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¿Quién es el Farmacéutico?

El Farmacéutico es el profesional de la salud experto en medicamentos.

Forma parte del equipo de salud indispensable para la atención del paciente.

Su responsabilidad es asegurar que el tratamiento con medicamentos que el paciente recibe sea seguro y efectivo, para contribuir a su mejor calidad
de vida.

Es el último profesional de la salud con el que el paciente se comunica antes de comenzar su tratamiento con medicamentos.

Credenciales requeridos por ley al Farmacéutico:

Licencia otorgada por la Junta de Farmacia de Puerto Rico a base de:



Graduación de Bachillerato o Doctorado en Farmacia (5-6 años de estudios)
o
Práctica supervisada por un preceptor
o
Exámenes de reválida, incluyendo NAPLEX (el mismo examen requerido en todo Estados Unidos)
o
Ser miembro del Colegio de Farmacéuticos de Puerto Rico

Cumplir con el Código de Ética Profesional

• Registro y recertificación en el Departamento de Salud mediante educación
continua

El farmacéutico es el profesional de salud con los más amplios conocimientos sobre los medicamentos y sus usos.

La profesión de farmacia está expandiendo sus roles dentro del sistema de prestación de servicios de salud de una profesión enfocada en la
preparación y dispensación de medicamentos a una que promueve que el farmacéutico provea un servicio abarcador orientado hacia el paciente para
maximizar la efectividad de la terapia con medicamentos.

A nivel mundial, se ha reconocido el cuidado farmacéutico como la filosofía de práctica profesional la cual está centrada en el paciente y orientada a
resultados positivos de la terapia con medicamentos. Este nuevo concepto requiere al farmacéutico trabajar en conjunto con el paciente y con otros de
sus proveedores de cuidado de salud para promover la salud, prevenir enfermedades y asegurar que el régimen de la terapia con medicamentos sea
seguro y efectivo con el propósito de lograr la óptima calidad de vida en relación con su salud.

La profesión de farmacia se practica en distintos escenarios, tales como farmacias de comunidad, hospitales, industrias farmacéuticas y en el gobierno.

Seleccionar a su farmacéutico es tan importante como seleccionar a su médico. Las medicinas de hoy tienen un gran potencial para curar síntomas y
enfermedades y mejorar la calidad de vida, pero a su vez pueden hacer daño si se administran en forma incorrecta. La orientación sobre medicamentos
– los recetados y los que se obtienen sin receta - es una de las funciones más importantes del farmacéutico. El volumen de medicamentos de receta
que han sido autorizados a poder obtenerse sin receta ha ido en aumento acelerado en esta última década.

Seleccionar y utilizar una sola farmacia asegura que su récord sobre medicamentos esté en un solo lugar, reduciendo el riesgo de medicinas
duplicadas o interacciones perjudiciales con el medicamento recetado.

El contacto continuo entre farmacéutico y paciente contribuye a la mejor efectividad de los medicamentos, evita posibles interacciones o reacciones
alérgicas y provee información esencial sobre su uso correcto, como por ejemplo recomendaciones sobre alimentos y bebidas mientras se utilizan
ciertos medicamentos.

La Ley Núm. 247 de 3 de septiembre de 2004, conocida como Ley de Farmacia de


Puerto Rico enumera los pasos requeridos en el proceso de dispensación de una
receta. Cada uno de ellos va dirigido a proteger su salud y bienestar. Para llevar a
cabo este proceso, el farmacéutico cuenta con la valiosa ayuda de técnicos en
farmacia debidamente certificados por la Junta de Farmacia, autorizados por ley a
realizar sus funciones bajo la supervisión directa del farmacéutico.

Es importante que usted como paciente conozca que el proceso de dispensación de


cada medicamento de receta, incluye lo siguiente:

1. Recibir e interpretar la orden médica.

La receta no siempre se presenta clara y legible. Es


o
indispensable aclarar cualquier duda, ya que la letra ilegible,
el parecido entre los nombres de algunos medicamentos y el
uso de abreviaturas confusas, entre otros factores, pueden
propiciar errores en la dispensación. Esto puede requerir
comunicarse con el prescribiente antes de continuar el
proceso.

Es necesario determinar la legitimidad de la receta. La receta debe estar expedida y firmada por un médico, dentista, podiatra o
o
veterinario, en el curso normal y ejercicio legal de su profesión en Puerto Rico.

En caso de sustancias controladas, la ley federal establece que el farmacéutico es responsable si dispensa una receta de una
o
sustancia controlada cuando de las circunstancias particulares debió haber sospechado que la receta era falsa o fraudulenta.

2. Evaluar la receta para verificar que contenga toda la información requerida por las diversas leyes y reglamentos aplicables a la
dispensación del medicamento recetado.

Si falta alguna información, hay que procurar obtenerla del paciente o del prescribiente, y anotarla al dorso de la receta, excepto
o
en caso de narcóticos, en que la reglamentación estatal, según interpretada por la Administración de Servicios de Salud Mental
y Contra la Adicción (ASSMCA) no lo permite.

En caso de sustancias controladas, la receta debe incluir el número de registro federal del Drug Enforcement Administration
o
(DEA) y el de registro estatal de ASSMCA.

También hay que verificar la vigencia de la receta, que es de seis meses desde la fecha de su expedición, excepto en caso de
o
recetas de sustancias narcóticas, cuya vigencia de solamente dos días.

3. Entrar los datos de la receta en el expediente farmacéutico del paciente, el cual generalmente se mantiene de forma electrónica.

En este expediente debe incluirse información demográfica del paciente, historial significativo de enfermedades, medicamentos
o
y otros productos que utiliza para su salud, medicamentos a los que es alérgico, y otras anotaciones pertinentes hechas por el
farmacéutico, como si el paciente no desea envases con tapas de seguridad.

Esta información debe entrarse cuidadosamente ya que se ha de seguir usando durante todo el proceso de dispensación, va a
o
ser utilizada por el farmacéutico para detectar problemas relacionados con medicamentos que puedan presentarse, para
prevenirlos o solucionarlos y en el futuro servirá de base para repeticiones.

En caso de que otra persona que no sea el paciente traiga la receta a la farmacia para su dispensación, la ley federal como
o
HIPAA, requiere que se determine a juicio del proveedor de los servicios, en este caso el farmacéutico, que se cumplen los
requisitos establecidos por esa ley para que la persona se considere representante del paciente, antes de divulgar cualquier
información de salud del paciente.

4. Determinar y ofrecer al paciente la posibilidad de intercambio del medicamento de marca recetado por un medicamento bioequivalente.

La Ley de Farmacia requiere que cuando el prescribiente no escribe al lado del nombre de cada medicamento de marca
o
recetado la frase “No Intercambie” con su puño y letra, y existe un medicamento bioequivalente al recetado y de menor precio,
el farmacéutico viene obligado a ofrecerle al paciente la posibilidad de intercambio.

Para determinar si existe un medicamento que se considere bioequivalente al recetado, el farmacéutico tiene que consultar una
o
publicación de la Administración de Alimentos y Drogas federal (FDA, por sus siglas en inglés) denominada “Approved Drug
Products with Therapeutic Equivalente Evaluations” y mejor conocida como “Orange Book”. La misma contiene una lista de los
medicamentos aprobados por la agencia para su mercadeo en los Estados Unidos, clasificados con un código que indica si son
considerados terapéuticamente equivalentes al medicamento original o si no lo son. La Ley de Farmacia exige que los
medicamentos que se intercambien aparezcan codificados como terapéuticamente equivalentes en el “Orange Book”.

Se requiere además obtener la firma del paciente o su representante como evidencia de su consentimiento al intercambio y
o
hacer varias anotaciones al dorso de la receta.

5. Seleccionar el medicamento prefabricado o componer el medicamento, si el mismo no está disponible en el mercado tal y como ha sido
recetado.

El proceso de composición de un medicamento puede variar en complejidad desde simplemente reconstituir un medicamento
o
prefabricado al mezclarlo con agua destilada, hasta preparar un medicamento estéril partiendo de ingredientes activos e
ingredientes inertes. De ello depende si se requiere equipo, condiciones o instalaciones y adiestramiento especializado, así
como autorizaciones especiales y cumplimiento con leyes, reglamentos y estándares profesionales adicionales a los aplicables
a la dispensación de medicamentos prefabricados.

Aún en caso de medicamentos prefabricados, los tribunales han sido consistentemente claros en sus expresiones y severos en
o
sus decisiones relacionadas con la responsabilidad del farmacéutico en cuanto a la selección correcta de los medicamentos que
se dispensan.

6. Envasar el medicamento.

El medicamento tiene que ser envasado de acuerdo con la recomendación del manufacturero, la cual a su vez fue aprobada por
o
la FDA.

Para la mayoría de los medicamentos de uso oral también hay que cumplir por ley federal con el requisito de uso de tapas de
o
seguridad, con el propósito de prevenir el envenenamiento de niños.

7. Rotular el medicamento recetado.

Se requiere rotular el medicamento dispensado con la “fecha de expiración”. Esta es la fecha luego de la cual el paciente no
o
debe usar el medicamento (“beyond use date”). No siempre es la misma fecha de expiración del manufacturero. La fecha se
determina de manera distinta para medicamentos en forma de tabletas o cápsulas, polvo reconstituido, dosis unitaria, o
medicamentos compuestos mezclando varios ingredientes.
Hay que añadir rótulos auxiliares cuando son requeridos, como en caso de sustancias controladas, o cuando son
recomendados por estándares profesionales.

El propósito es promover el uso adecuado del medicamento, ya que un rótulo equivocado, incompleto o un error en las
o
indicaciones de uso del medicamento puede resultar en daños al paciente, a niños y otras personas que usen esos
medicamentos sin que fueran recetados para ellos.

8. Verificar la receta dispensada contra la orden médica según prescrita y el expediente farmacéutico del paciente.

El propósito de esta verificación es una oportunidad final para constatar la corrección de la dispensación realizada y de detectar,
o
prevenir y solucionar problemas relacionados con el medicamento recetado. Entre los problemas potenciales se pueden
mencionar que al paciente se le haya prescrito más de un medicamento de la misma categoría (duplicación de la terapia), un
medicamento en dosis menor o mayor que la recomendada por el manufacturero y aprobada por la FDA, uno contraindicado
para alguna de sus condiciones de salud, o alguno que interacciona con otro de sus medicamentos.

En estos casos, el farmacéutico necesita obtener información adicional del paciente o comunicarse con el médico. Cualquier
o
gestión o cambio que fuera necesario hacer para prevenir o solucionar el problema, debe documentarse en la receta o en el
expediente farmacéutico.

Llevar a cabo esta verificación es una función importantísima e indelegable del farmacéutico. El farmacéutico es el último
o
profesional de la salud que interviene con el paciente antes de que éste comience su farmacoterapia y puede detectar a tiempo
errores o situaciones potencialmente adversas para el paciente.

9. Entregar el medicamento recetado al paciente o su representante, luego de haberle orientado sobre su uso adecuado.

La Ley de Farmacia requiere al farmacéutico orientar confidencialmente de persona a persona a todo paciente o su
o
representante sobre sus medicamentos recetados. Esta orientación conlleva una oportunidad para compartir con el paciente la
información que a juicio profesional del farmacéutico sea necesaria y significativa para optimizar la farmacoterapia su terapia.
La orientación al paciente es otra función indelegable del farmacéutico.

Se exime al farmacéutico del requisito de entregar el medicamento recetado y orientar al paciente solamente cuando el paciente
o
renuncia a recibir la orientación.

A los pasos del proceso de dispensación en sí, hay que añadir los pasos necesarios para obtener la aprobación o autorización
o
del medicamento por el plan médico del paciente. La farmacia como proveedor de servicios de salud se comunica
electrónicamente en tiempo real con el plan médico o su Administrador de Beneficios de Farmacia (PBM, por sus siglas en
inglés) y depende de la efectividad y eficiencia de esta comunicación para completar la provisión de un servicio profesional, en
este caso, la dispensación de una receta.

RECUERDE:
Este es el proceso aplicable a la dispensación de cada receta, y cada uno de los medicamentos ordenados por su médico constituye una receta, que
tiene que pasar por todo este proceso, para su propia seguridad como paciente.

El tiempo que usted espera depende del número y tipo de medicamentos recetados y de los pasos en el proceso de dispensación y de aprobación por
el plan médico aplicables a cada uno de sus medicamentos.

Depende además de cuantas recetas se recibieron antes que la suya y cuanto tiempo cada una requiere.

Si usted tiene una situación que considera de necesidad urgente o emergencia, consulte a su farmacéutico. Su farmacéutico está disponible para
ayudarle.

1. Nombre y dirección
2. Nombre de marca o genérico del medicamento,
concentración (250mg) y cantidad (10 cápsulas)
3. Instrucciones para el paciente (tomar una cápsula tres
veces al día por 10 días)
4. Se requiere autorización para repetir recetas.
5. Cada orden para un medicamento es una receta.
6. Sustancias controladas requieren registro federal y
estatal.
7. Nombre completo dirección y teléfono del médico.
8. La receta es válida por seis meses. Si es narcótico,
sólo por dos días.
9. Permite al farmacéutico verificar la corrección de la
dosis.
10. Si el médico no escribe esta frase, el farmacéutico
deberá ofrecerle al paciente la opción de intercambiar
el medicamento de marca recetado, por uno
bioequivalente de menor precio.
11. La firma del médico es lo que hace válida la receta.
12. Licencia para ejercer en Puerto Rico
13. Registro federal para recetar sustancias controladas.
14. Registro estatal para recetar sustancias controladas.

15. NPI - Numero de Identificación Nacional de Proveedor

El paciente tiene derecho


A seleccionar libremente a su farmacéutico como proveedor de servicios de salud, y por tanto a la farmacia de su preferencia.

A que su receta sea dispensada por un farmacéutico, o por otro personal autorizado bajo la directa e inmediata supervisión de un farmacéutico.

A que se mantenga en su farmacia un expediente con información sobre sus medicamentos que permita al farmacéutico prevenir, detectar y solucionar
problemas relacionados con sus medicamentos recetados.

A que su farmacéutico le presente la opción de un medicamento bioequivalente al medicamento recetado, cumpliendo con los requisitos establecidos
por ley.

A que su medicamento recetado sea envasado con tapa de seguridad (a menos que solicite lo contrario), y a que el rótulo del medicamento indique su
nombre, concentración, instrucciones de uso, fecha de expiración, número de lote, nombre del médico

A que su farmacéutico le oriente personalmente sobre cómo debe administrarse el medicamento recetado, precauciones, posibles reacciones, cómo
conservar el medicamento, y otra información pertinente a su uso adecuado

A que se proteja la confidencialidad de toda la información sobre su salud contenida en la receta y en el expediente del paciente.

A que se le brinde información sobre el precio de su medicamento recetado.

A que se le provea copia de su receta, cuando sea necesario.

A que su farmacéutico esté accesible para orientarlo sobre los medicamentos que puede adquirir sin receta médica, para que pueda tomar una
decisión informada al seleccionarlos.

INFLUENZA A H1N1
Con motivo del reciente brote de la Influenza A H1N1 en Puerto Rico, queremos que tenga la más actualizada información sobre este virus que se está
propagando rápidamente por varios países. Aunque la situación es preocupante, no es para alarmarse o para que cunda el pánico. Al contrario, lo que
se debe es continuar atentos a la información, y seguir las recomendaciones de prevención.
Puede acceder el enlace www.cdc.gov/h1n1flu/espanol/ para información actualizada en español, muy útil para los farmacéuticos al orientar a sus
pacientes, al igual que para que toda la comunidad se oriente con las fuentes oficiales.

También, puedes acceder los siguientes enlaces para que adquiera varios documentos con valiosa información para su cuidado y el de sus seres
queridos.

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