Las vías de recursos en el proceso civil

©Pedro Pablo
Hernández

Editor:
Lennys Tejada
Betancourt

Corrección y estilo:
Luisa Hernández

Diseño de portada:
Rafael Emilio Genao

Diagramación:
Francisco Cabrera

Evaluación del contenido:

Carmen Rosa Martínez

Evaluación pedagógica:
Cristobaliza Zaiz

Primera Edición:
Mayo de 2018

Al cuidado de Ediciones UAPA.

ISBN: 978-9945-580-63-1

Impreso en los talleres de Reproducciones UAPA

Santiago de los Caballeros, Rep. Dom.

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electroóptico, por fotocopia o cualquier otro medio existente o que pueda surgir en el
futuro, sin el permiso previo, por escrito de la Universidad Abierta Para Adultos, UAPA.
EL RECURSO DE TERCERÍA
Orientaciones de la Unidad III
En la unidad I y II, tuvimos la oportunidad de ver la sentencia y su clasificación,
así como también los principios generales de las vías recursivas: recursos
ordinarios y extraordinarios, así como también los efectos que producen unas vías
y otras. Los dos recursos anteriores oposición y apelación, son recursos ordinarios,
ahora veremos la tercería que es un recurso extraordinario.

En esta unidad encontrarás las competencias que debes alcanzar en la misma, el

esquema de contenido, el desarrollo de la unidad, un resumen, actividades y
ejercicios de autoevaluación para que evalúe tu propio aprendizaje. Es importante
concentrarse bien en el estudio de los aspectos relativos a los efectos del recurso de
tercería así como también quienes están legitimados para interponer dicho recurso
y los aspectos relativos a la ejecución de la sentencia objeto de tercería, y
finalmente los recursos que pueden interponerse contra dicha sentencia.

Competencias Unidad III

1-Aplica el recurso de tercería en las asesorías profesionales que brinda a sus
clientes en los casos en que estos han sido afectados por una sentencia en las que
ellos no han sido parte.

2- Valora el recurso de tercería como garantía constitucional del debido proceso en

la representación de sus clientes ante los tribunales civiles y comerciales.

3-Redacta los actos e instancias fundamentales para ejercer de manera efectiva el

recurso de tercería en la representación de sus clientes ante los tribunales civiles y
comerciales.

Esquema de contenido de la Unidad III

1-Definifición del recurso de tercería.
2-Característica de los recursos extraordinarios.
3-Utilidad del recurso de tercería.
4-Naturaleza jurídica del recurso de tercería. 5-
Legitimación activa.
6-Legitimación pasiva
7-Condiciones generales para incoar el recurso.
8-Quienes pueden interponer un recurso de tercería
9-La representación
10-Diferencia entre tercería y otros recursos.
11-Plazo para interponer el recurso y competencia del tribunal.
12-El efecto suspensivo en la tercería
13-Decisiones impugnables por el recurso de tercería 14-
Procedimiento del recurso de tercería.
15-Medidas de instrucción en el recurso de tercería.
16-Efecto suspensivo del recurso tercería.
17-Efectos de la sentencia
18-El recurso de tercería ante la jurisdicción inmobiliaria.
19-Recurso de tercería en materia de amparo.
20-Ssuspensión de la ejecución de la sent encia en el curso de la tercería.
21-Prohibición de la suspensión en materia de desalojo de inmuebles.
Las vías de recursos en el proceso civil

1-Definifición del recurso de tercería.

Por principio general, cuando una parte ha sido lesionada por una sentencia, puede
impugnarla por las vías establecidas por el legislador. En principio solo quien ha
sido parte en un proceso está legitimado, para interponer un recurso en contra de
esa sentencia que le causa agravios, pero el legislador ha querido proteger a
aquellas personas que la sentencia le ha causado algún agravio y que aun que no
figuraron en la instancia ni fueron representados, puedan atacar esa sentencia.

El recurso de tercería se puede definir como una vía extraordinaria abierta a toda
persona que sin ser parte en el proceso ha sido perjudicada por la sentencia dada
por el tribunal.
Este recurso se fundamenta en que nadie pude ser condenado sin que se le haya
dado la oportunidad de haber sido oído o representado en una instancia, para que
esgrima sus medios de defensas.
El artículo 474 del Código de Procedimiento Civil dominicano, establece que una
parte perjudicada en sus derechos por una sentencia, en la que ni ella ni las
personas que ella represente, hayan sido citadas, puede deducir tercería contra
dicha sentencia.
Asimismo, el artículo 475 del Código de Procedimiento Civil, establece que la
tercería deducida como una acción principal se someterá al tribunal que haya
pronunciado la sentencia impugnada. La deducida como incidente en proceso
pendiente ante un tribunal, se establecerá por instancia ante dicho tribunal, si fuere
igual o superior al que pronunció la sentencia, motivo de la tercería.

Tavares (1989), apunta que haciéndose eco de dos reseñas jurisprudenciales de

principios del siglo pasado, la conceptualiza como “un recurso concedido a los
terceros lesionados por la sentencia, a fin de obtener su retractación o su
reformación”.
Alarcón (2016), citando a Nieva Fenoll, se refiere a ella como una institución que
abre la posibilidad a un tercero perjudicado por una resolución judicial, de que
solicite la revisión de dicha resolución por el mismo juez que la dictó, teniendo en
cuenta que el anterior proceso fue sustanciado sin él. De ese modo, el juez volverá
a juzgar los puntos que le señale el tercero, como si, de hecho, estuviera

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

completando el proceso ya celebrado con los argumentos que ahora le da el

tercero.
Con el recurso de tercería se quiere garantizar el debido proceso, y se le da la
oportunidad a una persona que no fue parte en el proceso, pero que intervino una
sentencia que le perjudica o le causa ciertos agravios, y justo que esa persona
pueda interponer alguna acción para hacer borrar los efectos de esa sentencia, para
lo cual podrá aportar todas las pruebas ante el tribunal, en apoyo a su defensa
material.
El recurso de tercería, es un recurso extraordinario. Sin embargo, cuando veíamos
la clasificación anterior, la tercería no es ni de retractación ni de reformación, pues
puede ser ambas, según sea el caso.

En el art. 1351 del Código Civil, establece el principio de la relatividad de los

efectos en una sentencia. La sentencia no puede perjudicar a un tercero, dicho
artículo dice de la siguiente manera: “La autoridad de cosa juzgada no tiene lugar
sino respecto de lo que ha sido objeto de fallo. Es preciso que la cosa demandada
sea la misma; que la demanda se funde sobre la misma causa; que sea entre las
mismas partes y formulada por ellas y contra ellas, con la misma cualidad”.
El legislador trata de defender al tercero de varias maneras: 1) Intervención;
persona entiende que un proceso pudiera repercutir en su contra simplemente
interviene 2) Medios de Inadmisión o defensa invocando el efecto relativo de las
sentencias (Art. 1351). 3) Tercería. Condiciones de admisibilidad: a)
Efectivamente un tercero (no participo en el proceso bajo ningún título y b) Que la
sentencia le cause un perjuicio actual o eventual, material o moral. Respecto al
medio de inadmisión en virtud del efecto relatividad de la sentencia. Lo
aconsejable es incoar dicho medio de inadmisión y dependiendo de la suerte del
mismo, incoar o no el recurso. El incoar el medio d inadmisión pude traer
beneficios, pero no puede, de manera alguna, perjudicar el recurso, por lo cual es
recomendable procedimentalmente hablando.
La tercería tiene un efecto bumerán, porque si pierde la demanda la sentencia
puede ser ejecutada en su contra. Por lo cual, la tercería debe de tener ante todo un
fin práctico. Una sentencia que ha sido recurrida en tercería y no ha sido invalidada
respecto a tal parte, le es por demás oponible en lo adelante.

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Las vías de recursos en el proceso civil

2-Característica de los recursos extraordinarios.

Los recursos extraordinarios, salvo la tercería, no pueden ser incoados contra las
sentencias susceptibles de ser atacadas por un recurso ordinario: no puede
recurrirse en revisión civil o en casación contra una sentencia en defecto mientras
pueda ser impugnada por la oposición, ni contra una sentencia en defecto o
contradictoria que pueda ser atacada por apelación.
El juez apoderado de un recurso extraordinario puede examinar solamente aquellas
cuestiones limitativamente planteadas con el recurso. Los recursos extraordinarios
no plantean ante el juez apoderado el examen del proceso en sí mismo, sino de
algunos de sus aspectos particulares.
Cuando una persona no ha sido ni ha estado representada en la instancia que afecta
sus derechos, está protegida por la autoridad relativa de cosa juzgada. El artículo
1351 del código civil expresa: la autoridad de la cosa juzgada no tiene lugar sino
respecto de lo que se ha sido objeto de fallo, respecto a las partes que han sido
puestas en causa.
Las sentencias se oponen contra aquellos o a favor de quienes han sido parte en la
instancia, sea como partes principales o intervinientes, es decir que para todos los
demás que afecte la sentencia, se encuentra abierto el recurso de tercería.
El recurso de tercería tiene su fundamento legal en los artículos 474 a 479 del
Código de Procedimiento Civil, y es un recurso extraordinario porque solo está
abierto en circunstancias especiales, distinto ocurre con los recursos ordinarios,
que están abierto siempre, salvo el caso de que la ley expresamente lo haya
prohibido o limitado.

3-Utilidad del recurso de tercería.

Pérez (2009), señala que el recurso de tercería viene a salvaguardar los derechos de
una persona que no fue parte en la instancia, de ahí la importancia que reviste, por
los motivos siguientes:
1-Hay situaciones jurídicas muy complejas y la relatividad de la cosa juzgada
puede dejar subsistir un perjuicio, para una persona que no ha sido parte en la
instancia.
Esto podría ocurrir cuando se reconoce una servidumbre de paso en un inmueble
en copropiedad, no habiendo uno de los codueños tomado parte en la instancia. En

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

esta eventualidad, no es suficiente oponer la relatividad de la cosa juzgada, porque

la servidumbre va a quedar establecida aun en perjuicio de quien no figuró en la
instancia, por el carácter indivisible de la misma.
2-Muchas veces se causa un perjuicio a un tercero.
Oponer la relatividad de la cosa juzgada, es un medio de defensa, pero en
ocasiones se requiere una ofensiva o de lo contrario el perjuicio resultaría una
realidad.
3-Muchas veces una persona puede estar representada en el proceso.
Esto es verdad, pero es posible que haya sido mal representada, posiblemente en
fraude de sus derechos.
El recurso de tercería vendría entonces a contrarrestar los agravios que le puede
causar la sentencia dada por un tribunal, sin que el haya sido parte en la instancia.
Alarcón (2016), refiere que la utilidad práctica de la tercería fue durante
algún tiempo objeto de serios cuestionamientos y desencuentros. Ciertamente los
terceros podían intervenir en salvaguarda de sus derechos: - intervención
voluntaria y aunque esto no ocurriera, ya dictada la sentencia, quedaban
cubiertos a través del efecto relativo de la cosa juzgada y la imposibilidad de que
lo resuelto en juicio, sin que ellos fueran partes, se les opusiera. La experiencia,
sin embargo, fue demostrando que esta relatividad idílica de la cosa juzgada no
era suficiente por sí sola en determinados casos para hacerlos inmunes o
protegerlos eficazmente frente a los embates de la ejecución.
Al margen de la multiplicidad y complejidad de las relaciones privadas y la
interdependencia de intereses que a veces propician que los actos de ejecución
inter partes impacten a terceras personas, se cita el peligro de que alguien
supuestamente representado en el proceso sea víctima de un fraude y que en tales
condiciones ya no esté en capacidad de invocar la relatividad de la cosa juzgada.
Lo propio ocurre también con la sentencia que reconoce una servidumbre de
paso a través de un inmueble afectado de copropiedad, ante la posibilidad de que
uno de los codueños que no fue parte en el proceso pueda justificar un interés
legítimo en que ese dictamen sea modificado o reencausado. Para los terceros
concernidos en ambos casos el único remedio viable a fin de proteger o hacer valer
sus derechos es la tercera.
La tercería dará paso entonces a un proceso declarativo posterior al fallo, cuya
virtualidad hará pender todavía, durante veinte largos años289, el cierre definitivo

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Las vías de recursos en el proceso civil

de un ciclo y en nombre de los principios de audiencia y contradicción mantendrá a

la parte gananciosa a la expectativa de que en cualquier momento surja un tercero
agraviado dispuesto a exigir sus derechos. Lo que de primera intención o a simple
vista pudiera percibirse como un atentado al sosiego, a la estabilidad del sistema
y a la seguridad jurídica se revela entonces como un mal necesario, ante la
perentoriedad de las garantías que orbitan alrededor del debido proceso. La
autoridad judicial desandará el camino recorrido y sopesará la oferta probatoria del
tercerista para reconsiderar lo juzgado, ahora con los elementos y argumentos
inéditos traídos a colación por este último.
En general se admite la tercería tanto contra las decisiones contenciosas civiles y
comerciales como contra las ordenanzas de referimiento. En Francia también
contra los actos graciosos, No se admite, por el contrario, ni con relación a los
fallos de la Corte de Casación ni los actos de simple administración judicial.
4-Naturaleza jurídica del recurso de tercería.
Alarcón (2016), sostiene que la tercería no constituye, en puridad, un verdadero
recurso, sino, más bien, una acción principal en «ínoponibilidad» de sentencia
al tercerista. Su verdadero objeto, ni más ni menos, es hacerle declarar
inoponible la decisión y obtener que la misma sea retirada del ordenamiento
jurídico en todo o en parte, pero solo respecto de él.
En su sentido más estricto el recurso, cualquiera que este sea, es una herramienta
reservada a las partes envueltas en la contestación para que quien se sienta
agraviado por la resolución judicial, tenga la oportunidad de discutir sus
términos y hacerla revocar, anular o modificar. La condición de parte es
indisoluble de la legitimación para recurrir porque en buena lógica, como ha dicho
Martínez mejía “no se puede hablar de «recurso» para referirse a la acción de
quien acude a la jurisdicción por primera vez”.
Más todavía son las partes quienes a través del recurso pueden dar continuidad al
proceso y evitar que la decisión judicial que afecta sus intereses se haga
definitivamente firme, sea para seguirlo en el mismo contexto espacial (Vías de
retractación) o en otra jurisdicción superior (vías de reformación). Cuando
irrumpe un tercero presentando quejas u objeciones en contra del veredicto del
juez, su acción impugnatoria no configura un auténtico recurso porque con ella
se da paso a un proceso autónomo, muy bien diferenciado de la disputa
original. Se abre entonces un nuevo escenario en que solo serán discutidos los
puntos juzgados que afecten al tercero y que hayan sido planteados por él.

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

El recurso es, en cambio, un acto del proceso, lo que descarta su mención

cuando se trate de iniciar un pleito nuevo. No se crea a través de él una
contestación distinta, sino que es parte de una saga: la secuencia lineal del
mismo litigio. Efectivamente el tercero en el marco de la tercería se defenderá,
pero en un proceso ex novo con substantividad propia que a su vez, si cabe,
generará apelación, casación, revisión civil, ,conforme aplique y hasta las
tercerías sucesivas, en la medida en que surjan otros terceros virtualmente
afectados.
5-Legitimación activa.
Están llamados a interponer la acción en tercería aquellos cuyas
calidades hubieran sido usurpadas bajo el manto de una representación irreal o
amañada.
Se entiende por tercero todo aquel que no es parte por él mismo en el proceso
ni ha estado representado. Nótese que mientras la noción de parte se concibe en
vertiente positiva como quien reclama o frente a quien se reclama en justicia la
satisfacción de una pretensión, la de tercero, en cambio, solo hace sentido
cuando se formula en vertiente negativa.
La norma, como se ha visto, dicta que toda persona que desde el principio haya
estado integrada al proceso por ella misma o debidamente representada, o que
después llegara a estarlo a través de la intervención voluntaria o forzosa,
carece de legitimación o lo que es lo mismo no tiene derecho a accionar en
tercería. Pero aquel o aquella que dictada la sentencia figure en ella en
alguna calidad, es admisible en tercería si la interpone en otra distinta. Así,
por ejemplo, puede que estuviera en la instancia de partición como
representante de uno de los legatarios y después de emitida la sentencia atacarla
en tercería en representación de otro. Por igual haber fungido como
representante de una de las partes y atacar más tarde la decisión en tercería a
título personal.
Sobre las dependencias autónomas del gobierno dotadas de personería jurídica
propia, ha prevalecido el criterio de que las mismas perfectamente admisibles
en tercería respecto de fallos o resoluciones en las que fungiera como parte
el Estado dominicano, siempre que justifiquen un interés legítimo. Un botón
de muestra sirve para ilustrar la situación:
“..que tal y como lo afirma el recurrente, el Banco Agrícola de la República
Dominicana es y ha sido desde su fundación en 1945 una institución autónoma,

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Las vías de recursos en el proceso civil

con patrimonio propio y personalidad jurídica distinta de la del Estado, en virtud

de los términos precisos e inequívocos de los textos legales invocados por el
recurrente y que, por tanto, no habiendo sido parte dicho banco en la litis que
culminó en la sentencia que la Corte a que dictó el 25 de febrero de 1965, tenía
derecho a recurrir en tercería contra el referido fallo si este comprendía bienes
que por cualquier origen estuvieran en su patrimonio ... que el examen de los
medios dados en la sentencia impugnada muestra que todos ellos tienden a
fundamentar, con argumentos extrajurídicos, el criterio de que el Banco Agrícola
de la República Dominicana y el Estado Dominicano constituyen en la realidad
una sola y misma persona jurídica, criterio que esta SC] declara erróneo y
contrario a textos legales precisos e inequívocos...”. (S. C. J. B. J. 675, p. 314,
enero, 1967).
Por otro lado se justifica la acogida de la tercería cuando es ejercida por
alguien en contra de quien se pronunciaron condenaciones directas sin haber sido
parte en la instancia. Lo determinante no es aquí la adjudicación misma de tales
condenaciones, sino la circunstancia de que el agraviado no fue llamado a
defenderse.
El ministerio público no puede interponer tercería contra una sentencia rendida
en los casos en que haya fungido como parte adjunta. Tampoco en los que el
legislador exija que se le escuche o que la causa le sea comunicada. Por el
contrario, sí sería admisible en hipótesis muy específicas en que esté llamado
a actuar de oficio por mandato de la ley y naturalmente si están dadas las
condiciones exigidas para el ejercicio de la acción; o cuando pueda, por
motivos de orden público, aparecer como parte principal. Igual en aquellos
otros, bastante raros, en que él debe asumir la representación de ciertas
personas, como ocurre en la instancia de declaratoria de ausencia en que se
supone lo haga a nombre del ausente.
6-Legitimación pasiva
Conforme señala Alarcon (2016), es de mucha importancia saber si la tercería debe
ser dirigida solo contra parte favorecida con la sentencia objeto del recurso o si
también debería incluirse a quien resultara condenado por ese mismo fallo, tal es el
caso de la legitimación pasiva..
En estos casos hay que distinguir según que el condenado haya ejecutado o no la
sentencia. En el primer supuesto procede notificar la tercería tanto a la parte
gananciosa como perdidosa, sobre todo si con ella se buscar obtener la suspensión
o la cesación de la ejecución.

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

En la otra hipótesis, la tercería debería solo dirigirse contra el beneficiario, a menos

que se pretenda que ha habido colusión entre ambos litigantes originarios para la
obtención del fallo.
7-Condiciones generales para incoar el recurso.
La persona que no ha sido citada ni representada en una instancia, puede deducir la
tercería contra la sentencia que lo condena o le afecta sin que haya tenido la
oportunidad de ser citado o representado en esa instancia, porque ello sería al
sagrado derecho de defensa establecido en nuestra Constitución.
Se admite también que una persona puede deducir la tercería contra una sentencia,
cuando invoca una calidad diferente a la que tenía en primera instancia, porque la
recibilidad de la tercería, no es una excepción al principio general ya que el
litigante forma su recurso fundamentándose en una calidad diferente, aquella con
la que figuró en el primer grado. (Cas. Soc. 13 juin 1979. Gaz. Pal. 1979. 2 Panor.
527. Enc. Jur. Dalloz, ibid. No, 52).
Son necesarias tres condiciones para deducir el recurso de tercería:
1-Experimentar un perjuicio o estar amenazado por uno.
Esto significa que quien deduce la tercería debe justificar un interés que motive el
deseo de obtener la retractación de la sentencia impugnable por tercería.
2-No haber sido parte del proceso.
Si la persona fue citada o representada en la instancia, no tendría calidad para
interponer el recurso de tercería, porque esa vía estaría cerrada para ella.
3-No haber sido representado en la instancia, salvo en caso de fraude.
Si la persona fue representada y alega que fue objeto de una representación
fraudulenta, tendrá que probar ese alegado ante el tribunal para que la tercería
pueda ser deducible.
De no hacerlo, no creo que el tribunal se retractará en su sentencia.
8-Quienes pueden interponer un recurso de tercería
Como ya hemos señalado el recurso de tercería puede ser interpuesto por cualquier
persona que haya sido afectado por una sentencia en la cual el no fue parte, ni
estuvo representado. Lo que se persigue es que esta persona lesionada pueda
articular sus medios de defensas, para restablecer sus derechos.

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Las vías de recursos en el proceso civil

El recurso de tercería puede ser interpuesto por el comprador del inmueble

adjudicado en proceso contra su vendedor en el que no era parte y del que se enteró
solamente cuando se le requirió la presentación de su certificado de título para
cancelarlo.“ (S. C. J., B. J. No. 957. Año 895º). “Los terceros no pueden recurrir
en casación más que contra la decisión rendida en última instancia sobre su recurso
de tercería.” (S. C. J. B. J., No. 1065. Año 104º).

9-La representación
Una persona está debidamente representada cuando es presentada por su
mandatario legal o convencional. Cuando surgen las dificultades se trata de un
causahabiente particular o de un garante, se considera al garante que no fue puesto
en causa en posición de tercero por tanto puede deducir la tercería. El
causahabiente a título particular es representado por su autor en relación a los actos
anteriores a su derecho, pero toma la calidad de tercero por los actos posteriores.
También se puede admitir que un codeudor solidario no ha sido representado por
su coobligado este se puede beneficiar de la tercería.
La misma solución se admite en caso de fianza. Se trata de un deudor subsidiario
que no debe despojarse de la protección, aun en ausencia de fraude del deudor
principal.

10-Diferencia entre tercería y otros recursos.

Todos los demás recursos, apelación, oposición, revisión civil, le contredit,
requieren que el recurrente haya sido parte en la instancia que dio origen a al
sentencia atacada, para que pueda interponerlo. En tanto que la tercería el requisito
fundamental es que no haya sido parte en el proceso.
Si una de las pates interpuso un recurso de apelación, y la Corte lo declara
inadmisible, podría interponer la terrecería contra esa misma sentencia recurrida,
en la cual él no fue parte ostentando otra calidad, y si le rechazan la tercería nada
impide que interponga un recurso de apelacion contra esa misma sentencia.
Hay similitud en cuanto al objeto del recurso de tercería y el recurso de oposición,
pero se diferencian en que en la última, el que se defendió fue parte del proceso, y
en la tercería no pudo haber sido parte del proceso [en materia de dolo una parte
puede invocar tercería]).

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

11-Plazo para interponer el recurso y competencia del tribunal.

No hay un plazo establecido en la ley para interponer el recurso de tercería, por
tanto la prescripción es a los 20 años, el plazo del derecho común. El tribunal
competente, dependerá de si es principal o incidental. El recurso de Tercería es
principal cuando la parte afectada por una decisión no es parte en ningún proceso
abierto. Se efectúa ante el mismo tribunal que dictó la decisión, como vía de
retractación. La Tercería incidental es cuando la parte se encuentra en un proceso
(a cualquier título) con relación a la decisión a recurrir, pero no fue parte en la
instancia que dio ocasión a la propia sentencia (ej. Puede ser una Demanda en
Rescisión de Contrato, soy parte de la demanda en desalojo en ocasión de la
decisión a recurrir, pero nunca fui parte del proceso que dio ocasión a dicha
sentencia porque en Contrato rescindido yo no tenía calidad ni de comprador ni de
vendedor, sino que se trata del Contrato de compra que había hecho el vendedor
del inmueble con el propietario anterior a él).
La competencia es funcional; en cuanto a la tercería incidental dependerá si el
tribunal que conoce la demanda en curso, es igual superior o inferior en orden
jerárquico al que dictó la sentencia. Si es de igual o superior jerarquía entonces
procede conocerla, si es inferior, deberá incoarse de manera principal por ante el
tribunal que dictó la sentencia, esto por jerarquía judicial.

La suspensión de alguna medida, la debe hacerle juez apoderado de la tercería, no

un juez de los referimientos. Se puede incoar por vía de citación (fecha fija) o
emplazamiento (dan plazo para constituir abogado). Si es incidental ante el JPI,
puede ser hecha por acto abogado a abogado, respecto la parte que ya está en la
instancia y por citación o emplazamiento respecto a los que no están o no son
partes en esa instancia. Art. 478 de CPC.

Finalmente, hay que diferenciar si la tercería es acogida o rechazada. Si la tercería

rechaza las pretensiones del recurrente, se confirmará la sentencia respecto al
tercero. Si la tercería es acogida, se retractará o reformará la sentencia solo
respecto a los efectos que afligen o tocan al tercero. La Sentencia sobre la tercería
puede ser objeto de cualquier recurso ordinario o extraordinario. Asimismo, la
Tercería no tiene que esperar ningún recurso, es el único que no está sujeto a que
esté abierto o cerrado ningún recurso.

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Las vías de recursos en el proceso civil

El plazo para intentarlo es de veinte años. La tercería es incidental cuando se

introduce en el curso de una instancia, contra una sentencia precedentemente
dictada y de la cual uno de los litigantes quiere prevalerse. En este caso, conforme
a la solución admitida después de un largo tiempo por la jurisprudencia, la tercería
puede ser ejercida sin limitación de tiempo.
Esta regla es una aplicación de la máxima “quae temporalia sunt ad agendum
perpetua sunt ad excipiendum” (cuando la acción en nulidad no puede ser
intentada, porque se ha extinguido, por haber transcurrido el plazo de la
prescripción, el beneficiario podrá ampararse en la excepción de que ella es
perpetua); la cosa juzgada puede ser invocada sin limitación de tiempo, es lógico
reconocer al litigante la posibilidad de ejercer la tercería. La tercería principal es
llevada ante la jurisdicción de la cual emana la sentencia así recurrida. Toda
jurisdicción del orden judicial de derecho común o de excepción, puede retractar
sobre tercería la sentencia que haya dictado.
12-El efecto suspensivo en la tercería
La tercería, lo mismo que el recurso de casación, no es, en principio, suspensiva de
la ejecución de la sentencia impugnada; es la regla general aplicable, en principio,
a todos los recursos extraordinarios. El artículo 478 del Código de Procedimiento
Civil, análogamente a como lo decide para el recurso de casación el artículo 12 de
la ley sobre proceso de casación, da al tribunal apoderado del procedimiento de la
tercería la facultad discrecional de acoger o desestimar una demanda tendiente a
suspender la ejecución de la sentencia impugnada, salvo si se trata de sentencias
que hayan ordenado el abandono de una heredad y que hayan adquirido la
autoridad de la cosa juzgada, esto es, que no sean ya recurribles por oposición o
por apelación.
Esas sentencias “deberán ser ejecutadas contra los litigantes condenados, no
obstante la tercería, y sin causar perjuicio a esa acción”. Para que esta disposición
excepcional sea aplicable es preciso que se encuentren reunidas las dos
condiciones apuntadas. Por consiguiente, la suspensión puede ser concedida si se
trata de materia mobiliaria, o de sentencia recurrible por oposición o por apelación.
El objeto de esta restricción a los poderes concedidos al juez para suspender la
ejecución de la sentencia es el evitar que, mediante una tercería concertada entre el
recurrente y la parte condenada, esta conserve en su poder el inmueble cuyo
abandono le fue ordenado. 13-Decisiones impugnables por el recurso de tercería

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 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

En principio todas las sentencias son impugnables por el recurso de tercería: civil,
comercial, referimiento, tribunal ordinario o de excepción. Sin embargo, como en
derecho nada es absoluto, debemos señalar que no es posible interponer este
recurso contra las decisiones de la Suprema Corte de Justicia como Corte de
Casación, pero sí en caso de ser acogido el recurso, ante el tribunal de envío, o en
caso de ser rechazado, por ante el tribunal que dictó la decisión.
Para interponer el recurso de tercería no hay que tomar en cuenta si la decisión fue
ejecuta o no, basta con que el recurrente no haya sido parte en el proceso que
origino la sentencia atacada.
La tercería por causa de dolo o fraude está llamada a proteger a sucesores y
acreedor quirografarios. Como las partes pudieran perjudicar a un tercero por un
acto, el legislador idea la acción pauliana del artículo 1167 del Código Civil, pero
si para perjudicar a terceros las partes recurren a un litigio ficticio (se demandan y
ejecutan a sabiendas para defraudar el patrimonio), se podrá recurrir esa sentencia
en tercería siempre y cuando se pruebe el dolo sobre la representación, pues esto es
lo que convierte a tal afectado en un verdadero tercero. Solo lo pueden interponer
aquellos cuyos representados han sido parte y les han defraudado, que serían el
deudor o el de cujus según sea el caso.

14-Procedimiento del recurso de tercería.

El recurso de tercería se interpone por vía de citación o emplazamiento. Si es
incidental por ante el Juzgado de Primera Instancia, puede ser hecha por acto de
abogado a abogado, en materia civil o en la Corte de Apelación. Se aplican las
reglas del procedimiento ordinario.
De conformidad con las previsiones del artículo 475 del Código de Procedimiento
Civil, la tercería deducida como una acción principal se someterá al tribunal que
haya pronunciado la sentencia impugnada. La deducida como incidente en proceso
pendiente ante un tribunal, se establecerá por instancia ante dicho tribunal, si fuere
igual o superior al que pronunció la sentencia, motivo de la tercería.
El artículo 476 del CPC, establece que si el tribunal no es igual o superior,
entonces la tercería deducida como incidente se interpondrá como acción principal
ante el tribunal que haya dictado la sentencia de donde nazca la tercería.

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Las vías de recursos en el proceso civil

El tribunal ante el cual se haya presentado la sentencia impugnada podrá, según las
circunstancias, continuar el proceso o suspenderlo para conocer del incidente. (Art.
477 CPC).
15-Medidas de instrucción en el recurso de tercería.
La persona que ataca una decisión por el recurso de tercería, es porque no ha sido
parte en el proceso, y por ello, no conoce las pruebas en que el juez se fundamentó
para dar dicha decisión, por lo tanto cuando se conoce el recurso, el litigante tiene
derecho a solicitar todas las medidas de instrucción que sean procedentes para
demostrar la improcedencia de la sentencia en cuando a los puntos que le afectan.
En conclusión este tiene derecho a:
1-Aportar pruebas en apoyo a su defensa.
2-Tener acceso a las pruebas sometidas por las demás partes envueltas en el
proceso.

16-Efecto suspensivo del recurso tercería.

Como los demás recursos extraordinarios, la tercería no suspende la ejecución de la
sentencia impugnada. No obstante, el artículo 478 da al tribunal apoderado la
facultad discrecional de acoger o desestimar la solicitud de suspensión. En ciertos
casos la ley indica que no es posible la suspensión.

17-Efectos de la sentencia
Si la tercería es rechazada, la sentencia impugnada surtirá todos sus efectos frente
al tercero recurrente. En caso de que la tercería sea acogida la sentencia es
retractada en tanto que afecte al tercero recurrente, que no necesariamente debe ser
de manera completa. Cuando la retractación es parcial, los demás aspectos de la
sentencia surtirán pleno efecto entre las partes. En algunos casos no es posible la
retractación parcial, como es el caso de indivisibilidad.
La sentencia que decide sobre la tercería es impugnable mediante los recursos
ordinarios o extraordinarios de conformidad con el derecho común.

96
 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

18-El recurso de tercería ante la jurisdicción inmobiliaria.

Es mucho lo que se ha discutido entre especialistas en derecho inmobiliario y
jueces de la jurisdicción inmobiliaria, respecto del recurso de tercería ante los
tribunales de la jurisdicción inmobiliaria, unos entienden que sí y otros que no. Los
que niegan esta posibilidad de que no es admisible el recurso de tercería ante la
Jurisdicción Inmobiliaria, arguyen que el legislador no ha contemplado dicho
recurso. Otros sostienen que como el derecho procesal civil es supletorio del
derecho inmobiliario, es admisible el recurso de tercería ante los tribunales de
jurisdicción inmobiliaria.
Esta es la situación que cotidianamente vemos en la jurisdicción inmobiliaria,
donde personas víctimas de fraudes acuden en procura de que sus derechos de
propiedad les sean protegidos, pues nunca fueron enterados de que sus bienes
estaban siendo objeto de procesos judiciales.
Tal es el caso, por ejemplo, de la adquisición y deslinde de un inmueble en virtud
de una sentencia que así los aprueba, al declarar como válido y legítimo los actos
que dieron origen a esas operaciones. Sin embargo, hoy día es debatida la
admisibilidad de esta acción en la jurisdicción inmobiliaria.
En este sentido, ciertamente los antecedentes que hasta este año se habían tenido
sobre el tema favorecían la inadmisibilidad de la tercería. Inadmisibilidad
justificada; 1) en que la referida acción no está prevista ni en la Ley 108-05, de
Registro Inmobiliario ni en sus reglamentos; 2) que los recursos, como la tercería,
tienen un carácter de orden público, y por vía de consecuencia, estaría mal
instituirse vía jurisprudencia una acción que de manera expresa no contempla la
ley, y 3) que en materia de inmuebles existen otras vías de derecho que un tercero
puede utilizar, dentro de las cuales se resalta la litis sobre derechos registrados.
Estamos de acuerdo en que existen otras vías, como la enunciada precedentemente,
pero siempre y cuando el derecho cuya revocación se procure se haya generado en
virtud de un acto distinto a una sentencia y se encuentre publicitado ante el
Registro de Títulos, es decir, que se trate de inmuebles afectados por derechos
reales que estén registrados (Art.28 de la Ley 108-05).
Admitir la tercería ante la Jurisdicción Inmobiliaria, es aplicar la tutela judicial
efectiva y garantizar el derecho de defensa de un tercero, que su derecho de
propiedad que dicho sea de paso tiene un carácter constitucional, ha sido afectado
por una sentencia en la cual él no fue parte.

97
Las vías de recursos en el proceso civil

Entendemos que la Ley de Registro Inmobiliario le ha dado a los tribunales de la

jurisdicción inmobiliaria la posibilidad de admitir la tercería en base al carácter
supletorio que tiene ahora el derecho común dentro de la referida jurisdicción
(Arts. 3 y Principio VIII de la Ley 108-05).
Además, la sola razón que taxativamente la tercería no la prevea la Ley, no es un
impedimento para que en apego a los principios que rigen la materia de tierra, se le
dé cabida a la jurisdicción a terceros afectados por decisiones jurisdiccionales de
los tribunales de tierra. La tercería es un reflejo puro y duro del derecho de defensa
que debe imperar en todo proceso judicial.
Los jueces de los tribunales de la Jurisdicción Inmobiliaria, cuando la Ley que los
rige resulta insuficiente para resolver un asunto, aplican el derecho común al
momento de rendir sus decisiones para administrar justicia. Esto se ha visto
reiteradamente en figuras propias del derecho civil que han hecho suyas los jueces
de esta jurisdicción, tales como: Recursos incidentales, demandas
reconvencionales, inclusive en grado de apelación, demandas en intervención
forzosa y voluntaria, acciones de amparo, y otras.
En el caso de las intervenciones, llama la atención como se admite la intervención
de un tercero en los procesos llevados ante los Tribunales de la Jurisdicción
Inmobiliaria, tomando como fundamento el carácter supletorio del derecho común,
que es el que establece la figura del tercero interviniente voluntario, y por otra
parte, se pretenda no admitir el recurso de tercería, siendo ésta interpretación y
aplicación de la norma contraria a lo que determina el propio Código de
Procedimiento Civil en su artículo 466, cuando declara que “la intervención será
admisible cuando el que la intente pueda, con derecho, deducir la tercería”.
De modo que, si las demandas en intervención de un tercero son admitidas en la
Jurisdicción Inmobiliaria, bajo el mismo argumento jurídico deben ser admitidas
las acciones en tercería, pues sino los mismos tribunales están incurriendo en una
contradicción y violación de la ley y la Constitución, al discriminar la admisión de
la acción de una demanda en intervención y no la de tercería, en base al argumento
“la ley no lo prevé”, cuando tampoco prevé la demanda en intervención.
Es precisamente la postura constitucional del derecho de defensa que
recientemente ha asumido el Tribunal Superior de Tierras del Departamento
Central, el que mediante una decisión admitió la tercería (Sentencia del 30 de
noviembre del 2015). La decisión fue recurrida por ante la Suprema Corte de
Justicia y ahora resta esperar el precedente que traerá, que aunque no sería
vinculante, como las decisiones del Tribunal Constitucional, será un marco de

98
 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

referencia importante de cara a la seguridad jurídica que necesita nuestro sistema

de justicia.
19-Recurso de tercería en materia de amparo.
El Tribunal Constitucional dominicano, en ocasión de un recurso de revisión
constitucional interpuesto contra una decisión de una acción de amparo, por
Sentencia TC/0061/13 del 17 de abril de 2017, decidió que el ante la Jurisdicción
de amparo es admisible el recurso de tercería, y adujo que:
“El recurso de revisión previsto en el artículo 94 de la referida Ley No. 137-11,
estos prefirieron recurrir en tercería. En efecto, en el mencionado texto se establece
que: Todas las sentencias emitidas por el juez de amparo pueden ser recurridas en
revisión por ante el Tribunal Constitucional en la forma y bajo las condiciones
establecidas en esta ley. Párrafo. Ningún otro recurso es posible, salvo la tercería,
en cuyo caso habrá de procederse con arreglo a lo que establece el derecho común.
d) En ese sentido, resulta oportuno señalar que la tercería está prevista en los
artículos 474 y siguiente del Código de Procedimiento Civil.
En el artículo 474 del Código de Procedimiento Civil se establece lo siguiente: Una
parte perjudicada en sus derechos por una sentencia, en la que ni ella ni las
personas que ella represente, hayan sido citadas, puede deducir tercería contra
dicha sentencia; mientras que en el 475 se consagra que: La tercería deducida
como una acción principal se someterá al tribunal que haya pronunciado la
sentencia impugnada. La deducida como incidente en proceso pendiente ante un
tribunal, se establecerá por instancia ante dicho tribunal, si fuere igual o superior al
que pronunció la sentencia, motivo de la tercería. e) El artículo 474 del Código de
Procedimiento Civil, cuyo contenido se transcribe en el párrafo anterior, es
aplicable en la especie en virtud del principio de supletoriedad previsto en el
artículo 7.12 de la Ley No. 137-11.
En dicho texto se establece: Para la solución de toda imprevisión, oscuridad,
insuficiencia o ambigüedad de esta ley, se aplicaran supletoriamente los principios
generales del Derecho Procesal Constitucional y sólo subsidiariamente las normas
procesales afines a la materia discutida, siempre y cuando no contradigan los fines
de los procesos y procedimientos constitucionales y los ayuden a su mejor
desarrollo. f) El Tribunal Constitucional, interpretando el mencionado artículo 474,
República Dominicana
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL Sentencia TC/0061/13. Expediente TC-04-
2012-

99
Las vías de recursos en el proceso civil

0023, relativo al recurso de revisión constitucional de decisión de amparo incoado

por los señores Carlos Domingo Tavárez y Darío Romano Vásquez, contra la
Resolución No. 166, de fecha veintidós (22) de noviembre de dos mil once (2011),
y la Resolución No. 10-2012, de fecha nueve (9) de febrero de dos mil doce
(2012), ambas dictadas por la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del
Distrito Judicial de Santiago y el Oficio Administrativo No. 123 del dieciocho (18)
de octubre de dos mil once (2011) de la Procuraduría Fiscal del Distrito Judicial de
Santiago. Página 11 de 14 estableció que quienes han participado en el proceso del
cual surgió la sentencia carecen de derecho para recurrir en tercería, en el
entendido de que no son terceros: requisito que es necesario para poder interponer
un recurso de tercería en cualquier materia (Sentencia TC/0015/12, del 31 de
mayo).
En la especie, los señores Carlos Domingo Tavárez y Darío Romano Vásquez no
tenían calidad para interponer el recurso y, en consecuencia, el tribunal que dictó la
sentencia objeto del mismo interpretó correctamente el derecho al declararlo
inadmisible. g) El recurso de tercería, según el referido artículo 474, puede ser
interpuesto por ante el tribunal que dictó la sentencia objeto del mismo, por la vía
principal, o por ante otro tribunal, por la vía incidental, cuando exista proceso
pendiente ante una jurisdicción superior o de igual jerarquía. h) La sentencia que
declaró inadmisible el recurso de tercería es susceptible del recurso de revisión
previsto en el artículo 94 de la referida Ley No. 137-11, en razón de que fue
dictada por el juez de amparo, texto que establece que “Todas las sentencias
emitidas por el juez de amparo pueden ser recurridas en revisión por ante el
Tribunal Constitucional en la forma y bajo las condiciones establecidas en esta
ley”.
El recurso de revisión es necesario en esta materia, ya que si no se permitiera lo
decidido por el juez de amparo en materia de tercería sería definitivo e irrevocable
y las posibles vulneraciones a derechos fundamentales no podrían ser subsanadas,
situación que no se corresponde con el modelo de justicia constitucional diseñado
por el constituyente, en el cual el Tribunal Constitucional es el órgano de cierre en
materia de interpretación y protección de derechos fundamentales”.
Consideramos correcta la decisión del Tribunal Constitucional de establecer que el
recurso de tercería es admisible en materia de amparo, y basta con que la decisión
de amparo haya perjudicado a un tercero que no fue parte en esa acción
constitucional. Lo que se persigue en esencia es tutelar un derecho constitucional
fundamental, que es derecho de defensa con apego al debido establecido en el
artículo 69 de nuestra Constitución dominicana, el cual establece las garantías

100
 UNIDAD: III. EL RECURSO DE TERCERÍA

mínimas del debido proceso de ley, estableciendo las reglas que se han de seguir
para que el mismo se lleve a cabo en plena igualdad de condiciones.

20-Ssuspensión de la ejecución de la sen tencia en el curso de la tercería.

De conformidad con las previsiones del artículo 478 del Código de Procedimiento
Civil dominicano, las sentencias que hayan adquirido el carácter de la cosa juzgada
y que ordenen el abandono de una heredad, serán ejecutadas contra los litigantes
condenados, no obstante la tercería, y sin causar perjuicio a esta acción. En los
demás casos, los jueces podrán, apreciando las circunstancias, suspender la
ejecución de la sentencia.
Alarcon (2016), señala que aun cuando la tercería por sí sola no afecta la
ejecución del fallo que con ella se ataca, lo que es igual a decir que no tiene,
en sí misma, efecto suspensivo, se permite al tercerista pedir y eventualmente
obtener la suspensión de la ejecución de esa decisión que le afecta o que
amenaza sus intereses.
El requerimiento de suspensión debe llevarse accesoriamente al tribunal ya
apoderado de la acción en tercería. En tal sentido ha sido juzgado que en
estas circunstancias, vigente la instancia en tercería, el juez de los
referimientos sería «incompetente» (sic) para ordenarla.
La suspensión no puede ser acordada a petición del tercerista más que ante
la evidencia de que la ejecución le causaría un daño de consecuencias
irreparables. Es el caso, por ejemplo, del tercero que solicita la suspensión de la
ejecución de la sentencia que ordena la venta de un automóvil• que a su juicio
le pertenece y cuya propiedad reivindica.
Todo indica que al referirse el precepto a que” los jueces podrán ... suspender
la ejecución”, la delegación de la competencia, implícita en todo caso, recae en
el mismo tribunal que conoce de la tercería y el apoderamiento con esta
finalidad debe hacerse con posterioridad a la notificación del correspondiente
acto introductivo o talvez, para variar, en la misma actuación. No antes. La
precisión sobre la competencia es muy importante porque a través de un
símil con el patrón de la suspensión de la sentencia recurrida en apelación,
pudiera plantearse llevar el asunto ante el Presidente del tribunal cuando
este es colegiado y no ante el tribunal mismo, en pleno.

101
Las vías de recursos en el proceso civil

El artículo 478 CPC no alude por ningún lado al juez Presidente estatuyendo
en referimiento. Tampoco ha habido una disposición más reciente que a
modo suplementario lo haya hecho. Por tanto la competencia es del tribunal
como tal, no del titular de la Presidencia.
La ley es muda con relación al procedimiento que se emplearía con esta
finalidad. Por analogía podría sugerirse seguir el patrón de las demandas
adicionales o de los encausamientos a breve términos.
21-Prohibición de la suspensión en materia de desalojo de inmuebles
Alarcon (2016), señala que hay un caso, empero, en que por excepción a la
regla se difumina cualquier posibilidad de que se acoja la impetración de
suspensión. La facultad que en principio tendría el juez de otorgar este
beneficio se deniega en términos absolutos en un único supuesto previsto en la
primera parte del artículo 4 78 CPC: cuando la tercería atañe a una sentencia
que ordena el desalojo de un inmueble y que además ha adquirido la fuerza
de la cosa juzgada.
La prohibición, ya desaparecida en Francia, viene, pues, condicionada a dos
factores que deben interactuar al alimón: a) que el fallo disponga la
desocupación del inmueble; y b) que haya igualmente pasado en fuerza de cosa
juzgada. A falta de cualquiera de ellas, el tribunal puede suspender la ejecución.
Así, por ejemplo, enfocándonos en el segundo requisito, la suspensión podría
ser otorgada tratándose de una decisión que sin ser firme todavía, se beneficie de
la ejecución provisional.

102
 Resumen de la Unidad III
El recurso de tercería está regido por los artículos 474-479 del Código de
Procedimiento Civil.
La tercería es una vía abierta a todos los terceros cuando son lesionados o están
amenazados de un perjuicio por efecto de una sentencia en la que no han sido
parte. Este recurso se fundamenta en el principio constitucional de que nadie puede
ser condenado sin haber sido oído o debidamente citado.
La persona que no ha sido citada ni representada en una instancia, puede deducir la
tercería contra la sentencia que lo condena o le afecta sin que haya tenido la
oportunidad de ser citado o representado en esa instancia, porque ello sería al
sagrado derecho de defensa establecido en nuestra Constitución.
Se admite también que una persona puede deducir la tercería contra una sentencia,
cuando invoca una calidad diferente a la que tenía en primera instancia, porque la
recibilidad de la tercería, no es una excepción al principio general ya que el
litigante forma su recurso fundamentándose en una calidad diferente, aquella con
la que figuró en el primer grado.
Con el recurso de tercería se quiere garantizar el debido proceso, y se le da la
oportunidad a una persona que no fue parte en el proceso, pero que intervino una
sentencia que le perjudica o le causa ciertos agravios, y justo que esa persona
pueda interponer alguna acción para hacer borrar los efectos de esa sentencia, para
lo cual podrá aportar todas las pruebas ante el tribunal, en apoyo a su defensa
material.
RESUMEN

El recurso de tercería, es un recurso extraordinario. Sin embargo, cuando veíamos

la clasificación anterior, la tercería no es ni de retractación ni de reformación, pues
puede ser ambas, según sea el caso.
El legislador trata de defender al tercero de varias maneras: 1) Intervención;
persona entiende que un proceso pudiera repercutir en su contra simplemente
interviene 2) Medios de Inadmisión o defensa invocando el efecto relativo de las
sentencias (Art. 1351). 3) Tercería. Condiciones de admisibilidad: a)
Efectivamente un tercero (no participo en el proceso bajo ningún título y b) Que la
sentencia le cause un perjuicio actual o eventual, material o moral. Respecto al
medio de inadmisión en virtud del efecto relatividad de la sentencia. Lo
aconsejable es incoar dicho medio de inadmisión y dependiendo de la suerte del
mismo, incoar o no el recurso. El incoar el medio d
inadmisión pude traer beneficios pero no puede, de manera alguna, perjudicar el
recurso, por lo cual es recomendable procedimentalmente hablando Requisitos
para la procedencia del recurso de la tercería:
1) Haber sufrido un perjuicio o estar amenazado de él.
2) No haber sido parte en la instancia.
3) No haber sido representado en la instancia, salvo caso de fraude.
Actividades Unidad III
1-Acercate a una Cámara Civil, y busca una sentencia en la cual se haya
interpuesto un recurso de tercería, y verifica las condiciones en que se interpuso el
recurso de tercería. Realiza un informe al respecto envíalo al facilitador para su
socialización.
2-Redacta un recurso de tercería y envíalo al facilitador para su socialización.
3-Redacta las conclusiones de audiencia en un recurso de tercería y envíalo al
facilitador para su socialización.
Resuelve la siguiente casuística
El señor EL ARRANCADO, recibió una notificación de parte del señor EL
RICHACHÓN, en la persona de un vecino, el cual no firmó el acto. En dicho acto
se le notificó una demanda en resolución de contrato y daños y perjuicios para
comparecer en el plazo de la octava franca de ley, ante la Cámara Civil del Distrito
Nacional. EL ARRANCADO, no compareció ante el tribunal, y cuando le
notificaron la sentencia condenatoria en su contra, este procedió a interponer un
recurso de tercería, alegando que la sentencia le perjudicó sin que se le diera la
oportunidad de él defenderse, ya que la notificación del acto introductivo de la
demanda fue notificado en la persona de un vecino el cual no firmó el acto como
establece la ley. Responda invocando los textos legales correspondientes, doctrina
y jurisprudencia.
1-Considera usted que la notificación de la demanda fue correcta? Por qué?
2-Considera usted que el recurso de tercería es procedente en ese caso? Por qué?

3-Que otro recurso usted considera que podría ser procedente? Por qué?
Ejercicios de autoevaluación de la unidad III
Encierra en un recuadro la letra V o F, según que el enunciado sea verdadero
o falso.

1. V. F La tercería es el recurso abierto para las personas que no han sido parte en
un proceso y que se sienten perjudicada por la sentencia.
2. V. F El recurso de tercería se interpone ante el tribunal jerárquicamente superior
a aquel que dictó la sentencia.
3. V. F El recurso de tercería sólo se interpone por vía principal.
4. V. F La tercería tiene por efecto suspender la ejecución de la sentencia.
5. La parte que ha sido representada en una instancia tiene derecho a deducir la
tercería.
Bibliografía Básica de la Unidad III

Alarcón, Edynson, 2016. Los recursos del Procedimiento Civil, Recursos

Comentados, 3ra. Ed. Ediciones Librería Jurídica Internacional, S. R. L., Santo
Domingo, D. N Constitución de la República Dominicana.

Código de Procedimiento Civil dominicano.

Pérez Méndez, Artagnan, 2009. Procedimiento Civil, Tomo I, Vol, II, Impresora
Amigo del Hogar, Santo Domingo, D. N.
.

Tavares, Froilán, 1989. Elementos de Derecho Procesal Civil dominicano, (Vol. I y

II, 6ta.
Edición, Editorial Cachafú, Santo Domingo, D. N..