DIRECCIÓN DE POSGRADOS MAESTRÍA EN NEUROEDUCACIÓN Y TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN CURSO: INTRODUCCIÓN A LA FILOSOFÍA APLICADA A LA EDUCACIÓN SUPERIOR
CONCLUSIONES
ORIGEN DE LA INTELIGENCIA
Una de las características del ser humano es crear un” metaconocimiento”
que es llegar a crear hipótesis, teorizar y comprobar el conocimiento y luego analizarlo, refutarlo, ser capaz de entender conceptos y crear conocimiento sobre éste, tal es el caso de su búsqueda por entender la inteligencia, usando la propia inteligencia, investigando y aplicando la inteligencia misma para llegar a dimensionar todo lo que se relaciona a ella, o el lenguaje, utilizando el propio lenguaje para ser estudiado.
Se encuentra entonces a través de la filosofía, antropología, y otras ramas,
que la inteligencia surge de la interacción entre tres factores/elementos inherentes: El factor biológico, el lenguaje y el trabajo: El factor biológico comprende aquellas mutaciones azarosas y en pos de su adaptación al medio en los inicios del hombre primitivo que proporcionó al ser humano el aparato fonador (aparato que no posee otro animal) y su instinto de comunidad; surge entonces el lenguaje, que da la capacidad de comunicar símbolos, signos, de iniciar la capacidad de abstracción y en consecuencia, el pensamiento; y el trabajo, al adaptarse a su entorno, encuentra formas de modificarlo, creando herramientas, comunicándolo a su comunidad y empezando a construir conocimiento sobre el uso de dichas herramientas, las técnicas que iban aprendiendo con su experiencia y capacidad de abstracción, su creatividad y tradición al “heredar” el conocimiento sobre el trabajo. El ser humano tiene características perceptivas bastante amplias, diferente a las de los animales, los animales responden instintivamente, dependiendo sus características especiales y el contexto en el que viven, a ciertos estímulos relacionados a su supervivencia, los recursos a su alcance y todo lo que ello implica, sin necesidad de modificar nada. En cambio, el ser humano al no tener “especialización” en su existencia y existir en cualquier contexto, tiene las puertas abiertas a todo campo perceptivo, a analizarlo, a adaptarse y a modificar su entorno a su conveniencia.
Así, sistemáticamente, a través del desarrollo constante de su capacidad
cognitiva, las modificaciones fisiológicas, la tradición heredada de sus antepasados a través del lenguaje, el conocimiento implícito y acumulado tras años y años de experiencia, dan como resultado el desarrollo de la inteligencia, la capacidad de razón, el conocimiento profundo, los juicios, conceptos, el sistema de referencia, la capacidad de abstracción y con ello el elaborar hipótesis y en la experiencia que verifica o falsee dicha hipótesis, el hombre tiene como producto el conocimiento.