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Ensayo.

Hablar sobre si es necesario o no una reforma en nuestra ley especial del Contencioso
Administrativo es un tema de una importante utilidad, ya desde aquí en las primeras líneas de este
ensayo le puedo afirmar que si es importante y mas que necesario que se haga dicha reforma, ya que
la estrecha relación directamente con la protección judicial efectiva de los administrados, que
además está consagrada en nuestra constitución y en principio este debe ser el instrumento como
base para la defensa del administrado contra la administración y no como un instrumento de
protección de la Administración frente a los particulares; aun tomando en cuenta que la Ley
atribuya a los órganos de la Jurisdicción contencioso administrativa competencia para conocer de
las demandas que pueda pretender la propia Administración contra particulares, lo que puede
involucrar es la creación de un fuero procesal para la Administración, mas esto no afecta el carácter
fundamental de la misma como instrumento para garantizar el derecho ciudadano al control, que
debe existir en un Estado de derecho.

De este modo creo firmemente que es fundamental aprender del pasado para tener una
mejor comprensión de nuestro presente, de una u otra forma el comportamiento humano tiende a
repetirse en ciertas circunstancias, pero en este caso conocer el pasado para saber la trayectoria que
ha tenido el derecho contencioso administrativo en nuestro país es de gran ayuda para saber a dónde
deberíamos llevar las mejores decisiones para mejorar las fallas que tenga el mismo. Tomando en
cuenta el criterio anterior puedo afirmar que aun teniendo algunas imperfecciones la Ley especial
por lo menos logro recoger de cierta manera una parte de los principios que dispersamente
regulaban la Jurisdicción contencioso administrativa y que se habían desarrollado jurisprudencial y
doctrinalmente, ya que para darse cuenta de esto solo es necesario buscar y ver lo abundante que
son las bibliografías y la gran cantidad de fallos dictados en las últimas décadas por los tribunales
contenciosos administrativos. Lo que nos puede confirmar que más bien la construcción del
contencioso administrativo en nuestro país ha sido gracias a la obra de los tribunales y de la
academias venezolanas, desarrollado con base en nuestras propias normas constitucionales y legales
que fueron de este modo engrosando el ordenamiento jurídico, por supuesto, con la ilustración de la
mejor doctrina del derecho administrativo contemporáneo universal.

Ahora si tomamos en cuenta por así decirlo que la primera reforma al contencioso
administrativo después de estar en vigencia la constitución del 1999 fue con la Ley Orgánica del
Tribunal Supremo de Justicia del año 2004, la cual no tuvo un alcance extenso que digamos,
podríamos decir que limitado, lo cual introdujo algunos cambios posibles a modificar el
procedimiento contencioso administrativo para poder acomodarlo al principio de la tutela judicial
efectiva, siendo un ejemplo el caso de la eliminación del agotamiento previo de la vía
administrativa como la condición de admisibilidad de la acción en materia de nulidad de los actos.
Aun mas fueron las lagunas que se presentaron, siendo la jurisprudencia la que tiene que
interponerse y hasta en algunos casos de necesidad para amortiguar estas omisiones.
En este orden, la tan esperada Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa
como he dicho anteriormente esta ley tuvo muchas marcas hechas por parte de la jurisprudencia y
doctrina que fueron tomados en consideración, como por ejemplo podemos decir algunos en el
siguiente orden: la atribución de sus competencias, la creación de la estructura administrativa y la
oralidad en el proceso. Aun con eso es importante recalcar que fue una reforma no tan
revolucionaria por no decir escaso en los avances que hizo, mas aun no le quito el merito de por lo
menos la recopilación de esa buena parte de doctrinas y jurisprudencias que tomaron en cuenta para
crear dicha Ley Especial y que también es una nueva base por donde seguir avanzando en el
desarrollo de nuestro Derecho Contencioso Administrativo, claro en ese momento podría haber sido
la ocasión para que nuestro legislador hubiera hecho reales innovaciones, como por ejemplo en
materia de medidas de urgencia y de ejecución de sentencia para así lograr una eficaz tutela judicial
efectiva del administrado, pero dicho caso no lo fue y ya es pasado en un futuro se deberá hacer una
nueva reforma a la Ley especial. Aun que por el momento será la labor de la doctrina y la
jurisprudencia el motivar nuevos cambios y mejoras en el sistema.

Tomando como base los verdaderos principios universales o la idea primarias a lo que debe
ser el derecho comparto las opiniones del Profesor Antonio Canova Gonzalez, que afirma a la
negación o al ver morir el derecho administrativo, que como ya antes mencionado es el instrumento
por excelencia para garantizar la libertad de los ciudadanos y el cual tenemos que denunciar en
forma contundente lo que ocurre y señalar con firmeza a los culpables. Y como dijo Allan R.
Brewer Carías “La mejor de las leyes está llamada a fracasar, si no hay jueces que puedan actuar
con independencia y autonomía, y además, no hay abogados probos que aseguren su aplicación”.
En nuestro país estamos pasando en una época oscura por así romantizar la grave situación que
estamos atravesando y los sectores que ha afectado pero no sé, si es por ser un soñador o porque
quizás este loco pero tengo fe y sé que estos malos tiempos crearan personas fuertes que traerán los
buenos tiempos y salir de esta oscuridad que estamos atravesando y en eso lo harán nuestras leyes y
nuestra sociedad. Mientras tanto hare mi parte en seguir aprendiendo y avanzando como ser para
ayudar a lo que pueda. Y mi conclusión es la misma que te di al principio es necesaria una reforma
a la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, y la respuesta es sí pero es posible
que aun no lo hagan de la manera más eficaz o como usted o yo esperamos que sea y quizás se
repita errores parecidos a la última reforma a lo cual espero mejor que no lo hagan y de allí dejar
que por el momento sea la doctrina y la jurisprudencia hagan su trabajo en no dejar morir el
Derecho Contencioso Administrativo. Gracias y hasta luego.

Luis Araujo: 27.306.012

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