Está en la página 1de 3

Cuidado del medio ambiente

Como cuando nos subimos a un coche y nos ponemos el cinturón de


seguridad, casi sin pensarlo, pues igual cuando del respeto del medio ambiente
se trate, que cuando tengamos un plástico en nuestras manos, por ejemplo,  sea
automático tirarlo donde corresponda y así poder reciclarlo.  O el simple gesto
de cerrar el grifo de agua mientras nos lavamos los dientes para no
desperdiciarla.

El planeta tierra es nuestra casa y es la casa que le dejaremos a nuestros hijos,


con lo cual, desde pequeños deben aprender a cuidarlo y no contaminarlo, y
para ello deben conocer de qué manera hacerlo. Hemos preparado entonces
una serie de fichas con actividades para alumnos y alumnas de primaria (10 a
12 años) para que puedan aprender dónde, en qué contenedores y sus colores, 
y cómo se debe tirar la basura. Y otras fichas con actividades relacionadas con
el ahorro del agua y la energía.

Jugamos a ser un árbol

Para llevar a cabo este juego se debe ir con los niños a un parque y realizar un
estudio (breve) de la flora del lugar. Observar, tomar nota, sacar fotos, etc
sobre diferentes plantas.

Luego, ya en la escuela, la maestra selecciona al azar a dos niños a los cuales


les asignará de forma secreta el papel de convertirse en un árbol en particular.
Los niños pasarán al frente del salón y se designará la mitad del pizarrón para
cada niño. A continuación (y sabiendo los niños que árbol tendrán que
personificar) se tienen que dar a la tarea de darle pistas a sus compañeros para
que éstos adivinen qué árbol está representando cada niño. Por ejemplo: Soy
un árbol que demora muchos años en crecer, me gusta la humedad, me agrada
crecer muy alto por encima de otros árboles, doy una extraña pero bonita flor,
etc. Es importante recordar que las preguntas se tienen que relacionar con lo
aprendido en el parque botánico.
 

Inventamos un cuento para ayudar al planeta

Si los niños ya tienen edad suficiente como para crear un cuento, se les puede
proponer realizar dicha actividad pero con la temática del medio ambiente. Se
divide a los niños en grupos y se les asigna un tema dentro de la categoría del
medio ambiente. Por ejemplo un grupo deberá hablar sobre la importancia del
agua potable, otro sobre la capa de ozono, otro sobre el cuidado de las plantas
y otro puede referirse al reciclado de basura. Cada equipo deberá idear un
cuento o historia (con un principio, nudo y desenlace) para que el resto
aprenda y tome conciencia sobre la importancia del cuidado del medio
ambiente.

Pequeñas grandes cosas que podemos hacer…

Este juego consiste en enseñarles a los niños que el cuidado del medio
ambiente nos involucra a todos por igual y que, sin importar la edad que ellos
tengan, siempre pueden hacer algo para beneficiar el cuidado del
medioambiente. Para ello debemos pedirles a los niños que lleven diferentes
elementos que se puedan reciclar. Por ejemplo: hojas de papel que ya no
sirvan, pack de cartón (de leche, de jugo, etc), cajas de medicamentos vacíos,
latas, botellas de plástico, etc.

Con todos estos elementos se deberán pensar y armar diferentes manualidades.


Por ejemplo, con las cajas de medicamentos y los envases de jugo, se puede
hacer una ciudad reciclada (cada caja será un edificio o casa). Luego, pintado
cada edificio la ciudad se habrá convertido en una ciudad ecológica.

Haciendo tarjetas solares

Es importante que los niños sepan de la importancia y del poder del sol. Para
poder transmitir esta enseñanza necesitaremos una cartulina de un color fuerte
y llamativo. Por ejemplo naranja o verde. Dobla la misma por la mitad. Luego
debemos tomar algunos objetos como flores, llaves, lápices, etc. Colócalos
encima de la cartulina y deja que el sol actúe durante unas 6 u 8 horas. AL día
siguiente observa cómo el sol ha modificado el color de la cartulina dejando
impresa la silueta de los objetos colocados sobre las cartulinas.

Los detectives del medioambiente

Para este juego se necesitarán diferentes niños los cuales tendrán una misión
secreta que deberán cumplir durante una semana. La docente seleccionará a
estos niños y les asignará a cada uno, una función de cuidado pero los niños
no deberán decir nada al resto de sus compañeros: simplemente deberán
ocuparse de cumplir con el rol que la docente les ha dado. Por ejemplo, el niño
detective del cuidado del agua, deberá ocuparse de que los grifos de la escuela
no queden perdiendo agua. El niño detective del cuidado de la higiene, deberá
reportar si algunos niños no obedecen con la norma de “no arrojar basura en el
patio de la escuela o en el aula”.

Como los niños deben jugar de manera encubierta, el juego consiste en que, al
finalizar la semana los niños adivinen quienes han tenido los roles de
detectives y cuál le corresponde a cada uno. Gana el niño que no se haya
equivocado con ninguna de las asignaciones (o se haya equivocado lo menos
posible).

Este juego se puede realizar en diferentes momentos del año y asignarle a


diferentes niños los roles para crear conciencia en  ellos sobre el cuidado del
medio ambiente.

También podría gustarte