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Método 1
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Practica torcer la cintura. Contrae tu codo derecho hacia el cuerpo con el puño
cerrado como si estuvieras a punto de dar un puñetazo. Tu cuerpo debe
orientarse hacia la derecha. Luego, practica torcer la parte superior de tu cuerpo
para dar frente a tu oponente. Esto le dará mucho más fuerza a tu puñetazo.
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Utiliza las caderas para generar fuerza, no solo los brazos. Recuerda que
generarás más fuerza con un golpe al torcer las caderas mientras te mueves hacia
tu objetivo. Los beisbolistas también utilizan esta estrategia para generar más
fuerza cuando golpean con el bate.
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Método 2
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Empuña el puño y termina el golpe. Algunas veces, es más fácil utilizar la
palma de la mano para golpear, pero en este caso, un puño es más preciso.
Apuntar a un lado de la cara de una persona y golpearla desde un lado es
extremadamente difícil de hacer con fuerza cuando solo se utiliza la palma de la
mano.
5.
Utiliza las caderas para generar fuerza, no solo los brazos. Genera más
fuerza con un golpe al torcer las caderas mientras te mueves hacia el objetivo.
Asegúrate de utilizar las caderas y los brazos si quieres poner más fuerza en tu
balanceo.
Método 3
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Párate en una posición consistente. Coloca tus pies a aproximadamente la
altura de los hombros y plántalos firmemente sobre el suelo.
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Protégete la cara. Flexiona los codos y mantenlos fijos. Luego, pon tus puños
arriba para que te protejan la cara.
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Espera que tu oponente restalle su cabeza hacia atrás y se caiga al perder el
equilibrio. Ten cuidado ya que esto puede causar que la persona pierda el
conocimiento.
Método 4
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Utiliza tus dedos para apuñalar la garganta del oponente. Clava tus dedos en
su garganta. Esto causará que su faringe se hunda, lo que evitará que respire.
Consejos
Mantén tu enfoque en el oponente. Serás derrotado si dejas de fijarte en él.
Siempre tienes que estar preparado para responder y defenderte si el oponente
intenta atacarte primero.
Si se aleja, déjalo en paz y sal del lugar de inmediato.
Si tienes que golpear primero, fíjate en sus ojos y atínale cuando pestañee. Un
pestañeo de un milisegundo puede darte la ventaja que necesitas para terminar
rápidamente una pelea.
Si estás en una situación en la que no hay salida, trata de dar el puñetazo en
plena conversación o cuando esa persona menos se lo espere.
Siempre da puñetazos en combinaciones.
El golpe en la garganta es muy peligroso y doloroso; solo utilízalo en las
situaciones de vida o muerte. De igual forma, prepárate para asumir la
responsabilidad de tus acciones.
¡Siempre recuerda hacer bien el puñetazo en la sien porque puedes matar a
alguien si lo haces mal!
Trata de no pegar tanto tus puños a tu cara mientras bloqueas los golpes de
modo que evites que alguien empuje o golpee tus puños hacia tu cara.
Sigue practicando estos trucos con unos modelos, lo que incrementará tu
confianza.
Aprende la mecánica de tu cuerpo y balanceo. ¡Esto ayudará a aportar mucha
potencia!
No se puede proteger la garganta con algún tipo de protector. Puedes protegerlo
por tu cuenta ya que este lugar pequeño no se puede proteger con nada más que
con tu mentón, quizás.
Un golpe duro en el nervio radial en el antebrazo puede sobrecargar el centro
motor en el cerebro, lo que causa desorientación o incluso pérdida del
conocimiento y te brinda la oportunidad de escapar.
Advertencias
El impulso que se da con un puñetazo es pura física. Se trata de una relación
entre masa y velocidad. Si no tienes masa, compénsala con velocidad. Desde
luego, es bueno tener ambas.
Solo hazlo si no tienes otra opción.
Utiliza el tercer método solo si no eres capaz físicamente de hacer otra cosa, ya
que se necesita poca fuerza corporal.
Ten en cuenta que tendrás que enfrentar las consecuencias de hacerlo, sin
importar cuáles sean.
Solo utilízalo si no hay otra salida.