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La delincuencia en los jóvenes

Jesus David Moreno Garzon

Alumno

Universidad Tecnológica de Bolivar

Facultad de economía y negocios

Cartagena de Indias

2019
La delincuencia en los jóvenes.

Introducción

La delincuencia es un fenómeno que se viene presentando desde hace años, el que ha atacado
a nuestra juventud, y a la mayoría de los seres humanos, en cuanto a niños menores de 15 años,
adultos de entre 18 y 25 años, y señores mayores de 40 años. Esta aberración se ha encargado de
envolver a los seres humanos, más que todo a los hombres (sexo masculino), quienes se han
tomado el trabajo de delinquir (violar la ley), o cometer actos impuros como la muerte, lo cual
conlleva a una consecuencia gravísima, por lo tanto se someterá a un castigo estipulado por la
ley. Este fenómeno a medida que el mundo avanza se ha convertido en un problema que cada vez
más genera mucha preocupación en los hogares más vulnerables por decirlo así, pues estos
hogares son los que se caracterizan por tener algún miembro que tiene problemas con la justicia;
al igual que los que pertenecen a las clases sociales más populares, pero en estos no es tan
común.

La delincuencia juvenil se ubica en América Latina, dentro de un contexto social


caracterizado por grupos de niños y adolescentes ubicados dentro de niveles de pobreza,
desempleo, narcotráfico, baja escolaridad o analfabetismo, agresiones sexuales y desintegración
familiar. A estos grupos sociales se les ha negado todos los derechos humanos, tales como el
derecho a la vida, la salud, la educación, la vivienda, etc.

En el mundo actual la delincuencia se ha manifestado más que todo en los jóvenes, pues éstos
no han tenido una formación buena en sus hogares, tanto es así que ellos toman un rumbo fácil, y
resulta que se están destruyendo así mismos. El hogar es la base fundamental de todo ser
humano, ya que allí es donde se aprenden los valores, la trata de personas, identificar las
verdaderas amistades, y sobre todo tener presente que en el camino siempre nos encontraremos
con dificultades, y que estas serán obstáculos para poder continuar, más sin embargo las
podemos superar.

Actualmente vivimos en un mundo de indiferencia, en donde lo que le pasa al otro no es


nuestro problema, donde cada uno vela por sus propios intereses sin tomarse un momento para
reflexionar sobre las consecuencias de sus actos. Tal vez por esto, por malas influencias por
parte de los “amigos” y los medios de comunicación, y por el carente sentido de la familia que
se vive, ha aumentado la delincuencia en los últimos años, y lo que es peor: se inician desde
muy temprana edad, generando delincuencia juvenil. Ésta se refiere a los actos violentos
cometidos por menores de edad, es una situación que cada vez se hace más frecuente, donde el
aumento de pandillas y crímenes cometidos por menores de edad va en crecimiento. (Rubio S.
2013)

Se debe tener en cuenta la edad en que los jóvenes deciden tomar este camino tan oscuro, pues
algunos tienes más accesibilidad que otros, ya que tienen armas que los guían, y al resto lo
inducen para que cometa actos indebidos. Cualquier menor es capaz de amenazar, hurtar,
agredir, hasta de matar, por el solo hecho de obtener un objeto que no le pertenece, y a su vez
recibir a cambio un problema con la justicia.

En particular muchas veces no nos tomamos el trabajo de investigar las causas por las cuales
los jóvenes deciden tomar este camino, ya que primero buscamos una crítica, y después
juzgamos a esas personas sin saber lo que realmente les pasa. Algunos jóvenes deciden tomar
este camino porque en sus hogares no los formaron, o fueron abandonados en un orfanato; otros
deciden buscar este camino por voluntad, y el resto son obligados por personas de un rango
superior, que a veces resultan ser personas que tienen más de una cuenta pendiente con la
justicia, y además estos jóvenes en su niñez fueron antisociales, y siempre eran reprimidos en sus
hogares, por tal motivo su único escape fue el más fácil. La delincuencia rebosa en todos las
ciudades, países, incluyendo todas las clases sociales sin excepción alguna. Cabe resaltar un
aspecto muy importante que se trata de la formación de bandas o las llamadas pandillas, las
cuales tienen atemorizadas a la sociedad, pues se caracterizan por ser personas muy malas, y más
si tienen aspecto de ladrón, o más bien de delincuente.

A medida que el tiempo corre, los jóvenes, más que todo los hombres, se dedican a caer en un
mundo tan bajo, lleno de peligros, pero que para ellos significa una salida para sus problemas,
pues la mayoría suelen tener problemas familiares, más que todo con las respectivas autoridades,
ya que cometen actos indebidos, solo para satisfacer sus necesidades personales, o más bien
necesidades de trabajo, puesto que sus jefes le exigen rendir cuentas, y así poderles pagar “su
sueldo”. Se considera que la mayoría de los jóvenes que determinan socorrer a esta salida, lo
hacen porque no tienen una orientación básica, como es la formación del hogar, como antes se
mencionaba, ya que el desintegro de las familias afecta mucho el estado emocional de los
jóvenes, pues estos piensan que sus familiares estarán siempre con ellos, y no es así; al contrario
sus familiares deciden abandonarlos porque piensan que les harán daño, pero no piensan en el
detrimento que les ocasionan, y además hacen que se depriman.

Considerando lo anterior, la solución de estos jóvenes la encuentran en cosas indebidas,


porque se sabe que no solo es la delincuencia que ataca a estos jóvenes, sino también las bebidas
alcohólicas, el consumo y venta de estupefacientes, concierto para delinquir, entre otros. Estos
actos conllevan a la pérdida de lo que los jóvenes habían alcanzado hasta el momento, pues
muchos antes de tomar este rumbo, ya tenían planes para su futuro, otros estudiaban, y
decidieron dejar los estudios tirados por este camino tan perverso. Algunos jóvenes cuentan con
suerte de conseguir una ayuda profesional que los puede salvar, como hay algunos que deciden
seguir, y jamás encontrarán una salida, pues llegan a convertirse en jefes de sus bandas, y obvio
que este puesto les genera más entradas de dinero, pero no les genera una esperanza de librarse
de tener problemas con la justicia.

Lo antes mencionado hace referencia a las circunstancias de las cueles se derivan muchos
métodos como son: la droga, el homicidio, y las Lesiones, que son causadas por jóvenes que
están más avanzados, ósea que ya tienen un poco más de experiencia, y que asimismo sus jefes
(Cabecilla de la banda), les han enseñado como matar, sin dejar huellas. Santiago dijo: “el
consumo de alcohol desempeña un papel importante en muchos delitos violentos, tales como las
agresiones y homicidios producidos en peleas con desconocidos o el maltrato a la pareja y a los
hijos dentro de la familia”. (Rebondo S. 2013.Pag.32

Cuerpo o desarrollo.

La delincuencia es un fenómeno que ha abordado a toda la sociedad, pues la mayoría de los


jóvenes están perdidos en este mundo. No existe una solución para poder desaparecer este vicio,
porque la única solución que hay son los centros de rehabilitación, y pues son tantos los jóvenes
que ya hasta se puede decir que hay hacinamiento, no del todo, pero si se asemeja un poco, tanto
es así que los especialistas ya no dan basto para socorrer a tantos jóvenes, pero lo ideal sería que
el gobierno implementara otros centros, y así poder salvar a los jóvenes. Podríamos decir que la
delincuencia no se hereda, pero si se transmite, es decir, si tenemos un mal ejemplo en nuestra
familia, ya sea la cabeza familiar, en este caso sería el padre, el niño seguiría sus pasos, y
acabaría igual que su padre. Desde una perspectiva psicología, diríamos que: la delincuencia se
deriva de traumas, enfermedades o adicciones, elección de vida, o convivencia social.

Desde un punto de vista social, la delincuencia se ha tomado el papel de fomentar en los


jóvenes una vida totalmente diferente, a la que ya le habían instruido en sus hogares; derivando
así una serie de causas fatales como son: perder el cariño por el estudio, tener un hogar destruido,
tomar una actitud agresiva, y sobre todo sentirse frustrado. La delincuencia juvenil se
caracteriza también por la crisis de la adolescencia y en ciertas ocasiones se traduce en un acto
“iniciático”, es decir, una forma en que los jóvenes reflejan que han crecido y son
independientes de los adultos. Esto es coherente con la idea que la gran mayoría de los jóvenes
no reinciden (Lunecke & Vanderschueren, 2004. Pag.73).

La sociedad mira la delincuencia como un acto destructivo, ya que nos hace daño a sí mismos,
a nuestras dinastías, y más que todo a los niños menores de edad, quienes se ven afectados por
esta ola de acontecimientos perversos, dañinos, y sobre todo malignos. De este problema se
desprende una salida despiadada, como lo es la droga, separación de familias, tanto como pobres
y ricas; porque es desde aquí que se forma al delincuente, dejando atrás sus sueños y triunfos.
Actualmente no existe el diálogo familiar, pues es un tema que hemos dejado pasar por
desapercibido, y no nos damos cuenta que el daño es para nosotros mismos. Deberíamos tomar
conciencia sobre esto, y fomentar charlas para la recuperación de estos jóvenes. .

Un punto interesante es la desatención que a veces tienen las autoridades con estos casos, pues
últimamente se presentan muchos atracos, brindan su “ayuda”, pero no resuelven, claro en
algunos casos, en base a esto, el periodista Uriel dice que: “Las autoridades encargadas de
dictar medidas preventivas para contrarrestar la delincuencia juvenil, se han quedado cortas,
para que el menor delincuente, que como el árbol que empieza a crecer torcido, se enderece
adecuadamente”. (Ortiz U. 2014)

Como se mencionaba antes prácticamente no existe una solución para evitar que los jóvenes
salgan de ese camino, del cual entraron desde muy pequeños, pues fueron criados así, o tenían
amistades que los indujeron por este camino. Se sabe que la formación del hogar es muy
importante porque aquí es donde empieza nuestro ejemplo a seguir. Tal vez algunos jóvenes no
corren con la suerte de tener a unos padres ejemplares para su vida, pues estos también han
llevado una vida descarriada, perdida, sin orden, sin control, y no son capaces de abrir los ojos
por miedo a como reaccione la sociedad, más sabiendo que esta es solo un medio de crítica que
no quiere ver su recuperación. Llega un momento de la vida en que quieren reflexionar, y ya es
demasiado tarde, las cosas ya están avanzadas, y el querer salir de ello no es fácil.

“La falta de un trabajo estable y una vivienda propia y de espacios públicos óptimos,
constituye en Colombia, uno de los problemas sociales más sensibles y complejos de resolver.
Es imprescindible el diálogo, la concertación, el trabajo en equipo, aún más tomando en cuenta
la nueva coyuntura política y la posibilidad de que la constitución pueda legitimar de manera
precisa, no solamente en enunciado, el derecho a la vivienda de las familias colombianas.
Amerita el asunto, compromisos por parte de distintos sectores de la sociedad, a fin de
garantizar la igualdad de derechos de todos los
ciudadanos, y sobre todo de la población menor
de 18 años, que ante la falta de oportunidad se encuentra en riesgo permanente de delinquir”.
(Turizo, M. 2015. Pag. 45)

La falta de oportunidades en la vida de un joven, es tan común, más que todo en los barrios
vulnerables, y en las comunidades de escasos recursos; pues estos jóvenes no contaron con ayuda
desde sus hogares, y vieron como sus pares se perdían cada vez más en este vicio. Como todos
los seres humanos no podemos estar pendientes de las necesidades de otros, el gobierno se ha
encargado de crear instituciones que le brinden ayuda, y pues ya es decisión de cada joven si la
quiere tomar, tampoco se le presionará, porque es decisión propia y no una obligación, aunque
debería serlo, porque es para su propio bien. En la constitución está establecido que los seres
humanos tenemos las “mismas igualdades”, habiendo mencionado lo anterior, se corrobora:
Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, recibirán la misma protección y trato de
las autoridades y gozarán de los mismos derechos,  libertades y oportunidades sin ninguna
discriminación por razones de sexo, raza, origen nacional o familiar, lengua, religión, opinión
política o filosófica. (Constitución política de Colombia. Artículo 13. 2007.Pag.2)

Como ya está bien consignado en la constitución, todos deberíamos tener los mismos
derechos, pero si nos damos cuenta hay miles de jóvenes que están desprotegidos por el
gobierno, y más que todo a todos esos jóvenes que le ha tocado enfrentarse al conflicto armado
por el que viene pasando el país hace 52 años, quien ha dejado miles de heridos, familias
separadas, campesinos sin cosecha, jóvenes sin futuro, pero claro la FARC dice que estos pueden
retomar sus sueños, pero ya ellos saben que no será lo mismo, porque nunca sabemos cuándo la
FARC se le dé por volver a la guerra, y volver a sentirse derrotado no es para nada agradable.
Cuanto no darían esos jóvenes por ver una luz de esperanza en su camino, por escuchar una voz
de aliento que le diga que todo fue un desengaño que les vendó los ojos para que sus metas se
frustraran; el deseo de volver a estar con sus familias, y que todo fuera como el cielo, de color
azul, pero un azul de Paz, que es lo que verdaderamente necesitamos en nuestros hogares.

La delincuencia en las chicas es menos común, que en la de los chicos, pues las chicas cuando
cometen un acto impuro lo hacen con agresividad, pero sin intención de agredir a la víctima,
pues se dice que el sexo femenino se destaca por ser frágil, y un poco más dulces, y por este
motivo no se llega a la necesidad de agredir, aunque hay casos en que, si se agrede a la víctima,
pero así mismo la agresora puede quedar en libertad, claro si el juez no encuentra culpabilidad en
ella. El perfil de estas chicas suele ser de: adicción a las drogas, frustración escolar, grupos de
amigos sin buenas costumbres, y ante todo la falta de un hogar.

¿Qué tan importante es la formación en el hogar? … según la constitución política de


Colombia en su artículo número 42, dice: “La familia es el núcleo fundamental de la sociedad.
Se construye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer
de contraer matrimonio o por voluntad responsable de conformarla. (Constitución política de
Colombia. Artículo 42. 2009. Pag. 36)

La familia es la base fundamental de la humanidad, ya que de esta se desprenden una serie de


valores universales como lo son: el respeto, la comunicación, la sinceridad, la libertad, la
igualdad, y la tolerancia; es por tanto que la primera escuela es el hogar, y es aquí donde se
forma el ser humano, al igual que en su segundo hogar, la escuela. Por medio de estas dos
entradas se considera que el futuro de todos los jóvenes está dentro de su formación, para así
poder ser alguien en la vida. El papel que tiene la familia frente la formación de los jóvenes es
muy importante, porque es allí donde aprendemos a desenvolvernos, a saber, con quién debemos
relacionarnos, y, sobre todo como nos vamos a desempeñar ante la sociedad, sabiendo que más
que una sociedad, es un medio de crítica que no quiere el progreso, si no la derrota ajena. La idea
ahora no es convertirnos en creyente de críticas, si no en creyentes de fe, y en que todo cambiara
para nuestro bien.
“Un niño aprende de sus padres los dos modelos de seres humanos, el modelo hombre y el
modelo mujer. El problema enorme de los padres que son solo mujer, por ejemplo, deriva del
hecho de que sus hijos están expuestos a un solo modelo, el propio, mientras el otro se halla
ausente. Esta es la consecuencia más importante en los niños de la disolución de la pareja”.
(Suarez, O. 2000. Pag. 4)

Un aspecto interesante de la delincuencia es: el hecho de que un joven sea antisocial, no


significa que por este motivo se haya vuelto delincuente. Resulta que entre más acumule
conductas que lo perjudiquen, será peor para su progreso. El que sea antisocial significa un atajo
para s vida, pues cuando se decida buscar amistades se encontrará con quien no quería, y así su
vida cambiará totalmente, y más si no ve salidas. Muchas veces no nos ponemos en el papel de
ese joven, y lo que hacemos es excluirlo de la sociedad, pero no sabemos que le estamos
causando un mal.

Planteamiento del problema.

“Víctimas de la discriminación social y excluidos de las decisiones importantes, muchos


jóvenes carecen de planes o proyectos de vida, y son considerados incapaces de adaptarse al
medio social, por lo cual toman la delincuencia como alternativa de supervivencia. El fácil
acceso a las drogas, la falta de oportunidades de empleo, salud, educación y espacios para la
cultura y el deporte, la desintegración familiar, la impunidad, entre otros factores, componen el
contexto en el que nace y crece la delincuencia juvenil”. (Jiménez R. 2005. Pag. 2)

Ser discriminado por ser pérfido, es una situación muy difícil, porque si el joven es antisocial,
y recibe comentarios muy fuertes, no querrá salir de su casa, y se acomplejará de todo. Hay
momentos en que las críticas hacen que los jóvenes se enfrasquen y tengan miedo de enfrentar la
realidad, y así se va generando una secuencia de pensamientos estragos, pudiendo evitarlos, pero
es complicado. Más que todo la discriminación se ve por el origen racial o étnico que aflige al
ser humano, es decir sus verdaderas raíces, que son detalles que no se pueden negar, y más aún si
son físicos. Se han encontrado casos en que los jóvenes llegan a convertirse en delincuente
porque lo han marcado sus enigmas, y en otros casos enfermedades que los dejan señalados para
toda la vida.
En el caso de estos menores, adolescentes o jóvenes, el comportamiento antisocial procede
de una psicosis: la delincuencia es el síntoma de una enfermedad. Estos trastornos pueden
manifestarse en la infancia o la adolescencia a través de actitudes solitarias, escasa relación
con los demás, bajo rendimiento escolar, hipersensibilidad o ansiedad social. Pueden parecer
excéntricos y ser víctimas de otros.( Defez, C. 2006. Pag. 11)

Nos encontramos en un mundo en donde se ha pluralizado la violencia, irresponsabilidad,


robo, desintegración familiar, divorcios, abortos cuyos protagonistas son personas jóvenes en su
mayoría; los cuales no han adquirido la suficiente experiencia, pues desde muy pequeños les
tocó buscar recursos para poder sobrevivir a tanta maldad. Han surgido a través del tiempo
familias que se disocian por causa de graves enfrentamientos, discusiones, y más que todo por no
tener un medio por el cual puedan subsistir. Este tipo de familias se caracterizan por estar llenos
de problemas, y por eso deciden abandonar a esas pobres criaturas que no tiene la culpa de que
sus padres lo hayan engendrado, para luego no quererlos, pero no para mal, si no que los tienen
que abandonar porque no tiene los medios de cómo mantenerlos.

Da mucha tristeza ver como esos orfanatos se llenan cada vez más de niños, que quedan
desprotegidos por sus familias, y más si aún están empezando a crecer, y no se saben defender de
los males que hay en la sociedad. A parte se ven en las calles jóvenes que están súper perdidos en
la droga; es doloroso ver como la expanden, y lo peor es cuando la consumen, que se
transforman en otros seres. “El vínculo entre el individuo y el narcótico debe ser tratado por
profesionales para cortar esa relación de esclavitud, en la que el adicto tiene muchos problemas
guardados que tapa mediante el consumo, hasta el punto que éste pasa a ser un hábito y el
drogodependiente, no puede prescindir de determinada sustancia”. (Raffo M. 2012)

Es difícil establecer una relación con los adictos, pues su forma de pensar es distinta. Sin
embargo, hay que perder el miedo y acercarse a ellos, porque nunca sabemos si ellos se llegarán
a convertirse en nuestros amigos, claro si los sabemos tratar. Existen muchas alternativas para
relacionarse con un indigente de la calle, si tú le brindas ayuda, él cederá, o si le brindas tu
amistad de muy buenas maneras también cederá. Los errores que cometen estos jóvenes se
deben a muchas cosas, unas de ellas son: abandonan sus estudios, quedan huérfanos de padres, el
rechazo de la sociedad, el tener una enfermedad que no tiene cura… estos aspectos hacen que los
jóvenes tomen decisiones que dañarán su camino, y dichas decisiones impiden seguir con sus
metas.

Tantos jóvenes que han desperdiciado su vida por tener dinero, y resulta que se están
acabando así mismos, pues esa fue su única salida, y a medida que sus oportunidades se
obstruyen, ellos cierran ese capítulo de su vida, y se les encienden una luz, pero no de
esperanzas, pues se encontrarán con cosas que jamás habían visto, y si las vieron están
condenados a volverlas a vivir.

Cada día que pasa el incremento de las bandas delincuenciales se vuelve más grande. Hay
muchos medios de comunicación que transmiten los incidentes ocasionados por estas bandas, se
sabe que perjudican a la sociedad, pero muy poco se toman precauciones sobre ello. Desde un
punto de vista social, podríamos decir que los jóvenes que toman este camino porque no tuvieron
amistades que los aconsejaran, o más bien una familia ejemplar, bueno aunque no sean perfectas,
pero por lo menos se enseña lo básico, porque el saberse relacionar con el resto del mundo es
algo importante. Las características personales son esenciales en la vida de un joven, puesto que
no puede mostrarse doble ante la sociedad, el saber que no se debe aparentar lo que no es, el
hablar con la verdad y el ser escuchado, ser honesto y actuar con mucho respeto.

En palabras del Doctor Jesús, algunos factores psicológicos que afectan a los jóvenes son:

 “Presencia de situaciones personales que, al estar presentes, incrementan la


probabilidad de desarrollar problemas emocionales, conductuales o de salud.
 Estas situaciones promueven la ocurrencia de desajustes adaptativos que dificultarían
el logro del desarrollo esperado de ser capaz de contribuir y participar activamente
en la sociedad.
 Los factores de riesgo pueden influir de modo directo o indirecto en el desarrollo de
conductas problemáticas. Del mismo modo, pueden actuar de modo próximo o
distante en el tiempo”. (Cureces, J. 2006. Pag. 3)

Discusión

Según el análisis realizado por el cabildante sobre el Sistema de Responsabilidad Penal para
Adolescentes, que es la figura mediante la cual se judicializan los menores entre los 14 y 17
años de edad, los delitos más comunes son hurto y tráfico de estupefacientes.
“Es alarmante que cada vez haya más niños que delinquen en las calles, cuando su derecho y
su deber es estar en los colegios. Esto demuestra que la política económica y social de
formación de menores está fracasando”, manifestó Horacio José Serpa, actual concejal de la
ciudad de Bogota.

“El delincuente juvenil, pues, necesitará sus fantasías inconscientes tan cargadas de odio y
destructividad, y actuarlas en la realidad; pero, he aquí que esta descarga motora aumentará la
angustia y el sentimiento de culpa, de lo cual deberá desprenderse mediante nuevos actings
out”. (Sánchez M. 1991. Pag. 35-36)

“Las sanciones son medidas disuasorias caracterizadas por la imposición de restricciones,


prohibiciones u obligaciones, que se establecen como consecuencias para las personas que
cometen delitos. Entre las sanciones legales utilizadas con mayor frecuencia en diferentes
lugares del mundo se encentran:

 El pago de multas
 La asignación a supervisión de adultos, como padres, tutores o familias provisionales.
 La obligación de realizar trabajo comunitario
 Restricciones en sus relaciones con otros, tales como:
 Convivir o comunicarse con personas determinadas
 Asistir a lugares específicos
 Conducir. (Chan, Estrada, Rodríguez.2014.)

Recomendaciones.

Con la ayuda del gobierno, deberíamos crear más centros de rehabilitación para estos jóvenes,
que han desperdiciado su vida, por no tener oportunidades de estudio, hogares que se hicieran
cargo de ellos, y mucho menos alguien que les brinde su amistad y consejos. A medida que el
mundo evolucione, crearán nuevos métodos para la recuperación de los jóvenes, y más si se trata
de los niños menores de edad, que son los más afectados por esta ola tan de estropicios.

Implementar en los centros de rehabilitación actividades recreativas, para que estos jóvenes
que sienten que lo han perdido todo, sientan que hay personas que sí los valoran, y sobre todo
que pueden volver a su vida, claro no será igual, pero si podrán recuperar a su familia.
Crear un grupo de tutores, los cuales se encarguen de ir a los barrios más vulnerables,
llevándoles charlas que les sirvan para su formación, y para su futuro. Hay muchas comunidades
que necesitan este tipo de ayuda, pues también han sido víctimas del conflicto armado que se
viene presentando desde hace 52 años en nuestro país Colombia, y motivarlos a superar sus
pérdidas, y sus malos ratos es una idea muy buena.

Tratar de animar a todos esos jóvenes que se han visto discriminados por la sociedad; solos,
sin ningún tipo de amistad, y aún más si han sido abandonados por sus padres, o han quedado
huérfanos. Son detalles que a veces no tenemos en cuenta, y por eso rechazamos a esos jóvenes
que solo necesitan nuestro amor.

Comentario.

Para poder salvar nuestra juventud debemos crear grupos de apoyos para que los jóvenes que
están perdidos en esto, puedan ver una luz de esperanza, y no se sientas solos. Debemos tener en
cuenta que un consejo puede curar todas sus heridas, y por ende este tomará su mejor camino. La
delincuencia se ha convertido en un método de escape para la juventud, ya que en ella se
encuentra una solución, conocida como “la salvación de un alma”, ósea que por medio de estas
podemos olvidar todo aquello que nos impide ser feliz, y a la vez todo aquello que nos hace
sentir por decirlo así envidia. Actualmente los jóvenes se sienten en la dicha de seguir este
camino, pues este les genera entradas de dinero, y pueden hacer cosas que jamás habían hecho.

Conclusión

Las estadísticas crecen más y más, pero no hay una solución para esto, pues las autoridades
competentes utilizan su fuera, y entonces se generan nuevas riñas… así jamás habrá Paz. Si en
verdad existiera un gobierno capaz de responder por las necesidades de cada ser humano, no
estuviéramos así, aunque intenten “ayudar”, pero lo que hacen en muchos casos es empeorar, y
así se ve afectada la llamada “Justicia” que deseamos tener.

Para finalizar quisiera invitar al resto de jóvenes que ayudemos a los jóvenes que están
perdidos, y que se sometan a tratamientos psicológicos para su propio bien. Es muy difícil
someterse a un tratamiento, pero si queremos el bien de esos jóvenes debemos incentivarlos para
que dejen ese camino tan cruel que por desgracia les tocó vivir.
“EL PROBLEMA NO ES LA DELICUNCIA, ES QUE A SU PRECENSIA NOS
ACOSTUMBREMOS.

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