Está en la página 1de 1

A veces, perder tiempo es ganar vida.

Porque más allá de lo que nos han hecho creer, el


tiempo no es oro, ni siquiera estaño. Permitirnos instantes donde no hacer nada y limitarnos a
ser, sentir y disfrutar, es sinónimo de bienestar y felicidad.

También podría gustarte