5. IRRIGACIÓN (SUERO FISIOLÓGICO) 6.DEBRIDACIÓN (LIMA N° 20)

165
7. TOMA DE 1A MUESTRA 8. MEDIO DE TRANSPORTE
(Pre instrumentación) (Caldo tioglicolato)

9. PREPARACIÓN BIOMECÁNICA 10. IRRIGACIÓN


(Step back) (Suero fisiológico)

11. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 35) 12. TOMA DE 2ª MUESTRA


(Post instrumentación)

166
13. MEDIO DE TRANSPORTE 14. OBTURACIÓN PROVISIONAL
(Caldo tioglicolato)

SEGUNDO DÍA (72 HORAS DESPUÉS)

1. AISLAMIENTO ABSOLUTO 2. REMOCIÓN DE OBTURACIÓN


PROVISIONAL

3. ASEPSIA DEL CAMPO OPERATORIO 4. IRRIGACIÓN


(Suero fisiológico)

167
6. DEBRIDACIÓN (LIMA N° 25) 7. TOMA DE 3ª MUESTRA
(Pre obturación)

7. MEDIO DE TRANSPORTE 8. OBTURACIÓN PROVISIONAL


(Caldo tioglicolato)

8. MUESTRAS PRE OBTURACIÓN

168
ANEXO 6. PROCESO EN EL LABORATORIO

1. MUESTRAS OBTENIDAS 2. TUBOS DE ENSAYO

3. PLACA PETRI: AGAR SCHAEDLER 4. REACTIVO DE ANAEROBIOSIS

5. OBTENCIÓN DE LA MUESTRA 6. DILUCIÓN DE LA MUESTRA

169
7. SUSPENSIÓN DE LA MUESTRA 8. SIEMBRA DE LA MUESTRA

9. DISEMINACIÓN DE LA MUESTRA 10. INCUBACIÓN: JARRAS DE


CON ESPÁTULA DE DIGRALSKY ANAEROBIOSIS (72 HORAS)

170
ANEXO 7. RECUENTO DE UFC/ml – YODURO DE POTASIO YODADO (IKI)
AL 2%

MUESTRA A: PRE INSTRUMENTACIÓN MUESTRA B: POST INSTRUMENTACIÓN

204 x 104 UFC/ml 10 x 102 UFC/ml

MUESTRA C: PRE OBTURACIÓN (72 HORAS DESPUÉS)

10 UFC/ml

171
ANEXO 8. RECUENTO DE UFC/ml – HIPOCLORITO DE ODIO (NaOCl) AL
2,5%

MUESTRA A: PRE INSTRUMENTACIÓN MUESTRA B: POST INSTRUMENTACIÓN

260 x 105 UFC/ml 160 x 102 UFC/ml

MUESTRA C: PRE OBTURACIÓN (72 HORAS DESPUÉS)

1040 UFC/ml

172
ANEXO 9. RECUENTO DE UFC/ml – SUERO FISIOLÓGICO (Grupo Control)

MUESTRA A: PRE INSTRUMENTACIÓN MUESTRA B: POST INSTRUMENTACIÓN

2280 x 104 UFC/ml 1116 x 102 UFC/ml

MUESTRA C: PRE OBTURACIÓN (72 HORAS DESPUÉS)

ND

ND: No determinado, numerosas colonias no contables

173

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