Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
C ole cción
------"------F
en torno a los
DeI dicho al hecho: cinco miradas
vin cu los e ntre pr oy ec t o y ac c ión de en s e ñ a n z a /
Bib l i o t e c a Nacional:
A na Za va la..' let af ' l' - - uónt ev ideo:
CLAEH,2 01 0.
his t or ia ; 4)
136 p . ¡ 24 c: m . - ( Cuader nos de
1. HISTOR]A - ENSEÑANZA
I. Zavala , Ana , 1952- c oauc '
Ana Buela
87
Ya teníacasipronta la primera ficha de trabajo: esla Historia?".
"¿Qué
Como el curso tiene un énfasisen nuestra disciplina,%creía necesarioco-
menzar hablando de la Historia, mostrándolesqué estudia, quiénes lo ha-
cen, cómo se reconstruye el pasado histórico, desde qué lugar, etcétera.
Esteproyectono desapareciódel todo. A una semanadel inicio de cursos
no podía borrar y er;:tpezarde nuevo.
94 Mientras que el de primer año tiene (mejor dicho, tenía) énfasisen Geografía.
95 Philippe Rekacewicz,
"La cartografía:entre ciencia,arte y manipulacióno enLeMonde
Diplomatique,marzo de 2006,pp. 20-22.
88
Pensarque los mapas representanel espaciotal cual es y que la
nos enseñalo que pasó. historia
89
implicala desujeto,deactiaidaddelsujeto,derapportdersujeto
consigo
milyo' de rapportdeesesujetocon otros(quecáionstnyen,
' controran,
aalidan,compartenesesabeir).ss
90
tanto busco tirar por tierra ra idea de ra reina frívora
que re dijo al pueblo
francés:(si no tienen pary coman torta>>.
.Ahora bien, ¿cuántasvecesestaremoscargandoa una clasede infini_
tasintencionalidadesdg ra¡ que no somosconscientes?
esto o decimos lo otro? ¿paraqué hacemos
¿cuántasvecesestaremosdiciendo urgo qrr" ,,o
sabemosde dónde.viene,-dónde ro aprendimoso quiér,no" lo contó?
Entonces,escribir sobre gy" p".*u-o, acerca
de ra historia, cuál
sabemosy qué hacemosen el]osar,ónáe clase,ur
r-p."r.irraiut" para com-
prender y así poder transformarIa enseñanza.
Meprur.,r"rtru, prácticas
r-rpon", primero, entendercómo somoscomo
prof"ro.", mirado alaluz
de los profesoresque queremosser.podemos,ir"i.
i"tárrtando ser otros:
los que evalúan objetivamenteo-los quedan ad;;l;ilost.rrus.
mos empezara cambiarla mirada, transformar o pode_
lo insoportabre
t *por_
table100 y de a poco buscarentenderpor qué es así. "r,
Las preguntasque nos formuru*o, * estabúsqueda
nunca estáncir-
cunscriptasúnicamentea la clase,sino que remiten
necesariamente a una
dimensiónidentitaria:.¿porqué piensoüs clases
au qué
me gustamás la histo:ia contemporáneaque la "riuJtrma? ¿por
antigua?.ro. q.ro"*u g.rr_
ta estehistoriador?¿por qué estótema nunca lo
dolz ¿plr qué me siento
cómodacon estosarumnosy no con estosotros?
H;[a; las respuestasno
es el objetivo del presenteaitícuro.sería demasiado
u*uilioro querer en_
Esteejercicio es soto et inicio de una uJsqueaá
::lÍ:il:*e'o. que es y
El bastón blanco
9l
De repente empecé a empantanarTre:
!á-mara lenta y pausa. El pro_
grama pidetotabordar una civilización de Medio
oriente f ,r'u americana.
¿Egipto?.La,profesora de r..eme decía que ella ya to trabía trabajado en
profundidag,,po.lo cual no podía volvei a lo mismo.
Decidí trabajarcon
un mapa del libro pensarla Historialv donde aparecían
señaladaslas zo_
nas donde surgieron las-primeras civilizaciones.
Esto me permitía hacer
una Presentacióngeneral y luego irme directamente
hacia América,1'ses-
cenario que no habían.estudiadóen primer año.
Allí pr"su'turiu distintos
grupos indígenasen diferentes estadiosculturales
y triugo trubajaríasobre
los incas.
caminar a la deriva y no visuarizarun caminopor
er cual transitarson
la misma cosa.Desde rrüryo hasta noviembre me
sentí caminando con el
<bastónblanco,, (expresión de desesperación
q,r" ,rru^á, con mi colega
Magdalena cuando nos sentimo, p".didu, ur, ál
progr".""l. Iba para un
lado y-de repente me enfrentaba con una paredj,.dé
acá no sargo>),me
decía.Buscabaentoncesotra ruta.... comenzaba
a leer un tema conven_
cida de que lo iba a dar y luego lo desechaba.
Mis convencimientoseran
efímeros.
Pero volvamos a América. Cuando terminara
con los incas, ¿qué ha-
ría? ¿volvería a Europa.y daría Grecia,Roma
y luego la-caídadel Impe-
rio? Tenía que hacerlo porque de ro contrarioir"g;u; a octubre con
f.pr_do
estetema. ¿Quétan rápido? Me implicaba estudiar *,r"ño. Además nunca
puedo hacer síntesisdelos temasque araño;ahí
seguro me estancaba.ca_
llejó1sin salida y yo asistiendo a mi propia muerté.
Anuncié que íbamos
a estudiar Grecia sin ningún de ello, po. Jos razonesbá_
"o.,rrur,"lrniinto
sicas:1) no sé trabajarsuJintamente temasque doy poi prirrru.avez,y por
tanto temíaetemizarm.,y 2)-ellosya ro habían
urLiiuáo en primer año.
Finalmente, decidí quedarme ón Américu y truuu¡uiJ
o.uro de esas
civilizaciones: la Conquist4 América bajo el dbminio
de Espana y revo_
de independencia con foco en el Río de la plata
fycfgnes . Cruzatíael At-
lántico solo a los efectos de explicar los fenómenos
americanos cuando
ameritara hacerlo.
92
Tuve varias vecesla sensaciónde que estabaestropeandodemasiado
la cancha.Temía que los chiquilines notaran mi incoherencia,que me re-
clamaran que les decía una cosay luego hacía otr4 pero eso nunca suce-
dió. Sospechoque en parte esto se debe a que las clasestenían principio
y fin. La semana de trabajo tenía coherencia,pero si alguien me hubiera
pedido que contara el trabajo que realizaría a lo largo del año, no hubiera
podido. ¡Claro!,los alumnos difícilmentepercibenla ruta larga. Para mí
fue terrible no haber podido (salvo excepciones)ir y venir en el curso,
zurcirloalos temas.
104 Desearíasiempre poder zurcir los temas. Es como el desplazamientoen el riel, que
hace la cámara a medida que va filmando, Me encanta sentir que puedo hacer ese
ejercicioy me frustra terriblemente sentir que las clasesson como tomas aisladasde
una película que nunca se puede editar.
93
ser profesora de CienciasSocialesy serlo ademásde un programa nuevo,
larguísimo y cuyos temas no me gustaban.Lo era también sentirme sin
rumbo, trabajando en un presentecorto que no tenía proyección más que
para dos o tres semanas.
Frente a esta situación busqué algo que me devolviera el placer de la
docencia.Un respiro, una pausa en la adversidad.Tenía que hacer algo
distinto, que al menos los entusiasmarafrente a temasque ya habían visto
y no querían volver a estudiar. Por ejemplo: <(Losviajes del descubrimien-
to> (<¡otravez Colóry no!>)o frente a otros que me resultabandemasiado
áridospara un segundoaño (comolas <Nuevasideas>).
Estasestrategiasque puse en práctica tienen que ver con mi pro-
yectode enseñanzade la Historia, ese que está siempre en todas par-
tes, haga lo que haga. Por supuesto que ese gran telón de fondo que
es el proyecto, no aparecede un día para el otro. No es fácil, siendo
para cada uno de nosotros tan <naturalo,hacerlo aparecer,como pre-
senciay como génesis,así que empiezo por mi propia historia con la
Historia.
<Tendremossuertesi aprendemos
queno hay ningún lugar,queno hay ningún atracadero
quepuedadisolaeren su esconditelo quefuimos>,
Fernando Cabrera
94
(no fue), sino que resulta
natura. Intento mostrarles que la historia
que vean que ciertas
imprescindible para .onotui el presente'Busco
en otro tiempo o que se
¿" Ia actualidad tienen sus orígenes
".J* como contenidos del
relacionan con algún fenómeno que tiabajamos
pasado.
Hicimosuntrabajoconlosd.atosactualesdeHaitíyBoliviaqueextra-
los índicesde pobreza:mortalidad, analfa-
¡e ta GuíadelMuráo.vimos
de
betismo,etc.Luegotrabajamossobrelosgrupos-étnicosyyolespregun-
América Latina fueran
taba si era casualq,r" 1o, áos puíre, más pobr-esde e
i", áo, que tenían mayoresporcentajesde población.afrodescendiente
a continuación de todo lo
indígena respectivamJnte.Este ejercitio heCho
pro."ro de conquista y de la sociedad
quuohuuiu*ós trabajadosobre "í
que resulta el cono-
colonial, buscabaqul ellos captaranlo imprescindible
cimientohistórico.
Porque<lahistoriaeselúnicoinstrumentoquepuedeabrirlaspuer-
t-^"no"
a s a u ncon o cim ie ntodelmundodeunaman e ra s in o c ie n t í f ic a p o rlo
roronadar.tosles digo a los chiquilines,también siguiendo a Vilar'
hay que saber
qrr" puru saber leer un diário -un gesto tan cotidiano-
lo sepan
historia.106 E insisto en que ell0s ya tib"t't mucha historia sin que
conscientemente(esunl también de generarlesautoestima y de
^urr"rá
transmitirlur.or,fiu.ra para estudiarla asi8natura)' -
historia" incluí la
En la ficha introductoria que prePalé "Qué es la
en las elecciones
tapa aet diario Clarínsobreelúiunfo áel FrenteAmplio
El titular decía ..Histórico triunfo de la izquierda en Uruguay"-
¿Ét ZOO+.
e| diario titulaba así?
i"t p"ai que ellos irri"rp,"t"'an la noticia: ¿Pg qué
Amplio nunca había
casi todos pudieron decir que era porque éi r."nte
eanadolas ólecciones.
r- pocosex-
..r" ustedescómo sabeneso?rr...porquesír, decían.Algunos
firmeza: uNo es
p."r"ion' ,rMe lo dijo mi mgfre",Les repliqué -conmucha
interpretar la-noticia'
porq.r" sí, esporqué sabenhistoria,por ésopudieron
par{do¡ políticos y saben que
Forq.r" ustedes Jono.ur'tla historia de los
La fuerza de
;;t* gobernó el Partido Nacional o el Pártido Coloradoo.
luego saquéde una
mis palaürasles agradó y se miraban satisfechos.Pero
guerra en
;".p:i;;" montóí de retortes de diarios y revistasreferidos a la
etcétera, y ahí no pu-
los Balcanes,al conflicto árabe-israelí,al apartheid
del diario tendrían
dieron decir casi nada. En broma les dije qtu "tu parte
;::-,run:y"i*pri"uq"";;;i";;;"t#11':::"::":
La docenciaes tristementeuna
^:lix:
pero tare
mente. aveces mepresunro siros
gar a imaginar lo fascininté &i:TtrE:,::X?::t¿?iJr'":','il:
que es.noiq"" estáIlena de reconocimientos,
ff r:tXltTff#t':';:::i:dt'* p"q'é¡*t'o.r"9,.
sumo se compart-":
q"uJ"pu,.iuun soro
esuna tareaen.or,rro irero también
escaptaruru'aito,iT|ffi
:H:,";Tlffl":ff
5:l"i*;lll#
-::","1gú"."hrg9.
res no eligieron estar arf. No
rr u pui*urru."r en sus butacas
mala, esperandosilencrosamente si la obra es
su final.
b. Cuestionar lo natural
97
Las situaciones en las que intento sensibilizarlos son las referidas a
las desigualdadeseconómióas.He trabajado en distintos fllrsos dos ac-
tividade"sespecialmentepara ello. una que consisteen comParar los PBI
per cápita dé diferentes paísesy ver en números cómo viven unos y otros
habitantesdel planeta.
Y otra que se refiere al mundo deliet set, que en bttena medida oPera
como modelo. Es una nota sobre |ennifer Aniston y Brad Pitt, en el mo-
mento de la noticia, uno de los matrirnonios más exitosos de Hollywood' El
artículo cuenta que la pareja gasta(ba)diez mil dólares al mes en cremas.
La noticia puede r,b p.o*ró."mos demasiadoestupor habida cuenta de
que estamosacostumbradosa ver a esosPersonaje.s llTV o enlas revis-
9n
tas de la farándula. No es secretasu riqueza que, lejos de querer reservar
al ámbito privado, se exhibe como ejemplo de éxito social'
Muchós alumnos se corunuevencon estarealidad y otros no. Algunos
dicen que, si es su plata, estábien que la gls,b"-"" lo que quieran'1ffiEs un
razonamiento que va de la mano con el del esfuerzo.Se esforzaron Para
tener todo lo que tienen.
He aprenáido a aceptar estas opiniones -que antes internamente
descalific-abaal instante- a la luz de mis propias contradicciones.loeBusco
crear un clima en donde se sientan con confianza Pata fazonaf y opinar
libremente. No quiero ser una profesora que oles baja línea", por lo que
me preocupo especialmentepoi escuchara aquellos alumnos con los que
discrepo.llo
Doy sí un combate por los olvidados de la historia: los negros, los
indios, ios gauchos,las niujeres,los pobres.etcétera.Ellos estánen mis cla-
sesporque"forman parte de mi deseode sensibilizara los alumnos con las
in¡usticüs sociales;recuperar para que puedan oír a los que no han tenido
vó2. Comparten escenuiio .o., otroJ: los gobemantes,los doctores,los es-
tancieros...Aunque, revisando, veo que tienen los roles protagónicos'
tOA Et pt*t* que les hago es que un mundo que acepJaesocomo natural nos tiene que lla-
mar la atenáón. Por{ue r"r.rttu itrdtttisible tal opulencia conviviendo con tanta miseria'
más
L09 Les digo esopero luego me voy del liceo a mi casa,que estáubicada en unbarrio
lindo que el de ellos.
juntas y desde
110 ConMagdalena siempre conversamossobreel tema' Las dos nos recibimos
q,r".oni*u*os a trabajar, siempre lo hemos hectto en contextosde pobreza' Creíamos
de otrás olvidados o marginados, como los indios, los negros,
{ue mostrarles la realidaá
los obreros o los enfermos, podría hacerlos encontrar un lugar donde identificarse' Sin
embargo esocasino sucede.Las historias felicesson las que los seducenmás.Pensándolo
bieo rádtabastante natural: uno sueñacon aquello que querría ser'
98
ne-
No se puede trabaiar la sociedadcolonial únicamente viendo a los
arranque. Pero
gros y a los indios, potq"" seríauna mirada tuerta desdeel
so-
íí, necesariamente,uno decide cuánto quiere detenerseen cadag{Po
claro está,iluminamos algún lugar y
y .otr,o hacerlo. En el escenario,
"iut
dejamosotros en Penumbra.
La preoia
lo habían visto el
11t L.r .hlq*lt""s ya sabíanque en el debatehabría una vela porque
viernes anterior en el grupo de2'e 6'
99
(Con estasmanos ustedesvan a participar y luego van a votar a favor de
uno de los equipos",les digo.
Alejandro es Inocencio VIII Mateo (quien aparecedespués de haber
faltado toda la semana),Analía y Cecilia son los comerciantesque finan-
ciarán el viaje. IncreíblementeAlejandro tiene una cadenita con una cruz
lo que le sienta muy bien con su personaje.¡Toda una revelación!
¡Acción!
Nanando la acci6n
100
El tribunal pregunta. Mateo no preparó nada pues recién se reintegra,
pero es inteligente y-les sigue la exposición. Alejandro preparó una série
de preguntas y las formula correctamente.Algo pregunti Cecilia; nada
Analía. Desde atrás,formando parte del públicó, nóargo les pregunta so-
bre los vientos, cómo pensaban afrontai posibles torrientas... .i¿pueden
navegar el Índico?rr.Poi primeravezestá quieto, al menos parece absorto
en Ia actividad. Yo estoy sentadadetrás de Maximiliano y Diego. Hoy Die-
go no mira por la ventana; es más, pareceque hoy no hubieranada áetrás
del vidrio.
Van respondiendo a las preguntas del público con soltura; suenan
convincentes.Y lo que no deja de sorprenderme,se escuchanentre ellos.
Lorena le promete al tribunal el sesentapor ciento de las gananciasdel
viaje, <de todas las ricas especiesque vamos a traer, y tambi-énoro, plata,
{uTTÍ"? algodón". Reparo:mencionó damascos,téimino que habíamos
definido la clase anterior. cuando les anuncio que vamos á pasar a los
navegantesespañoles,todos aplauden.Rodrigo chifla: ,.¡uguurie.los por-
tugueses!>.
Los españolesson Leonardo, Marina y Analía B. En estegrupo se des-
taca Analía; la elegí a propósito para que levantara el nivel.-Leónardo es
medianamentebueno pero muy tímido; Marina es buena aunque incons-
tante enel trabajo y el cuatro miembro, jesús, desertó.Desde qüe armé los
grupos Analía protestó. Prime¡o me reprochabael haberla etegido para un
trabajo cuando ella no precisabala noia, y ruego protestabap-orel equipo
en el que la había puesto. Analía es muy amigá de Agustina y Lorena, y a
su vez es la novia de Germán. pensé que el hecho dé enfrentarlos les iba
a dar más confianza para animarse a debatir. Además, no podía ponerlos
juntos porque se ,,robaban>el debate.
Analía sacauna naranjay dice que ellos sabenque la Tierra esredonda
y por esemotivo eligen llegar al estenavegando hacia el oeste.<Nuestra
ruta es más segura porque aquí no habrá pósibilidades de que nos asalten
piratas o los furcos>. Leonardo murmura cosas,pero no s"i-po.u con la
voz y.Marina repite lo que dice Analía es su eco.Mateo les pregunta por
los alimentos y las carabelasque van a llevar. <¿Cuántoskil,os?i,.empie-
zan a sentirsevarias vocesal mismo tiempo, porque esono lo prepararon.
El resto de la clasequiere dejarlos en evidencia.Ánalía se bajonea,Marina
le habla... Intervengo,parano dejar caerel crima de clase.ir.r"go Alejan-
dro les pregunta por los vientos alisios. Analía explica que no ios afecta-
rán porque esosvientos no llegan a la región por lá q,r" pi".,run navegar.
Verónica-si verónica,la que siempreestáen otra-les preguntapoilo,
l0l
instrumentos técnicosque llevarán. Leonardo habla de los usos del astro-
labio y la brujula. Ya veo que esade aprenderselos usos de los adelantos
técnicoses una "fiju". En el reparto que hicieron entre ellos parecía estar
establecidoque uno leía esepunto.
Mateo les dice que esa ruta no tiene certeza.<¿Enqué se basan para
pensar que cuzando el Atlántico llegan enseguida a Asia?". Marina em-
pieza a decir que es <cuestión de creero,que precisan arriesgarse.AlSu-
nos saltan de atrás... <pero los portuguesesya sabíanque Por Africa iban
bienr, etcétera.Se alborotan Pero están discutiendo del tema. Toca el tim-
bre. Sevan hablando del debate.
El lunes conocimos los fallos del tribunal. Tres votos a favor de los
portuguesesy uno (el de Mateo) a favor de los españoles.Mateo dice que
ól traba¡o de los portugueses fue más convincente ("hubo más trabajo de
equipo") pero que él creíaque había que apostara otras rutag no quedarse
solo con la de África, por eso financiaría el viaje de los españoles.Alejan-
dro dice que el equipo de los españolesno estabamuy coordinado y que
en realidad solo hablaba Analía. Cecilia y Analía P. coincidieron en que a
los españolesles faltó mas trabajo de grupo.
¡Acción!
Narranilo la acción
l02
la tercera y
Luego les pido que lean los textos y valan completando
en el cuaderno. La primera
última columna del áadro que tienen cópiado
,.Nuevas Ideaso y la terce-
columna dice oAntiguá negi*"",r,Ia segunda
dos primerT' Pof lo que' de
ra <Autores/fi1ósofü'. Ya íienen hechas"las
hablaban de soberanía
ahora en más, deUeián saber qué autor o autorei
;;;i"; quiénes defendían la monarquía limitada'
que competir) consiste
La tercerap"rr" ó;u serádivertida, pues habrá
"
a caáu equipo en función
en una serie de pr"g¡*tu' que voy formulando
equipo üene un vocero o
á" to qrru hicieionin la segunda-Plfe' Cada
personaje,nunca diciendo su
representantey estecontestácon la foto del
..-..g""rpizarrónfiguran:-ol-osIndecisos,,,<LosBuitres,,,.American
nómbre.
jaimito"' Empezamos' "¿Qué fi-
Idiob, .<LosTen>>,"Siñ No^Ureo y olos
lósofo o filósofos ,rr,á sola persona-no podía concentrar los
";i;6tq"" vamos por partes... ..co-
tres poderes?,,.ToJos ¿ríá al mismo tiempo.
imito la v"o' de SusanaGiménez y etl-o-s se ríen' <¿Vamosa
rrectooooo>>,
Idiob'
doblar?rr,pregunta Vanesa' <Punto para American
caótica y todos gritan alavez, pro'
Como la clasese torna demasiaáo
pongo hacer,rr'," *áu fu 9fe c1d.aequipó responda solo' En caso de
"" equipo que levante la
no saber tu r"rpt"rtu, ," tu ¿uiu palabra al prlmei
no alcanzo
;; perdóoia foto. grto también generadificultades Pofque
a ver qué equipo levantó prirnero'
gsteUan-que miraba por la ventana y no se-sumoa Iringqn grupo-
altura lo dejo..- es un chi-
se ofreció para ayudar^" ér, h tarea.Ya a esta
pero negado, conflictivo'
luiün *uy ittt"tígente y entonces emPlt
Esteban va dicienáo qué équipo debe responder
zarr aordenarse.S" entré eilos. Tienén encirna de los bancos el
"r.n"flut
cuaderno abierto;;;i;rq"ema de las tres columnas y los textos. Recién
ahoracomienzanatomarseuntierrrpoPararesPonderbuscandoenlos
materiales.
Creoqueestasdosclasesdedicadasaljuegodl}osfilósofosdelsiglo
estricto' pero sí las
xvIIL fueron de las últirnas con el 2.43. No en-sentido
últimasqueconsideroquepuedenserllamadasclases,pueslasquetrans-
encuentros obligados en los
currieron hasta fin de uño'fuuror, más bien
que ellos y yo h.rchábamosPor aguantar'
103
El juego en el aula: lo que no pertenece a la realidad
104
El autor italiano Andrea Imeronilr2dice que estetipo de juego se llama
orientado,se contrapone al espontáneo, y justamente es el que predomina
entre los niños grandeg adolescentesy adultos. Entonces,én ei ¡uego que
se desarrolla en el aula no existe creatividad lúdica de los estudiantls;
ellos iuegan lo que nosotros queremosque jueguen y bajo unas reglas tam-
bién previamente establecidaspor nosohos. Esta concepción coñtraría la
del psicoanalistafrancés Testayre,quien parte de la base de que el juego
siempre nace del deseodel jugador y nunca puede ser algo ordenado pór
otros.113
Trátese de una actividad orientada o espontánea,llevada a cabo en
el marco de una claseo en un espaciolibremente elegido por los jugado-
res, las sensacionesde júbilo y tensión siempre están preJentes.Jugar es
divertido, conlleva pfacer,pero al mismo üempo mantiene la ateniión y
requiere concentración.Máxime si se trata de una competenciaen la que
los jugadores se esforzaránpor derrotar a sus contrincantes.
Por último, jugar es, según varios autores,salirse de la realidad.lla En
palabras de Huizinga, (<serde otro modo que en la vida realrr.El juego
tiene fantasía,ya que todo es posible. Podemosser otras personas,en otro
tiempo y en otro lugar. No tiene límites precisos más que los impuestos
por el propio juego o los que se autoimpone el jugador. Trasladadó esto al
mundo áulico, ¿cuáles la aiila real de la clasede Cienciassociales?
¿Esta-
mos en clasecuando jugamos?
El2.a 7 fue, desdeel punto de vista del rendimiento académico,uno de
mis peoresgrupos: La mitad de los alumnos sellevó la materia a exameny
durante el año el clima de clasefue siempre tenso.Digamos que no podíi
descuidarme porque enseguida se descarrilabael trabajo; casi cotidiana-
mente tenía a dos o tres alumnos fuera del salón. Estascaracterísticasque
describo me hacían suponer que el debateno iba a salir bien, o por lo me-
nos iba a salir peor que en el resto de los grupos. sin embargo, y para mi
sorpresa,fue en donde meror se debatió; en donde mejor dima se-logróy
fueron, tambiéry por lejos,los equipos que mayor esfuerzo dedicaroñ a lá
tarea.La actividad fue un oasisen el desierto;rompió con una rutina, más
bien con un modo de ser del grupo (y también mío, supongo).
1t2 Andrea Imeroni cEl juego como medio educativo>.Conferenciabrindada por el au-
tor. La Coruña,7986.
1 1 3 Citado en Hilda Cañeque,luegoy tsida,BuenosAires, El Ateneo, 1991,p. g.
114 Dice s. Freud que lo opuesto al juego no es lo serio sino lo real.. . <A pesar de toda la
emoción que caracterizaal mundo lúdico, el niño establecebien su diferencia y expe-
rimglta placer al unir sus objetosy situacionesimaginarias con las cosastangiblei y
visibles del mundo realo, En H. Cañeque,o. cit.
r05
Tan satisfechame había quedado que supuse que en el escrito se ve-
ría reflejado este trabajo. Pero, otra vez para mi sorpresa,no fue así. El
2P 7 volvió a rendir como de costumbre: solo la tercera parte de la clase,
aproximadamente, alcanzóel nivel aceptable.Para mí era aún más increí-
ble que Alejandro se hubiera sacadoun <dosr>.Corregí su escrito varias
veces,lo leí de atrás para adelantey no le daba para más. ¿Quéhabía Pasa-
do? ¿Cómoun alumno que había trabajado tan bien en su rol de Papa,no
había podido responder en el escrito?¿Quéabismo había allíztts
Intuyo que para los alumnos el juego no formaba parte de la clasepro-
piamente dicha. Laaida realde estapasabapor una profesora que entraba,
pasabala lista, se paraba adelante y hablaba o escribía en el pizarrón o
trabajabacon las fichas.Eso sí era la clase,lo que supuestamentehabía que
aprender para pasar de año o para salvar el escrito.Pero la fantasíaestaba
fuera de eseformato.
Lo que transcurrió en las instanciasde juego formó parte, creo, de lo
irreal. Analía P., que en el debate casi no habló aunque formaba parte del
tribunal, sacó una buena nota en el escrito. Su rendimiento fue mucho
mejor que el de Alejandro. Analía era medianamenteaplicada y estudiaba
para los escritos,en cambio Alejandro no. El volvió a ser el de la vida real
(un mal estudiante), aunque el día del debatehabía logrado -maravillo-
samente- convertirseen otro.
¿Dónderadica el problema entonces?¿Enque los alumnos no logran
captar que el juego forma parte de la clasey que los profesoresbuscamos
que seauna instancia más de aprendizaje?¿O será que los profesores no
establecemosuna evaluación que se correspondacon esainstancia de jue-
go? ¿O hacemospocos juegos, lo que les hace pensar que se trata de un
alto en el trabajo en serio?Supongo que un poco de todo.
Primero, la evaluación no consistió en otra actividad lúdicE lo que
hubiera tenido más que ver con la propuesta de trabajo, pese a que cada
equipo llevó una nota que pusieron los miembros del tribunal y otra que
les puse yo. En realidad, a los ojos de los alumnos se trataba de una nota
más (un oral) y no del escrito, que siempre tiene un peso institucional mu-
cho más fuerte, independientementede que uno no lo haga pesar tanto.
Segundo, creo que tenemos incorporada una concepción del juego
como pausa necesariaal trabajo o estudio en serio (¿algomás descansado
1L5 Una situación similar volvió a darse con el 2.e3 y el juego de los filósofos del siglo
XVIII, aunque no puedo desarrollarla tanto pues en el escrito que evalué este tema:
solo les forrnulé dos preguntas referidas a esospensadores.Setrataba del escrito final
y tenía otros temas para preguntar.
106
quizá-?,¿un pasatiempo?).De hecho, yo.misma pensé
en este tipo de acti_
vidades para aquel-lostemas en que creía que páar"
les muy pesados.Rastreandora tibriograr?a o resurtar_
"u".rirros
óu.e ui¡*go encontréque
estaidea era manejada por Comenio, L'ockey
J"llres de los sigros
xvl y XVII. por ro.tanto, era esperableque los "urio,
arumno, i.t"rp."t"ran que
el debate constituía un paréntóis dentrb del trabajo
ru.io, que era el que
hacíamosel resto de los días.
De todos modos, tanto Comenio como Locke veían
en las actividades
lúdicasuna finalidad educativa.SegúnFlores
D,Arcais,r; los jesuitasfue_
ron los primeros en crear un sistemi educativo
en donde estánminuciosa_
mente pautadoslos tiempos que se dedicana cada
acüviáad.y úA; y
la recreación,tan necesatios r,, concepcióry "l
también deben servir para
producir un aprendizaje. Er ".rpuzre me entretiene, pero al mismo tiempo
aprendogeografía;los juegoJde roresme permiten
aprenderhistoria, del
mismo modo, las academiasteatrales...
Creo que deberíaestabreceralgún método de trabajo
donde los arum_
nos vieranlos juegos con cierta cotidianeidad,
formanáo parte d,era aids
realde la clase.una,rutina que incorporararas
actividadesrúdicasen ra
mismajerarqujaque los repaitidos.Algo que convirtiera
a estasestrategias
-salvavidas de una maraiircunstancia- en un proyecto
de enseñanza.
En el escenario. Cenando un círculo
t07
co.Con la diferencia deque ahora puedo comprender cosasde mi práctica
que en aquel momento hacía infuitivamente. No es que uno innorie tanto;
' sucede
sí que uno empieza a entenderlo que hacecon la perspectiva de los
añosy graciasa la <gimnasia>que hemosvenido haciendoén Andamios.
Releyéndomedescublí que en los alboresde mi carreraya estabapresente
una modalidad de trabajo que fui confirmando con los áños.
Lo: repartidos por sí solosno son un guión, pues estecomprende mu-
-
cho más: hubieran precisado de mis anotacionei al lado de caáa texto, de
mi palabraexplicandola selección.¿peropor qué para mí eran un <guión
diario"? Lo eran y lo siguen siendo. porque lai fichas que armo para tra-
bajar con los alumnos son mi ruta, constituyen el caminó por el qüe puedo
transitar con,seguridad:yo la armo, pongo allí todo lo qué quieio abordar
y pongo también los ejerciciosque quiero que hagan.Cuando no hay nada
de esto,me pierdo.
final de aquella carpetatiene un aire de queja.Recuerdo -casi que
.El
revivo- la sensaciónamarga con la que terminé de redactar aquel capíiu-
lo que llevaba por título un fragmento de una canción de Dreiler.rlz Eran
tiempos de parcialesy exámenes,y me daba la sensaciónde que había que
poner un punto final cuanto antes.citaba a Borgespara decii que solo án-
tendemos-aquello que podemos expresarcon pálabras.,,puedá que tenga
razón. Tal vez exista mucho que tódavía estoy procesando,internalizan-
dq y que aún no pienso conscientemente.>
ocho años despuésme animaría a decir que he aprendido a ver en el
dar un trabajo infinitamente más complejó que el de planificar.porque
-clase
la docencia es una tareaen oiuo (como la o-brateátral¡, con otrosy conino,
que no se agota en saber más historia ni en haber dado un curso muchos
años.Foucaultllscoincide con lo que decíaBorges.,.Un saberes aquello de
se
Jo_q"." puede hablar en una práctica discurJivar. En aquella caipeta yo
habría querido decir más pero probablementeno hubiera podido, u.rr.,ql"
dispusiera de más tiempo. Afortunadamente, a vecesuno puede volvei.
<A la deriva, no quiso ser la segunda parte de ,,La historia que nos
une>.Pensary hacer
"A la deriva> me permitió darle un senüdo á lo qrr"
ya estabapresente.En algún momento sentí que veía la totalidad de aigo
que habíavisto en forma parcial y por tramos. pude comenzara decirlo qie
r08
hago.Curiosamente empiezo a comPrender algo de mi práctica docente
trabajando sobre un curso que di casi a ciegas.
Bibliografía
109
Cuadernode Historir (4)
BIBLIOTECA
NACIONAL
URUGUAY